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INTRODUCCIÓN A LOS
INVENTARIOS FORESTALES
OBJETIVOS DE LA UNIDAD
El termino inventariar significa cuantificar el recurso forestal desde los puntos de vista
cualitativos y cuantitativos. Por lo que un inventario forestal es la operación tendiente a
obtener datos relativos a los diversos parámetros del bosque y las manifestaciones del
crecimiento, de acuerdo con la calidad de estación. (Padilla, 1987)
El inventario forestal tiene como objetivo conocer la magnitud del recurso forestal, su
superficie, su distribución, composición y existencias maderables. También, es la
cuantificación y calificación de las especies forestales arbóreas y sus características ecológico–
silvícolas. (Raymond, 1991)
Un inventario forestal es el método usado para medir y registrar los datos del bosque, procesar
estos datos de campo para obtener así información de la cantidad y calidad de los árboles y
características del área boscosa, con un grado de detalle y precisión de acuerdo al objetivo
previsto y la exactitud requerida. (Ferreira, 2005).
Un inventario forestal es un procedimiento útil para obtener información necesaria para la toma
de decisiones sobre el manejo y aprovechamiento forestal.
Todo inventario de recursos forestales debe recabar cinco tipos de información: área de
bosques, localización y distribución por tipos de bosque, cantidad de recursos existentes,
calidad de los recursos y cómo cambian éstos en el tiempo. Estos aspectos se discuten a
continuación.
En el manejo forestal, hay dos momentos durante los cuales es importante medir y calcular las
áreas de bosque.
I unidad
Manual de Inventarios Forestales 3
El segundo momento para medir y calcular áreas de bosque es antes de la planificación del
aprovechamiento, cuando ya se ha decidido cuánto y dónde se va a aprovechar cada año. En
ese momento, hay que medir y marcar el área de corta anual como unidad productiva y
administrativa.
El área y forma del bosque se presentan en un mapa general, a una escala conveniente. En el
mapa se incluyen los perímetros del bosque con indicación de los puntos de referencia
(esquineros, cruces, árboles límites), las características naturales del bosque (ríos, mesetas,
planicies, vertientes), carreteras, caminos, construcciones, entre otros. Asimismo, al mapa se le
debe añadir los nombres de los propietarios vecinos. Se recomienda un error inferior al 1/100 ó
1% en la determinación de los perímetros. (Catie, 2002; Fundap, 1993)
Un rodal se define como la unidad mínima geográficamente continua de bosque, que tiene
características homogéneas en cuanto a tipo de bosque, especie dominante, densidad, clase de
edad, clase de altura, clase de pendiente y calidad de sitio. El término rodal es aplicado en
plantaciones y estratos en bosques naturales.
La rodalización es un trabajo de gran importancia que sirve de base al manejo para determinar
de manera exacta y detallada los recursos del bosque, facilitar la localización y la organización
de las cortas. Cualquier trabajo de manejo se refiere al área de los rodales. Se recomienda un
error inferior al 1/10 ó 10% en la medición de las divisiones del bosque. (Fundap, 1993)
I unidad
Manual de Inventarios Forestales 4
La medición del volumen es obviamente el resultado más importante del inventario, sin
embargo, es la variable dasométrica que esta sujeta a mayores errores de medición. Por esta
razón el inventario debe ser ejecutado cuidadosamente.
Los resultados de volumen sirven para decidir sobre el orden cronológico de áreas de
aprovechamiento anual y para dar una idea del volumen aprovechable en el presente.
Los inventarios forestales deben medir la calidad de los fustes, es decir, la calidad de madera
que existe en el bosque. La calidad de los fustes se mide solamente en los árboles tipo o en
todos los árboles medidos, según las características de la vegetación que se este muestreando.
Esta información se utiliza para determinar la estrategia de intervención en las operaciones
silviculturales a aplicar, especialmente en los raleos. (Fundap, 1993)
Dentro del concepto clásico se han definido varios tipos de inventarios clasificados según el
método estadístico y según su objetivo. Esta clasificación se presenta a continuación.
I unidad
Manual de Inventarios Forestales 5
Es decir, el tipo de inventario elegido debe considerar la medición total o una muestra con
distribución al azar o sistemática. También, de acuerdo con las características del recurso, se
debe considerar o no la división en estratos. (Catie, 2002)
El inventario forestal debe ser definido bajo un objetivo, indicador del nivel de detalle, es decir
el grado de precisión que debe tener el muestreo y la cantidad de información requerida.
Consiste en la evaluación rápida del bosque, con el fin de conocer la disponibilidad volumétrica
actual, puede ser sobre el volumen total de todas las especies o sobre determinadas especies de
acuerdo a su uso.
I unidad
Manual de Inventarios Forestales 6
El propósito principal de este inventario es evaluar los procesos dinámicos que ocurren en el
bosque; es decir, el crecimiento, mortalidad y reclutamiento de nuevos árboles a partir de un
diámetro establecido.
Malleux establece que la precisión de un inventario se indica a través del error de muestreo
expresado como un porcentaje del volumen medio por hectárea. Usando el error de muestreo a
un nivel de confianza de 95% (es el nivel más usado), como índice de grado de precisión.
a. Inventario de reconocimiento.
Consiste en una evaluación rápida del potencial forestal de una determinada superficie, con el
fin de clasificarla “a priori” apta o no apta a una actividad económica. En el que, el error de
muestreo no es necesario.
I unidad
Manual de Inventarios Forestales 7
Estos inventarios tienen como objetivo recolectar información básica para la evaluación y
monitoreo de bosques a gran escala y de interés gubernamental principalmente, o bien para
estudios de factibilidad de empresas forestales. Estos inventarios son de baja a mediana
intensidad de muestreo (0.1% a 2% del área).
d. Inventario detallado.
I unidad
UNIDAD II
OBJETIVOS DE LA UNIDAD
1. Conocer los términos estadísticos que tienen relación con los inventarios forestales.
1.4.1 ESTADISTICA
b) Estadística inferencial. Esta estadística proporciona una metodología para tomar decisiones
sobre una población, siguiendo un razonamiento derivado de la evidencia de datos
numéricos observados en una muestra en esa misma población. (Padilla, 1987)
1.4.2 POBLACION
Una población se define como el conjunto de individuos con características comunes, cuyo
conocimiento es objeto de interés desde un punto de vista estadístico. Se puede distinguir entre
población de individuos y población de observaciones.
Una población de individuos esta formada por todo el conjunto de individuos que poseen una
característica previamente establecida; a partir de esta población de individuos se pueden
generar una o varias poblaciones de observaciones que es el conjunto de todos los valores que
puede tomar una variable de interés sobre la población de individuos.
1.4.3 MUESTRA
La muestra debe ser representativa de la población para la cual deseamos generar información.
Para obtener una muestra representativa de una población debemos estar seguros de que todos
los elementos de la población posean igual probabilidad de ser seleccionados como parte de la
muestra. (Catie, 2002)
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Manual de Inventarios Forestales 10
Se define como la unidad más simple elegida para componer o medir una muestra, puede ser un
individuo, un número dado de individuos, una unidad de superficie, etc. Es la unidad de
muestra empleada para inferir las características de una población. (Padilla, 1987)
2.1.5. MUESTREO
El muestreo es un procedimiento por medio del cual se seleccionan, miden o registran las
características previamente determinadas, de la muestra de una población, con el objetivo de
conocer esa población a través del estudio de tales muestras. (Padilla, 1987)
2.1.6. VARIABLE
Variable cualitativa: es aquella en que no es posible hacer una medición numérica para
describir el atributo, es decir, estas variables describen cualidades. Por ejemplo, color de
follaje, forma de hojas, apariencia de un fruto, etc.
Variable continua: es aquella en la cual pueden ocurrir todos los valores posibles,
existentes dentro de una amplitud de variación dada. Por ejemplo, entre dos posibles
valores de biomasa (300 y 3001 kg), existe un número alto de posibles observaciones
(300.001, 300.002, 300.003 ….. 300.999 kg).
Variable discreta: es aquella en la cual no ocurren todos los valores posibles que contiene
una amplitud de variación dada. Es común encontrar variables discretas dentro del
conjunto de los números enteros, ya que se generan a partir de conteos. Por ejemplo, el
número de plantas por parcela, el número de insectos capturados en una trampa, el número
de frutos de un árbol, etc. (Catie, 2002; Padilla, 1987)
II unidad
Manual de Inventarios Forestales 11
2.1.7. ESTADISTICO
2.1.8. PARÁMETRO
Un parámetro es una cantidad numérica que define a una población con respecto a alguna
característica. Aun en poblaciones finitas el parámetro rara vez llega a conocerse, por lo que
comúnmente se estima a partir de muestras. (Padilla, 1987)
Los datos obtenidos con la evaluación y medición de todas las unidades de muestreo en la
población (censo), o con la evaluación de una parte de las unidades de muestreo en la población
(muestreo), se deben analizar para generar información utilizable. Comúnmente se utilizan
técnicas estadísticas para analizar estos datos, y en inventarios forestales, las más utilizadas son
las siguientes.
Una de las formas más sencillas de generar información a partir de datos de un gran número de
observaciones de una variable es por medio de cuadros de distribución de frecuencias. Las
distribuciones de frecuencias permiten observar tendencias o rasgos sobresalientes de las
observaciones.
Una vez que los datos están agrupados es posible observar las tendencias de las observaciones,
tales como valores más frecuentes, dispersión de los valores, etc. Los valores del cuadro de
distribución de frecuencias se pueden utilizar para construir histogramas o polígonos de
frecuencia. (Catie, 2002)
II unidad
Manual de Inventarios Forestales 12
Son valores calculados que representan cierta característica, y que se llaman parámetros cuando
se calculan de una población de observaciones, y estadísticos, cuando se calculan de una
muestra. Los estadísticos más utilizados para inventarios sin estratificar con muestreo aleatorio
y sistemático son los siguientes.
_
A. MEDIA ARITMÉTICA (X)
Es el índice de tendencia central más usado para describir una característica de la población; en
una muestra proveniente de un inventario forestal se estima así:
X
(X ) (2-1)
n
Donde:
X = Volumen por parcela (m³/ha)
n = Número de parcelas levantadas
Es el índice de dispersión más usado para medir la desviación de los valores individuales con
respecto a la media.
Un valor bajo indica que la población es homogénea, y un valor alto indica que la población es
heterogénea. A partir de una muestra se puede estimar por:
( X ²) n
( X )²
S (2-2)
n 1
Donde:
X² = Volumen por parcela al cuadrado
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Manual de Inventarios Forestales 13
S
CV 100 (2-3)
X
Así como la desviación estándar mide el promedio de las desviaciones de las observaciones
individuales con respecto a la media muestral, el error estándar mide el desvío de las medias
muéstrales respecto de la media poblacional, y se calcula por la fórmula:
S n
Sx 1 (2-4)
n N
Donde:
N = Área del bosque en has / Área de la parcela en has
En la práctica, cuando n/N es igual o menor que 0.05, se puede considerar la población como
infinita; también se puede considerar como población infinita un bosque con un área mayor de
400 hectáreas.
Cuando la población es infinita, para el cálculo del error estándar se emplea la fórmula
siguiente:
S
Sx (2-5)
n
El error de muestreo es diferente para cada parámetro forestal (densidad, área basal y volumen)
y también difiere de especie a especie.
