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(UAPA)
ASIGNATURA:
Historia de la Civilización Media
TEMA:
Tarea VI
Sustentante:
Grisenis Mena Castillo
Matricula:
Facilitador:
Hipólito Catedral Díaz
FECHA:
Santo Domingo, Rep. Dom.
22 de agosto del 2019
Qué es la Edad Media
Otros historiadores los finalizan en el año 1453, haciéndolo coincidir con la Caída
del Imperio Bizantino, una fecha muy fácil de recordar ya que coincide con uno
de los inventos que revolucionarían el mundo entero, la invención de la Imprenta,
sin meternos a batallear ya que también coincide con el fin de la Guerra de los
Cien Años.
Pronto el Islam terminó de separar a las distintas creencias, los persas, los
otomanos, etc. Las invasiones extranjeras, del norte que sufrió la Europa
Occidental, hicieron que fueran mucho más reservados con sus fronteras. Por
otro lado, en oriente, el proceso fue totalmente distinto, ellos nunca vivieron la
Edad Media, como nosotros la vivimos o entendemos.
Japón sufrió también una política basada en el feudalismo, como ocurrió en
Europa pero se produjo aproximadamente en el año 1.000 hasta el 1.800. Por lo
tanto tampoco es equiparable en un espacio temporal.
Pero una cosa es cierta, la Edad Media fue un período de la historia europea
que dejó profundas huellas en el continente. Marcada por importantes
acontecimientos históricos, el inicio y el final de este período estuvo marcado por
grandes cambios culturales, políticos, religiosos, sociales y económicos,
convirtiéndose en uno de los períodos más fascinantes de la historia.
El paso de la edad antigua a la conocida como edad media, no fue algo
inmediato sino que , evidentemente, se desarrolló de modo gradual ya que hubo
una transición en diversos ámbitos:
La Edad Media suele ser situada por los historiadores entre dos sucesos de
suma importancia. El primero, que marca su inicio, se le atribuye a la caída
del Imperio Romano de Occidente (476), dándole fin al período de la Edad
Antigua o Clásica.
Por otro lado, el hecho que marca el fin de la Edad Media es la caída del Imperio
Romano de Oriente en 1453. Pero muchas eran las profundas
transformaciones que estaban ocurriendo en aquel momento (siglo XV y XVI),
entre ellas:
El Renacimiento,
El descubrimiento de América,
la incorporación de la Imprenta,
la Reforma Protestante de Lutero.
La Edad Media se divide en tres etapas: la Temprana Edad Media, Alta Edad
Media y la Baja Edad Media. Veamos en qué consisten básicamente cada una
de ellas.
Comienza a fines del siglo V y llega hasta fin del siglo VIII. Se
caracterizó por la fusión de las culturas germánicas y la latina (heredera
del Imperio Romano ya desaparecido). Desde el punta de vista político se
ve la desintegración del Imperio Romano de Occidente, y la formación
de los llamados Reinos Romano Germánicos. En este período se
desarrolló también el Imperio Carolingio. En la economía se ve
la transición desde el modo de producción esclavista característico
de Roma al Sistema Feudal que será característico de la siguiente etapa.
Comienza a inicios del siglo XII y llega hasta mediados del siglo XV.
Es un momento de reapertura, donde lentamente vuelven a ganar
importancias las ciudades y las actividades comerciales, surgiendo un
nuevo grupo social: la burguesía. Es el momento en que empiezan a
desarrollarse las primeras transformaciones que luego llevarán en la edad
Moderna al surgimiento del sistema capitalista.
En el ámbito del arte, la edad Media verá el nacimiento del arte islámico, con sus
grandes construcciones cubiertos por atauriques, lacerías, una cuidada y
colorida decoración y grandes avances arquitectónicos como sus cuidados
arcos, sus grandes cúpulas y su destacada atención por todo lo relacionado con
los jardines, como podemos ver todavía en los monumentos que perviven de
esta época, como la preciosa Alhambra de Granada.
En el ámbito de la Europa cristiana, destacan dos estilos artísticos, el románico
y el gótico, aunque también se apreciaron otros estilos menos conocidos como
el prerrománico, el bizantino o el carolingio, por citar solo algunos. Pero son
el románico y el gótico los que se consideran los estilos predominantes de la
Edad Media.
El románico se extendió por Europa durante los siglos XI y XIII y se vincula
especialmente con el auge de los monasterios durante esta época,
caracterizándose por ser grandes construcciones de piedra, con grandes
bóvedas, arcos de medio punto y grandes portadas esculpidas, por citar solo
algunas características.
Por su parte, el estilo gótico, que se extendió entre los siglos XIII y XV, es un
arte eminentemente urbano vinculado a la construcción de magníficas catedrales
de grandes vidrieras, altos muros y pilares y enormes naves y girolas que querían
presentar la magnificencia del poder de Dios que se extendía hacia el cielo, estilo
que dará ya paso al renacentista, donde el hombre se convertirá en el centro del
universo y la cultura.
La Filosofía
Por último, las obras literarias son enormemente extensas y, durante esta
época, se trataron una enorme cantidad de temas diferentes. Generalmente, se
suele dividir en dos bloques, la literatura religiosa y la profana, aunque esta
continúa siendo una división muy simplista.
Las vidas en las ciudades fueron deteriorándose, con una falta casi total de
administración, las ciudades ya no dan de comer y la población vuelve al mundo
rural, en busca de oportunidades para vivir. Las ciudades que antes gozaban
de todo tipo de lujos, empiezan a dejar de ofrecer estos servicios, la ciudad
comienza a deteriorarse.
