Sei sulla pagina 1di 152

Programa de Apoyo Ecológico

(Begleitprogramm
Tropenökologie – TÖB)

Enfoques económicos
para la valoración de la
diversidad biológica
Programa de Apoyo Ecológico
(Begleitprogramm
Tropenökologie – TÖB)

Enfoques económicos pa-


ra la valoración de la di-
versidad biológica

Dr. Thomas Plän

Eschborn – Alemania, 2000


Número de serie: TÖB P-3s

Publicado por: Cooperación Alemana al Desarrollo:


Deutsche Gesellschaft für
Technische Zusammenarbeit (GTZ) GmbH
Postfach 5180
D-65726 Eschborn
Responsable:: Programa de Apoyo Ecológico:
Begleitprogramm Tropenökologie (TÖB)
Dr. Claus Bätke
Autores: Dr. Thomas Plän, inf. – Gestión de la informacción,
biotecnologia y aprovechamiento de la biodiversidad
Lessingstr. 3a, D-93049 Regensburg,
Alemania
Tel.: +49-941-299054, Fax: +49-941-25627, email:
Tplaen@t-online.de
Redacción: Michaela Hammer, Birgit Küßner
Traducción: Sandra Patow – Derteano
Derechos de protec- DM 5,-
ción:
ISBN: 3-933984-
Imprenta: TZ Verlagsgesellschaft mbH, D-64380 Roßdorf, BRD

© 2000 Derechos reservados


Prefacio
Los sistemas ecológicos tropicales aseguran la subsistencia de gran parte de la
población mundial. La creciente destrucción y degradación de los recursos
naturales en los países en desarrollo pone en peligro los esfuerzos para lograr
un desarrollo sostenible y la eficacia de la lucha contra la pobreza.
En el marco de la cooperación para el desarrollo, el Programa de Apoyo
Ecológico (Tropenökologisches Begleitprogramm - TÖB) desea hacer un
aporte para una mejor utilización, aprovechamiento y aplicación de los
conocimientos y experiencias adquiridos en este campo.
El TÖB es un proyecto de servicios supra-regional, que es ejecutado por la
Cooperación Alemana al Desarrollo (Deutsche Gesellschaft für Technische
Zusammenarbeit - GTZ) por encargo del Ministerio Federal para la
Cooperación Económica y el Desarrollo (Bundesministerium für
wirtschaftliche Zusammenarbeit und Entwicklung - BMZ).
En respuesta a una solicitud, el programa auspicia estudios relacionados a
proyectos sobre cuestiones de relevancia para la ecología tropical. Desea
contribuir al desarrollo de conceptos para la protección y uso sostenible de
los ecosistemas tropicales, con el fin de diseñar instrumentos innovadores
para una cooperación para el desarrollo que a la vez proteja el medio ambiente.
Al transformar los resultados científicos en una asesoría práctica, presta
apoyo a los respectivos proyectos en la aplicación de acuerdos internacionales
como la Agenda 21 y la Convención sobre la Biodiversidad, que a ojos del
BMZ son de primordial importancia.
Un elemento esencial de la concepción del programa es el trabajo conjunto de
científicos alemanes y locales en torno a temas orientados hacia la
implementación. Con ello, el TÖB contribuye de manera importante a la
capacitación práctica de expertos y a la formación de un acervo de
experiencias y conocimientos en los países asociados.
A través de su serie de publicaciones, el TÖB expone de manera accesible los
resultados y recomendaciones de los estudios realizados en torno a proyectos.
Estas publicaciones están a disposición de todas las organizaciones e
instituciones dedicadas a la cooperación para el desarrollo, así como del
público interesado en temas del medio ambiente y desarrollo.

I. Hoven Dr. C. van Tyll


Jefe de la sección Jefe de la división Desarrollo rural
Protección del medio ambiente y de los
recur sos naturales, gestión de recursos
forestales
Ministerio Federal de Cooperación Deutsche Gesellschaft für Technische Zusammenarbeit
Económica y Desarrollo (BMZ) (GTZ) GmbH
Índice

Índice

ÍNDICE.................................................................................................... I

RELACIÓN DE TABLAS ......................................................................... IV

GLOSARIO .............................................................................................V

SUMILLA ............................................................................................... 1

1 INTRODUCCIÓN (RESUMEN DEL OBJETIVO)................................... 9


1.1 Análisis del problema.............................................................. 10
1.2 Fijación de objetivos............................................................... 11

2 RESULTADOS Y ANÁLISIS............................................................. 15
2.1 Desaparición de la biodiversidad como consecuencia de
la carencia de mercados y la falla del mercado ......................... 15
2.2 Categorización de los valores de la biodiversidad..................... 20
2.3 Ejemplos de valoración de la diversidad biológica.................... 33
2.3.1 Valor de uso de genes y componentes
bioquímicos ................................................................33
2.3.2 Valor de uso de las especies........................................41
2.3.3 Valor de uso de ecosistemas y paisajes........................43

3 RECOMENDACIONES ................................................................... 47
3.1 Métodos y técnicas de valoración............................................ 47
3.1.1 Determinación de valores de uso directo y pasivo
en mercados simulados...............................................50
3.1.2 Determinación indirecta de los valores de uso
directo........................................................................57

I
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

3.1.3 Determinación de los valores de uso indirecto............. 60


3.2 El aspecto de costos de la conservación y destrucción de
la diversidad biológica y el procedimiento del análisis de
costo - beneficio .....................................................................63
3.2.1 Costos de oportunidad: costos de restauración y
sostenibilidad, valores de uso no aprovechado ........... 64
3.2.2 Análisis de costo - beneficio........................................ 69
3.3 Organización de mercados con precios apropiados ..................70
3.3.1 Asignación de valores monetarios y análisis de
costo - beneficio ......................................................... 70
3.3.2 Eliminación de medidas de intervención fallidas ........ 72
3.3.3 Creación de derechos privados de propiedad y
gestión integrada de la biodiversidad......................... 73
3.3.4 Creación de herramientas de intervención
basadas sobre el mercado.......................................... 76
3.3.5 Creación de mercados globales .................................. 80
3.4 Recomendaciones referentes a la cooperación para el
desarrollo ...............................................................................85
3.4.1 Análisis de costo - beneficio orientados a
proyectos, con aplicación de los instrumentos de
valoración disponibles ............................................... 86
3.4.2 Capacitación y desarrollo institucional para el
inventario y control de la biodiversidad...................... 86
3.4.3 Creacion y / o fortalecimiento de los prerequisitos
institucionales para el desarrollo e
implementación de estrategias nacionales de
biodiversidad ............................................................. 87

II
Índice

3.4.4 Capacitación y fortalecimiento institucional para


la aplicación de análisis de costo - beneficio y
técnicas de valoración ................................................88
3.4.5 Apoyo a las capacidades de investigación en los
países en desarrollo en el campo limítrofe entre
la ecología y la economía ...........................................88
3.4.6 Identificación de las fallas de intervención ..................92
3.4.7 Creación de incentivos................................................92
3.4.8 Participación de la población local en los
ingresos provenientes de la biodiversidad ...................94
3.4.9 Apoyo en la creación de derechos de propiedad ..........94
3.4.10 Participación en la creación de mercados
ambientales globales a través de acuerdos
bilaterales y multilaterales..........................................96

4 REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS................................................... 97
4.1 Literatura citada...................................................................... 97
4.2 Bibliografía .......................................................................... 105

III
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Relación de cuadros

Cuadro 1: Valor económico total de un bien biológico.............................20

Cuadro 2: Clasificación de los recursos...................................................24

Cuadro 3: Clasificación de los valores económicos y sus


correspondientes métodos de valoración....................................44

Cuadro 4: Comparación de los costos de áreas protegidas y los


beneficios derivados de los usos de las mismas..........................62

Relación de tablas

Tabla 1: Valor de uso de genes y componentes bioquímicos ...................36

Tabla 2: Valor de uso de las especies ......................................................40

Tabla 3: Valor de uso de los ecosistemas ................................................43

IV
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Glosario

Análisis de costo - Captación y valoración de ciertas acciones o


beneficio (ACB) medidas y sus alternativas en unidades monetarias.

Análisis de mercado Análisis de las posibilidades de procuración y


colocación de una empresa o ramo, así como de
las influencias ejercidas por el mercado en un
momento dado.

Análisis de voluntad Encuesta dirigida a obtener la valoración de un


de pago componente de la diversidad biológica a través del
precio hipotético que los encuestados pagarían
por dicho recurso.

Asimilación Captación y procesamiento de un sustrato.

Biodiversidad o Concepto que agrupa la cantidad, multiplicidad y


diversidad biológica heterogeneidad de organismos vivos en un
determinado entorno o unidad espacial,
clasificables según sus niveles de integración en
genes, especies y ecosistemas.

Bio-prospección Exploración de la biodiversidad con el objeto de


ubicar recursos genéticos o bioquímicos de valor
comercial.

Biótico Referido a organismos y procesos vitales.

Capital natural Riqueza natural en recursos biológicos.

Costos de Costos de las alternativas no aprovechadas.


oportunidad

V
Glosario

Derechos de emisión Licencia de contaminación que concede al titular el


derecho de lanzar al medio ambiente cierta
cantidad de emisiones.

Descuento Preferencia por un uso privado actual y


socialmente destructivo frente a un uso privado
futuro y socialmente conservacionista.

Ecosistema Unidad funcional básica de la ecología, que


abarca tanto a los organismos como a su entorno.
Comprende conceptos como flujos de energía,
cadenas alimentarias, patrones de diversidad,
ciclos bio-geo-químicos de alimentación,
desarrollo y evolución, y cibernética.

Enfoque de costos de Enfoque de mercado sobre la base de los gastos


viaje requeridos para un viaje en particular como
medida o equivalencia de ciertos productos o
recursos.

Enfoque del mercado Evaluación de mercados para bienes y servicios


sustituto privados en relación con determinados recursos o
productos

Hábitat Lugar en el que vive un organismo.

Mecanismo de Mecanismo para el ordenamiento de factores o


asignación recursos de producción según ciertos objetivos.

Mercados Mercados globales de implementación obligatoria


ambientales globales (a través de normativas legales internacionales) o
(MAG) voluntaria (a través de acuerdos).

Población Total de individuos de una especie que habitan en


un espacio determinado.

VI
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Preferencia Orden de prioridad que los individuos asignan a la


demanda de determinados bienes.

Producción Primaria Fotosíntesis total, incluyendo la materia orgánica


Bruta consumida a través de la respiración durante la
medición.

Producción Primaria Cantidad de materia orgánica almacenada en las


Neta plantas verdes, sin contar la materia consumida a
través de la respiración durante la medición.

Productividad Acumulación de una sustancia orgánica por


unidad de tiempo.

Producto Bruto Valor total de los bienes y servicios producidos


Interno (PBI) dentro del territorio de un país.

Recurso biológico Concepto que abarca los recursos genéticos,


organismos totales o parciales, poblaciones y
cualquier otro componente biótico de los
ecosistemas, de valor o beneficio real o potencial
para la humanidad.

Screening Exploración dirigida a la búsqueda de


determinadas sustancias o efectos.

TDR - Derechos de Derechos de desarrollo del comercio internacional


desarrollo que posibilitan una protección adecuada de los
transferibles valores globales de la biodiversidad, sobre todo
(transferable en los países tropicales.
development rights)
Valor de casi opción Valor de la postergación de una decisión
irreversible con el objeto de esperar a obtener
información adicional que sirva de base para la
toma de decisiones

VII
Glosario

Valor de existencia Valor intrínseco de un recurso.

Valor de legado Valor de la conservación intacta de un recurso


para aprovechamiento de las generaciones futuras.

Valor de opción Postergación del uso o aprovechamiento para un


momento futuro.

Valor de uso directo Valor de un recurso biológico o sistema de


recursos sobre la base del consumo o la
producción, o su interacción inmediata con los
sujetos del mercado.

Valor de uso Valor de un recurso o aporte biológico para los


indirecto recursos o ecosistemas de uso directo.

Valor de uso pasivo o Medición de la importancia asignada a un recurso


no uso o factor similar con respecto a nosotros, nuestra
descendencia u otras especies.

VET - Valor Suma o agregado de los valores de uso directo,


Económico Total indirecto, de opción o casi opción, y de no uso o
uso pasivo de un recurso o sistema de recursos.

VIII
Sumilla

Sumilla

La diversidad biológica se ve expuesta a una vertiginosa desaparición en


todos sus niveles de integración. Debido a la falta de internalización de los
costos y beneficios, los precios de mercado de los recursos biológicos no
reflejan el verdadero valor de los mismos. El hecho de que estos efectos
externos no se consideren en el precio es indicio de una falla del mercado.
Ésta se debe mayormente a la diferencia entre los beneficios privados y
sociales / ecológicos, la carencia de mercados y las medidas de
intervención perjudiciales.

Como hipótesis de partida del presente documento planteamos que la falta


de asignación de valores económicos a los respectivos componentes de la
diversidad biológica contribuye a su vez a la desaparición de la misma. A la
inversa, la asignación de un valor económico adecuado a estos
componentes detendría - e incluso revertiría - esta desaparición.

En el capítulo ‘Resultados y Análisis’ se enfoca en primer lugar la


desaparición de la biodiversidad desde el punto de vista de la carencia de
mercados y la falla del mercado, y se plantea como tesis el que una puesta
en valor de los componentes de la biodiversidad con orientación al mercado
contrarrestaría dicha desaparición. En segundo lugar, se clasifican los tipos
de valor de la diversidad biológica en diversas categorías dependientes e
independientes de su uso.

El valor social de un recurso o producto biológico se compone de cuatro


categorías de valor de uso: valor directo, valor indirecto, valor de opción o
casi opción y valor pasivo o de no uso. La suma de estos componentes es
el valor total de los respectivos recursos integrantes de la diversidad
1
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

biológica. Entre estos conceptos de valor existen, sin embargo,


superposiciones lógicas, lo cual puede llevar a una doble contabilización
bajo las diferentes categorías de valores. Cuanto más aspectos del valor de
uso podamos identificar e incluir en el Valor Económico Total (VET), más
nos acercaremos al ‘verdadero valor’ de un bien biológico. Sin embargo,
seguirá siendo un monto teórico si no conseguimos asignarle un valor de
mercado que se acerque a la realidad. Debido a la explotación de la
diversidad biológica y a la falta de información sobre la misma - cuya causa
está sobre todo en la falla del mercado - existe una necesidad apremiante de
realizar estudios de valoración económica.

El presente documento incluye - a manera de ejemplo - estudios de


valoración económica con respecto al valor de explotación de la diversidad
biológica en lo referente a genes y materiales bioquímicos, especies,
ecosistemas y paisajes.

Seguidamente, en el capítulo ’Recomendaciones’ se describen los métodos


pertinentes para la valoración. La utilización de estos elementos de análisis
tiene mucho sentido, sobre todo si se tiene en cuenta que nos dan indicios
sobre cómo reformar los mercados para corregir la actual situación
perjudicial, o - si esto no fuese posible - nos ayudan a tomar una decisión
sobre la manera en que el Estado podría intervenir para corregir las señales
del mercado.

Las categorías antes descritas de valores de uso - valores directos,


indirectos, opción o casi opción, y de no uso o pasivos- que componen el
VET, requieren en parte la aplicación de distintos métodos de valoración.
En el texto se presentan estos métodos y se analiza su aporte de
información.

2
Sumilla

Entre este repertorio metodológico merece especial atención el análisis de


voluntad de pago, que - con excepción de los valores indirectos - permite
evaluar tres categorías de valores de explotación. De hecho, es el único
camino viable para analizar los valores de no uso. Por otro lado, el texto
presenta como métodos alternativos las técnicas indirectas para la
determinación de los valores de uso directo.

Los métodos para la determinación de preferencias, tales como el análisis


de voluntad de pago, no son adecuados para calcular los valores de uso
indirecto (funciones ecológicas reguladoras) del factor de producción
recursos naturales, puesto que respaldan o incluso posibilitan actividades
económicas independientes de las preferencias. Para realizar este cálculo,
se suele utilizar los métodos indirectos para la determinación de la
producción, tales como el método de variaciones en la productividad, el
cálculo del costo de los esfuerzos de conservación y uso sostenible, el
enfoque de los costos de restauración y el de la función de producción. El
objetivo de este último consiste en medir las consecuencias físicas de los
cambios en las funciones ecológicas sobre las actividades económicas.

Como complemento a la determinación de los aspectos de uso de la


diversidad biológica, se estudia también los costos relacionados con la
conservación, los beneficios de la misma y la restitución de la
biodiversidad. El siguiente paso consiste en establecer una comparación
con los beneficios sociales y económicos. Las alternativas dejadas de lado
en razón de los resultados de la valoración se contabilizarán como costos
de oportunidad.

Con estos análisis de costo - beneficio será posible determinar y valorar las
diversas acciones o medidas y sus alternativas en función de unidades

3
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

monetarias. Los costos y beneficios deberán calcularse de manera tal que


sea posible comparar correctamente las distintas alternativas.

Al hacer uso de este instrumentario, se pudo demostrar que el beneficio


económico de la protección de la diversidad biológica a nivel local resulta
limitado. A nivel regional / nacional, el beneficio es un poco mayor, pero
recién a nivel global resulta sustancial. En cambio, con los costos sucede lo
contrario: son significativos a nivel local, moderados a nivel regional y
nacional, y más bien reducidos a nivel global. Para lograr una protección
eficaz de la biodiversidad, es necesario contrarrestar este desequilibrio en
los tres niveles.

Para ello, el documento analiza cuatro medidas que podrían llevar a una
creación de mercados a través de la aplicación eficaz de los enfoques de
valoración. Se trataría de lo siguiente:

• La eliminación de las distorsiones dañinas de los mecanismos de


mercado (‘desregulación’), mediante la reducción de los errores
intervencionistas. Un paso importante para que los precios reflejen la
realidad de los costos sociales reside en la erradicación de todo
subsidio, que reduce artificialmente los costos privados de actividades
perjudiciales para la biodiversidad.

• La creación de mercados a través de la privatización y de una gestión


integrada de la biodiversidad basada en un criterio de eficiencia: aquéllos
que administran un activo deberían también beneficiarse con la
explotación del mismo. Esto se podría lograr a través de la creación de
derechos de propiedad sobre recursos biológicos que hasta ahora
carecían de los mismos, es decir, a través de la transferencia de

4
Sumilla

derechos de propiedad del nivel nacional al nivel de los propietarios de


tierras (incluyendo a los que adquirirían dichos derechos a través de
reformas agrarias pendientes).

• La introducción de sistemas de intervención de preferencia orientados


hacia el mercado, como complemento de las políticas de control.
Mientras las segundas se aplican para controlar (reducir / limitar) las
actividades no deseadas en combinación con medidas legales o
políticas, los instrumentos de intervención de la economía de mercado
(IEM) crean incentivos económicos. En un sentido más estrecho, los
IEM incluyen medidas políticas referidas explícitamente a costos y
beneficios privados, de modo que los costos y beneficios comparativos
de tipo social se internalicen en los precios de mercado. Se clasifican en
cinco categorías: contribuciones / impuestos / derechos, subvenciones,
sistemas de pignoración, derechos negociables e incentivos
compensatorios.

• La creación de mercados ambientales globales (MAG) de la


biodiversidad (en inglés GEM: global environmental markets). Estos
mercados pueden surgir obligatoriamente, como resultado de un marco
legal internacional, o a través de acuerdos voluntarios. Ambas
modalidades se caracterizan por transferencias de pago bilaterales y
multilaterales. La especial relevancia práctica de los esfuerzos de
valoración monetaria de los costos de protección, conservación y
restitución de la diversidad biológica para las transferencias de pago (por
ejemplo, los derechos transferibles de desarrollo - en inglés TDR:
transferable development rights) reside en que servirán de base de
medición para los presupuestos de las medidas nacionales e

5
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

internacionales de protección de la biodiversidad. Pero no bastará con


garantizar el reembolso de las utilidades proporcionales a los países
propietarios de los recursos. La compensación financiera por el uso o
disponibilidad de los recursos biológicos deberá alcanzar también a los
grupos de personas que protegen directamente la biodiversidad, y
pueden y desean participar en los beneficios.

Los métodos y mecanismos aplicables se traducen en diez


recomendaciones concretas aplicables a la cooperación para el desarrollo,
que nos llevan a propuestas de acción operativas:

• El establecimiento de análisis de costo - beneficio con aplicación del


instrumentario disponible para la valoración de los proyectos mismos de
cooperación para el desarrollo.

• El capacitación y el desarrollo institucional necesarios para el inventario


y seguimiento de los recursos de la biodiversidad en los países
asociados.

• La creación y/o fortalecimiento de condiciones institucionales que sirvan


de marco para el desarrollo y la implementación de estrategias nacionales
de biodiversidad.

• La capacitación y el desarrollo institucional en los países asociados


mediante la aplicación de análisis de costo - beneficio y técnicas de
valoración.

6
Sumilla

• El apoyo a las capacidades de investigación en los países en desarrollo


en el campo limítrofe entre la ecología y la economía.

• La identificación de medidas de intervención perjudiciales y la


correspondiente asesoría para su erradicación.

• El apoyo a la creación de diversos incentivos basados en el mercado.

• El desarrollo de estrategias de participación de la población local en los


ingresos generados por la biodiversidad.

• La colaboración para la creación de derechos de propiedad.

• La cooperación en la creación de mercados ambientales globales


(MAG), a través de acuerdos bilaterales y multilaterales.

7
Introducción (resumen del objetivo)

1 Introducción (resumen del objetivo)

En diciembre de 1994, el autor presentó un connotado estudio preliminar


sobre el tema “Enfoques económicos para la valoración de la diversidad
biológica“, con apoyo financiero del Foro para el Medio Ambiente y
Desarrollo. Este estudio preliminar contenía un resumen y una corta
apreciación de los enfoques económicos para la valoración de la diversidad
biológica.

Después de conversaciones con el Programa de Apoyo Ecológico (en


alemán Tropenökologisches Begleitprogramm - TÖB) de la Cooperación
Alemana al Desarrollo (GTZ), resultó que en esa esfera existía interés por
convertir el estudio preliminar en un estudio completo, que también debía
ser traducido al inglés. Sobre todo era importante revisar el contenido para
adecuarlo a fines prácticos: ¿cómo llevar a cabo la valoración monetaria de
la diversidad biológica, y qué caminos existen para recibir una
compensación económica adecuada por los valores asignados a los
recursos?

Por lo tanto, se procedió primero a revisar la versión alemana del estudio


con respecto a la claridad de conceptos y lenguaje, y a mejorar su
estructura. A fin de que pueda servir de manual de uso práctico, se
adjuntaron ejemplos de los procedimientos a seguir con respecto a la
valoración monetaria de la biodiversidad y al análisis de costo - beneficio, y
recomendaciones para la organización de mercados con precios adecuados,
así como consejos complementarios relacionados con la cooperación para
el desarrollo.

9
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

1.1 Análisis del problema

La diversidad biológica o biodiversidad es un concepto que abarca el


número, multiplicidad y heterogeneidad de los organismos vivos en una
determinada aglomeración o unidad espacial. Se clasifica según diferentes
niveles de ordenamiento e integración:

• los genes y sus derivados

• las especies y

• los ecosistemas.

En el ámbito global, la diversidad biológica se ve afectada por una


vertiginosa desaparición en los tres niveles de integración. La hipótesis de
partida del presente documento plantea que la falta de asignación de valores
monetarios a los diferentes componentes de la biodiversidad es causa
coadyuvante de esta desaparición. A la inversa, la asignación de un valor
monetario adecuado a estos componentes debería detener dicha
desaparición, e incluso revertirla.

Si los precios de mercado reflejaran el valor real de los recursos biológicos


(incluyendo los sistemas de recursos) y del papel - sobre todo ecológico -
que desempeñan, la internalización de los costos y beneficios externos haría
que los costos de los respectivos recursos mostraran todos los valores
asignables a ellos. Esto a su vez haría perceptible la importancia privada y
social (no sólo ecológica) de la biodiversidad en el mercado, lo cual
redundaría en su conservación y aprovechamiento sostenible. Para ello es
necesario identificar de la manera más amplia posible el valor económico de
los recursos biológicos para la sociedad, y expresarlo en marcos alemanes

10
Introducción (resumen del objetivo)

o dólares. Aun si no es posible lograr una completa valoración monetaria


de los componentes de la diversidad biológica (por ejemplo, porque no es
posible administrar el acceso a determinados bienes o recursos), se puede
lograr una aproximación bastante exacta.

1.2 Fijación de objetivos

El presente estudio trata - por un lado - de las valoraciones ya existentes de


aquellos componentes de la biodiversidad a los que se ha asignado un
precio de mercado, ya sea como materia prima o como producto
transformado. Por otro lado, describe y analiza los diferentes métodos para
calcular el valor directo e indirecto de recursos biológicos, que aspiran a
determinar el “verdadero“ valor de dichos recursos, más allá de su
aprovechamiento como mercadería:

¿Cuáles son los enfoques existentes para la determinación del valor directo
e indirecto de recursos biológicos? ¿Hasta qué punto contribuyen los
recursos biológicos en forma directa e indirecta al bienestar económico y al
desarrollo socioeconómico de las economías nacionales? O, a la inversa:
¿cuál es el valor “verdadero“ que los autores asignan a los recursos
biológicos de uso comercial? ¿Y de qué manera determinan el valor
indirecto, tal como aparece con mayor claridad en funciones como la
protección contra inundaciones, la fotosíntesis, la regulación del clima o la
conservación de los suelos?

En el estudio preliminar se mostró que en este sentido se opta por enfoques


muy diferentes entre sí. Un procedimiento muy común es la medición de
los costos de la restauración ecológica. Otro se orienta según los precios
de mercado de los recursos biológicos sobre la base (teórica) de las

11
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

máximas cosechas sostenibles. Un tercer camino establece una relación


entre la productividad ecológica y la económica. El presente estudio intenta
clasificar estos distintos enfoques y evaluar sus respectivas deficiencias, sin
dejar de lado los peligros que entraña un enfoque de valoración de la
diversidad biológica basado exclusivamente sobre consideraciones
económicas.

Las deficiencias encontradas sirven de base para hipótesis científicas,


políticas y económicas con relación a objetivos de calidad, criterios
cualitativos y costos de la biodiversidad. Para ello, la interrogante clave que
nos orienta es la de determinar las valoraciones económicas y monetarias
necesarias para garantizar la conservación y restitución de un estado
deseable de la biodiversidad.

Los análisis de costo - beneficio nos permiten comparar los valores de


conservación, uso sostenible y restauración de la biodiversidad y los costos
respectivos con el valor privado y social de usos alternativos y sus costos
correspondientes. Para ello, procedemos a trabajar en tres etapas:

• Primero se identifican las consecuencias de los escenarios alternativos.

• Luego se cuantifican todos los escenarios con respecto a sendos costos


y beneficios económicos.

• Se calcula y compara las cifras de costo - beneficio.

Sin embargo, aun si la comparación resulta ventajosa para la alternativa


conservacionista, esto todavía no garantiza en lo más mínimo un efecto de
conservación. Dicho efecto recién se presenta cuando se manifiestan en el

12
Introducción (resumen del objetivo)

mercado utilidades y beneficios reales, y ventajas de costo, lo cual podría


darse siempre y cuando:

• Se creen realmente mercados para los componentes de la diversidad


biológica.

• Se compensen las actuales distorsiones de precios mediante instrumentos


de intervención de la economía de mercado.

• Se implementen medidas políticas que desencadenen efectos de


compensación similares a los que surgirían por sí mismos en un mercado
eficiente.

Esto nos lleva al tema de los instrumentos de financiación, que en caso


dado deberían proporcionar el incentivo eficaz para la protección, el uso
sostenible y la restitución de la diversidad biológica, tanto a nivel nacional
como internacional. Seguidamente se toca el punto de los sistemas de
financiamiento existentes o actualmente en discusión, a fin de evaluar su
eficacia y sugerir mejoras en su conceptualización y diseño.

De acuerdo a esta estructura lógica, el presente documento se desarrolla


como sigue:

El segundo capítulo (2.) - ’Resultados y análisis’ - comienza por enfocar la


desaparición de la biodiversidad desde el punto de vista de la carencia de
mercado y de la falla del mismo. Luego se procede a plantear la tesis según
la cual la valoración orientada al mercado de los componentes de la
biodiversidad contrarresta dicha desaparición. En un segundo paso, se
clasifica los tipos de beneficios que aporta la biodiversidad en categorías
dependientes e independientes de su uso. Por último, se cita algunos

13
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

ejemplos para explicar el activo y el pasivo de la valoración económica de


los genes, las especies y los ecosistemas.

En el tercer capítulo (3.) - ’Recomendaciones’ - se presentan diversos


métodos para la valoración de la diversidad biológica con respecto a los
diferentes valores de uso. La segunda parte del capítulo trata del aspecto
de costos de la protección, y explica el instrumento del análisis de costo -
beneficio. La tercera parte del capítulo describe las medidas que llevarían a
una implementación eficaz de dichos enfoques de valoración (creación de
mercados). Ello nos conduce, por último, a ciertas recomendaciones con
respecto a la cooperación para el desarrollo.

14
Resultados y análisis

2 Resultados y análisis

2.1 Desaparición de la biodiversidad como consecuencia de la


carencia de mercados y la falla del mercado

Durante mucho tiempo, la teoría económica (por ej. Hartwick 1977, Solow
1974, 1986) planteaba como suposición básica que el bienestar económico
no se ve perjudicado - sino más bien incrementado - por el consumo del
capital natural. Al menos, éste sería el caso si los ingresos de una uso
eficiente de los recursos naturales no renovables se reinvertían en capital
multiplicable, y por lo tanto renovable.

Sin embargo, en los últimos años la desaparición de los recursos biológicos


dentro del marco de la crisis ecológica ha llevado a una revisión
trascendental de la función del entorno viviente para la economía.
Crecientemente, la biodiversidad se contempla como una forma de capital
natural que apoya las actividades económicas. Por lo tanto, la
biodiversidad se entiende ahora - según la definición del Artículo 2 de la
Convención sobre la Biodiversidad (CBD) - como ’la variabilidad entre
organismos vivos de todas las procedencias, incluyendo los de origen
terrestre, marino y de otros ecosistemas acuáticos, así como los complejos
ecológicos a los que pertenecen’. Esta definición comprende ’la diversidad
dentro y entre las especies y los ecosistemas’. El mismo artículo define los
recursos biológicos como ’recursos genéticos, organismos y partes de los
mismos, poblaciones o cualquier otro componente biótico de los
ecosistemas con un beneficio o valor real o potencial para la humanidad’.

