Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
BABELIA
EL OBSERVADOR DISPERSO
Unos exiliados rusos en la Europa del siglo XIX: los últimos románticos, dice Carr.
Desde muy pronto en el libro sabemos con qué intensidad fluye la sangre por sus
venas. “Con la pasión todo pasa a través del fuego, toda impureza desaparece
calcinada, y lo que queda es oro puro”, escribió Natalia en su diario antes de que
partieran rumbo a París. Poco tiempo después de instalarse allí viajan a Italia,
https://elpais.com/cultura/2015/03/04/babelia/1425497019_473535.html Página 1 de 8
Aleksandr Herzen, la enfermedad de la verdad | Babelia | EL PAÍS 24/1/19 20(25
donde Herzen encuentra a unos viejos amigos. Natalia, que rondaba los treinta
años, se enamora entonces de Natalia, la hija pequeña de los Tuchkov. Unos
meses después, cuando estos vuelven a Rusia, le confiesa en una carta: “Desde
tu partida mi alma siente lo que sentiría un cuerpo al que le hubieran amputado
un miembro: un dolor sordo, estúpido, mudo y carente de sentido”. Es otro signo
más de un corazón exaltado, de unos afectos que sólo consiguen la paz en los
excesos.
Herzen se define poco después, durante la que iba a ser una de las peores
temporadas de su vida, llena de “desazón y zozobra”: “Hombres de fe, hombres
de amor’, como se denominan en oposición a nosotros, ‘hombres de la duda y la
negación’; no saben lo que es arrancar de raíz las esperanzas alimentadas a lo
largo de una vida; no conocen la enfermedad de la verdad (...)”, escribe. Sir Isaiah
Berlin, en el ensayo que le dedica a Herzen en Contra la corriente, traduce esa
singular dolencia como un profundo “escepticismo acerca del significado y valor
de los ideales abstractos”. “Herzen”, explica, “habló de algo aún más inquietante,
un sentido fantasmal de la creciente e insalvable brecha entre los valores
humanos de las élites relativamente libres y civilizadas (a las que él sabía que
pertenecía) y las necesidades reales, los deseos y gustos de las vastas masas de
humanidad sin voz, suficientemente bárbaras en occidente, pero más salvajes
aún en Rusia o los llanos de Asia”. Ya antes había acotado el sentido de su obra.
“Siempre trató el mismo tema central: la opresión del individuo, la humillación y
degradación de los hombres por las tiranías políticas y personales; y el yugo de la
costumbre social, la oscura ignorancia y el salvaje y arbitrario desgobierno que
mutilaba y destruía a los seres humanos en el brutal y odioso imperio ruso”.
https://elpais.com/cultura/2015/03/04/babelia/1425497019_473535.html Página 2 de 8
Aleksandr Herzen, la enfermedad de la verdad | Babelia | EL PAÍS 24/1/19 20(25
https://elpais.com/cultura/2015/03/04/babelia/1425497019_473535.html Página 3 de 8
Aleksandr Herzen, la enfermedad de la verdad | Babelia | EL PAÍS 24/1/19 20(25
Son lazos muy diferentes: Herzen era para ella como el aire, y por eso todo
estaba lleno de luz; Georg, en cambio, era la tierra y la tierra palpitaba. Cuando, al
final, Herzen le exigió que decidiera entre uno y otro, se quedó con él: de otra
manera no hubiera podido seguir viviendo. Pero tampoco era posible dejar por
las buenas de palpitar, y Natalia murió poco después, el 2 de mayo de 1851. Había
enfermado en medio de su último embarazo. El pequeño llegó nacer pero no vivió
más que unas horas.
https://elpais.com/cultura/2015/03/04/babelia/1425497019_473535.html Página 4 de 8
Aleksandr Herzen, la enfermedad de la verdad | Babelia | EL PAÍS 24/1/19 20(25
Cuenta Carr que Herzen descubrió en Londres que “la democracia es la única
forma de gobierno compatible con la libertad y la dignidad del individuo” y que,
aunque fuera escéptico con la evolución de Europa, pensaba que era el horizonte
hacia el que debía dirigirse Rusia. Uno de sus viejos y grandes amigotes no era de
la misma opinión. Había vuelto a encontrarse con él después de su ya lejana
salida de Moscú y seguía siendo el de siempre: Bakunin “era un artista de la
conspiración y la intriga, y las amaba por su propia esencia”, escribe E. H. Carr.
Alguna vez habían soñado juntos con transformar el mundo. En aquel momento,
Herzen era mucho más modesto en sus objetivos. Se había identificado con el
liberalismo constitucional; Bakunin seguía fascinado con el anarquismo
revolucionario. Estaba dispuesto a encender la mecha de la violencia allí donde
pensara que podía germinar. Herzen había quedado, en cambio, en un terreno de
nadie. Para los conservadores y los tímidos liberales, era un nihilista que alentaba
la revolución. Los revolucionarios, en cambio, consideraban que la había
traicionado.
