INCUBANDO HUEVOS DE SERPIENTE

David Wilkerson

Incubando huevos de serpiente" es un término bíblico, no una broma, y tiene que

ver con caminar en santidad delante de Dios. Isaías el profeta descubrió la causa
secreta de la caída espiritual del pueblo de Dios y Dios le ordenó que sonara una
trompeta penetrante: contra ellos. "Clama a voz en cuello, no te detengas alza tu
voz como trompeta, y anuncia a mi pueblo su rebelión, y a la casa de Jacob su
pecado" (Isaías 58: 1). A Isaías se le dijo que expusiera lo pecados del pueblo de
Dios, a aquellos quienes estaban buscándole diariamente, a aquellos quienes se
deleitaban en conocer sus caminos en caminar en rectitud, a aquellos quienes
amaban acercarse a Dios. "Que me buscan cada día quieren saber mis caminos,
como gente que hubiese hecho justicia, y, que no hubiese dejado la ley de su Dios
me piden justos juicios, y quieren acercarse a Dios (Isaías 58:2). Pero sus
oraciones no estaban pasando del techo y su ayuno era en vano. Ellos llegaron a la
conclusión de que todo su sacrificar, todo su orar y todo su buscar a Dios no
estaba dando frutos. Y de hecho, Dios estaba escondiendo su rostro de ellos “Pero
vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro Dios, vuestros
pecados han hecho ocultar de vosotros su rostro para no oír" (Isaías 59:2).

Había una buena razón para que Dios estuviera enojado. Su pueblo estaba
siguiendo todas las indicaciones; ellos estaban de continuo en su casa y decían
todas las palabras correctas: “Queremos escuchar a Dios y hacer lo que él nos
diga”. Ellos parecían tan obedientes y se veían tan religiosos. Pero sus corazones
estaban divididos; amaban a Dios con sus bocas solamente. Dios le reveló a
Ezequiel que los judíos, "… estarán delante de ti como pueblo mío, y oirán tus
palabras y no las pondrán por obra; antes hacen halagos con sus bocas, y el
corazón de ellos anda en pos de su avaricia. Y he aquí tu eres a ellos como cantor
de amores, hermoso de voz y que canta bien; y oirán tus palabras, pero no las
pondrán por obra" (Ezequiel 33:30-32). Es por esto que Dios ordenó a Isaías
clamar tan fuertemente contra su propio pueblo, a aquellos quienes aparentaban
estar buscándolo tan diligentemente ¿Qué pecado ocasionó que Dios retirara su
presencia? Fue el pecado de “incubar huevos de serpientes" y "tejer telas de
araña" (Isaías 59:5). La mente es el vientre del corazón, y los pensamientos son la
semilla o el esperma, los pensamientos inicuos son semillas de serpiente, las
cuales se convertirán en huevos si la semilla no se destruye inmediatamente.
Dios mira lo que está sucediendo dentro del vientre de la mente. El no juzga por
apariencias externas; El considera el corazón. "Porque cuál es su pensamiento en
su corazón, tal es él..." (Proverbios 23: 7). El pueblo de Dios estaba adorando de
labios para afuera. Ellos gritaban un fuerte amen a cada llamado a santidad;
aparentaban ser amantes fervientes de la verdad, pero sus mentes eran cuevas de
víboras. Eran nidos llenos de huevos de serpiente y estaban sentados en la
presencia de Dios, incubando pensamientos inicuos. Sus mentes estaban
envenenadas, estaban pensando en ídolos, estaban tejiendo telas de araña con
excusas endebles para entregarse a cosas prohibidas. Ellos estaban ayunando,
orando, buscando a Dios, haciendo cosas religiosas, pero sus mentes no estaban
limpias. Sus pensamientos e imaginaciones desordenadas no eran traídas a
cautividad.

NO HAY NADA INOFENSIVO O INOCENTE EN LOS PENSAMIENTOS INICUOS. SI

ESTOS NO SON INMEDIATAMENTE RECHAZADOS PUEDEN ENVENENAR EL ALMA.

