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Angeline Herrera Moreno

01/02/019

La dualidad en el mito de “Los Hermanos Ayar”

Ensayo

El mito de las cuatro parejas de hermanos que emergen del interior de una cueva
llamada Paracatimbo para fundar el imperio incario se dió a conocer por parte de los
cronistas, uno de ellos Juan Díez de Betanzos (1551), quien estuvo radicado en la ciudad
del Cuzco y escribió con gran profundidad sobre la historia del Incanato. Luego sería
Luis E. Valcarcel, un historiador quien reescribiera este mito, pero en una versión
modernizada, en su libro “Historia del Perú antiguo a través de la fuente escrita” en el
año de 1984. Este mito es el que tiene, desde la perspectiva de María Rostworowski,
más características andinas. Los hermanos: Ayar Manco y su mujer Mama Ocllo; Ayar
Cachi y Mama Cora; Ayar Uchu y Mama Rahua y, por último, Ayar Auca y su esposa
Mama Huaco reflejan en sus semejanzas y diferencias la estructura sobre la cual
posteriormente se fundaría el gran imperio del Tahuantinsuyo.

De forma breve el mito narra como los hermanos salieron cada uno con su
pareja, luego de un gran diluvio que acaba con todo, de una cueva llamada Paracatimbo
ubicada a doce leguas al noroeste del Cuzco. Debido a la devastación del lugar
decidieron buscar una nueva tierra fértil para habitarla. Durante el trayecto uno de los
hermanos Ayar Cachi fue encerrado por los demás en una caverna. Luego Ayar Uchu
fue convertido en piedra al saltar sobre la espalda de un ídolo de piedra. En el camino a
Ayar Auca le salieron alas y pudo volar cerca del sol, pero antes de que terminara de
pisar tierra nuevamente fue igual, que el resto de sus hermanos, convertido en piedra. Es
así como el único que sobrevivió fue Ayar Manco y junto con sus cuatro hermanas
encontró tierra fecunda y allí fundó una ciudad a la que llamó Cuzco, capital de las
cuatro regiones del Tahuantinsuyo.

En este relato el elemento de la cueva tiene un gran significado ya que para


muchas culturas precolombinas alrededor del mundo la tierra era considerada
verdaderamente una madre, desde su cosmovisión la madre tierra era sagrada porque en
ella tenían principio y fin todas las cosas. Durante muchos milenios, las cuevas
desempeñaron una parte importante en la vida religiosa de la humanidad…entrar en la
Angeline Herrera Moreno
01/02/019

oscuridad de la cueva era como penetrar en la matriz de la Madre tierra; volver a salir
después de la iniciación ritual equivalía a un renacimiento.1 Es de esta manera que se
expresa el origen incario, los Incas fueron hijos de la tierra porque nacieron de ella.

Pero también es importante mencionar que:

la naturaleza siempre ha suscitado emociones ambivalentes. Es hermosa fértil,


nutriente, benévola y generosa. Pero también es salvaje, destructiva,
desordenada, caótica, asfixiante y esparce la muerte: esta es la madre en su forma
terrorífica como Némesis, Hécate o Kali2.

Es decir, la naturaleza es dual y como consecuencia de ello también sus hijos


tienen esa característica. La dualidad de la naturaleza se ve reflejada en el mito de los

hermanos Ayar. Según Ileana Almeida la primera pareja conformada por Ayar
Cache y su hermana Mama presentan características análogas porque Cache se puede
traducir a “sal de los cerros”, un mineral que es expulsado por la tierra y que no se deja
enterrar fácilmente. El nombre de su compañera Mama Huaco significa “muela cordal”,
se encuentra dentro de una cavidad, dentro de la oscuridad y también es difícil de sacar.
Por ello la autora concluye que ambos tienen en común la fuerza de sus voluntades.

Tanto Ayar Cache como Mama Huaco poseen un poder muy grande.
Ayar Cache es capaz de modificar el paisaje y convertir las montañas en
quebradas y las quebradas en montañas. Mama Huaco puede dar muerte a sus
enemigos de un solo golpe de su honda3.

La pareja siguiente conformada por Ayar Uchu y Mama Raura también comparte
similitudes. El nombre de Ayar Uchu se puede traducir como “hermano ají”, que tiene la
cualidad de ser caliente al comerlo. El ají al igual que la sal estaban prohibidos durante
los rituales en los cuales tampoco, según Ileana Almeida, se podía tener contacto sexual.
Por otro lado, el nombre de Mama Raura tiene el significado de “ardor”, “avivar la
lumbre para cocinar” y también “escocer de calor como el ají pimiento”. De esto
Almeida puede deducir que la primera y segunda pareja están relacionadas entre sí por

1
Rupert, Sheldrake, La Madre Naturaleza y la desacralización del mundo, 26.
2
Rupert, Sheldrake, La Madre Naturaleza y la desacralización del mundo, 21.
3
Ileana Almeida, Mitos Cosmogónicos de los pueblos indígenas del Ecuador, 126.
Angeline Herrera Moreno
01/02/019

diferentes conceptos: frío/calor, interior/exterior, excremento/condimento;


obscuridad/claridad4.