En 1865 Herzen abandonó Inglaterra. Su situación era cada vez más delicada
respecto a las nuevas generaciones, que querían quemarlo todo, arrasarlo,
empezar de nuevo, tirar abajo esas minúsculas conquistas que se habían ido
logrando poco a poco. Se instaló en Ginebra, a La Campana ya no le quedaría
mucha vida por delante. E. H. Carr: “Herzen había perdido la confianza de la
generación ascendente. Podía tener aún razón a sus propios ojos, pero ya no
estaba a la vanguardia de ningún movimiento. Su estrategia podía ser perfecta,
pero el ejército ya no lucharía bajo su mando. Era un general sin ejército”. Ya no
le quedaba mucho tiempo: el 21 de enero de 1870 falleció en París.
https://elpais.com/cultura/2015/03/04/babelia/1425497019_473535.html Página 5 de 8
Aleksandr Herzen, la enfermedad de la verdad | Babelia | EL PAÍS 24/1/19 20(25
https://elpais.com/cultura/2015/03/04/babelia/1425497019_473535.html Página 6 de 8
Aleksandr Herzen, la enfermedad de la verdad | Babelia | EL PAÍS 24/1/19 20(25
terráqueo”.
Sí, también Herzen estuvo modelado por su tiempo. Y le tocaron las borrascas
del romanticismo y procuró mantener el volante en una época en la que
estallaban las revoluciones nacionales sosteniendo siempre su vieja querencia
por sociedad de iguales. “Creyó que la última meta de la vida era la vida misma”,
escribe de él Isaiah Berlin. “Creyó que los fines remotos eran un sueño, que la fe
en ellos era una ilusión fatal; que sacrificar el presente o el inmediato o previsible
futuro a estos fines distantes debe conducir siempre a formas crueles y fútiles de
sacrificio humano”. Y, por eso, para terminar el trabajo que dedicó a Herzen
recoge algunas de sus lúcidas y hermosas palabras. “El arte, y el rayo veraniego
de la felicidad humana: estos son los únicos bienes reales que tenemos”.
E. H. Carr. Los exiliados románticos. Galería de retratos del siglo XIX. Presentación de Pere
Gimferrer. Traducción de Buenaventura Vallespinosa. Anagrama. Barcelona, 2010. 443 páginas.
19,95 euros.
Isaiah Berlin. Contra la corriente. Ensayos sobre la historia de las ideas. Traducción de Hero
Rodríguez Toro. Fondo de Cultura Económica. México D. F., 1992. 455 páginas. 22,80 euros.
Aleksandr I. Herzen. Crónica de un drama familiar. Traducción e introducción de Víctor Gallego
Ballestero. Alba. 181 páginas. 13,30 euros.
Richard Sennett. El extranjero. Traducción de Marco Aurelio Galmarini. Anagrama. Barcelona,
2014. 131 páginas. 14,16 euros.
Aleksandr Herzen. Doctor Krupov. Traducción de Sara Gutiérrez. Prólogo de Enrique López Viejo.
Ardicia. Madrid, 2014. 105 páginas. 14,16 euros.
ARCHIVADO EN:
›
Siglo XIX · Romanticismo · Isaiah Berlin · Mijaíl Alexándrovich Bakunin · Revolución Rusa · Rusia
· Europa este · Historia contemporánea · Europa · Estilo vida · Historia · Movimientos literarios
· Literatura · Movimientos culturales · Cultura
CONTENIDO PATROCINADO
Los diagramas de Gantt están Los 6 productos más innovadores Una experta en lingüística explica Un estudio revela cual es la app
anticuados (hay otra opción) y originales del 2018. ¡El cuarto te… como hablar un nuevo idioma con más eficiente a la hora de aprender
solo 15… un idioma
(MONDAY.COM) (INNOVACIONALDIA) (BABBEL) (BABBEL)
Y ADEMÁS...
https://elpais.com/cultura/2015/03/04/babelia/1425497019_473535.html Página 7 de 8
Aleksandr Herzen, la enfermedad de la verdad | Babelia | EL PAÍS 24/1/19 20(25
Perú vence con polémica Acto vandálico de un taxista a la El 'dardo' de Gonzo ('El La Guardia Civil avisa: lo que
hija de Carlos Sainz, que indigna a Intermedio') que saca los colores tienes que hacer si encuentras esta
su… al 'número dos' del PP tras su… marca en tu puerta
(AS PERÚ) (TIKITAKAS) (LO MÁS VISTO) (CADENA SER)
recomendado por
© EDICIONES EL PAÍS S.L. Contacto Venta de contenidos Publicidad Aviso legal Política cookies Mapa EL PAÍS en KIOSKOyMÁS Índice RSS
© EDICIONES EL PAÍS S.L. Contacto Venta de contenidos Publicidad Aviso legal Política cookies Mapa EL PAÍS en KIOSKOyMÁS Índice RSS
https://elpais.com/cultura/2015/03/04/babelia/1425497019_473535.html Página 8 de 8