PENSAMIENTO

CRÍTICO

TOMA DE DECISIONES
RAZONADAS
Desarrollando los hábitos para convertirte en un pensador reflexivo.

Conforme la complejidad percibida por nosotros en relación a cómo vivir en este mundo se
incrementa, tendemos a descansar más en lo que los expertos y los medios nos dicen, sin
preguntarnos de donde viene ese expertise que se les atribuye, y aceptamos de manera no-crítica su
consejo. Esta posición sumada a la avalancha de información con la que lidiamos a diario, parece que
nos está haciendo observadores pasivos y tomadores débiles de decisiones.

La manera en que nos hemos aproximado

en este curso ha sido diseñada para cobrar
consciencia de la necesidad de convertirnos
en pensadores autónomos y reflexivos, a
través de cambiar los hábitos de pensar
cuando accedemos a diversos modos de
pensamiento.

Hemos revisado los beneficios de contar

con una estructura de pensamiento crítico o
método que nos sea de ayuda para adherir y
articular nuestros conocimientos y nos
ayude a filtrar y refinar la información que
recibimos de nuestros asuntos de interés.

Así, el gran asunto tiene que ver con la gran pregunta que nos debemos hacer: ¿cómo pensamos?
Hemos revisado esa cuestión con la ayuda de autores como Johanness Hessen y John Dewey.

Al revisar los trabajos de este autor, podemos aprovechar la ventaja de filtrar aquello que es universal
más que situacional; aquello que es esencial y no es arbitrario, acerca del criticismo o pensamiento
reflexivo.

Decimos que tenemos un hábito, cuando algo ya forma parte de nuestro ritmo y no es solo una
excepción. Nuestra vida tiene ritmos: ritmo del corazón, respiración, comidas, día y noche, etc. Así
nuestro pensar debe ser parte de nuestros hábitos, pero no como una rutina, sino lo contrario, como
algo que se nos facilita y que se hace sin mayor esfuerzo, pero con claridad. Por ejemplo, al recordar
constantemente las seis preguntas de Rudyard kipling de su poema: ¿Qué, por qué, cuándo, cómo,
dónde y quién?

Las habilidades de pensamiento crítico serán aprendidas

mejor, así como oras habilidades lo son, cuando tenemos
alguna necesidad conectada con ellas.

Ese en ello que encontraremos el estímulo para hacerlo.

Sin embargo, este aprendizaje solo puede ser logrado si
cubre de manera indisociable: el conocimiento,
experiencia práctica, auto-transformación y libertad
interior.

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Revisemos ahora estos conceptos:

Conocimiento Experiencia

Por conocimiento nos referimos al La Experiencia práctica llega, cuando

entendimiento teórico de una
materia, hecho, o condición a la que
estamos atentos por algo.
Sin embargo, esto es un asunto
sobre cosas pasadas, y necesitamos
convertirlo en un asunto práctico,
para su uso futuro o su extrapolación
a otras circunstancias o ambientes.
Debemos ser capaces de aplicarlo de
nuevas maneras.
hemos dominado las conexiones
entre el hacer y las consecuencias de
lo hecho, de tal forma que hemos
sido afectados por dichas
consecuencias.
La experiencia no es un asunto
abstracto o especulativo que se
adquiere en un aula o salón de
clases.

En el capítulo “Experience and thinking” John Dewey sugiere que:

“Necesitamos apreciar cuanto más agudas y

extensivas serían nuestras observaciones e
ideas, si fueran formadas bajo condiciones de
experiencias vitales, que requieran el uso de
nuestro juicio: Salir a la caza de conexiones de
la cosa que investigamos”
(Dewey. Democracy an Education. Chapter 11)

La Transformación personal, ocurre cuando somos conscientes de convertir dicha experiencia

práctica en parte de nuestras renovadas nuevas rutinas accesibles para uso futuro. Podemos decir
que esto es una especie de un despertar de algunas de nuestras habilidades dormidas. Heráclito
señala en el fragmento 26 “Todo hombre puede encenderse a sí mismo una luz en la oscuridad”.

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 La libertad interior completará el aprendizaje, cuando disfrutemos la experiencia de estar a cargo de
nosotros, de tener la tranquilidad y paz mental para elegir y vivir con las consecuencias de lo elegido,
en vez de tener que descansar en los juicios de los demás. Con ello evitaremos el gran sesgo de la
socio-conformidad.

Recuerda que la aprehensión de algo requiere: conocimiento, experiencia práctica, auto-transformación

y libertad interior.

