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UNIDAD I

INTRODUCCIÓN A LOS
INVENTARIOS FORESTALES

OBJETIVOS DE LA UNIDAD

Al finalizar la unidad, los estudiantes estarán en capacidad de:

1. Definir qué es un inventario forestal.

2. Describir qué información básica se recolecta en un inventario forestal.

3. Conocer las clasificaciones sobre inventarios forestales.


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1.1 DEFINICIONES DE INVENTARIOS FORESTALES

El termino inventariar significa cuantificar el recurso forestal desde los puntos de vista
cualitativos y cuantitativos. Por lo que un inventario forestal es la operación tendiente a
obtener datos relativos a los diversos parámetros del bosque y las manifestaciones del
crecimiento, de acuerdo con la calidad de estación. (Padilla, 1987)

El inventario forestal tiene como objetivo conocer la magnitud del recurso forestal, su
superficie, su distribución, composición y existencias maderables. También, es la
cuantificación y calificación de las especies forestales arbóreas y sus características ecológico–
silvícolas. (Raymond, 1991)

Un inventario forestal es el método usado para medir y registrar los datos del bosque, procesar
estos datos de campo para obtener así información de la cantidad y calidad de los árboles y
características del área boscosa, con un grado de detalle y precisión de acuerdo al objetivo
previsto y la exactitud requerida. (Ferreira, 2005).

1.2 INFORMACIÓN BÁSICA QUE RECOLECTAN LOS INVENTARIOS


FORESTALES

Un inventario forestal es un procedimiento útil para obtener información necesaria para la toma
de decisiones sobre el manejo y aprovechamiento forestal.

En el manejo de bosques naturales y plantaciones, un administrador forestal normalmente debe


tener a mano información confiable que le permita manejar su bosque, para que este produzca
en forma sostenible la máxima cantidad de productos, de la mejor calidad, en el menor tiempo y
al costo mas bajo posible.

Todo inventario de recursos forestales debe recabar cinco tipos de información: área de
bosques, localización y distribución por tipos de bosque, cantidad de recursos existentes,
calidad de los recursos y cómo cambian éstos en el tiempo. Estos aspectos se discuten a
continuación.

1.2.1 ÁREAS DE BOSQUE

En el manejo forestal, hay dos momentos durante los cuales es importante medir y calcular las
áreas de bosque.

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El primer momento es antes de empezar la planificación del manejo y el inventario en general.


En ese momento, hay que conocer la extensión y las características principales de los recursos
con los que se va a trabajar. El proceso de planificación difiere para bosques extensos, con
varios tipos de vegetación, cada uno de tamaño diferente, y para bosques pequeños básicamente
con un solo tipo de vegetación.

El segundo momento para medir y calcular áreas de bosque es antes de la planificación del
aprovechamiento, cuando ya se ha decidido cuánto y dónde se va a aprovechar cada año. En
ese momento, hay que medir y marcar el área de corta anual como unidad productiva y
administrativa.

El área y forma del bosque se presentan en un mapa general, a una escala conveniente. En el
mapa se incluyen los perímetros del bosque con indicación de los puntos de referencia
(esquineros, cruces, árboles límites), las características naturales del bosque (ríos, mesetas,
planicies, vertientes), carreteras, caminos, construcciones, entre otros. Asimismo, al mapa se le
debe añadir los nombres de los propietarios vecinos. Se recomienda un error inferior al 1/100 ó
1% en la determinación de los perímetros. (Catie, 2002; Fundap, 1993)

1.2.2 LOCALIZACIÓN Y DISTRIBUCIÓN DE TIPOS DE BOSQUE

Para la planificación de un inventario forestal, además de conocer la extensión del área de


bosque se debe clasificar esa área según los tipos de bosque presentes. Con este fin se
acostumbra dividir el área en rodales del bosque.

Un rodal se define como la unidad mínima geográficamente continua de bosque, que tiene
características homogéneas en cuanto a tipo de bosque, especie dominante, densidad, clase de
edad, clase de altura, clase de pendiente y calidad de sitio. El término rodal es aplicado en
plantaciones y estratos en bosques naturales.

La rodalización es un trabajo de gran importancia que sirve de base al manejo para determinar
de manera exacta y detallada los recursos del bosque, facilitar la localización y la organización
de las cortas. Cualquier trabajo de manejo se refiere al área de los rodales. Se recomienda un
error inferior al 1/10 ó 10% en la medición de las divisiones del bosque. (Fundap, 1993)

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1.2.3 VOLUMEN MADERABLE

La medición del volumen es obviamente el resultado más importante del inventario, sin
embargo, es la variable dasométrica que esta sujeta a mayores errores de medición. Por esta
razón el inventario debe ser ejecutado cuidadosamente.

Los resultados de volumen sirven para decidir sobre el orden cronológico de áreas de
aprovechamiento anual y para dar una idea del volumen aprovechable en el presente.

El volumen se puede calcular con la ayuda de tablas de volumen o empleando factores de


forma, necesitando en ambos casos la determinación del diámetro y la altura de los árboles
inventariados. (Catie, 2002; Fundap, 1993)

1.2.4 CALIDAD DEL VOLUMEN MADERABLE

Los inventarios forestales deben medir la calidad de los fustes, es decir, la calidad de madera
que existe en el bosque. La calidad de los fustes se mide solamente en los árboles tipo o en
todos los árboles medidos, según las características de la vegetación que se este muestreando.
Esta información se utiliza para determinar la estrategia de intervención en las operaciones
silviculturales a aplicar, especialmente en los raleos. (Fundap, 1993)

1.2.5 DINÁMICA DE CRECIMIENTO

El conocimiento de la dinámica de crecimiento ayudará a determinar el ciclo de corta del rodal


y a sugerir la manera de controlar su evolución en el transcurso del tiempo. La dinámica de
crecimiento de los árboles y del bosque se puede obtener analizando los datos de parcelas
permanentes de medición (PPM), análisis fustales y a través de tarugos de incremento.
Asimismo, en tablas de crecimiento previamente elaboradas. (Fundap, 1993)

1.3 CRITERIOS PARA CLASIFICAR LOS INVENTARIOS FORESTALES

Dentro del concepto clásico se han definido varios tipos de inventarios clasificados según el
método estadístico y según su objetivo. Esta clasificación se presenta a continuación.

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1.3.1 SEGÚN EL MÉTODO ESTADÍSTICO

La clasificación de inventarios por método estadístico puede resumirse en el siguiente esquema:

Es decir, el tipo de inventario elegido debe considerar la medición total o una muestra con
distribución al azar o sistemática. También, de acuerdo con las características del recurso, se
debe considerar o no la división en estratos. (Catie, 2002)

1.3.2 SEGÚN EL OBJETIVO

El inventario forestal debe ser definido bajo un objetivo, indicador del nivel de detalle, es decir
el grado de precisión que debe tener el muestreo y la cantidad de información requerida.

La clasificación de inventarios según objetivo considera los siguientes tipos:

a. Evaluación del potencial maderero

Consiste en la evaluación rápida del bosque, con el fin de conocer la disponibilidad volumétrica
actual, puede ser sobre el volumen total de todas las especies o sobre determinadas especies de
acuerdo a su uso.

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b. Evaluación para un plan de aprovechamiento

Además de conocer la potencialidad volumétrica, este tipo de inventario exige el conocimiento


de las características del área con fines de extracción.

c. Evaluación para un plan de manejo

Este inventario requiere distribuir la volumetría por clase diamétrica y la capacidad de


regeneración del bosque.

d. Evaluación de la dinámica del bosque

El propósito principal de este inventario es evaluar los procesos dinámicos que ocurren en el
bosque; es decir, el crecimiento, mortalidad y reclutamiento de nuevos árboles a partir de un
diámetro establecido.

1.3.3 CLASIFICACIÓN DE ACUERDO AL GRADO DE PRECISIÓN

Malleux establece que la precisión de un inventario se indica a través del error de muestreo
expresado como un porcentaje del volumen medio por hectárea. Usando el error de muestreo a
un nivel de confianza de 95% (es el nivel más usado), como índice de grado de precisión.

Los inventarios se pueden clasificar de la siguiente manera:

a. Inventario de reconocimiento.

Consiste en una evaluación rápida del potencial forestal de una determinada superficie, con el
fin de clasificarla “a priori” apta o no apta a una actividad económica. En el que, el error de
muestreo no es necesario.

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Su ejecución se basa en el juzgamiento rápido del área, mediante un reconocimiento aéreo o un


simple sondeo por la misma. Donde la experiencia profesional juega un papel muy importante.
b. Inventario exploratorio.

Estos inventarios tienen como objetivo recolectar información básica para la evaluación y
monitoreo de bosques a gran escala y de interés gubernamental principalmente, o bien para
estudios de factibilidad de empresas forestales. Estos inventarios son de baja a mediana
intensidad de muestreo (0.1% a 2% del área).

Tanto en el caso de bosques naturales como de plantaciones forestales, la información por


recolectar se centra en el área de bosques, su localización y distribución por tipos y la cantidad
y calidad de productos que contiene. (Catie, 2002).

El error de muestreo es entre 15-20%.

c. Inventario semi - detallado.


Este tipo de inventario permite tener más información y de mayor confiabilidad, como para
garantizar la instalación de un complejo industrial, Se ajusta a estudios de pre-factibilidad,
siendo el error de muestreo aceptable no mayor al 15%. (CATIE, 1994)

d. Inventario detallado.

Es el de mayor nivel de confiabilidad y se ajusta a estudios de factibilidad. Este inventario no


debe tener un error de muestreo mayor al 10%. (CATIE, 1994)

I unidad
UNIDAD II

ESTADÍSTICA BÁSICA PARA INVENTARIOS


FORESTALES

OBJETIVOS DE LA UNIDAD

Al finalizar la unidad, los estudiantes estarán en capacidad de:

1. Conocer los términos estadísticos que tienen relación con los inventarios forestales.

2. Aplicar un análisis de varianza a los datos provenientes de un inventario forestal.

3. Diferenciar los estadísticos y los parámetros que se obtienen de un inventario forestal.


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1.4 CONCEPTOS ESTADÍSTICOS

1.4.1 ESTADISTICA

La estadística es una rama de la matemática que proporciona un conjunto de métodos y


procedimientos que permiten reunir, organizar y analizar datos numéricos en forma adecuada
para la toma de decisiones. La estadística puede dividirse de la manera siguiente:

a) Estadística descriptiva. Su finalidad es procesar la información para que pueda ser


interpretada fácil y rápidamente. Incluye la presentación de datos en gráficos y cuadros, así
como el cálculo de resúmenes numéricos, tales como frecuencias, promedios y porcentajes.

b) Estadística inferencial. Esta estadística proporciona una metodología para tomar decisiones
sobre una población, siguiendo un razonamiento derivado de la evidencia de datos
numéricos observados en una muestra en esa misma población. (Padilla, 1987)

1.4.2 POBLACION

Una población se define como el conjunto de individuos con características comunes, cuyo
conocimiento es objeto de interés desde un punto de vista estadístico. Se puede distinguir entre
población de individuos y población de observaciones.

Una población de individuos esta formada por todo el conjunto de individuos que poseen una
característica previamente establecida; a partir de esta población de individuos se pueden
generar una o varias poblaciones de observaciones que es el conjunto de todos los valores que
puede tomar una variable de interés sobre la población de individuos.

1.4.3 MUESTRA

La muestra es una parte o subconjunto de la población, la cual normalmente se escoge con el


fin de recoger datos para generar información acerca de la población.

La muestra debe ser representativa de la población para la cual deseamos generar información.
Para obtener una muestra representativa de una población debemos estar seguros de que todos
los elementos de la población posean igual probabilidad de ser seleccionados como parte de la
muestra. (Catie, 2002)

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2.1.4. UNIDAD DE MUESTREO

Se define como la unidad más simple elegida para componer o medir una muestra, puede ser un
individuo, un número dado de individuos, una unidad de superficie, etc. Es la unidad de
muestra empleada para inferir las características de una población. (Padilla, 1987)

2.1.5. MUESTREO

El muestreo es un procedimiento por medio del cual se seleccionan, miden o registran las
características previamente determinadas, de la muestra de una población, con el objetivo de
conocer esa población a través del estudio de tales muestras. (Padilla, 1987)

2.1.6. VARIABLE

Característica o atributo que distingue o identifica a un objeto, individuo o unidad de muestreo.


Se distinguen las siguientes variables.

 Variable cualitativa: es aquella en que no es posible hacer una medición numérica para
describir el atributo, es decir, estas variables describen cualidades. Por ejemplo, color de
follaje, forma de hojas, apariencia de un fruto, etc.

 Variable cuantitativa: es aquella en que las observaciones son numéricas y son el


resultado de una medición o un contero. Por ejemplo, la altura de un árbol, el peso de
madera aserrada, la edad de una plantación, etc.

 Variable continua: es aquella en la cual pueden ocurrir todos los valores posibles,
existentes dentro de una amplitud de variación dada. Por ejemplo, entre dos posibles
valores de biomasa (300 y 3001 kg), existe un número alto de posibles observaciones
(300.001, 300.002, 300.003 ….. 300.999 kg).

 Variable discreta: es aquella en la cual no ocurren todos los valores posibles que contiene
una amplitud de variación dada. Es común encontrar variables discretas dentro del
conjunto de los números enteros, ya que se generan a partir de conteos. Por ejemplo, el
número de plantas por parcela, el número de insectos capturados en una trampa, el número
de frutos de un árbol, etc. (Catie, 2002; Padilla, 1987)

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2.1.7. ESTADISTICO

Un estadístico es un número que resume información contenida en una muestra. Los


estadísticos no son valores fijos, sino que varían de muestra en muestra de una misma
población, y por lo tanto solo pueden ser utilizados para generar inferencias inciertas acerca del
verdadero valor del parámetro poblacional. (Catie, 2002)

2.1.8. PARÁMETRO

Un parámetro es una cantidad numérica que define a una población con respecto a alguna
característica. Aun en poblaciones finitas el parámetro rara vez llega a conocerse, por lo que
comúnmente se estima a partir de muestras. (Padilla, 1987)

2.2. ANÁLISIS DE DATOS

Los datos obtenidos con la evaluación y medición de todas las unidades de muestreo en la
población (censo), o con la evaluación de una parte de las unidades de muestreo en la población
(muestreo), se deben analizar para generar información utilizable. Comúnmente se utilizan
técnicas estadísticas para analizar estos datos, y en inventarios forestales, las más utilizadas son
las siguientes.

2.2.1. DISTRIBUCION DE FRECUENCIAS

Una de las formas más sencillas de generar información a partir de datos de un gran número de
observaciones de una variable es por medio de cuadros de distribución de frecuencias. Las
distribuciones de frecuencias permiten observar tendencias o rasgos sobresalientes de las
observaciones.

Un cuadro de distribución de frecuencias es una agrupación de datos en clases exclusivas y


exhaustivas. Para cada clase se registra el número de observaciones que pertenece a esa clase o
categoría. Las clases deben ser exclusivas para que cada observación sea asignada a una única
clase o grupo, y exhaustivas, para que todas las observaciones sean asignadas a alguna clase.

Una vez que los datos están agrupados es posible observar las tendencias de las observaciones,
tales como valores más frecuentes, dispersión de los valores, etc. Los valores del cuadro de
distribución de frecuencias se pueden utilizar para construir histogramas o polígonos de
frecuencia. (Catie, 2002)

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2.2.2. VALORES ESTADÍSTICOS DE MUESTREOS SIN ESTRATIFICAR

Son valores calculados que representan cierta característica, y que se llaman parámetros cuando
se calculan de una población de observaciones, y estadísticos, cuando se calculan de una
muestra. Los estadísticos más utilizados para inventarios sin estratificar con muestreo aleatorio
y sistemático son los siguientes.

_
A. MEDIA ARITMÉTICA (X)

Es el índice de tendencia central más usado para describir una característica de la población; en
una muestra proveniente de un inventario forestal se estima así:

X
(X ) (2-1)
n

Donde:
X = Volumen por parcela (m³/ha)
n = Número de parcelas levantadas

B. DESVIACIÓN ESTÁNDAR (S)

Es el índice de dispersión más usado para medir la desviación de los valores individuales con
respecto a la media.

Un valor bajo indica que la población es homogénea, y un valor alto indica que la población es
heterogénea. A partir de una muestra se puede estimar por:

 ( X ²)  n
( X )²
S (2-2)
n 1

Donde:
X² = Volumen por parcela al cuadrado

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C. COEFICIENTE DE VARIACIÓN (CV)

Es un índice usado para medir la dispersión en términos relativos y equivale a expresar la


desviación estándar como porcentaje de la media.

El coeficiente de variación permite comparar la variabilidad de poblaciones que tienen


diferentes medias, y se calcula así:

S
CV     100 (2-3)
X

D. ERROR ESTÁNDAR (Sx)

Así como la desviación estándar mide el promedio de las desviaciones de las observaciones
individuales con respecto a la media muestral, el error estándar mide el desvío de las medias
muéstrales respecto de la media poblacional, y se calcula por la fórmula:

 S   n
Sx      1   (2-4)
 n  N
Donde:
N = Área del bosque en has / Área de la parcela en has

En la práctica, cuando n/N es igual o menor que 0.05, se puede considerar la población como
infinita; también se puede considerar como población infinita un bosque con un área mayor de
400 hectáreas.

Cuando la población es infinita, para el cálculo del error estándar se emplea la fórmula
siguiente:

S
Sx  (2-5)
n

E. ERROR DE MUESTREO (Em)

El error de muestreo es diferente para cada parámetro forestal (densidad, área basal y volumen)
y también difiere de especie a especie.

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En general, el error de muestreo para una especie es mayor, para un grupo de especies se reduce
el error y más todavía si se trata del total de especies. Se calcula por la expresión:

Em  (Sx)  (t ) (2-6)

Donde:
t = Valor t de Student (depende del nivel de confianza requerido y de los grados de libertad)

F. ERROR DE MUESTREO RELATIVO (Em%)

El error de muestreo relativo es el error de muestreo expresado en porcentaje, y se calcula a


través de la fórmula siguiente:

 Em 
Em%    100 (2-7)
 X 

G. LIMITES DE CONFIANZA

La media obtenida a partir de una muestra difiere de la verdadera media poblacional. La media
poblacional está comprendida entre un límite inferior y un límite superior. Es decir, se puede
estimar a través de las relaciones siguientes:

LCs  X  Em (2-8)

LCi  X  Em (2-9)

Donde:
LCs = Límite de confianza superior
LCi = Límite de confianza inferior

H. TAMAÑO DE LA MUESTRA

CV ²  t ²
n (2-10)

Donde:
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n = número de parcelas a levantar


CV = coeficiente de variación (%)
t = valor t de Student (depende del nivel de confiabilidad requerido y de los grados de libertad)
E = error de muestreo máximo requerido (generalmente se utiliza un 15%)

2.2.3. VALORES ESTADÍSTICOS DE MUESTREOS ESTRATIFICADOS

Para realizar el análisis estadístico de un inventario forestal estratificado se utilizan las fórmulas
siguientes:

A. MEDIA ESTRATIFICADA

Xe 
 ( Xj )  ( Nj ) (2-11) Nj 
Aj
(2-12)
 Nj Tp

Donde:
Xe = Volumen estratificado (m³/ha)
Xj = promedio de volumen del estrato j (m³/ha)
Nj = tamaño del estrato j, expresado en número de parcelas
Aj = área del estrato j (has)
Tp = área de la parcela (has)

B. DESVIACION ESTÁNDAR ESTRATIFICADA

Se 
 (Sj)  ( Pj )  100 (2-13)
Xe

Aj
Pj  (2-14)
At

Donde:
Se = desviación estándar estratificada (%)
Sj = desviación estándar del estrato j (m³/ha)
Pj = proporción de cada estrato
At = área total del bosque (has)

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C. ERROR ESTÁNDAR ESTRATIFICADO

Sxe 
 (Sj )  ( Pj ) ²   (Sj)²  ( Pj ) (2-15)
n N

At
N (2-16)
Tp
Donde:
Sxe = error estándar estratificado (m³/ha)
n = número total de parcelas levantadas

D. TAMAÑO DE LA MUESTRA

t ²   ( Sj )²  ( Pj )
ne  (2-17)
t ²   ( Sj )²  ( Pj )
( Ea )² 
 Nj
E
Ea  ( Xe)  (2-18)
100
Donde:
ne = número de parcelas a levantar en todo el bosque
t = valor T de Student (depende del nivel de confianza requerido y de los grados de libertad)
Ea = precisión o error en unidades del valor (m³/ha)
E = error de muestreo máximo requerido, generalmente 10% ó 15%

E. DISTRIBUCION DE PARCELAS POR ESTRATO

NPe1  ne  Pj (2-19)

ne  ( Sj )  ( Pj )
NPe 2  (2-20)
 (Sj)  ( Pj )
Donde:
NPe1 = número de parcelas que le corresponden al estrato j (distribución proporcional al área)
NPe2 = número de parcelas que le corresponden al estrato j (distribución según la variabilidad
de los estratos).
II unidad
UNIDAD III

MÉTODOS PARA LA ELABORACIÓN DE MAPAS


GENERALES

OBJETIVOS DE LA UNIDAD

Al finalizar la unidad, los estudiantes estarán en capacidad de:

1°. Conocer los elementos esenciales que debe contener un mapa general.

