Recuperación del agua empleada

en el lavado de automóviles
El agua y la energía son los recursos más importantes en la actividad de un lavadero de vehículos. Optimizar el
uso de estos recursos permite reducir los costes de operación y minimizar el impacto ambiental.
Concretamente, la reutilización del agua empleada en el lavado de automóviles genera importantes beneficios
económicos y medioambientales:

Por un lado, el ahorro en el consumo de agua de la fuente de suministro, cuyo coste es cada vez más alto.

Por otro lado, disminuye el volumen de agua para vertido y se reduce la carga de contaminantes de la misma.

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Consumo de agua durante el lavado de automóviles

Las fuentes de agua utilizadas para el lavado de automóviles pueden tener diversa procedencia, como
red de abastecimiento público, pozo, agua de lluvia recogida y almacenada en las instalaciones del
centro de lavado y/o agua regenerada con calidad suficiente para ser reutilizada de nuevo en el
proceso de limpieza; siendo la red de abastecimiento de agua potable municipal la fuente más
frecuente de suministro.

Dependiendo del proceso de lavado que se lleve a cabo, el consumo puede llegar a ser de hasta 500
litros, si se realiza mediante lavado manual fuera de las instalaciones de un centro de lavado; no
obstante, esta práctica supone un alto impacto ambiental y un alto consumo de agua, por lo que es
una práctica poco sostenible en términos económicos y ecológicos.

Para un proceso de auto-lavado con lanza a presión y reciclado de agua, el agua empleada puede
reducirse a 25 litros. En la siguiente tabla se resumen los datos de consumo:

Consumo de agua por vehículo durante el proceso de lavado

Consumo de agua en litros
Tipo de lavado
Sin reciclado Con reciclado

Manual con manguera 400-500 No posible

Autolavado con lanza a presión 50-80 25-40
Automático en puente de lavado 200-300 80-120
Automático en túnel/tren de lavado 150-200 30-40
Fuente: Elaboración propia

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Impacto ambiental: contaminación del agua y vertido

Con el uso, los vehículos incorporan partículas de naturaleza tanto orgánica como inorgánica.
Estas partículas pueden ser procedentes del medio (restos de insectos, alquitrán, polvo,
barro,…) o generadas por el propio vehículo (aceite, grasa, cera, restos pastillas de freno,…). El
agua de lavado se contamina con estas partículas y con los productos químicos añadidos para
realizar la limpieza. El grado de contaminación depende de varios factores:

Tamaño y tipo de vehículo.

Actividad: Uso privado y transporte de personas, agrícola, ganadero, industrial o militar.

Ubicación geográfica y características del entorno.

Tiempo transcurrido desde la última limpieza.

Cantidad y tipo de productos químicos (detergentes principalmente) utilizados en el proceso

de limpieza.

Volumen de agua consumido en el proceso.

Si no se realiza una actuación que garantice un tratamiento adecuado del agua empleada
durante el proceso de limpieza, se estará realizando un vertido incontrolado de agua
contaminada, generando un daño directo al medio ambiente.

¿Cómo reducir el consumo de agua y el impacto ambiental?

La tendencia en los centros de lavado es el desarrollo de nuevos procesos con un mayor nivel
de automatización y de presión de agua, que implican el ahorro de los volúmenes de agua
necesarios y una mejora de la calidad del agua tanto para reutilización como para vertido.

El tratamiento de las aguas de proceso debe cumplir los siguientes objetivos:

Adecuar la calidad de agua (TSS y concentración de hidrocarburos) a la normativa vigente

para vertido a cauce público y/o alcantarillado.

Proteger frente a obturaciones las boquillas de proyección de agua a alta presión.

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 Garantizar que el agua empleada está libre de organismos patógenos que puedan generar problemas infecciosos al personal de
operación y usuarios del sistema.

Eliminar sales del agua que puedan dejar manchas sobre sobre las superficies del vehículo tras el proceso de aclarado.

Reducir los volúmenes de agua empleados gracias a la reutilización de agua tratada en alguna de las etapas del proceso de limpieza,
pudiendo llegar a un ahorro de de un 50% hasta un 80% del agua de consumo de estas instalaciones.

La solución AZUD

AZUD ofrece una amplia gama de soluciones de filtración y tratamiento de agua tanto para realizar un vertido con garantías como para
la reutilización del agua en el proceso de lavado. Los sistemas de filtración AZUD HELIX AUTOMATIC FT AA reducen significativamente
la concentración de partículas, garantizando la continuidad del proceso, la calidad de agua y la eficiencia energética.

Un gran número de instalaciones avalan la experiencia de AZUD en este sector.

Sistema de filtrado AZUD HELIX AUTOMATIC FT AA empleado como prefiltro para protección de membranas de ósmosis inversa.
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