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ENSILLANDO Y MONTANDO

Controlando el Pasado
Carol Lynne

1
Capítulo Uno

Ray Justice vio desanimado el enorme montón


de papales mientras el sol se ponía a través de
la gran ventana de su oficina. Hubo un
momento en el que tuvo la impresión que una
vez establecido en el trabajo, su función se
nivelaría. No fue así, al menos no para los
empleados de Brockway, Lee y Thompson.

La firma de publicidad es una de las principales


en la nación Ray había logrado un gran numero
de premios por su impresionante ola de
campañas exitosas. Su mirada se movió a los
inactivos proyectos en el lado opuesto de la
mesa. A el le pagaban un buen salario debido a
sus innovadoras campañas, entonces porque el
tenía que pasar la mayoría de sus días
haciendo papeleo de oficina. Su teléfono
celular sonó sacándolo de su pequeña fiesta de

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auto-lastima. El vio el identificador de la
pantalla, no reconoció el número de larga
distancia. “Probablemente un maldito telemar-
queting,” murmuro. Aun así tomo la llamada
era mejor que seguir pasando el día
tamborileando el papeleo.

“Ray Justice,” él contesto, subiendo los pies


arriba del escritorio de vidrio y cromo.

“¿Raymond Eli Justice, Jr.?”

“Si. ¿Puedo ayudarlo?”

“Mi nombre es James Krueger, de la oficina


legal de Krueger y Westmoor en Red Lodge,
Montana. Soy el representante del testamento
de su padre, espero poder verlo después del
funeral.”

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Ray ahogo un gemido antes de que se pudiera
escapar. “Lo siento, debe de haber un error
Ray Justice. Mi padre, murió hace veintitrés
años.”

“¿Usted es Raymond Eli Justice, nacido en


West Seneca, New York, el 23 de enero de
1982?”

“Si, ese soy yo, solo que como ya le dije mi


papá murió cuando yo tenia tres años.” El casi
le cuelga al tipo. Ray no había hablado de su
homónimo desde que tenía siete años y había
hecho que su mamá llorara.

“Siento que sea yo quien le informe esto pero el


Señor Raymond Eli Justice, Padre, murió hace
dos días en su rancho de Montana.”

*****

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Todavía confundido con la anterior
conversación, Ray entro en su cochera y apago
el carro. Su mirada se fue hacia el banco de
herramienta y la herramienta que su padre
había dejado. Alineados como soldados, estaba
la herramienta, lo único que el tenia de su
padre.

Ray se sentía orgulloso de mantener la


herramienta de la manera que le hubiera dado
orgullo a su padre. Saliendo de su carro
deportivo, el paso su mano sobre los aceitada
herramienta que el nunca había aprendido a
usar. ¿Porque las habría dejado?

Con un suspiro, Ray se giro tomo su maletín


del asiento del pasajero. Después de cerrar la
cochera, de la misma casa de su infancia. Todo
le parecía diferente.

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Su madre había muerto hace ocho años y muy
poco había cambiado en la casa. Ray dejo las
llaves en la mesa de formica amarilla y cromo y
subió las escaleras al segundo piso hacia el
ático.

Si su madre tenia secretos, el los descubriría


en una de las cajas que ella mantenía
almacenadas en el lugar menos visto.

Usando una silla como su escalera, Ray tomo


el corto cordón de la compuerta y lo jalo. La
oxidada bisagra rechinó cuando la escalera
bajo. El retiro la silla y fijo el escalón inferior en
el piso de madera.

El no estaba seguro de lo que iba a encontrar


en esos viejos baúles, pero algo le decía que
su vida estaba por cambiar.
*****

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Ray se inclino en la tumba de su madre y retiro
el polvo de la simple lapida. Cuando Isabella
Justice había fallecido, Ray todavía estaba en
la universidad y el fue incapaz de pensar en
nada elaborado. Ahora la piedra lo
avergonzaba. El había heredado una buena
suma, porque no había pensado en retribuir a
su mamá por todos los años de duro trabajo
que ella había ello en su nombre?

“Yo finalmente examine todas esas cajas.”

El se sentó en sus talones y se metió las


manos en su chaqueta. “¿Porque no me lo
dijiste? ¿Porque mentiste todos estos años?”

Los papeles del divorcio que su mamá tenia en


el ático lo sorprendieron al descubrirlos. Paso
el resto de la noche tratando de entender la
traición de su madre. Se puso de pie y se iba a

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retirar pero se detuvo. “Quizás tu solo tratabas
de protegerme. Realmente lo hiciste. ¿Pero no
crees que merecía saber que mi papá seguía
vivo? ¿O era mas fácil para ti que creyera que
estaba muerto?”

Ray suspiro y estudio los alrededores de la


tumba. “Me tomare un tiempo libre. Diablos, no
estoy seguro si tendré trabajo cuando regrese,
pero necesito ir. Su funeral es el lunes y por
alguna razón, Creo que es importante para mí
estar ahí. No se para que, quizás para escupir
su tumba, o quizás solo para tener la
oportunidad de ver que era mas importante
que nosotros para él.”

*****
Ray dejo el mapa en el asiento del pasajero. El
estaba bajo el letrero del J Bar Rancho y sus
palmas estaban sudando. Cuando se detuvo en

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la pequeña ciudad de Red Lodge por
direcciones, el tipo parecía saber quien era Ray
y a donde necesitaba ir. ¿Era el J Bar tan
conocido?

El hizo un gesto de dolor cuando el lujoso carro


sedan rentado raspo por debajo con la tierra
seca. Buena cosa que el le hubiera agregado el
seguro. El se quedo sin aliento cuando vio el J
Bar, tenia construcciones en diferentes
tamaños, era un valle de libros de cuentos.
Mierda. El quería odiar el lugar, ¿pero como
podía si solo veía belleza en ese rancho?

El notó a un grupo de vaqueros alrededor de un


gran cobertizo y se dirigió hacia ellos. El
presiono el botón que bajaba la ventanilla del
lado del conductor. “Discúlpenme ¿alguno de
ustedes es Alfred Deacon?”

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Un joven vaquero se rio. “¿Alfred? ¿Es ese el
primer nombre de Deacon?” El hombre se giro
hacia sus amigos. “Diablos, chicos, nosotros
tendremos que hacerle algunas bromas.”

La mayoría de los vaqueros empezaron a


reírse mientras se alejaban. Ray no podía creer
que solo hubieran ignorado su pregunta. “Esta
el aquí o no esta.”

Uno de los hombres se acercó al carro y señalo


hacia otro cobertizo. “Encontraras a Deacon en
allá en el cuarto tack. El siempre llega tarde
hasta para comer.”

“Gracias.” Ray subió la ventanilla y apago el


motor. El vio hacia por el espejo retrovisor al
grupo de vaqueros dirigirse a una pequeña
construcción cruzando el camino de tierra.
*Tack, tachuela cambio, quien sabe a que se refiere lo dejaremos en ingles. si Ray no sabe nosotros menos.

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Con una profunda respiración, Ray salio del
carro y se puso el saco de su traje. Después de
desarrugar su pantalón gris tanto como pudo, el
entro al cobertizo. El vio alrededor. ¿Que
diablos es un cuarto tack?

“¿Hola? ¿Señor Deacon?”

“Aquí atrás,” una profunda voz contesto.

Ray sonrió por primera vez en dos días. La voz


de Alfred Deacon se oía igual a la de los
vaqueros de las películas de vaqueros, baja y
grave, como si Deacon hubiera fumado
demasiados cigarros en su vida. Camino a la
parte de atrás del cobertizo y bajo por un
declive a lo que asumió era el cuarto tack.

Ray vio por primera vez al gerente del rancho


de su padre y se sorprendió. Deacon parecía

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estar en la primera mitad de sus treinta, era
mucho mas joven de lo que Ray suponía y era
hermoso. “¿Señor Deacon?”

Deacon levanto la vista de la silla en la que


estaba trabajando. “Joder.”

Ray abrió más los ojos. “¿Discúlpeme?”

Deacon sacudió la cabeza y camino hacia Ray,


y extendió la mano. “Lo siento. Me dejaste
perplejo por un segundo. Eres la misma imagen
de tu papá.”

Ray se sintió incomodo. “No puedo saberlo.”

Deacon se detuvo y bajo su mano. “Si.


Supongo que no puedes. Siento eso.”

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Ray se encogió de hombros. Compasión era
algo con lo que nunca se había sentido cómodo
y por alguna razón, el que viniera de este
hermoso vaquero de un metro noventa y dos
con oscuros ojos color chocolate lo hacia
sentirse peor.

Ahora era el turno de Deacon de sentirse


incomodo. El metió sus pulgares en las bolsas
delanteras y movió la cabeza hacia la puerta.
“¿Ya comiste?”

Ray negó. “Vengo directo del aeropuerto de


Billings. No estaba seguro cuanto tiempo me
tardaría y quería llegar antes de que
anocheciera.”

Riéndose, Deacon le señalo a Ray que lo


siguiera. “Esto es Montana, no el fin de la tierra.
A pesar de que en el invierno cuando nieva eso

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parece. ¿Porque no me acompañas a comer,
en la casa-comedor?”

“Esta bien, si crees que a nadie le moleste.”

“¿Molestarle? Diablos, Es tu propiedad ahora.


Después de la comida te llevare a la casa
principal y te ayudare a establecerte.” Deacon
subió los escalones del pequeño cobertizo y vio
a los vaqueros que había visto entrar antes. El
se detuvo y vertió agua caliente en un tazón y
comenzó a lavarse las manos en el provisional
lavabo.

Después de que Deacon terminara, el dio un


paso atrás. Ray no estaba seguro de si
esperaba que se lavara las manos o no, pero
decidió seguir su ejemplo. El se quito el sacó
de su traje y busco un lugar donde colgarlo.

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“Dámelo.”

“Gracias.” Ray le dio su saco y se enrollo las


mangas antes de imitar el procedimiento que
Deacon había realizado.

“¿Te molestaría decirme como murió mi


padre?” Ray pregunto.

“¿No lo sabes?”

Ray negó. “Solo me dijeron que murió.”

“Uno de los trabajadores lo encontró por el rio.


El evidentemente tuvo un ataque cardiaco,
cayo de su caballo y se golpeo la cabeza con
una roca.”

“Entonces, que, ¿murió del ataque cardiaco o


de la caída?”

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Deacon se encogió de hombros. “Eso no
importa. Muerte es muerte.”

Una vez que Ray se seco las manos busco su


saco.

“Esta bien. Yo la cuelgo por ti.” Deacon abrió la


puerta de malla y camino por un pequeño
cuarto se detuvo a colgar el costoso saco en un
gancho de madera en la pared.

Ray vio como su pieza de ropa de cientos de


dólares era tratada como una ordinaria
chaqueta de mezclilla.

El siguió a Deacon al interior de un gran cuarto


lleno de largas mesas alineadas y sillas.

“Me gustaría que todos conocieran a Ray


Justice, Jr.,” Deacon lo presento.

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La mitad de las mandíbulas se cayeron. Los
vaqueros empezaron a preguntar.

“¿Que? ¿RJ tenia un hijo?”

“¿Porque no lo sabíamos?” otro hombre


preguntó.

Deacon levanto sus manos y sacudió la


cabeza. “RJ no hacia nada sin una buena razón
y lo saben. Ahora dejen de actuar como una
pandilla de imbeciles y preséntense ustedes
mismos.”

El primero fue el joven vaquero con el que


hablo antes, extendió la mano. “Soy Cody
Williams. Trabajo en el J Bar desde hace seis
años. Atiendo a los huéspedes.”

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Ray le estrecho la mano. “Huéspedes ¿Pensé
que era un rancho ganadero?”

“Nosotros abrimos el rancho a huéspedes


desde finales de mayo hasta mediados de
octubre. La cría no basta para que sea rentable
un rancho de este tamaño, por lo que usamos
los ingresos de los huéspedes para
mantenernos a flote,” Deacon explico.

Ray vio alrededor del cuarto. “¿Entonces,


donde están los huéspedes? ¿Ellos comen en
otra casa-comedor?”

“No. Ellos comen aquí con nosotros. El ultimo


grupo se fue esta mañana y el siguiente llega
mañana,” Deacon agrego.

Otro vaquero se puso de pie. “Hi, Ray. Soy


Neil, el capataz del J Bar. Ayudo a coordinar los

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campos de pastoreo con el gerente, uh, ese es
Deacon. Y también muestro a los huéspedes
como trabajar con el ganado y cosas
parecidas.”

“Neil se esta vendiendo corto,” Deacon


intervino. “El también es el maldito mejor con el
lazo que conozco y también revisa los campos
para que el ganado paste.”

Un hermoso hombre de cabello rojo oscuro se


puso e pie y toco la punta de su gorra de
béisbol. “Yo soy Jimmy. Yo solo trabajo en el
verano. Soy un estudiante de la universidad de
Montana. Mientras estoy aquí ayudo un poco
con todo, desde hablar con los huéspedes,
acompañarlos cuando montan o ayudar a
mover las cabezas de un campo de pastura a
otro.”

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“Encantado de conocerlos.” Ray vio hacia
Deacon. “¿Cabezas?”

“Es el termino en el rancho para el ganado.”

Ray asintió y se sintió como un idiota. “Claro.”

“Y Griggs es el encargado de los caballos. El


es el único vaquero que veras con cola de
caballo.”

Ray sonrió y estrecho la mano del nativo


americano. “Encantado de conocerte.”

“Igualmente.”

Deacon presento a otros vaqueros. “Nosotros


tenemos algo de tiempo entre cortar el heno y
preparar las cabañas para los huéspedes que
llegan mañana.”

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Una mujer salia de la cocina secándose las
manos con una toalla. “Si ustedes dos
terminaron de hablar y quieren mover sus
mandíbulas para comer, será mejor que se
muevan antes de que todo se enfrié.”

Deacon se rio. “Ves a la lindura tras el


mostrador es nuestra cocinera de fin de
semana, Libby. Durante la semana la cocinera
regular es Martha. Martha es conocida por
todos como Madre. Cuando hay huéspedes ella
tiene un ayudante, Donna. De ves en cuando
veras por aquí a Beth, quien atiende la oficina,
Taggert, quien esta con su equipo de fútbol y
algunos mas que son trabajadores de medio
tiempo. Te los presentare mas tarde.”

Deacon tomo un plato y le dio otro a Ray.


“Nosotros nos servimos la comida estilo buffet,
te sirves tu mismo, si quieres algo en particular

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solo pídeselo a Libby o a Madre. Ellas
usualmente son lindas atendiéndote.”

Ray lleno su plato con ensalada, chicharos y la


mas pequeña pieza de pollo frito que pudo
encontrar antes de dirigirse a una silla vacía.

Deacon con sus largas piernas se sentó a


horcajadas en la silla de a lado de Ray con un
plato rebozando de comida. El vio al plato de
Ray y sacudió la cabeza. “No crees que es muy
poca comida, No comeremos nada hasta la
cena.”

“Normalmente no como a la hora de la comida,


seguro que esto estará bien.” Ray le dio una
mordida a su ensalada, impresionado con el
rancho. Eso definitivamente no había salido de
una botella.

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Deacon tomo una canasta con pan y la dejo
entre ellos. “Eso es lo básico nosotros
continuaremos cuando te hayas acomodado.”

Ray asintió. El retiro la piel de su pollo y comió


una pequeña cantidad de carne. “¿Cuantas
vacas tiene este lugar?”

“Nosotros no las llamamos vacas, ¿recuerdas?


Son ganado o cabezas.”

“Lo siento. Supongo que tengo mucho que


aprender. Incluso nunca he montado un
caballo, excepto el de las ferias que caminan
en circulo.”

Jimmy bufo y Deacon le dio una mirada de


reprimenda. “Bueno, tu estas en el lugar
correcto para aprender. Nosotros tenemos
caballos para todos los niveles de habilidad.

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Después te presentare a algunos de mis
favoritos.”

“Necesito llamar al abogado de mi padre y


avisarle que estoy aquí. El quería verme en su
oficina en Red Lodge después del funeral del
lunes. ¿El funeral va a ser en Red Lodge?”

“Si y no. Será llevado mañana en la noche a


Red Lodge al bar favorito de RJ, pero el funeral
será aquí en el rancho el lunes en la mañana.”

“¿Aquí?”

Deacon asintió y se trago su bocado. “El J Bar


ha pertenecido a la familia Justice por cuatro
generaciones, tu eres la quinta. Hay un
pequeño cementerio familiar arriba en el cerro
a lado del pequeño valle los rancheros ya
construyeron el lugar.”

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¿Cuatro generaciones? Ray no había conocido
ni a sus abuelos del lado materno. El no podía
imaginar pertenecer a una familia de cuatro
generaciones. ¿Y el era la quinta? Ray no
sabía lo que iba suceder. Su vida estaba en el
este no en Montana.

Antes de que el se lo pudiera decir a Deacon,


el guapo hombre hablo, de nuevo. “Hay mucha
gente de aquí y de Billings que han estado
tratando de comprar este lugar durante años.
Apuesto a que ellos se quedaran impactados
como el infierno cuando se enteren que hay
una quinta generación de Justice. Estoy seguro
que eso es parte de lo que James Krueger
quiere hablar contigo.”

Ray alejo el plato, el poco apetito que tenia se


le fue. El sabia que el necesitaba decirle la
verdad a Deacon. “Bueno para ser honesto. El

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rancho estaría mejor en manos de alguien más.
Yo trabajo en publicidad. No se nada de como
llevar un lugar como este. Pienso preguntarle al
señor Krueger si sabe de alguien que quiera
comprar el rancho.”

Deacon bajo el tenedor y giro la cara hacia


Ray. “Espero que lo consideres. La gente que
esta interesada en comprarlo lo quiere para
hoteles, departamentos y condominios. No
quedara nada a lo que le puedas decir rancho
cuando terminen. Hasta donde se el rancho
funciona, no necesitas saber como llevarlo.
Tienes gente que puede hacer eso por ti.”

A pesar de que Ray sabia que el no iba a


cambiar de parecer, el no podía decírselo a
Deacon en un cuarto lleno de gente que
dependía del rancho para vivir. “Pensare en
eso.”

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*****

Deacon le quito la llave a la ornamentada


puerta de la casa principal y lo guió a la
entrada. “Bueno, esta es. Hay cuatro
recamaras arriba, incluyendo la recamara
principal. Es tu casa ahora.”

