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¿Cómo sería el país actualmente si el magnicidio no hubiera sucedido?

El Doctor LUIS CARLOS GALÁN SARMIENTO, abogado de la universidad


Javeriana graduado con honores y se destacó por fundar la revista Vértice; y en el
sector estudiantil gracias a la ponencia que presentó, durante el III Congreso
Javeriano de abogados, sobre la integración económica de América Latina, la que
fuera su tesis de grado. Y Realizo su doctorado en Derecho y Economía
graduándose el 6 de agosto de 1965 político Colombiano Político. Proclamado
candidato presidencial por la convención del partido liberal, el 18 de agosto de
1989, quien tuvo inconvenientes con este y a raíz de esta situación dio origen a su
propio partido conocido como el nuevo liberalismo con el cual casi logra la
presidencia de la Republica de Colombia y en alguna ocasión presento la
siguiente moción "No reconozco enemigos dentro del Partido Liberal; los únicos
enemigos son los que utilizan el terror, la violencia para acallar al pueblo
colombiano, para intimidarlo o para asesinarle a sus más importantes
protagonistas". el cual fue víctima de los carteles de la droga en Colombia por su
lucha frontal en contra de ellos a quienes se les atribuye su asesinato y la
penetración que tenían en la sociedad colombiana, y en su afán de modernizar las
instituciones para terminar con la corrupción al interior de estas, haciendo alusión
a una de sus frases célebres “Lo que requiere Colombia, ante todo, es sinceridad
entre quienes se acerquen a interpretar su destino y que las ideas fundamentales
se conviertan en compromiso real de quienes las presentan para que puedan
llegar a ser verdaderos propósitos nacionales”, el doctor GALÁN un estudiante
brillante desde su niñez, al ocupar siempre el primer puesto pero a si mismo
rebelde en su causa e ideales, su primer acto político del que se tuvo noticia fue
en los desfiles estudiantiles de protesta contra el régimen de Rojas Pinilla. Tenía
13 años. Por cuenta de ello, fue detenido Así afirmó “la fama entre sus
compañeros del Colegio Antonio Nariño de ser el político, fantasía que alimentaba
hablándoles de sus sueños de pronunciar discursos en el parlamento” y en el
episodio una noche en la plaza de toros, recibió una pedrada en la nariz, la cual le
dejó una cicatriz por el resto de su vida y que representaría para él una marca en
la política, y fue un sello hasta el día de su muerte para todos su seguidores ya
que como lo representaba mediante la expresión A los hombres se les puede
eliminar pero a las ideas no …
El doctor Galán siempre fue creyente que con educación se puede llegar a
cambiar el mundo tanto así que trato de lograrlo en Colombia llegando a ser una
figura importante de la política siempre fiel a sus ideales, con todos sus logros, la
más relevante fue la promoción de reforma universitaria de 1971 cuando fue
nombrado por el señor presidente pastrana como ministro de educación durando
dos años en el cargo, lo cual fue considerado por muchos como casi escandaloso
por la edad con la que contaba para esa época y más por las actividades que
realizó durante ese tiempo aparte de la anteriormente nombrada, resultando un
balance de extraordinarias realizaciones: estatuto docente para la
profesionalización de la educación; ley 9º sobre colegios cooperativos;
concentraciones de desarrollo rural en 35 regiones del país; sistema de validación
del bachillerato para mayores de 25 años; sistema de promoción automática en los
tres primeros años de educación primaria; ley de impuesto a los cigarrillos para
financiación del deporte; transformación de quince seminarios en colegios de
primaria y bachillerato convirtiendo su gestión en impresionante, Su participación
política en el país se caracterizó por la rebeldía y la crítica constructiva, como lo
demuestra con una de sus frases célebres: “Nuestra responsabilidad consiste en
demostrar a los violentos, a los terroristas, a los desesperados que han caído en el
extremismo que para buscar la igualdad entre los hombres no hay que apelar al
odio ni a las pasiones inspiradas en los instintos brutales, ni a la lucha de clases,
ni a la contienda entre hermanos”, con sus frases y actitudes pudo haber
cambiado este país ya que los hechos hablan por sí solos en este momento
violento y de desorden en nuestro país damos respuesta sobre un supuesto si el
doctor Galán no hubiese muerto en tan trágico hecho este país no tendría tanta
corrupción en las instituciones, como la de la salud y su ley 100 donde
prácticamente los que tienen dinero son los beneficiados con estos servicios, y
cabe realizar la diferencia con un hecho que se presentó con el actual señor
presidente de la República de Colombia doctor JUAN MANUEL SANTOS al cual le
detectaron cáncer y a los tres días lo estaban operando a comparación de las
personas humildes y no reconocidas en este país, a los cuales les detectan un
tumor maligno y a los doce meses los están velando y enterrando porque no hubo
capacidad ni presupuesto para efectuarles la operación correspondiente, también
podemos citar la problemática con la educación, al no tener la capacidad de cupos
en las universidades públicas para cubrir los requerimientos del futuro de
Colombia como son los niños y jóvenes que salen a enfrentarse con la realidad de
la vida al tratar de conseguir un trabajo sin siquiera tener una profesión porque les
es imposible acceder a los estudios universitarios si son de estratos bajos ya que
no tienen dinero suficiente para costearse los estudios en una universidad privada,
haciendo alusión a una de sus frases célebres, “Cuando una sociedad no le da
esperanza a su juventud, esa sociedad tampoco tiene esperanza por sí misma”
con esto podemos verificar que los derechos fundamentales se han convertido en
negocios donde las ganancia son repartidas entre unos pocos llegando a la
conclusión que la corrupción al interior de las instituciones es la causa de que el
país se encuentre en estas condiciones de violencia e inseguridad presentadas
actualmente y respondemos la pregunta inicialmente estipulada, si el doctor Galán
estuviera vivo y hubiese cumplido con todas sus metas e ideales este país sería
un mejor sitio para vivir y ofreciendo las garantías suficientes para el núcleo de la
sociedad como lo es la familia, accediendo a sus derechos fundamentales como
es la salud y la educación ahora podemos hacer referencia a otro de los discursos
o frases célebres “Si modernizamos nuestras instituciones y nuestros conductas
políticas para integrarnos como una verdadera Nación unida y solidaria, nada ni
nadie podrá detener el progreso de Colombia.”, aparte de todo lo anterior siempre
refirió otra frase que es muy importante y muy verídica que a la larga viene siendo
la principal fuente de la problemática en nuestra sociedad viendo y comparando la
sociedad colombiana con otras como la japonesa o china, “Los cambios de fondo
en una Nación son los cambios de conciencia, los cambios de mentalidad …
me gustaría que en alguna ocasión de la historia llegará un líder con los mismos
ideales del doctor galán haciendo posible el sueño de todos los colombianos
convirtiendo en realidad otro de las oraciones y por cierto una de las más
utilizadas por él y conocidas por todos los colombianos. "Por la libertad, Por la
justicia, Por la democracia, Por la paz. Siempre adelante ni un paso atrás. Y lo que
fuere menester, sea, esta luz se apagó el 18 de agosto de 1989, en plena
campaña presidencial, cuando sufrió un atentado mortal en la plaza de Soacha, al
sur de Bogotá.d

BIBLIOGRAFÍA

Cortés Arévalo, Fernando, ​El asesinato de Galán​ (edición actualizada), Bogotá,


Editorial Planeta, 2005, .
Cuartas Chacón, Carlos Julio, “Insurgencia de un soñador - ​Elogio​ de Luis Carlos
Galán Sarmiento” , en ​Revista Javeriana​ No. 707, agosto de 2004.
Durán Casas, S.J., Vicente, “18-08-89”,​ ​Editorial​, en ​Revista Javeriana​ No. 707,
agosto de 2004.
Galán Gómez, Mario, “El despertar de la conciencia”, en ​Cifras y Letras​ - Revista
de la Contraloría Distrital No. 25, Bogotá, octubre de 1989.
NOTA: EN LA UNIVERSIDAD JAVERIANA ES LA PARTE DONDE MÁS SE ENCUENTRA INFORMACIÓN DEL DOCTOR
LUIS CARLOS GALAN SARMIENTO
(Bucaramanga, 1943 - Bogotá, 1989) Político colombiano. Proclamado candidato presidencial por
la convención del partido liberal,. Su participación política en el país se caracterizó por la
rebeldía y la crítica constructiva. Se comprometió sobre todo a combatir la corrupción y el
clientelismo e intentó modernizar los partidos políticos y las instituciones colombianas. Su mayor
reto, no obstante, fue enfrentarse al narcotráfico y su penetración en la sociedad colombiana,
con lo que se convirtió en el blanco de la violencia promovida por los capos de la droga, a
quienes se atribuye la autoría intelectual de su asesinato.

