.
I'
ASPECTOS ECONOMICOS,
FINANCIEROS Y SOCIALES
DE LA MINERIA*
Estimados señores periodistas:
Tengo el agrado de encontrar-
me ante ustedes con la doble fi-
nalidad de exponerles algunos
puntos de vista y de dialogar,
posteriormente, sobre ellos, en
relación con el tema menciona-
.do, en la esperanza de ayudarles
a esclarecer algunas interrogantes
en vuestro ya motivado interés
por la actividad minera.
Me sentiré satisfecho si llego a
incentivar un diálogo fructífero
que sirva para que la difusión de
la gran importancia que tiene la
minería en el Perú, sea· cada vez
mayor.
En la primera sesión de este
Seminario, pude apreciar cómo el
Director General de Minería y los
principales funcionarios de esa
dependencia explicaron en forma
.l ilustrada las diversas etapas por
las que discurre una operación
minera. Apreciaron ustedes cómo
la prospección, la exploración y
el desarrollo conducían hacia la
(*) Exposi c ión d e l I ng. César Jaime Fernán-
dez, Presidente de la Sociedad de Mine-
ría, en el Seminario para Periodistas, or-
ganizado por el Ministerio de Energía y
Minas, el 29 de Setiembre de 1977.
explotación de los minerales úti-
les contenidos en un yacimiento.
También se hizo lo propio con
las etapas de la concentración de
las mencionadas especies minera-
les útiles en un producto de me-
nor volumen y mayor riqueza,
denominado "concentrado", el
c~al puede ser exportado o ali-
mentado a las etapas siguientes
de fundición y refinación. Se
mencionaron también los servi-
cios complementarios como la
construcción, la generación de
energia, el abastecimiento, el
transporte, la comercialización
de los productos y el conjunto de
servicios de carácter social como
la construcción e implementa-
ción de viviendas, escuelas, hos-
pitales, locales de esparcimiento
y recreación, etc.
l. LA ACTIVIDAD MINERA Y
LOS MINEROS
Todo este amplio y variado
conjunto de etapas y servicios,
que no tienen, necesariamente,
un desarrollo secuencial, consti-
tuyen una importante actividad
económica cuyo objetivo princi-
CESAR JAIME FERNANDEZ
pal es el de producir metales para
su utilización en la supervivencia
y en el desarrollo de la humani-
dad.
Hacer minería significa, pues,
efectuar una serie de actividades
tendentes a extraer del suelo re-
cursos no renovables que, luego
de un largo proceso técnico....:.
científico, se conviertan en pro-
ductos básicos que serán a su vez
transformados, mediante el pro-
ceso industrial, en bienes que
sirvan para satisfacer necesidades
humanas.
Las actividades que incluye la
minería empiezan por la idea de
realizarlas, continuando con la
intención de localizar el lugar
preciso de nuestro territorio don-
de se encuentran los recursos
mineros, determinando, luego, su
cantidad y calidad, con los estu-
dios y los trabajos correspondien-
tes, los que indicarán la inversión
necesaria para efectuar la explo-
tación y continuar con todos
los procesos, hasta llegar a su ya
mencionada transformación en
bienes de consumo directo.
La experiencia nos indica que
estos depósitos de minerales
están lejos de los centros pobla-
MINERIA
dos, en sitios inhóspitos, a eleva-
das alturas sobre el nivel del mar,
a veces en montañas donde la
nieve es permanente. Estas condi-
ciones geográficas y climatológi-
cas se han endurecido gradual-
mente en la medida en que el
tiempo ha transcurrido y los
lugares más accesibles han sido
ya explotados.
Buscar un depósito o yaci-
miento minero y encontrarlo no
es tarea fácil. Requiere de un
gran esfuerzo que muchas veces
termina sin resultado positivo
después de haberse invertido
gran cantidad de trabajo y dine-
ro. Esto determina el carácter
aleatorio o azaroso de la activi-
dad minera. Ser minero, pues,
significa estar dispuesto a correr
el riesgo de perder todo lo que se
tiene o de realizar toda una vida
de esfuerzos para terminar con
absolutamente nada.
Sin embargo, se encuentran
personas que tienen el criterio
de que esta minería de esfuerzos
y de riesgos, un poco romántica
tal vez, estaría terminando. Esto
es un error porque aún las gran-
des exploraciones, con las técni-
cas más avanzadas, sólo multipli-
can este riesgg y las pérdidas en
capital y trabajo se tornan aún
más grandes.
En el Perú, la actividad minera
caracteriza al hombre peruano.