II unidad
Manual de Inventarios Forestales 14
En general, el error de muestreo para una especie es mayor, para un grupo de especies se reduce
el error y más todavía si se trata del total de especies. Se calcula por la expresión:
Em (Sx) (t ) (2-6)
Donde:
t = Valor t de Student (depende del nivel de confianza requerido y de los grados de libertad)
Em
Em% 100 (2-7)
X
G. LIMITES DE CONFIANZA
La media obtenida a partir de una muestra difiere de la verdadera media poblacional. La media
poblacional está comprendida entre un límite inferior y un límite superior. Es decir, se puede
estimar a través de las relaciones siguientes:
LCs X Em (2-8)
LCi X Em (2-9)
Donde:
LCs = Límite de confianza superior
LCi = Límite de confianza inferior
H. TAMAÑO DE LA MUESTRA
CV ² t ²
n (2-10)
E²
Donde:
II unidad
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Para realizar el análisis estadístico de un inventario forestal estratificado se utilizan las fórmulas
siguientes:
A. MEDIA ESTRATIFICADA
Xe
( Xj ) ( Nj ) (2-11) Nj
Aj
(2-12)
Nj Tp
Donde:
Xe = Volumen estratificado (m³/ha)
Xj = promedio de volumen del estrato j (m³/ha)
Nj = tamaño del estrato j, expresado en número de parcelas
Aj = área del estrato j (has)
Tp = área de la parcela (has)
Se
(Sj) ( Pj ) 100 (2-13)
Xe
Aj
Pj (2-14)
At
Donde:
Se = desviación estándar estratificada (%)
Sj = desviación estándar del estrato j (m³/ha)
Pj = proporción de cada estrato
At = área total del bosque (has)
II unidad
Manual de Inventarios Forestales 16
Sxe
(Sj ) ( Pj ) ² (Sj)² ( Pj ) (2-15)
n N
At
N (2-16)
Tp
Donde:
Sxe = error estándar estratificado (m³/ha)
n = número total de parcelas levantadas
D. TAMAÑO DE LA MUESTRA
t ² ( Sj )² ( Pj )
ne (2-17)
t ² ( Sj )² ( Pj )
( Ea )²
Nj
E
Ea ( Xe) (2-18)
100
Donde:
ne = número de parcelas a levantar en todo el bosque
t = valor T de Student (depende del nivel de confianza requerido y de los grados de libertad)
Ea = precisión o error en unidades del valor (m³/ha)
E = error de muestreo máximo requerido, generalmente 10% ó 15%
NPe1 ne Pj (2-19)
ne ( Sj ) ( Pj )
NPe 2 (2-20)
(Sj) ( Pj )
Donde:
NPe1 = número de parcelas que le corresponden al estrato j (distribución proporcional al área)
NPe2 = número de parcelas que le corresponden al estrato j (distribución según la variabilidad
de los estratos).
II unidad
UNIDAD III
OBJETIVOS DE LA UNIDAD
1°. Conocer los elementos esenciales que debe contener un mapa general.
3°. Manejar los programas de Map maker Arcview y ArcGis para la elaboración de mapas
generales.
Manual de Inventarios Forestales 18
3.1. INTRODUCCIÓN
Un inventario forestal no se realiza sin un mapa del bosque a estudiar. Un mapa general debe
contener cuatro elementos esenciales:
Escala
Indicador del norte
Leyenda
Datos generales
Por convención, los mapas se designan para que se lea el norte hacia arriba. La escala del mapa
puede presentarse con números o mediante una escala grafica. La leyenda debe ser
suficientemente clara y amplia para que cualquier persona pueda interpretar los símbolos que se
dibujaron: tipos de bosque, veredas, caminos, ríos, etc.
Existen varios procedimientos para elaborar mapas, tales como levantamiento del área con
brújula y cinta, levantamiento con teodolito y estadía, levantamiento con unidades de GPS,
utilizando sensores remotos como fotografías aéreas e imágenes de satélite. Estos
procedimientos se describen a continuación.
Dos ejemplos de sensores remotos son las cámaras que se utilizan para tomar las fotografías
aéreas y las imágenes de satélite. Ambas técnicas permiten al profesional forestal clasificar los
bosques según tipos, calcular sus respectivas áreas y elaborar mapas para facilitar la
planificación y ejecución de inventarios forestales y planes de manejo forestal. A continuación,
se discute brevemente sobre los aspectos más sobresalientes de los sensores remotos.
Las fotografías aéreas han sido utilizadas durante largo tiempo en los inventarios de recursos
forestales. El uso de fotografías aéreas, no obstante, es preferible en áreas donde se necesita
determinar tipos de bosque, o donde las fotografías ya existen y son relativamente recientes, o
donde el bosque no ha estado sujeto a intervenciones humanas desde el momento en que se
tomaron las fotos. También, donde los recursos para la interpretación son escasos, y el nivel de
conocimiento de los bosques es bajo, la interpretación manual de fotos ofrece información de
calidad aceptable para la planificación del inventario y el manejo.
III unidad
Manual de Inventarios Forestales 19
En América Central, todavía se usan fotografías aéreas para la estratificación de los bosques y
para la determinación del tamaño de áreas de cada tipo de bosque. El procedimiento para
trabajar con fotografías aéreas puede resumirse en el siguiente:
Para la planificación en gran escala, las fotografías aéreas han venido perdiendo terreno, a favor
de las imágenes de satélite, ya que el costo de estas últimas se ha reducido notablemente. Así,
el precio de las imágenes Landsat, pasó en el año 2001 de US$ 4000 por imagen a US$ 800 las
imágenes georeferenciadas.
Las fotografías aéreas, también han perdido terreno debido a que las imágenes de satélite son
distribuidas en formato digital, lo cual facilita su almacenamiento, interpretación, calculo de
áreas y producción de mapas de cobertura forestal. En el mercado existen programas de
computación para mostrar, interpretar y editar imágenes de satélite, en Internet se pueden
adquirir gratuitamente el Spring y Multispect; también se pueden adquirir programas de bajo
costo como IDRISI, o programas sofisticados como el ERDAS.
III unidad
Manual de Inventarios Forestales 20
Las hojas cartográficas se pueden emplear para delimitar áreas de bosque. La precisión de este
método depende básicamente de la habilidad que se tenga para interpretar y manejar las hojas
cartográficas, y generalmente, se utiliza en la delimitación de áreas extensas cuando no existen
los recursos para una delimitación más precisa.
Utilizando hojas cartográficas, la delimitación de áreas boscosas puede realizarse a través del
procedimiento siguiente:
Colocarse en el terreno en un lugar donde se puedan observar los límites del bosque, para lo
cual se recomienda buscar “PARTES ALTAS”.
3.4. GEOPOSICIONADORES
La delimitación de áreas forestales con GPS (sistema de posicionamiento global) es uno de los
métodos más modernos que se utilizan en la planificación de inventarios forestales.
La exactitud del método depende básicamente de la precisión del GPS, existiendo aparatos con
distintas precisiones, y por lo general los más precisos son los más caros. Este método tiene la
desventaja de que en áreas pequeñas (menores a 2 hectáreas) si el GPS no es muy preciso, el
error del levantamiento puede ser bastante alto.
El levantamiento de datos con este aparato es muy fácil y se puede resumir en los aspectos
siguientes:
III unidad
Manual de Inventarios Forestales 21
Se efectúan caminamientos por los límites del bosque, y con el Geoposicionador (GPS) se
registran las coordenadas de estos límites. El registro de los datos se puede hacer
directamente en la memoria del GPS o utilizando una boleta de registro.
Los datos del GPS se pueden vaciar en un computador utilizando programas como el
MapSource.
Para inventarios forestales de áreas pequeñas (menores de 50 hectáreas), es común emplear los
levantamientos topográficos con brújula para la delimitación del bosque. Esta técnica es
sencilla y da resultados bastante precisos cuando se tiene la habilidad para manejar brújula.
Los levantamientos topográficos con teodolito en bosques son raros, debido a su alto costo.
El caminamiento del perímetro del bosque debe hacerse con una persona que conozca bien sus
límites, empezando por cualquier punto, aunque es preferible empezar desde un punto
identificado con certeza sobre las hojas cartográficas, lo que permitirá después georeferenciar el
bosque. Otra forma de georeferenciar el área consiste en tomar con GPS la coordenada del
punto de inicio del levantamiento, la cual se utilizará para la georeferenciación del bosque.
Habiendo recolectado los datos, el paso siguiente es la elaboración del mapa y el cálculo del
área y el perímetro, lo cual puede hacerse a través de programas como MapMaker y Autocad.
III unidad
UNIDAD IV
PLANIFICACIÓN DE
INVENTARIOS FORESTALES
OBJETIVOS DE LA UNIDAD
1°. Emplear criterios técnicos para determinar la forma y el tamaño más “adecuado” de las
unidades de muestreo en un inventario forestal.
2°. Aplicar métodos estadísticos para determinar el tamaño de la muestra en los inventarios
forestales.
3°. Emplear criterios técnicos para determinar el método de muestreo más “adecuado” según
las características del bosque a inventariar.
4°. Planificar un inventario forestal tomando en consideración las características del área a
inventariar.
Manual de Inventarios Forestales 23
Un inventario forestal debe tener objetivos específicos, que indiquen en forma clara el tipo,
cantidad y calidad de la información a tomar. La fijación de objetivos debe hacerse en conjunto
con la persona interesada.
La fijación de objetivos debe determinar qué información de los árboles y del terreno se
requiere y con qué grado de detalle y precisión. Si los objetivos del inventario no están bien
claros, lo más probable es que al final la información obtenida sea mala debido ya sea a la
ausencia o insuficiente descripción de algunas características de los árboles (o del terreno) o
bien falta de precisión del muestreo.
La solución no es tomar toda la información del bosque que es posible imaginar y con un alto
nivel de precisión para cubrir cualquier solicitud de información, debido a que la toma de datos
y el procesamiento de ellos es muy caro. La solución y lo que debe hacerse es determinar con
anticipación en forma bien clara y precisa los objetivos del inventario. (Ferreira, 1994)
Antes de iniciar un inventario forestal es necesario recopilar cierta información base, la cual
permitirá hacer una mejor planificación del inventario. Entre los datos más importantes que se
deben obtener se encuentran los siguientes:
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 24
No existe una receta fija para diseñar un inventario forestal. El diseño final depende del tipo de
bosque, la información requerida, tiempo y fondos disponibles, entre otros. El tiempo y los
fondos disponibles son los factores principales que afectan el diseño de un inventario.
El mejor diseño de inventario es aquel que reporta resultados más precisos a un costo más bajo.
En los inventarios forestales la unidad de muestreo es la parcela. Es muy importante definir su
tamaño, forma y número, puesto que tienen mucha influencia sobre la calidad de los resultados
y los costos del inventario. Estos aspectos se discuten a continuación.
La unidad de muestreo tradicional usada en los inventarios forestales, es la parcela que es una
superficie fija de tamaño pequeño, de forma circular, cuadrada o rectangular. En general, para
bosques jóvenes y densos, es más conveniente usar parcelas pequeñas; y para bosques más
viejos y ralos, se utilizan parcelas grandes.
