Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
(Conferencia en el SEMINARIO: LA EDUCACIÓN HACIA UN FUTURO COMÚN (02-11-98) organizado por la FACULTAD
DE CIENCIAS HISTÓRICOSOCIALES Y EDUCACIÓN de la UNIVERSIDAD NACIONAL PEDRO RUIZ GALLO)
1.1. La educación.
Sigo pensando con Chacón (1970) que la educación es el medio clave para liberar
a los pueblos de toda servidumbre y para hacerlos ascender de condiciones de vida
menos humanas a condiciones de vida más humanas. Educar en la esperanza o educar
para la utopía es cultivar expectativas, preparar hombres que se nieguen a aceptar
gregariamente la realidad actual como única realidad posible, y se empeñen en su
transformación. Educar en la esperanza es educar en el valor de la vida, como valor
supremo e inalienable, de su significado y su destino, la superación de las estructuras, la
convicción de su propia capacidad para mejorar el presente y forjar un futuro mejor.
2
acercamiento y comprensión del curso de la historia pasada. Estas coordenadas no
parecen todavía ordenar del todo nuestro presente. Quizás en la superficie emergen
sobre todo los contrastes del cambio de una etapa de la historia moderna a otra en la que
se mezclan lo viejo del mundo moderno con el posmodernismo, sin llegar a emerger una
nueva síntesis en términos de concepción del mundo. En todo caso, estamos tan
inmersos en este proceso histórico que difícilmente podemos verlo a plenitud.
Solamente con una genuina actitud de búsqueda podremos definir los valores
que sostengan la proclama de propuestas de vida y desarrollo en respuesta a las
necesidades humanas de hoy. (Alayza, 1997) Mi planteamiento dinámico del conocimiento
me lleva a considerar el futuro como consecuencia del pasado y el presente, sin rupturas
bruscas, sin saltos revolucionarios aunque si con variaciones de dirección. A menudo
ocurre que una utopía de hoy se convierte en una realidad de mañana. El futuro se teje
de pasado, presente y de utopía. (2)
2. Paradigmas educativos.
En la parte introductoria del informe Delors (1996), que recoge lo esencial del
Informe Faure "Aprender a ser" (1972) y la Reflexión sobre el desarrollo del futuro de la
educación" (1984), se señalan fuerzas, corrientes antagónicas y tensiones que es
necesario ponderar y tener presente:
3
2.2. Referencias a paradigmas educativos globales.
4
nueva pedagogía basada en la globalidad del contenido y las diferencias entre los sujetos,
enjuiciar críticamente las informaciones de los mass media y formar a los alumnos en
este sentido, iniciarse en los problemas del trabajo y de la vida económica, de la
educación permanente y de adultos, pasar de un trabajo individual al trabajo en equipo,
colaboración con otros miembros de la comunidad escolar; una gestión empeñada en
poner en marcha proyectos de innovación basados en los problemas o expectativas del
centro, mejorando la estructuración administrativa, la autogestión económica.
Los criterios que me han guiado para elaborar esta matriz han sido la pertinencia
para responder a las exigencias de nuestra realidad, la calidad y equidad a la que debe
responder toda innovación y la trascendencia en el tiempo.
Según Guédez (1992), existe una relación dialéctica específica entre educación y
realidad socio-cultural, por lo que no se puede separar nuestra vocación histórica de un
esquema educativo. En otras palabras, no podemos concebir un proyecto pedagógico al
margen de un proyecto histórico-global, ni tampoco favorecer la conquista y consolidación
de un proyecto histórico sin el apoyo de un proyecto educativo.
5
esquema que permita definir los esfuerzos, delimitar las estrategias, fundamentar la
dinámica y precisar los objetivos del proceso educativo. Un proyecto Educativo
Institucional cristaliza un conjunto de elementos que dan forma a la intención educativa de
una comunidad escolar en consonancia con el Proyecto Educativo Nacional. En este
sentido, articula intereses sociales, objetivos, medios y regulaciones que dan forma a esa
intención. (Morales y otros, 1993)
Existe el convencimiento de que urge superar lo que Romero (1990) llama el rígido
paralelismo entre el desarrollo del sistema educativo y el de los sistemas productivos y del
empleo. Al respecto hay que aclarar que la superación de la plaga del desempleo no es
responsabilidad de la educación. Lo que compete a ésta es la redefinición del rol que le
compete a la orientación vocacional/profesional en su acepción más amplia pues en un
sistema económico dominado por la competitividad, la calidad y la "excelencia" del
producto, la formación debe entenderse como una preparación para los cambios, ya que
éstos también afectan permanentemente al mundo empresarial.