Los incas la desarrollaron y logra-
ron con sus productos satisfacer
necesidades y realizar hasta crea-
ciones artísticas. En la época
colonial, el hombre peruano dio
su vida, sacrificó en parte su raza
por la explotación minera. En la
república continúa la minería
sosteniendo el desarrollo econó-
mico del Perú por cuanto signi-
fica producción para la exporta-
ción y la consecuente obtención
de divisas necesarias para comple-
mentar nuestra supervivencia y
financiar nuestro desarrollo.
En una revisión rápida de
cuántos somos los mineros, en-
contraremos que en la Minería
Peruana los empresarios mineros
apenas llegaríamos a 50 y como
ya lo mencionó el Director Ge-
neral de Minería, Ing. Rafael del
Aguila, el total de trabajadores
MINERIA
mineros llegan a alrededor de
50,000 personas.
Pues bien, todo este conjunto
de hombres, podríamos decir si
me lo permiten, que pertenecen
a una rara especie humana, cada
vez más escasa, de seres con una
voluntad casi gigantesca, suma-
mente decididos y valerosos, con
capacidad y experiencia amplias
y hasta con una fortaleza física
singular, que les permite adaptar-
se a las condiciones geográficas
inhóspitas de nuestras montañas
y con extraños poderes de orga-
nizar y conducir que, de repente,
los deben a su contacto profundo
con la naturaleza. Y es a los es-
toicos mineros, que saben aco-
modarse a las situaciones buenas
como a las duras, a quiénes hoy
el país entero vuelve los ojos
para que ayuden a solucionar
una grave crisis económico-
financiera.
Los mineros cumplirán segura-
mente, una vez más, con su inelu-
dible deber de solidaridad huma-
na , pero, y esto es un ruego, dé-
mosles la comprensión y colabo-
ración que es todo lo que ellos
reclaman de la sociedad, y es la
prensa, poderosa herramienta de
comunicación de masas, la que
tiene que servirles a lograr su an-
helo de establecer ese invisible
contacto con los demás perua-
nos, sin que ello signifique la re-
nuncia al derecho de crítica cons-
tructiva.
2. ASPECIDS ECONOMICOS DE
LA ACTIVIDAD MINERA
Analizaremos brevemente los
aspectos que singularizan a la mi-
nería en el marco de la actividad
económica, como generadora de
ingresos suficientes para cubrir
costos y permitir un excedente
que, después de garantizar la
permanencia de la actividad, sa-
tisfaga a los factores humanos
que intervienen en esta actividad
productiva: trabajadores, Estado
y empresarios.
Para analizar y comprender la
importancia económica de la mi-
nería en el país, es necesario ob-
servar la forma como esta activi-
dad aporta a nuestro desarrollo
económico y como ha servido al
sostenimiento de la evolución de
nuestra economía. El aspecto
más importante que condiciona
esta evolución se refiere, sin lu-
gar a dudas, a la forma cuma esta
actividad genera excedentes o
valor agregado, de tal manera
que permita un alto grado de
ahorro y su correspondiente in-
versión para acelerar el crecimien-
to del mismo sector minero y de
los demás sectores económicos
del país. Los resultados en la pro-
ducción indicarán si hubo ahorro
e inversión suficiente o adecua-
dos a nuestro requerimiento.
2.1. COMO SE GENERAN
LOS INGRESOS
Un concepto nunca bien escla-
recido en nuestro país es el que
nuestra minería, como la de cual-
quier país del mundo, compite
en un mercado internacional. No
se trata, pues, de una actividad
económica que pueda transferir
la elevación de sus costos inter-
nos al consumidor de sus produc-
tos a través del precio, como su-
cede con la industria manufactu-
rera, por ejemplo.
El ingreso en la minería está
condicionado a la situación del
mercado internacional de meta-
les y sufre, por lo tanto, los im-
pactos de la situación económica
mundial.
Debe comprenderse a plenitud
que mientras subsista en el mun-
do el orden económico vigente, a
través de las exportaciones de
metales remitimos al extranjero
los componentes internos de los
costos e importamos los proble-
mas económicos existentes en
otros países.
Las deducciones en la venta, es
decir, los costos externos, que se
pagan en el extranjero, por con-
cepto de fletes y "Maquilas" o
tarifas internacionales por fundi-
ción y refinación de nuestros
productos, son otra particulari-
dad que condiciona los ingresos
de la minería. También a través
de ellos debemos sufrir las eleva-
ciones en los precios internacio-
nales de los insumos, del petróleo
y otros combustibles, así como
los costos de los requerimientos
157
 para combatir la polución en los
¡:iaíses desarrollados.
