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Criterios Teológicos

para la presentación de Jesucristo hoy

Hugo Fernández Mora, Pbro*

1. EL PROBLEMA nicación y por la necesidad de co-


municarlo. Hay una cuestión pre-
1.1 Identificación y contexto via: Sale de mi reflexión y concien-
del problema cia? Esta cuestión se refiere, pues, a
las fuentes de donde obtengo mi
1.1.1 Identificación del proble- conocimiento sobre Jesucristo.
ma
La pregunta por los criterios teo-
Se trata del problema general: lógicos para la presentación de Jesu-
cómo presentar a Jesucristo hoy? cristo hoy, pretende aclarar desde
En orden a su solución se plantea el punto de vista de la teología el
la pregunta: qué criterios teológicos poblema de la comunicación de
iluminan la solución del problema Jesucristo a los hombres de hoy.
consistente en presentar a Jesucris-
to hoy? Estas reflexiones se sitúan más en
el deber ser que en lo que ha sido o
Presentar a Jesucristo es un pro- es actualmente.
blema de comunicación. Implica un
sujeto que comunica, un objeto por 1.1.2 Contexto del problema
comunicar, una acción comunica-
dora, unos medios de comunicación, 1.1.2.1. Contexto pastoral
unos destinatarios. También se pue-
de preguntar por la finalidad que se El problema de buscar y ofrecer
propone el comunicador y la comu- los criterios teológicos para presen-
* Licenciado en Sagrada Escritura, Pontificio Instituto Bíblico; Director del Departamento Doc-
trinal del Secretariado Pennanente del Episcopado Colombiano.

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tar a Jesucristo hoy se sitúa dentro " ... una cuidadosa y celosa trans-
de la pastoral. Es un problema de misión de la verdad sobre Jesucris-
orden teológico con miras a la evan- to. Esta se encuentra al centro de la
gelización y a la catequesis. evangelización y constituye su con-
tenido esencial" (Juan Pablo 11, D.!.
- Dentro de la Teología Pastoral 1,2).

"Evangelizar es, ante todo, dar La introducción al capítulo cris-


testimonio, de una manera sencilla tológico de Puebla dice: "Nos pro-
y directa, de Dios revelado por ponemos anunciar las verdades cen-
Jesucristo mediante el Espíritu San- trales de la evangelización: Cristo,
to. Testimoniar que ha amado al nuestra esperanza, está en medio de
mundo en su Hijo; que en su Verbo nosotros, como enviado del Padre,
encarnado ha dado a todas las cosas animando con su Espíritu a la Igle-
el ser y ha llamado a los hombres a sia y ofreciendo al hombre de hoy
la vida eterna" (E.N. 26). su palabra y su vida para llevarlo a
su liberación integral" (n. 166).
"La evangelización también debe Enseguida se refiere a la Iglesia y
contener siempre -como base, cen- como en L.G., dentro de ella a
tro y a la vez culmen de su dinamis- María y, finalmente como en GS, al
mo- una clara proclamación de que hombre (nn. 167-169).
en Jesucristo, Hijo de Dios hecho
hombre, muerto y resucitado, se "Como núcleo y centro de la
ofrece la salvación a todos los hom- Buena Nueva, Jesús anuncia la sal-
bres, como don de la gracia y de la vación, ese gran don de Dios que es
misericordia de Dios (cf. Ef 2,8; liberación de todo lo que oprime al
Rom 1,16)" (E. N. 27). hombre, pero que es sobre todo
liberación del pecado y del maligno,
"No hay evangelización verdade- dentro de la alegría de conocer a
ra, mientras no se anuncie el nom- Dios y de ser conocido por El, de
bre, la doctrina, la vida, las prome- verlo, de entregarse a El" (E.N. 9).
sas, el reino, el misterio de Jesús de
Nazaret, Hijo de Dios" (E.N. 22a). "En el centro de la catequesis en-
contramos esencialmente una perso-
"La evangelización comprende na, la de Jesús de Nazaret. "
además la predicación de la esperan- (Juan Pablo 11, C.T. 5b).
za en las promesas hechas por Dios
mediante la nueva alianza en Jesu- - Dentro de la Pastoral concreta
cristo; la predicación del amor de
Dios para con nosotros y de nuestro El contexto pastoral concreto de
amor hacia Dios; la predicación del nuestro problema es el de una defi-
amor fraterno para con todos los ciente predicación sobre Jesucristo,
hombres -capacidad de donación y ya sea a veces porque no existe, o
de perdón, de renuncia, de ayuda es lánguida, o es abstracta, o está
al hermano- que por descender del llena de "slogans" pero no está mo-
amor de Dios, es el núcleo del Evan- tivada ni vinculada con la Biblia ni
gelio" (E.N. 28). con la vida, o se reduce a la narra-

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ción repetitiva acerca de Jesús de la fe de millones de hombres. Depen-
historia o por sesgos ideológicos se derá también el valor de su adhe-
presenta deformada la imagen de sión a la Iglesia y de su presencia
Jesucristo, o se la reduce a deter- activa de cristianos en el mundo. De
minados rasgos vistos con una lente este conocimiento derivarán opcio-
tendenciosa hasta convertirla en nes, valores, actitudes y comporta-
caricatura y contra-evangelio. mientos capaces de orientar y defi-
nir nuestra vida cristiana y de crear
0, finalmente, de tal manera se hombres nuevos y luego una huma-
manipula horizontalmente que se nidad nueva por la conversión de la
seleccionan de su imagen solo conciencia individual y social"
aquellas características que con- (Juan Pablo 11, D.I. 1,2).
cuerdan con las necesidades mate-
riales de los hombres y se escogen 1.1.2.2 Contexto teológico
aquellos episodios que se refieren o
parecen referirse a E:llas de modo Presentar a Jesucristo es dar a
que hacen no solo que Jesús diga y conocer qué significa su nombre,
haga como ellos quieren sino que se responder a las preguntas: quién es
cierran el paso para la imitación de Jesucristo? De dónde viene? Qué se
Jesucristo obnubilando su auténtica propone o cual es su misión? Qué
imagen, tergiversando sus palabras y hizo y hace? Vive aún? Qué exige y
malinterpretando sus obras. qué promete? Además presentar a
Jesucristo es estar abierto a las pre-
Este proceder es, en parte, reac- guntas de los destinatarios y estar
ción contra una presentación verti- dispuesto a dar razón de nuestra
calista, desencarnada, doceta, en la esperanza (cf. 1 Pe 3,15).
cual la imagen de Jesucristo queda-
ba relegada al pasado, a la lejanía, Para responder a estas cuestiones
a la trascendencia, poco tenía que es necesario preguntarse quién pue-
ver con las realidades humanas y no de responderlas? Quién puede dar a
era imitable. conocer a Jesucristo? Cuáles son las
fuentes de conocimiento de Jesu-
En el contexto de las preocupa- cristo? Con qué fin presentarlo?
ciones de este Congreso cristológico Cuáles son los destinatarios? Es
subyacen las preguntas: cómo he- necesario presentarlo? Cuáles crite-
mos de presentar a Jesucristo? Qué rios hay para presentarlo?
imagen hemos de presentar? Y for-
mulamos una cuestión precisa: Qué Estas y otras preguntas nos debe-
criterios teológicos nos iluminan rían llevar a indagar en las fuentes
para dibujar la imagen del Jesús que de la divina revelación; a tomar
hemos de entregar a nuestro pue- como punto de partida las confesio-
blo? nes de la fe de la Iglesia y a entrar
en el contexto de la teología trini-
Juan Pablo 11, enseñándonos taria, de la cristología, soteriología
acerca de la verdad sobre Jesucristo, y neumatología; a estudiar la teolo-
dice: "Del conocimiento vivo de gía de la revelación y de la fe, par-
esta verdad dependerá el vigor de la ticularmente en los temas de la

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palabra de Dios y la evangelización muerte y resurrección y el envío de
y a situamos en el contexto de la su Espíritu Santo nos salvará (cf.
teología de la Iglesia. DV 4).

Pero no se trata en este trabajo "La obra de Dios en favor del


de realizar la investigación que ha- mundo que se reconoce y acepta en
cen estos tratados teológicos, sino la fe, es Jesucristo en su muerte y
que tratamos de mostrar y de asu- resurrección. Con esto hizo el Padre
mir sus conclusiones y de descubrir todo lo que podía: en su Hijo se
sus líneas maestras. entregó al mundo en tal forma que
Dios mismo vino a ser parte de este
La tarea será ante todo adopción mundo, y con la muerte y resurrec-
de grandes principios. A fin de ción de Jesucristo este mundo fue
que esta selección de los "criterios transformado, redimido y diviniza-
centrales de la fe de la Iglesia" do. Algo más grande no era posi-
(Juan Pablo Il, D.!. 1,4) no sea arbi- ble" (G. Maschalek, Fe como con-
traria hay que recurrir al Magisterio fesión de Cristo, en 57. Kern W.
de la Iglesia porque "el oficio de 314).
interpretar auténticamente la pala-
bra de Dios, oral o escrita, ha sido Predicar a Jesucristo es anunciar
encomendado únicamente al Magis- que el amor de Dios para el hombre
terio de la Iglesia" (DV 10b; cf. LG y el mundo, se manifestó infinito e
25). irreversible en Jesucristo. Predicar
a Jesucristo es anunciar la salvación
Podemos precisar más el contex- que Dios nos ofrece. Esta es indivi-
to de nuestro problema por medio siblemente nuestra realización, sal-
de la siguiente concatenación: para vación y felicidad.
salvarse es necesario creer (Mc 16,
16; Col 1,23; Hebr 11,6), para creer
es necesario escuchar (cf. Rom 10, 1.2 Planteamiento del problema
14-17) la Buena Nueva de la salva-
ción (cf. Ef 1,23), para escuchar la Es importante antes de dar una
palabra de la Buena Nueva (cf. Act. respuesta o de proponer una solu-
15,7) es necesario que ésta sea ción de un problema plantearlo
anunciada (cf. Rom 10,14; Act adecuadamente. Respuestas que no
8,31; Lc 24,46-47). Ahora bien, el aclaran y soluciones falsas son con
centro y esencia de la Buena Nueva frecuencia fruto espontáneo de
es Jesucristo (Act 5,42; 8,35; 11,20; cuestiones no planteadas o mal
17,18; Gal 1,16). Es pues necesario planteadas. Cuando se dan cuestio-
el anuncio de Jesucristo para poder- nes mal planteadas la caridad urge
se salvar (cf. Conc. Vat. Il, PO 4). que re-planteadas las respondamos;
la comprensión piede que entenda-
Anunciar a Jesucristo es procla- mos el punto de vista del que inte-
mar con fe que Dios amó tanto al rroga o cuestiona; la verdad exige
mundo (cf. Jn 3,16) que dió a su que hagamos ver en dónde está la
Hijo, para que hecho hombre y falla y cuál es el camino para la
llamado Jesucristo, con su vida, solución verdadera.

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Por eso nos esforzamos por plan- Puede también representar los
tear el problema de cuáles son los términos patrísticos disdaskalía,
criterios para la presentación de teología, economía, catequesis.
Jesucristo hoy en nuestro medio.
Tiene también la ventaja de
1.2.1 LO$ términos expresar la comunicación y los ac-
tos por los cuales se predica o da a
En la pregunta formulada: "Cuá- conocer el Señor directamente por
les son los criterios teológicos para palabras o actitudes o a través de
la presentación de Jesucristo hoy en medios de "comunicación social".
nuestro medio" todos los términos
merecen ser aclarados. En síntesis no se trata de que al
Señor que está presente de modo
Cuáles: en principio se requiere invisible en medio de los suyos (Mt
una calificación, sin que baste la 28,20), los suyos lo hagan presente
mera enumeración. de modo visible, revelen claramente
su presencia oculta.
Criterios: asumimos de la palabra
criterio el sentido más genuino: ins- Jesucristo: El es el "objeto" que
trumento para juzgar. ha de ser presentado.

Criterios teológicos: son determi- lfoy: nos referimos a la época en


nados principios teológicos que por que vivimos. Será necesario carac-
ser más conocidos y ciertos, sirven terizar el tiempo presente. Al fin
como instrumentos de juicio para de cuentas será caracterizar a los
dilucidar un problema teológico o hombres y su historia de la actuali-
pastoral. Nos situamos aquí en el dad .
.,ámbito de la verdad salvífica. Se
trata de aclarar una verdad del En nuestro medio: hace referen-
ámbito de la salvación. cia el espacio humano, al ámbito
y ambiente socio-cultural especial-
La ''presentación de", "presentar mente de nuestro país. De todos
a" Jesucristo: el término es poliva- modos el horizonte de quien habla
lente y lo suficientemente amplio y de quien escucha es, en principio,
como para que represente los ver- limitado y limitante.
bos neotestamentarios: revelar, ma-
nifestar, dar a conocer, aclarar, pre-
dicar-proclamar, evangelizar, anun- 1.2.2 El planteamiento
ciar, enseñar, dar testimonio, decir,
hablar. Y los sustantivos: revela- Dentro de una cuestión más am-
ClOn, manifestación, predicación- plia: cómo presentar a Jesucristo
proclamación, evangelio, testimonio hoy en nuestro medio? Cuáles son
(acto de testigo), enseñanza (del los criterios teológicos principales
maestro), conocimiento, misterio, que nos sirven para presentar a
palabra, verdad (cL 63. Latourelle, Jesucristo a los hombres contem-
R.46). poráneos en nuestro ambiente?

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Se trata de un problema de co- A fin de asegurar la mayor certe-
municación. "El concepto de comu- za y claridad de los criterios hemos
nicación indica que se trata de un de comenzar por cercioramos de las
proceso de mediación, de una ac- fuentes de donde los tomamos y del
ción de compartir con otras perso- justo recurso a ellas.
nas" (E. Gabel, arto "comunicación
social", en S.M., 1, c. 813, Herder,
Barcelona 1972). Comunicar es 2. BUSQUEDA DE SOLUCIONES
hacer que algo que está en uno o es
poseído por uno pase a otro y lle- 2.1 Fuentes de los criterios cris-
gue así a ser poseído por ambos en tológicos
común. El "terminus a quo" y el
"terminus ad quem" de la comuni- 2.1.1 Fuentes de la Teología
cación pueden estar en singular o en
plural. La Teología, como inteligencia
de la fe ("intellectus fidei"), recibe
La comunicación supone un suje- su objeto de la fe de la Iglesia. El
to o agente que comunica, un bien contenido esencial de la fe es la ver-
que se comunica, es decir un obje- dad salvadora. "Solo la Iglesia ente-
to, un destinatario, una acción co- ra vive entera la fe" (Ratzinger, J.,
municadora, una finalidad, unos Pluralismo, 40). Solo ella es el suje-
medios. Se puede preguntar tam- to adecuado del "credo". La Teo-
bién por la finalidad, necesidad y logía recibe su objeto para poseerlo
eficacia de la comunicación. Habrá cada vez más y profundizar en el
que estar alerta también respecto a misterio insondable. El credo es
las características de la comunica- oído en la predicación, escuchado
ción de que se trate. en la catequesis, profesado en la
liturgia, estudiado en la teología.
En relación con los criterios teo- Esta profundiza su objeto a nivel
lógicos para comunicar a Jesucristo científico y procura preguntarse lo
hoy, hemos de indagar las fuentes que Dios ha revelado y cómo lo ha
y apreciar su valor. revelatlo. Todo lo que Dios ha reve-
lado se contiene en "la Tradición y
En resumen: desde la praxis pas- la Escritura ( que) están estrecha-
toral, en orden a ella, y dentro del mente unidas y comunicadas. Pues,
problema más amplio de cómo pre- procediendo ambas de la misma
sentar hoy a Jesucristo, pregunta- divina fuente, en cierto modo se
mos por los criterios teológicos que mezclan en un mismo cauce y
sirvan para aclarar el cómo hacer tienden hacia un mismo fin" (DV
participantes a otros del conoci- 9).
miento que tenemos de Jesucristo.
La cuestión la enfocamos como "La Sagrada Tradición y la Sagra-
un problema de comunicación, pero da Escritura constituyen un único
de una comunicación peculiar. Es sagrado depósito de la palabra de
decir, tomamos la comunicación Dios confiado a la Iglesia" (DV 10).
como una analogía. La teología en su función positiva

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estudia los testimonios de la Escri- pal testimonio acerca de la vida y
tura con el apoyo de la exégesis y enseñanza del Verbo Encamado,
de la hermenéutica. La teología po- Nuestro Salvador" (DV 18). Ani-
sitiva de la tradición estudia los mada la Iglesia por el Espíritu del
testimonios que de la divin"a tradi- Señor saca de este mismo depósito
ción dan los Padres, los Doctores, de la fe cuanto propone sobre Cris-
los Teólogos, la Liturgia, la Histo- to para ser creído. (cf. DV 10b).
ria y la vida actual del pueblo cris-
tiano (cf. DV 8c). Por eso el criterio fundamental es
la Sagrada Escritura en relación con
"Pero el oficio de interpretar la confesión de la Iglesia creyente
auténticamente la palabra de Dios y orante (cf. Comisión Teológica
escrita o entregada (por divina Tra- Internacional, II Pluralismo, Tesis
dición) ha sido confiado únicamen- 7, 43). Profesamos la fe con los
te al Magisterio vivo de la Iglesia" símbolos (cf. C.T. 28), Puebla 372;
que "no está por encima de la pala- 1001.
bra de Dios, sino que le sirve, ense-
ñando solamente lo que ha sido "Entre las fórmulas dogmáticas,
transmitido" (DV 10). La teología las de los antiguos concilios tienen
positiva cuando se aplica a las ense- la prioridad. Las fórmulas que ex-
ñanzas del magisterio, trata de presan una reflexión del pensamien-
conocer a través de él la fe de la to cristiano están subordinadas a las
Iglesia. Pues "el Magisterio se expre- que expresan los hechos mismos de
sa ante todo en vinculación material la fe" (95 bis. Ratzinger, J. ib.).
con el credo de toda la Iglesia y con
la Escritura leída según el credo. El Magisterio de la Iglesia, parti-
Solo este credo forma a la Iglesia cularmente el magisterio actual,
como sujeto de por sí. El Magiste- guarda e interpreta la fe de la Iglesia
rio es la auténtica expresión de este (cf. DV 10). "Por eso, en la teolo-
sujeto porque y en cuanto -en el gía católica la índole eclesial de la
poder del Espíritu que hace posible fe debe concretarse necesariamente
la adhesión al credo- precisamente en una continua referencia al Magis-
expresa y preserva este mismo cre- terio" (Sagrada Congregación para
do" (95 bis. Ratzinger, J. CTI Plu- la Educación Católica. La Forma-
ralismo 41-42). ción Teológica de los Futuros Sa-
cerdotes, Roma, Typis Poliglottis
2.1.2 Fuentes de los criterios Vaticanis. 1976, n. 44). El mismo
cristológicos documento recuerda en seguida el
carácter de servicio a la palabra de
Son las mismas fuentes de la Teo- Dios (cf. DV 10) y momento inter-
logía, especialmente de la Cristolo- no y condición indispensable de la
gía, a saber, la Sagrada Escritura y teología (n. 45). En el n. 46 presen-
la Tradición, pero especialmente los ta las funciones del Magisterio,
Evangelios porque "todos saben que primera de las cuales es ser "porta-
entre los escritos incluso del Nuevo dor, intérprete y garante de la regu-
Testamento justamente sobresalen la fidei para la unidad de los creyen-
los Evangelios, ya que son el princi- tes", añade la función de sintetiza-