3.2. La globalización.
La persona educada tiene que estar preparada para vivir en un mundo global pero
peculiar. Debe tener la aptitud necesaria para ser un ciudadano del mundo -por su visión,
sus horizontes y su información- (aspecto global) pero también tendrá que ser capaz de
nutrirse de sus raíces autóctonas, y a su vez de enriquecer y nutrir a su propia cultura
(aspecto local).
Se busca dar forma a categorías y criterios que permitan una mejor comprensión y
evaluación de las realidades que se viven y que se van a vivir: participación,
respeto y solidaridad. Se pone de relieve los aspectos positivos derivados de la
globalización como el crecimiento de una mayor conciencia de los problemas
internacionales comunes, cuyo abordaje no compete únicamente a los estados o
sociedades nacionales afectados: el desarme, el hambre, la basura nuclear, la
ecología y el medio ambiente, el crecimiento demográfico así como el consumo y
tráfico de drogas.
Se denuncia que se pretende así configurar una nueva cultura "universal" sin tener
en consideración los procesos que conducen a la transición de las culturas específicas, ni
sus potenciales modos de inserción ni su propia visión de cómo proceder en ese camino
"universalista". Frente a ello hay una posición epistemológica en el campo de una
interculturalidad que se plantea acabar con los efectos perversos que históricamente
nos han legado las relaciones sociales entre grupos procedentes de culturas diferentes.
Junto a esta posición, existe una cada vez mayor toma de conciencia de la
relación intrínseca entre los desafíos de los niveles ético, político y económico y se
advierte la ineludible necesidad de la educación política para que los ciudadanos
6
asumamos plena de responsabilidad en la vida democrática entendida ésta como
participación organizada y activa de la población para atender los requerimientos del bien
común. A veces por eufemismo pero sobre todo para no chocar con los detractores de los
partidos políticos, hoy se habla mucho más de educación ciudadana que de educación
política. Yo sigo pensando que esta última es la que nos corresponde para la asunción de
una actitud coherente con las exigencias de una cultura de paz en la que todos los
peruanos podamos vivir con dignidad.
3.3. La espiritualidad.
Ante las sombras que la filosofía antimetafísica arrojó sobre la verdad del ser, el
hombre de hoy se pregunta angustiado por el bien: qué es el bien; por qué la vida, tanto
en su vertiente individual como en la social, exige imperiosamente un sentido. La
insistencia en regresar a los valores éticos y a las energías espirituales del ser humano
aparece como una respuesta a lo que el Informe Delors denomina el "sentimiento de
desencanto" que predomina en este fin de siglo.
Existe consenso respecto a que la vida cotidiana tiene que convertirse en una vida
con sentido para cualquier hombre y la tierra tiene que transformarse en la patria de la
humanidad. Ello exige trabajar en pro de una cultura de vida, que promueva el sentido
de la vida, el respeto a la vida y una ética de la vida. Una cultura que -a mi entender-
sintetiza y hace viable el mensaje de Cristo y por ende se identifica con la "civilización del
amor", es decir, con la propuesta a la humanidad que formulara el Papa Pablo VI en la
clausura del Año Santo de 1975. Para Pablo VI se trata de una "verdadera civilización"
entendiendo por tal el conjunto de condiciones morales, civiles, económicas, que permiten
a la vida humana una posibilidad mejor de existencia, una racional plenitud, un feliz
destino eterno.
Como señala Cardona (1990), es patente que la preocupación ética aparece hoy
en todos los sectores del saber científico y del práctico, al menos en sus representantes
más cualificados. La biología, la medicina, la física, la educación, la economía, los
negocios... muestran, en sus hombres mejores, una fuerte carga de preocupación ética.