Luis Carlos Galán


Luis Carlos Galán Sarmiento creció en el hogar formado por el doctor Mario Galán Gómez,
político y presidente de Ecopetrol durante once años, y Cecilia Sarmiento Suárez; era el tercero
de doce hijos. Se creyó por muchos años que el líder liberal descendía del comunero José
Antonio Galán. Estudios recientes muestran que aunque no es claro este parentesco, Luis Carlos
Galán tenía lazos familiares con distinguidos prohombres liberales. El padre de su tatarabuela
paterna, José Joaquín Vargas, comandante del ejército libertador de la Costa Atlántica, fue tío
del político, pensador y economista Florentino González Vargas y del general Plutarco Vargas,
héroe radical caído en la batalla de La Humareda. Por el lado materno, su abuela María Suárez
Galvis Marín Durán era prima segunda del presidente Eduardo Santos y de la madre del poeta y
político Jorge Gaitán Durán.
En 1949, la familia Galán se radicó en Bogotá, en una casa de la calle 59 con carrera 17. Al año
siguiente ingresó en el Colegio Americano. Alternó las temporadas de estudio con vacaciones en
Bucaramanga y Charalá, entablando una entrañable amistad con su primo Alfonso Valdivieso
Sarmiento, más tarde fiscal general de la nación. Cursó el bachillerato en el colegio
departamental Antonio Nariño, en el que ocupó el primer puesto durante todos sus estudios.
Durante su juventud participó en las manifestaciones estudiantiles contra el régimen militar del
general Gustavo Rojas Pinilla. "Durante una de ellas, en 1957 (relató Fernando Garavito), Galán
lanzaba piedra y recibía piedra, hasta que una, certeramente dirigida, lo golpeó en la nariz y
comenzó a sangrar a mares. Luis Carlos Galán conserva todavía la marca y un cierto ángulo
nasal que podría confundirse con el de los judíos; pero no, viene de allá, de la pedrada. Herido,
un jeep del ejército lo recogió y lo condujo a la plaza de toros, donde estuvo 24 horas detenido
con la cara inflamada, pero con el ánimo más inflamado todavía con el deseo de hacer algo
único, de tumbar la dictadura."
El 19 de noviembre de 1960 recibió el grado de bachiller y el año siguiente realizó un viaje a pie
de Bogotá a Charalá. Ingresó en la Universidad Javeriana, donde fundaría la revista Vértice; se
destacó en el sector estudiantil gracias a la ponencia que presentó, durante el III Congreso
Javeriano de abogados, en compañía de Raúl Gutiérrez, sobre la integración económica de
América Latina, que fue su tesis de grado. Recibió éste como doctor en Derecho y Economía el 6
de agosto de 1965. Ese mismo año Eduardo Santos, quien era padrino de matrimonio de los
padres de Galán, le llamó para colaborar en El Tiempo. En este diario inició una vertiginosa
carrera periodística: director de la sección económica, redactor de "Temas y Nombres",
comentarista, editorialista y miembro de la junta directiva.
Durante esta época fue influido por el pensador cristiano Teilhard de Chardin, en cuyo
pensamiento fue introducido, así como en otras corrientes filosóficas, por don Mario Galán.
Desde 1968 hasta 1970 fue subgerente del periódico. Por su labor investigativa al lado de
Enrique Santos Calderón y Daniel Samper, los tres periodistas fueron conocidos como "los tres
mosqueteros". Célebre fue su crónica "Un instante para morir" (relato de un secuestro en Cuba)
publicada en El Tiempo entre el 25 y 29 de agosto de 1969.
Paralelamente, Luis Carlos Galán desarrolló una muy coherente carrera política. Desde la
convención liberal javeriana, en agosto de 1963, Galán expresó su deseo de formar nuevas
generaciones que intervinieran revitalizando el partido. En marzo de 1965 era miembro de la
Dirección Liberal de Bogotá y, todavía en la universidad, logró el apoyo de dos mil estudiantes a
la candidatura de Carlos Lleras Restrepo. Esta fructífera relación con el presidente lo llevaría a la
secretaría y, posteriormente, a la junta directiva de la Sociedad Económica de Amigos del País
en 1966. Como miembro y secretario de la delegación colombiana a la Conferencia Mundial de
Comercio y Desarrollo (UNCTAD), viajó a Nueva Delhi, y luego a Oriente Medio.
En 1970, el presidente Pastrana lo nombró ministro de Educación. La corta edad del ministro
resulta casi escandalosa y recuerda las audacias con que el presidente López Pumarejo
asombraba a sus contemporáneos. La actividad del joven ministro fue impresionante. De sus dos
años en el cargo resultó un balance de extraordinarias realizaciones: estatuto docente para la
profesionalización de la educación; ley 9º sobre colegios cooperativos; concentraciones de
desarrollo rural en 35 regiones del país; sistema de validación del bachillerato para mayores de
25 años; sistema de promoción automática en los tres primeros años de educación primaria; ley
de impuesto a los cigarrillos para financiación del deporte; transformación de quince seminarios
en colegios de primaria y bachillerato; promoción de la reforma universitaria de 1971.
En el Congreso, el ministro Galán se reveló como un eficaz orador parlamentario, mientras que
en el ministerio iba desplegando sus singulares condiciones para el magisterio y la cátedra, que
ya había venido desempeñando como profesor de Historia de las Ideas Políticas en la
Universidad Jorge Tadeo Lozano y como profesor de Derecho Civil en la Javeriana. En 1971, la
amistad y el compañerismo con Gloria Pachón Castro, redactora estrella de El Tiempo, se habían
convertido en amor, y el 22 de diciembre el ministro y la periodista, apadrinados por el
presidente de la República y doña María Cristina Arango de Pastrana, contrajeron matrimonio.
Desde aquel día Gloria se convirtió en la más eficaz y constante colaboradora del entonces
ministro y luego embajador y político.
El presidente Pastrana Borrero lo nombró en 1972 embajador en Italia. Entre las misiones que le
fueron encomendadas figuraron la de representar en la FAO a Colombia, ser delegado en
reuniones de la UNESCO, la Oficina Iberoamericana de Educación y la Organización Mundial del
Turismo, presidir la delegación de Colombia en la Conferencia Mundial de Alimentación y
promover el acuerdo Colombo-Italiano para la creación del Centro Nacional de Restauración de
obras de arte. Impulsó también el proyecto de Desarrollo Rural Integrado, el acuerdo sobre el
ingreso de la Flota Mercante Grancolombiana a los puertos italianos y del Mediterráneo, y la
colaboración italiana en la construcción de los túneles de Quebradablanca (carretera
Bogotá-Villavicencio).
En 1972 nació en Bogotá su primogénito, Juan Manuel, y dos años más tarde nació su segundo
hijo, Claudio Mario, en Roma, donde adelantaba una especialización sobre la Comunidad
Económica Europea. Regresó al país en 1976 como codirector, con el ex presidente Lleras
Restrepo, del semanario Nueva Frontera. A la vez fue columnista permanente de los diarios El
Colombiano y Vanguardia Liberal. Ese mismo año nació en Bogotá su tercer hijo, Carlos
Fernando.
En 1979 ingresó en la política activamente y fue elegido senador de la República por Santander.
El 30 de noviembre de ese año fundó el movimiento Nuevo Liberalismo, como una alternativa
política dentro del partido liberal, apoyado por Álvaro García Herrera y Enrique Pardo Parra,
quienes lo habían acompañado durante su brillante actuación parlamentaria, en la que se
destacó en un debate sobre las minas de El Cerrejón.

Hacia mayo de 1981, en Villa de Leiva, redactó el documento esencial del nuevo movimiento
disidente: "Agoniza una época en Colombia (escribió en ese documento nº 1) y con ella también
las fórmulas políticas, sociales y económicas de la sociedad tradicional. A los ojos de toda la
nación es evidente que se agotan las antiguas concepciones institucionales. Está naciendo en
Colombia una nueva sociedad, lo que supone una nueva manera de entender y hacer política. La
agonía de una época histórica no es fácil para ningún pueblo y las incertidumbres sobre lo que
debe nacer se multiplican en estos momentos... Quienes promovemos el Nuevo Liberalismo
somos liberales porque nos sentimos herederos de lo que ha sido el partido liberal en la vida del
país como vocero del pueblo y sincero representante del espíritu democrático. El liberalismo ha
sido la fuerza del cambio en la sociedad colombiana, pero hoy, al cabo de un cuarto de siglo de
política frentenacionalista, el liberalismo está paralizado, afronta una profunda crisis de
identidad, lo aprisionan intereses egoístas y lo amenazan aventureros del populismo... En los
últimos años el liberalismo dejó de ser el partido del pueblo para convertirse en partido de
gobierno hasta considerar el poder como un fin en sí mismo... Avanza hacia un derrumbe fatal y
definitivo, no por mérito de su adversario tradicional, que vive problemas iguales y peores que
los que afectan el área liberal, sino por el desconcierto ideológico de un partido cuya identidad
estuvo siempre en su capacidad creativa, en la pulcritud de sus dirigentes y en la sinceridad de
sus luchas, características que hoy parecen perdidas y que el Nuevo Liberalismo busca rescatar
en franca apelación al pueblo".
Como metas fundamentales el nuevo movimiento fijó una serie de puntos: una nueva dimensión
de la independencia nacional, resaltando una política exterior dirigida a la construcción de un
nuevo sistema de relaciones internacionales, apoyando la multiplicación de asociaciones de tipo
regional y por la unificación de América Latina; la demarcación de una política cultural de
carácter democrático, basada en un proceso de recuperación de los valores culturales y de la
riqueza de su patrimonio artístico, histórico, arqueológico y arquitectónico; una clara defensa del
movimiento indígena colombiano, remarcando la presencia indígena en las instituciones
democráticas y poniendo en consideración los requerimientos de la Coordinadora Indígena
Nacional, como son el respeto a la autodeterminación cultural, social, política y económica de las
comunidades indígenas, la devolución de tierras y ampliación de resguardos y el saneamiento de
las reservas de propiedad de las comunidades indígenas, suspendiendo de inmediato los
programas de colonización que pudieran ser organizados por el Estado.
Por medio de la democracia orgánica, el Nuevo Liberalismo proponía organizar las relaciones
políticas, económicas y sociales en forma democrática, renovando la forma de hacer política en
el Congreso por medio de la reducción del presupuesto, la supresión del turismo y las
corruptelas de los congresistas, gracias a la reglamentación de las fuentes de financiamiento. Se
pretendía respaldar la descentralización administrativa, económica y cultural del país, luchar
contra los monopolios y la concentración de la riqueza, frenar los abusos de los grandes grupos
financieros y eliminar la miseria como base de una democracia económica. Y a la vez apoyar a
las organizaciones populares, los sindicatos y las diversas formas de participación popular para
el desarrollo de una democracia social. Una última aspiración era un sistema nacional de salud
que, abarcando todas las capas de la sociedad colombiana, supusiese una verdadera conquista y
un derecho real para el pueblo.
El ideario del Nuevo Liberalismo abarcó casi todos los aspectos del acontecer nacional, desde la
renovación de la administración pública, la justicia y el código de estado civil hasta la vital
importancia de los medios de comunicación, la modernización agropecuaria y la transformación
de los sectores industriales, crediticios y de política económica internacional. Subrayó con ojo
previsor la problemática ecológica y recalcó la importancia de un fortalecimiento de la política
fiscal.

Tras la primera convocatoria del Nuevo Liberalismo en el Salón Rojo del Hotel Tequendama el 29
de abril de 1980, Galán se consagró por entero a la actividad política. Dos años más tarde fue
candidato presidencial y obtuvo 745.000 votos. El movimiento, que participó en las elecciones
nacionales hasta 1988, contaba con seis senadores, nueve representantes a la Cámara, 27
diputados y 350 concejales a principios de los años ochenta. En 1983 formó parte como senador
de la Comisión Asesora de Relaciones Exteriores y se destacó por sus denuncias contra la
corrupción administrativa, la reforma de la televisión y las actividades ilegales de algunos
congresistas.
En 1984 el Nuevo Liberalismo obtuvo 605.408 votos en las elecciones corporativas, pero dos
años más tarde Luis Carlos Galán se abstuvo de participar en las elecciones presidenciales, para
no ahondar la división en el seno de su partido. Al año siguiente dictó un curso en Oxford y viajó
por varios países europeos. De forma paralela al desarrollo del Nuevo Liberalismo, el país se
encontró sumergido en una atroz ola de asesinatos. En 1987 ya habían caído el ministro de
justicia Rodrigo Lara Bonilla, miembro del movimiento galanista; el director de El Espectador
Guillermo Cano y el candidato presidencial Jaime Pardo Leal, además de un sinnúmero de
magistrados, jueces, senadores y periodistas.
En 1988, la convención nacional del liberalismo en Cartagena aceptó la idea lanzada por Galán
de convocar una consulta popular para la democratización del partido. El 6 de julio de 1989, el
liberalismo unido lanzó la candidatura presidencial de Galán, quien nombró a César Gaviria como
su jefe de campaña. Todas las encuestas le otorgaban más del 60 por ciento de los votos.
Cuando, el 18 de agosto en plena campaña, Galán subió a la tarima de oradores de la plaza de
Soacha, tenía la seguridad del triunfo, pero fue asesinado. En el Cementerio Central de Bogotá,
durante el sepelio en el que cientos de miles de personas acompañaron el féretro, su hijo Juan
Manuel encomendó las banderas de su padre a César Gaviria. Como escribió Juan Lozano: "La
Constitución de 1991 es el mejor homenaje a la memoria de Galán... Colombia tiene que dar
cabal aplicación a esos instrumentos que tanta sangre nos costaron. Ése es un imperativo
nacional".

Archivo creado: 13 de octubre de 2008.

El 18 de agosto de 1989 murió víctima de un atentado, a los 45 años


de edad, Luis Carlos Galán Sarmiento, candidato a la Presidencia de Colombia. Nacido en
Bucaramanga el 29 de septiembre de 1943, en el hogar formado por Mario Galán Gómez,
entonces Contralor Departamental, y Cecilia Sarmiento Suárez, fue el tercero de 12 hermanos.
Bachiller del Colegio Antonio Nariño de Bogotá, ciudad donde se había radicado la familia,
concluyó sus estudios de Derecho y Economía en la Pontificia Universidad Javeriana en 1965 y
recibió su título profesional en 1970. Había iniciado su vida política en 1956, en el movimiento
contra el gobierno del General Rojas Pinilla, y su trayectoria como periodista, en los claustros
universitarios. Fue entonces cuando fundó la revista “Vértice” y escribió los primeros
editoriales. Después estaría vinculado a “El Tiempo” y “Nueva Frontera”. Profesor universitario
desde 1967, fue nombrado Ministro de Educación en 1970 y en 1972, Embajador en Italia.
Dedicado a la actividad política desde 1978, fue Senador y Concejal de Bogotá. Fundó en 1979
el movimiento “Nuevo Liberalismo” y fue candidato presidencial en 1982. Casado con Gloria
Pachón Castro en 1971, son sus hijos Juan Manuel, Claudio Mario y Carlos Fernando. Para
honrar su memoria Colombia celebra anualmente el Día de la Democracia el 18 de agosto.

