·Poesía Visual·

(Laura Sánchez)
· PROFUNDIDADES ·
¿Y si el mar no es tan profundo como pensé?

(Pausa) (música Oltremare)

No… el anagrama no radica en cuán profundo (o pando) es el mar.

El problema se halla en el agua…
Mientras más profundo uno se sumerge,
Más oscura se torna el agua.
Agua, profundidad y luz no albergan en un mismo espacio de
tiempo.
 PAUSA

Sobre ella no hay mucho que hablar…

Se requiere estar en silencio.
Observar lo externo
Como reflejo de lo interno.
Mantenerse en pausa,
transitando el presente.

(photomontaje y algunos textos).

 MUTAR
Voy a escribir un poema al que será necesario corregir.
Porque nada es estático. Hasta la poesía debe mutar.
LADO B

¿Has intentado alguna vez dibujar una

sombra?
¿O cantar el silencio que habita en el
abismo?
Abismo que surge al caer en la nada de
una mirada.
Mirada que lleva a la ausencia.
Ausencia generadora de vértigo
dejándonos sólo en pausa.
Pausa que se caya en un silencio vertical.
 ABES

Aún sin terminar,

Voy abriendo recuerdos.
Al igual que la nieve,
el agua te hace más lento el caminar.

(poner música Marionas)

 FUGA
El tiempo permite inventar nuevas situaciones.
Vivir en el pasado (o con él) es estar ausentes de RENOVACIÓN … y de RESTAURACIÓN.
¿No será acaso, la incapacidad de inventar en nuestro presente lo que nos obliga a mirar hacia atrás?

Impresiones de un photomontaje y algunas notas.

 ESCRITOS EN BLAU
De aquellas reiteradas palabras
Que revolotean aquellas páginas,
(Y que parecen tener la misma intención)
Algo cambio.
 ECO TARDÍO – John Ashbery.

A solas, con nuestra locura y nuestra flor preferida,

Vemos que en realidad no queda nada sobre lo que escribir.
O que, más bien, es necesario continuar escribiendo sobre las mismas cosas de siempre
De la misma manera, repitiendo las mismas cosas una y otra vez,
Para que así el amor persista y se haga gradualmente diferente.

Hay que volver a examinar eternamente hormigas y colmenas,

Así como el color que tomó el día un centenar de veces,
Variando entre el verano y el invierno
Para que baje la velocidad hasta alcanzar la de una verdadera zarabanda
Y se acurruque allí, a descansar, con vida.

Sólo entonces la falta crónica de atención de nuestras vidas nos envolverá,

conciliadora y con un ojo en esas largas sombras de peluche marrón
que le hablan tan profundo a la conciencia improvisada que tenemos de nosotros mismos,
los motores parlantes de nuestra época.

Textos y fotografías by Laura Sánchez · lausanchez.ula@gmail.com · +5492616180153