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Roque Dalton

(San Salvador, 1935 - cerca de Quezaltepeque, 1975) Poeta salvadoreño


cuya obra, de estilo coloquial y socialmente comprometida, fue partícipe de
la renovación de la lírica latinoamericana de la década de 1960. Nacido en
la popular barriada de San José de la capital salvadoreña, el joven Roque
Dalton cursó sus primeros estudios en los colegios religiosos Santa Teresita
del Niño Jesús y Bautista, para ingresar posteriormente en el Externado de
San José, donde en 1953 obtuvo el graduado como bachiller.

Roque Dalton

Desde muy joven manifestó una acusada conciencia social que le llevó a
militar en los movimientos revolucionarios que luchaban por las mejoras
sociales en Centroamérica. En 1956, mientras estudiaba Leyes en la
Universidad de El Salvador, fue en uno de los miembros fundadores del
Círculo Literario Universitario, y en 1957 se desplazó hasta Moscú como
delegado salvadoreño en el Sexto Festival de la Juventud y los Estudiantes
por la Paz y la Amistad. Previamente había estado en Chile para cursar
estudios superiores de Jurisprudencia (1953), carrera que complementó en
su país natal con la de Ciencias Sociales (1954-1959), y en la Universidad
de México con la de Etnología (1961).

Por aquel entonces ya era Roque Dalton una de las voces jóvenes más
prometedoras de la poesía hispanoamericana contemporánea. Algunas de
sus primeras composiciones habían sido galardonadas en varias ediciones
del Premio Centroamericano de Poesía (1956, 1958 y 1959). En 1963, con
la publicación de uno de sus mejores poemarios, El turno del ofendido, se
consolidó como el poeta salvadoreño más relevante de su tiempo. La obra
fue distinguida con una mención honorífica en el certamen Casa de las
Américas, certamen que siete años después ganaría con el poemario Taberna
y otros lugares (1969).

Su actividad política corría pareja a su dedicación a la creación literaria.


Miembro del Partido Comunista Salvadoreño desde 1958, Dalton ya había
sido encarcelado en varias ocasiones en su país natal cuando, en 1961, se
vio abocado a tomar el camino del exilio. Emprendió entonces un periplo
que le llevó a residir y trabajar en Guatemala, México, Checoslovaquia y
Cuba, estancias en el extranjero que solía interrumpir con esporádicas
visitas a su país natal. Se ganaba la vida con los ensayos y artículos que
iba publicando, lo que le permitió viajar también, unas veces por motivos
periodísticos y otras por activismo político, a las Repúblicas de Vietnam y
Corea, y a numerosos países europeos y sudamericanos.

Por desavenencias con los dirigentes izquierdistas de su país, en 1967


abandonó el Partido Comunista y se mantuvo al margen de su militancia
política hasta que, en 1973, regresó a El Salvador para alistarse en las filas
del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), donde tomó el pseudónimo
guerrillero de Julio Delfos Marín. Tras colaborar activamente con esta
organización clandestina partidaria del enfrentamiento directo y la lucha
armada, por oscuras razones que nunca se han llegado a aclarar fue
perseguido, juzgado y ejecutado por sus propios compañeros de armas,
que abandonaron su cuerpo en un paraje agreste donde fue despedazado y
devorado por las fieras. Esta ejecución desencadenó airadas protestas en
los círculos intelectuales, especialmente entre los escritores
hispanoamericanos, abanderados en su condena por el argentino Julio
Cortázar.

La poesía de Roque Dalton, aunque de rasgos coloquiales, se sustentó en la


fuerza de las palabras y del ethos implicado en ellas, como en los siguientes
versos: "La vida paga sus cuentas con tu sangre / y tú sigues creyendo que
eres un ruiseñor. / Cógele el cuello de una vez, desnúdala, / túmbala y haz
de ella tu pelea de fuego, / rellénale la tripa majestuosa, préñala, / ponla a
parir cien años por el corazón. / Pero con lindo modo, hermano, / con un
gesto propicio a la melancolía". En sus versos subyace un espíritu rebelde
que plantea temas de fuerte contenido social, tratados de una manera a
veces tierna y a veces irónica y sarcástica, cuyo resultado es de un enorme
lirismo.

Sus influencias fueron el surrealismo y las vanguardias europeas en


general, la poética conversacional latinoamericana (sobre todo voces como
la del chileno Nicanor Parra, que habían traído nuevos aires irónicos a la
lírica del continente), la poesía moderna de expresión inglesa, los clásicos
en lengua española y algunos poetas contemporáneos, como el
guatemalteco Otto René Castillo, el cubano R. Fernández Retamar, el
nicaragüense Ernesto Cardenal o el argentino Juan Gelman.

Una parte de su obra ahonda en las aproximaciones entre el relato breve y


el poema en prosa, tentativa en la que alcanzó buenos resultados. Un
equilibrio entre calidad del lenguaje, ingenio, intelecto, amor humanista y
visión política confluyen en sus mejores títulos, como en su célebre Taberna y
otros lugares (1969), merecedor del premio Casa de las Américas, tal vez su
libro más importante. Antes había publicadoLa ventana en el rostro (1961), El
turno del ofendido (1963), El Mar (1964) yPoemas (1968). Luego publicó los
libros Las historias prohibidas de pulgarcito(1975, poesía); y Pobrecito poeta que era
yo (1976, novela).
Póstumamente aparecieron algunos títulos inéditos y varias recopilaciones
antológicas de sus versos, como Poemas clandestinos (1980), Un libro rojo para
Lenin (1986), Un libro levemente odioso (1988), En la humedad del secreto(antología
compilada por Rafael Lara Martínez, San Salvador, 1994) y Antología
mínima (a cargo de Luis Melgar Brizuela, San José de Costa Rica, 1998). En
el campo del ensayo, publicó una monografía titulada El Salvador (1963), un
ensayo sobre César Vallejo (1963) y un volumen de testimonios aparecido
bajo el epígrafe de Miguel Mármol (1972). Compuso además algunas piezas
teatrales, comoCaminando y cantando (publicada en 1976) y Los
helicópteros (escrita en colaboración con José Napoleón Rodríguez, e impresa
en 1980).
Salvador Salazar Arrué

(Sonsonate, 1899 - San Salvador, 1976) Artista y escritor


salvadoreño también conocido por el seudónimo de Salarrué, una de las
voces fundamentales de la literatura hispanoamericana por su concisión y
fuerza en la recreación de la realidad de su pueblo.

Su identificación con el mundo del campesino salvadoreño y sus


exploraciones en los asuntos esotéricos orientales y de ciencia ficción han
llevado a valorarlo como uno de los iniciadores de la nueva narrativa
latinoamericana y como destacado exponente de la cultura de su país.
Sus Cuentos de barro (1933), relatos de extrema brevedad, contribuyeron a
forjar la estética del cuento hispanoamericano.

Instalado con su familia en la capital salvadoreña desde los ocho años, a


los diez años publicó ya sus primeros textos en el Diario de El Salvador.
Formado en el Liceo Salvadoreño, el Instituto Nacional y la Academia de
Comercio, estudió además pintura y dibujo con el maestro greco-ruso Spiro
Rossolimo, y más tarde, gracias a una beca, en la Corcoran School of Art de
Washington, donde con veinte años realizó su primera exposición individual
en la Hisada's Gallery.

De regreso a El Salvador, contrajo nupcias con la artista Zelie Lardé y


comenzó a prestar servicios laborales en la Cruz Roja. En 1928 fue
contratado como redactor jefe del diario Patria, dirigido por los
escritores Alberto Masferrer y Alberto Guerra Trigueros. Publicó allí artículos y
su primeros relatos, reagrupados luego en Cuentos de cipotes. Fundó y dirigió
las revistas Amatl y Espiral; a lo largo de su vida colaboraría en numerosas
rotativos y revistas literarias y artísticas.