2°. Elaborar mapas generales empleando procedimientos fotogramétricos y cartográficos.

3°. Manejar los programas de Map maker Arcview y ArcGis para la elaboración de mapas
generales.
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3.1. INTRODUCCIÓN

Un inventario forestal no se realiza sin un mapa del bosque a estudiar. Un mapa general debe
contener cuatro elementos esenciales:
 Escala
 Indicador del norte
 Leyenda
 Datos generales

Por convención, los mapas se designan para que se lea el norte hacia arriba. La escala del mapa
puede presentarse con números o mediante una escala grafica. La leyenda debe ser
suficientemente clara y amplia para que cualquier persona pueda interpretar los símbolos que se
dibujaron: tipos de bosque, veredas, caminos, ríos, etc.

Existen varios procedimientos para elaborar mapas, tales como levantamiento del área con
brújula y cinta, levantamiento con teodolito y estadía, levantamiento con unidades de GPS,
utilizando sensores remotos como fotografías aéreas e imágenes de satélite. Estos
procedimientos se describen a continuación.

3.2. SENSORES REMOTOS

Dos ejemplos de sensores remotos son las cámaras que se utilizan para tomar las fotografías
aéreas y las imágenes de satélite. Ambas técnicas permiten al profesional forestal clasificar los
bosques según tipos, calcular sus respectivas áreas y elaborar mapas para facilitar la
planificación y ejecución de inventarios forestales y planes de manejo forestal. A continuación,
se discute brevemente sobre los aspectos más sobresalientes de los sensores remotos.

3.2.1. FOTOGRAFÍAS AÉREAS

Las fotografías aéreas han sido utilizadas durante largo tiempo en los inventarios de recursos
forestales. El uso de fotografías aéreas, no obstante, es preferible en áreas donde se necesita
determinar tipos de bosque, o donde las fotografías ya existen y son relativamente recientes, o
donde el bosque no ha estado sujeto a intervenciones humanas desde el momento en que se
tomaron las fotos. También, donde los recursos para la interpretación son escasos, y el nivel de
conocimiento de los bosques es bajo, la interpretación manual de fotos ofrece información de
calidad aceptable para la planificación del inventario y el manejo.

III unidad
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En América Central, todavía se usan fotografías aéreas para la estratificación de los bosques y
para la determinación del tamaño de áreas de cada tipo de bosque. El procedimiento para
trabajar con fotografías aéreas puede resumirse en el siguiente:

1. Se arreglan las fotografías aéreas para tener visión estereoscópica.


2. Se fijan acetatos sobre las fotografías aéreas.
3. Mediante la observación detenida de las fotografías aéreas se van delineando sobre los
acetatos los límites del bosque. La fijación de estos límites requiere de un conocimiento
previo del área a trabajar, por lo tanto, la exactitud del mapa está en función del
conocimiento que se tenga del sitio.
4. Habiendo delimitado el bosque, se procede a calcular el área del mismo, para lo cual se
puede utilizar la técnica de la rejilla de puntos.

3.2.2. IMÁGENES DE SATÉLITE

Para la planificación en gran escala, las fotografías aéreas han venido perdiendo terreno, a favor
de las imágenes de satélite, ya que el costo de estas últimas se ha reducido notablemente. Así,
el precio de las imágenes Landsat, pasó en el año 2001 de US$ 4000 por imagen a US$ 800 las
imágenes georeferenciadas.

Las fotografías aéreas, también han perdido terreno debido a que las imágenes de satélite son
distribuidas en formato digital, lo cual facilita su almacenamiento, interpretación, calculo de
áreas y producción de mapas de cobertura forestal. En el mercado existen programas de
computación para mostrar, interpretar y editar imágenes de satélite, en Internet se pueden
adquirir gratuitamente el Spring y Multispect; también se pueden adquirir programas de bajo
costo como IDRISI, o programas sofisticados como el ERDAS.

La clasificación de imágenes satelares generalmente llega a tipo de cobertura (bosque, pasto,


agricultura, etc.); sin embargo, para la planificación de inventarios forestales, además se
requiere conocer los tipos de bosque presentes. La resolución de las imágenes Landsat no es
suficiente para este fin, y las imágenes SPOT aún son relativamente caras. Por esta razón, en
América Central se ha utilizado una combinación de datos de campo (con GPS), mapas
temáticos existentes e imágenes de satélite para la clasificación de bosques a escala de paisaje.

III unidad
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3.3. MEDICIÓN Y CÁLCULO DE ÁREAS EN HOJAS CARTOGRÁFICAS

Las hojas cartográficas se pueden emplear para delimitar áreas de bosque. La precisión de este
método depende básicamente de la habilidad que se tenga para interpretar y manejar las hojas
cartográficas, y generalmente, se utiliza en la delimitación de áreas extensas cuando no existen
los recursos para una delimitación más precisa.

Utilizando hojas cartográficas, la delimitación de áreas boscosas puede realizarse a través del
procedimiento siguiente:

 Colocarse en el terreno en un lugar donde se puedan observar los límites del bosque, para lo
cual se recomienda buscar “PARTES ALTAS”.

 Ubicar en la hoja cartográfica el lugar donde se está haciendo la observación.

 Luego de haberse ubicado en la hoja cartográfica, se empieza a observar las características


del terreno donde pasan los límites del bosque (lomo de colina, ladera alta, ladera media,
pie de monte, valle, depresión, etc.), esta información se busca en la hoja cartográfica y se
van trazando los límites del bosque en ésta. Para hacer la delimitación más precisa,
frecuentemente es necesario trasladarse a varios puntos para poder observar todos los
límites del bosque.

 Teniendo delimitado el bosque en la hoja cartográfica, se procede a calcular el área del


mismo, para lo cual se puede utilizar la técnica de la rejilla de puntos.

3.4. GEOPOSICIONADORES

La delimitación de áreas forestales con GPS (sistema de posicionamiento global) es uno de los
métodos más modernos que se utilizan en la planificación de inventarios forestales.

La exactitud del método depende básicamente de la precisión del GPS, existiendo aparatos con
distintas precisiones, y por lo general los más precisos son los más caros. Este método tiene la
desventaja de que en áreas pequeñas (menores a 2 hectáreas) si el GPS no es muy preciso, el
error del levantamiento puede ser bastante alto.

El levantamiento de datos con este aparato es muy fácil y se puede resumir en los aspectos
siguientes:

III unidad
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 Se efectúan caminamientos por los límites del bosque, y con el Geoposicionador (GPS) se
registran las coordenadas de estos límites. El registro de los datos se puede hacer
directamente en la memoria del GPS o utilizando una boleta de registro.

 Los datos del GPS se pueden vaciar en un computador utilizando programas como el
MapSource.

 La información del GPS se puede procesar en programas como ArcView, MapMaker y


Autocad, en los cuales se elabora el mapa en forma rápida y confiable.

3.5. LEVANTAMIENTOS TOPOGRÁFICOS

Para inventarios forestales de áreas pequeñas (menores de 50 hectáreas), es común emplear los
levantamientos topográficos con brújula para la delimitación del bosque. Esta técnica es
sencilla y da resultados bastante precisos cuando se tiene la habilidad para manejar brújula.
Los levantamientos topográficos con teodolito en bosques son raros, debido a su alto costo.

En un levantamiento topográfico con brújula se miden básicamente acimuts, pendientes y


distancias, utilizando los instrumentos siguientes: brújula, clinómetro, cinta métrica de 50
metros y un formulario en donde se apuntan las mediciones y las observaciones.

El levantamiento topográfico puede hacerse con cinco personas: el anotador de datos, el


medidor de ángulos y pendientes, el jalador de cinta, el chapeador y el guía. Aunque el
chapeador y el guía abren el camino, es a veces necesario tener uno o dos chapeadores más.

El método de levantamiento topográfico que más se utiliza es el del POLÍGONO CERRADO,


el cual consiste en empezar la medición desde un punto cualquiera, luego se van midiendo
todos los límites del bosque hasta terminar en el punto de inicio.

El caminamiento del perímetro del bosque debe hacerse con una persona que conozca bien sus
límites, empezando por cualquier punto, aunque es preferible empezar desde un punto
identificado con certeza sobre las hojas cartográficas, lo que permitirá después georeferenciar el
bosque. Otra forma de georeferenciar el área consiste en tomar con GPS la coordenada del
punto de inicio del levantamiento, la cual se utilizará para la georeferenciación del bosque.

Habiendo recolectado los datos, el paso siguiente es la elaboración del mapa y el cálculo del
área y el perímetro, lo cual puede hacerse a través de programas como MapMaker y Autocad.

III unidad
UNIDAD IV

PLANIFICACIÓN DE
INVENTARIOS FORESTALES

OBJETIVOS DE LA UNIDAD

Al finalizar la unidad, los estudiantes estarán en capacidad de:

1°. Emplear criterios técnicos para determinar la forma y el tamaño más “adecuado” de las
unidades de muestreo en un inventario forestal.

2°. Aplicar métodos estadísticos para determinar el tamaño de la muestra en los inventarios
forestales.

3°. Emplear criterios técnicos para determinar el método de muestreo más “adecuado” según
las características del bosque a inventariar.

4°. Planificar un inventario forestal tomando en consideración las características del área a
inventariar.
Manual de Inventarios Forestales 23

4.1. DEFINICIÓN DE OBJETIVOS

Un inventario forestal debe tener objetivos específicos, que indiquen en forma clara el tipo,
cantidad y calidad de la información a tomar. La fijación de objetivos debe hacerse en conjunto
con la persona interesada.

La fijación de objetivos debe determinar qué información de los árboles y del terreno se
requiere y con qué grado de detalle y precisión. Si los objetivos del inventario no están bien
claros, lo más probable es que al final la información obtenida sea mala debido ya sea a la
ausencia o insuficiente descripción de algunas características de los árboles (o del terreno) o
bien falta de precisión del muestreo.

La solución no es tomar toda la información del bosque que es posible imaginar y con un alto
nivel de precisión para cubrir cualquier solicitud de información, debido a que la toma de datos
y el procesamiento de ellos es muy caro. La solución y lo que debe hacerse es determinar con
anticipación en forma bien clara y precisa los objetivos del inventario. (Ferreira, 1994)

4.2. RECOPILACIÓN DE INFORMACIÓN BASE

Antes de iniciar un inventario forestal es necesario recopilar cierta información base, la cual
permitirá hacer una mejor planificación del inventario. Entre los datos más importantes que se
deben obtener se encuentran los siguientes:

 Tiempo y fondos disponibles para el inventario


 Apoyo logístico y organizaciones que participan en el inventario
 Accesibilidad, vías de comunicación y servicios existentes
 Inventarios previos, informes y mapas existentes (de suelos, vegetación, etc.)
 Lista de especies de árboles esperadas (comerciales, no comerciales, protegidas, etc.)
 Hojas cartográficas, fotografías aéreas o imágenes de satélite
 Estado legal de la propiedad
 Área total y colindancias
 Topografía general. (Catie, 2002)

IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 24

4.3. DEFINICIÓN DEL MARCO DE MUESTREO

No existe una receta fija para diseñar un inventario forestal. El diseño final depende del tipo de
bosque, la información requerida, tiempo y fondos disponibles, entre otros. El tiempo y los
fondos disponibles son los factores principales que afectan el diseño de un inventario.

El mejor diseño de inventario es aquel que reporta resultados más precisos a un costo más bajo.
En los inventarios forestales la unidad de muestreo es la parcela. Es muy importante definir su
tamaño, forma y número, puesto que tienen mucha influencia sobre la calidad de los resultados
y los costos del inventario. Estos aspectos se discuten a continuación.

4.3.1. TAMAÑO DE LAS UNIDADES DE MUESTREO

La unidad de muestreo tradicional usada en los inventarios forestales, es la parcela que es una
superficie fija de tamaño pequeño, de forma circular, cuadrada o rectangular. En general, para
bosques jóvenes y densos, es más conveniente usar parcelas pequeñas; y para bosques más
viejos y ralos, se utilizan parcelas grandes.

Para elegir el tamaño de la parcela hay que considerar dos factores:

 La representatividad
 El tiempo de medición

La representatividad se refiere a que la variación del bosque éste representada en la parcela (en
las parcelas más grandes, la variabilidad es menor que en parcelas pequeñas). La guía principal
para elegir el tamaño de la parcela es que ésta sea tan grande para incluir un número
representativo de árboles, pero que sea lo suficientemente pequeña para que el tiempo de
medición requerido no sea excesivo. Se recomienda como regla práctica, que el tamaño sea tal
que incluya de 20 a 30 árboles medibles, que el árbol sea medible depende del diámetro mínimo
fijado que puede ser 10, 15, 20 etc. (Ferreira, 2005)

El CONAP recomienda para los bosques de Guatemala, los tamaños de parcelas siguientes:

 En bosques latifoliados cuya superficie es mayor a 10000 hectáreas, parcelas de 1 hectárea


 En bosques latifoliados cuya superficie es menor a 1000 hectáreas, parcelas de 2500 m2
 En bosques de coníferas, parcelas de 500 m2
 En bosques mixtos, parcelas de 1000 m2

Cualquiera que sea el tamaño de la unidad de muestreo escogida, este no debe variar en el
mismo inventario. Hay que tener presente que los tamaños de las unidades de muestreo
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 25

siempre se refieren al plano horizontal, es decir, en terrenos inclinados hay que hacer la
corrección de pendiente. (Catie, 2002; Ferreira, 1994)

4.3.2. FORMA DE LAS UNIDADES DE MUESTREO

La consideración más importante para definir la forma de la parcela es el “efecto de borde”. Es


más conveniente seleccionar formas con menor relación perímetro/superficie. La forma que
mejor llena esta condición es la forma circular; con rectángulos largos y delgados o cuadrados
muy pequeños el error de borde es considerable.

A continuación, se presentan algunas consideraciones sobre las parcelas de uso más común en
inventarios forestales.

a) PARCELA CIRCULAR

La parcela circular se utiliza solamente en bosques con buena visibilidad, y no se recomienda


en terrenos con pendiente fuerte. Una de las ventajas de esta parcela es que su trazo es fácil, ya
que únicamente se necesita una cinta métrica.
Para calcular el radio de la parcela se emplea la fórmula siguiente:

_________________________
Radio (m) = Tamaño de la parcela en m2 / π (4-1)

b) PARCELA CUADRADA

La parcela cuadrada se emplea comúnmente en parcelas permanentes de medición (PPM), y en


bosques con poca visibilidad. Para establecer la parcela cuadrada se necesita además de la cinta
métrica, una brújula para medir los ángulos de 900 del cuadrado.

Para calcular el lado de la parcela se utiliza la fórmula siguiente:


_______________________
Lado de la parcela (m) = Tamaño de la parcela en m2 (4-2)

c) PARCELA RECTANGULAR

Las parcelas rectangulares se recomiendan en bosques con poca visibilidad y en terrenos con
pendiente fuerte. En áreas donde existan pendientes, se recomienda ubicar el lado más largo de
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 26

la parcela en forma paralela a la pendiente, esto con el objetivo de captar la mayor variabilidad
posible (gradiente de crecimiento).

Para establecer la parcela rectangular, se necesita una cinta métrica y una brújula para medir los
ángulos del rectángulo.
Los lados para parcelas rectangulares, podrían ser, por ejemplo:

 Parcelas de 1000 m2 (25m x 40m)


 Parcelas 800 m2 (25m x 32m)
 Parcelas de 600 m² (20m x 30m)
 Parcelas de 500 m2 (20m x 25m)
 Parcelas de 300 m2 (15m x 20m). (Ferreira, 1994; Matteucci et al., 1982)

4.3.3. TAMAÑO DE LA MUESTRA

Una vez determinado el tamaño de la parcela, la etapa siguiente es determinar el tamaño de la


muestra, es decir, el número de parcelas a medir en el terreno.

El tamaño de la muestra se refiere al área total por inventariar, expresado en número de parcelas
de un tamaño definido.

Para determinar el tamaño de la muestra, existen dos modalidades: método de la intensidad de


muestreo y método del error de muestreo. Estos métodos se discuten a continuación:

a) MÉTODO DE LA INTENSIDAD DE MUESTREO

En este método el tamaño de la muestra se estima aplicando un porcentaje de intensidad del


área total, para lo cual se requiere bastante experiencia y habilidad para fijar el porcentaje; el
método no deja de ser subjetivo y arbitrario. Por ejemplo, para un área grande o cuando no se
requiere una exactitud alta, se puede fijar una intensidad del 2% al 5%.

Para calcular el número de parcelas se utilizan las fórmulas siguientes:

Am
Np  (4-3)
Tp

IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 27

Im
Am   At (4-4)
100

Donde:
Np = número de parcelas a levantar
Am = área muestreada (has)
Tp = tamaño de la parcela (has)
Im = intensidad de muestreo (%)
At = área total del bosque (has)
La experiencia en Petén (Guatemala), señala que en este tipo de bosques es más práctico
inventariar con base en intensidades de muestreo, ya que permite simplificar el proceso de
diseño y planificación del inventario forestal. Las intensidades propuestas están basadas en el
mínimo necesario para alcanzar un error del 15%, respecto del volumen comercial para todas
las especies en conjunto. En todo caso, después de realizar el inventario este debe incluir el
error obtenido cualquiera que sea su valor. Si existiera un caso en que este sea mayor al 15%
este debe ser aceptado.

A continuación, se presenta una propuesta de intensidades mínimas de muestreo aplicable a los


bosques peteneros de la Reserva de la Biosfera Maya.

Tabla 1. Intensidades de muestreo aplicable en bosques peteneros

Superficie a inventariar Intensidad mínima de Número de parcelas a levantar


(has) muestreo (%) (de 1 hectárea cada una)
5,000 0.80 40
10,000 0.50 50
15,000 0.40 60
20,000 0.35 70
30,000 0.27 80
40,000 0.23 90
50,000 0.20 100
100,000 0.15 150
Fuente: Carrera, 1996.

En el Altiplano Occidental de Guatemala, cuando no se hace un pre-muestreo, se recomienda


referirse al cuadro siguiente para determinar la intensidad de muestreo a aplicar en función del
área y tipo de bosque, y del error máximo de muestreo permitido.

IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 28

Tabla 2. Intensidad de muestreo recomendable en el altiplano Occidental de Guatemala

Intensidad de muestreo (%)


Superficie a
inventariar Bosques de coníferas Bosques mixtos y latifoliados
(has) 15% de error de 20% de error de 15% de error de 20% de error de
muestreo muestreo muestreo muestreo
5 20.4 12.5 30.3 18.1
10 10.2 6.2 15.2 9.0
15 6.8 4.2 10.1 6.0
20 5.1 3.1 7.6 4.5
30 3.4 2.1 5.1 3.0
40 2.5 1.6 3.8 2.3
50 2.0 1.2 3.0 1.8
100 1.0 0.6 1.5 0.9
Fuente: Fundap, 1993.

El CONAP recomienda que para bosques de coníferas el error de muestreo permitido no debe
ser mayor del 15%; mientras que para bosques mixtos se considera un máximo de error de
muestreo permisible del 20%.

Ejemplo 4.1. En un área boscosa de 500 hectáreas se decidió realizar un inventario forestal
con una intensidad de muestreo del 2%. Si las unidades de muestreo serán parcelas circulares
de 1000 m2 cada una, ¿qué número de parcelas se deben evaluar en el campo?

Utilizando la fórmula 4-4, el área a muestrear es igual a:

2
Am   500has
100

Am = 10 has

Finalmente, utilizando la fórmula 4-3, el número de parcelas a levantar es igual a:

10has
Np 
0.10has

Np = 100 parcelas (con una intensidad de muestreo del 2%)

IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 29

b) MÉTODO DEL ERROR DE MUESTREO

Este método consiste en determinar el número de parcelas de muestreo tomando como base la
variabilidad del bosque, y para medir esta variabilidad se usa el coeficiente de variación.

