Sei sulla pagina 1di 18

Universidad Santo Tomás

Escuela de Enfermería
Gestión Del Cuidado En Salud Mental
Prof. Victoria Fritz

Trastornos del Espectro Autista:


Autismo Infantil

Integrantes: Francisca Alarcón,


Romina Flores, Consuelo Martínez,
Leticia Medina, Belén Morales,
Berenice Sosperrey
Carrera: Enfermería
Sección:1

Los Ángeles, 27 de Noviembre del 2018.


INTRODUCCIÓN
Desde la antigüedad han existido diversos tipos de trastornos relacionados
con el daño neurológico, los cuales hace unos poco se dejaron de nombrar como
enfermedad (por el escaso conocimiento sobre la función neuronal) y pasaron a ser
parte de Los Trastorno del Espectro Autista, definiéndose como “Aquellas disfunción
neurológica crónica con fuerte base genética que desde edades tempranas se
manifiesta en una serie de síntomas relacionados con la interacción social, la
comunicación y la falta de flexibilidad en el razonamiento y comportamientos” (1)
El autismo, englobado ahora dentro de los Trastorno del Espectro Autista, es
definido por primera vez por Kranner en 1943 como un desinterés por el mundo
externo, afectando severamente el funcionamiento de los individuos. Es un trastorno
en el cual se ve afectado el funcionamiento cerebral mediado por un desorden del
desarrollo el cual suele presentarse a los 3 años (2).
Considerando el autismo como un trastorno propio del neurodesarrollo,
suele presentarse en edades tempranas, antes de la etapa escolar, reconocible por
sus características propias como como escaso contacto visual con personas que lo
rodean, no responder a su nombre, no sonreír, aislamiento y uso inusuales de
juguetes (3).
En el autismo infantil, caracterizado por anomalías en la comunicación tanto
verbal como no verbal, desarrollo pobre de la imaginación y desinterés por la
interacción social reciproca, es una disfunción del comportamiento a nivel
neurológico (3), el cual genera controversias en los padres que presentan hijos con
este tipo de trastorno, debido a los comportamientos que presentan. Si bien no tiene
cura, presenta diversos tipos de tratamientos para ayudar tanto a los padres como
a los niños a mejorar su calidad de vida e interacción social, en donde la enfermera
cumple un rol importante desde el momento de la sospecha del trastorno.

MARCO TEORÍCO

2
Definición de Trastorno del Espectro Autismo:
El trastorno del espectro autista (TEA) se encuentra dentro de la clasificación
de trastornos generalizados del desarrollo (TGD), para su estudio y comprensión
han sido clasificado por parte de la OMS en la clasificación CIE-10 y por parte de la
APA por DSM-IV-TR, ambas son un sistema de clasificaciones de enfermedades y
trastornos mentales. La CIE-10 permite un registro sistemático, análisis,
interpretación, y comparación de datos, se subdivide en 10 secciones y 3 de ellas
son dedicadas al trastorno infantiles, es utilizado por parte de psicólogos, por otra
parte DSM-IV-TR tiene como objetivo ofrecer descripciones a las categorías
diagnosticas para facilitar la atención de personas con diversos trastornos mentales,
se subdivide en 17 categorías y es utilizado por parte de psiquiatras .Dentro de las
principales comparaciones que se puedes observar entre ambas se encuentran en
la siguiente con respecto a TEA
(Anexo 1)
Historia del Autismo infantil a nivel mundial y en Chile
El termino autismo fue utilizado en varias ocasiones por psicólogos y
psiquiatras para definir ciertas características de aislamientos en paciente con
esquizofrenia en el año 1911, mientras que en 1923 un psicólogo lo introdujo en
términos de personalidad introvertida severa (4).