15
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

A fin de que la diversidad de recursos biológicos pueda contribuir al


bienestar general, es necesario que su rentabilidad económica sea
comparable o incluso mayor a la de las fuentes de riqueza alternativas. En
otras palabras: si los ingresos provenientes de las inversiones que reducen el
capital natural son mayores a los de las alternativas conservacionistas,
entonces el agotamiento del capital natural se justifica en términos
económicos (Barbier et al. 1994. p. 53 ss).

No obstante, actualmente esta justificación económica se tambalea en la


mayoría de los casos. Debido a la falta de internalización de los costos y
beneficios externos, los precios de mercado de los recursos biológicos no
reflejan el verdadero valor de los mismos. El ignorar estos efectos externos
para la fijación del precio es indicio de una falla del mercado.

Esta falla del mercado puede tener diferentes causas:

• La diferencia entre el beneficio privado y social: en aquellos mercados


en que se comercializa componentes de la diversidad biológica, los
precios de mercado suelen reflejar sólo los beneficios privados, y no los
sociales. Estos últimos incluyen los beneficios ecológicos y se
manifiestan en diversas medidas tanto a nivel local como global. La
asignación de precios de mercado a los componentes comercializados
de la diversidad biológica no significa entonces que dichos precios
reflejen su valor económico real. En parte, esto se debe a la carencia de
métodos confiables para determinar el valor social de los componentes
de la biodiversidad. Sobre todo, faltan mecanismos que permitan
integrar los resultados de estas mediciones en los precios de mercado.

16
Resultados y análisis

• La falta de derechos privados de propiedad sobre los componentes de


la biodiversidad, o el problema del descuento: la situación se ve
agravada por la prioridad que se otorga a un beneficio privado real y
presente - que implica un uso socialmente perjudicial - frente a un
beneficio privado futuro que equivaldría a un uso social sostenible y
conservacionista.

• La carencia de mercados: no sólo sucede que los precios de mercado


de los componentes comercializados de la biodiversidad únicamente
reflejan algunos de sus atributos; es más: la mayoría de los recursos y
aportes biológicos ni siquiera se comercializan en los mercados,
mientras que para las actividades alternativas por cierto sí existen
mercados. Los efectos del hombre sobre la biodiversidad y viceversa
no aparecen en el funcionamiento del mercado. Los componentes
aprovechables de la diversidad biológica carecen de mercado local o
global, entendiéndose el mercado como un lugar de encuentro de la
oferta y la demanda, en que los agentes económicos podrían expresar
sus valoraciones de los bienes y servicios ecológicos o biológicos a
través de los mecanismos de precio.

• Las políticas de intervención perjudiciales: A ello se agregan las


distorsiones del mercado por la aplicación de políticas mal concebidas,
como los sistemas de incentivos (subvenciones, transferencias directas
de ingresos, exenciones tributarias, etc.) que contribuyen a la ineficiencia
de los mercados existentes y fomentan la devaluación o destrucción de
recursos biológicos (deforestación, monocultivo, abonos dañinos para
el ecosistema).

17
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

A pesar de estas restricciones, no debería menospreciarse la capacidad del


mercado de realizar un aporte a la aproximación de los beneficios privados
y sociales y a una mejor conservación de la biodiversidad. “Después de
todo, la calidad de un mecanismo de asignación (= un mecanismo que
clasifica los factores o recursos productivos de acuerdo a determinados
objetivos) no debe ser evaluada sólo mediante una comparación de los
resultados reales con consecuencias ideales que tal vez no serían
alcanzables bajo ningún mecanismo real de asignación (el llamado enfoque
Nirwana). (...) Como en la realidad sólo disponemos de mecanismos de
asignación de funcionamiento imperfecto, valdría la pena preguntarse cuál
podría ser la contribución pragmática del mercado para la protección de los
recursos naturales“ (Endres & Querner 1994, p. 139). Después de todo, la
creación de un valor económico real a través de precios adecuados
redundaría en un acercamiento entre los intereses sociales de la
conservación de los recursos biológicos y los intereses privados de su
aprovechamiento.

Por lo tanto, el superar esta falla del mercado requeriría lo siguiente:

• Una internalización de los costos y beneficios de la biodiversidad en los


precios de mercado.

• La creación de mercados para la movilización de la oferta y demanda de


recursos biológicos sobre la base de su valor.

• La erradicación de las medidas de intervención - tanto políticas como


económicas - que distorsionan los precios.

El beneficio que aporta determinado componente de la biodiversidad para


sus respectivos agentes de demanda condiciona la demanda y las

18
Resultados y análisis

decisiones de compra (por ej., un recurso aprovechable para la industria


farmacológica o turística), y por lo tanto fija el precio. Este beneficio
equivale al valor que otorga el agente de demanda al componente en
cuestión. Por lo tanto, la valoración monetaria de la biodiversidad tiene
como objetivo principal el expresar este beneficio o valor a través de un
precio. Los métodos que pueden utilizarse para ello se discutirán en el
próximo capítulo.

Hampicke (1991, p. 104 ss) no considera que la valoración económica y


monetaria de la biodiversidad deba expresar el valor de las especies
individuales o de la naturaleza “en sí“ en unidades monetarias (“este tipo de
valoración monetaria sería inadmisible“). Más bien se pregunta cuánto
costaría evitar su destrucción, o restaurar su plena funcionalidad. “En este
caso, no se trataría de una violación de los límites del análisis monetario.
La crítica a menudo expresada por la opinión pública sobre este tipo de
valoración monetaria sólo puede estar basada en un malentendido, que
podría evitarse al prestar más atención a lo que en verdad dice la mayoría
de economistas.“ “Si se plantea un nivel de protección de la naturaleza
prácticamente equivalente a la inviolabilidad, esto significa en términos
económicos que dicho nivel mínimo para la conservación de las especies
no podría reducirse ni siquiera frente a una demanda con voluntad de pago.
En otras palabras, no sería comprable, pues su precio sería
matemáticamente estratosférico. Cuando los costos de protección de la
naturaleza son tan altos que superan cualquier nivel expresable en términos
monetarios, sólo serían accesibles a través de otro valor inconmensurable -
como el sacrificio de vidas humanas. Entonces habría que elegir entre dos
alternativas no susceptibles de valoración monetaria, y se trataría de una
decisión para nada envidiable.“

19
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

2.2 Categorización de los valores de la biodiversidad

La demanda de bienes biológicos se compone de las diferentes preferencias


valorativas de los agentes del mercado. En otras palabras, los valores de
uso son relativos, y dependen de los agentes del mercado y sus
preferencias. Esto significa que todas las decisiones de asignación implican
costos de oportunidad (los costos de alternativas no seleccionadas). En los
análisis de costo - beneficio (véase el capítulo 3, sección 3.2.2), estas
alternativas pueden sopesarse unas frente a otras. El valor social de un
recurso o aporte biológico está compuesto por cuatro categorías de valores
de uso:

Valores dependientes del uso

1. El valor directo de un recurso biológico o sistema de recursos está


condicionado por su uso directo (consumo o producción), o por su
interacción inmediata con los agentes del mercado. Son muchos los
recursos biológicos que se comercian en los mercados (plantas y
animales de uso agropecuario, madera, plantas medicinales, observación
de animales silvestres, etc.), y sus valores de uso directo de reflejan en
sus precios de mercado. Los ingresos provenientes del aprovechamiento
de ecosistemas para el turismo, la caza y la pesca reflejan el valor directo
de mercado de éstos. Sin embargo, tal como se expuso anteriormente,
estos precios de mercado son por lo general incompletos, ya que no
toman en cuenta ciertos atributos valorativos sociales.

20
Resultados y análisis

2. El valor indirecto de un recurso o aporte biológico proviene del valor que


éste tiene para un recurso o ecosistema directamente aprovechado.
Muchos recursos biológicos adquieren valor por su importancia
económica indirecta para los recursos directamente aprovechados. Los
valores indirectos se basan en primer lugar en el beneficio que aportan
para otras especies directamente explotadas y / o sus genes (valor bio-
cenológico indirecto), en segundo lugar en su importancia para el logro
de resultados ecológicos como la protección contra la erosión, la
asimilación de residuos biológicos, la estabilización de microclimas, la
conservación de las reservas de agua, el almacenamiento del carbono,
etc. (valor indirecto para los ecosistemas), y en tercer lugar en su
significado para futuras evoluciones (valor evolutivo indirecto).

3. El valor de opción se refiere a la postergación del uso para una época


futura. Al asignarle un valor, se mantiene abierta la opción de aprovechar
el recurso biológico en una fecha posterior. El valor de casi opción
representa la postergación de una decisión irreversible con el fin de
obtener la información de apoyo necesaria para la misma. El recurso se
mantiene intangible mientras se espera recopilar informaciones en relación
a él. El concepto del valor de casi opción viene ganando en importancia
debido a las dificultades prácticas para la valoración, a los riesgos e
inseguridades que provienen de vacíos en el conocimiento científico, y a
las consecuencias en parte irreversibles de un uso alternativo de
componentes biológicos.

21
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Valores independientes del uso

4. El valor de no uso o uso pasivo de la biodiversidad resulta de la


importancia que ésta pueda tener para nosotros, nuestros descendientes u
otras especies. Se subdivide en el valor de legado (valor aprovechable para
generaciones futuras) y valor de existencia (el valor de su existencia misma
y su conservación). El valor de no uso o valor pasivo de los recursos
biológicos está bajo el dominio sustancial de consideraciones éticas. Se
manifiesta en aquellas instancias en que un grupo de individuos decide no
aprovechar algún componente de la diversidad biológica, pero declara que
sentiría una pérdida si este componente desapareciera (Brown 1990,
Randall 1991).

Los valores directo, indirecto, de opción y casi opción, y de no uso o


pasivo de un recurso o sistema de recursos se suman para formar el valor
económico total (VET, cuadro 1).

Entre los diferentes conceptos de valor existen superposiciones lógicas que


implican el peligro de una doble contabilización bajo las distintas categorías.
Esto afecta especialmente a los valores opción, de legado y de existencia.
Sin embargo, en este punto debemos señalar que en la teoría económica
existen diferentes concepciones sobre cómo hacer la suma de las
valoraciones de los cambios en el entorno para poder llegar a una
valoración económica total.

22
Resultados y análisis

VET = F (VUD, VUI, VO, VCO, VL, VE)


VET = VU + VNU = (VUD + VUI + VO + VCO) + (VL + VE)

VET: Valor económico total


VU : Valor de uso
VNU: Valor de no uso
VUD: Valor de uso directo
VUI: Valor de uso indirecto
VO: Valor de opción
VCO: Valor de casi opción
VL: Valor de legado
VE: Valor de existencia

Cuadro 1: Valor económico total de un bien biológico

En relación al punto 1:

El precio de mercado de un recurso biológico refleja el valor de uso


directo del mismo. Sin embargo, un aprovechamiento alternativo sin
valor monetario del mismo recurso (con frecuencia más deseable
desde el punto de vista social) no logra imponerse - a pesar del
beneficio que traería consigo - debido a que las circunstancias
favorecen al uso que sí tiene un precio asignado. Puesto que los
agentes del mercado (individuos, instituciones públicas y privadas,
empresas, etc.) otorgan mayor importancia al valor monetario de los
productos y aportes comercializados que al valor de uso directo no
comercial o de subsistencia, se presenta aquí un desequilibrio a favor
del desarrollo de aprovechamientos comerciales y la explotación

23
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

indiscriminada de recursos biológicos. Esto no sólo significa que, por


ejemplo, la pesca, la explotación maderera y el uso agrícola tendrán
prioridad frente a actividades de subsistencia o a la “protección de la
naturaleza a través de la inacción“. También implica que muchos
ecosistemas y hábitat naturales que dan lugar a usos directos sin valor
monetario pasarán a ser sometidos a usos que sí detentan un valor
comercial (Perrings 1995, p. 866).

Un típico valor de uso no monetario es el valor vivencial o de usuario


(en inglés: ’user value’), que se refiere al propio y egoísta disfrute de la
diversidad biológica, por ejemplo al observar o fotografiar la
naturaleza, o al ver en ella un modelo o un aliciente para actividades
artísticas, etc. Cuando el valor de uso directo se comercializa (por
ejemplo en recorridos de observación de la vida silvestre), se convierte
en una interesante alternativa para otros aprovechamientos directos con
valor monetario (por ejemplo, la caza).

Al analizar explícitamente el valor de uso directo, notamos con


claridad que es necesario hacer una valoración equiparable de los usos
alternativos directos sin valor monetario, a fin de que puedan competir
equitativamente en el mercado (véase el capítulo 3, sección 3.3, sobre
la creación de mercados mediante la asignación de precios para
amantes de la naturaleza).

En relación al punto 2:

El valor de uso indirecto de un componente de la biodiversidad por lo


general no está contemplado en los precios actuales del mercado.
Cuanto más indirecto es el beneficio obtenido, más se dificulta su
representación monetaria. Mientras que el beneficio bio-cenótico
24
Resultados y análisis

indirecto de los microorganismos del suelo (por ejemplo, las bacterias


de las nudosidades que conviven con las leguminosas) es relativamente
fácil de relacionar con la explotación directa de cultivos, resulta ya más
difícil cuantificar el papel ecológico fundamental que los elefantes
desempeñan en las sabanas y los bosques africanos para la
diversificación de los ecosistemas, la dispersión de las semillas, la
contención de la vegetación de matorrales, la expansión de los
pastizales y el control de la mosca tse-tse. Aun más ardua es la tarea
de valorar los beneficios indirectos atribuibles a ecosistemas enteros.
Las escalas de valor se hacen más difusas a medida que nos alejamos
del ámbito individual, y puede resultar finalmente que la complejidad
de un componente y las características emergentes del sistema hagan
imposible concebir su valor en el estado actual de los conocimientos.

En relación al punto 3:

Debido a las dificultades del cálculo teórico de elección de alternativas


resulta aconsejable sopesar cuidadosamente las posibles
consecuencias de las decisiones irreversibles. En situaciones donde
existe una alternativa reversible y una irreversible, es recomendable
escoger la reversible. Si bien la base del valor de opción es el reservar
el acceso a los componentes no aprovechados de la biodiversidad, el
valor de casi opción incurre en los esfuerzos de conservación de la
misma para disminuir la incertidumbre y evitar posibles consecuencias
irreversibles (Hampicke, p. 87 ss). La dificultad metodológica para la
valoración y las aplicaciones en la práctica reside en averiguar cuánto
debería gastar una sociedad en conservar los componentes
potencialmente aprovechables de su diversidad biológica.

25
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

En relación al punto 4:

Con frecuencia se considera que el valor de existencia incluye el valor


de legado. A estos dos valores pasivos o de no uso se suele agregar
un tercero: el valor vivencial, que representa el disfrute propio de la
biodiversidad. Puesto que estos diferentes valores se superponen, es
recomendable reunir todos ellos bajo el concepto integrador de valor
pasivo o de no uso.

Cuanto más valores relacionados con los aspectos de uso se pueda


determinar y reunir en el VET, tanto más nos acercaremos al ’verdadero’
valor de un bien, recurso o aporte biológico. Los componentes referidos al
valor pasivo y de opción dependen en gran medida de los agentes de
demanda, y los resultados pueden ser muy distintos debido a los diferentes
entornos culturales. Por otro lado, el VET seguirá siendo un monto teórico
si no logramos plasmarlo en un precio de mercado.

Aparte de la relatividad de los valores y precios a nivel del usuario, la


potencialidad de uso de cada recurso es también diferente. El valor de uso
se ve influido por:

a. El potencial de transformación de los recursos biológicos: hasta qué


punto son utilizables para diferentes fines.

b. Su susceptibilidad a la sustitución: hasta dónde pueden ser


reemplazados por otros recursos.

c. La rivalidad en el uso y el criterio de sostenibilidad: si el uso de


recursos biológicos por un agente del mercado interfiere con el uso
del mismo u otro recurso por otros agentes del mercado.

26
Resultados y análisis

Pero los precios de mercado no sólo se establecen por acción de la


demanda y de las preferencias valorativas de los sujetos del mercado. La
determinación de los precios de mercado de los recursos biológicos
también depende de:

La acción de la oferta, sobre la cual influyen a su vez los criterios de


exclusividad de uso, es decir, los derechos de propiedad (materiales e
intelectuales) y su efectividad. Si bien se puede asignar un valor a los
bienes públicos ’puros’ (como el aire y el agua) o a un acervo de recursos
de uso comunitario (como por ejemplo los efectos benéficos del bosque),
resultan externos al mercado debido a la imposibilidad de su escasez -
inalcanzable aun artificialmente. El cuadro 2 establece una relación entre los
factores explicados bajo c y d.

No es posible excluir a otros Sí es posible excluir a


del uso del recurso otros del uso del recurso
Uso del recurso por A no
influye sobre el uso de otros Bienes públicos ‘puros’
agentes. Recursos bajo
soberanía
Acervo de recursos (por ej. nacional)

Uso del recurso por A sí de uso comunitario


influye sobre el uso de otros Bienes privados
agentes.

Cuadro 2: Clasificación de los recursos

En relación a los puntos a. hasta c.:

Los valores de recursos explotables alternativos deberán determinarse en


cálculos separados y compararse en análisis de costo - beneficio (véase el

27
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

capítulo 3, sección 3.2.2). Las diferencias pueden ser grandes, sobre todo
en lo referente a intereses de uso privados y sociales. El dominio que
ejercen los intereses privados de uso sobre el mercado suele ser
precisamente una de las causas del peligro que amenaza a la biodiversidad.
Para los bienes de aprovechamiento exclusivamente privado existen
mercados y precios de mercado; no así para los bienes públicos ’puros’.

En relación al punto d:

Con la entrada en vigencia de la Convención sobre la Biodiversidad


(CBD), existen derechos nacionales exclusivos de uso para la gran
mayoría de recursos biológicos del mundo: los diferentes estados
tienen soberanía sobre su respectiva diversidad biológica, aunque en la
práctica esto no siempre se cumpla. La exclusividad pura de los
derechos de uso sobre recursos biológicos sólo se da en casos de
propiedad privada. Todavía no hay un acuerdo definitivo sobre el
régimen privado o público de los derechos de uso de una gran
cantidad de recursos biológicos y los beneficios que aportan. Pero
Vogel (1994) tiene razón en señalar que sólo una efectiva privatización
de los recursos biológicos podrá traer consigo el interés deseable de
conservarlos mediante el uso sostenible, y podrá permitir una
competencia equitativa con modalidades de uso alternativas, también
provistas de derechos de propiedad.

Antes de entrar en vigencia la CBD, los recursos biológicos del planeta


- ahora sujetos a la exclusiva soberanía nacional - eran considerados
patrimonio común de la humanidad, y por lo tanto eran de libre acceso
y uso. La CBD redujo considerablemente el número de recursos
biológicos de uso no exclusivo: por ejemplo, sólo son de libre uso los

28
Resultados y análisis

recursos biológicos marinos que se encuentran fuera de las aguas


territoriales o de las áreas nacionales de exclusión. También los
beneficios ecológicos de la diversidad biológica (como la producción
de oxígeno de las plantas verdes) son de libre uso.

Por cierto, existe una gradación entre los recursos biológicos de uso
exclusivamente privado y los (pocos) recursos de acceso y uso
totalmente libres. En el cuadro 2 aparecen dos categorías - la de
’Recursos bajo soberanía nacional’ (= derechos de uso casi
exclusivos) y la de ’Acervo de recursos de uso comunitario’ (=
derechos de uso casi libres) - que hacen de puente entre ambos
extremos. En este sentido, lo importante para la valoración de los
derechos de uso es el hecho que los intereses de propiedad ponen de
manifiesto con mucho mayor claridad las preferencias valorativas en
los distintos mercados.

Sin importar si la perspectiva de análisis es local, nacional o global, el VET


de un recurso biológico que no es un bien público depende también de
enfoques normativos, pues es necesario tomar en cuenta apropiadamente
los derechos de propiedad y acceso.

Al inicio del presente documento se introdujo la tripartición jerárquica de los


recursos biológicos a nivel de genes, especies y ecosistemas. Es posible
determinar el VET en los tres ámbitos (así como en los niveles
intermedios). Sin embargo, es natural que el VET de un gen o de un
elemento no reflejen adecuadamente el VET de la especie que los contiene;
el VET de una especie (o biocenosis) tampoco es suficiente para
representar el valor del ecosistema. Veamos una analogía: el valor de una
tuerca no refleja el valor del motor, así como el valor del motor no indica el

29
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

valor de un avión, y así como el valor del avión no nos dice nada sobre el
valor del aeropuerto. La validez de una valoración económica depende del
nivel de integración sobre el cual fue calculada. Por lo tanto, sólo son
válidos aquellos análisis que establezcan comparaciones entre explotaciones
alternativas del mismo nivel jerárquico.

Ante este panorama, no es de sorprender que se dé preferencia a la


aplicación de enfoques de valoración económica dirigidos al nivel superior:
el de los ecosistemas (Barbier et al. 1994). Supongamos que el análisis de
costo - beneficio (ACB, véase el capítulo 3, sección 3.2.2) del VET de un
ecosistema favorece la alternativa ’conservación’: aquí ya se incluye una
multiplicidad de componentes de la diversidad biológica de los niveles
inferiores, para los cuales resulta innecesario determinar los respectivos
VET (una tarea que por cierto podría resultar imposible desde el punto de
vista cuantitativo). En cambio, si el ACB de un ecosistema arroja como
alternativas el uso sostenible, la restauración o el uso modificatorio del
entorno, entonces podrá hacerse cálculos complementarios para determinar
los VET de los niveles jerárquicos inferiores, a fin de evaluar poblaciones o
recursos genéticos especiales y establecer, por ejemplo, recomendaciones
específicas de gestión.

Por supuesto que las valoraciones económicas de los recursos biológicos


de niveles jerárquicos inferiores y sus aplicaciones en la práctica pueden
producir determinados efectos sobre el mercado que harían innecesario el
cálculo del VET de niveles superiores. También puede suceder que el
enfoque valorativo utilizado para analizar algún componente de las
jerarquías inferiores lleve a considerar también los niveles superiores. Por
ejemplo, la iniciativa de someter a programas de ’screening’ farmacológico
a todas las plantas superiores de un ecosistema en el marco de una
30
Resultados y análisis

prospección biológica tendría dimensiones tan amplias y una duración tan


larga que ejercería un inmediato efecto conservacionista sobre el
ecosistema. Sin embargo, el interés por un gen determinado sólo tendría
consecuencias conservacionistas marginales para todo aquello que esté
fuera del ámbito del gen en cuestión, o en todo caso de la especie que lo
detenta.

Por otro lado, se introdujo como concepto complementario el del ’valor


primario’ (VP), que se suma al VET (= valor secundario) para formar el
’valor ambiental total’ (VT). Representa características referidas al
ecosistema y a la biosfera, de gran importancia económica pero imposibles
ya de medir mediante las preferencias valorativas. Incluso existe una
controversia sobre la factibilidad de representar este valor en términos
económicos (véase Perrings 1995, p. 842 ss). La distinción entre dicho
concepto y el valor de uso indirecto no está clara. Por lo tanto, no se
tratará este punto separadamente, y supondremos que las características del
sistema estarán cubiertas por el valor de uso indirecto.

Sin embargo, su importancia fundamental para los enfoques de valoración


monetaria está fuera de toda discusión. Immler (1993) señala que “el
patrimonio natural productivo es la categoría clave para determinar el valor
ecológico y económico total“. Ante la objeción que la economía no es la
herramienta adecuada para determinar su precio, respondió con toda razón
que “cualquier aproximación a esta magnitud - sin duda difícil - es más
sensata que una intervención operativa, con toda seguridad equivocada“, y
que “la incapacidad de la industria para comprender el concepto
’patrimonio natural’ no era consecuencia de una naturaleza que no se dejaba
entender, sino de una economía que le daba las espaldas“.

31
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Es posible lograr la aproximación a través del análisis de la función de


producción. La transformación de unidades de valor ecológicas en
económicas podría resultar factible dentro del concepto - tanto ecológico
como económico - de la productividad. La productividad ecológica
(producción primaria bruta y neta) tiene un límite superior potencial en
teoría calculable, representado por los ecosistemas primarios que cubren la
superficie terrestre (“productividad silvestre mundial“), o por los
ecosistemas que se desarrollarían si de pronto se extinguiese toda influencia
humana (“productividad natural potencial“). Los ecosistemas de cultivos
se caracterizan por tener la misma productividad neta (en el caso de
explotaciones agrícolas existe además la adición de los abonos artificiales),
pero una menor productividad bruta que los ecosistemas autóctonos,
típicos de cada entorno. (Debido a los fenómenos de degradación propios
de los ecosistemas cultivados - lavado de nutrientes y erosión de suelos -
con el tiempo disminuye también la producción primaria neta: durante los
últimos 30 años se perdió el 20% de la tierra vegetal de uso agrícola a nivel
mundial.) En 1986 la humanidad ya consumía el 40% de la decreciente
producción primaria neta de nuestro planeta (Vitousek et al. 1986).

Por otro lado, la clasificación jerárquica de los ecosistemas desde el punto


de vista de su VET no coincidiría con las jerarquías fijadas por las
prioridades ecológicas (por ejemplo, en razón de su productividad). Esto
se debe en parte a la incorporación de valores de no uso (según los cuales
una región montañosa no muy productiva pero sí atractiva podría tener una
mejor valoración que una llanura verde altamente productiva). Pero el
motivo principal es que aún carecemos de los métodos y datos científicos
que nos permitan calcular el valor de uso indirecto de tal manera que se

32
Resultados y análisis

eliminen las distorsiones causadas por los actuales precios de mercado


(Perrings 1995, p. 889).

Pero no sólo descuidamos los ecosistemas: también el componente


evolutivo apenas si aparece en nuestros enfoques económicos de valoración
de la diversidad biológica. Y esto a pesar que en los últimos años la
valoración de las plantas comerciales y sus parientes silvestres ha
experimentado - también en términos económicos - un crecimiento
exponencial, como tributo implícito a su enorme trascendencia (véase, por
ej., Mooney & Fowler 1991). Pero sólo una representación económica de
los ecosistemas naturales como ámbitos de producción, experimentación y
almacenamiento in situ de la biodiversidad evolutiva podrá responder a las
esperanzas - surgidas con la bio-prospección - de llegar a asegurar a largo
plazo la conservación de los ecosistemas de procedencia e incidencia.

2.3 Ejemplos de valoración de la diversidad biológica

En esta sección presentamos diversos ejemplos de los métodos de


valoración descritos en el capítulo 3, sección 3.1 (véase para ello Perrings
1995, p. 844 y ss), aplicados a una serie de recursos biológicos. La
clasificación elegida no responde a los tipos de uso sino a la jerarquía de la
biodiversidad: genes, especies y ecosistemas.

2.3.1 Valor de uso de genes y componentes bioquímicos

Antes, el aprovechamiento de los genes (de animales y plantas) o


componentes de los organismos vivos estaba unido a la crianza o cultivo de
las especies que los contenían; en cambio ahora, la nueva biotecnología

33
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

permite aprovechar estos genes y componentes independientemente de las


especies que los albergan, como por ejemplo en cultivos de células u
organismos transgénicos. Esta es la característica que distingue los
ejemplos presentados en esta sección de productos como el marfil o la
madera, cuya explotación sigue unida a las especies respectivas. Sin
embargo, las fronteras entre ambas modalidades no están claramente
definidas. Así, a pesar de los métodos biotecnológicos de uso podría
resultar más rentable obtener determinados componentes a partir de
individuos completos (cultivados o silvestres) de la especie de origen.

El valor de uso directo de la diversidad genética se basa en su suministro de


la materia prima para la obtención de determinadas características,
aprovechables para la producción de fármacos, productos agrícolas y
alimentos. Gracias a la transferencia posible de genes dentro de una misma
especie o entre especies, la biotecnología moderna y la tecnología genética
permiten una ampliación adicional del potencial utilizable de los recursos
genéticos, lo cual redunda en un aumento o creación del valor de uso
directo de los recursos genéticos y sus derivados (insumos naturales).

De esta manera, el actual volumen del mercado de productos de fabricación


biotecnológica abarca anualmente a nivel mundial más de 250,000 millones
de dólares, y las inversiones en investigación y desarrollo de los estados de
la OCDE suman 9,000 millones de dólares por año. Las tasas anuales de
crecimiento varían entre 8% para los procedimientos biotecnológicos, y 20
a 35% para la tecnología genética. Así por ejemplo, los ingresos por ventas
en los Estados Unidos para el año 1992 ascendían a unos 5,000 millones de
dólares, 35% más que el año anterior (Burrill & Lee 1992, n. Downes 1993).

34
Resultados y análisis

Para el año 2000, se espera ingresos diez veces superiores (Industrial


Biotechnology Association 1992, n. Downes 1993).

Los precios de mercado reales y potenciales mencionados aquí y en los


siguientes ejemplos suelen sufrir distorsiones debido a los componentes de
transferencia, de manera que es necesario ajustarlos al hacer los cálculos
económicos de los costos (véase Hampicke, p. 180 y ss). Sobre todo es
importante tener en cuenta que el precio alcanzado o alcanzable por
determinado recurso bio-genético no está definido por su valor ecológico,
sino refleja su valor actual según el punto de vista del mercado.

Aun así es posible que la presencia o creación de un mercado ejerzan un


efecto positivo sobre la conservación de los recursos biológicos (sin
embargo, también puede suceder lo contrario). Las iniciativas de bio-
prospección van unidas a la idea que el descubrimiento (a través de ensayos
biológicos) y el desarrollo de componentes o genes aprovechables
redundan automáticamente en la creación de un mercado, y que este último
trae consigo no sólo medidas de conservación in situ del recurso en
cuestión, sino sobre todo opcionales efectos conservacionistas sobre otros
recursos del mismo hábitat aún no investigados desde el punto de vista de
su aprovechamiento comercial. Sánchez y Juma (1994) parten del supuesto
que el intercambio de recursos y tecnologías genéticas entre países del
norte y del sur ascendería en el futuro al 10% del valor total del comercio
mundial.

Muchos autores han publicado obras sobre el valor comercial de los


recursos genéticos, pero todos los aportes de información están aún muy
incompletos. Las valoraciones existentes apenas si tienen en cuenta los
valores de uso indirecto y pasivo, y prácticamente ni se menciona los VET.

35
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

En cuanto a las alternativas de uso, se da mucha importancia a los aspectos


farmacéuticos y agrícolas, y en cambio se descuida por completo las
nuevas opciones como el desarrollo de enzimas o la comercialización de
nuevas especies de plantas ornamentales.