En base solamente a la variabilidad de la población, un bosque heterogéneo necesita mayor


número de parcelas que un bosque homogéneo, para obtener la misma precisión en el muestreo.

Para calcular el número de parcelas en un muestreo simple se utiliza la fórmula 2-10, es decir:

CV ²  t ²
n (4-5)

Donde:
n = número de parcelas a levantar
CV = coeficiente de variación (%)
t = valor t de Student (depende del nivel de confiabilidad requerido y de los grados de libertad)
E = error de muestreo máximo requerido (generalmente se utiliza un 15%)

De la fórmula anterior, se deduce que el tamaño de la muestra está en función de la variabilidad


del bosque (CV) y de la precisión requerida (E), y no del tamaño de la superficie del bosque a
inventariar. El problema normalmente es que de antemano no se conoce el valor del coeficiente
de variación. Este valor depende de la homogeneidad del bosque y del tamaño de las parcelas.

En general, el coeficiente de variación del volumen, puede ir desde 35% para bosques
homogéneos hasta 250% para bosques muy heterogéneos. En el Altiplano Occidental de
Guatemala, el coeficiente de variación del volumen varía en general entre 22 y 32% en el caso
de bosques de coníferas y entre 26 y 46% en el caso de bosques mixtos y latifoliados.

La estimación del coeficiente de variación puede hacerse mediante un pre-muestreo (muestreo


piloto) o por información de otros inventarios cercanos al área.

Realizar un pre-muestreo tiene algunos inconvenientes de orden práctico. Entre los principales
inconvenientes se reconocen los siguientes:

1°. Regresar al bosque en dos ocasiones para recolectar información, tiene repercusión en los
costos del inventario.

IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 30

2°. Se necesitan por lo menos diez parcelas por estrato para tener un coeficiente de variación
confiable. Utilizar un menor número de muestras puede llevarnos a serios errores de
estimación.

3°. Si bien se argumenta que se puede hacer el muestreo piloto y después complementar el
número de parcelas faltantes, esto no permite hacer una buena distribución sistemática de
las parcelas. (Carrera, 1996; Ferreira, 1994)

IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 31

Ejemplo 4.2. En un bosque de 152 hectáreas se hizo un pre-muestreo con 10 parcelas de 500
m2 cada una, obteniendo un coeficiente de variación de 33.7%. Si el error de muestreo debe ser
inferior al 15%, con un nivel de confiabilidad del 95%, determinar ¿qué número de parcelas se
deben evaluar en el campo para obtener la precisión requerida?
Utilizando la fórmula 4-5, tenemos que el número de parcelas es igual a:
(33.7)²  (2.262)²
n n = 25.8  26 parcelas
(15)²
Como el valor “t de Student” varía de acuerdo al número de parcelas, y el cálculo anterior se
basó en 10 parcelas, se debe calcular nuevamente el valor de “n” usando ahora un valor de “t de
Student” para 26 parcelas. Entonces, tenemos que el número de parcelas es igual a:

(33.7)²  (2.060)²
n n = 21.4  21 parcelas
(15)²
Se repite el cálculo ahora con un valor “t de Student” para 21 parcelas. Entonces, tenemos que
el número de parcelas es igual a:

(33.7)²  (2.086)²
n n = 22.0  22 parcelas
(15)²

Ahora empleamos un valor “t de Student” para 22 parcelas. Entonces, tenemos que el número
de parcelas es igual a:

(33.7)²  (2.080)²
n n = 21.8  22 parcelas
(15)²

Hasta aquí termina el cálculo, debido a que ya se dio la estabilización de “n”. Por lo tanto, se
concluye que para obtener la precisión requerida se deben establecer 22 parcelas; como ya se
levantaron 10 parcelas en el pre-muestreo solamente nos hacen falta 12 parcelas.

IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 32

4.4. DEFINICIÓN DEL MÉTODO DE MUESTREO

Una vez determinado el número de parcelas a medir, el paso siguiente es distribuir la muestra
de parcelas en el bosque. Las parcelas se pueden distribuir en forma aleatoria, en forma
sistemática, en forma estratificada y por conglomerados.

En este paso se requiere analizar las diferentes opciones de muestreo y definir cuál es la que
permite minimizar los costos del inventario y maximizar la precisión de las estimaciones.

Los costos de un inventario están determinados principalmente por los tiempos de


desplazamiento en el campo y los tiempos efectivos de medición. En este sentido, se debe dar
preferencia a diseños de muestreo con una buena distribución de la muestra, de tal forma que se
reduzcan el tiempo de desplazamiento y el de ubicación de las unidades de muestreo en el
campo, ya que estos son, en realidad, tiempos no efectivos.

4.4.1. MUESTREO ALEATORIO

En este diseño las unidades muestrales son seleccionadas aleatoriamente, sin que la elección de
una influya en las otras. El muestreo aleatorio es muy útil cuando el parámetro que se quiere
estimar se manifiesta de manera homogénea en la población.

El análisis estadístico del inventario forestal se realiza utilizando las fórmulas que se presentan
en las páginas 10, 11 y 12 de este documento.

Entre las desventajas de este diseño está la inseguridad para establecer la ubicación exacta de
las muestras en el bosque, los altos costos por accesibilidad, genera poca representatividad de la
muestra cuando se evalúan poblaciones heterogéneas, y el hecho de no proporcionar datos
confiables acerca de la configuración y topografía del bosque. (Catie, 2002; Ferreira, 1994)

El procedimiento para distribuir las parcelas en gabinete se resume así:

a. Elaborar mapa base


b. Definir forma y tamaño de la parcela de muestreo
c. Delimitar el área de cada unidad de muestreo (utilizando MapMaker o ArcView)
d. Enumerar parcelas de muestreo (sólo parcelas completas)
e. Seleccionar aleatoriamente las parcelas de muestreo (selección sin reemplazo)

IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 33

Ejemplo 4.3. En un bosque de coníferas se hizo un inventario


forestal, distribuyendo al azar 10 parcelas en un área de 52.3
hectáreas. Las parcelas establecidas fueron de forma circular y
de 1000 m². La distribución de las parcelas se observa en la
figura.

En la figura, nótese que cada cuadrito corresponde al área de una


posible parcela. Se numeraron aquellas parcelas que entraban
completamente en los límites del polígono, por lo tanto, sólo
estas parcelas entraron al sorteo.

1.4.2 MUESTREO SISTEMÁTICO

El muestreo sistemático es el más utilizado en inventarios forestales de bosques naturales


tropicales, a pesar de que en teoría este tipo de muestreo no está basado en las leyes de la
probabilidad, lo que no permite calcular con precisión el error de muestreo. Sin embargo, se
pueden introducir procedimientos especiales que validan el cómputo del error de muestreo, por
ejemplo, la selección al azar de la primera muestra, parcela o transecto.

En la práctica casi todos los inventarios realizados con muestreo sistemático son analizados
utilizando las fórmulas del muestreo al azar (ver páginas 10, 11 y 12).

Entre las ventajas del muestreo sistemático están la ubicación fácil de las parcelas, el costo del
trabajo de campo es menor en comparación del método aleatorio, existe una distribución
regular de las parcelas sobre toda la población inventariada, y se tiene la posibilidad de dibujar
las características del terreno.

El modelo sistemático de uso más común es por líneas, que consiste en definir líneas de
muestreo equidistantes sobre las cuales se ubican las parcelas también equidistantes. Si la
separación entre líneas es igual a la separación entre parcelas se llama distribución cuadrada y
si la separación entre líneas es diferente a la separación entre parcelas, la distribución es
rectangular. Generalmente en la distribución rectangular la separación entre líneas es mayor
que la separación entre parcelas sobre la línea. (Catie, 2002; Carrera, 1996; Ferreira, 1994)

IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 34

El espaciamiento entre líneas de muestreo y entre parcelas, se determina con las fórmulas:

Tp
L (4-6)
BI

Tp
S (4-7)
I

Am
Im  (4-8)
At

Tp  Np
Am  (4-9)
10000

Donde:
L = distancia entre líneas de muestreo en una distribución rectangular (m)
S = distancia entre líneas de muestreo y parcelas en una distribución cuadrada (m)
Tp = tamaño de la parcela (m²)
B = distancia entre parcelas en metros (valor que debe fijarse previamente, mínimo 50 m)
I = intensidad de muestreo (fracción)
Am = área a muestrear (has)
Np = número de parcelas
At = área total del bosque (hectáreas)

El procedimiento para distribuir las parcelas en el mapa se resume así:


a. Elaborar mapa base
b. Definir forma y tamaño de la parcela de muestreo
c. Definir la orientación de las líneas de muestreo
d. Determinar la separación entre líneas de muestreo y entre parcelas
e. Elegir al azar la primera parcela (a partir de ésta todas serán ubicadas sistemáticamente)
f. Dibujar en el mapa las líneas de muestreo y las parcelas

IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 35

Ejemplo 4.4. En un inventario forestal de un bosque de coníferas se distribuirán en forma


sistemática 10 parcelas de 1000 m2 sobre un área de 52.3 hectáreas. Si la distancia entre
parcelas es de 100 metros, ¿determinar el espaciamiento entre líneas de muestreo en una
distribución rectangular?

Utilizando la fórmula 4-9, el área a muestrear es igual a:


1000m²  10
Am 
10000
Am = 1.0 has

Luego, utilizando la fórmula 4-8, la intensidad de muestreo es igual a:


1.0has
Im 
52.3has
Im = 0.01912

Finalmente, utilizando la fórmula 4-6, el distanciamiento entre líneas de muestreo es igual a:


1000m²
L
100m  0.01912
L = 523 m

Es importante mencionar que la fórmula 4-6 proporciona un dato aproximado, el cual podemos
modificar a conveniencia; sin embargo, en la medida de lo posible el valor final que decidamos
utilizar debe acercarse al valor obtenido por la fórmula.

En la figura se presenta la distribución de parcelas de nuestro ejemplo.


Nótese que todas las parcelas están ubicadas a la misma distancia, es
decir, a cada 100 metros. Asimismo, se decidió que la distancia entre
líneas de muestreo sería de 500 metros.

Es importante mencionar que entre más líneas de muestreo


establezcamos, mayor cobertura del área tendremos; sin embargo, esto
ocasiona mayores costos del inventario, ya que necesariamente se
debe incrementar la distancia entre parcelas de muestreo.

IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 36

1.4.3 MUESTREO ESTRATIFICADO

El muestreo estratificado consiste en dividir el bosque en subunidades más homogéneas


denominadas “estratos” y efectuar un muestreo independiente en cada estrato.

Un estrato corresponde a una superficie boscosa con una o varias características en común
desde el punto de vista fisiográfico (bosque de montaña, de colina, de llanura, etc.), florístico
(dominancia de ciertas especies) o estructural (alto, medio, bajo). La experiencia en América
Central es que una estratificación que combine características florísticas con características del
suelo (pendiente, drenaje, humedad y pH) resulta muy funcional.

Es importante que los inventarios forestales detecten los diferentes estratos y que los resultados
de las existencias volumétricas se expresen a nivel de estrato. No obstante, existen áreas
boscosas en donde no se detectan diferencias que permitan la estratificación. Tampoco es
práctico tener más de cinco estratos diferentes en un inventario forestal.

Para aplicar el muestreo estratificado se requiere de un conocimiento del bosque a evaluar,


referente a su variabilidad. La estratificación puede hacerse a priori o a posteriori, si se hace
antes o después de la realización del inventario. La estratificación es eficiente si la variación
dentro de los estratos es pequeña y entre los estratos es grande.

Los diferentes estratos pueden ser de forma y de superficie variable, y se constituyen


únicamente de unidades homogéneas en cuanto al criterio de estratificación elegido y no
necesariamente geográficamente continuas.

En cada estrato el muestreo puede ser aleatorio o sistemático, y se emplean los mismos
procedimientos de estos muestreos para distribuir las parcelas en el mapa. El número de
unidades de muestreo en cada estrato puede ser proporcional a la superficie o a la variabilidad
del mismo. En el primer caso, la intensidad de muestreo es igual en cada estrato, y en el
segundo, se trabaja con base en la variabilidad del bosque.

Si la intensidad de muestreo no es igual para todos los estratos, la distancia entre líneas de
muestreo y parcelas debe ser ajustada de acuerdo con la intensidad de muestreo en cada estrato.
De preferencia, las líneas de muestreo deben tener la misma orientación, aunque existen casos
en donde por la forma y topografía que tiene el bosque, es necesario darles diferente orientación
a las líneas de muestreo.

IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 37

Entre las ventajas del muestreo estratificado están:


 Mejora la representatividad, debido a que agrupa a individuos o poblaciones similares.
 Aplicable a grandes extensiones y a agrupaciones de trozos separados de bosque.
 Permite evaluar las masas forestales tropicales con alto grado de variabilidad.

Una desventaja de este método se da en poblaciones con gran variabilidad, donde los estratos
muchas veces resultan muy pequeños en extensión, por lo que no se puede hacer un muestreo
de pequeña intensidad dentro de cada estrato. (Catie, 2004; Ferreira, 1994; Godínez, 1998a)

Ejemplo 4.5. Se hizo un inventario forestal en un bosque de coníferas, en un área de 52.3


hectáreas. El método de muestreo utilizado fue el estratificado sistemático. Se utilizo la
densidad del arbolado como criterio de estratificación.

En el estrato ralo se ubicaron 9 parcelas en un área de


15.2 hectáreas, y distanciadas a cada 50 metros.

En el estrato denso se ubicaron 8 parcelas sobre un área


de 37.1 hectáreas, y distanciadas a cada 75 metros.

En ambos estratos, las parcelas fueron de forma circular


y de 1000 m2.

Observe que, por la forma del bosque, la orientación de


las líneas de muestreo no fue la misma.

1.4.4 MUESTREO POR CONGLOMERADOS

Debido a las fracciones de muestreo tan bajas que se utilizan en inventarios forestales, la
cantidad de tiempo requerida para movilizarse de una unidad de muestreo a otra es
considerable, cuando es comparado contra el tiempo real de medición. Por esta razón, la
medición de parcelas en conglomerados es mucho más eficiente, dado que se reducen los
tiempos de traslados entre unidades de muestreo.

El diseño por conglomerados es muy utilizado cuando no es posible o es demasiado costoso


construir una lista o mapa con todas las posibles parcelas en el bosque. También, se emplea en

IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 38

bosques donde las condiciones del terreno dificultan el caminamiento para establecer las
unidades de muestreo.

En un muestreo por conglomerados, la población se divide en conglomerados o unidades


primarias, cada conglomerado está dividido en unidades más pequeñas o unidades secundarias.
En un muestreo por conglomerados en dos etapas, se toma una muestra de unidades primarias
y, luego, dentro de cada unidad primaria seleccionada, se toma una submuestra de unidades
secundarias. Los conglomerados pueden seleccionarse aleatoriamente, o pueden estar en una
población estratificada.

La ventaja de un muestreo por conglomerados es que las mediciones se concentran en los


conglomerados o unidades primarias. Para obtener estimaciones del promedio y error estándar
no sesgado, se deben seleccionar las unidades primarias aleatoriamente. Sin embargo, es
común en los inventarios forestales que las unidades primarias se seleccionen aleatoriamente y
que el muestreo de las unidades secundarias se haga sistemáticamente dentro del conglomerado.

El muestreo en conglomerados más frecuentemente utilizado en estudios biológicos y forestales


es el muestreo en dos etapas o muestreo bietápico. En este diseño de “M” conglomerados, se
escogen aleatoria o sistemáticamente “m” conglomerados. Luego, en cada conglomerado
seleccionado en la primera etapa, se escogen aleatoria o sistemáticamente “n” unidades
secundarias de “N” existentes en el conglomerado, en donde la suma de las “N” es igual al
número total de unidades secundarias en la población. (Catie, 2002)

El procedimiento para distribuir las parcelas en el mapa se resume así:

1. Elaborar mapa base


2. Definir forma y tamaño de las unidades primarias de muestreo
3. Definir forma y tamaño de las unidades secundarias de muestreo
4. Elaborar mapa con unidades primarias de muestreo
5. Seleccionar aleatoria o sistemáticamente las unidades primarias de muestreo
6. Elaborar mapa con unidades secundarias de muestreo (sólo de las unidades primarias
seleccionadas)
7. Seleccionar aleatoria o sistemáticamente las unidades secundarias de muestreo

IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 39

Ejemplo 4.6. Un bosque de coníferas de 52.3 hectáreas, fue dividido en 34 bloques o unidades
primarias (M) de 1 hectárea cada una. Los bloques o unidades primarias, están conformados
por 20 parcelas cuadradas (N) de 500 m2 cada una.

Aleatoriamente, se seleccionaron 2
unidades primarias (m); y en cada
unidad primaria, se seleccionaron
aleatoriamente 5 unidades secundarias
(n). En la figura se presenta la
distribución de unidades primarias y
secundarias.

En la figura, nótese que únicamente


se tomaron en cuenta las unidades
primarias de muestreo que entraban
completamente en los límites del
polígono, por lo tanto, sólo estas
unidades entraron al sorteo.

Asimismo, se observa que las


unidades secundarias tienen una
distribución aleatoria en cada unidad primaria seleccionada.

1.4.5 MUESTREO CON RELASCOPIO

Este método se conoce también como muestreo con parcelas de tamaño variable, realizado con
la ayuda de un instrumento llamado relascópio.

La unidad de muestreo es un punto desde donde y con un giro de 360 grados se cuentan todos
los árboles que a la altura del DAP son iguales o mayores que al ángulo horizontal que
determine el relascópio.

El método fue inventado por el forestal Austriaco Dr. Walter Bitterlich en 1947, y permite
estimar directamente el área basal por hectárea.

IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 40

a. Principios teóricos del Relascopio

En el muestreo con parcelas de tamaño variable, el radio de la parcela varía en función del
diámetro del árbol. Cada árbol tiene su propia parcela, y el área de la parcela es directamente
proporcional al área basal del diámetro del árbol.

En la condición del árbol límite, es decir a la máxima distancia para que sea muestreado, la
razón del diámetro del árbol/radio de la parcela es una constante.

En la parcela de tamaño fijo (1000 m2 por ejemplo) el área basal por hectárea se obtiene
calculando el área basal de cada árbol y la suma de las áreas basales se multiplica, por el factor
de conversión que es 10 y que resulta de dividir 10,000m2 (1 ha) entre 1000 m2 (tamaño de la
parcela).En la parcela de tamaño variable el área basal por hectárea que representa cada árbol se
llama factor del área basal (F.A.B.) y se obtiene multiplicando el área basal del árbol por la
razón 10,000/área de la parcela o sea:

4.5. DEFINICIÓN DE LAS VARIABLES A MEDIR

En esta etapa se deben identificar las variables a medir en campo para generar la información
necesaria para cumplir con los objetivos del inventario forestal.

Básicamente se deben identificar las variables que se medirán en el terreno y las variables que
se medirán en los árboles, lo cual dependerá del tipo de inventario a realizar (Catie, 2002). Lo
relacionado a la medición de estas variables se discute en la unidad 5 de este documento.

4.6. DISEÑO Y ELABORACIÓN DE FORMULARIOS DE CAMPO

Una vez que se han definido las variables a evaluar, se deben diseñar los formularios de campo
para la recopilación de información.

IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 41

El registro de las mediciones del inventario se hace en formularios que deben estar preparados
antes del inicio del trabajo de campo. La elaboración de los formularios debe considerarse
como una de las fases de planificación, que ha de ser precedida por algunas decisiones
fundamentales, especialmente lo relativo a la información que ha de contener el inventario.

El tipo de formulario depende de la información a obtenerse, la que estará definida por los
objetivos del inventario. El formulario debe ser simple, pero con espacio suficiente para
recoger toda la información que se necesita (es preferible un tamaño pequeño).

No existe un formulario u hoja de registro único para anotar las observaciones o mediciones
que se toman en el campo. La forma de registrar la información cambia según si el bosque es
de una especie ó de varias especies. Para una sola especie es muy común registrar las
mediciones agrupándolas en clases diamétricas. Para varias especies, existen distintas formas
de registrar la información.

