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Director:

Manuel Desviat
Redacción:
María Diéguez, María José Gil Bonmatí,
Ana González Rodríguez, Ana Moreno,
Ana Moro
Diseño:
Átopos
Consejo Editor:
Setenta años sin Freud 2
M Desviat, Marta Ráfols y Alberto Fernández Liria
J.M. Caldas Almeida, F. Colina
F. Chicharro, P.G. Delgado,
M. Desviat, Domingo Alves,
A. Fernández Liria, I. Levav, J. Mas Hesse,
El trauma masivo causado por el enemigo: 8
su influencia en la identidad del grupo grande
F. Pereña, M.E. Ruiz de Velasco, B. Saraceno
y sus consecuencias políticas y sociales.
Vamik Volkan M.D.

Apego y el autoconocimiento: 20
la educación de los hijos con el cerebro en mente
Daniel J. Siegel

Desarrollos (Posibles) en la terapia psicoanalítica


Horst Kächele
34
La herencia del psicoanálisis: 46
clínica y teoría para el siglo XXI
Miguel Ángel González Torres

El psicoanálisis desde el paradigma de la complejidad 59


Nicolás Caparrós

Portada:
El arquitecto, Pep Carrió
Paginas centrales
Sumario:
Núm. 9 , 2010
Los espacios del sueño I
Átopos colabora con: Robert Desnos
Átopos colabora con el Departamento de Salud
Mental y Toxicomanías de la OMS, Ginebra.
Prólogo a las Obras Completas de Sigmund Freud, II
Fundación Paideia Galiza José Ortega y Gasset

Redacción:
C/Juan de Austria, 30 - 4º A. 28010 Madrid
Hipótesis del histerismo español,
José Ortega y Gasset
IV
Email: redaccion@atopos.es
Página Web: www.atopos.es

Administración, edición, publicidad,


Prólogo (fragmento) a Psicoanálisis
y política de Herbert Marcuse,
VIII
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Escena XIV, William Shakespeare.
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Edipo Rey (fragmento), Sófocles. XVI
Depósito Legal: M-20233-2003 El mal oscuro (fragmento) XXII
ISSN: 1696-3202 Giuseppe Berto. (1914-1978)
Setenta años sin Freud renueva el debate cartesiano, el debate
sobre qué entendemos por ‘científico’,
aportaciones de Freud en el ámbito de
la psicología y de la cultura han transfor-
Manuel Desviat, Marta Rafols y pues, en verdad, sus teorías no son falsa- mado para siempre nuestra percepción
Alberto Fernández Liria bles, no están sujetas a prueba: los mitos
–al igual que Marx estaba seducido por la
de las relaciones humanas. Y si me remito
a la tímida mención de un aniversario es
Tal vez los tiempos futuros modelarán o disminuirán éste o aquel resultado de sus Grecia clásica– y las obras maestras de la únicamente para aplaudir la idea de este
investigaciones, pero nunca se conseguirá acallar las preguntas que Sigmund Freud literatura –Schopenhauer, Proust, Mann– monográfico que la revista Átopos dedica
dirigió a la humanidad, ni tampoco se podrá para siempre negar o enturbiar sus son el material en que se apoya, junto con a la herencia de Freud.
investigaciones. las fantasías y sueños de un puñado de
Thomas Mann (Palabras en el 80 cumpleaños de Freud) pacientes del mundo burgués de la Vie- El programa de Humanidades de la Fun-
na de las últimas décadas del siglo XIX y dación “la Caixa” tomó la iniciativa de
primeras del XX. «Antes de esto, tanto en presentar en Madrid, en el contexto de su
sueño como en los oráculos, muchos hom- programa anual de debates sobre pensa-
bres han dormido con su propia madre», miento contemporáneo, un ciclo de con-
exclama Yocasta en Edipo. Escribe Freud ferencias dedicado a revisar las más im-
defendiéndose de la hipócrita moral de la portantes corrientes relacionadas con el
decadente Europa central de su tiempo. psicoanálisis. La dirección del temario y la
Un debate y la valoración del legado de selección de los ponentes fue encomen-
Freud al que nos introducen, con sus no- dada al Dr. Alberto Fernández Liria con
tas editoriales, Marta Ráfols, directora de una demanda diáfana y de envergadura:
Humanidades de CaixaForum – gracias a invitar a cinco prestigiosos investigadores
la cual tenemos posibilidad de publicar para que nos expusieran los nuevos desa-
los textos de Siegel, Volkan, Hachele y rrollos y desafíos internacionales en teoría
Miguel Ángel González Torres–, y Alber- y práctica psicoanalítica.
to Fernández Liria, coordinador del ciclo
de conferencias 70 años sin Freud que se Desde el primer momento pusimos todo
está impartiendo en Madrid en estos días. nuestro empeño en procurar la convoca-
Una reflexión y un debate actuales sobre toria de un público heterogéneo formado
psicoanálisis, práctica clínica e investiga- por profesionales procedentes de distin-
ción científica, bien representado por los tos enfoques y escuelas psicoterapéuticas
conferenciantes, cuyos artículos constitu- y también por personas ajenas a la psico-
yen el cuerpo central de este número de logía. Haber logrado tal variedad de vo-
Átopos, junto con un texto de Nicolás Ca- ces –ponentes y público- nos parece muy
parrós sobre las teorías de la complejidad valioso máxime cuando es frecuente en
y las aportaciones psicoanalíticas. nuestro país que las convocatorias dirigi-
Manuel Desviat* das a psiquiatras y psicólogos se circuns-