La definición actual del autismo está dada por el psiquiatra Leo Kenner
(Austria 1896-EE.UU 1981) quien en 1943 publica un artículo llamado “Autistic
disturbances of affective contact” el que ayudo a consolidar este trastorno en el
mundo entero. Su primera publicación fue “autismo infantil precoz” el que consistió
en el estudio de alrededor de 100 niños y del seguimiento de la investigación de
otros colegas. En él Kenner presentó características específicas dentro del cuadro
clínico, como aislamiento profundo para el contacto con las personas, un deseo
obsesivo de preservar la identidad y una relación intensa con objetos, aunque en
1951 destaco como signo primordial para el diagnóstico precoz la obsesión por

3
mantener la identidad, expresada por vivir en un mundo donde no haya cambios, un
ambiente estático. De este modo dejo clara la diferencia entre el autismo y la
esquizofrenia (4)

La OMS creo dos centros de diagnóstico de trastornos mentales uno de ellos


es el International Classification of Diseases (ICD) y el otro la American Psychiatric
Association el Diagnostics and Statistics Manual of Mental Disorders (DSM). La
primera versión del DSM-I surgió en 1952, pero este no incluyo en sí mismo el
autismo, sino que los niños eran diagnosticados con “reacción esquizofrénica de
tipo infantil”. En el año 1968 apareció la segunda versión (DSM-II) el que tampoco
contenía el autismo dentro de los trastornos mentales. Fue en 1980 con la
publicación del DSM-III que integro el autismo como “autismo infantil”. En 1987 con
el DSM III-R se sustituyó el nombre por autismo infantil por trastorno autista ya
reconociéndolo como un trastorno, con criterios de diagnóstico más minucioso y
detallados. En los años 1994 y 2000 se publicaron nuevas versiones de DSM-IV
donde se lograron clasificar 5 categorías de autismo trastorno autista: trastorno de
Asperger, trastorno de Rett, trastorno desintegrativo infantil y trastorno generalizado
del desarrollo no especificado (5).

Epidemiologia y etiología
La prevalencia del trastorno del espectro autista, específicamente del
autismo, afecta mayormente al sexo masculino. En Chile aún no existe un registro
de las personas diagnosticadas, pero tomando la prevalencia internacional dice que
existen 9 de cada 1000 recién nacidos vivos (RNV) con Autismo diagnosticado, que
al entre cruzarlo con los datos nacionales se estima que de los 240.569 RNV
registrados en el 2007, la cantidad aproximada de niños con Autismo en Chile es de
2165 niños. Para el año 2009 se actualizó los datos con la base de datos de
escolares con TEA en educación especiales existiendo un total de 589 más. Con la
Junta Nacional de Jardines Infantiles se detectaron en la etapa pre- escolar un total
de 2157 niños con necesidades educativas especiales en el primer semestre del
2009 de los cuales 89 presentaban trastornos de la comunicación (6).
4
Etiología
Al espectro autista todavía no se encuentra una causa única y concreta. Las
primeras definiciones que se crearon en 1943, hasta la década de los 60 se pensaba
que la patología era un trastorno psicológico vinculado a padres poco expresivos
con una falta de interés en las emociones. Con el paso de los años las teorías de
su causa fueron cambiando, en los años 70 se iniciaron investigaciones biológicas
para precisar la causa, pero hasta ahora los expertos no están seguros de su
etiología, pero si están seguros en la búsqueda de una causa en el factor genético,
metabólico o vírico que en conjunto o por separado causen un desarrollo anómalo
del sistema nervioso central (6).
Hasta el día de hoy se está buscando la etiología y hasta el momento los
estudios han demostrado estas asociaciones genéticas específicas, encontrado
como posibles causas:
Síndrome X frágil: es una forma muy común de retraso mental que se hereda siendo
un trastorno cromosómico de mutación en la secuencia normal de ADN, en el gen
FMR-1 produciendo una inactivación por una expansión del número de repeticiones
y que además se inactivan los 2 genes de remplazos FXR-1 y FXR-2 que ayudan
en la maduración de las conexiones sinápticas entre neuronas causando una
discapacidad intelectual el cual sus síntomas se ven reflejados en el periodo de
lactancia y en la primera infancia hacia delante (6)(7).
Encefalitis: en una enfermedad que produce una inflamación del cerebro
generalmente por una infección, se presenta en los primeros años de vida y
disminuye progresivamente con la edad, esta enfermedad causa una destrucción
neuronal y puede llegar a provocar sangrado en el cerebro y dañar la masa
encefálica (7).
Fenilcetonuria (PKU):es una enfermedad congénita metabólica hereditaria que se
presenta por una carencia de la enzima Fenilalanina Hidroxilasa lo que se traduce
en la incapacidad de metabolizar los aminoácidos tirosina y el aumento de los
niveles de fenilalanina generan daño a nivel del SNC produciendo daño cerebral (7).

