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Afortunadamente cada vez hay más personas conscientes del daño que
las emociones pueden provocar en la salud. Sin embargo, es menos
conocido qué ocurre desde que recibimos un impacto emocional
negativo hasta que acabamos enfermando. Lo explicaré paso a paso.
Según la medicina holística, cada uno de nosotros dispone de cuatro
cuerpos interrelacionados entre sí: el cuerpo físico, el energético, el
emocional y el mental. Cada cuerpo tiene su misión y solo él puede
llevarla a cabo.
El Campo emocional son nubes pequeñas de todos los colores del arco iris,
transparentes, fluyen, se movilizan. Este campo te permite experimentar todos tus
sentimientos. Se extiende más o menos 7.5 cm alrededor de tu cuerpo.
Cuerpo Energético:
Tipos de bloqueos
Síntomas
Lo cierto es que la mayoría de las personas suelen estar bloqueadas en
mayor o menor medida. Sin embargo, existen síntomas que tendrían que
hacernos dar cuenta de la gravedad de la situación, tales
como: insomnio, no poder desconectar, encontrarse mal sin motivo
aparente, sentirse triste, no saber qué dirección tomar en la vida, sentirse
agotado, echar siempre la culpa a los demás o tener pensamientos
negativos.
Tratamiento
Todos en alguna fase de nuestra vida hemos estado bloqueados, incapaces de tomar decisiones, sin
capacidad de desarrollar proyectos. Esta situación afecta a muchos ámbitos, entre ellos, la relación
de pareja, familiar, relaciones sociales en general.
Las energías vitales no fluyen, nuestro interior, cuerpo, mente y espíritu no recibe lo suficiente y si el
bloqueo es continuado los daños aparecen. Tristeza continuada, incluso estados depresivos y
ansiedades. La autoestima también se daña en ese estado, pues la incapacidad de realizar
acciones, la sensación de pérdida de días, meses incluso años, hacen mella en ella.
Los que buscan un crecimiento interior, paradójicamente están más expuestos a esos bloqueos. El
deseo de avanzar, de notar, de ver más, de ayudar pueden bloquear de tal manera, que incluso
personas muy cualificadas espiritualmente, abandonan durante años o para siempre ese camino.
Como siempre, tengo que advertir que las soluciones son tan variadas como casos de bloqueos.
Pero voy a intentar exponer alguna solución por si puede ser aplicada o adaptada a vuestro caso.
Constancia. Una vez realizado el planing, seguirlo lo más escrupulosamente posible. Sacar fuerzas para
realizar esas acciones y romper la dinámica del bloqueo.
Resultados. Los resultados llegan. Poco a poco, sin darse cuenta. Las dinámicas cambian. Al haber
hecho cambios en el día a día, el Aura vuelve a subir, se canaliza mejor y el bloqueo se va
desvaneciendo, dando paso a la vitalidad. Importante absorber energía en esos paseos, integrarse
en la naturaleza, avanzar. No hay nada milagroso, sólo la constancia y poco a poco tendrás mas
fuerzas para afrontar más situaciones y vencerlas.
Insisto en que la generalización no es adecuada, pero fórmulas sencillas como la de listar, dan
excelentes resultados. No es mi intención canalizar, pues soy consciente de las múltiples situaciones
que hacen más compleja esa salida del bloqueo.
Al realizar acciones, movemos energías, alimentamos nuestra Aura y canalizamos mejor. Los
bloqueos alimentan la inacción, es una espiral peligrosa, pero seguro que eres, si es tu caso,
completamente capaz de salir adelante.
Fuente: http://www.swamimanuel.blogspot.com.es/
Sofia Yoldi
Estoy cansado, vivo una desesperación interior inmensa, ésta siendo vinculada más particularmente al aspecto
de mi vida que está representada por el órgano afectado.
Es importante que encuentre los medios de retomar mi vida en mano y que esté activo.
Puedo buscar lo que amo verdaderamente, bien sea el arte, el deporte, un pasatiempo, para volver a
darme vitalidad y el gusto de vivir.
INCONTINENCIA (…fecal,…urinaria)
Las causas de la incontinencia temporal pueden ser, entre otras: … Prolapso pélvico en las mujeres: caída o
deslizamiento de la vejiga, uretra o recto.
La enuresis o incontinencia urinaria es la emisión involuntaria e inconsciente de orina, con más frecuencia
durante la noche, que persiste en el niño después de la edad en que es normal que aprenda a controlarse, es
decir, después de los tres años. No se trata de un niño que ocasionalmente se orina en la cama, después de una
pesadilla o de una emoción fuerte.
El hecho de que el niño se orine en la cama, sin control, durante la noche, indica que se reprime mucho durante
el día y que no logra controlarse ya. Es el tipo de niño que le tiene mucho miedo a la autoridad, sobre todo al
padre o a la persona que cumple ese papel. Ello no quiere necesariamente decir que le tema físicamente. Más
bien tiene miedo de disgustarlo, de no estar a la altura de sus expectativas. Para este niño, disgustar a esa
persona le sería tan penoso como la vergüenza que siente al orinarse en la cama.
Si es tu hijo quien presenta este problema, es importante que le leas el párrafo anterior y que le hagas saber que
todo cuanto necesita es más estímulo. A este niño, que se exige mucho a sí mismo, el hecho de decirle que es
bueno, el hecho de valorar sus talentos y de repetirle que aunque se equivoque sus padres lo van a querer igual,
le ayudará a creerlo y le hará relajarse. Es recomendable que el niño verifique si lo que él cree con respecto a
las expectativas de sus padres es realmente cierto.
