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Luz: Las semillas en su germinación se comportan de manera diferente a luz, aquellas que
necesitan luz se denominan fotoblásticas positivas (como la lechuga), tambien tenemos las
semillas afotoblásticas que les es indiferente la presencia de luz como las cucurbitaceas (auyama,
melon, patilla, entre otras) y la gran mayoria incluyendo la de cannabis son fotoblásticas negativas,
el pigmento fotoreceptor de las semillas se denomina fitocromo
Humedad: Para que se produzca la germinación son necesarios algunos requisitos minimos y uno
muy importante es la presencia de agua. este induce la activación de las tres etapas de
germinación: la absorción de agua(imbibición), reactivacion enzimatica (activación metabolica) y
división y elongación celular.por lo tanto los adecuados niveles de humedad permiten la
rehidratación del protoplasma celular y la turgencia de la semilla lo que provoca la ruptura de los
tegumentos y catapun vemos salir la raiz :D
Estado del desarrollo del embrión: Este es el factor mas importante, un embrion poco
desarrollado o mal desarrollado por mas que hagamos he intentemos no germinara, este debe
alcanzar su madurez dentro de la semilla y ademas debe cumplir un periodo de reposo o latencia
Reservas alimenticias: Estas deben ser otorgadas por la planta madre de la semilla y almacenadas
en los cotiledones que permiten el uso de nutrientes necesarios para el desarrollo radicular y la
elongación del tallo para expulsar hacia arriba los cotiledones y comienza así la planta a adquirir su
autonomía metabólica y convertirse en ser autótrofo
Bibliografia
https://www.arcuma.com/dr.cannabis/factores-que-influyen-en-la-germinacion-y-sus-
recomendacione.html
Factores internos.
Entre los factores internos que afectan a la germinación estudiaremos la madurez que presentan
las semillas y la viabilidad de las mismas.
Decimos que una semilla es madura cuando ha alcanzado su completo desarrollo tanto
desde el punto de vista morfológico como fisiológico.
La madurez morfológica se consigue cuando las distintas estructuras de la semilla han
completado su desarrollo, dándose por finalizada cuando el embrión ha alcanzado su
máximo desarrollo. También, se la relaciona con la deshidratación de los diferentes tejidos
que forman la semilla. La madurez se suele alcanzar sobre la misma planta, sin embargo,
existen algunas especies que diseminan sus semillas antes de que se alcance, como ocurre
en las semillas de Ginkgo biloba o de muchas orquídeas, que presentan embriones muy
rudimentarios, apenas diferenciados.
Aunque la semilla sea morfológicamente madura, muchas de ellas pueden seguir siendo
incapaces de germinar porque necesitan experimentar aún una serie de transformaciones
fisiológicas. Lo normal es que requieran la pérdida de sustancias inhibidoras de la
germinación o la acumulación de sustancias promotoras. En general, necesitan reajustes
en el equilibrio hormonal de la semilla y/o en la sensibilidad de sus tejido para las distintas
sustancias activas.
La madurez fisiológica se alcanza al mismo tiempo que la morfológica, como en la mayoría
de las especies cultivadas; o bien puede haber una diferencia de semanas, meses y hasta
años entre ambas.
La viabilidad de las semillas es el período de tiempo durante el cual las semillas conservan
su capacidad para germinar. Es un período variable y depende del tipo de semilla y de las
condiciones de almacenamiento.
Atendiendo a la longevidad de las semillas, es decir, el tiempo que las semillas
permanecen viables, pueden haber semillas que germinan, todavía, después de decenas o
centenas de años; se da en semillas con una cubierta seminal dura como las leguminosas.
El caso más extremo de retención de viabilidad es el de las semillas de Nelumbo nucifera
encontradas en Manchuria con una antigüedad de unos 250 a 400 años.
En el extremo opuesto tenemos las que no sobreviven más que algunos días o meses,
como es el caso de las semillas de arce (Acer), sauces (Salix) y chopos (Populus) que
pierden su viabilidad en unas semanas; o los olmos (Ulmus) que permanecen viables 6
meses.
En general, la vida media de una semilla se sitúa entre 5 y 25 años.
Las semillas pierden su viabilidad por causas muy diversas. Podríamos pensar que mueren
porque agotan sus reservas nutritivas, pero no es así, sino que conservan la mayor parte
de las mismas cuando ya han perdido su capacidad germinativa.
