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Creyentes, Agnósticos y Ateos en la Era Global

Profesor: Edison Otero


Ayudante: Florencia Balboltín

Fecha: 27 de noviembre 2018

Alumnos: Zoe Farías


Macarena Miranda

ENSAYO

¿Puede una sociedad vivir sin religión?

A lo largo de toda la historia se ha visto como las distintas religiones han contribuido a la
sociedad en su totalidad, siendo utilizadas como una fuente de explicación a varios sucesos
tales como; la existencia de la humanidad o el sentido de la vida.
A pesar de ello, remontándonos a los inicios de los tiempos donde no hay indicios concretos
de las religiones o una alternativa a ellas, se puede negar la existencia de ellas, y pensar que
las comunidades ya han vivido períodos sin religión por lo que ¿sí ha sido posible antes
porque no también ahora?
Si bien la mayoría de las religiones tienen un Dios al cual acudir, muchas otras rinden
pleitesía a entes, intentando explicar el origen de la vida, a partir del cosmos de las creencias
y de la naturaleza humana. Todos estos sentimientos de adoración derivan de una moral ética
o de estilos de vida que han heredado.
Es importante destacar que creencia y religión pueden tener un lazo como pueden no
tenerlo.

La religión según la RAE es el “Conjunto de creencias o dogmas acerca de la divinidad, de

sentimientos de veneración y temor hacia ella, de normas morales para la conducta

individual y social y de prácticas rituales, principalmente la oración y el sacrificio para

darle culto”1. En pocas palabras se interpretará religión, cómo grupo de individuos cuya

forma de vida esta estrechamente ligada a una creencia sobre algún ser superior
todopoderoso. Y creencia, se define como “El firme asentimiento y conformidad con

1 Definición de Religión, Real Academia Española


algo. La creencia es la idea que se considera verdadera y a la que se da completo crédito
como cierta”.
A pesar de esta definición se explicará en este ensayo el concepto de otra manera, para
así poder responder a la pregunta. Además de avalar que creencia y religión pueden tener
un lazo como pueden no tenerlo.
Debemos comenzar entendiendo que significará religión para comprender la analogía de
este escrito. Se interpretará religión, cómo una forma de vida ligada a una creencia sobre
algún ser superior. Ahora bien, el fiel creyente no tiene obligación alguna a pertenecer a
una religión, pues en este ensayo se refiere a religión en un sentido ligado a abundante
grupo de personas que creen o sienten lo mismo ante un ser súper poderoso. Por lo tanto,
se relacionará la religión con sociedad.
Entonces, reconoceremos a la religión como un grupo de personas que son creyentes y
tienen una ideología en común y a los creyentes que no tienen razón alguna para
corresponder a una religión.
Siempre que lo anterior sea entendido, se puede responder a la pregunta de si ¿una
sociedad puede vivir sin religión?. A causa de la inquietud que causa la interpelación, se
defenderá en lo próximo que, las sociedades pueden existir sin religión, pero la religión
no puede ser compuesta sin una sociedad.

A continuación, se presentará el primer argumento, en donde se evaluarán los distintos


niveles de desarrollo que tienen las sociedades y cómo afecta su ubicación geográfica.

En primer lugar, si nos encontramos en una sociedad agraria, es decir, una sociedad con altos
índices de pobreza, escasez de instituciones educativas y de salud con una alta inestabilidad
política y social que tiende a darse principalmente en los países africanos, tienden a ser
mayoritariamente religiosos casi por regla general. Si bien hay casos excepcionales, es poco
usual que alguien se manifieste como agnóstico y claramente hay menos probabilidad de que
éste sea ateo. La falta de educación fusionada con la pobreza ha comprobado empíricamente
que hay una mayor adhesión religiosa, participación e importancia en sus vidas.
En el segundo nivel se encuentran las sociedades industrializadas donde se han comenzado
procesos de desarrollo y crecimiento económico las cualese no ha alcanzado aún la condición
de utópica de crecimiento social dado la alta desigualdad. De todos modos son más estables,
lo que les permite desarrollar procesos democráticos, como por ejemplo Latinoamérica.
Donde si bien el cristianismo posee una alta presencia y afiliación su compromiso no es de
tal magnitud dado a que el proceso de secularización se ha manifestado con creces dejando
inactivas las iglesias. Este proceso es atribuible a la tesis de Ulrich Beck, en la cual se están
refugiando en una idea personal de Dios, es decir, cada uno tiene un Dios al cual predicarle,
lo que des generaliza al Dios de todos.

Finalmente se explican las sociedades post industrializadas, cuya característica principal es


que en lo sustantivo han resuelto las necesidades básicas de la población en su totalidad dada
la alta estabilidad política. Es por esto que tienen una alta tendencia a la secularización
representado en el síndrome de las “iglesias vacías” con mayores índices de agnósticos, ateos
y no afiliados, siendo un gran ejemplo, Europa. En consecuencia, la aparición del tipo de
espiritualidad “New Age” el cual se define como el conjunto de prácticas cuyo sentido es el
perfeccionamiento espiritual, fuera de las iglesias tradicionales, donde las personas
interesadas pueden desarrollarse física, mental y/o espiritualmente (con un valor asociado)
por medio del Yoga, Feng shui, Taichí, Dietas no tradicionales, aprecio por la ecología,
medicina no tradicional, entre otras. Por lo que son prácticas desarrolladas por personas de
ingresos medios-altos.

Los tres tipos de sociedad donde se puede fácilmente categorizar cada región específica del
mundo las cuales, a pesar de tener grandes diferencias en el nivel de presencia de la religión,
estas poseen un elemento en común que es la creencia en algo o alguien. Dado que la especie
humana tiene la necesidad de creer en algo o alguien superior, porque el vínculo creado
gracias al sentimiento de pertenencia al colectivo le otorga seguridad, las sociedades tienden
a creen en un todopoderoso, doctrina o un arte ancestral. Esto se vincula con la teoría de Pipa
Norris y Ronald Inglehart acerca de la Experiencia de inseguridad existencial que si bien se
basa en la adherencia religiosa para el caso funcia del mismo modo para las creencias. Pues
al no tener garantías o resueltas las cosas básicas de la vida la constante incertidumbre frente
a las situaciones imposibles de predecir sin control alguno, impulsan a las comunidades hacia
la religión o mejoras espirituales como una forma de encontrarse a sí mismos y refugiarnos
y encontrar respuestas.
En conclusión, si bien las personas han demostrado ser fieles a la religión durante un periodo
bastante extenso, hoy los individuos encuentran respuestas en otras áreas o creencias. Por lo
tanto, la sociedad puede vivir sin religión puesto que se refugian en otras ideologías que,
junto a un determinado desarrollo socioeconómico, se han convertido en una nueva forma de
ver los problemas y sus posibles soluciones. Resultando una sociedad que puede creer en
diversas cosas o incluso no creer, pero no sentirse parte de una religión que engloba
sentimientos, ya que somos presentes de una sociedad cada vez más individualista.

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