Ray vio alrededor del cuarto. Una fotografía


arriba de la chimenea capto su atención. El
camino hacia ahí y la levanto de la repisa de la
chimenea. Era de un pequeño grupo de
hombres y de una mujer. “Tu sigues diciendo lo
mismo, pero yo no lo siento mío. No conozco a
ninguna de esta gente de la fotografía. Quiero
decir se que este es mi padre, pero solo porque
me encontré ayer en el ático una fotografía de
el con mi mamá.”

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Deacon camino hacia él y vio la fotografía. El
es tu abuelo Ben ella tu abuela Gloria, no estoy
seguro, pero creo que los demás eran
trabajadores de tu abuelo.”

Ray vio sobre su hombro. “¿Sabes porque lo


hizo? ¿Porque nos dejo a nosotros....a mi?”

“No realmente. El dijo algo una vez borracho,


que siempre me ha extrañado.”

“¿Que fue lo que dijo?” Ray vio la imagen de su


padre. A pesar de que el corte de cabello era
diferente, Ray podía decir que tenía el mismo
cabello rebelde con el que había batallado toda
su vida. En la fotografía en blanco y negro el no
podía decir si compartían el mismo color verde
de los ojos. Ray imaginaba que si, tomando en
cuenta que su mama los tenia azules. El
distraídamente se paso un dedo por el

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profundo hoyuelo que tenia en su mejilla
izquierda. Justo igual que el que RJ tenía en su
mejilla.

“El dijo que si pudiera vivir su vida de nuevo,


haría muchas cosas diferentes.”

Ray dejo la fotografía en la repisa. “¿El nunca


hablo de mi?”

Deacon descanso su mano en el hombro de


Ray. “Una vez al año, a finales de enero, el se
encerraba en si mismo durante tres o cuatro
días de juerga.”

Ray mordió su labio inferior. ¿Lo recordaba su


padre? “Mi cumpleaños es el 23 de enero.”

“Lo imagine una vez que finalmente me dijo


todo,” Deacon admitió.

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¿Deacon sabía acerca de él? “¿Cuando fue
eso?”

“Hace poco mas de tres años, supongo.”


Deacon levanto una vieja pelota de béisbol de
la repisa.

“¿Puedes decirme que te dijo de mi?” Ray


preguntó, tomando la pelota de manos de
Deacon y dejándola de nuevo en la repisa.

“Casi nada, realmente. El solo me dijo que su


hijo se estaba graduando de la universidad,”
Deacon dijo.

Ray estaba impactado. “¿El sabía que yo


estaba en la universidad? ¿Como?”

Deacon se encogió de hombros. “Quien sabe.”

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Con sus manos cerradas detrás de su espalda,
Ray camino alejándose. El no podía explicar
sus sentimientos. Una gran parte de él estaba
enojado con su padre que se había interesado
lo suficiente para enterarse de los eventos
importantes, eventos que el había celebrado
solo después de la muerte de su madre. Otra
parte de el estaba emocionada al saber que su
padre se había preocupado por el a su propia
pequeña y egoísta manera.

Sin girarse a ver a Deacon, Ray preguntó,


“¿Crees que seria demasiado intrusivo si veo
por los alrededores un poco? Quizás encuentre
alguna pista de porque el hizo lo que hizo.”

Un juego de llaves fue arrojado a la mesa a


lado de Ray. “Ahí están. La mas pequeña son
para su escritorio,” Deacon le informo.

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Ray tomo las llaves y considero que
repentinamente el hombre se había enojado.
“Estas enojado.”

“Supongo que lo estoy, pero no por ti. Quiero


decir. No me molesta que trates de saber mas
de tu familia, es solo que es raro que alguien
revise las cosas en la casa. RJ fue mi mejor
amigo desde hace trece años. Supongo que es
difícil pensar que se fue,” Deacon dijo.

Quizás el se había equivocado con la edad del


gerente del rancho. “Tu no te vez tan viejo.”

Deacon sonrió. “Realmente no lo soy. Solo


tengo treinta y dos años.”

“Entonces ¿conoces a RJ desde que tenias


diecinueve años?” Ray pregunto.

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“No. Dije que lo considere mi mejor amigo
desde hace trece años. Yo realmente lo conocí
desde que tenía quince. Yo era un niño local,
que trabajaba aquí, en los veranos. Después
de graduarme, yo sabía que quería trabajar en
el rancho, pero RJ no tenia vacantes de tiempo
completo. Entonces yo encontré un trabajo en
el norte.”

Deacon camino hacia la repisa y tomo la


fotografía de RJ en un caballo. “Las cosas…no
funcionaron. Regrese aquí y RJ invento un
trabajo para mi. Con los años fui aprendiendo y
me convertí en el gerente.” Deacon vio
alrededor del cuarto. “He pasado mucho tiempo
aquí en años.”

“¿Te sentirías mejor si te quedas mientras abro


el escritorio de mi padre?”

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Deacon se coloco su sombrero vaquero en la
cabeza y se dirigió a la puerta. “No, no lo creo.
Yo aprecio que preguntaras, pero si RJ quisiera
que conociera sus secretos me los hubiera
dicho.”

Con la mano en la perilla, Deacon se giro hacia


Ray. “Mi casa es la que sigue al establo.
Cuando estés listo te mostrare los caballos y
hablaremos. Puedes tener tu primera lección
antes de que lleguen los primeros huéspedes
en la mañana.”

“Gracias,” Ray dijo.

Deacon toco su sombrero y salio.

Ray cerró la puerta y se apoyo en ella. Su


mirada se fue hacia el rustico cuarto. El trato de

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imaginar a su padre en el sillón, su cabello
negro entrecano apoyado en una almohada.

Todo lo que había escuchado desde que llego


al rancho era completamente diferente al
hombre que lo había abandonado. Sin incluso
darse cuenta llego a la oficina de su padre que
solo la había visto en su imaginación Ray se
limpio las lagrimas.

“¿Quien eres?”

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Capítulo Dos

Ray se sentó ante el antiguo escritorio que


había pertenecido a cuatro generaciones de
hombres Justice. Sus manos temblaban
mientras el sostenía la llave que le daría pistas
de su pasado. Con una profunda respiración, el
abrió la pequeña cerradura de latón.

No fue hasta que abrió el cajón inferior que el


encontró algo más personal que chequeras y
estados de cuenta. El sacó una vieja caja de
zapatos y la dejo arriba del escritorio.

Ray no estaba seguro de cuanto le llevo abrir la


caja, marcada con su nombre escrito a mano
por su padre. El trazo los rasgos de la pluma
con la punta del dedo. Se puso de pie y cruzo
la masculina oficina hacia el pequeño bar y se
sirvió un trago de whiskey. Beber no era su

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costumbre pero seria indulgente, el necesitaba
toda la fuerza que pudiera reunir. Si necesitaba
toda la botella que así fuera.

Regreso al escritorio tomo una calmada


respiración mientras levantaba la tapa de la
caja. El se froto los ojos cuando vio el paquete
de cartas, toneladas de ellas. El rápidamente
levanto el primer paquete de cuatro o cinco
cartas y sacudió la cabeza. ¿Que diablos?

*****

Unos fuertes golpes en la puerta llamaron la


atención de Ray. El parpadeo varias veces y se
limpio los ojos. Mientras se ponía de pie, sobre
las cartas abiertas en el piso. La alfombra
alrededor de él estaba literalmente cubierta de
ellas. Se dirigió a la puerta. Cuando la abrió se
sorprendió de ver a ese hombre afuera.

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Deacon estaba con un plato cubierto de
aluminio. “Te perdiste la cena.”

Todavía confundido, Ray tomo el plato.


“Gracias.”

“¿Estas bien?” Deacon pregunto.

Ray negó. “No.” El vio hacia la oficina. “¿Puedo


mostrarte algo?”

Deacon asintió y siguió a Ray al inferior de la


oficina de RJ. Ray dejo el plato de comida en el
escritorio y señalo hacia las cartas y sobres
que llenaban el suelo. “Todas fueron dirigidas a
mi, pero solo unas cuantas fueron enviadas.”
Deacon se inclino y levanto un pequeño
paquete de hojas. Antes de empezar a leer, el
vio a Ray. “¿Estas bien con esto?”

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“Si. Quizás tu puedas darme algunas
respuestas.”

Todavía sosteniendo las hojas en la mano,


Deacon vio alrededor del cuarto. “¿Cuantas de
estas hay?”

Ray se encogió de hombros. “No se sesenta


setenta quizás. Me escribía dos o tres veces al
año, usualmente en mi cumpleaños, en navidad
y el diecisiete de Junio. Esa debió ser la fecha
en que me dejo. Hay incluso una marcada
devuélvase al remitente. Esa fue una tarjeta por
la graduación de la preparatoria.”

Ray levanto una y se la dio a Deacon. “Esta es


la única que realmente escribió mi madre.”

Deacon tomo la carta.

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Mientras Deacon leía las mentiras que la madre
de Ray había escrito, Ray se tenso incomodo.
El todavía no podía creer en la traición de la
única persona en el mundo que creía que podía
confiar.

Deacon termino de leerla y devolvió la carta a


Ray. “¿Tu realmente te sientes de esa
manera?”

Exasperado, Ray levanto las manos. “Ella me


dijo que el estaba muerto. Seguro no le dije que
no quería nada con él.”

Ray tomo las cartas del suelo. “No puedo creer


porque le creyó a ella.”

Deacon se limpio la garganta y se sentó en el


suelo a lado de Ray. “RJ era gay. No es raro
que la gente odie a alguien debido a su

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preferencia sexual. Según tu mamá tu estabas
enojado con el y deseabas que estuviera
muerto.”

“¿Mi papá era gay? Bueno, supongo que eso


explica muchas cosas.”

Deacon puso su mano en el muslo de Ray.


“¿Como que?”

Ray sacudió la cabeza. “Sus sarcásticos


comentarios acerca de maricas. Como ella
reacciono cuando le dije, al salir de la
preparatoria.”

“Tu eres…”

“Si. Lo supe toda mi vida, pero no me atreví a


decírselo mientras todavía vivía en casa.
Nosotros realmente no hablamos mucho

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después de eso. Ella dijo que era afortunado de
que el dinero de mi padre pagara… ¡Mierda! Yo
no creía, yo no pensé antes. Mamá dijo el
dinero de tu papá esta pagando por tu
universidad. Pensé que se refería a algún tipo
de seguro o algo así. Maldición. Eso fue
cuando yo me gradué de preparatoria.”

Ray se puso de pie y comenzó a pasear por la


oficina. ¿Que habría pensado su padre de él?
“Apuesto que el pensaba que tenia a un real
idiota de hijo. Algún niño malcriado y presumido
que se rehusaba verlo pero que aun así
tomaba fácilmente su dinero. No me extraña
que las últimas cartas no fueran como las
primeras. El debió odiarme.”

Deacon se paro frente a él y detuvo su paseo


con una mano en el pecho de Ray. “No te
golpees, no fue tu culpa.”

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Ray tomo un puño de su negro cabello y lo jalo.
Era algo que hacia desde que era niño para
castigarse. “Deseo que pudiera decírmelo. El
murió pensando que yo lo odiaba.”

Deacon retiro los dedos de Ray de su cabello.


“¿Que? ¿Tu no crees que el puede vernos en
este momento? Bueno, Se que RJ, y puedo
decirlo sin ninguna duda, el esta escuchando
cada palabra que estamos diciendo. A el nunca
le gusto la gente que hablaba a sus espaldas.”

Ray vio su mano cubierta por la mucho más


grande mano de Deacon. El se odio a si mismo
por mostrar debilidad ante el rudo ranchero. Su
mano en la de Deacon se sentí casi...en su
corazón. ¿Como seria sentirse totalmente
rodeado por el cuerpo del fuerte y bronceado
gerente?

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Ray rápidamente se alejo. A pesar de que
Deacon definitivamente era su tipo, el sabia
que no debía llegar al rancho y tomar al
vaquero. “¿Es demasiado tarde para la lección
de cabalgata?”

Deacon vio por la ventana la oscuridad de la


noche. “Es demasiado tarde para montar. Estoy
seguro que los caballos ya están con la
pastura. Si te parece empezamos mañana
temprano, yo estoy en el establo a las cinco”

¿De la mañana?” Ray casi se ahoga.

Deacon se rio. “Si. El desayuno es servido a las


siete y la faena diaria debe estar terminada
antes de las diez. Los huéspedes llegaran para
la hora de la comida y tendremos las cabañas
listas.”

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“Esta bien, Nos vemos a las cinco. Solo no te
rías si me duermo arriba del caballo.”

*****

Deacon acomodo el cincho de la silla en Black


Jack presionando su rodilla contra el grande y
negro abdomen.

A pesar de ser un maldito fino caballo, Black


Jack tenía la tendencia a retener aire si el
cincho no estaba suficientemente apretado.

El oyó a los vaqueros reírse y quito la vista del


caballo para ver la causa de esa conmoción.

“Maldición, Incluso vestido como un tipo de


ciudad, el es caliente,” Cody dijo.

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“Joder ¿quien es ese que camina como un
dulce?” Taggert preguntó. “El es hermoso.”

Por alguna razón el comentario de Taggert


inmediatamente puso de mal humor a Deacon.
“Ese es el hombre que puede despedirte en un
segundo. Cuida tu boca.”

El se alejo de los vaqueros, gritándoles


órdenes sobre el hombro. “Regresen al trabajo.
Quiero la cerca arreglada de lado de Logan
antes del desayuno.”

Deacon podía oír a los vaqueros refunfuñar


mientras montaban y se iban. El había pasado
casi toda la noche despierto, pensando en Ray.
Viéndolo ahora con los ajustados jeans y la
camisa estilo vaquero no prometía nada bueno
para el resto del día. La atracción que el había
sentido por Ray en su traje, no se comparaba

46
con el jovencito pretendiendo vestir ropa de
vaquero.

“Lo siento, llego tarde,” Ray dijo cuando todavía


estaba lejos.

“No te preocupes.” Deacon señalo hacia las


botas de cocodrilo de Ray. “¿Son nuevas?”

Ray asintió, su cuello y mejillas se ruborizaron.


“Lo son. Tengo que admitir que no tenia nada
apropiado para vestir y tuve que ir de compras.”

“Bueno, esas lindas botas se ven bien pero no


debes usarlas.”

Ray vio hacia abajo a sus brillantes nuevas


botas. “¿Porque? Son buenas botas.”

47
Deacon levanto su pie y pateo. Su bota salio y
fue a caer a dos metros de distancia.
“Necesitas tener unas botas con las que
puedas hacer eso. De otra manera si te caes
del caballo y la bota se atora en el estribo, el
caballo te arrastrara.”

Ray empezó a agarrar su cabello, mientras


pensaba en eso. “No tengo otras.”

“No te preocupes. Hay un montón en el sótano


de la casa-comedor. La mayoría de nuestros
huéspedes les pasa lo mismo que a ti con las
botas. Nosotros las encontraremos después de
desayunar.”

Deacon recupero su bota antes de guiar a Ray


al establo. “Ya saque a Dandy afuera para que
pruebes. Ella es la que acostumbramos a usar
con los huéspedes ella sabe lo que hace.”

48
Ray se rio. “Quieres decir, que ella esta
acostumbrada a llevar gente de la ciudad en su
lomo.”

“Si, Algo como eso.” El camino al cuarto de tack


y señalo la percha de las monturas. En el
centro del gran carril estaban las mantas. “Esta
bien, lo primero que debes de hacer es tomar
una manta y una montura.”

En lugar de ir hacia la percha, Deacon entro en


un pequeño cuarto y regreso con una
hermosamente labrada a mano, montura
cereza. “Esta es la que acostumbraba a usar
RJ. Creo que te agradara usarla.”

Ray pasó su mano por las intricadas iniciales


labradas en un lado de la montura. “¿Mi padre
montaba en Dandy?”

49
Deacon se mordió un lado de la mejilla para no
reírse. “No. RJ era uno de los mejores jinetes
que he conocido. El montaba en, Surly, es
demasiado para ti en este momento. Toma la
manta negra con rayas que esta allá?”

Ray entro al pequeño cuarto y regreso con la


manta de RJ. El no dijo nada, pero Deacon
podía decir que pesaba un poco más de lo que
Ray esperaba.

Deacon salio del cuarto y rodeo la equina el


establo en donde Dandy estaba esperando
amarrada a un poste. “Esta bien, lanza la
manta sobre el lomo de Dandy. Si, así es… Un
poco más arriba hacia el cuello. Perfecto.
Ahora, retrocede y déjame poner la montura.
Esta bien, toma la parte del frente del cincho
aquí en la silla. Asegúrate de tomarlo y
deslízalo acá, que no golpee el caballo. Solo

50
déjalo caer suavemente. Entonces tú tomas
aquí el otro lado y lo enganchas. Así, tira tan
fuerte como puedas. Yo usualmente le doy un
buen empujón con la rodilla para asegurarme
de que no se deslice conmigo. Una vez que
esta suficientemente apretado solo lo
acomodas aquí. Ahora el frente del cincho debe
quedar tan apretado que solo queden tres
dedos entre él y el caballo.”

“¿Voy a tener un examen después?” Ray


pregunto con sus chispeantes ojos verdes.

Deacon se rio. “No. Pero a menos que quieras


ser pisoteado en tu culo asegúrate de hacerlo
bien la primera vez.” Deacon camino a lado de
Ray y maniobro para quedar a lado de Dandy.
“Ahora, pon tu pie izquierdo en el estribo y sube
apoyándote de la cabeza de la silla. Una vez

51
que estés arriba desliza la otra pierna al otro
lado.”

Con su pequeña estatura y lo apretado de sus


jeans, Ray pasó un duro momento para poder
poner el pie en el estribo. Una vez que
finalmente lo hizo, Ray estaba prácticamente
haciendo un splits. Deacon sabía que no había
manera de que el pequeño hombre pudiera ser
capaz de subir el solo. El coloco ambas manos
sobre la cadera de Ray y lo levanto.

“Desliza la otra pierna por arriba,” le indico. El


se rehusó a reconocer lo bien que sintió esa
pequeña cadera en sus manos.

Una vez que estuvo en la silla, Ray sonrió.


“¿Me veo igual que un vaquero?”

52
Deacon pensó que Ray se veía como un
pedazo de cielo desde donde el estaba de pie.
“Si. Todo lo que necesitas es un poco de
estiércol de vaca en tus botas y lo serás.”

“Oh, mis botas. ¿Debería habérmelas


cambiado antes de montar?”

Deacon negó. “Solo te voy a mostrar lo


fundamental ahora. Nosotros solo montaremos
alrededor de uno de los anillos de monta, así
que estarás seguro.”