Un estudio reciente de Sedjo, Simpson y Reid (1994) compara la


prospección de recursos genéticos con una lotería. No se conoce cuál es
el premio mayor, y tampoco se sabe cuántos serán los principales
ganadores entre los que se dividirá dicho premio. También se desconoce si
existen boletos a los que no se ha asignado ningún premio. Esta
comparación no sólo alude a la incógnita sobre la distribución espacial de
los organismos, sino también a que no se sabe si el gen o componente
interesante estará presente únicamente en ése o a la vez en otros
organismos. Puesto que recién están apareciendo nuevos segmentos en el
mercado de recursos genéticos, y que aún no se conoce a ciencia cierta la
escasez de la mayoría de los recursos biológicos, son pocas las empresas
que están dispuestas a pagar precios altos. El estudio llega a la conclusión
que en condiciones óptimas el máximo valor económico posible es de
10,000 dólares por especie. En cuanto a los espacios amenazados en que
viven estas especies, se pagaría un máximo de 20 dólares por hectárea.

En lo referente a los contratos de recolección, actualmente las empresas


interesadas pagan entre 50 y 200 dólares por muestra no procesada
proveniente del hábitat original (Laird 1993). Pero sería precipitado deducir
el precio de mercado del material genético a partir de estas cifras, puesto
que se pagan en retribución del arduo trabajo de recolección de muestras, y
no en relación con el material mismo.

36
Resultados y análisis

Componentes aprovechables en la industria farmacéutica

Según un estudio de la OCDE (1987), el 25% de los fármacos


comercializados en los países de la OCDE es de origen vegetal, y si se
incluye en este cálculo a los países no industrializados, el porcentaje alcanza
75%. En los países de la OCDE, los ingresos por medicamentos de base
vegetal vendidos con o sin receta alcanzan durante el año 1985 un valor de
más de 100,000 marcos alemanes. Dos quintos de todos los productos
farmacéuticos modernos fabricados en los Estados Unidos contienen uno o
más ingredientes naturales (Oldfield 1984).

El valor comercial de los medicamentos fabricados sobre la base de


especies de vida silvestre se calcula mundialmente en más de 40,000
millones de dólares por año, y en Estados Unidos solamente se llegó en
1980 a la cifra de 8'112,000 millones de dólares. La participación actual de
materiales genéticos provenientes del sur del planeta en la industria
farmacéutica es de 4,700 millones de dólares. A la fecha, la producción por
hectárea de plantas medicinales provenientes de los bosques tropicales se
calcula entre 262 y 1000 dólares (Pearce & Moran 1994).

Farnsworth & Soejarto (1985) tomaron como supuesto que - con una tasa
de extinción del 10% anual - para el año 2000 habrían desaparecido unas
2,067 especies vegetales, de las cuales unas 16 podrían tener un especial
interés farmacéutico. Con ello, su pronóstico equivaldría a una pérdida
económica de 3,250 millones de dólares (16 x 203 millones).

A través de la bio-prospección - es decir, la exploración de la diversidad


biológica en busca de recursos genéticos y bioquímicos de valor comercial
- dentro de los próximos diez años el valor del plasma germinal proveniente
del sur del planeta y utilizable para fines médicos aumentará de los actuales
37
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

4,700 millones de dólares a unos 47,000 millones de dólares. Con respecto


a Costa Rica, Aylward (1993) estima el valor de la prospección
farmacéutica en 4,810 millones de dólares por cada producto exitoso.
Frente a esta cifra, los costos de inversión para la elaboración y
comercialización rentable de un solo producto farmacéutico terminado
ascienden a más de 200 millones de dólares (Krattiger & Lesser 1994).

En cambio, Mendelsohn & Balick (1995) son más bien escépticos con
respecto a la importancia económica futura de la bio-prospección: estiman
que el ’valor social’ total de la farmacopea tropical aún no descubierta sólo
alcanza unos 150,000 millones de dólares, o 48 dólares por hectárea. Con
respecto al valor de mercado para empresas privadas, sus cálculos
ascienden a 3,000 millones o 1 dólar por hectárea.
Por su parte, UNEP ha calculado a grosso modo el valor farmacéutico de
las especies vegetales ya extintas, y ha llegado al resultado estadístico de
una pérdida ’farmacéutica’ promedio de 80,000 dólares por especie (UNEP
1993). Sin embargo, esta cifra es un tanto engañosa, porque en el cálculo
se incluyó algunos productos ’estrella’ (como por ej. la aspirina o el Taxol),
que trajeron ganancias millonarias para algunas empresas.

Recursos genéticos vegetales


La complejidad de las prácticas de cultivo, tanto modernas como
tradicionales, hace que sólo sea posible lograr una aproximación muy
general del valor monetario real de las especies, aunque se trate de las
variedades de cereales más comunes. Esta incertidumbre en la
cuantificación monetaria del valor actual de mercado se refleja en los
estimados sobre la contribución de los recursos genéticos del hemisferio
sur al valor de la producción de alimentos del hemisferio norte. Tomando
en cuenta sólo el trigo y el maíz, los estimados bordean los 75 millones de

38
Resultados y análisis

dólares anuales para Australia, 500 millones de dólares anuales para los
Estados Unidos y 2,700 millones de dólares anuales para los estados de la
OCDE (Mooney & Fowler 1991). Según Woodruff & Gall (1992),
aproximadamente la mitad del crecimiento de la productividad agrícola en
este siglo se debe directamente a la selección artificial, recombinación y
transferencia de genes dentro de la misma especie.

Los cálculos de la industria estadounidense de semillas muestran que una


característica genética beneficiosa proveniente de una especie del tercer
mundo podría tener una participación anual de más de 2,000 millones de
dólares en los ingresos de los productores de trigo, arroz y maíz de los
Estados Unidos. El Departamento de Agricultura de ese país (US
Department of Agriculture) estima que el material genético vegetal ha llevado
a un 1% anual de aumento en la productividad, con un valor inicial muy
superior a 1,000 millones de dólares.

39
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Tabla 1: Valor de uso de genes y componentes bioquímicos

Tipo de uso Método de Valor Fuente


valoración estimado (US
aplicado $)
Plantas Análisis de mercado: 2’580,000 Farnsworth &
estimado de ingresos Soejarto 1985
por ventas
Plantas Análisis de mercado 474,000 Principe 1989
Árboles Análisis de mercado 7,500 McAllister 1991
Plantas Estimado del valor de 23'700,.000 Principe 1989
las vidas salvadas
Especies provenientes del Camerún Costos de renovación 15-150 Ruitenbeek
de patentes 1989
Especies provenientes de Costa Rica Análisis de mercado: 253 Harvard
estimado de derechos Business School
por licencia
Plantas de bosques tropicales Análisis de mercado y 585-1'050,000 Pearce &
estimado de vidas Puroshothaman
humanas salvadas 1992
Bio-prospección farmacológica para Análisis de mercado: $ 4,81 millones Aylward 1993
un producto vegetal exitoso retorno neto de la bio-
prospección
Seres vivos Análisis de mercado: 52 - 46,000 Reid et al. 1993
ingresos por ventas +
derechos de licencia

La bio-prospección ofrece un gran potencial como fuente de nuevas plantas


aprovechables, como material de partida para el mejoramiento de las
especies y como proveedor de plaguicidas naturales. Lo mismo se aplica a
la industria química, por ejemplo en lo referente a grasas y aceites vegetales,
fibras y productos químicos botánicos (Plotkin 1992).

40
Resultados y análisis

A principios del tercer milenio, el ramo mundial de alimentos


biotecnológicos va a crecer a 20,000 millones de dólares, un monto seis
veces mayor al actual.

2.3.2 Valor de uso de las especies

A diferencia de la sección 2.3.1, aquí trataremos de los componentes de la


diversidad biológica que se explotan como organismos completos debido
a su biomasa o parte de ella.

Uso de plantas

De las 250,000 especies mundiales de plantas multicelulares o vasculares ya


descritas por la ciencia, se estima que alrededor de un tercio (en total unas
80,000) tienen componentes comestibles para el ser humano. Unas 15,000
especies (incluyendo hierbas, especias y similares) se utilizan actualmente
para la alimentación humana (Heywood 1994, información verbal). A nivel
supra-regional o global se cultivan unas 150 especies para fines alimentarios,
pero el 50% de los alimentos vegetales de la humanidad proviene de sólo
cinco cereales (trigo, maíz, arroz, cebada y mijo), y el 90% de la demanda
está cubierto por 20 especies (Myers 1989).

La cantidad actualmente utilizada y procesada de materia prima renovable


llega a un monto anual de alrededor de 2,000 millones de toneladas de
madera, 2,000 millones de toneladas de cereales (incluye reservas de
aseguramiento nutricional), y 2,000 millones de toneladas de otros
productos diversos como caña de azúcar, remolacha, semillas oleaginosas y
legumbres secas. Tan sólo el comercio maderero alcanza los 80,000
millones de dólares anuales.

41
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Según Peters et al. (1989), únicamente el valor neto actual de las materias
primas biológicas de uso sostenible que albergan los bosques tropicales del
Perú (caucho, fruta, madera) llega a 6,330 dólares por hectárea: más de seis
veces el valor de la madera en sí (490 dólares por hectárea).

En la industria química alemana se utilizan actualmente unos 2 millones de


toneladas de materias primas renovables (un 10% del consumo total de
materias primas).

Uso de la fauna silvestre

Prescott-Allen & Prescott-Allen (1986) estiman que los aportes monetarios


de la flora y fauna silvestre y semi-silvestre alcanzan ya el 4% del PBI de
Canadá y Estados Unidos.

Barnes & Pearce (1991) muestran que el valor de uso directo de algunas
formas de gestión de la vida silvestre es mayor que el de la transformación
de los espacios ocupados por los animales silvestres en zonas de pastoreo.

42
Resultados y análisis

Para otros ejemplos, véase la tabla 2:

Tabla 2: Valor de uso de las especies

Tipo de uso Método de Valor Fuente


valoración aplicado estimado
(US$)
Valor de observación de elefantes, MVC; $ 25 millones/p.a. Brown & Henry
Kenia método de costos de 1993
viaje
Exportaciones de marfil antes de la $ 35-35 Barbier et al.
prohibición de exportaciones, todo millones/p.a. 1990
África
Uso de búfalos salvajes, Zimbabwe $ 3,5-4,5/ha Child 1990
Exportación de productos forestales $ 11,000 Barbier et al.
no-coníferos, todas las latitudes millones/p.a. 1994
tropicales
Cosecha de fruta de la selva tropical $ 6330/ha Peters et al.
y látex, Perú 1989
Uso de peces y leña de los $ 38-59/ha Barbier et al.
humedales, Nigeria 1991
Mejoramiento de la supervivencia de MRC $ 21/p. persona Brown et al.
la lechuza moteada del norte & p.a. 1994
(Northern Spotted Owl)

2.3.3 Valor de uso de ecosistemas y paisajes

Los recursos y servicios ecológicos que se derivan de las funciones de


producción, transmisión e información de los ecosistemas generan ingresos
económicos bajo la forma de valores de uso directo. Éstos incluyen los
productos madereros y no madereros, plantas medicinales, genes

43
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

provenientes de las plantas, caza y pesca, recreación y turismo, educación y


hábitat humano, ya que todos estos productos y servicios implican un
aprovechamiento directo de los bosques. El uso directo supone, por
ejemplo, la facilidad de acceso al recurso ’bosque’.

En cambio, el uso indirecto no requiere de acceso al recurso ’bosque’, y


entre los principales valores de uso indirecto de la biodiversidad están las
funciones reguladoras de los ecosistemas. Cada ecosistema está integrado
por una serie de componentes físicos, biológicos y químicos. Los
procesos que se dan entre estos componentes resultan en tipos específicos
de funciones o características de los ecosistemas, como la circulación de
nutrientes, la productividad biológica, los sistemas acuáticos, y la
sedimentación. Este papel ecológico regulador es responsable por
numerosas funciones y prestaciones ecológicas de valor fundamental para la
existencia humana y las sociedades (por ejemplo, la protección contra la
erosión, la retención de agua, la eliminación de elementos tóxicos, la
asimilación de los residuos biológicos, la regulación y estabilización del
clima, el almacenamiento del carbono, etc.).

Una vez que se haya comprendido el papel que desempeñan las especies
individuales en estas funciones reguladoras, es en principio factible deducir
el valor de uso indirecto de estas especies. De hecho, la relación entre los
organismos individuales y la función del ecosistema es de importancia clave
para el concepto de la valoración del uso indirecto.

Immler (1989) parte del supuesto que haría falta aproximadamente un tercio
del PBI de Alemania para asegurar la restauración de las fuerzas naturales
no humanas.

44
Resultados y análisis

La mayoría de los estudios existentes que intentan determinar el valor


económico de los bosques sólo captan valores parciales, y no el VET (en
relación a la crítica respectiva, véase Perrings 1995, p. 886 ss). Los valores
de uso indirecto y pasivo suelen dejarse de lado por completo, e incluso los
valores de uso directo con frecuencia aparecen incompletos.

La primera iniciativa para determinar el VET de los bosques tropicales fue


emprendida por Castro (1994), quien calculó que el valor real promedio del
patrimonio natural de Costa Rica era de 1278 a 2871 dólares por hectárea.
Si esta cifra se multiplica por la superficie total del país (1,3 millones de
hectáreas), nos da un VET real de 1,700 a 3,700 millones de dólares, de los
cuales - según este estudio - el 34% pertenece a Costa Rica y el 66% a la
humanidad.

Kaosard et al. (1994) intentaron determinar - no el valor total - pero sí la


casi totalidad del valor de los parques Khao Yai en Tailandia. (La
valoración no incluía el valor de no uso de las personas que no viven en
Tailandia, ni el valor de la circulación del carbono.) La valoración
comparativa de las tierras de uso agrícola fue de 250 dólares por hectárea
(véase la tabla 3).

Barbier et al. (1991) logran demostrar que el uso directo de la planicie


anegable Hadejia-Jama`are de Nigeria para la pesca, la extracción de leña y
la agricultura migratoria genera mayores ingresos económicos que las
irrigaciones establecidas corriente arriba.

45
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Tabla 3: Valores de uso de los ecosistemas

Tipos de uso Método de Valor estimado Fuente


valoración aplicado (US $)
Eco-turismo, Camerún $ 19/ha Ruitenbeek 1989
Conservación de la fertilidad Variación en la $ 8/ha & Ruitenbeek 1989
de suelos por forestación y productividad $ 23/ha
control de inundaciones, (prevención de daños)
Camerún
Parque Khao Yai, Tailandia MVC, método de $ 80 millones/p.a. Kaosard et al. 1994
costos de viaje 400/ha/p.a.
Ecoturismo, Costa Rica Método de costos de $ 1250/ha Tobias &
viaje Mendelssohn 1991
Importancia de los humedales Enfoque de función de Ellis & Fisher 1987
para producción de cangrejos, producción
Golfo Pérsico
Valoración de reservas Enfoque de función de $ 566,070 a $ Munasinghe 1993;
naturales, Madagascar producción 2'160,000 Kramer 1993
MVC, método de
costos de viaje
Almacenamiento del carbono 1,300/ha/p.a. Pearce 1990
en los bosques, Brasil
Importancia de los manglares $ 536 millones Ruitenbeek 1992
para la agricultura, Indonesia
Retención de agua a través de $ 232-$ 388/acre Bowes & Krutilla
los bosques, USA 1989
Bosque tropical en Perú, río Método de la $ 6,300/ha para Peters et al. 1989
Nanay productividad productos no
(comparación de madereros vs. $
ganancias) 1000 por
deforestación total
Bosque tropical en Costa Rica VET $ 102-$ 214/ha/p.a. Castro 1994
$ 1278 a $ 2871/ha
$ 133a $ 278
millones/p.a.
$1,700 a $ 3,700
millones

46
Recomendaciones

3 Recomendaciones

3.1 Métodos y técnicas de valoración

Debido a los beneficios de la diversidad biológica y a la falta de


información sobre los mismos causada por las fallas del mercado, existe la
urgente necesidad de llevar a cabo estudios de valoración económica. En lo
sucesivo se presentarán los métodos de valoración más adecuados. Entre
los argumentos en favor de su aplicación tenemos los siguientes:

• Proporcionan información valiosa sobre cómo realizar las reformas


necesarias en los mercados para corregir las actuales distorsiones. Aun
si esto no fuese posible:

• Suministran datos que sirven de ayuda en la toma de decisiones, a fin de


que el Estado pueda tomar las medidas de intervención necesarias para
corregir las señales del mercado.

Al aplicar estos métodos de valoración, resulta importante recordar qué es


lo que mide el método en cuestión: podría ser, por ejemplo, el beneficio de
uso directo, o el beneficio neto que incluye los beneficios de uso y no uso,
etc. También hay que tomar en cuenta la confiabilidad de los diferentes
datos y metodologías con respecto a la valoración de cada tipo de
beneficio (Perrings 1995, S. 878).

Tal como se aprecia en el cuadro 3, las diferentes categorías de valor de


uso - ’valor de uso directo’, ’valor de uso indirecto’, ’valor de opción y
casi opción’ y ’valor de no uso o pasivo’, que juntas forman el VET -
requieren la aplicación de diversos métodos de valoración. A continuación
47
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

presentaremos estos métodos y comentaremos la gama de efectos que


permiten valorar.

No todos los métodos de valoración son apropiados para determinar todos


los costos y beneficios relacionados con la biodiversidad. Sin embargo,
cada uno de ellos es útil dentro del contexto adecuado. A grosso modo,
podemos diferenciar los métodos de valoración monetaria de la siguiente
manera (véase OCDE 1996, p. 74):

• Métodos basados sobre precios de mercado reales (análisis de


mercado);

• Métodos basados sobre precios de mercado simulados (análisis de


voluntad de pago: valoración y gradación contingente, modelo de
elección individual);

• Métodos basados sobre precios de mercado sustitutos (por ej., el


enfoque de costos de viaje y el enfoque de precios hedonistas); y

• Métodos basados sobre el enfoque de función de producción (por ej.,


valor de las variaciones en la productividad, costos de prevención de
daños, costos de trasplantación).

Puesto que - en el marco de este estudio - nos interesan los valores de uso
externos de la diversidad biológica, no cubiertos por los precios de
mercado reales, en lo sucesivo nos limitaremos a tratar los enfoques de
valoración basados sobre mercados simulados (sección 3.1), mercados
sustitutos (sección 3.2) y el enfoque de función de producción (sección
3.3). Por lo tanto, no tocaremos la herramienta conocida del análisis de
mercado.

48
Recomendaciones

Cuadro 3: Clasificación de los valores económicos y sus


correspondientes métodos de valoración; el signo <>
identifica a los métodos menos apropiados

Valores de uso Valores de no uso

Valores de uso directo Valores de uso indirecto Valores de opción Valores de existencia
(valores funcionales) Valores de casi opción Valores de legado

MÉTODOS: MÉTODOS: MÉTODOS: MÉTODOS:

Análisis de mercado Costos de prevención Modelo de 'elección Análisis de voluntad


de daños individual' de pago

Método de costos Gastos preventivos Valor de información


de viaje restringida

Análisis de voluntad Valor de variaciones Análisis de voluntad


de pago en la productividad de pago

Precios hedonistas <Enfoque de costos


de trasplantación>

Precios 'públicos' <Enfoque de costos


de sustitución>

<Enfoque de costos
de sustitución, etc.>

49
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

El conjunto actualmente disponible de métodos de valoración muestra


grandes diferencias, no sólo en la metodología misma, sino también en su
enfoque conceptual del problema. Así, por ejemplo, aún no existe
consenso sobre cómo determinar el valor de existencia (Perrings 1995, p.
891).

Estos métodos presuponen la aceptación por parte de los responsables


políticos. Son ellos quienes deben garantizar que los requerimientos
identificados de la valoración monetaria adquieran efectividad económica, a
través de transferencias de ingresos, impuestos y contribuciones, etc.

El cuadro 3 muestra la especial importancia del análisis de voluntad de


pago, pues - con excepción del valor de uso indirecto - aporta información
sobre tres de las categorías de uso. De hecho, es el único método que
permite identificar los valores de no uso. Esto resulta significativo, porque
los valores de no uso (o valores pasivos) de la diversidad biológica no
guardan relación alguna con ninguna actividad, ni siquiera con la compra de
productos del mercado por un hogar cualquiera. En este caso no es
posible aplicar los métodos de valoración indirecta (Stephan & Ahlheim
1996, p. 153).

3.1.1 Determinación de valores de uso directo y pasivo en mercados


simulados

Los métodos sociológicos de encuestas constituyen el enfoque más útil o


significativo para la determinación del valor económico de los componentes
de la diversidad biológica. En principio, estos métodos pueden distinguirse
entre sí según dos objetivos:

50
Recomendaciones

• Encuestas realizadas con el fin de asignar un valor a la diversidad


biológica (método de valoración contingente - MVC, basado sobre dos
tipos de análisis: el de la voluntad de pago y el de la voluntad de
renuncia).

• Encuestas dirigidas a establecer una gradación o jerarquía de valores


(método de gradación contingente - MGC).

La mejor oportunidad de aplicación del método de valoración directo se


presenta cuando se trata de determinar la voluntad de pago o de renuncia
correspondiente a un uso relacionado con el medio ambiente por parte del
encuestado, o correspondiente a su opinión o conocimientos personales
(por ej., las alternativas de recreación cercanas). Los análisis de voluntad
de pago referentes a pérdidas del medio ambiente o de la diversidad
biológica son más problemáticos. Además, aún no existen conclusiones
definitivas sobre los procesos psicológicos y cognitivos que influyen sobre
la formulación de las respuestas.

El método de valoración directo no es lo bastante exacto como para llevar a


cabo análisis de costo - beneficio o para fines legislativos. Sin embargo, si
las preguntas planteadas son específicas, los resultados constituirán una
encuesta de opinión pública que podrá servir de herramienta
complementaria para establecer prioridades en el uso y conservación de la
biodiversidad. No hay que perder de vista que es el único método capaz de
fijar un precio de mercado a partir de valores de no uso (Blamey
&Common 1993).

Sin duda, la principal limitación de este método está en la posible brecha


entre las respuestas de los encuestados sobre su voluntad de pago, y lo que
estarían dispuestos a pagar si la cosa fuese ’en serio’ (Ruck 1990, p.
51
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

330). Por ejemplo, en Australia el MVC y los métodos similares gozan de


poca credibilidad, pues los valores obtenidos se consideran
exageradamente altos (Blamey 1996).

Método de valoración contingente (MVC)

En un análisis directo de la voluntad de pago o de renuncia, las preferencias


de valor se determinan sobre la base de encuestas. Este método se conoce
como método de valoración contingente (MVC), pues se basa sobre una
situación hipotética (“situación de mercado simulado“). Se aplica para
determinar valores de uso directo, de no uso o uso pasivo (valores de
existencia y de legado), y de opción y casi opción, pero no así los valores
de uso indirecto. Por lo tanto, el MVC (y su similar, el MGC), difieren de
todos los demás métodos económicos de valoración, que sólo son
utilizables para un tipo de valor de uso.

Según Pearce & Moran (1994), el MVC es el método más importante para
la valoración económica de la biodiversidad, en gran parte porque es el
único que refleja los valores de la misma no orientados al uso (valores de
existencia y de legado). Además de la captación y del intercambio de
información que tienen lugar durante la entrevista, es importante levantar un
acta al pie de la letra y grabar la conversación en una cinta, pues esto
permite luego realizar ejercicios de interpretación (como el “análisis de
pensar en voz alta“) para analizar el conocimiento y la comprensión del / de
los entrevistado(s) en relación a la biodiversidad.

El interés que suscita este método ha ido aumentando notablemente a lo


largo de los últimos diez años, debido a las siguientes razones:

52
Recomendaciones

• Es el único método que permite analizar cuantitativamente los valores no


relacionados con el uso.

• Las entrevistas o encuestas bien concebidas y correctamente ejecutadas


pueden tener la misma validez que las cuantificaciones de valores de uso
directo obtenidas por otros métodos.

• La concepción, el análisis y la interpretación de las preferencias de valor


expresadas también han mejorado, gracias a avances como las teorías
del “muestreo científico“ o del “beneficio estimado“, que han
perfeccionado la gestión, el análisis y la validez de datos computarizados
y encuestas de opinión pública.

El primer paso del MVC consiste en proveer a los encuestados la


información necesaria sobre los antecedentes del recurso natural en
cuestión, incluyendo datos sobre la calidad, cantidad y escala temporal de
las variaciones ocurridas.

Como segundo paso se elige un método de pago. Así, los encuestados


podrán decidir si estarían dispuestos a aportar dinero para un fondo
hipotético, a pagar un impuesto con fines específicos o a aceptar un
aumento de precios. Durante esta etapa es muy importante que el
encuestador proponga un método de pago confiable, y que pueda presentar
al entrevistado un escenario verosímil y aceptable.

En un tercer momento, debe seleccionarse un método que permita


determinar la voluntad de pago o de renuncia de la manera más exacta
posible. Se puede plantear preguntas ’abiertas’, para que los encuestados
se vean obligados a determinar el monto máximo que estarían dispuestos a
pagar o al que accederían a renunciar. Se puede utilizar también un enfoque

53
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

’de dicotomía’, en que el entrevistado es confrontado con un monto


concreto. Este monto se modifica repetidas veces dentro de un mismo
grupo de entrevistados, a fin de acercarse lo más posible al valor ’real’
(véase Perrings 1995, p. 845 ss, Hampicke 1991, p. 118 ss y Pearce &
Moran 1994, p. 58 ss).

Para determinar el valor directo asignado a un ’producto’ o ’servicio’


proveniente de la biodiversidad sobre la base de una encuesta, es
importante verificar la confiabilidad y validez de las respuestas, e investigar
posibles distorsiones.

A fin de obtener respuestas exactas y confiables con relación a la voluntad


de pago, es recomendable utilizar un método de encuesta estandarizado,
como por ejemplo el desarrollado por el Comité de la Administración
Nacional de los Océanos y la Atmósfera de los Estados Unidos (US
National Oceanic and Atmospheric Administration) (NOAA, Arrow et al.
1993).

54
Recomendaciones

1 Tipo y dimensiones de la muestra: la elección de un diseño y tamaño


específicos para la muestra es una tarea técnica difícil, que requiere de la
ayuda de un profesional en estadística experimentado.

2 Reducción al mínimo de las preguntas no contestadas: una tasa alta de


preguntas sin responder impediría la confiabilidad de una encuesta de
valoración contingente.

3 Entrevista personal: es poco probable que una encuesta por


correspondencia aporte una valoración confiable. Es preferible elegir
entrevistas personales frente a frente, si bien las entrevistas telefónicas
tienen ventajas en cuanto a costos y la posibilidad de una supervisión
centralizada.

4 Ensayo previo relativo al efecto del entrevistador: el entrevistador es un


elemento muy importante de las encuestas de MVC. Es posible que un
entrevistador influya sobre las respuestas obtenidas (excepto en encuestas
por correspondencia)y las oriente en favor de la alternativa ’socialmente
deseable’, puesto que la conservación del medio ambiente es ampliamente
percibida como algo positivo. A fin de investigar y excluir esta posibilidad,
las encuestas importantes deben incorporar experimentos adecuados.

5 Informes: cada informe sobre una encuesta realizada debería consignar qué
muestra de la población se incluyó en la misma, cuántos individuos fueron
entrevistados, y cuál fue la tasa de preguntas no respondidas (clasificadas
por tipo: por ej. respuestas denegadas). El informe debería incluir también
la exacta formulación de las preguntas y su secuencia, y el texto de
cualquier otra comunicación a los encuestados (por ej., una carta
introductoria). Todos los datos de la encuesta deberán archivarse y
ponerse a disposición de las personas interesadas.

6 Cuidadosos ensayos previos con respecto al cuestionario: en una encuesta


de MVC, los entrevistados se ven confrontados con una serie de
informaciones nuevas y a menudo técnicas, mucho más complicadas que las
de una encuesta normal. Esto plantea como condición que se haga una
preparación muy cuidadosa y se conduzca un ensayo previo, a lo cual debe
agregarse evidencia proveniente de la encuesta definitiva en el sentido que
los encuestados aceptaron y comprendieron adecuadamente los supuestos y
las preguntas de la encuesta.

7 Un diseño conservador: si algún aspecto relacionado con la captación y


análisis de las respuestas resulta ambiguo, se debe consignar de
preferencia la opción que subestima la voluntad de pago. Un diseño
conservador aumenta la confiabilidad de la valoración monetaria, puesto
que elimina las respuestas extremas que pueden llevar a montos exagerados
e improbables.

55
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

8 Tipo de respuesta solicitada: es preferible utilizar el enfoque de la


voluntad de pago en lugar de la alternativa de compensación, puesto que el
primero es más conservador.

9 Formato de la encuesta: la pregunta referente a la valoración debería ser


planteada en términos generales, como si fuese un voto plebiscitario.

10 Descripción precisa del programa o política: se debe ofrecer a los


encuestados una información adecuada sobre el programa ambiental objeto
de la encuesta.

11 Ensayo previo con respecto a las fotografías: es muy importante explorar


cuidadosamente el efecto que las fotografías pudieran tener sobre los
encuestados.

12 Presentación de bienes sustitutos: se debe presentar a los encuestados


otros bienes que podrían sustituir al recurso biológico en cuestión. Para
ello hay que recordarles explícitamente - antes de la principal pregunta
valorativa - que existen alternativas y que deben tenerlas en cuenta.

13 Promedio del factor temporal: el ruido proveniente de una diferencia


temporal - y que podría opacar el resultado de la encuesta - debería
reducirse promediando muestras independientes tomadas en distintos
momentos en el tiempo. Si se presentara una clara tendencia temporal,
habría que preguntarse si la información valorativa obtenida es confiable.

14 Opción de ’no respuesta’: la pregunta valorativa principal debería incluir


explícitamente una opción de no respuesta, además de las alternativas ’sí’ o
’no’. A los encuestados que elijan la opción de no responder a la pregunta
se les pedirá que expliquen su elección.

15 Repreguntas con respecto a ’sí’ o ’no’: las respuestas ’sí’ o ’no’ deberían
estar seguidas por una pregunta abierta: ’¿Por qué respondió usted sí /
no?’

16 Cruce de información: la encuesta debería incluir una serie de otras


preguntas que permitan interpretar la respuesta a la principal pregunta
valorativa. El informe final debería incluir breves descripciones de las
diferentes versiones de voluntad de pago.

17 Preguntas relativas a la comprensión y aceptación: la encuesta no debería


ser tan compleja que plantee tareas que superen las capacidades o desafíen
la buena disposición de los participantes.