5
Esclerosis tuberosa: es una afección autosómica hereditaria que genera una
mutación de los genes TSC1 Y TSC2 regulan el proceso de proliferación y
diferenciación afectando el SNC y generando síntomas cerebrales del trastorno del
espectro autista (7).
Rubeola en el embarazo: es una enfermedad producida por una infección de tipo
vírica que causa defectos congénitos o la muerte del feto ante esta enfermedad solo
existe la vacunación como prevención (7).
Timerosal en vacunas y Metales pesados (mercurio): este compuesto está presente
en las vacunas chilenas como preservante en dosis superior a la norma permitida
por las organizaciones internacionales de chile, este componente el cual es
mercurio orgánico traspasa la barrera hematoencefálica por su gran liposolubilidad
además de traspasar la placenta depositándose en el sistema nervioso central
donde se transforma en mercurio inorgánico, generando estragos en los cerebros
en formación, provoca trastornos de conducta , hiperactividad, déficit atencional
trastornos del lenguaje y disfasia en los niños, en chile se llegó hasta una demanda
por el uso de esta vacuna en pequeños puesto que algunos niños después de estas
vacunas con timerosal presentaron un retroceso cognitivo con deterioro de la
comunicación y conductual. (8)

Detección y diagnostico oportuno de los Trastornos del espectro autista


(TEA)

Los tipos de comportamiento atípicos en los niños son detectables a


temprana edad mediante una exhaustiva observación y seguimiento por parte de
los profesionales de la salud que se encuentren en contacto con el paciente infantil
a través de una observación acompañado por un continuo seguimiento del
desarrollo psicomotor. Al apreciar alguna alteración o retraso de este, nos
encontramos ante una sospecha de TEA.

La detección de los TEA se realiza hasta los tres años, lo cual debe ser
apreciado a través de signos que presente el niño en cuestión, tales como: “Retraso

6
o ausencia del habla, no presta atención a las otras personas, no responde a las
expresiones faciales o sentimientos de los demás, falta de juego simbólico, ausencia
de imaginación, no muestra interés por los niños de su edad, no respeta la
reciprocidad en las actividades de “toma y dame”, incapaz de compartir el placer,
alteración cualitativa en la comunicación no verbal, no señala objetos para dirigir la
atención de otra persona, falta de utilización social de la mirada, falta de iniciativa
en actividades o juego social, estereotipas de manos y dedos o reacciones
inusuales o falta de reacción a estímulos sonoros.” (9) Cualquiera de los signos
antes mencionados deben ser observados por los especialistas o padres del niño.

Uno de los momentos en que se puede apreciar los tipos de alteraciones


comunes en un TEA es cuando los padres consultan a pediatría; durante la
observación del desarrollo psicomotor realizado en la atención primaria en salud
(APS) y a través de la utilización de la Escala del Desarrollo Psicomotor (EDDP) y
del Test del Desarrollo Psicomotor (TEPSI) se puede confirmar la sospecha de TEA
utilizando la pauta de señales de alerta de TEA (9).

Anexo 2

Los niños o niñas que tengan edades entre los 0 a 16 meses al igual que los
que posean 30 meses hasta los 4 años 11 meses, y presenten la señal de alerta
obligatoria según su rango etario además de una o más señales de precaución
correspondiente según la pauta de cotejo de señales de alerta de TEA, serán
derivados inmediatamente a la etapa de confirmación diagnóstica. Por otro lado, los
niños que posean edades entre los 16 y 30 meses y presenten la señal de alerta
obligatoria además de una o varias señales de precaución correspondientes según
la pauta de cotejo de señales de alerta de TEA y su rango etario, serán derivados
inmediatamente al periodo de Vigilancia (9).