*****

Antes de conducir al bar al servicio en la


memoria de RJ, Deacon llevo a Ray a la
funeraria Jameson. El estaciono la camioneta
del rancho y apago el motor. “¿Estas seguro
acerca de esto?”

53
Ray se acomodo su sacó sport. “Estoy seguro.
No tienes que ir conmigo si no quieres, pero
necesito verlo.”

Deacon sabía que el necesitaba preparar a Ray


para lo que el iba a ver. Esa era la razón por la
que el servicio se llevaría en el bar en lugar de
en la funeraria. “Cuando el cayo del caballo, su
cabeza golpeo con una roca. Lyle Jameson
digo que el podía esconder el daño, pero…”

Ray cruzo el asiento y puso su mano sobre


Deacon. “Entiendo.”

Deacon asintió. La sensación de la mano de


Ray fue directa a su pene. El se encontró
inclinándose hacia Ray. Todo en lo que podía
pensar era en probar esos tentadores labios del
hombre. Sus codos golpearon la bocina cuando
el jalaba a Ray a sus brazos, sorprendiendo a

54
ambos. ¿Que diablos estaba haciendo?
Deacon pensó. Seduciendo a Ray en el
estacionamiento de la funeraria era increíble y
estupido. Deacon abrió la puerta y le dio a Ray
la mejor sonrisa que pudo mostrar. “¿Listo?”

“Si y no.” los ojos de Ray parecían un poco


brillosos cuando el tomo la manija de la puerta.

Deacon había llamado a Lyle y los esperaba en


la entrada cuando ellos llegaron.

“Siento tu perdida,” Lyle le dijo a Ray en forma


de saludo.

“Gracias.”

Ray siguió a Lyle al interior de uno los cuartos


cuando Deacon se retiro. No es que el no
quisiera ver a su viejo amigo, solo que el

55
pensaba que Ray podría necesitar un momento
a solas con su padre primero.

Deacon se quedo en la parte de atrás del


cuarto y observó a Ray, tratando de detectar
sus emociones con su postura. El vio como
Ray observo el cuerpo de RJ varias veces
antes de fijarse en él.

Deacon no podía ver que estaba haciendo,


pero el sutil temblor en los hombros de Ray le
dijo que el joven estaba sufriendo. El se dirigió
hacia Ray, ofreciéndole un toque compasivo en
la espalda del hombre. “¿Estas bien?”

“El se ve diferente a la fotografía.”

Deacon sabía que Ray no estaba hablando


acerca del lado derecho de la cabeza de RJ
donde se había dado el golpe fatal. “¿Como?”

56
Ray señalo hacia la solapa del traje negro de
RJ. “No se quizás es la ropa. Solo no me
parece él.”

“Ellos partieron la ropa por la espalda para


ponérselo. No puedes esperar que le ajuste a
la medida.”

Ray negó. “No. No es eso lo que quiero decir.


Yo lo he visto mas del tipo de jeans y franela.”

Deacon sonrió. “RJ podría ser un ranchero,


pero el era un diablo bien vestido cuando la
ocasión lo ameritaba. A el no le gustaría irse sin
estilo.”

Ray vio sobre sus hombros. “Gracias por


asegurarte de que el fuera feliz.”

57
Deacon se encogió de hombros y sintió el ardor
de las lágrimas pero se rehusó a dejarlas caer.
“Es lo que los amigos hacen por otros.”

Ray se giro hacia la cara de Deacon. El paso


su mano por la mejilla de Deacon. “Lo siento.
Esto debe ser muy difícil para ti.”

Deacon parpadeo varias veces tratando de


desaparecer la amenaza de las lágrimas.
“Apesta decirle adiós, sabiendo que nunca mas
compartirás una cerveza o una risa.” Deacon
lucho para evitar que las lágrimas cayeran.

“Yo no podría pedir un mejor amigo.”

Una lagrima escapo y Ray rápidamente se la


secó. Deacon vio fijamente esos ojos verdes
que eran muy parecidos a los de RJ y se sintió

58
perdido en ellos. Si pudiera tan solo inclinarse y
cubrir esos dulces labios con los suyos.

Ray pareció estudiar a Deacon un momento.


Repentinamente sus ojos se abrieron
ampliamente. “¿Ustedes eran amantes?”

Sorprendido, Deacon negó. El no había


mencionado su propia preferencia sexual a
Ray. “No. ¿Que te hace pensar eso?”

Ray se encogió de hombros. “No se. Quizás es


porque puedo ver lo mucho que lo amas. Yo
nunca he tenido ese amor de un amante,
menos de un amigo. Yo solo pensé que
quizás…”

Deacon negó. Dios el quería besar a Ray, pero


seducir al hijo de su mejor amigo, no era algo

59
que RJ considerara adecuado, especialmente
no frente a él.

“¿Puedo preguntarte algo?” Ray preguntó.

“Claro,” Deacon contestó.

“¿Eres gay?”

Incluso después de años de haber salido del


closet en el rancho, a Deacon todavía le
resultaba difícil admitirlo. “Si.”

“¿Si tu amabas a mi papá. Porque no eran


amantes?”

“No se. Nosotros veíamos al otro de otra


manera. El no era mi tipo, supongo.” Deacon
sabía que el necesitaba cambiar de tema. Eso
no era algo que quisiera tratar con Ray, no ahí.

60
“Vamos te invito un trago en honor a RJ.”

*****

Ray le quito la llave a la puerta del frente.


“Aprecio lo que haces por mi.”

Deacon vio a Ray un momento. “Es un placer.”

“¿Te gustaría entrar y tomar un trago? Quizás


un ultimo brindis por mi padre?” El no podía
explicarlo, pero sabía que era importante. Ray
sabía que el no era el único en sentir la
corriente eléctrica entre ellos.

“Mejor no,” Deacon contesto.

“¿Por favor? ¿Solo uno? ¿No quiero quedarme


solo todavía.”

61
Deacon finalmente asintió y siguió a Ray al
interior de la casa. El camino hacia el bar y
sirvió un vaso de whiskey, le dio un trago al
suyo antes de servir el otro. El le paso el vaso a
Ray antes de tomar su posición a lado de la
chimenea.

Ray tomo un trago de su fuerte licor. “Entonces


¿A que hora estará todo el mundo aquí en la
mañana?”

“Bien nos reuniremos frente al establo a las


nueve. Es tradición montar al cementerio, pero
también ira una Van para la gente mayor. Si te
sientes mas cómodo que montar pueden ir…”

“No. Puedo montar a Dandy. ¿Que con el


ataúd?”

62
“Nosotros lo llevamos sobre una carreta
abierta, se ha hecho así por generaciones.”

Ray se jalo el cabello. “Toda la noche me he


estado maldiciendo a mi mismo. He estado
oyendo cosas agradables de mi padre y me
enojo conmigo mismo.”

Deacon termino su bebida y se sirvió otra.

Ray tomo un trago y dejo el vaso en la mesa.


“Dios, deseo poder haberlo tenido en mi vida.
Pase muchos años confundido y asustado de
admitir quien soy.”

Ray sabía que era más que eso. Su papá había


construido una vida de la que podía sentirse
orgulloso. El tenía un fantástico grupo de
amigos quienes se apoyaban. Ray nunca había
conocido el tipo de apoyo que los amigos de su

63
papá parecían ofrecerle. El se paro frente a
Deacon y vio fijamente los oscuros ojos café.
“Se que no encajo aquí, pero quiero.”

Acercándose, Deacon lentamente se inclino y


rozó sus labios con los de Ray, antes de
rápidamente retirarse. “Necesito irme.”

Ray vio impactado como Deacon abría la


puerta para salir. El hermoso hombro vio sobre
su hombro por última vez.

“Tengo cosas que hacer en la mañana. Si no


estoy alrededor, uno de los chicos te ayudara a
ensillar a Dandy.”

¡Maldición! Ray quería gritar cuando la puerta


se cerró detrás de los anchos hombros de
Deacon. El corrió a la puerta intentando
detener a Deacon, pero se detuvo. Quien fuera

64
los demonios con los que estaba luchando
Deacon, Ray sentía que no era el momento de
presionar al hombre.

*****

Deacon subió a la camioneta y recorrió la corta


distancia hacia su pequeña casa en el rancho,
maldiciéndose a si mismo en el camino. ¿En
que diablos estaba pensando? El sabía tan
pronto como sus labios tocaron a Ray que eso
era un error. La atracción que sentía era
demasiado fuerte para un romance casual y
Ray era el hijo de su mejor amigo. “¡Joder!”

El cerro la puerta del frente de su casa de


golpe y comenzó a desnudarse de camino a la
cocina abrió una botella de whiskey que RJ le
había regalado para su cumpleaños. Desnudo
frente al fregadero el veía por la ventana,

65
esperaba que ninguno de los huéspedes
estuvieran paseando en la oscuridad.

Deacon tomo otro trago directo de la botella y


se limpio la boca. El no había sido totalmente
honesto con Ray. El había estado enamorado
de RJ en otro tiempo, pero su amigo lo había
rechazado. El ahora sabía la razón. En un
momento, RJ le había confiado a Deacon que
el lo amaba como a un hijo, ahora Deacon
sabía porque. RJ había vivido el duelo por el
hijo que no se permitió nunca conocer.

¿Que pensaría RJ si supiera que urgentemente


Deacon quería enterrar su pene en el culo de
Ray? El bufo.

Eso no se trataba solo de sexo. Eso era algo


más, Ray despertaba el instinto protector en

66
Deacon. El quería sostener al pequeño hombre
y nunca dejarlo ir.

El se dirigió a la sala, y al pequeño escritorio en


la esquina. Abriendo el cajón superior el sacó el
sobre con su nombre que el señor Krueger le
había dado la semana anterior, con un mensaje
de RJ que no lo abriera hasta hacer amistad
con Ray. Deacon suponía que seducir al hijo de
su mejor amigo, no era precisamente lo que RJ
tenía en mente. Deacon todavía no estaba
seguro que diablos se suponía que quiso decir.
¿Que podría RJ querer decirle a Deacon que
ya no le hubiera dicho? Después de otro trago
de la botella, Deacon tomo la carta y se fue al
sofá. El dejo el whiskey en la mesa de café y
abrió la carta.

67
Capítulo Tres

Vistiendo unos pantalones de vestir negros y


una camisa blanca, Ray toco la turquesa en el
centro de la corbata vaquera*, el la había
encontrado en el escritorio de su papa. La plata
en las puntas de la piel estaba muy maltratada.
Ray no dudaba que fuera una de las favoritas
de su papá. El esperaba que a nadie le
molestara que la usara.

El se sorprendió de encontrar a Dandy ya


ensillada y esperando en el establo. “Hey,
chica.” el le hablo, pasando su mano por la crin
rojiza de la yegua. Una sombra detrás de él.
Hizo que Ray se girara, esperaba ver a
Deacon.

“Oh, hi, Cody.”


*La corbata vaquera es dos tiras de piel delgada como cintas de zapatos redondeadas con puntas de plata y una
especie de medallón que las une y que queda en la parte superior de la camisa.

68
El joven y apuesto vaquero toco su sombrero.
“Imagine que montarías a Dandy. Espero no te
moleste que la haya preparado y este lista.”

“No para nada. Gracias.” Ray vio alrededor.


“¿Deacon esta con los huéspedes?”

“No. El hablo con ellos ayer cuando llegaron.


Les explico de la muerte de RJ y ellos están de
acuerdo en tratar de pasar desapercibidos esta
mañana hasta después de los servicios
fúnebres.”

“Oh. Eso es bueno.” El camino con sus botas


prestadas por la tierra. “¿Sabes donde esta
Deacon?”

Cody negó. “No lo he visto, pero todos


imaginamos que el necesita algo de tiempo a
solas, no es el único ausente.”

69
Ray regreso su atención al caballo. El recordó
como Deacon le había dicho que se hacían las
cosas, pero el esperaba… Oh diablos, él no
sabía que esperaba.

“¿Quieres ir a desayunar?” Cody preguntó.

“Claro.” Ray le dio a Dandy otra caricia bajo el


mechón de la cara y siguió a Cody cruzando el
camino. El paso una van de pasajeros que se
usaba para transportar a los huéspedes y llego
a la casa-comedor. “¿Como cuanta gente se
espera?”

Cody vio hacia el camino del rancho. “Es difícil


decirlo, pero imagino que alrededor de
cincuenta jinetes, Quizás seis o siete en la van.
Los remolques con los caballos deben de llegar
en cualquier momento.”

70
Ray noto que Cody continuamente veía la
corbata prestada. “¿Esta bien que use esto?”

Cody asintió. “Seguro. RJ siempre la usaba


para darle la bienvenida a los huéspedes y
cuando él y Deacon hacían la gran cena para
los huéspedes en la vieja cabaña de verano.”

Ray odiaba admitirlo, pero el todavía no había


ido a la gran estructura a la que le decían la
cabaña de verano. “Yo todavía no he estado
ahí, pero ahora estará lleno de huéspedes.”

“No, para nada. Los huéspedes se quedan en


el área nueva. Esa es original, la construyo tu
tatarabuelo se usa principalmente para la cena
de final de la semana y es donde siempre
tenemos nuestras cenas de día de acción de
gracias y navidad. RJ reconstruyo la cocina

71
hace un par de años. A el le fascinaba ser el
chef junto con Deacon.”

“¿Todos los chicos pasan aquí las fiestas?” Ray


tomo un plato y se sirvió huevos revueltos y
tocino.

Antes de contestar, Cody vio alrededor del


cuarto. La mayoría de la gente ya había
comido, Ray podía decirlo por las manchas
rojas y amarillas en el mantel de la mesa. Cody
vio a los lados y le dijo en voz baja a Ray. “La
mayoría de nosotros nos quedamos aquí,
porque no somos bienvenidos por nuestra
familia en nuestras casas.”

Desconcertado con la declaración, Ray llevo su


plato a la mesa. Una vez que Cody estuvo
frente a él, él se inclino. “¿Seria descortés si te
pregunto porque no serian bienvenidos?”

72
Cody tomo un bisquet lo partió a la mitad y le
agrego mantequilla. “Principalmente por lo gay,
pero nosotros realmente no publicamos eso a
nuestros huéspedes, lo mantenemos bajo el
sombrero.”

Ray dejo el tenedor con el huevo a medio


camino de su boca. “¿Todos son gay?”

Cody se rio. “¿No lo sabias?”

Ray negó.

“Hace años después de que a Deacon fue muy


golpeado por esos tipos con los que el
trabajaba, RJ fue al norte a buscarlo al hospital.
El lo trajo aquí al J Bar y le dijo que el podía ser
él mismo aquí. La palabra se corrió y aquí
estamos. Todos inadaptados, rudos vaqueros
de Montana, Texas y Wyoming.”

73
A Ray se le atoro la comida en la boca. “¿Pero
si los huéspedes no lo saben, como pueden ser
ustedes mismos?”

Juntando sus cejas, Cody tomo huevo de su


plato con el tenedor. “Solo porque no se te
permite alardear de tu sexualidad ante los
huéspedes, no quiere decir que no se te
permita ser tu mismo. ¿Eres gay, verdad?”

“Si.”

“¿Tu hablas en tu trabajo de lo que haces en tu


casa?” Cody pregunto.

Ray negó. “Entiendo el punto.”

*****
Deacon tropezando llego a la cocina y preparo
una jarra de café. El se sentía como si una

74
banda militar estuviera golpeando en su
cabeza, se inclino y sacó la carta de RJ del
bote de basura la dejo sobre el mostrador y
trato de desarrugarla de su rabieta de la noche
anterior. Cuando la había arrojado, no tenía
intención de leer las viles cosas de nuevo, pero
al despertar se dio cuenta que quizás era el
alcohol el problema y no lo que estaba escrito
en la página.

Sin esperar a que el café estuviera listo,


Deacon fijo una taza sobre el goteo automático.
Eso iba a estar más fuerte que el infierno, pero
como se sentía, era lo que necesitaba.
Tomando su café y la carta el regreso a la
mesa, saco una silla y se sentó. Pensar en leer
y maldecir de nuevo, incluso estando semi-
sobrio. Las palabras escritas en la pagina eran
en extremo contrarias al hombre que el había
conocido.

75
Mi Querido viejo amigo,

Si estas leyendo esto significan que tú ya


tienes algún tipo de relación con mi
caprichoso hijo. Por favor, no te dejes
engañar por él. El es un interesado en lo
único que va a pensar es en vender las
tierras que tantos años le costó a mi
familia adquirir.

El recordó las palabras de Ray. Su nuevo


amigo tenía razón, RJ pensaba que su hijo era
un malcriado presumido.

Deacon se brinco la parte en donde RJ


confesaba la inicial separación e su esposa e
hijo. El no sentía deseos de leer como su viejo
amigo se quejaba de su matrimonio, que se
había casado demasiado joven y asustado para
salir del closet.

76
Deacon incluso no le interesaba que RJ
hubiera tenido un breve amorío con un
compañero de trabajo masculino y que eso
fuera la causa de la rotura del matrimonio. El
dejo a su esposa e hijo para perseguir su
‘verdadero ser’ como RJ lo decía. Deacon le
decía puro egoísmo.

No era de extrañar que después de un par e


años de relaciones fallidas, RJ empezara a
sentirse culpable acerca de la manera en que
dejo a Ray Jr. Cuando el recibió la carta de la
mama de Ray, diciéndole que Ray no deseaba
ver ni hablar con él, RJ lo había dado por
hecho. RJ todavía siguió manteniendo y
pagando la universidad de Ray Jr. pero el
sentía una amargura que se lo estaba
comiendo como un cáncer.

77
Deacon regreso a leer la carta escrita por RJ
Cuando me entere que mi corazón estaba
dando problemas, contrate a un detective
privado. Yo necesitaba saber
exactamente en que tipo de hombre se
había convertido mi único heredero. El
reporte que recibí, hizo incluso que me
enojara más. ¿Como se atrevía Ray Jr. a
rechazar una relación conmigo cuando él
mismo era gay?

Créeme, Deacon, si yo pudiera te dejaría


el rancho a ti. Desafortunadamente, una
disposición de mi bisabuelo no me deja
elección. El rancho pasa al descendiente
directo o se vende. Nosotros ambos
sabemos que no podemos permitir eso.
Es por eso que quiero pedirte el mayor
favor de mi vida.