La representatividad
El tiempo de medición
La representatividad se refiere a que la variación del bosque éste representada en la parcela (en
las parcelas más grandes, la variabilidad es menor que en parcelas pequeñas). La guía principal
para elegir el tamaño de la parcela es que ésta sea tan grande para incluir un número
representativo de árboles, pero que sea lo suficientemente pequeña para que el tiempo de
medición requerido no sea excesivo. Se recomienda como regla práctica, que el tamaño sea tal
que incluya de 20 a 30 árboles medibles, que el árbol sea medible depende del diámetro mínimo
fijado que puede ser 10, 15, 20 etc. (Ferreira, 2005)
El CONAP recomienda para los bosques de Guatemala, los tamaños de parcelas siguientes:
Cualquiera que sea el tamaño de la unidad de muestreo escogida, este no debe variar en el
mismo inventario. Hay que tener presente que los tamaños de las unidades de muestreo
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 25
siempre se refieren al plano horizontal, es decir, en terrenos inclinados hay que hacer la
corrección de pendiente. (Catie, 2002; Ferreira, 1994)
A continuación, se presentan algunas consideraciones sobre las parcelas de uso más común en
inventarios forestales.
a) PARCELA CIRCULAR
_________________________
Radio (m) = Tamaño de la parcela en m2 / π (4-1)
b) PARCELA CUADRADA
c) PARCELA RECTANGULAR
Las parcelas rectangulares se recomiendan en bosques con poca visibilidad y en terrenos con
pendiente fuerte. En áreas donde existan pendientes, se recomienda ubicar el lado más largo de
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 26
la parcela en forma paralela a la pendiente, esto con el objetivo de captar la mayor variabilidad
posible (gradiente de crecimiento).
Para establecer la parcela rectangular, se necesita una cinta métrica y una brújula para medir los
ángulos del rectángulo.
Los lados para parcelas rectangulares, podrían ser, por ejemplo:
El tamaño de la muestra se refiere al área total por inventariar, expresado en número de parcelas
de un tamaño definido.
Am
Np (4-3)
Tp
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 27
Im
Am At (4-4)
100
Donde:
Np = número de parcelas a levantar
Am = área muestreada (has)
Tp = tamaño de la parcela (has)
Im = intensidad de muestreo (%)
At = área total del bosque (has)
La experiencia en Petén (Guatemala), señala que en este tipo de bosques es más práctico
inventariar con base en intensidades de muestreo, ya que permite simplificar el proceso de
diseño y planificación del inventario forestal. Las intensidades propuestas están basadas en el
mínimo necesario para alcanzar un error del 15%, respecto del volumen comercial para todas
las especies en conjunto. En todo caso, después de realizar el inventario este debe incluir el
error obtenido cualquiera que sea su valor. Si existiera un caso en que este sea mayor al 15%
este debe ser aceptado.
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 28
El CONAP recomienda que para bosques de coníferas el error de muestreo permitido no debe
ser mayor del 15%; mientras que para bosques mixtos se considera un máximo de error de
muestreo permisible del 20%.
Ejemplo 4.1. En un área boscosa de 500 hectáreas se decidió realizar un inventario forestal
con una intensidad de muestreo del 2%. Si las unidades de muestreo serán parcelas circulares
de 1000 m2 cada una, ¿qué número de parcelas se deben evaluar en el campo?
2
Am 500has
100
Am = 10 has
10has
Np
0.10has
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 29
Este método consiste en determinar el número de parcelas de muestreo tomando como base la
variabilidad del bosque, y para medir esta variabilidad se usa el coeficiente de variación.
Para calcular el número de parcelas en un muestreo simple se utiliza la fórmula 2-10, es decir:
CV ² t ²
n (4-5)
E²
Donde:
n = número de parcelas a levantar
CV = coeficiente de variación (%)
t = valor t de Student (depende del nivel de confiabilidad requerido y de los grados de libertad)
E = error de muestreo máximo requerido (generalmente se utiliza un 15%)
En general, el coeficiente de variación del volumen, puede ir desde 35% para bosques
homogéneos hasta 250% para bosques muy heterogéneos. En el Altiplano Occidental de
Guatemala, el coeficiente de variación del volumen varía en general entre 22 y 32% en el caso
de bosques de coníferas y entre 26 y 46% en el caso de bosques mixtos y latifoliados.
Realizar un pre-muestreo tiene algunos inconvenientes de orden práctico. Entre los principales
inconvenientes se reconocen los siguientes:
1°. Regresar al bosque en dos ocasiones para recolectar información, tiene repercusión en los
costos del inventario.
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 30
2°. Se necesitan por lo menos diez parcelas por estrato para tener un coeficiente de variación
confiable. Utilizar un menor número de muestras puede llevarnos a serios errores de
estimación.
3°. Si bien se argumenta que se puede hacer el muestreo piloto y después complementar el
número de parcelas faltantes, esto no permite hacer una buena distribución sistemática de
las parcelas. (Carrera, 1996; Ferreira, 1994)
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 31
Ejemplo 4.2. En un bosque de 152 hectáreas se hizo un pre-muestreo con 10 parcelas de 500
m2 cada una, obteniendo un coeficiente de variación de 33.7%. Si el error de muestreo debe ser
inferior al 15%, con un nivel de confiabilidad del 95%, determinar ¿qué número de parcelas se
deben evaluar en el campo para obtener la precisión requerida?
Utilizando la fórmula 4-5, tenemos que el número de parcelas es igual a:
(33.7)² (2.262)²
n n = 25.8 26 parcelas
(15)²
Como el valor “t de Student” varía de acuerdo al número de parcelas, y el cálculo anterior se
basó en 10 parcelas, se debe calcular nuevamente el valor de “n” usando ahora un valor de “t de
Student” para 26 parcelas. Entonces, tenemos que el número de parcelas es igual a:
(33.7)² (2.060)²
n n = 21.4 21 parcelas
(15)²
Se repite el cálculo ahora con un valor “t de Student” para 21 parcelas. Entonces, tenemos que
el número de parcelas es igual a:
(33.7)² (2.086)²
n n = 22.0 22 parcelas
(15)²
Ahora empleamos un valor “t de Student” para 22 parcelas. Entonces, tenemos que el número
de parcelas es igual a:
(33.7)² (2.080)²
n n = 21.8 22 parcelas
(15)²
Hasta aquí termina el cálculo, debido a que ya se dio la estabilización de “n”. Por lo tanto, se
concluye que para obtener la precisión requerida se deben establecer 22 parcelas; como ya se
levantaron 10 parcelas en el pre-muestreo solamente nos hacen falta 12 parcelas.
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 32
Una vez determinado el número de parcelas a medir, el paso siguiente es distribuir la muestra
de parcelas en el bosque. Las parcelas se pueden distribuir en forma aleatoria, en forma
sistemática, en forma estratificada y por conglomerados.
En este paso se requiere analizar las diferentes opciones de muestreo y definir cuál es la que
permite minimizar los costos del inventario y maximizar la precisión de las estimaciones.
En este diseño las unidades muestrales son seleccionadas aleatoriamente, sin que la elección de
una influya en las otras. El muestreo aleatorio es muy útil cuando el parámetro que se quiere
estimar se manifiesta de manera homogénea en la población.
El análisis estadístico del inventario forestal se realiza utilizando las fórmulas que se presentan
en las páginas 10, 11 y 12 de este documento.
Entre las desventajas de este diseño está la inseguridad para establecer la ubicación exacta de
las muestras en el bosque, los altos costos por accesibilidad, genera poca representatividad de la
muestra cuando se evalúan poblaciones heterogéneas, y el hecho de no proporcionar datos
confiables acerca de la configuración y topografía del bosque. (Catie, 2002; Ferreira, 1994)
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 33
En la práctica casi todos los inventarios realizados con muestreo sistemático son analizados
utilizando las fórmulas del muestreo al azar (ver páginas 10, 11 y 12).
Entre las ventajas del muestreo sistemático están la ubicación fácil de las parcelas, el costo del
trabajo de campo es menor en comparación del método aleatorio, existe una distribución
regular de las parcelas sobre toda la población inventariada, y se tiene la posibilidad de dibujar
las características del terreno.
El modelo sistemático de uso más común es por líneas, que consiste en definir líneas de
muestreo equidistantes sobre las cuales se ubican las parcelas también equidistantes. Si la
separación entre líneas es igual a la separación entre parcelas se llama distribución cuadrada y
si la separación entre líneas es diferente a la separación entre parcelas, la distribución es
rectangular. Generalmente en la distribución rectangular la separación entre líneas es mayor
que la separación entre parcelas sobre la línea. (Catie, 2002; Carrera, 1996; Ferreira, 1994)
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 34
El espaciamiento entre líneas de muestreo y entre parcelas, se determina con las fórmulas:
Tp
L (4-6)
BI
Tp
S (4-7)
I
Am
Im (4-8)
At
Tp Np
Am (4-9)
10000
Donde:
L = distancia entre líneas de muestreo en una distribución rectangular (m)
S = distancia entre líneas de muestreo y parcelas en una distribución cuadrada (m)
Tp = tamaño de la parcela (m²)
B = distancia entre parcelas en metros (valor que debe fijarse previamente, mínimo 50 m)
I = intensidad de muestreo (fracción)
Am = área a muestrear (has)
Np = número de parcelas
At = área total del bosque (hectáreas)
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 35
Es importante mencionar que la fórmula 4-6 proporciona un dato aproximado, el cual podemos
modificar a conveniencia; sin embargo, en la medida de lo posible el valor final que decidamos
utilizar debe acercarse al valor obtenido por la fórmula.
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 36
Un estrato corresponde a una superficie boscosa con una o varias características en común
desde el punto de vista fisiográfico (bosque de montaña, de colina, de llanura, etc.), florístico
(dominancia de ciertas especies) o estructural (alto, medio, bajo). La experiencia en América
Central es que una estratificación que combine características florísticas con características del
suelo (pendiente, drenaje, humedad y pH) resulta muy funcional.
Es importante que los inventarios forestales detecten los diferentes estratos y que los resultados
de las existencias volumétricas se expresen a nivel de estrato. No obstante, existen áreas
boscosas en donde no se detectan diferencias que permitan la estratificación. Tampoco es
práctico tener más de cinco estratos diferentes en un inventario forestal.
En cada estrato el muestreo puede ser aleatorio o sistemático, y se emplean los mismos
procedimientos de estos muestreos para distribuir las parcelas en el mapa. El número de
unidades de muestreo en cada estrato puede ser proporcional a la superficie o a la variabilidad
del mismo. En el primer caso, la intensidad de muestreo es igual en cada estrato, y en el
segundo, se trabaja con base en la variabilidad del bosque.
Si la intensidad de muestreo no es igual para todos los estratos, la distancia entre líneas de
muestreo y parcelas debe ser ajustada de acuerdo con la intensidad de muestreo en cada estrato.
De preferencia, las líneas de muestreo deben tener la misma orientación, aunque existen casos
en donde por la forma y topografía que tiene el bosque, es necesario darles diferente orientación
a las líneas de muestreo.