2.2. COSTOS
Los costos más importantes en
la actividad minera son los insu-
mos y la mano de obra.
El aspecto singular en cuanto a
los insumos consiste en el alto
componente importado que to-
davía ellos mantienen. Aún cuan-
do la industria minera ha incre-
mentado considerablemente el
consumo de. productos y materia-
les nacionales, es todavía elevado
el monto de lo que ella debe im-
1 portar del exterior. La variedad
1 de estos insumos no es muy am-
plia , hablamos mayormente de
barrenos, cables de acero, herra-
mientas y repuestos para uso en
las labores mineras, así como de
barras de acero, reactivos quí-
micos, algo de ferretería y tam-
bién de herramientas y repuestos
para las plantas metalúrgicas y
talleres de mantenimiento; pero
el valor de los mismos alcanza al
40° /o del total insumido por la
minería.
El costo de la mano de obra y
de las condiciones paralelas de
beneficio social constituye otra
,' particularidad de la actividad mi-
nera, ya que, de modo general,
podemos sostener que los jorna-
les más altos que se pagan en el
país y los más elevados montos
por condiciones de trabajo y de
vida corresponden a la minería
fundamentalmente, por la natu:
raleza de las propias labores y
por el alejamiento de los centros
roblados, lo que origina la nece-
sidad de atender rubros muy
variados y singulares, respecto a
otras actividades económicas
como la construcción y manteni:
miento de viviendas, hospitales,
escuelas, mercantiles y centros de
recreación y esparcimiento. Todo
lo cual se ·traduce en que el com-
ponente por estos conceptos sea, ,
en promedio, del 55º/o del costo l
de producción total. · 21529), por el 2° /o del mismo
2.3. DISTRIBUCION DE LA
UTILIDAD
En este aspecto es donde se
158
encuentran las singularidades más
importantes de la minería como
actividad económica.
Brevemente, diremos que, de
los elementos que intervienen en
la producción minera, el factor
humano, además de su participa-
ción en la renta producida a
través de los jornales y . sueldos,
percibe el 10°/o de las utilidades
antes de impuestos a través de la
Comunidad Minera, como parti-
cipación 1íquida en efectivo
(4° /o) y como participación pa-
trimonial en la propiedad de los
activos de las empresas (6º/o) .
Una particularidad, quizás la
más importante de toda esta ac-
tividad . económica, está dada por
el carácter agotable del yacimien-
to minero, su activo más valioso.
Esta característica que es única
para la minería y el petróleo,
hace obligatoria la reinversión de
una buena parte de las utilidades
para la continua exploración y
desarrollo del yacimiento, tratan-
do de evidenciar nuevas reservas
minerales que, cuando menos,
mantengan la continuidad de la
actividad económica. En minería,
podemos reinvertir con dicho
objeto hasta el 40º / o de las u ti-
lidades.
La participación del Estado en
las utilidades no se realiza en la
actividad minera, únicamente a
través del Impuesto a la Renta, ·
tal como lo consagra la Ley Ge-
neral de Minería vigente; sino
que, desnaturalizando el carácter
contractual de dicho instrumento
legal, frecuentemente el Estado
viene recurriendo a ella para cu-
brir sus requerimientos económi-
cos ante la situación de crisis por
la que atraviesa. Es así como se la
viene gravando con una carga tri-
butaria adicional del 19º/o, re-
presentado por el 15º/o del valor
de las ventas de sus productos co-
mo impuesto a la exportación
(Decretos Leyes Nos. 21528 y
valor como impuesto a los bienes
y servicios (Decreto Ley No.
21497) y por otro 2º/o de ese
mismo valor por comisión de la
venta· de dichos productos a
favor de la entidad estatal Mi-
nero-P.erú Comercial.
Si totalizáramos todos los con-
ceptos por los cuales participan
e~ el excedente generado por la
minería, tanto el Estado como la
Comunidad Minera, llegaríamos
en promedio, a que el 85º /o de
dicha diferencia entre el ingreso
y el costo, es percibido por los
otros dos socios intervinientes el
Estado y la Comunidad Miner;.