56
Recomendaciones

Método de gradación contingente (MGC)

El MGC es el hermano menor del MVC. El rasgo que distingue esta


herramienta del tipo anterior de encuesta es que los entrevistados se ven
confrontados con una serie de opciones, que deberán ordenar en una
jerarquía de acuerdo a su escala de valoración. El encuestador enumera una
serie de características para cada alternativa, y explica las diferencias entre
las opciones. Además, deberá indicar los costos que implica cada
alternativa.

El plantear preguntas que permitan valoraciones relativas y señalen los


costos para cada alternativa facilita la elección del encuestado. Por otro
lado, se hace más difícil llegar a determinar el límite monetario real.

Perspectivas de progresos metodológicos

El método de la ’preferencia formulada’ o MPF (Adamowicz 1994,


Louviere 1994) promete mejoras para el proceso de valoración directo. A
través de esta herramienta - originalmente diseñada para los ramos de
mercadeo y transporte - es posible obtener respuestas de los consumidores
con respecto a un rango más amplio de características del recurso en
cuestión que si se aplicara un análisis de valoración directo.

3.1.2 Determinación indirecta de los valores de uso directo

Los métodos de valoración indirectos o de mercado sustituto se basan


todos sobre el hecho que los bienes “naturaleza“ y “recursos biológicos“
se consumen conjuntamente con bienes privados complementarios, que a
su vez cuentan con precios bien conocidos o fácilmente calculables. Estos
enfoques indirectos son técnicas que deducen las preferencias a partir de

57
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

observaciones del mercado. Se puede intuir las preferencias en torno a un


bien perteneciente a la biodiversidad cuando un individuo compra un
producto de mercado relacionado de alguna manera con dicho bien. Las
técnicas descritas aquí son las siguientes:

• El método de los costos de viaje;

• El enfoque de “precios hedonistas“;

• El enfoque del comportamiento de aversión, y

• El método de respuesta a la dosificación.

Las técnicas de mercado sustituto centran su atención sobre mercados de


bienes y servicios privados, vinculados con recursos o productos
biológicos (o ambientales). Los productos y servicios comprados y
vendidos en estos mercados sustitutos guardan relación con los productos
y recursos biológicos y ambientales en cuestión, pues al comprar un
producto o servicio los individuos muestran a la vez sus preferencias en
favor (o en contra) de un bien ecológico. “En una simplificación extrema:
cuando un aficionado a las aves gasta 1000 marcos alemanes en comprar
unos prismáticos, entonces la observación de aves vale para él un mínimo
de 1000 marcos alemanes.“ (Hampicke 1991, p. 115)

Sin embargo, el potencial del enfoque de mercado sustituto se ve limitado


por varios factores:

• No es posible sacar conclusiones hipotéticas, es necesario basarse en la


realidad. Si el bien natural ya no está disponible, tampoco existirá el
objeto sustituto (los prismáticos del ejemplo anterior)

58
Recomendaciones

• El método sólo mide la intensidad de un interés vivencial personal (’valor


vivencial’). No mide la voluntad de conservar la diversidad biológica
(’valor de existencia’).

• La relación que se establece entre los gastos privados cuantificables y el


objetivo conservacionista es con frecuencia débil (por ej., los
prismáticos también pueden servir para otros propósitos).

• Las experiencias vivenciales de la naturaleza suelen ser no específicas:


muchas personas disfrutan igual de los recursos naturales al pasear por
una plantación de pinos, que desde el punto de vista de la biodiversidad
carece por completo de valor. La voluntad de pago que se deduce aquí
no es equivalente al valor de protección de la biodiversidad.

El método de los costos de viaje presenta limitaciones similares. La


relación entre los gastos de un viaje y la valoración de los componentes de
la biodiversidad en el lugar de destino es cuestionable si el viaje se
emprende también por otros motivos. No obstante, este método puede
aportar datos valiosos acerca de la voluntad de pago que se relaciona con el
disfrute de la naturaleza, especialmente si se elige lugares de destino
específicos y costosos. Hasta ahora, el método ha sido aplicado a los
grandes parques de animales mayores en el África (Brown & Henry 1989, y
a las reservas de bosques tropicales de Costa Rica (Tobias & Mendelssohn
1991). En este último estudio, se demostró que la voluntad de pago de los
visitantes locales y extranjeros (sobre todo turistas estadounidenses)
relacionada con una hectárea de bosques supera el precio de compra de las
tierras de la reserva en dos décimas. La única conclusión económica
posible es que debería ampliarse el área ocupada por la reserva. Con
respecto a este método, Ruck (1990, p. 261) señala que - en el caso de

59
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Kenia y Tanzania - la abolición de los parques nacionales perjudicaría en


gran medida al turismo de playa, mientras que para Sri Lanka, India o Costa
de Marfil - donde el turismo se centra en balnearios de playa o en lugares
adecuados para congresos, y los parques nacionales no son sino una
atracción secundaria - la desaparición de estos últimos no tendría efecto
alguno o no afectaría en mayor medida los análisis de costo - beneficio de
la industria turística.

El enfoque de respuesta a la dosificación está dirigido a determinar la


relación existente entre un daño (respuesta) y las causas del mismo (por ej.,
la contaminación ambiental). Así, un cierto nivel de intensidad puede
relacionarse con variaciones en el resultado, lo cual lleva a su vez a cambios
de valoración en el mercado. Sin embargo, este enfoque sólo se aplica a
cambios en el medio ambiente, y por lo tanto no es apropiado para la
valoración económica de valores independientes del uso.

3.1.3 Determinación de los valores de uso indirecto

Los métodos descritos en las secciones 3.1.1 y 3.1.2, utilizados para


determinar las preferencias, no son adecuados para calcular a precio de
mercado los valores de uso directo e indirecto (funciones ecológicas
reguladoras) de la naturaleza como factores de producción, puesto que
apoyan - o incluso permiten - las actividades económicas sin tener en cuenta
las preferencias. A fin de determinar los valores de uso indirecto hay que
aplicar otros métodos. Sin embargo, estos métodos aún se ven afectados
por las limitaciones de nuestros conocimientos sobre la importancia
funcional de la diversidad biológica y de las prestaciones ecológicas
relacionadas con ella.

60
Recomendaciones

Determinaciones indirectas de la productividad

El método de las variaciones en la productividad puede utilizarse para


determinar los valores de uso directo e indirecto de los ecosistemas a través
de precios de mercado. Por ejemplo, el valor de la función ecológica que
desempeña un bosque en el área de captación de una planta hidroeléctrica
se puede medir calculando el valor neto de la diferencia en la producción de
energía hidroeléctrica atribuible a la sedimentación en presencia o ausencia
del bosque (tala completa), o ante un bosque más pequeño (reducción).

Otro método - también basado en la productividad y emparentado con el


anterior - mide el esfuerzo laboral que necesitaría un agente del mercado
(individuo o empresa) para mantener u optimizar los efectos ecológicos
(por ej., un campesino que construye andenes o terrazas para prevenir la
erosión del suelo). El esfuerzo en cuestión es tomado como medida para la
valoración de los efectos ecológicos correspondientes (Perrings 1995, p.
856).

El enfoque del costo de sustitución mide el costo de reemplazar o reponer


los componentes de la diversidad biológica (por ej., a través de la
reintroducción o la reforestación), y utiliza dicho costo como base para la
valoración económica. Los costos de prevención y restitución son difíciles
de medir, puesto que no disponemos ni de técnicas sofisticadas ni de
niveles de costo confiables para la prevención o reparación de muchos de
los daños ambientales. El hecho que la reducción del porcentaje de dióxido
de azufre y de óxido de nitrógeno en el aire a un valor cercano a cero
consuma ingentes cantidades del presupuesto nacional no nos permite
deducir que el valor del aire limpio sea equivalente al costo de prevención.
Por ejemplo, el estimar los daños causados por la contaminación de las

61
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

aguas a los bosques y los recursos ictiológicos sobre la base de los costos
de prevención resulta engañoso, a menos que las personas o entidades
involucradas estén dispuestas a realizar el gasto correspondiente. El
Ministerio del Medio Ambiente de Alemania (BMU) publicó en 1991 el
informe final de su proyecto de investigación sobre este tema, titulado
“Costos de la contaminación ambiental / beneficios de la protección
ambiental“. En dicho informe, los costos de prevención arriba mencionados
se estimaron en 130 millones de marcos alemanes por año (Wicke 1986).

Enfoque de función de producción

El enfoque de función de producción tiene por objetivo determinar los


efectos físicos que las variaciones en las funciones ecológicas pudieran
tener sobre las actividades económicas. Las consecuencias de estos
cambios se manifiestan a través de la variación en el rendimiento de estas
actividades. Por lo tanto, se puede establecer una relación entre la
productividad económica y la ecológica.

A fin de transformar la productividad ecológica en económica, obviamente


es necesario que se comprenda bien las funciones reguladoras de la
ecología que apoyan la actividad económica, y aquí nuevamente nos
enfrentamos a las limitaciones del actual conocimiento científico. La cosa
se hace aun más difícil cuando debemos entender en detalle las causas de
las funciones ecológicas (por ej., el papel funcional de especies
individuales). Claro está que - tanto desde el punto de vista ecológico
como económico - resulta altamente deseable promover el avance de los
conocimientos.

Nuestra falta de entendimiento con respecto a las bases ecológicas de la


actividad económica no debería impedirnos utilizar los datos ya conocidos
62
Recomendaciones

para calcular las valoraciones de la función de producción. Por ejemplo,


Ruitenbeek (1992) tomó como base diferentes supuestos en cuanto a los
vínculos causales entre los factores ecológicos y económicos para valorar
los diferentes escenarios. Los resultados concretos de estos enfoques de
valoración se presentan en la sección 2.3.

Desde el punto de vista formal, el rendimiento comerciable de Q dependería


de varios factores: Q = F (Xi....Xk, S). [En el estudio de Ellis y Fisher
(1987) sobre los efectos de los humedales sobre la producción de
cangrejos (Q), el factor S es el área que abarcan los humedales en cuestión.]

Sin embargo, las condiciones del mercado y las políticas regulatorias


pueden tener efectos económicos sobre el enfoque de función de
producción. Esto haría que tuviesen influencia también sobre el valor
económico calculado de las funciones ecológicas.

3.2 El aspecto de costos de la conservación y destrucción de la


diversidad biológica y el procedimiento del análisis de
costo - beneficio

Las secciones anteriores estuvieron dedicadas al tipo y a las dimensiones de


los valores económicos de uso de los recursos biológicos, y a los métodos
utilizados para su valoración. En esta sección, trataremos brevemente de
los costos asociados con la conservación, el uso sostenible y la
restauración de la diversidad biológica, a fin de compararlos con los
beneficios sociales y económicos. Si calculamos el valor monetario de los
recursos biológicos sujetos a conservación, uso sostenible y restauración,
podemos compararlos con otros usos alternativos. Las alternativas no

63
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

aprovechadas se contabilizan como costos de oportunidad. Pueden


considerarse como una renuncia fundamentada por la escasez de factores
en favor de objetivos alternativos. Las actividades y alternativas en cuestión
se pueden sopesar y valorar a través de análisis de costo - beneficio (ACB,
véase más adelante).

3.2.1 Costos de oportunidad: costos de restauración y sostenibilidad,


valores de uso no aprovechado

¿Cuánto cuesta no destruir la naturaleza? Desde el trabajo pionero de


Krutilla y Fisher (1975), este tema ha sido tratado por una serie de estudios.
Enfoques tales como el utilizado por Bishop (1980) para estimar los costos
de conservación de especies individuales son todavía poco frecuentes, y la
mayoría de estudios se dedican más bien a calcular los costos de
oportunidad de los requerimientos de área para la conservación de la
naturaleza. El punto de partida para este tipo de investigación fue el trabajo
realizado por Goldstein (1971), que comparaba dos usos alternativos de un
área en el medio oeste de los Estados Unidos: dedicarla a un uso agrícola
intensivo o conservarla como área de esparcimiento para cazadores de aves
contra el pago de un derecho. El resultado de la investigación demostró
que la segunda alternativa podía resultar económicamente más favorable.

Algunos estudios, como los de Turner et al. (1983) y Krutilla y Fisher


(1975), llegaron a la conclusión que mantener una condición natural no
causa costos económicos, puesto que las inversiones planificadas de gran
envergadura han demostrado ser poco rentables. Un trabajo realizado por
Willis et al. (1988) muestra la diferencia entre el costo aparente del uso de
tierras en caso que la distorsión de precios favorezca un uso destructivo de

64
Recomendaciones

la naturaleza, y los costos de oportunidad económicamente más bajos que


resultan de un cálculo correcto.

De hecho, debería usarse el enfoque del VET al calcular los costos de


oportunidad, es decir, las pérdidas monetarias ocasionadas por
posibilidades de uso no aprovechadas. Se debe tomar en cuenta los
valores dependientes e independientes del uso, y valorarlos a través de los
métodos basados sobre el precio de mercado y de los métodos
independientes del precio de mercado. En 1989, la Corte de Apelaciones
de los Estados Unidos dictaminó que era necesario revisar los
procedimientos establecidos por el Ministerio del Interior de ese país para
la valoración de daños causados al medio ambiente (Marggraf y Streb 1997,
p. 17). Esta decisión judicial marcó época, y si bien aún no ha sido
ejecutada, sí ha entrado en vigencia un segundo dictamen, según el cual los
daños ambientales deberán valorarse sobre la base de los costos de
restauración y de la pérdida del usufructo de opciones de uso no
aprovechadas.

En este punto resultaría apropiado tomar un poco de distancia y considerar


a grandes rasgos los objetivos de calidad (mínimos) y los costos de la
biodiversidad, en lugar de tener en cuenta sólo sus valores de mercado
reales y potenciales. ¿Cuáles son las condiciones marco factibles y
deseables desde el punto de vista científico con relación a la ecología y
biodiversidad? ¿Y cómo podrían trasladarse a unidades contables de la
economía global y nacional a fin de demostrar su superioridad frente a los
usos destructivos?

“La progresiva destrucción de la naturaleza en muchos países en desarrollo


necesita de una respuesta sobre la mejor alternativa económica en cuanto al

65
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

número, las dimensiones y la ubicación geográfica de parques nacionales,


todo ello dentro de un marco de tiempo determinado para un país o para la
civilización humana“ (Ruck 1990, p. 365). Aquí, “parque nacional“ debe
tomarse como sinónimo de un conjunto de ecosistemas o acervos
biológicos sometidos a protección, uso sostenible y restauración. Ruck (p.
365 ss) nos indica diferentes caminos para calcular las respuestas
económicas a este problema.

“Los precios de mercado de productos y factores reflejan en parte la


escasez material - y los consiguientes costos de oportunidad -, pero
normalmente se ven distorsionados por los componentes de transferencia.
Por lo tanto es necesario realizar correcciones para el cálculo de los costos
económicos. Además, siempre debe establecerse una distinción entre
costos dinámicos y estáticos, y cada conjunto debe ser incorporado al otro.
Con frecuencia es necesario aclarar asuntos relacionados con la asignación:
no todos los costos del uso alternativo de un área con fines
conservacionistas deberán consignarse como costos de protección de
especies o biotopos.“ (Hampicke 1991, p. 180). Los fondos dedicados a
la conservación de la diversidad biológica siempre deberían repartirse en
función de prioridades bien definidas y con la mayor eficiencia posible:
algunos objetivos pueden alcanzarse con un costo mínimo, y en otros
casos deberá maximizarse el grado de cumplimiento de cierto objetivo
dentro de un determinado presupuesto. En la práctica, los costos de la
conservación de la biodiversidad pueden dividirse en las siguientes
categorías: costos de inversión, laborales y de uso de tierras. Cada una de
ellas plantea problemas específicos. Una serie de estudios realizados a
nivel mundial con respecto a conflictos de diversa envergadura muestra que
los costos de oportunidad de la conservación de la diversidad biológica

66
Recomendaciones

muchas veces son menores de lo pensado. Por ejemplo, en los estados


pertenecientes a Alemania Federal antes de la reunificación bastarían 1,000
millones de marcos alemanes para implementar un programa exigente de
protección de la naturaleza.

Wells (1992) comparó los costos y beneficios de áreas protegidas a nivel


local, regional y global, estableciendo criterios cualitativos para la
distribución de costos y beneficios entre los diferentes niveles de análisis.
Su valoración de los beneficios de las áreas protegidas tomó como punto
de partida el trabajo de Dixon y Sherman (1990, citado en Wells 1992). El
autor señala que aún carecemos de investigaciones empíricas al respecto, y
que éstas serían muy necesarias para la identificación de las medidas a
implementarse. Los resultados del estudio muestran diferencias entre los
niveles de análisis: las áreas protegidas a nivel local aportan un beneficio
económico limitado; a nivel regional / nacional la cosa mejora un poco, pero
los beneficios sustanciales se manifiestan a nivel global. En cambio, los
costos generados por estas áreas protegidas siguen la tendencia contraria: a
nivel local aparecen como significativos, a nivel regional y nacional son
moderados, y a nivel global (por ejemplo, a través de contribuciones a
mecanismos de financiamiento multilaterales) son reducidos (véase el
cuadro 4).

Wells (1992) llegó a la conclusión que para una protección eficaz de la


biodiversidad era indispensable contrarrestar este desequilibrio a través de
las siguientes medidas:

• Transferencias de medios financieros entre los hemisferios norte y sur,


destinados la protección de la biodiversidad.

67
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

• Aumento de las ganancias a nivel local y a nivel regional / nacional, a


través de una ampliación en las estrategias de uso sostenible.

Cuadro 4: Comparación de los costos de áreas protegidas y los


beneficios derivados de los usos de las mismas

Usos / beneficios potenciales Costos potenciales significativos


NIVEL LOCAL
Uso de consumo Costos indirectos (por ej., daños por
consumo de pastos)
Recreación / turismo Costos de oportunidad (por ej., por
restricciones de uso)
Valores futuros
NIVEL REGIONAL / NACIONAL
Recreación / turismo Costos directos (establecimiento de
áreas protegidas)
Áreas de captación de aguas Costos de oportunidad
Valores futuros
NIVEL GLOBAL
Diversidad biológica (costos mínimos)
Uso de no consumo
Procesos ecológicos
Educación e investigación ambiental
Valores futuros

A fin de que la población local se beneficie realmente con los ingresos de


las formas de uso sostenible, deben crearse a nivel nacional y regional otras
condiciones socioeconómicas y jurídicas adicionales. Estos aspectos se
refieren a la tenencia de tierras, a los derechos de propiedad sobre la
diversidad biológica y a la promoción del desarrollo rural.

68
Recomendaciones

3.2.2 Análisis de costo - beneficio

Los análisis de costo - beneficio (ACB) permiten valorar en términos


económicos y expresar en términos monetarios las distintas actividades o
medidas y también sus alternativas. A fin de comparar correctamente los
costos y beneficios de estos usos alternativos, es necesario llevar a cabo su
valoración de la manera más apropiada posible.

Para ello, sería recomendable atenerse al siguiente procedimiento:

• Hay que comenzar por identificar todas las consecuencias de una


actividad (uso, uso alternativo, variaciones en el status quo de la
biodiversidad).

• Se determinará el valor presente (VP) de los beneficios VP [B (DEV)] y


de los costos VP [C (DEV)] de naturaleza privada generados por una
acción determinada, y se calculará la diferencia entre ambos: VP [B
(DEV)] - VP [C (DEV)].

• Dependiendo del nivel de integración correspondiente, se calculará el


beneficio económico social de un uso alternativo (por ej., conservación
o uso sostenible) en los diferentes niveles de integración, es decir, nivel
local, nacional, global o total: VETt = VETg + VETn + VET1. Después
de obtener el resultado de la fórmula VT [VET (SUB)], se sustraerá de
este valor total los costos sociales de este uso alternativo obtenidos
según la fórmula VT [C (SUB)].

• Si la diferencia obtenida según la fórmula VT [VET (SUB) - C(SUB)]


es mayor a la diferencia de VT [B (DEV) - C (DEV)], entonces el uso
alternativo es económicamente recomendable. Sin embargo, sus méritos

69
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

políticos dependerán de la posibilidad de hacer participar al usuario


privado en los ingresos calculados a nivel local, nacional y / o global.

Si se desea calcular los costos y beneficios de una actividad sin considerar


un escenario alternativo, se omitirá el segundo paso. El uso será
económicamente recomendable si los beneficios calculados exceden a los
costos. Puesto que el análisis de costo - beneficio requiere que se
identifique y cuantifique de la manera más completa posible todos los
costos y beneficios nacionales e internacionales, también se incluirá los
costos y beneficios individuales (por ej., efectos externos), aun si no son
aparentes desde el punto de vista económico.

3.3 Organización de mercados con precios apropiados

En las secciones precedentes se explicaron las causas de las fallas del


mercado en términos de la valoración de la diversidad biológica, o más bien
de la falta de valoración de la misma. Además se describieron las técnicas
utilizadas para determinar el valor real de los componentes de la diversidad
biológica (VET a nivel local, nacional y global, etc.). Ahora, debemos
responder a dos preguntas cruciales: ¿cuál será el impacto práctico de estos
métodos y detalles teóricos sobre los precios y los mercados?, y ¿cómo se
manifestarán los costos y beneficios externos de los recursos biológicos -
determinados por la valoración económica hasta donde lo permite el estado
de los conocimientos - en los mercados y los precios?

Asignación de valores monetarios y análisis de costo - beneficio

A fin de que los precios de mercado se aproximen al valor real de los


componentes de la diversidad biológica, o a fin de que se puedan tomar

70
Recomendaciones

decisiones eficientes con relación a dichos precios, es necesario reunir


primeramente toda la información disponible sobre los bienes de la
diversidad biológica. Por lo tanto, el primer paso de la teoría a la práctica
consiste en aplicar las técnicas de valoración descritas en la sección 3.1, y
los análisis de costo - beneficio explicados en la sección 3.2. Barbier et al.
(1994) deducen algunas conclusiones importantes para la relevancia práctica
de los ACB a partir de la investigación realizada en el Parque Nacional
Mantadia (Munasinghe 1993):

• Primero, hay que adaptar las técnicas de valoración a la situación local.


En el caso específico mencionado, se usó el arroz como medida de
valoración de las ventajas económicas del bosque.

• Segundo, es necesario seleccionar y aplicar las técnicas de valoración a


las situaciones pertinentes, a fin de obtener indicaciones útiles con
respecto a los valores que se verían perjudicados por la alternativa de
uso escogida. Es importante tener en cuenta siempre cuál es el factor
que mide un método de valoración en particular (por ej., los efectos del
uso directo, los ingresos netos provenientes de los efectos del uso
directo e indirecto, etc.). Tampoco hay que perder de vista la
confiabilidad de los datos y métodos utilizados para valorar las
respectivas ventajas.

• Tercero, hay que aclarar también cuáles son los factores no medidos por
el estudio en cuestión, a qué nivel de jerarquía se condujo el estudio, y si
se logró calcular el valor económico total (VET) o sólo algunos
elementos de éste.

71
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Sólo cuando dispongamos de estos instrumentos adaptados al caso


concreto, y de los conocimientos preliminares que nos proporcionan sobre
el valor económico ’real’ del uso o conservación de los recursos
biológicos, podemos abordar la interrogante central: ¿cuáles son los
mecanismos que permiten trasladar estos valores socioeconómicos ya
determinados a una realidad monetaria del mercado?

A continuación, describiremos cuatro de estos mecanismos:

• Correcciones de las distorsiones perjudiciales de los mecanismos de


mercado (’desregulación’ o liberalización) mediante la eliminación de las
medidas intervencionistas fallidas (3.3.2).

• Creación de mercados a través de la privatización y de la gestión


integrada de la biodiversidad (3.3.3).

• Implementación de sistemas de control inducidos por el mercado


(3.3.4).

• Creación de mercados globales de la biodiversidad (3.3.5).

3.3.1 Eliminación de medidas de intervención fallidas

Los gobiernos tienden a intervenir en los mercados, muchas veces con las
mejores intenciones. Sin embargo, si bien se puede dictar algunas medidas
para corregir los efectos externos (no reflejados en los precios) que dañan
la diversidad biológica, muchas iniciativas de intervención se contraponen al
objetivo de proteger la biodiversidad, aun si están destinadas a lograr otros
propósitos importantes. Algunos ejemplos conocidos de este tipo de
medidas de intervención son los subsidios de deforestación, precios

72
Recomendaciones

demasiado bajos por suministros de agua, subsidios agrícolas, etc. Esta


clase de medidas se conocen como incentivos perversos, es decir,
incentivos que llevan a una disminución de la diversidad biológica. Los
incentivos perversos son el resultado de fallas de política. Los incentivos
más perversos son aquéllos que fueron creados para promover objetivos
que destruyen la biodiversidad (OCDE 1996, p. 70).

Un paso importante hacia el establecimiento de precios que reflejen los


costos sociales es la eliminación de todo tipo de medidas de apoyo que
reduzcan artificialmente los costos privados de las acciones perjudiciales
para la biodiversidad. La OCDE ha llevado a cabo un estudio reciente
(1998) acerca de este problema, al cual hacemos referencia. Un enfoque
que permite corregir las distorsiones de precios causadas por controles
estatales de precio o monopolios nacionales consiste en tomar los precios
de mercado competitivos e internacionalmente válidos como precios ’de
sombra’ (Ruck 1990, p. 220).

3.3.2 Creación de derechos privados de propiedad y gestión


integrada de la biodiversidad

En una economía de mercado ideal, el mercado se desarrolla ’por sí


mismo’, de manera tal que los intereses privados de uso trabajan a favor de
los intereses sociales, y las medidas de corrección pueden ser mantenidas al
mínimo. A fin de siquiera acercarnos a este ideal, existe una premisa: los
usuarios privados deben poder obtener beneficios de los rendimientos
nacionales o globales de la conservación y / o del uso sostenible de la
biodiversidad. Esto se podría lograr a través de la creación de derechos de
propiedad sobre aquellos recursos biológicos para los que estos derechos
no existían, o mejor dicho, a través de la transferencia de estos derechos de

73
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

propiedad del Estado a los propietarios de tierras (incluyendo a aquéllos


que tienen reclamos pendientes en ese sentido por la no implementación de
reformas agrarias).

Este enfoque es la consecuencia lógica de la continuación del “régimen de


soberanía nacional“ sobre los recursos genéticos a nivel local. Dicho
sistema fue creado por la Convención sobre la Biodiversidad (CBD) para
reemplazar el anterior “régimen de libre acceso“, que existía tanto a nivel
nacional como local. Se basa sobre un criterio de eficiencia: ’aquéllos que
controlan un activo deberían ser los mismos que se benefician con los
efectos de uso de dicho activo’. Si una comunidad local no puede obtener
un beneficio neto de su inversión (el uso sostenible de un ecosistema o de
ciertos componentes de la biodiversidad), no tendrá tampoco interés en
mantener esta inversión. (Pearce & Moran 1994, p. 144; Vogel 1996, p.
36).

Persson (1994) pudo demostrar que la transferencia de títulos de propiedad


a los ocupantes informales de un área disminuía la tasa de deforestación,
sobre todo si el descuento es menor que el valor futuro del bosque. Estos
títulos de propiedad podrían también dar lugar a la transferencia de
derechos de uso por períodos limitados para los ecosistemas de uso no
exclusivo: pensemos en ello como un otorgamiento de licencias a través de
tasas de prospección, derechos de visita, tasas de cosecha, derechos de
emisión, derechos de desarrollo, etc.

Analizados desde el punto de vista de la jerarquía de la diversidad biológica


- genes, especies y ecosistemas - estos derechos de propiedad se
concentrarán por lo general a nivel de los ecosistemas. Sería recomendable
que los titulares no vean restringidos sus derechos a aspectos de uso y

74
Recomendaciones

beneficio individuales, sino que se les brinde acceso a toda una gama de
opciones: por ejemplo, turismo, caza, materias primas renovables, etc. Una
estrategia integral de bio-prospección no sólo podría hacer que el mercado
tuviese efectos conservacionistas concretos para los recursos in situ, sino
también traería consigo efectos opcionales de conservación para otros
recursos del mismo hábitat que aún no han sido explorados
comercialmente.

Esto presupone que la estrategia de bio-prospección se mantenga abierta en


términos de las especies, los genes y los materiales contenidos en ambos.
Cuanto más general sea la política de screening de recursos de uso
comercial (dando prioridad a la captación), mayor será el efecto
conservacionista del valor de casi opción de los recursos aún no
investigados sobre el ecosistema completo. Cuanto más específico sea el
enfoque (especie xy, efecto ab), menos probable será el efecto protector
sobre el todo y la especie en particular, en especial cuando la consiguiente
explotación del recurso puede resultar en la escasez o pérdida del mismo.
Por lo tanto, deberá implementarse programas de seguimiento previos y
posteriores a la prospección, a fin de controlar el estatus de los
componentes de la biodiversidad.

La prospección abre nuevas fuentes de ingreso para los países en


desarrollo. En lugar de demandar constantemente la transferencia de
tecnología y de fondos desde el hemisferio norte, podrán a su vez ofrecer a
los países desarrollados una “tecnología genética“ propia, en forma de
materias primas, medicamentos naturales, etc. (Lesser & Krattiger 1994,
Lesser 1994). Por otro lado, para asegurar el éxito duradero de las
estrategias de bio-prospección, sería recomendable transferir un monto
creciente de ’know-how’ biotecnológico al área de la que provienen los

75
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

recursos biológicos (’desarrollo de capacidades institucionales’), para


promover la comercialización de los recursos y sus productos derivados no
sólo a nivel global sino regional.

Lo mismo se aplica al eco-turismo: también aquí es posible prolongar el


aprovechamiento de los recursos a través de la diversificación de la oferta
turística (atracciones múltiples). Sin embargo, de igual manera deberá
hacerse un seguimiento estricto de los efectos secundarios, y compartir los
beneficios con las comunidades locales.

Por lo demás, es cuestión de desplegar nuestra imaginación para encontrar


nuevas formas de comercializar los recursos de la diversidad biológica. El
proyecto “Campfire“ (en español: “fogata de campamento“) de Zimbabwe
es un ejemplo de este tipo de solución de mercado, que diversifica el uso de
los componentes de la biodiversidad y asegura así un mejor efecto
conservacionista.