Una semilla será más longeva cuanto menos activo sea su metabolismo. Esto, a su vez,
origina una serie de productos tóxicos que al acumularse en las semillas produce a la larga
efectos letales para el embrión. Para evitar la acumulación de esas sustancias bastará
disminuir aún más su metabolismo, con lo cual habremos incrementado la longevidad de
la semilla. Ralentizar el metabolismo puede conseguirse bajando la temperatura y/o
deshidratando la semilla. Las bajas temperaturas dan lugar a un metabolismo mucho más
lento, por lo que las semillas conservadas en esas condiciones viven más tiempo que las
conservadas a temperatura ambiente. La deshidratación, también alarga la vida de las
semillas, más que si se conservan con su humedad normal. Pero la desecación tiene unos
límites; por debajo del 2%-5% en humedad se ve afectada el agua de constitución de la
semilla, siendo perjudicial para la misma.
En resumen podemos decir que, para alargar más tiempo la vida de una semilla, ésta debe
conservarse en las siguientes condiciones: mantenerla seca, dentro de unos límites;
temperaturas bajas y, reducir al mínimo la presencia de oxígeno en el medio de
conservación.
Factores externos.
Entre los factores ambientales más importantes que inciden en el proceso de germinación
destacamos: humedad, temperatura y gases.
Humedad.
La absorción de agua es el primer paso, y el más importante, que tiene lugar durante la
germinación; porque para que la semilla recupere su metabolismo es necesaria la
rehidratación de sus tejidos.
La entrada de agua en el interior de la semilla se debe exclusivamente a una diferencia de
potencial hídrico entre la semilla y el medio que le rodea. En condiciones normales, este
potencial hídrico es menor en las semillas secas que en el medio exterior. Por ello, hasta
que emerge la radícula, el agua llega al embrión a través de las paredes celulares de la
cubierta seminal; siempre a favor de un gradiente de potencial hídrico.
Aunque es necesaria el agua para la rehidratación de las semillas, un exceso de la misma
actuaría desfavorablemente para la germinación, pues dificultaría la llegada de oxígeno al
embrión.
Temperatura.
Luz
Gases.
http://www.euita.upv.es/varios/biologia/temas/tema_17.htm#Factores%20que%20afectan%20a
%20la%20germinaci%C3%B3n
Proceso de Germinación
Esquema de las fases de la imbibición de agua por una semilla, medida mediante el incremento
en peso fresco durante el proceso de germinación (Figura modificada de Azcón--Bieto, J. y Talón,
M. 1993. “Fisiología y Bioquímica Vegetal”. Interamericana/ McGraw-Hill. ).
La duración de cada una de estas fases depende de ciertas propiedades de las semillas,
como su contenido en compuestos hidratables y la permeabilidad de las cubiertas al agua
y al oxígeno. Estas fases también están afectadas por las condiciones del medio, como el
nivel de humedad, las características y composición del sustrato, la temperatura, etc. Otro
aspecto interesante es la relación de estas fases con el metabolismo de la semilla. La
primera fase se produce tanto en semillas vivas y muertas y, por tanto, es independiente
de la actividad metabólica de la semilla. Sin embargo, en las semillas viables, su
metabolismo se activa por la hidratación. La segunda fase constituye un período de
metabolismo activo previo a la germinación en las semillas viables o de inicio en las
semillas muertas. La tercera fase se produce sólo en las semillas que germinan y
obviamente se asocia a una fuerte actividad metabólica que comprende el inicio del
crecimiento de la plántula y la movilización de las reservas. Por tanto los factores externos
que activan el metabolismo, como la temperatura, tienen un efecto estimulante en la
última fase.
En las dos primeras fases de la germinación los procesos son reversibles, a partir de la fase
de crecimiento se entra en una situación fisiológica irreversible. La semilla que haya
superado la fase de germinación tendrá que pasar a la fase de crecimiento y originar una
plántula, o por el contrario morir.
