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UNIVERSIDAD NACIONAL PEDRO RUIZ GALLO

FACULTAD DE CIENCIAS HISTÓRICOS SOCIALES Y EDUCACIÓN

ESCUELA PROFESIONAL DE ARQUEOLOGÍA

INVESTIGACIÓN Y PRÁCTICA
ARQUEOLÓGICA I

EL TRABAJO DEL
ARQUEÓLOGO

ESTUDIANTES:
 Pérez Vargas, Nicolle
 Cango Montes, Nicole
 Manayay Céspedes, Pilar
 López Ramo, Angélica
 De la Cruz Panta, Vivian

CATEDRA:
Arql. Luis Enrique Chero Zurita
2019-I
ACTIVIDAD LABORAL
Los arqueólogos son profesionales de la antropología especializados en la historia del
ser humano a través de restos, tales como huesos, tejidos, cerámica, herramientas,
características del paisaje y de las construcciones. Algunos arqueólogos se especiali-
zan en el estudio de una región geográfica, un período histórico o un tipo de objeto,
por ejemplo, monedas o cerámica.

Entre sus funciones destaca realizar trabajo de campo, que implica:

 La excavación, identificación, registro y conservación de restos históricos. A par-


tir de las muestras recogidas deben ser capaces de relacionarlas con pruebas
ambientales como el clima, la fauna y la flora, y elaborar una imagen de la vida
en la cultura y sociedad de la época.

 Trabajar de forma coordinada con otros profesionales, como topógrafos y espe-


cialistas en excavación. Los arqueólogos pueden utilizar fotografías aéreas o téc-
nicas geofísicas para identificar los sitios arqueológicos.

 En el contexto de una excavación, el arqueólogo se encarga de la supervisión de


excavadoras, así como fotografiar y catalogar los objetos. El arqueólogo debe
tomar notas y realizar mediciones precisas para utilizar estos datos en la poste-
rior redacción de informes.

 Planificar y gestionar el tiempo en las escavaciones, ajustándose a los plazos


establecidos. En algunos casos, la excavación es un trabajo de larga duración
que quedará abierta de forma permanente, y se convierte en un lugar abierto al
público en general.

Los arqueólogos pueden realizar otras funciones como buscar información, explicar y
difundir sus hallazgos o realizar análisis. En concreto se encargan de:

 Buscar información y documentación sobre un periodo histórico; investigando en


museos, universidades, centros de investigación.

 Asegurarse de que las exposiciones en museos tienen rigor histórico y se cum-


plen las medidas de preservación.

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 Asesoramiento a empresas vinculadas a la administración local, donde deciden
si los nuevos proyectos urbanísticos pueden destruir un yacimiento arqueológi-
co. Por este motivo un arqueólogo dedica una parte importante de su tiempo a
evaluar la planificación de las obras, y a negociar con los responsables de las
obras sobre el diseño de los mapas.

 Inspección de yacimientos históricos, monumentos y edificios históricos, con el


objetivo de preservar estos sitios históricos.

 Elaborar informes, crear películas, simulaciones o maquetas de realidad virtual.


El uso de diseño asistido por ordenador (CAD) y de sistemas de información
geográfica (SIG) es cada vez más común en este trabajo.

PERFIL PROFESIONAL
Para ser arqueólogo se necesita:

 Conocimientos de historia y antropología.

 Interés por el pasado.

 Ser detallista y metódico.

 Persistencia, determinación y la automotivación.

 Tener capacidad para organizarse.

 Tener una mente analítica y lógica para procesar la información de los resulta-
dos.

 Habilidades prácticas para excavar el terreno con cuidado y para manejar obje-
tos delicados.

 Resistencia física.

 Capacidad para trabajar bajo cualquier condición meteorológica.

 Habilidades de TIC.

 Habilidades de comunicación y de trabajo en equipo.

 Habilidades de negociación y de comunicación escrita, para redactar informes.

 Flexibilidad para viajar.

COMPETENCIAS
 Aptitud para utilizar y manejar cámaras y equipos fotográficos.

 Aptitudes para el diseño asistido por ordenador.

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 Bien organizado.

 Capaz de prestar atención al detalle.

 Capaz de trabajar en sitios con polvo y estrechos.

 Capaz de utilizar mapas y gráficos.

 Carácter emprendedor.

 Conocimientos sobre métodos y técnicas de conservación.