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 37
Una desventaja de este método se da en poblaciones con gran variabilidad, donde los estratos
muchas veces resultan muy pequeños en extensión, por lo que no se puede hacer un muestreo
de pequeña intensidad dentro de cada estrato. (Catie, 2004; Ferreira, 1994; Godínez, 1998a)
Debido a las fracciones de muestreo tan bajas que se utilizan en inventarios forestales, la
cantidad de tiempo requerida para movilizarse de una unidad de muestreo a otra es
considerable, cuando es comparado contra el tiempo real de medición. Por esta razón, la
medición de parcelas en conglomerados es mucho más eficiente, dado que se reducen los
tiempos de traslados entre unidades de muestreo.
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 38
bosques donde las condiciones del terreno dificultan el caminamiento para establecer las
unidades de muestreo.
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 39
Ejemplo 4.6. Un bosque de coníferas de 52.3 hectáreas, fue dividido en 34 bloques o unidades
primarias (M) de 1 hectárea cada una. Los bloques o unidades primarias, están conformados
por 20 parcelas cuadradas (N) de 500 m2 cada una.
Aleatoriamente, se seleccionaron 2
unidades primarias (m); y en cada
unidad primaria, se seleccionaron
aleatoriamente 5 unidades secundarias
(n). En la figura se presenta la
distribución de unidades primarias y
secundarias.
Este método se conoce también como muestreo con parcelas de tamaño variable, realizado con
la ayuda de un instrumento llamado relascópio.
La unidad de muestreo es un punto desde donde y con un giro de 360 grados se cuentan todos
los árboles que a la altura del DAP son iguales o mayores que al ángulo horizontal que
determine el relascópio.
El método fue inventado por el forestal Austriaco Dr. Walter Bitterlich en 1947, y permite
estimar directamente el área basal por hectárea.
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 40
En el muestreo con parcelas de tamaño variable, el radio de la parcela varía en función del
diámetro del árbol. Cada árbol tiene su propia parcela, y el área de la parcela es directamente
proporcional al área basal del diámetro del árbol.
En la condición del árbol límite, es decir a la máxima distancia para que sea muestreado, la
razón del diámetro del árbol/radio de la parcela es una constante.
En la parcela de tamaño fijo (1000 m2 por ejemplo) el área basal por hectárea se obtiene
calculando el área basal de cada árbol y la suma de las áreas basales se multiplica, por el factor
de conversión que es 10 y que resulta de dividir 10,000m2 (1 ha) entre 1000 m2 (tamaño de la
parcela).En la parcela de tamaño variable el área basal por hectárea que representa cada árbol se
llama factor del área basal (F.A.B.) y se obtiene multiplicando el área basal del árbol por la
razón 10,000/área de la parcela o sea:
En esta etapa se deben identificar las variables a medir en campo para generar la información
necesaria para cumplir con los objetivos del inventario forestal.
Básicamente se deben identificar las variables que se medirán en el terreno y las variables que
se medirán en los árboles, lo cual dependerá del tipo de inventario a realizar (Catie, 2002). Lo
relacionado a la medición de estas variables se discute en la unidad 5 de este documento.
Una vez que se han definido las variables a evaluar, se deben diseñar los formularios de campo
para la recopilación de información.
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 41
El registro de las mediciones del inventario se hace en formularios que deben estar preparados
antes del inicio del trabajo de campo. La elaboración de los formularios debe considerarse
como una de las fases de planificación, que ha de ser precedida por algunas decisiones
fundamentales, especialmente lo relativo a la información que ha de contener el inventario.
El tipo de formulario depende de la información a obtenerse, la que estará definida por los
objetivos del inventario. El formulario debe ser simple, pero con espacio suficiente para
recoger toda la información que se necesita (es preferible un tamaño pequeño).
No existe un formulario u hoja de registro único para anotar las observaciones o mediciones
que se toman en el campo. La forma de registrar la información cambia según si el bosque es
de una especie ó de varias especies. Para una sola especie es muy común registrar las
mediciones agrupándolas en clases diamétricas. Para varias especies, existen distintas formas
de registrar la información.
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 42
La toma de los datos de campo es una de las etapas más importantes de un inventario forestal,
pues proporciona la información básica para hacer cálculos y sacar conclusiones. La calidad de
la información es dependiente de la calidad del personal de campo.
La capacitación y organización del personal de campo es una actividad que debe hacerse
siempre antes de iniciar el trabajo de terreno, y es la única manera de asegurarse que el personal
sabe lo que está haciendo, y si lo sabe aumenta la posibilidad de hacerlo bien.
Un jefe de equipo, quien deberá ser un técnico forestal con experiencia en inventarios, y
cuyas funciones son: registrar las mediciones, controlar directamente las mediciones
(especialmente la altura), indicar al ayudante la dirección de la línea que da la brújula.
Un medidor, quien será el responsable de medir distancias, el DAP y altura de los árboles,
contabilizar la regeneración natural, y otras mediciones.
Un ayudante, quien deberá conocer el bosque y cuyas funciones son: brechar, ayudar en el
trazo de la parcela y en la medición de distancias. (Ferreira, 1990)
En esta etapa, se deben definir los procedimientos para realizar una evaluación de la calidad del
trabajo de campo. Esto deberá ser realizado por la persona responsable del inventario.
Los problemas que podemos encontrar en un inventario forestal, dan lugar a dos tipos de
errores: errores no muestrales (sesgos) y errores muestrales (aleatorios). La optimización de un
inventario consiste en minimizar los errores no muestrales y maximizar la eficiencia muestral.
Para ello, es necesario individualizar y cuantificar las fuentes de error y desarrollar los
procedimientos adecuados para minimizarlos. Esto se discute a continuación.
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 43
A. ERRORES NO MUESTRALES
Errores de diseño:
Distribución subjetiva de las unidades de la muestra
Muestra no representativa por localización o concentración de unidades
Los mapas y los sistemas de información geográfica (SIG) ayudan a diseñar muestras más
representativas y a minimizar este tipo de errores.
Errores operacionales:
Localización viciada de las unidades de muestreo
Delimitación imperfecta de las unidades de muestreo
Errores de medición de los árboles
Los modelos dendrométricos simples, como el requerido para estimar la densidad o altura
media de un rodal, no generan errores de importancia. En cambio, los modelos desarrollados
para estimar un variado número de productos rollizos de diferentes calidades, sanidades y
dimensiones, basados en modelos fustales y simuladores de trozado, pueden producir
estimaciones altamente sesgadas.
Cartografía defectuosa
Límites inadecuados que provocan la exclusión de superficies
Apreciación sesgada de la superficie de bosque
IV unidad
Manual de Inventarios Forestales 44
B. ERRORES MUESTRALES
Errores de diseño:
Elección de diseños muestrales no apropiados para el tipo de inventario forestal.
IV unidad
UNIDAD V
EJECUCIÓN DE
INVENTARIOS FORESTALES
OBJETIVOS DE LA UNIDAD
Después de haber planificado todos los aspectos relacionados a la ejecución del inventario
forestal, se procede a la toma de datos de campo, que constituye la segunda operación
importante de un inventario forestal. En un inventario forestal las mediciones se inician con la
ubicación y delimitación de la parcela.
A. UBICACIÓN
La ubicación inicial del centro o vértice de la parcela se hace con la ayuda de instrumentos
como la brújula, el clinómetro, la cinta métrica, el GPS, etc.
Entre las condiciones que no influyen en el desplazamiento del centro o vértice de la parcela
podemos mencionar los taludes, rondas corta fuego, pequeños claros de bosque, árboles
tumbados por el viento, pequeños ríos, entre otros.
Cuando el centro o vértice de la parcela se sitúa fuera de los limites del bosque se elimina la
parcela en ese sitio, pudiéndola ubicar en otra parte del bosque. Es preferible no medir que
registrar medidas falsas, imaginadas o imprecisas.
B. DELIMITACIÓN
El centro o vértice de la parcela deberá marcarse con una estaca “grande” y desde este punto se
procede a trazar los límites de la parcela, de acuerdo a la forma y tamaño que se han definido
previamente. (Fundap, 1993)
V unidad
Manual de Inventarios Forestales 47
DH
DC (5-1)
Cos
Donde:
DC = distancia compensada
DH = distancia horizontal
Cos α = coseno de los grados de pendiente del terreno
Los datos de identificación se anotan en una boleta de campo previamente elaborada. El olvido
de uno de estos datos puede obligar a no tomar en cuenta la parcela en los cálculos, por lo que
la anotación de la información debe hacerse con cuidado. Los datos de identificación pueden
incluir los siguientes:
- Fecha. Deberá anotarse el día, mes y año de la medición; estos datos permitirán verificar si
no hay mala numeración de las parcelas y saber también cuántos días tomó la fase de campo
del inventario.
- Inicio y final de las operaciones. Tiempo necesario entre la llegada del caminamiento al
centro o vértice de la parcela y el final de las operaciones en la parcela (separar estos dos
tiempos). Esta información servirá para evaluar el rendimiento de los equipos de trabajo.
- Operadores. Se debe anotar el número de personas que tomaron los datos en la parcela, y
principalmente el nombre del o las personas que anotaron la información en los formularios.
(Ferreira, 1994; Fundap, 1993)
La recopilación de información del terreno permitirá tener información auxiliar para planificar
de mejor manera el manejo del bosque. Las variables que se recopilan del terreno pueden ser
las siguientes.
V unidad
Manual de Inventarios Forestales 48
DV
P(%) *100 (5-2)
DH
Donde:
P(%)= pendiente en porcentaje
DV= distancia vertical
DH= distancia horizontal
= ángulo en grados
- Textura del suelo. En el terreno, se puede apreciar la textura del suelo por el tacto, con un
poco de experiencia. Las arenas empiezan a raspar entre los dedos a partir de 0.1 mm. La
arcilla se distingue del limo por amasamiento: un poco de tierra húmeda que se frota entre
los dedos se desmorona cuando es limo, no cuando es arcilla.
La textura se puede clasificar en los siguientes grupos: franco limoso, arcilloso, areno-
arcilloso, arenoso, grava y rocoso. El conocimiento de la textura del suelo puede ser de
suma utilidad para planificar las actividades de aprovechamiento del bosque.
- Altitud. Puede tomarse con un altímetro o con un GPS. Esta información puede ser útil
para la elaboración de curvas a nivel, especialmente cuando se esta utilizando el método de
muestreo sistemático.
V unidad
Manual de Inventarios Forestales 49
La recolección de los datos dendrométricos constituye lo esencial del trabajo a realizar en una
parcela. En una parcela se miden los árboles que están presentes en la misma, sin embargo,
existen casos en donde no se sabe exactamente si un árbol entra o no en la parcela. En esta
situación, se recomienda utilizar los criterios que se presentan en la figura siguiente:
Las mediciones dendrométricas más comunes que se realizan en una parcela son el diámetro, la
altura, incrementos y el estado físico del arbolado. Estos aspectos se discuten a continuación:
La medición del diámetro está normalizado a una altura de 1.3 metros sobre el nivel del suelo,
el cual se conoce como DAP (diámetro a la altura del pecho) o diámetro normal.
En la parcela se mide el DAP con corteza de todos los árboles. Generalmente, el diámetro de
referencia mínimo a medir es 10 cms, pero puede ser diferente según el objetivo del inventario,
por ejemplo, en inventarios con fines de carbono se empieza las mediciones a partir de 5 cms.
