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Si las sectas avanzan, es por algo. ¿Qué pasara el día en que les arrebatemos sus
grandes banderas? Se desplomarán, habiendo cumplido con su misión, que es la de
despertar al gigante adormecido, la Iglesia Católica.
¿Y qué pasó? Que con la explosión de las sectas nos dimos cuenta de que nuestros
análisis no era correcto. De pronto los apáticos se volvieron activos y entusiastas. Pues
bien, ¿a qué se debe este cambio?
Pensábamos que la Palabra de Dios era algo difícil, reservada a los seminarios, los
conventos y las escuelas de teología. Para el pueblo sencillo eran suficientes el
catecismo y el devocionario.
Pues bien, llegaron las sectas y demostraron que no es así. La Biblia es para todos:
niños y adultos, eruditos e ignorantes. El pueblo corrió tras ellos en búsqueda de
alimento espiritual más sólido y genuino. Y nosotros, la Iglesia de Cristo, nos quedamos
atrás, con nuestro tesoro bien cuidado. Poseyendo la plenitud de la verdad, lo
escondimos. Los demás, abriendo la Biblia, dieron la impresión de contar con riquezas
más grandes que las nuestras. Y muchos se fueron con ellos.
¿Qué pasará el día en que nosotros católicos pongamos la Biblia en el lugar que se
merece, volviéndose en el principal alimento espiritual de todo creyente, empezando
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8/4/2019 Las Cuatro Banderas de las Sectas
Nosotros católicos pensábamos que la entrega personal a Cristo era solamente para los
sacerdotes y las religiosas. Pues bien, llegaron las sectas y nos abrieron los ojos,
recordándonos que la entrega a Cristo es para todos, una entrega consciente y
definitiva a El como el único Salvador y Señor de la propia vida. Algo realmente
entusiasmante y sencillo al mismo tiempo, al alcance de todos, que da sentido a la vida
y crea la conciencia de una igualdad esencial entre todos los miembros del pueblo de
Dios.
¿Qué pasará el día en que entre nosotros católicos todo esto se vuelva «ley», eliminando
en los laicos aquel profundo complejo de inferioridad, que los atrapa y les impide
elevarse hacia las cumbres del compromiso apostólico y la santidad?
Para muchos católicos sencillos, Dios es un ser familiar, con el cual tienen un trato
continuo y amoroso, que da una profunda serenidad a la propia vida. El problema está
en que no tienen una conciencia clara acerca del «tesoro» que poseen.
Al contrario, las sectas buscan a propósito este tipo de experiencia y hacen alarde de
ella, utilizando los recursos más variados: oración, ayuno, canto, testimonio, etc. Saben
que se trata de un tesoro que se tiene que encontrar a como dé lugar, y, al encontrarlo,
o tener la impresión de haberlo encontrado, sienten la obligación de comunicar la
buena nueva, creando en la comunidad un clima de euforia contagiosa.
¿Qué pasará el día en que entre nosotros católicos esa búsqueda se vuelva «ley»,
haciendo del Dios lejano el Dios amigo e inseparable?
El que encontró a Dios y quedó marcado por esta experiencia, no puede quedar callado.
Para él la misión se vuelve en el paso obligado. Si a esto se añade una mística particular
y un sistema de «conquista» bien planeado, no hay que extrañarse de los resultados.
¿Qué pasará el día en que en el mundo católico se vuelva en un estilo normal de acción
pastoral, haciéndose «ley» la búsqueda constante de la oveja perdida, contando con una
mística y una metodología específica con miras a recuperar a los alejados?
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8/4/2019 Las Cuatro Banderas de las Sectas
Lástima que aún estamos muy lejos de poder vislumbrar este cambio, empezando por
los seminarios y las casas de formación para religiosas. Ni modo. Le tocará al laicado
dar este paso tan importante en la vida de la Iglesia, como ya está pasando con muchos
movimientos apostólicos. De todos modos, el día en que esto suceda, podremos decir
con toda razón: «¡Benditas las sectas que vinieron a despertarnos!».
Hasta que la Iglesia no tome conciencia de sus cuestionamientos y no les arrebate sus
mejores banderas. Entonces las sectas se desplomarán habiendo cumplido con su
misión, que consiste precisamente en despertar al gigante adormecido, que es la Iglesia
Católica.
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Links
1. http://fraynelson.com/biblioteca/apologetica/index.html
fraynelson.com/biblioteca/apologetica/cuatro_banderas_de_las_sectas.htm 3/3