Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
Según el profesor Milano Sánchez, el procedimiento administrativo surge como “el medio técnico
jurídico más adecuado para determinar la verdad real de los hechos que servirá de motivo al acto
final”, por consiguiente, el procedimiento comprende la regla “audi alteram partem” o el derecho a
ser oído alegando en su defensa y considerando las pruebas; para la aplicación de esta regla es bueno
diferenciar la naturaleza del juicio o del acto del procedimiento, es decir, el procedimiento
administrativo constituye una garantía respecto a los derechos de toda persona individual o
colectiva, pública o privada, cuyo derecho subjetivo o interés legítimo se vea afectado por una
actuación administrativa.
Los principios son premisas fundamentales jurídicas que buscan, con su aplicación, la justicia,
equidad, bien común, bienestar social; es decir son el contenido básico del sistema, además, tiene
una superioridad jerárquica inevitable sobre los demás elementos del sistema, de tal forma que la
norma congruente con un principio general será la que deba prevalecer.
Estos sirven de base para el legislador en la elaboración de las leyes, sin embargo, existen otros que
sin estar inmersos en la norma, sirven al juzgador para decidir conforme a buen derecho, asimismo,
dichos principios cumplen la función limitativa cuando estos demarcan ordenadamente relaciones
entre normas jurídicas jerárquicamente superiores con otras de rango inferior.
Existen principios aplicables al procedimiento administrativo que son reconocidos por la mayoría de
los sistemas jurídicos y que están contemplados en la Constitución Política del Estado (cpe), Art.
232, por lo mismo se tiene que las normas jurídicas de carácter constitucional son de jerarquía
superior a cualquier otra norma del sistema jurídico, toda vez que consagran principios jurídicos que
a lo largo de la historia han ido tomando un protagonismo importante dentro del procedimiento
administrativo y que desconocerlos resulta imposible.
El tratadista argentino Jorge W. Peyrano señala la existencia de dos características, “la bifrontalidad
y la complementariedad”, la primera se refiere a la presentación de los principios en pareja
contrapuesta, por ejemplo, el principio dispositivo se contrapone al inquisitivo, al de concentración
el de dispersión, al de conservación el de nulidad, al de oralidad el de escrituridad, etc.
Por la segunda se entiende que los principios no se presentan aislados unos de otros, sino
fuertemente enlazados o unidos, principalmente los más importantes implican o suponen la
existencia de otros que son complementarios o consecuenciales, por ejemplo, el principio de
economía supone necesariamente la existencia de principios como los de impulso procesal,
concentración, celeridad, preclusión, de conservación, saneamiento, etc.
Gerardo Parajeles estructura los principios del procedimiento administrativo y realiza la siguiente
clasificación: Principios inherentes al objeto del proceso, a la estructura del proceso, al
procedimiento y a la moralidad del proceso. Así. Max Mostajo realiza una descripción de cada uno de
estos.
a) Sometimiento pleno a la ley o legalidad objetiva. No solo se intenta proteger los intereses de toda
persona individual o colectiva, pública o privada, cuyo derecho subjetivo o interés legítimo se vea
afectado por una actuación administrativa, por el contrario, la defensa de la norma jurídica adjetiva,
con el fin de mantener el imperio de la ley y la justicia, así se manifiesta de un modo expreso el
interés público, al efectuar el respeto del derecho objetivo y la primacía de la ley como el debido
proceso.
b) Jerarquía normativa. Las actuaciones administrativas así como las reglamentarias deben observar
la jerarquía normativa y la supremacía de la Constitución, en su expresión más generalizada implica
reconocer a la cpe como norma suprema fundamental del Estado Social y Democrático de Derecho,
que se constituye como la base y cimiento sobre el cual se asienta la estructura de las normas y actos
administrativos.
c) Proporcionalidad. La administración debe actuar siempre sometida a la ley y utilizar los medios
adecuados para su cumplimiento, lo que implica la adecuación de los medios a los fines y prohibir
excesos en la actuación, tiene especial trascendencia sobre todo en materia de sanciones
administrativas, en las intervenciones o incidencias administrativas en el ejercicio de los derechos
del interesado.
d) Garantía del debido proceso. Este principio se constituye en una garantía constitucional que
integra tres subprincipios consistentes en el derecho a ser oído, a ofrecer y producir pruebas y a una
decisión fundada o motivada por parte de la administración pública, toda vez que el desconocimiento
de este principio genera vicios que afectan a los actos administrativos procesales.
Principios inherentes
al procedimiento
a) Imparcialidad o probidad. Este principio exige una conducta imparcial y justa de parte de las
autoridades administrativas sin que sirva de excusa la relatividad de este principio, bajo quebranto
de la garantía constitucional aunque el peso orientador es siempre el interés general, evitando toda
clase de discriminaciones o exclusiones.
e) Impulso de Oficio u oficiosidad. Desde mi punto de vista merece importancia, porque supone no
solo la impulsión de oficio, sino también la instrucción de oficio, por consiguiente, corresponde a la
autoridad administrativa la adopción de los recaudos conducentes a su impulsión hasta el dictado del
acto final, así como el desarrollo de la actividad necesaria para obtener las pruebas pertinentes para
su adecuada resolución, en ese contexto, la carga de la prueba recae sobre la administración pública.
g) Contradicción. Es la posibilidad de que se haga valer los intereses y estos intereses sean
adecuadamente confrontados en presencia de sus respectivos titulares antes de adoptar una decisión
definitiva, es decir, no hay procedimiento válido si no existe igualdad de oportunidades entre las
partes en cada uno de los trámites o momentos procesales, un auténtico debate contradictorio sobre
los hechos y el derecho.
h) Escrituridad. No obstante el movimiento de los procesos orales que pueden efectuarse de manera
excepcional, en el ámbito administrativo existe la conveniencia del procedimiento escrito, esto para
evitar presiones sobre los interesados, obligando a motivar y a decidir las peticiones oportunamente,
además, lo escrito permanece como prueba dada la cantidad de procesos que se debe tramitar.
a) Legalidad. Este principio tiene origen en el anhelo de seguridad, la aspiración a una meta ideal e
inalcanzable de seguridad jurídica absoluta, en tanto que este último no es posible con el tosco ins-
trumento de la ley, asimismo, se presume que todas las actuaciones en el procedimiento
administrativo se presumen legítimas, en consecuencia, ninguna autoridad administrativa puede
dictar alguna disposición que no encuentre apoyo en algún precepto legal, es decir, implica una
obligación para las autoridades de actuar con apego a las leyes y a la propia cpe.
Dentro de nuestro régimen constitucional las autoridades no tienen más facultades que las que
expresamente les atribuye la ley, en tanto que los actos de autoridades administrativas que no estén
autorizados por Ley alguna, importa violación de garantías, toda vez que la ley constituye el límite de
la administración.