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CONFLICTO, ACOSO
Y VIOLENCIA EN
ENTORNOS LABORALES
MANUEL LUCAS SEBASTIÁN CÁRDENAS
ROSA JIMÉNEZ ROMERO
Director del Proyecto: Manuel Lucas Sebastián Cárdenas
Autores:
No está permitida la reproducción parcial o total de este libro, ni su tratamiento por cualquier medio informático,
ni la trasmisión en ninguna forma ni por ningún medio, ya sea mecánico, electrónico, magnético, electroóptico, por
fotocopia o por cualquier otro, sin el permiso explícito del titular del Copyright.
I.S.B.N.: 978-84-617-2692-9
Depósito legal: SE 2134-2014
NOTA: El uso de metodología psicológica específica para la exploración de la salud mental de trabajadores que pueda conllevar la aplicación
de las herramientas que se presentan en esta publicación deberá ser realizado exclusivamente por profesionales de la Psicología, que según
nuestro Colegio Oficial de Psicología son los únicos autorizados para esta práctica profesional. Los profesionales de la Psicología deben hacer
un uso responsable de las herramientas que esta publicación pone a su alcance para evitar un uso indebido de las mismas que origine, entre
otros, problemas deontológicos y consecuencias legales.
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Estructura general de la obra
Estructura general
de la obra
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Índice de contenidos
Índice de
contenidos
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Índice de contenidos
Índice de
contenidos
1. INTRODUCCIÓN
2. MARCO CONCEPTUAL
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Índice de contenidos
Índice de
contenidos
ANEXOS
3. Q-SATA
4. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
5. HERRAMIENTA COMPLEMENTARIA
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Prefacio
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psicosociales. Sin embargo, es el campo de cada vez más inseparables desde una pers-
la evaluación-intervención el que más urgen- pectiva ecológica de la salud laboral.
temente necesita de atención, prueba de ello
son las estadísticas sobre riesgos psicosocia-
les que salen con regularidad a la luz. COLEGIO OFICIAL DE PSICOLOGÍA DE ANDALUCÍA
OCCIDENTAL
2014
En esta línea, el sistema preventivo actual re-
quiere de profesionales conocedores de la
importancia de la multiplicidad de factores de
riesgo Ergonómicos y Psicosociales que afec-
tan a las personas en el mundo laboral y, para
lograr su objetivo, estos profesionales deben
ser capaces de sistematizar y aplicar proce-
dimientos de intervención que modifiquen las
condiciones laborales, de forma que al menor
coste de recursos logren el mayor beneficio
posible para la salud de trabajadores y traba-
jadoras.
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Prólogo
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mente todos pueden calificarse como “úni- apartados evaluativos y preventivos de forma
cos” pero, en este caso, no se trata sólo de claramente diferenciada, además de incorpo-
un instrumento diferenciado, ni tan siquiera rar aspectos de violencia física y, evidente-
en el campo de estudio del acoso psicológi- mente, la actualización de sus referencias. El
co laboral, sino de un instrumento único por apartado de revisión conceptual destaca por
su planteamiento desde la perspectiva de la la concepción del texto, que puede calificarse
triangulación de datos, que le confiere unas como didáctica, pedagógica, y que lo diferen-
características como instrumento de evalua- cia sensible y positivamente de otros dedica-
ción extraordinarias (literalmente fuera de lo dos únicamente a describir su instrumento en
que habitualmente tenemos a nuestra dispo- cuestión. La concepción del conflicto como
sición) y el rigor metodológico aplicado para elemento que puede revestir características
su desarrollo, poco común en muchos instru- positivas para la organización es una reflexión
mentos, incluso desde una perspectiva inter- que debe subrayarse, así como su descrip-
nacional. ción, a modo de continuum, desde estas ca-
racterísticas positivas a las negativa, mucho
No se trata de un instrumento sencillo en su más útil y ecológica que la habitual dicotomía
aplicación, como tampoco lo es el proceso a maniquea. Merece una especial reseña la mo-
evaluar. La formación especializada de la per- délica definición del informe de resultados, re-
sona encargada de administrarlo, y el cono- flejo del procedimiento de aplicación. En este
cimiento de la organización sobre la que se punto nos atreveríamos a sugerir al lector que
aplique son fundamentales. No son caracte- añada al título del libro un subtítulo del tipo
rísticas al alcance de unas pocas personas, “intervención psicosocial”, puesto que se trata
sino simplemente recomendables y asequi- de un texto claramente orientado a la acción.
bles mediante formación especializada, como
ocurre con otras herramientas empleadas en En el año de la edición de la campaña euro-
los campos de la Seguridad en el trabajo y la pea de EU-OSHA que tiene como lema “Tra-
Higiene industrial. bajos saludables: gestionemos el estrés”, cen-
trada en la búsqueda de soluciones prácticas
El Meta-V, añadido a las ediciones anterio- para la gestión de los riesgos psicosociales,
res del presente trabajo, que conceptualiza sin duda esta obra contribuirá de forma sig-
la violencia externa como la intersección del nificativa en las aportaciones que de ella se
riesgo físico con el psicosocial, presenta una deriven.
propuesta muy interesante para abordar el fe-
RAMÓN FERRER PUIG
nómeno, siguiendo la filosofía de segmentos Universidad de Barcelona. Agosto 2014
de análisis del SATA que facilita enormemente
la labor preventiva.
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Prólogo a la
segunda edición
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dad psicológica es diferente a la etiqueta que ción “tóxica”, una intervención solamente en
comúnmente asignan los miembros de una la estructura de la organización puede ser
sociedad a un fenómeno dado de la conducta también inaceptable. En este sentido, esta vi-
o pensamiento humano. La explicación psico- sión sistémica de problema nos puede llevar
lógica, puesto que pretende ser una explica- a “evitar” esas soluciones fáciles que muchas
ción científica, no puede estar, por supuesto, veces vemos como “propuestas mágicas” de
en contradicción con la experiencia fenome- los departamentos de personal de las empre-
nológica que el ser humano tiene de un fenó- sas. Un ejemplo de ello lo tenemos en esas
meno, pero debe ir más allá de ella si quiere situaciones que a menudo vemos los ergóno-
servir para predecir (evitar, eliminar, curar, etc.) mos donde el departamento de personal pro-
dicho fenómeno. Además, dicha explicación pone que la persona acosada (o la persona
debe servir también para medir dicho fenó- acosadora) sea trasladada de un puesto de
meno. Si la explicación es válida, debe ser po- trabajo a otro en la empresa.
sible a partir de ella desarrollar instrumentos
de medida para evaluarla. En este sentido, de- La triangulación, y la visión sistémica en la que
bemos recalcar que muchas veces se olvida está basada, tiene una consecuencia muy po-
que la validez de una herramienta de medida sitiva en la práctica actual de los ergónomos
es un verdadero “test objetivo” de la validez y en el abordaje jurídico de este problema.
de la explicación psicológica en la que está Es necesario que los ergónomos prevencio-
basada. nistas nos convenzamos a nosotros mismos
y seamos capaces de convencer a la socie-
Partiendo de estas premisas, es evidente que dad de que no es posible hacer prevención
SATA es un intento “científico” totalmente de riesgos laborales desde unas evaluaciones
necesario de abordar el problema del aco- basadas en “check-lists”. La conducta huma-
so laboral desde una postura basada en las na, individual y social, tiene que ser analizada
teorías psicológicas de la conducta individual, con una combinación de métodos cuantitati-
las relaciones personales y las dinámicas de vos y cualitativos que contemplen todos sus
las organizaciones. Por esta razón, el futu- aspectos y que, además, permitan llegar a re-
ro usuario de esta herramienta puede tener sultados y conclusiones válidos. Para llegar a
la garantía de que el autor la ha desarrollado diagnosticar que existe un acoso laboral real
después de una completa revisión de todos es necesario que existan datos objetivos de
los aspectos teóricos y metodológicos re- acoso que pueden ser observables. Pero tam-
ferentes a este problema discutidos por los bién es necesario que exista una “experiencia
investigadores en los últimos 20 años. Su subjetiva” de acoso por parte de la persona
elección de la “triangulación” como técnica acosada, unas conductas observables de la
metodológica, por ejemplo, está basada en persona o personas acosadoras, unas prácti-
un entendimiento “sistémico” de la conducta cas organizacionales que permitan y favorez-
humana y los fenómenos sociales que forma can el acoso, etc. Sólo de esta manera, pode-
parte de los planteamientos de la Ergonomía mos solucionar los problemas reales de acoso
actual, como queda reflejado en la extensa re- que nos encontremos en nuestra práctica pro-
visión bibliográfica que el autor ofrece en esta fesional como ergónomos prevencionistas y,
obra. El acoso laboral es un problema que su- sólo así, la sociedad reconocerá la existencia
fre una persona pero su génesis, desarrollo y real del problema y la necesidad de evitarlo.
resolución reflejan un problema interpersonal También de esta manera, cuando los casos
y organizacional. Pretender que la solución lleguen ante las instancias judiciales, los tribu-
del acoso que sufre una persona puede ser nales tendrán datos fiables para intervenir si
analizada a partir de las características de la fuese necesario sentenciarlo.
persona acosada solamente es, además de
inútil, peligroso porque puede agravar el pro-
pio acoso. Del mismo modo, aunque el acoso JOSÉ JUAN CAÑAS DELGADO
ocurrirá fundamentalmente en una organiza- Universidad de Granada. Enero 2014
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Prólogo a la primera
edición
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cidentes, reconocimientos médicos…), difícil- cesite mucho tiempo para convertirse en un
mente se realiza algún tipo de inversión en la detector anticipatorio del acoso, pero valgan
prevención de riesgos psicosociales (estrés, estas líneas de sincera felicitación a la tarea
burnout …) y mucho menos en el acoso labo- ya efectuada.
ral.
MIGUEL BARÓN DUQUE
Universidad de Sevilla. Junio 2007
Muy probablemente, los responsables de las
empresas y organizaciones laborales adopta-
rán medidas preventivas en el acoso laboral si
tienen la influencia de una cultura centrada en
la “gestión de conflictos, la participación en la
toma de decisiones de tarea, el liderazgo par-
ticipativo o delegativo, la comunicación hori-
zontal…”, si disponen del tiempo necesario y
la posibilidad de reflexionar sobre la gravedad
de las consecuencias del acoso psicológico
en el trabajo.
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“En el ámbito de la salud en el trabajo, uno de los pecados capitales consiste en emprender estudios sofisticados
que describen con todo lujo de detalles el estrés, sus causas y consecuencias… y que se quedan en eso. Diagnos-
ticar sin tratar y aún menos prevenir equivale a pecar por omisión”
Guía sobre el estrés relacionado con el trabajo: ¿La “sal de la vida” o el “beso de la muerte”? Comisión Europea,
2000
“A este problema universal está enfrentada la educación del futuro porque hay una inadecuación cada vez más
amplia, profunda y grave por un lado entre nuestros saberes desunidos, divididos, compartimentados y por el otro,
realidades o problemas cada vez más transdisciplinarios, transversales, multidimensionales, transnacionales, glo-
bales, complejos”
Edgar Morin
Introducción
general
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de trabajo. “Exponen así su equilibrio y funcio- sociología Laboral Aplicada).
namiento mental a la amenaza que contiene
el trabajo para hacer frente a una exigencia Debemos aclarar que esta perspectiva no es la
que es aún más imperiosa: ¡sobrevivir!”, (De- única posible para tratar estos temas en la es-
jours, 1988). Una confirmación parcial de esta fera laboral. Por ejemplo, existen dos tenden-
tendencia se encuentra en el hecho de que el cias legales divergentes: la llamada “Escuela
deterioro laboral de los últimos tiempos haya de la Salud” que considera al Acoso Laboral
provocado que “el miedo a perder el trabajo” como Riesgo Psicosocial y, por otro lado, los
lleve a que se realicen horas extras sin cobrar- considerados “Laboralistas Puros” que lo con-
las o a una reducción significativa del nivel de sideran como una agresión laboral a la digni-
absentismo para evitar el “despido objetivo dad del trabajador (Molina, 2005; Rodriguez,
por faltas de asistencia al trabajo por causas 2002). Aunque ambas tendencias no pueden
aún justificadas pero intermitentes” (periódi- entenderse como mutuamente excluyentes si
co: El Mundo. Miércoles 18/09/2013, pág. 39). promoverán diferentes vías de estudio y tra-
tamiento desde nuestro actual marco norma-
El objetivo principal de la materia expuesta y tivo (doble plano: el del derecho a la salud y
de la organización de la misma es servir de a la prevención; y el de los derechos funda-
base para la investigación-intervención de es- mentales afectados). Además del tratamiento
tos procesos por parte de diferentes profesio- legal de estos procesos, es importante tener
nales del ámbito laboral. Este objetivo condi- en cuenta que, en nuestro contexto laboral
ciona forzosamente el nivel de profundización actual, la gestión de personas en entornos de
en las diferentes materias por lo que no po- crisis supone un aspecto de extraordinaria re-
drá esperarse un tratamiento exhaustivo o un levancia en las empresas (de cara a la produc-
cierre conceptual de cada fenómeno. En este tividad y a su misma supervivencia), por lo que
sentido, para ahondar en lo tratado aconseja- los temas tratados deber entenderse no sólo
mos la lectura de la amplia bibliografía que se como claves para la prevención-tratamiento
relaciona al final de la obra. de problemas organizacionales sino también
como factores a tener en cuenta para crear
La perspectiva adoptada para tratar estos te- ambientes de trabajo organizacionalmente
mas ha sido la de la psicosociología laboral sostenibles, donde la productividad alcan-
aplicada (más propiamente: ergonomía orga- zada pueda mantenerse en niveles óptimos
nizacional). Desde esta perspectiva, iniciada para la empresa sin perjudicar la salud y la im-
con los trabajos de Elton Mayo y W. Lloyd War- plicación de las personas.
ner, “lo psicosocial” hace mención a la encru-
cijada existente entre lo individual, lo grupal La presente obra trata los procesos de Con-
y lo organizacional con repercusiones claras flicto Interpersonal, Acoso Laboral y Violencia
para los trabajadores y para la empresa en Externa fundamentalmente desde su dimen-
múltiples frentes (productividad, salud, cultura sión como riesgos psicosociales. En esta lí-
organizacional, errores, conflictos…). nea, y de cara a la gestión de los riesgos la-
borales, es importante tener en cuenta que su
Una vez reconocidos como fenómenos psi- prevención, detección e intervención puede
cosociales, su posible impacto negativo en la establecerse en cuatro momentos diferentes,
salud de los trabajadores caracterizará estos hablamos de las fases nombradas como pre-
procesos como riesgos psicosociales, junto vención primaria (promoción de hábitos sa-
al estrés laboral o a la fatiga laboral (véase la ludables), prevención secundaria (detección
guía de actuaciones de la Inspección de Tra- temprana), prevención terciaria (intervención)
bajo y Seguridad Social sobre riesgos psico- y, la menos conocida, prevención cuaternaria
sociales, 2012) y promoverá su estudio e in- (investigación forense), que atendería a las si-
tervención desde el ámbito de la Prevención tuaciones donde el daño se ha producido y no
de Riesgos Laborales (más específicamente se han detectado factores de riesgo (allí don-
desde la especialidad de Ergonomía y Psico- de han fallado los cauces preventivos).
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La prevención cuaternaria supondría la inves- cidos, se investiga la existencia de factores
tigación “aguas arriba” de cara a la búsqueda generadores de riesgo y su relación con uno
de las causas para que los daños no vuelvan o varios casos concretos, normalmente des-
a producirse e incluiría a la “ergonomía foren- de supuestos de verificación y contraste para
se” así como aquellas actividades de investi- evitar simulaciones o errores de diagnóstico,
gación de las causas una vez se ha produci- desde instancias que pueden ser externas a
do un daño inesperado para la organización. las propiamente preventivas (por ejemplo en
Desde este esquema que proponemos (adap- peritajes judiciales o en comités internos), y
tado de Kuehlein, Sghedoni, Visentin, Gérvas con fines tanto preventivos de cara a la apari-
y Jamoule, 2010), la prevención cuaternaria, ción de nuevos casos así como de restitución
a diferencia de la prevención terciaria donde y reparación desde el marco legal vigente.
se interviene sobre factores de riesgo cono-
Las ediciones anteriores de SATA han goza- ceptos y definiciones, y la segunda a la eva-
do de un considerable impacto en nuestra luación e intervención centrándose en un ins-
sociedad y en los foros e instituciones pro- trumento concreto.
fesionales. De hecho, el SATA ha sido publi-
cado como Nota Técnica de Prevención por Una advertencia, la “niebla conceptual” que
el Instituto Nacional de Salud e Higiene en el envuelve a los fenómenos aquí tratados po-
Trabajo (INSHT), aparece como instrumento nen en tela de juicio la especificidad y el al-
de referencia en varias guías sobre la materia, cance de las nociones con las que se trabajan
entre ellas la de la Inspección de Trabajo y Se- (algunas veces se aluden a fenómenos dife-
guridad Social sobre riesgos psicosociales, y rentes con el mismo término, otras veces se
es hoy día ampliamente utilizado en el ámbito alude con diferentes términos al mismo fenó-
nacional e internacional. meno).
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individuos, mientras que los instrumentos que
permiten la evaluación de estos fenómenos a
nivel grupal y organizacional son muy escasos
(Wlosko, 2009).
21
CAPÍTULO
CONFLICTO INTERPERSONAL EN
ENTORNOS LABORALES
1
Capítulo 1
Parte 1.
CONCEPTOS Y DEFINICIONES
24
Capítulo 1
Medina, Luque y Cruces (2005) aclaran que con amplios conocimientos de psicología del
resolver un conflicto es sinónimo de finalizar- trabajo y ergonomía organizacional, así como
lo, eliminarlo o reducirlo, en cambio gestio- de dinámica grupal e interpersonal. Para una
narlo supone el diseño de estrategias para mayor profundización en la temática de la
maximizar sus aspectos positivos y minimizar gestión de los conflictos recomendamos la
su potencial disfuncional, que incluirá, por lo lectura atenta de la obra de Munduate y Me-
tanto, los procesos de análisis y resolución o dina (2005).
estimulación del conflicto. De este modo, una
gestión eficaz de los conflictos permite a la
organización extraer el máximo beneficio de 02 Marco conceptual
la situación. La decisión sobre qué proceso
seguir necesitará de un análisis sobre las cir- 2.1. CONCEPTO DE CONFLICTO
cunstancias en que ha surgido el conflicto, sus
efectos sobre las partes así como los compor- Para los intereses de la presente obra, un con-
tamientos puestos en juego para afrontarlo. La flicto hace referencia a un proceso de oposi-
clave de la positividad de los conflictos estará, ción o desacuerdo percibido entre dos o más
por lo tanto, en su gestión eficaz para mante- partes con similar capacidad de resolución,
nerlos dentro de los límites apropiados para pudiendo generar ineficiencia para la organi-
que su resultado sea autocrítico, activador y zación y daños para la salud de las personas
creativo (Robbins, 1987; citado en Munduate y implicadas. Un conflicto es siempre una expe-
Martinez, 1994). riencia subjetiva con o sin base objetiva y sur-
ge cuando las actividades a desarrollar para la
Es importante señalar que, en lo que sigue, la consecución de objetivos se obstaculizan en-
presente obra se ceñirá a los conflictos inter- tre sí. De este modo, Raven y Kruglanski (1970)
personales en el lugar de trabajo desde una definieron el conflicto como “la tensión entre
óptica psicosocial. La casuística general de dos o más entidades sociales que surge de
este tipo de conflictos, con gran presencia de la incompatibilidad de los objetivos actuales
elementos informales de las organizaciones o deseados”.
(poder, grupos, comunicación,…), provoca que
sean usualmente ocultados o negados por 2.2. PENSAMIENTO SOBRE EL CONFLICTO
parte de instancias superiores de la organiza- EN LAS ORGANIZACIONES
ción, por lo que les será de difícil aplicación
los mecanismos estándar de resolución de Podemos observar tres tradiciones de pen-
conflictos como son la mediación, la nego- samiento sobre los conflictos (Ramió, 1999).
ciación o el arbitraje. En este sentido, el con- Estas tradiciones de pensamiento están en-
tenido de lo expuesto a continuación estará troncadas con los razonamientos sobre el
enfocado en el análisis e intervención de este funcionamiento de la organización en general
tipo de conflictos por parte de un profesional y la importancia que conceden a la vertiente
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Capítulo 1
26
Capítulo 1
verse a la luz de las tres metáforas siguientes la organización, es decir, como procesos de
(Ganháo, 1997): La organización como máqui- co-construcción de la propia identidad or-
na, la organización como ser vivo y, por último, ganizacional o de los presupuestos básicos
la organización como cultura-red. compartidos, “que un grupo crea, descubre
y desarrolla en el proceso de aprendizaje de
Desde la metáfora de la máquina, el conflicto cómo lidiar con los problemas de adaptación
resultaría análogo al rozamiento en los engra- externa e interna y que funcionan, al menos
najes de una “máquina perfecta”, por ejemplo lo suficientemente bien, para que sean consi-
un reloj, algo del todo inaceptable para su derados válidos y enseñados a los miembros
buen funcionamiento y que se debería su- como una forma correcta de percibir, pensar y
primir. La organización es perfecta y segura, sentir en relación a esos problemas” (Schein,
son los humanos los que portan las imperfec- 1970). Desde esta visión, los conflictos no de-
ciones, por lo que habrá que estar atento a ben ser suprimidos o minimizados, sino ges-
cualquier conflicto que surja entre ellos para tionados por parte de la organización para
anularlo, siempre en aras del buen funciona- extraer sus beneficios mientras se evitan sus
miento de la organización que es algo diferen- riesgos potenciales.
te a las personas que la componen. En última
instancia los conflictos surgidos en estas or- Actualmente esta metáfora está siendo am-
ganizaciones son desestimados, negados u pliada por la idea de “Red”, por lo que podría-
ocultados, por lo que tendrán un carácter en- mos denominarla como “cultura-red”, como
cubierto y los superiores jerárquicos tenderán decía José Luís Molina (2001), “la metáfora de
a inhibirse, la mayor parte de las ocasiones, las redes es una de las imágenes más sugesti-
o (en caso de que “llegue a mayores”) a casti- vas de nuestro tiempo. La imagen de una ma-
gar a todo el personal es decir, al conflicto en quinaria de relojería o la de un organismo en
sí mismo, sin inmiscuirse en las razones del funcionamiento ya no nos sirven para explicar
mismo. nuestro mundo”. En cambio, las imágenes de
redes de poder o las redes personales, “evo-
Desde el modelo de ser vivo, aceptaríamos can poderosas sugestiones y se acercan más
los conflictos como naturales, difícilmente su- a esa idea de fluidez y de autoorganización
primibles y no del todo negativos, serían algo descentralizada que reconocemos a la natu-
análogo a la superación de una barrera adap- raleza de los fenómenos que queremos expli-
tativa, como una enfermedad. El objetivo, por car”.
lo tanto, no sería el de suprimirlos sino el de
minimizarlos, por ejemplo, curar una herida. En la siguiente tabla se expone, a modo de
resumen, el pensamiento sobre los conflictos
En el modelo de organización como cultura, desde las organizaciones en función de las
aceptaríamos los conflictos no sólo como na- tres metáforas señaladas.
turales, sino como componentes mismos de
27
Capítulo 1
28
Capítulo 1
• Conflicto de Tarea, si se deben a cues- Aunque supone una diferencia útil, dado que
tiones relacionadas con la tarea o con el se suele recomendar la estimulación e intensi-
contenido de la misma. ficación de los conflictos de tarea y prevenir y
mitigar los de relación, Van de Vliert y De Dreu
• Conflicto de Proceso, si surgen por la (2005) describen tres problemas relativos a la
asignación de la tarea en la unidad de dicotomía entre conflicto de relaciones y de
trabajo, por determinar a la persona res- tarea.
ponsable de cada actividad, o por la dis-
tribución de obligaciones y/o recursos. • En primer lugar, es debatible que no exis-
Este tipo de conflicto está muy relaciona- ta conexión entre la tarea y la emoción.
do con el de tareas, la diferencia radica
en que mientras el conflicto de proceso • En segundo lugar, rara vez ocurren por
se produce por los medios, el de tareas separado conflictos puramente de ta-
lo hace por los fines. rea o puramente relacionales (un con-
flicto puede definirse como la experien-
La idea principal que subyace a esta catego- cia tanto de desacuerdo cognitivo tanto
rización es la diferencia entre sentimientos o como de tensión cognitiva).