 Cuidadoso.

 Curioso.

 Destrezas en informática.

 Habilidades comunicativas.

 Habilidades prácticas.

 Interesado en la historia.

 Metódico.

 Paciente.

 Persistente.

 Resuelto.

 Trabaja en el exterior bajo todo tipo de condiciones climáticas.

 Trabaja en equipo.

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Como…

INVESTIGADOR
El arqueólogo es un investigador del tiempo. Antes y después de realizar una prospec-
ción o excavación, se debe realizar una investigación adecuada.

Un buen investigador debe tener las siguientes cualidades:

 Rigurosidad en sus labores: Las huellas tangibles del comportamiento hu-


mano son a veces evidentes, pero muchas veces muy sutiles (incluso microscópi-
cas). Por lo tanto, es necesario ser muy meticuloso en la observación y en la des-
cripción para que no se pierdan evidencias. No hay que olvidar que, con frecuen-
cia, manipulamos material muy antiguo y frágil.

 Curiosidad intelectual: No se puede ser arqueólogo sin ser curioso, sin tener
ganas enormes por descubrir, identificar, cubrir vacíos en el conocimiento, es de-
cir, sin la inquietud por conocer más.

 Capacidad de observación: El arqueólogo debe recuperar datos sin poder


entrevistar a sus interlocutores. Todo lo que puede hacer es ver los lugares o pro-
ductos de su paso por el mundo. Cuenta entonces, básicamente, con su capaci-
dad para observar, describir y registrar. Dibujará bien si observa bien. Tomará
buenas fotos si observa bien. Llenará bien sus notas de campo si observa bien. Su
observación tendrá, además, que ir de aspectos muy específicos al entorno que lo
rodea. Esta capacidad de observación será su respaldo fundamental como investi-
gador.

Por otra parte, en el campo de estudios de la Arqueología, es relativamente común


observar ciertos errores o problemas comunes en los jóvenes investigadores. Con el
objetivo de estar alertas ante estos posibles fallos, presentamos una lista de errores
comunes. (Vega Centeno, 2016)

 Poca paciencia en labores de registro y descripción: A veces estar dos horas


en cuclillas, con el sol encima o cuatro horas con una lupa de aumento en el gabi-
nete puede exasperar o desesperar. Es una labor que no puede llevar a cabo efi-
cientemente quien tiene poca paciencia o poca capacidad de concentración, que
lo pueden llevar a abandonar el trabajo o a hacerlo de forma descuidada.

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 Sobredimensionamiento de las aptitudes físicas para el trabajo: Como en
arqueología es frecuente recorrer grandes distancias en zonas rurales o realizar
labores físicamente exigentes como cargar una carretilla o manejar una pala o un
pico, es frecuente escuchar frases como "si no caminas, no eres arqueólogo"
"arqueólogo que no puede subir cerros no vale" o, "llénenle más la carretilla para
ver qué tan buen arqueólogo es". Tener buena disposición para el esfuerzo físico
es, sin duda, algo importante para el trabajo de campo. Sin embargo, nunca hay
que perder de vista que este trabajo es, fundamentalmente, un ejercicio intelectual
que además, demanda esfuerzo físico y no al revés. Pretender que el esfuerzo físi-
co es lo que le da sentido al trabajo de campo es distorsionar su naturaleza y, por
otro lado, margina a colegas que, a pesar de tener plenas aptitudes para la investi-
gación, serían dejados de lado por no tener una óptima condición física o incluso
por tener algún tipo de discapacidad física.

 Falta de constancia para la conclusión de una investigación: En arqueología,


las labores de campo fascinan por el aura de aventura y experiencia al aire libre,
mientras que las labores de gabinete o laboratorio suelen desanimar ante la posibi-
lidad de pasar meses encerrado entre cuatro paredes. Por esa razón, es frecuente
que la entusiasta participación en las etapas de campo se diluya en las etapas
posteriores, por lo que la labor de investigación queda inconclusa. Nunca debe ol-
vidarse que, si bien los descubrimientos más espectaculares se dan en el campo,
los más trascendentales se han dado en los gabinetes y laboratorios. Pero para
llegar a ellos se requiere constancia. La ausencia de constancia atentará severa-
mente contra las metas de un investigador.

Algo muy importante a considerar son los pasos a seguir para realizar una investiga-
ción Arqueológica.