Utilizando los textos literarios para mejorar nuestras habilidades de pensamiento

crítico

Una de las mejores formas para desarrollar

nuestras habilidades de pensamiento crítico
es mediante la lectura de las obras literarias
pues se acercan en gran medida a describir
las condiciones humanas con que vivimos
todos.

Leer y estudiar un texto, nos pone en

contacto con asuntos que reflejan la vida
diaria. Nos da contextos y situaciones en
los que al leer debes articular las ideas y
pensamientos expresados durante la trama,
de la que desconocemos aún su desenlace.

Debemos leer en ellos no solo el lenguaje

literal sino también el lenguaje entre-líneas u
oculto, así como las expresiones
metafóricas que nos llevan a otras unidades
semánticas.

¿Por qué el hábito de la lectura es importante?

Mediante la lectura, desarrollas Para mí, un gran beneficio viene

las habilidades para accesar,
memorizar, localizar, sintetizar y
enjuiciar significados literales o
implícitos.
De igual forma, algunos autores
disfrutan de dejar situaciones
abiertas o no resueltas, de
manera que el lector siempre se
queda preguntando sobre el
porqué de las elecciones de los
personajes y tratando de darles
consejo.
del lenguaje de la imaginación
Otro de los beneficios usado en la literatura, para crear
consiste en que modos alternos de coexistencia.
incrementarás tu Ya sea en teatro, poesía, cuento o
vocabulario y aprenderás novela, el lenguaje de la
a expresar tus imaginación crea mundos
pensamientos, mediante abiertos a nuevas posibilidades
lenguaje que crea de experiencias humanas.
mundos.
Un poeta Griego señala que: “Es
la ausencia de imaginación lo
que convierte a los humanos en
inválidos de la realidad”
(Odysseas Elytis, Open papers)

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Me gusta el poder de las palabras y me gusta verlas expresadas en poemas o diálogos internos o en
diálogos entre personas. Ello ha hecho una diferencia en mi manera de pensar y de relacionar
lenguaje y pensamiento.

Revisemos la siguiente información:

Leer una novela no significa que la tengas que

aprender, significa que te permite articular los
pensamientos de los personajes y los tuyos al mismo
tiempo. A veces te pone a favor de uno u en contra de
otro, lo que significa que has ponderado sus razones y
hecho algún juicio basado en algo.

También nos hace dar recomendaciones a los

personajes, pues hemos encontrado empatía con ellos
y sus acciones. Les hablemos como si estuviéramos
con ellos en la novela.

¿Quién podría ser el mismo después de analizar a

Huckleberry Finn, o a Alyosha Karamazov?, ¿Puedes
no ser empático con Don Quijote y Sancho Panza?

De igual forma, al leer puedes viajar en el tiempo y el espacio de otras culturas y aprender como las
sociedades de esos tiempos plantearon y resolvieron sus problemas. Como es que encontraron su
forma de estar-en-el-mundo.

Para algunos de Ustedes que deseen desarrollar un plan de mejora, les sugiero las siguientes
actividades de nuestra lista de Diez, que podrán realizar en cualquier orden que les acomode mejor,
manteniendo en mente que “La acumulación cuantitativa eventualmente produce un brinco de
cualidad:

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LISTA DE DIEZ

1. Realiza una auto-evaluación de las formas en que piensas.

2. Incrementa tu vocabulario y lenguaje crítico revisando los diversos glosarios

disponibles sobre este tema en la web.

3. Aprende y practica el uso de herramientas gráficas como mapas mentales, para

ordenar tus pensamientos y desarrollar nuevas formas de conexión y articulación
entre ellos.

4. Investiga la relación entre los siguientes términos: cognición, pensamientos, pensar,

razonar, comprender, conocimiento, holístico, entendimiento, juicio, intuición y
sabiduría.

5. Lee un poema al día. Disfruta escuchar palabras con poder. Palabras y postulados que
crean mundos.

6. Mantén una libreta de notas acerca de cómo vas articulando tu aprendizaje sobre los
diversos modos de pensamiento.

7. Lee algunos cuentos cortos Anton Chekhov, Julio Cortázar, Katherine Mansfield, Arthur
Conan Doyle, o cualquier autor que disfrutes.

8. Practica el leer, escribir, escuchar, y platicar de manera crítica. Pero mejor Hazlo en ¡en
vivo!

9. Sigue las recomendaciones de lecturas sugeridas en cada sección del curso para
aprender más.

10. Haz tu propia, lista de diez.