78
Necesito que seduzcas a mi hijo. No te
estoy pidiendo que te enamores de él,
solo necesito que Ray Jr. piense que lo
haces. Usa cada una de tus habilidades
como amante para convencerlo de que no
venda el rancho J Bar. Te lo estoy
rogando, Al final, Cuando termines con él
y le rompas el corazón. Solo desearía
estar ahí para ver la angustia en la cara
de Ray Jr. Hazle saber lo que se siente
amar a alguien que no te corresponde.
Esa seria la perfecta venganza para mi,
mi amigo.

Deacon tiro la carta enojado una vez más. A el


le preocupaba seguir sus instintos con Ray
debido a su amistad con RJ. Cuando el
descubrió que estaba siguiendo el plan de RJ
sin siquiera saberlo.

79
Deacon se levanto de la silla y se dirigió a la
cama. “Que se joda RJ y su funeral.”

Mientras el se acostaba y se cubría con los


cobertores, los pensamientos sobre Ray lo
seguían como una plaga. Ahora el conocía las
circunstancias detrás de la relación o la falta de
ella de Ray y RJ, el se sentía incluso peor por
el joven, al imaginar a Ray montando por la
colina para dar tributo a su padre quien fue
capaz de crear un subterfugio para herirlo.
Con un gruñido, Deacon retiro los cobertores y
salio de la cama.

*****

Deacon podía ver el lento movimiento de la


procesión que se dirigían por la colina cuando
el saco a Black Jack del establo. El no sabía
quien había ensillado su caballo, pero estaba

80
agradecido. El subió en la suave montura de
piel y fue a todo galope hacia Ray.

En minutos el pudo ver los hombros de Ray a


lado de la carreta que llevaba a su padre. En
ese momento, Deacon se juro que el haría lo
mejor para recompensar a Ray de lo que RJ
quería. El todavía no entendía las reflexiones
de su amigo, pero el también se rehusaba a
vivir el resto de su vida preguntándose. Estaba
feliz de haber quemado la carta. Esperaba que
nadie, y especialmente Ray, pudieran encontrar
los que RJ escribió sobre su hijo.

Ray debió oír que alguien llegaba porque


detuvo a Dandy y vio sobre su hombro.

Deacon sabia con la sonrisa del solemne


hombre que todo el riesgo valía la pena.

81
El detuvo a Black Jack a lado de Dandy. Sin
una palabra el se inclino y le dio a Ray un
profundo pero corto beso. “Lo siento, debí estar
aquí.”

Ray lamió sus labios. “Estaba asustado de que


no hubieras venido por lo que sucedió anoche.”

Deacon negó. “Lo que sucedió entre nosotros


es la razón de que hubiera venido.”

Ray junto sus negras cejas. “No entiendo.”

Lo último que quería era a propósito herir a


Ray. Decirle al joven acerca de la carta no era
opción. “No importa. Vamos a decirle adiós a
RJ.”

82
Deacon podía decir que Ray todavía no
entendía el conflictivo humor de Deacon, pero
el finalmente asintió.

Ellos alcanzaron la carreta y montaron a lado


de ella por el estrecho y polvoriento camino
hasta la cima de la colina.

Porque era lo esperado, Deacon ayudo a los


vaqueros a llevar el sencillo ataúd hacia el hoyo
que habían preparado con anterioridad.

Ellos lo bajaron de la manera antigua


colocando unas sogas por debajo y
deslizándolo abajo jalándolas de ambos lados.
Una vez que RJ estaba en su lugar definitivo de
reposo, Deacon dio un paso atrás y tomo su
lugar a lado de Ray.

83
Mientras el escuchaba al Reverendo Peters
hablar de todas las cosas buenas que RJ había
hecho en su vida por la gente de Montana,
Deacon empezó a sentir un dolor en el pecho.
El sabia que todo lo que el reverendo decía era
correcto.

RJ había hecho todas esas cosas que ahora


estaban en lucha con su nuevo instinto
protector por Ray.

El tomo la mano de Ray cuando el Reverendo


Peters termino el servicio. Era costumbre
elogiar al difunto, pero RJ había odiado
siempre esa costumbre, así que Deacon
decidió darle eso. Dadas las circunstancias, el
estaba agradecido de hacerlo. El sabía que el
dolor enturbiaría su declaración, esperaba que
con el tiempo los buenos recuerdos del hombre

84
al que todo el mundo alrededor lloraba,
regresaran.

Ray apretó su mano, llamando la atención de


Deacon. El vio al pequeño hombre y Ray le
recompenso con una sonrisa. Los verdes ojos
de Ray estaban húmedos, pero el no lloraba.

“¿Te sientes con deseos de montar un poco


conmigo?” Deacon le pregunto Mientras Jimmy
y Neil empezaban a cubrir con tierra la tumba.

Ray vio alrededor a los asistentes al funeral y


asintió. “Me gustaría eso. Siento que todo el
mundo me ve.”

Deacon guió a Ray entre la multitud alejándolo.


“No es a ti. Es al recuerdo de tu padre.”

85
Después de agradecer al reverendo, ellos
llegaron a sus caballos. Deacon se sintió
orgulloso cuando Ray logro montar a Dandy
por si mismo. “Has mejorado,” él lo felicito.

Ray sonrió. “Creo que son los pantalones.


Estos no están tan apretados como los jeans.”

“Me gustan tus jeans, si eso significa que


necesitare subirte a la montura cuando los
lleves puestos, estoy totalmente de acuerdo
con eso.”

Ray tenia una extraña expresión en su cara


cuando ellos montaban hacia el limite con las
tierras de Logan. “¿Que te sucedió?”

“¿Que quieres decir?” Deacon preguntó.

86
“¿El fantasma de la ultima navidad te visito
anoche? Cuando me dejaste después del breve
beso, pensé que habías decidido que no valía
tu tiempo.”

“No. nunca sentí que no valieras mi tiempo.


Solo estaba preocupado por RJ y como se
sentiría con esto.” Deacon sacudió la cabeza.
“He decidido que no me importa. Me gustas.”

Ray sonrió. “Tu también me gustas.”

Deacon siguió hacia un punto que quería


mostrarle a Ray. “Ahí hay un recodo del rio al
que los lugareños le pusieron el nombre de tu
familia al rio.”

“¿En serio? ¿Tengo un recodo?” Ray se reía.


“Eso es mucho mejor que un lugar de
estacionamiento en casa.”

87
Deacon se rio y sacudió la cabeza mientras
ellos llegaban al recodo. “Estas de muy buen
humos para ser un hombre que acaba de
acudir a un funeral.”

El se arrepintió tan pronto las palabras salieron


de su boca. La expresión de Ray se nublo.
“Tienes razón. Lo siento.”

Deacon detuvo a Black Jack y desmonto. El


amarro a su caballo en un árbol e hizo lo
mismo con Dandy antes de ayudar a Ray a
bajar de la silla de RJ.
“Eso fue lo mas desconsiderado que pude
decir. Debo de disculparme.” Deacon acerco su
boca a la de Ray con toda la pasión que el
sentía en su interior desde que conoció al
hombre. El barrio con su lengua el interior de la

88
boca de Ray y gimió cuando el sintió a su muy
pronto-amante corresponder.

El beso fue más profundo y más carnal que


nada que hubiera experimentado Deacon en
mucho tiempo. Sus manos se deslizaban por la
espalda de Ray hasta apretar ese lindo culito
que él había estado viendo durante días.

Deacon metió su pierna entre los muslos de


Ray y lo levanto ligeramente del suelo. Ray
quebró el beso y veía fijamente a los ojos a
Deacon mientras comenzaba a presionarse
contra él.

“Te quiero,” Ray gimió, frotando su duro pene


contra el muslo de Deacon.

89
“Me tienes.” Deacon sabia que estaba perdido
en el momento que el rozo sus labios contra los
de Ray la noche anterior.

El sentía las manos de Ray deslizándose


rápidamente en sus pantalones de vestir. “No
tengo nada conmigo.”

Ray sonrió y bajo el cierre de Deacon sacando


su prominente bulto. “Nosotros dejaremos la
jodida para la cama, pero quiero probarte.”

Deacon normalmente no tenia sexo oral sin la


protección de un condón, pero Ray no era un
extraño que encuentras en un bar. El asintió
con un leve movimiento de cabeza su
consentimiento mientras Ray se deslizaba a los
pies de Deacon.

90
Con sus rodillas débiles, Deacon vio alrededor.
“Espera.” El levanto a Ray a sus brazos y lo
llevo cargando hacia un árbol. “Mierda
¿Puedes sostener mis pantalones?”

Riéndose, Ray los alcanzo entre ellos, mientras


decía. “No quiero que vayas a caer entre
espinas con todas tus cosas expuestas.”

Deacon se rio. El encontró un área de suave


césped bajo un gran árbol y bajo a Ray. Con su
espalda apoyada contra el tronco de un árbol,
Deacon guió la boca de Ray a su pene.

El primer húmedo toque de la lengua de Ray


contra su eje hizo que Deacon se estremeciera
de placer, y enterró sus dedos en el negro
cabello del hombre. “Si, lámeme.”

91
Ray seguía trabajando el pene de Deacon
desde la punta a la raíz, siguiendo las gruesas
venas con su lengua. Nunca se había sentido
tan feliz con una boca en su vida. “¡Jesús! vas
a matarme.”

Ray contesto lamiendo las bolas de Deacon y


dándoles golpecitos con su lengua. La tortura
era suficiente para enloquecer a Deacon. El
tomo su pene y llevo la cabeza a la boca de
Ray.

“¿Por favor?”

Ray asintió y escupió en la palma de la mano.


El envolvió la lubricada mano alrededor de la
base del pene de Deacon mientras el tragaba
cuanto podía profundamente en su garganta
del eje de Deacon.

92
“¡Joder!” Con cada chupada que Ray le daba,
Deacon tenía una sensación de toque eléctrico
que subía por su espalda. El inclino hacia atrás
su cabeza todo lo que le permitía el árbol.
Mientras el continuaba empujando su pene, él
empezó a preguntarse como se vería ese
mismo árbol las siguientes tres estaciones del
año. El sonrió al pensar estar en la nieve,
recibiendo una invernal mamada del hombre
que le estaba realizando un fantástico trabajo,
con su eje entero profundamente en su
garganta.

Ray pasó su lengua por la ranura de la corona,


enviando a Deacon a una lujuria excesiva. El
no pudo evitarlo pero lentamente empezó a
empujarse dentro y fuera de la boca de Ray.
Deacon tenso las mandíbulas y cerro los puños
tratando de evitar el inminente clímax. Dos
minutos mas, por favor, Dios, dos minutos más,

93
el repetía una y otra vez para si mismo
mientras Ray lo enrollaba con su lengua de
nuevo. No le llevo mucho a sus bolas
apretarse. Los dientes de Deacon estaban
moliéndose con la fuerza de la tensión. Cuando
su pene una vez mas fue tragado hasta la raíz,
Deacon sabía que el estaba llegando al límite.
“Voy a disparar.”

Ray retiro la boca pero continúo masturbando


el pene de Deacon con su mano. Deacon gruño
cuando él primer chorro de semen cayo en la
mejilla de Ray. Deacon vio cuando el pintaba al
hermoso hombre con cuatro chorros más de
blanco fluido.

Deacon cayó de rodillas y lavo la cara de su


amante con su lengua, disfrutando su propia
semilla mezclada con la sal de la piel de Ray.

94
Ray giro la cabeza y encontró la boca de
Deacon, lamiendo el interior.

Una vez que su amante estaba completamente


limpio, Deacon se sentó y vio fijamente esos
brillantes ojos verdes. “Tu turno.”

Ray se rio y levanto la mano. Deacon estaba


tan metido en la experta mamada que no se dio
cuenta que Ray se había estado masturbando
al mismo tiempo. El tomo la mano de Ray y la
lamió lentamente limpiando y chupando los
largos y elegantes dedos del joven dentro de su
boca de uno por uno.

“Joder, eso es caliente,” Ray gruño.


Deacon se acostó en el suave césped y jalo a
Ray a sus brazos. El señalo hacia el agua. “Ese
es el rio Justice. Realmente es un tributario del
rio Yellowstone, pero el rio Justice, es como

95
todo el mundo lo conoce por aquí. Es una
bendición en más de un sentido. Los otros ríos
que cruzan el J Bar se secan durante duros
veranos, pero el rio Justice nunca. Es la vida de
este rancho y los ranchos que bordea.

Ray descanso su mejilla en el pecho de


Deacon. “Hay mucho de la historia de mi familia
aquí. Es una vergüenza que no la conozca.”

“En la cabaña de verano hay un par de diarios


de tu bisabuelo. Nada que altere la vida, solo
habla acerca del día a día de lo que sucedía en
el rancho.”
“Tienes que mostrármelos. Yo todavía ni
siquiera he visto el interior de la cabaña de
verano. ¿Quien la nombro así?”

“Tu papá. El le dio el nombre cuando


empezamos a tener huéspedes aquí. Tiene

96
chimenea, pero la calefacción apesta. Se
intento agregar calefacción central hace unos
veinte años, pero arruinaría el valor estético de
la cabaña, así que todo el calor va por la orilla
inferior. Esa es la razón de que no tenemos
huéspedes en invierno.”

Ellos siguieron acostados en silencio antes de


que Ray dijera. “Nosotros deberíamos regresar
para la cena. Me gustaría pasar algo de tiempo
con los huéspedes.”

“¿Puedes?”
“Seguro. Tengo grandes decisiones frente a mí.
Me gustaría hablar con los huéspedes y ver lo
que les gusta del rancho. Y también pasar
tiempo con Beth y ver los libros.”

Deacon estaba desconcertado. “Me sorprende


lo mucho que has pensado.”

97
Ray sonrió no solo soy un genio creativo, soy
malditamente bueno para los negocios.”

Deacon sabia por las largas noches que


pasaba con RJ que el rancho apenas y lograba
mantenerse en números negros. El se
preguntaba que Ray tomara el efectivo de los
desarrolladores seria mejor decisión comercial.
Sus pensamientos lo regresaron a la carta de
RJ. No importaba lo que Ray decidiera hacer
con el rancho, Deacon sabía que el no podía
usar sus sentimientos personales para influir en
Ray de una u otra manera eso no iba a
suceder.

*****

Para cuando ellos llegaron al establo, Ray


podría decir que la mayoría de los dolientes ya

98
se habían retirado. El vio a Deacon. “¿Crees
que la gente se moleste porque no nos vieron?”

Deacon negó. “No. La gente aquí es muy


tolerante. Ellos probablemente imaginaron que
necesitábamos tiempo a solas.”

Ray desmonto a Dandy y froto su lastimado


trasero. El no estaba seguro que le dolía más
su trasero o la parte interna de sus muslos.
“Creo que necesito dejar de montar por un par
de días.”
Deacon se rio cuando el empezó a desensillar
a Dandy. “Tu solo necesitas trabajar a tu ritmo,
entre mas montes, mas te acostumbraras.”

Neil llego con una de las camionetas del


rancho. El llevaba varios huéspedes en la parte
de atrás con algunos sacos y grandes cuadros
blancos. “Voy al valle Cottman a dejar los

99
minerales y los cuadros de sal,” le dijo a
Deacon.

Deacon asintió y Neil se iba a alejar.

“¡Espera!” Ray grito. “¿Te molesta si los


acompaño?”

Neil pareció sorprendido con la pregunta. “No


para nada.” Neil le dijo al hombre sentado en la
cabina con él que se fuera a la caja de la
camioneta.
“No tienes que hacer eso. Yo puedo subir a la
caja.” Incluso aunque Ray sabía que los
vaqueros lo consideraban un presumido niño
de ciudad, el necesitaba ser rudo para llevar el
rancho.

100
El viejo hombre movió la mano. “No te
preocupes por eso. Yo voy más cómodo aquí.
Solo que no quería que Neil se fuera solo.”

Ray podía decir que el huésped estaba siendo


amable, pero el acepto el gesto. “Gracias.”

El se giro hacia Deacon. “Te veré mas tarde?”

“Será lo mejor o tendré que perseguirte.”

Ray subió a la camioneta y se coloco el


cinturón de seguridad. “Espero que no te
moleste que vaya contigo.”
“No para nada. Usualmente hago esto con los
huéspedes una o dos veces por semana. Eso
les permite descansar de los caballos un poco
y ver mas del rancho,” Neil explico.

101
Ray se rio y dramáticamente se froto su
lastimado trasero. “Entiendo la necesidad de
descansar de los caballos.”

Neil tomo el camino del rancho y se dirigió al


oeste. Ray le dio al hombre varias miradas,
tratando de determinar si Neil también era gay.
El rudo aspecto del vaquero no le decía nada a
su gay radar, pero entonces de nuevo, ni un
vaquero lo hacia.

Neil empezó a sonreír. “Si.”

“¿Huh?”
“¿Te estabas preguntando acerca de mi
sexualidad, correcto? La respuesta a la
pregunta no dicha es si.”

Ray se froto la parte de atrás de su cuello.


“¿Fue tan obvio?”

102
Neil se rio. “No realmente, pero Cody me dijo
que ustedes dos habían hablado acerca de
eso. Ver lo que tenias en la mente fue fácil.
Nosotros todos somos gay excepto los
cocineros. Beth tiene una pareja masculina, ella
vive con Roscoe.

Hasta hace poco yo tenia un compañero al que


solía ver ocasionalmente en Billings.”

Ray se acomodo en el asiento y vio hacia


afuera por la ventanilla del pasajero. Con un
rancho lleno de hombres gay, el se preguntaba
acerca de otras cosas. “¿Han tenido
huéspedes gay?”

Neil levanto las cejas y se movió en el asiento.


“Una vez hace tiempo.”

103
“¿Algo sucedió entre el huésped y algún
miembro del staff?”

Neil negó. “No es que no hayamos sido


tentados una o dos veces, pero nosotros
usualmente mantenemos a las familias con
nosotros.”

Ray asintió. El se preguntaba si había un


mercado inexplorado viéndole a la cara. El J
Bar era único, no había dos en su tipo. Quizás
ellos deberían considerar abrirlo a grupos
especiales. Eso era algo que definitivamente
tendría que considerar con Deacon mas tarde
Capítulo Cuatro

Deacon no vio a Ray de nuevo hasta que


llegaron a la casa-comedor esa noche para la
cena. El hizo su mejor esfuerzo mezclándose
con los huéspedes antes de servir su plato y

104
sentarse a lado de su nuevo amante. “¿Tuviste
un productivo día?”

Ray sonrió y le dio un golpecito a Deacon con


su rodilla. “Un muy productivo día. ¿Que tal el
tuyo?”

