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Introducci�n
La Energ�a E�lica (EE) - su nombre procede del nombre griego del dios del viento,
Eolos- puede considerarse una de las formas de energ�a solar indirecta
En efecto, la acci�n solar t�rmica sobre la atm�sfera terrestre determina
diferencias t�rmicas entre distintas �reas del planeta, en funci�n de un conjunto
de factores: latitud, altura sobre el nivel del mar, distancia a las masas de agua,
tipo de superficie, vegetaci�n, etc.
C�mo la temperatura de un gas guarda relaci�n con la presi�n del mismo, de la zona
de mayor presi�n a la de menor presi�n (aire menos denso y m�s c�lido) circular�n
vientos, es decir, habr� movimiento de masas de aire.
Por ejemplo desde oc�anos, mares y grandes espejos de agua, mas frescos, tender�n a
soplar vientos hacia las zonas de tierra firme.
Los vientos se ven a su vez influenciados por otros factores, tales como la
rotaci�n terrestre.
Esto determina una din�mica permanente, donde las masas de aire buscan equilibrarse
sin jam�s lograrlo.
Se estima que hasta el 2 % de la radiaci�n solar se convierte en energ�a cin�tica
del viento.
Pueden clasificarse por el n�mero de palas, siendo de gran difusi�n los tripala, en
cuanto a los bipala y en particular los monopala, requieren de contrapesos para un
funcionamiento balanceado.