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Capítulo 1
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Capítulo 1
lizarlo y comprenderlo de una manera holísti- sodios parciales del mismo. Este mismo autor
ca. Así, Pondy (1967) señalaba que concebir el propone un modelo para explicar este proce-
conflicto como un proceso dinámico permite so que contempla cinco etapas mostradas en
superar definiciones estrechas que utilizan el la figura.
término para describir lo que tan sólo son epi-
Desde este modelo se considera que un epi- parámetros estructurales del sistema y de la
sodio conflictivo es tan sólo un eslabón de situación que se confronta (Sebastián, 2010).
una relación y, por lo tanto, puede resultar Este conjunto de elementos son los llamados
una mejora o una de- gradación de la misma elementos latentes, circunstanciales y activos
dependiendo de si el episodio ha sido resuel- (condicionantes, contexto y comportamientos)
to satisfactoriamente, o no, para las diversas del conflicto. En definitiva, los conflictos no
partes. son “simples altercados puntuales”, sino pro-
cesos en curso.
Por tanto, un conflicto tiene una vertiente pro-
cesual y una dinámica. El conflicto es visto Para Van de Vliert y De Dreu (2005), un con-
como un proceso en el que se manifiestan una flicto es una experiencia subjetiva de incom-
serie de eventos (episodios conflictivos) que patibilidad, que no necesariamente tiene una
tienen una secuencia en particular. El conjun- base real objetiva, con “un asunto” con com-
to de eventos incluye experiencias pasadas, ponentes afectivos y cognitivos, que desen-
comportamientos actuales y visiones respec- cadenan reacciones o comportamientos diri-
to del futuro. Todo conflicto surge en unas gidos al otro.
condiciones contextuales dadas por ciertos
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Capítulo 1
• Las que reducen las posibilidades de que Por otro lado, Van de Vliert (Op. Cit.) distingue
la otra parte también llegue a frustrase. entre las conductas espontaneas, ya sean
• Las que reducen las posibilidades de un escalativas o desescalativas, que correspon-
conflicto de relación en el futuro. derían a las no intencionadas y las conductas
• Las que resuelven los actuales conflictos. estratégicas en referencia a las que forman
• Las que reducen o previenen la intensifi- parte de un plan consciente para prevenir o
cación del conflicto actual. estimular el conflicto.
• Mientras que las conductas escalativas
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Capítulo 1
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Capítulo 1
Factores de riesgo
Característica del trabajo
Fuente: Elaboración propia, basado en Cox, T. Work Related Stress. Agencia Europea de la Salud y Seguridad. 2000.
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Capítulo 1
Fuente: Elaboración propia, basado en Cox, T. Work Related Stress. Agencia Europea de la Salud y Seguridad. 2000.
El F-Psico 3.0 del Instituto Nacional de Segu- moderador del estrés, y que el método con-
ridad e Higiene en el Trabajo explora las rela- creta estudiando la posibilidad de contar con
ciones personales y Apoyo social del siguien- apoyo instrumental o ayuda proveniente de
te modo (INSHT, 2011): otras personas del entorno de trabajo ( jefes,
compañeros,…) para poder realizar adecua-
“El factor relaciones y apoyo social se refie- damente el trabajo, y la calidad de tales re-
re a aquellos aspectos de las condiciones de laciones.
trabajo que se derivan de las relaciones que
se establecen entre las personas en el entor- Igualmente, las relaciones entre personas
no de trabajo. Recoge este factor el concep- pueden ser origen, con distinta frecuencia e
to de “apoyo social”, entendido como factor intensidad, de situaciones conflictivas de dis-
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Capítulo 1
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Capítulo 1
Parte 2.
EVALUACIÓN E INTERVENCIÓN (ABC DE
CONFLICTOS)
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Capítulo 1
informe sobre el estrés relacionado con el tra- rigor. Esta articulación de enfoques permite la
bajo: comprensión de un modo más integral del fe-
nómeno en estudio al tiempo que posibilita la
“El principio de la “triangulación” mantiene exploración de coincidencias o desajustes.
que para estar seguros, un potencial riesgo
psicosocial u organizativo debe ser identifica- Para apoyar una estrategia de triangulación
do mediante referencias cruzadas de, al me- en el análisis de un conflicto se ha elaborado
nos, tres tipos distintos de pruebas. El grado una herramienta que permite describir de los
de consenso entre estos puntos de vista di- elementos componentes para su estudio. Se
ferentes proporciona alguna indicación de la trata del ABC de conflictos (Análisis Básico de
fiabilidad de los datos y, dependiendo de las Conflictos) elaborado por Sebastián (2010).
medidas utilizadas, de su validez concurren-
te” (Agencia Europea para la Seguridad y la La Ficha ABC es una lista de referencia a tener
Salud en el Trabajo, 2005). en cuenta cuando se realiza el análisis de una
situación potencial o actual de conflicto. Su in-
En la práctica, dicha estrategia se sostiene en terés radica en guiar el proceso de indagación
el uso combinado y complementario de diver- permitiendo mostrar los criterios descriptivos
sos enfoques cualitativos y cuantitativos de mínimos que pueden servir para esclarecer
cara a mejorar la confiabilidad de los hallaz- los condicionantes de una situación determi-
gos. Los datos observados se analizan sepa- nada de cara a una intervención.
radamente, y luego se comparan, como una
manera de validar los hechos.
38
Capítulo 1
3.2. ELEMENTOS DEL ABC DE CONFLICTOS: ferenciar entre los objetivos y las actividades
que se realizan para su logro. Deustch (1949,
3.2.1. TENDENCIA HACIA LA TAREA O HACIA 1973) indica la posibilidad de que exista una in-
LA RELACIÓN compatibilidad entre las actividades y/o entre
los objetivos de varias unidades sociales, ya
Para su diferenciación se puede utilizar la es- sean estas personas, grupos o departamen-
cala de Jehn (1995) para el conflicto de tarea, tos. En función de los elementos incompati-
y la escala de Cox (1998) para el conflicto re- bles, puede diferenciarse entre interdepen-
lacional. Ambas escalas han sido utilizadas en dencia positiva y negativa (Deutch, Op. Cit.).
castellano (véase: Guerra, Martínez, Mundua-
te y Medina, 2005; Medina, Munduate, Dora- La Interdependencia positiva entre las metas
do, Martinez y Guerra, 2005). supone que, a pesar de existir una exclusión
entre las actividades de los actores, existe
3.2.2. INTERDEPENDENCIA DE OBJETIVOS una relación necesaria entre sus metas, de
modo que es necesaria la cooperación para
En una acción orientada a metas podemos di- alcanzar los objetivos. Por ejemplo, dos médi-
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Capítulo 1
Existencia de normas claras de tratar los conflictos: Formas inadecuadas de tratamiento de los conflictos:
• Centrarse en los problemas y no en las personas. • Romper la comunicación o anclarse: atacando a los interlo-
• Comprender las reacciones emocionales como un elemento natu- cutores, interrumpiendo o centrándose en características
ral en los conflictos. personales.
• Presentar los argumentos en primera persona. • Culpabilizar, enjuiciar o presuponer.
• Favorecer las discusiones abiertas sobre las diferencias. • Ignorar los intereses de la otra parte.
• Determinar puntos de acuerdo y realizar seguimientos. • La imposición de acuerdos.
• Dar por sentado que la comunicación es fácil.
Tratamiento eficaz de los conflictos: •
• Escucha activa. Inconsistencia e inflexibilidad en el desarrollo de las tareas:
• Establecer metas claras. • Tensión por la carencia o por la inadecuación de los recur-
• Determinar los problemas, los intereses, las posiciones y las reac- sos existentes.
ciones personales. • Ausencia de transparencia en los flujos de información para
• Mantener una actitud abierta para encontrar soluciones creativas. la realización de las tareas, favoreciendo los malos entendi-
dos frecuentes durante el desarrollo del trabajo,
Establecer medidas organizativas para evitar la generación de conflic- • Imprevisibilidad respecto a gráficos y funciones.
tos: • Conflicto entre valores y acciones.
• Resalte la existencia de objetivos y metas comunes.
• Fomente la existencia de indicadores de desempeño grupal. Problemas de supervisión y liderazgo:
• Establecer y aplicar protocolos sencillos de Conflictos, Acoso • Exceso de “personalismo” en la gestión.
Laboral y Violencia Externa. • Políticas discrecionales de premios y castigos.
• Revisión constante de las tareas y funciones de los puestos de • Utilizar la amenaza de sanciones como el único medio de
trabajo. lograr que se realicen las tareas.
• Realizar reuniones periódicas con los trabajadores. • Agravios entre trabajadores.
• Elaborar periódicamente informes sobre logros, necesidades, • Trabajo en equipo sin normas o reglas del juego.
planificaciones, dificultades, etc. • Competitividad por el mantenimiento del empleo
• Realizar reuniones periódicas para comunicar iniciativas y pro- • Dificultad para entender la razón de las decisiones toma-
puestas de mejora. das.
• Contar con la participación y sugerencias de los trabajadores. • No razonar las decisiones, utilizar como único argumento el
• Controlar el desarrollo e implementación de políticas y procedi- nivel en la jerarquía.
mientos.
• Realice programas de acogida para los nuevos miembros (evitan
malentendidos).
• Proporcione espacios de encuentro adecuados para facilitar un
acercamiento afectivo entre los miembros de los diferentes equi-
pos y secciones.
47
CAPÍTULO
SISTEMA TRIANGULAR DE
ANÁLISIS DEL ACOSO LABORAL
2
Capítulo 2
Parte 1.
CONCEPTOS Y DEFINICIONES
50
Capítulo 2
51
Capítulo 2
y del Trabajo en la Universidad de Bergen, nes, no excluyentes entre sí, podemos des-
Noruega, el acoso laboral es un conflicto so- tacar las que contemplan al acoso como una
cial no resuelto que ha seguido un proceso de situación que le ocurre a alguien; las que lo
escalada. definen como algo que le ocurre a la organi-
zación; y las que lo configuran como un fenó-
En esta línea, encontramos hoy día concepcio- meno relacional.
nes de consenso como la de Einarsen, Hoel,
Zapf y Cooper (2003): Esta diversidad conceptual del fenómeno del
acoso dificulta su estudio y ha constituido un
“Acoso, ofensa, exclusión social de alguien o serio problema para su análisis. Ejemplo de
afectar negativamente a las tareas de traba- ello es que podemos encontrar diferentes re-
jo de alguien. Para etiquetar de acoso laboral sultados estadísticos sobre su frecuencia en
(mobbing o bullying) y ser aplicado a una si- función de la metodología empleada (ver Ba-
tuación particular, es una interacción o un pro- rón, Muñoz, Martínez y Munduate, 2006):
ceso que tiene que ocurrir repetidamente y
regularmente (ej. semanalmente) y durante un Si las personas contestan a un cuestionario
periodo de tiempo (ej. aproximadamente seis de cuarenta ítems relacionados con conduc-
meses). El acoso laboral es un proceso de es- tas de acoso, y puntúa, al menos uno de ellos
calamiento en el cual la persona se enfrenta de manera elevada, indicando que padece
desde una posición inferior y resulta ser obje- agresiones al menos una vez a la semana y
tivo de actos sociales negativos sistemática- durante al menos seis meses, la frecuencia de
mente. Un conflicto no puede llamarse acoso las personas que admiten estar padeciendo
laboral si es un incidente aislado o si las dos acoso oscila entre el 3% y el 7%.
partes en conflicto tienen aproximadamente
el mismo poder.” Si se pregunta directamente “¿has padecido
acoso laboral en los últimos seis meses?”, la in-
2.2. ¿DIFERENTES REALIDADES O DIFE- cidencia aumenta entre el 10 y el 25%. Desde
RENTES ENFOQUES? este enfoque más del 20% de los empleados
son expuestos ocasionalmente a acciones so-
Resulta innegable que el fenómeno del aco- cialmente negativas como la humillación, sin
so moral posee actualmente una importante que esto implique acoso laboral (Hoel y Coo-
relevancia social, de modo que no resulta ex- per, 2000).
traño encontrar en la literatura especializada
numerosas definiciones del mismo desde di- Si se proporciona una definición de mobbing
ferentes ámbitos disciplinares ( jurídico, mé- y se pregunta a la persona si se considera
dico, psicológico). Sin embargo, no existe un víctima del acoso laboral, se obtiene una inci-
consenso social y científico de lo que abarca dencia de entre el 1% y el 4%.
este fenómeno. De las diferentes concepcio-
52
Capítulo 2
Además de esta diversidad estadística y con- mente caracterizado por actos físicamente
ceptual, existe también una multiplicidad de agresivos. Por el contrario, la violencia física
términos con los que la comunidad científica raramente aparece en el síndrome laboral
hace referencia a este fenómeno (o a fenó- adulto. Más bien, el Mobbing adulto se carac-
menos más o menos relacionados). Según teriza por conductas mucho más sofisticadas,
Vartia (2003), algunos de estos términos son: cínicas, como por ejemplo: Aislamiento social
Harassment, Scapegoating, Mobbing, Psycho- de la víctima.
logical terror, Workplace trauma, Work harass-
ment, Bullying, Abusive behaviour, Emotional Propongo mantener el término “bullying” para
abuse. las agresiones sociales entre niños y adoles-
centes en la escuela, y reservar el término
Esta diversidad terminológica puede llegar a “Mobbing” para la conducta adulta”.
plantear la duda de si nos referimos con dife-
rentes términos a distintas realidades relacio- En España se ha seguido generalmente la de-
nadas, o a una misma realidad desde diversos cisión de Leymann sobre el empleo del térmi-
enfoques. En nuestra opinión, entendemos no mobbing, no obstante, en la literatura per-
que se trata de un mismo fenómeno visto des- tinente podemos encontrar también una gran
de líneas de trabajo distintas, cada una de las variedad terminológica (ver López y Vázquez,
cuales resalta algún aspecto diferencial a es- 2007). Así tenemos, entre otros, los términos
tudiar. de: Mobbing, acoso moral, acoso psicológico,
hostigamiento psicológico, acoso laboral, vio-
Existe, no obstante una importante diferencia- lencia psicológica, acoso institucional, maltra-
ción conceptual entre los términos Bullying y to psicológico, violencia moral, acoso social,
Mobbing realizada por Leyman (1996). terrorismo psicológico, psicoterror laboral,
etc.
“Deliberadamente no utilicé el término inglés
“bullying”, usado por los investigadores ingle- Actualmente, el interés sobre situaciones de
ses y australianos (en USA, también se usa el acoso han traspasado los límites de la empre-
término “Mobbing”), ya que la mayoría de las sa para adentrarse también en otros contex-
veces esta destructiva (in)comunicación no tie- tos: acoso sexual, acoso en la pareja, en la
ne claramente las características de violencia familia, en el colegio, etc. Aún teniendo cier-
física del “bullying”; sino que muy frecuente- tas similitudes, lo más acertado actualmente
mente se realiza de un modo muy cuidadoso, es tratarlos desde un punto de vista técnico
sofisticado (que no deja pruebas tangibles); lo como fenómenos diferentes (una visión de las
que no disminuye, al contrario, multiplica, su similitudes y las diferencias puede verse en
efecto estigmatizador. Pérez, Nogareda, Martín, y Sancho 2001). El
SATA pretende aportar un marco de compren-
De hecho, el “bullying” escolar está fuerte- sión del acoso laboral, y aunque se puedan
53
Capítulo 2
transferir algunas ideas desde este marco a diciones patógenas. En otras palabras, la dis-
otros fenómenos relacionados, este no es el tinción entre “conflicto” y “psicoterror” no se
objeto de la herramienta que presentamos. centra en qué se hace, o cómo se hace, sino
en la frecuencia y duración de lo que se hace.
En esta obra se empleará el término “acoso Este planteamiento subraya el hecho de que
laboral” para describir este conjunto de com- la investigación básica desarrollada en Suecia
portamientos al que Leymann hace referencia (…) se apoya en conceptos de investigación
con el vocablo “mobbing”, dado que aúna la fisiológicos. Básicamente, se trata de una lí-
traducción del concepto con el contexto del nea de investigación que pone el énfasis en
fenómeno. No emplearemos la expresión el estrés somático o psicológico: ¿A partir de
“acoso en el lugar de trabajo” dado que eng- qué intensidad, las actividades de psicote-
lobaría también al “acoso sexual” que puede rror producen enfermedades psicológicas o
darse en el lugar de trabajo. psicosomáticas? La investigación se ha con-
centrado primordialmente en el estrés físico o
2.3. HACIA UNA DEFINICIÓN OPERATIVA psicológico”.
Según Leymann (1996), “el Psicoterror o Mo- En nuestro país, podemos encontrar un in-
bbing en la vida laboral conlleva una comu- tento de definición oficial de mobbing en la
nicación hostil y desprovista de ética que es Proposición de Ley 122/000157: Derecho a no
administrada de forma sistemática por uno o sufrir acoso moral en el trabajo, de 23 de No-
unos pocos individuos, principalmente contra viembre de 2001, donde se define al fenóme-
un único individuo, quien, a consecuencia de no como “un conjunto de comportamientos
ello, es arrojado a una situación de soledad o actitudes de una o varias personas contra
e indefensión prolongada, a base de accio- otras en el ámbito laboral, normalmente si-
nes de hostigamiento frecuentes y persisten- tuadas en una relación jerárquica asimétrica,
tes (definición estadística: al menos una vez dirigidas a causar un profundo malestar psi-
por semana) y a lo largo de un prolongado cológico y personal en el trabajador afecta-
periodo (definición estadística: al menos du- do, degradando sus condiciones de trabajo”.
rante seis meses). Como consecuencia de la Dicha proposición conceptúa al acoso como
alta frecuencia y larga duración de estas con- riesgo laboral, enmarcándolo expresamente
ductas hostiles, tal maltrato se traduce en un en el sistema preventivo: “el acoso moral se
enorme suplicio psicológico, psicosomático y considera un riesgo laboral, que debe ser evi-
social. tado por el empresario y cuyo incumplimien-
to debe ser considerado una infracción muy
La definición excluye los conflictos tempora- grave”.
les y focaliza un punto en el tiempo donde la
situación psicológica comienza a traducirse, Posteriormente, el Acuerdo Marco Europeo
psiquiátrica o psicosomáticamente, en con- sobre el acoso y la violencia en el trabajo (fir-
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Capítulo 2
mado el 26 de abril de 2007 por la CES, BUSI- • Las conductas provocan en las víctimas
NESSEUROPE, la UEAPME y el CEEP) estable- consecuencias diferentes, según la fase
ce la siguiente descripción de consenso: del proceso en que se encuentre.
• El acosador tiene una intencionalidad de
“El acoso y la violencia son la expresión de carácter instrumental (para alcanzar un
comportamientos inaceptables adoptados objetivo) o de carácter finalista (para des-
por una o más personas, y pueden tomar truir a la víctima).
muy diversas formas, algunas más fácilmente
identificables que otras. La exposición de las Hay desequilibrio de poder entre las partes
personas al acoso y a la violencia puede de- enfrentadas, o al menos la víctima no dispone
pender del entorno de trabajo. de los recursos necesarios para hacer frente.
Desde un punto de vista jurídico y siguien-
Se da acoso cuando se maltrata a uno o más do esta línea de operativización debemos
trabajadores o directivos varias veces y deli- destacar por su utilidad la conceptualización
beradamente, se les amenaza o se les humi- del acoso laboral como “presión laboral ten-
lla en situaciones vinculadas con el trabajo. denciosa, la presión laboral tendente a la au-
toeliminación de un trabajador mediante su
Se habla de violencia cuando se produce la denigración” de Ramón Gimeno (2005). Esta
agresión de uno o más trabajadores o directi- conceptualización se analiza en sus compo-
vos en situaciones vinculadas con el trabajo. nentes estructurales del siguiente modo:
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Capítulo 2
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Capítulo 2
2.4. DEFINICIÓN DE ACOSO LABORAL sen, Hoel, Zapf y Cooper en 2003. Sin más
preámbulos, la definición que se propone es:
Proponemos una definición del fenómeno que
nos aproxime a su comprensión, contribuyen- “Entendemos por Acoso Laboral la exposi-
do a su diferenciación de otros fenómenos ción sistemática y/o prolongada en el tiem-
organizacionales y permita trazar límites entre po a un conjunto articulado de actos socia-
“lo que es” y “lo que no es” una situación de les negativos, percibidos como dañinos y no
Acoso Laboral. deseados, dirigidos hacia una o más perso-
nas, por parte de otra/s que actúan frente a
Existen en nuestro país dos definiciones que aquélla/s desde una posición de poder (no
consideramos más relevantes. Una es la que necesariamente jerárquico), con el propósi-
expone la Nota Técnica de Prevención Nº 854 to o el efecto de crear un entorno hostil o
del INSHT (Acoso psicológico en el trabajo: humillante que perturbe la vida laboral de
definición), de Fidalgo, Gallego, Ferrer, Noga- la persona afectada. Es un proceso de esca-
reda, Pérez y García (2010) y la otra es la que lamiento (intensificación y expansión) en el
aparece en la “Resolución de 5 de mayo de curso del cual la persona afectada termina
2011, de la Secretaría de Estado para la Fun- en una posición inferior, constituyéndose en
ción Pública, por la que se aprueba y publica destinatario sistemático de actos sociales
el Acuerdo de 6 de abril de 2011 de la Mesa negativos. Dichas acciones se dan en el mar-
General de Negociación de la Administración co de una relación de trabajo, pero no res-
General del Estado sobre el Protocolo de ac- ponde a las necesidades de organización del
tuación frente al acoso laboral en la Adminis- mismo y suponen un riesgo importante para
tración General del Estado”. la salud.”
Ambas definiciones tienen un propósito claro, Esta definición extensa intenta dar cuenta
en el primer caso es el definir el Riesgo de del fenómeno de Acoso Laboral en cuanto a
Acoso Laboral de un modo operativo y acce- Riesgo Laboral y como fenómeno social en la
sible para el Técnico de Prevención, en el se- intersección organización-individuo, por ello
gundo caso es servir para articular un protoco- requiere de algunas apreciaciones:
lo de actuación en el seno de organizaciones
(en el ámbito de la Administración General del • A) Actualmente conocemos que el es-
Estado y de los organismos públicos vincula- tereotipo de la “intimidación verbal” ha
dos o dependientes de ella) ante situaciones dado paso a “conductas más sutiles” o
de acoso laboral. conductas que podemos tildar de con-
traproducentes o antisociales (ver por
Utilizaremos diferentes elementos de estas ejemplo Dick y Rayner, 2004). Según Li-
definiciones y se complementará con algún dia Moroni (2007), hasta los años 90 del
apartado de la definición que realizaron Einar- siglo pasado, la literatura organizacional
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Capítulo 2
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Capítulo 2
lo que respecta a los valores, la cultura y sen, Hoel, Zapf y Cooper, 2003) en el que
el estilo de gestión (González-Trijueque la Inferioridad, referida a la asimetría de
y Delgado, 2008). Desde esta perspecti- poder, es un elemento clave para enten-
va, el Acoso Laboral es entendido como der el proceso de acoso. Esta perspec-
consecuencia de determinados factores tiva enmarca el acoso como fenómeno
organizacionales, siendo las variables social y procesual, en la línea de enten-
individuales como la estructura de per- derlo como un conflicto no resuelto que
sonalidad, las habilidades sociales, las sigue un curso de escalada. Enmarcar el
estrategias de afrontamiento, etc. las acoso como proceso, distanciándonos
moduladoras de las intensidad de la per- de su imagen cristalizada, nos abre el
cepción del síndrome y/o de las conse- camino para hacernos preguntas sobre
cuencias originadas (González-Trijueque la organización: ¿Qué intenta resolver el
y Delgado, 2008). La percepción será acoso? ¿Por qué nadie dice nada? ¿Cómo
una variable relevante para entender la se permiten estas acciones? ¿Ya se han
afectación de personas en situaciones dado circunstancias similares? ¿Cómo es
donde se realicen actos sociales nega- la cultura preventiva?...
tivos “sutiles”, de modo que además de
su valor en cuanto “ataque” estará tam- Toda intervención sobre las fuentes del
bién la percepción de los mismos como problema necesita de la indagación del
constitutivos de un patrón, es decir, actos proceso. Las acciones no ocurren de im-
portadores de sentido. proviso, por ello debemos comprender el
curso de las mismas. De un modo análo-
• D) La expresión a “en el marco de una go, la investigación del “iter criminis”, el
relación de trabajo” debe entenderse camino del delito, permite al criminalista
como una referencia al contexto orga- diferenciar y entender las fases del pro-
nizativo donde se produce el acoso, es ceso de un delito y asignar responsabili-
decir, alude en exclusiva a una vincula- dades en cada una de ellas.
ción laboral y no a un vínculo espacial o
legal. De este modo, los actores de un Existen en la actualidad diversos modelos de
proceso de acoso pueden provenir de escalamiento de los conflictos. Se suele re-
diferentes empresas pero trabajar en el currir al modelo de Glasl (1982) para explicar
mismo espacio de trabajo y con la mis- cómo evoluciona un conflicto hasta llegar al
ma organización del mismo. Así mismo, mobbing (Por ejemplo: Zapf y Gross, 2001). El
diferentes actos negativos pueden llegar modelo de escalamiento de Glasl diferencia
a realizarse fuera del espacio de trabajo tres fases y nueve etapas dentro del proceso
y de la organización. de desarrollo de un conflicto (ver Meseguer,
2005):
• E) Es un proceso de escalamiento (Einar-
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Capítulo 2
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Capítulo 2
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Capítulo 2
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Capítulo 2
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Capítulo 2
En otras circunstancias, sin que exista nece- El abuso de poder no es igual a acoso, no
sariamente un jefe con estas características, obstante, organizaciones que permiten estas
pueden darse escenarios en los que un su- acciones, donde se gestiona por amenazas
perior jerárquico ejercite de forma abusiva su o donde el estereotipo del “psicópata corpo-
poder de dirección y organización. Nos en- rativo” se ve con buenos ojos y tiene un fácil
contramos, igual que ante un jefe “psicópata encaje suponen un magnifico caldo de cultivo
corporativo”, ante situaciones de abuso de para procesos de acoso y el resto de trastor-
poder. nos psicosociales.
