Sei sulla pagina 1di 2

Recientes avances cambian la forma de entender la

embriología
Se presentó en Madrid un informe científico sobre la comunicación entre madre e
hijo durante el embarazo

Los progresos científicos hacen muchas veces que queden obsoletas leyes que se
adoptaron sobre la base de conocimientos menos avanzados. Pero no en todos los casos
los legisladores muestran la misma receptividad ante lo que dice la ciencia.

Hace dos semanas el Parlamento británico se encendió en un intenso debate por la Ley
de Embriología y Fertilidad. Los adelantos de la medicina hacían necesaria una
adecuación de la normativa a las nuevas investigaciones. Los líderes de los partidos
dejaron que los diputados votaran en conciencia.

También a finales del mes de mayo, el Bundestag alemán sostuvo un debate en el que se
revisaron los límites a la investigación con células madre embrionarias. Nuevamente se
acudió a la libertad de voto entre los parlamentarios.

Italia lleva meses envuelta en discusiones sobre el aborto, reabiertas por la llamada que
Giuliano Ferrara, un periodista y político agnóstico, hizo a las Naciones Unidas para
que adaptara su Declaración de Derechos a los nuevos descubrimientos médicos sobre
el principio de la vida humana.

En España, solo los flagrantes abusos cometidos por las clínicas abortistas o algunas
declaraciones hechas en el contexto electoral han sido capaces de mantener la cuestión
del aborto en el debate político.

Y no es porque la ciencia esté parada. En todos los sitios hay avances, y muy
importantes, que desvelan luces nuevas suficientes como para que los legisladores
tomaran cartas en el asunto. La semana pasada se presentó en Madrid un informe
científico sobre la comunicación materno-filial en el embarazo, realizado por la
Universidad de Navarra. Se titula “Células madre y vínculo de apego en el cerebro de la
mujer” y ha reunido a expertos en neurobiología, neuroimagen, psiquiatría, sociología y
biología molecular. Se trata de un retrato de los lazos que se crean entre una mujer y su
hijo desde los primeros días de la gestación.

Diálogo precoz

La técnica de la neuroimagen permite esclarecer los procesos emocionales que unen a la


madre con su hijo. Por ejemplo, con tan solo quince días de vida el embrión es capaz de
reducir el estrés de la madre mediante la desactivación del cortisol, una de las hormonas
que lo favorecen.

Igualmente, se silencian todas las células maternas que generarían el natural rechazo
ante el embrión como un cuerpo extraño. Así lo explica una de las autoras del informe,
Natalia López Moratalla, catedrática de Bioquímica de la Universidad de Navarra y
especialista en la tolerancia inmunológica en el embarazo: “Se establece un diálogo
molecular que hace que el sistema inmunológico de la madre no rechace al feto. El
embrión es un 50% materno y un 50% paterno, por lo que el organismo de la madre
debería rechazarlo, cosa que no sucede, lo que no significa que el embrión deje de ser
extraño a la madre”.

Más tarde, entre las ocho y las dieciséis semanas, las señales que envía el feto en este
diálogo molecular estimulan la producción de neurotransmisores cerebrales en la madre,
como la oxitocina (la llamada hormona de la confianza), dando lugar a lo que se conoce
como vínculo de apego. Esa hormona alcanzará altas dosis en momentos clave de la
relación de confianza materno-filial, como el parto o la lactancia. También se produce
en dosis altas cuando el niño da las conocidas patadas en el vientre de la madre.

Cuidados de niño

Cada vez resulta más claro que hay una especie de simbiosis entre madre e hijo. Pues no
solo la madre cuida del hijo: también él le presta servicios.

La convivencia de nueve meses hace que algunas células de la sangre del feto y de la
placenta pasen a la circulación materna. Estas células madre fetales permanecen en
determinados nichos, sobre todo en la médula ósea, para después distribuirse por
distintos órganos maternos y contribuir en los procesos de reparación, hasta el punto de
que “se han encontrado células madre fetales de varón, portadoras del cromosoma Y, en
el corazón de mujeres que padecían enfermedades cardiacas. Es decir, las células del
hijo han contribuido a reparar el defecto materno”, afirma López Moratalla.

El estudio recoge artículos publicados en las principales revistas científicas (Nature,


Proceedings, Science, Journal of Pediatric Surgery y otras) desde el año 2002 que están
cambiando la forma de entender la embriología. Los hallazgos están ya asentados en la
comunidad científica, pero son desconocidos en ámbitos ajenos a los especialistas. El
objetivo de este equipo interdisciplinar de investigadores es facilitar la divulgación
científica. Y es que solo si se conoce el qué, el cómo y el porqué de las cosas, podrán
tomarse decisiones legislativas acertadas con respecto a tan cruciales asuntos.

http://www.aceprensa.com/articles/recientes-avances-cambian-la-forma-de-entender-la-
embriologia/

http://www.slideshare.net/dediego/embriologa-uph-teora08

Estudiantes Tecnología Médica 2º año

Curso de Embriología:

Beitia, Aneth

Lezcano, Katherine

Potrebbero piacerti anche