15 Esa tarde, los discípulos se le acercaron y le dijeron:
—Este es un lugar alejado y ya se está haciendo tarde. Despide a las
multitudes para que puedan ir a las aldeas a comprarse comida. 16 Jesús les dijo: —Eso no es necesario; denles ustedes de comer. 17 —¡Pero lo único que tenemos son cinco panes y dos pescados! —le respondieron. 18 —Tráiganlos aquí —dijo Jesús. 19 Luego le dijo a la gente que se sentara sobre la hierba. Jesús tomó los cinco panes y los dos pescados, miró hacia el cielo y los bendijo. Después partió los panes en trozos y se los dio a sus discípulos, quienes los distribuyeron entre la gente.
Juan 6:7-10 Nueva Traducción Viviente (NTV)
7 Felipe contestó: —¡Aunque trabajáramos meses enteros, no tendríamos el
dinero suficiente[a] para alimentar a toda esta gente!
8 Entonces habló Andrés, el hermano de Simón Pedro: 9 «Aquí hay un muchachito que tiene cinco panes de cebada y dos pescados. ¿Pero de qué sirven ante esta enorme multitud?». 10 Jesúsdijo: «Díganles a todos que se sienten». Así que todos se sentaron sobre la hierba, en las laderas. (Solo contando a los hombres sumaban alrededor de cinco mil). 11 Luego Jesús tomó los panes, dio gracias a Dios y los distribuyó entre la gente. Después hizo lo mismo con los pescados. Y todos comieron cuanto quisieron. 12 Una vez que quedaron satisfechos, Jesús les dijo a sus discípulos: «Ahora junten lo que sobró, para que no se desperdicie nada». 13 Entonces ellos juntaron las sobras y llenaron doce canastos con los restos que la multitud había dejado después de comer de los cinco panes de cebada.