“Buscad a Jehová mientras pueda ser hallado, llamadle en tanto que está cercano.
Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a
Jehová el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro el cual será amplio en
perdonar. Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros
caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así
son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que
vuestros pensamientos" (Isaías 55:6-9). Algunos cristianos dejan al enemigo
sembrar pensamientos inicuos en sus mentes, y luego dejan que los pensamientos
persistan sin hacer nada con ellos y sin darse cuenta del peligro que estos
representan. Jesús comparó estos pensamientos inicuos a la cizaña y el "enemigo
que la sembró es el diablo" (Mateo 13: 39). Los cristianos deben rechazar estos
pensamientos tan pronto aparecen. La vida cristiana involucra: “Derribando
argumentos y toda altivez que se levante contra el conocimiento de Dios, y
llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia de Cristo" (2a Corintios 10:5).
Esta actividad va conectada con el versículo cuatro: “Para la destrucción de
fortalezas" (2a. Corintios 10:4). Los pensamientos inicuos se convierten en
fortalezas. Satanás siembra el pensamiento y está decidido a mantenerlo vivo,
protegiéndolo hasta que concibe y se transforma en una serpiente crecida. El
consentir y tolerar pensamientos inicuos es incubar una serpiente. Dios dice:
“Derríbalo, deséchalo y trae cada pensamiento a cautiverio, no permitas que ni un
solo pensamiento inicuo ande vagando a su voluntad Persigue ese pensamiento,
captúralo y mátalo".
LOS PENSAMIENTOS OFENSIVOS SON LOS MAS PELIGROSOS

Esta es la primera de tres formas de concebir e incubar huevos de serpiente que

voy a tratar. Cuando alguien te malinterpreta y dice cosas que te lastimen,
¿empiezas a dejar que esos pensamientos den vuelta una y otra vez en tu mente?
Si es así, estas concibiendo huevos de serpiente. Como un ejemplo: este ministerio
recibe una parte de correspondencia de crítica. El año pasado, después de
enviarnos el calendario de fin de año, un predicador de santidad nos regresó una
nota sorpresiva: ”quítame de tu lista de correo. Tu y tu esposa se ven como dos
típicos pentecostales”. ¿Estaban nuestras sonrisas muy amplias? ¿Le molestó la
bufanda de mi esposa? ¿O tal vez su peinado? además soy fuertemente acusado
de traer desesperación a la iglesia, de ser todo tristeza y muerte. La esposa de un
pastor dijo: “nunca lo he visto sonreír de 25 años”. Ahora bien si nosotros
empolláramos todas estas estas expresiones ofensivas concebiríamos huevos de
serpiente de amargura y rencor. Pero Dios dice: “no lo consientas, mátalo” “no
pelees con los que te acusan, no respondas. Haz que todos los pensamientos que
te justifican se detengan ahora mismo. Si continuas con estos pensamientos y los
traes a la memoria una y otra vez, vas a concebir un huevo y a incubar una
serpiente” La biblia dice: “…y si los apretaren, saldrán víboras” (Isaías 59:5). Hay
madres e hijas, padres e hijos que son enemigos. Hay cristianos que no se hablan
entre ellos. Hay algunos que dicen: “no puedo perdonar lo que me dijo, no lo
puedo superar”. Todos ellos han incubado huevos de serpiente, y las serpientes se
mueven con libertad a través de sus mentes, derramando amargura y veneno. ¿Te
lastiman fácilmente? ¿Hierves por dentro? ¿Te irritas? ¿Te desvelas y te quemas
por dentro recordando cada palabra? Estas en una posición muy peligrosa, porque
te estas sentando en huevos de serpiente, concibiendo veneno y muerte. En vez
de esto deja que el pie de Cristo aplaste la cabeza de la serpiente. Sufre
injusticias; recíbelas; aguanta el dolor; desecha el pensamiento de odio y
venganza; sácalo de tu mente. Considera lo que Cristo sufrió: “se levantan testigos
malvados de lo que no se, me preguntan; me devuelven mal por bien, para afligir
mi alma. Pero yo cuando ellos enfermaron me vestí de cilicio, afligí con ayuno mi
alma y mi oración se volvió a mi seno. Como compañero, como por mi hermano
andaba; como el que trae luto por madre, enlutado me humillaba. Pero ellos se
alegraron en mi adversidad, y se juntaron; Se juntaron contra mí gentes
despreciables, y yo no lo entendía; Me despedazaban sin descanso; Como
lisonjeros, escarnecedores y truhanes, Crujieron contra mí sus dientes. (Salmos
35:11) y también mis enemigos dicen mal de mí preguntando ¿cuándo morirá y
perecerá su nombre? Y si vienen a verme hablan mentira; su corazón recoge para
sí iniquidad y al salir fuera la divulgan. Reunidos murmuran contra mi todos los
que me aborrecen: contra mi piensan mal diciendo de mí: cosa pestilencial se ha
apoderado de él; y el que cayó en coma no volverá a levantarse aun el hombre,
Aun el hombre de mi paz, en quien yo confiaba, el que de mi pan comía, Alzó
contra mí el calcañar (salmo 41:5-9)