2.4. APRECIACION DEL RE-
SULTADO ECONOMICO
Si en las otras actividades eco-
nómicas se requiere un resultado
positivo que justifique el de-
sarrollo de un esfuerzo y man-
tenga viva la volición de los diver-
sos .factores que intervienen en
ellas, en la minería, el resultado
positivo tiene que ser necesaria-
mente mayor no sólo para justi-
ficar la realización de una activi-
dad esforzada, sino fundamental-
mente, para mantener un margen
que amortigue los continuos im-
pactos de las cada vez más fre-
cuentes caídas de las cotizaciones
internacionales o precios de los
metales y para permitir una rein-
versión importante que, además
de restituir las reservas minerales
explotadas, las incremente para
ampliar las operaciones o iniciar
otras nuevas.
No, se ha logrado todavía, y
ello solo es fruto del desarrollo
que se comprenda que todos lo~
socios que participan de esta acti-
vidad y que invierten en ella no
sólo valores materiales sino taro-
bien espirituales, como la volun-
tad, la capacidad, la experiencia,
deben obtener de la misma el be-
neficio comunitario o propio que
justifique sus esfuerzos y que
tienda a hacerlos perdurables
para los suyos y para toda la
nación.
La consagración, ya lograda en
todo el mundo, de la libertad
individual, a despecho del siste-
ma político o económico en que
se viva, nos obliga a demostrar
nuestro respeto por esa libertad
esencial, a través del robusteci-
miento de la voluntad de cada
uno de los factores humanos que
MINERIA
intervienen en la producción,
como único medio de obtener el
beneficio común a través de la
conjugación de esfuerzos. Hoy
no se discute que nadie actúa por
obligación sino por libre decisión
y que el individuo se retirará del
campo de su acción o de la activi-
dad misma, en cuanto sienta la
insatisfacción. Creo que es tam-
bien universal el convencimiento
de que la vida humana es muy
corta para discurrir siquiera una
parte de ella en amargura.
3. ASPECTOS FINANCIEROS
Nos concretaremos a un corto
análisis de los que singularizan a
la actividad minera dentro del
concepto de que su caracterís-
tica principal, de recurso no re-
novable, obligá permanentemen-
te a la inversión con el doble ob-
jetivo secuencial de mantener
cuando menos el valor de las re-
serva& minerales y el de propen-
der al constante incremento de
su capacidad productiva como
medio de, por lo menos, mante-
ner los costos dentro de límites
usuales contra su permanente
tendencia a elevarse no sólo debi-
do a los factores externos, como
la inflación, sino a causas pro-
pias, como el alejamiento de las
zonas de trabajo respecto a los
lugares de extracción y del em-
pobrecimiento gradual de los mi-
nerales.
3.1 COSTO DE LA INVER-
SION
Cuando hablamos de la inver-
sión en minería, no nos referi-
mos, pues, al capital con que nor-
malmente se inicia cualquier acti~
vidad e<:onómica, sino que debe-
mos entenderla como un flujo
constante del excedente genera-
do hacia la misma operación, por
las razones que varias veces he-
mos repetido, Por consiguiente,
cualquier término de los que
usualmente se utilizan para me-
dir la rentabilidad de los nego-
cios, deberá siempre referirse al
concepto de "inversión total"
para ser justicieramente compa-
rable. . - minería al inversionista con los
Cuando en 1950 se dio el Có-
MINERIA
digo de Minería, obra maestra
como instrumento promocional,
se estableció el concepto de con-
siderar a la minería como activi-
dad generadora de divisas y no,
como ha sucedido últimamente,
en que se le ha vuelto a tratar
como generadora de tributos. Es
así que se le liberó de todas las
cargas tributarias "ciegas", enten-
diéndose por tales a las contribu-
ciones que gravan la producción,
para someterla al régimen racio-
nal del Impuesto a la Renta, es
decir, al resultado positivo, como
único tributo. Debido a las ren-
tabilidades, del orden del 25° /o
a 30° /o, que así se originaron y
que se mantuvieron casi durante
2 décadas, se logró el crecimiento
sostenido y hasta autofinanciado
de la mediana minería.
Ya en 1967 se establecieron
tribu tos "ciegos" y se recurrió al
controlismo en la política cam-
biaría, obligando desde entonces
a la industria minera a solventar a
otras actividades menos produc-
tivas y a financiar el crecimiento
burocrático. La rentabilidad
sobre la inversión total cayó a un
promedio inferior al 20º/o.
En los últimos tiempos esa ~-
fra siguió decreciendo y la indus-
tria minera se ha visto envuelta
en una seria crisis para salir de
la cual requerirá el retorno a la
polí'ica tributaria de 1950 y un
tiempo más o menos prolongado
para restituir sus niveles de inver-
sión a las cifras mucho más eleva-
das a que obliga la incesante in-
flación en que se debate la eco-
nomía nacional desde hace cinco
años.