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dor de los valores seguros y comu- mundo con la Encíclica "Redemp-
nes y finalmente considera el magis- tor Hominis" y la Exhortación
terio "como facultad de juicio acer- "Catechesi Tradendae" y para Amé-
ca de la conformidad entre los rica Latina (y el mundo) con el Dis-
resultados de investigaciones, refle- curso inaugural de la Conferencia
xiones de teólogos, experiencias General del Episcopado Latinoame-
espirituales de personas y de gru- ricano reunida en Puebla en 1979,
pos, y la revelación transmitida por cuando habla de "la verdad sobre
medio de la Tradición que el mismo Jesucristo" (cf. Puebla, pago 5-7).
Magisterio custodia, interpreta
auténticamente y propone a los fie- Para nuestro ámbito Latinoame-
les" (ib. 46). ricano la misma Conferencia en su
Documento contiene continuas
Finalmente recuerda la relación referencias a Cristo y dedica en la II
entre Magisterio y teólogo: "La parte, capítulo 1, el primer parágra-
Iglesia tiene el derecho y el deber fo a tratar de "la verdad sobre Jesu-
de exigir a los teólogos la fidelidad cristo el Salvador que anunciamos"
al Magisterio que, lejos de prejuzgar (nn. 170-219).
la libertad de la legítima investiga-
ción, le da garantía positiva de La cristología de Puebla es trata-
auténtica edificación del Cuerpo de da sobre el trasfondo socio-religioso
Cristo, que es la Iglesia. En realidad de la piedad popular, en el ambien-
el munus docendi es propio de los te sereno de la confesión de fe de
obispos colegialmente unidos con el toda la Iglesia, no sin tener en cuen-
Sumo Pontífice, en la línea de la ta las contradicciones de las "relec-
sucesión apostólica, (LG 25; Pablo turas" e ideologizaciones de algu-
VI, AAS 58 (1966) 890 ss.) a los nos; es situada dentro del marco de
cuales, en la teología, como en cual- la Historia de la salvación, que se
quier otra forma de catequesis y dirige hacia su cumplimiento defini-
de predicación, no puede sustituír- tivo en Cristo. Toma su punto de
seles con el pensamiento individual. partida en el Padre, presenta cen-
Este conserva su función, pero solo tralmente los misterios de la Encar-
para investigar, ampliar, explicar el nación y de la Pascua y culmina con
dato objetivo, que viene de Dios y la referencia al envío del Espíritu
es guardado y proclamado por la Santo, Espíritu de filiación que
Iglesia" (ib. n. 47). mueve hacia la consumación escato-
lógica en la casa del Padre.
En cuanto al Magisterio cristoló-
gico actual, solamente notemos la La cristología de Puebla es de
cristología renovada, profundamen- por sí un criterio básico para la pre-
te bíblica, trinitaria, tradicional, sentación de Jesucristo en nuestro
eclesial y coherente del Concilio medio, porque es el Magisterio la
Vaticano JI. El Magisterio incansa- norma próxima "que hace a la fe
ble, profundo del Papa Pablo VI, el inequívocamente presente en su
Magisterio catequístico de Juan Pa- tiempo" (87. Ratzinger, J., Normas
blo 1, y el prometedor Magisterio de para la predicación del Evangelio, p.
Juan Pablo II que comenzó para el 28).

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y no hay otras fuentes de la reve- vez mejor y los mantenga siempre
lación pues los acontecimientos activos" (DV Sc). Es la unidad de
históricos más que fuentes de la la Iglesia la que ha creado un canon
revelación divina son la materia único. Cuando peligra la unidad de
prima que ha de ser discernida. Son la Iglesia, peligra también la unidad
signos ambiguos que han· de ser del Canon. Los últimos desarrollos
aclarados por la palabra de la Sagra- de la escuela de Bultmann anatema-
da Escritura y la Tradición. tizan la teología lucana y las pasto-
rales. Y en cuanto a la tradición la
2.1.3 Naturaleza de las fuentes distinción de "Frühkatolizismus"
de la revelación ha sido una brecha arbitraria en la
continuidad sin solución, de las
En orden a nuestro objetivo ac- comunidades cristianas.
tual nos basta recordar al Vaticano
II: 2.1.3.2. La Divina Tradición

2.1.3.1. La Sagrada Escritura De ella dice igualmente el Conci-


lio: "La palabra de Dios confiada
Es la Palabra de Dios en cuanto por Cristo el Señor y por el Espíri-
que está consignada por escrito bajo tu Santo a los Apóstoles, la Sagrada
la inspiración del Espíritu Santo Tradición la transmite íntegramente
(DV 9). "La Iglesia no obtiene por a los sucesores de ellos a fin de que
medio de la sola Sagrada Escritura ellos. iluminados por el Espíritu de
la certeza acerca de todo lo revela- la verdad, con su predicación, fiel-
do" (DV 9). Ya que la Tradición mente la guarden, la expongan y la
recibe la palabra de Dios y la trans- difundan" (DV 9).
mite (cfr. DV. 9)
2.1.4 Características de los li-
"En la composición de los Libros bros del Nuevo Testamen-
Sagrados, Dios se valió de hombres to y en especial de los
elegidos que usaban de todas sus Evangelios
facultades y talentos; de este modo,
obrando Dios en ellos y por ellos, "Los escritos del Nuevo Testa-
como verdaderos autores, pusieron mento dan testimonio perpetuo y
por escrito todo y solo lo que Dios divino" (cf. DV 17) del cumpli-
quería" (DV 11). miento de los tiempos, de la Encar-
nación del Verbo, de la irrupción
"Los Libros Sagrados enseñan del Reinado de Dios en la tierra,
sólidamente, fielmente y sin error de la revelación que Jesús hace de sí
la verdad que Dios hizo consignar mismo y del Padre y del perfeccio-
en dichos libros para salvación nues- namiento de su obra con su muerte,
tra" (DV 11). resurrección, ascensión gloriosa y
con el envío del Espíritu Santo.
"El canon íntegro de los Libros También dan testimonio de que
Sagrados se da a conocer a la Iglesia levantado en la cruz atrae a los
por la misma Tradición, la cual hace hombres hacia sí, y de que es el
que la Iglesia los comprenda cada único que tiene palabras de vida

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eterna. Este misterio no fue revela- pueden aprecia!· mejor tres etapas
do a los antepasados, sino que aho- en la vida y mensaje de Cristo antes
ra es revelado en el Espíritu Santo de llegar a nosotros: primero, su
a los Apóstoles de Cristo y a los vida y predicación antes de Pascua;
profetas a fin de que prediquen el segundo, la predicación apostólica
Evangelio, susciten la fe en Jesús el de la muerte y resurrección de Jesús,
Mesías y el Señor y congreguen la los relatos de su vida y repetición
Iglesia" (cf. DV 17). de sus palabras dentro de la misma
predicación; tercero, la labor redac-
El Nuevo Testamento es el cum- cional de los hagiógrafos que pusie-
plimiento del Antiguo y los libros ron por escrito seleccionando, sin-
del Antiguo Testamento fueron in- tetizando y adaptando, pero man-
corporados a la predicación evangé- teniendo forma de proclamación.
lica (cf. DV 16). La Historia de las fl)rmas ha distin-
guido en la predicación referente a
Los Evangelios son el testimonio Cristo variadas formas: catequesis,
principal de la vida y doctrina de narraciones, testimonio, himnos,
Jesucristo (cf. DV 18). Son parte discursos, etc. y se ha esforzado por
de los escritos neotestamentarios en determinar la "situación vital" de
los que laIglesia primitiva da su tes- cada una de las pequeñas unidades
timonio de fe acerca de Jesús el literarias con que están compuestos
Mesías. El texto que poseemos es el los evangelios. Procura seguir su
más copiado en la historia de la evolución desde su origen en la vida
humanidad y ha de tenerse por de Jesús, o a través de la tradición
seguro. La crítica literaria se ocupa oral pasando por redacciones hasta
de las características de estos escri- la redacción final.
tos. Ha llegado a la conclusión de
que a la redacción procedió un El Magisterio de la Iglesia se ha
período de tradición oral. Fuentes pronunciado acerca de este método
escritas, que ya no se conservan, alertando y estimulando (P.C.E.
parecen haber entrado a formar Instrucción "Sancta Mater Ecclesia"
parte del material de los evangelios 21 IV 1964) Y las líneas fundamen-
sinópticos. Las diferentes piezas de tales de dicha instrucción fueron
la tradición se compilaron y redac- asumidas por el Concilio Vaticano
taron en los evangelios. El kerigma II en D.V. 19 al tratar del carácter
apostólico o predicación viva del histórico de los Evangelios.
evangelio (cf. DV Sc) se transmitió
en diferentes formas que han sido
y son estudiadas por el método de 2.1.5 La verdad histórica de los
la "historia de las formas", que Evangelios
purificado de prejuicios filosóficos
y teológicos y con un trabajo ince- Esta cuestión tiene una larga his-
sante, ha abierto una vía de acceso toria que aquÍ no vamos a evocar.
desde el Cristo de la fe de la Iglesia Actualmente se presentan unos
a través de los evangelios hasta hechos y se plantean las preguntas.
Jesús de Nazareth objeto de la mis-
ma fe de la Iglesia. Gracias al méto- Hechos. El texto actual de los
do de la historia de las formas se Evangelios es el estadio final de

158 CRITERIOS TEOLOGICOS


redacciones que la precedieron (cf. aunque no lo transmite con la fide-
Lc 1,1-4) y que a su vez espigaban lidad material de una grabación
de la predicación o kerygma que se magnetofónica (cfr. 57. Kern, W.
transmitía en las comunidades de 241).
la Iglesia primitiva. Los Evangelios
fueron escritos por lo menos unos Los evangelistas y las comunida-
treinta o cuarenta años después de des primeras refieren hechos y pala-
los hechos que refieren. bras no que ellos han creado sino en
que ellos han creído. Por haber
Estos escritos y la predicación creído ven los hechos y escuchan
precedente nacen de la fe y son las palabras a la luz de "los aconte-
para suscitar la fe. Han deformado cimientos gloriosos de Cristo y por
la historia? Al reproducir la imagen la iluminación del Espíritu de ver-
de Cristo de la fe cierran el acceso a dad" (P.C.B., Instrucción "Sancta
Jesús de Nazareth? Mater Ecclesia", n. 2d).

Por otra parte, observamos igual- En resumen, es la tradición de la


mente otros hechos. Los Evangelios Iglesia la que nos da confianza ple-
son testimonio de fe de diversas co- na en el acceso a Jesús de Nazareth
munidades de la Iglesia primitiva a través del kerygma evangélico,
que están en continuidad sin ruptu- aunque resulta "con frecuencia im-
ra con lo sprimeros testigos del posible señalar el exacto tenor de
Señor resucitado en quien recono- un pasaje en la haca de un Jesús
cen a Jesús de Nazareth autenticado histórico, pero precisamente por
por Dios con obras poderosas, mi- la Índole genuina del testimonio,
lagrosas y signos (Act. 2,22-36). que refleja la situación histórica y
"Sin este kerygma no habría habido teológica del siglo 1, deduce el
Evangelios, ya que el anuncio mis- entendido la especial credibilidad
mo de Jesús crucificado y resucita- de la tradición (57, Kern, W. 241).
do es el presupuesto y el alma de la
tradición evangélica. Igualmente en La Iglesia se ha pronunciado en
el kerygma apostólico, por consi- favor de "La verdad histórica de los
guiente, la vida terrena de Jesús Evangelios" y la ha explicado en la
sigue siendo el dato fundamental e citada instrucción de la Pontificia
imprescindible" (34. Geiselmann, Comisión Bíblica, y el Concilio
J. R. 212; cfr. 22. Dodd, e.H.). El Vaticano 11 sintetiza con energía la
mismo Geiselmann concluye su misma enseñanza (DV 17).
libro así: "La Iglesia primitiva creía
no solo en el Mesías, sino también
en el Jesús histórico como Mesías" 2.1.6 Valor cristiano del Anti-
(ih. pago 213). guo Testamento
La predicación de la fe del Nuevo El designio oculto de Dios res-
Testamento está referida al Jesús pecto a la salvación de los hombres
histórico, pero anuncia sus dichos y se va realizando en la historia hu-
hechos como propios del Señor mana. Comenzó a revelarse en la
resucitado y presente en su Iglesia, Antigua Alianza antes de consumar-

HUGO FERNANDEZ MORA, PBRO. 159


se por Cristo en la plenitud de los y conservan para siempre su valO!
tiempos. (cf. DV 14).

Dios escogió en el Antiguo Testa- La Iglesia ha recibido los libw&


mento a Israel, a fin de hacerlo del Antiguo Testamento "UII~Ol'pO
instrumento de salvación por todo radas a la predicación evangéhca".
el mundo. Por eso Dios le dió a Ellos alcanzan y muestran su pleni-
Israel la gracia para que antes de tud de sentido en el Nuevo Testa-
que Cristo llegara, pudiera vivir por mento (cf. Mt 5,17; Lc 24,27; Rm
la fe en el misterio de Cristo. 16,25-26; 2 COl' 3 14-16) y a su vez
lo iluminan y lo explican.
Bajo el régimen de la Antigua
Alianza Dios dió a su pueblo leyes "La Palabra glorificada de Cristo,
que educaran los corazones, institu- llena de su Espíritu, explica el sen-
ciones que bosquejaran el misterio tido del Antiguo Testamento (Cf.
de la salvación y lo dieran a conocer Lc 24,27: "Y, empezando por
bajo el velo de las figuras a la fe de Mo\sés y continuando por todos los
los creyentes. profetas, les explicó (dierméneusen)
lo que había sobre él en todas las
En el Antiguo Testamento la his- Escrituras"). Cristo, de diversas ma-
toria fue dirigida por Dios a fin de neras está en el Antiguo Testamen-
educar los corazones de los hom- to; así lo indica él mismo (cf. Lc
bres para la salvación, bosquejar el 4,16-21)".
misterio de Cristo y significarlo.
"Los libros del Nuevo Testamen-
Los profetas anunciaron la salva- to, en un acto contemplativo, des-
ción escatológica y al atestiguar la cubren el sentido cristiano del Anti-
caducidad de la Antigua Alianza guo Testamento. Los Padres, en
empezaron a revelar su significación cambio, establecen técnicas de
figurativa. interpretación del Antiguo Testa-
mento principalmente la alegoría, la
Las anteriores afirmaciones son "theoria" y la tipología. Además
el resumen del libro del P. Grelot, hay el moderno "sensus plenior".
"sentido cristiano del Antiguo Tes-
tamento ", (Desclée de Brouwer, El principio que une estas técnicas
Bilbac. 1967) sintetizadas en las es el simbolismo. Cristo es el símbo-
tesis de la primera parte de "Biblia lo central. Porque el Antiguo Testa-
y Teología" del mismo autor (Her- mento es símbolo de Cristo, por eso
der. Barcelona. 1969). hay que leerlo cristianamente.