3.3.3 Creación de herramientas de intervención basadas sobre el


mercado

Existe una amplia gama de medidas que permiten superar la brecha entre los
valores económicos totales (VET) y los precios de una mercado nacional.
Básicamente se puede distinguir entre las medidas políticas y las
herramientas de mercado. Las primeras implican un control directo
(reducción / limitación) de las acciones no deseadas desde el punto de vista
jurídico o político, mientras que las segundas actúan indirectamente
creando incentivos de mercado. “No es coincidencia que la política global
del medio ambiente haya estado dominada por los conceptos de ’dirección
y control’. Las razones para ello residen en la organización sectorial y la

76
Recomendaciones

fragmentación de funciones en la administración pública, el relativo poco


peso político de las instituciones ambientales del gobierno, y - por último
pero no por ello menos importante - el hecho que en muchos países el
debate público asigna una escasa importancia a la política ambiental como
tarea del Estado.“ (Paulus 1995).

Los sistemas de incentivos económicos pueden dividirse en cuatro


categorías:

• Incentivos positivos: todo aliciente o estímulo monetario (pago directo,


repartición de costos, ventajas tributarias) o no monetario
(reconocimiento público al desempeño sobresaliente) que motive a los
individuos o grupos (gobiernos, organizaciones internacionales,
comunidades locales) a conservar la diversidad biológica.

• Des-incentivos: cualquier mecanismo que internalice los costos del uso y


/o daño de los recursos biológicos, y haga desistir a las personas o
grupos de los perjuicios causados a la biodiversidad.

• Incentivos indirectos: todo mecanismo que cree o mejore los precios o


las señales del mercado, a fin de estimular la protección y el uso
sostenible de la biodiversidad.

• Incentivos perversos: incentivos que alientan a un comportamiento


perjudicial para la diversidad biológica. Los incentivos perversos son el
resultado de una intervención fallida por parte del gobierno. Los
incentivos más perversos son los que se crean con el fin de fomentar
actividades que destruyen la biodiversidad (OCDE 1996, p. 70).

77
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Si los resultados de las valoraciones económicas de los recursos biológicos


no llevan a la reforma o la creación de nuevos mercados, sólo queda la
alternativa de apoyar el valor económico de la biodiversidad mediante
medidas de intervención. La opinión según la cual el mercado es
básicamente capaz de realizar sus propios ajustes (con sólo ocasionales
intervenciones por parte del Estado), no es sino una aseveración cualitativa.
“De ella no se puede deducir en modo alguno que los procesos de ajuste
económico y los incentivos del gobierno sin duda tendrán lugar a tiempo y
con la fuerza suficiente como para evitar las consecuencias catastróficas de
una escasez de recursos.“ (Endres & Querner, 1993; con respecto a las
fallas del mercado véase la p.124 ss.).

Sin embargo, a pesar de las limitaciones del mecanismo de mercado


descrito en las secciones anteriores para reflejar el VET de los respectivos
componentes de la diversidad biológica, no debería subestimarse la
capacidad del mercado de contribuir a la solución del problema de la
destrucción de la biodiversidad. Ya que los mecanismos actuales de
asignación son incompletos, y que el resultado ideal de un VET que integre
todos los factores no es alcanzable con ningún mecanismo de asignación
real, cabe preguntarse cuál es el aporte práctico que puede prestar el
mercado a la protección de los recursos naturales. (Endres & Querner
1993, p. 139).

A fin de perfeccionar lo más posible los mecanismos de asignación, resulta


recomendable acudir a los instrumentos de intervención propios de la
economía libre de mercado (IEM). Entre ellos figuran las tarifas
ambientales, la estrategia de precios en relación a recursos e insumos, los
impuestos y contribuciones, las subvenciones, los fondos para el medio
ambiente, los derechos y licencias transferibles, las escalas tributarias
78
Recomendaciones

flexibles, los sistemas de pignoración, etc. (Paulus 1995).

En un sentido más estricto, los IEM incluyen todas las medidas políticas
explícitamente relacionadas con los costos y beneficios privados y dirigidas
a incorporar a los precios de mercado los costos y beneficios comparativos
de tipo social. Los IEM se pueden clasificar en cinco categorías:

• Tarifas, impuestos, derechos y suplementos de precio que deberán


pagarse por los costos sociales originados por los daños.

• Subvenciones que alientan a los individuos a cambiar de actividad y


adecuarse a los estándares sociales de protección ambiental.

• Sistemas de pignoración o empeño que cobran un cargo suplementario


por el uso temporal de un recurso y reintegran dicho cargo si el recurso
es conservado o restaurado.

• Derechos transferibles o comerciables para el uso de recursos.

• Incentivos compensatorios para determinados grupos o individuos que


deben asumir riesgos o costos excepcionales para la conservación de
recursos biológicos. (Barbier et al. 1994, S.180).

Sin embargo, los IEM implican un considerable esfuerzo de administración


y supervisión. Por lo tanto, - como indica Paulus (1995) - es importante
examinar las condiciones institucionales y adaptar el instrumentario de la
mejor manera posible a las estructuras existentes. Los criterios para la
elección de los instrumentos adecuados incluyen la efectividad ecológica, la
eficiencia económica, la factibilidad administrativa, los costos e ingresos
públicos, los efectos de distribución y la ejecutabilidad.

79
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

No existe ningún IEM que pueda compensar por sí solo algún peligro
específico que amenace la biodiversidad. Es necesario combinar diversos
instrumentos para hacer frente a los complejos problemas del costo social
de la conservación, el uso sostenible y la restauración de la diversidad
biológica.

En principio, los costos sociales y de prevención de los daños ecológicos


deberían recaer sobre los grupos que los causan. De lo contrario, todos
los costos de uso tendrían que ser asumidos por los usuarios de los
recursos biológicos, incluyendo los costos del control y prevención de
daños. A la inversa, los costos adicionales relacionados con la promoción
de usos no comercializados deberían cubrirse mediante incentivos
positivos. Esto último puede lograrse a través de instrumentos de control
basados en el mercado, tal como lo demuestra claramente Lippke (1996, p.
253).

3.3.4 Creación de mercados globales

Tal como se mencionó repetidamente en las secciones anteriores, muchos


enfoques de conservación y / o uso sostenible producen beneficios
globales. La conservación de la diversidad biológica en un bosque tropical
puede beneficiar a individuos y grupos de otros países, ya sea porque
obtienen ventajas de sus recursos renovables, porque sus ciclos bio-geo-
químicos tienen efectos positivos globales, o porque simplemente desean
que exista como un valor en sí mismo.

Sin embargo, si el país en cuestión no obtiene un beneficio monetario de


estos valores de uso externos a nivel global debido a la falta de mercados
apropiados, entonces tendrá poco o ningún incentivo en contribuir a

80
Recomendaciones

conservar los recursos biológicos correspondientes.

Por lo tanto, es necesario crear los mercados ambientales globales (MAG).


Estos mercados pueden surgir en forma obligatoria - como resultado de las
normas internacionales - o pueden ser constituidos de manera voluntaria.
Entre los ejemplos de esto último tenemos los canjes de deuda por
naturaleza y los acuerdos de beneficios compartidos, como los establecidos
entre Merck & Co, Shaman Pharmaceuticals, Biotics Ltd. y otros con los
dueños de los recursos biológicos. Por otro lado, los mercados inducidos
por instrumentos legales han adquirido relevancia sobre todo en el contexto
de la Convención sobre el Clima, e incluyen los acuerdos
intergubernamentales sobre la reducción del CO2 establecidos entre
Noruega, Polonia y México a través de la Global Environmental Facility
(GEF), y los acuerdos de forestación firmados por varias empresas
estadounidenses de energía.

Ambos enfoques - tanto el de los mercados inducidos por normas legales


como el de los acuerdos voluntarios - tienen una característica en común:
las transferencias de pago bilaterales o multilaterales. De hecho, en un
futuro cercano los servicios de transferencias financieras específicos y bien
organizados resultarán indispensables. La particular importancia práctica de
la valoración monetaria de los costos de conservación, uso sostenible y
restauración de la biodiversidad consiste en que estos enfoques formarán la
base para la elaboración de los presupuestos de las medidas
conservacionistas - tanto nacionales como internacionales. Esto resulta
primordial con relación a los instrumentos financieros necesarios la
implementación de la Convención sobre la Biodiversidad (CBD),
instrumentos que incluyen la GEF y las carteras de biodiversidad del Banco
Mundial, del Banco de Desarrollo de las Naciones Unidas y de los bancos
81
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

continentales de desarrollo. En este sentido, el debate sobre los “costos


incrementales“ de la conservación de la biodiversidad puede ser de utilidad
para estas consideraciones monetarias. Todavía continúa la controversia
sobre lo que se incluye bajo el concepto de “costos incrementales
completos“ mencionado en el Artículo 20 de la CBD. Sin embargo, es
urgente llegar a una conclusión a este respecto, puesto que aquí se
determina cuáles serán los elementos de los proyectos relativos a la
biodiversidad que se incluirán como “costos incrementales“ entre los
aspectos cubiertos por los mecanismos financieros de la CBD y la GEF.

El Secretariado (entonces interino) de la CBD estableció un listado de los


diferentes rubros que justificarían los pagos por transferencia considerados
por la Convención, entre los que se incluye una estructura burocrática
bastante complicada encargada de la tramitación (UNEP/CBD/IC/2/17 del
25 de abril de 1994). En este sentido, tal vez sería más apropiado restringir
el concepto de costos incrementales netos a objetivos definidos de la
conservación y el uso sostenible (externalidades globales de la pérdida de la
biodiversidad), puesto que el tercer objetivo de la CBD - la repartición de
beneficios - demanda justamente la división de los ingresos y no la
restitución de los costos. Según Glowka et al. (1994), los costos
incrementales se definirían en forma simplificada como los costos
necesarios para conservar, usar en forma sostenible y restaurar los
componentes de la biodiversidad definidos por los objetivos cualitativos (si
fuese necesario, se podría sustraer del uso sostenible directo de la
biodiversidad y de la repartición de beneficios - no así de las transferencias
por tecnología - los montos obtenidos por rendimientos inmediatos). Con
ello, los gastos financieros específicos se basarían en valores monetarios
no relacionados con el uso.

82
Recomendaciones

El Proyecto Internacional de Financiamiento de la Conservación (en inglés:


International Conservation Financing Project) del Instituto Mundial de
Recursos (World Resources Institute) ha intentado calcular los fondos
anuales necesarios para la conservación de los recursos biológicos, y ha
llegado a una cifra estimada de 20 a 50 millones de dólares por año (Reid &
Miller 1989). Tan sólo la preservación de 2,000 especies animales con 500
individuos cada una a lo largo de 20 años alcanza la cifra de 25,000 millones
de dólares, equivalente al primer aterrizaje del hombre en la luna. La
protección tradicional de los bosques tropicales implicaría un costo de 170
millones de dólares anuales durante por lo menos 5 años.

A fin de establecer una jerarquía de prioridades para las transferencias, se


desarrolló un índice de eficiencia de costos para los proyectos relacionados
con la biodiversidad (véase el Segundo Foro Global de la Biodiversidad,
que tuvo lugar en Nassau en 1994):

• Un indicador adecuado de los beneficios de la biodiversidad o de su


significado biológico, para lo cual se puede acudir a las estadísticas
nacionales sobre la diversidad de las especies y su presencia endémica
por km2.

• El costo de intervención, representado por el monto de la inversión (por


km2) en medidas de conservación a nivel nacional.

• Las probabilidades de éxito (voluntad de conservación), que se evalúan


sobre la base del porcentaje del territorio nacional convertido en área
protegida.

83
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

• El grado de amenaza, estimado sobre la base de las tasas de


deforestación y de crecimiento poblacional.

• Debemos recordar que no basta con garantizar el retorno de las


utilidades compartidas a los países dueños de los recursos. Por el
contrario, la compensación financiera por el uso o explotación de la
diversidad biológica debe extenderse a los grupos (comunidades,
locales, organizaciones de conservación, administraciones de parques
nacionales, etc.) que se encargan directamente de la protección y el uso
sostenible de la biodiversidad. Sin embargo, esto presupone toda una
gama de condiciones institucionales, organizativas y legales, incluyendo
los procedimientos para asegurar la oportuna y confiable distribución de
los fondos transferidos en forma de valores económicos equivalentes.

A fin de asegurar los pagos internacionales estratégicos, se viene


considerando una serie de instrumentos financieros (por ej., el
establecimiento de un fondo para los bosques tropicales, los acuerdos de
franquicias relacionadas a los recursos, etc.). Debido a su naturaleza de
libre mercado, los derechos transferibles de desarrollo, conocidos por sus
siglas en inglés TDR (’transferable development rights’), resultan
especialmente prometedores para la adecuada conservación de los valores
globales de la biodiversidad en los países tropicales.

El primer paso hacia el establecimiento de los TDR para la conservación de


la diversidad biológica consistiría en diferenciar entre las áreas de
conservación y las de desarrollo. Los individuos que poseen terrenos en
las áreas de conservación también recibirían TDR, pero no se les permitiría
aplicarlos a las áreas de conservación. En lugar de ello, podrían vender
estos TDR en las áreas de desarrollo, donde se supone que habrá una fuerte

84
Recomendaciones

demanda de derechos restringidos de desarrollo. Los ingresos obtenidos


por la venta de sus TDR servirían de compensación financiera a los
propietarios de las áreas de conservación. Un mercado de TDR de este tipo
podría establecerse también a nivel internacional. Los países tropicales
podrían excluir de un uso alternativo algunas áreas de sus ecosistemas
auténticos, y cubrir sus costos de oportunidad (valor neto actual del uso
alternativo no aprovechado) mediante la venta de sus TDR a nivel local e
internacional (véase Panayotou 1994). Hasta cierto punto, este sistema de
TDR ya existe bajo la figura de los ’canjes de deuda por naturaleza’. El
elemento esencial de estos acuerdos es la transferencia de los derechos de
desarrollo para las áreas de conservación a organizaciones no
gubernamentales (ONG) internacionales, en canje por el repago o la
condonación de parte de las deudas de los países en cuestión. Sin
embargo, estos derechos no suelen relacionarse con los costos de
oportunidad.

3.4 Recomendaciones referentes a la cooperación para el


desarrollo

El ejemplo de las técnicas de valoración ilustra el dilema fundamental de la


economía ambiental, es decir, cómo pasar de las sistematizaciones a las
propuestas operativas concretas. Los análisis de muchos estudios de caso
son bastante convincentes, pero sus teorías científicas aún no son
aplicables en la práctica cotidiana. Ha llegado ya el momento de emprender
este paso tan necesario, y es la cooperación para el desarrollo la que debe
diseñar los conceptos operativos y aplicarlos en proyectos piloto. Aquí los
conceptos clave son la adquisición de conocimiento, la capacitación y la
creación de las instituciones adecuadas.

85
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

3.4.1 Análisis de costo - beneficio orientados a proyectos, con


aplicación de los instrumentos de valoración disponibles

La medida que salta a la vista sería la de hacer uso de los instrumentos de


valoración para incluir los análisis integrales de costo - beneficio en la
planeación y ejecución de proyectos (relacionándolos con los estudios de
impacto ambiental - EIA), a fin de que sirvan de base para la determinación
de los valores económicos totales (VET) dentro de los proyectos. Como
condición para ello es necesario desarrollar programas de capacitación y
establecer lineamientos para los responsables de los proyectos tanto en
Alemania como en los países asociados, y aplicarlos primero en una fase
piloto para proyectos seleccionados. Al diseñar este tipo de programas y
lineamientos, habría que cuidar que la indispensable estandarización no
impida la libertad de acción dentro de las condiciones individuales de los
proyectos, y la adaptación práctica de los procedimientos en cuestión (por
ej., métodos de valoración contigente - MVC).

3.4.2 Capacitación y desarrollo institucional para el inventario y


control de la biodiversidad

A fin de llevar a cabo las valoraciones económicas de la biodiversidad bajo


condiciones razonables, debe conocerse adecuadamente el componente en
cuestión. Esto significa que previamente se habrá hecho un inventario de
los componentes de la biodiversidad, clasificándolos en los tres niveles de
integración de la jerarquía (genes, especies y ecosistemas). Además, es
necesario hacer un seguimiento de estos inventarios mediante los métodos
apropiados de control y evaluación. Actualmente existe ya una amplia
bibliografía para la implementación e infraestructura de este tipo de

86
Recomendaciones

programas (Stork & Samways 1995, Guarino et al. 1995), y no tocaremos


el punto en detalle. Debería prestarse particular atención a los
procedimientos acelerados inventario descritos en las obras citadas, así
como a la estrecha cooperación entre expertos y para-taxónomos, tal como
se ha documentado con particular y encomiable claridad en el caso del
Instituto de la Biodiversidad (INBio) de Costa Rica. La cooperación para
el desarrollo (CD) debe participar en los inventarios de biodiversidad de los
países asociados a través de medidas apropiadas de capacitación e
infraestructura.

3.4.3 Creacion y / o fortalecimiento de los prerequisitos


institucionales para el desarrollo e implementación de
estrategias nacionales de biodiversidad

En este contexto es necesario sobre todo el fortalecimiento de las


autoridades nacionales y regionales, responsables de proteger la diversidad
biológica y administrar los territorios correspondientes. También hay que
integrar las estrategias de conservación de la biodiversidad dentro de la
planificación del uso de tierras y promover una mayor cooperación entre
todas las instituciones involucradas (autoridades nacionales y locales,
organizaciones de desarrollo y del medio ambiente, movimientos sociales,
organismos de cooperación para el desarrollo). La CD puede desempeñar
un importante papel en este proceso a través de actividades de asesoría o
consultoría. Una posible forma de apoyo consistiría en asegurar que los
rendimientos provenientes del uso de recursos genéticos retornen en forma
proporcional a las áreas protegidas. Al mismo tiempo habría que revisar y
modificar la legislación, a fin de hacerla compatible con los objetivos de
conservación y desarrollo.

87
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

3.4.4 Capacitación y fortalecimiento institucional para la aplicación


de análisis de costo - beneficio y técnicas de valoración

No basta con adaptar las estructuras de la cooperación para el desarrollo en


los países donantes: los organismos correspondientes deben transferir a los
países beneficiarios los conocimientos necesarios para la aplicación de
técnicas de valoración y análisis de costo - beneficio, dentro del marco del
desarrollo de las capacidades institucionales requeridas para el inventario de
la biodiversidad. La CD puede hacer un aporte notable al organizar cursos
de capacitación y especialización, y ofrecer consultoría a las instituciones
pertinentes en los países asociados. Al mismo tiempo, es necesario revisar
y modificar la legislación referente a los procedimientos mencionados,
como sucede por ejemplo con las directivas estadounidenses denominadas
DOI.

3.4.5 Apoyo a las capacidades de investigación en los países en


desarrollo en el campo limítrofe entre la ecología y la
economía

Debido a la creciente demanda de recursos genéticos, que trae consigo un


aumento de actividades tales como la bio-prospección en los bosques
tropicales, es necesario brindar apoyo a los programas nacionales de
inventario de la biodiversidad e investigación de ecosistemas, a fin de que
puedan diseñar las estrategias apropiadas de uso sostenible. Habría que
establecer un fondo internacional para promover el desarrollo de
capacidades institucionales relacionadas con el inventario de la
biodiversidad, la toma de muestras y su documentación, y el intercambio de
información. Al mismo tiempo, es necesario asegurar el libre acceso a la

88
Recomendaciones

información y la participación de las comunidades locales. Las experiencias


del Instituto de la Biodiversidad de Costa Rica (INBio) indican que
deberíamos seguir este ejemplo y desarrollar métodos aun mejores para
otros países.

La capacidad de investigación y tecnología de los países en desarrollo


puede recibir apoyo por parte de iniciativas privadas. Sin embargo, debido
a la envergadura de estas tareas, dicho apoyo no será suficiente por sí solo
y deberá ser complementado por esfuerzos internacionales. Las
instituciones de investigación extranjeras deberían cooperar con sus
similares en los países en desarrollo, sobre todo en el complejo campo de
la investigación básica en los bosques tropicales. En este contexto, es
necesario asegurar el libre acceso a los resultados de las investigaciones por
parte de todas personas involucradas, crear y fortalecer instituciones
nacionales capaces de encargarse de la investigación, y aplicar en la práctica
los resultados de las investigaciones a través de la educación ambiental.

Un área extremadamente importante en la que se requiere la CD es sin duda


es establecimiento y promoción de modernos centros de investigación de la
biodiversidad en los países asociados, en particular para la creación de una
sólida y moderna taxonomía que servirá de base para todos los demás
campos de investigación de la biodiversidad. Bisby (1995) señala que “la
taxonomía resulta fundamental para determinar las unidades y el patrón del
conocimiento humano de la diversidad de las especies“ *. Por su parte,
Hubert Markl sostiene lo siguiente: “Hay que explicarlo con claridad: sin el
aporte activo de una investigación bio-taxonómica dinámica y productiva -

*
En inglés: “Taxonomy is fundamental in providing the units and the pattern to humankind ´s notion
of species diversity.“

89
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

sobre todo en relación a los inventarios de organismos tropicales,


subtropicales y marinos de todas las latitudes - será imposible adquirir los
conocimientos ecológicos necesarios para una gestión global de la biosfera
(una gestión que nos traiga beneficios, así como nuestra actitud auto-
controlada de protección redunda en beneficio de las comunidades
naturales). Estos conocimientos son indispensables para asegurar la
convivencia sostenible a largo plazo entre el hombre y la naturaleza de la
que depende nuestro futuro (...) Si bien este aspecto es parte de la
infraestructura de la investigación de la biodiversidad, refleja sólo en cierta
medida el particular valor científico de la bio-taxonomía. Esta exacta
diferenciación de las formas de vida nos proporciona el requisito
indispensable para aprehender justamente lo que más nos sorprende y
entusiasma de ellas: su maravillosa capacidad de adaptación al entorno, sus
diestros métodos de conquista de nichos ecológicos, su inagotable
repertorio de soluciones originales para todos los problemas de la vida -
tales como conseguir alimento en competencia con sus congéneres y demás
especies, evitar a sus enemigos y luchar contra los parásitos - y finalmente
su suprema capacidad para formar sistemas sociales colectivos cuyas
habilidades de aprendizaje y adaptación no parecen tener límite ni siquiera
entre los animales, para no hablar de los humanos. No podríamos llevar a
cabo nuestras investigaciones en ninguno de estos campos si no fuera por
las claras distinciones establecidas por la taxonomía, que nos sirven de
base para el análisis comparativo.“ (Markl 1995)

La taxonomía moderna afronta importantes desafíos para el futuro: debe


desarrollarse como una ciencia integral, que combine los métodos
tradicionales con los de vanguardia (véase Bisby 1995), y garantice la
formación de taxónomos capaces no sólo de integrar ambos enfoques, sino

90
Recomendaciones

también de utilizar los últimos adelantos de la tecnología informática. A ello


se agrega que la taxonomía viene ganando en importancia como elemento
de infraestructura de la biotecnología. Los conservacionistas de la
biodiversidad centran sus esperanzas en las estrategias participativas del uso
biotecnológico de los componentes naturales (bio-prospección) para la
preservación in situ de la diversidad biológica. Por lo tanto, la cooperación
para el desarrollo debería incluir también la investigación de la ecología y
biología química, incluyendo sus relaciones con la industria, las ciencias
sociales y los aspectos económicos de la biodiversidad. Siempre que sea
posible, deberá buscarse la integración de los proyectos de CD en las
iniciativas científicas internacionales de la biodiversidad como
DIVERSITAS, BioNET International y SystematicsAgenda 2000.

Otro ámbito clave de la investigación de la biodiversidad en la que no


debería faltar la CD es la economía de la diversidad biológica. En años
recientes - sin duda como resultado de la CBD, promulgada por
Conferencia Mundial del Medio Ambiente y Desarrollo (Río de Janeiro
1992), y de los debates sobre el valor y la valoración de los recursos
biológicos - esta sub-área de la economía ambiental ha experimentado un
auge vertiginoso. Se han publicado ya una serie de estudios relacionados
con las iniciativas de valoración de los recursos biológicos, pero aún son
pocos los esfuerzos de investigación coordinados e interdisciplinarios.

3.4.6 Identificación de las fallas de intervención

A fin de acercarnos al objetivo de reflejar los costos sociales a través de los


precios, es necesario erradicar las medidas de apoyo que reducen
artificialmente los precios privados, y fomentar la internalización de efectos
externos adversos a través de herramientas económicas o políticas
91
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

adecuadas. En este sentido, la cooperación para el desarrollo podría


brindar asesoría para el desmantelamiento de los instrumentos económicos
nocivos sobre la base del VET y del análisis de costo - beneficio. Además,
debería condicionarse la aprobación y financiamiento de los proyectos de
cooperación a la eliminación de los des-incentivos contraproducentes para
los respectivos objetivos conservacionistas.

3.4.7 Creación de incentivos

En la valoración de recursos naturales es necesario realizar un esfuerzo


especial para llegar a precios ecológicamente válidos.

Hasta ahora no ha sido posible llegar a una formación de precios que


considere los requerimientos de la oferta y la demanda, y que a la vez tenga
en cuenta los objetivos de la ecología. Los valores de consumo y no
consumo de la diversidad biológica sólo se reflejan parcialmente en los
precios de mercado. En los cálculos económicos totales debe tenerse en
cuenta también los costos del control o seguimiento de la ecología. El
subsidiar usos no sostenibles envía señales económicas equivocadas, y con
frecuencia es la causa de la destrucción de los recursos naturales. En el
marco de los proyectos de cooperación, la ayuda al desarrollo debería
alentar la conservación de la diversidad biológica a través de incentivos
económicos, y tomar distancia con respecto a la promoción de formas de
uso de tierras no compatibles con la ecología.

92
Recomendaciones

La asesoría brindada a las autoridades nacionales y locales debería


fomentar la implementación y ensayo de instrumentos económicos
destinados a generar precios de mercado próximos a los cálculos del VET.

3.4.8 Participación de la población local en los ingresos provenientes


de la biodiversidad

El éxito de un proyecto depende de la participación de la población local en


los procesos decisorios, la identificación de problemas durante las etapas
de planeamiento e implementación, y una correcta evaluación. Los
procesos de toma de decisiones en torno a la organización de un proyecto
deberían contar con la mayor transparencia posible, y es necesario prever
mecanismos para que las partes afectadas puedan presentar objeciones.

Hasta ahora no se ha dado la consideración debida al efecto que puedan


tener los incentivos económicos sobre las poblaciones locales. En los
proyectos de bio-prospección y toma de muestras emprendidos por
organizaciones estatales, es indispensable planificar desde el inicio la
apropiada y equitativa participación de las comunidades locales en la
repartición de los beneficios obtenidos. En el marco de los proyectos
privados, las iniciativas de participación deberían recibir el apoyo de las
autoridades del gobierno.

3.4.9 Apoyo en la creación de derechos de propiedad

Es necesario fortalecer y asegurar los derechos de propiedad de la


población local. Esto incluye la revisión de las estructuras de tenencia de
tierras y el refuerzo de los derechos de los pueblos indígenas y las
comunidades tradicionales, entre los cuales están el respeto a su identidad

93
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

cultural y la propiedad intelectual colectiva de sus conocimientos


tradicionales.
En la economía, las innovaciones industriales y el desarrollo de nuevos
productos gozan de la protección legal de los derechos de propiedad
intelectual, por ejemplo, a través de las leyes de patentes (reforzadas
recientemente a nivel internacional por el acuerdo del GATT). En cambio,
los derechos colectivos de propiedad intelectual de las comunidades locales
tradicionales y de los pueblos indígenas no reciben reconocimiento
internacional. Si deseamos aprovechar el valioso patrimonio de la
experiencia y los conocimientos de estos grupos a favor de una gestión
justa y equitativa y el uso sostenible de los recursos biológicos, es
indispensable fortalecer estos derechos.

Es necesario tomar medidas sobre todo en las siguientes áreas:

• La evaluación del sistema de tenencia de tierras, a fin de fomentar las


prácticas de gestión sostenible y la transferencia de los títulos de
propiedad sobre la diversidad biológica (concepto clave: privatización).

• La creación de instrumentos legales que aseguren la protección de la


propiedad intelectual colectiva de los pueblos indígenas y las
comunidades tradicionales.

• El análisis de la influencia que ejercen las nuevas normas internacionales


de refuerzo de los derechos de patente en el marco del GATT sobre la
disponibilidad de tecnologías favorables para el medio ambiente en los
países en desarrollo. A la vez, debería investigarse las consecuencias
socioeconómicas y ecológicas de las patentes sobre las formas de vida
de los pequeños campesinos y pueblos indígenas.

94
Recomendaciones

3.4.10 Participación en la creación de mercados ambientales


globales a través de acuerdos bilaterales y multilaterales

En el caso de la aplicación de la Convención sobre el Clima, destinada a


reducir los niveles de emisión de CO2 , se firmaron acuerdos bilaterales y
multilaterales entre los países, pero también entre individuos e instituciones
de derecho privado. De igual manera, en el caso de la biodiversidad se
podrían buscar acuerdos similares dirigidos a cumplir con los objetivos
específicos de la conservación. Podríamos mencionar como ejemplo a
seguir la iniciativa estadounidense ‘Forest for the Future’ (Bosques para el
Futuro). Finalmente, es importante no dejar de lado la participación y
motivación del sector privado en estos acuerdos bilaterales y multilaterales
de conservación de la biodiversidad.

95
Referencias bibliográficas

4 Referencias bibliográficas

4.1 Literatura citada

ADAMOWICZ, W. 1994 Stated preference methods for environmental


valuation. Documento presentado ante la Conferencia Annual de la
Agricultural Economics Society, University of Exeter.

ARROW, K.J. 1993 Report of the NOAA panel on contingent valuation.


US Federal Register. 58(10): 4602-4614.

AYLWARD, B.A. 1993 The economic value of pharmaceutical


prospecting and its role in biodiversity conservation. LEEC
Discussion Paper 93-05. International Institute for Environment and
Development, Londres.

BARBIER, E., ADAMS, W., KIMMAGE, K. 1991 Economic valuation of


wetland benefits: The Hadejiia-Jama´are floodplain, Nigeria. London
Environmental Economics Centre, Paper 91-02, Londres.

BARBIER, E.B., BURGESS, J.C., FOLKE, C. 1994 Paradise Lost? The


ecological economics of biodiversity. Earthscan, Londres.

BARBIER, E.B., BURGESS, J.C.SWANSON, T., PEARCE, D.W. 1990


Elephants, economics and ivory. Earthscan, Londres.

BARNES, J. & PEARCE, D.W. 1991 The mixed use of habitat. Centre for
social and economic research on the global environment, Londres.

BISBY, F.A. 1995 Characterization of biodiversity. En: Heywood, V. &


Watson, R. (editores): Global biodiversity assessment, 21-106,
Cambridge University Press, Cambridge.