Deacon se rio y mojo en gravy su pan. “Tuvo


sus momentos.”

“Hey, Deacon,” Taggert dijo desde el marco.


“Lambert acaba de llamar y dice que algo de
nuestro ganado esta de su lado de la cerca.”
“Mierda. Esta bien. Come y después iremos.” El
se giro hacia Cody. “Te encargas de la fogata
sin nosotros.”

“Si, jefe.”

105
Deacon le dio un codazo a Ray. “¿Quieres ir a
montar o prefieres cantar canciones y contar
historias con los huéspedes?”

Ray Terminando de morder su ensalada. “¿Que


tan lejos?”

Deacon sonrió. El sabia que probablemente el


trasero de Ray estaba lastimado, eso era mas
una prueba que nada. “Cerca de treinta
minutos de cabalgata, pero sobre terreno
difícil.”

Viendo hacia su pollo, Ray se lamió los labios.


“¿Que piensas que debería hacer?”

“Déjame pensarlo un momento.” Entre más


consideraba sus opciones, más clara era su
decisión. Desafortunadamente, la mitad del

106
comedor no era lugar para discutir eso con
Ray.

El rápidamente termino su cena levanto su


plato y lo llevo a la canasta para lavar antes de
entrar a la cocina y darle un beso a Martha en
la mejilla. “Gran cena, Madre.”

Martha palmeo la mejilla de Deacon. “¿Tienes


un dulce en ese niño?”

Deacon siguió la mirada de Madre que veía a


Ray, quien estaba limpiando su plato en el bote
de basura.
“El no es un niño, pero seguro como el infierno
que es lindo. ¿No es así?”

Martha se rio. “Siempre tienes los ojos en los


lindos.”

107
“El aplasta las opciones,” dijo, empujando
suavemente a Martha antes de apresurarse a
salir de la cocina.

El alcanzo a Ray en el frente de porche,


“¿Entonces?” Ray preguntó. “¿Voy a ir?”

Deacon guió a Ray fuera del porche hacia el


establo. Una vez dentro, arrincono a su amante
contra el cuarto tack y presiono su cuerpo
junto. “Estaba pensando en que si montas
hasta Lambert, tu no sentirás deseos de
montarme después de la fogata.”

El se inclino y paso su lengua por la mejilla de


Ray y entro profundamente a explorar su boca.
Sus dedos encontraron su camino en el negro
cabello mientras el beso continuaba. Solo se
separaron cuando necesitaron oxigeno. “Me
gustaría que cantaras canciones con los

108
huéspedes mientras me permitas atender ese
dulce trasero”

“Oh si. yo puedo jugar lindo con un incentivo


como ese.”

Deacon oyó a los otros vaqueros entrar al


establo. Le dio a Ray un último beso y un
golpecito en su trasero. “Cuida de esto por mi y
yo te recompensare mas tarde.”

Riéndose, Ray sacudió la cabeza y acuno el


pene de Deacon en su mano. “Lo mismo.”
*****
Ray realmente se sentía nervioso cuando se
unió a Cody y cerca de dieciséis huéspedes en
el gran frente de la cabaña de verano. Esa era
su primer fogata y el Señor sabia que el no
conocía una sola canción vaquera. Encontró un

109
lugar vació en un gran tronco. “¿Puedo
sentarme aquí?”

La señora madre de dos, sonrió. “Claro,


mientras me hagas favor de reírte de mis
chistes. Será bueno que Jeff sea atrapado un
poco por el monstruo verde de los celos.”

Ray se rio y se sentó a lado de la mujer. “Soy


Ray, por cierto.”

“Jennifer.” Ella señalo a su lado. “Mi hija


Bethanne, mi hijo David y mi marido desde
hace dieciocho años, Jeff. ¿Estas casado?”

Ray negó. “Soy gay.”

El atrapo una expresión sorprendida en la cara


de Cody mientras el vaquero llegaba frente a
Ray y se sentaba a su lado. Jennifer sonrió y

110
palmeo la rodilla de Ray. “Bueno, entonces
tienes que encontrar un agradable hombre”

“Estoy trabajando en eso.”

*****

Después de más canciones que le impedían


pensar, Ray recibió un codazo en un lado.

“¿Te molestaría ayudarme con las galletas y


malvaviscos?” Cody preguntó.

“No para nada.” Ray se levanto tomando la


oportunidad de escapar del ruido por unos
momentos. El siguió a Cody al interior de la
cabaña de verano y al interior de la brillante
cocina de gourmet. “Maldición.”

111
Cody se rio. “No combina con el resto de el
lugar, ¿No es así?”

Ray pasó su mano sobre el granito claro del


mostrador. El podía sentir los ojos de Cody en
él y levanto la vista. “¿Que?”

Cody se quito el sombrero y paso su mano por


su corto cabello castaño rojizo. “Se supone que
nosotros no dejamos que los huéspedes sepan
que somos gay.”

“¿Que? preguntó. Yo no le di la información


voluntariamente.”

Cody asintió. “Lo se.”


Ray entrecerró los ojos. “¿Esa es una regla de
Deacon o de mi padre?”

112
Cody se giro y empezó a llenar una bandeja
con galletas, malvaviscos y barras de
chocolate. “De tu padre.”

Ray quería decirle a Cody que se olvidara de la


jodida regla pero el sabía que seria mejor
discutirlo con Deacon primero. Quizás había
una razón para la estupida regla que el
desconocía. “Hablare con Deacon acerca e
esto.”

Cody asintió. “Solo pensé que debía


mencionártelo.” Cody levanto la bandeja. Si tu
llevas esto, yo me encargo de la sidra.”

Ray llevo la bandeja afuera a la mesa de picnic.


El estaba más que feliz de ver que Deacon y el
resto de los trabajadores habían regresado. El
pasó la mirada a Deacon y le hizo una seña.

113
A pesar de que Deacon estaba hablando con
uno de los huéspedes, se disculpo y camino
hacia él. “¿Te diviertes?”

Ray sonrió. “Ayudaría si supiera algunas


canciones. Ten,” le dijo señalando la bandeja.
“Se útil. Yo nunca he preparado s’more * en mi
vida.”

Deacon dio un juguetón gruñido. “Muérdete la


lengua. Los S’mores son el cielo para todo
vaquero.”

“¿En serio?” El se inclino a murmurarle al oído.


“Y yo que pensaba que era el sexo.”

*Malvavisco entre galletas y bañadas con chocolate

Deacon se rio. “Eso, también. pero comer el


chocolate derretido sobre el malvavisco es algo
que podemos hacer en publico.”

114
Deacon se alejo y Ray vio hacia el fuego. El vio
a la pareja con la que el había estado sentado
antes besándose. ¿Porque el no podía hacer
eso? El suspiro y se sentó en un tronco
mientras Deacon y algunos trabajadores
ayudaban a los huéspedes con su postre.

A la luz rojo y naranja del fuego el estudio a


Deacon con los trabajadores y los huéspedes.
A pesar de que Deacon era diplomático, se
veía algo extraño. Era casi como si Deacon
hubiera levantado una pared entre él y los
huéspedes. Ray se preguntaba si había algo
escondido que debería saber, había visto a
Deacon trabajar a lado de los trabajadores y
parecía fácil y feliz. El quería verlo de ese
modo todo el tiempo no solo cuando no había
huéspedes alrededor.

115
Las ruedas de sus pensamientos se pusieron
en marcha, ya había tenido oportunidad de
sentarse con Beth y ver los libros durante la
tarde. Los veranos era el mejor momento para
el rancho, pero los huéspedes no eran
suficientes en primavera y otoño. Beth le había
explicado que el horario escolar jugaba un
papel importante en eso. Las familias tendían a
salir durante las vacaciones de verano. Eso era
por lo que RJ siempre había planeado trabajar
alrededor de esas fechas.

Ray no podría ayudar a mover el ganado o en


las labores de todo los días, pero el era bueno
en promover, y publicitar. Quizás una nueva
estrategia pudiera ayudar a haber al J Bar más
grande de lo que ya era. Eso sin tener en
cuenta sus propias motivaciones. A pesar de
que el nunca había tenido una oportunidad
antes, Ray podía hacerlo en nombre de los

116
hombres que vivieron y trabajaron el rancho por
generaciones.

Ray decidió no darle a Deacon ni a nadie


esperanzas hasta que hiciera algunas
investigaciones. El tenia mucho trabajo por
delante si quería terminar antes de tomar el
avión en cinco días, pero si todo salía bien, el
tendría una razón para regresar.

*****

Para las once de la noche, Deacon ya había


sonreído todo lo que podía por un día, dijo
buenas noches a los huéspedes y toco su
sombrero hacia Ray, esperando que su nuevo
amante reconociera la señal.
Empezó a lavarse el polvo y espero a que Ray
se uniera. El oyó ruidos detrás de él y se giro
para ver a Ray patinando al detenerse.

117
“¿Que jodidos es todo esto?” Ray pregunto
levantando sus cejas. “Durante dos horas,
estoy sentado ahí esperando por ti y entonces
tu me dejas.”

Deacon sacudió la cabeza. “¿Por que piensas


que toque el sombrero? quería que tu te
disculparas y me siguieras.”

“Entonces porque no solo dijiste, Hey, nos


vamos”

Deacon no podía imaginarse porque Ray


estaba tan enojado. El señalo los huéspedes
que quedaban, “¿No crees que les extrañaría
que saliéramos juntos?”
Ray empezó a jalarse su cabello. “No puedo
con esta jodida mas.”

118
Sin decir más, Ray corrió hacia la casa
principal.

Deacon se quedo preguntándose que diablos


había sucedido. El se quito el sombrero y
golpeo su muslo. Al parecer Ray todavía no se
había acostumbrado a la manera en que las
cosas funcionaban en el rancho y la pequeña
ciudad alrededor del campo.

El continúo caminando hasta la bifurcación del


camino que llevaba a la casa principal o a su
propia cabaña. ¿Debía ir después de que Ray
lo había dejado o debería dejar que el joven se
calmara? Sabia que había sido un día difícil
para Ray. Quizás después de un día de pesar y
estrés solo se había desquitado con él.
Dejando el sombrero de nuevo en su cabeza,
Deacon se dirigió hacia la casa de Ray. Ese era
uno de los pocos caminos del rancho que tenia

119
grava, resultaba incomodo caminar, se salio a
un lado del camino, caminando por el césped
llego a la casa subió los escalones del porche
de dos a la vez. Deacon levanto la mano para
tocar cuando un movimiento atrapo su
atención, se giro y encontró a Ray sentado en
una de las sillas en la esquina del gran porche
del frente.

El dio varios pasos y apoyo su cadera contra el


barandal del porche. “¿Sigues enojado?”

“Me gustas.”

A pesar de la oscuridad podía ver la cara de


Ray, se sentía el hombre más feliz ante esa
declaración. “También, me gustas,” contesto.
“¿En serio? Entonces ¿porque te asusta tanto
mostrarlo?”

120
En lugar de contestar directamente, Deacon fue
hacia la silla frente a Ray. “Nunca sabes como
reaccionaran los heteros. A final de cuentas yo
aprendí a esconderme de ellos.”

“¿Que tipo de vida es esa?”

Deacon lanzó su sombrero a la pequeña mesa


a lado de él. “Me golpearon hasta darme por
muerto, Casi lo logran, antes de venir aquí.”
Deacon suspiro y decidió decirle a Ray algo
que muy poca gente sabia.

“¿Recuerdas que te dije que me fui a trabajar a


un rancho en el norte? Bueno, uno de los
vaqueros con los que compartía cuarto
encontró una fotografía que había recortado de
una revista. Había tenido cuidado de
esconderla, pero el husmeo entre mis cosas.”

121
Deacon frotaba sus manos juntas. No
importaba cuantos años habían pasado desde
el incidente, el siempre lo tendría presente.
“Los hombres que yo considere mis amigos
conspiraron a mis espaldas. Ellos me sacaron
de la cabaña una noche y me amarraron de un
árbol. Ellos tomaron turnos para golpearme,
cuando terminaron yo estaba casi muerto. Si el
propietario del rancho no hubiera salido a ver la
causa del alboroto, no dudo que hubiera
muerto esa noche.”

El oyó a Ray inhalar.

“Puedes pensar que soy un cobarde, pero


estoy vivo y tengo el trabajo para el que nací.”

Ray se puso de pie frente a Deacon. “Pensé


que este era tu hogar.”

122
Deacon jalo a Ray a su regazo. “Si. lo es. El
único que acepta quien soy.”

Ray acuno la mejilla de Deacon y beso su


frente. “Es tiempo de confesiones, supongo que
te ganaste oír la mía. Hasta hace unos minutos
yo comenzaba a pensar que podía
establecerme aquí. Se que seria un enorme
ajuste, pero veía la manera en que tu y los
otros trabajadores estaban juntos.”

Deacon podía ver las lágrimas reflejadas en los


profundos verdes ojos de Ray con la luz de
luna mientras su amante continuaba.

“Yo quería eso. Quería un grupo de amigos con


quien bromear y con quienes divertirme. Gente
que me apoyara en los momentos difíciles.”

“Tu tienes eso, todo eso,” Deacon le dijo.

123
Ray negó. “No si tengo que esconderme cada
vez que llega otra van llena de huéspedes. Mi
padre les dio un lugar seguro donde vivir y
donde trabajar. Eso a mi entender era que ser
gay era aceptable en el J Bar, pero poco sabia
que únicamente era aceptable detrás de las
puertas cerradas. Yo no puedo vivir así. No
quiero.”

“¿Que estas diciendo?” Deacon sintió como si


su corazón era arrancado de su pecho. El
conocía a Ray desde hacia muy poco tiempo,
pero era la primera vez en su vida que se había
sentido tan completo con alguien.
Ray descanso su frente contra Deacon. “Yo
digo que no puedo permitirme a mi mismo
enamorarme de ti bajo estas circunstancias.”

124
Ray empezó a tratar de separarse de, pero
Deacon lo sostuvo mas fuerte, manteniéndolo
en su lugar. El no estaba seguro que decirle al
hombre, pero Deacon sabía que no podía dejar
que Ray se alejara. “¿Bajo que circunstancias
puedes enamorarte de mi?”

Ray le dio un suave beso en la boca a Deacon.


“Una en la que yo pueda hacer esto si quiero.
Sentarme en la noche con otras parejas
tomándose las manos y robándose besos.
Quiero eso. Mis sentimientos por ti no son
menos, porque ambos somos hombres y si la
gente no puede entender eso, estoy seguro de
que no quiero darles la bienvenida en mi casa y
en mis tierras.”
“Nosotros los necesitamos para hacer
negocios, no es fácil en estos días hacer que
un rancho de este tamaño se mantenga. El
ingreso de los huéspedes lo mantiene a flote.”

125
“Entonces, quizás necesitamos un tipo
diferente de huéspedes. Quizás gente que
acepte un estilo de vida alternativo.”

Deacon tenía el fuerte presentimiento que


sabía a donde iba Ray, pero el tenia serias
dudas. El sacudió la cabeza. “Nosotros no
seremos capaces de encontrar suficientes…”

Ray lo beso de nuevo. “El mundo esta lleno de


hombres gay. Déjame encontrarlos y ofrecerles
traerlos aquí.”
“¿Igual que una versión gay de la película el
campo de los sueños*?”
*película estelarizada por Kevin costner en 1989, en donde un granjero oye una misteriosa voz que le dice que
construya un campo de béisbol en un campo de trigo.

Ray se rio. “Si, algo así. Pero en serio...piensa


acerca de eso. Cuantas veces eres capaz de ir
de vacaciones con tu pareja y ser totalmente

126
libre de tomarlo del brazo o besarlo si estas de
humor”

Deacon nunca había tenido unas reales


vacaciones, mucho menos algo remotamente
parecido a lo que Ray estaba diciendo.
¿Entonces realmente quieres hacer del J Bar
un punto vacacional para hombres gay?”

“No solo para ellos, para familias alternativas,


lesbianas, diablos yo no soy quisquilloso,
mientras los huéspedes que lleguen no les
moleste ver que te bese de vez en cuando.
Estuve con Beth y vi los libros y me parece que
la primavera y el otoño son temporadas difíciles
en el rancho. Quizás si reservamos esas
temporadas para los huéspedes del GLBT*
ellos vendrían aquí”

127
Deacon no estaba seguro de que funcionara,
pero realmente le gustaba pensar que Ray se
quedara. Si el modernizaba el rancho, que así
fuera. “Tu te mudarías aquí.”

Ray froto su nariz con la de Deacon. “Bueno,


no tengo que mudarme aquí, pero
probablemente lo quiera hacer. La publicidad
es algo que se hace principalmente en la
computadora, donde quiera que tenga acceso
al internet puedo trabajar.”

“La oficina del rancho tiene internet, también la


de RJ.”

“¿Crees que sea buena idea?” Ray preguntó.


*Gay, lesbianas, bisexuales y transexuales

En ese momento a Deacon le tenía sin cuidado


que la idea se tambaleara. Lo importante era

128
pasar tiempo con Ray. “Creo que deberíamos
hacerlo.”

Ray lo beso, dando golpecitos con la punta de


la lengua a Deacon. “¿Que te parece si
subimos las escaleras y celebramos?”

Deacon apretó el trasero de Ray. “No he


pensado en otra cosa desde que te vi.”

Ray bajo del regazo de Deacon y le dio la


mano, Jalándolo para que se pusiera de pie.
Deacon lo guió a la puerta y se sorprendió
cuando no pudo entrar. “¿Cerraste con llave?”

Ray saco las llaves de la bolsa y se las dio a


Deacon. “Claro que cerré. Porqué no lo haría?”

Deacon estuvo tentado a decirle a Ray que


recordara que estaba en el campo. El tomo las

129
llaves y abrió la casa antes de devolvérselas a
Ray. “Con la excepción de la oficina, nosotros
no cerramos con llave. Nosotros nunca hemos
tenido problemas por dejar la casa abierta.”

Ray entro y dejo las llaves en la mesa de la


entrada. “Me llevara un tiempo acostumbrarme
en casa no puedo ni salir a tirar la basura sin
cerrar con llave detrás de mi.”

Deacon coloco su mano en la espalda de Ray y


lo guió a las escaleras, “Esta es tu casa ahora,
así que muestra un poco de confianza.”

Ray se giro y comenzó a caminar hacia atrás.


El se desabrocho la camisa y la dejo caer por
sus hombros.

Deacon no pudo resistir pasar su mano por el


suave pecho de Ray y el ligero camino de vello

130
debajo de su ombligo. “Eres malditamente
sexy.”

