Adolfo Núñez (1954 -)

Tomás José García Vázquez

Biografía

Adolfo Núñez nació en Madrid (1954). Por un lado,

estudió Composición y Guitarra Clásica y, por otro,
Ingeniería Industrial, con la suerte de terminar siendo
artista y científico a la vez.

Fue discípulo de los compositores Francisco

Guerrero, Carmelo Bernaola, Antón García Abril, Román
Alís, Brian Ferneyhough y Luis de Pablo; y estudió en el
CCRMA (Universidad de Stanford, EEUU) Música por Ordenador con J. Chowning y
L.Smith, becado por el programa Fulbright.

Diseñó y dirige el laboratorio LIEM del INAEM-Ministerio de Educación,

Cultura y Deporte (Madrid).

Trabajó en los talleres de la UPIC-CEMAMu (Unidad Poliagógica Informática

del Centro de Estudios de Matemática y Automática Musicales) en París, que fundó y
dirigía en aquel momento una de las leyendas de la composición algorítmica: Iannis
Xenakis.

Imparte clases en el Departamento de Música de la Universidad Autónoma,

además de otros cursos, conferencias y colaboraciones en diversas publicaciones sobre
composición, ciencia y tecnologías para la música.

Además, es autor del libro "Informática y Electrónica Musical" (Editorial

Paraninfo).
Obra

Su obra abarca todo tipo de música: de cámara (en la que se considera la

“electrónica grabada” como un instrumento más), música orquestal, para banda sonora
cinematográfica, coro, coro con electrónica en vivo, electrónica grabada (estéreo, 8
canales, cuadrafónica y 5.1), instalaciones sonoras (interactivas con sensores, con vídeo,
cuadrafónicas o con pianola), instrumento solo (guitarra, clarinete, violonchelo, órgano,
piano, etc.), música para teatro, libre (número indeterminado de instrumentos), música
para ópera, para orquesta, música por ordenador, radiofónica, solista y orquesta (piano y
orquesta de cuerda), para exposiciones de pintura.

Se basa en métodos numéricos. En su manera de componer destaca la importancia

del instrumental tecnológico, pero siempre subordinado a la idea sonora o musical.

Entre sus discos cabe destacar el realizado por Ana Vega Toscano (Tecnosaga)
con su obra para piano y Anira (Hyades Arts) con su música por ordenador. También es
autor del libro "Informática y Electrónica Musical" (Editorial Paraninfo).

Entre sus últimas actividades figuran la presentación de su instalación sonora

interactiva “Oráculo” en colaboración con el artista plástico Carlos Urbina.
Concierto para sonido

Está compuesto para violín, viola, violonchelo, vientos y efectos electro-acústicos.

Dura 12 minutos aproximadamente.

La parte electrónica actúa como solista, dialogando con los músicos, y recogiendo
lo que tocaban transformándolo a su vez en nuevas excursiones solistas. A pesar que el
clima básico es sereno y tranquilo la obra va ‘calentándose’ con efectos sonoros que
suenan como agua corriendo en un riachuelo, respiros, ráfagas de aire, etc.

Es música que cobra sentido solo en conjunto con el grupo orquestal. Antes de
terminar hay un clímax en fff, pero las cosas se vuelven a calmar y todo termina en
susurros ppp y finalmente silencio total.

Se puede escuchar en el perfil de “Sound Cloud” del propio Adolfo Núñez.

Umbrales de incertidumbre
Concierto-improvisación con flautas de pico (Pedro Bonet) y electrónica en vivo.
Estrenada en la exposición de Ángel Orcajo en el Instituto del Patrimonio Histórico
Español en Madrid (junio, 2009). Es denominado por sus propios autores como
“espectáculo plástico sonoro”.

Es también un ejercicio de interacción y creatividad con el edificio del IPCE, obra

de Fernando Higueras que constituye uno de los principales ejemplos del organicismo
tardío expresionista de la arquitectura española.

Consiste en ocho improvisaciones en electroacústica y flautas de pico, cada una

de las cuales están directamente inspiradas en una de las ocho pinturas de Ángel Orcajo
presentes en aquella exposición.

Presenta un juego de ecos y sinestesias entre las diversas artes que nos replantea
el infinito círculo de visión, inspiración y creación en el hacer artístico.
Nuestra cápsula
Se estrenó en 2018 y dura 9 minutos. Consiste en música electrónica grabada en
8 canales.

El título quiere significar "nuestro entorno", del que sobre todo se refiere al de la
ciudad. La obra está basada por lo tanto en sonidos urbanos que se han organizado para
transmitir una impresión de una realidad dura y áspera; más bien la de una ciudad gris
llena de edificaciones de hormigón. La obra está dedicada al director de cine Esteban
Crespo, cuya película Amar inspiró esta música.

Configuración de altavoces:

1 2 escenario / frente de la sala

3 4

5 6

7 8 parte trasera de la sala

Esta también se encuentra en el perfil de “Sound Cloud” de Adolfo Núñez.