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JUDAS

William Hendriksen

Destinatarios:
Se dirige a cristianos que necesitan consejo y aliento para oponerse a las doctrinas de falsos
maestros.

Damos por supuesto que Judas ha instruido a los lectores en el pasado.


El escribe, “quiero recordarles”, y parece estar refiriéndose a a aquella enseñanza apostólica
que en forma de doctrina cristiana fuera confiada “a los santos de una vez por todas”

Propósito de la Carta:
Con unas pocas palabras, Judas explica la razón que le ha movido a redactar su carta: 1) en
primer lugar quiere animar a los lectores a afirmar su fe; 2) en segundo lugar, los alerta al
peligro que significan las personas inmorales que se han infiltrado entre ellos; 3) y finalmente
quiere que los lectores se den cuenta de cuál es la vida y la doctrina de sus adversarios.

Siente la necesidad de avisar a los miembros que estén alerta y que se opongan a los hombres
que se han infiltrado en la comunidad cristiana Las circunstancias lo han obligado a cambiar
el contenido de la carta que pensaba escribir.

La carta que Judas iba a escribir: “la salvación que tenemos en común”
“sentí la necesidad de hacerlo”

Damos por sentado que la palabra fe se refiere al cuerpo de doctrinas cristianas. Se trata del
Evangelio que los apóstoles proclamaron y que es, por consiguiente, equivalente a “la
enseñanza de los apóstoles” (Hch. 2:42). ← La fe objetiva.
La fe que se les entregó a los santos de una vez por todas.

Hay dos observaciones que debemos hacer aquí: Judas no dice si esta gente impía perteneció
alguna vez a la comunidad cristiana; y estos que se han infiltrado no son honestos en cuanto a
sus relaciones con los creyentes, porque se han introducido furtivamente en la iglesia. Su sigilo
denuncia sus verdaderas motivaciones. Probablemente eran predicadores itinerantes que tenían
la meta de destruir la iglesia de Jesucristo. El Nuevo Testamento tiene muchas advertencias
dirigidas a los creyentes de que deben evitar las enseñanzas extrañas que traen los falsos
maestros (Fil. 3:2; Col. 2:8; 2 Ti. 3:6; 1 Jn. 3:7; 2 Jn. 7).

“De quienes hace mucho tiempo se escribió que habrían de ser condenados”
Dios tiene una lista de los impíos que merecen la condenación. Estos pecadores, cuyos
nombres aparecen en la lista, son los “que habrían de ser condenados”
Entran a hurtadillas en la iglesia cristiana reconociendo la existencia de Dios; de no ser así, se
les hubiera negado el ingreso.

Descripción
Impíos que toman la gracia de nuestro Dios como pretexto para una vida desenfrenada
de los falsos (1RA)
maestros y Pero su conducta personal revela impiedad (cf. vv. 15, 18), ya que estos hombres piensan que
su anuncio la gracia de Dios les permite entregarse a un libertinaje sexual sin límites.
acerca de la
condenación Estas personas pervierten las enseñanzas de la Palabra de Dios entregándose a una vida de
que se inmundicia sexual. La expresión licencia para el libertinaje es una expresión que Pedro
avecina,.. emplea para describir la vergonzosa conducta homosexual de los sodomitas (2 P. 2:7).
(Judas)
recurre a la
Impíos que … niegan a Jesucristo, nuestro único Soberano y Señor (2DA)
historia y da
Están renunciando constantemente la autoridad divina de Jesucristo.
tres
(“y niegan al único Señor Dios y a nuestro Señor Jesucristo”)
ejemplos del
Designa a Jesucristo como nuestro único Soberano y Señor, y da a entender que no podemos
juicio divino
tener ningún otro Señor que Jesús.

III. Ejemplos de la historia (5–7)


A. Israel incrédula

Judas tiene un orden temático en el cual menciona a los israelitas incrédulos en el desierto, a
los ángeles caídos y a los ciudadanos de Sodoma y Gomorra. En estos tres casos, Judas
enfatiza el tema de la desobediencia y rebelión contra Dios que lleva inevitablemente a la
condenación.

Esta nación, tan altamente privilegiada, fue testigo de muchos milagros asombrosos que
lograron su liberación de la esclavitud. Pero aun así, esta gente se rehusó a confiar en el
iderazgo visible de Dios. Y por rechazar la dirección que Dios les ofrecía, sufrieron la ira de
Dios. Esa ira se manifestó en castigos muy severos: muchos israelitas perecieron en el desierto
(1.207.100. Morían alrededor de 90 personas por día) y fueron abandonados por Dios. ¡Qué
tremenda advertencia acerca del peligro de tomar a la ligera el castigo de Dios!

v. 7
Por lo tanto, cuando los hombres de Sodoma se interesaron por tener
relaciones sexuales con varones, pervirtieron el orden creado para la relación normal. En otras
palabras,
los hombres de Sodoma no deseaban mujeres (véase Gn. 19:8–9); al contrario, estos hombres
exigían
relaciones homosexuales con los hombres que estaban visitando a Lot. Las acciones de los
sodomitas
son la perversión. Es así como algunos traductores traducen la frase fueron tras otra carne.

Y el pecado de injuria a los seres celestiales es equivalente al de


la incredulidad de los israelitas en el desierto (v. 5). Los israelitas incrédulos injuriaron al Dios
que los

había redimido de la esclavitud y los había cuidado en muchas maneras (véanse especialmente
Nm.
14:1–4, 10–11). Su rechazo total a Dios fue causa de un despliegue de la gloria divina,
mediante el cual
Dios manifestó su ira contra el pueblo rebelde.654 Por consiguiente, llegamos a la conclusión de
que el
propósito de Judas es demostrar que el juicio de Dios recae sobre quienes se rebelan.
Demuestra que a
pesar de las evidencias del juicio divino, los coetáneos de Judas no están dispuestos a escuchar
a algún
argumento razonable y por ello invitan al castigo eterno que caiga sobre ellos.

BALAAM
Así como Balaam buscó la destrucción de Israel, del mismo modo los impíos deseaban la
destrucción del pueblo de Dios.

No debemos interpretar el término error en un sentido pasivo, como si Balaam hubiese sido
descarriado y así llegó a errar. Al contrario, este término tiene un significado activo—Balaam
engañó a los israelitas llevándolos a pecar. En forma parecida, el objetivo de los oponentes de
Judas es el de engañar a la comunidad cristiana y obtener una ganancia.

CORÉ
“Han perecido en la rebelión de Coré”. El triste relato de la rebelión de Coré contra Moisés
figura en Números 16:1–35. Coré, Datán y Abiram fueron tragados por la tierra junto con
sus familias; 250 líderes fueron consumidos por el fuego. Esto sucedió como resultado de
la negativa de éstos a aceptar el liderazgo de Moisés y Aarón.

Dios castigó severamente a esta gente por desafiar su administración y enseñanza.

Coré puso en tela de juicio la sabiduría de Dios al designar a Moisés y Aarón como líderes de
Israel. En forma similar, es de suponer que los adversarios de Judas rechazaban la enseñanza y
liderazgo apostólico en la iglesia cristiana. Y tal como sucedió con Coré y sus seguidores, estos
adversarios también perecerán bajo el juicio de Dios.

Judas está tan seguro de esto que escribe el verbo perecer en tiempo pasado, como si la acción
ya hubiese tomado lugar: “Han perecido en la rebelión de Coré”.

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