97
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

BISHOP, R.C. 1980 Endangered species: an economic perspective.


Transactions of the 45th North American Wildlife and Natural
Resources Conference, Wildlife Management Institute, Washington
D.C., 208-218.

BLAMEY, R.K. 1996 Citizens, consumers and contingent valuation:


Clarification and the expression of citizen values and issue-opinions.
En: Adamowicz, W.L., Boxall, P.C., Luckert, M.K., Phillips, W.E. &
White, W.A. (editores): Forestry, economics and the environment.
CAB International, Guildford.

BLAMEY, R. & COMMON, M. 1993 Stepping back from contingent


valuation. Centre for Resource and Environmental Studies, Australian
National University, Canberra.

BROWN, G.M. 1990 Valuation of genetic resources. En: Orians, G.H.,


Brown, G.M., Kunin, W.E., Swierbinski, J.E. (editores): The
preservation and valuation of biological resources, 203-228.
University of Washington Press, Seattle.

BROWN, G.M., LAYTON, D., LAZO, J. 1994 Valuing habitat and


endangered species. Discussion Paper 94-1 (Enero). Institute for
Economic Research, University of Washington.

BROWN, G. & HENRY, W. 1989 The economic value of elephants,


LEEC Discussion Paper 89-12, London Environmental Economics
Centre.

BURRILL, G.S. & LEE, K.B. 1992 Biotech 93: Accelerating


Commercialization: An Industry Annual Report 1.

CASTRO, R. 1994 The economic opportunity cost of wild land


conservation areas (EOCWCAs): the case of Costa Rica. Harvard
University, Mass.

98
Referencias bibliográficas

CHILD, B. 1990 Economic analysis of buffalo range ranch. En: Kiss, A.


(ed.) Living with wildlife resource management with local participation
in Africa. Banco Mundial, Washington D.C., 155-176.

DIXON, J.A. & SHERMAN, P.B. 1990 Economics of protected areas, a


new look at the benefits and costs. Earthscan, Londres.

ELLIS, G.M. & FISHER, A.C. 1987 Valuing the environment as input.
Journal of Environmental Management 25, 149-156.

ENDRES, A. & QUERNER, I. 1993 Die Ökonomie natürlicher


Ressourcen. Wissenschaftliche Buchgesellschaft Darmstadt.

FARNSWORTH, N.R. & SOEJARTO, D.D. 1985 Potential


consequences of plant extinction in the United States on the current
and future availability of prescription drugs. Economic Botany 39 (3):
231-240.

GLOWKA, L., BURHENNE-GUILMIN, F., SYNGE, H., MCNEELY, J.A.


& GÜNDLING, L. 1994 A guide to the Convention on Biological
Diversity. Environmental Policy and Law Paper No.30, IUCN,
Cambridge.

Goldstein, J.H. 1971 Competition for wetlands in the Midwest: An


economic analysis. Johns Hopkins University Press for Resources
for the Future, Baltimore - Londres.

GUARINO, L., RAMATHA RAO, V. & REID, R. 1995 Collecting plant


genetic diversity. CAB International, Wallingford and University
Press, Cambridge.

HAMPICKE, U. 1991 Naturschutz-Ökonomie. Ulmer Verlag Stuttgart.

HARTWICK, J.M. 1977 Intergenerational equity and the investing of rents


from exhaustible resources. American Economic Review 66, 972-974.

99
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

IMMLER, H. 1989 Vom Wert der Natur. Zur ökologischen Reform von
Wirtschaft und Gesellschaft. Natur in der ökonomischen Theorie, Teil
3. Westdeutscher Verlag, Opladen.

KRAMER, R. et al. 1993 Valuing a protected tropical forest: A case study


of Madagascar. Documento preparado para el IV Congreso Mundial
de Parques Nacionales y Áreas Protegidas, Caracas.

KRATTIGER, A. & LESSER, W. 1994 The „Facilitator“: A new


mechanism to strengthen the equitable and sustainable use of
biodiversity. En: SEI: A Clearing-house mechanism to promote and
facilitate technical and scientific cooperation, Estocolmo, 13-22.

KRUTILLA, J.V.& FISHER, A.C. 1975 The economics of natural


environments. Studies in the valuation of commodity and amenity
resources. Johns Hopkins University Press for Resources for the
Future, Baltimore - Londres - Washington D.C.

LAIRD, S. 1993 Contracts for biodiversity prospecting, En: Reid, W.


(ed.): Biodiversity prospecting: Using genetic resources for
sustainable development. World Resources Institute, Washington
D.C.

LIPPKE, B. 1996 Incentives for managing landscapes to meet non-timber


goals: Lessons from the Washington Landscape Management Project.
En: Adamowicz, W.L., Boxall, P.C., Luckert, M.K., Phillips, W.E. &
White, W.A. (editores): Forestry, economics and the environment.
CAB International, Guildford.

LOUVIERE, J.J. 1994 Relating stated preference measures and models to


choices in real markets. Documento preparado para el taller ‘Using
contingent valuation to measure non-market values’, del
Departamento de Energía y la Agencia de Protección Ambiental de
los Estados Unidos, Herndon, VA.

100
Referencias bibliográficas

MARGGRAF, R. & STREB, S. 1997 Ökonomische Bewertung der


natürlichen Umwelt. Spektrum Akademischer Verlag Heidelberg,
Berlín.

MARKL, H. 1995 Wohin geht die Biologie? Biologen in unserer Zeit 3, 33-
39.

MENDELSOHN, R. & M.BALICK 1995 The value of undiscovered


pharmaceuticals in tropical forests. Economic Botany 49(2): 223-228.

MUNASINGHE, M. 1993 Environmental economics and sustainable


development. World Bank Environment Paper 3. Washington D.C.

MYERS, N. 1989 Loss of biological diversity and its potential impact on


agriculture and food production. En: Pimentel, D. & Hall, C.W.
(editores): Food and natural resources. Academic Press, San Diego i.
al., 49-68.

OCDE 1998 Improving the environment through reducing subsidies, Part I


Summary and policy conclusions, París.

OCDE 1996 Saving Biological Diversity - Economic Incentives., OCDE,


París.

OLDFIELD, M.L. 1984 The value of conserving genetic resources, U.S.


Depto. del Interior, Servicio Nacional de Parques, Washington D.C.

PANAYOUTOU, T. 1994 Conservation of biodiversity and economic


development: The concept of transferable development rights. En:
Perrings, C. et al. (editores): Biodiversity conservation: Policy issues
and options. Kluwer Academic Press, Amsterdam.

PAULUS, S. 1995 Marktwirtschaftliche Instrumente der Umweltpolitik in


Entwicklungsländern. GTZ, Eschborn.

101
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

PEARCE, D.W. 1990 An economic approach to saving the tropical


forests. LEEC Paper 90-06, Londres.

PEARCE, D.M. & MORAN, D. 1994 The economic value of biodiversity.


Earthscan, Londres.

PERRINGS, C. & PEARCE, D.W. 1994 Threshold effects and incentives


for the conservation of biodiversity. Environmental and resource
economics 4:13-28.

PERSSON, A. 1994 Macroeconomic policies behind deforestation in


Costa Rica. En: Perrings, C., Mäler, K.-G., Folke, C., Holling, C.S.,
Jansson, b.-O. (editores): Biodiversity Conservation: Policy Issues
and Options. Kluwer Academic Press, Dordrecht.

PETERS, C.M., A.H. GENTRY & R.O. MENDELSOHN 1989 Valuation


of an Amazonian rain forest. Nature 229 (26 de junio de 1989): 655-
56.

PLOTKIN, M.J. 1992 Tropische Länder als Quelle neuer Produkte von
Industrie und Landwirtschaft - ein Ausblick. En: Wilson, E.O.
(editor): Ende der biologischen Vielfalt, Springer Verlag Heidelberg i.
al., 128-138.

PRESCOTT-ALLEN, C. & PRESCOTT-ALLEN, R. 1986 The first


resource. Wild species in the North American economy. Yale
University Press, New Haven - Londres.

PRINCIPE, P. 1989 The economic significance of plants and their


constituents as drugs. En: Wagner, H., Hikino, H., Farnsworth, N.
(editores): Economic and medicinal plant research. Academic Press,
Londres, 3:1-17.

RANDALL, A. 1991 The value of biodiversity. Ambio 20:64-68.

102
Referencias bibliográficas

REID, W.V. et al. 1993 A new lease of life. En: Reid, W. (ed.) Biodiversity
prospecting. World Resources Institute, Washington D.C.

REID, W.V. & MILLER, K.R. 1989 Keeping options alive: The scientific
basis for conserving biodiversity. World Resources Institute,
Washington D.C.

RUCK, C. 1990 Die ökonomischen Effekte von Nationalparks in


Entwicklungsländern. Verlag Pinus Druck, Augsburg.

RUITENBEEK, H.J. 1992 The rainforest supply price: A tool for


evaluating rainforest conservation expenditures. Ecological
Economics 6(1):57-78.

RUITENBEEK, H.J. 1989 Social cost benefit analysis of the Korup


project, Cameroon. Informe del WWF preparado para el World
Wide Fund for Nature y la República del Camerún, Londres.

SÁNCHEZ, V. & JUMA, C. 1994 Challenges and opportunities for south-


south-cooperation in implementing the Convention on Biological
Diversity. En: Krattiger, A.F., McNeely, J.A., Lesser, W.H., Miller,
K.R., St.Hill, Y., Senanayake, R. (editores): Widening perspectives
on biodiversity, IUCN, Gland, e International Academy of the
Environment, Ginebra, 305-307.

SOLOW, R.M. 1974 Intergenerational equity and exhaustible resources.


Review of Economic studies, Symposium on the economics of
exhaustible resources, 29-46.

SOLOW, R.M. 1986 On the inter-temporal allocation of natural resources.


Scandinavian Journal of Economics, 88 (1), 141-149.

103
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

STORK, N.E. & SAMWAYS, M.J. 1995 Inventorying and monitoring of


biodiversity. En: Heywood, V. & Watson, R. (editores): Global
biodiversity assessment, 453-544, Cambridge University Press,
Cambridge.

SWANSON, T.M. 1994 Biodiversity and intellectual property rights. En:


Perrings, C., Mäler, K.-G., Folke, C., Holling, C.S., Jansson, B.-O.
(editores): Biodiversity Loss: Ecological and economic issues.
Cambridge University Press, Cambridge.

TOBIAS, D. & MENDELSOHN, R. 1991 Valuing eco-tourism in a


tropical rain-forest reserve. Ambio 20:91-93.

TURNER, R.K., DENT, D., HEY, R.D. 1983 Valuation of the


environmental impact of wetland flood protection and drainage
schemes. Environment and Planning A 15:871-888.

UNEP 1993 Guidelines for country studies on biodiversity. UNEP, Nairobi.

VITOUSEK, P. et al. 1986 Human appropriation of products of


photosynthesis, BioScience 36(6)-368-373.

VOGEL, J.H. 1994 Genes for sale - Privatization as a conservation policy.


Oxford University Press, Oxford, Nueva York.

WELLS, M. 1992 Fiduciary funds to preserve biodiversity: Green funds.


Ecologia.

WICKE, L. 1986 Die ökologischen Milliarden. Kösel, Munich.

WILLIS, K.G., BENSON, J.F., SAUNDERS, C.M. 1988 The impact of


agricultural policy on the costs of nature conservation. Land
Economics 64:147-157.

WOODRUFF, D.S. & GALL, G.A.E. 1992 Genetics and conservation.


Agriculture, Ecosystems and Environment 42, 53-73.

104
Referencias bibliográficas

4.2 Bibliografía

Abramowitz, J. 1991 Investing in biodiversity: US research and conservation


efforts in developing countries. World Resources Institute, Washington
D.C.

Adamowicz, W. 1994 Stated preference methods for environmental valuation.


Documento presentado en la Conferencia Annual de la Agricultural
Economics Society, University of Exeter.

Adamowicz, W.L., Boxall, P.C., Luckert, M.K., Phillips, W.E. & White, W.A.
(editores) 1996 Forestry, economics and the environment. CAB
International, Guildford.

Adamowicz, W., Louviere, J., Williams, M. 1994 Combining stated and revealed
preference methods for valuing environmental amenities. Journal of
Environmental Management 26.

Adamowicz, W., Asafu-Adalaye, J., Boxall, P.C., Philips, W. 1991 Components of


the economic value of wildlife: An Alberta study. The Canadian Field
Naturalist. 105(3):423-429.

Adamowicz, W., Phillips, W., Pattison, W. 1986 The distribution of economic


benefits from Alberta duck production. Wildlife Society Bulletin, 14(4).

Adger, W.N., Brown, K. Cervigni, R., Moran, D. 1995 Total economic value of
forests in Mexico. Ambio 24: 286-296.

Altschul, S. v. Reis 1973 Drugs and foods from little-known plants. Harvard
University Press, Cambridge, Mass. & Londres.

Amacher, R.C., Tollison, R.D., Willett, T.D. 1972 The economics of fatal
mistakes: Fiscal mechanisms for preserving endangered predators. Public
Policy 20:411-441.

Anderson, D. & Williams, R.H. 1994 The cost effectiveness of GEF projects.
Documento de Trabajo GEF No. 6, Washington D.C.

Antonovic, J. 1990 Genetically based measures of uniqueness. En: Orians, G.H.,


Brown, G.M., Kunin, W.E., Swierzinbisnki, J.E. (editores): The preservation
and valuation of genetic resources, University of Washington Press, Seattle,
94-118.

105
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Appasamy, P. 1993 Role of non-timber forest products in a subsistence economy:


the case of a joint forestry project in India. Economic Botany, 47.

Arndt, U., Nobel, W. & Schweizer, B. 1987 Bioindikatoren. Möglichkeiten,


Grenzen und neue Erkenntnisse. Ulmer Verlag, Stuttgart.

Arrow, K.J. 1993 Report of the NOAA panel on contingent valuation. US Federal
Register. 58(10):4602-4614.

Arrow, K.J. & Fisher, A.C. 1974 Environmental preservation, uncertainty and
irreversibility. Quart. J. Econ. 88:312-319.

Asafu-Adjaye, J., Phillips, W., Adamowicz, W. 1989 Towards the measurement of


total economic value: The case of wildlife resources in Alberta. Staff paper
No. 89-16, Department of Rural Economy, University of Alberta,
Edmonton, Alberta.

Attfield, R. 1983 The ethics of environmental concern. Blackwell, Oxford.

Association of environmental and resource economists workshop 1992 Benefit


transfer: procedures, problems, and research needs. Case study synopsis.

Aylward, B.A. 1993 The economic value of pharmaceutical prospecting and its
role in biodiversity conservation. LEEC Discussion Paper 93-05.
International Institute for Environment and Development, Londres.

Aylward, B. & Barbier, E. 1992 Valuing environmental functions in developing


countries. Biodiversity and Conservation 1, 34-50.

Bachmura, F.T. 1971 The economics of vanishing species. Natural Resources


Journal 11:674-692.

Balandrin, M.F., Klocke, J.A., Wurtele, E.S., Bollinger, W.H. 1985 Natural plant
chemicals: sources of industrial and medicinal materials. Science
228:1154-1160.

Balick, M. & Mendelsohn, R. 1992 Assessing the economic value of traditional


medicines from tropical rainforests. Conserv. Biol. 6(1).

Banco Mundial 1994 Making development sustainable: The World Bank Group and
the environment. Washington D.C.

Banco Mundial 1994 Financing innovation and instruments. Contribution of the


investment portfolio of the pilot phase of the Global Environment Facility.
Documento presentado a la Conferencia Regional sobre la Conservación de
la Biodiversidad. Asian Development Bank, Junio 6-8. Washington D.C.

106
Referencias bibliográficas

Banco Mundial 1994 Implementing the convention on biological diversity. Toward


a strategy for World Bank assistance. Environment Department. Washington
D.C.

Banco Mundial 1994 Incorporating social assessment and participation into


biodiversity conservation projects. Global Environment Coordination
Division and Environment Department. Washington D.C.

Banco Mundial 1993 The environmental data book: A guide to statistics on the
environment and development. Washington D.C.

Banco Mundial 1992 Strategy for forest sector development in Asia. World Bank
Technical Paper 182. Washington D.C.

Banco Mundial 1992a The Banco Mundial and the environment: Fiscal 1992.
Washington D.C.

Banco Mundial 1992b World Development Report 1992. Development and the
environment. Oxford University Press, Nueva York.

Banco Mundial 1991 A World Bank operations evaluation study: Forestry: The
World Bank’s experience, Washington D.C.

Banco Mundial 1991a The forest sector. A World Bank policy paper. Washington
D.C.

Banco Mundial 1989 World debt tables, external debt of developing countries
1982-1987. Washington D.C.

Barbier, E. 1992 Rehabilitating gum arabic systems in Sudan: economic and


environmental implications. Environmental and Resource Economics 2,
341-358.

Barbier, E. 1994 Valuing environmental functions: tropical wetlands. Land


Economics 70(2), 155-173.

Barbier, E., Adams, W., Kimmage, K. 1991 Economic valuation of wetland


benefits: The Hadejiia-Jama´are floodplain, Nigeria. London Environmental
Economics Centre, Paper 91-02, Londres.

Barbier, E.B., Burgess, J.C., Folke, C. 1994 Paradise Lost? The ecological
economics of biodiversity. Earthscan, Londres.

Barbier, E.B., Burgess, J.C., Markandya, A. 1991 The economics of tropical


deforestation. Ambio 20:55-58.

Barbier, E.B., Burgess, J.C.Swanson, T., Pearce, D.W. 1990 Elephants, economics
and ivory. Earthscan, Londres.

107
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Barbier, E.B. 1989 The economic value of ecosystems: 1 Tropical wetlands LEEC,
Gatekeeper series No. 89-02.

Barbier, E.B. 1989 Economics, natural resources scarcity and development.


Conventional and alternative views. Earthscan.

Barrett, S. 1991 Economic instruments for climate change policy. En: OCDE
(editor): Environmental policy: How to apply economic instruments. París,
53-110.

Barrett, S. 1991a Economic analysis of international environmental agreements:


Lessons for a global warming treaty. En: OCDE (editor): Environmental
policy: How to apply economic instruments. París, 111-149.

Barnes, J. & Pearce, D.W. 1991 The mixed use of habitat. Centre for social and
economic research on the global environment, Londres.

Barstow, R. 1986 Non-consumptive utilization of whales. Ambio 15:155-163.

Bateman, I. et al. 1992 A contingent valuation study of the Norfolk Broads.


Informe para la National Rivers Authority.

Batie, S.S., Mabbs-Zeno, C.C. 1985 Opportunity costs of preserving coastal


wetlands: a case study of a recreational housing development. Land
economics 61:1-9.

Beck, G. 1990 Naturschutz - aus ökonomischer Sicht. Tesis de licenciatura ante la


Universidad Técnica de Berlín.

Benkert, W. 1987 Die Bedeutung des Gemeinlastprinzips in der Umweltpolitik.


Zeitschrift für Umweltpolitik und Umweltrecht 9:213-229.

Bennett, E. & Reynolds, C. 1993 The value of a mangrove area in Sarawak.


Biodiversity and Conservation 2:359-375.

Bennett, E. 1978 Threats to crop plant genetic resources. En: Hawkes, J.G.
(editor): Conservation and Agriculture, Duckworth, Londres, 113-122.

Bennett, J. 1984 Using direct questioning to value the existence benefits of


preserve natural areas. Australian Journal of Agricultural Economics 28
(2/3): 136-152.

Benson, J.F. & Willis, K.J. 1990 The aggregate value of non-priced recreation
benefits of the Forestry Commission Estate. Report to the Forestry
Commission, University of Newcastle Upon Tyne.

Bergstrom, J.C., Stoll, J.R., Titre, J.P., Wright, V.L. 1990 Economic value of
wetlands-based recreation. Ecological Economics 2:129-147.

108
Referencias bibliográficas

Bisby, F.A. 1995 Characterization of biodiversity. En: Heywood, V. & Watson, R.


(editores): Global biodiversity assessment, 21-106, Cambridge University
Press, Cambridge.

Binswanger, H. 1989 Brazilian policies that encourage deforestation in the


Amazon. Banco Mundial, Environment Department, Working Paper 16,
Washington D.C.

Bishop, R.C. 1982 Option value: An exposition and extension. Land economics
58:1-15.

Bishop, R.C. 1980 Endangered species: an economic perspective. Transactions of


the 45th North American Wildlife and Natural Resources Conference,
Wildlife Management Institute, Washington D.C., 208-218.

Bishop, R.C. 1978 Endangered species and uncertainty: The economics of a safe
minimum standard. American Journal of Agricultural Economics 61:10-18.

Blab, J., Forst, C., Klär, C., Niclas, G., Wey, H., Woithe, G. 1991
Förderprogramme zur Errichtung und Sicherung schutzwürdiger Teile von
Natur und Landschaft mit gesamtstaatlich repräsentativer Bedeutung. Natur
und Landschaft 66:3-9.

Blamey, R.K. 1996 Citizens, consumers and contingent valuation: Clarification


and the expression of citizen values and issue-opinions. En: Adamowicz,
W.L., Boxall, P.C., Luckert, M.K., Phillips, W.E. & White, W.A. (editores):
Forestry, economics and the environment. CAB International, Guildford.

Blamey, R. & Common, M. 1993 Stepping back from contingent valuation. Centre
for Resource and Environmental Studies, Australian National University,
Canberra.

Blum, E. 1993a Incentive policies and forest use in the Philippines. En: Repetto,
R. & Gillis, M. (editores): Public policies and the misuse of forest
resources, World Resources Institute, Washington D.C.

Blum, E. 1993b Making biodiversity conservation profitable: a case study of the


Merck/INBio agreement. Environment 35, 16-20, 38-45.

Boado, E. 1989 Incentive policies and forest use in the Philippines. En: Repetto,
R. & Gillis, M. (editores): Public policies and the misuse of forest
resources, World Resources Institute, Washington D.C.

Boadu, F.O. 1992 Contingent valuation for household water in rural Ghana. Journal
of Agricultural Economics 43(3).

109
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Bohn, A. & Byerlee, D. 1993 The wheat breeding industry in developing countries:
An analysis of investments and impacts. Centro Internacional de CIMMYT,
Singapore.

Bonus, H. 1986 Eine Lanze für den „Wasserpfennig“. Wider die Vulgärform des
Verursacherprinzips. Wirtschaftsdienst 1986/IX:451-455.

Bonus, H. 1981 Instrumente einer ökologieverträglichen Wirtschaftspolitik. En:


Binswanger, H.C., Bonus, H., Timmermann, M. (editores): Wirtschaft und
Umwelt, Kohlkammer Verlag Stuttgart, 84-163.

Bonus, H. 1980 Öffentliche Güter und der Öffentlichkeitsgrad von Gütern.


Zeitschrift für die gesamte Staatswissenschaft 136:50-81.

Bowers, J. 1988 Farm incomes and the benefit of environmental protection. En:
Collard, D., Pearce, D., Ulph, D. (editores): Economics, growth and
sustainable environments. Essays in memory of Richard Lecomber,
Macmillan, Basingstoke - Londres, 161-171.

Bowers, J. 1988a Cost-benefit analysis in theory and practice: Agricultural land


drainage projects. En: Turner, E.K. (editor): Sustainable environmental
management, Belhaven Press - Westview Press, Londres - Boulder, 265-
269.

Bowes, M.D. & Krutilla, J.V. 1989 Multiple-Use Management: The economics of
public forestlands. Resources for the Future, Washington, D.C.

Bowles, I.A. & Prickett, G.T. 1994 Reframing the green window: An analysis of
the GEF pilot phase approach to biodiversity and global warming and
recommendations for the operational phase. Conservation International,
Natural Resources Defense Council, Washington D.C.

Boyd, R. & Hyde, W. 1989 Forestry sector intervention: the impacts of public
regulation on social welfare. Iowa State University Press.

Boyle, K.J. & Bergstrom, J.C. 1992 Benefit transfer studies: myths, pragmatism,
and idealism. Water Resources Research 28(3):657-663.

Braatz, S.,, Davis, G., Rees, C. 1992 Conserving biological diversity: A strategy for
protected areas in the Asia-Pacific region. World Bank Technical Paper
193. Washington D.C.

Bradley, P.N. & McNamara, K. (editores) 1993 Living with trees: Policies for
forest management in Zimbabwe. World Bank Technical Paper 210,
Washington D.C.

110
Referencias bibliográficas

Bromley, D. & Cernea, M. 1989 The management of common property resources:


Some conceptual and operational fallacies. World Bank Discussion Paper
No. 57.

Brookshire, D.S. & Neill, H.R. 1992 Benefit transfers: Conceptual and empirical
issues. Water Resources Research 28(3):651-655.

Brookshire, D.S., Eubanks, L.S., Randall, A. 1983 Estimating option prices and
existence values for wildlife resources. Land Economics 59:1-15.

Brookshire, D.S., David, S., Ives, B., Schulze, W. 1976 The valuation of aesthetic
preferences. Journal of environmental economics and management
3(3):325-346.

Browder, J.O. 1988 The social costs of rainforest destruction. Interciencia 13(2).

Browder, J.O. 1988a Public policy and deforestation in the Brazilian Amazon. En:
Repetto, R. & Gillis, M. (editores): Public policies and the misuse of forest
resources, World Resources Institute, Washington D.C.,

Brown, G.M. 1990 Valuation of genetic resources. En: Orians, G.H., Brown, G.M.,
Kunin, W.E., Swierbinski, J.E. (editores): The preservation and valuation of
biological resources, 203-228. University of Washington Press, Seattle.

Brown, G.M., Layton, D., Lazo, J. 1994 Valuing habitat and endangered species.
Discussion Paper 94-1 (Enero). Institute for Economic Research,
University of Washington.

Brown, G. & Henry, W. 1989 The economic value of elephants, LEEC Discussion
Paper 89-12, London Environmental Economics Centre.

Brown, G. & Goldstein, J.H. 1984 A model for valuing endangered species.
Journal of environmental economics and management 11:303-309.

Brown, K. 1992 Carbon sequestration and storage in tropical forests. Centre for
Social and Economic Research on the Global Environment, Discussion
Paper 92, University of East Anglia and University College London,
Norwich y Londres.

Brown, K. & Goldin, I. 1992 The future of agriculture: Developing country


implications. Development Centre Studies, OCDE, París.

Brown, K., Pearce, D.W., Perrings, C., Swanson, T. 1993 Economics and the
conservation of biological dive rsity. Documento de Trabajo GEF 2.
Washington D.C.

Burrill, G.S. & Lee, K.B. 1992 Biotech 93: Accelerating Commercialization: An
Industry Annual Report 1.

111
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Callicott, J.B. 1986 On the intrinsic value of nonhuman species. En: Norton, B.G.
(editor): The preservation of species. University Press, Princeton, 138-172.

Cameron, T.A. & Quiggin, J. 1994 Estimation using contingent valuation data from
a ‘dichotomous choice with follow-up’ questionnaire. Journal of
Environmental Economics and Management 27, 218-234.

Carson, R. et al. 1992 A contingent valuation study of lost passive values resulting
from the Exxon Valdez oil spill. Informe ante el Fiscal General del estado
de Alasca.

Carter, M. 1987 Economic and socio-economic impacts of the Thorns Starfish on


the Great Barrier Reef. Informe ante la Great Barrier Reef Marine Park
Authority, Institute of Applied Environmental Research, Griffith University,
Brisbane.

Castro, R. 1994 The economic opportunity cost of wild land conservation areas
(EOCWCAs): the case of Costa Rica. Harvard University, Mass.

Cernea, M. 1993 The sociologist’s approach to sustainable development. Finance


and Development 30(4):11-13.

Cervigni, R. 1993 Biodiversity, incentives to deforest and tradable development


rights. GEC working paper 93-07, Centre for Social and Economic Research
on the Global Environment, University of East Anglia, University College
London.

Cervigni, R. 1993a Estimating the benefits of plant genetic resources for food and
agriculture: Suggested approaches. Centre for Social and Economic
Research on the Global Environment, University College London y
University of East Anglia.

Cesario, F.J. 1976 Value of time in recreation benefit studies. Land economics
52:32-41.

Child, B. 1990 Economic analysis of buffalo range ranch. En: Kiss, A. (editor):
Living with wildlife resource management with local participation in Africa.
Banco Mundial, Washington D.C., 155-176.

Child, B. 1990a Assessment of wildlife utilization as a land use option in the semi-
arid rangelands of Southern Africa. En: Kiss, A. (editor): Living with
wildlife. Wildlife resource management with local participation in Africa.
Banco Mundial, Washington D.C., Annex 3:193-204.

Chopra, K. 1993 The value of non-timber forest products: an estimate from India.
Economic Botany 47 (3), 251-257.

112
Referencias bibliográficas

Cicchetti, C.J., Fisher, A., Smith, V.K. 1971 An econometric evaluation of a


generalized consumer surplus measure: The mineral king controversy.
Econometrica 39: 813-827.

Cicchetti, C.J. & Freeman, A.M. 1971 Option demand and consumer surplus:
Further comment. Quarterly Journal of Economics 85:528-539.

Ciriacy-Wantrup, S.v. 1952 Resource conservation economics and politics.


University of California, Division of Agricultural Sciences, Berkeley y Los
Angeles.

Clark, C.W. 1976 Mathematical bio-economics: The optimal management of


renewable resources. John Wiley, Nueva York.

Cleaver, K., Munasinghe, M., Dyson, M., Egli, N., Peuker, A., Wencelius, F.
(editores): 1992 Conservation of West and Central African rainforests.
World Bank Environment Paper 1. Washington D.C.

Cline, W. 1992 The economics of global warming. International Institute for


International Economics, Washington D.C.

Collard,D., Pearce, D., Ulph, D. (editores) 1988 Economics, growth and


sustainable environments. Essays in memory of Richard Lecomber,
Macmillan, Basingstoke - Londres.

Common, M. & Perrings, C. 1992 Towards an ecological economy of


sustainability. Ecological economics 6, 7-34.

Cooper, D., Vellvé, R., Hobbelink, H. (editores) 1992 Growing diversity: Genetic
resources and local food security. Intermediate Technology Publications,
Londres.

Cornes, R. & Sandler, T. 1986 The theory of externalities, public goods and club
goods. Cambridge University Press, Cambridge, R.U., Nueva York, Port
Chester, Melbourne, Sydney.

Cornia, G.A., Jolly, R., Stewart, F. (editores) 1989 Adjustment with a human face.
Oxford University Press, Nueva York.

Costanza, R. & Daly, H.E. 1987 Toward an ecological economics. Ecological


Modeling 38:1-7.