Ray sonrió iluminando todo su rostro mientras


desabotonaba sus jeans. “Y eso que no has
visto mi mejor rasgo.”

Con Ray parado en el escalón de arriba, ellos


estaban nariz con nariz. Deacon tomo la parte
de atrás del cuello de Ray y lo jalo a un beso.
Mientras su lengua se enrollaba con la de Ray,
él bajaba los jeans del pequeño hombre tanto
como podía.

Deacon quebró el beso y sonrió. “Si.”

Ray mordió su lleno labio inferior mientras se


sentaba en el escalón y se quitaba los jeans y
ropa interior. El abrió sus muslos y apoyo sus

131
brazos en el escalón superior. “¿Es esto lo que
tenias en mente?”

Deacon se arrodillo y apoyo sus manos en el


escalón donde Ray tenía sus pies. El dejo de
hablar. Todo en lo que podía pensar era en el
pene frente a él, goteando pre-semen. El lamió
las firmes bolas de Ray y siguió su camino a lo
largo del eje, deteniéndose ocasionalmente
para raspar con sus dientes la piel.

Ray gimió tomando un puño del cabello de


Deacon. “Mas.”

Deacon sabía que Ray no necesitaba rogar. El


incluso no había probado su premio, no había
manera que lo dejara. El paso su lengua por la
ranura de la corona y lamió el pre-semen que
continuaba goteando.

132
“Mmmm.” Gimió cuando deslizo sus labios
sobre la cabeza del pene. el sabor de Ray hizo
explosión en su boca.

Ray jalo el cabello de Deacon más fuerte e


impulso sus caderas llevando su pene mas
profundo en la garganta de Deacon.

Deacon coloco sus manos en el abdomen de


Ray sosteniéndose mientras liberaba el pene
en su boca. El no podía creer que el iba
arruinar ese increíblemente erótico momento
“Lo siento pero mis rodillas me están matando.
Supongo que no soy tan joven como solía ser.”

Ray se rio y se movió al escalón superior todo


lo que pudo sin tumbar a Deacon por las
escaleras.

“Vamos, viejo. Te ayudare a llegar a la cama.”

133
Deacon feliz siguió el desnudo cuerpo de Ray.
Diablos, en ese momento el seguiría a Ray a
cualquier lado que quisiera guiarlo. Se
sorprendió cuando Ray paso la recamara
principal.

Deacon había estado en la recamara de RJ en


muchas ocasiones pero nunca como amante.
“¿Porque no usas la recamara principal?

Ray vio sobre su hombro. “Esa no es mía. No


puedo dormir en la misma cama en donde mi
padre jodio a sus amantes.”

Deacon se rio. “Tu tienes una inflada idea de la


vida sexual de RJ. El nunca trajo a un hombre
a la casa.”

Ray se dio la vuelta con una expresión de


asombro en la cara. “¿El no tenia sexo?”

134
“Yo no dije eso. El iba a Billings un fin de
semana al mes.”

“¿Que es lo que hay en Billings? Neil dijo eso


de que el iba también.” Una idea le llego.
“¿Crees que mi papá y Neil eran amantes?”

Deacon se encogió de hombros. “Si lo fueron


nunca me entere. Billings es el único lugar de
alrededor con un bar gay. Diablos, hay solo
cuatro en el estado. Si un tipo quiere un
encuentro con hombres de mediana edad. va a
‘El Desván’.”

Ray entro a uno de los cuartos extras y subió a


la cama deshecha. “Suficiente de hablar, ahora
desnúdate.”

Deacon jalo el frente de su camisa y los


broches de presión saltaron.

135
“Despacio,” Ray amonesto. “Quiero ver cada
centímetro de tu cuerpo.”

Deacon se rio. “Soy un vaquero no un


desnudista.” Se sentó en la cama y se quito las
botas y calcetines antes de pararse frente a la
cara de Ray. Su amante estaba sobre una pila
de almohadas apropiadamente acomodado
contra la cabecera. “Además, he esperado
demasiado tiempo.” Un pensamiento lo golpeo.
“¿Tienes las cosas?”

Ray salio de la cama y entro al cuarto de baño.


Deacon termino de desnudarse y se acostó. El
paso su mano por su cuerpo, deteniendo una
en su pecho, mientras con la otra acariciaba su
erección.

Cuando Ray no regresaba, Deacon le grito.


“¿Te desmayaste adentro?”

136
“No. Espera un segundo.”

Deacon notó algo diferente en la voz de Ray y


la curiosidad lo venció. Salio de la cama y fue a
investigar. Lo que vio estuvo cerca de hacerlo
correrse justo ahí.

Con un pie en el sanitario, Ray se estaba


insertando un gran dildo en su culo. Con Ray
de espaldas a él, tenía una vista perfecta del
dildo color carne deslizándose al interior.
“Pensé que ese era mi trabajo.”

Ray se sobresalto y vio sobre su hombro. Su


cara estaba roja aparentemente avergonzado,
pero Deacon podía detectar algo de rubor de la
excitación, también. “Me gusta estirarme a mi
mismo antes.”

137
Diferente. Deacon se adelanto y tomo el dildo
en su mano. “Así, ¿Que si hago esto estoy
fuera de los limites?”

Ray gimió y Deacon tomo el control del juguete.


El comenzó a girar y a mover el rígido silicón,
dentro y fuera del agujero de Ray. Mientras
Deacon veía el cuerpo de su amante responder
al falso pene, el no podía evitar imaginar su
propio eje encajado profundamente en Ray.

El se inclino y chupo el lóbulo de la oreja de


Ray, empujando el dildo al interior tanto como
pudo. “¿Porque haces esto antes de joder?”

Ray arqueo la espalda y gimió. “Algunas veces


me duele al comienzo. Y no quería eso.
Especialmente no contigo.”

138
Antes de que Deacon pudiera mover el dildo de
nuevo, Ray comenzó a empujar su cadera
jodiendose el mismo. “Maldición, bebé. no
puedo esperar. Quiero sentirte. Hacerte volar.”

Deacon retiro el dildo y lo dejo en el lavabo. El


reemplazo el pene artificial con su dedo. A
pesar de haberlo jodido con la pieza de silicón,
Deacon podía sentir el apretado interior de las
paredes de Ray. “Eres pequeño y apretado.” El
no quería presumir pero Deacon sabía que su
pene era mucho más grande que el juguete
que Ray había estado usando. “¿Prométeme
algo?”

“Lo que quieras,” Ray dijo entre gemidos.

“Si empieza a dolerte, quiero estar seguro que


me lo dirás.”

139
Ray asintió mientras cabalgaba los dedos de
Deacon.

Satisfecho, Deacon vio alrededor y encontró la


pequeña bolsa de accesorios de Ray en la tapa
del sanitario. “Toma las cosas y déjame llevarte
a la cama.”

Ray tomo la bolsa de piel y saco una tira de


condones y un pequeño tubo de lubricante.

Deacon levanto a su amante en sus brazos y lo


llevo a la cama. El podía sentir el pre-semen
gotear de su eje mientras cruzaba el cuarto y
cuidadosamente depositaba a Ray en la gran
cama.

Deacon se acomodo entre los muslos abiertos


de Ray y abrió un paquete. Deslizo el condón

140
por el largo de su eje y aplico más lubricante a
su pene y al estirado agujero de Ray.

“Recuerda lo que me prometiste,” le recordó a


Ray mientras posicionaba la corona de su pene
en la entrada del pequeño hombre.

Deacon tenso sus mandíbulas mientras el


trataba de entrar en el pequeño espacio de su
amante. El revisaba la cara de Ray, en busca
de cualquier signo de dolor, hasta que el estuvo
totalmente adentro. Ray estaba tan apretado
como suponía, y Deacon nunca había sentido
nada tan intenso en su vida.

“Respira,” le dijo a Ray, deseando poder tomar


su propio consejo.

“Nunca me había sentido tan lleno,” Ray jadeo.

141
“¿Te estoy lastimando?” Por favor que no me
pida que me salga, Deacon rogó en silencio.

Ray negó y sonrió. “Me matas, pero de buena


manera.”

Aliviado de no ser el único que sentía el intenso


placer, Deacon gimió. El sintió los músculos de
Ray comenzar a relajarse mientras Deacon se
movía. Empezó un ritmo lento entrando y
saliendo hasta que estuvo seguro de no
lastimar a su amante.

Ray vio a los ojos a Deacon y asintió. Dándole


un silencioso permiso para más. Deacon
levanto su torso de Ray y empezó a impulsarse
mas fuerte y más rápido, con cada impulso
Deacon se sentía que se perdía dentro del
pequeño hombre. No iba a durar mucho, pero
Deacon intentaba alargarlo lo más posible.

142
Engancho las piernas de Ray en sus brazos,
abriendo a Ray más.

“¡Si!” Ray jadeo. “Te siento. Oh joder, ¡te


siento!”

El joven estaba jadeando mientras Deacon


insistentemente asaltaba el dulce cuerpo de su
amante una y otra vez. El fue recompensado
con un grito de éxtasis cuando Ray llego al
clímax.

Deacon sabía que estaba al borde, pero


cuando el cuerpo de Ray se tenso alrededor de
su pene, él estaba perdido. Se enterró
profundamente en el cuerpo de Ray mientras
llenaba en condón, gritando el nombre de Ray
cuando se corría.

143
Libero las piernas de Ray y lo beso, su amante
continuaba estremeciéndose. El quería
murmurarle dulces palabras al oído a Ray, pero
no quería decir nada trillado. Eso era, dios,
honesta y verdaderamente el nunca había
experimentado nada tan bueno como lo que
acababa de suceder, pero sabía que esas
palabras eran baratas, especialmente después
de joder.

Deacon sostuvo la base del condón mientras


se salía de Ray. Le dio a Ray un rápido beso
antes de salir de la cama e ir al cuarto de baño.

Después de tirar el condón en el bote de


basura, lavo su pene en el lavabo, tomo una
toalla, la mojo con agua caliente y regreso a la
recamara. Ray parecía dormido su respiración
todavía no era normal.

144
Deacon limpio a su amante tanto como pudo
dejando la toalla en la mesa de noche junto a la
lámpara. Se coloco bajo los cobertores y
acomodo a Ray contra su pecho. Con lo mucho
que el disfrutaría suaves besos y una pequeña
conversación en la almohada, sabía que era
mejor que Ray se hubiera quedado dormido.

“Es demasiado pronto,” murmuro para si


mismo.

145
Capítulo Cinco

Ray pasó la mayoría de los siguientes tres días


en la oficina de su padre investigando en
internet. El vio debajo del monitor y se maldijo a
si mismo. Si quería llegar a la reunión con el
abogado de su padre tendría que apurarse.

El marco la pagina que estaba revisando y se


levanto del escritorio. Su investigación estaba
dando resultados, definitivamente veía
posibilidades en que su plan rindiera frutos,
pero necesitaba algo de dinero para que
sucediera.

A pesar de lo nostálgico de la cabaña de


verano, necesitaba trabajo, al igual que otras
cabañas. También sentía que los trabajadores
merecían sus casas agradables, había oído
quejas de que las casas eran frías en el

146
invierno. La manera en que lo quería hacer
requeriría una buena suma de dinero además
de trabajo para mantener la integridad de las
viejas cabañas. El había oído de una compañía
en la ciudad de Kansas que hacia unas nuevas
ventanas que se veían como las originales. Ray
había ido más lejos y se había puesto en
contacto con esa gente. En su opinión, el vidrio
único de las ventanas era el principal culpable
del frío de las cabañas.

La culpa que sentía de esperar que hubiera


algo de dinero involucrado con la herencia de
su padre lentamente había sido reemplazada
con el conocimiento de que podía hacer cosas
maravillosas por el J Bar con dinero. No solo
para el rancho en si mismo, sino para los
vaqueros que veían a esa tierra como su hogar.
Solo el colocar los anuncios para su nueva
aventura iba a resultar costoso, pero Ray sabía

147
que tenía que colocar anuncios en algunas de
las publicaciones de la comunidad GLBT.

El tomo las llaves de su carro rentado de la


mesa y se sorprendió cuando abrió la puerta y
casi choca con Taggert. “Whoa.”

Impactado, Taggert bajo la cabeza. “Lo siento.


Deacon me dijo que irías a Red Lodge y venia
a ver si me podías dar un ride.”

“Claro, solo que no se cuanto me vaya a


tardar.” Ray se dirigió hacia el sedan.

“No me molesta esperar. Tengo cita en la


clínica.”

Después de que ellos se abrocharon los


cinturones de seguridad, Ray tomo el camino.
Se preguntaba si el podría usar la inesperada

148
oportunidad para pedirle a Taggert su opinión
sobre los cambios que se proponía realizar.

Ray espero hasta que tomaron la carretera


hacia Red Lodge. “Um, ¿puedo pedirte tu
opinión sobre algo?”

Taggert tendría alrededor de veintidós años y


parecía sorprendido con la pregunta. “¿A mi?
Claro.”

“¿Que pensarías de abrir el rancho


principalmente para huéspedes gay y
lesbianas? Tu sabes, un lugar para que ellos
puedan vacacionar y ser ellos mismos.”

“Nosotros ya hemos hecho eso. Algunas veces


hemos tenidos huéspedes que supongo son
gay.”

149
“Si, pero yo estoy hablando de mas, de
reservar algunos meses anunciando
exclusivamente excursiones para ellos.
Excursiones en donde se les permitirá ser ellos
mismos sin preocuparse de tomar de la mano o
besar a su amante.”

Taggert se froto la parte de atrás del cuello.


“Creo que suena bien, pero estas hablando de
que mucha tentación llegaría al rancho. Tu
conoces la política del lugar.”

Ray se rio. “Y la odio. Es una de las razones,


por la que estoy interesado en hacer esto es
para que todos puedan relajarse y ser quienes
son, no solo los huéspedes.”

Taggert pareció pensarlo por un momento,


antes de contestar. “Yo nunca he estado fuera,
fuera como algunos de los chicos. Diablos, Yo

150
incluso no he ido a un bar fuera de Red Lodge.
Quizás deberías preguntarle a alguien con un
poco mas de experiencia que yo.”

Ray negó. “La experiencia no tienen nada que


ver con esto. Supongo que la real pregunta es
te gustaría vivir en una atmósfera de completa
aceptación. Como parece que tu nunca la has
tenido hasta ahora.”

“Claro. ¿Quien no quisiera? Pero no voy a


vestir mis chaps* sin mis jeans por el rancho
solo para darle a los huéspedes alguna
emoción, eso ni lo pidas,” Taggert bromeo.

Ray se rio y levanto la mano. “Te lo prometo.”

*Chaps = chaparreras, guarda piernas detenidas en la cintura que enmarca el área de genitales. Los vaqueros la usan
para trabajar, pero se usan mas ajustadas en el sadomasoquismo

*****

151
El mover el ganado siempre había sido la
actividad favorita de los huéspedes. No era
realmente una gran producción, solo se movían
las cabezas de un campo de pastoreo a otro,
pero les daba la oportunidad de sentirse como
si fueran vaqueros, mostrando lo que habían
aprendido durante la semana.

A pesar del alboroto causado por un grupo de


animales de un año, todo fue suavemente.
Deacon estaba arriba de su caballo, mientras
Neil guiaba y les mostraba como, cuando noto
que uno de los novillos tenia una pierna
lastimada que necesitaba ser atendida.

Con su bien entrenada perra pastor australiano,


‘Georgia’ Neil separo al novillo del resto de las
cabezas y sin perder tiempo fue con su caballo
a todo galope, era casi como una experiencia
religiosa para la mayoría de los ‘vaqueros’ claro

152
a menos que estuvieran viendo a Griggs
montar su caballo sin montura o con solo una
piel de ante que ocasionalmente le colocaba
para que la vieran los huéspedes.

La cansada concurrencia pareció apreciar la


habilidad para atender al novillo de Neil y
Georgia. después de que uno de los señores
ayudo a Neil a aplicar el linimento al novillo
lesionado, Neil dio un pequeño espectáculo
para los huéspedes.

Deacon oyó a un jinete aproximarse detrás de


él y vio sobre su hombro.

“Hey,” Griggs saludo.

Deacon espero hasta que el caballo del


vaquero estuviera a lado de Black Jack. “¿Esta
todo bien?”

153
Griggs asintió. “Estoy un poco preocupado con
un par de huéspedes sobre si puedan bajar la
colina.”

“¿Déjame adivinar, Danny y Judy?”

Griggs reviso al pequeño grupo de jinetes hasta


que encontró a las dos personas en cuestión.
“No creo que ellos tengan la confianza para
bajar la colina.”

Deacon estudio a la pareja en sus veintes. Sin


llevar a los caballos por la colina les tomaría
cuatro horas regresar al rancho. “Ve y habla
con ellos. Si honestamente no se sienten
seguros para hacerlo, regreso a casa con
ellos.”

“¿Estas seguro? Van a llegar hasta el


anochecer.”

154
“Estoy seguro. Solo dile a Madre que mantenga
un par de platos caliente para nosotros.
Mientras sigamos por el camino estaremos
bien.”

Griggs asintió y fue hacia la pareja. Deacon vio


como Griggs trataba de explicar a los jinetes lo
que implicaba. Cientos de inexpertos jinetes
habían hecho el viaje bien, pero la clave era
confiar en tu caballo. Los caballos del J Bar
estaban bien entrenados, ellos podrían tomar,
la empinada colina con los ojos cerrados, pero
jinetes nerviosos tenían la tendencia a soltar
las riendas, lo que podría causar problemas.

Griggs vio hacia Deacon y negó. Deacon podía


decir que el vaquero se sentía mal, pero era
poco lo que se podía hacer.

155
Deacon chasqueo la lengua e hizo que Black
Jack caminara. “Bueno voy de regreso, nos
veremos más tarde.”

Por el camino vio a Judy sentada en su


montura, Deacon tenia el fuerte presentimiento
de que pronto ella desearía ir por el camino
corto a casa.

*****

Después de dejar a Taggert en la clínica, Ray


se estaciono frente a la oficina de los abogados
Krueger y Westmoor, reviso su cabello en el
espejo retrovisor antes de salir. Sonrió para si
mismo, cuando le puso llave al carro de nuevo.
Tenía que recordar que no estaba en la ciudad.

156
El llego al área de recepción y sonrió ante la
señorita detrás del escritorio. “Ray Justice.
Tengo cita con James Krueger.”

“Si, señor Justice, el señor Krueger lo esta


esperando. Segunda puerta a la derecha por el
pasillo.”