Anexo 3

7
El periodo de vigilancia tiene una duración de 30 días, en los cuales se aplica
el instrumento The Checklist for Autism in Toodlers, en su versión modificada (M-
CHAT/ES), el día 1 y 30 de vigilancia a los niños que presenten conductas atípicas
que den un indicio de que posea TEA. Este test es realizado a los padres o
cuidadores, los cuales responderán con respecto a las conductas que hayan
presentado los niños. Este periodo debe ser observado por un profesional de salud
perteneciente al equipo de rehabilitación de APS, o en caso de no contar con este
tipo de personal, se sugiere que el niño ingrese a un programa de estimulación
temprana perteneciente a Chile Crece Contigo de su comuna para que la vigilancia
sea observada y monitorizada por una educadora que se haga cargo del caso en
particular. En cambio, la confirmación diagnóstica se realiza una vez ya haya sido
aplicada la Pauta de Señales de Alerta, los dos M-CHAT/ES (aplicados en el período
de Vigilancia) junto con una Ficha de Derivación Evaluación Diagnóstica (9)

El profesional a cargo de la evaluación para realizar un diagnóstico y


caracterizar el trastorno necesita saber la historia clínica del niño a través de la
realización de una anamnesis, donde se podrán recolectar datos importantes de los
antecedentes familiares de trastornos similares o psiquiátricos, la historia evolutiva
del desarrollo psicomotor del niño y sus antecedentes de salud, aspectos familiares
y psicosociales, además de las consultas y tratamientos anteriores que posea (10).

Además, para realizar una confirmación diagnóstica o un diagnóstico


diferencial es necesaria la revisión del manual de diagnóstico y estadísticas de
trastornos mentales, los que están constituidos por tres secciones que fueron
actualizadas el año 2013, las cuales hablan de “proporcionar pautas para el uso
clínico y forense del manual, incluir los criterios y códigos diagnósticos de los
diferentes trastornos y, por último, recoger medidas dimensionales para la
evaluación de los síntomas, criterios sobre la formulación cultural de los trastornos
y una propuesta alternativa sobre la conceptualización de los trastornos de
personalidad, así como una descripción de las condiciones clínicas que están
actualmente en estudio” (10)
8
Una vez realizada las actividades antes mencionadas es necesario una
evaluación multidisciplinaria, la cual es realizada de la forma más completa posible
y así poder pesquisar o confirmas casos de TEA. Las áreas que requieren ser
evaluadas por este equipo de salud son: evaluación neuropediatrica para descartar
enfermedades psiquiatricas, evaluación psicométrica para objetivizar el nivel
intelectual de los niños, evaluación del funcionamiento personal y familiar lo que nos
permitirá saber el nivel de madurez psicológica y social, evaluación
neuropsicológica con la que se logrará saber si hay algún alteración, evaluación
comunicativo-lingüística, evaluación del procesamiento sensorial lo que permitirá
valorar las habilidades sensoriales de los niños con TEA y, para finalizar, una
evaluación clínica (pruebas y exámenes de laboratorio) (9).

También, en caso de ser necesario, existen una serie de pruebas


diagnósticas específicas para diagnosticar TEA, que podrían ser aplicadas para un
diagnóstico y evaluación más completa, como son ADI-R (Autism Diagnostic
Interview-Revised) aplicada a los mayores de 18 meses, ADOS-G (Escala de
Observación Diagnostica del autismo- Genérica) aplicada a los mayores de 36
meses, Social Communication Questionaire (SCQ) aplicada desde los cuatro años
con una edad de dos, Escala de evaluación del Autismo infantil (CARS) aplicada a
mayores de 24 meses, Entrevista Autismo Padres (PIA) aplicada a menores de
cinco años, Herramienta de diagnóstico a los dos años de edad (STAT) aplicada a
niños entre 24 y 35 meses y Autism Behavior Checklist (ABC) aplicada en niños con
edad preescolar (9).