En síntesis, el Antiguo Testa- Para leer cristianamente el Anti-


men to es una prefiguración, una guo Testamento es preciso ver en él
preparación, un anuncio, y una la presencia de Cristo Salvador. La
prome'w de la economía del Nuevo comunidad de fe experimenta la
Tl'stallll'nto. Los libros del Antiguo salvación actual y la refiere al futu-
T('sLamento son inspirados por Dios ro. La experiencia de fe es comum-

16(' CRITERIOS TEOLOGICOS


cable y formulable. Utiliza símbo- Así habría que disponerse para
los sobre todo cuando es consciente leer los textos mesiánicos del Anti-
de la presencia del misterio futuro guo Testamento: no como "dicta
en la salvación presente. Los libros probantia" sino como un testimo-
del Antiguo Testamento entran en nio global sobre la salvación futura
un contexto escatológico; por eso que habría de realizar en Cristo
hay que vivirlos con la nueva luz de plenamente (cf. 31. Fuglister, N.,
los acontedmientos salvadores. en MS III, 1, 121-242).
Cristo glorificado, lleno del Espíritu,
declara el sentido simbólico del 2.2 El recurso de las fuentes
Antiguo Testamento (cf. Luis Alon-
so Schokel Comentarios a DV, BAC 2.2.1 Hay que recurrir
Madrid, 1969).
2.2.1.1. Fundamento
El Nuevo Testamento es la pleni-
tud de los tiempos (cf. Ef 1,10; Gal Toda predicación cristiana es
4,4; Mc 1,15) y todos los .cumpli- proclamación, explicación, profe-
mientos de la historia de la salva- sión de la fe. Ahora bien, "la Iglesia
ción están orientados a la venida de ha considerado siempre como su-
Cristo. El es el "sí" de todas las prema norma de su fe la Escritura
promesas de Dios (cf. 1,20). unida a la Tradición, ya que, inspi-
rada por Dios y escrita de una vez
Pero el cumplimiento desbordó para siempre, nos transmite inmuta-
inconmensurablemente la promesa blemente la palabra del mismo
y la imaginación. Por eso entre Dios; y en las palabras de los Após-
Antiguo Testamento y Nuevo Tes- toles y los Profetas hace resonar la
tamento la relación no es de simple voz del Espíritu Santo. Por tanto,
continuidad, sino que se da triple toda la predicación de la Iglesia,
reláción: a) continuidad (correspon- como toda la religión cristiana, se
dencia, semejanza); b) ruptura dis- ha de alimentar y regir con la Sagra-
continuidad, diferencia), c) superio- da Escritura" (DV 21).
ridad (el Nuevo Testamento es más
excelente, mejor). Esta es la inter- 2.2.1.2. Primera predicación: predica-
pretación sobre todo de la "carta" ción kerigmática
a los Hebreos (vgr. Moisés-Cristo;
sacerdocio antiguo-sacerdocio de Esta predicación que debería
Cristo; culto antiguo sacerdocio de darse más en la Iglesia actual, debe-
Cristo; santuario de Jerusalén - san- ría recurrir habitualmente a los
tuario celestial, etc.) y en general textos kerygmáticos del Nuevo Tes-
del Nuevo Testamento (Jesucristo tamento y al espíritu que animó la
es el sucesor de David 2 Sam 7,12 y primera predicación del cristianis-
Lc 1,32s., pero "Mi Reino no es de mo. A un mundo necesitado del
este mundo" (Jn 18,36ss). (cf. A. mensaje cristiano hay que comen-
Vanhoye, arto "cumplimiento", en zar por darle lo esencial: el anuncio
VTB, 2a. ed., Herder, Barcelona. claro y definido de Jesucristo
1973.213-215). resucitado manifestación del amor

HUGO FERNANDEZ MORA, PBRO. 161


de Dios que libera y salva al hombre Es lamentable encontrar escritos
y al mundo (cfr. E.N. 22). que se pretenden "teologías" sin
recurso alguno o sin recurso serio a
2.2.;1..3 Catequesis las fuentes de la divina revelación.
Tal vez porque han cambiado de
Siguiendo a DV 10 y 24 Juan Pa- fuentes:
blo 11 acaba de decimos: "La cate-
quesis extraerá siempre su conteni- "Doble mal ha hecho mi.pueblo:
do de la fuente viva de la palabra de a mí me dejaron,
Dios, transmitida mediante la Tradi- manantial de aguas vivas,
ción y la Escritura. . .". "Hablar de para hacerse cisternas,
la Tradición y de la Escritura como cisternas agrietadas,
fuentes de la catequesis es subrayar que el agua no retienen". (Jer 2,
que esta ha de estar totalmente im- 13).
pregnada por el pensamiento, el
espíritu y las actitudes bíblicas y
_evangélica a través del contacto 2.2.2. Cómo recurrir
asidüo con los textos mismos. . . "
(55 Juan Pablo 11 "Catechesi Tra- El recurso a la Sagrada Escritura
dendae" (16 octubre de 1979), ha de ser con el ánimo de encontrar
n.27). allí la palabra de Dios que ilumina,
para "tener allí vida eterna" (Jn 5,
La peculiaridad de la catequesis 39).
es hacer madurar la fe y educar al
verdadero discípulo por medio del Hay que desterrar el falso méto-
conocimiento de la persona y men- do de poner en los textos de la
saje de Nuestro Señor Jesucristo Escritura lo que uno quiere que
(cf. 55 Juan Pablo 11, C.T., 19). digan. Hay que hacer exégesis y no
"eiségesis". Apartarse de las lectu-
2.2.1.4. Teología ras y relecturas selectivas y tenden-
ciosas.
"La Teología se apoya como en
cimiento perdurable, en la Sagrada La Escritura se ha de leer e inter-
Escritura unida a la Tradición; así pretar con el mismo Espíritu con
se mantiene firme y recobra su que fue escrita: por tanto, para des-
juventud, penetrando a la luz de la cubrir el verdadero sentido del tex-
fe la verdad escondida en el miste- to sagrado hay que tener muy en
rio de Cristo" ... debe ser alma de cuenta el contenido y la unidad de
la Teología" (DV 24). toda la Escritura, la Tradición viva
de toda la Iglesia, la analogía de la
Una de las características de la fe" (DV 12c).
Teología renovada es su fuerte
recurso a la Sagrada Escritura ya la Hay que leer la Sagrada Escritura
Tradición no ya en busca de textos como una unidad cuyo hilo conduc-
para apuntarlar tesis sino en busca tor es el símbolo de la fe, profesado
de escuchar allí los testimonios por el pueblo de Dios e interpreta-
diferenciados y el testimonio global do por el magisterio vivo de la
del misterio de Cristo. Iglesia.

162 CRITERIOS TEOLOGICOS


Hay que leerla en la comunión los Evangelistas es una lectura infiel
con toda la Iglesia, depositaria de la Es cierto que en su variedad con-
Divina Revelación, a fin de asegurar vergen en el mismo Jesús, pero en
el único ambiente comunitario en cada pasaje cada uno tiene su pers-
el cual ella puede ser fielmente vivi- pectiva. Y esta es parte de la rique-
da e interpretada. za de la imagen de Jesús y de su
mensaje. Cuánta razón tuvo la Igle-
Tener ,en cuenta la naturaleza sia al proscribir la mezcla de los
diferenciada de los testimonios es- Evangelios echando al olvido los
crlturísticos: época, espacio, género "diatessaron" como el de Taciano.
literario, intención.

Pero no hacer a las controversias 2.3 Criterios referentes al sujeto


objeto de predicación, ya que hay que presenta a Jesucristo
que tener máximo respeto a la fe de
los sencillos. 2.3.1. El Padre presenta a su Hi-
jo; Jesucristo mismo se
Servirse de comentarios compe- presenta; el Espíritu San-
tentes y al alcance. to lo da a conocer

El Antiguo Testamento tiene sen- 2.3.1.1. El Padre presenta a su Hijo


tido para los cristianos solo como
profecía cumplida en Jesucristo, El acontecimiento de Cristo co-
como palabra ya realizada en él y mienza por el Padre y en el Padre
en la Iglesia. La interpretación de mismo se origina la voluntad de
cualquier pasaje del Antiguo Testa- manifestarlo. De El viene todo ser
mento aplicándolo a las realidades (1 Cor 8,6) y toda acción. De El
actuales sin pasarlo a través de Cris- nace desde siempre el Logos, la
to y de la Iglesia y sin referencia a Palabra eterna (Jn 1,1). El es el in-
la consumación escatológica es una visible y quiere, en cierto sentido,
lectura pagana de la Biblia. Así se seguir siendo invisible (1 Tim 6,16)
trate de la lectura del Exodo. y revelarse por el "acontecimiento
Cristo" (cf. 106. Schulte, R., MS
No puede ser verdadera la inter- III, 1, 67ss). "Tanto amó Dios al
pretación que se hace en contra del mundo que dió a su Hijo único"
resto de verdades de la revelación y (Jn 3,16; cf. Gal 4,4).
de la Tradición y del "sensus fide-
lium" y en contra de la comunión Igualmen te del Padre parte el
con la Iglesia y sus pastores. envío de su Hijo para rescatarnos
(cf. Gal 4,4). El Padre lo había
Especialmente, en relación con anunciado a través de sus obras (ef.
los Evangelios, informarse cada vez Gen 1,1; Jn 1); por medio de la ley,
mejor acerca de "lo que los autores los personajes, las promesas, los
en realidad querían significar y de anuncios mesiánicos del Antiguo
lo que, con las palabras de ellos, Testamento. Estas fueron palabras
Dios quería manifestar" (DV 12a). del Padre a la humanidad por medio
Hoy una lectura indiferenciada de de su pueblo en vistas a hacerlo hijo

HUGO FERNANDEZ MORA, PBRO. 163


en el Hijo (cf. Ex 4,22; Dt 14, 1; como predicador). El Vaticano II
Os 11,1 Jr 31,20). El Padre empezó presenta la obra del Padre en AG
a anunciar a su mensajero en el y DH 11.
Antiguo Testamento (Act 13,23.32;
Rom 1,2; 15,8; 2Cor 1,20) en don-
de estaba presente la palabra del 2.3.1.2_ Jesucristo mismo se presenta
Padre (cf ls 40,8). Las palabras
fragmentarias del Padre en el Anti- El Hijo mismo dice "yo he veni-
guo Testamento se hacen palabra do" (Jn 10,10; 16,32; Mc 2,17, etc)
única, plena y definitiva de Dios en y él mismo proclama la Buena Noti-
el Nuevo (cí. Hebr 1,1-4; Jn 1). cia (Mc 1,14-15) que es El mismo
(cf. Mc 1,1; Rom 1,2-5). Porque El
En el Nuevo Testamento, espe- mismo es el Reino de Dios. En las
cialmente para Pablo, el Padre es el parábolas el tema principal es Cristo
que revela a su Hijo (Rom 3,21-24; mismo (cfr. Mc. 12,12). La muerte
Gal 1,16; Ef 3,3). "Pues el mismo y resurrección son el término y sen-
Dios que dijo: De las tinieblas brille tido de su venida y de su obra. El
la luz, ha hecho brillar la luz en mismo es la culminación de la reve-
nuestros corazones, para irradiar lación de Dios en el mundo (cfr.
el conocimiento de la gloria de DV 2). El dice relación al Padre ya
Dios que está en la faz de Cristo que es su imagen (ICor 11,7; 2Cor
(2Cor 4,6). Pero es quizás en los 4,4; Col 1,15), "resplandor de su
episodios del Bautismo de Jesús gloria y figura de su sustancia"
(Mc 1,9-11 y paralelos) y de la (Hebr 1,3).
Transfiguración (Mt 17,5 Y 2Pe 1,
16-18) en donde aparece de una Es el único Maestro (Mt 23,10).
manera más clara y hermosa cómo La palabra de Dios es palabra del
el Padre presenta a su Hijo Jesús Señor y palabra sobre el Señor
como Mesías en camino de cruz (Act 8,25), es evangelio cuyo con-
hacia la gloria e invita a los discípu- tenido esencial es Jesucristo (1 Tes
los a escucharlo como el Profeta 3,2). Es Cristo quien predica (c!.
anunciado y escatológico. 2Cor 3,3), envía embajadores (2Cor
5,20). El es' el sujeto y ~jeto de la
En San Juan dice Jesús: "Nadie predicación. San Agustín lo dice de
puede venir a mí, si el Padre que me modo sorprendente: "Christus
ha enviado no lo atrae" (Jn 6,44). Christum praedicat" (Sermo 354:
El Padre da testimonio de su Hijo PL 39,1563; cf. 48 Gunthor, A.,
(Jn 5,32_36-37; 8,18)_ 42).
En resumen: el Padre dice su Pa- En el Evangelio de San Juan él
labra, la manifiesta eternamente, en mismo se presenta con las siete pa-
la creación, en el Antiguo Testa- labras de autorevelación "Yo soy"
mento, con obras y palabras frag- más un atributo (o atributos): Jn
mentariamente; finalmente de ma- 6,35: el pan; 8,12: la luz; 10,7: la
nera plena en Jesucristo de quien da puerta; 10,11: el pastor; 11,25: la
testimonio por obras y palabras (cf. resurrecclón; 14,6: el camino y la
60. Klostermann, F. 212-214; Dios verdad y la vida; 15,1: la vid.

164 CRITERIOS TEOLOGICOS


"Jesucristo, Palabra hecha car- "Enviada por Dios a las gentes
ne, ... con su presencia y manifesta- para ser "sacramento universal de
ción, con sus palabras y obras, sig- salvación (LG 48), la Iglesia por
nos y milagros, sobre todo con su exigencia radical de su catolicidad,
muerte y gloriosa resurrección de obediente al mandato de su Funda-
entre los muertos y con el envío del dor (cf. Mc 16,16) se esfuerza en
Espíritu de la verdad, lleva a pleni- anunciar el Evangelio a todos los
tud toda la revelación y la confirma hombres" (AG 1).
con testimonio divino" (DV 4).
Así comienza el decreto del
El Concilio Vaticano II presenta Concilio Vaticano II sobre la activi-
la misión del Hijo, en AG 3. dad misionera de la Iglesia: toda la
Iglesia ha sido enviada a anunciar el
2.3.1.3. El Espíritu Santo da a cono- Evangelio. "La Iglesia peregrinante
cer a Cristo es, por naturaleza misionera puesto
que toma su origen de la misión del
El Espíritu que formó la humani- Hijo y de la Misión del Espíritu
dad del Señor en el seno de la Vir- Santo, según el propósito de Dios
gen (cf. Lc 1,35), que estuvo sobre Padre, cf. LG 2" (AG 2).
Jesús en su manifestación cuando el
Bautismo (Mc 1,9-11), yen la inau- Los Apóstoles, llamados por Cris-
guración de su ministerio (Lc 4,18) to, fueron la semilla del Nuevo
revela el misterio de Cristo en la Israel y el origen de la Jerarquía.
Iglesia (cf. Ef. 3,5), inauguró la Recibieron misión triple (cf. Mt 28,
Iglesia en Pentecostés (Act. 2). 18-20), mandato de predicar el
Evangelio en orden a la fe y la sal-
Es el Espíritu de Cristo (Rom vación (cf. Mc 16,15).
8,9; Flp 1,19) que inspira la con-
fesión de fe de la Iglesia en Jesús 2.3.2.2. Misión de los Apóstoles y sus
como Kyrios (cf. ICor 12,3), traba- sucesores
ja constantemente por la unidad de
la Iglesia (ICor 12,13), es Espíritu El deber de la Iglesia de propagar
de comunión (Ef 4,3-4; Flp 2,1) la fe y la salvación de Cristo ha sido
que hace anunciar la palabra de recibido por un mandato y por una
Dios (Act 4,30). El Vaticano II vida.
presenta esta acción del Espíritu
en AG 4,15. Por un mandato de los Apóstoles
lo recibió el orden de los Obispos
bajo el sucesor de Pedro (LG 19s;
2.3.2. La comunidad eclesial AG 5). Estre sus deberes principales
creyente es la encargada se destaca la predicación del Evan-
de presentar a Jesucr~to gelio (cf. LG 25; ChD 12).
(cf 60. Klostermann, F.,
216-231). A ellos ayudan los presbíteros y
diáconos (LG 20c) cuyo deber pri-
2.3.2.1. La Iglesia es misionera por na- mero es anunciar el Evangelio (cf.
turaleza (cf. LO 17; EN 59). PO 4).

HUGO FERNANDEZ MORA. PBRO. 165


2.3.2.3. Misión de todos los miembros 2.3.3. El creyente, en la comu-
de Cristo (DH 13; AG 35) nidad eclesial, presenta a
Jesucristo.
Por virtud de la vida recibida de
Cristo (cf. Ef 4,16) todos los miem- Por virtud de su sacerdocio co-
bros trabajan cada uno según su mún, los bautizados están llamados
operación propia por el crecimiento a anunciar las maravillas de aquel
de la caridad. que los llamó de las tinieblas a su
luz admirable, cf. 1Pe 2,4-10 (cf.
"La Iglesia, enriquecida con los LG 10).
dones de su fundador y observando
fielmente sus preceptos de caridad, Por el sacramento del bautismo
humildad y abnegación, recibe mi- están consagrados "a confesar de-
sión de anunciar el Reino de Cristo lante de los hombres la fe que
y de Dios e instaurarlo en todos los recibieron de Dios mediante la
pueblos y constituye en la tierra el Iglesia" (LG lla).
germen y el principio de ese reino"
(LG 5b). "Por el sacramento de la confir-
mación". . . están "obligados más
Es pues, toda la Iglesia la que ha estrictamente a difundir y defender
sido enviada a anunciar y presentar la fe, como verdaderos testigos de
a Cristo con el ejemplo, la predica- Cristo, por la palabra juntamente
ción, los sacramentos. con las obras" (LG lla.).

Habiendo el Señor enviado al Los seglares están llamados a


mundo una Iglesia, a una comuni- evangelizar, a dar claro testimonio
dad, estará más capacitada para de Cristo (cf. AA 2), a buscar que
realizar su misión mientras más sea todos conozcan al Dios verdadero y
Iglesia, mientras mejor viva como a su enviado Jesucristo (cf. Jn 17,3;
comunidad. Esto se realiza siguien- AA 3b; cf. EN 70).
do el modelo de la Iglesia en sus
comienzos (cf. Act 2,42), buscando "La responsabilidad de diseminar
la unidad que el Señor quiso para la fe incumbe a todo discípulo de
su Iglesia y a la cual promete efica- Cristo en su parte" (LG 17).
cia en orden a que el mundo crea
en Jesucristo (cf. Jn 17,21; Cf. EN El creyente que vive, que se em-
77). peña en vivir la comunión en la co-
munidad es el que mejor está dis-
Toda la comunidad es responsa- puesto para presentar a Jesucristo.
ble de la predicación (lTes 1,7; cf. Vivir en la comunidad significa
60. Klostermann, F., 248-251). estar superando el simple amor in-
Esto implica ayuda a los predicado- teresado y por lo menos, ir en cami-
res y colaboración en la predicación no del amor en la dimensión de la
y en el testimonio del predicador. cruz (cf. Mt 5,43-48), como el Sier-
Esto es una manera renovada de vo de Dios (cf. 1Pe 2,21-25), "verá
concebir la labor evangelizadora. descendencia" (cf. Is 53,9-10). Este

166 CRITERIOS TEOLOGICOS


es el testimonio personal y comuni- moral que es de por sí una predica-
tario de que habla EN 21. El amor ción eficaz.
fraterno irradia irresistiblemente
(cf. 1Jn 3,14). La palabra de Dios es viva y efi-
caz (cf. Hebr 4,12). Sin caer en una
2.3.4. El punto de partida desde especie de "donatismo de la pala-
donde presentar a Jesu- bra" (cí. 91. Ratzinger, J., 52) po-
cristo demos afirmar que aunque no se
suprima la eficacia, sí puede ser
2.3.4.1, Punto de partida objeti- impedida por la falta de testimonio.
vo: "Los hechos centrales salvíficos El Cristianismo es un mensaje que
cuya recíproca intercomunicación se transmite como los valores: por
("circumincessio") tiene siempre medio de testimonio (cí. 38. Gras-
delante de su mirada" (H. Urs von so, D., 246).
Balthasar, "Reflexiones histórico
salvíficas sobre la Teología de la
Liberación, en C.T.!., Teología de 2.3.5. La finalidad que se pro-
la Liberación, BAC minoro Madrid. pone el sujeto creyente
1978 pago 165).
La comunidad creyente o el cris-
2.3.4.2. Punto de partida subjeti- tianismo en la Iglesia presentan a
vo. La fe en Jesucristo se difunde Jesucristo en orden a suscitar o
por medio de la palabra unida al hacer crecer la fe de los destinata-
testimonio. Cuando hay personas rios en El y así buscar la salvación
que han percibido el significado que de los mismos.
Cristo muerto y resucitado tiene
para sus vidas, se han dejado alcan- "Predicando el Evangelio, la Igle-
zar por El (cf. Flp 3,12), se han sia atrae a los oyentes a la fe y a la
comprometido en su servicio, han confesión de la fe, los prepara para
sido perseguidos y, sin embargo, el bautismo, los libra de la servi-
viven en la más pura alegría, enton- dumbre del error y los incorpora a
ces Cristo es anunciado. Su palabra Cristo para que por la caridad crez-
se apoya en el testimonio de la can en él hasta la plenitud" (LG 17).
comunidad de los que ya han acep-
tado el mensaje y gritan con su vida Con el anuncio de las maravillas
el sentido de lo que anuncian los que Dios ha obrado por Cristo se
apóstoles (cf. 39. Grasso, D. 233). propone el heraldo de Cristo invitar
a los hombres a creer en el amor de
Personas que se han encontrado Dios manifestado en el plan de sal-
con Jesucristo y lo han dejado vación.
entrar en su propia vida son las per-
sonas que lo transparentan ante los "Lo que hemos visto y oído, os
demás. lo anunciamos, para que también
vosotros estéis en comunión con
Una persona o una comunidad nosotros y nosotros estemos en
que tienen fe en Jesucristo muerto comunión con el Padre y con su
y resucitado constituyen un milagro Hijo, Jesucristo" (1Jn 1,3).

