INSTITUCIÓN EDUCATIVA ESCUELA NORMAL SUPERIOR JUAN LADRILLEROS

MISA DE LA CELBRACIÓN DE LOS 60 AÑOS DE LA INSTITUCIÓN

OCTUBRE 4 DE 2019
DISEÑO GUIÓN:CECILIA HURTADO ANGULO
 MONICIÓN DE ENTRADA

Querida Comunidad educativa: Paz y Bien. Nos encontramos reunidos

en el marco de la celebración de los 60 años de nuestra Institución,
para celebrar con mucha alegría la fiesta de San Francisco de Asís,
creador de tres órdenes religiosas y de cuya fuente bebieron su
espiritualidad las Hermanas Terciaria Capuchinas de la Sagrada
Familia, quienes hasta hace poco acompañaron nuestro caminar a lo
largo de estas seis décadas. No podemos dejar de lado a Fray Luis
Amigó y Ferrer quien nos heredó la Pedagogía del Amor, la cual es
pilar de nuestro modelo pedagógico, como parte fundamental en la
formación de las nuevas generaciones. Te damos gracias señor por
todo lo vivido durante todo este tiempo y nos presentamos ante ti, con
un corazón humilde y agradecido para que sigas iluminando nuestro
sendero con la luz de tu palabra y la sabiduría de tu Santo Espíritu.
Nos disponemos para iniciar nuestra celebración con mucha alegría.

Canto de entrada

Acto Penitencial

Monición Antes de las lecturas

Hoy hablamos mucho de pobreza o de retornar los verdaderos valores

del evangelio. Lo que San Francisco de Asís emprendió en el siglo XIII
nos podría inspirar muy bien a nosotros, hombres de nuestro tiempo.
La sociedad de hoy amenaza con destruírse a sí misma en muchas
partes del mundo por su misma ideología y prosperidad; incluso en
países en desarrollo se imponen necesidades artificiales sobre el
pueblo, con pérdida de los más profundos valores de Dios y del mismo
pueblo. Lo que necesitamos es no solamente hablar sobre pobreza y
sobre vida evangélica, sino vivir responsablemente nuestra vida
cristiana conforme a los valores del evangelio. Escuchemos con
mucha atención la Palabra de Dios.

Primera lectura
Lectura del libro de Baruc
(1,15-22):

Confesamos que el Señor, nuestro Dios, es justo, y a nosotros nos

abruma hoy la vergüenza: a los judíos y vecinos de Jerusalén, a
nuestros reyes y gobernantes, a nuestros sacerdotes y profetas y a
nuestros padres; porque pecamos contra el Señor no haciéndole caso,
desobedecimos al Señor, nuestro Dios, no siguiendo los mandatos que
el Señor nos había dado. Desde el día en que el Señor sacó a
nuestros padres de Egipto hasta hoy, no hemos hecho caso al Señor,
nuestro Dios, hemos rehusado obedecerle. Por eso, nos persiguen
ahora las desgracias y la maldición con que el Señor conminó a
Moisés, su siervo, cuando sacó a nuestros padres de Egipto para
darnos una tierra que mana leche y miel. No obedecimos al Señor,
nuestro Dios, que nos hablaba por medio de sus enviados, los
profetas; todos seguimos nuestros malos deseos, sirviendo a dioses
ajenos y haciendo lo que el Señor, nuestro Dios, reprueba.

Palabra de Dios

Salmo
Sal 78,1-2.3-5.8.9

R/. Líbranos, Señor, por el honor de tu nombre.

Dios mío, los gentiles han entrado en tu heredad,

han profanado tu santo templo,
han reducido Jerusalén a ruinas.
Echaron los cadáveres de tus siervos en pasto a las aves del cielo,
y la carne de tus fieles a las fieras de la tierra. R/.

Derramaron su sangre como agua

en torno a Jerusalén, y nadie la enterraba.
Fuimos el escarnio de nuestros vecinos,
la irrisión y la burla de los que nos rodean.
¿Hasta cuándo, Señor? ¿Vas a estar siempre enojado?
¿Arderá como fuego tu cólera? R/.
No recuerdes contra nosotros
las culpas de nuestros padres;
que tu compasión nos alcance pronto,
pues estamos agotados. R/.

Socórrenos, Dios, salvador nuestro,

por el honor de tu nombre;
líbranos y perdona nuestros pecados
a causa de tu nombre. R/

Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Lucas (10,13-16):

En aquel tiempo, dijo Jesús: «¡Ay de ti, Corozaín; ay de ti, Betsaida! Si

en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros que en vosotras,
hace tiempo que se habrían convertido, vestidas de sayal y sentadas
en la ceniza. Por eso el juicio les será más llevadero a Tiro y a Sidón
que a vosotras. Y tú, Cafárnaún, ¿piensas escalar el cielo? Bajarás al
infierno. Quien a vosotros os escucha a mí me escucha; quien a
vosotros os rechaza a mí me rechaza; y quien me rechaza a mí
rechaza al que me ha enviado.»