V unidad
Manual de Inventarios Forestales 50
La medición se hace con cinta díamétrica, forcípula u otro instrumento adecuado al diámetro de
los árboles. (Ferreira, 1994; Fundap, 1993)
La medición del grosor de la corteza sirve para establecer una relación (lineal) entre el diámetro
con corteza y diámetro sin corteza. Si la ecuación de volumen a emplear en el inventario usa el
DAP sin corteza (lo más común es usar el DAP con corteza), necesariamente debemos conocer
el espesor de corteza.
La medición de corteza en árboles en pie se hace a la altura del DAP, y generalmente se utilizan
los árboles a los que se les mide la altura (árboles tipo).
Se requiere mucho cuidado y práctica para medir la corteza, se recomienda hacer 4 mediciones
en cruz con el “medidor de corteza” y sacar un promedio. (Ferreira, 1994; Fundap, 1993)
La altura es importante para el uso de tablas de volumen y en algunas ocasiones, puede servir
para indicar la productividad de un sitio. Las mediciones de DAP y su correspondiente altura,
se usan para establecer una relación local de DAP y altura.
Para las especies coníferas se mide la altura total del árbol, desde la base hasta el extremo de la
copa. Para las especies latifoliadas de preferencia se mide la altura del fuste, desde la base
hasta el punto de copa (inicio de las ramas más gruesas). La altura se puede medir también en
número de trozas (generalmente de 5 m) que pueden salir de un árbol, cuando se utiliza el
hipsómetro de Merritt principalmente.
En los bosques de coníferas de Guatemala, usualmente se miden las alturas de los 2 ó 3 árboles
más cercanos al centro de la parcela (árboles tipo). Cuando el rodal es muy heterogéneo, se
obtienen por lo menos dos alturas por especie importante. Otro criterio que se emplea, consiste
en medir un árbol por cada 100 m2 de parcela.
En los bosques latifoliados de Petén se mide la altura comercial, la que esta dada por el largo de
fuste aprovechable sin defectos, estimada en metros. Si bien, el uso de instrumentos para su
medición da resultados más precisos, implica un mayor tiempo por lo que es poco práctico. No
obstante, a veces se utiliza hipsómetro para hacer algunas comprobaciones y así calibrar mejor
la estimación ocular. (Carrera, 1996; Ferreira, 1994; Fundap, 1993)
V unidad
Manual de Inventarios Forestales 51
Para la medición del incremento diametral y la edad del árbol se utiliza el Barreno de Pressler,
que es una barra metálica hueca con uno de sus extremos afilado que se penetra en el árbol para
extraer una muestra cilíndrica de madera (tarugo).
Aunque las predicciones de crecimiento diametral a partir de tarugos pueden ser bastante
buenas, la técnica no proporcionará información confiable acerca del crecimiento del bosque en
su conjunto, especialmente lo referido a la mortalidad e ingreso de nuevos individuos.
La medición se hace en los “árboles tipo” a la altura del DAP, perpendicular al eje vertical del
árbol y barrenando siempre en diferentes direcciones (puntos cardinales) para obtener un buen
promedio del crecimiento.
Antes del examen de las muestras, se tomará el cuidado de remojarlas en agua durante una hora
para que retomen sus dimensiones iniciales. Se facilitará las observaciones si se cepilla una
cara con una cuchilla de afeitar. En la muestra se hacen tres mediciones: a) largo de los últimos
5 anillos, b) largo total y c) número total de anillos del tarugo.
Los datos obtenidos funcionan bien para proyecciones del crecimiento del DAP, área basal y
volumen en períodos cortos no mayores de 5 años. (Ferreira, 1994; Fundap, 1993)
V unidad
Manual de Inventarios Forestales 52
Esta clasificación de los árboles servirá para determinar la estrategia de intervención en las
operaciones silviculturales a aplicar, especialmente en los raleos.
En los bosques latifoliados de Petén, la calidad del fuste se evalúa en todos los árboles medidos,
cuantificando los “defectos visibles” en forma porcentual. (Carrera, 1996; Fundap, 1993)
Los datos silvícolas son utilizados para analizar sobre el tratamiento que se aplicará al rodal o al
bosque que se está inventariando. Los datos silvícolas que más se evalúan son los siguientes.
Además de identificar el estado fitosanitario, también se puede especificar el grado de daño que
posee el árbol, en categorías como: daño leve, daño severo o árbol muerto.
V unidad
Manual de Inventarios Forestales 53
Esta información se utiliza para hablar con el dueño, los guardabosques y los vecinos del
bosque, para descubrir cuáles son los riesgos de incendio, de presencia de plagas en los bosques
vecinos, si la enfermedad o la plaga es endémica o si acaba de aparecer, si rebaños vienen a
pastorear dentro del bosque, etc. (Ferreira, 1994; Fundap, 1993)
5.5.3. SOTOBOSQUE
V unidad
Manual de Inventarios Forestales 54
Su ausencia puede provocar erosión y muchas veces indica una densidad excesiva del dosel
arbóreo (necesidad de una intervención).
La medición del estrato arbustivo se hace proyectando las copas sobre el suelo, y con base en
esto puede definirse la clasificación siguiente:
Estrato denso (entre 75% y 100% de ocupación de la superficie)
Estrato de densidad media (entre 25% y 75% de ocupación)
Estrato ralo (con menos de 25% de ocupación)
Estrato ausente. (Fundap, 1993)
V unidad
UNIDAD VI
PROCESAMIENTO DE DATOS DE
INVENTARIOS FORESTALES
OBJETIVOS DE LA UNIDAD
2. Obtener los volúmenes por parcela y hectárea, y a partir de estos datos realizar un análisis
3. de varianza de las parcelas inventariadas.
6.1. INTRODUCCIÓN
La otra forma de procesar datos es el procedimiento manual, el cual puede emplearse cuando
las parcelas son pocas y cuando no se tiene acceso a utilizar una computadora.
El procesamiento de los datos se hace en varias etapas y niveles: primero al nivel de parcela,
después al nivel de estrato o del rodal si se ha estratificado, y finalmente al nivel de bosque.
Cada nivel utiliza fórmulas de procesamiento diferentes, lo cual se describe a continuación.
Para obtener la altura media de los árboles se deben emplear los datos de DAP y Altura de los
árboles tipo. Estos datos son sometidos a un análisis de regresión simple, para obtener el
modelo matemático de mejor ajuste (el que mejor relaciona el DAP con la altura).
El análisis de regresión puede hacerse para una especie en particular, para un grupo de especies,
para un estrato o para la totalidad el bosque, lo cual dependerá de la diversidad de especies que
existan en el área inventariada.
Los datos de DAP-Altura se pueden analizar utilizando diversos modelos matemáticos, siendo
los más utilizados:
H = a + b Ln DAP (6-1) H = 1.3 + a DAP + b DAP² (6-2)
H = a + b DAP (6-3) H = a + b 1/(DAP)0.37 (6-4)
Ln H = a + b DAP (6-5)
Donde:
H = altura total o comercial (m)
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 57
Para realizar regresiones simples existen programas de cómputo específicos como el SAS, JMP,
SYSTAT, etc. También se pueden utilizar procedimientos manuales, aplicando el método de los
mínimos cuadrados. Un procedimiento manual se describe en el ejemplo 6.1.
Ejemplo 6.1. En un inventario forestal se midió el DAP y la altura de 15 árboles tipo. Estos
datos fueron sometidos a un análisis de regresión simple para obtener el modelo matemático de
mejor ajuste. Para ilustrar el método de los mínimos cuadrados se utilizará el modelo
matemático 6-1, es decir: H = a + b Ln DAP
x = Ln DAP
y = Altura total
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 58
n( xy ) ( x)( y )
b (6-6)
n( x ²) ( x)²
15(1443.7075) (47.7341)(447.3)
b
15(152.6791) (47.7341)²
b = 26.117176
a y b x (6-7)
447.3 47.7341
a 26.117176 *
15 15
a = -53.291907
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 59
Repetir los cálculos, hasta estimar las alturas de todos los árboles tipo que se utilizaron en la
regresión. Luego obtener las sumatorias tal y como se ilustra en la tabla siguiente:
Coeficiente de determinación:
n ( XY ) ( X )( Y )
r² (6-8)
n ( X ²) ( X )² n ( Y ²) ( Y )²
15 ( 13868.0943 ) ( 447.3 )( 447.3000 )
r²
15 ( 13994.3700 ) ( 447.3 )² 15 ( 13868.0943 ) ( 447.3000 )²
r² = 0.90
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 60
Desviación estándar:
S
( X Y )² (6-9)
n 1
126.2757
S
15 1
S = 3.00 m
CMe
( X Y )² (6-10)
n2
126.2757
CMe
15 2
CMe = 9.71 m²
Los estadísticos que se obtuvieron sirven para establecer comparaciones entre distintos modelos
matemáticos para determinar el mejor modelo. El modelo matemático seleccionado es utilizado
para hacer los cálculos de volúmenes. La selección del mejor modelo matemático se hace así:
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 61
Ejemplo 6.2. En una parcela de 600 m² se midió el DAP de 12 árboles presentes, 8 de Quercus
tristis y 4 de Pinus oocarpa. Los datos obtenidos corresponden a los siguientes:
Especie Fórmulas
H = -11.661854 + 8.816598 Ln DAP
Pinus oocarpa
V = 0.0268287659 + 0.0000287215 DAP² H
H = -53.291907 + 26.117176 Ln DAP
Quercus tristis
V = -0.07851313 + 0.0000465508 DAP² H
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 62
Para el árbol No. 1 (Quercus tristis), que tiene un DAP de 15.4 cm, la altura es:
H = -53.291907 + 26.117176 Ln DAP
H = -53.291907 + 26.117176 Ln (15.4)
H = 18.12 m
Estos dos cálculos se repiten para todos los árboles de la parcela, teniendo el cuidado de utilizar
la fórmula correcta para cada especie. El resumen de los cálculos se presenta a continuación:
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 63
El volumen por hectárea en una parcela, se puede estimar a través de la fórmula siguiente:
Vp 10000
Vhap (6-11)
Tp
Donde:
Vhap = volumen por hectárea de la parcela
Vp = sumatoria de volumen de los árboles de la parcela (m³)
Tp = tamaño de la parcela (m²)
8.3361 10000
Vhap
600
Para determinar los estadísticos, parámetros y precisión del inventario forestal se necesita
conocer el volumen por hectárea de todas las parcelas inventariadas. Asimismo, debemos
conocer el área del estrato o bosque. Para ilustrar los cálculos se utilizará el ejemplo 6.3.
Con los datos de volumen de estas parcelas, determinar la media aritmética, la desviación
estándar, el coeficiente de variación, el error estándar, los límites de confianza, el error de
muestreo absoluto y relativo, y el cálculo del número de parcelas necesarias para tener un error
del 15 por ciento a un 95% de confiabilidad.
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 64
1 86.34 7454.60
2 92.36 8530.37
3 110.41 12190.37
4 127.77 16325.17
5 84.98 7221.60
6 89.74 8053.27
7 90.66 8219.24
8 146.43 21441.74
MEDIA ARITMÉTICA
X
(X )
n
828.69
X
8
_
X = 103.59 m³/ha
Este valor nos indica que en promedio en las 8 parcelas inventariadas existe un volumen de
madera de 103.59 m³/ha.
