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UNIVERSIDAD NACIONAL ABIERTA

VICERRECTORADO ACADÉMICO
CENTRO LOCAL MÉRIDA
UNIDAD DE APOYO TOVAR

TRABAJO PRÁCTICO: 1

ASIGNATURA: Sociología de la Educacion y Desarrollo Comunitario

CÓDIGO DE ASIGNATURA: 576

CARRERA: Educación Mención Preescolar (542)

FECHA DE ENTREGA: 23 / 07 / 2019

NOMBRE DEL ESTUDIANTE: Antonieta de J. Gareffa Villasmil

CÉDULA DE IDENTIDAD: C.I: V- 8.083.818

CENTRO LOCAL: Mérida (12)

OFICINA DE APOYO: Tovar (01)

FIRMA DEL ESTUDIANTE ____________________

NÚMERO DE TELÉFONO MÓVIL: 0426-9034622

LAPSO: 2019
UNIVERSIDAD NACIONAL ABIERTA
CENTRO LOCAL MÈRIDA
OFICINA DE APOYO TOVAR

ENSAYO: Módulo I

La educación como hecho social


Enfoques y Modelos teóricos de la Sociología de la Educación
Rol social del docente
La sociología de la educación es una disciplina que utiliza los conceptos, modelos y
teorías de la sociología para entender la educación en su dimensión social. Ha sido cultivada
por los sociólogos que han tenido un interés creciente por la educación y por los pedagogos
que han pasado de recurrir casi exclusivamente a la psicología, a un equilibrio entre ésta y la
sociología que podría ayudarnos a cambiar de parecer de la vida. La sociología nace en
Francia y casi al mismo tiempo nace en Inglaterra. De Inglaterra se dirige a EEUU, y ésta se
convierte en la sociología más poderosa del mundo que formándose la sociología empírica.
Según la Enciclopedia Ilustrada del Siglo XXI, la define como la “Ciencia que estudia el
desarrollo, la estructura, las instituciones (clase, familia, comunidad y poder) y la función de
la sociedad, basada en el concepto de que los seres humanos no actúan de acuerdo a sus
propias decisiones individuales, sino bajo influencias culturales e históricas y según los
deseos y expectativas de la comunidad en la que viven.
Desde el momento mismo de su inicio como ciencia, la Sociología se dió cuenta de la
interconexión de los fenómenos sociales y lo difícil que era segmentar la realidad social para
estudiar aspectos separados de ella. El funcionamiento de la sociedad como un todo está
presente desde el momento mismo de su nacimiento, al igual que la certeza de que la
sociedad es dinámica y que se transforma continuamente. Así, para la Sociología, todo
fenómeno social puede ser abordado desde dos perspectivas, el fenómeno en sí y el
fenómeno como proceso, de aquí que la Sociología estudie tanto la naturaleza del fenómeno
como los procesos de cambio social en él o producidos por él. Por cambio social se
entenderá toda variación producida en los aspectos básicos de la sociedad. La Sociología lo
abordará desde tres perspectivas: el contenido del cambio, la forma de llevarse a cabo, y los
motivos y las causas que lo produjeron, el cómo y el porqué se han producido cambios en la
sociedad, también ha sido una constante en la Sociología desde sus inicios.
Asimismo, una de las estructuras sociales que interesó y fue objeto de estudio desde el
inicio de la Sociología fue la educación, la educación como fenómeno social y las relaciones
entre educación y sociedad. Durkheim fue el primero en plantear que toda sociedad
instrumenta mecanismos de transmisión para adaptar a las nuevas generaciones a
costumbres, valores, creencias, pautas de comportamiento, valorados y permitidos
socialmente. La educación, y en concreto la escuela, cumple, para este autor, la función de
integrar a la vida social, a partir de la homogenización y de la transmisión de valores
universales y válidos para todos los miembros de la sociedad.