Estimamos que la rentabilidad
actual en la mediana minería
debe estar por debajo del 5º /o.
Les pedimos, fundamental-
mente en homenaje al tiempo,
relevarnos en la tarea de efectuar
una comparación meditada de
este porcentaje con lo que ofre-
cen las entidades de crédito, las
financieras y las mutuales aún
con propaganda televisada y con
rentabilidades libres de impuesto.
Ocupémonos sólo de compa-
rar los resultados que ofrece la
que ella debe pagar por concep-
to de intereses a los escasos cré-
ditos que hoy se le ofrecen: 5
contra 20° /o. Alguien podría
concluir que los mineros _segui-
mos haciendo minería porque no
sabemos hacer otra cosa o tal
l vez, porque no queden otras
cosas por hacer.
3.2. CAPITAL DE TRABAJO
Este costo de producir, como
muy bien se le ha dado en llamar,
corresponde en minería al capital
necesario para iniciar un ciclo de
producción, es decir, al dinero re-
querido para cubrir el costo de
todas las etapas de las que ya
hemos hablado, hasta la obten-
ción del pago por los concentra-
dos o metales comercializados.
En la mediana minería, esta ci-
fra corresponde a un período de
tiempo entre 60 y 90 días. En
otras palabras, se necesita el reci-
claje mínimo de 1/6 del valor de
la producción anual.
Actualmente, como ya lo he-
mos demostrado en muchas
oportunidades, incluso a las más
altas autoridades del país, la me-
diana minería ha perdido inclusi-
ve ese capital de trabajo, sobre
todo desde cuando fue gravada
con el 15° /o del valor de sus
ventas; es decir, que se le cercenó
precisamente la capacidad de
mantenerse en producción.
Desde entonces, las medianas
empresas mineras han venido so-
breviviendo en base a la utiliza-
ción de su crédito bancario y /o
comercial y de la modalidad cre-
diticia fiscal denominada "Acep-
tación Minera"; como resultan-
tes de medidas de orden tributa-
rio y cambiario equivocadas, me-
diante las cuales se extraen de la
minería recursos financieros para
el Estado y se le compensa con
un crédito blando y a mediano
plazo que no ha solucionado el
díferencial de capital de trabajo y
que a largo plazo redundará en
perjuicio de los intereses del
Estado.
4. ASPECTOS SOCIALES
Bajo este rubro, hemos que-
rido reiterar lo que se ha tocado
ya de soslayo, la contribución de
159
la minería a la elevación del nivel
de vida y de cultura no sólo de
los trabajadores que en ella labo-
ran, sino de las regiones mismas
en cuyas vecindades opera la uni-
dad minera.
Es muy difícil, inclusive para
muchas de las personas que ac-
túan en la minería, apreciar la
gradual influencia cultural que
los centros mineros han tenido y
tienen hasta en la forma de vida
en las regiones del interior del
país. Basta citar, a manera de
ejemplos, que gran parte de la
implantación de actividades co-
merciales y de servicio en ciuda-
des hoy grandes como Cerro de
Paseo, Huancavelica, Huancayo, Pu-
no, Cuzco y hasta en Arequipa y
Trujillo, se han originado sirvien-
do a la minería: que las principa-
les rutas ferroviarias y carreteras
en esas zonas han sido promovi-
das por esta industria y que hasta
la terminología idiomática acusó
el impacto de la fuerte influencia
cultural que llevaron a esas regio-
nes los promotores de las empre-
sas mineras.
Empero, para comprender el
verdadero valor del progreso en
esas zonas, debe medírsele res-
pecto a las condiciones en que
vivía el poblador de nuestra se-
rranía antes de que la minería se
convirtiera en actividad impor-
tante en el Ande Peruano.
La evolución desde aquella si-
tuación en el pasado ha llevado a
que las posteriores mejoras en los
niveles de vida de los trabajado-
res de la costa hayan sido promo-
vidas siguiendo el liderazgo que
la actividad minera tomó · hace
algunos años en estos campos.
Actualmente, el trabajador mi-
nero percibe salarios tres veces
superiores al mínimo que paga la
actividad industrial de cada zona.