Hay miles y miles que han dejado a la iglesia y al Señor y todo debido a que la
amargura los ha consumido. Alguien dijo algo ofensivo sin pensar y ellos fueron
lastimados. Después incubaron huevos de serpiente de pensamientos ofensivos y
dejaron que la serpiente hiciera su nido en los corazones como resultado, ellos no
pueden perdonar, ni olvidar. La biblia dice: Se apartaron los impíos desde la
matriz; Se descarriaron hablando mentira desde que nacieron. Veneno tienen
como veneno de serpiente; Son como el áspid sordo que cierra su oído, (Salmo
58:3-4). Las mentiras, las insinuaciones y la murmuración son todas muy
venenosas para ti si permites que entren en tu corazón, si permanece en ellas, si
te defiendes y deseas venganza Dios dijo: “mía es la venganza, yo daré el pago,
dice el Señor. Y otra vez el Señor juzgará al pueblo” (Hebreos 10:30) si tu
rechazas los pensamientos de venganza y te mantienes apacible, trayendo todos
los pensamientos inicuos a cautiverio, tu vivirás para ver el día cuando Dios haga
juicio y va a ser impresionante. Vas a estar muy contento por no haber tomado los
problemas en tus propias manos. ¿Recuerdas una y otra vez todas las cosas
terribles que se dicen de ti y todo lo que hacen? Este hábito puede destruirte,
¡Perdona! ¡Olvida! Deja que la palabra de Dios limpie todo.

EN SEGUNDO LUGAR MUCHOS CRISTIANOS HABITUALMENTE INCUBAN HUEVOS

DE SERPIENTE DEL TEMOR, QUE TRAE TORMENTO, CONFUSION Y ANSIEDAD.

Hay demasiados tipos de temor para siquiera comenzar a nombrarlos, pero todos
los pensamientos de temor son fatales si no se desechan y se matan, porque esta
clase de semillas se desarrolla en el más venenoso de todos los huevos de
serpiente. Como ejemplo tenía un amigo en Texas, un perfeccionista. Quien creció
tratando desalentadoramente de agradar a su padre. Como resultado el temía que
nunca iba poder agradar a su jefe o a su familia. Yo lo aconsejaba continuamente,
pero el temor de fracaso se había incubado en su mente y no se lo podía sacudir,
él se volvió voluble y amargado. Pensó que aun a Dios era demasiado difícil
agradarle… Finalmente el apunto una pistola hacia su estómago y terminó con su
vida. Su hijo es ahora igual a él.