La educación se considera como un fenómeno social porque la educación solo se da
dentro de la sociedad. Toda sociedad, desde la más primitiva hasta la más compleja crea
mecanismos de adaptación a la vida social, la socialización no es más que la introyección de
costumbres, valores, creencias, pautas de comportamiento vigentes, valorados y permitidos
socialmente. Inicialmente la familia y posteriormente la escuela, son las instituciones
designadas y aceptadas socialmente para cumplir esta función.
También porque la educación es producto de procesos sociales más amplios, es decir,
que responde a un contexto económico, político y social particular e históricamente ubicable
en tiempo y espacio. Las necesidades presentes en la sociedad determinarán el tipo de
educación, las costumbres, los valores, las creencias, las pautas de comportamiento y el
modo en que la educación se estructura. Además, porque la educación estructura y da
contenido a las relaciones sociales, esto es que al homogeneizar las pautas de
comportamiento y al transmitir contenidos universales y válidos para todos hace posible la
interacción social, condicionándola con actitudes, formas de vida y tipo de relaciones
aceptadas y valoradas socialmente.
Asimismo, otra característica es que la educación forma las identidades culturales
individuales y colectivas. Todo ser humano es producto de una cultura más amplia, a la cual
pertenece y con la cual se identifica. Su forma de actuar, pensar y hasta sentir vienen dados
por la cultura de pertenencia transmitida a través del proceso de socialización. En
consecuencia, la educación como fenómeno social se afrontará, sociológicamente, desde
dos perspectivas: el fenómeno en sí y el fenómeno como proceso. El fenómeno educativo,
sus relaciones sociales, su estructura social, su acción social y sus instituciones y el
fenómeno educativo como proceso generado por cambios sociales y productor e impulsor de
cambios sociales.
En este orden de ideas, la rama de la Sociología que estudia la dimensión social del
fenómeno educativo se denomina Sociología de la Educación que tiene como finalidad
generar conocimientos científicos que expliquen, sistemática y ordenadamente, la realidad
educativa, partiendo de un método riguroso que garantice la confiabilidad de sus hallazgos, y
le permita intervenir en ella. Como toda ciencia la Sociología de la Educación persigue
describir, analizar, explicar/comprender, predecir e intervenir en esa realidad. La Sociología
estudia la educación a dos niveles, macro y micro social, a nivel macro social estudia, las
relaciones entre lo social y lo educativo, los contenidos que se trasmiten (ideas, sentimientos
colectivos, tradiciones, hábitos y técnicas) las formas que reviste bajo la presión de las
estructuras sociales (instituciones escolares y el equipo o instrumental propio que sirve para
trasmitirlo) y a nivel micro social, las relaciones dentro del aula, los significados de la acción
para los actores y el currículum que se transmite.
De allí pues que, han surgidos diferentes perspectivas y teorías dentro de Sociología de la
Educación como son El Estructural Funcionalismo es una corriente que surge en la escuela
de Chicago, en la primera mitad del Siglo XX, este enfoque plantea que la sociedad es un
sistema donde todo y cada uno de los elementos están interconectados, que la sociedad es
meritocrática basada en la igualdad de oportunidades, en el consenso y en la búsqueda de
equilibrio. Asimismo, que la educación, además de socializar cumple la función de selección
y ubicación social de la posición que van a ocupar los individuos dentro de la escala social.