Ante la debilidad del imperio y la dificultad de mantener sus fronteras seguras,
las invasiones bárbaras comienzan a ocupar el gran territorio del Imperio. Por
otro lado, la cristianización en Hispania se había inciado muy tempranamente
en algunas zonas, a partir del siglo IV, el cristianismo sería la religión
generalizada.
Pero a mediados del siglo V, Roma no pudo contener más invasiones del norte
y poco a poco tribus como los suevos, vándalos y alanos, cruzaron su frontera
natural, el Rin y se dirigieron hacia las Galias, Máximo líder militar romano, pactó
con estos pueblos incorporándolos a su ejército y así fue como llegaron a cruzar
los Pirineos. Pronto estos nuevos soldados dejaron de percibir sus salarios y
decidieron cobrárselos a través de actos de pillaje.
De todos los pueblos germánicos fueron los visigodos los que finalmente se
instalaron en laPenínsula Ibérica, los suevos que había entrado de la mano de
Máximo fueron los únicos que resistieron las ofensivas visigodas, retirándose a
la zona más noroccidental donde formaría el reino suevo de Braga. Mientras
que los vándalos consiguieron cruzar el estrecho y así cruzar para seguir sus
incursiones en África.
La zona que abarca desde Cádiz hasta Alicante, además de Baleares y la parte
norte de África, bajo el dominio del Imperio Bizantino de Justiniano.
Corona de Recesvinto
La capital se fijó hacia el año 567 en Toledo, el reino visigodo de Toledo como
pasó a llamarse, introdujo cambios según fueron fortaleciéndose en su
reino. Reformas monetrarias y distintas campañas militares contra suevos y
bizantinos fueron las que marcaron reinados como el de
Leovigildo. Recaredo fue el siguiente rey visigodo y el primero en convertirse
al catolicismo y con el se convirtió todo el reino visigodo.
Así se fueron sucediendo entre disputas, riñas e intrigas, se sucedieron los reyes
visigodos, Suintila expulsa a los bizantinos en el año 620, Recesvinto
emprende reformas legislativas en el 650.
Sin duda, algo de lo que hablar. Cierto es que la cultura y la filosofía, el arte y la
música marcaron un antes y un después en le Edad Media y que siempre fueron
admiradas las obras que surgieron de esa época y que actualmente, se comparte
con los amantes del arte y el regodeo del pasado, pero la Edad Media, tenía sus
curiosidades.
Higiene
Mencionar higiene en la Edad Media, era lo único higiénico que se hacía, porque
lo que menos había allí era higiene. El suelo, al no estar pavimentado de ni
asfaltado, era el objetivo de pies que iban descalzos y como los baldes se tiraban
por la ventana (los cubos llenos de excrementos), esperando que todo acabase
filtrándose, mientras, era pisoteado por pies desnudos. Sí, caminaban sobre
excrementos.
Juicios
No había leyes por así decirlo lógicas. Se decía que la ley o funcionaba muy bien
o funcionaba muy mal y como en la Edad Media se juzgaban, se juzgaban hasta
a los animales, hasta el punto de que se les acusaba de robo y de asesinato.
Puede que no terminara de ser lógico, porque la pobre criatura tendría que cargar
con una culpa y sufrir las consecuencias, por no saber hablar, pero hacían las
cosas así.
Deportes
Sí, había deportes. En este caso, se habla del rugby como deporte que hoy en
día conocemos, pero de una manera medieval, por supuesto. El balón se hacía
con la vejiga de un cerdo y tenían que competir para poseer el balón, pero a
diferencia que el deporte actual, ellos simplemente se paraban y comenzaban a
pelearse. Al parecer, competían sin pensar en las consecuencias, con graves
heridas y posibles muertes. Debido a los problemas sociales que había en la
época, el deporte se descontroló y tuvo que prohibirse durante largo tiempo.
La tauromaquia también fue uno de los deportes más disfrutados durante la edad
media, en gran parte como herencia de la dominación romana y de sus
espectáculos en los anfiteatros y circos, donde las luchas entre hombres y
bestias eran las preferidas de la sociedad del momento. En la Edad Media siguió
siendo una parte importante y considerado como deporte en gran parte de la
costa mediterránea.
Pero el deporte rey, que sólo las altas clases sociales disfrutaban eran las luchas
de justas y torneos. Unos torneos en los que se trataba de insertar unas anillas
en una lanza mientras se cabalgaba a todo galope, pasar por sinuosos recorridos
donde tarugos de madera, empujaban al participante inevitablemente a la caída.
Recreaciones hemos visto muchas en las películas, pero en algunos lugares de
nuestra geografía se siguen celebrando, por ejemplo en Menorca.
Dondequiera que se instauró, echó por tierra todas las instituciones feudales,
patriarcales e idílicas. Desgarró implacablemente los abigarrados lazos feudales
que unían al hombre con sus superiores naturales y no dejó en pie más vínculo
que el del interés escueto, el del dinero contante y sonante, que no tiene
entrañas. Echó por encima del santo temor de Dios, de la devoción mística y
piadosa, del ardor caballeresco y la tímida melancolía del buen burgués, el jarro
de agua helada de sus cálculos egoístas. Enterró la dignidad personal bajo el
dinero y redujo todas aquellas innumerables libertades escrituradas y bien
adquiridas a una única libertad: la libertad ilimitada de comerciar. Sustituyó, para
decirlo de una vez, un régimen de explotación, velado por los cendales de las
ilusiones políticas y religiosas, por un régimen franco, descarado, directo,
escueto, de explotación.