Medidas terapéuticas
A continuación, se entregará información general de los métodos para la
intervención de TEA que cuentan mayor nivel de evidencia y otros altamente
recomendados, los cuales se encuentran dentro de la categoría de psicoeducativos,

9
por su diseño terapéutico, aunque los estudios sobre sus resultados aún sean
preliminares (9)

1. Enfoques basados en la intervención conductual:

Se basan principalmente en la modificación de la conducta y las técnicas


basadas en las teorías del aprendizaje para intervenir a los niños con TEA,
intentando mejorar las habilidades socio comunicativas y modificar los patrones
conductuales restrictivos, estereotipados o agresivos y autoagresivos presentes. De
este modelo derivan diversos métodos, que difieren principalmente en la edad de
inicio, la intensidad de la terapia, en entorno en que se aplican, especificidad para
el autismo, compatibilidad con otros métodos, y nivel de participación de los padres.
De tales como:

a. Applied Behavior Analysis (ABA) o Análisis Conductual Aplicado: Modelo


terapéutico que se basa en los principios del conductismo operante, es decir,
moldear las habilidades de sociabilización, imaginación y comunicación en los niños
con TEA por medio de la entrega de un refuerzo positivo, desde el refuerzo primario
(alimento en ocasiones) hasta el refuerzo social. Este tratamiento se utiliza tanto
para la adquisición de ciertas conductas, tales como el contacto ocular y también
para reducir las conductas problemáticas, como la autoagresión. Este tratamiento
es altamente recomendable debido a su efectividad. De este enfoque conductual
derivan otras intervenciones. En términos generales, existe evidencia que valida a
este método de intervención (9).

b. Entrenamiento en respuestas centrales (PRT): Se basa en los principios


conductuales de ABA y se utiliza para incentivar habilidades comunicativas y reducir
conductas auto estimulantes, como las estereotipas motoras entre otras. Las
modificaciones conductuales se consiguen por medio de estrategias motivacionales
a través de refuerzos directos y naturales (9).

10
c. Conducta verbal: Otro método conductual, enfocado principalmente en desarrollar
habilidades comunicativas verbales (9).

Con este modelo se pretende que el niño establezca la relación entre palabra
y su significado, como también que el niño adquiera la habilidad de utilizar el
lenguaje oral como medio para satisfacer sus necesidades.

d. Early Intensive Behavioural Intervention/Programas Intensivos de Intervención


Conductual (EIBI): Programa basado en los principios del ABA, es decir, en los
principios del condicionamiento operante y está centrado en promover mejoras en
las deficiencias en el lenguaje, tanto comprensivo como expresivo, la imitación,
conductas de auto-cuidado, e interacción social, de forma individual, tanto en los
entornos educacional como familiar, promoviendo el rol de la participación familiar
como fundamental para la generalización de las conductas a abordar. Estos
métodos resultan ser efectivos cuando se extienden a 40 horas semanales y por un
periodo superior a 2 años. Método validado como efectivo para intervenir en el
TEA66 (9).

2. Intervenciones basadas en El Desarrollo, las Diferencias Individuales y las


Relaciones DIR/Floortime™: Constituye una técnica terapéutica específica,
diseñada por Stanley Greenspan, basada en el modelo de desarrollo, diferencias
individuales y relaciones, o DIR® (Developmental Individual Differences
Relationship Model). Esta técnica permite a médicos, padres y educadores la
construcción de un programa adaptado a los retos y fortalezas específicas de los
niños, ayudándolos a ampliar sus círculos de comunicación. Un aspecto central en
el Floortime™ es el papel de las emociones naturales (“R”Relationship) del niño y
los intereses, esenciales para el aprendizaje de las interacciones. Otro aspecto
importante es eldesarrollo (“D” Developmental) cuya intervención, puede ayudar a
mejorar la empatía, reciprocidad afectiva y el pensamiento creativo, entre otros.
Finalmente, este modelo hace gran énfasis en las diferencias individuales (“I”
Individual Differences), para favorecer un abordaje individualizado para cada niño

11
en sus áreas más afectadas y considerando sus capacidades. Este método hace
énfasis en el rol de los padres como terapeutas de los niños, ayudando al
entrenamiento de estos para ejecutar la intervención68. Para esto el adulto se
adapta al nivel de desarrollo del niño para impulsar nuevas habilidades
generalmente a través del juego, siguiendo y participando en actividades que
interesen a los niños. Es un método que pese a presentar cierta evidencia69, no
muy concluyente ante la comunidad científica, sí es recomendado como un método
utilizable para la intervención en TEA (9).