RELATO CRONOLÓGICO
Galán, un porvenir

1943-1960
Bucaramanga, el viaje comienza

1943 - 29 de septiembre​
En el hogar formado por Cecilia Sarmiento Suárez y Mario Galán Gómez, entonces Contralor de
Santander, nace en Bucaramanga Luis Carlos Galán Sarmiento, tercero de los doce hijos del
matrimonio celebrado en 1939. El 30 de septiembre de 1944 se realizaría su bautizo.
En el horizonte familiar permanece la figura tutelar de dos hijos ilustres del departamento de
Santander: José Antonio Galán (1749-1782), el comunero, y Gabriel Turbay (1901-1947), amigo
de Mario Galán Gómez.
La familia Galán Sarmiento permanecerá en esa ciudad hasta 1949, cuando se traslada a Bogotá.
Junto a ellos estaría siempre María Suárez Galvis de Sarmiento, «Mamía», la abuela materna
fallecida en 1979 a los 93 años, de gran influencia en el hogar. El 25 de diciembre de 1951, Galán
hizo su Primera Comunión.

1957 - 5 de mayo​
Galán, de 13 años de edad, participa en las manifestaciones estudiantiles contra el régimen del
General Gustavo Rojas Pinilla, establecido cuatro años antes. Fue detenido por la Policía,
permaneciendo una noche en la cárcel. Así se afirmó “la fama entre sus compañeros del Colegio
Antonio Nariño de ser el político, fantasía que alimentaba hablándoles de sus sueños de
pronunciar discursos en el parlamento”.
Galán recordaría que en 1956 “ganó distinciones especiales entre sus condiscípulos al pedir
públicamente la elección popular de Presidente de la República en reemplazo del gobierno
dictatorial”.

1960 - 19 de noviembre​
Recibe el grado de Bachiller en el Colegio Antonio Nariño; debido a que ocupó el primer puesto
durante todos sus estudios de bachillerato, en la misma ceremonia recibe un diploma por medio
del cual se “le otorga el derecho a disponer de una beca que será adjudicada al estudiante que él
designe, de acuerdo con la dirección del Colegio”.
En 1952 Galán había ingresado a este centro educativo, luego de dos años de permanencia en el
Colegio Americano; en septiembre de 1956 se le reconoció como “el mejor improvisador en el
concurso abierto en el Colegio con motivo de su fiesta tradicional”. El premio consistió en un
ejemplar de la obra de Raimundo Rivas, ​El Andante Caballero Don Antonio Nariño(La juventud),
publicada en 1938 con un prólogo de Tomás Rueda Vargas. ​

1960-1970
Bogotá, primeros destellos

1963 - noviembre​
Circula el primer número de ​Vértice,​ revista de las juventudes liberales javerianas, fundada y
dirigida por Galán. Según algunos cronistas, este acontecimiento marcaría el inicio de su carrera
política. Daniel Samper Pizano haría referencia en 1988 precisamente a las Bodas de Plata de
Galán en la política, y recordaría el inicio de su trayectoria como “los tiempos en que era feliz y
javeriano”.
Galán había ingresado a la Universidad Javeriana en 1961, y desde ese año formaría parte del
grupo de “Los seis”, junto a Raúl Gutiérrez, Rosalba Gómez, Lucía Otálora, Armando Echeverri y
Gloria Isabel Nieto. En marzo del año siguiente asistiría a la Convención de Liberales Javerianos,
donde presentaría una proposición que fue aprobada prácticamente por unanimidad; y en 1963
participaría en el Congreso de la Federación Universitaria Nacional reunido en Medellín. En esos
años, Galán también dirigió el programa radial ​Voces de Juventudque transmitía la Emisora
Mariana. ​

1965 - 14 de agosto​
Una columna firmada por Galán aparece en el ​El Tiempo​, donde será reconocido “como
comentarista económico, amén de ejecutivo de la empresa y cronista —que para todo da su
extraordinaria vocación periodística—”, según nota aparecida años después en ese periódico.
Galán se había vinculado a esa casa editorial a mediados de ese año, el último de sus estudios
universitarios.
Nombrado secretario de la delegación de Colombia a la reunión de la UNCTAD sobre comercio
exterior y desarrollo, viajaría en 1968 a Nueva Delhi, donde realizó una importante exposición. Al
año siguiente, el 23 de agosto de 1969, es uno de los pasajeros del avión “J.A. Galán” que es
secuestrado y llevado a Cuba. Su crónica, muy elogiada, aparece en varias entregas. Años
después figuraría entre los grandes reportajes del periodismo colombiano.
Entre los personajes que admira y los autores que lee el joven periodista se destacan José
Asunción Silva y Rafael Uribe Uribe, Teilhard de Chardin, S.J. y Pietro Ubaldi. Al Padre Teilhard
dedicará la portada de la revista ​Actualidades Ecopetrolde mayo de 1970, en la que aparecen tres
escritos de Galán. ​

1970 - 6 de agosto​
Recibe su grado de Doctor en Ciencias Jurídicas otorgado por la Pontificia Universidad Javeriana,
en ceremonia privada que preside el P. Gabriel Giraldo, S.J. En el acta de grado figuran Samuel
Hoyos Arango, como Presidente de Tesis; Mario Galán Gómez, como Presidente Honorario; Gabriel
Melo Guevara y Fernando Contreras Olaya, miembros del tribunal examinador. A la ceremonia lo
acompaña el Director de ​El Tiempo​, Roberto García Peña.
Su trabajo de tesis, “La cooperación internacional en el desarrollo”, fue elaborado con base en la
ponencia que presentó ante la Conferencia de la UNCTAD en 1968. Por esos años, Galán fue
también profesor universitario, tanto en su Alma Mater, como en la Universidad Jorge Tadeo
Lozano.

1970-1981
Antes y después de Roma

1970 - 7 de agosto​
Galán toma posesión como Ministro de Educación en el gobierno del Presidente Misael Pastrana
Borrero, conviertiendose así en el ministro más joven de la historia de Colombia.
El 22 de octubre del mismo año, pronuncia en París un importante discurso ante la XVI sesión de
la Conferencia General de la UNESCO. Durante los 22 meses que está al frente de la cartera de
Educación, Galán enfrenta en diversos escenarios la crisis general que afronta el sistema
educativo colombiano y promueve la reforma universitaria de 1971.

1971 - 22 de diciembre​
Contrae matrimonio con Gloria Pachón Castro, periodista de ​El Tiempo​, hija de Álvaro Pachón,
también periodista, fallecido a temprana edad. En el hogar Galán Pachón nacerá el 29 de julio de
1972, en Bogotá, Juan Manuel, el mayor de tres hermanos. Los otros dos hijos, Claudio Mario y
Carlos Fernando, nacerían, respectivamente, en Roma en 1974, y en Bogotá en 1977.
Galán y su familia viajaron a la capital italiana a finales de 1972 y permanecieron fuera del país
hasta 1976. De 1972 a 1974 Galán desempeñó el cargo de embajador de Colombia ante el
Quirinal, y de 1974 a 1975 el de Representante de Colombia ante la FAO.

1976 – 21 de enero​
Publica su primera columna en ​Nueva Frontera​, la revista que dirige el ex-presidente Carlos
Lleras Restrepo. En el escrito, titulado “Por qué regreso al periodismo”, Galán habla del
fortalecimiento y la renovación que requiere esta profesión en Colombia. En adelante titulará su
espacio en la revista “Una nueva manera de hacer política”.
En 1977 apoyará la candidatura presidencial de Lleras Restrepo para las elecciones de 1978.

1979 - 30 de noviembre​
Funda el Nuevo Liberalismo, movimiento político que tendrá su primera reunión en el “Salón
Rojo” del Hotel Tequendama el 29 de abril del año siguiente, y que será disuelto después de
nueve años de activa participación en el escenario nacional.
En 1978 Galán había sido elegido por primera vez Senador de la República, por Santander, luego
de una memorable campaña en la que contó con el apoyo incondicional de Alfonso Valdivieso
Sarmiento, su primo y amigo cercano desde la infancia. En 1980 sería elegido Concejal de Bogotá.
Al año siguiente publicaría el libro “Los carbones del Cerrejón”.

1981-1989
De Rionegro a la cima

1981 - 18 de octubre​
En Rionegro lanza su candidatura presidencial. En julio había aparecido el texto “Nuevo
Liberalismo para una Colombia nueva”, que recogería los planteamientos de ese movimiento
político.
Al año siguiente, el 15 de julio, en carta que dirige al ex-presidente Carlos Lleras Restrepo, Galán
le comunica su decisión de retirarse de ​Nueva Frontera​, revista en la que ha ejercido el cargo de
codirector; Lleras Restrepo, que había elogiado a Galán en una de las columnas de Hefestos,
reitera su aprecio por el joven periodista que durante siete años le colaboró en esa publicación.
En 1982, en ​El Espectador,​ en el espacio titulado Grandes Reportajes, aparece una reseña sobre
los “doce puntos básicos de un programa de gobierno”, propuesto por Galán como candidato
presidencial. Se habla entonces del “fenómeno de un hombre joven y de un movimiento de
opinión”, que obtiene 745.000 votos. Galán fue reelegido como Senador de la República.

1984 - 30 de abril
En una vía de la capital de la República, el Ministro Rodrigo Lara Bonilla muere víctima de un
atentado;esta fecha señala el inicio de “la narcoguerra”. De 37 años de edad, Lara Bonilla,
destacado hombre del Nuevo Liberalismo, se había enfrentado con decisión a los
narcotraficantes.
Ese mismo año, se inicia la publicación de la revista ​Documentos Nuevo Liberalismoque circulará
por última vez en agosto 1992 con la edición No. 40. En 1985, el 2 de agosto, tendrá lugar el
Primer Congreso del Nuevo Liberalismo. ​

1986 - 11 de marzo​
En 1986 Galán, que había sostenido un debate histórico con Álvaro Gómez Hurtado transmitido
por televisión, renuncia a la candidatura presidencial. Entre 1982 y 1986, Galán había sido
miembro de la Comisión Asesora de Relaciones Exteriores.
Al año siguiente, en 1987, Galán viaja al extranjero para dictar clases en Oxford. El 13 de febrero
de ese mismo año, tuvo lugar en Budapest el atentado contra Enrique Parejo González, hombre
destacado del Nuevo Liberalismo y fiel seguidor de Galán, que había sucedido a Lara Bonilla en la
cartera de Justicia.

1989 - 4 de julio​
En Bogotá tiene lugar el acto de proclamación de la precandidatura presidencial de Galán. Un año
antes, en la Convención del Partido Liberal reunida en Cartagena el 13 de agosto, Galán había
tenido “la oportunidad de presentar las tesis por las cuales habían luchado”. Los acuerdos para la
unión liberal habían recibido el respaldo de esa Convención. En consecuencia, Galán asiste a la
Convención Nacional del Liberalismo que se reúne el 22 de julio en Bogotá.
El 6 de abril había presentado su plan de desarrollo ante el Seminario “La Colombia de los 90”, y
el 21 de junio había intervenido en el Seminario “La agenda Educativa de la década de los años
90’s para la Colombia del siglo XXI”.
En estos meses, a medida que crecía la popularidad de Galán, aumentaba también el temor por su
vida. La celebración de las bodas de oro del matrimonio Galán Sarmiento, el 27 de julio, fue la
oportunidad para un encuentro familiar inolvidable en Villa de Leyva.
1989
Llama encendida en la oscuridad

1989 - 18 de agosto
Poco antes de las nueve de la noche de ese viernes, al llegar a la tribuna donde presidiría una
manifestación política en la plaza de Soacha, municipio que hace parte del Distrito Especial de
Bogotá, Galán es herido de muerte. El país es sacudido minutos más tarde con la noticia de su
fallecimiento.
En la madrugada del sábado 19 de agosto, el cuerpo de Galán es llevado al Capitolio Nacional
donde permanece en cámara ardiente hasta el domingo 20 de agosto. Ese día tienen lugar sus
exequias en la Catedral Primada; horas después, sus restos mortales son sepultados en el
Panteón de los Inmortales del Cementerio Central. En este acto, Juan Manuel, su hijo mayor,
pronuncia una sentida oración fúnebre y encomienda a César Gaviria Trujillo, jefe de la campaña,
las banderas de su padre.
El día de su muerte, Galán había expedido una declaración condenando los asesinatos del
Magistrado Carlos Ernesto Valencia y del Coronel Valdelmar Franklin Quintero, este último
perpetrado ese mismo día, en la mañana.
Pocas semanas antes, el 4 de agosto, se había frustrado un atentado en Medellín. Dos días
después había viajado a Venezuela, donde había visitado la Hacienda de San Mateo, lugar donde
murió Antonio Ricaurte.