DESVIACIÓN ESTÁNDAR
( X ²) n
( X )²
S
n 1
( 828.69 )²
89436.35
8
S
8 1
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 65
S = 22.66 m³/ha
Este valor indica que el promedio de las desviaciones de los datos muestreados es de 22.66
m³/ha, con respecto a la media muestral (103.59 m³/ha).
COEFICIENTE DE VARIACIÓN
S
CV 100
X
22.66
CV 100
103.59
CV = 21.88%
Este resultado indica que la desviación promedio de los datos muestreados es de 21.88% con
respecto al promedio general (103.59 m³/ha).
ERROR ESTÁNDAR
S n
Sx 1
n N
22.66
Sx 1 8 80.6 has
N N = 1612
1612 0.05 has
8
Sx = 7.99 m³/ha
Este valor indica que el promedio de las desviaciones de los datos muestreados es de 7.99
m³/ha, con respecto a la media poblacional.
ERROR DE MUESTREO
Em (Sx) (t )
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 66
Em = 7.99 2.365
Em = 18.90 m³/ha
El valor de “t” depende del nivel de confianza requerido y de los grados de libertad (n-1). Para
siete grados de libertad (nuestro ejemplo) y un nivel de confianza del 95%, el valor t es 2.365.
Em
Em% 100
X
18.90
Em% 100
103.59
Em% = 18.25%
Se puede interpretar este resultado afirmando, con un 95% de certeza, que el valor de la media
poblacional esta en un rango de más o menos 18.25% con respecto de la media muestral.
LIMITES DE CONFIANZA
LS X Em
LS = 103.59 + 18.90
LS = 122.49 m³/ha
LI X Em
LI = 103.59 – 18.90
LI = 84.69 m³/ha
Se puede decir, con una probabilidad del 95% que la media real de la población no es menor a
84.69 m³/ha ni mayor a 122.49 m³/ha.
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 67
TAMAÑO DE LA MUESTRA
CV ² t ²
n
E²
(21.88)² (2.365)²
n
(15)²
n = 12 parcelas
(21.88)² (2.201)²
n
(15)²
n = 10 parcelas
Se repite el cálculo ahora con un valor “t de Student” para 10 parcelas. Entonces, tenemos que
el número de parcelas es igual a:
(21.88)² (2.262)²
n
(15)²
n = 11 parcelas
Ahora empleamos un valor “t de Student” para 11 parcelas. Entonces, tenemos que el número
de parcelas es igual a:
(21.88)² (2.228)²
n
(15)²
n = 11 parcelas
Hasta aquí termina el cálculo, debido a que ya se dio la estabilización de “n”. Por lo tanto, se
concluye que para obtener la precisión requerida se deben establecer 11 parcelas; como ya se
levantaron 8 parcelas en el pre-muestreo solamente nos hacen falta 3 parcelas, las que deberán
distribuirse en el bosque.
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 68
n 10000
Nha (6-12)
Np Tp
Donde:
Nha = número de árboles por hectárea
n = número de árboles (en cada clase diamétrica)
Np = número de parcelas
Tp = tamaño de la parcela (m²)
Ejemplo 6.4. En un bosque mixto de 6.2 hectáreas se realizó un inventario forestal, para lo
cual se establecieron 3 parcelas de 500 m². Los datos de estas parcelas son los siguientes:
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 69
Con estos datos, calcular el número de árboles por clase diamétrica, especie y hectárea.
Los datos de las parcelas se pueden agrupar por especie en diferentes categorías de diámetro,
las cuales pueden tener diferente amplitud, por ejemplo: 5, 10, 15 ó 20 cms; lo más común es
utilizar amplitudes de 5 y 10 cms.
Los datos de nuestro ejemplo se agruparon en amplitudes de 5 cm, tal y como se observa a
continuación:
Tabla 10. Frecuencias por clase díamétrica y por especie del bosque mixto.
Los datos de esta tabla, sirven de base para hacer los cálculos por hectárea del número de
árboles, área basal y volumen.
Empleando los datos del ejemplo 6.4 (3 parcelas de 500 m²) y de la tabla 10, calcular el número
de árboles por hectárea en la clase diamétrica de 10-14.9 cm para la especie de Alnus arguta.
n 10000
Nha
Np Tp
2 10000
Nha
3 500
Al aplicar la fórmula en cada dato de la tabla10, se obtiene por cada clase diamétrica el número
de árboles por hectárea de este bosque, lo cual se observa en la tabla 11.
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 70
Hay una correlación lineal relativamente alta entre el diámetro de la copa y el del fuste, según
investigaciones, en los árboles que están en el dosel superior o mediano la relación entre copa y
DAP es aproximadamente 20:1. Dicha relación permite usar el parámetro del área basal como
un indicador del nivel de competencia en el dosel.
Examinar la distribución diamétrica del área basal es una forma rápida de proporcionar
información sobre la necesidad de realizar un tratamiento para reducir la competencia en el
bosque entre los árboles comerciales y no comerciales.
El área basal en general indica la calidad del sitio, entre mayor sea ésta, mejor será la calidad de
sitio. El área basal sirve también de indicador de la densidad óptima para la regeneración
natural del bosque. El pinabete (Abies guatemalensis) o los encinos (Quercus sp.) se regeneran
bien bajo el dosel de otros árboles, mientras que los pinos necesitan de manera general bastante
luz para regenerarse (área basal inferior a 15 m²/ha).
En los bosques naturales del Altiplano de Guatemala, el área basal normal óptima se encuentra
entre 15 a 20 m²/ha para el aliso (Alnus sp.), de 20 a 25 m²/ha para el pino colorado (Pinus
hartwegii), de 25 a 30 m²/ha para el pino blanco (Pinus ayacahuite) y de 25 a 35 m²/ha para el
ciprés común (Cupressus lusitanica). Para los bosques de Petén, a partir de 10 cm de DAP, el
área basal varía de 18 a 35 m²/ha. (Fundap, 1993; Stanley, 1997)
El área basal de un árbol es la superficie de la sección de su fuste a 1.3 metros sobre el nivel del
suelo. El área basal de un bosque es la suma de todas las áreas basales de los árboles contados,
inferida a la hectárea. El área basal por hectárea se obtiene a través de la fórmula siguiente:
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 71
AB n 10000
ABha (6-13)
Np Tp
Donde:
ABha = área basal por hectárea (m²)
AB = área basal individual (m²)
n = número de árboles (en cada clase diamétrica)
Np = número de parcelas
Tp = tamaño de la parcela (m²)
DAP = diámetro a la altura del pecho (m)
Ejemplo 6.5. Utilizando los datos del ejemplo 6.4, calcular el área basal por clase diamétrica,
especie y hectárea de este bosque.
Como estamos utilizando los datos del ejemplo 6.4, este paso ya fue realizado (ver tabla 11).
Empleando los datos de la tabla 11, calcular el área basal individual en la clase diamétrica de
10-14.9 cms.
AB 0.7854 DAP²
AB 0.7854 (12.5 / 100)² DAP = (10+14.9)/2 DAP = 12.5
AB = 0.0123 m²
Este procedimiento se utiliza para estimar el área basal individual en cada clase diamétrica.
Empleando los datos del ejemplo 6.4 (3 parcelas de 500 m²) y de la tabla 11, calcular el área
basal por hectárea en la clase diamétrica de 10-14.9 cms para Alnus arguta.
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 72
AB n 10000
ABha
Np Tp
0.0123 2 10000
ABha
3 500
Al aplicar la fórmula en cada una de los datos de la tabla 11, se obtiene por cada clase
diamétrica el área basal por hectárea, lo cual se observa en la tabla 12.
La medida de volumen es obviamente el más importante resultado del inventario forestal, pero
también es importante reconocer que está más sujeto a los errores de medición.
Los resultados de volumen deben servir para decidir sobre el orden cronológico de áreas de
aprovechamiento anual (AAA) y para dar una idea del volumen aprovechable en el presente.
El volumen por hectárea es la suma de los volúmenes de los árboles contados en una hectárea, y
se estima a través de la fórmula siguiente:
V n 10000
Vha (6-15)
Np Tp
Donde:
Vha = volumen por hectárea (m³)
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 73
Ejemplo 6.6. Utilizando los datos del ejemplo 6.4, calcular el volumen por clase diamétrica,
especie y hectárea de este bosque. Para estimar la altura y volumen, utilizar las fórmulas
siguientes:
Empleando los datos del ejemplo 6.4 (3 parcelas de 500 m²) y de la tabla 11, calcular el
volumen por hectárea en la clase diamétrica de 10-14.9 cm para Alnus arguta.
Como estamos utilizando los datos del ejemplo 6.4, este paso ya fue realizado (ver tabla 10).
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 74
Al aplicar las fórmulas en cada dato de la tabla 10, se obtiene por cada clase diamétrica el
volumen por hectárea de este bosque, lo cual se observa en la tabla 13.
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 75
Los bosques secundarios jóvenes corresponden con frecuencia a estructuras más o menos
coetáneas. Las especies que presentan esta estructura, por lo general, corresponden a especies
exigentes de luz: heliófitas efímeras o durables. Generalmente, en el manejo de estos bosques
se utilizan sistemas silviculturales monocíclicos.
Una especie que presenta una estructura de J invertida indica que los individuos infantiles y
jóvenes se encuentran bajo la sombra de árboles de mayor tamaño y edad, y que pueden
sobrevivir bajo condiciones de menor iluminación: probablemente son esciófitos o esciófitos
parciales. Sin embargo, en un bosque discetáneo, la distribución diamétrica individual de
muchas especies puede ser coetánea. (Catie, 2001; Prodan, 1997)
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 76
Ejemplo 6.7. Utilizando los datos del ejemplo 6.4, graficar la estructura horizontal que
presenta este bosque.
Para graficar la estructura horizontal del bosque, se utilizarán los datos de la tabla 11,
colocando en el eje X, las clases diamétricas, y en el eje Y, el número de árboles por especie.
60
50
40
30
20
10
0
10-14.9 15-19.9 20-24.9 25-19.9 30-34.9
Clases diamétricas (cms)
La estimación del incremento del volumen es una aproximación, pero de vital importancia para
el manejo, pues de su conocimiento dependen las decisiones que se tomen en relación a la corta
anual.
Entre los métodos para proyectar el volumen, uno de los más usados es el Método de
Reynolds. Este método proyecta la tabla de rodal y se basa en el supuesto que los árboles
dentro de cada clase diamétrica están distribuidos al azar.
En cada árbol donde se obtengan muestras con el Barreno de Pressler, el incremento periódico
anual diamétrico se obtiene a través de la fórmula siguiente:
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 77
2 L
IPAd 10 (6-16)
Nac
Donde:
IPAd = incremento periódico anual diamétrico (cm/año)
L = largo de los 5 ó 10 últimos anillos de crecimiento (mm)
Nac = número de anillos de crecimiento (5 ó 10)
Existe una relación entre el incremento periódico anual diamétrico y el DAP. La relación entre
el incremento periódico anual diamétrico y el DAP se puede calcular por medio de un análisis
de regresión, o también se pueden usar promedios de incrementos por clases diamétricas.
Ejemplo 6.8. Para ilustrar el Método de Reynolds, se utilizarán los datos de un inventario
forestal realizado en un bosque de Pinus tecunumanii, en donde se extrajeron tarugos de madera
en una muestra de 30 árboles tipo. Con los datos obtenidos en este inventario se estimará el
incremento en volumen de este bosque, a partir de los datos de la tabla 15.