Cuando el procesamiento de la información será electrónico, toda o la mayor parte de la


información a registrar en la boleta deberá hacerse en forma de códigos numéricos o
alfabéticos, para lo cual será necesario elaborar una clave de dichos códigos. (Ferreira, 1994)

4.7. ELABORACIÓN DE MANUAL DE PROCEDIMIENTOS

Para facilitar la recopilación de información, es conveniente que antes de iniciar el trabajo de


campo se tenga elaborado un manual de procedimientos que incluya por ejemplo:
 Descripción del diseño de muestreo
 Llenado de formularios de campo
 Medición de distancias
 Localización y delimitación de unidades de muestreo
 Medición de variables y utilización de instrumentos
 Identificación de especies y recolección de muestras
 Procedimiento general para procesar la información. (Catie, 2002)

IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 42

4.8. ORGANIZACIÓN Y CAPACITACIÓN DEL EQUIPO DE TRABAJO

La toma de los datos de campo es una de las etapas más importantes de un inventario forestal,
pues proporciona la información básica para hacer cálculos y sacar conclusiones. La calidad de
la información es dependiente de la calidad del personal de campo.

La capacitación y organización del personal de campo es una actividad que debe hacerse
siempre antes de iniciar el trabajo de terreno, y es la única manera de asegurarse que el personal
sabe lo que está haciendo, y si lo sabe aumenta la posibilidad de hacerlo bien.

Cada equipo de trabajo como mínimo puede estar integrado por:

 Un jefe de equipo, quien deberá ser un técnico forestal con experiencia en inventarios, y
cuyas funciones son: registrar las mediciones, controlar directamente las mediciones
(especialmente la altura), indicar al ayudante la dirección de la línea que da la brújula.

 Un medidor, quien será el responsable de medir distancias, el DAP y altura de los árboles,
contabilizar la regeneración natural, y otras mediciones.
 Un ayudante, quien deberá conocer el bosque y cuyas funciones son: brechar, ayudar en el
trazo de la parcela y en la medición de distancias. (Ferreira, 1990)

En esta etapa, se deben definir los procedimientos para realizar una evaluación de la calidad del
trabajo de campo. Esto deberá ser realizado por la persona responsable del inventario.

4.9. PROBLEMAS COMUNES POR UNA PLANIFICACIÓN DEFICIENTE

En la planeación y ejecución del inventario forestal se encuentran algunos problemas comunes,


por ejemplo: mapas, hojas cartográficas y fotografías aéreas desactualizadas; equipo en mal
estado, o falta de equipo; logística inadecuada (campamento con deficiencias de alojamiento,
alimentación y ubicación); salarios, garantías y trato inadecuado.

Los problemas que podemos encontrar en un inventario forestal, dan lugar a dos tipos de
errores: errores no muestrales (sesgos) y errores muestrales (aleatorios). La optimización de un
inventario consiste en minimizar los errores no muestrales y maximizar la eficiencia muestral.
Para ello, es necesario individualizar y cuantificar las fuentes de error y desarrollar los
procedimientos adecuados para minimizarlos. Esto se discute a continuación.

IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 43

A. ERRORES NO MUESTRALES

Errores de diseño:
 Distribución subjetiva de las unidades de la muestra
 Muestra no representativa por localización o concentración de unidades

Los mapas y los sistemas de información geográfica (SIG) ayudan a diseñar muestras más
representativas y a minimizar este tipo de errores.

Errores operacionales:
 Localización viciada de las unidades de muestreo
 Delimitación imperfecta de las unidades de muestreo
 Errores de medición de los árboles

La minimización de este tipo de errores se logra mediante la capacitación del personal


operativo y con un adecuado control de las operaciones.

Errores originados por el modelo dendrométrico:

Los modelos dendrométricos simples, como el requerido para estimar la densidad o altura
media de un rodal, no generan errores de importancia. En cambio, los modelos desarrollados
para estimar un variado número de productos rollizos de diferentes calidades, sanidades y
dimensiones, basados en modelos fustales y simuladores de trozado, pueden producir
estimaciones altamente sesgadas.

Errores de procesamiento de datos:


 Errores de codificación y registro de datos
 Errores de transferencia de datos
 Errores de procesamiento y análisis

El chequeo de archivos electrónicos y el control de la consistencia de resultados del análisis


disminuyen los errores de procedimiento.

Errores en la determinación de la superficie:

 Cartografía defectuosa
 Límites inadecuados que provocan la exclusión de superficies
 Apreciación sesgada de la superficie de bosque

IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 44

B. ERRORES MUESTRALES

Errores de diseño:
 Elección de diseños muestrales no apropiados para el tipo de inventario forestal.

Errores originados en modelos de simulación del muestreo:


Los modelos de simulación mal planteados, con deficiencias e información incorrecta generan
errores de importancia.

IV unidad
UNIDAD V

EJECUCIÓN DE
INVENTARIOS FORESTALES

OBJETIVOS DE LA UNIDAD

Al finalizar la unidad, los estudiantes estarán en capacidad de:

1. Decidir en qué situaciones se debe cambiar la ubicación original de una parcela en un


inventario forestal.

2. Recopilar los datos de identificación, del terreno, dendrométricos y silvícolas en un


inventario forestal.
Manual de Inventarios Forestales 46

5.1. UBICACIÓN Y DELIMITACIÓN DE PARCELAS

Después de haber planificado todos los aspectos relacionados a la ejecución del inventario
forestal, se procede a la toma de datos de campo, que constituye la segunda operación
importante de un inventario forestal. En un inventario forestal las mediciones se inician con la
ubicación y delimitación de la parcela.

A. UBICACIÓN

La ubicación inicial del centro o vértice de la parcela se hace con la ayuda de instrumentos
como la brújula, el clinómetro, la cinta métrica, el GPS, etc.

El centro o vértice de la parcela se sitúa en el terreno en una ubicación previamente


determinada en la planificación del inventario y nunca se desplazará, excepto cuando el
perímetro de la parcela incluye o se limita a zonas forestales no productivas, como por ejemplo:

- Carreteras principales o secundarias


- Áreas agrícolas y residenciales
- Ríos principales
- Barrancos abruptos, etc.

Entre las condiciones que no influyen en el desplazamiento del centro o vértice de la parcela
podemos mencionar los taludes, rondas corta fuego, pequeños claros de bosque, árboles
tumbados por el viento, pequeños ríos, entre otros.

Cuando el centro o vértice de la parcela se sitúa fuera de los limites del bosque se elimina la
parcela en ese sitio, pudiéndola ubicar en otra parte del bosque. Es preferible no medir que
registrar medidas falsas, imaginadas o imprecisas.

B. DELIMITACIÓN

El centro o vértice de la parcela deberá marcarse con una estaca “grande” y desde este punto se
procede a trazar los límites de la parcela, de acuerdo a la forma y tamaño que se han definido
previamente. (Fundap, 1993)

En el trazo de la parcela se deben compensar aquellas distancias donde existan pendientes


mayores de 5º. La compensación de distancias puede hacerse con la fórmula siguiente:

V unidad
Manual de Inventarios Forestales 47

DH
DC  (5-1)
Cos

Donde:
DC = distancia compensada
DH = distancia horizontal
Cos α = coseno de los grados de pendiente del terreno

5.2. RECOLECCIÓN DE DATOS DE IDENTIFICACIÓN

Los datos de identificación se anotan en una boleta de campo previamente elaborada. El olvido
de uno de estos datos puede obligar a no tomar en cuenta la parcela en los cálculos, por lo que
la anotación de la información debe hacerse con cuidado. Los datos de identificación pueden
incluir los siguientes:

- Estrato. Numero de identificación del estrato, dado por el plan de inventario.

- Rodal. Numero de identificación del rodal, dado por el plan de inventario.

- Parcela. Número de identificación de la parcela, dado por el plan de inventario.

- Fecha. Deberá anotarse el día, mes y año de la medición; estos datos permitirán verificar si
no hay mala numeración de las parcelas y saber también cuántos días tomó la fase de campo
del inventario.

- Inicio y final de las operaciones. Tiempo necesario entre la llegada del caminamiento al
centro o vértice de la parcela y el final de las operaciones en la parcela (separar estos dos
tiempos). Esta información servirá para evaluar el rendimiento de los equipos de trabajo.

- Operadores. Se debe anotar el número de personas que tomaron los datos en la parcela, y
principalmente el nombre del o las personas que anotaron la información en los formularios.
(Ferreira, 1994; Fundap, 1993)

5.3. RECOLECCIÓN DE DATOS DEL TERRENO

La recopilación de información del terreno permitirá tener información auxiliar para planificar
de mejor manera el manejo del bosque. Las variables que se recopilan del terreno pueden ser
las siguientes.

V unidad
Manual de Inventarios Forestales 48

- Pendiente. Se refiere al grado de inclinación de los terrenos expresado en grados o


porcentaje. El conocimiento de la pendiente es indispensable para la delimitación de la
parcela. Cuando la pendiente es uniforme, basta con una sola medición; en aquellos sitios
donde hay diferentes pendientes, se aconseja tomar las medidas de pendiente necesarias y
calcular un promedio. Los procesos para calcular la pendiente de un terreno se utilizan las
formulas siguientes:

DV
P(%)  *100 (5-2)
DH

P(%)  tan( ) *100 (5-3)

P( grados)  tan 1  P% / 100 (5-4)

Donde:
P(%)= pendiente en porcentaje
DV= distancia vertical
DH= distancia horizontal
= ángulo en grados

- Textura del suelo. En el terreno, se puede apreciar la textura del suelo por el tacto, con un
poco de experiencia. Las arenas empiezan a raspar entre los dedos a partir de 0.1 mm. La
arcilla se distingue del limo por amasamiento: un poco de tierra húmeda que se frota entre
los dedos se desmorona cuando es limo, no cuando es arcilla.
La textura se puede clasificar en los siguientes grupos: franco limoso, arcilloso, areno-
arcilloso, arenoso, grava y rocoso. El conocimiento de la textura del suelo puede ser de
suma utilidad para planificar las actividades de aprovechamiento del bosque.

- Exposición. Es la dirección respecto al norte de la pendiente de la parcela. Se distinguen


las exposiciones siguientes: terreno plano, norte, noreste, noroeste, sur, sureste, suroeste,
este y oeste. Esta información puede ser útil en la comparación de crecimientos de acuerdo
a las distintas exposiciones que existan en el bosque.

- Altitud. Puede tomarse con un altímetro o con un GPS. Esta información puede ser útil
para la elaboración de curvas a nivel, especialmente cuando se esta utilizando el método de
muestreo sistemático.

V unidad
Manual de Inventarios Forestales 49

- Fisiografía. Es la situación en el centro de la parcela respecto al relieve general (± 100 m a


la redonda) y no al microrelieve de la parcela. Se distinguen las características fisiográficas
siguientes: lomo de colina, ladera alta, ladera media, pie de monte, valle, terraza, depresión.

- Erosión. La erosión es la acción de varios agentes climáticos y tiene como efecto la


desaparición progresiva de la capa superficial del suelo. Se indica la presencia y el tipo de
erosión presente en la parcela y alrededores (± 100 m a la redonda). En el campo se pueden
encontrar los tipos de erosión siguientes: sin erosión, erosión laminar, erosión en surcos y
erosión en cárcavas. (Ferreira, 1994; Fundap, 1993)

5.4. RECOLECCIÓN DE DATOS DENDROMÉTRICOS

La recolección de los datos dendrométricos constituye lo esencial del trabajo a realizar en una
parcela. En una parcela se miden los árboles que están presentes en la misma, sin embargo,
existen casos en donde no se sabe exactamente si un árbol entra o no en la parcela. En esta
situación, se recomienda utilizar los criterios que se presentan en la figura siguiente:

Figura 1. Esquema para determinar si un árbol está adentro o no de la parcela.

Las mediciones dendrométricas más comunes que se realizan en una parcela son el diámetro, la
altura, incrementos y el estado físico del arbolado. Estos aspectos se discuten a continuación:

5.4.1. MEDICIÓN DEL DIÁMETRO

La medición del diámetro está normalizado a una altura de 1.3 metros sobre el nivel del suelo,
el cual se conoce como DAP (diámetro a la altura del pecho) o diámetro normal.

En la parcela se mide el DAP con corteza de todos los árboles. Generalmente, el diámetro de
referencia mínimo a medir es 10 cms, pero puede ser diferente según el objetivo del inventario,
por ejemplo, en inventarios con fines de carbono se empieza las mediciones a partir de 5 cms.

V unidad
Manual de Inventarios Forestales 50

La medición se hace con cinta díamétrica, forcípula u otro instrumento adecuado al diámetro de
los árboles. (Ferreira, 1994; Fundap, 1993)

5.4.2. MEDICIÓN DEL GROSOR DE CORTEZA

La medición del grosor de la corteza sirve para establecer una relación (lineal) entre el diámetro
con corteza y diámetro sin corteza. Si la ecuación de volumen a emplear en el inventario usa el
DAP sin corteza (lo más común es usar el DAP con corteza), necesariamente debemos conocer
el espesor de corteza.

La medición de corteza en árboles en pie se hace a la altura del DAP, y generalmente se utilizan
los árboles a los que se les mide la altura (árboles tipo).

Se requiere mucho cuidado y práctica para medir la corteza, se recomienda hacer 4 mediciones
en cruz con el “medidor de corteza” y sacar un promedio. (Ferreira, 1994; Fundap, 1993)

5.4.3. MEDICIÓN DE ALTURAS

La altura es importante para el uso de tablas de volumen y en algunas ocasiones, puede servir
para indicar la productividad de un sitio. Las mediciones de DAP y su correspondiente altura,
se usan para establecer una relación local de DAP y altura.

La medición de la altura se puede hacer con hipsómetro o clinómetro y se recomienda, siempre


que las condiciones de visibilidad lo permitan, medirla con exactitud y no estimarla.

Para las especies coníferas se mide la altura total del árbol, desde la base hasta el extremo de la
copa. Para las especies latifoliadas de preferencia se mide la altura del fuste, desde la base
hasta el punto de copa (inicio de las ramas más gruesas). La altura se puede medir también en
número de trozas (generalmente de 5 m) que pueden salir de un árbol, cuando se utiliza el
hipsómetro de Merritt principalmente.

En los bosques de coníferas de Guatemala, usualmente se miden las alturas de los 2 ó 3 árboles
más cercanos al centro de la parcela (árboles tipo). Cuando el rodal es muy heterogéneo, se
obtienen por lo menos dos alturas por especie importante. Otro criterio que se emplea, consiste
en medir un árbol por cada 100 m2 de parcela.

En los bosques latifoliados de Petén se mide la altura comercial, la que esta dada por el largo de
fuste aprovechable sin defectos, estimada en metros. Si bien, el uso de instrumentos para su
medición da resultados más precisos, implica un mayor tiempo por lo que es poco práctico. No
obstante, a veces se utiliza hipsómetro para hacer algunas comprobaciones y así calibrar mejor
la estimación ocular. (Carrera, 1996; Ferreira, 1994; Fundap, 1993)
V unidad
Manual de Inventarios Forestales 51

5.4.4. MEDICIÓN DEL INCREMENTO DIAMETRAL Y EDAD

En un inventario forestal la medición del incremento diametral y edad, generalmente sólo es


posible en las especies coníferas, para lo cual se emplean los mismos árboles de la parcela a los
que se les midió la altura (árboles tipo).

Para la medición del incremento diametral y la edad del árbol se utiliza el Barreno de Pressler,
que es una barra metálica hueca con uno de sus extremos afilado que se penetra en el árbol para
extraer una muestra cilíndrica de madera (tarugo).

Aunque las predicciones de crecimiento diametral a partir de tarugos pueden ser bastante
buenas, la técnica no proporcionará información confiable acerca del crecimiento del bosque en
su conjunto, especialmente lo referido a la mortalidad e ingreso de nuevos individuos.

La medición se hace en los “árboles tipo” a la altura del DAP, perpendicular al eje vertical del
árbol y barrenando siempre en diferentes direcciones (puntos cardinales) para obtener un buen
promedio del crecimiento.

En la obtención de la muestra de tarugos, se recomienda estratificar y obtener el número de


tarugos en forma proporcional a la contribución de cada clase diamétrica al crecimiento en
volumen. El error en la determinación del crecimiento depende básicamente del número de
tarugos extraídos, por lo cual se recomienda un número entre 50 y 100 tarugos.

La muestra extraída (tarugo) se coloca en un recipiente donde no se dañe o deforme, con la


indicación de los números del árbol muestreado y de la parcela. La medición de los anillos se
recomienda hacerla en oficina, porque en el campo no existen las condiciones suficientemente
favorables. Esta técnica tiene la desventaja de estropear el árbol y de provocar podredumbres y
coloraciones. Se recomienda tapar el hoyo con mastic y/o un tarugo de madera desinfectado.

Antes del examen de las muestras, se tomará el cuidado de remojarlas en agua durante una hora
para que retomen sus dimensiones iniciales. Se facilitará las observaciones si se cepilla una
cara con una cuchilla de afeitar. En la muestra se hacen tres mediciones: a) largo de los últimos
5 anillos, b) largo total y c) número total de anillos del tarugo.

Existe correlación entre el incremento diametral y el DAP. En rodales coetáneos la relación es


una línea recta con pendiente positiva o negativa según la edad del bosque. En rodales
disétaneos la relación es una curva que se representa por una parábola de segundo grado.

Los datos obtenidos funcionan bien para proyecciones del crecimiento del DAP, área basal y
volumen en períodos cortos no mayores de 5 años. (Ferreira, 1994; Fundap, 1993)

V unidad
Manual de Inventarios Forestales 52

5.4.5. MEDICIÓN DE LA CALIDAD DE FUSTES

La calidad del fuste se puede medir de dos formas, siendo éstas:

 Estado físico. Árboles rectos, sinuosos, inclinados, bifurcados, etc.


 Posición jerárquica. Árboles dominantes, codominantes, intermedios y suprimidos.

Esta clasificación de los árboles servirá para determinar la estrategia de intervención en las
operaciones silviculturales a aplicar, especialmente en los raleos.

En los bosques latifoliados de Petén, la calidad del fuste se evalúa en todos los árboles medidos,
cuantificando los “defectos visibles” en forma porcentual. (Carrera, 1996; Fundap, 1993)

5.5. RECOLECCIÓN DE DATOS SILVÍCOLAS

Los datos silvícolas son utilizados para analizar sobre el tratamiento que se aplicará al rodal o al
bosque que se está inventariando. Los datos silvícolas que más se evalúan son los siguientes.

5.5.1. ESTADO FITOSANITARIO

La detección de plagas, enfermedades o daños diversos determinará la urgencia de intervención


del rodal o de la parte del bosque. La detección de daños ayudará a fijar la estrategia que debe
adoptar el dueño y los vecinos del bosque.

El estado fitosanitario del árbol puede evaluarse así:


- Sano
- Daños por gorgojo
- Daños por incendio
- Daños por ocoteo
- Daños por descortezamiento
- Daños por pastoreo
- Daños por aprovechamientos, etc.

Además de identificar el estado fitosanitario, también se puede especificar el grado de daño que
posee el árbol, en categorías como: daño leve, daño severo o árbol muerto.

En el procesamiento de la información, se define el estado fitosanitario general del rodal y se


obtiene un porcentaje de los árboles afectados por uno o varios daños.

V unidad
Manual de Inventarios Forestales 53

Esta información se utiliza para hablar con el dueño, los guardabosques y los vecinos del
bosque, para descubrir cuáles son los riesgos de incendio, de presencia de plagas en los bosques
vecinos, si la enfermedad o la plaga es endémica o si acaba de aparecer, si rebaños vienen a
pastorear dentro del bosque, etc. (Ferreira, 1994; Fundap, 1993)

5.5.2. REGENERACIÓN NATURAL

El conteo de la regeneración da una idea de la dinámica de regeneración del rodal y apoyará o


descartará el uso de la regeneración natural en las cortas de aprovechamiento.

La regeneración natural arbórea generalmente se mide en una subparcela, dentro de la parcela


principal.

El tamaño de la subparcela depende de la variabilidad de la regeneración. Si la regeneración es


muy homogénea, el área puede reducirse hasta 4 m2. Por el contrario, si la regeneración se
encuentra en parches o en individuos muy dispersos, el área puede subir a 100 ó 200 m 2. El
tamaño más común es 50 m2.

La regeneración natural se clasifica de diferentes maneras. A continuación, se presentan dos de


las clasificaciones más comunes:

a) Para los bosques de la región Occidental de Guatemala puede utilizarse la clasificación


siguiente:

 Brinzal: individuo entre 0.3 a 1.5 m de altura


 Latizal bajo: individuo mayor de 1.5 m de altura hasta 4.9 cms de DAP
 Latizal alto: individuo entre 5.0 a 9.9 cms de DAP

b) Para los bosques latifoliados del Petén se utiliza la clasificación siguiente:

 Brinzal: individuo mayor de 30 cms de altura hasta 4.9 cms de DAP


 Latizal: individuo entre 5.0 a 9.9 cms de DAP. (Beek et al., 1992; Carrera, 1996)

5.5.3. SOTOBOSQUE

El sotobosque influye en la extracción de los productos de un aprovechamiento forestal y en la


regeneración natural o la repoblación artificial. Su diversidad de especies es también un
indicador de la fertilidad o de las condiciones de crecimiento del lugar.

