La Municipalidad Metropolitana de Lima, a través del Instituto Metropolitano de Planificación ha publicado para consulta la propuesta de Plan Maestro del Centro Histórico de Lima- PMCHL elaborado por el Programa Municipal para la Recuperación del centro histórico de Lima - PROLIMA. Este breve artículo busca presentar los alcances de dicha propuesta y aportar en relación con la pertinencia de su elaboración y posible promulgación con la consecuente puesta en operación. El documento consta de tres partes: 1. Lineamientos conceptuales, 2. Diagnóstico y 3. Propuesta. Según se menciona en el mismo, los lineamientos conceptuales son la base para el diagnóstico realizado y por ende sirvieron junto con este diagnóstico para elaborar la propuesta presentada. Asimismo, se establece que “las nociones y conceptos que se aplicarán en el plan, así como la perspectiva histórica, la visión en la que se enmarca y los objetivos a alcanzar; primero, a largo plazo (objetivo principal) y luego a mediano plazo (objetivos secundarios). Ésta se basa en los principios de la recomendación de "Paisaje Urbano Histórico" de la UNESCO, la cual suscribe por ser la más acorde a la realidad del CHL”. Pareciera que la propuesta se fundamenta en el sólo hecho de ser un “Paisaje Urbano Histórico”, desconociendo, o por lo menos no expresándolo claramente, que este fragmento urbano es sólo una parte del sistema urbano de la ciudad de Lima, y que, por tanto, la propuesta no podría considerarse integral. Ello se revela sólo al inicio del documento, pues salta a la vista un hecho que para muchos puede no ser relevante, pero para aquellos involucrados en temas urbanos es obvio; entre los miembros del equipo redactor, no figuran profesionales de disciplinas que necesariamente permiten entender los problemas de toda ciudad, sea patrimonial o no, entendiéndola como un sistema integral que requiere precisamente soluciones integrales. Entre estas disciplinas tenemos la economía urbana y la sociología, pero además y dado que uno de los ejes estratégicos propuestos en el PMCHL define a “El centro de Lima como centro vivo y lugar atractivo para residir e invertir (Eje Estratégico II)”, es también extraño comprobar que no figuren expertos en desarrollos inmobiliarios, así como en otros en rubros afines. Por tanto, cabe preguntarse, ¿cómo se puede formular un “Plan Maestro Urbano” sin entender las lógicas económicas y sociales que existen en el ámbito de dicho instrumento? Pareciera pues que el principal problema radicaría en haber denominado “Plan” a un conjunto de propuestas de intervención y control, muy respetables, por cierto, pero carentes de la sustancia que las haría posibles: la población, la economía y el marco político-legal. Así pues, el diagnóstico que se hace en relación con el rol del CHL respecto a la metrópoli pareciera insuficiente pues su nivel de representación como espacio fundacional requeriría una mirada mayor y un entendimiento más profundo de la actividad que debiera realizarse en él para cumplir dicha función representativa. Pareciera que la mirada que subyace en todo el documento esta exclusivamente centrada en lo histórico (parcial, por cierto) sin incluir el presente, por lo que también cabe preguntarnos ¿acaso lo cotidiano actual, no será el patrimonio (por más caótico que parezca) que heredarán nuestros descendientes y por ende requiere criterios para su preservación? No mirar el presente, o mirarlo simplemente como algo equivocado y caótico, es desconocer las reglas que imperan y producen la ciudad que vivimos, reglas que es necesario entender para poder proponer medidas certeras que procuren la preservación tanto del pasado monumental como del presente. Sin embargo, es destacable el enorme esfuerzo desplegado para registrar y proponer conformaciones arquitectónicas que busquen amarrarse con el patrimonio edificado, así como la recopilación y registro de todo el patrimonio inmaterial, el minucioso análisis de riesgos físicos y el tratamiento paisajístico propuesto, pero repito, todo ello por más valioso que sea no podrá custodiarse, ni ponerse en valor, ni servir de manera “viva”, sin entender los fenómenos sociales y económicos que existen y que seguirán pugnando por desarrollarse en este espacio fundacional. Por último, debiera ser el IMP, entidad de la MML que somete a consulta la propuesta elaborada por PROLIMA, quien elabore el “Plan Maestro” para este segmento urbano dado que es la instancia de planificación apropiada para elaborar un instrumento adecuado para su gestión. Sólo teniendo una mirada general y mayor sobre la ciudad, se podrá entender el verdadero rol que debe cumplir el CHL en el concierto de Lima Metropolitana, la Región y el País y, por tanto, a partir de ello proponer las acciones, en diversas escalas, necesarias para la preservación de nuestro rico legado, pasado y presente.