Taller sobre era tecnológica

“Avance de medios de comunicación tradicionales y convencionales”

La comunicación cuando se lleva a cabo de forma adecuada, confiere poder a los conocimientos
y sentimientos de una persona. Es decir, quien sabe comunicarse tiene poder: el poder de influir,
de transformar, de sensibilizar, de conmover, de convencer, de explicar, de promover grandes
debates, de dejar constancia de su presencia en el mundo.
La comunicación como primera necesidad implica informar. Esto corresponde al mundo de los
conceptos, de las ideas, a la esfera del raciocinio. La segunda necesidad sería la de convencer,
persuadir, atraer el interés de los demás.

¿Pero, cómo podemos comunicar de modo efectivo?

Para ello debemos considerar los elementos o factores de la comunicación humana que son:
– Fuente: es el lugar donde emana la información, los datos, el contenido que se enviará, en
conclusión: de donde nace el mensaje primario.
. Emisor o codificador: Es el punto (persona, organización), que elige y selecciona los signos
adecuados para transmitir su mensaje, es decir, los codifica para poder llevarlo de manera
entendible al receptor. En el emisor se inicia el proceso comunicativo.
– Receptor o decodificador: Es el punto (Persona, organización), al que se destina el mensaje,
realiza un proceso inverso al del emisor, ya que en él está el descifrar o interpretar lo que el
emisor quiere dar a conocer. Existen dos tipos de receptor, el pasivo que es el que sólo recibe
el mensaje y el activo o perceptor, que es la persona que no sólo recibe el mensaje, sino que lo
percibe y almacena. Con este tipo de receptor se da uno de los factores comunicativos más
importantes y que conocemos como “feed – back o retroalimentación”.
– Código: Es un conjunto de reglas propias de cada sistema de signos y símbolos que el emisor
utilizará para transmitir su mensaje, para combinarlos de manera arbitraria porque tiene que
estar de una manera adecuada para que el receptor pueda captarlo.
Asimismo, es un sistema convencional de signos en los se cifra el mensaje. El código más
común es el verbal. Lo importante para que haya un proceso comunicativo es que los signos
utilizados en ese mensaje sean comunes al emisor y al receptor, de esta manera, el receptor
puede codificar la información e interpretarla.
– Mensaje: Es el contenido de la información, el conjunto de ideas, sentimientos,
acontecimientos expresados por el emisor y que desea transmitir al receptor, para que sean
captados de la manera que desea el emisor. El mensaje es lo que se comunica.
Está compuesto por los conceptos, ideas que se transmiten del emisor al receptor. El mensaje
puede tener diversos contenidos, según lo que el emisor desea expresar. Además, los mensajes
pueden ser verbales (orales o escritos) y no verbales, (anímicos y símbolos).
– Canal: Es el medio a través del cual se transmite la información – comunicación,
estableciendo una conexión entre el emisor y el receptor. Mejor conocido como el soporte
material o espacial por el que circula el mensaje.
Es el medio, la vía que escoge un emisor para transmitir el mensaje a los receptores. Durante
el siglo XX, con la apertura de Internet, ha cambiado diametralmente la forma de comunicarnos,
si antes nos sorprendíamos con el progreso de algunas plataformas como hotmail o gmail, hoy
este espectro ha sufrido cambios sustanciales y somos testigos fehacientes de ello.
La irrupción de las redes sociales (Facebook, Twitter, Linkedin, Instagram, Blogs, entre otros,
marcó un antes y un después en lo que respecta a la era digital y aún estamos familiarizándonos
con este nuevo lenguaje que llegó para quedarse.

¿Entonces qué son los medios de comunicación tradicionales?

Dentro de dichos medios distinguimos los siguientes:

Televisión – Prensa y Radio

Prensa, radio y televisión no han muerto, simplemente se están transformando gracias a la
aplicación de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.
Actualmente, un elevadísimo porcentaje de los contenidos periodísticos, publicitarios o de
entretenimiento llegan hasta el usuario a través de Internet. Durante mucho tiempo prensa, radio
y televisión se resistieron a esta evidencia, cada vez mayor, pero pronto comprendieron que la
importancia de internet dentro del ámbito de la información y la comunicación radica
esencialmente en su capacidad para transmitir textos, imágenes, sonidos, vídeos o un conjunto
de todos ellos de forma casi instantánea, desde y hacia cualquier parte del mundo, y quisieron
hacerse su hueco.

Fué a partir de la asimilación de esta evidencia (sin contar por supuesto la enorme pérdida
en ingresos publicitarios que experimentaron los medios tradicionales) como desde hace al
menos una década, el futuro de los medios de comunicación de masas, tradicionales y
modernos, camina hacia la convergencia. Una convergencia que puede ser abordada desde
dos perspectivas: la capacidad de distintas plataformas para transportar servicios que
básicamente son similares (la fibra óptica por ejemplo, es capaz de transmitir señal de televisión,
radio, internet, como también de ello es capaz la red digital terrestre, etc), y la aproximación de
los dispositivos de consumo.