V unidad
Manual de Inventarios Forestales 54

Su ausencia puede provocar erosión y muchas veces indica una densidad excesiva del dosel
arbóreo (necesidad de una intervención).

La medición del estrato arbustivo se hace proyectando las copas sobre el suelo, y con base en
esto puede definirse la clasificación siguiente:
 Estrato denso (entre 75% y 100% de ocupación de la superficie)
 Estrato de densidad media (entre 25% y 75% de ocupación)
 Estrato ralo (con menos de 25% de ocupación)
 Estrato ausente. (Fundap, 1993)

V unidad
UNIDAD VI

PROCESAMIENTO DE DATOS DE
INVENTARIOS FORESTALES

OBJETIVOS DE LA UNIDAD

Al finalizar la unidad, los estudiantes estarán en capacidad de:

1. Obtener las alturas medias por especie y estrato de un bosque inventariado.

2. Obtener los volúmenes por parcela y hectárea, y a partir de estos datos realizar un análisis
3. de varianza de las parcelas inventariadas.

4. Estimar el número de árboles, el área basal y el volumen por hectárea de un bosque


inventariado.

5. Obtener el estado físico y fitosanitario de un bosque inventariado.

6. Estimar el número de individuos por hectárea de la regeneración natural.

7. Elaborar tablas de resumen de la información procesada en un inventario forestal.


Manual de Inventarios Forestales 56

6.1. INTRODUCCIÓN

El procesamiento de los datos de un inventario forestal, condensa y transforma los datos


tomados en el campo en algunos valores más fáciles de interpretar y en unidades directamente
utilizables para el plan de manejo.

Para procesar la información de un inventario forestal existe la alternativa de un procesamiento


electrónico, empleando programas de computación como el MIRASILV, DATACONIF,
EXCEL, etc. Que se justifica para inventarios en grandes extensiones de bosques

La otra forma de procesar datos es el procedimiento manual, el cual puede emplearse cuando
las parcelas son pocas y cuando no se tiene acceso a utilizar una computadora.

El procesamiento de los datos se hace en varias etapas y niveles: primero al nivel de parcela,
después al nivel de estrato o del rodal si se ha estratificado, y finalmente al nivel de bosque.
Cada nivel utiliza fórmulas de procesamiento diferentes, lo cual se describe a continuación.

6.2. OBTENCIÓN DE ALTURAS MEDIAS

El procedimiento que se describirá a continuación, se emplea en los inventarios forestales que


utilizan la metodología de los árboles tipo. En los inventarios donde se mide la altura de todos
los árboles este procedimiento no aplica.

Para obtener la altura media de los árboles se deben emplear los datos de DAP y Altura de los
árboles tipo. Estos datos son sometidos a un análisis de regresión simple, para obtener el
modelo matemático de mejor ajuste (el que mejor relaciona el DAP con la altura).

El análisis de regresión puede hacerse para una especie en particular, para un grupo de especies,
para un estrato o para la totalidad el bosque, lo cual dependerá de la diversidad de especies que
existan en el área inventariada.

Los datos de DAP-Altura se pueden analizar utilizando diversos modelos matemáticos, siendo
los más utilizados:
H = a + b Ln DAP (6-1) H = 1.3 + a DAP + b DAP² (6-2)
H = a + b DAP (6-3) H = a + b 1/(DAP)0.37 (6-4)
Ln H = a + b DAP (6-5)

Donde:
H = altura total o comercial (m)
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 57

DAP = diámetro a la altura del pecho (cms)


Ln = logaritmo natural
a, b = coeficientes de regresión

Para realizar regresiones simples existen programas de cómputo específicos como el SAS, JMP,
SYSTAT, etc. También se pueden utilizar procedimientos manuales, aplicando el método de los
mínimos cuadrados. Un procedimiento manual se describe en el ejemplo 6.1.

Ejemplo 6.1. En un inventario forestal se midió el DAP y la altura de 15 árboles tipo. Estos
datos fueron sometidos a un análisis de regresión simple para obtener el modelo matemático de
mejor ajuste. Para ilustrar el método de los mínimos cuadrados se utilizará el modelo
matemático 6-1, es decir: H = a + b Ln DAP

PASO 1: LINEALIZACIÓN DE MODELO MATEMÁTICO

x = Ln DAP
y = Altura total

PASO 2: OBTENCIÓN DE SUMATORIAS

Tabla 3. Linealización de modelos matemáticos


Altura total en
No. DAP (cm) Ln DAP (x) xy x²
m (y)
1 28.0 3.3322 35.0 116.6272 11.1036
2 26.0 3.2581 29.0 94.4848 10.6152
3 25.3 3.2308 28.3 91.4318 10.4381
4 26.0 3.2581 32.3 105.2365 10.6152
5 26.0 3.2581 31.0 101.0010 10.6152
6 24.0 3.1781 25.5 81.0404 10.1000
7 17.5 2.8622 22.5 64.3995 8.1922
8 24.7 3.2068 28.2 90.4319 10.2836
9 23.9 3.1739 26.4 83.7904 10.0735
10 22.0 3.0910 34.9 107.8774 9.5545
11 32.1 3.4689 37.0 128.3477 12.0330
12 34.0 3.5264 42.3 149.1651 12.4352
13 29.0 3.3673 36.9 124.2532 11.3387
14 13.9 2.6319 16.3 42.8998 6.9268
15 18.0 2.8904 21.7 62.7211 8.3542
TOTAL 47.7341 447.3 1443.7075 152.6791

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 58

PASO 3: OBTENCIÓN DE COEFICIENTES

n( xy )  ( x)( y )
b (6-6)
n( x ²)  ( x)²

15(1443.7075)  (47.7341)(447.3)
b
15(152.6791)  (47.7341)²

b = 26.117176

a  y b x (6-7)

447.3  47.7341 
a  26.117176 *  
15  15 

a = -53.291907

PASO 4: OBTENCIÓN DE ESTADÍSTICOS

Para un DAP de 28 cm, la altura del árbol es:


H = -53.291907 + 26.117176 Ln (28)
H = 33.7359

Para un DAP de 26 cm, la altura del árbol es:


H = -53.291907 + 26.117176 Ln (26)
H = 31.8004

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 59

Repetir los cálculos, hasta estimar las alturas de todos los árboles tipo que se utilizaron en la
regresión. Luego obtener las sumatorias tal y como se ilustra en la tabla siguiente:

Tabla 4. Cálculo de estadísticos


DAP Altura Altura
No. XY X² Y² (X-Y)²
(cm) real (X) estimada (Y)
1 28.0 35.0 33.7359 1180.7553 1225.0000 1138.1086 1.5980
2 26.0 29.0 31.8004 922.2109 841.0000 1011.2638 7.8421
3 25.3 28.3 31.0876 879.7785 800.8900 966.4377 7.7706
4 26.0 32.3 31.8004 1027.1521 1043.2900 1011.2638 0.2496
5 26.0 31.0 31.8004 985.8116 961.0000 1011.2638 0.6406
6 24.0 25.5 29.7099 757.6021 650.2500 882.6773 17.7231
7 17.5 22.5 21.4607 482.8657 506.2500 460.5615 1.0801
8 24.7 28.2 30.4607 858.9928 795.2400 927.8566 5.1109
9 23.9 26.4 29.6008 781.4621 696.9600 876.2095 10.2454
10 22.0 34.9 27.4374 957.5650 1218.0100 752.8106 55.6905
11 32.1 37.0 37.3048 1380.2782 1369.0000 1391.6494 0.0929
12 34.0 42.3 38.8067 1641.5222 1789.2900 1505.9578 12.2033
13 29.0 36.9 34.6524 1278.6718 1361.6100 1200.7855 5.0519
14 13.9 16.3 15.4456 251.7632 265.6900 238.5665 0.7300
15 18.0 21.7 22.1964 481.6628 470.8900 492.6820 0.2465
TOTAL 447.3 447.3000 13868.0943 13994.3700 13868.0943 126.2757

Coeficiente de determinación:

n (  XY )  (  X )(  Y )
r² (6-8)
 n (  X ²)  (  X )²  n ( Y ²)  ( Y )² 
15 ( 13868.0943 )  ( 447.3 )( 447.3000 )
r²
15 ( 13994.3700 )  ( 447.3 )² 15 ( 13868.0943 )  ( 447.3000 )² 

r² = 0.90

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 60

Desviación estándar:

S
 ( X  Y )² (6-9)
n 1
126.2757
S
15  1

S = 3.00 m

Cuadrado medio del error:

CMe 
 ( X  Y )² (6-10)
n2

126.2757
CMe 
15  2

CMe = 9.71 m²

Los estadísticos que se obtuvieron sirven para establecer comparaciones entre distintos modelos
matemáticos para determinar el mejor modelo. El modelo matemático seleccionado es utilizado
para hacer los cálculos de volúmenes. La selección del mejor modelo matemático se hace así:

 Para el coeficiente de determinación (r²), el mejor modelo matemático es el que tiene


valores cercanos a 1.0. En general, valores mayores de 0.7 se consideran aceptables.
 Para la desviación estándar (S) y el cuadrado medio del error (CMe), el mejor modelo
matemático es el que tiene los valores más bajos.

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 61

6.3. PROCESAMIENTO DE DATOS POR PARCELA

6.3.1. CÁLCULO DEL VOLUMEN POR PARCELA

Ejemplo 6.2. En una parcela de 600 m² se midió el DAP de 12 árboles presentes, 8 de Quercus
tristis y 4 de Pinus oocarpa. Los datos obtenidos corresponden a los siguientes:

Tabla 5. Datos de campo por Parcela

Árbol No. Especie DAP (cm)


1 Quercus tristis 15.4
2 Quercus tristis 17.4
3 Quercus tristis 21.4
4 Quercus tristis 23.4
5 Quercus tristis 27.9
6 Quercus tristis 23.6
7 Pinus oocarpa 22.8
8 Quercus tristis 31.4
9 Quercus tristis 34.5
10 Pinus oocarpa 17.7
11 Pinus oocarpa 21.6
12 Pinus oocarpa 16.5

Utilizando la información anterior, y las fórmulas siguientes, determinar el volumen por


hectárea en esta parcela.

Tabla 6. Ecuación de volúmenes por especie

Especie Fórmulas
H = -11.661854 + 8.816598 Ln DAP
Pinus oocarpa
V = 0.0268287659 + 0.0000287215 DAP² H
H = -53.291907 + 26.117176 Ln DAP
Quercus tristis
V = -0.07851313 + 0.0000465508 DAP² H

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 62

PASO 1: OBTENCIÓN DE ALTURAS Y VOLUMEN

Para el árbol No. 1 (Quercus tristis), que tiene un DAP de 15.4 cm, la altura es:
H = -53.291907 + 26.117176 Ln DAP
H = -53.291907 + 26.117176 Ln (15.4)
H = 18.12 m

Para el mismo árbol, el volumen es:


V = -0.07851313 + 0.0000465508 DAP² H
V = -0.07851313 + 0.0000465508 (15.4) ² (18.12)
V = 0.1216 m³

Estos dos cálculos se repiten para todos los árboles de la parcela, teniendo el cuidado de utilizar
la fórmula correcta para cada especie. El resumen de los cálculos se presenta a continuación:

Tabla 7. Cálculo de volúmenes por parcela

Árbol No. Especie DAP (cm) Altura (m) Volumen (m³)


1 Quercus tristis 15.4 18.12 0.1216
2 Quercus tristis 17.4 21.31 0.2218
3 Quercus tristis 21.4 26.72 0.4910
4 Quercus tristis 23.4 29.05 0.6619
5 Quercus tristis 27.9 33.64 1.1405
6 Quercus tristis 23.6 29.27 0.6804
7 Pinus oocarpa 22.8 15.91 0.2974
8 Quercus tristis 31.4 36.73 1.6072
9 Quercus tristis 34.5 39.19 2.0928
10 Pinus oocarpa 17.7 13.67 0.2882
11 Pinus oocarpa 21.6 15.43 0.4776
12 Pinus oocarpa 16.5 13.05 0.2557
TOTAL 8.3361

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 63

PASO 2: OBTENCION DEL VOLUMEN POR HECTAREA

El volumen por hectárea en una parcela, se puede estimar a través de la fórmula siguiente:

Vp  10000
Vhap  (6-11)
Tp

Donde:
Vhap = volumen por hectárea de la parcela
Vp = sumatoria de volumen de los árboles de la parcela (m³)
Tp = tamaño de la parcela (m²)

En nuestro ejemplo, el volumen por hectárea de la parcela es igual a:

8.3361  10000
Vhap 
600

Vhap = 138.94 m³/ha

6.3.2. CÁLCULO DE VALORES ESTADÍSTICOS DESCRIPTIVOS

Para determinar los estadísticos, parámetros y precisión del inventario forestal se necesita
conocer el volumen por hectárea de todas las parcelas inventariadas. Asimismo, debemos
conocer el área del estrato o bosque. Para ilustrar los cálculos se utilizará el ejemplo 6.3.

Ejemplo 6.3. En un bosque de 80.6 hectáreas de Pinus pseudostrobus se realizó un inventario


forestal, para lo cual se establecieron 8 parcelas de 500 m².

Con los datos de volumen de estas parcelas, determinar la media aritmética, la desviación
estándar, el coeficiente de variación, el error estándar, los límites de confianza, el error de
muestreo absoluto y relativo, y el cálculo del número de parcelas necesarias para tener un error
del 15 por ciento a un 95% de confiabilidad.

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 64

Tabla 8. Análisis estadísticos por parcela

Volumen en m³/ha (Volumen)²


No. De parcela
(X) (X)²

1 86.34 7454.60
2 92.36 8530.37
3 110.41 12190.37
4 127.77 16325.17
5 84.98 7221.60
6 89.74 8053.27
7 90.66 8219.24
8 146.43 21441.74

TOTAL 828.69 89436.35

MEDIA ARITMÉTICA

X
(X )
n

828.69
X 
8
_
X = 103.59 m³/ha

Este valor nos indica que en promedio en las 8 parcelas inventariadas existe un volumen de
madera de 103.59 m³/ha.

DESVIACIÓN ESTÁNDAR

 ( X ²)  n
( X )²
S
n 1

( 828.69 )²
89436.35 
8
S
8 1
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 65

S = 22.66 m³/ha

Este valor indica que el promedio de las desviaciones de los datos muestreados es de 22.66
m³/ha, con respecto a la media muestral (103.59 m³/ha).

COEFICIENTE DE VARIACIÓN

S
CV     100
X

 22.66 
CV     100
 103.59 

CV = 21.88%

Este resultado indica que la desviación promedio de los datos muestreados es de 21.88% con
respecto al promedio general (103.59 m³/ha).

ERROR ESTÁNDAR
 S   n
Sx      1  
 n  N

 22.66   
Sx    1 8  80.6 has
N N = 1612
   1612  0.05 has
 8   

Sx = 7.99 m³/ha

Este valor indica que el promedio de las desviaciones de los datos muestreados es de 7.99
m³/ha, con respecto a la media poblacional.

ERROR DE MUESTREO

Em  (Sx)  (t )

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 66

Em = 7.99  2.365

Em = 18.90 m³/ha

El valor de “t” depende del nivel de confianza requerido y de los grados de libertad (n-1). Para
siete grados de libertad (nuestro ejemplo) y un nivel de confianza del 95%, el valor t es 2.365.

ERROR DE MUESTREO EN PORCENTAJE

 Em 
Em%    100
 X 

 18.90 
Em%     100
 103.59 

Em% = 18.25%

Se puede interpretar este resultado afirmando, con un 95% de certeza, que el valor de la media
poblacional esta en un rango de más o menos 18.25% con respecto de la media muestral.

LIMITES DE CONFIANZA

LS  X  Em

LS = 103.59 + 18.90

LS = 122.49 m³/ha

LI  X  Em

LI = 103.59 – 18.90

LI = 84.69 m³/ha
Se puede decir, con una probabilidad del 95% que la media real de la población no es menor a
84.69 m³/ha ni mayor a 122.49 m³/ha.

VI unidad
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TAMAÑO DE LA MUESTRA

CV ²  t ²
n

(21.88)²  (2.365)²
n
(15)²

n = 12 parcelas

Como el valor “t de Student” varía de acuerdo al número de parcelas, y el cálculo anterior se


basó en 8 parcelas, se debe calcular nuevamente el valor de “n” usando ahora un valor de “t de
Student” para 12 parcelas. Entonces, tenemos que el número de parcelas es igual a:

(21.88)²  (2.201)²
n
(15)²

n = 10 parcelas

Se repite el cálculo ahora con un valor “t de Student” para 10 parcelas. Entonces, tenemos que
el número de parcelas es igual a:

(21.88)²  (2.262)²
n
(15)²

n = 11 parcelas

Ahora empleamos un valor “t de Student” para 11 parcelas. Entonces, tenemos que el número
de parcelas es igual a:

(21.88)²  (2.228)²
n
(15)²

n = 11 parcelas
Hasta aquí termina el cálculo, debido a que ya se dio la estabilización de “n”. Por lo tanto, se
concluye que para obtener la precisión requerida se deben establecer 11 parcelas; como ya se
levantaron 8 parcelas en el pre-muestreo solamente nos hacen falta 3 parcelas, las que deberán
distribuirse en el bosque.

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 68

6.4. PROCESAMIENTO DE DATOS POR ESTRATO

6.4.1. CÁLCULO DEL NÚMERO DE ÁRBOLES POR HECTÁREA


El análisis del número de árboles por hectárea, por especie y por clase diamétrica proporciona
información vital para determinar la factibilidad de realizar un aprovechamiento, la riqueza
futura del rodal, y una idea sobre a cuál grupo ecológico pertenece una especie de interés.
El número de árboles por hectárea se define como la suma de todos los árboles existentes en un
área definida (1 hectárea), y se obtiene a través de la fórmula siguiente:

n  10000
Nha  (6-12)
Np  Tp
Donde:
Nha = número de árboles por hectárea
n = número de árboles (en cada clase diamétrica)
Np = número de parcelas
Tp = tamaño de la parcela (m²)

Ejemplo 6.4. En un bosque mixto de 6.2 hectáreas se realizó un inventario forestal, para lo
cual se establecieron 3 parcelas de 500 m². Los datos de estas parcelas son los siguientes:

Tabla 9. Datos de campo en bosque mixto

PARCELA 1 PARCELA 2 PARCELA 3


DAP DAP DAP
ESPECIE ESPECIE ESPECIE
(cms) (cms) (cms)
Alnus arguta 15.4 Alnus arguta 13.8 Alnus arguta 18.9
Alnus arguta 17.4 Alnus arguta 18.4 Alnus arguta 17.7
Alnus arguta 21.4 Pinus oocarpa 19.5 Pinus oocarpa 17.3
Alnus arguta 23.4 Alnus arguta 21.4 Pinus oocarpa 18.2
Alnus arguta 22.9 Alnus arguta 23.4 Alnus arguta 25.8
Alnus arguta 23.6 Alnus arguta 17.1 Alnus arguta 22.9
Pinus oocarpa 22.8 Pinus oocarpa 20.1 Alnus arguta 19.8
Alnus arguta 21.3 Pinus oocarpa 27.6 Alnus arguta 14.2
Alnus arguta 34.5 Alnus arguta 26.4 Alnus arguta 15.8
Pinus oocarpa 17.7 Pinus oocarpa 22.5 Pinus oocarpa 19.7
Pinus oocarpa 21.6 Pinus oocarpa 21.8 Alnus arguta 17.9
Pinus oocarpa 16.5 Pinus oocarpa 14.3 Alnus arguta 16.5
Pinus oocarpa 24.2

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 69

Con estos datos, calcular el número de árboles por clase diamétrica, especie y hectárea.

PASO 1: AGRUPACION DE LOS ÁRBOLES EN CLASES DIAMÉTRICAS

Los datos de las parcelas se pueden agrupar por especie en diferentes categorías de diámetro,
las cuales pueden tener diferente amplitud, por ejemplo: 5, 10, 15 ó 20 cms; lo más común es
utilizar amplitudes de 5 y 10 cms.