El primer paso consiste en la elección del tema o problemática a investigar. A partir de


allí se delimita un área de estudio y un periodo determinado, y se plantea los objetivos
generales y específicos que pretende alcanzar la investigación. (Benzi, 2014)

Una forma de trabajar es comenzar con el planteo de hipótesis que luego serán con-
trastadas con los datos.

El segundo paso consiste en lo que se denomina trabajo de campo:

I. La primera etapa es la prospección arqueológica: Estudio previo de las carac-


terísticas del terreno y del potencial que puede guardar ese sitio arqueológico. Para
realizar esta tarea se utilizan cartas, mapas, fotografías aéreas, referencias históricas
y datos de informantes que puedan brindar alguna información.

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II. Después de haber localizado los sitios arqueológicos en el área elegida, se eligen
aquellos en los que se van a realizar la recolección superficial y los sondeos; que sir-
ven para recuperar los restos arqueológicos allí depositados o dispersados.

III. La excavación: Tal intervención abarca distintos métodos que van desde la explora-
ción no destructiva hasta la excavación integral, pasando por sondeos limitados o to-
mas de muestras. En la excavación se realizan cuadrículas donde se mapea, fotogra-
fía y se toman las medidas tridimensionales de cada artefacto, ecofacto o estructura
encontrada. Esto permite tener un registro del nivel y lugar donde se encontró cada
elemento (procedencia) y su relación con los demás (asociación), lo que posibilita
asignarle significado (contexto).

El siguiente paso es el trabajo de laboratorio, donde se lava, clasifica y analiza todo el


material encontrado, teniendo en cuenta la procedencia y la asociación, para luego po-
der dar una explicación y contrastar las hipótesis planteadas en la investigación. La
integración de los resultados que se obtengan en las instancias de la excavación y de
laboratorio, permite al investigador acercarse al conocimiento del pasado y a respues-
tas para las preguntas que se ha formulado con anticipación.

Una vez que se realizaron todos los estudios necesarios para la investigación arqueo-
lógica, los materiales son conservados en los museos. Para ello deben intervenir los
conservadores que realizan la evaluación del estado en que se encuentran y deciden
si deben ser restaurados o tratados para evitar su deterioro. Luego los materiales son
almacenados y si presentan las condiciones adecuadas pueden ser exhibidos.

La difusión de la investigación y del conocimiento científico no conforma una etapa


más, sino que está presente durante todo el proceso de investigación.

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Como…

FUNCIONARIO PÚBLICO
Los arqueólogos se desempeñan como funcionarios públicos cuando ocupan puestos
de trabajo en Unidades Ejecutoras, Ministerios o alguna otra entidad gubernamental.

En el caso del Perú, puedes ocupar puestos en las Unidades Ejecutoras (Ejecutora
Naylamp 005 en Lambayeque), en la División Desconcentrada de Cultura (DDC) y en
el Ministerio de Cultura.

Guiándonos de las anteriores entidades expondremos los puestos y funciones que


puede ocupar un arqueólogo.

UNIDAD EJECUTORA:

 Director Ejecutivo: Está encargado de dirigir, conducir y supervisar el desa-


rrollo y cumplimiento del proyecto, aprobar su plan operativo y presupuestal, así
como aprobar la construcción y funcionamiento de los museos de sitios.

 Dirección de infraestructura y proyectos: Conformada por los directores de


los museos arqueológicos. Es la responsable del proceso de elaboración de los
estudios de pre-inversión, estudios básicos y expedientes técnicos a cargo del
proyecto especial, así mismo, es responsable de la coordinación, gestión, ejecu-
ción, supervisión y liquidación de las obras civiles; y la coordinación, gestión y
supervisión de los proyectos arqueológicos, bajo cualquier modalidad de ejecu-
ción presupuestal de acuerdo a la normatividad vigente.

DIVISIÓN DESCONCENTRADA DE CULTURA:

 Dirección Regional: Su función es de gestionar en la región la ejecución de


las políticas y lineamientos establecidos por el Ministerio de Cultura en concor-
dancia con la política del estado y con los planes sectoriales y regionales en ma-
teria de Cultura.

 Oficina de Control Patrimonial: Se encarga del control y ubicación de los


bienes muebles ubicados en la DDC, así mismo, de la asignación de dichos bie-
nes al personal y de los trámites en coordinación con la sede central de los bie-
nes dados de baja.