Por ejemplo, tomemos como
datos las cifras promedios según
el número de trabajadores al mes
de mayo de 1977:
Jornal Básico Jornal Directo
Gran Minería 453.75
Mediana Minería 308.77
Total Minería . . 382.85
160
Además, la minería otorga a
sus trabajadores hasta catorce
bonificaciones, asignaciones y
gratificaciones en dinero y cinco
en servicios que, aparte de su ele-
vado costo de construcción, im-
plementación y abastecimiento ,
incluyen el de su operación y
mantenimiento mensuales. Entre
las primeras tenemos las siguien-
tes: bonificaciones por trabajo en
subsuelo, altura y humedad; re-
cargos de 100°/o del salario por
sobretiempos y trabajo nocturno:
pagos por feriados y domingos
no laborados; asignaciones por
familia, por h~io en edad escolar
y por el fallecimiento de familia-
res cercanos; gratificaciones por
fiestas patrias, por navidad y por
vacaciones, aparte del haber vaca-
cional correspondiente; adicional
a todo esto la entrega periódica
de ropa distinta de la de trabajo
y/o de protección y subvenciones
diarias de' refrigerio. Entre los
servicios, la minería brinda vi-
vienda familiar, incluyendo el co-
rrespondiente servicio de agua,
desagüe y energía eléctrica; hos-
pital para la atención gratuita de
los trabajadores y sus familiares;
escuelas, mercantiles o servicios
de venta de artículos de primera
necesidad a precios de costo y
hasta centros de esparcimiento y
de recreación.
La industria minera se compla-
ce de todo lo mencionado y pro-
pende a brindar las mayores co-
modidades posibles a su personal;
sin embargo, los empresarios es-
tamos preocupados porque la
mejora de tipo económico del
trabajador minero no va paralelo
con su desarrollo cultural y que
sólo éste podría permitir el mejor
aprovechamiento de su forma-
ción tecnológica, con resultados
favorables en la productividad.
Por estos motivos, requerimos
que se comprenda que el reto
por mejorar las condiciones de
vida en la minería, en las mayor-
mente elevadas y frígidas regio-
,¡ nes en que opera, es permanente,
y que su gradual realización sólo
Total
será posible si se le permite la
980. 12
disponibilidad de los recursos
562.22
económicos que debe invertir en
775 .76 ello.
...
5. ¿CUAL FUE EL DESARRO· n
LLO MINERO? e
d
En la legislación del año 1950, d
el tratamiento preferencial otor-
gado a la minería, ha permitido e
que la producción minera alcan- s,
zara cifras altas y diera un gran r
salto desde el 50 hasta el 60 y ü
el 68. - t
En 1950 se produjo 33,000 ¡::
toneladas de cobre fino. En 1960 1
se alcanzó 184,000 toneladas. a
Esto debido, principalmente, a l,
la entrada en producción de [
Toquepala. En 1968, la pro- ¡-
ducción alcanza las 212,000 1,
toneladas. E
Para el caso del plomo, la e
producción del 50 era de 62,000 e
toneladas. Y alcanza en 1960 a
131,000 toneladas, llegando en
1968 a 155,000 toneladas.
En el caso del zinc, la pro-
ducción del 50 fue de 77 ,000
toneladas. En 1960 alcanza a
157,000 toneladas y en 1968
llega a 291,000 toneladas.
La producción de plata de
1960 sobrepasa al doble de la de
_1950. En el primer año fue de 13 r
millones de onzas, mientras que e
en el 60 se llega a 36 millones s
de onzas. I
Para el caso del hierro, la pro- E
ducción principal se comienza en e
1955 , la de Marcona llega ya en I
el 60 a 3'100,000 toneladas. En
1968 alcanza a 5'700,000 tonela-
das de contenido metálico de
hierro.
Este crecimiento, especialmen-
te del 50 al 60, se debe a la legis-
lación promociona! y a la aper-
tura de nuevas, medianas y pe-
queñas minas y a la ampliación
de éstas en el período del 55
al 60.
También es importante men-
cionar que, a partir de 1950, cre-
cen la producción de bismuto y
cadmio, mientras que el resto de
los otros subproductos se depri-
men un poco.
Todo este crecimiento llevó a
que cambiara la estructura del in-·
greso de divisas por exportacio-
nes en el que los cinco productos
mineros mencionados representa-
°
ron en el 50 el 21 Jo del total de
ingreso de divisas por ex portacio-
MINERJA
nes. En 1960 el 44º/o y en 1968
el 49º /o, sin contar los otros pro-
ductos metálicos, ni el petróleo y
derivados.