Desde 1989
Entre la Historia y el porvenir

1989 - 21 de diciembre​
El Presidente de la República Virgilio Barco Vargas sanciona la Ley 75, “por la cual la Nación rinde
honores a la memoria del doctor Luis Carlos Galán Sarmiento”. Entre otras disposiciones, se
ordena la creación del Instituto para la Democracia ‘Luis Carlos Galán Sarmiento’, convertido
años después en la Corporación “Escuela Galán”; así como que la Biblioteca del Congreso lleve el
nombre del ilustre Senador. Ocho días después del magnicidio, el viernes 25 de agosto, una
multitudinaria Marcha del Silencio congregó a miles de universitarios frente al Cementerio
Central. Surgió entonces un importante movimiento estudiantil que promovió algunas de las
propuestas de Galán.
Poco después se creó la Fundación Luis Carlos Galán, entidad que asumió la publicación de la
revista ​Documentos Nuevo Liberalismo.​ Los dos últimos números de la serie, 39 y 40, de agosto
de 1990 y 1992, respectivamente, se denominaron ​Documentos Fundación Luis Carlos Galán.​
También la Fundación publicó el libro ​Galán,​ bajo la dirección de Alberto Zalamea, y otro con
escritos de Galán y textos de otros autores, titulado ​¡Ni un paso atrás, siempre adelante!Por
iniciativa de sus compañeros de promoción (1965) se creó la Cátedra Galán en la Pontificia
Universidad Javeriana. En esta institución se le daría el nombre de Galán al auditorio ubicado en
el edificio que alberga la Facultad de Ciencias Jurídicas, donde cursó sus estudios universitarios.
Allí se exhibe de manera permanente el retrato al óleo de Galán pintado por Cecilia Fajardo.​
En 1991, sobre la tumba de Galán en el Cementerio Central, se levanta el mausoleo diseñado por
el arquitecto Alfonso García Galvis, hecho de una piedra monolítica traída de Barichara. También,
en ese año, entra en circulación una emisión postal de Colombia que reproduce la célebre
fotografía de Hernán Díaz.

1996 - 25 de abril
Por medio de la Ley 277, el Congreso de Colombia decreta la creación del Premio Internacional
Luis Carlos Galán Sarmiento, “con el objeto de exaltar la labor de la persona, grupo de trabajo o
institución, nacional o internacional que se haya destacado por su contribución al fortalecimiento
de la democracia, la paz y los derechos humanos”. Este premio lo entrega el Presidente de la
República el 18 de agosto de cada año, día de la Democracia en Colombia. En 1994 se había
publicado la segunda edición del libro de Fernando Cortés, “El asesinato de Galán”.
En mayo de 1998 circuló el libro “El rojo de Galán - Nueva manera de hacer política”, tesis de
grado de Juan Manuel Galán Pachón; y en noviembre de 2003 apareció el de Alonso Salazar,
“Profeta en el desierto - Vida y muerte de Luis Carlos Galán”, obra que mereció el Premio Planeta
de ese año.
Entre los diferentes homenajes tributados a Galán, se cuenta la inauguración en el año 2004 de la
Biblioteca Luis Carlos Galán, del Congreso de Colombia, que contiene varias colecciones, entre
ellas el fondo histórico de ese ente legislativo.

30 de julio de 2001​
El Presidente de la República Andrés Pastrana Arango sanciona la ley 668 “por medio de la cual
se declara anualmente el 18 de agosto como Día Nacional de la Lucha Contra la Corrupción”; ​y se
establece que todos los años, ese día “el Gobierno Nacional llevará a cabo una campaña de sensibilización y
difusión de los valores éticos que deben inspirar la transformación moral de la República, recordando la lucha
ejemplar que en defensa de los intereses del país y en contra de la corrupción efectuó el doctor Luis Carlos
Galán Sarmiento”. También por medio de esa Ley, el Congreso de la República de Colombia creó “la ‘Medalla
Luis Carlos Galán de Lucha Contra la Corrupción’, con su nombre y efigie impresos en alto relieve, que deberá
entregarse el día 18 de agosto de cada año, previa selección realizada en sesión conjunta de las Comisiones de
Ética del Senado de la República y de la Cámara de Representantes, a la persona natural o jurídica que haya
trabajado de manera ejemplar en la lucha contra la corrupción”.

Mario Galán Gómez había fallecido en el año 2000. Su esposa, Cecilia Sarmiento de Galán, murió
el 31 de diciembre de 2004.

BIBLIOGRAFIA

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Luis Carlos Galán Sarmiento


(​Bucaramanga​, ​29 de septiembre​ de ​1943​ † ​Bogotá​, ​18 de agosto​ de ​1989​), fue
un​abogado​ y ​político​ de la ​Pontificia Universidad Javeriana​, candidato a la presidencia
en dos ocasiones por el ​Partido Liberal Colombiano​ y en una ocasión por el movimiento
Nuevo Liberalismo (movimiento político fundado por él, disuelto cuando regresó al
partido liberal), destacado por su apoyo popular (pese a carecer de suficiente ayuda
política); y por su contribución en la democratización interna de los partidos
colombianos. Asesinado durante su última campaña electoral por personas dirigidas
por​Pablo Escobar​, jefe de la mafia de la droga en Colombia. En junio de 2006 se inició
un juicio contra ​Alberto Santofimio Botero​, quien fue hallado culpable de ser el autor
intelectual de su asesinato. En octubre de 2008 Santofimio fue dejado en libertad en
decisión de segunda instancia.

Vida​
Hijo de Mario Galán y de Cecilia Sarmiento, uno de sus hermanos es el
también ​político​Antonio Galán, y otro es el ​médico​ y ex ​Ministro​ Augusto Galán. Mario
Galán fue un destacado dirigente ​liberal​ del ​departamento de Santander​, que fue
perseguido luego del asesinato de ​Jorge Eliécer Gaitán​ en ​1948​, por lo que decidió
trasladar a su numerosa familia (compuesta por 12 hijos) a ​Bogotá​; llegaría a ser
Contralor General de la República y ​presidente​ de la estatal ​petrolera​, ​Ecopetrol​.
En ​1950​ Luis Carlos Galán Sarmiento inicia sus estudios en el Colegio Americano y
en ​1952​ ingresa al Colegio ​Antonio Nariño​. Destacado estudiante, en ​1957​ participó
activamente en las marchas estudiantiles de protesta contra el régimen dictatorial del
general ​Gustavo Rojas Pinilla​, lo que le acarreó una detención policial que lo condujo a
una noche de prisión, a pesar de ser todavía un niño. En ​1960​ se graduó con honores
como bachiller e ingresó a la ​Pontificia Universidad Javeriana​ de Bogotá, a estudiar
Derecho y Economía. Tras graduarse de bachiller inició sus estudios universitarios en
la ​Pontificia Universidad Javeriana​, en ​1963​ fundó la revista universitaria ​Vértice​.
En ​1965​ se graduó como ​abogado​. Durante su paso por la universidad se inició en el
oficio de periodista, que continuaría tras obtener su título profesional, como columnista
del diario ​El Tiempo​. De hecho, terminó desposando a una colega suya, doña Gloria
Pachón.

Carrera política​
A través del periodismo se dio a conocer entre la clase dirigente del país, siendo
"​adoptado​" por el ex presidente ​Carlos Lleras Restrepo​ como su heredero político e
intelectual; éste, siendo aún presidente, nombró a Galán en su primer cargo público,
como miembro de la delegación colombiana a la Conferencia Mundial de Comercio y
Desarrollo, en ​Nueva Delhi​ en ​1969​. Al año siguiente el nuevo presidente, ​Misael
Pastrana​, lo designó como ministro de Educación, cargo en el que permaneció
hasta​1972​, cuando pasa a la embajada de Colombia en ​Italia​, durante cuatro años
más.

En ​1976​ regresa al país para apoyar la candidatura reeleccionista del ex presidente


Lleras, y se hace elegir concejal del municipio de ​Oiba​, en ​Santander​, en donde
empezo sus carrera politica y se dio a conocer en este pueblo nacio el fundador de el
partido liberal de Colombia Vicente Azuero Plata. En las elecciones de ​1978​ obtiene un
escaño para el ​Senado​ en representación de su departamento. Por ese entonces Carlos
Lleras anuncia su retiro de la política y sus seguidores ven en Galán al líder que puede
llevar al éxito las intenciones de renovación que tenía Lleras para el Partido y su
programa político para el país; es así como en ​1979​ funda el movimiento ​Nuevo
Liberalismo​ como una disidencia interna del partido liberal. En ​1980​ y bajo el lema de
"Bogotá pertenece a todos sus habitantes" obtiene una abrumadora votación para el
Concejo de la ciudad capital, convirtiéndose en un líder de talla nacional. En ​1982​Galán
participó en la contienda electoral para Presidente de la República, luego de que la
convención liberal llevada a cabo hacía un año hubiera cerrado las puertas al debate
entre Galán y el candidato elegido, el ex presidente ​Alfonso López Michelsen​. En
las ​elecciones​, Galán solo alcanza el tercer lugar, detrás del ganador ​Belisario
Betancur​ y del ex presidente López. Los resultados sin embargo beneficiaron al ​Nuevo
Liberalismo​, que concurrió como partido independiente. Para las elecciones
de ​1986​Galán decide retirar su candidatura y favorecer la unión liberal en torno
a ​Virgilio Barco​, quien resulta ganador con una aplastante mayoría. En ​1987​, con la
mediación del ex presidente ​Julio César Turbay​, Galán regresó al partido liberal
colombiano (PLC) para participar en una consulta popular que definiera el candidato
del partido para las elecciones de ​1990​. Galán fue influenciado por la forma de ser
de ​Jorge Eliécer Gaitán​a quien siempre admiró por su transparencia y su forma directa
de decir las cosas.

Asesinato ​
Luego de recibir varias amenazas, Galán fue herido mortalmente en un mitin electoral
el ​18 de agosto​ de ​1989​, en ​Soacha​, C
​ undinamarca​. Fue llevado a Bogotá al hospital
de Kennedy al sur de la capital donde a pesar de los múltiples esfuerzos médicos
murió.

Inicialmente fueron inculpados por este magnicidio ​Alberto Hubis Hazbún​ y otras
cuatro personas. Sin embargo fueron absueltos por la justicia y dejados en libertad
tras 42 meses de cárcel. Tras declaraciones hechas por el confeso narcotraficante​Jhon
Jairo Velásquez Vásquez​ (alias "​Popeye​"), la fiscalía investigó al también político​Alberto
Santofimio Botero​, quien inicialmente, (en sentencia de primera instancia que fue
apelada) fue declarado autor intelectual y condenado a 24 años de prisión por el
magnicidio. En octubre de 2008 Santofimio fue dejado en libertad, tras permanecer
tres años y cuatro meses en prisión, al no encontrarse pruebas contundentes que lo
vincularan con el asesinato, según lo determino el ​Tribunal Superior de Cundinamarca​.

Para ese momento de su muerte todas las encuestas auguraban la victoria de Galán en
la consulta popular. En las elecciones presidenciales de ​1990​, con amplia ventaja (más
del 60% a su favor). ​César Gaviria​, jefe de debate en la campaña de Galán, fue
designado su sucesor y fue finalmente vencedor en las elecciones.