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 Oficina de Arquitectura/Patrimonio Histórico: Se encarga del control, super-
visión e inspección de los bienes inmuebles aplicando directivas técnicas y regla-
mentos relacionados en la conservación y preservación del patrimonio histórico y
colonial en los diferentes distritos y provincias de la región Lambayeque. Es res-
ponsable de proponer, coordinar, fundamentar y asesorar a los usuarios en los
trámites dentro del centro histórico de la ciudad.

 Oficina de Arqueología: Se encarga en la atención de expedientes ingresa-


dos para la supervisión y elaboración del Certificado de Inexistencia de Restos
Arqueológicos (CIRA), así mismo, de la inmediata atención en las afectaciones
de sitios arqueológicos dentro de la región Lambayeque. Se encarga del aseso-
ramiento en los proyectos arqueológicos a elaborar y ser ejecutados, así como la
coordinación con entidades públicas y privadas de la región.

MINISTERIO DE CULTURA:

 Ministro de cultura: Entre sus funciones esta el formular, planear, dirigir,


coordinar, determinar, ejecutar, supervisar y evaluar la política nacional y secto-
rial en materia de cultura, aplicable a todos los niveles del gobierno. Realizar el
seguimiento respecto del desempeño y logros alcanzados a nivel nacional, regio-
nal y local y tomar las medidas correspondientes.

 Viceministro de patrimonio cultural e industrias culturales: Es la autoridad


inmediata al ministro de cultura en materia de patrimonio cultural, los que inclu-
yen a los patrimonios arqueológicos y monumentales, inmaterial, paleontológico
y el fomento cultural. Supervisa y coordina el desarrollo de los proyectos en el
ámbito de su competencia.

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En los…

MUSEOS
En el Perú hay dos tipos de museos arqueológicos: Los Museos Nacionales y los Mu-
seos de Sitio. Cada uno tiene sus funciones donde los arqueólogos desempeñan sus
trabajos.

MUSEO NACIONAL:

Sus funciones son (Resolución Ministerial n°0475-2007-ED, 2007):

a. Velar por la conservación, investigación, protección, y custodia de los bienes cultu-


rales muebles, así como de la administración del Museo.

b. Conducir las acciones de investigaciones arqueológicas, la protección y puesta en


valor de los monumentos arqueológicos encomendados; y en los monumentos ar-
queológicos que cuenten o donde se encuentran Museos de Sitio vinculados al Museo
Nacional.

c. Evaluar los resultados de las investigaciones y proponer a la Dirección Ejecutiva las


medidas de ajuste y reprogramación de los proyectos que sean necesarios.

d. Promover y coordinar la recuperación y rescate del patrimonio cultural mueble.

e. Proponer, dirigir y supervisar los proyectos de ampliación de infraestructura y ade-


cuación museográfica, así como los de conservación y restauración de bienes cultura-
les muebles.

f. Proponer y ejecutar proyectos y acciones tendientes a potenciar la labor difusora del


museo. g. Planificar, diseñar, desarrollar, mantener, montar y desmontar exposiciones
temporales o definitivas en la región, en el país o en el exterior, con las debidas autori-
zaciones de la Dirección Ejecutiva del Proyecto y los organismos nacionales compe-
tentes; proponiendo, además, políticas y medidas de mantenimiento y seguridad.

h. Inventariar, catalogar y actualizar el registro de los bienes culturales muebles y los


monumentos arqueológicos ubicados en el área que le fuera asignada.

i. Evaluar permanentemente los resultados de las actividades de conservación em-


prendidas y proponer los correctivos que sean necesarios para superar los problemas
que pudieran presentarse.

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j. Supervisar la correcta ejecución de las acciones de conservación cuando sean asig-
nadas a terceros.

k. Conducir acciones orientadas al acondicionamiento de las instalaciones, espacios e


infraestructura turística, para facilitar la presencia de visitantes, su acceso y servicios,
a las zonas de uso intensivo y extensivo.

l. Supervisar el efecto que produce el acceso de visitantes al Monumento y monumen-


tos arqueológicos a su cargo; y proponer medidas de conservación adecuadas.

m. Informar y emitir opinión, dando conformidad a la documentación técnica - adminis-


trativa de los proyectos y actividades que se ejecuten en los monumentos arqueológi-
cos que le fueran asignados.

n. Elaborar los términos de referencia de los servicios de consultoría y apoyo que se


contraten para la ejecución de los proyectos, intervenciones y otros que se aprueben.

o. Gestionar y/o hacer seguimiento del proceso de aprobación de los proyectos ar-
queológicos, de acuerdo a las normas y procedimientos establecidos por las entidades
competentes del Estado y/o por las organizaciones e instituciones financieras corres-
pondientes.

p. Impulsar la creación de patronatos y asociaciones de apoyo al museo, el mismo


que será regulado por el COCOIN.

q. Otras funciones que le asigne el Director Ejecutivo del Proyecto Especial .

