Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
El ecosistema es el conjunto de especies de un área determinada que interactúan entre ellas y con su
ambiente abiótico; mediante procesos como la depredación, el parasitismo, la competencia y la simbiosis, y
con su ambiente al desintegrarse y volver a ser parte del ciclo de energía y de nutrientes.
¿Qué es un ecosistema?
Un ecosistema está compuesto por procesos en constante actividad a lo largo de un tiempo y en un área determinada.
Este término ha sido debatido a lo largo de la historia, perfilando su definición. Su origen se
remonta a los siglos XVIII y XIX, donde naturalistas de la época trataban de discernir los
patrones que existían detrás de las interacciones entre los individuos así como su
distribución. Todo se hizo desde un planteamiento estático, su modelo no evolucionaba
con el tiempo. El ecosistema era una estructura constante en el tiempo.
Hacia el siglo XX surgieron múltiples formas de interpretar al ecosistema que sí incluían el
cambio en el tiempo, apareciendo dos visiones asociadas, el holismo y el reduccionismo.
Desde el punto de vista holístico, el ecosistema adquiere propiedades equiparables a las de
los organismos que lo integran. El todo es más que la suma de las partes. Desde el
punto de vista reduccionista podríamos explicar las propiedades de los ecosistemas a partir
del conocimiento de las propiedades de los organismos que lo forman. El todo no es más
que la suma de las partes.
Pese a que el primero que acuñó este término fue Roy Clapham en 1930, su definición
apenas hacia referencia a los componentes físicos y biológicos del entorno. En 1935 Arthur
George Tansley, un botánico y ecólogo, lo completó como una serie de complejas
interacciones entre individuos de una comunidad y los flujos de energía y materia
provenientes de factores bióticos y abióticos. A partir de este punto muchos autores han ido
aportando a esta definición.
Ecosistemas Terrestres:
Tanto la flora como su fauna vive y desarrolla sus actividades en la tierra como sustrato
principal. Al ser un ecosistema basado en este componente, hay múltiples factores que
afectan directamente a su biodiversidad (latitud, altitud, humedad, temperatura, etc.). Este
hecho provoca una separación en zonas según la latitud.
Praderas: Con la PPN más baja de este grupo, tan solo 600.
Ecosistemas Acuáticos:
Son aquellos en los que su flora y fauna vive y desarrolla su actividad en agua
mayoritariamente. Debido a las propiedades del agua algunos de los factores que afectan a
los ecosistemas terrestres se ven atenuados. Otros como transparencia del agua y el
alcance de la luz serán factores determinantes. Aquí encontramos a dos divisiones
importantes:
Ecosistemas de agua salada: Son todos aquellos que tengan lugar en aguas
con concentraciones de sales minerales elevadas. Pueden estar en zonas más
terrestres (ría), pero la mayor parte de este grupo no es continental. Pueden ser
mares, rías, playas, océanos…
Ecosistemas de agua dulce: Son todos aquellos que tengan lugar en aguas
con concentraciones de sales minerales bajas. Mayoritariamente se encuentran
en zonas continentales. Pueden ser ríos, lagos, manantiales, aguas
subterráneas…