“Gracias.” Ray vio el letrero en la puerta, toco y


abrió la puerta. “¿Señor Krueger?”

Un hombre de mediana edad con escaso


cabello le extendió la mano. “Encantado de
conocerte. Por favor llámame James.”

“Gracias, James.” Ray tomo el asiento ofrecido.


James movió algunas carpetas de su escritorio
antes de darle a Ray un gran sobre de papel
manila, antes de abrirlo le dio otra carpeta
“Ante todo eso es de naturaleza personal, aquí

157
tengo algunos papeles que necesitas firmar,
incluidos la nueva escritura del rancho, tendré
que llevarla a la corte lo antes posible.”

Ray asintió y firmo los numerosos documentos.


La mayoría eran acerca del rancho.

El todavía no veía nada acerca de dinero en


efectivo, pero el asumía que pudiera estar en el
sobre que le dieron. Con la dirección de sus
pensamientos en la cabeza, otra vez la culpa le
llego a Ray. Sabía en su corazón que el dinero
era necesario para hacer los cambios en J Bar.
Se sentía confiado de que su papá se sentiría
orgulloso de lo que esperaba hacer.

Después de que el ultimo papel legal estuvo


firmado, Ray se puso de pie y estrecho la mano
de James. “Gracias por tomarse la molestia de

158
hablarme. Si no fuera por usted nunca hubiera
conocido el J Bar.”

Una extraña expresión cruzo la cara de James


momentáneamente antes de alejarla con una
forzada sonrisa. “Te deseo la mejor de las
suertes, Ray.”

Ray se despidió de la recepcionista con un


movimiento de cabeza y regreso al carro. Tan
pronto como estuvo en la privacidad del sedan,
el abrió el sobre. El se sorprendió al encontrar
algunas fotografías suyas y un sobre con su
nombre escrito con la letra de su papá.

Con mano temblorosa, Ray abrió el sobre


blanco. Desenvolvió la hoja de libreta y empezó
a leer.

159
Ray Jr.,
Si estas leyendo esto, debe ser que estoy
muerto, Es triste que mi muerte te de
esperanza de llevarte el dinero de
Montana, pero así es.

Como seguramente sabes, el rancho no


te lo deje yo. Para ser honesto yo no
quería dejártelo, pero no tuve elección, Yo
nunca te hubiera dado nada mío ni de tu
herencia aquí en Montana, pero las leyes
son así y yo no puedo cambiarlas.

En lo que tengo elección, se lo dejo a


Deacon y a algunos de los trabajadores,
Ellos lo merecen mas, y no te atrevas a
demandarlos por lo que sientes que es
tuyo, o dios me ayude yo te perseguiré
hasta el día de tu muerte.

160
Ray gimió ante la vehemencia detrás de las
palabras escritas por su padre. El casi rompía
la carta en ese momento, pero algo perverso
dentro de el le hizo continuar leyendo.

Se que legalmente, no puedo evitar que


vendas el rancho y regreses a tu elegante
vida en la ciudad de Nueva York, pero al
menos te pido que te tomes un tiempo y
reconsideres. El J Bar ha pertenecido a mi
familia por generaciones. Nosotros
siempre hemos sentido un gran orgullo de
ser uno de los mayores ranchos privados
en el estado de Montana.

Si tan solo tú regresas al Este, Deacon y


el resto de los trabajadores están
calificados para manejar el lugar. Tu solo
recibirías las ganancias sin nunca

161
ensuciarte tus suaves manos levantando
un dedo para ganarlo.

Eso fue hasta donde pudo llegar Ray. El guardo


la carta en el sobre y la dejo en el asiento
trasero y suspiro.

Le tomo un tiempo calmarse lo suficiente para


prender el carro. Mientras se dirigía al café en
donde había quedado de encontrarse con
Taggert, él luchaba por alejar las lagrimas
El se decía a si mismo una y otra vez que no
era problema que RJ no sabia la historia por la
cual Ray nunca había escrito o visitado
Montana para verlo. Las cosas hubieran sido
diferentes si solamente no le hubiera mentido la
persona que se suponía mas lo amaba.

Taggert estaba fuera de la linda cafetería, tan


pronto como vio a Ray se acerco con dos tazas

162
de café en las manos. Ray se inclino por el
tablero y abrió la puerta del pasajero.

“Gracias.” Taggert le dio una taza a Ray. “Una


de azúcar y dos de crema, ¿verdad?”

Ray asintió y dejo la taza en el tablero.


Mientras salía de la ciudad, no dudaba que
Taggert fuera capaz de reconocer su actual
humor, porque el vaquero no se atrevió incluso
a hacer conversación.
El sol se estaba poniendo rápidamente. Ray
ajusto la visera, maldiciéndose a si mismo por
dejar sus lentes de sol en la cómoda. Mientras
manejaba levanto la taza de café, esperando
que estuviera lo suficiente fría para beberla.

“¡Ten cuidado!” Taggert grito cuando Ray daba


una vuelta.

163
Como si fuera en cámara lenta, la taza de café
caliente salto de su mano mientras el trataba
de esquivar al gran alce.

Ray sintió el impacto momento antes e que


todo su mundo se volviera negro.

*****
Ellos estaban a solo medio kilómetro del rancho
cuando Deacon se sorprendió de ver a Neil
cabalgar hacia ellos a todo galope. Incluso en
la distancia, Deacon podía decir por el lenguaje
corporal de Neil que algo malo había sucedido.

El acelero la marcha de Black Jack y se dirigió


hacia su capataz. “¿Que sucedió?” grito
cuando estuvo lo suficientemente cerca. Ambos
hombres detuvieron sus caballos.

164
“Recibimos una llamada del hospital Beartooth.
tuvieron un accidente de camino a casa desde
Red Lodge. Taggert y Ray ambos fueron
ingresados.”

Deacon incluso no espero por mas detalles, él


dirigió a Black Jack a todo galope hacia el
establo.

Jimmy y Griggs ambos esperaban por él en el


establo, cuando Deacon desmonto. Jimmy ya
tenia la camioneta encendida esperando a
Deacon.

Deacon entro en la camioneta y salio


levantando grava en su camino al hospital.

A medio camino, Deacon se obligo a ir mas


despacio y colocarse el cinturón de seguridad.
Una vez en la carretera, se dirigió tan rápido

165
como se atrevió hacia Red Lodge. A medio
camino de la ciudad. Vio las luces de
advertencia. Vio a la multitud estupidamente
viendo la escena del accidente. Eso era algo
que lo enfermaba, pero Deacon sabía que era
parte de la naturaleza humana.

Una grúa levantaba lo que quedo del carro


rentado de Ray, todo el frente del sedan estaba
chocado. El primer pensamiento de Deacon era
que Ray había chocado contra un árbol, pero la
sangre y los cuernos le dijeron que se había
equivocado. “Joder.”

Después del accidente, Deacon sobrepaso a


todos los carros que pudo de manera segura,
en un esfuerzo por llegar con Ray. “Por favor
Dios, que este bien.”

*****

166
Incluso antes de abrir los ojos, el sintió el peso
de una mano en su brazo. El sabía que ese era
Deacon por el olor a caballo y piel. “Hey,” él dijo
con dificultad, abriendo los ojos.

“Hey, bebé. ¿Como te sientes?”

Ray lamió los labios. “Sediento.”


Deacon alcanzo una taza de plástico de la
pequeña mesa y le dio en la boca a Ray. “Solo
un par de tragos. No queremos que vomites.”

Con lo mucho que deseaba tomarse todo el


vaso, el siguió las ordenes de Deacon. “¿Que
sucedió? ¿Que diablos era esa cosa?”

“Alce,” Deacon le informo a Ray. “Cuando


decides golpear a un animal, seguro como el

167
diablo que encontraste a uno de los mas
grandes.”

“Debería estar en el zoológico o en un lugar de


esos, no vagando por los caminos por voluntad
o por la fuerza”

Deacon sonrió. “Hey, estas hablando del


orgullo de Montana.”
Ray se vio a si mismo al parecer sorprendido
de ver que estaba intacto. “¿Que tan mal
estoy?”

“Contusión, nariz quebrada, muñeca dislocada


y una quemadura en el muslo.”

“Café.”

“¿Huh? ¿Quieres café?”

168
“No, Yo estaba tratando de beber café. Debí de
haberlo tirado. ¿Como esta Taggert?”

Deacon se movió en el asiento “Brazo


quebrado y clavícula, moretones y algunos
cortes. Esos son los únicos que le preocupan
pero ya le asegure que lo hará incluso más
sexy.”

Ray entrecerró los ojos. “No tengas ideas con


Taggert.”

Deacon se rio. El se inclino y le dio un suave


beso en los labios a Ray. “No necesitas
preocuparte tu llenas toda mi atención.”

Ahí fue cuando la nube en el cerebro de Ray se


alejo y recordó a que había ido a Red Lodge en
primer lugar. Sin dinero para empezar la nueva
aventura, sabía que no podía desperdiciar días.

169
“¿Estoy lo suficientemente bien para irme a
casa en la mañana?”

“¿Que? pensé que te quedarías hasta el


domingo.”

Ray no sabía como decirle a Deacon la verdad.


El necesitaba tiempo lejos de Montana, del J
Bar y de Deacon para procesar todo lo que le
había sucedido. “Tengo algunas cosas que
necesito hacer antes de regresar al trabajo el
lunes.”

Deacon parpadeo varias veces. “Que es tan


importante para que dejes la ciudad?”

Ray trato de asentir pero sentía que la cabeza


se le caería del cuello. “Por favor solo

170
prométeme que me llevaras al aeropuerto en la
mañana.”

Los músculos de la mandíbula de Deacon se


tensaron cuando el apretó los dientes. “Claro,
pero sabes que golpear a un alce no ocurre
todos los días. Realmente no necesitas
regresar a Nueva York a causa de eso.”
Ray trenzo sus dedos con los de Deacon.
“Tengo cosas en que pensar, necesito hacerlo,
por favor.”

Como le decía a Deacon que necesitaba


decidir si para restaurar el rancho de su padre
necesitaba vender la casa por la que tan duro
trabajo su madre para pagar, No. Esa no era
exactamente la verdad. El sabía en lo profundo
que necesitaba tiempo para digerir la carta
escrita por su padre.

171
El sabia que RJ estaba dolido por el aparente
distanciamiento de Ray, pero él realmente
había tratado de buscarlo, Entre mas lo
pensaba mas mal se sentía. Ni una vez había
tratado su padre de verlo cara a cara.

“Hey, ¿que esta pasando por esa lastimada


cabeza tuya?” Deacon murmuro, besando la
mejilla de Ray.

“Solo preguntándome porque mi papá nunca


trato de verme. Cuando descubrí la verdad,
estuve enojado con mi mamá por mentirle.
Pero pienso que si hubiera estado en el lugar
de mi papá, hubiera hecho todo lo que
estuviera en mi poder para ver a mi hijo, me
aprobara o no. Yo podría al menos localizarlo
una vez que fuera adulto y tener una
conversación hombre a hombre con él.”

172
Deacon vio sus ojos llenos de tristeza cuando
le retiro el cabello de la frente a Ray “El era
mas orgulloso que cualquier hombre que
hubiera conocido, a veces es un defecto. El fue
mi mejor amigo, pero no puedo disculparlo. Lo
que hizo estuvo mal, Punto, no hay excusas
para eso.” Deacon se inclino mas y acaricio con
su nariz el cuello de Ray. “Sabes que eres el
mundo para mi. Si tienes que ir a Nueva York,
no te quedes mucho, me he acostumbrado a ti.”

Ray aprecio todo lo que su amante dijo, pero si


sus sentimientos hacia Deacon eran reales,
sobrevivirían al tiempo que le tomara poner su
cabeza y corazón en orden. Ray acuno el
cuello de Deacon. El era el hombre que había
conocido hace menos de una semana y ya
Deacon significaba mas que nadie en el
mundo.

173
Con lo mucho que el quería decirle a ese
hombre que lo amaba esas dos pequeñas
palabras, no se lo permitía su consciencia.
Quizás con el tiempo cuando supiera quien era
no lo que su mamá o su papá pensaban que
era.
Capítulo Seis

El jefe de Ray entro en la oficina y aventó una


carpeta en el escritorio. “¿Vacas? Yo te pedí
anuncios para la campaña de una panadería y
tu me sales con ¡vacas!”

Ray levanto la vista de la computadora.


“Cabezas.”

“¿Discúlpame?”

“Cabezas o ganado, no vacas. La premisa del


anuncio es que la gente piense en el campo. en

174
los tiempos en que las mamas horneaban para
su familia.”

La cara roja frente a él gruño. “Tu solo piensas


en ganado y vaqueros desde que regresaste de
tus vacaciones.”
“No fueron vacaciones. Mi papá murió.”

“Lo que sea. Porque no te tomas unos días


para decidir si quieres seguir. Esto no es el
campo. Tu no estas haciendo un anuncio local
para gente de Manhattan con esos tontos
anuncios que sigues haciendo.”

Ray vio a su jefe salir de su oficina. “Joder.”

El se inclino en su silla y cerro los ojos. El sabía


que su jefe tenía razón. En ese momento le
gustaría estar en el frente de su porche de su
casa en el J Bar. El calor en la ciudad era

175
sofocante. Que no daría por estar bajo una
sombra en el campo con una fresca brisa.

A pesar de que llevaba casi dos semanas, él


había decidido casi de inmediato que quería
regresar.
Pero las cosas se toman su tiempo. El tenía
que poner una casa en venta y reorganizar una
vida.

*****

“Hey, jefe”

Deacon vio sobre el libro frente a él. “Si,


Jimmy”

“Esto es de Ray. El lugar en Billings en donde


rento el carro, por fin lo recogió y esto es de

176
Ray. Son sus efectos personales que estaban
en el interior.”

Deacon tomo el gran sobre de manila en el


interior. “Gracias.”

Jimmy asintió y salio de la casa-comedor.


“¿Quieres otra tasa de café?” Martha preguntó.

Deacon tomo su taza sorprendido de que el


café estuviera frío. “Eso sería genial.”

A el le faltaba al menos otra hora de trabajo y


sabía que necesitaba cafeína.

Como había logrado conectarse a Ray era algo


que todavía no entendía, pero la vida sin su
amante le estaba pasando factura con las
horas de sueño.

177
Su dedo rozo la esquina del sobre. La dirección
en la esquina le decía que era del abogado de
RJ. “Este no es tu asunto, Deacon.”

“¿Que dices?” Martha pregunto, entrando al


cuarto.

“Nada solo hablando conmigo mismo.”

Martha tenia una jarra de café frente a ella. En


lugar de solo servirla, tomo asiento frente a él.
“Se metió debajo de tu piel. ¿no es así?”

Deacon sonrió. “¿Es tan obvio?”

“Bueno. puedo decir que no y mantener tu


orgullo, o puedo decir la verdad. ¿Que
prefieres?”

178
“Lo extraño. Hablar por teléfono no es lo
mismo.”

“Entonces dile.”

Deacon vio a la mujer que había sido una


madre para todos en uno u otro momento. “No
puedo. No se la razón por la que se mantiene
lejos, pero creo que esta en este sobre.”

Martha vio el sobre en cuestión. “Supongo que


tienes una decisión que tomar.”

Deacon asintió y se sirvió café. “Incluso aunque


Ray sea hijo de RJ, cero que mi viejo amigo lo
odiaba.” Deacon le dijo a Martha de las cartas
que Ray había encontrado y también de la que
Deacon había recibido. “…Es solo que no lo
entiendo,” Deacon concluyo.

179
Martha tomo la mano de Deacon. “Creo que al
final, cuando RJ estaba muriendo, el comenzó
a amargarse por todas las cosas que estaban
mal en su vida, principalmente Ray. El estaba
herido cuando hizo esas cartas. No dejes que
eso nuble tu juicio sobre tu amistad. La realidad
es que fue tu amigo. Deja que tu relación con
Ray se manche de esos recuerdos.”

“¿Crees que realmente amo a Ray?”

Martha se encogió de hombros. “El se llevo esa


respuesta a la tumba.” Ella se puso de pie y
puso sus dedos en la mesa. “Quizás sea
momento de que este lugar sea el hogar de
Ray y no de RJ.”

“Que quieres decir?” Deacon sabia que Ray se


sentía bienvenido en el rancho.

180
“RJ puso su marca en todo por aquí. Los
fantasmas pueden seguir viviendo. Si hay
malos sentimientos entre RJ y Ray, quizás es
tiempo de cambiar cosas.”

“¿Como?” él preguntó.
Martha apoyo los brazos en la mesa y se
inclino hacia Deacon. “En los viejos días,
ponían su marca a las cosas. J Bar es la marca
de este lugar, con eso se marcaba el ganado.”

“¿Y?”

“Sucede que cuando Elijah Justice declaro que


el J Bar nunca podría pasar a nadie que no
fuera un Justice. El no dijo nada de la tierra,
solo del nombre. Creo que eso puede aclararle
a Ray quien probablemente nunca tenga un
heredero. Que sucedería entonces con este
lugar cuando su tiempo llegue. Quizás es el

181
momento que una visita al señor Krueger
pudiera ayudar con tu problema con Ray. Haz
de este lugar el hogar de Ray y el regresara.”

Deacon se rascaba la mandíbula. El sabía por


las cartas de RJ que lo ultimo que quería era
heredar el rancho a Ray, entonces porque ella
le dice a el eso. “¿Porque no le dijiste a RJ
sobre tus teorías sobre el J Bar?”

Martha sonrió. “Porque a diferencia del resto de


ustedes, sabia de Ray y no quería que RJ le
dejara el rancho a nadie mas que al ultimo de
los Justice. Es la manera en que debía ser, a
pesar de tu relación. Tu pareces olvidar que yo
he trabajado aquí por mucho tiempo. Aquí hay
muchos esqueletos Justice que tu no conoces.”

182
Con una sonrisa de autosatisfacían, Martha
regreso a la cocina a terminar de preparar la
comida.

Deacon vació el contenido del sobre en la


mesa. Si el iba a ir a ver al señor Krueger, él
necesitaba entender que tenia en contra.
*****
Ray termino de sellar una caja y la apilo con las
otras. El había hecho mucho progreso en los
últimos días. El había hecho arreglos con un
local de caridad para que una camioneta fuera
al día siguiente, lo único que le quedaba era
clasificar la mitad del ático.

El no había tenido suerte en vender la casa de


su madre, pero el mercado apestaba y no sabía
cuando se vendería. Con tiempo libre forzado
en su trabajo, decidió hacer cuanto pudiera por
tener lista la vieja casa.

