Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
MÁS INFORMACIÓN
El gasto en personal amenaza el objetivo de déficit de la Generalitat
Las autonomías empiezan a recortar gasto público por la asfixia financiera
Los portavoces de la oposición han arremetido contra Pere Aragonès a quien han acusado de no
asumir su responsabilidad ante el bloqueo presupuestario. La socialista Alicia Romero ha reclamado
al Govern que convoque ya elecciones y ha lamentado que el vicepresidente haya culpado a la
oposición de no tener Presupuestos. "Si no tenemos cuentas es porque ustedes no las presentaron en
el hemiciclo. Y muchas de sus reivindicaciones estaban en los Presupuestos del Estado que ustedes
rechazaron", ha afirmado la socialista.
María Sirvent, de la CUP, ha mostrado su estupor de que el Govern tenga que acometer recortes
cuando gestiona 2.700 millones más de ingresos. "Denuncian al Estado pero recortan para cumplir el
déficit. ¿No ven que no tiene ningún sentido? ¿Cómo pueden decir que así seremos más
independientes?". José María Cano, de Ciudadanos, ha acusado a Aragonès de actuar con una
"insolidaridad populista de libro" y de no controlar las cuentas, entre otras cosas, por el "despilfarro"
del procés. El diputado del PP, Alejandro Fernández, considera que los recortes promovidos por la
Generalitat son una consecuencia de la "irresponsabilidad del Gobierno y de la Generalitat", ambos
sin Presupuestos actualizados para este ejercicio.
"Llevaremos al Estado a los tribunales para que nos paguen los recursos
por los anticipos de la financiación de 2019 que son nuestros, de los
ciudadanos de Cataluña, que nos corresponden por ley y que nos están
reteniendo de forma irregular", ha señalado Aragonès casi al mismo
tiempo que iniciaba su intervención.
En total, son unos 4.500 millones de euros que las comunidades han
dejado de recibir durante este año pero que ya habían consignado en sus
Presupuestos. Este desfase está obligando a algunas autonomías a
aprobar recortes o contener el gasto en el último tramo del año. Las
autonomías también reclaman otros 2.500 millones por el cambio del
sistema contable del IVA.