Miembro de la Sociedad de Amigos del Arte (1935-1939), durante varios


años trabajó como agregado cultural de la delegación diplomática en
Estados Unidos, y participó en la Conferencia de Educación organizada en
julio de 1941 por la Universidad de Michigan. Alternó la literatura con la
pintura; se recuerda especialmente el éxito de sus exposiciones en Nueva
York y San Francisco (1947-49) y de algunas de las que realizó
posteriormente en su país y de nuevo en Estados Unidos entre 1958 y
1963. Otra de sus facetas artísticas fue la de compositor: se le deben más
de un centenar de canciones.

En 1963 ocupó el puesto de Director General de Bellas Artes, y en 1967


fundó, en el parque Cuscatlán, la Galería Nacional de Arte (actualmente
conocida como Sala Nacional de Exposiciones), centro cuya dirección
asumió. Desde 1973 hasta su fallecimiento fue asesor cultural del gabinete
del Director General de Cultura, Carlos de Sola.

La obra literaria de Salarrué lo ha colocado en el justo papel de clásico no


sólo de la literatura salvadoreña, sino también de la cuentística en
castellano. Su peculiar costumbrismo es más bien un énfasis en la lengua
de su pueblo, una visión tierna de los pequeños seres que atraviesan, con
su ternura y miseria, los paisajes de su país. Escribió acerca de campesinos
y desplazados de las urbes, identificándose con sus problemas y rasgos, así
como con su materia verbal, que reproduce la tensión idiomática entre los
dialectos, las lenguas indígenas y el castellano.

En su caso también se ha hablado de realismo mágico: un buen ejemplo de


ello es el célebre cuento "El anillo de Oricalco", que desarrolla el tema de la
muerte, los indios magos, y el tópico del anillo encantado. Sus primeras
novelas fueron El Cristo negro (1927) y El señor de la burbuja (1927).
Con Oyarkandal (1929), recopilación de relatos, dio a conocer sus primeros
cuentos fantásticos. Entre sus títulos posteriores deben
destacarse Remontando el Uluán (1932),Cuentos de barro(1933), Conjeturas en la
penumbra (1934), Eso y más (cuentos, 1940), Cuentos de cipotes (1945; 1961,
edición íntegra), Trasmallo (cuentos, 1954), La espada y otras
narraciones (1960), La sed de Sling Bader (novela, 1971), Catleya luna(novela,
1974) y Mundo nomasito (poemas, 1975). Entre 1969 y 1970, a instancias de
la editorial de la Universidad de El Salvador, el poeta y narrador
salvadoreño Hugo Lindo se encargó de prologar los dos tomos de las Obras
escogidas de Salarrué, quien intervino directamente en la selección de los
textos.
Oswaldo Escobar Velado

(Santa Ana, 1919 - 1961) Poeta salvadoreño. La primera


etapa de su producción siguió los cauces del romanticismo, pero
posteriormente desarrolló una obra más realista, comprometida y social.

En el campo de la política, formó parte del "grupo de los seis", que luchó
contra el dictador Maximiliano H. Martínez. Vivió desterrado en Guatemala
entre 1944 y 1945, y más tarde en Costa Rica. Abogó por la unión de
Centroamérica en una sola entidad. En los últimos años de su vida, sufrió
un cáncer en la lengua que le obligó a trasladarse en varias ocasiones a
Texas, donde las intervenciones quirúrgicas no lograron sanarle.

Su poesía es un equilibrio de belleza lírica y compromiso con su tiempo


histórico. Debatiéndose siempre entre el posmodernismo vanguardista, el
romanticismo y el compromiso social y político, su lírica resulta difícil de
ubicar. Entre sus libros destacan Poemas con los ojos cerrados (1943), Diez sonetos
para mil y más obreros (1950), Volcán en el tiempo (1955), Árbol de lucha y
esperanza (1951),Cristoamérica (1958), Cubamérica (1960), Antología
Poética (1967) y Patria exacta y otros poemas (1978).
Esbozo biográfico

Nació en Estelí (Nicaragua), el 11 de mayo de 1924, como parte del matrimonio del doctor Daniel
Alegría R. y de la santaneca Ana María Vides. Trasladada a El Salvador cuando sólo contaba con
nueve meses de edad, realizó sus estudios primarios y secundarios en el colegio santaneco "José
Ingenieros", los que combinó con la lectura personal de los clásicos franceses. En 1943, partió
becada hacia la Universidad de Loyola (New Orleans, Estados Unidos), pero finalizó su Bachelor of
Arts en Filosofía y Letras en la George Washington University (Washington D. C., 1948).

Entre sus traducidas a otros idiomas- se encuentran: Anillo de silencio (poesía, México, 1948,
recopilado por Juan Ramón Jiménez y su esposa Zenobia, con prólogo de José Vasconcelos);Suite
de amor, angustia y soledad (poesía, San Rafael, Mendoza, Argentina, 1951, con prólogo de Rafael
Baeza Flores y carátula del fotógrafo Juan Pí. De este libro, la autora ha renegado y hasta ha
sustraído ejemplares de las casas de sus amigos); Vigilias (poesía, México, 1953, con portada hecha
por Elvira Gascón); Acuario(poesía, Santiago de Chile, 1955); Tres cuentos (narrativa infantil, San
Salvador, 1958, con portada e ilustraciones interiores de Agustín Blancovaras. Una traducción al
inglés fue hecha por Helen Wohl Patterson); Huésped de mi tiempo (poesía, Buenos Aires, 1961);
New voices of Hispanic America (antología de poetas y cuentistas, en colaboración con su esposo,
Boston, Beacon Press, 1962, 226 págs.; reeditada en 1981); Vía única (poesía, Montevideo, Alfa,
1965) y Cenizas de Izalco (también en colaboración con su esposo, novela, 1966; ganó el segundo
lugar en el concurso Seix Barral, Barcelona, 1962; reeditada varias veces en El Salvador desde
1976).

Esos volúmenes se complementan con Aprendizaje (antología poética, San Salvador, 1970); Juego
de espejos (novela breve, revista Repertorio, Costa Rica, 1970); Pagaré a cobrar y otros poemas
(selección de varios libros poéticos, Barcelona, 1973); El detén (novela corta, Barcelona, 1977);
Sobrevivo (poesía, Premio Casa de las Américas, La Habana, 1978); La encrucijada salvadoreña
(ensayo, 1980); Suma y sigue (Madrid, 1981. Es una antología poética preparada y prologada por
Mario Benedetti),Álbum familiar (novela, San José, Costa Rica, 1982); Nicaragua, la revolución
sandinista: una crónica política 1855-1979 (ensayo, México D. F., 1982); No me agarran viva: la
mujer salvadoreña en la lucha (testimonio, México D. F., 1983); Para romper el silencio: resistencia
y lucha en las cárceles salvadoreñas (testimonios, México D. F., 1984); Pueblo de Dios y de
Mandinga (novela, México D. F., 1985); Despierta, mi bien despierta (novela, San Salvador, 1986);
La mujer del río Sumpul (poesía, Roldanillo, Colombia, 1987); Y este poema río (Managua, 1988)
yVariaciones en clave de mí (1988).