Palabra del Señor

Oración de los fieles:

1. Para que el Señor conceda al Papa Francisco., a nuestro Obispo Rubén Darío., y
a todos los sacerdotes y religiosos de nuestra diócesis corresponder con
fidelidad, santidad de vida y gratitud al ministerio que Él mismo les ha confiado.
Roguemos al Señor.
2. Por nuestra comunidad educativa, para que guiada por la luz de tu palabra, siga
sembrando virtud y ciencia en los corazones de cada uno de nuestros
estudiantes y de esta forma puedan trabajar por la construcción de una vida
más digna para todos. Roguemos al señor.
3. Por todas las religiosas y docentes que pasaron por nuestra institución a lo
largo de este tiempo y que disfrutan de mejor vida, para que los tengas
gozando de tu presencia. Roguemos al señor.
4. Por todos los enfermos de la comunidad educativa, para que le concedas la
salud a sus males físicos y emocionales. Roguemos al señor
 5. Para que los niños y jóvenes se abran al mensaje del Evangelio,
descubran la inconfundible voz del Maestro que los llama a su
seguimiento para extender el Reino de los cielos y lo sigan.
Roguemos al Señor.
6. Para que toda la humanidad goce de paz, justicia y amor, para
que cesen los odios y rencores, las divisiones y sectarismos, y
para que el Reino de Dios sea una realidad entre todos los
hombres. Roguemos al Señor.
7. Para que los que sufren la muerte o el alejamiento de sus seres
queridos experimenten el consuelo del Señor, y para que Él
fortalezca a los que se ven tentados, dé esperanza a los
agonizantes y la vida eterna a todos los difuntos. Roguemos al
Señor.
8. Para que Jesús nos conceda vivir en el amor y el servicio a los
hermanos. Roguemos al Señor.
9. Para que el Señor infunda en todos sus fieles un conocimiento
cada día más pleno y una participación cada vez más consciente
y viva en la acción de gracias que celebramos en la Eucaristía.
Roguemos al Señor.
10.Para que quienes se preparan para los sacramentos del Orden y
del Matrimonio y a la profesión religiosa, aviven su deseo de amar
hasta las últimas consecuencias la misión que el Señor les quiere
encomendar, y siempre hay quienes quieran seguir el mismo
camino. Roguemos al Señor.

Ofrendas:
Pan: Con el pan, te ofrecemos nuestra vida diaria con sus luchas y
esperanzas, el fruto del trabajo realizado durante estos años, nuestras
fortalezas y debilidades.

Vino: En el Cáliz con vino te ofrecemos, nuestro amor que necesita

del fuego de tu Corazón y la vida de nuestras/os hermanas/os que
sufren por la violencia, la pobreza, la discriminación y toda clase de
marginación.
Manos:
Bandera institucional:
Hermana Terciaria Capuchina:
Frutos de la región:( banano, chontaduro, coco, etc.).
En estos frutos cultivando la tierra, Señor, te presentamos a todos los
campesinos que luchan diariamente por ganarse el sustento,
bendícelos y haz que se haga justicia con los agricultores, que están
necesitando apoyo y que la mirada de la sociedad se fije en ellos, para
que el amor y la caridad, también alcance a todos
Cuadro de Monseñor:
En este cuadro te presentamos Señor la vida y obra de Monseñor
Gerardo Valencia Cano y cada una de las obras que dejó a nuestra
ciudad, bendícelas y permite que sigan cumpliendo con el propósito
establecido para bien de nuestra comunidad
Biblia:
Luz: Te presentamos Señor esta luz, que simboliza la luz de Cristo
que desde pequeños buscamos y nos permite ver tanto el mundo,
como nuestro interior. Tú nos dijiste, yo soy la luz del mundo; el que
me siga, no caminará en la oscuridad, sino que tendrá la luz de la vida.

Oración por la Paz

Señor, haz de mí un instrumento de tu paz.
Donde haya odio, que yo ponga amor.
Donde haya ofensas, que yo ponga perdón.
Donde haya discordia, que yo ponga unión.
Donde haya error, que yo ponga verdad.
Donde haya duda, que yo ponga fe.
Donde haya desesperanza, que yo ponga esperanza.
Donde haya tinieblas, que yo ponga luz.
Donde haya tristeza, que yo ponga alegría.
Haz que no busque tanto
el ser consolado como el consolar,
el ser comprendido como el comprender,
el ser amado como el amar.
Porque dando es como se recibe,
olvidándose de sí mismo es como uno se encuentra,
perdonando es como se obtiene perdón,
y muriendo es como se resucita para la vida eterna.

Amén