Legado familiar ​
Casado con la periodista ​Gloria Pachón​, con quien tuvo tres hijos: ​Juan Manuel​ quien
es actualmente Senador por el Partido Liberal, ​Carlos Fernando​, periodista y Concejal
de Bogotá por Cambio Radical, y Claudio Mario, analista político y actual Secretario de
Cooperación Internacional de ​Cundinamarca​. Su hermano ​Antonio​ fue Concejal y
candidato a la Alcaldía de Bogotá, Augusto, otro de sus hermanos, fue Ministro de
Salud y Embajador ante la ​Unesco​; su cuñada ​Maruja Pachón​ fue ministra de
Educación y el esposo de ésta, ​Alberto Villamizar​, fue senador por el Nuevo Liberalismo
y Zar antisecuestro.

Aeropuerto Luis Carlos Galán​


El tradicional nombre del ​Aeropuerto Internacional El Dorado​, será cambiado por ley,
para adoptar el del caudillo liberal Luis Carlos Galán Sarmiento, asesinado hace ya 20
años en el municipio de ​Soacha​ cerca de la capital colombiana. La nueva ley, remitida
a sanción presidencial, adopta el nombre de Luis Carlos Galán desde el momento de la
vigencia de la norma.

Biografía Luis Carlos Galan Sarmiento

VIDEOS BIOGRAFICOS​ de Galán


Durante los primeros 38 años de su vida, Luis Carlos
Galán Sarmiento se había llamado Jorge Galán. Ese
era su nombre, de acuerdo con la inscripción en su registro civil de nacimiento, que
solo mucho tiempo más tarde pudo ser corregido mediante un poder otorgado a su
primo y uno de sus amigos más cercanos, Alfonso Valdivieso Sarmiento.
El primer acto político de Galán del que se tenga noticia fue en los desfiles
estudiantiles de protesta contra el régimen de Rojas Pinilla. Tenía 13 años. Por cuenta
de ello, fue detenido una noche en la plaza de toros.
Pero en el episodio recibio una pedrada en la nariz, que le dejó el resto de su vida una
cicatriz que habría de representar para él una especie de bautizo en la política rebelde,
que fue su sello ante sus electores hasta el día de su muerte.
Ajeno a los ideologismos, Galán estaba realmente convencido de que la solución de los
problemas del país era él, encarnando el símbolo de la renovación y de la limpieza, y
en ello basó su proyecto político. Algunos acusaban por ello al movimiento de Galán de
ser excesivamente caudillista y excluyente. Quizás por ello fue por lo que su
movimiento no resistió la embestida brutal de su muerte, y su pronta disolución
demostró que el Nuevo Liberalismo era básicamente Luis Carlos Galán, punto de
partida y punto final de uno de los proyectos políticos más interesantes del siglo.
Desde niño, Galán se había revelado como una personalidad extremadamente
perfeccionista: era alérgico a la mediocridad. De ese perfeccionismo son testimonios
varias cartas y ciertas anécdotas no muy conocidas. Por ejemplo, en algunas de esas
cartas dirigidas a sus hermanos habló así de sus aspiraciones estudiantiles: "Ante todo,
ganar el año, con todo éxito. Convertirme en presidente de la academia Rafael Nuñez
de la facultad. Ganar la maratón de Girardot. Leer todo lo que pueda. Obtener el cariño
y la comprensión de una niña bien hermosa, sea quien sea, a la que yo quiera
comprender y amar".
En otra carta escribió: "Me preocupa empezar a crear un prestigio y defenderlo".
Otra prueba de su perfeccionismo y disciplina estricta la constituye la oportunidad en la
que, habiendo ingresado al movimiento scout, se propuso llegar a pie desde Bogotá a
Bucaramanga. Pasó La Caro, Zipaquirá, Ubaté, Chiquinquirá, Oiba... y abordó un
camión de panela, aunque otras versiones dicen que su padre fue a buscarlo y lo
encontró rendido en la carretera. O la ocasión en la que decidió matricularse en clases
de equitación, porque según él le hacía bien para la espalda, cuando la verdadera
razón era que Galán quería que lo vieran entrar bien montado sobre el caballo a los
pueblos a los que lo llevaran sus correrías políticas.
Orador y diagnosticador
Si hubiera que reconocerle a Galán las cosas que hacía mejor en la vida habría que
mencionar dos: era un excelente orador, y un insuperable diagnosticador. Su oratoria
no solo hacía vibrar en la plaza pública, sino que fue consagratoria en su paso por el
Congreso. El que más se recuerda fue un debate que en forma abrupta le planteó
Alberto Santofimio en el senado.
Santofimio acusaba a Galán de haberle hecho juego al conservatismo facilitando la
elección de Belisario Betancur. De esta confrontación salió victorioso Galán, y así lo
reconocieron los senadores asistentes. En cuanto a sus diagnósticos sobre los sucesos
nacionales y los problemas del país, hay muchos que después de diez años de su
muerte mantienen su extraordinaria vigencia a la luz de la postración del campo, de la
corrupción, de la amenaza del narcotráfico y de la violencia guerrillera, y no habría que
cambiarles una sola coma para concluir que en ellos está perfectamente explicado qué
es todo lo que nos viene pasando a los colombianos.
No así sus diagnósticos económicos, sobre todo los correspondientes a sus dos
primeras campañas presidenciales, que para la época algunos consideraban anticuados
y controvertibles.
Político y periodista
Ambas cualidades, la del orador y la del diagnosticador, comenzó a cultivarlas desde
muy joven, cuando la emulación entre su vocación de político y la de periodista, que
siempre estuvieron entrecruzadas en su vida, lo impulsó a surgir públicamente en sus
épocas de estudiante haciendo un poco de ambas cosas. Se apoderó del mimeógrafo
del colegio Antonio Nariño y allí inició la publicación de sus primeros boletines políticos,
que se convertirían más tarde, ya de estudiante javeriano, en la revista Vértice.
En estos primeros quehaceres combinados del periodismo y de la política estaría la
respuesta aún no suficientemente clara de por qué Luis Carlos Galán no terminó, como
su juventud y rebeldía lo hacían lógico, matriculado en las toldas del MRL, sino en las
del llerismo. Testigos de aquellos primeros números de Vértice aseguran que Galán se
sintió inmediatamente atraído a Lleras cuando este aceptó una invitación a colaborar
en la revista.
A través de aquella "Carta a la juventud liberal" (que después se supo que era
reencauchada para la revista) se supone que Carlos Lleras cautivó a Galán, pero otros
testigos de la época se niegan a creer que la explicación de esta sociedad política
hubiera sido tan sencilla, y le atribuyen al ex presidente Lleras cierta labor personal de
convencimiento. El hecho es que el liberalismo de Galán se consolidó, y logró
enganchar para el entonces candidato presidencial el apoyo de más de dos mil
estudiantes universitarios.
Recién egresado de derecho y economía en la Javeriana, el periodista y el político
seguían compitiendo. Una llamada de Eduardo Santos lo vinculó a EL TIEMPO como
editorialista económico, y muy pronto se convirtió en director de la sección y en
asistente de la dirección del periódico.
Pero, además, Galán se probó exitosamente como reportero. Uno de sus mejores
trabajos surgió de la experiencia vivida cuando viajaba en un avión que fue
secuestrado y desviado a Cuba, en 1965. La crónica de esta aventura no solo es un
emocionante recuento de los hechos, sino que tuvo un final inesperado cuando, de
regreso a Bogotá, Galán se propuso encontrar a los familiares de los aún no
identificados secuestradores con base en unas leves pistas e, increíblemente, lo logró.
Liberal radical
En EL TIEMPO fue uno de los "tres arcángeles", junto con Daniel Samper y Enrique
Santos, estrellas periodísticas de su generación. Se hizo buen amigo de ambos. Al
igual que Daniel, Galán tuvo tentaciones místicas. El pensamiento cristiano de Teilhard
de Chardin, una de sus lecturas favoritas a los veinte años, ejerció una gran influencia
en su formación intelectual, y con frecuencia mezclaba sus planteamientos políticos
con consideraciones filosóficas, morales y espirituales. Pero a diferencia de Enrique,
Galán jamás tuvo tentaciones izquierdistas.
Más aún, Galán no tuvo grandes brincos ideológicos en su vida. Su postura de liberal
radical inculcada desde niño por las convicciones férreas de su padre fue siempre su
sello político. Inspirado en ella, después de haber sido la oveja negra del oficialismo
liberal, selló la unión de su partido, en uno de los momentos más lúcidos y maduros de
su carrera política, como lo comprobaría la historia, no sin cierta ironía para todos sus
admiradores que no concebían a Galán sino actuando por fuera del oficialismo liberal.
Durante cuatro años de reportería en EL TIEMPO resistió las tentaciones que le ponía
permanentemente en su camino el entonces presidente Lleras con el ofrecimiento de
atractivos cargos, salvo por la secretaría de la delegación para la Unctad, en Nueva
Delhi. De esta misión existe una fotografía de Galán de chaqueta 'Nerú' al frente del
Taj Mahal.
La oportunidad de ser ministro se le presentó en pleno Frente Nacional.
Como se sabe, una mañana fue a hacerle un reportaje al entonces presidente recién
electo Misael Pastrana, reunión de la que salió nombrado Ministro de Educación, a los
27 anos. Su aceptación vino adornada con una singular anécdota familiar.
Por primera vez el nuevo Ministro pudo dormir solo en su cuarto, que hasta entonces
compartía con tres de sus hermanos, y con frecuencia con algunos de sus 80 primos
que iban y venían.
Durante muchos años, su inmensa familia fue la única consejera en la que Galán
confiaba, y en compañía de la cual diseñó y manejó el curso de su carrera. No suena
exagerado afirmar que los únicos, distintos de su propia familia, que lograron
descorrer el velo de su organización, fueron Rodrigo Lara y César Gaviria, este último
cuando resultó escogido por Galán como director de su campaña, pocos meses antes
de que cayera asesinado.
En su cargo como ministro hizo exactamente lo que el presidente Pastrana le había
pedido: "No quiero que usted reforme la educación en Colombia, sino simplemente que
denuncie todas sus fallas". Con esa facilidad de Galán para diagnosticar los vicios del
país, hizo eso durante casi dos años, pero los días especialmente convulsionados que
se vivían entonces en el ambiente estudiantil le costaron muchos enfrentamientos, e
incluso su Mercedes Benz gris fue quemado en los predios universitarios.
Siendo todavía Ministro escogió a una colega de EL TIEMPO, Gloria Pachón, como su
esposa, con quien tuvo tres hijos. Todos ellos han dejado mostrar alguna inclinación