Se suman a los libros anteriores: Fuga de Canto Grande(testimonio, 1999. Somoza, expediente
cerrado. La historia de un ajusticiamiento (testimonio, Managua, 1993; El niño que buscaba a ayer
(narrativa juvenil, México D. F., 1996, segunda edición);Clave de mí (poesía, San José, Costa Rica,
1997, con prólogo de Mario Benedetti), Umbrales (poesía, San Salvador, 1997); Luisa en el país de
la realidad (prosas y poemas, 1987; San Salvador, 1997) y Saudade (poesía, Madrid, 1999); Esto
Soy yo (

La Universidad de Pittsburg le publicó, en ediciones bilingües,Flores del volcán/Flowers from the


volcano (1982, con traducción de Carolyn Forche) y Mujer del río/Woman of the river (1989, con
traducción de "Bud" Flakoll). Además, Claribel y su esposo fueron traductores y editores de On the
front line: guerrilla poems of El Salvador (Willimantic, Cubstone Press, 1989).Esto soy (Antología
Poética compilada por el poeta salvadoreño Luis Alvarenga e introducción de Gioconda Belli,
CONCULTURA, El Salvador, 2004)

El 19 de marzo de 1999, fue homenajeada por la Facultad de Humanidades de la Universidad


Centroamericana (UCA) de Managua (Nicaragua), en el marco del VII Congreso de Literatura
Centroamericana. En El Salvador, se le dedica, junto a Matilde Elena López, la VI Semana Nacional
de la lectura (19 al 24 de abril de 2004).
Alfredo Espino

(Edgardo Alfredo Espino Najarro; Ahuachapán, 1900 - San


Salvador, 1928) Poeta salvadoreño que a partir de la publicación de su
único libro, Jícaras Tristes, ha sido uno de los líricos más leídos en su país y
está considerado como uno de los autores clásicos de la literatura
centroamericana.
Nacido en el seno de una familia numerosa (segundo de ocho hermanos),
era hijo del también poeta Alfredo Espino, miembro de una destacada
dinastía de profesores, médicos y escritores. El joven Alfredo recibió una
esmerada formación académica que finalizó en 1927, cuando se doctoró en
la Facultad de Jurisprudencia y Ciencias Sociales de la Universidad de El
Salvador con una tesis sobre Sociología estética.

A muy temprana edad comenzó a publicar colaboraciones literarias en las


revistas Lumen y Opinión estudiantil y en los periódicos La Prensa y Diario
de El Salvador. Llevó una vida bohemia y disipada que le condujo a caer en
frecuentes crisis alcohólicas, en una de las cuales se quitó la vida cuando
contaba poco más de veintiocho años de edad. Sus restos mortales,
sepultados en primera instancia en el Cementerio General de San Salvador,
fueron después trasladados a la llamada Cripta de los Poetas, en el
camposanto de los Jardines del Recuerdo.

Sus composiciones, diseminadas en papeles sueltos y en distintas


publicaciones, fueron recopiladas por su padre con el fin de llevarlas a la
imprenta. Una parte de esta recopilación, prologada por un texto
esclarecedor del poeta Alberto Masferrer, fue publicada en 1932 en el diario
Reforma social. A causa de su repercusión, en 1936 vio la luz en forma de
libro una compilación más completa y representativa de su obra que se
tituló Jícaras tristes.

La poesía de Alfredo Espino es un equilibrio de romanticismo y expresión


mesurada, que canta al paisaje con imágenes de gran poder descriptivo y
plasticidad, siempre desde una percepción tierna de los seres y las cosas de
su tierra. Buena parte de su obra es un canto a la región de Cuzcatlán.
Prefirió la sencillez y la métrica tradicional para sus modestas pretensiones
líricas y escribió romances y sonetos, aunque no desechó el verso libre. Sus
poemas evocan los árboles, los frutos, el aroma de la noche, los colores, los
niños y lo maternal.

Desde su publicación, sus poemas fueron acogidos y difundidos con


entusiasmo por los lectores salvadoreños, que enseguida se identificaron
con su líricas descripciones paisajísticas. Así, Jícaras tristes se convirtió en
una de las lecturas obligadas en los programas educativos salvadoreños, y
desde instancias gubernamentales se promovió su edición y difusión.
José Rutilio Quezada
José Rutilio Quezada

Archivo:Jose R Quezada.jpg

Mini pic of Dr. Rutilio Quezada

Nombre de
José Rutilio Quezada Escobar
nacimiento

Nacimiento 30 de septiembre de 1930


Quezaltepeque, La Libertad, El
Salvador Americaa CentroAmerica

Nacionalidad Salvadoreño

Educación Escuela Normal Superior, Universidad de


California, Riverside

Ocupación Escritor, botánico, entomólogo y científico

Años activo Siglo XX, Actualidad

Área Novela
Botánica

Obras La última guinda


notables Dolor de Patria

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José Rutilio Quezada, (Quezaltepeque, La Libertad, 30 de septiembre de 1930, actualidad)


es un escritor, botánico y científicosalvadoreño. Trabaja en el campo de la botánica y la
entomología, pero también se ha destacado como novelista, destacando su primera
novela Dolor de Patria seguida de su segunda novela La última guinda.
nfancia, pre adolescencia y juventud[editar]
El pequeño pueblo de aquellos años, donde vivió con su padre,Luis Bernardo Quezada,y su
madre, María Antonia Escobar, le aportó sensaciones y experiencias que iban a formar un
espíritu inquisitivo. Muchos de los sucesos de esa época han quedado sólidamente
registrados en la memoria del autor, las cuales fueron plasmadas en su primera novela Dolor
de Patria.

Rutilio creció entre la atención y cariño de sus seis hermanos y sus dos padres. Ambos eran
correctos en su comportar y le inculcaron firmes principios morales a él y a sus hermanos. El
era el benjamín de la casa y toda la familia le enseñó a leer y escribir, por eso antes de que
Rutilio entrara a primer grado ya sabía leer y escribir”. El padre de Rutilio, al morir les dejó de
herencia a todos los hermanos unos terrenos de cafetales en su pueblo natal. Los hermanos
decidieron unánimemente rifar los terrenos partidos para no enemistarse por la repartición.

Estudios y Carrera[editar]
La escuela primaria la hizo en el Grupo Escolar ‘‘José Dolores Larreynaga’’, de
Quezaltepeque. El plan básico y el bachillerato, que así se llamaban en aquella época, los
cursó en el Instituto General Francisco Menéndez, el INFRAMEN, de San Salvador. Se graduó
como Bachiller en Ciencias y Letras, en 1949.

Entre 1950 y 1951 estudió en la Escuela Normal Alberto Masferrer, donde obtuvo el grado de
Profesor Normalista, Clase A. Siguió luego estudios especializados en la enseñanza de la
Biología y la Química, y en 1955 obtuvo el título de profesor de estas especialidades, en la
Escuela Normal Superior, institución de sólido prestigio académico en esos años.

Posteriormente, entre los años 1965 y 1969, siguió estudios de Maestría en Ciencias, en
la Universidad de California en Riverside. En la misma institución hizo su doctorado en
Ciencias y Filosofía con especialización en el control biológico de insectos. En 1979,
la Universidad de El Salvador le otorgó la incorporación con el título de Doctor en Biología.
Entre 1976 y 1977 fue asesor de investigaciones del ‘‘Centro Nacional de Tecnología
Agropecuaria’’ del Ministerio de Agricultura y Ganadería. Entre 1984 y 1986 trabajo como
etimólogo en el Centro Agronómico Tropical de Investigaciones y Enseñanza, CATIE,
en Costa Rica.