MUSEO DE SITIO:

Sus funciones son (Resolución Ministerial n°0475-2007-ED, 2007):

a. Velar por la conservación, investigación, protección, y custodia de los bienes cultu-


rales muebles, así como de la administración del Museo.

b. Conducir las acciones de investigaciones arqueológicas, la protección y puesta en


valor de los monumentos arqueológicos adscritos a la jurisdicción asignada por el Mu-
seo Nacional y la dirección Ejecutiva del Proyecto.

c. Evaluar los resultados de las investigaciones y proponer a la Dirección Ejecutiva las


medidas de ajuste y reprogramación de los proyectos que sean necesarios.

d. Promover y coordinar la recuperación y rescate del patrimonio cultural mueble.

e. Proponer, dirigir y supervisar los proyectos de ampliación de infraestructura y ade-


cuación museográfica, así como los de conservación y restauración de bienes cultura-
les muebles.

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f. Proponer y ejecutar proyectos y acciones tendientes a potenciar la labor difusora del
museo. g. Planificar, diseñar, desarrollar, montar, mantener y desmontar exposiciones
temporales o definitivas en la región, en el país o en el exterior, con las debidas autori-
zaciones de la Dirección Ejecutiva del Proyecto y los organismos nacionales compe-
tentes; proponiendo, además, políticas y medidas de mantenimiento y seguridad.

h. Inventariar, catalogar y actualizar el registro de los bienes culturales muebles y los


monumentos arqueológicos ubicados en el área que le fuera asignada.

i. Evaluar permanentemente los resultados de las actividades de conservación em-


prendidas y proponer los correctivos que sean necesarios para superar los problemas
que pudieran presentarse.

j. Supervisar la correcta ejecución de las acciones de conservación cuando sean asig-


nadas a terceros.

k. Conducir acciones orientadas al acondicionamiento de las instalaciones, espacios e


infraestructura turística, para facilitar la presencia de visitantes, su acceso y servicios,
a las zonas de uso intensivo y extensivo.

l. Supervisar el efecto que produce el acceso de visitantes al Monumento y monumen-


tos arqueológicos a su cargo; y proponer medidas de conservación adecuadas.

m. Informar y emitir opinión, dando conformidad a la documentación técnica - adminis-


trativa de los proyectos y actividades que se ejecuten en los monumentos arqueológi-
cos que le fueran asignados.

n. Elaborar los términos de referencia de los servicios de consultoría y apoyo que se


contraten para la ejecución de los proyectos, intervenciones y otros que se aprueben.

o. Gestionar y/o hacer seguimiento del proceso de aprobación de los proyectos ar-
queológicos, de acuerdo a las normas y procedimientos establecidos por las entidades
competentes del Estado y/o por las organizaciones e instituciones financieras corres-
pondientes.

p. Impulsar la creación de patronatos y asociaciones de apoyo al museo, el mismo


que será regulado por el COCOIN.

q. Otras funciones que le asigne el Director Ejecutivo del Proyecto Especial.

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De…

SERVICIOS
Se pueden englobar aquí, los trabajos independientes que realizan los arqueólogos
para compañías privadas. En el Perú, se le conoce a este tipo de arqueología como
Arqueología de Contrato.

La arqueología de contrato en el Perú tiene sus orígenes en la década de 1990, cuan-


do luego de cambios profundos en el modelo económico en el estado peruano se ini-
ciaron políticas de privatización y se promovió la explotación a gran escala de recur-
sos naturales, sobre todo mineros. Para lograr el último objetivo, se diseñaron políti-
cas de protección ambiental, social y cultural, que incluyeron a los denominados Estu-
dios de Impacto Ambiental(EIA), los cuales fueron formalizándose hacia finales de los
90. Sin embargo, es a partir de la primera década del presente siglo, cuando los cam-
bios a nivel legislativo obligaron a que se desarrollasen una mayor cantidad de dichos
trabajos (Aldana 2013). Desde ese momento, los trabajos de arqueología cobran gran
relevancia como requisito previo para las obras de gran infraestructura y como el es-
pacio laboral para la gran mayoría de arqueólogos en el Perú.