Costanza, R., Farber, S., Maxwell, J. 1989 Valuation and management of wetland
ecosystems. Ecological Economics 1(4):335-362.

Cummings, R.G., Brookshire, D.S., Schulze, W.D. 1986 Valuing public goods. An
Assessment of the contingent valuation method. Rowman & Allanheld,
Totowa, N.J.

113
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Danielson, L.E., Leitch, J.A. 1986 Private versus public economics of prairie
wetland allocation. Journal of Environmental Economics and Management
13(1).

Dasgupta, A.K. & Pearce, D.W. 1978 Cost-benefit analysis, theory and practice.
Macmillan, Londres - Basingstoke.

Davis, S.G. (ed.) 1993 Indigenous views of land and the environment. World Bank
Discussion Paper 188. Washington S.C.

Davis, S., Castilleja, G., Poole, P.J., Geisler, C. (editores) 1993 The social
challenge of biodiversity conservation. Documento de Trabajo GEF 1,
Washington D.C.

Deacon, R. & Murphy, P. 1992 The structure of an environmental transaction: the


Debt-for-Nature Swap. Department of Economics, University of California
en Santa Barbara.

Decker, D.J. & Goff, G.R. (editores) 1987 Valuing wildlife. Economic and social
perspectives. Westview Press, Boulder - Londres.

deGroot, R. 1992 Functions and values of protected areas: A comprehensive


framework for assessing the benefits of protected areas to human society.
Climate Change Research Centre, Agricultural University, Wageningen.

deLacy, T. & Lockwood, M. 19?? Estimating the non-market values of nature


conservation resources Australia. Charles Sturt University, Albury,
Australia.

Desvousges, W.H., Gable, A.R., Dunford, R.W., Hudson, S. 1993 Contingent


valuation: the wrong tool to measure passive-use losses. Choices II:9-11

Dewees, P.A. 1993 Tress, land, and labor. World Bank Environment Paper 4.
Washington D.C.

Diamond, A.W. & Filion, F.L. (editores) 1987 The value of birds. ICBP Technical
Publication No.6, IUCN, Cambridge.

Dinerstein, E. & Wikramanayake, E. 1993 Beyond hotspots: how to prioritise


investments to conserve biodive rsity in the Indo-Pacific region. Conserv.
Biol. 7(1):53-65.

Dixon, J.A., Scura, L.F., van´t Hof, T. 1993 Meeting ecological and economic
goals: Marine parks in the Caribbean. Ambio 22(2-3): 117-125.

Dixon, J.A. & Sherman, P.B. 1991 Economics of protected areas. Ambio 20: 68-
74.

114
Referencias bibliográficas

Dixon, J.A. & Sherman, P.B. 1990 Economics of protected areas, a new look at the
benefits and costs. Earthscan, Londres.

Dogse, P. & von Droste, B. 1990 Debt for nature exchanges and biosphere
reserves. UNESCO, París.

Downes, D.R. 1993 New diplomacy for the biodiversity trade: Biodiversity,
biotechnology and intellectual property in the Convention on Biological
Diversity. Versión preliminar. Washington D.C.

D´Silva, E. & Appanah, S. 1993 Forestry management for sustainable development.


EDI Policy Seminar Report 32. Banco Mundial, Washington D.C.

Duke, J.A. 1976 Economic appraisal of endangered plant species. Phytologica


34:21-27.

Durning, A.B. 1989 Poverty and the environment: Reversing the downward spiral.
Worldwatch Paper 92, Worldwatch Institute, Washington D.C.

Ebenroth, C.T. & Bühler, S. 1990 Verschuldungskrise und Umweltschutz - Debt-


for-Nature-Swaps, eine Lösung für zwei Probleme? Natur und Recht 6:260-
266.

Ehrlich, P.R. & Ehrlich, A.H. 1992 The value of biodiversity. Ambio 21(3).

Ellis, G.M. & Fisher, A.C. 1987 Valuing the environment as input. Journal of
Environmental Management 25, 149-156.

Eltringham, S.K. 1984 Wildlife resources and economic development. John


Wiley, Chichester i. al.

Endres, A. 1985 Umwelt- und Ressourcenökonomie. Erträge der Forschung 229,


Wissenschaftliche Buchgesellschaft Darmstadt.

Endres, A. & Querner, I. 1993 Die Ökonomie natürlicher Ressourcen.


Wissenschaftliche Buchgesellschaft Darmstadt.

English, J., Tiffen, M., Mortimer, M. 1993 Land resource management in


Machakos district, Kenya 1930-1990. World Bank Environment Paper 5,
Washington D.C.

Evenson, R.E. 1991 Genetic resources: assessing economic value. En: Vincent, J.,
Crawford, E., Hoehn, J. (editores): Valuing environmental benefits in
developing economies. Actas de seminarios que tuvieron lugar de febrero a
mayo de 1990 en la Michigan State University, Special Report No. 29.

115
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Faeth, P., Cort, C., Livernash, R. 1994 Evaluating the carbon sequestration benefits
of forestry projects in less developed countries. World Resources Institute,
Washington D.C.

Fankhauser, S. 1992 A point estimate of the economic damage from global


warming. Centre for Social and Economic Research on the Global
Environment. CSERGE Discussion Paper 92, University of East Anglia y
University College London, Norwich y Londres.

Fankhauser, S. 1994 The social costs of greenhouse gas emissions: an expected


value approach. The Energy Journal 15(2).

Farber, S. & Costanza, R. 1987 The value of coastal wetlands for protection of
property against hurricane wild damage. Journal of Environmental
Economics and Management, 14:143-151.

Farnsworth, N.R. 1988 Screening plants for new medicines. En: Wilson, E.O.
(editor): Biodiversity, National Ac ademy Press, Washington D.C., 83-97.

Farnsworth, N.R. & Soejarto, D.D. 1985 Potential consequences of plant


extinction in the United States on the current and future availability of
prescription drugs. Economic Botany 39 (3): 231-240.

Favre, D.S. 1989 International trade in endangered species. A guide to CITES.


Martinus Nijhoff, Dordrecht i. al.

Fearnside, P.M. 1990 The rate and extent of deforestation in Brazilian Amazonia.
Environmental Conservation 17:213-226.

Festl, J. 1980 Kosten-Nutzen-Analyse von Meliorationen und Kultivierung.


Disertación en Hohenheim.

Findeisen, C. 1991 Natural products research and the potential role of the
pharmaceutical industry in tropical forest conservation. Rainforest Alliance,
Nueva York.

Fisher, A.C. & Krutilla, J.V. 1974 Valuing long run ecological consequences and
irreversiblilities. Journal of environmental economies and management
1:96-108.

Fisher, A.C. & Hanemann, W.M. 1985 Endangered species: The economies of
irreversible damage. En: Hall, D.O., Myers, N., Margaris, N.S. (editores):
Economies of ecosystem management. Junk Publications, Dordrecht i. al.,
129-138.

Fitzgerald, S.G. 1986 World Bank pledges to protect wild lands. BioScience
36:712-715.

116
Referencias bibliográficas

Freeman, A.M. III 1984 The quasi-option value of irreversible development.


Journal of Environmental Economics and Management 11:292-295.

Freeman, A.M. III 1979 The Benefits of environmental improvement: Theory and
practice. Johns Hopkins University Press, Baltimore.

French, H. 1994 Umgestaltung der Weltbank. En: Brown, L.R. (editor): Zur Lage
der Welt 1994. Fischer, Frankfurt, 211-244

Frey, R.L. & Blöchinger, H. 1991 Schützen oder Nutzen. Ausgleichszahlungen im


Natur- und Landschaftsschutz. Rüegger, Chur - Zurich.

Furtado, J. 1990 Biological diversity: Global conservation needs and costs.


Environment Programme Report, Centre for Integrated Development,
Londres.

Gámez, R. et al. 1993 Costa Rica’s conservation program and National


Biodiversity Institute (INBio). En: Reid, W. et al. 1993 Biodiversity
prospecting: Using genetic resources for sustainable development. World
Resources Institute, Washington D.C.

Gans, O. & Margraf, R. 1997 Kosten-Nutzen-Analyse und ökonomische


Politikbewertung, Band I: Wohlfahrtsmessung. Betriebswirtschaftliche
Investitionskriterien. Springer, Berlin, Nueva York, Heidelberg.

Germann, D. 1989 Erlauben die defizitären Wirtschaftsergebnisse eine


unveränderte Beibehaltung der forstpolitischen Zielsetzung? Ein
Diskussionsbeitrag - am Beispiel der Hessischen Landesforstverwaltung.
Forstarchiv 60:219-222.

Gillis, M. 1988 Indonesia: Public policies, resource management and the tropical
forest. En: Repetto, R. & Gillis, M. (editores): Public policies and the
misuse of forest resources, World Resources Institute, Washington D.C.

Gillis, M. 1988a Malaysia: Public policies and the tropical forest. Repetto, R. &
Gillis, M. (editores): Public policies and the misuse of forest resources,
World Resources Institute, Washington D.C.

Gillis, M. 1988b West Africa: Resource management policies and the tropical
forest. Repetto, R. & Gillis, M. (editores): Public policies and the misuse of
forest resources, World Resources Institute, Washington D.C.

Global Environmental Facility 1992 Memorandum of understanding on Norwegian


funding of pilot demonstration projects for joint implementation
arrangements under the climate convention GEF, Banco Mundial,
Washington D.C.

117
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Glowka, L., Burhenne-Guilmin, F., Synge, H., McNeely, J.A. & Gündling, L. 1994
A guide to the Conve ntion on Biological Diversity. Environmental Policy
and Law Paper No.30, IUCN, Cambridge.

Godoy, R. & Bawa, K. 1993 The economic value and sustainable harvest of plants
and animals from the tropical rainforest: Assumptions, hypotheses, and
methods. Economic Botany 47(3):215-219.

Godoy, R., Lubowski, R., Markandya, A. 1993 A method for the economic
valuation of non-timber tropical forest products. Economic Botany
47(3):220-233.

Gödde, M. 1990 Unternehmen als Sponsoren. Umwelt (VDI) 20:632-634.

Goldstein, J.H. 1971 Competition for wetlands in the Midwest: An economic


analysis. Johns Hopkins University Press for Resources for the Future,
Baltimore - Londres.

Goodland, R.J.A. 1988 A major new opportunity to finance the preservation of


biodiversity. En: Wilson, E.O. (editor): Biodiversity. National Academy
Press, Washington D.C.

Goodland, R.J.A. & Webb, M. 1987 The management of cultural property in World
Bank assisted projects. World Bank Technical Paper 62.

Gradwohl, J. & Greenberg, R. 1988 Saving the tropical forests. Earthscan,


Londres.

Green, R.M. 1977 Intergenerational distributive justice and environmental


responsibility. BioScience 27:260-265.

Grimes, A. et al. 1993 Valuing the rainforest: The economic value of non-timber
forest products in Ecuador. Yale School of Forestry and Environmental
Studies, New Haven.

GTZ 1997 Bodenrecht und Bodenordnung, Eschborn.

GTZ 1993 Die Rolle von Abreizen bei der Anwendung von RMSH als
Vorgehensweise.

Guarino, L., Ramatha Rao, V. & Reid, R. 1995 Collecting plant genetic diversity.
CAB International, Wallingford y University Press, Cambridge.

Gutierrez, B. & Pearce, D.W. 1992 Estimating the environmental benefits of the
Amazon forest: an inter-temporal valuation exercise. Documento de trabajo
GEC 92-44, Centre for Social and Economic Research on the Global
Environment, University College London y University of East Anglia,
Londres y Norwich.

118
Referencias bibliográficas

Hall, P. & Bawa, K. 1993 Methods to assess the impact of extraction of non-
timber tropical forest products on plant populations. Economic Botany
47(3):234-247.

Hampicke, U. 1991 Naturschutz-Ökonomie. Ulmer Verlag Stuttgart.

Hampicke, U. 1991a Neoklassik und Zeitpräferenz - der Diskontierungsnebel. En:


Beckenbach, F. (ed.): Die ökologische Herausforderung für die
ökonomische Theorie. Metropolis, Marburg, 127-149.

Hampicke, U. 1990 Naturschutzfinanzierung. En: Ganzheitliche Naturschutzpolitik


statt Reservatsdenken. Dokumentation einer Anhörung der Grünen im
Bundestag, Bonn, 42-64.

Hampicke, U. 1990a Ökologische und ökonomische Probleme der


Grünlandextensivierung. Naturschutz in Nordhessen 11:31-46.

Hampicke, U. 1990b Naturschutz als eine regionalwirtschaftliche Option. En:


deHaen, H. & Isermeyer, F. (editores): Ländlicher Raum im Abseits? Vauk,
Kiel, 178-193.

Hampicke, U. 1989 Was darf und was kann monetarisiert werden? En:
Möglichkeiten und Grenzen der Monetarisierung von Natur und Umwelt.
Schriftenreihe des IÖW 88-20, Institut für Ökologische
Wirtschaftsforschung, Berlín, 19-41.

Hampicke, U. 1989a Volks- und betriebswirtschaftliche Kosten des Naturschutzes


in der Landwirtschaft und Möglichkeiten der Finanzierung. Laufener
Seminarbeiträge 87-3: 60-84.

Hampicke, U. 1988 Extensivierung der Landwirtschaft für den Naturschutz - Ziele,


Rahmenbedingungen und Maßnahmen. Schriftenreihe Bayer. Landesamt für
Umweltschutz 84:9-35.

Hampicke, U. 1987 Naturschutz als ökonomisches Problem. Zeitschrift für


Umweltpolitik und Umweltrecht 10:157-195.

Hampicke, U. 1987a Ökologische Vorgaben für die Agrarökonomie. Umrisse


einer Landwirtschaft ohne Ausrottung von Arten. Internationales Institut für
Umwelt und Gesellschaft, Berlín.

Hampicke, U. 1985 Die volkswirtschaftlichen Kosten des Naturschutzes in Berlin.


Ökonomische Begleitstudie zu den „Grundlagen für das
Artenschutzprogramm Berlin“. Technische Universität, Berlín.

Hampicke, U. 1985a Die voraussichtlichen Kosten einer naturschutzgerechten


Landwirtschaft, Kali-Briefe17:701-714.

119
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Hampicke, U. 1983 Die voraussichtlichen Kosten einer umweltgerechten


Landwirtschaft. Landschaft+Stadt 15:171-183.

Hampicke, U., Horlitz,T., Kiemstedt, H., Tampe, K., Timp, D., Walters, M. 1991
Kosten und Wertschätzung des Arten- und Biotopschutzes. Erich Schmidt
Verlag, Berlín.

Hanemann, W.M. 1991 Willingness to pay and willingness to accept: How much
can they differ? American Economic Review 81(3):663-647.

Hanemann, W.M. 1989 Welfare evaluations in contingent valuation: Experiments


with discrete responses. American Journal of Agricultural Economics
66(3):32-34.

Hanemann, W.M 1988 Economics and the preservation of biodiversity. En:


Wilson, E.O. (editor): Biodiversity. National Academy Press, Washington
D.C., 193-199.

Hanley, N.D. 1990 Valuation of environmental effects: final report - stage one.
Industry Department of Scotland y Scottish Development Agency.

Hanley, N.D. & Craig, S. 1991 Wilderness development decisions and the
Krutilla-Fisher model: the case of Scotland’s flow country. Ecological
Economics 4(2):145-162.

Hanley, N.D. & Spash, C. 1993 Preferences, information and biodiversity


preservation. Discussion papers in Economics 93-12, Department of
Economics, University of Stirling.

Hanusch, H. 1987 Nutzen-Kosten-Analyse. Vahlen, Munich.

Hartje, V.J. 1986 Zur Erhaltung genetischer Ressourcen. Zeitschrift für


Wirtschafts- und Sozialwissenschaften 106: 229-252.

Hartwick, J.M. 1977 Intergenerational equity and the investing of rents from
exhaustible resources. American Economic Review 66, 972-974.

Hausman, J.A., Leonard, G.K., McFadden, D. 1992 Assessing use value losses due
to natural resource injury. Cambridge Economics Inc., Cambridge, Mass.

Heath, R. 1992 Wildlife based tourism in a developing country: The economic


implications. University of Zimbabwe.

Heath, R. 1992a The growth in wildlife based tourism in Zimbabwe. University of


Zimbabwe.

120
Referencias bibliográficas

Heberlein, T.A. 1986 Measuring resource values: the reliability and validity of
dichotomous contingent valuation measures. Documento presentado para la
Reunión de la American Sociological Association, Nueva York.

Hecht, S., Norgaard, R., Possio, G. 1988 The economics of cattle ranching in
Eastern Amazonia. Interciencia 13(5):233-239.

Henry, C. 1974 Investment decisions under uncertainty: The „irreversibility


effect“. American Economic Review 64:1006-1012.

Hof, J. & King, D. 1991 Recreational demand by tourists for saltwater beach days:
Comment. Journal of Environmental Economics and Management 22:281-
291.

Hoffmann, H. & Wohlgschaft, M. 1990 Ökonomische Betrachtungen zum


Bayerischen Kulturlandschaftsprogramm. Berichte über Landwirtschaft
68:196-215.

Hohl, A. & Tisdell, C. 1993 How useful are environmental safety standards in
economics? - The example of safe minimum standards for protection of
species. Biodiversity and Conservation 2:168-181.

Huber, R. 1992 Case studies showing cost/benefit of tourism and protected areas
development. Documento presentado ante el IV Congreso Mundial de
Parques nacionales y Áreas Protegidas, Caracas.

Hundloe, T.J. 1990 Measuring the value of the Great Barrier Reef. Australian
Parks and Recreation 26(3):11-15.

Hundsdorfer, M. 1989 Kostendatei für Maßnahmen des Naturschutzes und der


Landschaftspflege. Materialien 55, Bayerisches Staatsministerium für
Landesentwicklung und Umweltfragen, Munich.

Imber, D., Stevenson, G., Wilks, L. 1991 A contingent valuation survey of the
Kakadu conservation zone. Resource Assessment Commission, Research
Paper No. 3, Canberra.

Immler, H. 1993 Welche Wirtschaft braucht die Natur? Frankfurt a.M.

Immler, H. 1989 Vom Wert der Natur. Zur ökologischen Reform von Wirtschaft
und Gesellschaft. Natur in der ökonomischen Theorie, Teil 3.
Westdeutscher Verlag, Opladen.

Industrial Biotechnology Association 1992 U.S. Biotechnology industry fact


sheet.

IUCN, The Nature Conservancy, WWF 1994 First global forum on environmental
funds. Cambridge, R.U.

121
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Jansen, D.J. 1990 Sustainable wildlife utilization in the Zambezi valley of


Zimbabwe: Economic, ecological and political tradeoffs. Project paper no
10, WWF Multispecies Project, Harare.

Jarass, L., Niesslein, E., Obermair, G.M. 1989 Von der Sozialkostentheorie zum
umweltpolitischen Steuerungsinstrument. Nomos, Baden-Baden.

Johansson, P.-O., Kristrom, B., Maler, K. 1989 Welfare evaluations in contingent


valuation: Experiments with discrete response data: Comment. American
Journal of Agricultural Economics.

Johansson, P.-O. & Löfgren, K.G. 1985 The economics of forestry and natural
resources. Basil Blackwell, Oxford.

Kahnemann, D., Knetsch, J.L. 1992 Valuing public goods: The purchase of moral
satisfaction, Journal of Environmental Economics and Management
22(1):57-70.

Kahneman, D., Knetsch, J.L., Thaler, R.H. 1990 Experimental tests of the
endowment effect and the coarse theorem. Journal of Political Economy
98(6).

Karl, H. & Klemmer, P. 1988 Ökonomische und ökologische Agrarmarktreform


und Ansatzpunkte für die Vergabe von Bewirtschaftungsbeiträgen.
Zeitschrift für Umweltpolitik und Umweltrecht 11:339-359.

Katzman, M. & Cale, W. 1990 Tropical forest preservation using economic


incentives: A proposal of conservation easements. BioScience 40(11):827-
832.

King, K. 1993 The incremental costs of global environmental benefits.


Documento de Trabajo GEF 5. Washington D.C.

King, K. 1993a Issues to be addressed by the GEF program for measuring


incremental costs for the environment. Documento de Trabajo GEF 8.
Washington D.C.

Kling, C.L. 1988 Comparing welfare estimates of environmental quality changes


from recreational demand models. Journal of Environmental Economics and
Management. 15(3):331-340.

Kling, C.L. 1987 A simulation approach to comparing multiple-site recreation-


demand models using Chesapeake Bay survey data. Marine Resource
Economics 4(2):95-109.

122
Referencias bibliográficas

Klockow, S. & Matthes, U. 1991 Umweltbedingte Folgekosten im Bereich


Freizeit und Erholung. Forschungsvorhaben 101 03 110/06 des
Umweltbundesamtes. Umweltbundesamt Berlin, Texte 4/91.

Knebel, B. & Krause, M. 1989 Gesamtwirtschaftliche Analyse der


Flurbereinigung. Tesis de licenciatura en Kassel.

Knetsch, J.L. & Sinden, J. 1984 Willingness to pay and compensation demanded:
Experimental evidence of an unexpected disparity in measures of value.
Quarterly Journal of Economics XCIX (3): 507-521.

Köhne, M. 1987 Auflagen zum Natur- und Wasserschutz: Rechtliche und


ökonomische Aspekte der Entschädigung. En: Landwirtschaft und Umwelt,
Schriften der Gesellschaft für Wirtschafts- und Sozialwissenschaften
23:347-360.

Kosmo, M. 1989 Commercial energy subsidies in developing countries. Energy


Policy 17:244-253.

Kramer, R. et al. 1993 Valuing a protected tropical forest: A case study of


Madagascar. Documento preparado para el IV Congreso Mundial de Parques
Nacionales y Áreas Protegidas, Caracas.

Krattiger, A. & Lesser, W. 1994 The „Facilitator“: A new mechanism to strengthen


the equitable and sustainable use of biodiversity. En: SEI: A Clearing-house
mechanism to promote and facilitate technical and scientific cooperation,
Stockholm, 13-22.

Krutilla, J.V.& Fisher, A.C. 1975 The economics of natural environments. Studies
in the valuation of commodity and amenity resources. Johns Hopkins
University Press for Resources for the Future, Baltimore - Londres -
Washington D.C.

Kuhlmann, F. & Müller, H. 1986 Zur ökonomischen Bewertung von


Naturschutzauflagen für den Landwirtschaftsbetrieb. Landwirtschaftsverlag
Hessen, Friedrichsdorf im Taunus.

Kuliopulos, H. 1990 Amazon Biodiversity. Science 248:1305.

Laird, S. 1993 Contracts for biodiversity prospecting, En: Reid, W. (editor):


Biodiversity prospecting: Using genetic resources for sustainable
development. World Resources Institute, Washington D.C.

Ledec, G. & Goodland, R. 1992 Harmonizing sustainable development with


conservation of wild lands. En: Kapoor-Vijay, P. & White, J. (editores):
Conservation biology: a training manual for biological diversity and genetic
resources. Commonwealth Science Council, Londres.

123
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Leibundgut, H. 1983 Führen naturnahe Waldbauverfahren zur


betriebsdwirtschaftlichen Erfolgsverbesserung? Forstarchiv 54:47-51.

Leslie, A.J. 1987 A second look at the economics of natural management systems
in tropical mixed forests. Unasylva 39(155):46-58.

Lever, H. & Huhne, C. 1987 Debt and danger. The world financial crisis. Penguin
Books, Middle Essex.

Lippke, B. 1996 Incentives for managing landscapes to meet non-timber goals:


Lessons from the Washington Landscape Management Project. En:
Adamowicz, W.L., Boxall, P.C., Luckert, M.K., Phillips, W.E. & White,
W.A. (editores): Forestry, economics and the environment. CAB
International, Guildford.

Loehmann, E.T. & De, V.H. 1992 Application of stochastic choice modeling to
policy analysis of public goods: A case study of air quality improvements.
Review of Economics and Statistics 64:474-480.

Loomis, J.B. 1990 Comparative reliability of the dichotomous choice and open
ended valuation techniques. Journal of Environmental Economics and
Management 18(1):78-85.

Loomis, J.B. 1989 Test-retest reliability of the contingent valuation method: A


comparison of general population and visitor response. American Journal of
Agricultural Economics, 71:76-84.

Loomis, J.B. 1988 Contingent valuation using dichotomous choice models.


Journal of Leisure Research 20(1):46-56.

Louviere, J.J. 1994 Relating stated preference measures and models to choices in
real markets. Paper prepared for the US Department of Energy and
Environmental Protection Agency workshop ‘Using contingent valuation to
measure non-market values’, Herndon, VA.

Lynne, G.D., Conroy, P., Prochaska, F.J. 1981 Economic valuation of marsh areas
for marine production processes. Journal of environmental economics and
management 8:175-186.

Mährlein, A. 1990 Einzelwirtschaftliche Auswirkungen von Naturschutzauflagen.


Vauk, Kiel.

Mäler, K.G. 1977 A note on the use of property values in estimating marginal
willingness to pay for environmental quality. Journal of environmental
economics and management 4(4): 355-369.

124
Referencias bibliográficas

Magrath, W. & Arens, P. 1989 The cost of soil erosion in Java: A natural resource
accounting approach. Environment Department, Working Paper No. 18,
Banco Mundial, Washington D.C.

Mahar, D. 1989 Government policies and deforestation in Brazil’s Amazon region.


Banco Mundial, Washington D.C.

Maille, P. & Mendelsohn, R. 1993 Valuing eco-tourism in Madagascar. Journal of


Environmental Management 38:213-218.

Marcondes, M. 1981 Adaptación de una metodología de evaluación económica,


aplicada al Parque Nacional Cahuita, Costa Rica. Centro Agronómico
Tropical de Investigación y Enseñanza (CATIE), Serie Técnica No. 9.

Marggraf, R. & Streb, S. 1997 Ökonomische Bewertung der natürlichen Umwelt.


Spektrum Akademischer Verlag; Heidelberg, Berlín.

Margulis, L. & Lovelock, J.E. 1974 Biological modulation of the Earth’s


atmosphere. Icarus 21:471-489.

Markandya, A. & Pearce, D.W. 1988 Environmental considerations and the choice
of the discount rate in developing countries. Banco Mundial, Environmental
Dept. Working Paper No. 3.

Markl, H. 1995 Wohin geht die Biologie? Biologen in unserer Zeit 3, 33-39.

Martinez-Alier, J. 1987 Ecological Economics. Basil Blackwell, Oxford.

Mateo, C.A.Q. (ed.) 1993 Debt-for-nature swaps to promote natural resource


conservation. FAO, Roma.

Mauksch, W. 1987 Der Naturschutzwert von einigen normalen agrarischen


Flurbereinigungsmaßnahmen. Landschaft + Stadt 19:136-143.

McConnell, K.E. & Strand, I.E. 1981 Measuring the cost of time in recreation
demand analysis. American Journal of Agricultural Economics 63:153-156.

McNeely; J.A. 1989 How to pay for conserving biological diversity. Ambio
18:303-313.

McNeely, J.A. 1988 Economics and biological diversity. Developing and using
economic incentives to conserve biological resources. IUCN, Gland.

McNeely, J.A. & Norgaard, R. 1991 Developed country policies and biological
diversity in developing countries. Agriculture, ecosystems and environments
42:194-204.

125
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

McNeely, J.A. & Tobias, R.J. 1991 Economic incentives for conserving biological
diversity in Thailand. Ambio 20(2):86-90.

Mendelsohn, R. & M.Balick 1995 The value of undiscovered pharmaceuticals in


tropical forests. Economic Botany 49(2): 223-228.

Mendelsohn, R.O., Hof, J., Petersen, G., Reed, J. 1992 Measuring recreation
values with multiple destination trips. American Journal of Agricultural
Economics 74(4):926-933.

Mendelsohn, R.O. & Tobias, R.J. 1991 Valuing eco-tourism in a tropical rainforest
reserve. Ambio 20(2):91-93.

Mercer, E., Kramer, R., Sharma, N. 1993 Estimating the nature tourism benefits of
establishing the Mantadia National Park in Madagascar. Centre for Resource
and Environmental Policy Research, Duke University, NC.

Miller, J.R. & Menz, F.C. 1979 Some economic considerations in wildlife
preservation. Southern Economic Journal 45:718-729.

Milner-Gulland, E.J. & Leader-Williams, N. 1992 A model of incentives for


illegal exploitation of rhinos and elephants: Poaching pays in Luangwa
Valley, Zambia. Journal of Applied Ecology 29.

Ministerio de Recursos Naturales, Energía y Minas, Costa Rica 1991 National


study of biodiversity: Costs, benefits and needs for financing and
conservation of biological diversity in Costa Rica.

Mintzer, I.M. 1993 Implementing the framework convention on climate change:


Incremental costs and the role of the GEF. Documento de Trabajo GEF No.
4. Washington D.C.

Mishan, E.J. 1981 Introduction to normative economics. Oxford University Press,


Nueva York - Oxford.

Mishan, E.J. 1976 Cost-benefit analysis. Praeger, Nueva York.

Mitchel, C. 1989 Economics and the environment: A case of small island states.
Prepared for the Caribbean Conservation Association Conference on
Economics of the Environment, Barbados.

Mitchell, R.C. & Carson, R.T. 1989 Using surveys to value public goods: The
contingent valuation method. Resources for the future, Washington D.C.

Mittermeier, R.A., Bowles, I.A., Cavalcanti, R.B., Olivieri, S., da Fonseca, G.A.B.
1994 A participatory approach to biodiversity conservation: The regional
priority setting workshop. Conservation International, Washington D.C.

126
Referencias bibliográficas

Montgomery, C., Brown, G.M., Adams, D. 1994 The marginal cost of species
preservation: The Northern Spotted Owl. Journal of Environmental
Economics and Management. 26(2):111-128.

Moran, D. 1994 Contingent valuation and biodiversity conservation in Kenyan


protected areas. Biodiversity and Conservation (en publicación).

Mooney, P. & Fowler, C. 1991 Die Saat des Hungers. Rowohlt, Hamburgo.

Morey, E.R., Shaw, W.D. & Rowe, R.D. 1991 A discrete-choice model of
recreational participation, site choice, and the activity valuation when
complete trip data are not available. Journal of Environmental Economics
and Management 20:181-201.

Munasinghe, M. 1993 Environmental economics and sustainable development.


World Bank Environment Paper 3. Washington D.C.

Munasinghe, M. 1992 Economic and policy issues in natural habitat and protected
areas. Banco Mundial, Washington D.C.

Munasinghe, M., Cruz, W., Warford, J. 1993 Are economy-wide policies good for
the environment? Finance and Development 30(3):40-43.