Su Carrera como Escritor[editar]


En el año 1984 Rutilio publica su primera novela Dolor de Patria, la cual trata sobre la vida de
varios campesinos que trabajan en las cortas de café en El Salvador. La historia es rica en
personajes, pero se centra sobre todo en uno principal, Nicho, desde que tiene unos 10 años,
hasta 50 años después, cuando la guerra en El Salvador estalla. Paralelamente se habla de la
vida de Toño, quien será su mejor amigo en la adultez y en los momentos más difíciles de la
enfermedad de Nicho. Una amistad tan fuerte y leal que dura más allá de la muerte injusta y
sangrienta de ambos compañeros y amigos. la novela trata temas como la pobreza, la época
de la bonanza del café y su decaimiento, los conflictos del estado debido al gobierno militar
impuesto mediante fraudes electorales y los constantes abusos a los derechos humanos del
pueblo salvadoreño

En 1988 publica su segunda novela La última guinda, la cual trata sobre la vida de una
estudiante universitaria, Zenaida, y sus vivencias desde la vida como bachiller en el
INFRAMEN, su vida como estudiante de Medicina en la Universidad de El Salvador, su
romance con Sabino Loucel y los diferentes acontecimientos que rodean la dictadura del
militar Carlos Humberto Romero. Se menciona la Masacre estudiantil del 30 de julio de 1975,
la huída de Zenaida y su madre hacia Estados Unidos (la cual termina en fracaso debido a la
estafa de los coyotes), y luego de la muerte de su madre en el desierto de Arizona, por fin
decide unirse a la guerrilla salvadoreña con el fin de encontrarse con el último ser amado que
le queda, su novio Sabino.

En 1994 publica su tercera novela, Las Profecías de Adán Cangrejo, Crónicas Auténticas
del Pueblo más Lindo del Mundo, narra la historia del pueblo natal de Rutilio y de sí mismo,
así como de su esposa y familia. Todo la narración tiene un toque pintoresca e imaginativa de
hechos y lugares reales, preservando en el libro, la identidad de ese lugar.

También ha publicado otros libros como Como los Girasoles, Diario Íntimo de una Batalla
Desigual (2003), Aquellos Exilios Involuntarios, Memorias de un Entomólogo(2004), y
otras. Una de sus últimas novelas, Mientras viva esta orquídea (2010) novela que trata sobre
el amor y la mujer y que deja marcado temas tradicionales en la cultura salvadoreña como el
machismo.

Recientemnente en el 2012 publicó su novela Tsunami, que trata sobre el terremoto y tsunami
de Chile en el 2009
DAVID ESCOBAR GALINDO

Datos Biográficos.
Nació Santa Ana, el 4 de Octubre de 1943. Hijo de José David Escobar Vides y Doña Esthela
Galindo Pohl. Abogado de profesión y poeta de nacimiento. Su infancia transcurrió entre el
campo y la ciudad. Apopa, Chalatenango y San Salvador. Sus estudios de primaria y secundaria
los realizo en el Colegio García Flamenco de San Salvador, y los Universitarios en la Universidad
de El Salvador, en donde se graduó de Doctor en Jurisprudencia y Ciencias Sociales en 1968.

Escribe poesía, cuento, novela, fábula, teatro.


OBRAS:
Vigilia Memorable (poesía)1972
El libro de Liliam (poesía) 1976 Cornamusa(poesía) 1975 Coronación Furtiva(poesía )1975
La Rebelión de las Imágenes(cuento)1978 Los Sobrevivientes (cuento) 1980 La Tregua de los
Dioses(cuento)1981 Una Grieta en el Agua (novela)1972 La Estrella Cautiva(novela) 1985 Las
Hogueras de la Itaca(teatro) 1987 Ganador del primer lugar en certámenes literarios en Madrid
1974, Barcelona 1976 y Granada 1977. Ganador de los Juegos Florales en la rama de Poesía en
Quezaltenango, Guatemala 1980,1981 y 1983. Al ganar por tercera vez el primer lugar fue
declarado Maestre de Gran Saber. Ha sido jurado calificador de los juegos Florales de Nueva San
Salvador, San Vicente y San Salvador. Hijo meritísimo de las ciudades de San Salvador,
Ahuachapan y Santa Ana. Es fundador y Rector de la Universidad Dr. José Matías Delgado , fue
miembro suscriptor de los acuerdos de Paz en 1992. Actualmente es miembro del Consejo
Nacional de Seguridad. David Escobar Galindo es el escritor salvadoreño que mas premios
nacionales e internacionales ha obtenido en la historia de nuestro país. Los IX juegos Florales de
Santa Ana 2000 en homenaje llevaron su nombre.
Esbozo biográfico

Nombre: José Roberto Cea. Nació en Izalco, 10 de abril


de 1939.

Estudios (no concluidos): Periodismo y Letras en la Universidad de El Salvador (UES).Algunos


cargos desempeñados: director de la Editorial Universitaria de la UES, director de la revista “La
Universidad”, codirector de la revista “La Pájara Pinta”, secretario de Relaciones Públicas y
Promoción Universitaria de la UES, miembro del Consejo Editorial del Consejo Superior
Universitario (CSUCA) y jefe de Relaciones Públicas de la UES.

Méritos y premios: Premio internacional de Poesía del Círculo de Poetas y Escritores


Iberoamericanos de Nueva York, 1965. Premio 15 de septiembre, del Certamen Centroamericano
Ciencias, Letras y Bellas Artes, 1965 y 1966. Premio de poesía en el certamen latinoamericano
Pablo Neruda, Perú, 1974. Premio Internacional Rubén Darío, 1981. Primer premio en los juegos
florales agostinos de San Salvador, 1998.

Poesía: “Los días enemigos”, 1965; “Casi el encuentro”, 1965; “Códice de amor”, 1968, “Naúfrago
genuino”, 1968; “Códice liberado”, 1969, “El potrero”, 1970; “Antología general de la poesía en El
Salvador”, 1971; “Lecturas italianas”, 1973; “Pocas i buenas”, 1986; “Los herederos de farabundo”,
1981; “Corral no, coral de los desplazados”, 1986; “La guerra nacional”, 1992; “Cantar de los
cantares y otros boleros”, 1993; “Misa mitin”, 1998; “Todo el códice”, 1998.

Novela y narraciones: “De perros y hombres”, 1968; “El solitario de la habitación 5 guión 2”; “De la
guanaxia irredenta”, 1988; “Dime con quién andas y... ”, 1989; “Ninel se fue a la guerra”, 1990; “En
este paisito nos tocó y no me corro”, 1995.

Teatro: “Las escenas cumbres”, 1968. Ensayos y didácticos: “De hospitales y dibujos”,
1974;“Letras”: libros de texto para 1°, 2° y 3° año de bachillerato; “De la pintura en El Salvador”,
1986; “Teatro en una comarca centroamericana”, 1993.
Esbozo biográfico

Hugo Lindo nación en La Unión en 1917 y murió en San Salvador en 1985. Fue diplomático,
abogado, cuentista, novelista y poeta. Ocupó el cargo de director del Departamento Editorial del
Ministerio de Educación y luego el de Ministro de Educación. También representó al país en
puestos diplomáticos en Chile, Colombia y España. Fue miembro de número de la Academia
Salvadoreña de la Lengua y correspondiente de la Chilena y Colombiana. Asimismo se desempeñó
como decano de la facultad de Cultura general y Bellas Artes de la Universidad “Dr. José Matías
Delgado”. Su obra le hizo merecedor de varios premios. El poemario Libro de horas obtuvo el
Primer Premio del Certamen Permanente “15 de septiembre”, en Guatemala, 1947. Navegante río
obtuvo el Primer Premio Centroamericano en los Juegos Florales de Quezaltenango, 1962. A su
novela Cada día tiene su afán se le concedió el Segundo Premio República de El Salvador en el
Certamen Nacional de Cultura, 1964. Además de su obra premiada, destaca por sus ensayos
jurídicos; cabe mencionar su tesis doctoral El divorcio en El Salvador, 1948, la cual obtuvo una
medalla de oro, y el ensayo Movimiento unionista centroamericano, 1958. En narrativa destacan
los siguientes libros: Guaro y champaña (cuento, 1947); Aquí se cuentan cuentos (cuento, 1959);
Espejos paralelos (cuento, 1974); El anzuelo de Dios (novela, 1956); ¡Justicia, señor Gobernador!
(novela, 1960); Yo soy la memoria (novela, 1985); y Antología del Cuento centroamericano
(antología, 2 volúmenes, 1949-50)

