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Pontificia Universidad Javeriana

Facultad de Teología
Arte y espiritualidad
Filosofía
Jean Eyvind Jiménez S.
Profesor: Ricardo Acero M.
Fecha: 09/04/18

Plasmar la encarnación1

La pregunta inicial del texto es: ¿cómo surge la representación de la divinidad

en el cristianismo? A partir de esta pregunta, se desarrollan, de manera crítico-histórica,
las variadas expresiones del arte cristiano desde finales del helenismo hasta finales del
siglo XX. En medio de este recorrido de casi dos mil años se remite al término de la
inculturación o el proceso por el cual se afianza el evangelio en la cultura. Denotando
así, sus momentos álgidos de asimilación individual y colectiva como sus momentos
en decadencia.
1. Inculturación del cristianismo en el mundo greco-romano

Los elementos religiosos de la cristiandad se forman a partir de dos elementos:

la sinagoga y el mundo greco-romano. Para la primera, las pruebas fehacientes son la
sinagoga de Dura Europos y el baptisterio cristiano2; para la segunda, es el empleo de
imágenes con fines funerarios, cultuales y pedagógicos. Hubo resistencia por parte de
los primeros cristianos del mundo helénico y su trasegar hará mella algún par de siglos
en la cristiandad.
Se empiezan a consolidar las primeras edificaciones para las asambleas de las
comunidades cristianas, concomitantes, surgen el ajuar litúrgico y la jerarquía
eclesiástica. También, se adaptan formas de arte “pagano” y se representa la vida
después de la muerte en paisajes bucólicos, pastoriles o de naves llegando al puerto de
la salvación; además, Cristo es presentado como maestro-filósofo (Kyrios), imberbe o
como Cristo siríaco, barbudo.
2. La plena inculturación en el gran arte imperial

Tras, el edicto de tolerancia de Constantino en el 313, el concilio de Nicea en

el 325 y el paso de religión oficial a manos de Teodosio el arte cristiano adopta el
lenguaje y símbolos de la cultura romana. Es así que Cristo aparece como señor,

1 Este texto tiene como objetivo hacer una reseña descriptiva de Gascón, Plasmar la
encarnación en la historia, 2006.
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Gascón cree que el judaísmo no es una religión anicónica por esta razón.
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legislador, juez y maestro: es el Cristo pantocrátor con su estola, sandalias, nimbo, rollo
de ley, escabel, cátedra. Ejemplos de ello los mosaicos de san juan de Letrán, san
Damián, santa Sofía de Constantinopla, entre otros. Por otra parte, La teología política
romana se cristianiza, hay entonces, separación de la esfera política y religiosa.
3. El esplendor bizantino

Se da la asimilación del arte romano y la continuación del arte imperial. La

representación bizantina se nutre de la fastuosa ceremonial de la corte imperial de
Constantinopla: iconos e imágenes de Dios, los ángeles y los santos; las basílicas
abovedadas y con planta de cruz; inciensos, cantos, procesiones, y hermosas vestiduras;
oro en los fondos como representación de la luz de Dios, aquella que no tiene sombra;
y, mosaicos de personajes inmóviles con los ojos dilatados absortos en la
contemplación de la gloria de Dios.
4. La gran crisis y la solución

En el S. IV d.C la representación del señor se decanta como la un Cristo siríaco,

barbudo. Aunque es en este punto de la historia donde se reaviva el debate del
iconocalsmo por León III de Isaúrico (714-731) que, manda quitar los iconos de Cristo
en la puerta de Constantinopla; el pueblo se revela, y por ende, manda perseguir a los
iconódulos y destruir los íconos.
Los iconoclastas argumentaban que lo único que azuzaban los iconos era la
debilidad de la fe y de la iglesia que tanto defendían los iconódulos. El hijo de León III
Constantino (741-775), será uno de los mayores teóricos de los iconoclastas, dirá que
los íconos son ídolos. Al lado contrario, los iconódulos se defienden diciendo que no
son ídolos puesto que fueron reveladas por Dios al hombre, es decir, No realizado
manualmente, hay una intervención divina (Akeropita).
Se realiza entonces el II concilio de Nicea en el 787 sobre las imágenes sagradas
y se fundamenta el arte cristiano en el dogma de la Encarnación y la tradición de la
iglesia. Los padres conciliares distinguen el culto de adoración (a Dios) y el culto de
veneración (a las divinas imágenes). De este modo se supera la crisis iconoclasta.
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Fuente:
Bize, Hasan (2012). WebIslam. Fundamentos metafísicos del arte
islámico. Consultado el 08/04/10. https://www.webislam.com/articulos/69928-
fundamentos_metafisicos_del_arte_islamico.html