HUGO FERNANDEZ MORA, PBRO. 167


Concretamente presentamos a de Cristo (1 Tes 3,2; 2Cor 9,13), el
Jesucristo en orden a la conversión, evangelio de la gloria de Cristo
la fe y el crecimiento de la vida cris- (2Cor 4,4), el evangelio de vuestra
tiana, es decir, para seguirlo a El. salvación (Ef 1,13), el evangelio de
paz (Ef 6,15), el evangelio de ver-
Consciente de que la vida eterna dad" (Col 1,5).
consiste en conocer a Dios y a su
enviado Jesucristo (cf. Jn 17,3), El contenido del Evangelio según
quien presenta a Jesucristo no lo los sinópticos es el reinado de Dios
hace por ganancia, por prestigio, (Mc 1,15), según Act 8,12 es la ve-
para predicarse a sí mismo, sino nida del reinado de Dios, es decir la
para que los oyentes tengan vida buena nueva de Jesucristo (Act 8,
eterna. 35). Pablo es "escogido para el
Evangelio de Dios ... prometido en
las Escrituras ... acerca de su Hijo ...
2.4 Criterios referentes al obje- Jesucristo Señor Nuestro" (Rom
to por presentar 1,2-5). Los Apóstoles evangelizan a
Jesucristo (Act 5,42), las riquezas
2.4.1. El objeto de la predica- de Cristo (Ef 3,8), a Jesús y su resu-
ción es Jesucristo rrección (Act 17,18), la cruz de
Cristo (lCor 1,17).
El Nuevo Testamento presenta
diveraas expresiones para indicar el "El contenido del Evangelio es
objeto de la predicación: una persona: Dios en Cristo, por
quien se revela y en quien nos salva
- Primera expresión: (Mc 1,14- y cuya buena nueva es el evangelio"
15). Buena Noticia del Reinado de (38. Grasso, D., 50, para lo anterior
Dios (Lc 4,43), pero este Reinado cf.43-50).
de Dios es Jesucristo (comparar Mt
19,29 con Lc 18,29-30). - Cuarta expresión: objetivo de
la predicación es el "misterio" (20
- Segunda expresión: La palabra veces en Pablo). Es un gran misterio
de Dios (30 veces), la palabra del (6 veces) que Dios le ha revelado
Señor (40 veces), la palabra (8 ve- para que lo anuncie (Ef 3,3-7). Es el
ces) es el contenido de la predica- plan de salvación que Dios mantuvo
ción (Act 3,3; 15,35); 1 Tes 1,6.8; oculto desde la eternidad, que aho-
Rom 10,17). San Juan identifica la ra ha revelado y anuncia. Son tres
palabra con el Verbo Encarnado fases. Su contenido son los bienes
(Jn 1,1.14). Juan anuncia la "pa- mesiánicos (Is 64,3), la vida eterna
labra de vida" que es Cristo (1 Jn (lCor 2,7-10), la vocación de los
1,1-4). Los Apóstoles predican la gentiles (Rom 16,25-27; Ef 3,6-8),
palabra de Cristo (Act 8,5) o a la reconciliación en la sangre de
Jesucristo (Act 9,20). Cristo (Col 1,26 y 1,20), la recapi-
tulación de todas las cosas en Cristo
- Tercera expresión: el evangelio (Ef 1,10), es decir que el universo
(1 Tes 2,4; 1Cor 4,15), el evangelio vuelva a tener a Cristo por cabeza.
de Dios (1 Tes 2,2.8.9), el evangelio Una vez más, Cristo es el objeto del

168 CRITERIOS TEOLOGICOS


anuncio. Dios quiso dar a conocer En conclusi6n: el objeto de la
cuál es la riqueza de la gloria de este predicación es la buena noticia de
misterio entre los gentiles, que es que Dios ha iniciado su reinado en
Cristo entre vosotros, la esperanza el mundo por medio de uno a quien
de la gloria" (Col 1,27). ha constituido centro de una miste-
riosa historia de salvación que reali-
za por medio de su vida pasión y
- Quinta expresión: el Cristo muerte y resurrección con lo cual
pascual (cf. SC 106) es decir Jesu- infunde en nosotros su Espíritu y
cristo muerto y resucitado. La pre-
dicación kerygmática de los Actos y amor (cf. Rom 5,5) y se llama Jesu-
de Pablo proclama a Jesucristo cristo, es decir que el objeto de la
muerto y resucitado (Act 2,22-36; predicación es Jesús de Nazareth, el
Rom 1,2-5; 10,8-9; cf. 22, Dodd, C. prometido Mesías Salvador univer-
H., especialmente las tablas finales: sal.
el kerigma según Actos y Pablo).
2.4.2. Un cuestionamiento para
- Secta expresión: "la historia precisar el objeto que
de la salvación" esta expresión no hemos de presentar
es bíblica, pero representa la esen-
cia de la Biblia: "Cristo en vosotros Para presentar a Jesucristo basta
la esperanza de la gloria" (Col 1,27) con escoger cualquiera de estas ex-
El consuma la historia (Col 1,18- presiones? o hay que unirlas orgáni-
20). No es posible separar a Cristo camente? Con qué criterios? o tal-
del hombre. Cristo como nuestra vez basta con predicar un aspecto
esperanza y consumación es el obje- de su vida, una cualidad, ejemplo o
to de la proclamación. episodio? Puede cada uno formarse
subjetivamente la imagen que quie-
ra y hacerla objeto de su fe y de
- Séptima expresión: la predica- su predicación a los demás?
ción anuncia la salvación que nos
trae nuestro Salvador Jesucristo. Es Se puede, por propia voluntad o
la salvación mesiánica: que ha veni- elección, o impelido por propias
do a traer aquel a quien por ser Sal- ideas, silenciar algunos aspectos,
vador se le puso por nombre Jesús magnificar otros, interpretar por
(-Dios Salva) que es liberación de propia iniciativa la imagen total de
los pecados (Mt 1,21); el amor de Jesucristo y así predicarla?
Dios se manifestó salvando por me-
dio de su Hijo (cf. Jn 3,16-17); sal- "Se puede 'privilegiar' un aspec-
vación que comienza aquí pero se to, por ejemplo "el Jesús de la his-
consumará escatológicamente (Rom toria" y desvalorizar el "Cristo de
5,10; 8,19ss). El es llamado Salva- la fe", o viceversa? Imágenes como
dor (Lc 2,11; Act 5,31; Ef 5,23). la del "Subversivo de Nazareth" son
Salvación que nos libra de la muerte auténtico y lícito objeto de predica-
y del pecado y nos da vida nueva ción cristiana e imagen bajo la cual
(Rom 6,8ss). presentar a Jesucristo?

..
MUGO FERNANDEZ MORA, PBRO. 169
lT q • ..
2.4.3. En busca del método discípulos de Bultmann que recha-
para precisar el objeto zan la teología Lucana o ciertas
hemos de presentar capas redaccionales de los evange-
lios. En qué consiste la acción de
2.4.3.1. Cuatro normas Cristo? Para Lutero es la justifica-
ción por la fe. Para algunos libera-
En su hermoso libro "Palabra en cionistas actuales el compromiso
la Iglesia" el Cardo J. Ratzinger trae con una clase social y la lUGha revo-
un artículo titulado "Normas para lucionaria contra los poderes domi-
la predicación del evangelio en la nantes. Lo que significan entonces
actualidad". Seguiremos sus plan- las palabras de la Escritura también
teamientos porque arrojan gran luz significan ahora?
sobre nuestro tema.
La ambiguedad de la Escritura
La fe ha impuesto a la predica- puede ceder su puesto a la univoci-
ción estas cuatro normas: 10) La dad solo si se lee como una unidad
primera norma es la Escritura en global en ambiente de contempla-
su wlidad de Antiguo y Nuevo Tes- ción de la imagen como un todo
tamento; 20) Las confesiones de fe gracias a la visión unitaria que da el
de toda la Iglesia y los dogmas que nexo entre fe e Iglesia.
ordenados en su "hyerarchia verita-
tum" las complementsn; 30) El ma- - Confesión de fe y dogma: el
gisterio vivo de la Iglesia viva; 40) "escriturismo" exclusivo (sola scrip-
La fe que la Iglesia vive concreta- tura) fue un fracaso. La misma Igle-
mente en sus comunidades (= sensus sia que recibió 'el canon de los Li-
fidelium). bros Sagrados reconoció como eje '
de la Escritura "el símbolo de la fe"
Cada una de estas normas parece y lo tuvo siempre como norma para
suficiente, pero al ser cuatro, se interpretar la Escritura. Los símbo-
colige que ninguna es suficiente por los son el hilo conductor que atra-
sí sola, que cada una necesita de la viesa toda la Escritura y guía en
otra. medio de su laberinto. Es un canon
orgánico dentro del canon íntegro
2.4.3.2. El orden de las normas de la Biblia. Son aclaraciones de ella
no desde afuera sino desde adentro.
- La Escritura como norma: así Son su plano.
enfatizaron los Padres; Lutero rea-
firmó diciendo que ella tiene clari- Pero sucede que los símbolos han
dad transparente por sí misma d~ ser actualizados en cada época
(perspicuitas) y se auto-interpreta. (de hecho lo han sido) y han creci-
Hoy con la controversia entre do por adición de estratos históri-
historicistas y hermeneutas se ha cos de donde resulta que como nor-
oscurecido la transparencia, surgen ma se han vuelto inseguros, en do-
cánones dentro del canon: los refor- ble dirección:
mados no aceptan los libros origina-
dos en la diáspora helenista; otros a) La relación entre símbolo y Es-
no aceptan las cartas pastorales; hay critura se ha oscurecido y se du-

170 CRITERIOS TEOLOGICOS


da si tales formulaciones tienen 2.4.4.3. Inversión del orden de las
hoy eficacia para seguir siendo normas
eje de la Escritura y su aclaración
interna. Se ha perdido entonces la tradi-
b) El otro problema es el de los ción y hemos aterrizado en el va-
"dogmas" que por ser un proceso cío? De ninguna manera. Intente-
histórico generan cuestiones mos recorrer el camino en sentido
como la del "entonces" y el "aho- inverso. Miramos ahora el edificio
ra", la interpretación, las fuentes, de abajo hacia arriba.
la redacción, la jerarquía de ver-
dades. a) La fe del pueblo de Dios. De ahí
c) El magisterio. Así como en la an- partimos. Auténtica comunidad es
tiguedad el "yo" de la Iglesia aquella que no se cierra sobre sí
quiso. estar representado en el misma, sino que abierta a toda la
Símbolo, en la época moderna Iglesia descansa precisamente en la
llega a su culminación un proceso pertenencia al todo. Se libera de su
por el cual la autoridad del ma- particularismo y se integra en toda
gisterio hace inequívocamente la Iglesia en el espacio y en el tiem-
presente la fe en su tiempo. po. "Lo que le hace ser Iglesia den-
tro de la Iglesia es la superación de
Pero también la historia de los sí misma dentro de la Iglesia total"
últimos cien años muestra la (pág. 30).
limitación de este principio, por
ejemplo el Vaticano II significó
triunfo sobre teología fundada Por eso el sentido de la fe, la fe
unilateralmente en encíclicas an- del pueblo es una instancia dentro
teriores. Por otra parte en de la Iglesia, en la medida en que
algunas partes están indispuestos sea garantía de la estabilidad y de la
contra lo que llegue de Roma y comunidad apoyada en la fuerza del
los prejuicios no les dejan ver con Espíritu.
claridad.
De ahí sale una consecuencia
d) La fe del pueblo de Dios: no que- para la predicación: la fe sencilla
daría sino redescubrir la fe de las del hombre sencillo merece un res-
comunidades, por un lado como peto del predicador, pues esta fe
principio de estabilidad, conti- puede haber captado mejor el nú-
nuidad y conservación. Por otra cleo central. Precisamente el paso
parte, piensan otros, la comuni- del Antiguo Testamento al Nuevo
dad es el lugar en donde se hace Testamento se realizó en la fe de
la verdad por medio del diálogo. los sencillos. Los "Anawin" no
Se cambia así Iglesia por comu- tuvieron ni el liberalismo de los
nidad local y tradición eclesiásti- saduceos ni la ortodoxia de los fari-
ca por experiencia religiosa. Así, seos. Ellos con sencillez vivían el
evidentemente se pierde el senti- núcleo de la promesa y de la doc-
do auténtico de la fe, de la predi- trina (Zacarías, Isabel, María, Jesús
cación y de la Iglesia misma. mismo). El defiende a los sencillos

HUGO FERNANDEZ MORA, PBRO. 171


contra el escándalo que atenta con- está abierta hasta la venida del Se-
tra su fe, fe de pobres (cf. Me 9,42). ñor y que solo en esa venida alcan-
za su plenitud" (id. 34). Entonces
Otra consecuencia: es la fe senci- se revelará la totalidad de la verdad.
lla de la comunidad eclesial en don-
de habla el verdadero sujeto, la Esto significa que la posibilidad
Iglesia. El predicador no habla por de fijar la fe y sus límites disminuye
encima, sino dentro de la comuni- y que la fe simplifica su núcleo: se
dad. acerca a la "fe de los sencillos".
Porque en definitiva lo que perte-
Hay que tener en cuenta que la nece al núcleo de la fe es lo sencillo.
fe de la comunidad en un elemento "El objeto de la fe es algo sencillo
para conservar y no para producir. (incomplexum), a saber, la cosa que
Cuando se pone a producir, produ- es una, es decir, Dios" (Dinisio
ce fantasías (como tantas desviacio- Cartujano, citado en H. de Lubac,
nes en las devociones a los muertos, La fe cristiana, Ediciones Fax, Ma-
en las devociones a los santos, etc). drid, 1970. 246 n. 20 y 247 n. 22).
"La fe sencilla de la Iglesia viva
representa una instancia para la pre- c) Confesión de fe y dogma. Tam-
dicación porque encarna la fe de la bién los símbolos y los dogmas son
Iglesia total, el auténtico sujeto del normas porque expresan la fe y
credo; en ella habla la Iglesia una y oración de la Iglesia total. Admiten
total de todos los tiempos" (pág. "Jerarquía de verdades" en razón
32). También en cristología hay Qe su universalidad no cuantitativa,
que partir de ahí. sino por su vinculación con el Dios
trinitario y la confesión original de
b) El Magisterio. En cuanto repre- la Iglesia primitiva, es decir, la cruz-
sentante de toda la Iglesia puede resurrección y Señorío de Cristo
exigir respeto y obediencia de parte (cf. CTI, Ratzinger, J., Pluralismo,
del predicador. El orienta la con- 46). "Las afirmaciones más univer-
ciencia del cristiano. Más peso tiene sales son las que fundan la fe: Jesús
cuando sus afirmaciones tienen más ha resucitado, Jesús es el Cristo, el
universalidad espacio-temporal. Señor, el Hijo de Dios, En tomo a
Esto no da derecho de autoerigirse estas afirmaciones fundamentales se
en juez del magisterio. Antes de agrupan gradualmente los otros
pensar que se pueda tomar otra contenidos de la fe" (cf. 88, Ratzin-
decisión hay que esforzarse por ger, J. pág. 35).
cumplir lo que ha sido propuesto.
Algunos se muestran escépticos. d) La Escritura. La Biblia tiene un
ante el magisterio pero no lo son valor normativo único porque solo
respecto a su propia manera de pen- ella es el libro de la Iglesia en cuan-
sar y la de los que se adaptan al to tal. El Espíritu que la edifica es
pensamiento mundano. el que le ha dado la Escritura
como expresión de Jesucristo.
"Creer diacrónicamente con toda
la Iglesia significa también: tomar En la Iglesia hay dos funciones:
la fe de la Iglesia como una fe que la de mantenerse en la fe y la de