Otros libros del autor son: Desmesura (poesía, 1992); Varia poesía, con prólogo del poeta
colombiano Rafael Maya (Antología poética, 1960); Fácil palabra (poesía, 1985); Recuento
(anotaciones literarias e históricas de Centroamérica, 1969); Sólo la voz (poesía, 1968); Aquí mi
tierra (poesía, 1989); Sangre de Hispania fecunda (poesía, 1972); Maneras de llover (poesía, 1982)
y Resonancia de Vivaldi (poesía).
Esbozo biográfico
Hugo Lindo nación en La Unión en 1917 y murió en San Salvador en
1985. Fue diplomático, abogado, cuentista, novelista y poeta. Ocupó el
cargo de director del Departamento Editorial del Ministerio de Educación
y luego el de Ministro de Educación. También representó al país en
puestos diplomáticos en Chile, Colombia y España. Fue miembro de
número de la Academia Salvadoreña de la Lengua y correspondiente de
la Chilena y Colombiana. Asimismo se desempeñó como decano de la
facultad de Cultura general y Bellas Artes de la Universidad “Dr. José
Matías Delgado”. Su obra le hizo merecedor de varios premios. El
poemario Libro de horas obtuvo el Primer Premio del Certamen
Permanente “15 de septiembre”, en Guatemala, 1947. Navegante río
obtuvo el Primer Premio Centroamericano en los Juegos Florales de
Quezaltenango, 1962. A su novela Cada día tiene su afán se le concedió
el Segundo Premio República de El Salvador en el Certamen Nacional de
Cultura, 1964. Además de su obra premiada, destaca por sus ensayos
jurídicos; cabe mencionar su tesis doctoral El divorcio en El Salvador,
1948, la cual obtuvo una medalla de oro, y el ensayo Movimiento
unionista centroamericano, 1958. En narrativa destacan los siguientes
libros: Guaro y champaña (cuento, 1947); Aquí se cuentan cuentos
(cuento, 1959); Espejos paralelos (cuento, 1974); El anzuelo de Dios
(novela, 1956); ¡Justicia, señor Gobernador! (novela, 1960); Yo soy la
memoria (novela, 1985); y Antología del Cuento centroamericano
(antología, 2 volúmenes, 1949-50)

Otros libros del autor son: Desmesura (poesía, 1992); Varia poesía, con
prólogo del poeta colombiano Rafael Maya (Antología poética, 1960);
Fácil palabra (poesía, 1985); Recuento (anotaciones literarias e
históricas de Centroamérica, 1969); Sólo la voz (poesía, 1968); Aquí mi
tierra (poesía, 1989); Sangre de Hispania fecunda (poesía, 1972);
Maneras de llover (poesía, 1982) y Resonancia de Vivaldi (poesía).
Arturo Ambrogi
(San Salvador, 1878 - 1936) Escritor salvadoreño. El aprecio por las
costumbres de su país natal, El Salvador, y la atracción paralela que sintió
por la cultura de tierras lejanas marcaron de manera singular la obra
creativa de Arturo Ambrogi. La calidad de su obra y su estilo mordaz lo
ubican entre los escritores más importantes de su país.

Arturo Ambrogi

Nacido en 1878 en San Salvador, en el seno de una familia acomodada de


origen italiano, Arturo Ambrogi estudió en el Liceo Salvadoreño y recibió
muy pronto la influencia del modernismo liderado por Rubén Darío. Fue
Director de la Biblioteca Nacional y periodista; escribió sus primeros
artículos en El Fígaro, y llegó a trabajar en periódicos importantes como La
Ley de Santiago de Chile y La nación de Buenos Aires, colaboraciones que
simultaneó con la carrera diplomática.
Posteriormente fue nombrado cónsul, y como tal viajó por los Estados
Unidos, Europa, China y Japón, además de otros lugares exóticos. Las
experiencias vividas durante esos años fueron la fuente de varios libros de
viajes, como Marginales de la vida (1912), Sensaciones del Japón y la China (1915)
y Crónicas marchitas (1916), en los que el autor plasmó su agudo poder de
observación y su singular capacidad descriptiva.
Sería, no obstante, en el terreno narrativo donde Ambrogi hallaría mejor
cauce de expresión para su talento. Influido por el modernismo, que
dominó sus colecciones de relatos Bibelots (1893) y Cuentos y
fantasías (1895), el autor evolucionó después hacia una mayor preocupación
por la realidad cotidiana del país. Muestra de ello fueron las narraciones
costumbristas El jetón y Atanasio Aquino Rex, que introdujeron este género en El
Salvador. Fallecido en San Salvador en 1936, el influjo de Ambrogi fue
determinante en la producción de los escritores salvadoreños posteriores.
El estilo de Arturo Ambrogi resulta seductor debido a la precisión para el
detalle y las sensaciones y a su gran fuerza descriptiva, propia de la pintura
de la época, así como por el refinamiento y corrección de la prosa y su sutil
ironía. Su obra, en general, puede inscribirse dentro del impresionismo
literario, y también puede ser estudiada como una tensión entre sus deseos
de modernidad y sus preocupaciones regionalistas, o entre su
cosmopolitismo y cierto costumbrismo positivo que le hizo producir un título
como Libro del trópico (1907), donde profundiza en el campo y en los
problemas y sentimientos de sus campesinos a través de relatos y
descripciones. Luego aparecería El segundo libro del trópico (1916), y más
adelante los reuniría en un solo volumen. Entre sus obras figuran, además
de las mencionadas, Manchas, máscaras y sensaciones (1901), El Tiempo que
pasa(1913) y la póstuma Muestrario (1955).
Alberto Masferrer

(Vicente Alberto Masferrer Mónico; Tecapa, 1868 - San


Salvador, 1932) Escritor e intelectual salvadoreño. De personalidad
polémica, fue una de las figuras más dinámicas de la vida cultural y política
de su país y ejerció una fuerte influencia en las generaciones más jóvenes.

Hijo de una ciudadana salvadoreña, Leonor Mónico, y de un español


afincado en El Salvador, Enrique Masferrer, su padre se negó en un
principio a reconocerlo como vástago; posteriormente se avino a reconocer
su paternidad y Alberto pasó a vivir a la casa de su padre. Cursó sus
primeras letras en la escuela de Jucuapa, y, a los diez años de edad,
ingresó colegio que había fundado en San Salvador la pedagoga francesa
Agustine Charvin. En 1883 fue enviado por su padre a Guatemala en
represalia por haberse negado a cumplir un castigo que le había impuesto.
El jovencísimo Masferrer rechazó la custodia paterna y vagabundeó por
Guatemala, Honduras y Nicaragua, trabajando en oficios como el de
buhonero.

Ejerció luego la docencia en el departamento nicaragüense de Rivas, desde


donde fue enviado a la isla de Ometepe para que impartiera clases en el
presidio que allí se levantaba. Posteriormente se trasladó a San Rafael del
Sur, donde asumió la dirección de la Escuela de Varones. En 1885 se
trasladó a Costa Rica, donde apenas permaneció un año, y en 1886 regresó
a su país natal y fue profesor en El Carrizal, donde residió durante tres
años. En 1889 fue nombrado director de la escuela de Jucuapa, la misma
en que el propio Masferrer había recibido sus primeras clases.