Leyes en Chile
En América Latina existen varios países que poseen leyes que protegen a
los niños y adultos con Autismo como en Perú, Brasil, Argentina, Venezuela, en el
que cubre desde un diagnóstico precoz a tratamientos necesarios e integración a la
sociedad, mientras que en Chile aún se está trabajando y exigiendo una ley que
ampare por completo a las personas con este trastorno, ya que solo están
integradas a la ley 20.422 de igualdad de oportunidades e inclusión social (11).

Rol de la Enfermería en Autismo Infantil


El actuar de enfermería en niños que presenten Autismo va desde la
detección temprana del trastorno, mediante alteración de pruebas de desarrollo
motoras, hasta su abordaje integral individuo-familiar, considerando otras
patologías presentes. Es fundamental saber diferenciar entre las alteraciones
neuronales y aquellas de la conducta, que son responsabilidad de la crianza de los
niños, los cuales pueden presentar agresión y el incumplimiento de normas. Para
generar la diferencia entre la presencia de la patología o ausencia de esta se evalúa
el deterioro de las relaciones interpersonales, intensidad y frecuencia de estas (12).
El presentar ciertas modificaciones en el actuar diario va a influir directamente
en la relación enfermera-paciente, considerando estas como un método para
disminuir el trauma en los niños que puede generar acudir a una consulta enfermera.
Para realizar una correcta atención en niños que presenten autismo es
necesario desarrollar un buen PAE, donde entre las acciones propias de enfermería
12
se encuentra el colaborar con el diagnostico, mediante una pesquisa previo, apoyar
a la familia en el momento de confirmación del diagnóstico y a lo largo del todo el
proceso de aceptación y adaptación, educar sobre las correctas prácticas para
mejorar la calidad de vida tanto de los niños como la familia y educar al resto de los
profesionales sobre la correcta llegada hacia estos pacientes (13).
Junto con esto, dentro de las habilidades a desarrollar con el paciente estas
fomentar el estímulo-respuesta, reforzar ciertas actividades y eliminar otras.
Además de desarrolla ciertas terapias como:
1) Arteterapia: Dibujos sobre el desarrollo del niño, lo cual no solo permitirá
identificar características del autismo, sino que se crearan vínculos
enfermera-paciente por la expresión de sentimientos mediante esta técnica.
2) Musicoterapia, danza y dramatización: Expresión corporal de las vivencias
internas del niño, lo cual aumenta la verbalización, mejora la tolerancia al
contacto físico, mejora el contacto visual y aumenta vinculo enfermera-
paciente.
3) Pictograma: Mediante agendas visuales, normas de conductas y secuencias
de tareas (14).
Saber llegar al paciente y a la familia es de suma importancia para el camino a
recorrer, tanto para los padres como para los niños, mediante la escucha activa,
la participación comprometida con el paciente y la entrega de la información
necesaria para integrarlo de forma correcta a la sociedad (12) (14).

CONCLUSIÓN
El Autismo ahora visto como un trastorno y no como una enfermedad, se
encuentra presente en muchos niños en Latinoametica. En Chile la importancia que
tiene los niños con Autismo es mínima, considerando que no existe ninguna ley que
los acobije, por lo cual más medidas de atención son pocas.
13
Si bien las medidas de diagnósticos ahora han aumentado, falta mucho
conocimiento en relación con la atención de estos pacientes y la educación hacia
los padres sobre cómo manejar sus estilos de vida.
En cuanto al conocimiento sobre el Autismo, ha aumentado
considerablemente pero aún falta educación hacia la sociedad.