Muchas esposas son acosadas con pensamientos de perder a sus esposos, y

viceversa, porque escuchan de muchos amigos que se divorcian y esto aún entre
ministros. Ellos viven en el constante temor de: ¿Seré yo el próximo? Los padres
temen que sus hijos se pierdan en la drogas. Ellos ven a esta generación yéndose
al infierno, y se preguntan ¿Cómo puedo guardar a mi hijo o hija de toda esta
confusión? ¿Los contaminaran las escuelas con el humanismo? ¿Me despertaré un
día para descubrir que mi hijo o hija es frio o indiferente a Dios? Otros temen por
sus trabajos o por la economía, preguntándose si todo se va a derrumbar y si es
así, ¿Qué van a hacer ellos? ¿Cómo van a vivir? ¿Cómo van a pagar los recibos? Y
¿Cómo van a comer? Mucho temen nunca encontrar su lugar en la vida, ¿va a
tener importancia mi vida? ¿Seré útil? Me estoy haciendo viejo y no parece que
este progresando. Otros me están dejando atrás ¿A dónde estoy yendo? ¿Cuál es
mi futuro? Para muchos existe el temor de una enfermedad fatal, tal como el sida
o el cáncer con cada malestar que ellos sienten, ellos piensan: “¡Cáncer!” otros
piensan ¿Y si me hago viejo y enfermo sin que nadie se preocupe por mí? muchos
cristianos están sentados en el nido de huevos de temor. Este hábito de alimentar
pensamientos y temor debe ser detenido antes que te destruya que te envenene y
te haga indefenso. Olvida todas las fórmulas de cómo vencer el temor la Biblia no
da una receta de 4 pasos para vencer el temor. Pero Dios te dice que hacer
cuando estés pensamientos de temor invaden tu mente. Tú estás en la batalla
espiritual en este asunto no es un juego de niños, es un caso de vida o muerte.

Dios le dijo a Moisés que no enviará a los cobardes a la batalla “¿Quién es el

hombre medroso y pusilánime? vaya y vuelvas a su casa y no apoque el corazón
de sus hermanos como el corazón suyo (Deuteronomio 20:8). Dios ve los
pensamientos de temor como muy contagiosos y destructivos los temerosos y los
cobardes no creyeron la palabra de Dios ellos dudaron de sus promesas de
liberación. Dios había dicho: “…Vosotros os juntáis hoy en batalla contra vuestro
enemigos no desmaye vuestro corazón, no temáis ni os azoréis, ni tampoco os
desalientes delante de ellos, porque Jehová vuestro Dios va con vosotros para
pelear con vosotros, contra vuestros enemigos para salvaros (Deuteronomio
20:34) Dios preparó a su pueblo, les advirtió que las cosas se verían aterradoras e
imposibles, que ellos verían: ”…Caballos y carros y un pueblo más grande que tú,
no tengas temor de ellos, porque Jehová tu Dios está contigo (Deuteronomio 20:1)
¿Te ha fallado Dios alguna vez? ¿Le falló el a tus padres quiénes pasaron por la
última gran inflación? ¿Trajo el aquellos qué confiaron en él a través del desierto?
Esta es la respuesta de Dios a todos los que le temen: cuando las probabilidades
se ven pérdidas, cuando te ves abrumado sin escape o señal de ayuda no temas
pues, yo soy tu Dios y estoy contigo para rescatarte. O en las palabras del
salmista: “Porque él me esconderá en su tabernáculo el día del mal, me ocultará
en lo reservado de su morada, sobre una roca me pondrá en alto (Salmo 27:5) ¿Es
El un Padre celestial amoroso quien cuenta aún nuestros cabellos? ¿Defraudará El
a sus amados hijos? El pecado de temor es que éste acusa a Dios de abandono.
Este nos roba la confianza en su cuidado y preocupación amorosa. ¡Desecha todo
temor, trae todo pensamiento de temor cautivo a la obediencia del Señor Jesús

Finalmente existen los pensamientos que terminan en acciones sensuales y de

fornicación, los drogadictos testifican que ellos pueden dejar fácilmente su hábito
físico, pero no así su hábito mental, pues su mente sigue recordando
pensamientos pasados, pensamientos de serpiente. Tuve un amigo y miembro
administrativo que era un padre y esposo bondadoso. El había empezado a fumar
marihuana a los siete años de edad en la cochera de su papá; por más de
veinticinco años él fue adicto. El se salvó, pero siguió cayendo vez tras vez. El
excusa su hábito diciendo que el doctor le dijo que la marihuana le ayudaría con su
asma. El se arrepintió docenas de veces, lloró, clamó por misericordia. Fue a un
programa especial en el medio oeste y le fue muy bien por un año, pero la
marihuana nunca estuvo fuera de su mente. Después de un tiempo, él regresó a
su casa, involucró en las drogas a sus dos hijos y dejó a su esposa. Hoy su corazón
está endurecido y está perdido, porque incubó huevos de serpientes. Su mente
nunca fue limpiada, él vio al enemigo y se rindió, él vio a los carruajes de hierro de
Satanás y dijo: “¡Nunca lo lograré!”. El se rindió ante el temor.