La ética intenta responder a los desafíos de hoy articulando los principios de la
autonomía moral, la autodeterminación y la solidaridad. (Salvat, 1994) Se acepta cada vez
más que no puedo éticamente hacer el bien ni siquiera "para ser bueno". Tengo que ser
bueno para poder hacer el bien.
7
necesidad de ser ágiles, flexibles, dispuestas y capaces de realizar modificaciones en
respuesta a las condiciones cambiantes del mercado mundial y se están transformando
en "organizaciones de aprendizaje" cuyas características esenciales son, según
Gephart (1996): aprendizaje continuo a nivel de sistemas; generación y traspaso de
conocimientos; pensamiento sistémico y crítico; espíritu de flexibilidad y experimentación
y centrado en las personas.
8
La convergencia de las tecnologías de las telecomunicaciones, del computador, de
la micro-electrónica, de la radiodifusión y de la información han creado un número
creciente de nuevos servicios integrados de comunicación de valor añadido. Esto ha
originado una serie de redes mundiales abiertas que pueden transmitir simultáneamente
señales vocales, datos e imágenes a terminales de múltiples fines.
Pese a que hay quienes consideran que los "estudios interdisciplinares" han
perdido vigencia, coincido con Piaget (1975) que los progresos más importantes de la
ciencia contemporánea derivan justamente de las remodelaciones interdisciplinarias.
9
Será preciso la elaboración de programas de actuación, desarrollo de
metodologías diferenciadas para cada grupo de sujetos, basadas principalmente en la
comunicación de experiencias y en el diálogo. Temas como recursos humanos en la
empresa, formación en la empresa, aprendizaje del adulto, estrategias y recursos
didácticos para la formación en la empresa, aprendizaje del adulto, estrategias y recursos
didácticos para la formación en la empresa, etc. se inscriben en este nuevo ámbito de
intervención pedagógica.
En este contexto hacer gestión educativa quiere decir conducir a una institución al
logro de las finalidades de su proyecto educativo. La gestión no es un asunto sólo
técnico, sino fundamentalmente político. Por ello, gestión y proyecto institucional son
inseparables. En cuanto instrumento de gestión, el proyecto institucional resulta ser una
forma sistematizada de hacer viable la visión y misión de la institución y consiste, a su
vez, en el diseño y la ordenación (programación de una estrategia) de una serie de
procesos operacionales, coherentes y exigentes de recursos variados (gestión de
recursos), mediante los cuales determinados insumos son transformados en productos
específicos con un alto grado de calidad (calidad de procesos).
Por lo tanto, la gestión educativa puede ser entendida como la conducción global
de una institución educativa en sus dos componentes esenciales: el pedagógico y el
comúnmente denominado administrativo. Respecto de la gestión pedagógica quiero
10
precisar que es la gestión del currículo en función de la visión y misión de cada
institución. Y en cuanto a lo administrativo quiero destacar el interés que están
despertando tanto la autoevaluación como la acreditación sobre todo en el nivel de la
educación superior.
3.6.1. Funciones.
Frente a ello Imbernón (1994) plantea que, a la luz del conocimiento pedagógico
especializado, la función docente tiene estas tareas básicas:
11
* Participar en el planeamiento o proyección del currículo: conocer y tener en
cuenta la diversidad de componentes que intervienen en el proceso de enseñanza-
aprendizaje, los vínculos y las limitaciones que la realidad social e institucional
establecen y los obstáculos que los condicionantes contextuales comportan.
3.6.2. Promoción/formación.
Pero no debemos olvidar que el éxito de toda innovación, amplia o parcial, pasa
por la dignificación del maestro. Coincido con dice Díez Hochleitner (1996) en que es
necesario ir a la generación de una nueva cultura en la que la vocación, dedicación y el
sentido de responsabilidad son valores que no se ejercen o logran por dinero u otros
medios. Pero considero que el espíritu y expresión de esta cultura se desarrollan en un
clima social propicio a reconocer el papel y status que corresponde a los profesionales de
la educación.
Tal vez alguien pueda pensar que estas consideraciones son meras quimeras.