172 CRITERIOS TEOLOGICOS


actualizarse. De ahí la tensión entre fórmulas vefdaderas pero incom-
magisterio y teología. Tensión salu-' pletas, se completa maravillosamen-
dable si ambos no pierden su orien- te con la vida de fe. A mí también
tación fundamental hacia el centro me enseñaron: "Jesucristo es la se-
del credo. gunda persona de la Santísima Tri-
nidad que se encarnó y se hizo
Resumen: "Podemos decir que la hombre para redimirnos y darnos
auténtica fe de las comunidades ejemplo de vida". Es imperfecta e
que permanecen en la fe y la ora- incompleta. Pero la fe no es la fór-
ción de la Iglesia de todos los tiem- mula. Se perfecciona con el símbo-
pos es una señal de validez. La nor- lo profesado durante la celebración
ma de la predicación está en aquello comunitaria del pueblo de Dios el
que testifica la Iglesia total de día del Señor y, tal vez, con la
todos los tiempos. Instancia de este homilía. Se completa con la parti-
testimonio es el magisterio, que cipación en el ciclo litúrgico: Pas-
puede exigir obediencia total cuan- cua, Pentecostés, otros misterios del
do habla en nombre de toda la Igle- Señor y los de la Virgen Madre del
sia y de su Señor. La Escritura yel Señor. Se completa con la práctica
dogma hay que leerlos de la fe viva de la oración, la adoración eucarís-
de la Iglesia total, ella les confiere tica y la caridad fraterna hasta el
carácter claro e inequívoco, al sacrificio por los demás, la solidari-
tiempo que recibe de ellos la orien- dad con los necesitados, el perdón
tación que ha de seguir. Mirar a la de las ofensas. Se completa además
totalidad, y de este modo, mirar con la adhesión global al Vicario de
hacia el Señor, es la primera norma Cristo y el Obispo y la comunión
a la que puede confiarse el que ha con el resto de la Iglesia, al menos
de predicar, y que luego le condu- en forma de no cerrarse o excluir
cirá paso a paso en su propio cami- conscientemente a nadie.
nar y orar en común con los de-
más" (cf. 88. Ratzinger, J., 36). 2.4.3.4.2. El Magisterio

2.4.3.4. Aplicaci6n de estas normas a 1. En primer lugar el magisterio


la presentación de Jesucristo universal ordinario y extraordina-
rio, magisterio viviente para la Igle-
No es tarea fácil porque supon- sia viviente. Se ha pronunciado pro-
dría una larga investigación, en la fusamente en el Concilio. El mismo
Iglesia y en las fuentes. Nos conten- magisterio actual sigue insistiendo
tarnos con algunas sugerencias. en la actualidad del Concilio. El
Vaticano 11 es pues, norma cristoló-
gica actual. En cuál Jesucristo he-
2.4.3.4.1. La fe del pueblo de. Dios en mos de creer, nos lo dice actual-
Jesucristo mente el Concilio. Tomando el
camino descendiente, presenta a
Se trata de la fe viva que tiende Jesucristo trinitariamente, como
hacia su objeto de la fe incompli- enviado del Pa_dre y dador del Espí-
cada, de la fe de los sencillos. Esta ritu; de manera histórico-salvífica y
fe, entre nosotros, aun poseyendo bíblica; su misterio pascual, espe-

HUGO FERNANDEZ MORA, PBRO. 173


cialmente su resurrección y glorifi- muestra al Padre, que debía irse
cación; de modo eclesial: es el Fun- para darnos el Espíritu (Juan); en
dador y Cabeza de la Iglesia, Maes- quien están los tesoros, la Iglesia es
tro, Pastor y Sacerdote; modelo de su cuerpo (Pablo); la Iglesia es
perfección que llama a su segui- sacramento de Cristo (Vaticano II).
miento, origen de toda santidad,
revelador del Padre; Verbo encarna- d. Cristo habla con su vida aun a los
do, Hijo de Dios e hijo del hombre, no cristianos: su humanidad, su
el hombre nuevo; pobre, humilde, fidelidad a la verdad, su amor uni-
caritativo, solidario; presente en versal.
medio de nosotros, meta de la hu-
manidad, de la historia y del cos- e. Cristo habla con su muerte: su
mos. cruz (sufrimiento y abandono) revi-
vida cotidianamente por la Iglesia
No se refirió el Concilio, me pa- en la Eucaristía (n. 7).
rece, a los misterios concretos de su
vida sino más bien al carácter global f. En Cristo se revela de modo nue-
de ella (vgr. LG 8 Y DV 4). vo la verdad sobre la creación: en
Cristo el mundo se re-vincula con
Me parece que emerge una ima- la fuente divina de Sabiduría y
gen rica y variada de Cristo. Habría Amor: "Cristo, Redentor del mun-
que predicar más esta imagen del do, es aquel que ha penetrado, de
Cristo del Vaticano Segundo. modo único e irrepetible, en el mis-
terio del hombre y ha entrado en
El objeto de la presentaci6n cris- su 'corazón. " (n. 8).
tol6gica de Juan Pablo 11
g. Dimensión divina del misterio de
(1) en Redemptor Hominis. la redención: "Jesucristo, Hijo de
Dios vivo se ha convertido en nues-
a. El hombre a finales del siglo XX tra reconciliación ante el Padre" (n.
ha de mirar "hacia Cristo, redentor 9), ha dado satisfacción al amor ya
del hombre; hacia Cristo, redentor la paternidad de Dios, quien por la
del mundo". Cruz da el Espíritu.

b. También en la Iglesia: "A El no- h. El sentido de la cruz y de la


sotros queremos mirar, porque solo muerte de Cristo se explican con la
en El, Hijo de Dios, hay salvación, revelación del amor misericordioso,
renovando la afirmación de Pedro es decir, con Jesucristo.
"Señor, a quien iríamos, tú tienes
palabras de vida eterna" (Jn 6,68; i. "Cristo, Redentor, revela plena-
cf. Hebr 4,8-12). mente el hombre al mismo hombre"
(n. 10): el hombre re-encuentra su
c. Presenta el misterio de Cristo al grandeza y valor, es re-creado. Por
cual hemos de tender, misterio que eso el hombre ha de acercarse a
significa que El es Cabeza, de quien Cristo Encarnado y Redentor para
procede todo (Pablo), camino y ver- encontrarse a sí mismo: adorará a
dad, resurrección y vida, que nos Dios y se maravillará de sÍ.

174 CRITERIOS TEOLOGICOS


j. El estupor ante el hombre es buena Nueva y ofrecimiento de to-
también Buena Nueva: La cruz ha dos los hombres, no se puede cam-
devuelto la dignidad al hombre. biar.

k. Tarea de la Iglesia es ayudar al b. Algunos la quieren cambiar por


hombre a mirar hacia Cristo (10). "relecturas ":
1. El misterio de Cristo es la base de Origen: nacidas de especulacio-
la misión de la Iglesia: nes teóricas y no de meditación de
- En Cristo, Dios se ha revelado la palabra ni de compromiso evan-
plenamente a la humanidad y el gélico.
hombre ha conseguido plena con-
ciencia de su dignidad. Efectos: confusión de los fieles
pues se apartan de "los criterios
- "Jesucristo es principio estable y centrales de la fe de la Iglesia" y se
centro permanente de la misión que dan como catequesis.
Dios mismo le ha confiado al hom-
bre". Descripción de estas relecturas":
- "La gran misión, es decir: revelar 10) Unos
a Cristo al mundo, ayudar a todo a. silencian la divinidad de Jesu-
hombre para que se encuentre a sí cristo;
mismo en El" (n. 11). b. interpretaciones reñidas con la
fe de la Iglesia
m. Jesucristo es el camino princi- vgr. Jesús sería "profeta"
pal de la Iglesia. El mismo es nues- anunciador del Reino
tro camino hacia la casa del Padre y no verdadero Hijo de Dios
es también el camino hacia el hom- -centro
bre (n. 13b). ni centro y objeto del mensaje
n. La Iglesia no puede abandonar al 20) Otros
hombre cuya suerte está tan estre- a. comprometido políticamente
chamente unida a Cristo (n. 14). b. luchador contra la dominación
romana y poderes
En resumen: Juan Pablo 11 pre- c. comprometido en la lucha de
senta en "Redemptor Hominis" el clases.
misterio de Cristo como proceden-
te del amor del Padre, vinculado y Crítica:
vinculante con el hombre, fundante 1) no se compagina con la fe de
de la misión de la Iglesia en favor de la Iglesia esta imagen de Jesús polí-
todo hombre, realizado por la cruz tico, revolucionario, subversivo de
y la resurrección por medio de las Nazareth.
cuales Cristo nos da su Espíritu.
2) La causa de la muerte de Jesús:
(2) Discurso Inaugural (en Puebla):
a. Punto de partida: la confesión de a. Dicen que fue el desenlace de
la fe de Pedro (Mt 16.16). Esta es la un conflicto poIí tico.

HUGO FERNANDEZ MORA, PBRO. 175


b. Crítica: a. ha informado su historia
b. plasmado lo mejor de sus valo-
a) se confunde pretexto insi- res en el futuro.
dioso de acusadores con la actitud debe seguir animando el futuro;
bien diferente de Jesús. en el presente:
b) se calla la voluntad de - revela la vocación de concor-
entrega del Señor y aun la concien- dia y unidad que destierra guerras
cia de su misión redentora. en continente de esperanza donde
la Iglesia ha sido factor de integra-
30) Interpretación verdadera: ción
a. Los Evangelios muestran clara- -- se expresa en religiosidad o
mente cómo para Jesús era una ten- piedad popular.
tación lo que alterara su misión de
Servidor de Yahveth (Mt 4,8; Lc 4, 60) Desde esta fe en Cristo somos
15). capaces de:
b. No acepta confusión entre co- a. servir al hombre
sas de Dios y actitudes meramente b. a los pueblos
políticas (Mt 22,21; Mc 12,17; Jn c. penetrar su cultura
18,36). d. transformar sus corazones
c. "Rechaza inequívocamente el e. humanizar sistemas yestructu-
recurso a la violencia" ras.
d. Abre el mensaje a la conver-
sión de todos, incluso de Publicanos 70) Contenido válido de la evange-
e. Su misión tiene perspectiva lización es el misterio íntegro
mucho más profunda: salvación in- Sin -silencio, -olvidos, -mutilacio-
tegral por amor (transformante, nes, -inadecuada acentuación.
pacificador, de perdón y reconcilia-
ción). (3) Cristología de Puebla:
f. Esto es muy exigente para el
cristiano que quiere servir a sus her- La Cristología de Puebla ha sido
manos más pequeños (-pobres, presentada magníficamente. Es eco
necesitados, marginados - que re- de la cristología del Concilio. Pero
flejan en sus vidas el rostro doliente además presenta una síntesis, cosa
del Señor). que no se la propuso el Concilio.
También añade el esfuerzo por pre-
40) La fe verdadera de la Iglesia sentar junto con una cristología
(contra tales relecturas). descendente, también una cristolo-
gía ascendente; a partir de la fe en
No podemos cesar de afirmar que Jesús de Nazareth.
Jesucristo, Verbo e Hijo de Dios se
hace hombre La cristología de Puebla es, para
para acercarse al hombre nuestras Iglesias, norma de presen-
y brindarle la salvación, gran don tación de Jesucristo. Con tal de que
de Dios, lo hagamos en comunión con los
por la fuerza de su misterio. pastores y las Iglesias de América
Latina y en comunión con todos los
50) Esta fe en el pasado y el pre- pastores e Iglesias del mundo y con
sente: el Pastor e Iglesia Universal.

176 CRITERIOS TEOLOGICOS


y hay que tomarla globalmente. ción del Padre, del Hijo y del Espí-
y dentro del dinamismo de nuestro ritu Santo. De ahí arranca inmedia-
caminar hacia Cristo, en su segui- tamente la Iglesia.
miento que no será auténtico si es
contra la Iglesia y sus Pastores. Pablo VI ofreció en el "credo del
pueblo de Dios" una fórmula de fe
2.4.3.4.3. La confesión de fe .r el dogma quP "repite sustancialmente, con
algunas explicaciones postuladas
La riqueza misma de la presenta- por las condiciones espirituales de
ción que del Señor hacen el Conci- nuestra época, la fórmula nicena:
lio y los pontífices siguientes, exige es decir, la fórmula de la tradición
que se elabore concentración y sín- inmortal de la Santa Iglesia de Dios"
tesis de l~ totalidad. Por una parte (Pablo VI, Palabras Introductorias
es necesario volver a proponer la a la Profesión de Fe, n. 3).
simplicidad de las expresiones de la
fe, desde la brevedad de las fórmu- Estructura: no a la manera de los
las kerygmáticas del Nuevo Testa- complementos añadidos a la profe-
mento, pasando por los símbolos sión nicena sino como glosas inter-
más antiguos y recientes, hasta las caladas. De donde resulta un mosai-
formulaciones breves de la fe cris- co erudito en el cual la estructura
tiana. Manteniendo eso sí, religiosa- trinitaria de la profesión nicena
mente toda la riqueza de las expli- lleva la carga de textos de símbolos,
caciones del Magisterio. profesionales de fe, documentos del
magisterio antiguo y actual, espe-
Por eso los teólogos (vgr. K. cialmente de los tres últimos
Rahner, Necesidad de una fórmula Concilios.
breve de la fe Cristiana, Concilium
23 (1967) 450-464) piden una fór- La parte cristológica (nn. 11-12)
mula breve de la fe, en que se presenta a Jesucristo en sus tres
distinga lo esencial de lo secunda- etapas: preexistencia (Verbo eter-
rio, lo específicamente cristiano de no, Hijo, consustancial, su papel en
lo mundano. El mismo autor ofrece la creación); Encarnación (más ex-
un ensayo actual de fórmula de fe. plicaciones del "símbolo Quicum-
En la parte cristológica 460-462 que" sobre naturaleza y modo de
ofrece a Cristo como respuesta el unión; vida y ministerio en el cual
anhelo humano de salvación. El propone anuncio y fundación del
hombre busca lo que Dios está Reino, mandamiento nuevo, biena-
ofreciendo en Cristo y lo que los venturanzas, Misterio Pascual: pa-
cristianos testimonian con la vida sión -muerte-se pul tura-resurrecci ón-
y la palabra. El Hijo del hombre e ascensión); Parusía-reino-eterno.
Hijo de Dios es Jesús de Nazareth.
Quien por su vida prodigiosa, muer- Lo más notable y original es la
te y resurrección se muestra Hom- síntesis de la actividad del Verbo
bre-Dios. En él Dios nos ha amado encarnado.
irrevocablemente y nos ha dado la
verdad. Este presentación de Jesu- Su Santidad Juan Pablo II dice
cristo la hace dentro de la revela- del "credo del pueblo de Dios" que

HUGO FERNANDEZ MORA, PBRO. 171


en él, Pablo VI "quiso reunir los Para cumplir tus designios, él
elementos esenciales de la fe católi- mismo se entregó a la muerte, y,
ca" y nos dice: "Es una referencia resucitando, destruyó la muerte y
segura para el contenido de la cate- nos dió nueva vida. Y porque no
quesis" (Juan Pablo 11, CT, 28b). vivamos ya para nosotros mismos,
sino para él, que por nosotros mu-
Las Plegarias Eucarísticas nos rió y resucitó, envió, Padre, desde
presentan también contexto litúr- tu seno al Espíritu San:to. . ."
gico por excelencia, en contexto _ ... Epiclesis. Narración de institu-
doxológico, a Jesucristo. ción. Aclamación.
Plegaria 1I: contexto Trinitario; Memorial y ofrenda: " ... al cele-
estructura (del Prefacio): Padre-Je- brar este memorial de nuestra re-
sucristo-Hijo amado- tu Palabra: dención, recordamos la muerte de
pel creador, envío, hecho hombre Cristo y su descenso al lugar de los
por el Espíritu Santo - de María muertos, proclamamos su resurrec-
Virgen para que fuera Salvador y ción y ascensión a tu derecha; y
Redentor. mientras esperamos su venida glo-
riosa te ofrecemos su cuerpo y san-
Después de pausa: extendió sus gre, sacrificio agradable a tí, y sal-
brazos en la cruz: motivo (cumplir vación para todo el mundo".
la Voluntad del Padre); finalidad
(destruír nuestra muerte y manifes- La formulación del dogma cristo-
tar la resurrección); efecto (adqui- lógico de Calcedonia ha sido cada
rido un pueblo santo). vez más defendido por el Magisterio
y por los teólogos católicos. Es el
Plegaria lII: estructura trinitaria, último dogma cristológico definido
sumamente breve: "Ya que por (Cf. Discurso de S.S. Juan Pablo 11
Jesucristo, tu Hijo, Señor nuestro, a la Comisión Teológica, Internacio-
con la fuerza del Espíritu Santo, nal, 26 de octubre de 1979, en
das vida y santificas todo y congre- L'Osservatore Romano 27 de octu-
gas a tu pueblo sin cesar". bre de 1979, cf. n. 4).

Plegaria IV: contexto de la Histo- 2.4.3.4.4. La Escritura


ria de la Salvación. Estructura trini- Supuesta la fe del pueblo de
taria. Etapas: creación, pérdida de Dios, el Magisterio auténtico, la ne-
la amistad, "antes de la ley", alian- cesidad de la cOnfesión de fe breve,
za antigua, profetas-promesas; "y viene ahora el papel insustituíble de
tanto amaste al mundo, Padre San- la Escritura: su valor normativo in-
to, que al cumplirse la plenitud de dispensable, "criterio fundamental
los tiempos, nos enviaste por obra en relación con la confesión de la
del Espíritu Santo, nació de María Iglesia creyente y orante" (C. T.I.,
la Virgen, y así compartió en todo tesis 7, pág. 43).
nuestra condición humana menos
en el pecado; anunció la salvación a La Escritura, leída según el cre-
los pobres, la liberación a los opri- do, sigue siendo la primera fuente
midos y a los afligidos el consuelo. del conocimiento de Jesucristo.