L a manera de entender el mundo,


nuestro sentido del yo o, en palabras
de George Steiner, la forma de movernos
na las propias bases de la psicopatolo-
gía, rompiendo los límites de lo normal
y lo patológico, descentrando definitiva-
Freud en CaixaForum y la colaboración
criban únicamente a ámbitos cerrados y
sectorizados.
con Átopos Tradicionalmente psicoanálisis y las neu-
dentro de nuestra piel, es deudora de mente al hombre, como lo hiciera Marx
Freud, está impregnada por el psicoaná- en cuanto sujeto histórico. Más allá de En septiembre de 2009 se cumplieron 70 rociencias han reclamado para si una
lisis. Escribe Althusser que la razón occi- la clínica psicoanalítica o psiquiátrica, las años de la muerte de Sigmund Freud, un única verdad sobre el comportamiento
dental firmó, después de años de resis- ideas de Freud forman parte hoy del ima- pretexto para plantearse una revisión de humano. El psicoanálisis siempre ha visto
tencia, un pacto de coexistencia pacífica ginario común: la motivación, el valor del su legado. Tan innecesaria resultaba la en las prácticas de la psiquiatría biológi-
Fotograma de Recuerda
de Alfred Hitchcock, con el psicoanálisis que le introdujo en inconsciente, la importancia de los acon- excusa que hemos atravesado el umbral ca una manera artificiosa de afrontar los * Psiquiatra, director de
diseñado por Dalí la razón jurídica, religiosa, moral, política tecimientos tempranos, la sexualidad en de 2010 sin el menor reclamo de celebra- problemas del vivir que deja de lado la Átopos
y científica de la época. Freud revolucio- la infancia, el complejo edípico. Freud ciones. Lo cierto es que las admirables subjetividad o los modelos sociales basa-
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ÁTOPOS ÁTOPOS
dos en la teoría de la complejidad. Por su científicas, neurólogo de altas exigencias introducción del psicoanálisis, por ejem- Freud, fue, antes que nada, un clínico. El
parte, la psiquiatría biológica sigue repro- empíricas, autor literario, antropólogo y plo, supuso una auténtica conmoción psicoanálisis se constituyó a la vez como
chando al psicoanálisis su inconsistencia educador liberal atento a las transforma- cultural en los inicios del siglo veinte, las instrumento de intervención en la clínica
metodológica y la falta de estudios cientí- ciones sociales de su época...., no es posi- aportaciones de los culturalistas fueron y como intento de responder a los inte-
ficos estadístico-cuantitativos. No ha sido ble concebir la obra científica de Sigmund best sellers en los cincuenta y la voluntad rrogantes que clínica e intento de inter-
hasta muy recientemente que psicoanáli- Freud sobre el estudio de los procesos de descifrar el tipo de cuestionamiento vención planteaban. Ocurrió que no fue
sis y neurociencias han comenzado un es- mentales sin tener en cuenta sus vastos de los usos sociales que encerraba la lo- posible responder a esos interrogantes
peranzador y apasionado diálogo. conocimientos en múltiples ramas del sa- cura movió ríos de tinta en los sesenta y sin cuestionar los modelos desde los
ber. Con ese ávido y creativo bagaje cultu- setenta de la mano de los llamados an- que la cultura europea había pretendido
Los debates acontecidos en CaixaForum ral y con la minuciosa observación clínica, tipsiquiatras, de los reformadores de la entender tradicionalmente al ser huma-
Madrid permiten vislumbrar algunos míni- Freud supo ofrecernos una nueva mane- psiquiatría o de Michael Foucault y sus no: su desarrollo, las motivaciones de su
mos denominadores comunes entre la di- ra de “pensar” al hombre enfrentándolo secuelas... Pero también es verdad que se comportamiento y las construcciones de
versidad de prácticas terapéuticas ejerci- a su complejidad inconsciente. Emerge vio interrumpido en los ochenta y olvida- la cultura.