¿Qué entendemos por medio de comunicación alternativos?

La preponderancia de los medios de comunicación alternativos ha dado un vuelvo sustancial
en el último periodo. Por tal motivo, es posible detectar cómo las llamadas plataformas virtuales
2.0 ha alcanzado un gran impacto entre los jóvenes, quienes según diversos estudios, son los
mayores usuarios de dichas redes. Así lo señala Montero (2003) “Red social es un objeto que
acompaña a la humanidad y las organizaciones, produciendo el intercambio conjunto de ideas, servicios,
objetos y modos de hacer en la que personas y sociedad encuentran apoyo y refugio”.
En la misma línea, medios como Facebook y Twitter constituyen una herramienta social que
logra adhesión en vista que rompen con las barreras tradicionales de interacción, dando paso
a reforzar no sólo las relaciones humanas, sino también ofrecen un abanico de posibilidades
que conllevan a conocer y ser parte activa de otras membresías.
De esta forma, la utilidad ligada a las redes sociales va asociada a aspectos de innovación,
pues cada día las preferencias o intereses de un grupo ávido de información toma relevancia,
sobre todo considerando que la totalidad de los medios de masas existentes cumplen
estándares similares abocados a la rapidez, eficiencia y apertura de temas, lo cual genera
discusión sobre cualquier asunto trascendente a nivel general.
Ahora bien, el punto de partida para integrar las redes sociales parte por la estructuración de
un perfil, consignando aquellos datos que configuran el “yo” individual y que están enfocados
en exteriorizar aquellas características correspondientes al historial académico o laboral,
intereses profesionales y/o personales, entre otros.
En paralelo, Martinez (2008); indica que “el papel de las empresas en las redes sociales, representan
un recurso que al que acuden con frecuencia ala hora de elaborar sus estrategias con el in de alcanzar
sus objetivos publicitarios”.
Ciertamente, las organizaciones son conscientes que pertenecer a estar plataformas les otorga
un valor agregado, en el sentido de promocionar sus marcas por medio de un mensaje
adecuado que sea creativo, entendible, pero que además apele a factores emocionales. En esta
dirección, las acciones que emprenden las empresas están encaminadas a construir vínculos
que fortalezcan los lazos con los clientes y viceversa.
Por otro lado, las empresas e instituciones están al tanto del fuerte dinamismo que se produce
a consecuencia de un mundo cambiante, sujeto a profundas modificaciones y en el que
emergen un sin número de necesidades que deben ser atendidas. Por tal motivo, es de suma
importancia considerarlas, partiendo de la base que actualmente nadie está ajeno a las TIC’s.
Al contrario, forman parte intrínseca del ser humano y en su totalidad están aprehendidas por
éste.

En retrospectiva, la era tecnológica exige “estar”, “conocer” y “conversar” permanentemente con

los distintos conglomerados sociales. Esto, asienta un nuevo paradigma que sitúa al usuario
como eje central del proceso comunicativo y que busca potenciar un sistema de interrelaciones
en tiempo real.
El surgimiento de las redes sociales y su posterior apogeo, ha desarrollado un campo de acción
necesario para los especialistas en comunicación.
Es evidente que estas nuevas líneas de trabajo van tomando fuerza y se instalan en las
organizaciones públicas y privadas como un modelo a seguir. Como objeto de complementar lo
mencionado, la elaboración de una estrategia eficaz en conjunto con una correcta
administración de las plataformas virtuales puede conseguir resultados beneficios, porque en
cierto grado se mide la participación y aceptación de los públicos ante la emisión de datos
promovidos por la organización. Igualmente, una óptima difusión a través de dichas vías
conduce al reconocimiento y reputación online de las empresas que las manejan.

Después de haber leído el taller, hay conceptos básicos que fueron explicados, de
acuerdo a tu formación teórica y práctica, responda.

1. ¿Cuál ha sido la contribución de las nuevas tecnologías en el ambiente de trabajo? ¿Ha

tenido un efecto negativo o positivo? Fundamenta.

2. Según tú apreciación, ¿Los medios tradicionales siguen siendo efectivos o cada vez han
perdido protagonismo? ¿Cuál eliges con mayor frecuencia y por qué?

3. ¿Qué opinas sobre el cambio imparable que ha experimentado los medios de comunicación
en éstos últimos años?

4. ¿Qué opinión te merece Facebook y Twitter y cuáles son las ventajas y desventajas que
identificas en cada medio?

5. ¿Crees que las personas actualmente dan un uso efectivo a las redes sociales o sólo son
utilizadas en contextos informales?

6. ¿Cuán efectivo son los medios alternativos (Facebook, Twitter y páginas Web) en cuanto a
promoción y publicidad de marcas?

7. ¿Finalmente, qué medidas propondrías para el buen uso de las redes sociales en el
entorno de trabajo?