Ficha de cátedra- Nahuel Montes

Idea, tema, proceso

Para llevar a cabo una investigación es necesario separar analíticamente distintas etapas o fases que componen
el proceso por el cual se atravesará. Cuando nos referimos a la investigación científica hacemos mención a una
construcción del conocimiento rigurosa y organizada que posee las características de ser sistemática, empírica y crítica.
Sistemática, porque se realiza según un orden y un plan; empírica, en tanto se procura recolectar y analizar datos de lo
que denominamos realidad (no obstante vamos a ver que el dato se construye y no se trata simplemente de un proceso
lineal); que la investigación científica sea crítica implica un proceso de reflexividad, de evaluación, acerca de nuestros
enunciados. En suma, cualquier investigación posee un método.
Los propósitos de fundamentales de la investigación son dos: 1, producir conocimiento y teorías, lo que
denominamos investigación básica; y, 2, Resolver problemas prácticos, acción que pertenece a la investigación
aplicada. Para conseguir estos propósitos se concibe a la investigación como un proceso (dinámico, cambiante,
evolutivo). Empleamos este término, el de “proceso”, para referirnos a la totalidad de las acciones que desarrolla el
científico. Recuerden que diferenciamos la noción de “proceso” de la de “diseño” y la de “proyecto”. El proceso incluye
a los otros dos conceptos. Con “diseño” queremos referirnos al momento de la adopción de una estrategia metodológica.
En cambio cuando hablamos de proyecto, nos referimos al documento que contiene además del diseño una información
concisa sobre los objetivos, las metas en tiempo y espacio, el plan de actividades, la estructura del presupuesto, entre
otros elementos que un organismo pide para que demos cuenta de qué queremos hacer, cómo lo vamos a hacer, qué
recursos necesitaremos y en qué tiempo lo desarrollaremos.
El proceso, entonces, está relacionado con las distintas acciones que realizamos en investigación, y a las
mismas las agrupamos en fases. Las mismas se encuentran vinculadas entre sí, se den de manera secuencial o continua.
En principio, podemos decir que iniciamos con una idea y un planteamiento, pasamos por el desarrollo de la estrategia
metodológica y concluimos con la recolección, el análisis de los datos y algún tipo de reporte del estudio. El proceso es
circular en este sentido: los nuevos conocimientos generados producen nuevos interrogantes u objetos de aplicación. De
todas maneras, esto último no impide la posibilidad de regresar a una etapa previa.
El texto de Sampieri y otros (2003) propone el siguiente esquema para graficar el proceso y sus fases:
1. Desarrollo de una idea, tema o área a investigar
2. Selección del ambiente o lugar de estudio
3. Elección de participantes o sujetos de estudio
4. Inspección del ambiente o lugar de estudio
5. Trabajo de campo
6. Selección de un diseño de investigación (estrategia para desenvolverse en el ambiente o lugar y recolectar
datos)
7. Selección o elaboración de instrumento para recolectar datos
8. Recolección de los datos
9. Preparación de los datos para el análisis
10. Análisis de los datos
11. Elaboración de un reporte de investigación

En los estudios cuantitativos este esquema se aplica secuencialmente, no necesariamente así en los cualitativos. Se
comienza con una idea que va delimitándose, se establecen objetivos y preguntas de investigación, se revisa la literatura
y se construye un marco teórico. Luego, se ensayan respuestas tentativas a las preguntas y objetivos que se traducen en
hipótesis (no siempre). Se elabora o selecciona un plan para probar las hipótesis, esto es el diseño de la investigación, y
se determina una muestra. Finalmente, se recolectan datos utilizando uno o más instrumentos de medición, se analizan y
se reportan los resultados. En los estudios cualitativos, el planteamiento del problema (objetivos, preguntas y
justificación) y las hipótesis surgen en cualquier parte del proceso. En los dos enfoques, cuali o cuanti, el planteamiento
es susceptible de ser modificado. En los términos que plantea el texto citado, el trabajo de campo significa sensibilizarse
con el lugar, identificar informantes que aporten, adentrarse en la situación de investigación, además de verificar la
factibilidad del estudio.
Recapitulando
En las definiciones clásicas se asevera que la ciencia se caracteriza por ser un saber fundado que responde a
una metodología concreta de acuerdo a un plan concebido de antemano. Este aspecto nos resulta importante porque
sujetos a ese plan podemos precisar qué es lo que queremos saber o buscar y qué es lo que nos va a resultar necesario
para producir conocimiento.
En este sentido, conviene recordar que una teoría cuenta con hipótesis como punto de partida, con sus
consecuencias lógicas y observacionales. Una de las características centrales del conocimiento científico es la
verificación empírica de lo que postulamos. De manera que en el curso de una investigación vamos a prever este
aspecto mediante el método, entendido como el camino a seguir mediante una serie de operaciones fijadas de antemano
para alcanzar un fin. En este sentido, definimos a las técnicas como los procedimientos de actuación concretos que
detentan un carácter práctico y operativo (cuestionarios, entrevistas, encuestas, etc), pero guiadas por el método que
posee un carácter más global.
Dicho lo precedente, la secuencia lógica de la producción de conocimiento científico nos quedaría de la siguiente
manera:
marco teórico hipótesis variables operacionalización técnicas de
recolección de datos Datos