En 1890 fue nombrado subdirector escolar en Sensutepeque y archivero de


la Contaduría Mayor en San Salvador; dos años después, asumió la
dirección del Diario Oficial, y en 1900 se convirtió en secretario del Instituto
Nacional, cargo que abandonó un año después, cuando fue nombrado
cónsul de El Salvador en Buenos Aires (Argentina). Inició así una carrera
diplomática que lo llevaría a ocupar los consulados salvadoreños en
Santiago de Chile (1902), San José de Costa Rica (1907) y Amberes
(Bélgica, 1910). Fue delegado de El Salvador en la Conferencia de La Haya
(1912), colaborador en el Segundo Congreso Científico celebrado
Washington en 1915, asesor del Ministerio de Instrucción Pública y director
del Instituto Ixeles (1916).

Su labor literaria y ensayística se desarrolló paralelamente. En 1923 se


convirtió en uno de los editorialistas del periódico El Día, y en 1928, en
compañía de los escritores y periodistas Alberto Guerra Trigueros y José
Bernal, fundó en la capital salvadoreña el rotativo Patria, donde se hizo
cargo de la sección editorial y de una aplaudida columna titulada Vivir. Sus
trabajos periodísticos publicados en este diario fueron recopilados al cabo
de varios años por el poeta y crítico literario Pedro Geoffroy Rivas, y
publicados por la editorial de la Universidad de El Salvador. Masferrer brilló
también como periodista en territorio chileno, donde, bajo el pseudónimo
de "Lutrín", firmó una columna humorística que aparecía en los rotativos El
Chileno, de Santiago, y El Mercurio, de Valparaíso.

En los últimos años de su vida, Alberto Masferrer se implicó en la política de


su país. Participó ardientemente en la campaña electoral de 1929 y 1930 a
favor del partido laborista, apoyando al candidato Arturo Araujo, quien,
elegido presidente en 1931, resultó inmediatamente derrocado por el golpe
de estado del general Maximiliano Hernández Martínez. Las matanzas
posteriores a manos del ejército salvadoreño desengañaron a Masferrer,
quien hubo de partir a Guatemala y a Honduras sumido en la pobreza y la
enfermedad.

Según sus propias palabras, él quería "Luchar contra todas las injusticias;
declarar la guerra a la miseria y la ignorancia; meter el hombro a las clases
desheredadas sin humillar a las favorecidas; consagrar nuestro esfuerzo al
triunfo de la verdad y de la virtud (...). Considerado de esta manera, el
socialismo es la más santa de las doctrinas: es el cristianismo en sus más
avanzadas consecuencias. En este sentido, nuestra literatura debe ser
socialista", palabras que operan como una especie de poética o al menos de
programa cultural y social. Este episodio sumió al escritor en una amarga
decepción que se agravó por sus problemas de salud y por el agotamiento
que le produjo el viaje a Guatemala. De regreso a El Salvador, muy
mermado de facultades, falleció en la capital del país el 4 de septiembre de
1932.

Su obra, que ejerció profunda influencia en la juventud de su país, se


caracteriza por una mezcla de socialismo y misticismo religioso y por una
visión un tanto ambigua de los problemas sociales. Su primer
libro, Páginas (1893), a pesar de estar enclavado en el modernismo, se
destacó por su impronta social. Entre sus obras más importantes figuran La
nuevas ideas (1910), Ensayo sobre el destino (1926),El dinero maldito (1927) y El
minimun vital (1929). La obra Las siete cuerdas de la lira (1926) ahondó en los
misterios del cosmos, la psicología y las fuerzas sobrenaturales.
Otros títulos de su producción son Naderías (1900), Recortes (1908), ¿Qué
debemos saber? (1913), Pensamientos y formas (1921), El buitre se tornó
calandria (1922), Ensayos y figuraciones sobre la vida de
Jesús (1927), Helios(1928), La religión universal (1928) y El libro de la
vida (1932). Póstumamente se publicó El rosal deshojado (1935). Su copiosa
producción literaria le valió un asiento en la Academia Salvadoreña de la
Lengua, donde ocupó la silla N, en sustitución del poeta y militar Juan José
Cañas.
Claudia Lars

(Carmen Margarita Brannon Vega; Armenia, 1899 - San


Salvador, 1974) Poetisa salvadoreña, una de las voces más sobresalientes
de la lírica centroamericana del siglo XX.

Hija de Peter Patrick Brannon, ingeniero norteamericano, y de la


salvadoreña Carmen Vega Zelayandía, estudió en el colegio La Asunción de
la ciudad de Santa Ana, donde la joven Claudia se decantó por los estudios
humanísticos. Religión y poesía se vincularon en su hogar para acrecentar
su sensibilidad natural. Desde muy pronto recibió la influencia de los
clásicos antiguos y españoles (Góngora, Quevedo, Fray Luis de León), así
como la de los románticos ingleses y de Rubén Darío. También coincidió
con algunos de sus contemporáneos, como el cuentista salvadoreño
Salarrué.

Poetisa precoz, con diecisiete años publicó un breve poemario que pasó
inadvertido:Tristes mirajes, que vio la luz gracias al mecenazgo del general y
poeta Juan José Cañas, uno de sus primeros mentores. Por esa época
Claudia Lars mantenía relaciones sentimentales con el poeta Salomón de la
Selva. Pero en 1919, cuando habían ya formalizado su compromiso de
matrimonio, el padre de Claudia decidió romper el vínculo y enviar a su hija
a los Estados Unidos, a casa de unos familiares afincados en Pennsylvania.
Allí conoció a Le Roy Beers, con quien contrajo matrimonio tras un breve
período de noviazgo.

Sin abandonar el país norteamericano, la poetisa se instaló en compañía de


su nuevo esposo en el barrio de Brooklyn de Nueva York, donde ejerció
como profesora de lengua castellana en la Escuela Berlitz. En 1927 tuvo
ocasión de regresar a su país junto con su cónyuge, que acababa de ser
nombrado cónsul de los Estados Unidos en El Salvador. Aposentados en la
capital salvadoreña, a finales de 1927 nació su primer hijo, Le Roy Beers
Brannon, que sería el único vástago de Claudia Lars.
Claudia Lars volvió a frecuentar los cenáculos literarios, en especial el
congregado alrededor del poeta Alberto Guerra Trigueros, compuesto por
escritores comoAlberto Masferrer, Salarrué y Serafín Quiteño. En ese nuevo
ambiente la poesía de Claudia Lars fluyó de nuevo con espontaneidad y
soltura, lo que se tradujo en 1934 en una nueva entrega lírica: Estrellas en el
pozo, publicada en las famosas Ediciones Convivio por voluntad expresa de
su director, el intelectual costarricense Joaquín García Monge.
Esta obra, bien recibida por críticos y lectores, allanó el camino del
siguiente poemario de Claudia Lars, Canción redonda (1936), al que siguió,
tras un paréntesis,La casa de vidrio (1942). En este fértil periodo publicó
también Romances de norte y sur (1946), Sonetos (1947) y Ciudad bajo mi voz, libro
premiado en el Certamen Conmemorativo del IV Centenario del Título de
Ciudad de San Salvador.
En 1948 se instaló en Guatemala para ejercer allí sus competencias como
agregada cultural de la Embajada de El Salvador, cargo con el que acababa
de honrarla el gobierno salvadoreño. En Guatemala conoció además a quien
habría de convertirse en su segundo esposo, Carlos Samayoa Chinchilla. A
su regreso a El Salvador, continuó desempeñando algunos cargos públicos
en el departamento editorial del Ministerio de Cultura, donde poco tiempo
después asumiría la dirección de la revista Cultura. Mostró una mayor
madurez conceptual y expresiva en el volumen Donde llegan los pasos (1953),
al que siguió, dos años después, Escuela de pájaros(1955), un texto con el que
se acercaba a los lectores infantiles.
En 1959 publicó Fábula de una verdad y Tierra de infancia, obra que presentó
como sus memorias poéticas. En 1961 se imprimió una muestra antológica
de sus versos destinados a los niños (Girasol), que se complementó aquel
mismo año con una selección del resto de su producción lírica (Presencia en el
tiempo). Al año siguiente, su poemario Sobre el ángel y el hombre fue distinguido
con el segundo premio del Certamen Nacional de Cultura, y en 1965 fue
galardonada con el primer premio del certamen conmemorativo del
cincuentenario de los Juegos Florales de Quezaltenango (Guatemala), por
su libro Del fino amanecer. Su última obra, Nuestro pulsante mundo, se publicaría
en 1969.
Desde su libro inicial, Estrellas en el pozo (1934), el ideal poético de Claudia
Lars quedó en evidencia: la transparencia, la sencillez y la ternura como
revelación de la belleza, a través de un notable conocimiento formal del
verso. El paisaje y los seres que lo habitaban, así como el tema familiar, la
influyeron hondamente, como reflejó en La cantora y su pueblo. Ella misma
declaró: "Bajo los temores y las supersticiones que con los años se irían
desprendiendo de mi credulidad como hojas sin savia, la abuela sembraba
en mi mente ideas magníficas: la diferencia que hay entre la cobardía y la
acción heroica; entre la pureza del alma y los bajos instintos corporales".