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Capítulo 2
66
Capítulo 2
servir para entender el curso de ciertos acon- El proceso de evaluación de la fatiga laboral
tecimientos y como voz de alarma ante algu- deberá seguir la estrategia general de trian-
nas situaciones, pero debemos tener presen- gulación metodológica y contar con técnicas
te que constituyen uno de los factores que, como la entrevista, los grupos de discusión
con mayor frecuencia, contaminan los juicios o los cuestionarios. Entre estos últimos con-
de las personas en su comportamiento social tamos con instrumentos como el SOFI-sm de
cotidiano. A la hora de evaluar, cada caso con- Sebastián, Idoate, Llano y Almanzor (2008).
creto deberá ser juzgado y analizado tenien- Así mismo, se puede explorar más sobre la
do presente su contexto histórico, social y cul- comprensión y evaluación de este fenómeno
tural, alejándonos de la tentación de deformar mediante el estudio de obras como la de Gon-
la realidad para que termine encajando den- zález, Moreno y Garrosa (2005).
tro de un estereotipo. El único modo de eva-
luar y transformar las situaciones de trabajo es Conflicto Interpersonal
comprender cada fenómeno en su vertiente
procesual individual y única. Un conflicto hace referencia a un proceso de
oposición o desacuerdo percibido entre dos
Fatiga Laboral o más partes con similar capacidad de reso-
lución, pudiendo generar ineficiencia para la
Podemos entender a la fatiga como una sen- organización y daños para la salud de las per-
sación de claudicación y disminución de las sonas implicadas. Es siempre una experiencia
capacidades para hacer frente a una exigen- subjetiva con o sin base objetiva y surge cuan-
cia, como consecuencia, generalmente, de un do las actividades a desarrollar para la conse-
esfuerzo físico o psíquico. De este modo, en cución de objetivos se obstaculizan entre sí.
un ambiente laboral la fatiga supondrá, por Desde la teoría del conflicto del matemático y
un lado, una disminución del rendimiento físi- sociólogo noruego Johan Galtung (calderón,
co-psíquico, y por otro lado, un sentimiento de 2009), las señas de identidad de un conflicto
cansancio o agotamiento con manifestacio- son:
nes físicas asociadas al desempeño manteni- • El conflicto es crisis y oportunidad.
do de una actividad (Sebastián, Idoate, Llano • El conflicto es un hecho natural, estructu-
y Almanzor, 2008). ral y permanente en el ser humano.
• El conflicto es una situación de objetivos
La fatiga puede conllevar aumento de la irrita- incompatibles.
bilidad y de la agresividad, que pueden estar • Los conflictos no se solucionan, se trans-
presentes en personas en situación de acoso forman.
laboral. En cualquier caso, la fatiga laboral se • El conflicto implica una experiencia vital
entenderá siempre como una consecuencia holística.
del esfuerzo. • El conflicto como dimensión estructural
de la relación.
67
Capítulo 2
• El conflicto como una forma de relación porqué existir intencionalidad sexual por par-
de poderes. te de la persona agresora. En ambos casos
se produce una degradación del ambiente
Un conflicto interpersonal no es un proceso de de trabajo, con repercusiones negativas tanto
Acoso Laboral, dado que su definición no im- sobre las personas trabajadoras como sobre
plica la existencia de sistematicidad o reitera- la propia organización (Fundación Mujeres,
ción de actos sociales negativos, no obstante, 2010). El acoso por razón de sexo puede con-
si no es gestionado, se mantiene en el tiempo, templarse desde el ámbito del acoso laboral,
se dan diferencias de poder y sufre un proce- si se tratase de un proceso, o desde el ámbito
so de escalada puede llegar a producir Aco- de las agresiones laborales (violencia interna)
so Laboral. De forma simple podríamos decir si se tratase de actos aislados.
que un conflicto no tiene porqué ser acoso,
pero todo acoso puede entenderse como un Para Eva Ventín (Op. Cit.), el objetivo del aco-
conflicto con algunas características concre- so sexual es la obtención de favores sexuales
tas. El proceso de evaluación de un Conflicto de una persona, cuando quien lo realiza está
Interpersonal deberá seguir la estrategia ge- en una posición de superioridad respecto de
neral de triangulación metodológica y contar quien lo sufre. El acoso sexual estará susten-
con técnicas como la entrevista, los grupos de tado, por lo tanto, en una motivación distinta
discusión o los cuestionarios. En el primer ca- de la que se encuentra en el acoso laboral.
pítulo de este libro se expone el instrumento No obstante, en muchas ocasiones, cuando la
denominado “Análisis Básico de Conflictos” víctima no accede estos requerimientos se le
para ayudar en el análisis de los mismos. Así castiga y el acoso sexual puede derivar en un
mismo, se puede explorar más sobre la com- proceso de acoso. Para el proceso de evalua-
prensión y evaluación de este fenómeno me- ción-intervención en este tipo de fenómenos
diante la lectura de esta parte del libro. se debe tener en cuenta las claves que expo-
ne la Fundación Mujeres (2010):
Acoso Sexual y Acoso por razón de sexo
• El acoso sexual y el acoso por razón de
Podemos entender como acoso sexual toda sexo son situaciones sobre las que se
conducta o comentario reiterado con con- debe actuar tanto desde la perspectiva
notación sexual amparado en el poder y no de la igualdad entre mujeres y hombres
consentido por quién la recibe. Se debe dife- como desde la de la salud laboral.
renciar entre el acoso sexual y el acoso por • El tratamiento de las situaciones de aco-
razón de sexo. La diferencia entre ambos radi- so desde la salud laboral, será sin perjui-
ca en que, mientras el primero se circunscribe cio de las responsabilidades penal, labo-
al ámbito de lo sexual, el acoso por razón de ral y civil que se deriven.
sexo supone un tipo de situaciones laborales • La forma más eficaz de generar un en-
discriminatorias mucho más amplias, sin tener torno laboral libre de acoso y respetuo-
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Capítulo 2
69
Capítulo 2
esté dirigida a ocasionar un daño sobre un categorías: Acciones sobre las personas, so-
trabajador. La violencia (física o verbal), propia bre las tareas, de aislamiento y verbales.
de estas agresiones, podrá tener un carácter
interno o externo dependiendo de la perte- • Actos sobre las tareas: Supervisión ex-
nencia o no del agresor a la organización. En cesiva, ocultar información, no asignar
el caso de la violencia externa se incumplirá el tareas, asignar tareas no realistas, impo-
requisito de vinculación laboral que da cohe- sibles de cumplir, sin significado, innece-
rencia a un proceso de acoso. sarias, degradantes, repetitivas, etc.
• Actos sobre la persona: criticar persis-
Puede leerse más sobre este fenómeno en el tentemente, humillar públicamente, ex-
último capítulo de este libro donde se presen- pandir rumores maliciosos, realizar co-
ta el instrumento Meta-V para la evaluación y mentarios despectivos, críticas hirientes,
la prevención de este tipo de sucesos. En el burlas, subestimaciones, etc.
caso de un suceso de violencia interna se de- • Actos de aislamiento: ignorar, aislar so-
berá estar atento a la posibilidad de que res- cialmente impidiendo sus relaciones
ponda a: personales con otros compañeros de
trabajo, con el exterior, con clientes, no
• Un altercado puntual: No entra dentro dirigirle la palabra, etc.
del concepto de proceso de acoso. • Actos verbales: gritar, insultar, abusar
• Forme parte de un proceso de “conflicto, verbalmente, amenazar, etc.
acoso, intimidación y agresión” en algu-
na de sus combinaciones. En este caso Los actos sociales negativos estarán formados
se debe proceder como si fuese un pro- tanto por acciones como por omisiones. Al ha-
ceso de acoso y, paralelamente, aplicar blar de acciones generalizamos su significado
la sanción, castigo o reparación que co- e incluimos en él las “acciones por omisión”.
rresponda. Los actos concretos en un proceso de Acoso
Laboral, deberán constituir eslabones del pro-
2.6. QUÉ ES Y QUÉ NO ES ACOSO LABO- ceso general, por lo que no tendrán la consi-
RAL deración de actos de acoso aquellas acciones
que sean realizadas de forma puntual, no en-
Para que un proceso pueda ser calificado de cadenadas en el tiempo. En función de lo an-
Acoso Laboral, se requerirá que se cumplan terior, no tendrán la consideración de Acoso
todas las condiciones que se han especifica- Laboral elementos aislados como los que se
do en la definición. En su trabajo de explora- relacionan a continuación. No obstante, algu-
ción del constructo de Acoso Laboral desde nos de los siguientes elementos pueden ge-
un enfoque basado en la evidencia, Gavin nerar daño bajo determinadas circunstancias
Dick y Charlotte Rayner (Op. Cit.) proponen y requerirán de intervención psicosocial en el
agrupar las acciones en las siguientes cuatro seno de la empresa.
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Capítulo 2
NO ES ACOSO LABORAL
71
Capítulo 2
entre las partes implicadas. Un elemen- Una vez realizada esta primera aclaración con-
to clave en el mobbing es la incapacidad ceptual, existen tres figuras que se solapan
para defenderse del acosador. Así, si las parcialmente con la idea del Acoso Laboral y
partes se encuentran en condiciones simi- que pasamos a describir. Se trata del acoso
lares para defenderse, podremos hablar como conflicto escalado, el papel de las agre-
de una situación de conflicto grave, pero siones dentro del marco del acoso laboral y la
no de mobbing. Por tanto, el acoso laboral figura de los actos sociales negativos.
implica la relación de un actor, que es el
instigador y de un receptor, que no puede 3.1. CONFLICTO ESCALADO
responder a ese proceso instigador, o pue-
de hacerlo en un sentido limitado, que no La noción de conflicto escalado es afín al con-
le protege de las conductas del acosador. cepto de proceso de acoso. El escalamiento
de conflictos se caracteriza por el empleo, ac-
b) Es una forma característica de estrés la- tual o potencial, de violencia colectiva (agre-
boral. Su incidencia no se debe únicamen- siones físicas o psicológicas) utilizada como
te a características del trabajo o de la or- instrumento por personas que se identifican
ganización, sino que tiene su origen en las como parte de un grupo —ya sea transitorio
relaciones interpersonales. o con una identidad más permanente— con-
tra un individuo o conjunto de individuos, para
c) Se enmarca en el ámbito de la gestión lograr sus fines (adaptado de Krug, Dahlberg,
de prevención de riesgos psicosociales. Se Mercy, Zwi y Lozano, 2003).
diferencia de la violencia física y el acoso
sexual. De igual modo, si bien el concepto de acoso
laboral incluye conductas como humillacio-
d) No es una manifestación únicamente de nes, no ofrecer tareas a realizar, aislamiento
relaciones interpersonales. Se desarrolla social, amenazas verbales, maltrato físico, di-
a partir de un conjunto de características fundir rumores o hacer chistes de la vida pri-
de la organización del trabajo y de los cri- vada (Zapf y Leymann,1996), parece evidente
terios que se den en cuanto a política de que “las acciones intimidatorias suelen man-
recursos humanos. A pesar de que en nu- tener un orden ascendente de daño, pudien-
merosas organizaciones existen pautas do comenzar con un simple mote para ir pa-
de prevención y de acción contra el acoso sando lentamente a otros actos más graves
psicológico en el trabajo, la filosofía y los como reírse de la persona, meterse con ella,
diversos elementos que componen las po- burlarse, para llegar después al aislamiento, al
líticas de recursos humanos pueden crear rechazo, al insulto, a la agresión física… Esta
un entorno en el que se permita su perma- escalada va acrecentando la sensación de in-
nencia e incluso su desarrollo, aunque sea defensión de la víctima”. (Mansilla Izquierdo,
de manera indirecta. 2009).
72
Capítulo 2
73
Capítulo 2
demos observar los siguientes factores que gos mudos de las situaciones de acoso.
facilitan las conductas de ataque:
Desde la moderna neuroética parecen existir
• Desindividuación (anonimato destructivo evidencias que demuestran una dicotomía de
del agresor): Cuando el agresor se siente los comportamientos agresivos entre los cog-
anónimo, se suspende la responsabili- nitivos y los afectivos.
dad social y la autoevaluación.
Así, Joshua Greene y Jonathan Cohen (2007,
• Dehumanización (desconexión moral): 2009) investigaron mediante fMRI (Resonan-
Aparece cuando un ser humano conside- cia Magnética Funcional) las respuestas hu-
ra que se debe excluir a otro ser huma- manas a dilemas morales que implican la vida
no de la categoría moral de ser persona y la muerte de otros individuos. Concretamen-
(desaparece la moralidad que regiría en te, se sometió a un grupo de voluntarios al co-
la relaciones con sus congéneres). nocido como dilema del tranvía:
74
Capítulo 2
acabando con su vida para salvar otras cinco. bles de cambios en la conducta (cómo son
¿Qué debe hacer el sujeto? evaluadas las situaciones, cómo son aborda-
das, etc.). En resumen, se tratarían de un con-
La mayor parte de la gente que en el primer junto de estresores sociales extremos o des-
caso aprobaba el sacrificio de uno a favor de encadenantes que darían lugar a un síndrome
los otros cinco no admite lanzar al “hombre social extremo.
obeso” a la vía.
Desde la teoría del conflicto: El acoso laboral
Al estudiar el cerebro de los voluntarios que se refiere a una clase especial de conflicto en
se sometieron al estudio, Greene y Cohen ob- el trabajo, de larga duración, con frecuentes
servaron que, en el primer supuesto, se activa acciones de acoso que sistemáticamente son
la corteza prefrontal dorsolateral, una región dirigidas hacia la persona objetivo, y de na-
implicada en el autocontrol y la deliberación. turaleza escalada, es decir, que evoluciona a
En el segundo, están mucho más activos los través de diversas fases cuya escala o magni-
centros emocionales del cerebro. tud tiende a aumentar a lo largo del proceso
(Vartia, 2001).
Según los investigadores, en el primer caso
se hace un análisis utilitarista del problema Respecto a la teoría del estrés, debemos tener
(salvar el mayor número posible de vidas) presente que el enfoque fisiológico del estrés,
mientras que, en el segundo, el hecho de te- conceptualizándolo como una característica
ner que matar “activamente a una persona” aversiva o nociva del entorno de trabajo, ha
condiciona la reacción. Para cada caso Gree- sido superado en evidencia científica por el
ne y Cohen infieren dos procesos neuropsico- enfoque psicológico, que entiende el estrés
logicos distintos. laboral como la interacción dinámica entre la
persona y su entorno de trabajo (Cox, Griffi-
3.3. ACTOS SOCIALES NEGATIVOS ths y Rial-González, 2000). Así, acciones me-
nores, percibidas como amenazantes pueden
El acoso laboral puede verse desde dos con- ejercer un efecto devastador sobre la persona
cepciones diferentes aunque no contrapues- afectada en función del tiempo de exposición,
tas. es decir, para valorar los efectos del acoso la-
boral se debe tener en cuenta la conjunción
Desde la teoría del estrés: Puede conside- de la intensidad de las acciones, la percep-
rarse un tipo grave de estresor social en el ción de las mismas y el tiempo de exposición.
trabajo, una forma extrema de estrés laboral
(Zapf, Knorz, y Kulla 1996) en esta línea, para Estas dos conceptualizaciones tienen reper-
Leymann, el estrés es una reacción (biológica) cusiones a la hora de conformar las acciones
que produce efectos psicológicos, somáticos que son propias del acoso laboral. Por un
o psicosomáticos que pueden ser responsa- lado hablaremos de agresiones (ataques) y
75
Capítulo 2
por otro hablaremos de acciones sociales ne- da, asignar tareas degradantes, asignar tareas
gativas. Por ejemplo, un insulto en forma de sin sentido, tratar a una persona como si no
grito puede constituir un ataque que provo- existiera, pueden entenderse como de estilo
que unos efectos por sí sólo, no obstante, la indirecto.
negación reiterada del saludo a una persona
puede constituir un estresor social mantenido En función de lo anterior, para algunos auto-
en el tiempo que, a pesar de no entrañar do- res (Carreras y otros, 2002) el acoso laboral
sis elevadas de violencia, puede conllevar el puede ser directo, con agresiones de tipo
minamiento de una persona. intimidatorio, que a su vez pueden incluir un
daño físico o verbal; o bien indirecto, como el
De este modo, conductas del tipo: Gritar aislamiento y la exclusión social. No obstante,
o maldecir en voz alta a alguien, intimidar, es importante aclarar que la presencia de uno
amenazar o insultar, pueden ser catalogadas está condicionada por la presencia del otro,
como de ataque directo, mientras que com- por lo que deben considerarse como partes
portamientos como: Rechazar toda comunica- de un mismo proceso.
ción, lanzar rumores, burlarse de la vida priva-
76
Capítulo 2
QUÉ Algo que sucede a alguien Algo que sucede a una organización
CÓMO Ataques, agresiones Actos socialmente negativos
CUÁNTO 6 meses, 1 vez semana Relativo al binomio intensidad/duración
(punto de corte) (tiempo de exposición – intencionalidad
percibida)
CUÁNDO Sucesos encadenados Proceso: conflicto relacional escalado
QUIÉNES Agresor –Víctima; (testigos) Organización – Acosador – Afectado
ENFOQUE Individual (atribucional) Sistémico (relacional); Triangulación
EVALUACIÓN Detección (perfiles) Prevención primaria: Prevención
Prevención Secundaria: Detección
Prevención Terciaria: Intervención
Prevención Cuaternaria: Forense
MARCO Jurídico, clínico PRL: Ergonomía y Psicosociología
PREVENCIÓN NO SI
Fuente: Elaboración propia.
La dimensión temporal del (1996) señala cuatro etapas en las que se de-
04 acoso laboral sarrolla el mobbing: La primera etapa com-
prende incidentes críticos; la segunda etapa
El acoso visto como fenómeno social es un comprende un amplio número de conductas
proceso que se va instaurando en el tiempo de acoso y estigmatización; la tercera etapa
(Barón, Munduate y Blanco, 2003). Leymann comprende la intervención de las autoridades
77
Capítulo 2
78
Capítulo 2
79
Capítulo 2
las CSN, y puede que espere una continuidad del trabajador o su integridad psicológica y
en las CSN. que resulte en un ambiente de trabajo dañi-
no para el trabajador. Un sólo incidente grave
Un evento aislado no debe ser denominado de este comportamiento que tenga un efecto
acoso si no causa reacciones de estrés a lar- dañino duradero sobre el trabajador puede
go plazo (estresores agudos, en el sentido de también constituir acoso psicológico.”
eventos traumáticos, deben diferenciarse del
acoso). Sería un caso especial el de un evento Recapitulando, la dimensión temporal del aco-
único que induce a posteriores amenazas. so deber ser orientativa de la intencionalidad
e irreversibilidad de la situación. Si atende-
Einarsen y Skogstad (1996) afirman que no mos la literatura actual, encontramos una re-
es necesario que un comportamiento de hos- lación entre “intensidad de las agresiones”,
tigamiento se dé con una frecuencia de una “duración” y “frecuencia”, de tal forma que a
vez por semana durante al menos seis meses mayores intensidades de agresión y mayor
para poder considerar el proceso como mob- frecuencia, destacará menos el factor dura-
bing, sino que es suficiente que la víctima se ción para determinar si se trata o no de aco-
sienta acosada frecuentemente. Otros auto- so; del mismo modo, a menores frecuencias
res afirman que un trabajador puede conside- e intensidades de agresión destacará más el
rarse como víctima de mobbing si ha padeci- factor duración para aclarar si se trata o no de
do conductas de hostigamiento persistentes acoso.
durante el último año (Björkqvist, Österman y
Hjelt-Bäck, 1994). En última instancia, Adams y Desde el Sistema de Análisis Triangular del
Crawford (1992) indican que es posible inducir Acoso Laboral, entendemos que existe “tipi-
a una persona a un proceso de mobbing sim- ficación temporal” de acoso en una situación
plemente mediante un acto suficientemente dada cuando se constaten indicios de com-
amenazante. portamientos de acoso con frecuencia (una
vez a la semana como mínimo) y duración es-
Desde este supuesto podemos encontrar en tándar (mínimo seis meses). No obstante, aún
la legislación canadiense el art. 81.18 de la La- no existiendo “tipificación temporal”, debere-
bour Standards Act de la provincia de Québec mos continuar con nuestras pesquisas hasta
que entró en vigor en Junio de 2004, estable- conocer la gravedad del daño causado a la
ciendo que: persona afectada.
“A los efectos de esta Ley “acoso psicológico” A modo de ejemplo se puede reflexionar so-
significa cualquier comportamiento vejatorio bre las circunstancias que se presentan en los
de forma repetida, con carácter hostil o no equipos de trabajo por proyecto, donde la alta
deseado, en forma de conducta, comentario presión de trabajo junto a la gran cantidad de
verbal, acción o gesto, que afecte la dignidad horas de convivencia en grupo puede dar lu-
80
Capítulo 2
gar a conflictos y acciones de acoso a pesar Modelo dimensional del acoso laboral
de no cumplir los requisitos estándar de dura-
ción y frecuencia. Pensar en el acoso laboral como una dimen-
sión permitiría la evaluación de casos atípicos
4.1 ACOSO LABORAL COMO PROCESO: o poco usuales, donde cada característica se
MODELOS ANALÍTICOS extendería dentro de un intervalo de posibili-
dad. Como consecuencia, normalidad y anor-
La visión del acoso como conflicto escalado, malidad en las relaciones interpersonales y
la participación de las acciones sociales nega- laborales son simplemente puntos de un con-
tivas y la relativización de la temporalidad de tinuo más que fenómenos distintos y separa-
los ataques en función de la intensidad de los bles. Esta visión no está exenta de limitaciones
mismos, configura una conceptualización del como es el problema de llegar a un consenso
acoso como proceso. sobre los elementos significativos que definan
el proceso de acoso unido a la tendencia sim-
Una cuestión importante desde esta idea es plificar los perfiles dimensionales que podría
la de cómo identificar un caso concreto, para confluir en una visión de perfiles, lo que no se
ello mencionaremos tres modelos desde los alejaría mucho de la visión categorial.
que podremos enfrentarnos a la tarea de dis-
criminar casos y no-casos de acoso laboral. Modelo prototípico del acoso laboral
Modelo categorial del acoso laboral El prototipo no es ni una categoría ni una di-
mensión, sino una síntesis de ambas que asu-
Resulta fácil para su utilización por evaluado- me las ventajas de los enfoques anteriores y
res, legisladores o clínicos entender el acoso minimiza sus limitaciones. El constructo del
en formato “ocurre o no ocurre”. El fenómeno prototipo reconoce la heterogeneidad explí-
del acoso laboral sería una categoría concre- cita de los casos. Un constructo prototípico
ta e identificable. Las limitaciones desde este no asume la existencia de límites concretos y
enfoque son dobles: Por un lado existe el pro- conlleva la idea de que los casos prototípicos
blema conceptual de que cada proceso de puros son extremadamente raros. Desde el
acoso es difícilmente categorizable y genera- enfoque de Theodore Millon del que toma-
lizable, por lo que los umbrales de detección mos prestada su reflexión sobre prototipos,
pueden ser arbitrarios; Por otro lado existe un categorías y dimensiones (Millon, 1974), un
problema práctico y es determinar el punto de prototipo consiste en las características o pro-
corte real en un proceso de acoso (tiempo de piedades más comunes de los miembros de
exposición) para que devenga en daños para una categoría y describen, por tanto, un ideal
la persona afectada, la intensidad necesaria teórico a través del cual puede evaluarse a un
para la afectación, etc. caso real. Se considera que todas las propie-
dades del prototipo caracterizan al menos a
81
Capítulo 2
algunos miembros de la categoría, pero que la misma, es decir, contemplar los fenó-
ninguna propiedad es necesaria ni suficiente menos en su contexto de actuación.
para formar parte de la categoría. Es posible
que ningún caso real se adapte perfectamen- • Su principal objetivo se dirige hacia la
te al prototipo teórico sino que los diferentes comprensión de los hechos, lo que impli-
casos se aproximarían en distintos grados. ca el conocimiento de las posibles rela-
Cuanto más se aproxime un caso concreto al ciones manifiestas y latentes, analizando
ideal, más estrechamente tipificará el concep- su intencionalidad.
to. Esta es la idea que se manejará en la lista
de comprobación SATA cuando se hable de • El investigador y el objeto de investiga-
tipificación temporal. ción se suelen encontrar interrelaciona-
dos, lo que lleva consigo una serie de in-
La semejanza entre un proceso de acoso la- fluencias mutuas que deben ser tenidas
boral y el prototipo definido por Leyman ,por en cuenta.
ejemplo, es necesariamente tanto de tipo cua-
litativo como cuantitativo. Aunque categorías Respecto a las claves cuantitativas, debemos
y dimensiones sacrifican inevitablemente uno tener presente que a pesar de lo tranquiliza-
u otro tipo de información, el prototipo con- dor que resulta observar la realidad desde un
serva ambas, de ahí la importancia de la trian- “número mágico”, la asignación de un valor
gulación como método de aprovechamiento numérico a variables pertenecientes a un pro-
de ambos tipos de datos. Un prototipo gene- ceso social debe de hacerse con mucha cau-
rado teóricamente resulta útil como punto de tela y con un conocimiento profundo de las
anclaje desde el punto de vista conceptual, es restricciones que suponen las herramientas
decir, establece un marco de trabajo coheren- conceptuales y matemáticas que lo posibili-
te de descriptores en torno a los cuales toman tan.
forma las variantes reales del fenómeno. Es
La subjetividad del acoso laboral y
por ello que la importancia de la evaluación
de un caso de acoso recaerá en el entendi-
05 el acoso laboral subjetivo
miento de este proceso desde claves descrip-
tivas y cuantitativas. Según Niedl (1995) el centro de la definición
de Acoso laboral yace en la percepción sub-
En lo que respecta a las claves descriptivas, jetiva hecha por la victima de la existencia de
Guba y Lincoln (1983) señalan que las notas actos repetidos que son hostiles, humillantes
identificativas más comunes de la visión cua- e intimidadores y que son dirigidos hacia él
litativa son: o ella. No obstante, la mayoría de los estu-
dios teóricos parecen tratar al acoso laboral
• Una concepción múltiple de la realidad como un fenómeno objetivo y observable. Las
que exige una visión holística (global) de discusiones en este sentido se centran en la
82
Capítulo 2
objetividad de las mediciones, los debates en En estos casos cabría analizar con mayor de-
torno a la veracidad de las respuestas de las tenimiento las variables que puedan estar in-
víctimas, a la neutralidad de los observadores fluyendo en esta hipersensibilidad hacia com-
y entorno al verdadero significado particular portamientos o acciones que no conllevan la
de un comportamiento (Einarsen et al. 2003). intencionalidad de acoso.