Pues bien yo me reafirmo que forman parte de una utopía necesaria, vital, que tenemos
que defender si no queremos ser cómplices de un status quo apoyado en el cinismo y la
complacencia.
12
NOTAS
(2) Como bien apunta De la Torre (1993), si algo nos enseña el pasado es a mirar de cerca el futuro, a
imaginar con realismo lo que aún no existe, a proyectar nuestras experiencias y saberes más allá del contexto
en el que tuvieron lugar, a encarar el devenir como si fuera presente. Creo que fue Prigogine quien escribió: la
ciencia moderna está centrada en la evolución y el devenir en tanto que la ciencia clásica se preocupa del ser.
Mientras que una insiste en el cambio y la diversidad, en la historia y la expansión, la otra remarca la
estabilidad y permanencia, el realismo y los tributos del ser. De Aristóteles volvemos a Heráclito. Es ley de
historia que avanza espiralmente movida por la tensión pendular entre lo objetivo y lo subjetivo, la acción
desde dentro y desde fuera, el hombre como objeto y como agente de cambios, buscando siempre nuevas
síntesis integradoras.
(3) A las funciones sintetizadas en el Informe Delors (1996) (aprender a saber, a hacer, a ser y a aprender y a
convivir), Mayor Zaragoza (1996) insiste en aprender a emprender y gerenciar y yo me permito agregar
aprender a rebelarse.
Entiendo con Mayor Zaragoza que aprender a rebelarse es la capacidad de discernimiento, sin influencias
ajenas, de voluntad para ir a contraviento de los intereses a corto plazo y la mentira, de rebelarse y de no
aceptar lo inaceptable, de defender siempre la vida, y de no actuar nunca por la fuerza.
(4) Haden y King (1974) recogen 30 innovaciones educativas introducidas al principio de la década, con sus
ventajas, inconvenientes y dificultades, líderes que la promovieron y lugares donde se ubicaron cuando ello
fue posible.
(5) Lamentablemente, atrapada en la paradoja de exhibir indignación moral sin contar con la ventaja de una
teoría bien definida de la ética y la moralidad, la teoría educativa radical ha sido incapaz de desplazarse
desde la crítica hacia una visión sustantiva. En otras palabras, los educadores radicales no han podido
desarrollar un fundamento ético, ni un conjunto de intereses sobre los cuales construir una filosofía pública
que tome en serio la relación que existe entre la escuela y una vida pública democrática (Giroux, 1992).
(6) Suponen un nuevo soporte de una información casi instantánea acompañada de apoyos didácticos
mediante el video disco. Este se está convirtiendo en uno de los recursos “estrella”.. Es este campo es donde
más puede aplicarse la afirmación de: la utopía de hoy es la realidad de mañana.
(7) La perspectiva más actualizada de la gestión incorpora el concepto de "estrategia" que alude a una
metodogía sistemática para planificar las actividades pero es más que eso puesto que entraña una
concepción holística del quehacer empresarial aplicado a la institución educativa. (Hax, 1990; Johnson y
Scholes, 1989; Chiavenato, 1988 y Himmel, 1992)
Entre los modelos para la formulación de criterios para la autoevaluación destacan el modelo integrativo de
Khu (1981), el modelo de los criterios de calidad de Bergquist (1986) y el modelo de la práctica efectiva de la
docencia de Chickering (1987).
13
intelectual (Giroux), diseñador (Yinger), artesano político (Kohl), actor político (Carlson), académico
(Elner), artista (Eisner, Pérez)
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
ALAYZA, R.
1997 Globalización y cambios en la política. Lima. Instituto Bartolomé de Las Casas y CEP.
ARZOLA, S.
1992 La investigación en la Facultad de Educación: lo racional y lo razonable. En Anales
de la Facultad de Educación de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Vol. 13.
BUNGE, M.
1989 Etica y ciencia. Buenos Aires. Siglo Veinte.
CARDONA, C.
1990 Etica y sentido del quehacer educativo. Madrid. Rialp.
CEPAL/UNESCO
1992 Educación y conocimiento: eje de la transformación productiva con equidad. Santiago de Chile.
CEPAL/UNESCO.
CHACON, J.