para mantener viva la vocación política e intelectual de su padre. Y de la inmensa
ternura de Galán hacia su familia existen varias cartas, con frases bien elocuentes.
En una de ellas le escribe a su hijo Claudio Mario desde Oxford, donde estuvo un
tiempo de profesor, alejado de Colombia por motivos de seguridad: "Te he pensado
muchísimo estos meses. Eres muy sensible, noble y tienes un mundo afectivo muy
rico. Recibe todo el amor de tu padre".
El candidato
En 1972 fue designado embajador en Roma, desde donde le escribió a su padre una de
las cartas más reveladoras de su personalidad, ya convencido de que su destino estaba
definitivamente en la política, y de que ya no era hora de dejarle nada al azar. Con una
extensa y cuidadosa prosa Galán se caracterizaba por ser muy preciso en las palabras
revela sus planes en los siguientes términos:
"Mi primera preocupación es saber a dónde quiero llegar y, según eso, cuál de los
distintos caminos es el mejor. Mi meta debe ser un cargo o diversos cargos específicos
o, en cambio, exponer determinadas ideas, de modo que ellas influyan en el país o por
lo menos en Santander... Pero deseo que esas ideas sean de alcance nacional". Y más
adelante asegura que buscará su fuerte electoral entre los abstencionistas y el voto
femenino.
Nuevamente el periodista se atraviesa: recibe una tentadora oferta del ex presidente
Lleras para regresar al país a dirigir su publicación, Nueva Frontera. No lo piensa
demasiado, pero tampoco acepta de inmediato. La pulcritud de su talante político lo
lleva primero a escribirle al ex presidente una carta en la que ya queda en evidencia la
bronca creciente de Galán contra el oficialismo liberal de la época, advirtiéndose al
final de ella a Lleras: "Si usted, señor Presidente, considera que lo expuesto en esta
carta no constituye impedimento para vincularme a la Nueva Frontera...". Y por lo
visto no lo hubo, pues Galán regresó al país a hacer periodismo, pero también política,
de acuerdo con esa especie de mapa que había diseñado desde Roma.
Es en esa época cuando Galán comienza a recorrer el país en compañía de quien sería
uno de sus principales aliados políticos, su primo Alfonso Valdivieso, en unas
sorprendentes maratones. Compraron un jeep y viajaban todos los viernes por la tarde
a Santander. La meta que se había propuesto era un voto por cada kilómetro
recorrido. Regresaban a la madrugada del lunes a Bogotá, y el político volvía a ponerse
la camiseta del periodista. Fue así como, en 1978, salió elegido senador con 40 mil
votos que obtuvo en Santander.
Al año siguiente fundó el Nuevo Liberalismo, con un éxito tan rotundo que en las
elecciones de 1982 el movimiento alcanzó seis curules en el Senado y nueve en la
Cámara.
El congresista
Como parlamentario promovió la modernización administrativa y fiscal de los
municipios y sembró las semillas de la reforma constitucional que derivaría en la
Constituyente de Gaviria y de la reforma electoral que implantó el tarjetón en
Colombia y llevó al liberalismo a ensayar el método de la consulta popular para la
escogencia del candidato.
Su debate más sonado fue el que le hizo al contrato minero del Cerrejón, con el que
mantuvo prendida la atención pública durante muchos días. Hoy, sin embargo, Galán
tendría que aceptar que el negocio del carbón resultó siendo menos bueno de lo que él
pensaba, y que en la negociación, contrariamente a lo que había afirmado en el
debate, salieron muy bien librados los intereses de la nación.
También sobresalieron sus posturas verticales sobre el tema del narcotráfico, que
comenzaba a infiltrar el Congreso. A pesar de su fogosidad política y su visión
futurista, era un hombre demasiado crédulo e ingenuo, y por esa puerta se le colaron
indeseables personajes a su movimiento. De no ser por la decisión inquebrantable de
Galán para perseguirlos y denunciarlos, incluso a costa de su propia vida, otra más
grave que la actual, si es posible, sería la situación del país.
El conciliador
"Sepulturero del liberalismo", lo llamaron después de la Campaña presidencial del 82,
cuando un Partido Liberal dividido permitió el triunfo conservador de Betancur. Por eso
cuatro años después, cuando volvió a presentar su nombre a las elecciones, y después
de enfrentarse con gran valentía a Álvaro Gómez en los famosos debates televisados,
retiró finalmente su candidatura, para que un liberalismo unido le diera el triunfo a
Virgilio Barco.
Pero fue también en el 82 cuando Galán, aliado con Ernesto Samper y Julio César
Sánchez, cometió el error más costoso de su vida política, el llamado "Grupo Sagasa".
Con esa alianza quiso atravesársele, apadrinando el nombre de Carlos Ossa, a la
candidatura liberal oficialista para la alcaldía de Bogotá de Juan Martín Caicedo,
comandada por Hernando Durán Dussan fórmula esta última que además contaba con
el beneplácito de Carlos Lleras.
Por cuenta de ello llegó a hablarse de un distanciamiento de Galán con su mentor
político, pues habían quedado en orillas distintas. El resultado fue una aplastante
victoria conservadora de Andrés Pastrana.
Durán, incluso, demostró tener más votos que Galán y Samper juntos, y el tamaño de
esta derrota obligó al jefe del Nuevo Liberalismo a replantear seriamente su futuro
político.
La decisión no podía ser sino una. Su movimiento cada día reducía más su caudal
electoral, pero su prestigio y credibilidad iban en aumento ante la opinión. Por eso, si
Galán quería ganar las presidenciales del 90 tenía que hacerlo con el liberalismo unido.
Demostrando un talante político muy maduro, negoció la Union de su partido con
Durán Dussan. Aceptó entrar al gobierno de Barco (con quien encontró una gran
identidad en su programa de lucha contra el narcotráfico), y participó en la Convención
Liberal de 1988 en Cartagena, donde fue ovacionado, después de una elocuente y
emocionada intervención.
Pero todavía faltaba el paso final: entenderse con el jefe único del liberalismo, Julio
César Turbay, después de haberlo increpado hasta la saciedad en 1982. "Ambos
provenimos de la clase media, pero en distintas épocas", fue una de las frases que
pronunció para ambientar el que pudo haber sido el paso más incómodo de su carrera.
El final
Faltaba apenas un año para que las encuestas demostraran lo que ya sugerían: que
Galán sería el próximo Presidente. Arrancando 1989 dijo, en su primera declaración:
"Este año estará sometido a explosivas presiones". Era premonitorio: lo asesinaron el
18 de agosto en Soacha. Pero semanas antes de su muerte, había entrado en un
profundo estado de melancolía, fruto de un intento previo para acabar con su vida, que
casi lo logra en Medellín.
Consciente de que lo iban a matar, a Galán lo invadió una gran tristeza. Solo mitigada
brevemente durante un viaje a Venezuela, donde fue recibido como si ya hubiera sido
elegido Presidente. Queda sin respuesta el interrogante de cómo hubiera manejado
Galán los toros que le tocó lidiar a César Gaviria.
¿Cómo habría sido el enfrentamiento con Escobar? ¿Qué tratamiento le habría dado a
la crisis energética? ¿Se habría opuesto a la privatización y a la apertura? ¿Habría
combatido el neoliberalismo? ¿Habría logrado conseguir el acuerdo político que logró
Gaviria para hacer la Constituyente?
Son preguntas sin respuesta. Lo que sí sabemos a ciencia cierta es qué perdió
Colombia con la muerte de Luis Carlos Galán: perdió a un líder político, pero antes que
nada, perdió a un educador político.
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La detención de Alberto Santofimio, acusado por el asesinato de Luis Carlos
Galán, conmocionó al país. Reconstrucción del magnicidio que marcó la
historia reciente del país
Toda la historia de Colombia se ha escrito con violencia. Sin embargo, en pocas
ocasiones una frase tan breve había causado tanto impacto como la que trascendió la
semana pasada en los medios de comunicación: "Pablo, mátalo. Si el es presidente te
extradita". Eso fue lo que, según John Jairo Velásquez Vásquez, 'Popeye', uno de los
sicarios de confianza de Pablo Escobar Gaviria, le exclamó el político liberal Alberto
Santofimio Botero al temido capo. El complot estaba en marcha. Había que asesinar a
Luis Carlos Galán Sarmiento, para la época el dirigente con mayor opción de ganar las
elecciones.
No era la primera vez que Santofimio le hablaba al oído a Escobar. El influyente
político, considerado uno de los mejores oradores en la historia del país, acostumbraba
conversar en la intimidad con el narcotraficante. Lo visitaba en sus fincas para darle
sus opiniones sobre el proceso electoral de uno de los años más turbulentos en la
historia política colombiana. La atmósfera en 1989 no podía ser más ardiente. La mafia
estaba en una batalla sin cuartel para desestabilizar al país y evitar el fantasma de la
extradición. Los bombazos tenían atemorizada a la sociedad, y el Estado estaba cada
vez más acorralado.
Habían sido asesinados líderes de la talla de Jaime Pardo Leal y José Antequera. Y
meses después caerían Bernardo Jaramillo y Carlos Pizarro. En ese baño de sangre,
Galán había salido ileso y se perfilaba como el único hombre capaz de hacerle frente a
la macabra alianza entre narcotráfico y política tradicional. Era el baluarte moral del
país. Galán tenía una pelea casada contra los corruptos y una guerra declarada contra
los carteles de la droga. E iba a ser presidente de Colombia.
Y Santofimio, que veía a Galán como un rival invencible para sus propias aspiraciones
presidenciales, lo sabía. Por eso decidió capitalizar el odio natural de Escobar contra
Galán para asesinar al líder, según dijo 'Popeye' a la Fiscalía. Parecía que no era la
primera vez que el dirigente liberal le pedía al narcotraficante eliminar a un líder
político. Ya lo había hecho, según 'Popeye', cuando Escobar secuestró en 1988 a
Andrés Pastrana para presionar a la clase dirigente en contra de la extradición. En ese
momento, 'Popeye' dijo que Santofimio le insistió en varias oportunidades al capo que
la mejor manera de presionar la no extradición era asesinando a Pastrana. Escobar no
estuvo de acuerdo. Pero con Galán las cosas fueron diferentes. Y el capo terminó
aceptando, según 'Popeye', la propuesta de Santofimio.
Después que Luis Carlos Galán denunció públicamente
los vínculos de Pablo Escobar con la mafia, el senador
Alberto Santofimio Botero admitió en su movimiento
político al jefe del cartel de Medellín.