Entre los aportes o fortalezas que ha legado este enfoque se encuentran muchas, pero a
nivel de Sociología de la Educación conviene resaltar, el determinar que las escuelas o las
instituciones educativas responden a los intereses generales de la sociedad. El detectar
normas y propiedades latentes y no explícitas en el currículo escolar, lo que posteriormente
se denominará currículo oculto, el plantear la importancia de la educación en el desarrollo y
progreso social y el tratar de construir una teoría que engloba e interrelaciona todos y cada
uno de los componentes de la sociedad. Su debilidad radica en que toma como punto de
partida el consenso, el equilibrio y la estabilidad del sistema, sin tener en cuenta la
transformación y el cambio permanente. El desconocer los conflictos de clase e ignorar los
intereses socioeconómicos en competencia. Al ser apolítico no cuestiona los valores,
creencias y normas que la escuela transmite. Los conflictos se expresan como fallas de la
socialización o en la inadaptación del individuo por causas ajenas a la escuela o al aula. La
escuela esta alejada de los conflictos de clase y poder. El conocimiento se aprecia,
solamente, en función de su valor instrumental en el mercado.
Luego, surge el enfoque Critico –Marxista creado por Karl Marx, cabe destacar que él no
desarrolla el aspecto educativo ha profundidad y sólo lo coloca como una superestructura
social encargada de la ideología de la clase dominante. Es a partir de los años 70 donde los
marxista estructuralistas o neo - marxistas se dedican a estudiar la educación y la revelan
como la principal reproductora cultural o económica de las relaciones de producción
dominantes. La teoría de la reproducción económica, representada por el marxismo
estructuralista, parte de que la escuela es la mediadora y reproductora entre las posiciones
sociales de origen y la estructura social, trata de explicar como el origen de clase determina
el acceso y el progreso en el interior del sistema educativo. La educación forma parte de la
superestructura y cumple una función ideológica, entendiendo por ideología, falsa conciencia,
o sea la inculcación de significados funcionales y necesarios para la reproducción
económica, las relaciones económicas y la división del trabajo. La educación es un aparato
ideológico del estado y este es su aporte fundamental. El estado como mediador entre el
poder de las clases económicamente dominantes y la estructura y contenidos educativos.
El aporte fundamental de la teoría Crítica Marxista es haber develado el carácter
ideológico de la educación y cómo ésta reproducía la cultura y las relaciones económicas y
sociales dominantes. A raíz de sus aportes y estudios, la educación dejo de considerarse una
institución neutral, basada en la meritocrática y en la igualdad de oportunidades y paso a ser
considerada como una institución legitimadora de los valores y conocimientos socialmente
aceptados.
Mas tarde, en los años 80 surgen nuevos Enfoques de Sociología y de Sociología de la
Educación en particular no están interesados en crear la gran teoría social, sino en estudiar
la vida cotidiana, los significados que los individuos asignan a sus acciones y las
interrelaciones que se generan. El análisis recae en el propio proceso educativo, haciendo
énfasis en el análisis de gestión y transmisión de conocimientos y las relaciones de poder
que en él subyacen. En tanto, sobre la influencia de la Sociología crítica nace la nueva
Sociología de la Educación que va a centrar su objeto de estudio en la vida dentro del aula,
en las interacciones que allí se establecen, en los contenidos que se transmiten y como ellos
inciden en el significado de las acciones de los individuos que participan de esta interacción,
tanto alumnos como docentes.
Bajo el nombre de la nueva Sociología o Sociología Alternativa se agrupan una serie de
planteamientos diferentes, como son la Sociología interpretativa, la Sociología de la
resistencia y la introducción de dos variables fundamentales que hasta el momento no
habían sido consideradas en Sociología, la etnia y el género. Los elementos comunes que
unen a esta nueva Sociología son, la concepción del actor social como un ente participativo,
que construye y da significado a sus acciones, la vida cotidiana de la escuela como elemento
de análisis, el empleo del método cualitativo, sobre todo de la etnometodología y la
participación acción para la recolección de información y la creencia de que la institución
escolar puede ser transformadora tanto de las condiciones sociales como de los individuos.
La Sociología Interpretativa centra su estudio en las relaciones del aula, en la construcción
social del currículum y en las relaciones de poder que subyacen tanto en la transmisión de
conocimientos como en las interacciones profesor alumno; mientras que la Sociología de la
Resistencia se centra en el análisis de la escuela como un espacio de conflicto y lucha social
ideológica y política, y en como este espacio puede generar cambios tanto educativos como
sociales. La introducción de las variables de etnia y género han permitido detectar y
desentrañar la discriminación silenciosa que históricamente se ha mantenido oculta y
opacada por la discriminación de clases. En consecuencia, la nueva Sociología va a centrar
