LA GUAYABA TIENE DUEÑO:

En mayo de 1993, Guatemala vivió un capítulo histórico que, sorprendió a la

comunidad internacional e incluso a los mismos guatemaltecos, cuando en el
país un conjunto de factores de poder, entran en conflicto, por un lado un
presidente democráticamente electo, un hombre con decisión de cambiar la
trayectoria de dominio que grupos tradicionales acostumbraban tener sobre las
decisiones presidenciales, con los dueños de la guayaba, el grupo
acostumbrado a dar órdenes a los mandatarios y imponer sus decisiones. Esa
confrontación, se vio agudizada por el incremento del narcotráfico y lavado de
dinero, que seriamente penetró el Sistema Legislativo y El Judicial. El Presidente
de la República, Jorge Serrano Elías, hombre de carácter fuerte, toma medidas
drásticas para la depuración del Estado, que hacen que esto grupos de elite,
en contubernio con un grupo de elite militar propiciaran un golpe de estado,
que lo llevo al exilio junto a su familia. En las dos décadas siguientes, presiones
de todo tipo, y una red de desinformación de enorme magnitud, lanzada por
los mismos factores de poder, han logrado cubrir con una densa manta de
descrédito al Presidente, ignorando sus logros y magnificando sus errores,
mientras se le mantiene lejos, bajo una espada de Damocles. Por primera vez
en estos veinte años se podrá conocer, de la propia voz de Jorge Serrano Elías,
sin acotaciones sesgadas, su versión de los hechos de mayo de 1993, y también
un análisis cabal y minucioso, de parte de quien viviera, en calidad de
protagonista o como descendiente de protagonistas, los principales momentos
políticos de la Guatemala del siglo XX. Sin reservas y documentadamente el
autor, relata los acontecimientos y hechos que siguen después del serranazo
hasta el presente. El presidente Serrano, nos deja saber ¿Quiénes movieron los
hilos en aquella encrucijada? ¿Cuáles fueron los intereses que, movieron tales
manos ocultas? ¿Cuál ha sido el papel que han jugado, en el secuestro del
estado? ¿A quiénes cabe, en propiedad, el título de los dueños del país? Con
la obra La guayaba tiene dueño, se expone el testimonio sincero, valiente, de
un hombre que, desde su exilio, nos da, a nosotros y a la historia, la posibilidad
de tomar en cuenta la versión del agraviado, la que hasta ahora ha sido
acallada, tergiversada o, negada sin más. Si la verdad es una moneda de dos
caras, entonces ninguna de ellas, por sí sola, es la verdad; han de estar juntas,
vinculadas, para poder decir que la tenemos; este libro testimonial es la cara de
la verdad que permanecía velada, hasta ahora.