178 CRITERIOS TEOLOGICOS


1. El Antiguo Testamento cuánta la catequesis, la iniciación cristiana
riqueza puede darle a la cristología y la misma teología.
para la presentación de Jesucristo
dentro de la Historia de la Salva- A esto seguramente se refiere el
ción; dentro de esta historia, para Santo Padre en el discurso inaugu-
presentar la preparación evangélica, ral de Puebla: "Del conocimiento
particularmente las grandes líneas vivo de esta verdad (sobre-Jesucris-
de la esperanza mesiánica; y dentro to) dependerá el vigor de la fe de
de la misma Historia, para enrique- millones de hombres.
cer nuestra comprensión del nom-
bre de Jesucristo, de sus títulos y Dependerá también el valor de su
funciones. adhesión a la Iglesia y de su presen-
cia de cristianos en el mundo. De
2. El Nuevo Testamento particu- este conocimiento derivarán opcio-
larmente los Evangelios. Como nes, valores, y comportamientos ca-
sería necesario que los evangeliza- paces de orientar y definir nuestra
dores conociéramos más el Evange- vida cristiana y de crear hombres
lio y los Evangelios, que aprove- nuevos y luego una humanidad
cháramos los ricos frutos, maduros nueva por la conversión de la con-
y exquisitos de la Historia de las ciencia individual y social" (1, 2b).
formas, de la tradición y de la
redacción. Que fuéramos capaces El papel de la teología
de explicar con sencillez el sentido
de una perícopa con su unidad, su Aquí vendría a su vez la función
género literario, su finalidad con- indispensable de la teología para
creta, su teología. En una palabra actualizar el dato revelado, para
el mensaje que quiso poner en ella compararlo con los hombres de
el Evangelista. Cuánto ganaría con hoy, sus pensamientos, sus anhelos,
ello el conocimiento de Nuestro problemas, angustias, realizaciones.
Señor Jesucristo. Cómo se ilumina- No cerrarse más bien abrirse. Debe
rían los milagros de Jesús, adquiri- ser misionera y animar la civiliza-
rían más peso sus palabras de reve- ción y la cultura. Porque Jesucristo
lación y de exigencia, cómo brilla- verdadero Dios y verdadero hombre
rían con luz propia las actitudes del es el revelador de Dios y el revela-
Señor y cuánto resplandecería la dor del hombre.
caridad divina. Ahora sí que emer-
gería la imagen del Salvador delante
de los fieles como la del Cristo de la 2.4.5 Concretando el objeto de
visión del Apocalipsis en medio de la fe cristológica de la
la Iglesia (Apoc 1,9-20). IgleSia
Entonces también aparecería la 2.4.5.1. El objeto de la fe del
unidad de los dos testamentos y se pueblo de Dios, tal como lo profe-
recobraría para los cristianos el samos en el Símbolo y confesiones
valor del Antiguo Testamento. de fe, tal como es enseñado por el
Magisterio auténtico, tal como ha
Cuánto más se conocería así el sido contado, cantado y explicado
misterio de la Iglesia y se renovaría por la Sagrada Escritura es el miste-

HUGO FERNANDEZ MORA, PBRO. 179


rio inagotable de nuestro Señor Ya no con el género de profesión
Jesucristo. de fe sino con el género homilético,
Pablo VI hace una notable presenta-
Por ser misterio es abundancia de ción de Jesucristo, ofreciendo una
luz y de inteligibilidad. De modo síntesis que merecería más atención
que después de pensado queda co- (2 noviembre 1970 en Manila, cf.
mo inpensado, después de expresa- apéndice pág. 48).
do sigue como inexpresado y des-
pués de entendido queda sjempre 2.4.5.4. Teniendo en cuenta lo
sin comprender. Pero se puede pen- que las fuentes .nos ofrecen acerca
sar, expresar, entender verdadera de Nuestro Señor Jesucristo, nues-
aunque imperfectamente. tra presentación debería incluír:

En consecuencia, ningún discurso A) Nuestra confesión de fe en


humano es capaz de recoger toda la su Persona divina, es decir:
riqueza de este objeto. Solamente - como Palabra e tIijo del Padre y
podemos repetir, guardar en el co- ca-principio del Espíritu;
razón (cf. Lc 1,19; 2,51) Y tratar - como enviado del Padre "en
de vivir lo que Dios ha querido reve- favor de nosotros y para nuestra
lamos de "las inescrutables riquezas salvación";
de Cristo" (cf. Ef 5,8-10). - como Palabra pre-existente y
mediador de la creación de todo.
2.4.5.2. La divina revelación
entregada a la Iglesia, recibida con B)El misterio de su Encarnación:
la fe, cele brada en el culto y ense- nuestra profesión de fe en que El se
ñada por el magisterio ha sido ex- hizo verdaderamente hombre.
presada en las confesiones de fe y - Presentar la Encarnación dentro
su última expresión definida ha sido de la Historia de la salvación, como
en la "definición del Concilio de historia del amor de Dios, con sus
Calcedonia" (451). grandes etapas (creación, pecado,
promesa, alianza, esperanza mesiá-
2.4.5.3. En la actualidad, el nica).
Magisterio vivo para la Iglesia viva -- Hacer ver que El se hizo semejan-
ha presentado la fe común en el te a nosotros en todo "menos en el
"Credo del Pueblo de Dios" formu- pecado" (Hebr 4,15).
lado por Pablo VI (30 junio 1968). - Presentarlo como revelador defi-
No es definición dogmática sino nitivo de Dios de modo que se haga
repetición con adiciones actualizan- ver cómo su presencia, actuación,
tes de la profesión de fe Niceno- milagros, palabras transparentan el
constantinopolitana (año 381) (cf. poder, la bondad, la gloria, la santi-
"Credo del Pueblo de Dios n. 3). dad de Dios.
.- Los misterios principales de su
Juan Pablo 11 en "Catechesi tra- vida y ministerio vistos a la luz de
dendae" n. 28b propone el Credo la Pascua.
del Pueblo de Dios como una refe- - Su mensaje centrado en la revela-
rencia segura para la catequesis. ción de la paternidad divina, de

180 CRITERIOS TEOLOGICOS


nuestra filiación en e] Hijo, de la radar, por su misterio y sus miste-
donación de su Espíritu, de la fun-- rios, por su vida, acción, mensaje.
dación de su Iglesia, del manda-
miento nuevo, del sentido de la De modo que la libertad que El
cruz y de la esperanza de la gloria. nos trae se vea como cualidad ca-
- El carácter esencial de su men- racterística del don sustancial de
saje como llamamiento a seguir a nuestra filiación. El proceso para
Jesucristo. llegar a ser hijos (cf. 1,12), discípu-
-- Hacer referencia a la Iglesia, a los lo (cf. Mt 28,19; Jn 8,32; 15,8),
sacramentos y a la existencia del amigos (Jn 15,12-17) lleva a la li-
hombre. bertad cristiana y es entonces el
- Hacer ver la significación que la proceso esencial de la liberación
encamación y la cruz y resurrección evangélica.
tienen para el hombre y el universo.
2.4.6 Características que ha de
C)EI misterio pascual ha de reco- tener la presentación de
.ger los principales elementos: Jesucristo, por parte del
- los hechos: pasión, muerte, se- objeto presentado
pultura, descenso, glorificación, do-
nación del Espíritu Santo. 1. La presentación de Jesucristo
- el modo: Con amor se ofreció a ha de ser la de una persona. Esto
sí mismo (sacerdocio-sacrificio) implica conocerle por encuentro
voluntaria y obedientemente por personal. En este caso el encuen-
nosotros y por nuestra salvación. tro se ha dado inicialmente por la fe
- los fines: gloria divina, salvación del que lo presenta, y a continua-
del hombre por victoria sobre el ción por el trato personal y amisto-
pecado, el mundo, la muerte. so que se da en la oración. Y supo-
- los motivos: por amor ne que lo presenta para que el otro
- los efectos: salvación·liberación- también se encuentre personalmen-
vida nueva- vida eterna: donación te con El y creaca en un conoci-
del Espíritu. miento afectuoso. Esto impone,
- consecuencias: para el hombre y evidentemente, enfoques y determi-
la humanidad, especialmente para naciones.
la dignidad y convivencia humanas
y el progreso. 2. Siendo presentación personal
- el sentido revelatorio de la Pas- hay que empezar por su nombre,
cua (amor, fidelidad, justicia, gloria su función, su' origen. Después el
de Dios). diálogo continuará de acuerdo con
-- el sentido cósmico de la Pascua el horizonte, capacidades, conoci-
- nuestra esperanza de glorifica- mientos, anhelos, interés y requeri-
ción como fruto de la cruz (cf. Col mientos precisos del interlocutor.
1,27).
3. La presentación, siendo per-
D) Conclusión: de esta forma, sonal, ha de ir directamente al cen-
me parece, se presenta eficazmente tro esencial, dejando los detalles
a Jesucristo como Salvador y Libe- para el diálogo interpersonal.

HUGO FERNANDEZ MORA, PBRO. 181


4. Siendo la presentación de una proceso descrito por el apóstol. La
persona divina encarnada hay que palabra misma de Dios tiene efica-
dejar sentir a cada paso la presen- cia para dar a conocer a Jesús.
cia de la divinidad y de la humani-
dad. Es decir, que tomando la vía 8. La integridad de la imagen ha
descendente hagamos sentir que de entenderse como la integridad
Dios se esconde en Jesús. Y toman- esencial, como el enfoque de los
do la vía ascendente hagamos ver verdaderos valores esenciales y del
cómo Dios se revela en Jesús. Esto auténtico sentido de la persona pre-
deberíamos hacerlo al hablar de sus sentada. Es como la panorámica
actos, comportamientos, actitudes, completa pero en sus grandes líneas
milagros y palabras, particularmen-
te de su cruz y resurrección. 9. Si se presenta un aspecto hay
que presentarlo explícitamente
5. Siendo presentación personal como aspecto del todo, y una parte
hay que dejar pronto hablar a la de la presentación de dicho aspecto
persona presentada: "Es preciso ha de ser la ubicación dentro del
que El crezca y yo disminuya" (Jn todo.
3,30; cf. Jn 1,35-37. 41. 45-47; 12;
20ss). 10. A Jesús hay que presentarlo
con su cruz y la cruz con el crucifi-
cado. Al crucificado hay que pre-
6. Una presentación personal no
se dirige tanto a dar a conocer inte- sentarlo como resucitado y al resu-
lectualmente los compuestos de la citado como quien había sido
persona sino a la persona misma crucificado.
concreta. Y a la persona misma con-
creta en cuanto a su ser, sus "valo- 11. Las palabras del Señor hay que
res", origen y "sen tido". Si después presentarlas como mensaje más que
son propuestas preguntas de otro como doctrina, más en forma histó-
orden es necesario responderlas, por rica que en forma sistemática, más
ejemplo las preguntas más metafí- en forma concreta que en forma
sicas y funcionales. Y a cada paso abstracta, más como valores para
habrá que re-centrar la pregunta a vivir, que como enunciados teóri-
fin de que no se pierda de vista El. cos para pensar y vincularse jerár-
quicamente dentro de un todo.
7. Hay que exigir una etapa de 12. Las exigencias del Señor no
escucha por parte de la persona a la hay que ocultarlas sino colocarlas
que se le presenta Jesucristo, por- dentro del contexto de la Historia
que de otro modo con sus pregun- de la Salvación y del don divino del
tas extemporáneas que pueda difi- Espíritu de Cristo que con la dona-
cultar el justo conocimiento y ción de su amor hace posible el
encuentro personal con el Señor. mandamiento, factible la exigencia.
Esta es la pedagogía divina en Israel
(cf. Dt 6,4; 5,1) y mandato expreso 13. Finalmente, y es lo más carac-
del Nuevo Testamento: "Escuchad- terístico: a Jesús hay que presentar-
le" (Mt 17,5; cfr. Mc 12,29). La fe lo como es: en diálogo permanente
comienza con escuchar, según el con el Padre celestial.

182 CRITERIOS TEOLOGleOS


14. Un lugar muy especial tiene la Buena Nueva a toda la creación"
presentación teológica de Jesucris- (Mc 16,15); "Id pues, y haced dis·
to. Esto lo hace la Cristología. cípulos a todas las gentes bautizán·
dolas en el nombre del Padre y del
Se trata en ella de una presenta- Hijo y del Espíritu Santo y ense·
ción científica. Se dirige más al ñándoles a guardar todo todo lo
entendimiento que a la voluntad. Es que yo os he mandado" (Mt 28,19;
la razón que busca el objeto de su cf. LG 16, AG 3).
fe y la fe que desea entender. Es
también el esfuerzo para mostrar En resumen: a todos, todo.
cuán bien fundada está nuestra
esperanza (cf. 1Pe 3,15).
2.5.2. Los destinatarios son
2.5 Criterios tomados de los todos los hombres, razas,
destinatarios a quienes ha lenguas, situaciones, etc.
de presentarles Jesucristo a pesar de las diferencias.
2.5.1. Quienes son los destina- Para decirlo brevemente, Pente-
tarios de la presentación costés es a la vez la donación del
de Jesucristo Espíritu que perfecciona la salva-
ción y el signo de la universalidad
Predicamos a Jesucristo a todos de ella (cf. Act. 2). Porque Jesu-
los destinatarios de su venida salva- cristo por su Espíritu hace de todos
dora. Todos tenemos un Salvador un solo cuerpo (Ef 2,14-18), un
(1 Tim 4,10), todos somos ilumina- solo templo (Ef 2,19-22), habiendo
dos (Jn 1,29; 3,16s; 4,12; 8,12 derribado las separaciones y enemis-
1Jn 2,2), por eso conocemos que tades (Ef 2,14-18) de modo que ya
orar por todos los hombres "es bue- no hay judío ni griego, ni esclavo,
no y agradable a Dios, nuestro Sal- ni libre, ni hombre ni mujer, ya que
vador, que quiere que todos los todos vosotros sois uno en Cristo
hombres se salven y lleguen al cono- Jesús . . . herederos de la promesa"
cimiento de la verdad. Porque hay (Gal 3,28-29).
un solo Dios y también un solo
mediador entre Dios y los hombres, La evangelización está destinada
Cristo Jesús, hombre también, que a todos, y quien excluye a alguien
se entregó a sí mismo como rescate no posee el Espíritu de Cristo (cf.
por todos" (1 Tim 2,1-6). Puebla 205). Solo así podemos
decir todos "Padre Nuestro" (cf. Mt
Jesús se sacrificó por todos (Mt 6,9.14-15).
26,28 y paralelos; Mc 10,45); usa
de misericordia con todos (Rom Consecuencia de la destinación
11,32) y no solo con Israel (Mt universal de nuestro Salvador y de
23,27; Lc 19,41). su salvación es que El puede ser
recibido y conocido por todos y
y envió a los Apóstoles: "Id por dado a conocer a todos los hombres
todo el mundo y proclamad la de todos los tiempos y lugares.

HUGO FERNANDEZ MORA, PBRO. 183


2.5.3. De qué manera se ha rea- to el depósito de la fe y la unidad
lizado la presentación de del Cuerpo de Jesucristo.
Jesucristo al mundo y su
aceptación en los diversos La pluralidad de "teologías" y de
tiempos y espacios? "cristologías" del Nuevo Testamen-
to, así como el rechazo de la lectura
La Historia de la Iglesia, parti- política de la Escritura que hacían
cularmente de las misiones, y la los judíos, y la adopción del Anti-
historia de las culturas pueden res- guo Testamento, después de inter-
ponder este interrogante. pretarlo cristológicamente, en el
,Canon del Nuevo, son mue.stra evi-
En general, podemos decir, que dente de la manera cristiana de
la Iglesia a la cual se le ha confiado afrontar la pluralidad y la diversi-
difundir el mensaje de salvación y dad en favor de la misión, sin sacri-
en la cual se encuentra la plenitud ficar la unidad en la verdad sobre
de medios de la salvación (cf. UR su Señor. Esta verdad es "la confe-
3 e), siempre ha sido consciente de sión de Jesucristo muerto y resuci-
que ella ha sido en Cristo sacramen- tado, que (La Iglesia) anuncia y
to universal de salvación y que ha celebra con el poder del Espíritu
transmitido a las distintas genera- Santo" (cf. C.T.!., Pluralismo, tesis
ciones de la tierra el conocimiento 2 y 6 pags. 21-22 y 36ss).
verdadero de Nuestro Señor Jesu-
cristo. Ha sido también consciente
de la necesidad de anunciarlo en
orden a la fe y a la salvación. Esta es la experiencia normativa
cristiana. No puede ser sustituída
Igualmente ella ha sido conscien- por la ambigüedad de los aconteci-
te de la necesidad de adaptar el mientos pos-bíblicos, que son más
mensaje a la comprensión de las bien la materia prima que hay que
diversas épocas y pueblos, a fin de iluminar con la palabra de Dios
que pueda ser acpetado y compren- escrita y transmitida, -al fin de
dido. cuentas con la fe eclesial en Jesu-
cristo-, y no son, en cambio, reve-
Este problema se le presentó lación nueva de Dios.
desde el principio, cuando el men-
saje evangélico después de superar La Iglesia siempre fue consciente
el conflicto narrado en Act 10-11 y sus pastores cuidadosos de mante-
y 15 Y en Gal1, traspasó las fronte- ner lo que habían recibido (cf. 1
ras estrechas del judaísmo, para ser Cor 11,23; cf. D.V. 8). y sin solu-
anunciado entre los gentiles. La ción de continuidad todo el don de
solución no fue ni la ruptura del Dios entregado desde el principio
pueblo de Dios, ni el silencio del en Cristo con el Espíritu Santo a la
magisterio, ni el cambio de la confe- Iglesia, ella lo ha recibido con fe y
sión de fe, ni el rechazo de las Es- lo ha transmitido íntegro con fideli-
crituras, sino la adaptación a los dad hasta nosotros (cf. DV Cap. 2:
nuevos pueblos, manteniendo intac- Transmisión de la revelación divina).