su análisis, comprensión y explicación en los tres sistemas fundamentales de la institución
escolar, a saber: El sistema curricular, organización y transmisión de conocimientos, el
sistema de estilos pedagógicos, relaciones sociales y el sistema de evaluación, valoración.
Con respecto al rol social del docente, se define el término de rol como todo patrón de
comportamiento vinculado a una posición o situación social específica. El rol ideal prescribe
los derechos y obligaciones y al mismo tiempo genera expectativas sobre el comportamiento
en los otros. Es básicamente, el papel esperado y prescrito socialmente que se debe
desempeñar dentro de cada situación o posición que se viva u ocupe en sociedad. La
formación del docente dependerá de la concepción filosófica social, de la concepción del
individuo y de la concepción del aprendizaje valorada y prescrita socialmente y reflejada en el
diseño curricular de la carrera.
Asimismo, en la nueva concepción de la formación y la práctica docente el conocimiento
se concibe como una creación social. Docentes y alumnos se relacionan en términos de
igualdad, la información es compartida y se respetan las experiencias y la información que
cada uno posee. Los estudiantes son modelos dinámicos de conducta, que participan en la
definición y re definición de sus mundos. Se aceptan las diferencias y las diferentes formas
de percepción y conocimiento que provee cada cultura, grupo minoritario, etnia o género. Las
relaciones y las situaciones en el aula, contribuyen a que el alumno construya el
conocimiento y el significado del mismo. Las relaciones del aula que se generan a partir de
esta concepción resaltan la solidaridad, la tolerancia, el respeto a las diferencia, el aprender
a aprender, a convivir, a hacer y a conocer.
La nueva Sociología confiere al docente un nuevo rol del docente, que debe variar de
simple ejecutor de conocimientos ya elaborados a intelectual transformador, y esto solo es
posible si la formación hace énfasis en la transformación y no en la reproducción. La
concepción del maestro como intelectual plantea la idea de un creador, de un participante
activo, cuestionador de la práctica educativa que redimensione y genere continuamente
cambios en su rol y en su actividad. Esta acción no debe limitarse a las paredes del aula,
sino que debe trascender el espacio escolar, llegando a la comunidad y a la sociedad.
Actualmente, la sociedad presenta características bien definidas que influyen en le rol del
docente frente a ella; estas características se pueden resumir en dos palabras: Globalización
y postmodernidad, la primera es un producto del avance de la tecnología y de los sistemas
de comunicación. Según Castells (200) citado por Hernández (2005) expone que en una
sociedad como la actual el docente no debe desempeñar el rol tradicional ya que la escuela
que se necesita actualmente debe caracterizarse por la participación activa de todos sus
miembros en el manejo y la construcción de los conocimientos. Debido a que la sociedad
actual está caracterizada por la globalización, el conocimiento, la información y el rápido
cambio e incremento del saber, es necesario que la educación responda a esas
características. Por su parte, la postmodernidad, puede definirse sencillamente como la
etapa posterior al modernismo y ahí su nombre se entiende y se acepta, lo que la caracteriza
en primer lugar, la desmitificación, el derrumbamiento de los ídolos y de las utopías, de las
certezas, el ser humano se ha convertido en un ser escéptico, que no cree en nada y duda
de todo lo que tenga visos de verdad absoluta. Frente a esto se ha desarrollado una postura
de relativización de todo cuanto nos rodea, la conciencia de lo efímero de la existencia y del
mundo en la cual esta inmersa, por lo tanto lo único valido es la inmediatez, el vivir el aquí y
el ahora, el presente como forma de vida, cómo lo único válido, ésta actitud ha generado un
excesivo individualismo y superficialidad en las interrelaciones sociales. El individuo se
centra en su realización personal, se ha convertido en una persona capaz de construirse en
la exclusión y el dominio del otro, desarrollándose un juego de mascaras, una sociedad
carnavalesca, donde no se dan auténticas relaciones. Pero un rasgo que sobresale en la
posmodernidad es la aceptación de la diversidad, al tomar conciencia de que todo es relativo
y de que no existen certezas absolutas, se acepta al otro tal y como es, se acepta desde su
forma de ser, hasta su cultura, desarrollándose la pluralidad cultural, la tolerancia frente a las
peculiaridades de cada cultura.
No se puede afirmar que la sociedad actual es producto del desarrollo del
postmodernismo, las concepciones postmodernas han abonado el crecimiento y desarrollo
de la sociedad actual, ambos se retroalimentan y sustentan. Una sociedad en continuo
cambio y transformación solo puede subsistir si se desarrolla dentro de la flexibilidad, la
inmediatez y la total carencia de certezas, esto lo brinda la perspectiva postmoderna.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Hernández, A. (2005). Sociología de la Educación y Desarrollo Comunitario. Modulo I.


Publicaciones Monfort.c.a.

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