ANEXOS

14
Anexo 1:

Anexo 2 (10):

15
Anexo 3 (15):

REFERENCIAS
(1) Fundación Adana. Definición y tipos TEA [Internet], 2018. [Consultado el: 11
Nov, 2018]Disponible en: http://www.fundacionadana.org/definicion-y-tipos-
tea/
(2) Carmen Quijada. Espectro autista. Rev. Chil Pediatr [Internet]. 2008
[Consultado el: 11 Nov, 2018]; Vol (78):86-91. Disponible en:
https://scielo.conicyt.cl/pdf/rcp/v79s1/art13.pdf.
(3) María Vargas. Autismo infantil. Revista Cupula [Internet].2012 [Consultado
el: 13 Nov, 2018]; Vol (12):44-50. Disponible en:
www.binasss.sa.cr/bibliotecas/bhp/cupula/instructivo.pdf
(4) Artigas-Pallares, J. and Paula, I. (2018). El autismo 70 años después de Leo
Kanner y Hans Asperger [Internet]. 2018 [Consultado el: 6 Nov, 2018].
Disponible en: http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0211-
57352012000300008
(5) Transparencia Venezuela. (2018). Ley de Atención Integral y Protección para
las Personas Con Trastornos del Espectro Autista (Tea) y Condiciones

16
Similares - Transparencia Venezuela. [Internet]. 2018 [Consultado el 06 Nov,
2018]. Disponible en: https://transparencia.org.ve/project/ley-de-atencion-
integral-y-proteccion-para-las-personas-cofv-trastornos-del-espectro-aut-
ista-tea-y-condiciones-similares/
(6) Francesc Cuxart. Autismo: aspectos descriptivos y terapéuticos. Rev. on-
linetrainautism [Internet]. 2000 [Consultado el 20 de Nov del 2018].
Disponible en:
https://www.autisme.com/autisme/documentacio/documents/Causas%20del
%20autismo.pdf

(7) Sheila Grossman y Carol Mattson Porth. Fisiopatología. ed 9° ed. Barcelona


(España): Wolters Kluwer Health; 2014

(8) El Guardian De la Salud. Vacunas y Autismo. Rev. Soluciones. [Consultado


18 de Nov del 2018]; Vol. (15):18-37.
(9) Ministerio de salud. Guía de práctica clínica. Detección y diagnostico
oportuno de los trastornos del espectro autista (TEA). Gobierno de Chile
[Internet]. 2011. [Consultado el: 17 de Nov, 2018]. Disponible en:
file:///C:/Documents%20and%20Settings/USUARIO/Mis%20documentos/Do
wnloads/bd81e3a09ab6c3cee040010164012ac2%20(2).pdf
(10) Enrique Echeburúa, España Cibersam Karmele Salaberría, Marisol
Cruz-Sáez. Aportaciones y limitaciones del DSM-5 desde la Psicología
Clínica. [Internet]. 2014. [Consultado el: 13 de Nov, 2018]. Vol. (32), 65-74.
Disponible en:
file:///C:/Documents%20and%20Settings/USUARIO/Mis%20documentos/Do
wnloads/art07.pdf
(11) Espectro Autista en Chile. El Espectro del Autismo en Chile y la ley
20.422 que establece normas sobre igualdad de oportunidades e inclusión
social de personas con discapacidad.
(12) Mónica Pérez. Papel de la enfermera en la Atención Primaria en la
detección precoz del niño con Trastorno del Espectro Autismo y Síndrome de
Asperger. Enfermería Comunitaria [Internet]. 2015 [Consultado el 14 Nov,

17
2018]; Vol. 3: 37-45. Disponible en:
https://ria.asturias.es/RIA/handle/123456789/5423
(13) Ana Campos. Intervenciones enfermeras en el autismo infantil.
Calidad de vida, cuidadores e intervenciones para la mejora de la salud
[Internet]. 2017 [Consultado el 14 Nov, 2018]; Vol. (1): 361-366. Disponible
en: https://dialnet.unirioja.es/servlet/libro?codigo=522568
(14) Alba Sánchez. El papel de la enfermería en niños con Trastorno del
Espectro Autismo. Universidad de Valladolld [Internet]. 2016 [Consultado el
14 Nov, 2018]; :20-24. Disponible en:
https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=5321073
(15) Detección de señales de alerta. Rev. Chil. pediatría. Fundamentos de
la intervención temprana en niños con trastornos del espectro autista.
[Internet]. 2015. [Consultado el: 18 de Nov, 2018]. Disponible en:
file:///C:/Documents%20and%20Settings/USUARIO/Mis%20documentos/Do
wnloads/art11.pdf)

18

Potrebbero piacerti anche