Manlio Argueta. Nació el 24 de noviembre de 1935, en la ciudad de San Miguel, cabecera del
departamento oriental del mismo nombre.

Argueta fue miembro de la autodenominada Generación Comprometida y del Círculo Literario


Universitario, dos de los grupos literarios más reconocidos en El Salvador, surgidos entre 1950 y
1956, de influencia sartreana y que participaron en activismo social, cultural y político. Dichos
grupos estaban formados por Waldo Chávez Velasco, Orlando Fresedo, Eugenio Martínez Orantes,
Álvaro Menéndez Leal, Mercedes Durand, Irma Lanzas, Mauricio de la Selva, Armando López
Muñoz, Rafael Góchez Sosa, Jorge A. Cornejo, Tirso Canales, Ricardo Bogrand, Roberto Armijo,
José Roberto Cea, Ítalo López Vallecillos, Hildebrando Juárez, Alfonso Quijada Urías, Roque Dalton,
José Enrique Silva, Jorge Arias Gómez, René Arteaga, Roberto Armijo, José Napoleón Rodríguez
Ruiz y otras personas más.

Se dio a conocer entre la intelectualidad local cuando su poema Canto a Huistalucxitl alcanzó la
máxima presea en los Juegos Florales de San Miguel, convocados por la local Sociedad de
Profesores de Secundaria "Alberto Masferrer" (noviembre de 1956). Su escrito ganador fue
divulgado por el rotativo La Prensa Gráfica, en su edición del 18 de noviembre. Pocos días más
tarde, Argueta conquistó el primer premio de los Juegos Florales de Usulután, con el poema Canto
vegetal a la ciudad de Usulután, difundido por el mismo periódico el 9 de diciembre de ese año.
Triunfó en varios certámenes centroamericanos de poesía, gracias a los cuales pudo ver impresos
sus libros de poemas Un hombre por la patria, El animal entre las patas y En el costado de la luz
(San Salvador, Universitaria, 1968). Este último libro fue una antología poética, donde su autor
reunió sus poemarios Del amor y la llama (1959), El hijo pródigo (1959), El viajero (1963) y que el
dio título al libro (1966). Esta recopilación poética ganó el certamen regional "Rubén Darío",
convocado por el Consejo Superior Universitario Centroamericano (CSUCA) para conmemorar el
centenario natal del Fénix del Modernismo.

Además, la editorial Universitaria de San Salvador dio a prensas sus Poemas (1967), que no fue un
libro planificado, sino un tiraje independiente de materiales divulgados por la revista La
universidad, en su número de mayo-diciembre de 1966. A esta publicación la siguió el volumen
poético conjunto De aquí en adelante (San Salvador, Los cinco ediciones-La idea, 1967), publicado
junto con José Roberto Cea, Alfonso Quijada Urías, Roberto Armijo y Tirso Canales.

En 1967, su novela El valle de las hamacas obtuvo el primer premio en el Certamen


Centroamericano de Novela, convocado por el CSUCA. Fragmentos de esta obra fueron divulgados
por la revista sansalvadoreña La pájara pinta, pero la versión en libro fue realizada por la Editorial
Sudamericana (Buenos Aires, Argentina, 1970), por entonces encargada de la divulgación
internacional de los autores del "boom" narrativo latinoamericano.

Durante los años de residencia fuera de El Salvador, obtuvo el Premio Internacional de Novela
"Casa de las Américas" con Caperucita en la zona roja (La Habana, 1977. Fue traducida al inglés
como Little Red Riding Hood in the red light district, Willimantic, Curbstone Press, 1998, en version
de Edward Waters Hood).

Autor del poemario Las bellas armas reales (San José, Costa Rica, Marca, 1979 y 1982), en 1980
ganó el premio UCA Editores (San Salvador) con su novela Un día en la vida. Varias veces reeditado
y hasta reproducido en versiones ilegales, este conocido libro ha sido traducido a diez idiomas
(inglés, francés, italiano, danés, sueco, holandés, alemán, ruso, hebreo y ucraniano) y ha vendido
miles de ejemplares alrededor del mundo. Fue volcado a formato radiofónico por Miguel Ángel
Chinchilla y difundido en 1997 por YSUCA, la emisora de la Universidad Centroamericana "José
Simeón Cañas" (UCA, San Salvador).
Un día en la vida y su siguiente novela -Cuzcatlán. Donde bate la mar del sur (Tegucigalpa,
Guaymuras, 1986)- fueron traducidas al inglés y publicadas en Estados Unidos (One day of life y
Cuzcatlán: where the Southern Sea beats, New York, Vintage Books-Random House, 1983 y 1987)
e Inglaterra, países en los que sirvieron como traductores suyos Clark Hansen, Stacey Ross, Bill
Brow, Michael B. Miller y otros.

Compilador de la antología Poesía de El Salvador (San José, Costa Rica, EDUCA, 1983, 359 págs.),
fue autor de un cuento para niños en edición bilingüe (Los perros mágicos de los volcanes, Estados
Unidos, Children Books Press, 1990, con ilustraciones de Elly Simmons) y también publicó poemas
suyos traducidos al inglés, los que fueron incluidos en el volumen El Salvador, ilustrado con fotos
de Adam Kufeld (New York, W. W Norton, 1990).

En 1989, fue guionista y realizador de la película Cuzcatlán Stories, a la vez que redactó el guión
teatral de Un día en la vida, obra que ha sido representada por distintos grupos en escenarios de
Centro América y Europa.

Desde su retorno al país, ha publicado dos novelas de corte autobiográfico: Milagro de la paz (San
Salvador, Istmo y Adeline Editores, 1995, traducida como A place called Milagro de la Paz,
Willimantic, Curbstone Press, 2000) y Siglo de o(g)ro: bio-no-vela circular (San Salvador, Dirección
de Publicaciones e Impresos, 1998. Su título original era El poder tras el trono).