184 CRITERIOS TEOLOGICOS


Pero al mismo tiempo la predica- evangelios", ('\1 "Documentación
ción a los judíos se diferencia en los CEL.\'l No. ~~l (mayo-agosto de
Actos de los Apóstoles de la predi- 1979) pp 930-9"10).
cación a los paganos en el tema des-
de donde comienza, en los argu- Estos son apenas dos ejemplos.
mentos, pero no en la verdad ni en Todo Nuevo Testamento (para no
la imagen de Jesucristo_ (J. Dupont, hablar del Antiguo Testamento) es
Etudes sur les Actes des Apostres, una demostración dp la adaptación
Lectio Divina 45, les éditions du que hicieron inspirados por el Espí-
Cerf, París 1967, pág. 41ss, 133ss). ritu Santo los escritores sagrados,
que nos han transmitido como pala-
La epístola de los Hebreos que bra de Dios.
dice: "ayer como hoy, Jesucristo
es el mismo y lo será siempre" Pero hay algo más profundo: el
(Hebr 13,8), es un escrito muy sen- obrar mismo de Dios.
sible a la adaptación, se dirige a una
comunidad cristiana de origen judío 2.5.4 Paralelismo entre Encar-
que tenía nostalgia y sentía el vacío nación del Verbo, Sagra-
del culto, sacerdocio, santuario, etc. da Escritura e incultura-
del judaísmo. El pastor que escribió ción
esta "palabra de exhortación" (13,
22) presenta a Jesucristo bajo una El Concilio Vaticano II recoge la
figura fundada en la realidad del Tradición cristiana más profunda en
Jesús histórico, pero adaptada a las relación con la teología de la adap-
condiciones existenciales de la co- tación. El texto que presetamos es
munidad: una síntesis de la actitud de la Igle-
sia en la misión a través de los si-
glos, sin que algunas sombras oscu-
Recientemente el P. Carla Marti- rezcan este testimonio. Dice Dei
ni, S.J. presentó un ensayo en el Verbum:
que muestra a nivel catequístico
cómo los evangelios responden cada "Quedando siempre a salvo la
uno a una adaptación pastoral: verdad y la santidad de Dios, en la
Marcos, sería el "evangelio de los Sagrada Escritura se manifiesta,
catecúmenos", Mateo "el evangelio pues, la admirable "condescenden-
del catequista", Lucas "el evangelio cia" (gr. synkatábasis) de la eterna
del teólogo" y Juan "el evangelio Sabiduría, a fin de que aprendamos
del cristiano maduro" (cfr. C. Mar· la inefable bondad de Dios, y cómo,
tini, S.J., "Las etapas de la forma- teniendo providencia y cuidando de
ción del cristiano en la comunidad nuestra naturaleza, adapta su len-
primitiva a la luz de los cuatro guaje.

Pues, las palabras de Dios a como a' la Palabra del eterno Padre
expresadas b b' habiendo asumido
en lenguas humanas e e' la debilidad de la naturaleza humana
se hacen semejantes d d' se hizo semejante
al lenguaje humano e e' a los hombres" (DV, 13).

HUGO FERNANDEZ MORA, PBRO. 185


El mejor comentario del hecho Esta "inculturación" del mensaje
descrito en este texto, tan bien ba- evangélico acaba de ser explicada
lanceado, es la Cristología en com- por Su Santidad Juan Pablo II en
paración con la teología de la Escri- "Catechesi Tradendae" n. 53 en
tura. Para nuestro objeto no basta donde la vincula expresamente a la
anotar que hay paralelismo en el Encarnación.
punto de partida o término divino,
en el punto de llegada, en la unión, Resumiendo: para presentar a
en la distinción, en la inconfusión. Jesucristo hoy, puestas a ·salvo la
santidad y verdad de Jesucristo,
2.5.5 Aplicación a la presenta- hay que presentarlo en un lenguaje
ción de Jesucristo hoy comprensible, para los hombres de
hoy, con el fin de que se manifies-
Hemos de presentar a Jesucristo ten la condescendencia, Sabiduría,
de modo que pueda ser aceptado Providencia y solicitud de Dios para
por los hombres de hoy. Hay que con nosotros. Debe hacerse en or-
adaptar nuestra presentación, de den a la fe y la salvación.
modo que Jesucristo pueda ser
aceptado por todos, y comprendido 2.5.6 Encarnación de Jesucris-
su mensaje. Esto debe hacerse sin to en nuestra cultura
menoscabo de la santidad y verdad
de Jesucristo. Ha de hacerse como Evangelizar no es simplemente
manifestación e imitación de la anunciar como quien lanza palabras
condescendencia divina y en orden al viento, ni solamente hacer el ne-
a la salvación de los hombres. cesario anunció explícito (cf. EN
22; CT 19), porque "el anuncio no
En el camino descendiente de la adquiere toda su dimensión más
encarnación Jesús llegó hasta el que cuando es escuchado, aceptado,
anonadamiento (kénosis) del "Sier- asimilado y cuando hace nacer en
vo de Yahvé", hasta la muerte de quien lo ha recibido una adhesión
cruz (cfr. Flp 2,5-11). de corazón" (En 23).
Como se ve, esta fue la conducta "Lo que importa es evangelizar,
del mismo Señor que habló con un no de una manera decorativa,
lenguaje comprensible a sus oyen- como un barniz superficial, sino
tes campesinos iletrados de Palesti- de manera vital, en profundidad y
na. Les habló en parábolas que aun hasta sus mismas raíces, la cultura
hoy son el tesoro más adaptado y las culturas· del hombre en el
para dar a conocer a Jesús y el Rei- sentido rico y amplio que tienen en
no. Así obraron los Apóstoles y Gaudium et Spes (n. 53) tomando
misioneros. San Pablo se hizo "todo siempre como punto de partida la
a todos para salvar a toda costa a persona y teniendo siempre presen-
algunos" (lCor 9,22, cf. 19-22). Y tes las relaciones de las personas
como para purificar la intención: entre sí y con Dios" (E.N. 20a).
"y todo esto lo hago por el Evange-
lio para ser partícipe del mismo" Puebla (n. 386): "Con la palabra
(v. 23), dice San Pablo. cultura se indica el modo particular

186 CRITERIOS TEOLOGICOS


como en un pueblo, los hombres gelización y cultura, en: Análisis de
cultivan su relación con la naturale- Puebla, p. 133-134): naturaleza,
za entre sí y con Dios". "Si por cul- hombres, Dios, podríamos esque-
tura se entiende el conjunto de res- matizar así: •
puestas que el hombre va creando Cultura de un pueblo es:
en relación con el triple polo de
referencia (cf. G. Remolina, Evan- el conjunto de

1) V AL~RES::~;;;:::;===~¡¡:=~~~?".LA NATURALEZA
DESVALORES~
( ="conciencia colectiva")

2) FORMAS DE EXPRESION===-':':;;~~~::~===~
(costumbres-lengua)

3) FORMAS DE CONFIGURACION<::::::-----
(Instituciones y estructuras
de convivencia social)

Esta red de relaciones debería particular. Ciertamente, la revela-


ser analizada en nuestro pueblo ción divina, se acerca al hombre
(historia, actualidad y proyección creado como a un sujeto en estabili-
futura) concretada y aclarada a fin dad y mutación; quiero decir, con
de que verdaderamente pudiéramos sus precomprensiones fijas (prefe-
conocer nuestra cultura. rentemente filosóficas), por un lado
y, por otro, con sus ideas cambiales
Creo que en este punto se necesi- (las culturales), que le ayudan y le
ta un trabajo interdisciplinar. abren a la interpretación de lo reve-
lado. Pero como creyente debe pri-
Con este conocimiento de los mero escuchar atento la palabra a
destinatarios se podría ciertamente la que debe dejar hablar limpia-
anunciar más profundamente a mente sin pretender interferirla con
Nuestro Señor Jesucristo. Y hacer sus precomprensiones. Estas últimas
una cristología desde el horizonte deben estar dispuestas a ser corregi-
auténtico de nuestro pueblo. das y modificadas por la palabra
divina, conscientes de que no posee-
2.5.6.1. Dos anotaciones necesarias mos ningún modelo de pensamiento
humano que agote debidamente la
a. "La Teología católica ha de plenitud de la gracia y de la verdad
tener siempre delante de su pensa- de Dios".
miento la automanifestación de
Dios en Jesucristo; y ese Dios que "Los esquemas de interpretación
se ha revelado a sí mismo contiene de la existencia humana en conjun-
la eficacia suficiente para hacerse to sean más o menos personales o
comprender por todos los hombres sociales están con frecuencia al ser-
de todas las épocas, es decir, para vicio de una ideología no cristiana o
concretarse en su hermenéutica aun anticristiana, y hay que exa-

HUGO FERNANDEZ MORA, PBRO. 187


minarlos con atenta prudencia para invita a adaptar nuestro lenguaje a
"neutralizarlos" y utilizarlos para la los destinatarios: diversas culturas,
explicación cristiana del mundo. edades, situaciones, etc. a fin de sa-
Aunque el prejuicio de este filtro o lir al encuentro de las preguntas
tamiz puede desfigurar la automa- concretas que diversos hombres
nifestación de Dios con Cristo hacen a la divina revelación. La
hasta convertirla en totalmente des- adaptación a los destinatarios ha de
conocida" (Hans Urs von Balthasar. tener en cuenta las condiciones
"Reflexiones histórico-salvíficas sociológicas y sicológicas.
sobre la Teología de la liberación",
en C.T.I., Teología de la liberación, A manera de ensayo proponemos
BAC minor, Madrid. 1978, 165- algunas de estas situaciones.
166).
2.5.6.2. Variadas situaciones socio-
b. Supuesta la eficacia de la auto- culturales
manifestación de Dios, la Encarna-
ción misma y el ejemplo de Jesús, a. Teniendo en cuenta dos coor-
de la Iglesia y de los Apóstoles nos denadas.

Lugar donde vive

económico
y Status { social
"cultural"

Se puede proponer este esquema:

económico: "rico"
Hombre con poder { político: "fuerte"
cultural: "culto"

Hombre de clase [ económica


media cul tural

10) El hombre de la Hombre de clase { económica


obrera o artesanal pobre { social
ciudad
culturalmente

Hombre marginado { económica


miseria { social
cultural

-Terrateniente Latifundio
{ {
20.) El hombre del minifundio
campo - Dependiente

30.) El hombre "indi- { su cultura propia


gena" los influjos recibidos

188 CRITERIOS TEOLOGICOS


b. Teniendo en cuenta dentro la dido ver profunnl'l.rnente los proble-
coordenada tiempo las principales mas humano~ desde su propia situa-
preocupaciones y problemas: ción personal, familiar o social ,
desde su propio conflicto: la vida
Aqui tratamos de caracterizar el atormentada de Nietzsche, la pro-
tiempo presente, es decir, los hom- funda ruptura del hogar y de la
bres y su hi:,;toria de la actualidad. sicología de Freud, la situación de
Para enfocar este punto a la luz de miseria espiritual (lector asiduo de
la teología, podemos concretarlo t'n Vol taire) y social en medio de la
una pregunta: eual vivió Marx, sobre todo en
Londres, fueron proyectados sobre
2.5.6.3. ¿Cuáles son las principales la realidad humana, sicológica y
tendencias aspiraciones y pro- social. La paranoia de Hitler llevó
blemas del hombre actual al mundo a la segunda guerra con
especialmente en América La· su destrucción y muerte. Eran estos
tina? los mejores directores espirituales y
orientadores para la existencia de
2 .. ).6.3.1. Negativamente; ¿Cuales los pueblos modernos: El efecto ha
no son? sido distorsionar, manipular, falsear
la visión de la realidad, llevando al
A esta pregunta cada uno 1espon- hombre a visiones parciales, unilate-
de, dándose cuenta o S1l1 darse rales, exclusivas que no dan cuenta
cuenta, desde el punto de vista don- de toda la realidad. Una verdad par-
de está colocado. Todas las perso- cial que se vuelve exclusiva que se
nas son respetables, todos los pun- vuelve una mentira. Al fin de cuen-
tos de vista son comprensibles, pero tas se vuelve una ideología.
no todos los puntos de vista son
aptos para ver objetivamente los En la ideología no se busca lo
problemas. Hay "puntos de vista" verdadero, bueno, bello y uno sino
desde donde más bien no se ve. Son lo que favorezca la causa en la que
puntos de no-vista, así, por ejemplo se esté comprometido. Cuando una
cuando se habla desde situaciones persona se ideologiza, ya no se pue-
de emotividad. La emotividad es de esperar objetividad, ni imparcia-
ciega. De ahí salen gritos de angus- lidad, ni verdad. Se encontrará
tia, comprensibles, pero no visiones manipulación, instrumentalización,
objetivas de la realidad. Esos gritos distorsión y pensamiento tenden-
son más bien problemas sujetivos cioso.
por solucionar que soluciones ver-
daderas y justas para los problemas Con lo anterior no quiero decir
propios y ajenos. Pienso, en efecto, que no haya algunos elementos bue-
que el mundo actual debería ser nos, que no haya intenciones que se
más consciente de que las crisis más puedan y deben salvar. Tampoco
graves de la conciencia, las rupturas quiero decir que no puedan ser úti-
más serias de la convivencia y de un les sus planteamientos para tomar
pensamiento sano en el mundo han conciencia de las fallas y descuidos.
sido introducidas o al menos agra- Son estímulos que hacen despertar
vadas por hombres que han preten- la reflexión: qué bueno es que el

HUGO FERNANDEZ MORA, PBRO. 189


"hombre desde sus problemas clama 2.5.6.3.2. ¿Cuáles sí son las principa-
hacia Jesucristo y su Evangelio en les tendencias, aspiraciones
busca de la liberación. Que interpe- y problemas del hombre
le a la Iglesia por una ayuda para actual, especialmente en
liberarse. A mérica Latina?

Hemos respondido negativamen-


Otra cosa es que se manipule a te, no son simplemente aquellas que
Cristo, al Evangelio y a la comuni- nos quisieron hacer ver quienes dan
dad eclesial para distorsionar el la impresión de estar ideologizados,
mensaje y para hacerle decir lo que aunque hay que reconocerles el
no dice, desfigure a Cristo y lo haga mérito de haber despertado la con-
aparecer como cada uno quiere. ciencia cristiana sobre los proble-
mas de orden econónúco-social.
Cuando el hombre se acerca
armado con precomprensiones más Para describir al hombre actual
absolutas que el sentido obvio del habría que acudir a "Gaudium et
Evangelio, este es condicionado y Spes" y a Puebla, especialmente a
convertido en palabra segunda. Es fin de dar del hombre una imag~n
lo que ha sucedido cuando la reali- personal y comunitaria, espiritual
dad se estudia con la ayuda del aná- y material, inmanente y trascenden-
lisis marxista: ya se ha dado una te.
respuesta tenida con más firmeza
que un dogma. En tales circunstan- A) El hombre aspira a vivir a
cias cuando el Evangelio es llamdo a existir, a ser persona y a ser tratado
decir su palabra, esta es metida en como tal, a ser libre y entonces a
los moldes estrechos y deformados liberarse, a superar la soledad que
de una ideología y de tal manera produce la masificación.
manipulada que ya no es ella la que
tiene la iniciativa de proseguir el No tiene aquí Jesucristo un men-
discurso, sino que un sistema pre- saje y no ofrece un camino?
concebido y con metas fijas es el
que va trayendo nuevas ideas, pun- B) El hombre, especialmente en
tos de referencia, esquemas de un el tercer mundo, sufre mucho: ham-
frío dogmatismo, que ya el Evange- bre, desnudez, falta de salud, de
lio no es Buena Nueva sino mala techo, de educación, de seguridad
noticia y condenación. Llega un presente y futura. Estas carencias
momento en que si uno vuelve a lo impulsan a obrar y lo angustian
pensar en Evangelio como buena internamente; siente la tentación de
noticia, lo encuentro irreconocible absolutizar lo material que está en
así aherrojado en un sistema. el horizonte hasta donde alcanza un
hombre consumido en la miseria. Y
este horizonte es el materialismo:
Volviendo a nuestra pregunta ini- "solo en lo material está la solu-
cial: ción, solamente lo material es im-

190 CRITERIOS TEOLOGICOS


portante". Este materialismo se F) Al sentir el silencio de Dios '
presenta bajo dos signos: materia- un como abandono mortal (sus her
lismo capitalista y materialismo manos no son solidarios) se sient.
marxista. Por otra aprte desde las tentado al ateísmo, o por lo meno,
"sicologías" se busca dar al hombre a no reconocer la presencia de Dio:
una solución: ¿la ha encontrado? en la historia, a reducirse a la inma
nencia, y a crear en los Ídolos (dine
N o tiene aquí Cristo una palabra ro, poder, placer, ciencia, técnica
primera qué decir y multiplicidad política, cultura ... ) y les rinde cul
de acciones que emprender? too
C) El hombre encu2ntra que mu- ¿No tiene aquÍ el Señor Jesú~
chos de sus males son causados por una palabra primera que iluminE
el egoísmo que produce injusticias y solucione?
y opresiones, quiere liberarse, busca
quien le ayude. Quienes pretenden
G) Metido en la "lucha por la
liberar al hombre en América Lati-
vida", el hombre de América Latina
na, cómo lo quieren liberar? N o hay
sobre todo en las ciudades se está
aquí una palabra primera, -.sin
masificando, es víctima de la veloci-
ideologizar- qué decir al hombre
dad, del individualismo y la soledad
al hombre en nombre de Jesucristo?
¿No tiene Jesucristo y su Iglesia
D) Delante de soluciones para
una palabra y un camino que
sus problemas síquicos, materiales,
ofrecer?
sociales, se hace junta de médicos:
Marx, Freud, Nierzsche vienen (a
veces al tiempo) a sanar al enfermo. H) Deseosos los "cristianos" de
N o tiene aquí Jesucristo y su evan- solucionar los pro blemas de sus her-
gelio solución que dar? manos, tienden unos a solucionar
con Marx, otros con Freud, y otros
E)Abocado el hombre a una si- piensan que hay que cambiar el
tuación desesperada, se siente ten- evangeIÍo y la imagen de Cristo que
tado de materialismo, de agresivi- ofrece la Iglesia a fin de dar solu-
dad, de violencia. ción.
Al no encontrar adecuadas solu- ¿No puede el evangelio y la ima-
ciones en su religiosidad, a veces se gen de Jesucristo dar solución al
siente tentado de desesperación y hombre?
busca evasiones o soluciones ya sea
en una religiosidad sana, ya sea en ¿Hay necesidad de dividirlo, de
deformaciones religiosas (sectas, privilegiar al Jesús histórico, de
movimientos, supersticiones de silenciar al Señor de la fe, de
diversos signos). callar al Señor de la historia, de
guardar con rubor considerables
N o tiene Jesús una palabra que partes del Evangelio para así dar
dar? N o es El el camino por seguir? solución?