Los datos de nuestro ejemplo se agruparon en amplitudes de 5 cm, tal y como se observa a
continuación:

Tabla 10. Frecuencias por clase díamétrica y por especie del bosque mixto.

Clases diamétricas (cms) Alnus arguta Pinus oocarpa


10-14.9 2 1
15-19.9 10 6
20-24.9 8 6
25-29.9 2 1
30-34.9 1 0
Total por especie 23 14

Los datos de esta tabla, sirven de base para hacer los cálculos por hectárea del número de
árboles, área basal y volumen.

PASO 2: ESTIMACION DEL NÚMERO DE ÁRBOLES POR HECTÁREA

Empleando los datos del ejemplo 6.4 (3 parcelas de 500 m²) y de la tabla 10, calcular el número
de árboles por hectárea en la clase diamétrica de 10-14.9 cm para la especie de Alnus arguta.

n  10000
Nha 
Np  Tp

2 10000
Nha 
3  500

Nha = 13 árboles por hectárea

Al aplicar la fórmula en cada dato de la tabla10, se obtiene por cada clase diamétrica el número
de árboles por hectárea de este bosque, lo cual se observa en la tabla 11.

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 70

Tabla 11. Número de árboles por hectárea del bosque mixto

Clases diamétricas Especies Total por clase


% del total
(cms) Alnus arguta Pinus oocarpa diamétrica
10-14.9 13 7 20 8.1
15-19.9 67 40 107 43.2
20-24.9 53 40 93 37.8
25-29.9 13 7 20 8.1
30-34.9 7 0 7 2.7
Total por especie 153 93 247 100.0
% del total 62.2 37.8 100.0

6.4.2. CÁLCULO DEL ÁREA BASAL POR HECTÁREA

Hay una correlación lineal relativamente alta entre el diámetro de la copa y el del fuste, según
investigaciones, en los árboles que están en el dosel superior o mediano la relación entre copa y
DAP es aproximadamente 20:1. Dicha relación permite usar el parámetro del área basal como
un indicador del nivel de competencia en el dosel.

Examinar la distribución diamétrica del área basal es una forma rápida de proporcionar
información sobre la necesidad de realizar un tratamiento para reducir la competencia en el
bosque entre los árboles comerciales y no comerciales.

El área basal en general indica la calidad del sitio, entre mayor sea ésta, mejor será la calidad de
sitio. El área basal sirve también de indicador de la densidad óptima para la regeneración
natural del bosque. El pinabete (Abies guatemalensis) o los encinos (Quercus sp.) se regeneran
bien bajo el dosel de otros árboles, mientras que los pinos necesitan de manera general bastante
luz para regenerarse (área basal inferior a 15 m²/ha).

En los bosques naturales del Altiplano de Guatemala, el área basal normal óptima se encuentra
entre 15 a 20 m²/ha para el aliso (Alnus sp.), de 20 a 25 m²/ha para el pino colorado (Pinus
hartwegii), de 25 a 30 m²/ha para el pino blanco (Pinus ayacahuite) y de 25 a 35 m²/ha para el
ciprés común (Cupressus lusitanica). Para los bosques de Petén, a partir de 10 cm de DAP, el
área basal varía de 18 a 35 m²/ha. (Fundap, 1993; Stanley, 1997)

El área basal de un árbol es la superficie de la sección de su fuste a 1.3 metros sobre el nivel del
suelo. El área basal de un bosque es la suma de todas las áreas basales de los árboles contados,
inferida a la hectárea. El área basal por hectárea se obtiene a través de la fórmula siguiente:

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 71

AB  n  10000
ABha  (6-13)
Np  Tp

AB  0.7854  DAP² (6-14)

Donde:
ABha = área basal por hectárea (m²)
AB = área basal individual (m²)
n = número de árboles (en cada clase diamétrica)
Np = número de parcelas
Tp = tamaño de la parcela (m²)
DAP = diámetro a la altura del pecho (m)

Ejemplo 6.5. Utilizando los datos del ejemplo 6.4, calcular el área basal por clase diamétrica,
especie y hectárea de este bosque.

PASO 1: AGRUPACION DE LOS ÁRBOLES EN CLASES DIAMETRICAS

Como estamos utilizando los datos del ejemplo 6.4, este paso ya fue realizado (ver tabla 11).

PASO 2: ESTIMACION DEL ÁREA BASAL INDIVIDUAL

Empleando los datos de la tabla 11, calcular el área basal individual en la clase diamétrica de
10-14.9 cms.

AB  0.7854  DAP²
AB  0.7854  (12.5 / 100)² DAP = (10+14.9)/2 DAP = 12.5
AB = 0.0123 m²

Este procedimiento se utiliza para estimar el área basal individual en cada clase diamétrica.

PASO 3: ESTIMACION DEL ÁREA BASAL POR HECTÁREA

Empleando los datos del ejemplo 6.4 (3 parcelas de 500 m²) y de la tabla 11, calcular el área
basal por hectárea en la clase diamétrica de 10-14.9 cms para Alnus arguta.

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 72

AB  n  10000
ABha 
Np  Tp

0.0123  2  10000
ABha 
3  500

ABha = 0.1636 m²/ha

Al aplicar la fórmula en cada una de los datos de la tabla 11, se obtiene por cada clase
diamétrica el área basal por hectárea, lo cual se observa en la tabla 12.

Tabla 12. Área basal del bosque mixto (m²/ha)

Clases diamétricas Especies Total por clase


% del total
(cms) Alnus arguta Pinus oocarpa diamétrica
10-14.9 0.1636 0.0818 0.2454 3.0
15-19.9 1.6035 0.9621 2.5656 31.0
20-24.9 2.1206 1.5904 3.7110 44.9
25-29.9 0.7919 0.3960 1.1879 14.4
30-34.9 0.5531 0.0000 0.5531 6.7
Total por especie 5.2327 3.0303 8.2631 100.0
% del total 63.3 36.7 100.0

6.4.3. CÁLCULO DEL VOLUMEN POR HECTÁREA

La medida de volumen es obviamente el más importante resultado del inventario forestal, pero
también es importante reconocer que está más sujeto a los errores de medición.

Los resultados de volumen deben servir para decidir sobre el orden cronológico de áreas de
aprovechamiento anual (AAA) y para dar una idea del volumen aprovechable en el presente.

El volumen por hectárea es la suma de los volúmenes de los árboles contados en una hectárea, y
se estima a través de la fórmula siguiente:

V  n  10000
Vha  (6-15)
Np  Tp
Donde:
Vha = volumen por hectárea (m³)

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 73

V = volumen individual (m³)


n = número de árboles (en cada clase diamétrica)
Np = número de parcelas
Tp = tamaño de la parcela (m²)

Ejemplo 6.6. Utilizando los datos del ejemplo 6.4, calcular el volumen por clase diamétrica,
especie y hectárea de este bosque. Para estimar la altura y volumen, utilizar las fórmulas
siguientes:

Tabla 13. Fórmulas de altura y volumen


Especie Fórmulas de altura Fórmulas de volumen
Pinus oocarpa Ln H = 0.641798 + 0.623055 × Ln DAP V = 0.0268288 + 0.0000287215 DAP² H
Alnus arguta H = 13.84462 + -57.31105 × 1/DAP Vc = 0.1125761 + 0.00004148 DAP² H

V = volumen sin corteza (m³); Vc = volumen con corteza (m³)


H = altura (m) DAP = diámetro a la altura del pecho (cms)

Empleando los datos del ejemplo 6.4 (3 parcelas de 500 m²) y de la tabla 11, calcular el
volumen por hectárea en la clase diamétrica de 10-14.9 cm para Alnus arguta.

PASO 1: AGRUPACION DE LOS ÁRBOLES EN CLASES DIAMETRICAS

Como estamos utilizando los datos del ejemplo 6.4, este paso ya fue realizado (ver tabla 10).

PASO 2: ESTIMACION DE LA ALTURA

H = 13.84462 + -57.31105 × 1/DAP


H = 13.84462 + -57.31105 × 1/12.5 DAP = (10+14.9)/2 = 12.5
H = 9.26 m
PASO 3: ESTIMACION DEL VOLUMEN INDIVIDUAL

Vc = 0.1125761 + 0.00004148 DAP² H


Vc = 0.1125761 + 0.00004148 (12.5) ² (9.26)
Vc = 0.1726 m³

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 74

PASO 4: ESTIMACION DEL VOLUMEN POR HECTAREA


0.1726  2  10000
Vha 
3  500

Vha = 2.3012 m³/ha

Al aplicar las fórmulas en cada dato de la tabla 10, se obtiene por cada clase diamétrica el
volumen por hectárea de este bosque, lo cual se observa en la tabla 13.

Tabla 14. Volumen del bosque mixto (m³/ha).

Clases diamétricas Especies Total por clase


% del total
(cms) Alnus arguta Pinus oocarpa diamétrica
10-14.9 2.3012 0.4531 2.7543 4.3
15-19.9 16.4564 5.0501 21.5065 33.2
20-24.9 18.6568 8.7617 27.4185 42.4
25-29.9 6.4200 2.3480 8.7680 13.5
30-34.9 4.2793 0.0000 4.2793 6.6
Total por especie 48.1136 16.6130 64.7266 100.0
% del total 74.3 25.7 100.0

6.4.4. DETERMINACIÓN DE LA ESTRUCTURA HORIZONTAL DEL BOSQUE

El conocimiento de la estructura del bosque es fundamental para prescribir las intervenciones


de manejo y más importante aún para determinar el rendimiento de los bosques por tipo de
producto. El conocimiento del rango y distribución díamétrica permite una evaluación física y
económica mucho mejor que utilizando valores promedios como el diámetro medio.

La estructura horizontal de un bosque se puede describir mediante la distribución del número de


árboles por clase diamétrica. Así se ha definido dos estructuras principales: las coetáneas o
regulares y las discetáneas o irregulares.

Una estructura COETÁNEA corresponde a un


bosque en el cual la mayor parte de los individuos,
de una o varias especies, tienen una misma clase de
edad o tamaño. Esta estructura se expresa
gráficamente con una curva en forma de campana.
Las diferencias que se observan en el tamaño de los

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 75

árboles se deben a variaciones genéticas y a condiciones de crecimiento diferentes.

Los bosques secundarios jóvenes corresponden con frecuencia a estructuras más o menos
coetáneas. Las especies que presentan esta estructura, por lo general, corresponden a especies
exigentes de luz: heliófitas efímeras o durables. Generalmente, en el manejo de estos bosques
se utilizan sistemas silviculturales monocíclicos.

En una estructura DISCETÁNEA, los individuos del bosque se encuentran distribuidos en


varias clases de tamaño; lo que se representa mediante una distribución del tipo jota invertida.
También es común encontrar bosques cuya curva de distribución es una J invertida incompleta;
esto significa que algunas clases diamétricas se
encuentran subrepresentadas (tienen pocos individuos)
o sobrerepresentadas.

Los bosques primarios intervenidos y no intervenidos,


así como los secundarios maduros, presentan
estructuras discetáneas, aunque en muchos casos de
forma incompleta. En el manejo de estos bosques, se
utilizan comúnmente sistemas silviculturales
policíclicos.

Una especie que presenta una estructura de J invertida indica que los individuos infantiles y
jóvenes se encuentran bajo la sombra de árboles de mayor tamaño y edad, y que pueden
sobrevivir bajo condiciones de menor iluminación: probablemente son esciófitos o esciófitos
parciales. Sin embargo, en un bosque discetáneo, la distribución diamétrica individual de
muchas especies puede ser coetánea. (Catie, 2001; Prodan, 1997)

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 76

Ejemplo 6.7. Utilizando los datos del ejemplo 6.4, graficar la estructura horizontal que
presenta este bosque.
Para graficar la estructura horizontal del bosque, se utilizarán los datos de la tabla 11,
colocando en el eje X, las clases diamétricas, y en el eje Y, el número de árboles por especie.

Alnus arguta Pinus oocarpa


70
Número de árboles por hectárea

60

50

40

30

20

10

0
10-14.9 15-19.9 20-24.9 25-19.9 30-34.9
Clases diamétricas (cms)

Figura 1. Distribución diamétrica de los árboles del bosque mixto.

6.4.5. CÁLCULO DE INCREMENTOS

La estimación del incremento del volumen es una aproximación, pero de vital importancia para
el manejo, pues de su conocimiento dependen las decisiones que se tomen en relación a la corta
anual.

Entre los métodos para proyectar el volumen, uno de los más usados es el Método de
Reynolds. Este método proyecta la tabla de rodal y se basa en el supuesto que los árboles
dentro de cada clase diamétrica están distribuidos al azar.

En cada árbol donde se obtengan muestras con el Barreno de Pressler, el incremento periódico
anual diamétrico se obtiene a través de la fórmula siguiente:

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 77

2 L
IPAd   10 (6-16)
Nac
Donde:
IPAd = incremento periódico anual diamétrico (cm/año)
L = largo de los 5 ó 10 últimos anillos de crecimiento (mm)
Nac = número de anillos de crecimiento (5 ó 10)

Existe una relación entre el incremento periódico anual diamétrico y el DAP. La relación entre
el incremento periódico anual diamétrico y el DAP se puede calcular por medio de un análisis
de regresión, o también se pueden usar promedios de incrementos por clases diamétricas.

Ejemplo 6.8. Para ilustrar el Método de Reynolds, se utilizarán los datos de un inventario
forestal realizado en un bosque de Pinus tecunumanii, en donde se extrajeron tarugos de madera
en una muestra de 30 árboles tipo. Con los datos obtenidos en este inventario se estimará el
incremento en volumen de este bosque, a partir de los datos de la tabla 15.

Tabla 15. Valores dasométricos de un bosque de Pinus tecunumanii.


Clases diamétricas No. de árboles por
Volumen individual (m³) IPAd (cm/año)
(cm) hectárea (actual)
10 – 14.9 0.0787 56 2.15
15 – 19.9 0.1903 42 2.28
20 – 24.9 0.3679 37 2.41
25 – 29.9 0.6228 27 2.54
30 – 34.9 0.9653 14 2.67
35 – 39.9 1.4050 11 2.80
40 – 44.9 1.9511 5 2.93
45 – 49.9 2.6120 2 3.06
50 – 54.9 3.3962 0
TOTAL 194

PASO 1. CALCULO DE LA TASA DE CRECIMIENTO

La tasa de crecimiento se calcula dividiendo el incremento periódico anual diamétrico entre el


intervalo de la clase así:

IPAd
M  (6-17)
C

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 78

Donde:
M = tasa de crecimiento
IPAd = incremento periódico anual diamétrico (cm/año)
C = intervalo de la clase diamétrica (cm)

Utilizando los datos de la tabla 15 y la fórmula 6-17, tenemos que la tasa de crecimiento es:

Tabla 16. Tasa de crecimiento


Clases diamétricas (cm) IPAd (cm/año) M
10 – 14.9 2.15 0.430
15 – 19.9 2.28 0.456
20 – 24.9 2.41 0.482
25 – 29.9 2.54 0.508
30 – 34.9 2.67 0.534
35 – 39.9 2.80 0.560
40 – 44.9 2.93 0.586
45 – 49.9 3.06 0.612
50 – 54.9

PASO 2. CALCULO DE LOS MOVIMIENTOS DE CLASE

Debido al crecimiento de los árboles una parte de ellos pasarán a la clase siguiente y el resto
permanecerá en la misma clase. La razón de crecimiento indica el movimiento de árboles de
una clase a otra. El movimiento de clases se obtiene a través de las fórmulas siguientes:

MC1  Nha  M (6-18)

MC0  Nha  MC1 (6-19)

Donde:
MC1 = número de árboles que se moverán una clase diamétrica
MC0 = número de árboles que permanecerán en la misma clase diamétrica
Nha = número de árboles por hectárea (actual)
M = tasa de crecimiento

Utilizando los datos de la tabla 16, del paso 1, y las fórmulas 6-18 y 6-19, tenemos que los
movimientos de clase corresponden a los siguientes:

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 79

Tabla 17. Movimientos de clase


Clases diamétricas No. de árboles por Movimientos de clase
M
(cm) hectárea (actual) MC1 MC0
10 – 14.9 56 0.430 24.08 31.92
15 – 19.9 42 0.456 19.15 22.85
20 – 24.9 37 0.482 17.83 19.17
25 – 29.9 27 0.508 13.72 13.28
30 – 34.9 14 0.534 7.48 6.52
35 – 39.9 11 0.560 6.16 4.84
40 – 44.9 5 0.586 2.93 2.07
45 – 49.9 2 0.612 1.22 0.78
50 – 54.9

PASO 3. CALCULO DEL NÚMERO DE ÁRBOLES POR HECTÁREA EN EL FUTURO

El número de árboles por hectárea que “teóricamente” estarán en el futuro, se obtiene a través
de la fórmula siguiente:

Nhaf  acumular (MC1  MC0) (6-20)

Donde:

Nhaf = número de árboles por hectárea en el futuro


MC1 = número de árboles que se moverán una clase diamétrica
MC0 = número de árboles que permanecerán en la misma clase diamétrica

Utilizando los datos del paso 2 y la fórmula 6-20, tenemos que el número de árboles por
hectárea en el futuro será igual a:

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 80

Tabla 18. Densidad futura


Movimientos de clase No. de árboles por hectárea
Clases diamétricas (cm)
MC1 MC0 en el futuro
10 – 14.9 24.08 31.92 31.92
15 – 19.9 19.15 22.85 46.93
20 – 24.9 17.83 19.17 38.32
25 – 29.9 13.72 13.28 31.12
30 – 34.9 7.48 6.52 20.24
35 – 39.9 6.16 4.84 12.32
40 – 44.9 2.93 2.07 8.23
45 – 49.9 1.22 0.78 3.71
50 – 54.9 1.22
TOTAL 194.00

PASO 4. CALCULO DE VOLUMENES POR HECTAREA

Los volúmenes por hectárea en el presente y en el futuro se estiman con las fórmulas siguientes:

VA  Vi  Nha (6-21)

VF  Vi  Nhaf (6-22)

Donde:
VA = volumen actual (m³/ha)
VF = volumen futuro (m³/ha)
Vi = volumen individual (m³)
Nha = número de árboles por hectárea (actual)
Nhaf = número de árboles por hectárea en el futuro

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 81

Utilizando los datos de la tabla 18, del paso 3, y las fórmulas 6-21 y 6-22, tenemos que el
volumen actual y futuro por hectárea es igual a:

Tabla 19. Volumen futuro


Clases Volumen No. de árboles No. de árboles Volumen Volumen
diamétricas individual por hectárea por hectárea actual futuro
(cm) (m³) (actual) (futuro) (m³/ha) (m³/ha)
10 – 14.9 0.0787 56 31.92 4.407 2.512
15 – 19.9 0.1903 42 46.93 7.993 8.930
20 – 24.9 0.3679 37 38.32 13.612 14.097
25 – 29.9 0.6228 27 31.12 16.816 19.380
30 – 34.9 0.9653 14 20.24 13.514 19.538
35 – 39.9 1.4050 11 12.32 15.455 17.304
40 – 44.9 1.9511 5 8.23 9.756 16.058
45 – 49.9 2.6120 2 3.71 5.224 9.680
50 – 54.9 3.3962 0 1.22 0.000 4.157
TOTAL 194 194.00 86.776 111.656

PASO 5. CALCULO DE INCREMENTOS EN VOLUMEN DEL BOSQUE

Los incrementos en volumen del bosque se estiman a través de la fórmula siguiente:

IPAv  VF  VA (6-23)

Donde:
IPAv = incremento periódico anual volumétrico (m³/ha/año)

Utilizando los datos del paso 4 y la fórmula 6-23, el incremento en volumen del bosque es igual a:

IPAv  111.656  86.776

IPAv = 24.880 m³/ha/año

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 82

6.4.6. CÁLCULO DEL ESTADO FÍSICO DE LOS ÁRBOLES

El cálculo del estado físico de los árboles nos permite tener una idea de la calidad del estrato, lo
cual es muy útil para definir las estrategias de intervención en el mismo. La tabulación de la
información puede hacerse a través de dos métodos: utilizando porcentajes y/o valores por
hectárea.