En la producción de cobre,
como resultante de la política
seguida a partir de 1968, se llega-
rá con Cuaione y Cerro Verde, a
una cifra alrededor de 350,000
toneladas en este año (1977) . En
plomo se logrará cerca de las
190,000 toneladas. En zinc nos
acercaremos a las 450,000 tone-
ladas. En plata se llegará a 37
millones de onzas. En el caso del
hierro, la máxima producción fue
lograda en el año 1970 con
6'250,000 toneladas, después ha
disminuido por los fenómenos de
crisis que conocemos.
En todo el crecimiento men-
cionado le toca especial papel al
aporte de la mediana y pequeña
minería.
6. ¿POR QUE SE DEBE DESA-
RROLLAR LA MINERIA?
Todos los esquemas que se
plantean, como caminos para
desarrollar un país, cualquiera
sea la corriente de pensamiento
político de que se trate, contiene
el principio de que toda nación
deberá utilizar al máximo y en
primer lugar, los recursos con
que cuenta, tratando luego de
buscar una adecuada interdepen-
dencia con el resto del mundo en
la transacción de los bienes que
produce. ·
El país tiene grandes recursos
mineros, la mano de obra minera
puede incrementarse rápidamen-
te, aún cuando se utilice la alta
tecnología. Pero no disponemos
de recursos de capital. Nuestro
ahorro interno es insuficiente co-
mo para financiar íntegramente
la explotación de los grandes de-
pósitos con que contamos. Aún
para desarrollar a la mediana y
pequeña minería sería necesario
que el ahorro interno de todos
los sectores se canalice priorita-
riamente hacia el apoyo de esta
actividad.
Se debe desarrollar la minería
en primer lugar, porque es la
única que podría incrementar 9
MINERIA
aumentar la capacidad de pro-
ducción a corto plazo, de tal
forma que permita captar recur-
sos del exterior, es decir, los
bienes de capital y medios de
pago para desarrollar los otros
sectores económicos.
7. ¿COMO DESARROLLAR
NUESTRA MINERIA?
Si recordamos que esta activi-
dad económica de hecho compite
en un mercado internacional, es
obvio que las condiciones míni-
mas para propender a su desarro-
llo deben ser las que imperan en
ese mercado, a despecho de las
que pudieran existir en el país.
Lo único que se le puede acre-
ditar a la ciudadanía en relación
con la plena convicción que ya
debiera tener de que "el Perú es
un país minero", es el que nues-
tro potencial de minerales es
muy grande y variado; sin embar-
go, es necesario que se conozca
que también tenemos buenos
mineros, aquellos abnegados
hombres, cada vez más escasos
en el mundo, de los que hemos
ya hablado y que, por consi-
guiente, el único recurso que nos
falta para actualizar plenamente
nuestra riqueza es el capital, afor-
tunadamente, el menos difícil de
lograr, de los tres factores básicos
señalados.
En un país en proceso de desa-
rrollo o pobre, hablando en tér-
minos económicos realistas, el
capital, como fruto del ahorro in-
terno, es. exiguo y su costo, es
decir lo que llamamos interés, es
consecuentemente muy elevado;
por lo tanto, requerimos de la
ayuda económica extranjera,para
conseguir la cual debemos parti-
cipar en una competencia con
otros dentro del mercado inter-
nacional.
Todo fo dicho nos conduce,
pues, a establecer las condiciones
ideales para que la actividad mi-
nera pueda ofrecer, con benefi-
cio económico, sus productos en
el mercado mundial y que, asi-
mismo, ella sea un digno sujeto
de crédito en el exterior y que,
aún más, proporcione atractivos
suficientes para importar capital
extranjero de riesgo o de in-
versión.
7.1. ASPECTOS MATERIA-
1' LES
Entendidos como los condicio-
nantes obietivos que forman par-
te del marco ideal para el desa-
rrollo minero sostenido que an-
helamos, es imprescindible que
esta actividad pueda disponer de
la maquinaria, equipo e insumos
de la misma calidad y rendi-
miento que la minería extranje-
ra, que, como ya hemos dicho,
compite con ella.
No somos opuestos al desarro-
llo industrial de nuestro país,
sino que, exigimos, en primer
lugar, que no le dispute recursos
económicos fundamentales a la
minería, por la razón prioritaria
ya demostrada; en segundo tér-
mino, que incremente su con-
sumo de · materia prima nacio-
nal, incluyendo los metales, para
que no sea una industria artifi-
cial con la única intención de
sustituir importaciones, y en
tercer lugar, que ofrezca pro-
ductos de calidad, en cantida-
des adecuadas y con la oportu-
nidad que sea necesaria.