¿Por qué tantos que son liberados regresan a sus hábitos pasados? ¿Por qué el
lazo del pecado no es roto? Porque cuando los pensamientos inicuos son plantados
por espíritus mentirosos, éstos no son inmediatamente desechados. Deja que un
sólo pensamiento de lascivia permanezca en tu mente por treinta segundos y se
arraigará, muy pronto se convertirá en un huevo con una serpiente esperando a
ser incubada. Por eso la palabra de Dios literalmente clama: “¡Desecha el
pensamiento malo!”. No coquetees con este pensamiento, no le cedas ni un
centímetro. Corre al Señor, corre a su Palabra, clama por una limpieza de tu
mente, y deja que el poder de Dios saque todo pensamiento inicuo. Ten en mente
que si este pensamiento permanece, si es concebido y si se vuelve un huevo, se
incubará y la mente será mordida y envenenada. Tan pronto como cualquier
pensamiento malo venga a la mente, el cristiano debe decir: “Esto me puede
matar. Esto me va a destruir, esto es mortal. Podría perder mi vida y mi alma si
coqueteo con esto”. El cristiano debe entender: “Este pensamiento no es mío, no
es natural, no es mi carne; no es solamente un deseo pasado que regresa; este es
el mismo Satanás. Este es un espíritu mentiroso del infierno, enviado a engañarme
y a destruirme”.
El Señor promete en su Palabra: “Resistid al diablo y él huirá de vosotros”. Tú lo
debes resistir en tu mente, resistiendo el primer pensamiento malo.

LAS TERRIBLES CONSECUENCIAS DE INCUBAR HUEVOS DE SERPIENTE

Dios claramente revela lo que le va a pasar a la gente que es gobernar por

pensamientos inicuos.

EN PRIMER LUGAR sus pies corren al mar se apresuran para derramar sangre
inocente sus pensamientos de iniquidad destrucción y quebrantamiento hay en sus
caminos (Isaías 59:7) saías se estaba dirigiendo a un pueblo que había sido libre,
porque se había vuelto de su maldad. Ellos se habían regocijado en una victoria y
libertad nuevas, pero cuando Satanás regresó y dejó caer la semilla del
pensamiento malo, ellos no la desecharon, y de esta forma la serpiente surgió.
Nada puede detener a este tipo de gente ahora, ni un amigo, ni un argumento, ni
la Biblia, ni un profeta, pues ellos están decididos a hacer el mal y corren hacia la
iniquidad; destrucción y quebrantamiento hay en sus caminos, y todos los que son
inocentes son heridos. como ejemplo yo conocí a una mujer qué está enferma de
cáncer en la garganta en un hospital en Boston una porción de su garganta había
sido removida dejando un pequeño hueco a través del cual es el respirar camino al
quirófano para una segunda operación que se arrojó con un cigarro y trago el
humo para que el juego no hay poder humano que pueda detener la gente
encaminada a satisfacer su Lástima la esposa del ministro de Illinois recientemente
de su de su casa con un joven que unidad dejando a unos niños llorando y aún
esposo con el corazón destrozado pero esos niños que lloran no la pudieron
detener ella está corriendo hacia su lascivia

Como ejemplo: Yo conocí a una mujer que estaba enferma de cáncer en la

garganta, en un hospital en Houston; una porción de su garganta había sido
removida, dejando un pequeño hueco a través del cual ella respiraba. Camino al
quirófano para una segunda operación ella rogó por un cigarro y tragó el humo por
aquel hueco. No hay poder humano que pueda detener a la gente encaminada a
satisfacer su lascivia.