Debido al conocimiento internacional de su obra entre diversas comunidades académicas del


mundo, ha sido objeto de tesis doctorales, congresos literarios y otros eventos profesionales,
además de que ha desarrollado clases, como profesor invitado, en la cátedra de Literatura
Centroamericana de San Francisco State University y en otros centros de estudios superiores de
Europa, Estados Unidos y Canadá.

En el primer trimestre de 2000 fue nombrado por el Consejo Nacional para la Cultura y el Arte
(CONCULTURA) como director de la Biblioteca Nacional de El Salvador, cargo que ocupa hasta la
fecha.
Nació en la ciudad de San Salvador, el 20 de febrero de 1919. Desarrolló una amplia labor literaria
a favor de los derechos femeninos, al igual que tuvo una destacada participación radiofónica en
los sucesos del 2 de abril de 1944, cuando una conjura civil y militar intentó derrocar al gobierno
del general Maximiliano Hernández Martínez.

Tras marcharse al exilio, inició sus estudios académicos de Periodismo en la Universidad de San
Carlos (USAC, Guatemala), donde también prestó servicios culturales para el gobierno de Jacobo
Árbenz.

Derrocado el régimen guatemalteco, se marchó a a Quito (Ecuador), en cuya Universidad Central


obtuvo sus licenciaturas en Filosofía y Letras en la Universidad Central del Ecuador. Una de sus
tesis de graduación dio pie a la publicación titulada Ensayos de poesía ecuatoriana (Quito, 1957).

Tras residir un año en Panamá, en 1957 regresó a San Salvador y fue incorporada con grado
doctoral en la Universidad de El Salvador (UES).

Desde 1960 fungió como catedrática, vicedecana de la Facultad de Humanidades y directora de los
departamentos de Letras y Promoción Cultural de la misma universidad.Amparada en el
seudónimo "El tecolote", obtuvo el primer premio de prosa en los VIII Juegos Florales de la ciudad
de San Miguel (noviembre de 1960). Al mes siguiente, sus trabajos El héroe y Canción de Edipo y
Yocasta, calzados con los respectivos seudónimos "Tutecotzimí" y "Melpómene", lograron el
primer premio de prosa y una mención honorífica en poesía en los IV Juegos Florales de Nueva San
Salvador.
En diciembre de 1961, su cuento El muro se hizo acreedor al segundo lugar en la rama de narrativa
breve de los Juegos Florales de Nueva San Salvador. En este mismo año, la revista Vida
universitaria (San Salvador, Universidad de El Salvador) divulgó su cuento Al negro le pagan por
bailar.

Directora de Arte y Extensión Cultural del Ministerio de Educación, impartió clases en la


Universidad Centroamericana "José Simeón Cañas" (UCA) y fue decana de la Facultad de
Humanidades de la Universidad "Nueva San Salvador" (UNSSA, San Salvador).

Se desempeñó como delegada salvadoreña al XII y XIII Congreso de Filología y Lingüística


Románica (Bucarest, 1967 y Québec, 1972) y al Congreso Mundial de la Mujer (Finlandia, 1969).

Es autora de varios libros de poesía, cuento, teatro y ensayo, entre los que se cuentan: Masferrer,
alto pensador de Centroamérica (Guatemala, 1954; San Salvador, 1984), Interpretación social del
arte (San Salvador, 1965 y 1974, en edición corregida y aumentada), Dante, poeta y ciudadano del
futuro (San Salvador, 1965), El método sociológico en la crítica estilística (Bucarest, 1967), Cartas a
Groza (1970 y 1998), Estudio-prólogo a las Obras escogidas de Alberto Masferrer (San Salvador,
1971), Estudio-prólogo a las Obras escogidas de Claudia Lars (San Salvador, 1973), Estudios sobre
poesía (San Salvador, 1973), El momento perdido (poesía, San Salvador, 1976, con dibujos de
Cepomch), Refugio de soledad (poesía, 1978, San Salvador, revista Caracol-Universidad de El
Salvador), La balada de Anastasio Aquino (teatro, San Salvador, 1978, varias reediciones), Los
sollozos oscuros (poesía, San Salvador, 1982), El verbo amar (poesía, San Salvador, 1997) y Ensayos
literarios (recopilación, San Salvador, 1998).Tiene en prensa La niña del laberinto (cuentos) y en
preparación un estudio especial sobre las cartas que Gabriela Mistral le dirigió a Claudia Lars,
cuyos originales se encuentran en su poder.

Obtuvo primeros premios en los Juegos Florales de Chiquimula (poesía, Guatemala, 1951),
Concurso Nacional de la Paz (poesía, Guatemala, 1953), Universidad Central del Ecuador (poesía,
Quito, 1955), Juegos Florales Agostinos (San Salvador, 1957, donde conquistó tercer lugar con su
poema Yo busco tus raíces), Certamen "Centenario de Suchitoto" (ensayo, 1959), certamen
literario de La Prensa Gráfica (1959, 1964, 1966), premio único de ensayo (compartido) "Adrián
Recinos" en el Certamen "15 de septiembre" de Ciencias, Letras y Bellas Artes (Guatemala, 1962),
Certamen "Dante Alighieri" (ensayo, Guatemala, 1964), juegos florales de Sonsonate (febrero de
1965), concurso de la Universidad de Columbia (cuento, New York, 1973) y segundo lugar en los
Juegos Florales de Quetzaltenango (teatro, Guatemala, 1976).
Integrante de número de la Academia Salvadoreña de la Lengua (1997), su labor cultural ha sido
distinguida y homenajeada en múltiples ocasiones, entre las que se destacan: Organización de
Estudiantes de Humanidades de la UES (1962 y 1965), Asociación de Mujeres Universitarias (1967),
Fraternidad de Mujeres Salvadoreñas (1969), Corporación Municipal de Santa Ana (1972),
reconocimientos públicos de la Asamblea Legislativa de El Salvador, Liga Femenina, Mesa Redonda
Panamericana de San Salvador y San Miguel (1975), Instituto "Hermanas Somascas" (1976),
Ministerio de Educación (1978), Asociación de Mujeres Universitarias (1975), Caballero de la
Orden Francesa de las Artes y las Letras (1990), Departamento de Letras de la UES (1990), Instituto
Cultural Salvadoreño-Costarricense (1991), galardón "Princesa de Cuxcatlán" (1995), Universidad
Tecnológica, Alcaldía Municipal de San Salvador, Colegio "Cristóbal Colón" (1996) y Fundación
"María Escalón de Núñez" (1997). premio nacional de literatura 2005 conferido por CONCULTURA
del El Salvador.

biografia de "Álvaro Menéndez Leal"

Álvaro Menéndez Leal nació en Santa Ana, El Salvador, el 13 de marzo de 1932. Perteneció a la
llamada Generación Comprometida junto con Manlio Argueta, Italo López Vallecillos, Roque
Dalton y otros.
Álvaro Menéndez Leal, cuentista y dramaturgo, que escribió
bajo el seudónimo de Álvaro Menen Desleal. El seudónimo no se trata de un juego de silabas, sino
de las diferencias imperceptibles que a veces existen entre el bien y el mal. A lo que mas le quería
ser énfasis el autor con su seudónimo es a la lealtad y a la DESLEALtad. Menen Desleal fue famoso
en toda América y Europa, especialmente en Argentina donde vivió por muchos años, en Francia y
Alemania, donde dio clases de literatura lo mismo que en algunas universidades de los Estados
Unidos.

Álvaro Menen Desleal invadió con éxito el ensayo, el periodismo, el teatro, la poesía, pero fue su
suerte el cuento breve, como Rubén Darío. Menen Desleal creo el programa “Telediario
Salvadoreño.”

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