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EL PERVERSO ESPÍRITU MONOPOLISTA

Según el informe sobre el comercio y el desarrollo la mayor concentración del mercado se ha


convertido en algo habitual para muchos sectores y economías, siendo la aspiración de estos la
obtención de rentas, es decir, el dinero en la cadena empresarial.

Se dice que el comercio internacional siempre ha estado dominado por las grandes empresas.
Sin embargo, en la segunda guerra mundial había competencia de mercado, donde se limitaba
el poder y el alcance de las grandes corporaciones, muchas de estas limitaciones se fue
desgastando en la hiperglobalizacion, donde hay cada vez más mercados abiertos para hacer
negocios.

Esta expansión resultante del comercio ha estado estrechamente vinculada a la difusión de las
cadenas de valor mundial controladas por las principales empresas, llevando esto aún
desarrollo en la participación de la división internacional de trabajo (la producción global entre
países) aprovechando la mano de obra no especializada.

La base de datos de World imput. Es el que permite evaluar los cambios en la distribución de
valor añadido de la producción manufacturera entre diversos países. Donde la parte nacional
del valor añadido total más la parte nacional de los ingresos del trabajo por el valor añadido
total, descendieron en la mayoría de los países con excepción de china. Se dice que la parte
nacional de la fabricación disminuye en todos los países excepto en Canadá y China ( países
donde esa proporción aumento un 30% en el 2014).

Este factor distributivo ha sido el mayor poder de negociación de las empresas, debido en
parte a unos mercados de exportación extremadamente concentrados. Datos recientes a
niveles de empresas sobre las exportaciones de bienes no petroleras indica que empresas
exportadoras son el 1% de las `principales empresas representa un 57% de las exportaciones
de un país en el 2014. Aquí se nota la distorsión a favor de las mayores empresas. Las 5
mayores empresas exportadoras representan el 30% de las exportaciones totales de un país,
dando en consecuencia que disminuye la responsabilidad social y política de estas
corporaciones frente a los electores y trabajadores de los países de todo el mundo.

El éxito de China se ha basado en sus capacidad de reclamar y utilizar espacio de políticas para
promocionar el comercio y así aumentar el valor añadido nacional de las exportaciones de
manufacturadas, así también se basó en su capacidad para desarrollar mecanismos de
financiamiento independiente y de esta manera adquirir el control de bienes extranjeros, cosa
que para los países desarrollados lo consideran una amenaza para sus propios intereses
económicos.

Las grandes empresas han potenciado barreras nuevas para la competencia, aprovechando las
normas nacionales a fin de trasladar beneficios y eludir impuestos.

La falta de información de los datos relativos a los mercados y las condiciones de los costos ha
supuesto una limitación para el crecimiento de la mayoría de las empresas. Ahora para los
países en desarrollo en el comercio digital podría ser un primer paso prometedor, al promover
una infraestructura digital de equipos y programas.

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