La tercera pareja Ayar Auca y Mama Cora también guarda una relación de
analogía. Auca que significa “guerreo”, “enemigo” también se puede traducir como
sacerdote. Y el nombre de Cora quiere decir “hierba seca, árida, cizaña, desolada” en
ese sentido Auca y Cora se asemejan ya que de ambos se puede decir que expresan
infertilidad. La última pareja Ayar Manco y Mama Ocllo no queda exenta de estos
paralelismos. Manco que quiere decir “fertilidad, abundancia, riqueza” y Ocllo que
significa “prolífica, fecunda, preñada”. Claramente ambos guardan similitud. De esto
concluye Almeida que “la tercera y cuarta pareja se oponen entre sí por diferentes

conceptos: castidad/lubricidad; pobreza/riqueza; productivo/improductivo;


fecundidad/infecundidad.”5

El relato sobre los ocho hermanos gemelos revela las huellas de la organización
incásica basada en la dualidad. Los dos primeros Ayar Cahce y Ayar Uchu, son
protagonistas de acontecimientos inverosímiles y los dos últimos, Ayar Auca y
Ayar Anco, de hechos verdaderos. El cuarto hermano se queda con las cuatro
mujeres-hermanas de los otros dos ya que detenta riqueza, potencia sexual y
poder político. La oposición de hermanos enemistados se repite como en los
mitos de otras culturas6.

El tema del doble presente en el los mitos de los hermanos gemelos es también
un tema muy desarrollado dentro de la literatura. Según Levis Strauss cuando se trata de
gemelos o más de un niño que están a punto de nacer, “el mito normalmente refleja
consecuencias muy serias porque, aunque haya sólo dos hijos, los niños comenzarán a
luchar y a competir para decidir quién tendrá el honor de nacer en primer lugar”7. Se
cree que el malo es quien procederá a eliminar al resto.

Tal pareciera que eso el lo que sucede en el mito de los hermanos Ayar. Uno a
uno van desapareciendo los hermanos varones, todos se convierten en piedra hasta
quedar solamente el cuarto hermano Ayar Manco cuyo nombre se puede traducir como
“fertilidad, abundancia y riqueza”. Se podría interpretar que las cuatro hermanas han

4
Ibidem.
5
Ileana Almeida, Mitos Cosmogónicos de los pueblos indígenas del Ecuador, 127.
6
Ileana Almeida, Mitos Cosmogónicos,
7
Lévi-Strauss, Mito y Significado, 61.
Angeline Herrera Moreno
01/02/019

sobrevivido porque el poder debe radicar sobre un solo Inca “hijo del sol” y por lo tanto
su existencia no amenaza la consolidación ni el orden socio político del imperio.
Aunque la figura de Mama Huaco sea la de una mujer guerrera, de gran voluntad y
capaz de asesinar.

Sin embargo, hay que recalcar que los hermanos Ayar estaban lejos de encarnar
la dicotomía conocida como bueno/malo, sino que más bien el hecho de que hayan sido
más de dos hermanos denotaba diversidad y cada uno representaba un matiz diferente.
Tenían diferentes personalidades, que podrían también considerase como distintos
arquetipos: el fuerte, el voluptuoso, el anacoreta y el rico, cada uno de ellos con su par
femenino.

Es pertinente mencionar aquí que para los indígenas la Pachamama, la madre


tierra como su fundamento encierra dos dimensiones, que dentro de la concepción del
pensamiento occidental están separadas: el tiempo y el espacio. Desde la cosmovisión
indígena el espacio lo abarca todo, nada está separado de la madre tierra, todo está en
relación de unidad con la Pachamama. Por ello el mito de los Hermanos Ayar, su
nacimiento, podría interpretarse como el origen de una civilización que se originó a
partir de la multiplicidad más que de la ambigüedad. Y que el peligro de caer en
dualidades es la imposibilidad, heredada de occidente, para pensar en que ambas existen
formando parte una de la otra.

Bibliografía

Almeida, Ileana. Mitos Cosmogónicos de los pueblos indígenas del Ecuador. (Quito:
Abya Yala), 2014.

Sheldrake, Rupert. El renacimiento de la Naturaleza: la nueva imagen de la Ciencia y


de Dios. (Barcelona: Paidós), 1994.

Strauss-Lévi. Mito y Significado. (Alianza Editorial), 1978.

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