Martes 23 de Febrero de 2016

Juan Manuel Forero Cano

Estudiante de Ciencia Política
Estudios Sobre lo público – privado
Profesor: Alejandro Lozano
Síntesis documental: Loraux, Nicole. “El operador femenino”, “Las mujeres, los hombres y el
esfuerzo”. Contenido en “Las experiencias de Tiresias: Lo masculino y lo femenino en el
mundo griego”. Acantilado. Barcelona. España. 2004 Págs.: 9 – 40.
La autora pretende aportar a las visiones y pensamientos que se tienen de la antigua Grecia
en cuanto al hombre griego y su posición frente a lo femenino. Esto lo realiza según la
construcción de la filosofía, la política, las festividades, la ciudad, los mitos he incluso desde
el mismo hombre y su virilidad. Virilidad que es dicotómica a lo femenino y que sin esta
última no podría desarrollarse a su máxima expresión, según Loraux.
La hipótesis central del texto es que la visión alternativa con la que nos invita a mirar al
hombre griego de la antigüedad como un hombre digno que es más viril si tiene algo de
feminidad. Se explica esta relación como una ambivalencia con lo femenino desde la palabra,
que designa la división del sexo como indico de qué papel juega en un sistema dado el
individuo designado con el término. Se explica la ambivalencia como un intercambio entre los
sexos también, como una mezcla o una inversión. Esto lo explica en las relaciones que tiene
lo femenino y lo masculino en el cuerpo como las figuras inciertas mixtas de feminidad y
virilidad; en la psiquis, donde se amplía la sexualidad; en los ritos y fiestas donde se invierten
los roles para tener paso por el otro; en el teatro, donde en la interpretación se vive la
realidad y la ficción, donde se puede ser el otro y complementar lo masculino gracias a los
matices que brinda lo femenino.
Desde la interpretación de la autora a la visión del hombre griego de la antigüedad, lo
femenino es en tanto un objeto deseado. El cuerpo como el principal deseo. Pero así mismo
la inclusión de lo femenino como manera de interiorizarlo y generar la oposición para la
existencia del hombre, se mira como lo que representa la diferencia entre los sexos, mas no
como algo humano. El texto también permite analizar el placer y el dolor, no como algo dado
por la naturaleza a la mujer, sino como una virtud que poseen los hombres y las mujeres. El
placer en mayor medida de la naturaleza de la mujer (según la historia de Tiresias), mientras
que el dolor, explicado desde el sufrimiento del parto, aunque es mayoritariamente
expresado en la mujer por su condición de quien da vida, el hombre viril busca reforzar su
virilidad y su poder por medio del dolor. Ojala un dolor que se acerque a lo que puede ser un
dolor de parto.
El texto finalmente es una crítica a los historiadores y antropólogos que han estudiado a los
griegos, ya que definen la sexualidad como algo evidente o natural y que no amerita estudio.
Contrario a la afirmación de la autora que explica como los griegos pensaban gran parte de
su tiempo en las diferencias sexuales y como sacarle provecho a las mismas a favor o en
beneficio del hombre y su sociedad.