Desde sus inicios, este tipo de proyectos generó discusiones y polémicas. En dichas
polémicas se planteó una suerte de dicotomía que aún persiste, entre arqueología de
investigación y arqueología de contrato. Dicha dicotomía ha sido utilizada sobre todo
tanto para satanizar como para justificar a la arqueología de contrato. Esto sucede,
porque muchas veces, bajo el pretexto de ejercer una arqueología de contrato, no se
han respetado los estándares de excavación y registro adecuado. De allí, la muchas
veces justificada infravaloración de estos proyectos a la hora de utilizar sus resultados
para formular propuestas arqueológicas.

Uno de los aspectos que pueden servir para cuantificar el impacto de la arqueología
de contrato es la producción de publicaciones (reportes, ensayos, propuestas teóricas
o metodológicas) resultado de dichos trabajos en los últimos años. Muchos de estos
trabajos se desarrollan dentro de contratos con cláusulas de confidencialidad, no solo
con respecto al tema de la empresa contratante sino, también, con los mismos datos
encontrados por los arqueólogos, haciendo que estos sean literalmente privatizados,
dando como resultado que las publicaciones sean casi inexistentes.

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En los últimos 20 años la arqueología de contrato en el Perú se ha desarrollado rápida
y extensivamente dada la cantidad de proyectos mineros o de infraestructura, a con-
secuencia de las políticas económicas instaladas desde la década de los 90. Sin em-
bargo, los materiales y contextos arqueológicos recuperados no han servido de mucho
para potenciar o desarrollar explicaciones arqueológicas o conocimiento socialmente
útil. Su aparición en la historia de la arqueología peruana ha generado una suerte de
polarización entre arqueología de contrato y arqueología de investigación, lo que ge-
nera la negación de un problema. Dicha negación impide la discusión y evaluación
profunda de los procedimientos y registro provenientes de este tipo de arqueología en
el Perú (Tantaleán y Gonzales, 2016).

Entre los servicios que ofrecen las consultoras de arqueología de contrato son:

 Consultoría en certificado de inexistencia de restos arqueológicos: El CIRA


es el Certificado de Inexistencia de Restos Arqueológicos que Ofrece el Ministe-
rio de Cultura, y es requisito Requerido para autorizar el inicio de obras civiles,
públicas o privadas.

 Consultoría en topografía: La finalidad principal del trabajo Topográfico es


la de identificar y validar titularidades, recopilando la documentación necesaria al
proyecto en ejecución a fin de acreditar la tenencia, antigüedad, y el derecho que
ostenta el titular.

 Consultoría en Plan De Monitoreo Arqueológico (PMA): Estos proyectos se


realizan durante la etapa de trabajo de las obras y en el desarrollo de trabajo que
impliquen la remoción del terreno, en salvaguarda de áreas arqueológicas subya-
centes o colindantes, y de las evidencias que pudieran hallarse de forma princi-
pal.

 Consultoría en Proyectos De Investigación Arqueológica (PIA): Son proyec-


tos de investigación que tienen la finalidad de analizar la presencia o ausencia
de evidencia arqueológica en áreas de interés, así como su distribución, densi-
dad y naturaleza. Este proyecto es indispensable para la obtención del CIRA.

 Consultoría en Proyecto De Rescate Arqueológico (PRA): Son actividades


de investigación que surgen como resultado de los Proyectos de Evaluación Ar-
queológica o Monitoreo Arqueológico, con la finalidad de proteger la evidencia
arqueológica que afecta el proyecto o las obras de inversión.

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Como…

DOCENTE
Los arqueólogos desempeñan muchas labores, aportan nuevos conocimientos, los
cuáles son de interés para las instituciones donde trabaja (universidades, museos y
centros de investigación, organismos estatales o privados), para una determinada co-
munidad y para él mismo, acontinuación hablaremos de como el arqueólogo realiza la
función de maestro en instituciones.