http://www.euita.upv.es/varios/biologia/temas/tema_17.htm#Factores%20que%20afectan%20a
%20la%20germinaci%C3%B3n
Latencia y dormición Si tenemos en cuenta todo lo dicllo hasta ahora veremos que cuando ^ma
semilla viva, que conserva su poder germinativo, no germina puede deberse a dos causas. La
primera de estas causas es que las condiciones ambientales que rodean a la semilla no son
apropiadas para la germinación, no dispone de agua, hace demasiado frío o demasiado calor,
necesita luz y no la tiene o necesita oscuridad y está expuesta a la luz. A pesar de esa imposibilidad
para germinar, impuesta por el ambiente, la semilla conserva su capacidad germinativa y su
viabilidad en espera de condiciones ambientales apropiadas; es decir, la semilla está latente. Se
llama, pues, latencia a la incapacidad de una semilla para germinar, debida a que las condiciones
ambientales no son las apropiadas para hacerlo, incapacidad que va acompañada del
mantenimiento de la viabilidad y de poder germinativo, que se manifestará cuando dichas
condiciones ambientales sean propicias para la germinación. La segunda de estas causas es que
exista una o varias condiciones dentro de la propia semilla que le impida germinar a pesar de que
las condiciones ambientales sean apropiadas para la germinación; se dice entonces que la semilla
está durmiente y conservará su viabilidad basta que esas condiciones interiores cambien y la
semilla pueda germinar bajo condiciones ambientales apropiadas. Se llama, pues, dormición a la
incapacidad de algunas semillas viables para germinar bajo condiciones ambientales apropiadas
para que se dé su germinación, incapacidad que se perderá después de un período de tiempo más
o menos largo. La semejanza entre latencia y dormición es su resultado; en ambos casos una
semilla viable no puede germinar. La diferencia entre ambas situaciones está en las causas que las
originan
Tipos de latencia Si recordamos las condiciones ambientales que necesitaba una semilla para
germinar podremos deducir los tipos de latencia que pueden presentarse. Una semilla nunca
podrá germinar si no dispone de agua para embeber y permanecerá latente aunque el resto de las
condiciones externas sean adecuadas para su germinación. También un exceso de agua puede
inhibir la germinación de una scmilla; por 9 ejemplo, si se encuentra totalmente inmersa en el
agua, en ese caso la semilla no podrá realizar los intercambios gaseosos con el medio necesitados
para la respiración. Temperaturas excesivamente altas o bajas pueden hacer que una semilla sea
incapaz de germinar aunque disponga de agua en la cantidad adecuada, la semilla quedará latente
por sufrir una termo inhibición. Asimismo, una semilla que necesita germinar en la oscuridad
quedará en estado latente por la presencia de la luz, pues su germinación sufrirá una
fotoinhibición
Tipos de dormición Dependen del tipo de condición de la semilla que esté provocando la
dormición. Los principales tipos son: Dormición por impermeabilidad: Debida a que las
cubiertas seminales más externas son impermeables al agua, al oxígeno o a ambas. Las
semillas no germinarán hasta que estas cubiertas se ablanden por efecto del agua o de
hongos, se rompan por alternancia de frío y calor o sean corroídas por un ácido en el
tracto digestivo de un animal. Las cubiertas impermeables se presentan en las
leguminosas. Dormición embrional: Debida a que el embrión no ha alcanzado la madurez
fisiológica, es rudimentario o inmaduro. Muchas especies de orquídeas caen a tierra
cuando el embrión no está aún bien desarrollado. Necesitarán un período de tiempo hasta
que éste se desarrolle, diferencie y madure, y durante este período de tiempo la semilla
permanecerá durmiente. Dormición fisiológica: Es la que viven muchos tipos de semillas
que caen a tierra con el embrión perfectamente desarrollado y maduro y con sus
envueltas externas totalmente permeables. Estas semillas requieren un período de tiempo
después de ser arrojadas por la planta antes de poder germinar, y al conjunto de cambios
que se producen en la semilla durante este período de tiempo se Ilama posmaduración.
Las causas que provocan este tipo de dormición son complejas y se deben a la ^siología de
la semilla, es decir, al funcionamiento del metabolismo de la semilla.
Las principales teorías sobre las causas de este tipo de dormición son:
Impermeabilidad de las membranas celulares: A pesar de que el agua sea absorbida por la semilla
las células que forman la parte no embrional de la misma la retienen en su interior,
evitando que ésta llegue al embrión. A lo largo de la posmaduración la conductividad de
las membranas celulares va variando hasta permitir que el agua llegue hasta el embrión.
Hay que destacar que la dormición fisiológica es la que varios autores reconocen como única y
verdadera dormición, y dentro de ella se pueden reconocer dos tipos.
La latencia y la dormición son dos mecanismos que ayudan a la semilla a germinar en los
momentos más adecuados para que las nuevas plantas tengan las máximas posibilidades
de supervivencia.
La latencia asegura que la semilla germine en un momento en que las condiciones ambientales
sean propicias para el desarrollo de la nueva planta. La dormición asegura la supervivencia
de la espccie frente a cambios ambientales imprevistos, tan frecuentes en la naturaleza.
Por ejemplo, si una helada tardía mata las plantitas recién establecidas, siempre habrá un nuevo
grupo de semillas, con su dormición ya terminada, dispuestas a germinar en cuanto las
condiciones ambientales se regularicen. Si unos días primaverales en pleno invierno hacen
que las semillas no durmientes germinen, dando lugar a plantas con pocas oportunidades
de sobrevivir, gracias a la dormición habrá semillas que no puedan germinar en ese
momento, pese a que las condiciones ambientales sean apropiadas y que lo harán durante
la primavera siguiente, cuando hayan perdido su dormición, asegurando el desarrollo de
esa especie.
No todas las semillas de una misma especie son durmientes o no durmientes, sino que una misma
planta puede formar semillas con distintas características; así unas semillas serán
durmientes y otras no, y, dentro de las que son durmientes, unas perderán pronto su
dormición y otras tardarán mucho en completar el proceso de postmaduración.