Según Einarsen (Einarsen et al. 2003) el de- Debemos contemplar la posibilidad de que
bate en torno a la objetividad del comporta- un eventual simulador busque ganancias de
miento del acoso laboral debería centrarse en forma consciente en una hipotética situación
el ámbito jurídico donde es más necesario. La de acoso. Como diferencia principal entre un
perspectiva subjetiva, por otra parte, podría simulador y una persona afectada, podemos
ser más útil para la predicción de las respues- encontrar que esta última pretenderá que la
tas y reacciones de las víctimas, las conse- situación de conflicto se resuelva, tratando de
cuencias organizacionales y para las posibles canalizar sus energías hacia un acuerdo o una
respuestas organizacionales que intenten so- solución satisfactoria. Un simulador no busca-
lucionar el problema. rá el acuerdo o la solución, sino que necesita-
rá que la situación, creada probablemente por
La intencionalidad es otra parte fundamen- él mismo, se mantenga. Por ejemplo, algunos
tal de la definición, el problema en éste caso acosadores pueden crear la apariencia para-
es que normalmente es imposible verificar la dójica de afectados por una situación de aco-
presencia de una intención, dado que existe so. En todos estos casos, cabría analizar con
una distinción clara entre intenciones y com- más detalle la posibilidad de existencia de
portamientos, es decir, no toda intención tie- personas con algún tipo de trastorno mental.
ne un comportamiento equivalente. Para Ken-
neth Thomas (1992) las intenciones pueden Así mismo, las personas reaccionamos de
entenderse como propósitos que sirven para forma diferente a situaciones parecidas de
explicar patrones de ciertos comportamientos acoso, variando nuestra vivencia, nuestro
observables. Una intención sería una decisión afrontamiento o nuestra percepción del es-
adoptada con el propósito de iniciar una ac- calamiento del conflicto (Zapf y Gross, 2001;
ción de una manera determinada que opera Munduate y Dorado, 1998), de modo que, en
como una variable interviniente entre los pen- función de los resultados de investigaciones
samientos y emociones y el comportamiento actuales y tal como señala Moreno-Jiménez,
manifiesto. B. et al. (2005): “es bastante improbable que
el acoso pueda ser explicado exclusivamente
Puede darse el caso en que una persona vi- en términos de condiciones del trabajo“.
vencie una situación de acoso sin que exis-
tan evidencias de agresiones o acciones que También puede darse el caso de que todas
puedan estimarse como propias del mismo. las personas de un departamento perciban
83
Capítulo 2
que se las acosa. Si bien existe la posibilidad tos objetivos, subjetivos y comparativos (Ba-
de que actuaciones similares a las propias del llester, 2006):
acoso laboral se focalicen no sobre uno o va-
rios trabajadores sino sobre todos , en lo que Elementos objetivos
podemos denominar como presión laboral,
estos comportamientos acosantes dirigidos • Gravedad, intensidad y reiteración de las
a todos los trabajadores de forma indiscrimi- conductas de acoso
nada no podrían considerarse como acoso
laboral (Unión Sindical de Madrid-Región de • Modificación de condiciones de trabajo
CCOO, 2003). No obstante, en este caso con- y/o alteración de funciones
creto resultaría muy relevante señalar estas
actuaciones percibidas como un “caldo de • Evidencias de la posible intencionalidad
cultivo” propicio (un elemento latente) para de las conductas de acoso respecto al
que aparezcan situaciones claras de acoso abandono de la persona afectada.
laboral.
Elementos subjetivos
Liefooghe y Mckenzie (2003) descubrieron,
mediante la técnica de los grupos focales, • Daño sufrido
que los empleados pueden tener tienen una
conceptualización del acoso laboral, que dis- • Relevancia del daño
ta bastante de la visión de los investigadores:
Los empleados utilizaron el concepto de aco- Elementos comparativos
so laboral para señalar un acoso de tipo orga-
nizativo, “el acoso laboral institucionalizado”, • Trato diferencial respecto a otras perso-
en el que las prácticas organizativas sobre la nas o grupos
relación con los trabajadores y los sistemas
Acoso como riesgo laboral de
de evaluación y retribución, son considerados
injustos. Por lo que, más que hablar de un pro-
06 carácter psicosocial
blema en las relaciones interpersonales, en
el que el papel de la dirección de la empre- Desde la noción de acoso como proceso po-
sa, a lo sumo, aparecería como responsable demos inferir que la diferencia entre la vulne-
subsidiaria, es la propia organización la que rabilidad de una organización a la materializa-
desempeña un papel activo en el origen y el ción de situaciones de acoso y la constatación
desarrollo del proceso. de evidencias de situaciones de acoso activa
es sólo cuestión de tiempo. Un sistema para
Concluyendo lo dicho hasta ahora, para que el análisis del acoso laboral deberá ayudar a
se constate la presencia de un proceso de distinguir, por lo tanto, entre una situación de
acoso deberán concurrir una serie de elemen- vulnerabilidad (prevención) y una situación en
84
Capítulo 2
la que existan evidencias de procesos de aco- bre las actuaciones de la Inspección de Tra-
so en curso (detección). bajo y Seguridad Social en materia de acoso y
violencia en el trabajo afirma que:
Siguiendo este razonamiento sobre la mate-
rialización de una situación nociva para deter- “La violencia y el acoso en el trabajo también
minados trabajadores de una organización, pueden constituir un incumplimiento e infrac-
podemos enmarcar al acoso laboral dentro ción de las normas de prevención de riesgos
del ámbito de los riesgos laborales y, dado laborales.
que para su ocurrencia deberán presentar-
se determinadas circunstancias relacionadas La seguridad y salud del trabajador es el ob-
con la organización, lo identificaremos parti- jeto de protección de esta legislación y basta
cularmente como un riesgo laboral de carác- con la existencia de un riesgo real y previsible
ter psicosocial. de daño a la salud de los trabajadores para
que estas normas sean de plena aplicación.
Actualmente, algunos países de la Unión Eu-
ropea ya tienen una ley que contempla el aco- Además de los argumentos legales que ya
so laboral, como es el caso de Suecia (1993), establecía el CT 34/2003 basados en los Art.
Francia (1999) y Bélgica (2001). 4.7.d), Art. 15.1.g) y 25.1 LPRL y del reconoci-
miento explícito como disciplina preventiva
De acuerdo con la normativa sueca el empre- de la Ergonomía y Psicosociología Aplicada
sario tiene la obligación de organizar el traba- (Anexo VI RSP), el Tribunal Constitucional en
jo de modo que se prevenga el acoso; debe el FJ5a de su sentencia 160/2007 reconoce la
adoptar una política explícita contra el acoso; aplicación del Art. 14 de la LPRL ante situacio-
debe tomar medidas si aparecen signos de nes de riesgo psicosocial.
acoso; proporcionar apoyo a la víctima y tener
procedimientos específicos para ello (Artaz- Estas situaciones se definen como las resul-
coz, 2002). tantes de la interacción entre los trabajado-
res y la organización de la empresa y tienen
En España, el Tribunal Constitucional en las como básicas manifestaciones los errores hu-
sentencias STC 62/2007 y STC 160/2007 re- manos debidos a la organización del trabajo,
conoce que las obligaciones del empresario el estrés laboral y la violencia en el trabajo.
previstas en la LPRL son de plena aplicación Estrés y violencia son situaciones que se inte-
a los supuestos de riesgo psíquico motivados rrelacionan y que con frecuencia se manifies-
por la organización del trabajo que pueda po- tan de forma sucesiva o simultánea.
tencialmente padecer el trabajador cuando
aquellos sean ciertos y previsibles. Las medidas de prevención que el empresa-
rio debe aplicar ante los supuestos de acoso
Por otro lado, el Criterio Técnico 69/2009 so- y violencia en el trabajo de los que tenga co-
85
Capítulo 2
nocimiento o debiera haberlo tenido son las ción debe delegar la autoridad a estos
que mejor se adapten a cada situación con- trabajadores/as y permitirles que tomen
creta, aplicando las obligaciones generales las decisiones que consideren oportunas
de los Art. 14,15, 16, 18, 22 y 25 LPRL.” en cada caso. Los estudios de caso hasta
ahora demuestran claramente que la in-
De cara a la prevención del riesgo de acoso, actividad a estos niveles se asocia a su-
debemos conocer en qué fase del proceso periores que se sienten inseguros en su
nos encontramos antes de seleccionar una rol organizacional en este tipo de conflic-
medida preventiva, ya que éstas serán dife- tos. La política de la empresa debe hacer
rentes en función de si lo que se pretende es también explícito este rol.
prevenir, detener el proceso o rehabilitar a la
víctima. Algunas recomendaciones en esta lí- • 3. Intervención cuando el proceso ha
nea son (adaptadas de Artazcoz, 2002): avanzado: Si el proceso ha avanzado lo
suficiente como para que se evidencien
• 1. Prevención: Se recomienda establecer daños manifiestos para la salud de la per-
en la empresa una política escrita para sona afectada debe aconsejarse la baja
evitar que los conflictos avancen a es- y ofrecer ayuda profesional. Ahora bien,
tadios de riesgos. Es importante formar haber llegado a este estadio significa un
a los mandos de todos los niveles en la fracaso de gestión.
gestión de conflictos. Además debe es-
pecificarse cómo actuar si un conflicto
ha llegado muy lejos. Evidentemente,
07 Contexto conceptual SATA
además de estas medidas específicas
para abordar el acoso laboral, debe fo- El fenómeno del Acoso laboral se ha concep-
mentarse un entorno psicosocial general tualizado, históricamente, de una forma un
adecuado con exigencias razonables, tanto confusa como un tipo de estresor social
alto control, apoyo social de superiores o como un conflicto que se va escalando o
y compañeros, reconocimiento, salario como una forma de violencia particular, y en
adecuado y control de estatus. la mayoría de los casos se ha diferenciado
de otros comportamientos negativos como
• 2. Intervenciones para detener el aco- el acoso discriminatorio, el acoso sexual o la
so: Los superiores deben ser capaces violencia física. En esta obra, se presenta una
de leer los primeros signos de un posi- concepción del acoso como riesgo laboral de
ble conflicto que puede avanzar hacia carácter psicosocial derivado de un fenóme-
el acoso. Es aconsejable nombrar una no social relacional, un proceso de interac-
o más personas de la organización a la ción social en palabras de Leynmann, que se
que se puedan dirigir los empleados que establece en, y desde, un contexto organiza-
están siendo víctimas de acoso. La direc- cional. De este modo, planteamos la noción
86
Capítulo 2
de acoso laboral como un proceso de conflic- acoso laboral (SATA) provee de instrumentos
to escalado y, en consecuencia, como un es- conceptuales (definiciones operativas) que
tresor mantenido en el tiempo. Es por ello que nos permiten, de un modo riguroso, estable-
hablamos de procesos de acoso más que de cer la existencia o no de casos de acoso y, lo
situaciones de acoso. Desde este marco con- que es aún más importante, prevenirlos antes
ceptual, el sistema de análisis triangular del de que surjan.
Elementos básicos del acoso “Lo más grave, en el caso de Eichmann, era
08 laboral precisamente que hubo muchos hombres
como él, y que estos hombres no fueron per-
A continuación describiremos los elementos vertidos ni sádicos, sino que fueron, y siguen
propios del acoso laboral: Personas, grupos y siendo, terrible y terroríficamente normales.
organización. (...) esta normalidad resultaba mucho más
terrorífica que todas las atrocidades juntas,
8.1. ACOSADOR por cuanto implicaba que este nuevo tipo de
delincuente -tal como los acusados y sus de-
Tras la segunda guerra mundial, en los años fensores dijeron hasta la saciedad, en Nurem-
60 y 70, algunos psicólogos sociales empe- berg-, que en realidad merece la calificación
zaron a interesarse por el hecho paradójico de hostis generis humani, comete sus delitos
de que determinadas personas, en apariencia en circunstancias que casi le impiden saber o
totalmente normal, pudieran llegar a cometer intuir que realiza actos de maldad.”
tales atrocidades. El paradigma de esta para-
doja se puede observar en el análisis que la fi-
lósofa Hannah Arendt realizó del famoso caso Fruto de estas reflexiones, se evidenció un
del criminal de guerra Adolf Eichmann. modelo de comportamiento social del ser hu-
87
Capítulo 2
mano que, lejos de posturas de “buenos y ma- • Cumplimiento: estar de acuerdo sola-
los”, admite que las personas: mente públicamente, pero manteniendo
opiniones propias en privado, por ejem-
• Adoptan las definiciones de realidad de plo como resultado de una orden directa.
su grupo de referencia. Es la llamada
“Atribución situacional”. (Muzafer Sherif, • Identificación: estar de acuerdo mien-
1984: Robber’s Cave - Solomon Asch tras se es miembro del grupo, pública y
1982: Prueba de visión) privadamente, pero no después de aban-
donar el grupo.
• Realizan aquello que “deba” hacer según
lo que se espera de él. Es la llamada “In- • Internalización: estar de acuerdo pública
ternalización de roles”. (Philip Zimbardo, y privadamente, durante y luego de ser
1973: Cárcel de Stanford) miembro del grupo, es la conformidad
que procede de la convicción absoluta
• Obedecen a quienes creen que “saben en los propios actos.
más”. Es el concepto de “Obediencia a la
autoridad”. (Stanley Milgram, 1974: Expe- La evidencia obtenida sobre la conformidad
rimento Milgram) social muestra que prácticamente cualquier
ser humano, sometido a diferentes presiones,
• Deciden “grupalmente” a quién atender puede llegar a convertirse en un acosador.
en una emergencia. Es el concepto de Desde esta perspectiva resulta interesante
“Haraganería social” o “efecto especta- releer las palabras de Milgram (1974):
dor”. (Bibb Latane and John Darley, 1968:
Caso Kitty Genovese) “La capacidad del hombre de abandonar su
humanidad, de hecho, la inevitabilidad de
• Blindan su pensamiento en grupo y no hacerlo, al fundir su personalidad única con
se cuestionan la posibilidad de error. Es estructuras institucionales mayores, es un de-
el llamado “Pensamiento grupal”. (Irving fecto fatal que la naturaleza ha diseñado en
Janis, 1973: Bahía Cochinos) nosotros y que a la larga, da a nuestras espe-
cies solo una modesta oportunidad de super-
El concepto de la conformidad social nos vivencia...”
muestra cómo las personas cambian su com-
portamiento, opiniones y actitudes para enca- “Cada individuo posee una conciencia que
jar con las opiniones del grupo. en un grado mayor o menor, sirve para res-
tringir el fluir sin estorbo de impulsos destruc-
Existen diferente tipos de conformidad, así tivos hacia otros. Pero cuando uno funde su
Kelman (1958) identificó tres formas básicas: persona en una estructura organizacional,
una nueva criatura sustituye al hombre autó-
88
Capítulo 2
nomo, no estorbada por las limitaciones de la (Gonzalez de la Rivera, 1997), perverso nar-
moral individual, liberada de la inhibición hu- cisista (Irigoyen, 2001), bajo los efectos de
mana, solo consciente de las sanciones de la una modalidad grave de sociopatía agresiva
autoridad…” (Field, 1996)…
“La desaparición del sentido de responsabili- Sin rechazar estas propuestas, debemos dar
dad es la consecuencia de mayor alcance del cabida a la posibilidad de que el acosador
sometimiento a la autoridad.” pueda ser una persona normal sometida a
presiones organizacionales. A nuestro juicio,
Una visión aproximada de la idea de conformi- son necesarios más estudios en este sentido
dad puede encontrarse en el llamado efecto para diferenciar entre la descripción técnica
de la “posición vulnerable” (Conte y Paolucci, del fenómeno y el juicio moral implícito tras los
2001). Si, por ejemplo, en la autopista todos hechos. Si no llegamos a comprender por qué
excediesen el límite de velocidad, usted esta- surge este tipo de situaciones, en qué perso-
ría obligado a infringir la norma para evitar que nas y bajo qué condiciones, difícilmente con-
tarde o temprano lo alcanzarán desde atrás. seguiremos prevenir el daño. Por otro lado,
Su conducta estará influida por la norma de razonar que el acosador debe de ser malvado
velocidad que establecen otros y no estarán porque hace maldades, aparte de ser una ob-
implicados necesariamente procesos de imi- viedad, no nos ayudará en este camino.
tación ni representación alguna del otro. Se
trata de un simple caso de regularidad emer- Demonizar al acosador no redundará en be-
gente que tiene como resultado la violación neficios de cara a su detección temprana,
de una norma específica. En otro ejemplo, si más bien al contrario. En palabras de Justo
todos los compañeros tratan de una forma Serna, profesor de Historia contemporánea
determinada a la persona recién llegada al en la Universidad de Valencia y especializa-
departamento, puede que más tarde o más do en Historia Cultural (Serna, 2007): “Los
temprano una persona concreta y, en princi- totalitarismos no decayeron con la ruina de
pio, neutra respecto a esa persona, termine las dictaduras: persisten en las actitudes, en
por adoptar esa forma de trato si no quiere las conductas y en ciertos hábitos de quienes
ser rechazado por el grupo. no se toman en serio a sus congéneres y los
juzgan simplemente prescindibles. Tipos así
Existen también variables personales que en no siempre son degenerados patológicos: es
interacción con las organizacionales pueden más frecuente que sean unos idiotas mora-
desencadenar situaciones de acoso o la cris- les, gentes que se irresponsabilizan, que anu-
talización de la figura del acosador de la que lan su conciencia para así infligir el mal sin
hablamos actualmente en términos de psi- inquietarse. No son ni siquiera trágicos: son
cópata organizacional (Piñuel, 2001), bajo el más bien triviales, ciudadanos corrientes, qui-
síndrome por mediocridad inoperante activa zá vecinos ejemplares, tal vez eficaces y mo-
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presenta cuando se ven los hechos a poste- tarea que, además de ingenua, puede crear
riori, hablando ellas en términos de una buena equívocos y estigmatizaciones indebidas.
persona, honesta y responsable en la que un
ser malvado fija sus intenciones. Esta concep- Sin lugar a dudas, afirmamos que la perspec-
ción maniqueísta de pensar en términos de tiva procesual y sistémica del acoso debe fun-
Persona acosada-Buena / Persona acosado- damentar el marco técnico desde el que de-
ra-Mala nos fuerza a ver el fenómeno desde bemos enfrentarnos al reto de su detección
una visión cristalizada (una foto de la situación en formas tempranas para evitar el daño a los
final) que nos impide advertir la perspectiva afectados potenciales.
procesual de los hechos, comprender cómo
se fue gestando. Desde un punto de vista técnico es importan-
te disponer de una metodología analítica so-
Es necesario advertir que no estamos hablan- bre los estilos que las personas adoptan en
do aquí, en ningún caso, de banalizar el daño situaciones de conflicto. En este sentido, Van
de las víctimas o de establecer juicios morales de Vliert y Euwema (1994) proponen un mode-
relativistas, sino de la perspectiva más ade- lo taxonómico de descripción de las conduc-
cuada de afrontar una evaluación. Por ello, tas de gestión de un conflicto mediante una
buscar a la persona malvada en una situación doble dimensión: Agradable-Desagradable y
cargada de contexto organizacional es una Activo-Pasivo (ver figura)
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definido y la necesidad de afecto, que nos Fuera de un grupo la persona mostrará una
aportan bienes imprescindibles como segu- identidad social positiva y propia, conseguida,
ridad, bienestar, valoración, prestigio, reco- en parte, efectuando comparaciones entre su
nocimiento, etc. La capacidad del grupo para grupo y otro grupo relevante. Mediante estos
la satisfacción de necesidades es siempre li- mecanismos de autoestima, se sentirá moti-
mitada y, si existen restricciones importantes vado para menospreciar a otros grupos para
para proveer de estos elementos, se pueden mejorar su autopercepción y la estimación del
generar conflictos. grupo.
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otras funciones, y no es hereditaria”. Es decir, “cuál fue la causa?”. Para una cultura
la violencia es un producto de la cultura, y no constructiva del error en la empresa son
una característica intrínseca del ser humano, apropiadas las listas de fallos en las que
que surge a partir de que las relaciones socia- los trabajadores puedan criticar las fuen-
les de institucionalizan. tes de decisión e interferencia, así como
las reuniones de reflexión en las que se
Por último, debemos hacernos una pregunta busquen la mejora en común.
en relación a los grupos: ¿cómo pueden los
equipos eficaces contrarrestar los peligros de • Cultura de lucha y conflicto: Los con-
aislarse del mundo exterior y no tolerar las crí- flictos pertenecen a la cotidianidad del
ticas o ideas nuevas mientras logran mantener trabajo; deben resolverse con sensatez,
una identidad? En otras palabras, ¿Cómo re- en mesas redondas de discusión o vías
suelven con éxito del dilema de “adaptación y análogas.
cambio” frente a “conservación e identidad”?
• Cultura de la pregunta y la curiosidad:
Para el profesor Dieter Frey (1998) los equi- Los éxitos siempre comienzan por pre-
pos exitosos toman como referentes algunos guntas. De ahí, la necesidad de curio-
principios fundamentales para lograr la adap- sidad. A cada trabajador se le pide que
tación sin menoscabar la identidad: haga preguntas; nada debería ser tabú.
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• No se debe contar nada al supervisor “La conducta humana siempre está sujeta a
que lo haga actuar en contra de un com- fuerzas situacionales. Este contexto se eng-
pañero, quien lo haga es un “chivato”. loba dentro de otro contexto macroscópico
más amplio que casi siempre es un sistema
• No se debe mantener distancia o actuar de poder diseñado para sustentarse a sí mis-
de forma oficial. Si uno es un inspector mo. Los análisis que normalmente lleva a
no debe actuar como tal. cabo la mayoría de la gente, incluyendo la
que pertenece a instituciones legales, reli-
Existe una amplia gama de variables organi- giosas o médicas, se centran en la persona
zacionales que guardan relación con los con- como único agente causal. En consecuencia,
flictos interpersonales en el trabajo, pudiendo minimizan o pasan por alto el impacto de las
influir en su aparición, su duración y la grave- variables situacionales y los factores sistémi-
dad de los mismos. A día de hoy, empiezan cos que conforman la conducta y transforman
a conocerse las variables organizacionales a las personas. (…)
concretas que inciden en la problemática
del acoso laboral funcionando como poten- (Estos) sistemas malvados crean situaciones
tes predictores de situaciones de acoso, por malvadas, crean conductas malvadas y con-
ejemplo: Variables culturales (Van de Vliert, vierten en manzanas podridas incluso a las
1984), condiciones de trabajo insatisfactorias, buenas personas.”
el clima social empobrecido (Vartia, 1996; Var-
tia y Hyyti, 2002), los estilos de gestión del En este punto, deberíamos preguntarnos por-
conflicto (véase Barón, M. et al. 2006). qué las organizaciones se comportan de este
modo “malvado”.