183
El timbre de la puerta llamo su atención
alejándolo de su tarea. El se puso de pie y se
sacudió el polvo acumulado en su camiseta y
cabello antes de bajar por la escalera.

Antes de que pudiera llegar a las escaleras


inferiores, comenzaron a golpear la puerta.
“Ya voy,” grito.

El abrió la puerta y casi se desmaya. El hombre


que no podía sacarse de la cabeza estaba
frente a él. Ray empezó a reírse cuando su
amante lo levanto y lo beso.

Cuando trato de separarse lo suficiente para


interrogar a Deacon, los brazos de su hombre
lo apretaron más fuerte y profundizaron el
beso. Ray abrió su boca y chupo la lengua de

184
su amante. Maldición, él extrañaba el sabor de
Deacon.

El beso incluso fue mas caliente cuando


Deacon lamió los labios mejillas y mentón de
Ray con su lengua, En un momento el pene de
Ray estaba duro y presionándose contra el
muslo de Deacon mientras ellos continuaban
su erótico juego de lengua.
Ray jalo a Deacon al interior de la casa y cerró
la puerta. “Te necesito,” se aparto del beso lo
suficiente para decirlo.

Deacon se inclino y levanto a Ray sobre su


hombro, En esa posición Ray tenía una vista
perfecta el trasero de Deacon encerrado en
esos descoloridos jeans. El paso sus manos
sobre las firmes nalgas mientras era llevado
por las escaleras. El no pudo meter su mano

185
por la pretina del pantalón pero pudo meter un
dedo entre las nalgas de su amante.

“¿Cual?” Deacon preguntó.

“Primera puerta,” Ray contestó.

Deacon bajo a Ray a la cama. “¿Cosas?”

Ray se mordió el labio inferior. “Condones en el


cuarto de baño, todavía en la bolsa de viaje.” El
abrió el cajón de la mesita “Yo tengo el
lubricante.”

Mientras Deacon iba por los condones, Ray


comenzó a quitarse la ropa, para cuando
estuvo desnudo Deacon regreso al cuarto,
enfundado y listo, Ray había empezado a
estirarse el mismo. El no había tenido tiempo
de tomar el dildo del cajón, en su lugar lo

186
estaba haciendo de la manera tradicional. Al
parecer ambos tenían prisa.

Ray gimió insertando otro dedo cuando Deacon


subió a la cama. “¿Que estas haciendo aquí?”

Deacon se detuvo y sonrió, señalando la


puerta. “¿Debo irme?”

“Diablos no.” El retiro sus dedos y abrió las


piernas. “Ven acércate.”

Deacon se acomodo entre los muslos de Ray y


guió la cabeza de su pene hacia el agujero de
Ray. “¿Recuerdas nuestro acuerdo?”

Ray sabia exactamente lo que Deacon estaba


preguntando. “Prometo decirte si me lastimas.”

187
Después de empujar la cabeza a través del
anillo de músculos, Deacon se detuvo y se
inclino para besarlo. De todos los eróticos
besos que habían compartido en su relación,
Ray sabía que este tenia algo increíblemente
diferente. El sabía que el no era el único que lo
sentía. El bajo gemido de Deacon cuando sus
lenguas se cruzaron también era diferente.

Ray abrió los ojos y vio directamente al guapo


hombre que el había extrañado mas allá de
toda razón. Sin palabras Ray sentía la conexión
entre ellos incluso mas profunda.

Sin quebrar el contacto visual, Deacon


comenzó a moverse, con un lento ritmo,
Deacon fue entrando al interior del cuerpo de
Ray. A pesar de que Ray sentía un poco de
dolor agudo, se concentro de que no se notara
en su cara. Tener a Deacon con el era

188
demasiado importante para permitirse arruinar
el momento.

Una vez enterrado hasta la raíz, Deacon se


inclino y barrio con su lengua los labios de Ray.
“Dios, extrañe esto, a ti. Mi vida entera de
adulto la he pasado en el rancho y nunca me
había sentido solo como en estas dos ultimas
semanas.”
Ray asintió. El sabía lo que Deacon estaba
diciendo. El tiempo alejado de Deacon había
sido el puro infierno. No importaba cuan
ocupado había tratado de mantenerse. En cada
minuto del día el tenia la tentación de decir ‘que
se joda todo’ regreso a Montana.

Deacon siguió deslizando su pene al interior, el


estiramiento era asombroso. Ray podía jurar
que sentía cada vena y protuberancia del pene
de Deacon.

189
Ray envolvió sus piernas alrededor del torso de
su amante mientras el gemía con cada impulso.
Las palabras seguían muriendo en la punta de
su lengua. No todavía.

Deacon cambio de posición y aumento la


intensidad del ritmo. A pesar de que Ray sentía
que el vello púbico de Deacon raspaba contra
su pene, él disfrutaba ser capaz de ver la
hermosa cara del vaquero. El sonrió cuando vio
los oscuros ojos de Deacon como si se
estuviera concentrando en todo.

Ray sabía que el era la causa de toda la


concentración y eso le excitaba incluso más. El
sonido de su piel golpeando contra la piel de
Deacon era casi ensordecedor en el cuarto.
¿Quien hubiera pensado que incluso extrañaba
ese sonido? había algo en ese hombre que lo

190
enloquecía y que había anhelado durante esas
dos semanas.

Deacon tomo los tobillos de Ray y separo sus


piernas aun mas mientras continuaba entrando
y saliendo del agujero de Ray. Deacon vio a los
ojos a Ray. “Maldición, te extrañe.”

Ray sabia que estaba completamente


enamorado de ese hombre cuyas emociones
eran casi visibles en la expresión de Deacon.
Mientras con una mano tomaba su pene, Ray
limpio con la otra el sudor de la cara de
Deacon. Una vez mas, Ray quería decirle a
Deacon lo mucho que lo amaba, pero el sabía
que significaría mas cuando no estuvieran
jodiendo como conejos.

Si mano viajo por el pecho de Deacon


raspando el ligeramente velludo pecho con sus

191
cortas unas. Al ver las marcas rojas que dejo,
visibles bajo el vello le hizo estremecerse al
pensar que Deacon realmente estaba ahí. Su
amante realmente había viajado hasta Nueva
York para estar con él.

“Deacon,” el grito cuando su pene hizo


erupción, disparando su semilla en su
abdomen.

Deacon vio hacia abajo. Ray no estaba seguro


de si eran las marcas rojas de su rasguño en el
pecho de Deacon, pero algo pareció llevar a su
amante al borde.

Deacon grito con una combinación de gemido y


gruñido mientras aumentaba el ritmo de
entradas y salidas del cuerpo de Ray.

192
Con su juicio de nuevo intacto, Ray estudio la
cara de Deacon mientras se enterraba a si
mismo hasta la raíz y se corría. Tomo todo el
control de Ray no bajar las piernas una vez que
estaban envueltas alrededor de la cintura de
Deacon, su vaquero cayo arriba de él.

No era problema que Deacon pesara al menos


treinta kilos mas que Ray, la presión del peso
de su amante contra él era mas que
bienvenida, era necesaria. Ray paso sus
manos por la espalda de Deacon mientras su
pareja luchaba por recuperar su respiración.

Ray sabia que el no podía sostenerlo mucho


tiempo. El acerco sus labios al oído de Deacon
y le murmuro, “Te amo.”

Deacon giro la cabeza y capturo la boca de


Ray en un profundo beso, después de explorar

193
profundamente, Deacon le dio pequeños besos
por toda la cara a Ray. “Te amo, también.”

Ray casi gimió cuando el flácido pene de


Deacon salio de su agujero. Deacon se giro y
se quito el condón, tirándolo en el bote de
basura a lado de la cama.
Olvidando la limpieza por el momento, Ray se
acurruco contra el pecho de Deacon.
“¿Entonces me vas a decir porque hiciste todo
el camino hasta Nueva York?”

Deacon pasó la punta de sus dedos por un lado


de la cara de Ray. “Traje algunos papeles para
que firmes y te tengo una propuesta de
negocios.”

Confundido, Ray se apoyo en su codo para ver


a Deacon. “Pensé que ya había firmado todo.”

194
Deacon sacudió la cabeza. “Yo he estado
trabajando con el señor Krueger. Acerca de
cambiarle el nombre al rancho. No será oficial
hasta que vaya a la corte y esas cosas, pero
nosotros no podemos hacer nada hasta que tu
lo apruebes y lo firmes.”

“¿De que estas hablando? ¿Porque le


cambiaria el nombre al J Bar?”

Deacon jalo a Ray a sus brazos. “Es la manera


legal para que te salgas de la obstinación de tu
tatarabuelo. El rancho es ahora tuyo. No de tu
papá o de tus ancestros. Tuyo.”

“¿Que nombre decidiste?” Incluso con el corto


tiempo, Ray no podía imaginar que el rancho
tuviera otro nombre que J Bar.

195
La expresión de Deacon brillo. “Bueno, falta
todavía que tu lo apruebes, pero los otros
trabajadores y yo pensamos que como lo rodea
el rio, Justice River seria adecuado.”

“Justice River.” Ray repitió el nombre en su


lengua. “Me justa eso.”

“¿Tu regresas a casa conmigo?”

“Todos los cambios que tenia en mente para el


rancho requieren dinero. No puedo hacer nada
hasta que venda la casa de mi mamá.”

“Espera un segundo.” Deacon bajo de la cama


entro al cuarto de baño. El regreso con una
toalla sobre su hombro y una cartera.

196
“Gracias, pero yo realmente no necesito que
me pagues por sexo. Te lo doy gratis,” Ray
bromeo.

Deacon le aventó la toalla a Ray antes de


sentarse en la cama a lado de él. El sacó un
cheque de la cartera y se lo dio a Ray. “Tus
empleados te tienen una propuesta.”

Ray tomo el cheque, perplejo. “¿Que es esto?”


“Bueno, nosotros pensamos que quizás nos
dejes participar en el negocio del rancho,”
Deacon le informo.

“¿Pero que si fracasa? Esto son todos sus


ahorros. Yo no puedo arriesgar su dinero,” Ray
trataba de explicar.

“¿Porque? Tu puedes arriesgar lo tuyo. ¿Cual


es la diferencia? Nosotros tendríamos mas

197
interés de hacer el negocio rentable.” Deacon
se encogió de hombros. “Además, nosotros
creemos en ti. Y de esta manera los vaqueros
tendríamos un sentido de pertenencia que
antes no teníamos.”

“¿Que contigo?” Ray pregunto.

“¿Que conmigo?”

“¿Esto te daría una razón para seguir conmigo


por un tiempo?” Ray se mordió el labio inferior,
esperando la respuesta.

“No,” Deacon dijo sacudiendo la cabeza.

Ray sintió una opresión en el pecho.

Deacon se inclino y lo beso. “Pero esto podría.”

198
“Buena respuesta.” Ray beso a Deacon y lo
empujo a la cama para el segundo round.

*****

Ray estaba dirigiendo a un cargador que


llevaba una gran caja, cuando una gran van
llego. A lado de la van decía ‘especialistas en
reconstrucción’ con la frase. ‘Nosotros lo
dejamos listo para una segunda vez’.
Un hombre mayor salio y se dirigió hacia Ray.
“¿Ray Justice?”

Ray asintió. “Ese soy yo. Usted debe ser el


señor Walter.”

“Si. ¿Tiene las ventanas que quiere que


instalemos?”

199
“Si llegaron hace un par de horas. Dije que las
dejaran en el granero, espero que este bien.”

“Es genial. Mi hijo y yo podemos empezar a


clasificar cual va en cada cabaña.”

Con el ángulo del sol en el parabrisas de la


van, Ray no había notado a nadie mas en la
van. Ahora que veía bien estaba seguro que
había un jovencito en el asiento del pasajero.

“Les dejamos la cabaña a lado de la casa-


comedor. Es solamente un gran cuarto pero
tiene dos camas un par de sillas, un cuarto de
baño y una chimenea. la casa-comedor esta
siempre abierta si necesitan algo de comer o
beber o un aperitivo a media noche. Solo
asegúrense de dejar limpio o tendrán que
esconderse de Martha.”

200
Walter asintió. “Soy un poco quisquilloso con la
limpieza Martha y yo nos llevaremos bien.”

Ray se rio. “No lo digas tan alto. Martha ha


estado tratando de atrapar a un hombre en los
últimos treinta años.”

Walter se rio, pero Ray detecto una chispa en


los ojos azules del hombre. Viendo hacia el
cielo, Walter se protegió los ojos. “¿Con que
cabaña quiere que Tyson y yo comencemos?”
“Bueno, eso depende de cuanto se van a tardar
en cada una. La cabaña de verano es la que
tiene mas ventanas pero estará vacía durante
cuatro días. después de eso, únicamente hay
una semana antes de que los huéspedes
lleguen.”

Walter saco su pañuelo azul del bolsillo y se


limpio el sudor de la frente. “Vamos a echar un

201
vistazo a todo. Debo tenerle un horario para el
anochecer.”

“Me parece perfecto.”

Walter estrecho la mano de Ray una vez mas


antes de regresar al vehiculo. Ray regreso a su
casa, evito a uno de los cargadores que salía
con una mesa. El estaba feliz de que Deacon
le dijera que podía colocar algunos muebles de
RJ en las otras cabañas.
Mientras entraba a la casa, sonrió. El lugar se
sentía mas como su casa con sus cosas
distribuidas alrededor. El gran sillón de piel de
tres plazas quedo perfecto frente a la
chimenea. El no podía esperar a que llegara el
invierno y acurrucarse con Deacon en frente
del fuego.

“Wow, casi no se reconoce el lugar.”

202
Ray vio sobre sus hombros cuando unos
fuertes brazos envolvieron su cintura. “¿Quien
diría que tenia un gusto por las cabañas
rusticas? pensé que todo esto seria Pottery
Barn*-ish.”

“Pottery Barn-ish?” Deacon preguntó.

* Mueblería, que vende muebles en estados unidos y Canadá, basada en estilo americano.

“Es una tienda yuppy*. Olvídalo.” Ray se inclino


contra el pecho de Deacon. “Los chicos de las
ventanas llegaron.”

“Si, los vi cuando venia para acá.” Deacon beso


el cuello de Ray. “El hijo de Walter es bastante
guapo.”

Ray se giro y entrecerró los ojos. “¿Ya


habíamos tenido esta conversación?”

203
Deacon le dio un rápido beso a Ray. “Tengo el
fuerte presentimiento que nosotros vamos a
tener muchos hombres muy guapos en un par
de meses. Acordamos apreciar pero no tocar.”

Ray pretendió pensar un momento. “¿No


tocar?”

* Yuppy derrogativo chico de ciudad profesionista de clase media.

“Promete. No tocar.”

“Esta bien. Entonces parece que Tyson y su


buena apariencia se quedara fuera.”

204
Epilogo

Había sido un largo y duro invierno y Ray no


estaba seguro si sus bolas volverían a
descongelarse. El se puso su sombrero
vaquero y lentes de sol y salio de la casa.
Todavía estaba asombrado de los cambios
personales que habían sucedido en siete
meses. No solo Deacon se había mudado con
él antes del invierno, Ray había perdonado a su

205
padre y había aprendido a montar sin que la
silla lo lastimara.

“Mejor mueves ese flaco culo si quieres saludar


a nuestros primeros huéspedes,” Deacon le
grito.

Ray giro los ojos y continuo con su paso


normal. “Tranquilo vaquero, no corras.” le grito.
El estaba feliz de ver a Tyson parado en el
porche de la casa-comedor. Todo el mundo
estuvo impresionado del buen trabajo que
habían hecho con las ventanas de manera que
todos los vaqueros estuvieron de acuerdo de
que se le contratara como encargado del
mantenimiento del rancho.

Mientras pasaba por el porche, Ray llamo al


guapo hombre. “Ven, vamos a saludar a los
huéspedes como una familia.”

206
Tyson sonrió y bajo los escalones de dos a la
vez y se unió a Ray en un momento. “Yo no soy
seguro.”

Ray envolvió su brazo alrededor de la cintura


de Tyson. “Bueno, ahora lo eres. Tu eres parte
de esto y de nosotros.”
El empezó a quitar el brazo, pero Tyson le
golpeo las costillas. “Mantenlo ahí. Amo oír a
Deacon gruñir.”

“Eres un diablo, pero amo eso.”

Se aseguraron de tomarse su tiempo para


llegar al establo, Deacon tenia los ojos fijos en
ellos. “¿Estas tomando lo mío, Tyson?”

207
Tyson se rio, el sonido vibro en el pecho de
Ray. “No. solo era una prueba para
asegurarnos que todavía sabes lo que tienes.”

Deacon jalo a Ray separándolo de Tyson. “Lo


se. Cuida esa linda cabecita.”

El comentario combinado con el increíble


tamaño de Tyson, tenia a los otros trabajadores
carcajeándose cuando llego la camioneta azul
oscuro con los pasajeros.

“Muévanse, chicos.” Deacon envolvió su brazo


alrededor de Ray. “Tu quédate, bebé. Nuestro
primer grupo donde podemos estar
completamente cómodos estando el uno con el
otro.”

208
Ray se apoyo contra su amante. Su agenda
todavía no estaba completamente llena, pero
eran los primeros días.

La van llego y se estaciono. Griggs salio con la


cara roja. En lugar de esperar a los huéspedes,
se dirigió directamente hacia Ray y Deacon.
“Necesitan mantener a ese niño lejos de mi o el
primer día en el rancho puede ser el ultimo.”

Ray vio a quien se refería Griggs un hombre


cerca de los veinte años miraba de reojo a
Griggs. El huésped tenia largos hombros,
brillantes rizos negros alrededor de la cara que
saltaban mientras sacaba su equipaje.

“El es lindo.”

“El es un dolor en mi culo. Todo el camino


hasta aquí me ha estado haciendo una

209
pregunta tras otra. Que ha sido su fantasía ser
jinete. Que si tengo experiencia con los que
hablan de eso y no saben una mierda. Ese
chico no se calla.”

Ray sonrió y golpeo el hombro de Griggs.


“Tienes a tu primer huésped enamorado. Es
lindo”

Griggs hizo un sonido de disgusto y se fue.


Ray vio al lindo hombre comerse con los ojos a
Griggs se giro a Deacon. “Griggs esta
atrapado.”

“Si.” Deacon se inclino y le dio un rápido beso a


Ray. “Vamos a darle la bienvenida al futuro del
rancho Justice River.”

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