A las 2 de la tarde del


viernes de la semana
pasada, los agentes del
CTI llevaron a Alberto Santofimio a los calabozos del
búnker de la Fiscalía en Bogotá. Por cuarta vez en su
vida, el ex senador tolimense entró a prisión.
Las estrechas relaciones
entre Pablo Escobar y
Alberto Santofimio quedaron en evidencia en los
múltiples actos públicos y sociales a los que asistían el
capo y el senador.​ ​Aunque Santofimio era el más
cercano a Escobar, no fue el único político vinculado con
el narcotraficante.

El asesinato de Luis Carlos Galán causó un gran


desconcierto en el país y generó masivas manifestaciones
de rechazo por parte de la sociedad que reclamaba
justicia. Entre tanto ,en Medellín y el Magdalena Medio
las cabezas visibles del grupo 'Los Extraditables', Pablo
Escobar y José Gonzalo Rodríguez Gacha, 'El Mexicano',
celebraban

Gustavo de Greiff, Alfonso


Valdivieso y Alfonso Gómez Méndez se comprometieron
a aclarar y encontrar a los responsables del magnicidio
de Luis Carlos Galán cuando ocuparon el cargo de fiscal
general. Sin embargo, cada uno terminó sus períodos y
la investigación nunca concluyó.

Me van a matar
Galán sabía que lo iban a matar. Su médico personal, Augusto Leyva, ya le había
advertido de una reunión entre políticos y mafiosos en una finca en Venadillo, Tolima,
donde se habría fraguado su asesinato. No era la primera advertencia. Dos semanas
antes, en Medellín, un ex soldado con un rocket y 12 sicarios armados con fusiles
estaban en la ruta que iba coger Galán para dictar una conferencia sobre democracia
en una universidad pública. Ese día la suerte jugó a favor de Galán cuando una vecina
alertó a las autoridades. Pero Galán sabía que su destino estaba marcado.
Dos días después de ese atentado fallido en la capital de Antioquia, el carismático líder
viajó a Venezuela, donde su popularidad también era alta. Por esta razón el presidente
Carlos Andrés Pérez lo recibió con honores semejantes a los de un jefe de Estado. Su
visita fue tan exitosa que era extraño verlo tan cabizbajo. ¿Cuáles eran las razones de
ese silencio , le preguntó su viejo amigo Gustavo Gaviria, un reconocido cafetero. "Me
van a matar. Mañana volvemos a Colombia y me toca enfrentar la realidad". En efecto,
el viernes 18 de agosto de 1989 tenía programado el último acto público de campaña
en Soacha. Un sitio inseguro por las características geográficas pero de gran aprecio
para Galán pues nunca olvidó que había empezado a construir su fortín electoral en
Cundinamarca. Galán tomó una decisión que resultó premonitoria: no permitió que su
hijo menor de 12 años, Carlos Fernando, quien lo había acompañado por 26
municipios, fuera con él esa noche.
A pesar de las advertencias, Galán se había decidido: "El país no me va a conocer a mí
como un cobarde", le dijo a su amigo. Ante la terquedad, Gustavo Gaviria llamó al
presidente Virgilio Barco, quien ordenó que le enviaran un carro blindado. El Presidente
no volvió a dormir tranquilo. Tras enviarle el automóvil consultó a sus asesores sobre
la gravedad de las amenazas contra Galán, y uno de ellos le contó lo que había dicho
el propio Galán, días antes en un desayuno en Popayán: "Si muero asesinado, para
encontrar a los culpables, miren hacia el Tolima".
Pero había mucho más gente interesada en la muerte de Galán. La lista la
encabezaban los políticos corruptos, los narcos y los paramilitares. Para los primeros,
Galán era un peligroso adalid de la moralidad y hasta ese momento había dado
muestras de que no le iba a temblar el pulso para limpiar la política. Para los
segundos, les esperaba la extradición. Y para los terceros, una guerra a muerte del
Estado contra ellos.
Pero nada pudo hacer contra este triunvirato del mal. Según 'Popeye' una facción de la
vieja política, a través de Santofimio, persuadió a Escobar de que había que eliminar a
Galán. Según su testimonio a la Fiscalía, se programaron varias reuniones para planear
el crimen. "Alberto Santofimio le decía siempre a Pablo que Galán era su enemigo y
que estaba disparado en las encuestas. Que si llegaba a ser Presidente, lo iba a
extraditar porque no le perdonaba la muerte de Lara y frecuentemente le decía:
'Compadre, es Galán o nosotros".
Pablo Escobar utilizó su brazo criminal y organizó el atentado en Medellín que fracasó.
El capo paisa llamó entonces a su socio más poderoso, Gonzalo Rodríguez Gacha, alias
'El Mexicano', quien para la época había demostrado que le sobraba sangre fría para
ejecutar cualquier acción mortal. Rodríguez Gacha se organizó con los paramilitares del
Magdalena Medio, una naciente organización armada de extrema derecha entrenada
como pocas en audaces acciones sicariales.
Pero la labor de Rodríguez Gacha no se limitó a contratar a los gatilleros. También fue
clave en sobornar e infiltrar al DAS, organismo encargado del anillo de seguridad del
joven político. Precisamente, sus escoltas sabían cómo, en qué momento y dónde se
iba a ubicar en la plaza de Soacha. Allí lo asesinaron. Es una imagen que los
colombianos no olvidan: su cuerpo se desploma entre la confusión de varios hombres
que buscan protegerlo, otros que disparan al aire y otros que se quedan estáticos
sosteniendo unas pancartas. Eran las 8:40 de la noche.
A pesar de que hasta ese momento el país vivía bajo el yugo del narcoterrorismo y las
masacres salpicaban al país en toda su geografía, el crimen de este hombre fue
devastador para la sociedad. Habían matado una esperanza. La gente se echó a la calle
y los medios destilaban su rabia e impotencia en los titulares. El país clamaba justicia.
Cuatro días después de la conmoción, el presidente Barco en una alocución televisada
dio un parte de tranquilidad. "Les prometí que el crimen del doctor Galán no quedaría
impune y aquí tienen a los asesinos", señalando varios rostros encabezados por Jubiz
Hazbum, un barranquillero que se dedicaba a los cultivos hidropónicos. Según las
autoridades, Hazbum actuó con otras cuatro personas también capturadas. Sin
embargo, el respiro por lo que se creía que se había hecho justicia se fue esfumando
luego que el Ejército salió al poco tiempo con otro grupo de sicarios comandados por
Jaime Eduardo Rueda Rocha, a los que sindicaba también de ser los autores materiales
del crimen.
Desde ese momento, todo lo que conoció el país fue manipulación, confusión y
contradicciones. Hazbum y los otros cuatro acusados fueron declarados inocentes
después de pasar tres años en la cárcel. El grupo de pistoleros de Rueda Rocha
?quienes fueron los que realmente le dispararon a Galán? fueron masacrados uno a
uno por fuerzas oscuras. La familia Galán no se cansaba de denunciar que la
investigación había sido desviada y exigía que se investigara al aparato de seguridad
del Estado y a varios dirigentes de la clase política.
En semejante maremágnum de confusas noticias y después de acumular más de 400
cuadernos con miles de folios, el llamado de cientos de testigos y el trabajo de cuatro
fiscales generales de la Nación, parecía que el caso de Galán iba a engrosar la larga e
infame lista de magnicidios impunes de la historia política colombiana. La desazón no
podía ser mayor. Se había vinculado a 37 personas, de las cuales el único condenado
era Velásquez Vásquez, 'Popeye', a 26 años de prisión.
¿Por qué hasta ahora?
Uno de los avances significativos de la investigación ocurrió cuando se cumplieron 15
años del magnicidio. En agosto del año pasado, la recista SEMANA reveló una carta
desconocida de uno de los hombres que disparó contra Galán y en la que contaba en
detalle cómo se planeó y ejecutó el magnicidio.
Se trataba del testimonio de José Éver Rueda Silva, quien antes de ser asesinado en la
cárcel La Modelo le escribió a su madre, de su puño y letra, una carta en la que
básicamente le decía cómo los paramilitares y narcos, en alianza con algunos políticos,
planearon y ejecutaron la acción criminal. "Nuestro enlace principal, ordenado por 'El
Mexicano' y Henry Pérez, era el teniente del Ejército Carlos Humberto Flórez Franco,
quien dirigía la red de inteligencia del B-2 de la Décima Tercera Brigada. Por eso
tuvimos éxito en la muerte del doctor Galán, del doctor Teófilo Forero y Antequera, la
bomba de 'El Espectador' y la muerte del hijo de Víctor Carranza".
Casi dos meses después, y ante semejante testimonio, la Fiscalía ordenó la captura del
teniente Flórez Franco y lo llamó a juicio. No obstante, hasta hoy es prófugo de la
justicia y en el expediente figura con la sindicación de homicidio con fines terroristas.
Los fiscales determinaron que el ex oficial participó en el magnicidio facilitando la fuga
de los sicarios y ocultando las armas en su propio apartamento.
Cinco meses después, el pasado 28 de abril, los fiscales recibieron un fax desde la
cárcel de Cómbita. Era una carta firmada por 'Popeye' y el ex parlamentario Carlos
Oviedo Alfaro, quien paga una condena por homicidio en esa prisión. En el texto decían
que estaban dispuestos a revelarle nuevos datos sobre el crimen de Galán. Lo hicieron
porque después de años de permanecer en la misma prisión pasaron de ser enemigos
a amigos con una historia en común: Santofimio. Resulta que en 1992 Escobar le había
contado a Oviedo Alfaro que Santofimio era quien había ayudado a planear y diseñar el
asesinato de Galán. Testimonio que coincidía con la versión de su ahora compañero de
celda.
'Popeye' aseguró que en su primera declaración ante la justicia, hace 13 años, no se
atrevió a acusar a Santofimio por temor. Según él, Santofimio era tan poderoso que si
él declaraba en contra no vacilaría en hacerlo trasladar de cárcel en cárcel hasta
tenerlo vulnerable para asesinarlo. Hoy, según 'Popeye', todos sus enemigos están
muertos, ve que Santofimio se ha debilitado y que la mayoría de personas que
participaron en el crimen están muertas: todos los sicarios, 'El Mexicano', Pablo
Escobar, entre otros. Por eso decidió contar su verdad.
Para el fiscal, el testimonio de 'Popeye' era el que se había esperado durante años.
Provenía nada más y nada menos que de uno de los sicarios más temibles de Escobar,
uno de sus hombres de mayor confianza y uno de los que más afecto le tenía. 'Popeye'
creció casi desde niño junto a Escobar. "Más que cómplices éramos verdaderos
amigos", suele decir. Hoy tiene 43 años y dice que ha madurado a punta de rejas. De
hecho se sometió en dos ocasiones a la justicia y en ambas con el consentimiento de
Escobar.
Para la Fiscalía, el valor jurídico de lo dicho por 'Popeye' radica en que no se trata sólo
de un testimonio verbal, ni de una versión de oídas sino de uno de los protagonistas de
la historia. Pues no sólo participó en las reuniones decisivas de los crímenes planeados
por el cartel de Medellín sino que él mismo fue uno de los autores de estas acciones
delictivas. En el caso concreto de Galán, 'Popeye' planificó la logística y ayudó a
conseguir las armas de los sicarios. Y, como si fuera poco, posteriormente fue él quien
les pagó y los felicitó. Además, durante años, era el encargado de llevar a Santofimio
Botero a los escondites para que se encontrara con Escobar. "Es que él era el asesor
político del cartel", dice 'Popeye' en la indagatoria a la Fiscalía.
La pregunta que se hacen los colombianos es qué va a pasar ahora. El viernes de la
semana pasada Santofimio rindió indagatoria en un ambiente marcado por el
entusiasmo de la gente de que ahora si se va a hacer justicia. La opinión pública está
en contra de Santofimio. Prueba de ello es que no se le pudo trasladar en un avión
comercial del aeropuerto Matecaña de Pereira a Bogotá ante la resistencia de los
pasajeros que se negaron a compartir el vuelo. La Policía se vio obligada a trasladarlo
en un avión oficial.
Escándalo general
Todos estos hechos han constituido, de la noche a la mañana, el mayor escándalo
político desde el proceso 8.000. El desprestigio de la clase política en Colombia ha sido
enorme de tiempo atrás y una noticia como la de la semana pasada no hace sino
agravar esta situación. Los colombianos siempre han creído que los políticos reciben
dinero del narcotráfico. Sin embargo, no salen de su asombro de que algunos de ellos
puedan haber participado en la planeación de un asesinato. Una cosa es la financiación
de una campaña y otra, la complicidad en un magnicidio. Si las acusaciones por las
cuales Alberto Santofimio está hoy en la cárcel se comprueban, las consecuencias
tendrían mucho más alcance que su caso personal. No sólo nacional sino
internacionalmente.
Si bien algunos de los testimonios en contra de Santofimio son contundentes, varios
apartes del testimonio de 'Popeye' son menos convincentes que otros. Es el caso de la
afirmación de que no sólo quería matar a Luis Carlos Galán sino también a Andrés
Pastrana. El primero era su enemigo personal y existían circunstancias que podrían
hacer posible una venganza. Con el joven ex presidente conservador, sin embargo, no
se ve ninguna justificación realmente de fondo que pudiera llevar a Santofimio a
entusiasmarse con su muerte. Muchos que lo creen capaz de lo primero dudan de lo
segundo.