Estas variables organizacionales interactúan
con variables personales llegando a producir Podemos encontrar una explicación -al me-
variaciones en la percepción de acoso y en la nos parcial- a este hecho en los trabajos de
salud de las personas (Einarsen, 2000). Chris Argyris sobre las «rutinas defensivas en
la empresa». Para entender este concepto de-
El peso de estas variables situacionales y or- bemos ver primero a las organizaciones como
ganizacionales en las conductas humanas sistemas adaptativos complejos, este tipo de
puede llegar a ser determinante. Así, Zim- sistema (como un organismo vivo) dedica mu-
bardo (2008) propone que, desde un plano cho esfuerzo a realizar dos funciones primor-
conceptual, se otorgue a los procesos situa- diales pero contradictorias:
cionales y sistémicos un mayor peso del que
normalmente se le atribuyen al intentar expli- 1. Adaptarse y cambiar,
car conductas aberrantes y aparentes cam- 2. Conservarse y mantener su identidad.
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Desde este presupuesto podemos explicar, Cuando esta protección unilateral e ilusoria
por ejemplo, que en muchas empresas, ha- de los demás, propia de nuestras estrategias
blar de los problemas importantes en las re- individuales de engaño, se convierte en una
uniones sea visto prácticamente como una pauta organizativa, pasa a ser lo que Argyris
señal de mal gusto, implicando que los temas (1993) llama una “rutina defensiva”. Podemos
cruciales de la organización sólo se discutan conceptualizar a las rutinas defensivas como
donde no puedan ser cuestionados y donde todas las políticas y prácticas organizativas
las personas realmente involucradas no estén que evitan que las personas sufran incomodi-
presentes. dades y amenazas, al mismo tiempo que evi-
tan que descubran y eliminen las causas de
Así, para Argyris los seres humanos estamos esas incomodidades y amenazas.
equipados con un sistema de aprendizaje li- Además de esta contradicción a niveles orga-
mitado y autodefensivo que falla en situacio- nizativos, existirá también una diferencia en-
nes de incomodidad o amenaza. Este sistema tre lo que hacemos y lo que decimos (Argyris
nos exige mantener un control unilateral de y Schön, 1974). Se trata de la contradicción
la situación: no poner los juicios en discusión, inherente a nuestra “teoría de la acción”, que
evitar momentos engorrosos, maximizar la establece qué sucederá si hacemos algo y
ganancia y minimizar la pérdida, suprimir sen- que tiene dos aspectos.
timientos negativos y mostrarse tan racional
como sea posible. Se trata de una estrategia 1. Por un lado, la “teoría elegida”: Lo que
de engaño que sirve para no discutir aquello decimos si nos preguntan qué hacemos
que nos afecta. De este modo, ante la míni- o cómo lo hacemos.
ma percepción de amenaza, el pensamiento 2. Por el otro, la “teoría en uso”: Que guía
defensivo reemplaza inmediatamente al pro- realmente nuestra acción y que general-
ductivo. mente funcionará de modo no conscien-
te.
Percibimos nítidamente este proceso en otras
personas pero no en uno mismo. Así, nos au- El resultado de esta red de conductas incons-
to-engañamos diciendo que no hablamos de cientes suele ser organizaciones donde todos
aquello que deberíamos hablar para proteger saben lo que nadie dice y todos dicen lo que
a otras personas. Este fenómeno ha sido des- nadie supuestamente sabe. De este modo,
crito por Argyris (1990, 2000) como la “Des- cuando se pregunta en una entrevista a un
treza Incompetente” o la “Incompetencia Cua- mando sobre cómo se realiza el trabajo en
lificada”: Nuestra forma de cerrarnos a todo su equipo es frecuente que responda dicien-
aprendizaje posible para protegernos del do que mediante el ejemplo y la inspiración
dolor y la amenaza que plantean las nuevas (teoría elegida). Sin embargo, mediante obser-
situaciones. vación y otras entrevistas se podrá llegar a la
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Brodsky (1976) Existencia dentro de la cultura de elementos que permiten e incluso promueven
comportamientos de acoso.
Thylefors, 1987 Tipo de organización (organizaciones grandes y burocráticas).
Leymann, 1993 Deficiencia en la organización del trabajo.
Einarsen, Raknes y Matthiese, 1993 • Organizaciones muy jerarquizadas, con inhibición de la democracia inter-
na y penalización de desacuerdos respecto a las decisiones de los niveles
superiores.
• Grandes organizaciones, en comparación con las pequeñas.
Ashforth, 1994 Liderazgo tiránico.
Einarsen, Raknes & Matthiesen, 1994 Falta de liderazgo constructivo (Estilo de liderazgo débil o de «laissez-faire»);
falta de posibilidades de monitorear y controlar sus propios trabajos; alto nivel de
conflictos respecto a rol; clima social; comunicación interna.
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Favrelto, 1994 Realización de actividades no éticas por parte de la empresa o algunos de sus
directivos.
Zapf, Knorz & Kulla, 1996 Altas demandas laborales, bajo control sobre la tarea, conflicto de rol, ambigüe-
dad de rol.
Vartia, 1996 Deficiencia en la organización del trabajo.
Einarsen, Raknes y Matthiese, 1993 • Flujo pobre de información, Manera autoritaria de arreglar las diferencias
de opinión, Falta de discusión de metas y tareas, Escasas posibilidades de
influir en las cosas que a uno le tocan y le preocupan.
• Previsión de disminución del tamaño de la organización, reestructuración o
fusión con otras empresas: importancia de la incertidumbre que producen
dichos cambios en los trabajadores.
• Estrés percibido, sobrecarga de trabajo, imposibilidad de expresar las ideas,
un ambiente laboral estresante
McCarthy, Sheehan & Wilkie, 1995; Baron Políticas y prácticas empresariales tales como: Despidos, reestructuración, remo-
& Neuman, 1998 delación, reducción de plantilla, fusiones, etc.
Seigne, 1998 Percepción del ambiente laboral como: Estresante y altamente competitivo, Pla-
gado de conflictos interpersonales, Falta de una atmósfera amistosa y de apoyo,
Cambios organizacionales y Liderazgo de estilo autoritario.
Adams, 1998; Dick y Wagner, 2001 Facilitación de conflictos de intereses en los empleados, alto grado de estrés
organizacional.
Durieux, 1999 Gestión inadecuada de los recursos económicos y de poder.
Eirnasen, 1999 Demandas y expectativas incompatibles alrededor de: Roles, Tareas y Responsa-
bilidades.
Eirnasen, 2000 Organizaciones que toleran comportamientos propios de acoso
Hoel & Cooper, 2000 Estilo de liderazgo.
Hubert y Veldhoven, 2001 Lugares de trabajo con alto grado de estrés y escasa seguridad en el empleo
Salin, 2003 Políticas organizacionales, ambientes laborales competitivos
Moreno et al., 2005 Clima social, comunicación interna, tipo de contrato.
Muñoz et al., 2005 Conflicto relacional, estilo de gestión de conflicto.
Variables organizacionales
El acoso laboral es un fenómeno complejo y por analizar cómo influyen las variables orga-
multicausal donde se entrecruzan variables nizacionales. También indican que:
individuales, relacionales y organizacionales.
“De todos modos, como propone el para-
El reto actual es encajar las piezas que tene- digma individual, numerosas características
mos de forma que podamos establecer un pa- individuales, tanto de las víctimas como de
trón anticipatorio del acoso laboral. Bernardo los acosadores, pueden estar jugando un im-
Moreno y colaboradores (2005) se enfrentan portante rol en el proceso de acoso. No obs-
a este problema y señalan que la compren- tante, sin negar la importancia del papel que
sión del acoso laboral pasa, necesariamente, pueden jugar los factores psicológicos indi-
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“El sistema de justicia penal no debería seguir del libre albedrío, de mismo modo que no de-
guiándose por ilusiones sobre la coherencia bería guiarse por nociones, en otros tiempos
de la conducta en distintas situaciones, por comunes, como la brujería o la posesión dia-
nociones erróneas sobre el mayor impacto en bólica”.
la conducta de la disposición que de la situa-
ción, por la incapacidad de considerar dete- Podemos dividir estos “niveles de influencia”
nidamente la lógica de las interacciones “per- sobre la conducta humana en tres órdenes
sona-situación”, o ni siquiera por el concepto principales: sistemas, situaciones y comporta-
reconfortante, pero en gran medida ilusorio, mientos (ver tabla siguiente).
NIVELES DE INFLUENCIA
Niveles de influencia
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Capítulo 2
Debemos insistir al llegar a este punto en “Modificar o impedir una conducta censura-
que la explicación de aquellas causas menos ble por parte de personas o de grupos exige
próximas a las conductas de las personas no una comprensión de las fuerzas, las virtudes
relativiza la responsabilidad del agresor ni el y las vulnerabilidades que aportan estas per-
daño de la víctima. Poniendo un ejemplo des- sonas o grupos a una situación dada. Luego
de otro contexto, imagínense que ocurre un debemos reconocer plenamente el conjunto
accidente de aviación por el que una persona de fuerzas situacionales que actúan en ese
sale dañada como consecuencia de una im- contexto conductual. Modificar o aprender a
prudencia (una trasgresión) del piloto. En este evitar estas fuerzas puede tener un impacto
caso queda clara la responsabilidad del piloto, mayor para reducir las reacciones individua-
no obstante imagínense también que como les censurables que cualquier medida correc-
resultado de las investigaciones se evidencia tora que se centre únicamente en las perso-
que la compañía aérea presionaba a los pilo- nas que se hallan en la situación.”
tos para que realizaran más horas de vuelo de
las permitidas y esa imprudencia pudo ser el Es sumamente importante entonces poder ar-
resultado de esa “presión”. Este nuevo ele- ticular como condiciones latentes dan lugar a
mento causal no disminuye la responsabilidad situaciones concretas de las que surgen los
del piloto, pero nos informa de que si quere- comportamientos del acoso laboral. En este
mos evitar nuevos accidentes de ese tipo, de- sentido, Aubrey J. Yates (1975) intentando
bemos actuar también a niveles organizativos, comprender el lazo existente entre frustra-
entre los que también habrá que depurar res- ción, conflicto y agresión, reclamaba una de-
ponsabilidades. limitación clara para los conceptos de “situa-
ciones frustrantes”, “organismos frustrados” y
Lo repetiremos todas las veces necesarias: “respuestas a este estado de frustración”:
Las explicaciones de los diferentes niveles de
influencia no relativizan el daño de las perso- “Para resumir: Los organismos situados en
nas afectadas ni merman en grado alguno la situaciones de frustración objetivamente de-
responsabilidad de las personas agresoras. finidas, experimentarán en diversos grados la
Como hubiese dicho el filósofo Xavier Zubiri frustración y manifestarán diversas respues-
respecto a la libertad y la propiedad de nues- tas a este grado de frustración”
tros actos, “no basta con ser yo, es necesario
ser mío”. La importancia de los diferentes ni- Esta idea de articulación de niveles puede ex-
veles causales es la de proporcionarnos dis- plicarse mediante el siguiente ejemplo saca-
tintos escenarios de intervención para facili- do de un caso real:
tar que el acoso laboral pueda prevenirse y/o
evitar que vuelva a repetirse. En palabras de En una empresa con una cultura basada en
Zimbardo (2008): la jerarquía de tipo militar y con un liderazgo
dictatorial no se evalúan los factores de ries-
110
Capítulo 2
go psicosocial a pesar de que existen indica- que “hagamos el trabajo que le correspon-
dores suficiente para presuponer la existencia de al mando pero que éste no sabe hacer”.
de riesgos de este tipo, índices de absentismo Tras una serie de enfrentamientos, el nuevo
y de rotación muy elevados, importante nú- mando emprende una serie de acciones de
mero de bajas por motivos psicológicos, etc. a ataque, por ejemplo burlándose y propagan-
los que la dirección no les presta atención. En do rumores sobre asuntos personales, en re-
dicha organización no existe ningún código lación al que parece ser el líder informal del
ético de conducta y la valía de sus mandos se grupo de trabajadores y al que todos daban
centra exclusivamente en los resultados obte- por ganador del proceso de ascenso.
nidos a corto plazo.
Como consecuencia de todo el proceso, los
En dicha organización existe un departamen- resultados del departamento bajaron aún más
to pequeño de aproximadamente ocho perso- y la persona afectada, el líder informal del gru-
nas que desarrollan un trabajo de oficina téc- po, necesitó acudir de forma privada a un es-
nica. Tras el despido del mando superior de pecialista en salud mental.
esta oficina queda vacante su plaza, para lo
que se abre un proceso de evaluación de los Tras un tiempo en el que la conflictividad se
empleados de la oficina con el fin de promo- fue incrementando la dirección decidió des-
cionar al más capacitado, dado que por for- pedir a cuatro de los trabajadores del grupo,
mación y por experiencia todos cuentan con incluyendo al líder informal, y sustituirlos por
las habilidades necesarias para desarrollar la trabajadores del departamento del que pro-
tarea. venía el nuevo mando, que en realidad eran
amigos de éste. Este hecho derivó en nuevos
Después de un tiempo de evaluación, la di- enfrentamientos, ahora entre dos grupos en-
rección selecciona a una persona externa que frentados…
resulta ser el familiar de un alto cargo de la
empresa, desarrollaba hasta el momento un En el caso anterior se puede observar cómo
tipo muy diferente de actividad y sus habilida- se articulan en un proceso de acoso laboral
des son ciertamente deficientes para realizar los órdenes latente, circunstancial y activo.
las tareas que se demandan en ese puesto.
9.1. UN POCO DE FILOSOFÍA
El nuevo mando se siente rechazado por el
grupo de trabajo y comienzan algunos conflic- Inmiscuyéndonos, de puntillas, en un profun-
tos relacionados con el desarrollo de algunas do y laberíntico debate filosófico, quizá haya
tareas. Al cabo de un tiempo el nuevo mando quedado una pregunta en el ambiente, una
les exige más compromiso a los empleados pregunta tan vieja como el ser humano mis-
en el desempeño de sus labores, lo que es mo: ¿Hasta qué punto es el ser humano libre
visto por los trabajadores como un intento de en sus actuaciones?
111
Capítulo 2
Las respuestas a esta pregunta han variado, hacia la que el individuo se gira finalmen-
a modo de péndulo, desde el determinismo te es la de las fuerzas externas que se
hasta la indeterminación sobre nuestros ac- ejercen sobre él.
tos, en otras palabras, desde:
• De acuerdo con el segundo modelo, el
• El principio del libre albedrío basado en sujeto es un prisma que desvía según su
las doctrinas filosóficas que sostienen estructura establecida, los rayos de luz
que los humanos tienen el poder de ele- del determinismo social.
gir y tomar sus propias decisiones, por lo
que los individuos pueden ser responsa- • En el tercer modelo, el sujeto se asimila
bles de sus propias acciones. al timonel de un barco; hay fuerzas exter-
nas, vientos y corrientes, que afectan al
• Hasta el principio del determinismo indi- velero. Su desplazamiento será sin duda
vidualista desde el que se sostiene que relativo a la estructura del barco (vela,
nuestra vida está regida o fuertemente deriva, timón). Pero el timonel puede
determinada por circunstancias que es- hacer variar esa estructura para utilizar
capan a nuestro control de modo que na- u oponerse a las fuerzas externas. El ti-
die es responsable, en última instancia, monel “voltejea para ganar el barlovento
de lo que hace o deja de hacer. cambiando la configuración de su velero
(su mareaje) y su dirección (su rumbo)”
A estos dos colores extremos debemos unir (Curie, 1993).
todo un elenco de grises. Por ello, a día de
hoy, estamos lejos de alcanzar una respues- Lo relevante desde este último supuesto es
ta absoluta, no obstante, comenzamos a dis- que el timonel no es sujeto pasivo de su situa-
poner de soluciones de compromiso que nos ción, sino que contribuye incluso a definirla.
permiten ver alguna luz, al menos parcialmen-
te, fuera de este singular callejón sin salida. Sin embargo, tampoco es dueño de sus inicia-
tivas. Para Clot, ayudándonos tanto de la mi-
Resulta difícil abrirse paso en este marasmo tología como de la ciencia podemos obtener
de modos y modas de entender la acción del una “teoría natural del sujeto” según la cual
ser humano. No obstante, desde las claves el mundo es mucho más una constelación de
de esta obra y sin pretensiones de resolver dificultades que un sistema de presiones. Por
el enigma, puede ayudarnos la visión de Yves ello, la dimensión de la elección nunca se en-
Clot (2009) sobre la existencia de tres mode- cuentra neutralizada en los lugares de traba-
los “metafóricos”: jo. De este modo, siguiendo al filósofo francés
Pierre Aubenque (1963) tendría sentido la filo-
• Desde el primer modelo, el sujeto huma- sofía de la acción promovida Aristóteles: “La
no no es más que una veleta (la dirección indeterminación de los futuros es lo que hace
112
Capítulo 2
que el hombre sea el principio de los mismos. • Situación: Aspectos visibles de los he-
La naturaleza inacabada del mundo es el na- chos y los fenómenos.
cimiento del hombre.”
Son categorías subjetivas que influyen en la
Para finalizar, esta perspectiva conlleva tres forma de abordar la realidad social aportan-
giros conceptuales: do el punto de vista. Por ejemplo es diferente
estudiar el organigrama de una empresa des-
1) En nuestra concepción de la condición de el punto de vista del fenómeno social del
humana: Nacemos para cambiar, los se- liderazgo que desde el punto de vista de una
res humanos son proyectos inacabados situación social concreta de crisis.
que se reescriben continuamente.
Para nuestros propósitos podemos afirmar
2) En nuestra concepción metodológica: que la realidad social está compuesta de fac-
Si el comportamiento humano tiene un tores individuales (comportamientos), factores
origen multicausal, para llegar a com- relacionales (situaciones) y factores organiza-
prender una situación determinada de- cionales o institucionales (contextos)
bemos evaluar las distintas fuentes del
comportamiento con diferentes metodo- Desde una perspectiva sistémica de análisis
logías, para luego unir los resultados en nunca debe realizarse el estudio de un fenó-
un discurso coherente. meno aislado en sí mismo, sino que es impres-
cindible ampliar el marco de referencia hasta
abarcar todos los elementos que estén inci-
10 Hacia una visión de sistemas
diendo en él (el sistema).
113
Capítulo 2
pasar a analizar todas las partes que lo com- utilizados para analizar un sistema social po-
ponen, hasta las unidades más pequeñas de drán serán muy variados, encontrándonos
observación, y sus interacciones internas y con:
externas (psicológicas, físicas, culturales…).
Para ello, es necesario estudiar los fenóme- • Elementos descriptivos: Frutos de la ob-
nos en estrecha relación con su contexto. La servación de la actividad.
asunción de esta perspectiva sistémica lleva • Elementos estructurales: Organización y
consigo un cambio en nuestra percepción de estructura de los elementos descriptivos
la realidad. Ciertos rasgos individuales deben encontrados.
verse a la luz de las normas y patrones de la • Elementos funcionales: Relación de los
situación. Esta proposición puede apreciarse elementos con el conjunto y con otras
en la investigación de las conductas disfun- funciones.
cionales de las personas dentro de un grupo: • Elementos culturales: Normas, valores,
Si no recabamos en el contexto, estas con- creencias de la organización.
ductas pueden explicarse por un problema • Elementos estadísticos: Patrones, ritmos,
individual. Sin embargo, desde una perspecti- secuencias.
va sistémica, estos comportamientos pueden • Elementos conflictivos: Conflictos abier-
indicarnos también disfunciones a nivel del tos y subyacentes.
grupo, sin dejar de tener en cuenta la posible • Elementos histórico-evolutivos: Origen y
existencia de factores individuales. Esta dife- evolución del proceso en el tiempo.
rente percepción tendrá unas consecuencias
extremas en lo relativo al resultado de nues- Adaptado de: Francia, Martín, Salmerón y Es-
tros análisis. teban, 1993.
114
Capítulo 2
Cada línea del triángulo representa al conjun- agrupaciones de criterios de análisis (ver figu-
to de relaciones relevantes que se da entre ra).
los elementos señalados en los vértices. Así
tenemos tres grandes grupos de relaciones a Los criterios a evaluar en la línea que repre-
evaluar: senta a la relación entre la organización y los
potenciales acosadores se subdividen en dos:
• Las relaciones que se dan entre la orga-
nización y los afectados potenciales, • Los que responden principalmente a la
cuestión de hasta qué punto la organiza-
• Las relaciones entre la organización y los ción es un elemento facilitador-limitador
acosadores potenciales, de la existencia de acosadores.
115
Capítulo 2
Los criterios a evaluar en la línea que repre- Los criterios a evaluar en la línea que repre-
senta a la relación entre la organización y los senta a la relación entre los acosadores po-
afectados potenciales se subdividen en dos: tenciales y los afectados potenciales se sub-
dividen en dos:
• Los que responden fundamentalmente a
la cuestión de hasta qué punto la organi- • Los que responden fundamentalmente a
zación evita-facilita la existencia de afec- la cuestión de cuáles son los modos de
tados por el acoso psicológico. interacción que establecen los acosado-
res con los afectados y la trazabilidad de
• Los que responden principalmente a la dichos modos de interacción.
pregunta de hasta qué punto las perso-
nas afectadas o potencialmente afecta- • Los que responden principalmente a la
das por el acoso psicológico se relacio- pregunta de cuáles son los modos de in-
nan con la organización y esta relación teracción que establecen los afectados
es determinante de su papel. con los acosadores y si éstos son detec-
tables y modificables.
Segmentos de Análisis.
116
Capítulo 2
Debemos destacar que la utilidad del análisis que, sumado a otros factores, podría reducir
de una organización mediante los criterios la posibilidad o frecuencia de este fenómeno.
anteriores sólo puede entenderse desde un En otras palabras, eliminando un conjunto de
punto de vista global - sistémico, dado que la circunstancias propiciatorias dificultaremos
presencia de uno o varios de estos criterios en que los desencadenantes puedan prender la
una organización no constituye en sí mismo mecha.
una situación potencial de acoso psicológico
en términos de causalidad lineal. Un ejemplo
de ello sería el hecho de que la existencia de
un código ético en la empresa, posible crite-
rio a evaluar, no evitará todas las situaciones
posibles de acoso psicológico, pero sí consti-
tuiría un factor limitador de estas situaciones
117
Capítulo 2
Parte 2.
EVALUACIÓN E INTERVENCIÓN (SATA)
118
Capítulo 2
Resumen de conceptos
Método: Como la distancia entre la pregunta y la respuesta; Estrategias de In- Para hacerse una idea correcta del procedimiento de evaluación en Preven-
vestigación: Como los caminos para recorrer esa distancia; Técnicas: Como los ción de Riesgos Laborales recomendamos la lectura del libro: “Ergonomía:
medios de transporte posibles para recorres el camino elegido; Instrumentos: Pautas de actuación. Guía para la realización de evaluaciones Ergonómicas y
Como los modelos concretos de los medios de transporte. Psicosociales”. Editado por el Colegio Oficial de Psicología de Andalucía Occi-
dental en 2008.
Esta diferenciación no es un modelo asumido por una estrategia de investigación que con-
por toda la comunidad científica, de hecho lleva a su vez un conjunto de procedimientos
existen controversias para la diferenciación que se utilizan en la adquisición y elaboración
de cada término. Sin embargo, recomenda- de nuevos conocimientos. La lista de compro-
mos esta estructuración metodológica por su bación que se expone más adelante (G-SATA)
simplicidad de cara a los informes. estaría en el último nivel, es un instrumento al
servicio de esa estrategia.
El Sistema de Análisis Triangular del Acoso
Laboral es un modelo conceptual que conlle- A modo de ejemplo, en la siguiente tabla po-
va una metodología en el segundo nivel pro- demos ver esta estructura en modo de ficha
puesto. Este segundo nivel estará formado metodológica:
119
Capítulo 2
Debemos señalar que el método es sólo el ca- lo tanto contraria al sentido mismo de la disci-
mino, y lo importante no es el camino sino lle- plina, y debe evitarse a toda costa.
gar a buen puerto. Dicho en otras palabras: La
Ergonomía y Psicosociología no consiste en Desde esta obra recomendamos encarecida-
aplicar métodos, sino en llegar a establecer mente que si se va a utilizar un sólo método
un discurso coherente y fidedigno de lo que sin avanzar sobre la comprensión de la situa-
ocurre en la situación de trabajo. ción de trabajo, no se nombre a tal investiga-
ción como “evaluación ergonómica y/o psico-
Este error es muy frecuente en informes er- social” y, en su lugar, se titule con la fórmula:
gonómicos y psicosociales donde más parece “Estudio sobre (mobbing, burnout, etc.) uti-
que su finalidad es la de aplicar tan correc- lizando el método (X) sobre una muestra de
tamente un método (a menudo surgido en trabajadores del sector (Y)”.