Por todo lo dicho anteriormente podemos darnos cuenta de que las especies cuyas semillas
pueden tener dormición son capaces de sobrevivir en ambientes muy variables y difíciles,
como es el caso del agrícola.
https://www.mapa.gob.es/ministerio/pags/biblioteca/hojas/hd_1992_03.pdf
Aplicación exógena de hormonas: la dormición de muchas semillas puede ser superada mediante
la aplicación de giberelinas, citoquininas y/o etileno. Semillas que muestran un
requerimiento de almacenamiento en sitio seco, o bien requerimiento de frío o períodos
luminosos, generalmente responden bien a la aplicación de giberelinas. Un número menor
de tipos de dormición puede ser superado por las citoquininas. El etileno puede estimular
la germinación en algunas especies como lechuga y aumenta también el porcentaje de
germinación respecto al obtenido sólo con citoquinina o giberelinas. Aplicaciones con
ácido Abcísico inhiben la germinación y el crecimiento de muchas especies vegetales. Se
han observado cambios en los niveles endógenos de hormonas promotoras que aumentan
tanto las Giberelinas como citoquinas, cuando las semillas reciben los tratamientos
adecuados de luz, frío o almacenamiento en seco. Se ha observado también que la
regulación de la dormición de las semillas, no solo reside en la ausencia o no de
promotores, sino también por la presencia de inhibidores. Así las citoquininas tienen la
capacidad de aliviar los efectos provocados por varios inhibidores (ácido abscísico,
cumarina) en las semillas y otros órganos vegetales
Regulación hormonal del reposo Existe cada vez más evidencia acerca del rol que juegan las
hormonas vegetales tanto en la regulación de la dormición de las yemas como de las
semillas y otros órganos vegetales. UT. Nº 11. Germinación y latencia de semillas y yemas
– Cátedra de Fisiología Vegetal – FCA-UNER Pág. [21] El ácido abscísico, las giberelinas y
citoquininas se comportan como antagonistas en muchos test biológicos. Esto ha
posibilitado la hipótesis de que la dormición está regulada por la interacción entre
inhibidores y promotores del crecimiento. Experimentos realizados mediante la aplicación
exógena de hormonas han demostrado que la dormición de las yemas puede ser vencida
por las giberelinas y citoquininas. Así, la aplicación de ácido abscísico en hojas y regiones
apicales de Betula pubescens provocaba la formación de yemas terminales durmientes
bajo condiciones de día largo.
Giberelina: La giberelina es una fitohormona. Se producen en la zona apical, frutos y semillas. Sus
funciones son: i) interrumpir el periodo de latencia de las semillas, haciéndolas germinar,
ii) Inducir la brotación de yemas y iii) promover el desarrollo de los frutos (floración). Es
opuesta a otra hormona vegetal denominada ácido abscísico.
http://www.fca.uner.edu.ar/files/academica/deptos/catedras/WEBFV_2010/mat_did/Ut_11
GLSY.pdf
O en dos fases:
1) Iniciación de la germinación (finaliza al emitir la radícula)
2) Movilización de reservas (finaliza con la nascencia) y crecimiento de la plántula.
https://propagacionvegetal.wordpress.com/por-semilla/la-germinacion/
7) ¿qué son semillas fotoblásticas positivas, semillas afotoblásticas y
fotoblásticas negativas?
Las que requieren luz se llaman “semillas fotoblásticas”.
En los casos que la luz regula la respuesta, si la luz ayuda se llaman “fotoblásticas positivas”
http://www.fca.uner.edu.ar/files/academica/deptos/catedras/WEBFV_2010/mat_did/Ut_11GLSY.
pdf
En los embriones de las semillas, diferencia los tejidos vivos de los muertos sobre la base de la
actividad de enzimas deshidrogenasas (enzimas de la respiración).
Que una semilla sea viable, nos indica que es capaz de germinar y producir una plántula normal,
sin embargo podría estar dormida, y en ese caso no germinaría inmediatamente.
Procedimiento de análisis
1. Hidratación: las semillas deben embeberse para iniciar la actividad delas enzimas
deshidrogenasas; además así se ablandan los tejidos, y es más fácil cortarlos.
2. Corte o pinchazo: permite el contacto del TZ con los tejidos del embrión. En algunas especies,
por ejemplo alfalfa, el corte no es necesario, y el TZ es adicionado a la semilla intacta.
4. Evaluación: en base al patrón de tinción e intensidad. El analista debe estar familiarizado con la
anatomía de la semilla de la especie que está evaluando.
https://inta.gob.ar/sites/default/files/script-tmp-
el_anlisis_de_tetrazolio_en_el_control_de_calidad_de_.pdf