IPAd
M (6-17)
C
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 78
Donde:
M = tasa de crecimiento
IPAd = incremento periódico anual diamétrico (cm/año)
C = intervalo de la clase diamétrica (cm)
Utilizando los datos de la tabla 15 y la fórmula 6-17, tenemos que la tasa de crecimiento es:
Debido al crecimiento de los árboles una parte de ellos pasarán a la clase siguiente y el resto
permanecerá en la misma clase. La razón de crecimiento indica el movimiento de árboles de
una clase a otra. El movimiento de clases se obtiene a través de las fórmulas siguientes:
Donde:
MC1 = número de árboles que se moverán una clase diamétrica
MC0 = número de árboles que permanecerán en la misma clase diamétrica
Nha = número de árboles por hectárea (actual)
M = tasa de crecimiento
Utilizando los datos de la tabla 16, del paso 1, y las fórmulas 6-18 y 6-19, tenemos que los
movimientos de clase corresponden a los siguientes:
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 79
El número de árboles por hectárea que “teóricamente” estarán en el futuro, se obtiene a través
de la fórmula siguiente:
Donde:
Utilizando los datos del paso 2 y la fórmula 6-20, tenemos que el número de árboles por
hectárea en el futuro será igual a:
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 80
Los volúmenes por hectárea en el presente y en el futuro se estiman con las fórmulas siguientes:
VA Vi Nha (6-21)
VF Vi Nhaf (6-22)
Donde:
VA = volumen actual (m³/ha)
VF = volumen futuro (m³/ha)
Vi = volumen individual (m³)
Nha = número de árboles por hectárea (actual)
Nhaf = número de árboles por hectárea en el futuro
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 81
Utilizando los datos de la tabla 18, del paso 3, y las fórmulas 6-21 y 6-22, tenemos que el
volumen actual y futuro por hectárea es igual a:
Donde:
IPAv = incremento periódico anual volumétrico (m³/ha/año)
Utilizando los datos del paso 4 y la fórmula 6-23, el incremento en volumen del bosque es igual a:
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 82
El cálculo del estado físico de los árboles nos permite tener una idea de la calidad del estrato, lo
cual es muy útil para definir las estrategias de intervención en el mismo. La tabulación de la
información puede hacerse a través de dos métodos: utilizando porcentajes y/o valores por
hectárea.
Ejemplo 6.9. Para ilustrar el cálculo del estado físico de los árboles se utilizarán los datos de 3
parcelas que se establecieron en un bosque mixto de 2.7 hectáreas. Los datos de las parcelas
son los siguientes:
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 83
Los árboles de las parcelas se deben agrupar por especie y por categorías del estado físico, tal y
como se observa en la tabla 21.
Tabla 21. Frecuencias por especie y por categorías del estado físico.
Empleando los datos de la tabla 21, calcular el porcentaje de árboles rectos en Pinus oocarpa:
11
% 100
37
% = 29.73
Al repetir este procedimiento para cada dato de la tabla 21, se obtiene el estado físico en
porcentaje de los árboles del bosque, tal y como se observa en la tabla 22.
Tabla 22. Estado físico de los árboles del bosque mixto (porcentajes).
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 84
El cálculo del estado fitosanitario de los árboles nos permite tener una idea de la sanidad del
bosque, lo cual es útil para fijar las estrategias que se deben adoptar en el manejo del bosque.
Ejemplo 6.10. Para ilustrar el cálculo del estado fitosanitario de los árboles se utilizarán los
datos de 3 parcelas que se establecieron en un bosque de 3.2 hectáreas. Los datos son:
Los árboles de las parcelas se deben agrupar por especie y por categorías del estado
fitosanitario, tal y como se observa en la tabla 24.
Tabla 24. Frecuencias por especie y por categorías del estado fitosanitario.
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 85
Empleando los datos de la tabla 24, calcular el porcentaje de árboles sanos en Quercus tristis:
12
% 100
27
% = 44.44
Al repetir este procedimiento para cada dato de la tabla 24, se obtiene el estado fitosanitario en
porcentaje de los árboles del bosque, tal y como se observa en la tabla 25.
Para estimar el número recomendado de brinzales podemos considerar, como punto de partida,
la cantidad que normalmente se siembra en plantaciones (1,111 individuos/ha). La
competencia entre los árboles y otras especies vegetales no existe en una plantación, lo cual no
es el caso de los brinzales en bosques naturales latifoliados húmedos; por eso el número
recomendado de brinzales “comerciales” debe ser mayor de 1,111 por hectárea. Dada la alta
tasa de mortalidad bajo condiciones naturales, se recomiendan 2,000 brinzales por hectárea
como una cantidad adecuada. Otros investigadores han propuesto rangos aceptables de 988 a
2,470 brinzales por hectárea. (Catie, 2002)
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 86
CRN 10000
RNha (6-24)
Np Tp
Donde:
RNha = regeneración natural por hectárea
CRN = categoría de regeneración natural
Np = número de parcelas
Tp = tamaño de la parcela (m²)
Con estos datos, calcular la regeneración natural por hectárea de cada especie.
Los datos de las parcelas se deben agrupar por especie y por categorías de regeneración natural,
tal y como se observa en la tabla 27.
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 87
Empleando los datos del ejemplo 6.11 (8 parcelas de 50 m²) y de la tabla 27, calcular el número
de brinzales por hectárea para Pinus montezumae.
CRN 10000
RNha
Np Tp
15 10000
RNha
8 50
Al aplicar la fórmula en cada dato de la tabla 27, se obtiene la regeneración natural por hectárea
de este bosque, tal y como se observa en la tabla 28.
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 88
Después de haber realizado un muestreo independiente en cada estrato de bosque, se debe hacer
un análisis estadístico (estratificado) para determinar la precisión del inventario en general. Los
pasos a seguir se detallan en el ejemplo 6.12.
Con los datos siguientes, determinar los valores estratificados de la media aritmética, la
desviación estándar, el error estándar, y el cálculo del número de parcelas necesarias para tener
un error del 15 por ciento a un 95% de confiabilidad.
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 89
Utilizando los datos de cada estrato, y las fórmulas de las páginas 15 y 16 de este documento,
obtener las sumatorias siguientes:
Aj Aj
Nj Pj
Tp At
9.4 9.4
Nj Pj
0.1 235.3
Nj = 94.0 Pj = 0.0399
Este procedimiento se aplica para los otros Este procedimiento se aplica para los otros
estratos de bosque. estratos de bosque.
Xe
( Xj ) ( Nj )
Nj
206055.96
Xe
2352.6
__
Xe = 87.6 m³/ha
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 90
Este valor nos indica que en promedio en los cuatro estratos de bosque existe un volumen de
madera de 87.6 m³/ha.
Se
(Sj) ( Pj ) 100
Xe
37.47
Se 100
87.6
Se = 42.8%
Este valor nos indica que el promedio de las desviaciones de los datos muestreados en los
cuatro estratos es de 42.8%, con respecto a la media muestral estratificada (87.6 m³/ha).
Sxe
(Sj ) ( Pj ) ² (Sj)² ( Pj )
n N
Sxe
37.47² 1581.79 N
235.3
N = 2353
61 2353 0.1
Este valor nos indica que el promedio de las desviaciones de los datos muestreados en los
cuatro estratos es de 4.7 m³/ha, con respecto a la media poblacional.
t ² ( Sj )² ( Pj ) (2)² (1581.79)
ne ne
t ² ( Sj )² ( Pj ) (2)² (1581.79)
( Ea )² (13.14)²
Nj 2352.6
15%
Ea (87.6) Ea = 13.14 ne = 36 parcelas
100
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 91
Este valor nos indica que para obtener la precisión requerida se deben establecer 36 parcelas.
En el pre-muestreo se levantaron 61 parcelas, por lo tanto, se midieron más parcelas de las que
realmente se necesitaban. En este ejemplo, el paso 6 ya no tendría sentido, sin embargo, se
desarrollará solo con fines de ejemplificar los procedimientos de este paso.
Utilizando este criterio, las parcelas por estrato se distribuyen a través de la fórmula siguiente:
NPe1 ne Pj
Entonces, utilizando el área de los estratos, las 36 parcelas deberán repartirse de la manera
siguiente (ver datos del primer paso):
Utilizando este criterio, las parcelas por estrato se distribuyen a través de la fórmula siguiente:
ne ( Sj ) ( Pj )
NPe 2
(Sj) ( Pj )
Entonces, utilizando la variabilidad de los estratos, las 36 parcelas deberán repartirse de la
forma siguiente (ver datos del primer paso):
36 1.76
Estrato A: = 2 parcelas
37.47
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 92
36 0.64
Estrato B: = 1 parcela
37.47
36 0.29
Estrato C: = 0 parcela
37.47
36 34.78
Estrato D: = 33 parcelas
37.47
Es importante resaltar la diferencia entre estos dos métodos, ya que nos permite confirmar que
el número de parcelas a muestrear no depende del tamaño del estrato sino de su variabilidad.
Observe que el estrato A, a pesar de tener el área más pequeña que los estratos B y C, requiere
de más parcelas que estos estratos.
Por lo tanto, se concluye que las parcelas idealmente deben distribuirse de acuerdo a la
variabilidad que presenten los estratos (método B).
La información edáfica del bosque se puede resumir en una tabla de la manera siguiente:
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 93
La información dasométrica del bosque puede resumirse en una tabla que considere la
información siguiente:
DAP Altura
Árboles por Área basal Volumen IMA
Estrato promedio promedio
hectárea (m²/ha) (m³/ha) (m³/ha/año)
(cms) (m)
VI unidad
UNIDAD VII
MODALIDADES DE
INVENTARIOS FORESTALES
OBJETIVOS DE LA UNIDAD
7.1. INTRODUCCIÓN
En relación con esta nueva tendencia, es necesario señalar que, para la sociedad, el bosque ha
dejado de ser solamente madera de aserrío; cada día hay más conciencia de que este también es
la fuente de gran cantidad de bienes no maderables. Asimismo, nuestra sociedad reconoce que
el bosque produce servicios ambientales, los que en muchos casos poseen mayor valor que la
madera, pero para los cuales no se han desarrollado medidas de cuantificación.
Actualmente se reconocen como servicios ambientales del bosque: la mitigación de gases con
efecto invernadero, la belleza escénica, la paz y tranquilidad que un bosque da al ser humano, la
conservación de biodiversidad y de recursos genéticos, la regulación de caudales y de la calidad
del agua en las cuencas hidrográficas, y la prevención y atenuación de desastres naturales.
Estas tendencias exigen un cambio de actitud en el profesional forestal; cambio que debe
reflejarse en la utilización de las técnicas de inventario forestal como un medio para cuantificar
y valorar, tanto los productos maderables y no maderables del bosque, como los servicios
ambientales que este produce. (Catie, 2002)
Obtener información sobre el uso del suelo y las coberturas de cada estrato de bosque.
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 96
Inicialmente se rodaliza el área para poder planificar y realizar el inventario forestal. Esta
metodología se basa en la rodalización del bosque en estratos o clases de desarrollo (cuadro
12).