ámbitos puramente académicos e, incluso,
validado sólo con población estudiantil) que Lo más importante para el ergónomo, y lo re-
la comprensión de la situación de trabajo real petiremos cuantas veces sea necesario, es
sigue quedando huérfana tras un esfuerzo comprender el trabajo para transformarlo. El
evaluativo y también de tiempo y de dinero. profesional de la ergonomía no es un admi-
Resulta sorprendente, por ejemplo, que en el nistrador de métodos que otros crean, es un
análisis de resultados tras la administración científico aplicado que debe dominar la meto-
de un único cuestionario a un grupo de tra- dología de modo suficiente y adecuado para
bajadores se concluya diciendo que “tal vez utilizar, modificar o crear métodos de evalua-
no se encontraron daños porque los puntos ción permitiéndole llegar a obtener la com-
de corte del cuestionario se refieren a otra prensión de la situación de trabajo con el rigor
población”. Esta aplicación “inocente” de los necesario para poder transformarla.
métodos en ergonomía y psicosociología es
excesiva y erróneamente tecnocentrista, por A modo de reflexión sobre este asunto ofre-
120
Capítulo 2
121
Capítulo 2
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Capítulo 2
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Capítulo 2
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Capítulo 2
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Capítulo 2
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Capítulo 2
127
Capítulo 2
Tipos de Triangulación.
128
Capítulo 2
Desde el punto de vista sistémico, el uso de a términos del tipo “adecuado”, “suficiente”,
la triangulación no debe hacernos partícipes “apropiado” en la normativa, por otro, crean
de un realismo ingenuo mediante el que sólo un marco en el que el objetivo de la evalua-
necesitaríamos conocer que los resultados de ción estará relacionado con la comprensión y
los métodos se avalan unos a otros. La trian- la descripción de los procesos más que en su
gulación no pretende mezclar aseveraciones “medida”. La consecución de ese marco co-
de paradigmas o realidades (estáticas y diná- herente con el que describimos el fenómeno
micas) diferentes. Tampoco pretende mezclar a estudiar es lo que denominamos finalmente
perspectivas objetivas y subjetivas o aproxi- como “informe descriptivo” en contraste con
maciones inductivas y deductivas. Ni siquiera el “informe metrológico”.
aunar visiones integrales y particulares, datos
numéricos y textuales, o consideraciones de La triangulación, más allá de la mera confir-
causalidad e incausalidad. mación o contraste de los resultados, permi-
te una articulación conceptual de órdenes
Es imprescindible entender que la mezcla distintos en un mismo sistema, por ejemplo:
de datos no ocurre durante la etapa de los Esfera organizacional, esfera relacional y es-
resultados, sino en la de análisis de los mis- fera individual. De este modo, los resultados
mos (la discusión) y, por consiguiente, en las de las diferentes técnicas sirven para recrear
conclusiones. En dicha etapa de análisis, el una situación desde múltiples puntos de vis-
evaluador detectará una tendencia lógica en ta. Esta realidad poliédrica es necesaria en
la combinación de los resultados, es por ello las evaluaciones ergonómicas y psicosocia-
que la validez de la triangulación reside en la les, donde debemos ir más allá de lo evidente
capacidad de organizar los resultados de las para llegar hasta los factores multicausales de
técnicas en un marco coherente. los riesgos.
129
Capítulo 2
130
Capítulo 2
131
Capítulo 2
sición y del riesgo es muy difícil y costosa y “Es necesario medir y cuantificar para deter-
que la mayoría de las mediciones realizadas minar si existe un riesgo”: Aquí hablamos de
en la industria tiene poco valor o se ha rea- utilizar unos límites (la mayor parte de las ve-
lizado de forma incorrecta. Por lo tanto, es ces cuestionables) frente a una concepción
necesario persuadir a los actores de la pre- preventiva que refleje la continuidad de la re-
vención de riesgos, los profesionales que sis- lación riesgo-dosis.
temáticamente miden y a las empresas que
están pidiendo esos datos cuantitativos, para Resumiendo, será siempre de más utilidad un
que reflexionen sobre el verdadero interés de informe que presente los problemas principa-
estas mediciones, su validez, su costo y con- les, seguidos de las soluciones pragmáticas
vencerlos a “evaluar” con mayor validez, con encontradas y consensuadas que un informe
conocimiento y de acuerdo con objetivos ex- extenso con multitud de gráficas y números
plícitos. Como lo dijo Goelzer en 1996 (citado que sólo brinden las bondades del instrumen-
por Malchaire, 2010): to elegido.
132
Capítulo 2
133
Capítulo 2
Para finalizar este apartado sobre requisitos bio, de un status de mayor protección e inde-
metodológicos reproducimos, por su innega- pendencia técnica si expresa opiniones que
ble claridad, algunas de las consideraciones no son favorables a la dirección de la empre-
expresadas por Manuel Velázquez, Juan Ig- sa. La respuesta a esta cuestión depende de
nacio Goiria e Iñaki Olaizola, del Observatorio cada caso y circunstancia.
Vasco sobre el Mobbing y presentadas duran-
te la 6th International Conference on Workpla- La evaluación o identificación de problemas
ce Bullying en junio de 2008 en Montreal: relacionados con el estrés y la violencia en el
trabajo debe ser también eficaz cuando es-
“Se debe garantizar la confidencialidad de tos factores no afectan a la organización en
los datos e informaciones que se reciben de su conjunto sino solamente a determinadas
trabajadores y trabajadoras en el proceso personas.
de evaluación. La persona evaluadora debe
hacer un delicado juego de equilibrio para En las pequeñas empresas el proceso de
no dañar la intimidad de éstos al tiempo que evaluación debe ser mucho más simple y es
debe procurar que su acción preventiva sea preferible el uso de entrevistas al de cuestio-
eficaz. narios.
En principio, podría parecer que dicha inde- Las medidas que se adopten no deben ser
pendencia técnica está más garantizada si estereotipadas sino muy concretas, y corres-
se trata de una persona no implicada en la ponde a la persona empleadora definirlas y
empresa y que no tiene intereses propios en adoptarlas, previa consulta a los trabajado-
ella. Sin embargo, una persona experta exter- res y trabajadoras. Algunas medidas especí-
na puede estar sometida a más presiones de ficas, tales como la formación, las declaracio-
la empresa al mantener con ésta una relación nes solemnes del empresario o los códigos
mercantil y por tanto más precaria mientras de conducta, deben adaptarse a la situación
que una persona del servicio de prevención real de la empresa que ha debido ser previa-
interno de la empresa puede gozar, en cam- mente analizada o evaluada.
134
Capítulo 2
135
Capítulo 2
La observación directa del proceso de trabajo Los pasos que se tienen que seguir para llevar
es una técnica que consiste en observar aten- a cabo la Observación Directa son:
tamente el fenómeno, hecho o caso, tomar in-
formación y registrarla para su posterior análi- a. Determinar el objeto, situación, caso,
sis. En la observación será necesario tener en etc (que se va a observar)
cuenta dos aspectos importantes que pueden
influir en el resultado obtenido tras la misma: b. Determinar los objetivos de la obser-
vación (para qué se va a observar)
a) Ocultamiento: El individuo observado
puede percatarse de la presencia del ob- c. Determinar cómo se va a realizar la ob-
servador y distorsionar la conducta. servación
136
Capítulo 2
nes en un grupo focal, etc. En este sentido, la previas del mismo sujeto, de otros sujetos o
observación puede ser tomada como una téc- de teorizaciones sobre su actividad, por ejem-
nica transversal al proceso de investigación. plo según normas o procedimientos); Simulta-
Por este motivo, durante la investigación se neas (paralelas al desarrollo de la acción); De
deberá utilizar un registro de observaciones interrupción (en momentos precisos de la acti-
que será analizado y contrastado junto a los vidad); Aplazadas (referidas a algún momento
resultados de las otras técnicas. pasado o futuro de la actividad); Entrevistas
de explicitación.
La observación directa empleada durante las
evaluaciones ergonómicas y psicosociales 12.6.3. ENTREVISTAS SEMIESTRUCTURADAS
suele ser no estructurada (se realiza sin la
ayuda de elementos técnicos especiales) y de La información obtenida mediante verbaliza-
campo (se realiza en los lugares donde ocu- ciones provocadas puede complementarse
rren los hechos o fenómenos investigados). mediante la realización de entrevistas semies-
Las evaluaciones no estructuradas y de cam- tructuradas. Este tipo de entrevistas suponen
po constituyen el recurso principal de la ob- un modelo intermedio entre la entrevista no
servación descriptiva y equilibran la minimiza- estructurada y la entrevista cerrada (dirigida
ción del impacto del proceso de estudio sobre completamente por el técnico) y es probable-
el curso natural del trabajo con la obtención mente el tipo más común de entrevista usado
de datos relevantes con validez ecológica. En en la investigación social cualitativa. En este
esta línea, suele utilizarse el “registro anecdó- tipo de entrevista, el primer objetivo del inves-
tico”, donde de trata de registrar aquello que tigador es conocer “de primera mano” infor-
parece más significativo o digno de tenerse mación específica sobre el tema de estudio.
en cuenta sobre un lugar o sobre las manifes- Para ello, es necesario hacer las mismas pre-
taciones comportamentales de un individuo o guntas a cada entrevistado. Las entrevistas
grupo sin interpretar o juzgar, sino transcribir pueden hacerse a los actores, a los mandos o
o describir. En otras palabras: Máxima obser- a los representantes de los trabajadores para
vación, media descripción y mínima interpre- recabar diferentes aspectos de la situación de
tación. trabajo.
137
Capítulo 2
temente flexible para que cada entrevistado cunstanciales); 3. Los comportamientos rela-
pueda presentar información no prevista y cionados con un posible conflicto interperso-
que considere como relevante respecto al nal actual (elementos activos).
tema de estudio. Para ello no se efectúan pre-
guntas demasiado directas ni demasiado en- Durante las entrevistas podemos aplicar pau-
cubiertas. En la práctica se suele comenzar tas para el reconocimiento de casos de acoso
con preguntas abiertas que otorguen cierta utilizando un enfoque de análisis del lenguaje
libertad al entrevistado para la elaboración de (Parés, 2005). Para la realización de este aná-
la respuesta, ofreciéndole la posibilidad de lisis recabaremos información en el discurso
aportar información propia que puede resultar de la persona presuntamente acosadora so-
relevante. De este modo el investigador pue- bre:
de alcanzar un segundo objetivo: Una com-
prensión holística del punto de vista o de la si- 1. La falta de lógica o la lógica desconcer-
tuación de los entrevistados. Estas preguntas tante (incongruencia).
son llamadas preguntas guías y versan, según
el caso, sobre la existencia de problemática 2. La contradicción, a través de: Las fala-
preexistente, las circunstancias actuales del cias o argumentos falsos (que incluyen la
equipo (departamento, centro de trabajo…), insinuación y los malos entendidos) y los
sobre comportamientos relacionados con un errores o equivocaciones intencionadas
posible conflicto interpersonal o sobre la si- en el razonamiento.
tuación de trabajo en general.
12.6.4. ENTREVISTAS NARRATIVAS (INVESTI-
La entrevista de confrontación, de confron- GACIÓN NARRATIVA)
tación cruzada y de autoconfrontación son
entrevistas semiestructuradas que tienen el Siguiendo a Appel (2005), a partir de estudios
objetivo de confrontar con el entrevistado los sociolingüísticos, existen tres tipos de esque-
datos obtenidos mediante otras técnicas y en- mas comunicativos para exponer hechos so-
trevistas (ya sean sobre otros datos, otros in- ciales: la narración, la descripción y la argu-
formantes o sobre el informante mismo). Me- mentación.
diante esta técnica se enfrenta al entrevistado
a la ilogicidad o al carácter paradójico de la La metodología de la entrevista narrativa par-
relación entre su tarea y su actividad. te de la hipótesis de que la narración de las
experiencias personales sin previa prepara-
Durante las entrevistas realizadas en un caso ción supone una aproximación máxima a los
de acoso laboral las preguntas guías se pue- hechos realmente experimentados, y se basa
den formular sobre: 1. La existencia de pro- en tres marcos teóricos: el Interaccionismo
blemática preexistente (elementos latentes); Simbólico, la Fenomenología Social y la Etno-
2. Las circunstancias actuales (elementos cir- metodología.
138
Capítulo 2
139
Capítulo 2
nes normales, entrevistas convencionales o La reunión del grupo es dirigida por un mode-
en respuesta ante cuestionarios (Flick, Op. rador que facilita la discusión y utiliza una guía
Cit.). de discusión para mantener el enfoque de la
reunión y el control del grupo. La guía de dis-
Es importante aclarar que el desarrollo de téc- cusión contiene los objetivos de la investiga-
nicas como la observación, verbalizaciones ción e incluye preguntas de discusión abierta.
y las modalidades de entrevistas aquí pre-
sentadas requiere de una formación extensa Los grupos deben ser homogéneos y estar
sobre su uso y preparación. Este tipo de téc- compuestos por un número entre cinco y diez
nicas son prácticamente imprescindibles en personas. Para determinar cuántos grupos se
cualquier investigación psicosocial, pero en necesitan se debe recopilar la información
ningún caso pueden improvisarse o llevarse pertinente para generar hipótesis del tema en
a cabo sin la preparación teórica, práctica y estudio.
deontológica pertinente y deben restringirse
sólo a profesionales expertos en ciencias so- La discusión se debe conducir en forma de
ciales. La experiencia nos señala que su “apa- diálogo abierto en el que cada participante
rente simplicidad” suele estar detrás del mal pueda comentar, preguntar y responder a los
uso común de estas técnicas. comentarios de los demás. De este modo, los
participantes hablan libre y espontáneamente
Explicar las características de las narraciones sobre los temas que se consideran de impor-
y su importancia a la hora de revelar informa- tancia para la investigación. En otras palabras,
ción a través de las entrevistas narrativas o las el discurso se escucha en situación de no-po-
entrevistas episódicas excede de las posibili- lémica (cada colectivo por separado y, salvo
dades de esta obra. Para introducirse en este excepciones, el facilitador no aporta ni contra-
campo recomendamos la lectura atenta de la pone opiniones).
obra de Juan Carlos Gorlier (Gorlier, 2000).
Mediante esta técnica no se validan percep-
12.6.5. GRUPOS DE DISCUSIÓN ciones ni se analiza la realidad. El facilitador
mediante la escucha verifica la aparición o la
El grupo de discusión, a veces llamado en el preexistencia de hilos discursivos o líneas de
proceso de evaluación como “grupo de mejo- opinión dominantes que deberá interpretar e
ra” de cara a evitar una connotación negativa integrar en un discurso coherente.
de la palabra “discusión”, es una técnica cua-
litativa de exploración de percepciones por En los grupos de discusión se plantean fun-
medio de la escucha del discurso libremente damentalmente dos preguntas abiertas: ¿Cuá-
aportado por un volumen significativo de per- les son los problemas principales del equipo
sonas de los colectivos implicados. (departamento, centro de trabajo…)? y ¿Cuáles
son las soluciones a estos problemas? Como
140
Capítulo 2
141
Capítulo 2
142
Capítulo 2
143
Capítulo 2
del acoso laboral (acosador, afectado y orga- lar en una organización concreta podrá seña-
nización), y por otro lado nos referimos a la lar el camino de las mejoras a introducir para
triangulación como el acercamiento metodo- evitar situaciones de acoso laboral.
lógico que creemos más propicio a la hora de
analizar el fenómeno. Esta lista de comprobación tiene por admi-
nistrador y destinatario al evaluador. Supone
El Sistema de Análisis Triangular del Acoso una guía de recolección de datos donde cada
Laboral no es una herramienta de evaluación ítem contestado representa un indicio sobre
clínica ni de Recursos Humanos, es una me- la posibilidad (riesgo) de acoso, de modo que
todología de evaluación preventiva que debe a mayor número de ítems mayor es la posibi-
servir para recoger información relevante y lidad de la presencia de un caso de acoso o
para otorgarle una significación de cara a la de una vulnerabilidad en la organización que
gestión de Prevención de Riesgos Laborales, posibilite su existencia futura. Estos indicios
determinando condiciones facilitadoras o limi- son de naturaleza distinta (controles organiza-
tadoras del inicio del fenómeno, y no sólo la cionales, conductas, evidencias de daños…) y
historia de conflictos previos, situaciones dis- deberán completarse (y complementarse) uti-
paradoras o evidencias de conflictos en curso. lizando diferentes fuentes de información.
El Sistema de Análisis Triangular del Acoso La lista de comprobación G-SATA aporta una
Laboral es, en este sentido, una herramienta sistemática de recogida de indicios en base a
conceptual necesaria para la evaluación de una lista de criterios. Cada criterio está pen-
este tipo de situaciones. sado con el objetivo de valorar parte de un
segmento de análisis concreto, no obstante,
Desde esta concepción se creó una lista de podemos agruparlos por áreas temáticas. En
comprobación a la que denominamos G-SA- este sentido, nos parece importante señalar
TA que consiste en una serie de criterios de que lo que aportamos en este momento es la
evaluación agrupados en función de la rela- primera fase de desarrollo de la herramienta,
ción que tienen entre sí los tres elementos del es decir, los criterios de análisis consensua-
sistema (Organización, Afectado y Acosador) dos y filtrados por un panel de expertos en
desde una triple perspectiva (organizacional, base a la literatura científica actual.
relacional e individual).
Este instrumento constituye una ayuda útil
Estos criterios de evaluación, con sus pro- para profesionales de la Ergonomía y Psico-
puestas de valoración específicas (criterios, sociología aunque entendemos que ha de ser
niveles de significación…), permiten analizar la utilizado junto a otras pruebas desde la pers-
posibilidad de que se den situaciones de aco- pectiva metodológica de la triangulación per-
so en las organizaciones. De este modo, una mitiéndonos identificar fortalezas y vulnerabi-
visión de conjunto de este escenario triangu- lidades que posibiliten futuras mejoras.
144
Capítulo 2
90 ítems: Seis listados (uno por segmento de análisis) con 15 ítems (criterios) cada uno.
Contenido
145
Capítulo 2
sario un análisis global de los resultados por criterios fueron filtrados en función de la lite-
parte del evaluador. ratura científica actual, quedando 15 criterios
significativos por segmento de evaluación (en
13.2. CREACIÓN DE LA HERRAMIENTA total: 90 ítems). A continuación se enumeran
G-SATA las fases de creación de la herramienta.
Para la elaboración de esta herramienta se • Creación del marco conceptual del Siste-
creó un panel de expertos (Psicólogos Clíni- ma de Análisis Triangular del Acoso La-
cos, Responsables de RR.HH., Prevencionis- boral.
tas, Ergónomos, Orientadores laborales) con • Formación del grupo de expertos.
experiencia directa en casos de acoso. Se • Identificación y selección de los criterios
realizaron reuniones sistemáticas en las que, de análisis.
tras consensuar el acoso desde el modelo re- • Redacción previa de los listados de cri-
lacional que hemos presentado, se dividió al terios.
grupo de expertos en tres subgrupos: • Validación bibliográfica.
• Valoración de los ítems del G-SATA.
1. Grupo del área de persona acosadora • Valoración de la estructura del G-SATA.
2. Grupo del área de la organización • Filtrado de los criterios según resultado
3. Grupo del área de persona afectada de valoración.
• Redacción definitiva de las listas de cri-
Cada subgrupo se responsabilizó de aportar terios.
criterios válidos de evaluación en casos con- • Redacción de la monografía.
cretos de acoso y de consensuarlos en las • Creación de aplicación en hoja de cálcu-
reuniones generales, de este modo se ob- lo.
tuvieron 208 criterios. En último lugar, estos
146
Capítulo 2
PROCESOS SOCIALES
147
Capítulo 2
Daño Social
ÁREAS DE EVALUACIÓN ÍTEMS
148
Capítulo 2
149
Capítulo 2
La cifra del divisor de la fórmula corresponde cero a 100 de la situación global de agresión.
a la cifra máxima que puede alcanzar la suma Un valor alto determinaría la necesidad de
de los valores de las variables anteriores utilizar herramientas específicas en esta área
(3+6+12+14=35). (LIPT-60 versión española, entrevistas clínicas
sobre daño, NAQ…).
La forma de asignación de valores a cada una
de las variables viene recogida en las instruc- Los niveles de significación “orientativos” que
ciones del segmento de agresión (Ac- Af). proponemos en función de los resultados son:
Este índice proporciona una estimación de
0 SIN AGRESIONES
SATA index
0–5
SITUACIÓN GLOBAL SA-
- Sin tipificación temporal
TISFACTORIA
- Sin marcadores de agresión > 25
6–30
SITUACIÓN GLOBAL DE
- Sin tipificación temporal
ALERTA
- Sin marcadores de agresión > 25
1–90
- Ningún segmento > 6 SITUACIÓN GLOBAL DE
- Otro resultado con tipificación temporal PELIGRO
- Otro resultado con marcadores de agresión < 25
Análisis del perfil gráfico
150
Capítulo 2
Niveles de significación
Niveles de significación
Gráficos de resultados.
151
Capítulo 2
152
Capítulo 2
Count
TSprl2 Total
1 2
TSprl1 1 27 10 37
2 12 34 46
Total 39 44 83
Symmetric Measures
Asymp. Std.
Value Approx. Tb Approx. Sig.
Errora
Measure of Agreement Kappa 0,466 0,097 4,254 0,000
N of Valid Cases 83
a. Not assuming the null hypothesis.
b. Using the asymptotic standard error assuming the null hypothesis.
Count
TSprl2 Total
1 2
TSprl1 1 34 7 41
2 6 29 35
Total 40 36 76
153
Symmetric Measures
Asymp. Std.
Value Approx. Tb Approx. Sig.
Errora
Measure of Agreement Kappa 0,656 0,087 5,725 0,000
N of Valid Cases 76
a. Not assuming the null hypothesis.
b. Using the asymptotic standard error assuming the null hypothesis.
O-AC 6 4 2
O-AF 8 5 2
AC-O - - 6
AF-O 2 3 4
AF-AC 1 - 5
AC-AF 2 7 10
19 19+19=34 29+19=48
TOTALES:
(21% de los ítems) (42% de los ítems) (53% de los ítems)
154
INTERPRETACIÓN DE LOS VALORES DEL ÍNDICE KAPPA SEGÚN EL RANGO DE VALORES
Landis, J.R. y Koch, G. G. (1977). The measurement of observer agreement for categorical data. Biometrics. Vol. 33, pp. 159—174
RECURSOS DE EVALUACIÓN
FSICO 2.0 / 3.0 Metodología del INSHT para la evaluación de factores psicosociales.
LIPT-60 G Herramienta basada en el cuestionario de Leyman para observar estilos de mando a nivel grupal.
155
Mediante esta diversidad de fuentes se explo- el cuadro siguiente se reproduce un segmen-
ran los diversos ítems de cada segmento has- to concreto y las fuentes correspondientes.
ta que queden saturados de información. En
RECURSOS DE EVALUACIÓN
- Observación
El tipo general de conflicto en el grupo de trabajo ( jefes y compañeros) es el de - Verbalización
1
tarea. No se percibe un nivel excesivo de conflictos relacionales. - LIPT-60G
- Q-SATA
Existen mecanismos de evaluación-control de los responsables/jefes en materia de - Documentación
gestión de personal. Por ejemplo, en caso de existir una política de descentraliza- - RRHH
2 ción en la organización. ¿Se establece algún mecanismo extra de control sobre esa
descentralización (para que los responsables/jefes no puedan hacer y deshacer en
materia de gestión de personal sin pedir explicaciones).
Parte de la remuneración por objetivos de responsables/jefes está relacionada con - Documentación
3 la gestión del personal (estadísticos de accidentalidad, índice de absentismo, índice - RRHH
de rotación…).
Existe una correcta planificación y organización del trabajo y de las relaciones - Documentación
sociales en la organización. La organización respeta y fomenta el cumplimiento - RRHH
4
del convenio colectivo y de la normativa interna en todos los niveles organizativos - Entrevista
(materializándose de manera efectiva en el puesto de trabajo concreto). - Observación
- Q-SATA
El liderazgo imperante en la organización es de estilo autoritario (tiránico) o “laissez - Verbalización
5
faire” (dejar hacer). - RRHH
- Observación
Existen canales ascendentes y descendentes de comunicación entre los distintos - FSICO 2.0
miembros de la organización. El flujo de información y de la comunicación interna - RRHH
6
es adecuado. La organización (y sus responsables) hace llegar a los trabajadores el - Verbalización
valor de sus aportaciones. - Entrevista
- Documentación
7 ¿Existen canales y/o procedimientos que mantengan la confidencialidad?. - RRHH
- Entrevista
- RRHH
Puede el trabajador expresar sus opiniones sobre el trabajo a su jefe libremente.