Por otro lado, es necesario tener en cuenta que este caso había sido estudiado
exhaustivamente por dos fiscales que tenían toda la motivación para definir este
asunto. Alfonso Valdiviseso, como se recordará, era primo hermano de Luis Carlos
Galán, y la familia de éste siempre ha estado convencida de la participación de
Santofimio en el asesinato. El ex fiscal Alfonso Gómez Méndez, por su parte, como
político tolimense, había sido un permanente contradictor y crítico de su coterráneo. En
su momento, ninguno de los dos consideró que la evidencia era lo suficientemente
contundente como para una acusación formal.
El actual fiscal, Luis Camilo Osorio, tiene nuevas evidencias y son estas las que lo
llevaron a la decisión de la semana pasada. Y su captura les devolvió la esperanza a
los colombianos de que en Colombia sí se pueden esclarecer los magnicidios. La larga
lista de próceres y líderes cuyos asesinatos han quedado en la impunidad va desde
Uribe Uribe hasta Jaime Garzón. Pero una cosa es el entusiasmo de una sociedad que
clama justicia y otra muy distinta, el valor probatorio necesario para castigar a los
responsables.
Que el país esté aplaudiendo hoy la decisión de la Fiscalía no quiere decir que
Santofimio sea declarado culpable. Hay testimonios, indicios y coincidencias que
comprometen al político tolimense, pero esto no quiere decir que se haya fallado. Y
este país se ha acostumbrado a pasar de la ilusión de investigaciones que arrancan con
fuerza y con capturas escandalosas a la decepción de procesos que luego se desinflan
por presiones o falta de pruebas. Esta película se ha visto con los asesinatos de Jaime
Garzón, Álvaro Gómez Hurtado, Carlos Pizarro o Manuel Cepeda. En estos casos, los
destellos de justicia han sido flor de un día y las investigaciones se han ahogado en un
mar de impunidad.
El caso de Santofimio parece ser distinto a los demás. Cuando todo el mundo se
preocupa en Colombia de que las investigaciones jurídicas no sean torpedeadas por las
presiones políticas, en este caso es difícil encontrar gente que no aplauda un carcelazo
de Santofimio.
Pero la justicia no falla según los índices de popularidad. Por eso el gran reto en este
caso es jurídico. Y aquí la justicia colombiana se va a poner a prueba. ¿Qué tan veraz y
creíble es el testimonio de 'Popeye'? ¿Se puede condenar a una persona con sólo unos
pocos testimonios? ¿Hay contradicciones en los testimonios? ¿Hay cartas en el proceso
que el país no conoce? Por ahora, el controvertido político tendrá que hacer gala de
toda su elocuencia e inteligencia para armar una buena defensa porque las
acusaciones se ven sólidas.
El que está en su cuarto de hora, cuando ya se avecina su salida, es el fiscal Luis
Camilo Osorio. Él sabe que si prueban la culpabilidad de Santofimio saldrá en hombros
y será recordado como el hombre que logró resolver el primer magnicidio del país.
Pero si un juez encuentra que las pruebas no son suficientes, se escribiría otro capitulo
más de la vergonzosa historia de la impunidad en Colombia.
Además, con una gran frustración, porque no sólo se archivaría un expediente sino que
se enterraría el intento de hacer justicia por la muerte de un símbolo. Por eso
esclarecer la muerte de Galán va más allá de capturar a una persona. Es la
reivindicación histórica de un liderazgo que ha sido ejemplo para las generaciones
posteriores. Los estudiantes que marcharon en silencio para protestar por el asesinato
de su líder son hoy quienes están asumiendo las riendas del país.
Y así como hoy todos los colombianos saben qué estaban haciendo el día y la hora en
que murió Galán, se espera que en algunos años todo el mundo recuerde el día en que
encontraron a los responsables de su asesinato.
Mayo 13 de 2005 6:09 p.m.
Más de tres horas duró indagatoria de Alberto Santofimio por muerte de Luis
Carlos Galán
El Fiscal encargado del caso tendrá cinco días para decidir si dicta medida de
aseguramiento o deja en libertad al ex congresista.
Santofimio fue trasladado al mediodía desde Pereira en un avión de la Policía y
permanecerá en el búnker de la Fiscalía en la capital.
Cerca de las 2:30 de la tarde, inició su indagatoria ante un fiscal especializado de la
Unidad de Derechos Humanos y un agente especial de la Procuraduría. Lo acompañó
su abogado.
Santofimio fue capturado ayer en Armenia y trasladado a Pereira hacia las 2 de la
tarde. Hasta las 9:00 p.m. permaneció en el salón VIP del Aeropuerto Interncional
Matecaña, pero en vista de la imposibilidad de un viaje a Bogotá fue llevado al Palacio
de Justicia, donde al parecer, pasó la noche.
Su captura se produjo tras las declaraciones de alias 'Popeye' en las que asegura que
el político le dijo a Pablo Escobar que Galán lo iba a extraditar si ganaba la elecciones.
El testimonio de Popeye
Pegado a un diminuto radio Sony, el jefe del Cartel de Medellín, Pablo Escobar,
escuchaba nervioso la noticia que esa noche sacudió al país. Los periodistas
informaban que el candidato presidencial Luis Carlos Galán, que acababa de ser
baleado, estaba herido. Escobar estaba ansioso porque su intención de matarlo estaba
fracasando. Nunca antes lo habían visto así. Eso recuerda John Jairo Velásquez,
'Popeye', su hombre de confianza y la persona que, con un escalofriante testimonio,
tiene hoy al ex senador Alberto Santofimio Botero bajo la custodia de la Fiscalía por el
asesinato de Galán.
La declaración de 'Popeye', que purga una condena de 20 años por el magnicidio del
fundador del Nuevo Liberalismo, permitió reabrir el caso y saca a la luz una serie de
hechos sorprendentes que, a juicio de los investigadores, atan muchas de las
evidencias que se han recogido a lo largo de 16 años en el expediente.
Lo que este hombre cuenta sobre la noche de ese 18 de agosto de 1989, cuando Pablo
les dijo angustiado a sus hombres que si Galán sobrevivía nunca más se le podrían
volver a acercar, es el capítulo final de un plan que empezó a fraguarse en varias citas
a las que, según él, asistió Santofimio.
Aunque la confesión está incluida en el libro Sangre, Traición y Muerte, que aún no ha
sido publicado, el recluso dijo que decidió repetirla ante un fiscal y bajo juramento
para que tenga efectos legales sobre Santofimio.
'Pablo, mátalo'
A medida que avanzaba la campaña presidencial de Galán, Santofimio, que según
‘Popeye’ fue designado como el asesor político del grupo ‘Los Extraditables’ y que
recibía comisiones por 20.000 y hasta 500.000 dólares, asistió a una cita con el
narcotraficante en la finca Marionetas, a 10 kilómetros de la hacienda Nápoles.
‘Popeye', que para esa época se había convertido en el secretario personal de Escobar,
su jefe militar y el hombre que llevaba a Santofimio a los escondites del capo, estuvo
presente en la reunión.
Santofimio le dijo a Escobar que Galán iba a ser el seguro presidente y que en esa
posición iba a utilizar el poder para llegar a él y para extraditarlo, relata ‘Popeye’.
Y añade que la sugerencia del político fue: "Pablo, mátalo".
De inmediato, se armó una discusión. Santofimio le aseguró que Galán le iba a cobrar
el asesinato del ministro de Justicia, Rodrigo Lara Bonilla (ocurrido el 30 de abril de
1984), y que debía realizar el homicidio en esos momentos, cuando aún era candidato
y era vulnerable, señala 'Popeye'.
El capo se quedó en silencio cinco minutos. 'Popeye' dice que se acuerda mucho de esa
escena porque en esos instantes se estaba jugando el futuro de todos y porque en
medio de la meditación de su jefe, Santofimio le repitió: "Pablo, mátalo".
Escobar no le contestó, pero lo dio la orden a 'Popeye' de viajar a Medellín en busca de
Ricardo Prisco, uno de los sicarios más temidos del cartel. Tras cumplir esa misión,
'Popeye', Prisco y Escobar se sentaron a planear el crimen. El lugar escogido fue la
Universidad de Medellín, donde Galán tenía una conferencia.
La idea era usar un rocket y fusiles. 'Popeye' recibió la orden de comprar una
camioneta Mazda, con el fin de trasladar las armas, a nombre de Elmer 'Pacho'
Herrera, miembro del Cartel de Cali, para incriminar a esa organización, enemiga de
Escobar.
Tal como lo registran los archivos policiales, el 4 de agosto de 1989 el atentado fracasó
porque una ciudadana vio a un hombre escondido con un rocket, cerca a la
Universidad, y llamó a las autoridades que realizaron una requisa en el área.
Lo que no se sabía era que ese hombre, un ex soldado profesional, cuyo nombre
desconoce ‘Popeye’, se percató de la presencia de la Policía, simuló que estaba
defecando en el matorral y se soltó en llanto ante los primeros policías que lo
retuvieron y que, finalmente, lo dejaron ir.
El nuevo plan
El testimonio de ‘Popeye’ sobre la reunión que sostuvo Escobar con Santofimio
concuerda con otras declaraciones. Una de ellas señala que en 1989 una persona
buscó a Galán para contarle que había presenciado una reunión en una finca del
Tolima, en la que participaron Escobar, Gonzalo Rodríguez Gacha, alias ‘El Mexicano’,
Santofimio y otros cuatro congresistas. El tema fue la candidatura de Galán.
En todo caso, tras el fallido atentado en Medellín, la decisión fue acudir a hombres de
Bogotá y ‘El Mexicano’ dijo que podía conseguir los datos del itinerario de Galán en la
capital del país porque él tenía un hombre en el DAS, indica ‘Popeye’.
Luego, fue contratado Jaime Eduardo Rueda, quien pidió más 200 millones para
ejecutar el homicidio.
La participación de Rueda fue confirmada por su hermano José Ever, que escribió una
carta a su mamá, en mayo de 1992, en la que reveló que estuvo en distintas "cumbres
de la mafia", en donde estaban Santofimio, Gacha, Escobar y algunos de sus hombres
de confianza como ‘Popeye’.
La noche del crimen, luego de respirar tranquilo cuando por su radio Sony anunciaron
que el candidato herido acababa de morir, Escobar dijo que lo duro estaba por venir.
No hubo fiesta. El capo solo le dio tres aspiradas a un cigarrillo de marihuana y lo
apagó. Eran las 2 a.m.
Unos días después, cuando César Gaviria tomó las banderas del Nuevo Liberalismo,
Santofimio volvió a llamar a Escobar, dice ‘Popeye’.
Hablaron, añade, en varias ocasiones durante 10 días y sobre los resultados de las
elecciones. Luego, Escobar decidió a asesinar a Gaviria y se planeó hacerlo con un
carro bomba en Pereira, pero finalmente esta idea fue descartada.
‘Popeye’ señala que Gaviria no se expuso más y que el atentado contra el avión de
Avianca, ocurrido sobre Soacha, iba dirigido a él, quien no habría tomado ese vuelo por
recomendación de su jefe de seguridad.
Lara y Pastrana
Además, asegura que mucho antes de estos hechos, Santofimio era asesor de Escobar
en el Congreso, y que, ante las denuncias de Lara Bonilla contra el capo y la presión
del Nuevo Liberalismo, que impulsaba una moción para quitarle su curul en la Cámara,
recomendó matar al ministro de Justicia.
Y añade que cuatro días después de que él mismo ('Popeye') realizó el secuestro del
candidato a la alcaldía de Bogotá Andrés Pastrana, Santofimio pidió una cita con el
capo. 'Popeye' dice que lo recogió en el parque de El Poblado, en Medellín, y que lo
llevó hasta una cabaña en la parte alta de El Poblado, y allí se sentaron los tres en la
sala. Escobar dijo que había ordenado el secuestro para presionar a la familia del ex
presidente Misael Pastrana, padre de Andrés, a solucionar el problema de la
extradición. Santofimio sacó de su chaqueta los teléfonos privados de la residencia de
Pastrana y se los dio a Escobar, indica 'Popeye'.
Luego, añade, Santofimio le preguntó a Escobar quién había sido el "héroe" que realizó
el secuestro. El narcotraficante le contestó que lo tenía a su lado. El congresista hizo
parar a 'Popeye' y le dio un abrazo.
Acto seguido, asegura 'Popeye', Santofimio recomendó matar a Pastrana. Según la
declaración, Escobar dijo que eso era imposible. El congresista le habría dicho que si
no lo hacía lo vería convertido en alcalde de Bogotá y luego en Presidente y que era
mejor tener de su lado a un jefe de Estado más conveniente.
Escobar respondió que eso no era negociable y 'Popeye' llevó a Santofimio de regreso
al parque.
Estas revelaciones, que para la Fiscalía también son sorprendentes hacen parte ahora
de un proceso judicial contra uno de los más controvertido personajes políticos del
país.
Luis Carlos Galan Sarmiento Biography - ​English​
A Latin American symbol of political activism
Dr Luis Carlos Galan is a role model for those fighting against corruption in Latin
America and throughout the world. A gifted and dedicated politician, he was fearless in
exploring links between organised crime, drug trafficking and government. For this, he
was killed on 18 August 1989 outside Bogota, while on the campaign trail.
He was running for President. Dr Galan's legacy remains, and many of the reforms he
advocated have become reality, including new electoral procedures designed to reduce
rampant vote-buying and important changes to the constitution. Dr Galan remains a
hero to Colombians and Latin Americans, and the principles for which he lived and died
are still being pursued.

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