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 97
Las parcelas de forma circular son las más utilizadas. El tamaño de la parcela se define a través
del cuadro siguiente.
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 98
c) Tamaño de la muestra
El número de parcelas dentro de cada rodal, este definido por el tamaño y estructura del mismo.
En esta metodología el número de parcelas que se deben establecer en un rodal se obtiene de la
tabla siguiente.
d) Método de muestreo
e) Variables a medir
Inicialmente en cada punto de muestreo se obtiene información del terreno, por ejemplo: el tipo
de suelo, pendiente promedio, altitud, uso del suelo, etc.
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 99
Edad total en años (obtenida con barreno de Pressler o a través del conteo de verticilos
para los individuos pequeños)
Crecimiento de los últimos 5 años, a través de la medición de una muestra de madera
extraída con barreno de Pressler.
En cada punto de muestreo, con un relascopio se obtiene el área basal por hectárea,
haciendo las correcciones del área basal en aquellos sitios donde existan pendientes
mayores a 5 grados.
Este procedimiento se realiza solamente en los estratos C2, C3, C4, C5 y C6.
f) Procesamiento de la información
Para procesar las variables dasométricas de volumen, índice de sitio, incrementos, etc., se
utilizan curvas y tablas que han sido generadas a través de investigaciones forestales que se han
realizado en Guatemala y algunos países de América Central. Para hacer los cálculos y análisis
de datos se ha diseñado un programa especial para planes de manejo y planes operativos (SEP);
sin embargo, este procesamiento también se puede hacer manualmente.
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 100
– Volumen comercial para todas las especies del bosque productivo bajo manejo (DAP 25
cm), con un error máximo de muestreo del 15% al 95% de confianza para el conjunto de
estratos.
– Distribución por clase díamétrica del número de árboles, área basal y volumen comercial de
todas las especies por grupo comercial.
b) Tamaño de la muestra
En el departamento del Petén se han realizado investigaciones para definir cuál es el tamaño
“ideal” de la muestra para los bosques latifoliados húmedos. Con base a estas investigaciones
se ha propuesto que el número de parcelas a levantar se determine a través de la tabla siguiente.
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 101
Tabla 35. Intensidades mínimas y número de parcelas de muestreo en función del área.
c) Método de muestreo
En este tipo de inventarios se recomienda estratificar el área y luego en cada estrato establecer
las parcelas en forma sistemática.
d) Variables a medir
11 10 1m
12 9 10 m
13 8
14 7
15 6
500 m 50 m
16 5
17 4
18 3
19 2
20 1
20 m 10 m
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 102
También se evalúan las variables del terreno, y entre las más importantes están las siguientes:
e) Procesamiento de la información
Existen diversas fórmulas para determinar el volumen comercial. La FAO, en los años sesenta,
realizó en Petén la medición de 336 árboles sin gambas y 465 árboles con gambas, calculando
separadamente los dos grupos y utilizando 15 ecuaciones de regresión. Del análisis realizado,
se determinó que para estimar el volumen comercial de las especies latifoliadas del Petén se
debe utilizar la fórmula siguiente:
1 D
V 0.0567 0.5074 DAP² Hc (7-1)
100
Donde:
V = volumen comercial (m³)
DAP = diámetro a la altura del pecho (cm)
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 103
Por lo tanto, el muestreo de carbono debe realizarse atendiendo a estas cuatro fuentes, lo cual se
describe a continuación:
Es muy importante hacer notar que el componente más importante de esta fuente de variación
son los árboles, mientras que la maleza por su baja tasa de fijación puede dejar de muestrearse.
Muestreo: en las parcelas se deben registrar todos los individuos con un DAP > 5 cm. Se
emplean los mismos principios de muestreo que se aplican en un inventario forestal normal.
Cálculos: la biomasa de los árboles se puede calcular por medio de las ecuaciones:
Tabla 37. Ecuaciones de biomasa para árboles latifoliados por zona climática
Rango de
Zona climática Ecuación r2
DAP (cm)
Seca: <1500 mm/año y una Y = exp [–1.996 + 2.32 × Ln (DAP)] 5 – 40 0.89
estación seca larga. Y = 10^[–0.535 + Log10 (AB)] 3 – 30 0.94
Húmedo: 1500 – 4000 Y = 42.69 – 12.8 × DAP + 1.242 × (DAP)² 0.84
mm/año y una estación seca 5 – 148
Y = exp [–2.134 + 2.53 × Ln (DAP)] 0.97
corta o sin estación seca.
Muy húmedo: >4000
Y = 21.297 – 6.953 × DAP + 0.74 × (DAP)² 4 – 112 0.90
mm/año y sin estación seca.
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 104
Especie Ecuación R2
Coníferas Y = exp [–1.17 + 2.119 × Ln (DAP)] 0.98
Palmas Y = 4.5 + 7.7 × H 0.90
Café Y0 = 0.67134058 + [0.00072208395 × exp(–H/–0.40531445)] 0.98
El valor de biomasa en kilogramos es dividido dentro de 1,000 para obtener toneladas (t). Las
toneladas son multiplicadas por 0.5 para obtener carbono (C). La razón por la que se multiplica
por 0.5 para obtener carbono se debe a que la literatura indica que en promedio la materia
vegetal contiene un 50% de carbono, una vez que se ha removido el agua. El valor de carbono
es dividido dentro de la superficie de la parcela de muestreo (m²) para obtener tC/m². Al
multiplicarlo por 10,000 m²/ha se obtienen tC/ha.
Para determinar la biomasa abajo del suelo, que consiste en el sistema radicular de la
vegetación existente es conveniente estimarla como un porcentaje de la biomasa arriba del
suelo. La literatura de inventarios de carbono indica que un valor entre 10 y 15% es
conservador pero que permite obtener un estimado aproximado de la biomasa en esta fuente.
Para cultivos como el café la literatura reporta que la proporción entre la biomasa arriba del
suelo y la de raíces es de aproximadamente 30%.
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 105
a) HOJARASCA
Muestreo: la hojarasca en sí, se colecta del suelo en subparcelas de 1 m², las que pueden
estar colocadas en algún vértice de la parcela que se utiliza para medir árboles, siempre
teniendo cuidado de colectar toda la capa de materia en descomposición incluyendo el
humus y materia vegetal muerta que no esté en proceso de descomposición aún. Previo a la
colecta de hojarasca, se debe eliminar cualquier vegetal “vivo” que este presente en la
subparcela de 1 m².
El material colectado en la subparcela se coloca en una bolsa de muestreo, se pesa y se
anota el peso. Este procedimiento puede necesitar hacerse por partes debido al volumen de
material presente y la capacidad de las pesas disponibles. El material pesado debe
concentrarse en un sitio, homogenizarse y después sacar una muestra representativa (por
ejemplo, lo que quepa en una mano), la que deberá colocarse en bolsas de papel
debidamente numeradas e identificadas (es importante anotar el peso y un número de
identificación).
Cálculos: una vez terminado el proceso de medición se procede a llevar las muestras al
laboratorio, en donde se secan las muestras de hojarasca a 80 grados centígrados por 24
horas para determinar el peso seco. Para el cálculo de biomasa en esta fuente se obtiene el
valor para el contenido de humedad. Este valor se calcula de la siguiente manera:
Phs Pss
CH (7-2)
Phs
Donde:
CH = contenido de humedad
Phs = peso húmedo de la submuestra (gramos)
Pss = peso seco de la submuestra (gramos)
Con el valor de contenido de humedad se procede a calcular la proporción del peso húmedo que
corresponde a biomasa:
Donde:
Y = biomasa (gramos)
Pht = peso húmedo total (gramos)
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 106
Los valores obtenidos se dividen dentro de 1 000,000 para obtener toneladas. Este valor se
1
multiplica por 0.5, lo que da toneladas de carbono fijado. Las toneladas de carbono se dividen
dentro del total de metros muestreados para obtener tC/m². Este valor al multiplicarlo por
10,000 m²/ha nos proporciona tC/ha.
Muestreo: la materia vegetal muerta se refiere a los árboles muertos ya sea en pie o caídos.
Este material se mide en la misma parcela que se utiliza para la medición de árboles vivos.
En el caso de los árboles muertos en pie se les debe medir el DAP. Si están caídos se deben
medir dos diámetros en el tronco (en los extremos) y su longitud total.
Cálculos:
Para el cálculo de biomasa, los árboles muertos en pie utilizan las mismas ecuaciones de los
cuadros 16 y 17, con la condición de que sólo toman un 70% de la biomasa reportada por la
ecuación. De esta manera la ecuación para árboles latifoliados de la zona húmeda podría
quedar así: Y = {exp [–2.134 + 2.53 × Ln(DAP)]} × 0.7. De aquí en adelante, para obtener
tC/ha, se emplea el mismo procedimiento que se utiliza en los árboles vivos.
Para troncos caídos, se obtiene el volumen del tronco mediante la fórmula de Smalian y
después con la densidad de la madera se define la biomasa, quedando la ecuación así:
Y = Volumen (m³) × Densidad (kg/m³). Es importante contar con valores de densidad para
las especies existentes en el área evaluada. Si se desconocieran valores de densidad para
las especies encontradas se pueden tomar muestras de madera para determinar la densidad o
utilizar un valor de 0.5. De aquí en adelante, para obtener tC/ha, se emplea el mismo
procedimiento que se utiliza en los árboles vivos.
Al medir el suelo se busca identificar cuál es el contenido de carbono en los primeros 30 cms de
profundidad. Generalmente este componente tiene un alto valor de contenido de carbono.
También es el componente que sufre menos alteraciones de su contenido de carbono. Si se trata
de proyectos de reforestación en áreas degradadas, es posible que el carbono del suelo aumente
significativamente y en casos como este es muy importante contar con mediciones iniciales y
periódicas del contenido de carbono.
mm, escoja aleatoriamente una muestra representativa y colóquela en una bolsa de papel
debidamente identificada.
Cálculos: las muestras de suelo se procesan para determinar el contenido de carbono (CC)
en el suelo con el método de Walkley-Black u otro utilizado por el laboratorio disponible.
El carbono contenido en el suelo se calcula a partir de los valores de porcentaje de carbono
y densidad aparente con la siguiente fórmula:
Donde:
CC = contenido de carbono (%)
DA = densidad aparente (gr/cm³)
P = profundidad de muestreo (cms)
VI unidad
Manual de Inventarios Forestales 108
ANEXOS
Anexo 1. Tabla de t de Student
90% 95% 99%
gl gl
0.10 0.05* 0.01
1 6.314 12.706 63.657 1
2 2.920 4.303 9.925 2
3 2.353 3.182 5.841 3
4 2.132 2.776 4.604 4
5 2.015 2.571 4.032 5
2.056
26 1.706 2.779 26
27 1.703 2.052 2.771 27
28 1.701 2.048 2.763 28
29 1.699 2.045 2.756 29
30 1.697 2.042 2.750 30
VII unidad
Manual de Inventarios Forestales 109
VII unidad
Manual de Inventarios Forestales 110
Anexo 3. Ecuaciones para estimar volumen total sin corteza para especies latifoliadas
VII unidad
Manual de Inventarios Forestales 111
BIBLIOGRAFÍA
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VII unidad
Manual de Inventarios Forestales 112
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México. Noriega Editores. 632 p.
VII unidad