- FSICO 2.0
8 Puede elevar una petición en este sentido a superiores jerárquicos de su jefe, en el
- LIPT-60G
caso de que éste no atienda a sus demandas, sin temor a represalias
- Verbalización
Recursos Humanos o el Servicio de Prevención pueden ser órganos ejecutores en - Documentación
caso de conflicto. ¿Se incluye en el Convenio Colectivo cláusulas sobre la aplicación - RRHH
9
de sistemas correctores a los agresores, introduciendo el acoso como conducta
merecedora de sanción disciplinaria?.
- Q-SATA
10 Existe un código de conducta ético. - RRHH
- Documentación
156
Existe una adecuada selección del perfil profesional y personal para cada puesto - RRHH
11 de trabajo. La selección de personas para puestos intermedios o directivos está - Documentación
basada en competencias y no en fidelidad, familiares, amigos…
La gestión de personal se realiza de manera respetuosa con los trabajadores. No - Observación
se gestiona desde la amenaza, utilizando políticas y prácticas empresariales tales - Entrevista
12 como: despidos, reestructuración, remodelación, reducción de plantilla, traslados. O - Verbalización
existiendo excesivo control de los tiempos de trabajo y descansos, ausencias, faltas - RRHH
de puntualidad… - LIPT 60G
- Observación
- Verbalización
Existe una atmósfera amistosa y de apoyo en la organización. El ambiente laboral
13 - LIPT-60G
no se percibe como altamente estresante y competitivo.
- FPSICO 2.0
- Q-SATA
Se imparte formación a administradores, directivos, responsables de RR.HH. y de la - Entrevista
14 representación de personal y a los propios trabajadores como sujetos protagonistas - Documentación
de las relaciones sociales. - RRHH
- Documentación
15 Se establecen controles periódicos para detectar supuestos de acoso.
- RRHH
157
• El alfa de Cronbach obtenido es 0,764 lo vestigadores. De este modo, trabajado-
que señala que el instrumento presenta res y trabajadoras utilizan el concepto
una buena fiabilidad interna. de acoso laboral para señalar un acoso
• El análisis factorial obtiene 6 componen- más bien de tipo organizativo (“el acoso
tes que permiten explicar el 70,99 de la laboral institucionalizado”) en el que las
varianza. prácticas organizativas sobre la relación
• Los componentes coinciden parcialmen- con los trabajadores son consideradas
te con los segmentos de análisis. injustas.
• Los resultados encontrados en el análi-
sis factorial se encuentran en la línea de En resumen, los datos estadísticos del cues-
la investigación realizada por Liefooghe tionario Q-SATA confirman la existencia de
y Mckenzie en 2003 mediante la técnica los seis segmentos de análisis y obtienen una
de los grupos focales, en la que descu- buena fiabilidad interna.
brieron que los operadores pueden tener
una conceptualización del acoso laboral Reproducimos la parte del cuestionario que
que dista bastante de la visión de los in- aborda el segmento anteriormente expuesto.
Q-SATA
SEGMENTO O-AC NP SI NO
Si en este momento tuviera un problema en su grupo de trabajo ( jefes/as
1 y/o compañeros/as), ¿diría que es referente al trabajo que realiza o cómo lo
realiza?
2 ¿La relación con su jefe es participativa y constructiva?
¿Puede expresar su opinión sobre el trabajo a su jefe libremente? Puede
3 elevar una petición en este sentido a superiores jerárquicos de su jefe, en
el caso de que éste no atienda a sus demandas, sin temor a represalias.
4 ¿Conoce la existencia de un Código de Conducta Ético en su empresa?
¿Existe una atmosfera amistosa y de apoyo en su organización? El ambiente
5
laboral no se percibe como altamente estresante y competitivo.
158
159
CAPÍTULO
3
Capítulo 3
Parte 1.
CONCEPTOS Y DEFINICIONES
162
Capítulo 3
163
Capítulo 3
“Algunas partes estiman que la violencia en laboral implica un riesgo laboral y, en conse-
el lugar de trabajo, tanto en lo que respecta cuencia, la responsabilidad del empresario en
a su prevención como a sus consecuencias, la prevención de la violencia física ejercida
incumbe principalmente a la gestión de los contra sus trabajadores en el lugar de trabajo
recursos humanos. Otras, por el contrario, es- (criterio técnico 87-2011 de la Inspección de
timan que se trata de una cuestión de seguri- Trabajo y Seguridad Social).
dad y salud en el trabajo”.
Resumiendo lo expuesto hasta ahora, la vio-
En el mismo documento se llega al consenso lencia externa es un fenómeno cultural, que
de la necesidad, para abordar este reto, de afecta a todos los sectores aunque más inten-
establecer y seguir un enfoque previsor basa- samente a los servicios, que tiene una impor-
do en los sistemas de gestión de la seguridad tancia creciente y que debe afrontarse desde
y la salud en el trabajo. En este sentido, debe- diferentes ámbitos organizacionales sin negar
mos tener en cuenta el dictamen del “Comité la evidente implicación de la Prevención de
consultivo de seguridad, higiene y protección Riesgos. Desde estos presupuestos, inten-
de la salud en el trabajo” de la Comisión de taremos delimitar los conceptos pertinentes,
las Comunidades Europeas (documento n° diferenciarlos de otras nociones para evitar
1564/2/01) que indica: yuxtaposiciones o solapes de conceptos y
proponer un procedimiento para la preven-
“La violencia en el lugar de trabajo, tanto si ción de situaciones de violencia externa en el
proviene del interior como del exterior de di- lugar de trabajo.
cho lugar, y en todas sus formas, es un factor
de riesgo que el empresario –público o pri-
vado– está obligado a evaluar y prevenir o 02 Marco conceptual
reducir a través de medidas específicas, al
igual que todos los demás factores de riesgo, Siguiendo al “repertorio” de la OIT anterior-
con arreglo al artículo 6 de la Directiva marco mente señalado, la violencia en el lugar de
89/391/CEE. De hecho, el apartado 1 de dicho trabajo se define como toda acción, incidente
artículo 6 impone al empresario una obliga- o comportamiento que se aparta de lo razona-
ción de evaluar todos los riesgos, y la lista ble mediante el cual una persona es agredida,
de los riesgos relacionados con los agentes amenazada, humillada o lesionada por otra en
químicos, los equipos de trabajo, etc., no es el ejercicio de su actividad profesional o como
exhaustiva.” consecuencia directa de la misma. Se entien-
de por «consecuencia directa» un vínculo cla-
En nuestro país, la doctrina de las sentencias ro con el ejercicio de la actividad profesional y
judiciales del Tribunal Supremo establece con se supone que dicha acción, incidente o com-
claridad que la violencia externa que sufren portamiento ocurre posteriormente, dentro de
los trabajadores con motivo de su actividad un plazo de tiempo razonable.
164
Capítulo 3
Para una adecuada gestión de los riesgos psi- • Violencia como proceso:
cosociales es importante diferenciar, dentro
del ámbito de la violencia interna, entre aco- • Acoso.
so y violencia. La Comisión de las Comunida- • Violencia Interna. Intimidación o agre-
des Europeas en el año 2007 (transmisión del sión como situación límite de un pro-
acuerdo marco europeo sobre el acoso y la ceso de conflicto, aquí se encontraría
violencia en el trabajo) declara que: el continuo: De la Broma, al Acoso y
la Violencia, de Rosario Brenda Mas-
“El acoso y la violencia son la expresión de sanet de la Universidad de Puerto
comportamientos inaceptables adoptados Rico.
por una o más personas, y pueden tomar
muy diversas formas, algunas más fácilmente • Violencia como suceso:
identificables que otras. La exposición de las
personas al acoso y a la violencia puede de- • Violencia Interna. Momentos de máxi-
pender del entorno de trabajo. ma tensión como la comunicación de
despidos o sanciones, sin que exista
Se da acoso cuando se maltrata a uno o más conflicto previos.
trabajadores o directivos varias veces y deli- • Violencia “Interna”. Entre compañe-
beradamente, se les amenaza o se les humi- ros “desconocidos” en empresas de
lla en situaciones vinculadas con el trabajo. alta rotación o trabajo por períodos
Se habla de violencia cuando se produce la cortos.
agresión de uno o más trabajadores o directi- • Violencia “Externa”. Entre trabajado-
vos en situaciones vinculadas con el trabajo. res de distintas empresas presentes
en un mismo lugar de trabajo.
El acoso y la violencia pueden provenir de • Violencia Externa. Producida por un
uno o más directivos o trabajadores, con la cliente/usuario o más.
165
Capítulo 3
Esta diferenciación nos permite asignar recur- Uno de los mayores problemas para un pre-
sos e instrumentos diferentes con el propósi- vención eficaz, derivado de la asociación
to de evaluar con mayor eficacia estos ries- entre violencia y agresión física es la infrade-
gos laborales. De este modo, para el primer tección de las agresiones recibidas por los
grupo, Violencia-Proceso, la existencia de un trabajadores, ya que en la mayoría de las oca-
continuo acoso-intimidación-violencia puede siones, “o no se les presta atención o se asu-
analizarse mediante el modelo conceptual men como parte integrante del trabajo y, sin
del Sistema Triangular de Análisis del Acoso embargo, pueden tener importantes efectos
Laboral (SATA), mientras que para análisis del sobre las personas que los sufren, e incluso
segundo grupo, Violencia-Suceso, debere- sobre el resto de trabajadores que son testi-
mos tener en cuenta otros factores y una con- gos (NTP-489)”. Como ocurre con el grueso de
ceptualización diferente como se verá en el los factores psicosociales, los efectos de las
apartado de descripción del método Meta-V. conductas amenazantes o de las agresiones
verbales, por ejemplo, no tienen porqué ser
Dos elementos claves para delimitar el con- inmediatos y a menudo son difíciles de deter-
cepto de violencia en el lugar de trabajo y que minar, a diferencia de las agresiones físicas.
pueden llegar a prestar confusión son la am- Otro problema añadido es que su impacto de-
plitud del concepto de violencia y la relación penderá también de las distintas percepcio-
laboral. Respecto a la amplitud del concepto nes sobre lo que se considera una conducta
de violencia, la Nota Técnica de Prevención verbal abusiva o amenazante.
489 del Instituto Nacional de Seguridad e Hi-
giene (1998), señala que existe la tendencia Otro problema relacionado con la delimitación
a asociar violencia con la agresión física. Sin del concepto, y señalado también por la NTP-
embargo, el concepto de violencia debe ser 489, tiene que ver con la relación laboral: que
más amplio que el de la mera agresión física un acontecimiento de violencia se produzca
(pegar, golpear, empujar, disparar, etc.) y debe en el lugar de trabajo no tiene porqué signi-
incluir y comprender otras conductas suscep- ficar necesariamente que tal suceso sea un
tibles de violentar e intimidar al que las sufre. resultado directo de la propia actividad labo-
ral. Para que un episodio concreto se pueda
Así, la violencia en el trabajo incluiría, además contemplar como violencia externa, su causa
de las agresiones físicas, las conductas verba- debe radicar en la actividad laboral depen-
les o físicas amenazantes, intimidatorias, abu- diente del empresario, o en otros lugares don-
sivas y acosantes. De hecho, el problema de de los trabajadores desarrollen su trabajo o se
la violencia en el lugar de trabajo está, prin- les requiera que estén presentes como con-
cipalmente, centrado en los abusos verbales dición del desempeño de su trabajo. Se debe
y las amenazas, incidentes éstos que se pre- contemplar que algunos episodios pueden
sentan como los más comunes. ocurrir fuera del lugar de trabajo, por ejemplo
166
Capítulo 3
No tiene ninguna relación laboral con la víctima (no existe un trato comercial o de usuario entre
Agresor
agresor y persona afectada).
Violencia Motivo habitual Robo.
tipo I Frecuente en establecimientos comerciales, bancos, lugares de almacenamiento de objetos valio-
(violencia Escenarios
sos, personas que trabajan con intercambio de dinero, taxistas, etc.
externa) En este tipo se dan las conductas de mayor violencia y con peores consecuencias para la víctima. La
Características periodicidad y ocurrencia de este tipo de violencia es irregular en la vida de un determinado lugar de
trabajo.
Suelen ser clientes de los productos o servicios que se suministran (cliente, paciente, usuario, consu-
Agresor
midor,...).
Motivo habitual Percepción de haber sido maltratado, frustrado, agraviado, engañado, estafado... por la victima.
Violencia Estos hechos violentos suelen producirse mientras se ofrece el servicio. Son frecuentes en traba-
tipo II jadores de seguridad pública, conductores autobús, personal sanitario, profesores, vendedores,
Escenarios
(violencia de empleados de ventanilla, docentes u otros trabajadores del sector público o privado que ofrecen
servicios) servicios profesionales, públicos o privados.
Son habituales las agresiones físicas con consecuencias más leves que las de tipo I y abusos verba-
les y amenazas. Las acciones de tipo II surgen del contacto habitual y diario de los trabajadores con
Características
receptores insatisfechos de bienes y servicios, es por ello que representan un riesgo constante para
muchos trabajadores.
Tiene algún tipo de relación laboral con el lugar afectado o con algún trabajador concreto de tal
Agresor
lugar.
Suelen desarrollarse entre compañeros de trabajo como consecuencia de un conflicto insuficien-
temente elaborado de forma verbal y pobremente comunicado. También suele producirse con su-
Motivo habitual
periores por incumplimiento de expectativas. Las acciones pueden estar motivadas por dificultades
Violencia percibidas en la relación con la víctima, recelos, búsqueda de revancha o ajuste de cuentas.
tipo III
El más común es aquel en el que hay una implicación laboral directa entre el agresor (por ejemplo,
(violencia un empleado actual, o que ya no lo es) y el trabajador-víctima. Otro caso es aquel en el que existe
relacional) una relación personal entre ambos sujetos (cónyuge, ex-cónyuge, pariente, amigos). Más raramente
Escenarios
suele existir una implicación más indirecta; por ejemplo, el agresor elige un cierto lugar no tanto a los
trabajadores que en él trabajan porque tiene rencor, animadversión hacia tal sitio por tener para él
una carga representativa o simbólica.
Características Lo más habitual es que el objetivo sea un compañero de trabajo o un superior suyo.
167
Capítulo 3
168
Capítulo 3
a las tareas, sin estar necesariamente ajusta- el lugar de trabajo. En concreto, el estudio re-
da a la realidad, desde el punto de vista de veló que la presencia de factores de estrés
los trabajadores afectados directa o indirec- laboral, como una reducción de plantilla o la
tamente. Por ello, un análisis de la violencia congelación de los salarios, correlacionaban
debe contemplar no solo los recursos de se- con una percepción de mayor severidad en
guridad disponibles, sino la percepción del las agresiones.
riesgo por parte de los trabajadores.
En esta situación de interacción entre riesgos
En función de lo anterior, para afrontar correc- físicos y psicosociales surgen los llamados
tamente el riesgo de la violencia en el lugar meta-riesgos. En palabras de Niño, J. (2007),
de trabajo necesitamos abordar la dimensión “la confluencia de riesgos de diversa natura-
psicosocial de este fenómeno. Es decir, para leza (físicos y psicológicos) en ciertos trabajos
una adecuada gestión de los riesgos por vio- puede generar riesgos imprevistos o «emer-
lencia en el trabajo, debemos valorar junto al gentes» derivados de la interacción de los
riesgo “objetivo” de seguridad, las percepcio- mismos (meta riesgos) que pueden agravar
nes de los trabajadores respecto a la situación situaciones de por sí importantes.”
de seguridad personal. Dicho de otro modo,
no es suficiente contar con recursos para es- En este sentido, la violencia en el lugar de tra-
tos riesgos, es necesario que los trabajadores bajo debe ser analizada en su doble dimen-
los conozcan y actúen en consonancia con el sión: como riesgo de seguridad y como riesgo
nivel de seguridad de su puesto de trabajo. psicosocial. Así, Desde una perspectiva sisté-
Tanto un exceso de seguridad como una des- mica, deberemos valorar cómo “los distintos
preocupación desajustada pueden conllevar riesgos situacionales, combinados con los
consecuencias graves. efectos «pretraumáticos» y «postraumáticos»
sufridos, pueden generar los «meta-riesgos»
Algunas encuestas han descrito que, aunque indicados que pueden provocar desde fobias
el número de actos graves de violencia que hasta «blindajes cognitivos» frente a los ries-
ocurre en el área laboral es significativo y pa- gos, individuales o colectivos, como la cono-
rece ir en aumento, la mayoría de los entrevis- cida «ideología defensiva de los oficios», que
tados nunca ha presenciado un acto de vio- tiende a inhibir la percepción de los riesgos
lencia de este nivel. En un estudio realizado como mecanismos de reducción del estrés
por Baron y Neuman (1998) de 452 personas «pretraumático», especialmente en las situa-
entrevistadas el 70,60% informó no haber pre- ciones peligrosas.” (Niño, J. Op. Cit.).
senciado nunca un caso de agresión física en
el trabajo, no obstante, los autores encontra-
ron que determinados cambios organizacio-
nales y la inseguridad en el empleo estaban
relacionados con las formas de agresión en
169
Capítulo 3
170
Capítulo 3
personas que cometen un acto delictivo sin determinado ambiente de trabajo y bajo
mediar ninguna relación con la empresa o el unas condiciones impuestas por la tarea
trabajador. Debemos comentar que, aunque a desempeñar” (Norma ISO 6385:1981).
en este documento se hablará genéricamen-
te de clientes o usuarios, con este término se • Trabajador: Toda persona que realiza un
hace referencia a la mayor parte de relaciones trabajo, de manera regular o temporal,
posibles entre agresor y trabajador o empre- para un empleador. Un trabajador es una
sa, pero no se excluyen otras relaciones po- persona que de forma voluntaria presta
sibles como consumidores, pacientes, ex-em- sus servicios retribuidos. Desde la Ergo-
pleados, trabajadores de otras empresas que nomía se considera siempre al trabajador
comparten el lugar de trabajo, acompañantes, como operador humano en acción, y no
familiares o personas sin relación alguna. como mero receptor pasivo de las condi-
ciones de trabajo (Sebastián, 2008).
• Lugar de trabajo: Todo lugar en que los
trabajadores deben permanecer o don- • Afectado (Víctima): Todo trabajador o
de tienen que acudir por razón de su tra- empleador que es objeto de violencia en
bajo y que se encuentran bajo el control el lugar de trabajo.
directo o indirecto del empleador. Este
término debe contemplarse desde la óp- • Empresa: Organismo social integrado
tica del sistema de trabajo del que forma por elementos humanos, técnicos y ma-
parte, entendiéndolo como un “sistema teriales cuyo objetivo natural y principal
que comprende la combinación de per- es la obtención de utilidades o la pres-
sonas y medios de trabajo, actuando en tación de servicios, coordinados por una
conjunto sobre el proceso de trabajo, dirección que toma decisiones en forma
para llevar a cabo una actividad laboral, oportuna para la consecución de sus ob-
en un espacio de trabajo, sometidos a un jetivos.
171
Capítulo 3
Modelo Kauris.
El método Kauris tiene un enfoque integral y • Listas de control sobre distintas medidas
participativo (ver fig. 2) que engloba a la con- preventivas, como distribución del esta-
cepción del entorno laboral, dispositivos de blecimiento, protección contra atracos,
seguridad, planes de personal, prácticas de dispositivos de alarma y el manejo de di-
trabajo, orientaciones, formación, etc. Para nero en metálico.
su implementación se utilizan diversas herra-
mientas como: • Formulario para denunciar los incidentes
de violencia o las amenazas, etc., para la
• Cuestionarios para recoger las experien- evaluación de riesgos
cias del personal en situaciones de ame-
naza. • Información de apoyo de los programas
de prevención de la violencia, como im-
172
Capítulo 3
partir formación al personal sobre pro- dicho país (Brenda, 2007). El instrumento se
cedimientos seguros en el trabajo y en basa en el continuo: Civilidad-Incivilidad-Vio-
situaciones intimidatorias. lencia y se compone de tres subescalas: civili-
dad, incivilidad y violencia.
Este método puede aplicarse fácilmente en el
sector del comercio de cualquier país, aunque 4.3. MATRIZ HADDON
deberán introducirse algunos cambios antes
de poder aplicarlo en otros sectores, como la La matriz creada por William Haddon en 1970
asistencia sanitaria y los servicios sociales. se utiliza con asiduidad en la prevención de
lesiones. La matriz muestra los factores rela-
4.2. ESCALA CIV tivos a los atributos de las personas, atribu-
tos de los vectores o agentes, y atributos del
Rosario Brenda Massanet presentó en 2007 medio ambiente, social y físico, antes, durante
un instrumento para la medición de la incivi- y después de la lesión (prevención primaria,
lidad en el contexto laboral puertorriqueño secundaria y terciaria). Mediante la utilización
(CIV) desarrollado mediante el análisis de la de este marco se puede reflexionar y evaluar
frecuencia y propensión a la conducta incivil el peso relativo de los diferentes factores im-
en una muestra de los escenarios laborales en plicados y diseñar intervenciones.
MATRIZ HADDON
173
Capítulo 3
Parte 2.
EVALUACIÓN E INTERVENCIÓN (META-V)
174
Capítulo 3
SEGMENTOS DE ANÁLISIS
Espacio de trabajo: ¿Están diseñados los espacios de trabajo de modo que faciliten la vigilancia?
Espacio de trabajo: ¿Está diseñados los espacios de trabajo de modo que se facilite su uso?
Pregunta fuente: Qué tipo de uso (prestación, servicio...) requiere el cliente/usuario de la empresa/institución.
¿Están diseñados los espacios de modo que se gestionen debidamente los momentos de aglo-
Espacio de trabajo:
meración o tensión?
AGRESOR – TRABAJADOR (A-T)
Qué tipo de relación se establece entre el cliente/usuario y el trabajador (¿tiene un carácter emo-
Pregunta fuente:
cional intenso?)
Espacio de trabajo: ¿Están diseñados los espacios de modo que se equilibre la intimidad con la vigilancia?
TRABAJADOR – EMPRESA (T-E)
Qué tipo de tareas realiza el trabajador que puedan ser objeto de agresiones (en qué momentos,
Pregunta fuente:
en qué lugares...).
Espacio de trabajo: ¿Están diseñadas las tareas teniendo en cuenta los espacios de trabajo y su seguridad?
TRABAJADOR – AGRESOR (T-A)
Qué tipo de interacción tiene el trabajador con el cliente/usuario (¿Con cuántos clientes/usuarios
Pregunta fuente:
se relaciona el trabajador durante su jornada?)
¿Están los espacios diseñados de forma que permitan el descanso al trabajador durante la jorna-
Espacio de trabajo:
da? ¿Existen vías de escape en caso de agresión?
Segmentos de análisis y preguntas fuertes
175
Capítulo 3
REGISTRO
LOCALIZACIÓN
Fecha incidente:
Día de la semana:
Hora:
Localización:
Detalles del lugar del incidente:
Croquis del lugar:
TRABAJADOR
Nombre:
Trabajo/Categoría/Departamento:
¿Qué actividad realizaba cuando se
produjo el incidente?:
DETALLES DEL ASALTANTE(S)
Nombre:
Sexo:
Edad:
Dirección:
TESTIGO(S)
Nombre:
Sexo:
Edad:
Dirección:
RESULTADOS
¿Insultos?
¿Abuso verbal?
¿Conducta antisocial?
¿Daño a personas?
¿Daño a bienes?
¿Tiempo perdido?
¿Acciones legales?
INFORMACIÓN RELEVANTE
¿Qué ocurrió? (Relato del incidente con cuestiones relevantes)
Modelo de registro
176
Capítulo 3
Para un buen análisis de la violencia externa “Ese día había menos personal”, “Era la
es imprescindible poder utilizar información hora del relevo”).
sobre momentos, lugares, actividades labo-
rales, servicios que se prestaban, perfiles del • Desencadenantes: Ocupan el último
agresor y de los trabajadores afectados... puesto del proceso en el que se materia-
liza el incidente desde el punto de vista
Puede resultar de utilidad identificar y clasifi- del analista (ejemplo: Distracción, incum-
car los elementos causales en función de su plimiento de un protocolo).
inmediatez o disponibilidad en el momento de
materializarse el incidente. De este modo ten- En el caso de no disponer de estadísticas o
dríamos tres tipos de elementos: del diseño de un nuevo espacio de trabajo, se
pueden utilizar datos de situaciones próximas,
• Factores latentes: Ocupan puestos ini- “de referencia”, “situaciones de acción carac-
ciales del proceso en el que se materiali- terísticas” en palabras de François Daniellou,
za el incidente (ejemplo: Una política de sobre las que haremos análisis y estimaciones
reducción de costes en mantenimiento, del problema de violencia externa. Este análi-
falta de iluminación en zonas peligrosas, sis prospectivo permite identificar problemas,
ausencia de protocolos para “malas no- categorizarlos, especificar requisitos de con-
ticias”). cepción para, en una fase posterior, validarlos.