1970 Visión panorámica del temario del Décimo Encuentro de la Confederación Interamericana de Educación
Católica. En: Revista Interamericana de Educación. N° 159. Febrero-marzo. Bogotá.
DE LA TORRE, S.
1990 "Los estilos cognitivos en la formación del profesorado. Propuesta de un modelo de análisis". Infodidac. Revista
de Informática y Didáctica. N° 6.
1993 Didáctica y currículo. Bases y componentes del proceso formativo. Madrid. Dykinson, S.L.
DELORS, J.
1996 La educación encierra un tesoro. Informe de la Comisión Internacional sobre la educación para el siglo XXI.
Santillana/ UNESCO.
DIEZ HOCHLEITNER, R.
1996 Aprender para el futuro mejor: Educación y desarrollo. Documentos de un debate. X Semana Monográfica.
Fundación Santillana. Madrid.
DRUCKER, P.F.
1994 El Ascenso de la Sociedad del Conocimiento. En Facetas. Nº104, 2/94.
GELPI, E.
1991 Educación Permanente. Lima. Tarea.
GIROUX, H.
1983 "Teorías de la reproducción y la resistencia en la Nueva Sociología de la Educación: un análisis crítico". En:
Harvard Educational Review. N. 3. University of Ohio.
1990 Los profesores como intelectuales. Hacia una pedagogía crítica del aprendizaje. Barcelona. Paidós/MEC.
GUEDEZ, V.
14
1992 Pensamiento contemporáneo y formación para formadores del profesional de la educación. Ponencia presentada
en el Encuentro Internacional "Retos y exigencias del formador del profesional de la educación en América Latina". PUC.
Agosto.
HAX, A. y MAJLUF, N.
1991 Managing Strategy Concept and Process. A Pragmatic Approach. Englewood Cliffs. N.Y. Prentice Hall.
HIMMEL, E.
1992 Planificación, Gestión y Control Estratégico en la Universidad. En Administración Universitaria en América
Latina. Una perspectiva estratégica. Santiago de Chile. CINDA.
HUSEN, T.
1994 Enseñanza y/o aprendizaje: reforma de las estructuras y modalidades educativas. En: Aprender para el futuro
mejor: Educación y desarrollo. Documentos de un debate. X Semana Monográfica. Fundación Santillana. Madrid.
IMBERNON, F.
1994 La formación y desarrollo profesional del profesorado. Hacia una nueva cultura profesional. Barcelona. Grao.
IPIÑA, E.
1997 El Informe Delors y el Cambio en la Educación. En: Educación Hoy. N° 132. octubre-diciembre de 1997.
JOHNSON, G. y SCHOLES, K.
1988 Exploring Corporate Strategy. New York. Prentice Hall.
LYNCH, J.
1986 Multicultural Education. Principles and Practice. London. Routledge and Kegan Paul.
MAYOR ZARAGOZA, F.
1996 Continuidad y evaluación de las reformas educativas. En: Aprender para el futuro
mejor: Educación y desarrollo. Documentos de un debate. X Semana Monográfica. Fundación Santillana. Madrid.
MAYORGA, L.
1994 Relaciones entre política, ética y economía. En Nueva América. Nº 61.
MEJIA, M.R.
1996 Competencias y habilidades para una escuela del siglo XXI. Tarea. Revista de Educación y Cultura.
Setiembre. Lima.
PABLO VI
1971 Carta Encíclica Octogesima Adveniens. Lima. Hijas de San Pablo.
PIAGET, J.
1975 "La Epistemología de las Relaciones Interdisciplinarias". México, CERI, ANVIES.
PIOLETA, G.
1977 Democratización de la oportunidad. En: Educación Hoy. N° 132. octubre-diciembre. Santafé de Bogotá.
ROCKWELL, E. y Otros
1993 La práctica docente y la formación de maestros. Colombia.
SALVAT, P.
1994 Algunas paradojas de nuestra modernidad. En Nueva América. Nº 61.
STAVENHAGEN, R.
1995 Integración y exclusión. Fuentes UNESCO. N° 73. Octubre.
ZOPFL, H.
1993 La futurología en la pedagogía escolar. Revista Educación. Tübingen. Vol. 7.
15
16