Myers, N. 1993 Questions of mass extinction. Biodiversity and Conservation 2:2-


17.

Myers, N. 1991 Biological diversity and global security. En: Bormann, F.H. &
Kellert, S.R. (editores) Ecology, economics, ethics: The broken circle.
Yale University Press.

Myers, N. 1991a Tropical forests: present status and future outlook. Climatic
Change 19:3-32.

Myers, N. 1991b Tropical forests and climate. Climatic change 19:1-2.

Myers, N. 1989 Loss of biological diversity and its potential impact on agriculture
and food production. En: Pimentel, D. & Hall, C.W. (editores): Food and
natural resources. Academic Press, San Diego i. al., 49-68.

Myers, N. 1983 A wealth of wild species, storehouse for human welfare.


Westview Press, Boulder.

Newcombe, K. & de Lucia, R. 1993 Mobilizing private capital against global


warming: a business concept and policy issues. Global Environmental
Facility, Washington D.C.

127
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

NOAA (National Oceanic and Atmospheric Administration) 1994 Oil pollution act
of 1990: Proposed regulations for natural resource damage assessments, US
Department of Commerce.

Nordhaus, W. 1991 To slow or not to slow: The economics of the greenhouse


effect. American Economic Review 81(2):920-937.

Nordhaus, W. 1991a A sketch of economics of the greenhouse effect. American


Economic Review 81(2):146-150.

Norgaard, R.B. 1987 The economics of biological diversity: Apologetics or


theory? En: Southgate, D.D. & Disinger, J.F. (editores): Sustainable
resource development in the Third World. Westview Press, Boulder -
Londres.

Norse, E.A. (ed.) 1993 Global marine biological diversity: A strategy for building
conservation into decision making. Island Press, Washington D.C.

Norton, B.G. 1986 On the inherent danger of undervaluing species. En: Norton,
B.G. (editor): The preservation of species, University Press, Princeton.

Norton, B.G. 1984 Environmental ethics and weak anthropocentrism.


Environmental Ethics 6:131-148.

Norton, B.G. 1982 Environmental ethics and nonhuman rights. Environmental


Ethics 4:17-36.

Norton, B.G. & Ulanowocz, R.E. 1992 Scale and biodiversity policy: A
hierarchical approach. Ambio 21(3):244-249.

Norton-Griffiths, M. & Southey, C. 1994 The opportunity costs of biodiversity


conservation: a case study of Kenya. Ecological Economics (en
publicación).

Noss, R.F., Cline, S., Csuti, B., Scott, M. 1992 Monitoring and assessing
biodiversity. En: Lykke, E. (editor): Achieving environmental goals: The
concept and practice of environmental performance review. Belhaven Press,
Londres.

Nutzinger, H.G. & Zahrnt, A. (editores) 1989 Ökosteuuern. Umweltsteuern und -


abgaben in der Diskussion. C.F.Müller, Karlsruhe.

Oberndörfer, D. 1989 Schutz der tropischen Regenwälder durch Entschuldung.


Schriftenreihe des Bundeskanzleramts, Bd.5, Beck, Munich.

OCDE 1998 Improving the environment through reducing subsidies, Part I


Summary and policy conclusions, París.

128
Referencias bibliográficas

OCDE 1991 Environmental policy: How to apply economic instruments. París.

OCDE 1991a Responding to climate change: Selected economic issues. París.

OCDE 1989 Environmental policy benefits: Momentary evaluation. Preparado por


Pearce, D.W. & Markandya, A. OCDE, París.

OCDE 1987 The economic value of biological diversity among medicinal plants.
Environment Directorate ENV/ECO/87.8. Preparado por P. Principe.
OCDE, París.

OCDE 1996 Saving Biological Diversity - Economic Incentives., OCDE, París.

O´Connor, S. & Langrand, O. 1992 Can wildlife pay its way in Madagascar? World
Wildlife Fund for Nature, Madagascar.

O´Hara, S. 1984 Externe Effekte der Stickstoffdüngung. Probleme ihrer


Bewertung und Ansätze zu ihrer Ve rminderung aus ökonomischer Sicht.
Vauk, Kiel.

Oldfield, M.L. 1984 The value of conserving genetic resources, U.S. Dept. of the
Interior, National Park Service, Washington D.C.

Padoch, C. & de Jong, W. 1989 Production and profit in agro-forestry: an example


from the Peruvian Amazon. En: Browder, J.G. (editor): Fragile lands of
Latin America: strategies for sustainable development. Westview Press,
Boulder.

Panayoutou, T. 1994 Conservation of biodiversity and economic development: The


concept of transferable development rights. En: Perrings, C. et al.
(editores): Biodiversity conservation: Policy issues and options. Kluwer
Academic Press, Amsterdam.

Paulus, S. 1995 Marktwirtschaftliche Instrumente der Umweltpolitik in


Entwicklungsländern. GTZ, Eschborn.

Pearce, D.W. 1994 Capturing global environmental values. Centre for Social and
Economic Research on the Global Environment. University College London
and University of East Anglia, Norwich and Londres.

Pearce, D.W. 1992 Discounting. En: Pearce, D.W., Whittington, J., Georgiou, S.
Manual of environmental projects and policy appraisal, OCDE, París.

Pearce, D.W. 1992a Assessing the social rate of return in temperate zone forestry.
Centre for Social and Economic Research on the Global Environment,
University College London and University of East Anglia, Norwich and
Londres.

129
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Pearce, D.W. 1991 Economic valuation and the natural world. Earthscan
Publications, Londres.

Pearce, D.W. (ed.) 1991a Blueprint 2: Greening the world economy. Earthscan
Publications, Londres.

Pearce, D.W. 1991b Economic valuation and the natural world. Centre for Social
and Economic Research on the Global Environment, University College
London y University of East Anglia, Norwich.

Pearce, D.W. 1991 Deforesting the Amazon: Toward an economic solution.


Ecodecision 1:40-49.

Pearce, D.W. 1990 An economic approach to saving the tropical forests.


Documento LEEC 90-06, Londres.

Pearce, D.W. 1987 Foundations of an ecological economics. Ecological


Modelling 38:9-18.

Pearce, D.W. 1986 Cost-benefit analysis. Macmillan, Basingstoke.

Pearce, D.W. et al. 1993 Mexico forestry and conservation sector review: sub-
study of economic valuation of forests. Report to Latin American Technical
Department, Banco Mundial, Washington D.C.

Pearce, D.W., Bann, C., Georgiou, S. 1992 The social costs of fuel cycles. Centre
for Social and Economic Research on the Global Environment, University
College London.

Pearce, D.W. & Barbier, E.B. 1987 Forest policy in Indonesia. Banco Mundial,
Washington D.C.

Pearce, D.W., Barbier, E.B., Markandya, A. 1990 Sustainable development. Oxford


University Press, Oxford - Nueva York.

Pearce, D.W., Markandya, A., Barbier, E.B. 1989 Blueprint for a green economy.
Earthscan, Londres.

Pearce, D.M. & Moran, D. 1994 The economic value of biodiversity. Earthscan,
Londres.

Pearce, D.W. & Nash, C.A. 1981 The social appraisal of projects. Macmillan,
Londres - Basingstoke.

Pearce, D.W. & Turner, R.K. 1990 Economics of natural resources and the
environment. Harvester Wheatsheaf, Nueva York i. al.

130
Referencias bibliográficas

Pearce, D.W. & Warford, J. 1992 World without end: Economics, environment
and sustainable development. Oxford University Press, Oxford - Nueva
York.

Pearsall, S.H. III 1984 In absentia benefits of nature preserves: A review.


Environmental Conservation 11:3-10.

Perrings, C. 1995 The economic value of biodiversity. En: Heywood, V., Watson,
R. (editores): Global Biodiversity Assessment, 823-914, Cambridge
University Press.

Perrings, C. & Pearce, D.W. 1994 Threshold effects and incentives for the
conservation of biodiversity. Environmental and resource economics 4:13-
28.

Persson, A. 1994 Macroeconomic policies behind deforestation in Costa Rica.


En: Perrings, C., Mäler, K.-G., Folke, C., Holling, C.S., Jansson, b.-O.
(editores): Biodiversity Conservation: Policy Issues and Options. Kluwer
Academic Press, Dordrecht.

Peters, C.M., A.H.Gentry & R.O.Mendelsohn 1989 Valuation of an Amazonian


rain forest. Nature 229 (26 de junio de 1989): 655-56.

Peterson, G.L. & Randall, A. (editores) 1984 Valuation of wildlands resource


benefits. Westview Press, Boulder - Londres.

Phillips, W.E., Adamowicz, W.L., Asafu-Adjaye, J., Boxall, P.C. 1989 An


economic assessment of the wildlife resource in Alberta. Project Report no
89-04, Alberta Recreation, Parks and Wildlife Foundation.

Pinedo-Vasquez, M., Zarin, D., Jipp, P. 1992 Economic returns from forest
conversion in the Peruvian Amazon. Ecological Economics 6:163-173.

Pister, W.P. 1979 Endangered species: Costs and benefits. Environmental Ethics
1:341-352.

Plotkin, M.J. 1992 Tropische Länder als Quelle neuer Produkte von Industrie und
Landwirtschaft - ein Ausblick. En: Wilson, E.O. (editor): Ende der
biologischen Vielfalt, Springer Verlag Heidelberg i. al., 128-138.

Porter, R.C. 1982 The new approach to wilderness preservation through benefit-
cost analysis. Journal of Environmental Economics and Management 9:59-
80.

Posner, B. et al. 1981 Economic impact analysis for the Virgin Island Resources
Foundation. St. Thomas, US Virgin Islands.

131
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Prescott-Allen, C. & Prescott-Allen, R. 1986 The first resource. Wild species in


the North American economy. Yale University Press, New Haven - Londres.

Principe, P. 1991 Monetizing the pharmacological benefits of plants. US


Environmental Protection Agency, Washington D.C.

Principe, P. 1989 The economic significance of plants and their constituents as


drugs. En: Wagner, H., Hikino, H., Farnsworth, N. (editores): Economic and
medicinal plant research. Academic Press, Londres, 3:1-17.

Randall, A. 1991 The value of biodiversity. Ambio 20:64-68.

Randall, A. 1988: What mainstream economists have to say about the value of
biodiversity. En: Wilson, E.O. (editor): Biodiversity. National Academy
Press, Washington D.C.

Randall, A. 1987 Resource economics. John Wiley, Nueva York i. al.

Randall, A. 1986 Human preferences, economics and the preservation of species.


En: Norton, B.G. (editor): The preservation of species. Princeton University
Press.

Randall, A. & Stoll, J. 1983 Existence values in a total valuation framework. En:
Row, R.D. & Chestnut, L.G. (editores): Managing air quality and scenic
resources at national parks and wilderness areas. Westview Press, Boulder.

Raven, P. 1988 Our diminishing tropical forests. En: Wilson, E.O. (editor):
Biodiversity. National Academy Press, Washington D.C.

Reed, D. 1991 The Global Environmental Facility. Sharing responses for the
biosphere. Multilateral Development Bank Program, WWF International,
Washington D.C.

Rees, C. 1993 The ecologist’s approach to sustainable development. Finance and


Development 30(4):14-15.

Reid, W.V. (ed.) 1993 Biodiversity prospecting: Using genetic resources for
sustainable development. World Resources Institute, Washington D.C.

Reid, W.V. et al. 1993 A new lease of life. En: Reid, W. (editor): Biodiversity
prospecting. World Resources Institute, Washington D.C.

Reid, W.V. et al. 1992 Developing indicators of biodiversity conservation. World


Resources Institute, Informe Preliminar, Washington D.C.

Reid, W.V. & Miller, K.R. 1989 Keeping options alive: The scientific basis for
conserving biodiversity. World Resources Institute, Washington D.C.

132
Referencias bibliográficas

Repetto, R. 1990 Die Entwaldung der Tropen: ein ökonomischer Fehlschlag.


Spektrum der Wissenschaft 6:122-129.

Repetto, R. 1988 The forest for the trees? Government policies and the misuse of
forest resources. World Resource Institute, Washington D.C.

Repetto, R. 1986 World enough and time. Yale University Press, New Haven.

Repetto, R. & Gillis, M. (editores) 1988 Public policies and the misuse of forest
resources. University Press Cambridge i. al.

Rich, B. 1994 Mortgaging the earth: The World Bank, environmental


impoverishment, and the crisis of development. Beacon Press, Boston.

Rijsberman, F. 1991 Potential costs of adapting to sea level rise in OCDE


countries. En: OCDE (editor): Environmental policy: How to apply
economic instruments. París.

Rosenthal, D. & Nelson, R. 1992 Why existence value should not be used in cost-
benefit analysis. Journal of policy analysis and management 11(1):116-122.

Ruck, C. 1990 Die ökonomischen Effekte von Nationalparks in


Entwicklungsländern. Verlag Pinus Druck Augsburg.

Ruitenbeek, H.J. 1992 The rainforest supply price: A tool for evaluating rainforest
conservation expenditures. Ecological Economics 6(1):57-78.

Ruitenbeek, H.J. 1991 Mangrove management: An economic analysis of


management options with a focus on Bintuni Bay, Irian Jaya. Ministry of
State for Population and Environment, Yakarta.

Ruitenbeek, H.J. 1990 Economic analysis of tropical forest conservation


initiatives: Examples from West Africa, WWF.

Ruitenbeek, H.J. 1990a Evaluating economic policies for promoting rainforest


conservation in developing countries. Tesis doctoral (PhD), London School
of Economics and Political Science.

Ruitenbeek, H.J. 1990b The rainforest supply price: A step towards estimating a
cost curve for rainforest conservation. The Development Economics
Research Programme, London School of Economics.

Ruitenbeek, H.J. 1989 Social cost benefit analysis of the Korup project,
Cameroon. Informe del WWF, preparado para el World Wide Fund for
Nature y la República de Camerún, Londres.

Samples, K., Dixon, J., Gowen, M. 1986 Information disclosure and endangered
species valuation. Land Economics 62:306-312.

133
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Samples, K., Gowen, M., Dixon, J. 1986a The validity of the contingent valuation
method for estimating non-use components of preservation values for
unique natural resources. Documento presentado ante la American
Agricultural Economics Association, Reno.

Sánchez, V. & Juma, C. 1994 Challenges and opportunities for south-south-


cooperation in implementing the Convention on Biological Diversity. En:
Krattiger, A.F., McNeely, J..A., Lesser, W.H., Miller, K.R., St.Hill, Y.,
Senanayake, R. (editores): Widening perspectives on biodiversity, IUCN,
Gland, e International Academy of the Environment, Ginebra, 305-307.

Schäfer, A. 1988 Kosten-Nutzen-Analyse. Ex-post-Anwendung am Beispiel der


Rebflurbereinigung im Kaiserstuhl. Tesis de licenciatura en Kassel.

Scheele, M. & Isermeyer, F. 1989 Umweltschutz und Landschaftspflege im


Bereich der Landwirtschaft - Kostenwirksame Verpflichtung oder neue
Einkommensquelle? Berichte über Landwirtschaft 67:86-110.

Schily, O. 1994 Flora, Fauna und Finanzen. Hoffmann und Campe, Hamburgo.

Schkade, D. & Payne, J.W. 1994 How people respond to contingent valuation
questions: A verbal protocol analysis of willingness to pay for an
environmental regulation. Journal of Environmental Economics and
Management 26:88-109.

Schmalensee, R. 1972 Option demand and consumer’s surplus: Valuing price


changes under uncertainty. American Economic Review 62:813-824.

Schmitt, G. 1989 Die volkswirtschaftlichen Kosten der Agrarpolitik. WISU 6:358-


362.

Schneider, R. 1992 Brazil: An analysis of environmental problems and policies in


the Amazon. Report no 91-04-BR, Latin America and Caribbean Region,
Banco Mundial, Washington D.C.

Schramm, G. & Warford, J. (editores) 1989 Environmental management and


economic development. A World Bank Publication, Washington D.C.

Schreiber, H. 1989 „Debt-for-Nature-Swap“ - An instrument against debt and


environmental destruction? Zeitschrift für Umweltpolitik und Umweltrecht
12:331-352.

Schüller, A. (editor) 1983 Property rights und ökonomische Theorie. Vahlen,


Munich.

Schulz, W. 1985 Der monetäre Wert besserer Luft. Lang, Frankfurt a.M. i. al.

134
Referencias bibliográficas

Schulze, E.-D. & Mooney, H.A. (editores) 1993 Biodiversity and ecosystem
function. Springer Verlag Berlin i. al.

Schulze, W.D. et al. 1983 Economic benefits of preserving visibility on the


national parklands of the Southwest. Natural Resources Journal 23.

Schulze, W.D., D´Arge, R.C., Brookshire, D.S. 1981 Valuing environmental


commodities: Some recent experiments. Land Economics 57(2).

Schweppe-Kraft, B., Habeck, K., Schmitz, T. 1989 Ökonomische Bewertung von


Eingriffen in Natur und Landschaft. Am Beispiel Industriegebiet
Schichauweg. Landschaftsentwicklung und Umweltforschung 60, Technische
Universität Berlin.

Sedjo, R. 1987 The economics of natural and plantation forests in Indonesia.


Resources for the Future, Washington D.C.

Setzer, A.W. & Pereira, M.C. 1991 Amazonia biomass burnings in 1987 and an
estimate of their tropospheric emissions. Ambio 20:19-22.

Shamsundar, P. & Kramer, R. 1993 Does contingent valuation work in non-market


economies? Centre for Resource and Environmental Policy Research, Duke
University, Durham, NC.

Sharma, N. 1992 Managing the world’s forests. Kendall and Hunt, Dubuque, Iowa

Simberloff, D. 1987 The Spotted Owl fracas: Mixing academic, applied, and
political ecology. Ecology 68:766-772.

Simberloff, D. 1986 Are we on the verge of a mass extinction in tropical rain


forests? En: Elliott, D.K. (editor): Dynamics of extinction. John Wiley,
Nueva York i. al.

Simonis, U.E. (editor) 1988 Ökonomie und Ökologie. Auswege aus einem
Konflikt. Alternative Konzepte 33. C.F. Müller, Karlsruhe.

Sittenfield, A. & Gámez, R. 1993 Biodiversity-Prospecting in InBio. Reid, W.V.


(editor): Biodiversity prospecting: Using genetic resources for sustainable
development. World Resources Institute, Washington D.C..

Smith, N.J.H. & Schuktes, R.E. 1990 Deforestation and shrinking crop gene-pools
in Amazonia. Environment and Conservation 17:227-234.

Smith, V.K. 1987 Non-use values in benefit-cost analysis. Southern Economic


Journal 54:19-26.

Smith, V.K. 1983 Option value: A conceptual overview. Southern Economic


Journal 49:654-668.

135
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Smith, V.K. & Desvousges, W.H. 1986 Measuring water quality benefits. Kluwer-
Nijhoff Publishing, Boston 54:19-26.

Smith, V.K. & Kaoru, Y. 1990 Signals or noise? Explaining the variation in
recreation benefit estimates. American Journal of Agricultural Economics
72:419-433.

Solow, R.M. 1974 Intergenerational equity and exhaustible resources. Review of


Economic studies, Symposium on the economics of exhaustible resources,
29-46.

Solow, R.M. 1986 On the inter-temporal allocation of natural resources.


Scandinavian Journal of Economics, 88 (1), 141-149.

Soulé, M.E. (ed.) 1986 Conservation biology. The science of scarcity and
diversity. Sinauer, Sunderland, Ma.

Southgate, D.D. & Disinger, J.F. (editores) 1987 Sustainable resource


development in the Third World. Westview Press, Boulder - Londres.

Steer, A. & Lutz, E. 1993 Measuring environmentally sustainable development.


Finance and Development 30(4):20-23.

Steinlin, H. 1987 Kommerzielle Nutzung und Export von Holz aus tropischen
Feuchtwäldern. Allgemeine Forst- und Jagd-Zeitung 158:50-55.

Stephan, G. & Ahlheim, M. 1996 Ökonomische Ökologie, Springer Verlag, Berlín,


Heidelberg, Nueva York.

Stevens, T.H., Echeverria, J., Glass, R.J., Hager, T., More, T.A. 1991 Measuring
existence value of wildlife: What do CVM estimates really show? Land
Economics 67(4):390-400.

Stork, N.E. & Samways, M.J. 1995 Inventorying and monitoring of biodiversity.
En: Heywood, V. & Watson, R. (editores): Global biodiversity assessment,
453-544, Cambridge University Press, Cambridge.

Ströbele, W. 1987 Rohstoffökonomik. Vahlen, Munich.

Swanson, T. 1991 The economics of natural habitat utilization: a survey of the


literature and issues. London Environmental Economics Centre.

Swanson, T.M. 1994 Biodiversity and intellectual property rights. En: Perrings, C.,
Mäler, K.-G., Folke, C., Holling, C.S., Jansson, B.-O. (editores):
Biodiversity Loss: Ecological and economic issues. Cambridge University
Press, Cambridge.

136
Referencias bibliográficas

Swanson, T. & Barbier, E. 1992 Economics for the wilds: Wildlife, wildlands,
diversity and development. Earthscan, Londres.

Tampe, K. & Hampicke, U. 1989 Die voraussichtliche Belastung der öffentlichen


Haushalte durch Ausgleichszahlungen an die Land- und Forstwirtschaft
aufgrund der geplanten Novellierung des §3b BNatSchG. Gutachten im
Auftrag des Bundesministers für Umwelt, Naturschutz und
Reaktorsicherheit. Kassel.

Thibodeau, F.R. & Ostro, B.D. 1981 An economic analysis of wetland protection.
Journal of Environmental Management 12:19-30.

Thomas, D.H.L., Ayache, F., Hollis, T. 1990 Use values and non-use values in the
conservation of Ichkeul National Park, Tunisia. Environmental Conservation
18(2):119-130.

Tisdell, C.A. 1992 Environmental economic guidelines - Inter-country and inter-


regional requests for financial support for protected areas: What factors,
especially economic factors, might be important in ranking these. University
of Queensland, Brisbane.

Tisdell, C.A. 1990 Economics and the debate about preservation of species, crop
varieties and genetic diversity. Ecological Economics 2:77-90.

Tisdell, C.A. 1989 Environmental conservation: Economics, ecology and ethics.


Environmental conservation 16:107-112.

Tisdell, C.A. 1983 An economist’s critique of the world conservation strategy with
examples from the Australian experience. Environmental Conservation
10:43-53.

Tisdell, C.A. 1982 Wild pigs: Environmental pest or economic resource?


Pergamon Press, Sydney i. al..

Tobias, D. & Mendelsohn, R. 1991 Valuing eco-tourism in a tropical rain-forest


reserve. Ambio 20:91-93.

Turner, R.K. (ed.) 1991 Economics and wetland management. Ambio 20:59-63.

Turner, R.K. 1988 Wetland conservation: Economics and ethics. En: Collard, D.,
Pearce, D.W., Ulph, D. (editores): Economics, growth and sustainable
environments. Essays in memory of Richard Lecomber. Macmillan,
Basingstoke - Londres, 121-159.

Turner, R.K. 1988a Sustainable environmental management. Belhaven Press &


Westview Press, Londres - Boulder.

137
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Turner, R.K. & Brooke, J. 1988 Management and valuation of an environmentally


sensitive area: Norfolk Broadland case Study. Environmental Management
12(3).

Turner, R.K., Dent, D., Hey, R.D. 1983 Valuation of the environmental impact of
wetland flood protection and drainage schemes. Environment and Planning A
15:871-888.

Turner, R.K. & Jones, T. (editores) 1991 Wetlands: Market and intervention
failures. Four case studies. Earthscan, Londres.

Turner, R.K. & Mendelsohn, R. 1991 Valuing eco-tourism in a tropical rainforest


reserve. Ambio 20(2):91-93.

Umana, Q.A. 1989 Debt relief for energy efficiency, conservation and
sustainability. Republic of Costa Rica, Washington D.C.

Umana, Q.A. 1987 Costa Rica swap debt for trees. Wall Street Journal 3

UNEP 1992 Biodiversity Country Studies, Synthesis Report.

UNEP 1992a Uganda: Country study on costs, benefits, and unmet needs of
biological diversity conservation.

UNEP 1992b Bahamas: Country study on biodiversity; census, analysis,


conservation costs, benefits and unmet needs.

UNEP 1992c Indonesian country study on biological diversity.

UNEP 1992d Country study report for Nigerian costs, benefits and unmet needs of
biological diversity conservation.

UNEP 1993 Guidelines for country studies on biodiversity. UNEP, Nairobi.

van Dieren, W. (ed.)1995 Taking nature into account. Springer Verlag, Nueva York.

Vincent, J. 1990 Rent capture and the feasibility of tropical forest management.
Land Economics 66(2):212-223.

Vitousek, P. et al. 1986 Human appropriation of products of photosynthesis,


BioScience 36(6)-368-373.

Vogel, H. 1988 Naturschutzprogramme mit der Landwirtschaft in der


Bundesrepublik Deutschland - Übersicht. En: ABN (ed.):
Jb.Natursch.Landschaftspfl. 41:183-195.

Vogel, J.H. 1994 Genes for sale - Privatization as a conservation policy. Oxford
University Press, Oxford, Nueva York.

138
Referencias bibliográficas

Walsh, R.G., Johnson, D.M., McKean, J.R. 1992 Benefit transfer of outdoor
recreation demand studies 1968-1988. Water Resources Research 28(3):

Walsh, R.G., Loomis, J.B., Gillman, R.A. 1984 Valuing option, existence, and
bequest demands for wilderness. Land Economics 60:14-29.

Walsh, R.G. & Rosenthal, R.D. 1990 Estimating the public benefits of protecting
forest quality. Journal of Environmental Management 30:175-189.

Ward, N.I. & Brooks, R.R. 1978 Gold in some New Zealand plants. New Zealand
Journal of Botany 16:175-177.

Warren, D.M. 1991 Using indigenous knowledge in agricultural development.


World Bank Discussion Paper No. 127.

Watson, D. 1988 The evolution of appropriate resource management systems. En:


Berkes, F. (editor): Common property resources: Ecology and community
based sustainable development. Belhaven, Londres.

Webb, A., Lopez, M., Penn, R. 1990 Estimates of producer and consumer subsidy
equivalents: Government intervention in agriculture 1982-1987. US
Department of Agriculture Statistical Bulletin 803, Washington D.C.

Weinberger, M., Thomassen, G., Willeke, R. 1991 Kosten des Lärms in der
Bundesrepublik Deutschland. Erich Schmidt Verlag, Berlín.

Weinschenck, G. 1986 Der ökonomische oder der ökologischeWeg?


Agrarwirtschaft 35:321-327.

Weinscheck, G. & Werner, R. 1989 Einkommenswirkungen ökologischer


Forderungen an die Landwirtschaft. Landwirtschaftliche Rentenbank,
Frankfurt am Main.

Wells, M. 1992 Fiduciary funds to preserve biodiversity: Green funds. Ecologia.

Wells, M. 1992a A summary of the benefits, costs and risks of using


environmental trust funds for biodiversity conservation. Environmental
Policy and Research Division, Banco Mundial.

Wells, M. 1992b Biodiversity conservation, affluence and poverty: Mismatched


costs and benefits and efforts to remedy them. Ambio 21(3):237-243.

Wells, M. & Brandon, K. 1992 People and parks: Linking protected area
management with global communities. The World Bank, World Wide Fund
for Nature, US. Agency for International Development.

139
Enfoques económicos para la valoración de la diversidad biológica

Wendelaar, A., Pearce, D.W., Moran, D. 1994 Determining biodiversity


conservation priorities. Centre for Social and Economic Research on the
Global Environment, University College London y University of East
Anglia, Norwich.

Westman, W.E. 1977 How much are nature’s services worth? Science 197:960-
964.

Whittington, D. et al. 1991 Willingness to pay for improved sanitation in Kumasi,


Ghana: A contingent valuation study. En: Valuing Environmental Benefits in
Developing Economies, Michigan State University, Special Report No. 29.

Wicke, L. 1991 Umweltökonomie. Eine praxisorientierte Einführung. Vahlen,


Munich.

Wicke, L. 1991a Umweltökonomie und Umweltpolitik. Beck/dtv, Munich.

Wicke, L. 1986 Die ökologischen Milliarden. Kösel, Munich.

Wilks, L.C. 1990 A survey of the contingent valuation method. Resource


Assessment Commission, RAC Research Paper No. 2, Australian
Government Publishing Service, Canberra.

Willis, K.G. & Corkindale, J.T. (editores) 1995 Environmental valuation. CAB
International, Wallingford.

Willis, K.G. 1993 The national oceanic and atmospheric administration report on
contingent valuation methods: some comments. Department of Town and
Country Planning, University of Newcastle upon Tyne.

Willis, K.G. & Benson, J.F. 1988 Valuation of wildlife: A case study on the Upper
Teesdale site of special scientific interest and comparison of methods in
environmental economics. En: Turner, R.K. (editor): Sustainable
environmental management. Belhaven Press & Westview Press, Londres -
Boulder.

Willis, K.G., Benson, J.F., Saunders, C.M. 1988 The impact of agricultural policy
on the costs of nature conservation. Land Economics 64:147-157.

Willis, K.G. & Garrod, G. 1991 Landscape values: A contingent valuation approach
and case study of the Yorkshire Dales National Park. Countryside Change
Working Paper 21, University of Newcastle upon Tyne.

Woodruff, D.S. & Gall, G.A.E. 1992 Genetics and conservation. Agriculture,
Ecosystems and Environment 42, 53-73.

World Resources Institute 1992 World Resources 1992-1993, Oxford University


Press, Oxford.

140
Referencias bibliográficas

World Resources Institute, The World Bank, United Nations Development


Programme 1985 Tropical Forests: A call for action. Washington, D.C.

World Wide Fund for Nature 1988 Debt for nature, an opportunity. Philippines.

Young, A.M. 1986 Eco-Enterprises: Eco-tourism and farming of exotics in the


tropics. Ambio 15: 361-363.

Zilinskas, R.A. & Lundin, C. 1993 Marine biotechnology and developing countries.
World Bank discussion paper 210. Washington D.C.

141
gtz
Deutsche Gesellschaft für
Technische Zusammenarbeit (GTZ) GmbH
(Cooperación Alemana al Desarrollo)
Begleitprogramm Tropenökologie (TÖB)
Tropical Ecology Support Program
(Programa de Apoyo Ecológico)
Postfach 5180
D-65726 Eschborn
República Federal de Alemania
Fax: +49-(0)6196-79-6190
E-Mail: TOEB@gtz.de
World Wide Web: http://www.gtz.de/toeb

Potrebbero piacerti anche