A2. Realidad estadística del fenómeno (sucesos, lugares, formas, tipos de agresor…)
177
Capítulo 3
5.3. ANÁLISIS DE LOS SISTEMAS DE SE- a disponer de información precisa sobre cues-
GURIDAD: RECURSOS tiones del tipo:
Sistemas de Aviso (botón oculto, teléfonos directos, pautas de actuación: avisar a…)
Sistemas de Disuasión (dispositivos de videograbación, registro de entrada- salida-hora-DNI, Scanners)
Sistemas de Vigilancia y control (dispositivos de videovigilancia con salas de control)
Sistemas de presencia (presencia de “vigilantes” en espacios y/o tiempos críticos)
Sistemas de presencia y control (combinación de los niveles 2 y 3 con el 4)
C2. Nivel percibido de presencia del riesgo, independiente de los estadísticos de ocurrencia
178
Capítulo 3
En esta fase, es necesario entender que las Puede ser relevante conocer también datos
declaraciones de los trabajadores, y buena relativos al tratamiento posterior de los inci-
parte de sus acciones en materia de segu- dentes, así como la existencia de vulnerabili-
ridad, no tienen porqué corresponder a las dades previas por parte de los trabajadores:
estadísticas reales de agresiones, sino a la
percepción de incidentes críticos mitificados y
filtrados por heurísticos tales como los de an-
claje-ajuste, representatividad y accesibilidad.
D2. ¿Existen indicadores de vulnerabilidad individual de los trabajadores potencialmente afectados? (hipervigilancia
por ocurrencia previa, historial de trastornos mentales, etc.)
179
Capítulo 3
MATRIZ DE ACCIONES
PERCEPCIÓN DE
PERCEPCIÓN DE SEGURIDAD PERCEPCIÓN DE SEGURI-
SEGURIDAD
INFRA-AJUSTADA DAD SOBRE-AJUSTADA
AJUSTADA
NIVEL DE SEGURIDAD
Formación sobre recursos Sin acciones Sensibilización
SUFICIENTE
Matriz de acciones
180
Capítulo 3
Modelo Meta-V.
181
ANEXOS
CARACTERÍSTICAS DE LOS
PROCEDIMIENTOS
I
Anexos
184
Anexos
185
ANEXOS
G-SATA
2
Anexos
188
Anexos
Q-SATA
SEGMENTO O-AC NP SI NO
El tipo general de conflicto en el grupo de trabajo ( jefes y compañeros) es el de tarea. No se percibe un nivel
1 excesivo de conflictos relacionales.
Existen mecanismos de evaluación-control de los responsables/jefes en materia de gestión de personal. Por
ejemplo, en caso de existir una política de descentralización en la organización. ¿Se establece algún mecanismo
2 extra de control sobre esa descentralización (para que los responsables/jefes no puedan hacer y deshacer en
materia de gestión de personal sin pedir explicaciones).
3 ¿Parte de la remuneración por objetivos de responsables/jefes está relacionada con la gestión del personal
(estadísticos de accidentalidad, índice de absentismo, índice de rotación…).
Existe una correcta planificación y organización del trabajo y de las relaciones sociales en la organización. La
4 organización respeta y fomenta el cumplimiento del convenio colectivo y de la normativa interna en todos los
niveles organizativos (materializándose de manera efectiva en el puesto de trabajo concreto).
El liderazgo imperante en la organización es de estilo democrático, participativo, constructivo. Y no autoritario,
5 tiránico o “laissez faire” (dejar hacer).
Existen canales ascendentes y descendentes de comunicación entre los distintos miembros de la organización.
6 El flujo de información y de la comunicación interna es adecuado. La organización (y sus responsables) hace
llegar a los trabajadores el valor de sus aportaciones.
7 ¿Existen canales y/o procedimientos que mantengan la confidencialidad?.
Puede el trabajador expresar sus opiniones sobre el trabajo a su jefe libremente. Puede elevar una petición en
8 este sentido a superiores jerárquicos de su jefe, en el caso de que éste no atienda a sus demandas, sin temor a
represalias.
Recursos Humanos o el Servicio de Prevención pueden ser órganos ejecutores en caso de conflicto. ¿Se incluye
9 en el Convenio Colectivo cláusulas sobre la aplicación de sistemas correctores a los agresores, introduciendo el
acoso como conducta merecedora de sanción disciplinaria?.
10 Existe un código de conducta ético.
Existe una adecuada selección del perfil profesional y personal para cada puesto de trabajo. La selección de
11 personas para puestos intermedios o directivos está basada en competencias y no en fidelidad, familiares,
amigos…
La gestión de personal se realiza de manera respetuosa con los trabajadores. No se gestiona desde la amenaza,
utilizando políticas y prácticas empresariales tales como: despidos, reestructuración, remodelación, reducción
12 de plantilla, traslados. O existiendo excesivo control de los tiempos de trabajo y descansos, ausencias, faltas de
puntualidad…
Existe una atmósfera amistosa y de apoyo en la organización. El ambiente laboral no se percibe como altamente
13 estresante y competitivo.
Se imparte formación a administradores, directivos, responsables de RR.HH. y de la representación de personal
14 y a los propios trabajadores como sujetos protagonistas de las relaciones sociales.
189
Anexos
SEGMENTO O-AF Leer bien cada ítem. Buscar los indicios nece-
sarios en el puesto de trabajo mediante trian-
Conteste a las siguientes preguntas sobre la gulación (entrevistas, observaciones, análisis
relación entre la organización y las personas documental, cuestionarios...) antes de contes-
potencialmente afectadas. tar afirmativa o negativamente a su contenido.
Q-SATA
SEGMENTO O-AF NP SI NO
Se realizan evaluaciones de Riesgos Ergonómicos-Psicosociales de forma periódica. Se tienen en cuenta los
1 resultados de dichas evaluaciones en la gestión (toma de decisiones) de la organización.
¿Existe participación de los trabajadores a la hora de fijar tareas y objetivos de su trabajo? ¿Es posible influir en
2 “las cosas que a uno le tocan y le preocupan”?.
3 Los métodos de trabajo y producción de la organización son adecuados y eficientes. No existen cargas excesiv-
as de trabajo debido a la escasez o mala distribución de la plantilla.
La organización establece definiciones claras de funciones y responsabilidades. Están claros los objetivos del
4 trabajo.
Existe sensibilización sobre comportamientos constitutivos de acoso moral para que los afectados puedan
5 detectar si son objeto de agresiones de este tipo.
Las funciones coinciden con las actividades que realizan los trabajadores. No existen demandas y expectativas
6 incompatibles alrededor de roles, tareas y responsabilidad.
Puede acudir el trabajador a alguna entidad de la organización si tiene problemas con su jefe (Recursos Hu-
7 manos, Sindicatos…) sin temor a represalias
Se ofrece al trabajador oportunidades de formación, aprendizaje y crecimiento, promoviendo el desarrollo de
8 sus habilidades y posibilitando su promoción dentro de la organización.
Existe una política de tolerancia cero ante conflictos como elemento de control que incluye de manera
sistemática a investigaciones, expedientes disciplinarios y sanciones (tener presente que, a veces, determinadas
9 organizaciones toleran los abusos de ciertos individuos siempre y cuando generen beneficios y no produzcan
demasiados contratiempos).
10 Han recibido los mandos intermedios formación en la gestión de conflictos.
Se difunde información sobre los derechos y garantías que asisten a las victimas de situaciones de violencia
11 psicológica.
Existen mediciones periódicas de clima laboral. Se tienen en cuenta los resultados obtenidos en la gestión
12 (toma de decisiones) de la organización.
Existen en la empresa sistemas de solución de conflictos a través de mecanismos de mediación y arbitraje.
13 Dichos procedimientos son conocidos por los todos los trabajadores.
Existe un protocolo/manual de acogida o plan de integración de nuevos empleados al puesto de trabajo y a
14 la organización. En ese plan de integración se definen claramente las funciones y lo que se espera del nuevo
trabajador.
Existe un seguimiento para comprobar si los cambios organizacionales son asumidos y aceptados correcta-
15 mente.
TOTALES:
190
Anexos
SEGMENTO AC-O Leer bien cada ítem. Buscar los indicios nece-
sarios en el puesto de trabajo mediante trian-
Conteste a las siguientes preguntas sobre gulación (entrevistas, observaciones, análisis
si han existido o existen personas potencial- documental, cuestionarios...) antes de contes-
mente acosadoras en el escenario de evalua- tar afirmativa o negativamente a su contenido.
ción y sus relaciones con la organización.
Q-SATA
SEGMENTO AC-O NP SI NO
1 La persona potencialmente acosadora: Se apropia de los meritos de los demás (“robamedallas”).
Presenta una gran actividad, aunque totalmente inoperante, acompañada de un gran deseo de notoriedad, con-
2 trol e influencia sobre los demás.
3 Nunca practica el reconocimiento a los demás. Niega los méritos que un individuo brillante reúne para lograr un
premio o posición, atribuyendo todo éxito ajeno a relaciones con personas influyentes o injusticias del sistema.
Suele vivir profesionalmente de los demás, eludiendo sus responsabilidades más elementales sin ningún senti-
4 do de la culpabilidad.
5 Tiene un sentido exagerado o desproporcionado de su propia valía o méritos.
Es incapaz de sentir arrepentimiento, culpabilidad o, simplemente, de sentirse responsable del daño que está
6 causando.
7 Interpreta todos los comportamientos de las personas que le rodean como malintencionados.
Reacciona de manera agresiva ante cualquier comportamiento o suceso que ocurre a su alrededor. Pierde el
8 control en las situaciones que le sacan de quicio.
Desarrolla un estilo de dirección totalmente autoritario. Suele ser obstinado y terco, inflexibles hacia las ideas,
9 sugerencias o aportaciones de sus subordinados.
Tiene un sentido de la responsabilidad extremo que le lleva a una exigencia del otro desmesurada. Tiene una
10 pobre resistencia a la frustración que le lleva a ser más laxo en la evaluación de sus actos
11 Gestiona desde la amenaza. Quiere ganar a toda costa, aun machacando al otro.
Muestra una seguridad infranqueable que impide cuestionarle cualquier error. De modo que, incluso sus su-
12 periores tienen una cierta reticencia a llevarles la contraria o cuestionar sus actos. Son hábiles manipuladores,
personas peligrosas si les acompaña el poder.
191
Anexos
SEGMENTO AF-O Leer bien cada ítem. Buscar los indicios nece-
sarios en el puesto de trabajo mediante trian-
Conteste a las siguientes preguntas sobre gulación (entrevistas, observaciones, análisis
si existen o han existido personas potencial- documental, cuestionarios...) antes de contes-
mente afectadas en el escenario de evalua- tar afirmativa o negativamente a su contenido.
ción y su relación con la organización.
Q-SATA
SEGMENTO AF-O NP SI NO
1 Existen trabajadores que se identifican a si mismos como víctimas de una situación de acoso.
2 El trabajador ha denunciado problemas de ambigüedad y/o conflicto de rol.
3 No existe un clima abierto de comunicación que permita a los empleados expresar sus ideas, quejas o sugeren-
cias, obteniendo una respuesta efectiva.
4 No se facilita e incentiva la participación de todos los trabajadores en las reuniones.
5 La organización en conjunto presenta un porcentaje elevado de quejas, conflictos, rotaciones, bajas…
Algún trabajador presenta dificultades de integración. Por ejemplo: personas con diferente género, cultura o
6 religión al del resto del equipo de trabajo.
7 El puesto de trabajo tiene un elevado nivel de bajas y/o rotaciones.
Los trabajadores carecen de control sobre su puesto de trabajo (autonomía temporal, responsabilidad, iniciati-
8 va…).
El trabajador se siente desplazado, ”no encaja” o no encuentra su lugar en el equipo de trabajo o en la organi-
9 zación.
El trabajador cuestiona permanentemente a la organización, a la persona responsable, o al grupo de trabajo y a
10 sus decisiones (ej. persona pleitista, díscola…).
Aumentan el nivel de los Riesgos Psicosociales medidos en las evaluaciones. Han aumentado las quejas psico-
11 somáticas a Vigilancia de la Salud.
Existen persona absolutamente brillantes (con reconocimiento externo a la organización) en puestos inferiores.
12 Existen personas con capacidades muy por debajo de la media del resto del grupo de trabajo.
El trabajador se siente presionado por parte de la organización para que dedique tiempo extra a su jornada
13 laboral.
192
Anexos
193
Anexos
Q-SATA
SEGMENTO AC-AF NP SI I Ds M
Acciones del tipo: Restringir a la persona las posibilidades de hablar; Restringir o prohibir a los
1 compañeros la posibilidad de hablar con una persona…
Acciones del tipo: Obligar a alguien a ejecutar tareas en contra de su conciencia; No asignar
tareas a una persona; Asignar tareas con datos erróneos o con metas imposibles; Asignar a una
2 persona tareas muy por debajo de sus capacidades; Asignar tareas degradantes, sin sentido o
contradictorias; Asignar tareas y quitarlas sin ningún tipo de explicación; Retener información
imprescindible para la realización de la tarea…
3
Acciones del tipo: Ofertas sexuales, violencia sexual…
Acciones del tipo: Amenazas de violencia física; Maltrato físico; intimidación; Uso de violencia
4 menor…
5 Acciones del tipo: Ataques a las actitudes y creencias políticas o religiosas…
6 Acciones del tipo: Difundir rumores acerca de la víctima; Hablar mal de la persona a su espalda…
Acciones del tipo: Rehusar la comunicación con una persona a través de miradas y gestos o de
7 no comunicarse nunca con ella; Tratar a una persona como si no existiera; No dirigir la palabra a
una persona…
Acciones del tipo: Dirigirse al trabajador levantando la voz; Amenazas verbales; Gritos o insul-
8 tos…
Acciones del tipo: Hace comentarios despectivos, abusando del sarcasmo. Dirigirse al traba-
9 jador descalificándole, realizando esta conducta en presencia de otros; Criticar permanente-
mente la vida privada de una persona…
10 Acciones del tipo: Amenazas telefónicas, por escrito, por e-mail…
Acciones del tipo: Hacer parecer estúpida a una persona; Dar a entender que una persona
tiene problemas psicológicos; Mofarse de las discapacidades de una persona; Imitar los gestos,
11 voces... de una persona; Mofarse de la vida privada, el color de la piel, el aspecto físico o la
nacionalidad de una persona…
Acciones del tipo: Juzgar el desempeño de una persona de manera ofensiva; Cuestionar las
12 decisiones de una persona; Críticas permanentes del trabajo de la persona…
Acciones del tipo: Cambiar la ubicación de una persona separándola de sus compañeros. Asig-
13 narle un horario con el fin de que no coincida con el resto de sus compañeros…
Acciones del tipo: No mantener el mismo trato con todos los trabajadores. Conductas discrim-
inatorias por parte del jefe con algún compañero. Tener menos en cuenta las ideas de una
14 persona que las de sus compañeros. Asignar una remuneración menor que a sus compañeros
sin ninguna causa que lo justifique…
Algunas de las acciones anteriores, todas en conjunto, o una concatenación de varias de ellas
15 en el tiempo, han tenido una duración mayor o igual a 6 meses con una frecuencia mayor o
igual a una a la semana.
TOTAL:
194
Anexos
Q-SATA
SEGMENTO AC-O NP SI NO
El trabajador tiene miedo al despido. Existen personas con poder suficiente para cambiar las condiciones lab-
1 orales (forzar despidos, traslados…) sin un control por parte de la organización, de tal forma que se pueda tener
miedo a un conflicto relacional con ella.
El trabajador es excesivamente perfeccionista e inflexible. Tiene un sentido excesivamente rígido de la moral y
2 la justicia.
3 El trabajador ha pasado (en anteriores puestos y empresas) por un número excesivamente alto de despidos,
traslados, cambios de puesto, bajas de larga duración…
Se han dado casos de intentos de suicidio, conflictos familiares y un número anormal de divorcios en los miem-
4 bros del equipo de trabajo.
El trabajador no expresa una conducta asertiva (por ejemplo: responder a peticiones de forma agresiva o pasiva,
5 incapacidad para decir no, incapacidad para defender sus derechos de forma efectiva…).
6 Se ha sentido traicionado por los miembros del grupo.
Existen indicios de daño moral real o percibido, ej. sensación de humillación, de derrota, de culpa, falta de
7 autoestima…
Existen indicios de daño psicológico real o percibido, ej. ansiedad, depresión, trastorno de pánico, insomnio,
8 trastorno obsesivo-compulsivo…
Existen indicios de daño físico real o percibido, ej. trastornos dermatológicos, accidentes vasculares o coronari-
9 os, trastornos gastrointestinales…
10 Existen indicios de daño social real o percibido, ej. aislamiento social, deterioro familiar, pérdida de amigos…
El rendimiento laboral es muy insatisfactorio. Existen evidencias de deterioro o daño en la calidad o cantidad de
11 la producción o servicio.
195
ANEXOS
Q-SATA
3
Anexos
198
Anexos
terna del instrumento inicial de 22 ítems, ob- ítems del cuestionario obteniéndose un Alfa
teniéndose un Alfa de Cronbach de 0,716. Tras de Cronbach de 0,764. Los resultados del
este primer análisis se eliminaron tres de los nuevo análisis son los siguientes:
N %
CASOS VÁLIDOS 49 100,00
CASOS EXCLUIDOS 0 0,0
TOTAL 49 100,00
ESTADÍSTICOS DE FIABILIDAD
ESTADÍSTICOS DE FIABILIDAD
Media de la
Varianza de la Correlación Correlación Alfa de Cronbach
escala si se
escala si se elimina elemento-total múltiple al si se elimina el
elimina el
el elemento corregida cuadrado elemento
elemento
p1 7,5918 14,455 0,279 0,770
p3 7,6531 14,356 0,281 0,770
p4 7,8163 13,445 0,505 0,753
p6 7,7755 14,719 0,155 0,779
p7 7,8980 14,427 0,232 0,774
p8 7,9592 14,582 0,197 0,776
p9 7,6735 13,099 0,653 0,743
p10 7,6531 13,481 0,546 0,751
p11 7,8571 12,875 0,672 0,740
p12 7,8776 13,735 0,422 0,759
p13 7,8980 13,260 0,561 0,749
p14 8,0000 13,250 0,595 0,747
199
p15 7,9592 13,957 0,371 0,763
p16 8,2041 15,082 0,130 0,777
p17 7,9796 14,270 0,287 0,769
p19 8,0612 14,600 0,217 0,774
p20 8,1224 14,943 0,136 0,778
p21 8,2653 15,366 0,056 0,779
p22 8,0000 14,833 0,135 0,780
200
MATRIZ DE COMPONENTES (a)
Componente
1 2 3 4 5 6
p11 0,846
p9 0,839 -0,260
p10 0,786 -0,342
p14 0,757 -0,267
p13 0,743
p12 0,609 -0,282 0,253
p4 0,500 0,445 0,387 -0,333
p7 0,256 0,788
p17 0,683
p16 0,587 0,530
p22 -0,576 0,265 0,387 -0,347
p20 -0,370 0,589 -0,289
p21 0,422 0,673
p15 0,457 0,584 -0,412
p3 0,301 0,282 0,457 -0,478 -0,284
p19 0,268 -0,417 0,416 0,439
p6 0,328 -0,312 0,668
p8 0,440 0,643
p1 0,314 0,324 0,651
Método de extracción: Análisis de componentes principales a 6 componentes extraídos
201
Los seis componentes hallados reflejan par- señalar un acoso más bien de tipo organiza-
cialmente los segmentos de análisis y pueden tivo (“el acoso laboral institucionalizado”) en
categorizarse como: el que las prácticas organizativas sobre la re-
lación con los trabajadores son consideradas
• Factor 1: Ataques injustas.
• Factor 2: Relación afectado y organiza-
ción En resumen, los datos estadísticos de la prue-
• Factor 3: Estilo de liderazgo y de res- ba piloto del Q-SATA confirman la existencia
puesta de los seis segmentos de análisis y obtienen
• Factor 4: Daños una buena fiabilidad interna. Por lo que en-
• Factor 5: Defensas organizacionales tendemos que esta prueba puede ser usada
para evitar acosados a modo de screening en las evaluaciones de
• Factor 6: Defensas organizacionales riesgo.
para evitar acosadores
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
202
FACTOR 1
203
FACTOR 2
FACTOR 3
FACTOR 4
204
FACTOR 5
FACTOR 6
205
Cuestionario screening sobre
02 el acoso laboral
Referencia: Sebastián, M. L. (2010). Sistema
triangular de análisis del acoso laboral y ges-
tión de la violencia externa en el lugar de tra-
bajo: SATA 2.0 y Meta-V. Sevilla: Colegio Ofi-
cial de Psicología de Andalucía Occidental.
Q-SATA
SEGMENTO O-AC NP NO
1. ¿Existe un código de conducta ético en su empresa conocido por todos?
¿El liderazgo imperante en la organización es de estilo democrático, participativo, constructivo y no es autoritar-
2. io, tiránico ni de “dejar hacer”?
Existe una atmosfera amistosa y de apoyo en su organización. El ambiente laboral no se percibe como alta-
3. mente estresante y competitivo.
Q-SATA
SEGMENTO O-AF NP NO
¿Se le ofrece la oportunidad de formación, aprendizaje y crecimiento promoviendo el desarrollo de sus habili-
4. dades y posibilitando su promoción dentro de la organización?
¿Participa a la hora de fijar las tareas y objetivos de su trabajo? ¿Es posible influir en “las cosas que a uno le
5. tocan y le preocupan?
¿Puede acudir a alguna entidad de su empresa si tiene problemas con su jefe (Recursos Humanos, Sindicatos,…)
6. sin temor a represalias?
Q-SATA
SEGMENTO AC-O NP NO
Si en su organización existe, presuntamente, una persona que esté originando una situación de Acoso, responda lo siguiente:
7. ¿Se apropia de los méritos de los demás (“robamedallas”)?
¿Desarrolla un estilo de dirección totalmente autoritario? ¿Suele ser obstinado y terco, inflexible hacia las ideas,
8. sugerencias o aportaciones de sus subordinados y suele perder el control en las situaciones que le sacan de
quicio?
¿Gestiona desde la amenaza? Quiere ganar a toda costa, aun machacando al otro. Incluso sus superiores tienen
9. una cierta reticencia a llevarles la contraria o cuestionar sus actos.
206
Q-SATA
SEGMENTO AC-AF NP NO
¿La persona potencialmente acosadora realiza acciones como obligar a alguien a ejecutar tareas contra su vol-
10. untad; no asignarles tareas; asignarles tareas muy por debajo de sus capacidades; asignar tareas y quitarlas sin
ningún tipo de explicación; retener información imprescindible para la realización de la tarea,…?
¿La persona potencialmente acosadora difunde rumores acerca de usted? Habla mal de usted a su espalda; se
11. burla de sus discapacidades; creencias políticas o religiosas; imita sus gestos, voces; lo minusvalora,…
¿La persona potencialmente acosadora rechaza la comunicación con usted? ¿Prohíbe a los compañeros la
12. posibilidad de hablar con usted? ¿Le trata como si no existiera, no le dirige la palabra,…?
Q-SATA
SEGMENTO AF-O NP NO
¿Existe un clima abierto de comunicación que le permite expresar sus ideas, quejas o sugerencias, obteniendo
13. una respuesta efectiva?
14. ¿Se siente desplazado, “no encaja” o no encuentra su lugar en el equipo de trabajo o en la organización?
15. ¿Siente que su trabajo no es valorado por la organización y/o por sus compañeros?
Q-SATA
SEGMENTO AF-AC NP NO
¿Tiene usted miedo al despido? ¿Existen personas en la organización con poder suficiente para cambiar sus
16. condiciones laborales (forzar despidos, traslados,…) sin ningún control por parte de la dirección, de tal forma que
se pueda tener miedo a un conflicto relacional con ella?
¿Responde usted de una forma no aceptable?, por ejemplo: responde a peticiones de forma negativa o pasiva;
17. es incapaz de decir No; no es capaz de defender sus derechos de forma efectiva,…
Ha notado últimamente algunas de estas manifestaciones en su comportamiento, como por ejemplo: consumo
18. de alcohol, tabaco, y otras sustancias; trastornos del sueño, ansiedad; deterioro familiar, aislamiento, pérdida de
amigos; disminución de su rendimiento laboral; trastornos gastrointestinales, dermatológicos,…
19. ¿Cree que en trabajos anteriores a tenido situaciones de acoso?
207
ANEXOS
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HERRAMIENTA COMPLEMENTARIA
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ISBN 978-84-617-2692-9
9 788461 726929