HUGO FERNANDEZ MORA, PBRO. 191


2.5.7 Influencia de la situación muchos del campo, que aunque tie-
"religiosa" de los destina- nen fe infusa en el bautismo, sin
rios (o mejor, de su situa- embargo no la conocen ni pueden
ción ante la fe) sobre la dar razón de su fe.
presentación de Jesucristo
Gran parte de los cultores de la
2.5.7.1. Actitudes de los destinatarios religiosidad popular se hallan en
esta categoría, pero hay otras cate-
Advertimos que las categorías gorías más ignorantes. En esta cate-
que presentamos son fluctuantes, goría se encuentran muchas gentes
no pueden ser compartimientos sin sencillas.
comunicación, porque el hombre es
imprevisible pero son útiles para Situación de crecimiento en la fe
adaptar el mensaje a las necesidades
de los destinatarios. A esta categoría pertenecen quie-
nes han tenido o están teniendo una
Situación de increencia o de indi- educación, así sea mínima, en la fe.
ferencia Se supone al menos, una cierta fre-
cuencia de la audición de la palabra
Increencia: Primer caso, es la si- de Dios, un contacto con la comu-
tuación del hombre que no tiene fe, nidad cristiana y un mínimum de
del infiel. Este puede ser "infiel ne- acción cristiana en favor de los
gativo" cuando jamás ha tenido demás. Esto supone al menos los
oportunidad de escuchar de modo comienzos de una conversión al
adecuado la palabra de Dios. "Mo- Señor.
do adecuado" es aquel que es apto
para llevar a formar la opción fun- Situación Teológica
damental.
Los cristianos que creen con fe
Segundo caso: bautizado hereje o viva y practican, pueden estar en
apóstata por el bautismo tienen una situación teológica, cuando trabajan
referencia a la palabra de Dios, por buscar el objeto de su fe (inte-
están en contacto con Cristo y la llectus quaerens fidem": un enten-
Iglesia. Aunque sicológicamente dimiento deseoso de encontrar su
estén indispuestos, la gracia trabaja. fe; o cuando a partir de la fe se
hallan en tensión en busca de inte-
Indiferencia: El indiferente es el ligibilidad. Tratan de comprender el
infiel en la práctica de la vida. No objeto de su fe.
ha renegado de la fe, pero no le in-
teresa. Va de espaldas a ella. Vive o cuando a partir de la fe, se
y piensa como si no creyera. comprometen en la acción apostóli-
ca y buscan en la revelación la ilu-
Situación de ignorancia de bauti- minación para la acción.
zados en sociedad tradicional
Situación de cristianos que bus-
Es la situación de las grandes ma- can a Jesús no en la fe sino en la
sas de hombres de la ciudad y de praxis, no en las fuentes de la reve-

192 CRITERIOS TEOLOGICOS


lación divina sino en los aconteci- 25) anunció a Cristo que por noso-
mientos actuales como reveladores tros murió y el Padre lo resucitó
por sí mismos, no en comunión ple- por el poder de su Espíritu y nos da
na con la Iglesia y sus pastores sino a nosotros la posibilidad, si por la
en el conflicto y en la contestación. conversión y la fe nos volvemos a
El, de salvarnos.
2.5.7.2. Actitud ante estas situaciones
Debe hacerse en nombre de Dios,
Estas diversas posiciones ante la públicamente, con solemnidad. Hay
fe exigen adaptación en la presenta- que tomar posición.
ción de Jesucristo.
Ha de hacer referencia a la histo-
Cuál adaptación hacer? Supone- ria de la salvación, mostrar a Cristo
mos que la revelación divina ha de como centro y proponer su misterio
permanecer íntegra. Ahora aborda- esencial: su Encamación, su vida,
mos este problema desde el punto pasión, muerte, resurrección y la
de vista de la finalidad de la presen- parusía. Y la invitación a creer para
tación de Jesucristo. ser salvos.

2.6 Criterios tomados de la fina- La aceptación de la palabra tiene


lidad que se propone la pre- como prueba la conversión.
sentación de Jesucristo
2.6.2 Re-evangelización (EN
2.6.1 Primer anuncio de la fe 52-53)
(EN 51)
Es la finalidad que en gran parte
Se dirige a los "infieles negati- se ha de hacer en nuestros pueblos
vos". La presentación de Jesucristo de América Latina: bautizados que
tiene por finalidad invitarlos a optar no creen, que no han escuchado
por Jesucristo. Solo Dios sabe los adecuadamente la palabra que
caminos por donde los atrae. Sin anunciándoles a Jesucristo los invita
embargo, el testimonio de la fe, el a creer (cf. Juan Pablo II, C.T. 19).
diálogo que busca las "semina Ver- Aquí hay que confiar pues el bau-
bi" todos los valores existentes y tismo y la presencia del Espíritu
una presentación creyente, es decir, Santo son una exigencia de conver-
a partir de una experiencia vivida de sión y de fe. Hay que salir al paso
la fe en Jesucristo, pueden ser el de las causas por las que ellos no
camino. Dios es el que da la buena han creído y anunciarles a Jesús
voluntad y el que atrae. Hay que como el salvador de sus vidas.
hacerles ver que creer en Jesucristo
es un don que Dios lo da a quien 2.6.3 Catequesis (EN 54)
quiere (cf. Jn 6,65, cf. 45).
"La auténtica catequesis es siem-
Sobre esta base, la presentación pre una iniciación ordenada y siste-
ha de ser el kerygma, primer anun- mática en la Revelación que Dios
cio del Evangelio o predicación mi- mismo ha hecho al hombre en Jesu-
sional (cf. Juan Pablo II; C.T., 18 d; cristo revelación conservada en la

HUGO FERNANDEZ MORA, PBRO. 193


.
memoria profunda de la Iglesia y en enseñando en los seminarios el mis-
las Sagradas Escrituras y comunica- terio de Cristo como lo indica Op-
da constantemente" (CT 22c). tatam Totius n. 14-16?

"La catequesis ... persigue el do- 2.6.5 Necesaria dialéctica entre


ble objetivo de hacer madurar la fe estas diversas formas
inicial y educar al verdadero discí-
pulo por medio de un conocimiento El primer anuncio o kerigma ha
más profundo y sistemático de la de imbuír todas las otras formas, ya
persona y el mensaje de Nuestro que todos en mayor o menor grado
Señor Jesucristo" (Juan Pablo H, necesitamos ser evangelizados. La
C.T. 19). "La catequesis tiende Teología de la fe ha de impulsar la
pues a desarrollar la inteligencia del convicción de la necesidad de pri-
misterio de Cristo a la luz de la mer anuncio.
Palabra, para que el hombre entero
sea impreganado por ella" (leer La re-evangelización es la gran
todo el texto, n. 20b). tarea de la Iglesia. En este supuesto
se funda Puebla. Necesitamos que
resuene la Buena Noticia de Jesu-
Qué contenidos del misterio de cristo como en el primer día. La
Cristo hay que ofrecer en la re-evangelización es una evangeliza-
Catequesis ? ción para bautizados. Contiene mu-
chos elementos de catequesis y
C.T. n. 29 ofrece una síntesis de ojalá se enriqueciera con la expe-
tales elementos: Dios, Jesucristo riencia neo-catecumenal alentada
(Encarnación, Pascua, predicación).
Sin reducir a predicación de sola por la Iglesia. Es deseable que sean
humanidad, o a dimensión terrestre. fomentadas cada vez más, diversos
Explicar la asunción de la historia tipos de comunidad eclesial (p. ej.
por Dios en su Hijo Jesucristo. Pre- Comunidades Eclesiales de Base,
dicar renuncia, gozo y exigencias Comunidades Neo-catecumenales,
Comunidades basadas en la renova-
morales. ción del espíritu, etc) cuyos ele-
mentos configurantes deberían ser
2.6.4 Teología siempre reconocibles: palabra, sa-
cramento, comunidad. La Teología
La finalidad de la teología cristia- aclara que el bautismo no se reitera
na es reflexionar sobre la fe en or- y que más bien exige una vida cris-
den a la inteligencia de la fe y esta, tiana.
en orden a la salvación. El objeto
de la teología es Dios revelado por La catequesis ha de llevar consigo
Jesucristo en el Espíritu Santo Jesu- la renovación del primer anuncio o
cristo es el centro de la Teología. una preocupación de re-evangelizar.
El magisterio de la Iglesia ha da- La Teología debe colaborar con
do sabias normas acerca de la ense- la catequesis para precisar sus con-
ñanza de la Teología. Solo quiero tenidos a nivel exegético y sistemá-
consignar una pregunta: ¿se está tico.

194 CRITERIOS TEOLOGICOS


La Teología en nuestro medio ha 2.7.2 Testimonio: (cfr. E.N. 21)
de tener el oficio de reflexionar
sobre la evangelización y re-evange- El testimonio es la declaración de
lización y recibir de estas formas de un testigo acerca de lo que ha visto
predicación un hábito renovador. y oído (concientizado). Es declarar
que Jesús y el Mesías son una sola
Debe también reflexionar sobre persona.
la naturaleza de la predicación, sus
fuentes, sus contenidos, sujeto, me- Los cristianos, como testigos, tes-
dios, etc. tifican acerca de la resurrección de
Jesucristo. Esta testificación se
Hoyes prioritario aclarar las am- funda en que el cristiano, al acep-
bigüedades sobre las fuentes, "luga- tar, por la fe, a Jesucristo en su
res teológicos", finalidad de la teo- propia existencia, ha visto transfor-
logía, sobre su relación con la fe, mada su vida y desde su experiencia
con la palabra de Dios, con la de fe, da testimonio de que Jesu-
historia, con los problemas del cristo resucitó y está vivo, ya que a
hombre. . ......... . él lo ha transformado.

2.7 Criterios tomados de los 2.7.3. La palabra


Medios (1)
Es otra forma de testimonio. Es
2.7.1 El lenguaje de la transmi- necesaria para que el testimonio
sión de la fe. tenga valor, pierda su ambigüedad y
sea anuncio explícito de Jesucristo.
La fe se transmite como una ex-
periencia personal o de la comuni- La palabra debe ser sencilla y
dad. No se enseña ni se hereda. Fe comprensible. Debe servirse de la
Cristiana es aceptar a Jesucristo en imagen y utilizar recursos para
el centro de la propia existencia. grabarse en la mente y corazón de
Aceptamos la revelación porque la los oyentes (cfr. Juan Pablo II C.T.
Iglesia nos atestigua. A ella le atesti- n.53).
guaron los Apóstoles. y ellos dieron
testimonio de lo que habían visto y
oído. El lenguaje de la transmisión 2.7.4 Los signos
de la fe es ante todo el mismo de la
transmisión de los valores. Se trans- Los signos manifiestan el origen
miten por medio de personas com- y procedencia de la palabra. Son la
prometidas. rúbrica que autentica el origen de
la palabra (cfr. Act 2,43; 5,12; 4,
El lenguaje para transmitir la fe 29-30).
es ante todo el testimonio, luego la
palabra, los signos y las persecucio- Pueden ser físicos o morales (cfr.
nes. Act 16, 26-34).

(1) De aquí en adelante las cuestiones están tratadas muy esquemáticamente. Todos estos temas
merecerían un estudio más profundo y amplio.

HUGO FERNANDEZ MORA, PBRO. 195


2.7.5 Las persecuciones CONCLUSION

"Si me persiguieron a mí, tam- A fin de presentar hoy a Jesu-


bién a vosotros os perseguirán" (Jn cristo hay que mirar el modelo de
15,20). quienes nos lo han entregado:
La persecución como forma de -- El modelo es Dios quien "tan-
testimonio y suerte del testigo, ha to amó al mundo que le dió a su
de ser por causa del Evangelio y no Hijo único, para que todo el que
por la agresividad del que habla u crea en él no perezca, sino que ten-
obra. ga vida eterna" (Jn 3, 16).
Ahora bien, todas estas formas - el modelo es Jesús mismo que
de anuncio de Jesucristo son tam- me amó y se entregó a sí mismo por
bién hoy actuales. Y lo anuncian mí (cfr. Gal 2,20). "Por nosotros
eficazmente cuando son testimo- los hombres y por nuestra salva-
nios coherentes con la fe en Jesu- ción".
cristo y son parte de su seguimiento
auténtico. (cfr. A.G. 11). -- el modelo es María que la con-
cibió en su mente por la fe ("Feliz
2.8 Eficacia de la presentación tú que has creído": Lc 1,45) y le
de Jesucristo obedeció aun sin entender (cfr. Lc
1,29. 34. 38), les sirvió en la pobre-
La fe en Jesucristo no es el resul- za (Lc 2,7), lo presentó a los pasto-
tado de nuestros razonamientos, ni res (cfr. 2,16) y a los magos (Mt 1)
de los medios y recursos que ponga- y lo guardaba en su corazón (Lc 2,
mos en juego. 14. 51). Por eso nos lo pudo entre-
gar como Salvador.
Cuando hayamos hecho todo lo
que debíamos hacer hemos de decir - el modelo es la Iglesia que es
"Somos siervos inútiles; hemos he- engendrada por la escucha de la
cho lo que debíamos hacer". (Lc palabra, nace cuando se entrega a
17,10). Somos instrumentos. Si el El por la fe y el bautismo, crece
Señor se sirve hacernos útiles es don cuando profesa su fe, la celebra y la
suyo. alienta alrededor de la me¡;¡a euca-
rística y da fruto cuando se sacrifi-
La fe misma es don de Dios: "na- ca y se ofrece con amor como el
die puede venir a mí, si el Padre que Siervo de Dios para la salvación del
me ha enviado no le atrae" (Jn 6, mundo.
44). "Nadie conoce bien al Hijo
sino el Padre ... " (Mt 11,27). Al mirar atentamos estos mode-
los comprendemos que los que son
El Padre se puede servir de noso- así, son los que pueden verdadera-
tros si presentamos con humildad a mente presentar a Jesucristo.
Jesucristo, pues "cuando estoy
débil, entonces es cuando soy fuer- Porque lo tienen lo pueden dar.
te" (2Cor 12,10; cfr. ICor 2,1-5; El que no lo tiene y pretende trans-
Act 17,16ss ver v. 32). mitirlo más bien lo traiciona (gr.

196 CRITERIOS TEOLOGICOS


Paradídomi = tradere, entregar, ción que haciéndonos hijos no:
traicionar hace libres.
Paradósis = traditio, tradición, en-
trega, traición) Nos lo entregan para que surja er
nosotros la acción de gracias, 11
Dios, Jesucristo mismo, María, la doxología, la confesión de fe unáni
Iglesia nos dan a Jesucristo todo me, en el amor y la esperanza, 11
completo, como El es, sin división, comunidad y en la comunión.
sin fractura, sin ruptura, en unidad
e igualdad con el Padre y el Espíri- Nos lo entregan para que lo co
tu, verdadero Dios y verdadero nozcamos, lo amemos, lo sigamos
hombre, solidario con Dios en la y seamos salvadores de nuestrol
divinidad, solidario con nosotros en hermanos ofreciéndonos a ser servi
la humanidad, salvador porque fué dores por amor.
obediente por amor, liberador fué
el hombre libre, porque es el Hijo. Nos lo entregan para que lo pre·
sentemos a todos, a pastores 'Y
N os lo entregan en la Encarna- magos, a judíos y griegos, a ricos 'Y
ción y en la Pascua a fin de que El pobres, a sabios e ignorantes: el
nos entregue en la gloria. mismo Jesucristo sin mengua ni al·
teración, pero a cada uno con un
Nos lo entregan para que nos sal- gesto adaptado, con lenguaje com-
ve y libere con la profunda libera- prensible e igual amor.

DE LAS HOMILIAS DEL PAPA PABLO SEXTO


(Homilla pronunciada en Manila el 29 de noviembre de 1970)
PREDICAMOS A CRISTO HASTA LOS CONFINES DE LA TIERRA

Ay de mí si no evangelizare! Para esto me ha enviado el mismo Cristo. Yo SOy apóstol y tes-


tigo. Cuando más lejana está la meta, cuanto más difícil es el mandato, con tanta mayor vehe-
mencia el amor nos apremia. Debo predicar su nombre: Jesucristo es el Mesías, el Hijo de Dios
vivo; él es quien nos ha revelado al Dios invisible, él es el primogénito de toda creatura, y todo
se mantiene en él. El es también el maestro y redentor de los hombres; él nació, murió y resuci-
tó por nosotros.
El es el centro de la historia y del universo; él nos conoce y nos ama, compañero y amigo de
nuestra vida, hombre de dolor y de esperanza; él ciertamente vendrá de nuevo y será finalmente
nuestro juez y también, como esperamos, nuestra plenitud de vida y nuestra felicidad.
Yo nunca me cansaría de hablar de él; él es la luz, la verdad, más aún, el camino,la verdad y
la vida; él es el pan y la ruente de agua viva, que satisface nuestra hambre y nuestra sed; él es
nuestro pastor, nuestro guía, nuestro ejemplo, nuestro consuelo, nuestro hermano. El, como no-
sotros y más que nosotros, fue pequeño, pobre, humillado, sujeto al trabajo, oprimido, pacien-
te. Por nosotros habló, obró milagros, instituyó el nuevo reino en el que los pobres son biena-
venturados, en el que la paz es el principio de la convivencia, en el que los limpios de corazón y
los que lloran son ensalzados y consolados, en el que los que tienen hambre de justicia son sa-
ciados, en el que todos son hermanos.
Este es Jesucristo, de quien ya habéis oído hablar, al cual muchos de vosotros ya pertene-
céis, por vuestra condición de cristianos. A vosotros, pues, cristianos, os repito su nombre, a to-
dos los anuncio; Cristo Jesús es el principio Y el fin, el alfa y la omega, el rey del nuevo mundo,
la arcana y suprema razón de la historia humana y de nuestro destino; él es el mediador, a mane-
ra de puente, entre la tierra y el cielo; él es el Hijo del hombre por antonomasia, porque es el Hi-
jo de Dios, eterno, infinito, y el hijo de María, bendita entre todas las mujeres, su madre según
la carne; nuestra madre por la comunión con el Espíritu del cuerPo místico.
Jesucristo! Recordadlo: él es el objeto perenne de nuestra predicación; nuestro anhelo es
que su nombre resuene hasta los confines de la tierra y por los siglos de los siglos.

Tomado de la "Liturgia de las Horas", fascículo 8. Tiempo ordinario, domingo


166-167.
X" 1. Páginas

HUGO FERNANDEZ MORA, PBRO. 197


AYUDA BIBLIOGRAFICA PARA EL ESTUDIO DE LA CRISTOLOGIA
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