El Estado debe asumir con
propiedad la parte que le co-
rresponde como el socio ma~
yoritario de la actividad minera;
es decir, brindando los servicios
de infraestructura fundamental
que a su nivel de responsabilidad
corresponde, como las vías fé-
rreas y carreteras; las fuentes de
energía suficiente; el mejora-
miento de los servicios sociales
de carácter regional y nacional,
como la seguridad social y la
salubridad pública y la supera-
ción constante en dinámica y
eficiencia del trámite burocrá-
tico, especialmente en las adua-
nas, y en la autorización de es-
tudios y nuevos proyectos.
7 .2. ASPECTOS LEGALES
En países, como el nuestro, en
pleno desarrollo, es indiscutible
la tendencia a la prolíferación de
instrumentos legales. Se legisla
161
 con pre.1u1c10, es decir, que se
parte del supuesto de que hay
que determinar lo que se debe
hac~r para lograr un buen fin u ti-
lizando medios lícitos, y no
como en los países desarrollados
en los que sólo se norma sobre lo
que está en los límites entre lo
correcto e incorrecto.
Es pues : imperativo . que se
cambie esta mentalidad y que se
vaya a la simplificación de la
frondosidad legislativa, tendien-
do a disposiciones genéricas, por
ejemplo, para todas las activida-
des económicas, dejando para
legislar en forma específica las
etapas o partes que singularicen
a cada una.
En materia tributaria es donde
más cuidado debe ponerse a fin
de que se hae:a competitiva a
nivel internacional nuestra tribu-
tación, y que, de este modo se
logre créditos e inversiones ex-
del problema. fuerzo de imaginación necesario
para ver dentro de las entrañas de
Los profesionales d e la comu- nuestros Andes el cúmulo de di-
nicación, sinceramente interesa- visas que requerimos para lograr
dos, como lo están ustedes ahora, la felicidad de todos los peruanos
en la problemática minera nacio- y pensar en que los pocos y bue-
nal, deben ser el medio funda- nos mineros que se necesitan
mental que utilice nuestro país
para ello están listos a emprender
para decidirse a trabajar en el la tarea de desenterrar esas divi·
sentido de las soluciones más sas y únicamente les falta unos
directas y valederas.
pocos soles para cubrir los costos
Permítanme cerrar este men- del trabajo y algo de apoyo mo-
saje con una metáfora realmente ral para reforzar su voluntad de
minera, quisiera rogarles el es- realizarla.
REFRACTARIOS PERUANOS S. A.
Apartado 2828 tnEFOHO. 523570 LIMA· PERU
:,:.· ··:r::-.-:-::::-.:··.-..:(:':.{•·::::•.:, ···:·': . •.:..:........•.~•.:::::::::::.:::::::.:.:.:::.::::::~:.:·:::::::·::··:·:::·:::·:.::.:·:·:·:·:·:·:·:·:·:·(:·:::::·:·:::·:·:

1
tranjeras.
La legislación laboral tiene que
ser, también, minuciosamente LADAILLD8 : :::~":uml-
acondicionada para que dicho • eluminoen
atractivo motive el incremento • b6slcos
de las inversiones mineras. Posi-
blemente ello signifique hacer
más justos los dispositivos, pero
menos abundantes los beneficios
indirectos, de suerte tal que no
se deba convertir al empresario CASTABLES
• smco. . .
en un paternal participante de los • slllco • elumi......
problemas personales del trabaia- • b6slon
dor y a éste sí en un más imper-
sonal socio del beneficio logrado
con su esfuerzo. En pocas pala-
bras, ello quiere significar que la
medición de la productividad re- • slllco - eluminosos
cupere el bien ganado prestigio • elumlnosos
de que gozaba en la industria
minera como medio de lograr
haberes más equitativos, de a-
'1 cuerdo al rendimiento, como un APIBONABLEB MORTEROS
recurSo de verdadera promoción • slllcosos • un IIMN'lero pera
1 social y cultural simultáneas.
Como hemos podido apreciar
• b6slco• oede cipo de
refreotarlo 1
en el curso de esta sencilla diser- 11
tación, es mucho más fácil de lo · · · Distribuidores Exclusivos : f;·
que la mayona se imagina el logro
del desarrollo minero sostenido -eo.,.o.,w.lón Téftln de Conlerelo s.a. (PERUVIAN TFIAOfNG)
que el Perú requiere para asegu-
Av. Alfonso Ugarte 899 Yel. 28-8240
rar su permanente evolución eco-
nómica y cultural. Sólo nos falta
la comprensión de las verdaderas
raíces, dimensiones y soluciones

162 MINERIA