El arqueólogo como maestro debe ser consciente del papel que cumple en la socie-
dad, y dentro de ello comprender que la relación pedagógica tiene, al menos, dos di-
mensiones: la capacitación y la formación. La capacitación se refiere a la aprehensión
de conocimientos y al desarrollo de habilidades prácticas y capacidades de acción en
el mundo, en cumplimiento de la importante función de socializar a las nuevas genera-
ciones en el conocimiento acumulado por la sociedad humana para darle continuidad.
La formación, en cambio, comprende los procesos que contribuyen a la construcción,
a modelar la cosmovisión y a re-crear los universos de significados y los dispositivos
de asignación de sentido de las personas involucradas en los procesos formativos.

El principal objetivo del Arqueólogo como maestro es la formación de los estudiantes


en el determinado campo del saber. Por lo tanto el arqueólogo encargado de esta for-
mación debe tener un sólido conocimiento de esta respectiva área disciplinar, incenti-
var nuestra identidad cultural, el arqueólogo debe basar la propuesta de su enseñanza
para la comprensión del pasado en hacer ver al alumno que el paisaje social que, el
transfondo de los hechos históricos es un escenario móvil y cambiante que las accio-
nes de los hombres y las mujeres pueden ser transformados por otros hombres y mu-
jeres por lo tanto; que la enseñanza de las ciencias sociales debe favorecer una acti-
tud crítica y comprometida con las cosas que suceden en nuestro tiempo presente.

El arqueólogo como maestro en el ámbito universitario tiene la gran labor de formar


nuevos profesionales, investigadores, analíticos con el fin de que estos estudiantes
tengan un gran desenvolvimiento académico profesional, y hagan un bien a nuestra
sociedad cultural. (Berlanga, 2001)

Por lo general los arqueologos no disponen de un horario descansable para ejercer la


docencia, la mayoría de arqueólogos pasan la mayor parte de su tiempo en los mu-
seos, supervisando los proyectos de excavaciones, viajando, en laboratorios, etc.
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El arqueólogo como maestro tiene que diseñar estrategias de enseñanza y aprendiza-
je (intervenciones educativas concretas, actividades) Debe de promover los aprendi-
zajes que se pretenden y contribuir al desarrollo de la personal y social de los estu-
diantes. Diagnostica las necesidades de formación del colectivo de los estudiantes a
los que se dirige la formación.

Considera también todos estos lenguajes al encargar actividades a los estudiantes,


para que éstos aprendan a utilizarlos al crear sus documentos y mensajes. Esto facili-
tará luego su interacción en la sociedad (estos lenguajes forman parte de nuestra cul-
tura). Él tiene que despertar el interés de los estudiantes (la pasión por la arqueología)
hacia los objetivos y contenidos de la asignatura (establecer relaciones con sus expe-
riencias vitales, con la utilidad que obtendrán.). Y mantenerlo motivando a los estu-
diantes en el desarrollo de las actividades (proponer actividades interesantes, incenti-
vando la participación en clase). (Berlanga, 2001)

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BIBLIOGRAFÍA

ALDANA, M. (2013). La fiscalización ambiental en el Perú: Orígenes, estado ac-


tual y perspectivas Futuras. Derecho y Sociedad, 41: 323-340.

BERLANGA, A. A. (Ed.).( 2001). La enseñanza de la arqueología en el siglo XIX:


de las cátedras de castellanos de losada a la introducción en los estudios Universita-
rios. Córdoba, Argentina: Universidad de Córdoba, área de arqueología.

BENZI, M (Ed.)(2014). En Busca del Pasado, El trabajo del arqueólogo. Gobierno


de Santa Fe, Ministerio de innovación y cultura. Recuperado de: http://
museojuandegaray.gob.ar/files/novedades_serv_edu_attachment/07-en-busca-del-
pasado.pdf

RESOLUCIÓN MINISTERIAL N°0475-2007-ED, 2007. El Peruano. Lima, Perú. 6


de noviembre del 2017.

TANTALEÁN, H. y GONZALES, A. (2016). La arqueología de contrato en el Perú:


Surgimiento, caracterización y perspectivas. En Pellini, José Roberto (Ed.), Arqueolo-
gía de Contrato en Latinoamérica. Madrid, España. JAS Editores.

VEGA CENTENO, R.(2016). Guía de investigación en Letras y Ciencias Huma-


nas, Arqueología. Lima, Perú.

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