Si la incontinencia es fecal – incapacidad en retener las heces – o urinaria – pérdidas involuntarias de la orina –
ambas situaciones se refieren al control.
Puede que la vida quiera enseñarme a ser más flexible y a soltar a la gente y las situaciones.
La pérdida de control, bien de mis heces como de mi orina, me obliga a hacer una toma de consciencia en este
sentido.
Debo dejar de lado mis pensamientos rígidos que sólo son una protección que me impongo para protegerme de
mi sensibilidad ahí donde no puedo controlar la situación.
En este caso de incontinencia fecal, puedo preguntarme cuál es la persona o la situación que “me joroba”.
Puede que esté en fuerte reacción frente a la autoridad y el hecho de deber sufrir esta autoridad me lleva a vivir
esta situación de incontinencia. Para mí, la autoridad puede ser la propia vida que me lleva a realizar cambios
que no quiero hacer.
Puedo ir a ver en mi infancia quien representaba la autoridad para mí y si estuve en reacción contra ella.
En el caso de incontinencia urinaria, esta liberación incontrolable e inconsciente de emociones negativas que
representa la orina puede ser un medio de recibir más atención y afecto.
La causa subyacente de esto puede ser un sentimiento de rechazo, de no tener ningún mérito, de inseguridad, de
tener miedo del futuro.
La orina representa emociones negativas normalmente soltadas cuando ya no son necesarias o deseadas.
Esta liberación frecuentemente nocturna indica un conflicto a un nivel más profundo y del cual ni siquiera
tengo consciencia.
Siendo incapaz de “controlar” la pérdida de orina o de heces, soy incapaz de controlar lo que sucede en mi vida,
en particular las emociones, y esto me da miedo.
También puedo dejar ir demasiado fácilmente cosas o personas que amo, sin tener el valor o la fuerza de ir a
buscar lo que quiero.
Teniendo muchas esperas frente a la vida, estoy decepcionado y me “dejo ir”, esto puede ser tanto con relación
a mi cuerpo como a mi mente.
Un gran miedo o nerviosidad puede también causar la incontinencia, sobre todo en los niños.
La mayoría de las enfermedades físicas, mentales y emocionales son causadas por impactos
emocionales negativos no liberados al momento. Para poderlo explicar, será necesario hacer
una introducción a la medicina holística.
La medicina holística entiende que la energía entra en el cuerpo por los alimentos, el aire
y el sol. La energía se distribuye por todo el cuerpo a través de los meridianos. Esta energía
nos permite, por un lado, llevar a cabo acciones físicas, emocionales y mentales. Por otro,
hace que las células puedan reproducirse correctamente. Si la energía llega bien a todo el
cuerpo, todo funciona, pero no siempre es así. Cuando hay un impacto emocional (conflicto,
disgusto…), si no se libera al momento (hablando, gritando, llorando…), hay un
estancamiento de la energía, se obstruyen los meridianos y la energía se convierte en
materia (bloqueo energético).
Los bloqueos energéticos tienen una repercusión física y otra emocional. A nivel físico, un
bloqueo genera una presión sobre los órganos de alrededor y absorbe su energía. Estos
órganos se inflaman, se debilitan y, con el tiempo, originan enfermedades. Por el contrario,
las células que forman el bloqueo ganan en tamaño y en fuerza hasta el punto de alterar su
ADN, lo que puede generar tumores, miomas y quistes.
Para evitar enfermedades cancerígenas, el cuerpo abre pequeñas fisuras allí donde hay un
bloqueo. A través de las fisuras, provoca fugas de energía para no alimentar las células del
bloqueo y para impedir que cojan fuerza.
Cuando hay fugas, quiere decir que hay partes del cuerpo que reciben menos energía y se
vuelven más débiles. En muchos casos, una parte débil es el sistema nervioso.
Un sistema nervioso debilitado hace que la persona viva los impactos emocionales de
manera amplificada (ansiedad, angustia…), el doble o el triple de lo que sería normal. De
esta manera, el cuerpo físico ha transmitido el problema al cuerpo emocional.
Bloqueo materno. Origina en la parte inguinal izquierda y tiene las mismas causas que el
anterior. A nivel físico, provoca frigidez, problemas hormonales y de menstruación. A nivel
emocional, causa bloqueos en la creatividad, la ilusión y la intuición, además de dificultad
para demostrar afecto.
Bloqueo con los hijos. Se forma en la zona del páncreas por la enfermedad grave o la
muerte de un hijo. Puede provocar problemas digestivos y al sistema inmunológico, además
de diabetes. A nivel emocional, es la causa de grandes depresiones.
Bloqueo de impotencia. Se forma en los riñones y tiene que ver con el miedo, los
sentimientos de impotencia respecto a temas emocionales, o bien respecto al trabajo y el
dinero o la escuela. Provoca el debilitamiento y la inflamación de las lumbares, lo que da
problemas en los riñones, el conducto urinario y la vejiga (retenciones de líquidos, formación
de piedras en el riñón, cólicos…). El riñón deja de fabricar energía vital y esto se traduce en
sensación de cansancio, sentimientos de cobardía, falta de alegría y de ilusiones.