Revisión de “Y va de ensayo”, de Mariano Picón Salas

El texto de Mariano Picón Salas es un ensayo y sirve de magnífico ejemplo del

género. En este sentido, podemos decir que ha sido su primera aproximación a este tipo
de textos. Además, y por esta razón lo empleo como introducción, ofrece las
características fundamentales del ensayo de una manera sucinta, clara y efectiva. Para
afianzar su efectividad me interesa destacar un par de puntos que son esenciales para
entender la labor de un ensayista. Sin más preámbulos, entonces, aquí enumero los
aspectos fundamentales del ensayo:

1. “La función del ensayista (…) parece conciliar la Poesía y la Filosofía, tiende un
extraño puente entre el mundo de las imágenes y los conceptos.”

Alfonso Reyes, gran intelectual mexicano, dijo que el ensayo era el centauro de los
géneros. Así, como el animal mítico era mitad caballo y mitad hombre, este género
concilia aspectos de diferentes tipos de textos: narrativa, poesía, reflexión,
argumentación, revisión científica, etc. Por otro lado está lo referido en la cita previa: un
puente entre las imágenes y los conceptos. Un tránsito entre la abstracción de la mente y
la concreción de los sentidos. En cierta medida busca tomar la complejidad de una idea,
lo difícil y confusa que es la existencia, por ejemplo, y plasmarla en una construcción
plástica y aprehensible con rapidez, como la representación de un laberinto. Un buen
ejemplo de esto, está en el propio ensayo de Picón Salas, en el párrafo que va de la página
502 a la 503.

2. “No pretende como el filósofo ofrecer un sistema del mundo intemporalmente

válido, sino procede de la situación o el conflicto inmediato.”

Me interesa la primera parte de esta cita. La filosofía procede sistemáticamente, es

decir, el filósofo, en el sentido más tradicional del término, debería ocupar su pensamiento
en todas las ramas del conocimiento para orquestarlas en una propuesta globalizante. Aquí
está la distancia entre el filósofo y el ensayista. Montaigne, por ejemplo, nunca pretendió
agotar todas las ramas del saber. Al contrario, procedía por intereses particulares,
personales, y evaluaba cómo de estos podía desentrañar una reflexión importante aunque
no definitiva.
 3. “Quizás el ensayista no se atreva a convertir en leyes toda una serie de síntomas
(…) pero sí los perfilará o describirá.”

Esta cita, en cierta medida, es una corroboración o un desarrollo de la anterior. En

este sentido me interesa poner su atención sobre estas líneas. Es importante notar que el
ensayista no pretende hacer leyes o construir sistemas rígidos, el ensayista se detiene a
considerar un aspecto hasta agotar sus posibilidades.

4. “Por su propia naturaleza el ensayo se desarrolla de preferencia en épocas de

crisis, cuando el hombre se siente más confundido y están crujiendo amenazantes
—antes de que emerjan otros— los valores de una vieja cultura.”

Este punto es importante. No creo que sea obligatorio vivir una época de crisis para
ser un buen ensayista, sin embargo, sí es cierto que el ensayista siempre se inclina hacia
el futuro y la nueva posibilidad, hacia un orden que está emergencia y muestra un aparente
caos propio de la novedad. El ensayista reflexiona desde su soledad sobre la
incertidumbre de la existencia e intenta fijarle una forma. Se sumerge en la oscuridad de
lo ignoto no para apresarlo sino para tratar de intuir sus movimientos y delinearlos.

5. “…el problema se transforma en el específico de la Literatura que es como las

cosas se dicen.”

Esta es la parte esencial de los consejos: en el ensayo, el estilo es fundamental.

Pensemos que muchas veces nos interesa un ensayista no porque lo que dice es cierto o
está demostrado científicamente. Muchas de las reflexiones de Montaigne sobre
medicina, por mencionar una, están superadas en su aspecto científico porque han pasado
más de quinientos años de ciencia. Sin embargo, la gente sigue leyendo sus ensayos
porque el modo en que lo dijo, a pesar de qué dijo, nos demuestran un giro de pensamiento
que es importante. Si la esencia del ensayo es la forma, entonces, la manera de escribirlos
será clave.