Ejemplo 6.9. Para ilustrar el cálculo del estado físico de los árboles se utilizarán los datos de 3
parcelas que se establecieron en un bosque mixto de 2.7 hectáreas. Los datos de las parcelas
son los siguientes:

Tabla 20. Estado físico de los árboles

PARCELA 1 PARCELA 2 PARCELA 3


Especie Estado físico Especie Estado físico Especie Estado físico
Quercus tristis Sinuoso Quercus tristis Recto Quercus tristis Sinuoso
Quercus tristis Bifurcado Quercus tristis Bifurcado Quercus tristis Recto
Quercus tristis Sinuoso Pinus oocarpa Recto Pinus oocarpa Recto
Quercus tristis Recto Quercus tristis Recto Pinus oocarpa Recto
Quercus tristis Sinuoso Quercus tristis Sinuoso Quercus tristis Recto
Quercus tristis Sinuoso Quercus tristis Bifurcado Quercus tristis Sinuoso
Pinus oocarpa Recto Pinus oocarpa Recto Quercus tristis Sinuoso
Quercus tristis Bifurcado Pinus oocarpa Sinuoso Quercus tristis Sinuoso
Quercus tristis Recto Quercus tristis Recto Quercus tristis Recto
Pinus oocarpa Recto Pinus oocarpa Recto Pinus oocarpa Recto
Pinus oocarpa Recto Pinus oocarpa Sinuoso Quercus tristis Recto
Pinus oocarpa Sinuoso Pinus oocarpa Recto Quercus tristis Sinuoso
Pinus oocarpa Recto

Con estos datos, calcular el estado físico a través de la metodología de porcentajes.

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 83

PASO 1: OBTENCIÓN DE FRECUENCIAS

Los árboles de las parcelas se deben agrupar por especie y por categorías del estado físico, tal y
como se observa en la tabla 21.

Tabla 21. Frecuencias por especie y por categorías del estado físico.

Frecuencias del estado físico


Especie
Recto Sinuoso Bifurcado Total
Pinus oocarpa 11 3 0 14
Quercus tristis 9 10 4 23

PASO 2: OBTENCIÓN DE PORCENTAJES

Empleando los datos de la tabla 21, calcular el porcentaje de árboles rectos en Pinus oocarpa:

11
%  100
37

% = 29.73

Al repetir este procedimiento para cada dato de la tabla 21, se obtiene el estado físico en
porcentaje de los árboles del bosque, tal y como se observa en la tabla 22.

Tabla 22. Estado físico de los árboles del bosque mixto (porcentajes).

Estado físico (%)


Especie
Recto Sinuoso Bifurcado Total
Pinus oocarpa 29.73 8.11 0.00 37.84
Quercus tristis 24.32 27.03 10.81 62.16

Sumatoria 58.9 32.4 8.7 100.00

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 84

6.4.7. CÁLCULO DEL ESTADO FITOSANITARIO DE LOS ÁRBOLES

El cálculo del estado fitosanitario de los árboles nos permite tener una idea de la sanidad del
bosque, lo cual es útil para fijar las estrategias que se deben adoptar en el manejo del bosque.

Ejemplo 6.10. Para ilustrar el cálculo del estado fitosanitario de los árboles se utilizarán los
datos de 3 parcelas que se establecieron en un bosque de 3.2 hectáreas. Los datos son:

Tabla 23. Estado fitosanitario de los árboles

PARCELA 1 PARCELA 2 PARCELA 3


Especie Estado fíto. Especie Estado fito. Especie Estado fito.
Quercus tristis Sano Quercus tristis Sano Quercus tristis Sano
Alnus arguta Sano Quercus tristis Fuste hueco Quercus tristis Sano
Quercus tristis Fuste hueco Pinus oocarpa Sano Pinus oocarpa Sano
Alnus arguta Sano Alnus arguta Sano Pinus oocarpa Ocoteado
Quercus tristis Sano Quercus tristis Sano Quercus tristis Sano
Pinus oocarpa Ocoteado Pinus oocarpa Sano Quercus tristis Sano
Quercus tristis Sano Pinus oocarpa Ocoteado Alnus arguta Sano
Quercus tristis Sano Quercus tristis Sano Quercus tristis Sano
Pinus oocarpa Sano Pinus oocarpa Sano Pinus oocarpa Sano

PASO 1: OBTENCIÓN DE FRECUENCIAS

Los árboles de las parcelas se deben agrupar por especie y por categorías del estado
fitosanitario, tal y como se observa en la tabla 24.

Tabla 24. Frecuencias por especie y por categorías del estado fitosanitario.

Frecuencias del estado fitosanitario


Especie Fuste Total
Sano Ocoteado
hueco
Quercus tristis 12 0 2 14
Pinus oocarpa 6 3 0 9
Alnus arguta 4 0 0 4

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 85

PASO 2: OBTENCIÓN DE PORCENTAJES

Empleando los datos de la tabla 24, calcular el porcentaje de árboles sanos en Quercus tristis:

12
%  100
27

% = 44.44

Al repetir este procedimiento para cada dato de la tabla 24, se obtiene el estado fitosanitario en
porcentaje de los árboles del bosque, tal y como se observa en la tabla 25.

Tabla 25. Estado fitosanitario de los árboles del bosque (porcentajes).

Estado fitosanitario (%)


Especie Total
Sano Ocoteado Fuste hueco
Quercus tristis 44.44 0.00 7.41 51.85
Pinus oocarpa 22.22 11.11 0.00 33.33
Alnus arguta 14.81 0.00 0.00 14.81
Sumatoria 81.48 11.11 7.41 100.00

6.4.8. CÁLCULO DE LA ABUNDANCIA DE REGENERACIÓN NATURAL

El cálculo por hectárea de la regeneración natural nos da una idea de la dinámica de


regeneración del bosque, lo cual es muy útil para definir las estrategias de repoblación del
mismo, después de un aprovechamiento forestal.

Para estimar el número recomendado de brinzales podemos considerar, como punto de partida,
la cantidad que normalmente se siembra en plantaciones (1,111 individuos/ha). La
competencia entre los árboles y otras especies vegetales no existe en una plantación, lo cual no
es el caso de los brinzales en bosques naturales latifoliados húmedos; por eso el número
recomendado de brinzales “comerciales” debe ser mayor de 1,111 por hectárea. Dada la alta
tasa de mortalidad bajo condiciones naturales, se recomiendan 2,000 brinzales por hectárea
como una cantidad adecuada. Otros investigadores han propuesto rangos aceptables de 988 a
2,470 brinzales por hectárea. (Catie, 2002)

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 86

La regeneración natural por hectárea se obtiene a través de la fórmula siguiente:

CRN 10000
RNha  (6-24)
Np  Tp

Donde:
RNha = regeneración natural por hectárea
CRN = categoría de regeneración natural
Np = número de parcelas
Tp = tamaño de la parcela (m²)

Ejemplo 6.11. En un bosque de coníferas de 24.1 hectáreas se realizó un inventario forestal,


para lo cual se establecieron 8 parcelas de regeneración natural de 50 m². Los datos de estas
parcelas son los siguientes:

Tabla 26. Regeneración natural


Parcela No. Especie Tipo de regeneración Número de individuos
1 Pinus pseudostrobus Brinzal 4
2 Pinus montezumae Brinzal 10
3 Pinus montezumae Brinzal 5
4 Pinus montezumae Latizal bajo 12
Pinus oocarpa Latizal alto 8
5
Quercus conspersa Latizal bajo 6
6 Pinus pseudostrobus Brinzal 9
7 Pinus oocarpa Brinzal 20
8 Pinus oocarpa Brinzal 15
TOTAL 89

Con estos datos, calcular la regeneración natural por hectárea de cada especie.

PASO 1: AGRUPAR LA REGENERACIÓN NATURAL POR ESPECIE

Los datos de las parcelas se deben agrupar por especie y por categorías de regeneración natural,
tal y como se observa en la tabla 27.

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 87

Tabla 27. Frecuencias por especie y por categorías de regeneración natural.

Especie Brinzal Latizal bajo Latizal alto


Pinus montezumae 15 12 0
Pinus oocarpa 35 0 8
Pinus pseudostrobus 13 0 0
Quercus conspersa 0 6 0
Total 63 18 8

PASO 2: ESTIMACION DE LA REGENERACIÓN NATURAL POR HECTÁREA

Empleando los datos del ejemplo 6.11 (8 parcelas de 50 m²) y de la tabla 27, calcular el número
de brinzales por hectárea para Pinus montezumae.

CRN 10000
RNha 
Np  Tp

15  10000
RNha 
8  50

RNha = 375 brinzales por hectárea

Al aplicar la fórmula en cada dato de la tabla 27, se obtiene la regeneración natural por hectárea
de este bosque, tal y como se observa en la tabla 28.

Tabla 28. Regeneración natural por hectárea del bosque de coníferas.


Total por
Especie Brinzal Latizal bajo Latizal alto
especie
Pinus montezumae 375 300 0 675
Pinus oocarpa 875 0 200 1075
Pinus pseudostrobus 325 0 0 325
Quercus conspersa 0 150 0 150
Total por categoría
1575 450 200 2225
de regeneración

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 88

6.5. PROCESAMIENTO DE DATOS POR BOSQUE

Los procedimientos que se describen a continuación, sólo aplican cuando el bosque se ha


estratificado (mínimo dos estratos).

6.5.1. CALCULO DE VALORES ESTADISTICOS ESTRATIFICADOS

Después de haber realizado un muestreo independiente en cada estrato de bosque, se debe hacer
un análisis estadístico (estratificado) para determinar la precisión del inventario en general. Los
pasos a seguir se detallan en el ejemplo 6.12.

Ejemplo 6.12. En un inventario forestal se dividió el bosque en cuatro estratos diferentes, y se


realizó un pre-muestreo en cada estrato. En los estratos se distribuyeron en forma sistemática
61 parcelas de 1000 m² cada una.

Con los datos siguientes, determinar los valores estratificados de la media aritmética, la
desviación estándar, el error estándar, y el cálculo del número de parcelas necesarias para tener
un error del 15 por ciento a un 95% de confiabilidad.

Tabla 29. Valores estadísticos estratificado


Área del estrato Volumen medio del Desviación estándar Número de
Estrato en hectáreas estrato en m³/ha del estrato en m³/ha parcelas levantadas
(Aj) (Xj) (Sj) por estrato
A 9.4 112.2 44.0 9
B 18.3 42.9 8.2 8
C 17.6 29.7 3.8 8
D 190.0 96.0 43.1 36
Total 235.3 61

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 89

PASO 1: OBTENCIÓN DE SUMATORIAS

Utilizando los datos de cada estrato, y las fórmulas de las páginas 15 y 16 de este documento,
obtener las sumatorias siguientes:

Tabla 30. Obtención de sumatorias del método estratificado

Estrato Nj Pj (Xj) × (Nj) (Sj) × (Pj) (Sj)² × (Pj)


A 94.0 0.0399 10546.80 1.76 77.42
B 183.0 0.0778 7861.11 0.64 5.25
C 175.6 0.0748 5210.05 0.29 1.10
D 1900.0 0.8075 182438.00 34.78 1498.02
Total 2352.6 206055.96 37.47 1581.79

La expresión Nj para el estrato A, se La expresión Pj en el estrato A, se obtiene


obtiene de la manera siguiente: de la forma siguiente:

Aj Aj
Nj  Pj 
Tp At

9.4 9.4
Nj  Pj 
0.1 235.3

Nj = 94.0 Pj = 0.0399

Este procedimiento se aplica para los otros Este procedimiento se aplica para los otros
estratos de bosque. estratos de bosque.

PASO 2: OBTENCIÓN DE LA MEDIA ESTRATIFICADA:

Xe 
 ( Xj )  ( Nj )
 Nj
206055.96
Xe 
2352.6
__
Xe = 87.6 m³/ha

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 90

Este valor nos indica que en promedio en los cuatro estratos de bosque existe un volumen de
madera de 87.6 m³/ha.

PASO 3: OBTENCIÓN DE LA DESVIACION ESTÁNDAR ESTRATIFICADA

Se 
 (Sj)  ( Pj ) 100
Xe

37.47
Se  100
87.6

Se = 42.8%

Este valor nos indica que el promedio de las desviaciones de los datos muestreados en los
cuatro estratos es de 42.8%, con respecto a la media muestral estratificada (87.6 m³/ha).

PASO 4: OBTENCIÓN DEL ERROR ESTÁNDAR ESTRATIFICADO

Sxe 
 (Sj )  ( Pj ) ²   (Sj)²  ( Pj )
n N

Sxe 
37.47²  1581.79 N
235.3
N = 2353
61 2353 0.1

Sxe = 4.7 m³/ha

Este valor nos indica que el promedio de las desviaciones de los datos muestreados en los
cuatro estratos es de 4.7 m³/ha, con respecto a la media poblacional.

PASO 5: CALCULO DEL TAMAÑO DE LA MUESTRA

t ²   ( Sj )²  ( Pj ) (2)²  (1581.79)
ne  ne 
t ²   ( Sj )²  ( Pj ) (2)²  (1581.79)
( Ea )²  (13.14)² 
 Nj 2352.6

 15% 
Ea  (87.6)    Ea = 13.14 ne = 36 parcelas
 100 

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 91

Este valor nos indica que para obtener la precisión requerida se deben establecer 36 parcelas.
En el pre-muestreo se levantaron 61 parcelas, por lo tanto, se midieron más parcelas de las que
realmente se necesitaban. En este ejemplo, el paso 6 ya no tendría sentido, sin embargo, se
desarrollará solo con fines de ejemplificar los procedimientos de este paso.

PASO 6: DISTRIBUCIÓN DE PARCELAS POR ESTRATO

Método A. Distribución según el área de los estratos

Utilizando este criterio, las parcelas por estrato se distribuyen a través de la fórmula siguiente:

NPe1  ne  Pj

Entonces, utilizando el área de los estratos, las 36 parcelas deberán repartirse de la manera
siguiente (ver datos del primer paso):

Estrato A: 36 × (0.0399) = 1 parcela

Estrato B: 36 × (0.0778) = 3 parcelas

Estrato C: 36 × (0.0748) = 3 parcelas

Estrato D: 36 × (0.8075) = 29 parcelas

Método B. Distribución según la variabilidad de los estratos

Utilizando este criterio, las parcelas por estrato se distribuyen a través de la fórmula siguiente:

ne  ( Sj )  ( Pj )
NPe 2 
 (Sj)  ( Pj )
Entonces, utilizando la variabilidad de los estratos, las 36 parcelas deberán repartirse de la
forma siguiente (ver datos del primer paso):

36 1.76
Estrato A: = 2 parcelas
37.47

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 92

36 0.64
Estrato B: = 1 parcela
37.47

36 0.29
Estrato C: = 0 parcela
37.47

36 34.78
Estrato D: = 33 parcelas
37.47

Es importante resaltar la diferencia entre estos dos métodos, ya que nos permite confirmar que
el número de parcelas a muestrear no depende del tamaño del estrato sino de su variabilidad.
Observe que el estrato A, a pesar de tener el área más pequeña que los estratos B y C, requiere
de más parcelas que estos estratos.

Por lo tanto, se concluye que las parcelas idealmente deben distribuirse de acuerdo a la
variabilidad que presenten los estratos (método B).

6.5.2. ELABORACIÓN DE TABLAS DE RESUMEN

Después de que se ha procesado toda la información de un inventario forestal, es aconsejable


elaborar un resumen por estrato de la información edáfica, dasométrica y silvícola más
importante.

La información edáfica del bosque se puede resumir en una tabla de la manera siguiente:

Tabla 31. Características edáficas del bosque

Pendiente Relieve Textura


Estrato Área (has)
promedio (%) predominante predominante

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 93

La información dasométrica del bosque puede resumirse en una tabla que considere la
información siguiente:

Tabla 32. Características cuantitativas del bosque

DAP Altura
Árboles por Área basal Volumen IMA
Estrato promedio promedio
hectárea (m²/ha) (m³/ha) (m³/ha/año)
(cms) (m)

La información silvícola del bosque se puede resumir de la manera siguiente:

Tabla 33. Características cualitativas del bosque

Estado fitosanitario (%) Regeneración natural por hectárea


Estrato
Árboles Árboles
Brinzales Latizales Total
sanos dañados

VI unidad
UNIDAD VII

MODALIDADES DE
INVENTARIOS FORESTALES

OBJETIVOS DE LA UNIDAD

Al finalizar la unidad, los estudiantes estarán en capacidad de:

1. Aplicar el modelo PROCAFOR para inventariar bosques de coníferas.

2. Aplicar la metodología que se utiliza para inventariar bosques latifoliados húmedos.

3. Aplicar la metodología de inventario que se utiliza para estimar carbono en ecosistemas


forestales.
Manual de Inventarios Forestales 95

7.1. INTRODUCCIÓN

El termino 'inventario forestal' ha sido utilizado en el pasado como sinónimo de


“procedimientos para la estimación de recursos leñosos (principalmente maderables
comerciales) contenidos en el bosque”. Sin embargo, la necesidad de recopilar información
respecto de otros recursos no leñosos ha progresivamente modificado este concepto, para dar
cabida a inventarios especializados para la recolección de información de recursos de fauna,
flora, agua, recreación, fibras, plantas medicinales, frutas, lianas y muchos otros recursos no
leñosos. Todos ellos buscan estimular el desarrollo de inventarios multi-recursos, en cuyo
diseño y ejecución deben participar especialistas de diferentes disciplinas.

En relación con esta nueva tendencia, es necesario señalar que, para la sociedad, el bosque ha
dejado de ser solamente madera de aserrío; cada día hay más conciencia de que este también es
la fuente de gran cantidad de bienes no maderables. Asimismo, nuestra sociedad reconoce que
el bosque produce servicios ambientales, los que en muchos casos poseen mayor valor que la
madera, pero para los cuales no se han desarrollado medidas de cuantificación.

Actualmente se reconocen como servicios ambientales del bosque: la mitigación de gases con
efecto invernadero, la belleza escénica, la paz y tranquilidad que un bosque da al ser humano, la
conservación de biodiversidad y de recursos genéticos, la regulación de caudales y de la calidad
del agua en las cuencas hidrográficas, y la prevención y atenuación de desastres naturales.
Estas tendencias exigen un cambio de actitud en el profesional forestal; cambio que debe
reflejarse en la utilización de las técnicas de inventario forestal como un medio para cuantificar
y valorar, tanto los productos maderables y no maderables del bosque, como los servicios
ambientales que este produce. (Catie, 2002)

7.2. INVENTARIOS FORESTALES SEGÚN MODELO PROCAFOR

En el año de 1993, fue introducido a Guatemala el modelo centroamericano para la formulación


de planes de manejo (modelo PROCAFOR). Este modelo proporciona las bases técnicas para
realizar inventarios forestales y planes de manejo en bosques de coníferas. Los aspectos más
sobresalientes de esta metodología se describen a continuación.

7.2.1. OBJETIVOS DEL INVENTARIO

En el inventario forestal se persiguen los objetivos siguientes:

 Obtener información sobre el uso del suelo y las coberturas de cada estrato de bosque.
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 96

 Conocer el volumen y crecimiento para determinar la corta permisible y las características


del terreno para planificar el aprovechamiento.

 Identificar los tratamientos silvícolas.

7.2.2. DISEÑO DEL INVENTARIO

a) Rodalización del área

Inicialmente se rodaliza el área para poder planificar y realizar el inventario forestal. Esta
metodología se basa en la rodalización del bosque en estratos o clases de desarrollo (cuadro
12).

Cuadro 12. Criterios para rodalizar el bosque según el modelo PROCAFOR.


Código Estratos o clases de desarrollo Características

La densidad no es suficiente para asegurar la


regeneración del sitio. También pueden
C0 Regeneración no adecuada
ocupar el sitio algunos árboles semilleros
(no más de 4 m²/ha).
Son rodales con densidad aceptable. La
altura promedio de las plantas es mayor a 1
metro. Generalmente no se pueden extraer
C1 Regeneración adecuada
productos comerciales. Pueden haber
algunos árboles semilleros (no más de 4
m²/ha).
Son bosques jóvenes que están en el período
del raleo; es posible extraer producto como
C2 Bosques jóvenes
leña, aunque normalmente no es posible
extraer trozas.
Son bosques con edad media; en el raleo se
C3 Bosques medianos
pueden obtener algunas trozas y leña.
Son rodales de densidad variada con árboles
maduros y de volumen alto. El objetivo del
C4 Bosques maduros
próximo tratamiento silvicultural es la
regeneración del sitio.
C5 Bosques tratados para la Son rodales cortados y tratados con el

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 97

regeneración natural objetivo de favorecer la regeneración


natural. La densidad de los árboles
semilleros es normalmente entre 15 a 30
árboles por hectárea.
La productividad del bosque ha bajado
notablemente. La densidad es muy baja; la
edad de los árboles es muy avanzada; la
C6 Bosques de baja productividad
especie es incorrecta o de poco valor; el
bosque esta destruido por incendios, el
viento o los insectos.

b) Forma y tamaño de la parcela

Las parcelas de forma circular son las más utilizadas. El tamaño de la parcela se define a través
del cuadro siguiente.