La esposa de un ministro de Illinois, recientemente huyó de su casa con un joven

criminal, dejando a unos niños llorando y a un esposo con el corazón destrozado.
Pero esos niños que lloraban no la pudieron detener. Ella estaba corriendo hacia su
lascivia.
EN SEGUNDO LUGAR, la gente gobernada por malos pensamientos pierde toda paz
y todo discernimiento. “No conocieron camino de paz, ni hay justicia en sus
caminos; sus veredas son torcidas; cualquiera que por ellas fuere no conocerá paz”
(Isaías 59:8) cuidado nunca corras con un esposo o esposa cuyos pies ahora
corren hacia el mar no te des por vencido le va a costar todo aquel de la pareja
que ya ha sido redimido mantente firme para que el otro sea redargüido.

EN TERCER LUGAR, la mente gobernada por pensamientos inicuos eventualmente

se vuelve ciega y llena de horrible oscuridad.

“Por esto se alejó de nosotros la justicia, y no nos alcanzó la rectitud; esperamos

luz, y he aquí las tinieblas; resplandor, y andamos en la oscuridad. Palpamos la
pared como ciegos y andamos a tientas como sin ojos, tropezamos a medio día
como de noche; estamos en lugares oscuros como muertos” (Isaías 59:9-10). Los
más fríos y duros corazones en el mundo pertenecen a aquellos quienes una vez
fueron amantes abiertos y felices en el conocimiento del Señor. Ahora, debido a lo
que le pecado les hizo, no quieren escuchar de Él; ellos son completamente
extraños a Él.

Este es el caso de un evangelista con don de sanidad, quien alguna vez predicó a
miles, recientemente lo vi en mi oficina mirando hacia el espacio con una mirada
desolada y distante en sus ojos. Yo conozco a otro evangelista que perdió su
ministerio por una acusación de homosexualismo, él es ahora como un “zombie”,
cuando hablas con él es como si nadie estuviera allí. Ellos sabían que estaban mal,
pero siguieron hundiéndose más y más en su pecado, pisoteando la Verdad y
teniéndola en poco.

EN CUARTO LUGAR, ellos desarrollan personalidades muy cambiantes. “Gruñimos

como osos todos nosotros, y gemimos lastimeramente como palomas; esperamos
justicia, y no la hay; salvación, y se alejó de nosotros” (Isaías. 59:11).

Por un momento ellos están a punto de terminar su relación o apartarse, violentos

y enojados, pero al poco tiempo ellos gritan: “Lo siento mucho”. “No quise decir
eso, ayúdame, por favor”. Israel, habiendo incubado huevos de serpiente se volvió
como un oso gruñón y como una paloma que gime lastimosamente hacia Dios y
hacia ellos mismos. Ellos fueron de un temperamento violento a un pesar
emocionalista. Hoy en día las mujeres permanecen con sus maridos, quienes las
golpean sólo porque a veces éstas son amables y gentiles.
Pero Dios no tendrá nada que ver con estas actitudes tan cambiantes. Estas
actitudes extravagantes y fluctuantes significan que un veneno satánico está
obrando.

El Espíritu de Cristo es siempre amable, amoroso, bondadoso y paciente, y nunca

violento, nunca gruñendo como un oso.

Hay promesas rigurosas de Dios, certeza absoluta de que ningún pensamiento

inicuo necesita ser concebido en cualquier cristiano y convertirse en una serpiente.
“Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque
en ti ha confiado” (Isaías 26:3). “No os conforméis a este siglo, transformaos por
medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la
buena voluntad de Dios, agradable y perfecta” (Romanos 12:2).

“Por tanto, ceñid los lomos de vuestro entendimiento, sed sobrios y esperad por
completo en la gracia que se os traerá cuando Jesucristo sea manifestado” (1
Pedro 1:13).

“Alzaré mis ojos a los montes, de dónde vendrá mi socorro; mi socorro viene de
Jehová que hizo los cielos y la tierra. No dará tu pié al resbaladero, ni se dormirá
el que te guarda. He aquí, no se adormecerá, ni dormirá el que guarda a Israel.
Jehová es tu guardador; Jehová es tu sombra a tu mano derecha. El sol no te
fatigará de día, ni la luna de noche; Jehová te guardará de todo mal; él guardará
tu alma. Jehová guardará tu entrada y tu salida desde ahora y para siempre” (Sal.
121:1-8).