Cuadro 13. Determinación del tamaño de parcela según el modelo PROCAFOR.


Tamaño de parcela según estructura:
Estrato
Homogénea Normal Heterogénea
C0 100 m²
C1 50 m² 50 m² 50 – 100 m²
Regeneración
C2 100 m² 100 m² 200 m²
Jóvenes
C3 100 m² 100 m² 200 m²
Medianos
C4 100 m² 200 m² 200 – 500 m²
Maduros
C5
200 – 500 m² 200 – 500 m² 200 – 500 m²
C6
ó 100% ó 100% ó 100%
Tratados

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 98

c) Tamaño de la muestra

El número de parcelas dentro de cada rodal, este definido por el tamaño y estructura del mismo.
En esta metodología el número de parcelas que se deben establecer en un rodal se obtiene de la
tabla siguiente.

Tabla 34. Determinación del número de parcelas según el modelo PROCAFOR

Número de parcelas según estructura


Área de rodal (has)
Homogénea Normal Heterogénea
<1 2–3 3–4 4–5
1–2 3–4 4–6 5–7
2–5 4–5 5–7 6–8
5 – 10 5–6 6–8 7–9
10 – 20 6–8 7–9 8 – 12
> 20 7–9 8 – 12 10 – 15

d) Método de muestreo

Las parcelas se ubican dentro de cada rodal siguiendo un criterio sistemático.

e) Variables a medir

Inicialmente en cada punto de muestreo se obtiene información del terreno, por ejemplo: el tipo
de suelo, pendiente promedio, altitud, uso del suelo, etc.

En esta metodología, para la medición de las variables dasométricas y silvícolas se combina la


utilización de parcelas de dimensión fija y parcelas de dimensión variable (con relascopio).

MEDICIONES EN PARCELAS DE TAMAÑO FIJO:

 Conteo de todos los individuos presentes en la parcela.

 Selección de 2 a 4 árboles tipo (árboles representativos de la parcela), a los cuales se les


mide las variables siguientes:
 DAP en centímetros (sin decimales)
 Altura total en metros (sin decimales)

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 99

 Edad total en años (obtenida con barreno de Pressler o a través del conteo de verticilos
para los individuos pequeños)
 Crecimiento de los últimos 5 años, a través de la medición de una muestra de madera
extraída con barreno de Pressler.

MEDICIONES EN PARCELAS DE TAMAÑO VARIABLE

 En cada punto de muestreo, con un relascopio se obtiene el área basal por hectárea,
haciendo las correcciones del área basal en aquellos sitios donde existan pendientes
mayores a 5 grados.

 Este procedimiento se realiza solamente en los estratos C2, C3, C4, C5 y C6.

f) Procesamiento de la información

Para procesar las variables dasométricas de volumen, índice de sitio, incrementos, etc., se
utilizan curvas y tablas que han sido generadas a través de investigaciones forestales que se han
realizado en Guatemala y algunos países de América Central. Para hacer los cálculos y análisis
de datos se ha diseñado un programa especial para planes de manejo y planes operativos (SEP);
sin embargo, este procesamiento también se puede hacer manualmente.

7.3. INVENTARIOS FORESTALES EN BOSQUES LATIFOLIADOS HÚMEDOS

En la Zona de Usos Múltiples (ZUM) de la Reserva de la Biosfera Maya (RBM) en Petén,


Guatemala, se está promoviendo el manejo forestal, mediante un proceso ordenado de
otorgamiento de concesiones (comunitarias, industriales y mixtas), como estrategia para reducir
la conversión del bosque a otros usos no sostenibles de la tierra, conservar la biodiversidad y
contribuir al desarrollo socioeconómico de la región.

En el presente documento se presentan los aspectos más relevantes en el diseño y planificación


de inventarios forestales para la elaboración de planes de manejo en el sistema de concesiones
de la RBM. Es necesario aclarar que la metodología que se detalla a continuación sólo se
refiere a inventarios de productos maderables para bosques latifoliados húmedos y para áreas
grandes (mayores de cinco mil hectáreas). Los inventarios de productos no maderables
obedecen a otro tipo de diseños debido a sus características especiales.

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 100

7.3.1. OBJETIVOS DEL INVENTARIO

En el caso de las concesiones forestales de la RBM el objetivo del inventario es recabar


información confiable y al menor costo, de las características del área, así como información
dasométrica que permita la elaboración del plan de manejo. Por lo tanto, en el inventario
forestal se requiere la estimación de:

– Distribución y características de los principales estratos forestales.

– Volumen comercial para todas las especies del bosque productivo bajo manejo (DAP  25
cm), con un error máximo de muestreo del 15% al 95% de confianza para el conjunto de
estratos.

– Distribución por clase díamétrica del número de árboles, área basal y volumen comercial de
todas las especies por grupo comercial.

– Abundancia de regeneración natural.

7.3.2. DISEÑO DEL INVENTARIO

A continuación, se presentan los principales aspectos que se toman en cuenta al momento de


iniciar la planificación y diseño de los inventarios forestales en la RBM.

a) Tamaño y forma de las parcelas

En estos inventarios las parcelas tienen un tamaño de 1 hectárea. La forma de la parcela es


rectangular, con dimensiones de 20  500 metros.

b) Tamaño de la muestra

En el departamento del Petén se han realizado investigaciones para definir cuál es el tamaño
“ideal” de la muestra para los bosques latifoliados húmedos. Con base a estas investigaciones
se ha propuesto que el número de parcelas a levantar se determine a través de la tabla siguiente.

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 101

Tabla 35. Intensidades mínimas y número de parcelas de muestreo en función del área.

Superficie a inventariar Intensidad mínima de Número de parcelas a levantar


(has) muestreo (%) (de 1 hectárea cada una)
5,000 0.80 40
10,000 0.50 50
15,000 0.40 60
20,000 0.35 70
30,000 0.27 80
40,000 0.23 90
50,000 0.20 100
100,000 0.15 150
Fuente: Carrera, 1996.

c) Método de muestreo

En este tipo de inventarios se recomienda estratificar el área y luego en cada estrato establecer
las parcelas en forma sistemática.

d) Variables a medir

En estos inventarios la parcela de 1 hectárea (20  500 m) se divide en veinte subparcelas y se


numeran para realizar un muestreo de los árboles, fustales, latizales y brinzales (ver esquema).

11 10 1m
12 9 10 m
13 8
14 7
15 6
500 m 50 m
16 5
17 4
18 3
19 2
20 1
 20 m  10 m 

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 102

Las variables a evaluar en cada individuo se detallan a continuación:

Tabla 36. Variables a medir en bosques latifoliados húmedos


Dimensiones del Dimensiones de No. de subparcelas
Individuo Datos a recolectar
individuo la subparcela donde se evalúa
-No. de árbol
-Nombre común
Árbol DAP  25 cm 10  50 m Todas -DAP
-Altura comercial
-Defectos
Entre 10 y 24.9 -Nombre común
Fustal 10  50 m 1, 7, 11 y 17
cms de DAP -DAP
Entre 5 y 9.9 -Nombre común
Latizal 10  10 m 1, 7, 11 y 17
cms de DAP -No. individuos
 de 30 cms de
-Nombre común
Brinzal altura y  de 5 1  10 m 1, 7, 11 y 17
-No. individuos
cms de DAP

También se evalúan las variables del terreno, y entre las más importantes están las siguientes:

 Topografía: plana, ondulada, accidentada.


 Drenaje: excesivo, bueno, pobre, nulo.
 Estado del bosque: intervenido, no intervenido, sin bosque.
 Sitios arqueológicos: existe, no existe.

e) Procesamiento de la información

Existen diversas fórmulas para determinar el volumen comercial. La FAO, en los años sesenta,
realizó en Petén la medición de 336 árboles sin gambas y 465 árboles con gambas, calculando
separadamente los dos grupos y utilizando 15 ecuaciones de regresión. Del análisis realizado,
se determinó que para estimar el volumen comercial de las especies latifoliadas del Petén se
debe utilizar la fórmula siguiente:

1 D 
V  0.0567  0.5074  DAP²  Hc    (7-1)
 100 
Donde:
V = volumen comercial (m³)
DAP = diámetro a la altura del pecho (cm)
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 103

Hc = altura comercial (m)


D = defectos del árbol en porcentaje

Si bien, esta fórmula, en opinión de muchos está descontinuada, se recomienda su utilización


hasta la propuesta de otra fórmula que se ajuste mejor a las necesidades. (Catie, 1996)

7.4. INVENTARIOS PARA ESTIMAR CARBONO EN ECOSISTEMAS


FORESTALES

En sitios forestales el carbono se acumula en cuatro fuentes:


 Biomasa arriba del suelo (vegetación arbórea, arbustiva y herbácea)
 Biomasa abajo del suelo (sistema radicular)
 Hojarasca y materia vegetal muerta
 Suelos

Por lo tanto, el muestreo de carbono debe realizarse atendiendo a estas cuatro fuentes, lo cual se
describe a continuación:

7.4.1. DETERMINACIÓN DEL CARBONO ARRIBA DEL SUELO

Es muy importante hacer notar que el componente más importante de esta fuente de variación
son los árboles, mientras que la maleza por su baja tasa de fijación puede dejar de muestrearse.

 Muestreo: en las parcelas se deben registrar todos los individuos con un DAP > 5 cm. Se
emplean los mismos principios de muestreo que se aplican en un inventario forestal normal.

 Cálculos: la biomasa de los árboles se puede calcular por medio de las ecuaciones:

Tabla 37. Ecuaciones de biomasa para árboles latifoliados por zona climática
Rango de
Zona climática Ecuación r2
DAP (cm)
Seca: <1500 mm/año y una Y = exp [–1.996 + 2.32 × Ln (DAP)] 5 – 40 0.89
estación seca larga. Y = 10^[–0.535 + Log10 (AB)] 3 – 30 0.94
Húmedo: 1500 – 4000 Y = 42.69 – 12.8 × DAP + 1.242 × (DAP)² 0.84
mm/año y una estación seca 5 – 148
Y = exp [–2.134 + 2.53 × Ln (DAP)] 0.97
corta o sin estación seca.
Muy húmedo: >4000
Y = 21.297 – 6.953 × DAP + 0.74 × (DAP)² 4 – 112 0.90
mm/año y sin estación seca.

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 104

Y = biomasa (kilogramos); DAP = diámetro a la altura del pecho (cms);


AB = área basal (cm²); exp = “e elevado a la potencia de […]”

Tabla 38. Ecuaciones de biomasa para otras especies

Especie Ecuación R2
Coníferas Y = exp [–1.17 + 2.119 × Ln (DAP)] 0.98
Palmas Y = 4.5 + 7.7 × H 0.90
Café Y0 = 0.67134058 + [0.00072208395 × exp(–H/–0.40531445)] 0.98

Banano Y0 = 185.1209  881.9471  Ln( H ) / H ² 0.99

Y = biomasa (kilogramos); Y0 = biomasa (gramos); H = altura total (m)

El valor de biomasa en kilogramos es dividido dentro de 1,000 para obtener toneladas (t). Las
toneladas son multiplicadas por 0.5 para obtener carbono (C). La razón por la que se multiplica
por 0.5 para obtener carbono se debe a que la literatura indica que en promedio la materia
vegetal contiene un 50% de carbono, una vez que se ha removido el agua. El valor de carbono
es dividido dentro de la superficie de la parcela de muestreo (m²) para obtener tC/m². Al
multiplicarlo por 10,000 m²/ha se obtienen tC/ha.

7.4.2. DETERMINACIÓN DEL CARBONO ABAJO DEL SUELO

Para determinar la biomasa abajo del suelo, que consiste en el sistema radicular de la
vegetación existente es conveniente estimarla como un porcentaje de la biomasa arriba del
suelo. La literatura de inventarios de carbono indica que un valor entre 10 y 15% es
conservador pero que permite obtener un estimado aproximado de la biomasa en esta fuente.
Para cultivos como el café la literatura reporta que la proporción entre la biomasa arriba del
suelo y la de raíces es de aproximadamente 30%.

7.4.3. DETERMINACIÓN DEL CARBONO EN HOJARASCA Y MATERIA


VEGETAL MUERTA

Esta fuente de biomasa se mide de dos maneras:

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 105

a) HOJARASCA

 Muestreo: la hojarasca en sí, se colecta del suelo en subparcelas de 1 m², las que pueden
estar colocadas en algún vértice de la parcela que se utiliza para medir árboles, siempre
teniendo cuidado de colectar toda la capa de materia en descomposición incluyendo el
humus y materia vegetal muerta que no esté en proceso de descomposición aún. Previo a la
colecta de hojarasca, se debe eliminar cualquier vegetal “vivo” que este presente en la
subparcela de 1 m².
El material colectado en la subparcela se coloca en una bolsa de muestreo, se pesa y se
anota el peso. Este procedimiento puede necesitar hacerse por partes debido al volumen de
material presente y la capacidad de las pesas disponibles. El material pesado debe
concentrarse en un sitio, homogenizarse y después sacar una muestra representativa (por
ejemplo, lo que quepa en una mano), la que deberá colocarse en bolsas de papel
debidamente numeradas e identificadas (es importante anotar el peso y un número de
identificación).

 Cálculos: una vez terminado el proceso de medición se procede a llevar las muestras al
laboratorio, en donde se secan las muestras de hojarasca a 80 grados centígrados por 24
horas para determinar el peso seco. Para el cálculo de biomasa en esta fuente se obtiene el
valor para el contenido de humedad. Este valor se calcula de la siguiente manera:

Phs  Pss
CH  (7-2)
Phs

Donde:
CH = contenido de humedad
Phs = peso húmedo de la submuestra (gramos)
Pss = peso seco de la submuestra (gramos)

Con el valor de contenido de humedad se procede a calcular la proporción del peso húmedo que
corresponde a biomasa:

Y  Pht  Pht  CH  (7-3)

Donde:
Y = biomasa (gramos)
Pht = peso húmedo total (gramos)

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 106

Los valores obtenidos se dividen dentro de 1 000,000 para obtener toneladas. Este valor se
1

multiplica por 0.5, lo que da toneladas de carbono fijado. Las toneladas de carbono se dividen
dentro del total de metros muestreados para obtener tC/m². Este valor al multiplicarlo por
10,000 m²/ha nos proporciona tC/ha.

b) MATERIA VEGETAL MUERTA

 Muestreo: la materia vegetal muerta se refiere a los árboles muertos ya sea en pie o caídos.
Este material se mide en la misma parcela que se utiliza para la medición de árboles vivos.
En el caso de los árboles muertos en pie se les debe medir el DAP. Si están caídos se deben
medir dos diámetros en el tronco (en los extremos) y su longitud total.

 Cálculos:

Para el cálculo de biomasa, los árboles muertos en pie utilizan las mismas ecuaciones de los
cuadros 16 y 17, con la condición de que sólo toman un 70% de la biomasa reportada por la
ecuación. De esta manera la ecuación para árboles latifoliados de la zona húmeda podría
quedar así: Y = {exp [–2.134 + 2.53 × Ln(DAP)]} × 0.7. De aquí en adelante, para obtener
tC/ha, se emplea el mismo procedimiento que se utiliza en los árboles vivos.

Para troncos caídos, se obtiene el volumen del tronco mediante la fórmula de Smalian y
después con la densidad de la madera se define la biomasa, quedando la ecuación así:
Y = Volumen (m³) × Densidad (kg/m³). Es importante contar con valores de densidad para
las especies existentes en el área evaluada. Si se desconocieran valores de densidad para
las especies encontradas se pueden tomar muestras de madera para determinar la densidad o
utilizar un valor de 0.5. De aquí en adelante, para obtener tC/ha, se emplea el mismo
procedimiento que se utiliza en los árboles vivos.

7.4.4. DETERMINACIÓN DEL CARBONO CONTENIDO EN EL SUELO

Al medir el suelo se busca identificar cuál es el contenido de carbono en los primeros 30 cms de
profundidad. Generalmente este componente tiene un alto valor de contenido de carbono.
También es el componente que sufre menos alteraciones de su contenido de carbono. Si se trata
de proyectos de reforestación en áreas degradadas, es posible que el carbono del suelo aumente
significativamente y en casos como este es muy importante contar con mediciones iniciales y
periódicas del contenido de carbono.

 Muestreo: se recomienda utilizar la misma subparcela que se emplea en la medición de la


hojarasca (de 1 m²). Para lo cual se debe colectar una muestra de suelo en el centro de la
subparcela, haciendo un hoyo de 30 cms de profundidad. Prepare una muestra compuesta
de suelo de la siguiente manera: homogenice y cierna el suelo colectado con una malla de 5
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 107

mm, escoja aleatoriamente una muestra representativa y colóquela en una bolsa de papel
debidamente identificada.

Para determinar el contenido de carbono por unidad de área en el suelo, es necesario


conocer la densidad aparente del suelo. Con este propósito se puede utilizar el método del
“cilindro de volumen conocido”, el cual se describe a continuación:
1. Pese los cilindros y sus tapaderas e identifíquelo como peso 1 (P1).
2. Prepare la superficie del suelo (que esté lisa) a una profundidad de 5 cms.
3. Introduzca el cilindro en el suelo, para rellenar el interior del cilindro, sin comprimir
(utilice aceite mineral si ocurre adhesión del suelo con el metal).
4. Remueva el exceso de suelo de los extremos y remueva el cilindro con el suelo. Guarde
el cilindro de suelo en una bolsa o recipiente.
5. Coloque las muestras en un horno a 100 ºC por aproximadamente 72 horas. Después de
secar, pese el cilindro más el suelo y regístrelo como peso 2 (P2).
6. Calcule la densidad aparente en gr/cm³: DA = (P1 – P2)/volumen del cilindro.

Es importante explorar si al equipo se le facilita obtener la muestra verticalmente (como se


describe arriba) u horizontalmente, introduciendo el cilindro en una “pared” del hoyo
cavado para obtener la muestra de suelo. De acuerdo con los requerimientos del laboratorio
que procesará las muestras se puede optar por únicamente obtener la muestra para densidad
aparente y utilizar este mismo material para determinar materia orgánica.

 Cálculos: las muestras de suelo se procesan para determinar el contenido de carbono (CC)
en el suelo con el método de Walkley-Black u otro utilizado por el laboratorio disponible.
El carbono contenido en el suelo se calcula a partir de los valores de porcentaje de carbono
y densidad aparente con la siguiente fórmula:

Carbono en el suelo (tC/ha) = CC × DA × P (7-4)

Donde:
CC = contenido de carbono (%)
DA = densidad aparente (gr/cm³)
P = profundidad de muestreo (cms)

VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 108

ANEXOS
Anexo 1. Tabla de t de Student
90% 95% 99%
gl gl
0.10 0.05* 0.01
1 6.314 12.706 63.657 1
2 2.920 4.303 9.925 2
3 2.353 3.182 5.841 3
4 2.132 2.776 4.604 4
5 2.015 2.571 4.032 5

6 1.943 2.447 3.707 6


7 1.895 2.365 3.499 7
8 1.860 2.306 3.355 8
9 1.833 2.262 3.250 9
10 1.812 2.228 3.169 10

11 1.796 2.201 3.106 11


12 1.782 2.179 3.055 12
13 1.771 2.160 3.012 13
14 1.761 2.145 2.977 14
15 1.753 2.131 2.947 15

16 1.746 2.120 2.921 16


17 1.740 2.110 2.898 17
18 1.734 2.101 2.878 18
19 1.729 2.093 2.861 19
20 1.725 2.086 2.845 20

21 1.721 2.080 2.831 21


22 1.717 2.074 2.819 22
23 1.714 2.069 2.807 23
24 1.711 2.064 2.797 24
25 1.708 2.060 2.787 25

2.056
26 1.706 2.779 26
27 1.703 2.052 2.771 27
28 1.701 2.048 2.763 28
29 1.699 2.045 2.756 29
30 1.697 2.042 2.750 30

40 1.684 2.021 2.704 40


60 1.671 2.000 2.660 60
120 1.658 1.980 2.617 120
z 1.645 1.960 2.576 z
Diseño: Ing. Edwin Sosa

VII unidad
Manual de Inventarios Forestales 109

Anexo 2.Ecuaciones para estimar volumen total sin corteza en coníferas

VII unidad
Manual de Inventarios Forestales 110

Anexo 3. Ecuaciones para estimar volumen total sin corteza para especies latifoliadas

VII unidad
Manual de Inventarios Forestales 111

BIBLIOGRAFÍA

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