das por seguidores de Lacan, de Melanie hoy una encrucijada histórica y un mundo do y repudiado en esa Década del Cere-
Klein y de otras escuelas. Quizás el paso filosófico contemporáneo interesante y bro – en la que los clínicos perdieron la La obra de Freud representa – y ésta es
siguiente sería ahora lograr un diálogo y parecido, con unos territorios narrativos, cabeza y empezaron a actuar como si el su principal grandeza –una crítica radical a
una convergencia del psicoanálisis con las tecnológicos y científicos distintos que contacto con interlocutores que no fueran una concepción biempensante e ingenua
neurociencias pero también con otras dis- necesitan imperativamente unos de otros miembros de la propia profesión, cientí- del ser humano que se sustentaba en una
ciplinas del conocimiento. Muchas cosas y que exigen alimentarse mutuamente ficos básicos, gestores o patrocinadores, suerte de sentido común occidental que
están cambiando en la actualidad. En un para desarrollarse. sólo pudiera servir para contaminar la pu- no logró sobrevivir a tal crítica.
mundo intelectual caracterizado por una reza del lugar que la Ciencia parecía ha-
especialización radical va surgiendo para- Muchas gracias a los doctores Siegel, Frente a estas concepciones tradiciona-
berles asignado. les Freud propuso teorías alternativas,
dójicamente la necesidad de establecer Kaechele, Volkan, Miguel Angel González
puentes interdisciplinarios que abarquen Torres, y mi agradecimiento más sincero Hoy parecería que la sociedad no espe- que articuló a partir de sus observaciones
la compleja realidad del ser humano. Las al Dr. Alberto Fernández Liria y en espe- rara de los clínicos más que que cumplan clínicas, sobre cuestiones tan variadas
fronteras entre las distintas disciplinas del cial al Dr. Manuel Desviat por brindarnos con la función sanadora que les tiene como el desarrollo infantil, la memoria, el
conocimiento son día a día menos níti- la oportunidad de divulgar los trabajos de encomendada. No espera que su prác- recuerdo y el olvido, el efecto de las ex-
das y los estudios científicos, artísticos y tan reputados especialistas. tica plantee, además, preguntas, o haga periencias pasadas en la presente, las me-
sociales están cada vez más necesitados Marta Ráfols* aportaciones a pensamientos nacidos de diaciones entre los impulsos biológicos y
de unos modelos concordantes y consi- otras madres. Y los clínicos parecen ha- el comportamiento social o los modos en
lientes a los que debería sumarse el psi- ber articulado – a la sombra de la llama- los que las normas que hacen posible la
coanálisis. da medicina basada en la evidencia - un vida social tal y como la entendemos, son
formidable aparato para autoabastecerse hechas propias por los individuos a los
El Ciclo de Conferencias
El resultado de las discusiones recopila- de preguntas y de información para res- que integran los grupos humanos.
das en éste número de Átopos ha cumpli- Si algo ha caracterizado a la revista Átopos ponderlas sin salir de este campo que se Setenta años después de la muerte de
do nuestras expectativas de divulgación. desde su fundación en 2003 – y a su fun- les ha asignado. Freud, hallazgos – entonces impensables
Cinco investigadores enérgicos, con fuer- dador Manuel Desviat desde su época de
- procedentes de campos frecuentemente
zas intelectuales aptas para la incesante estudiante, algunas décadas antes - es su Por eso, después de que, en el año 2009 -
muy diferentes de aquellos en los que él
investigación de nuestro cerebro social, apuesta por la posibilidad de un diálogo setenta después de la muerte de Sigmund
trabajó han aportado nuevas luces sobre
han expresado con ardor sus opiniones y entre la clínica y la sociedad y el convenci- Freud -, el CaixaForum, llevado por el
estos temas, que, a veces, han resaltado
han debatido sobre los nuevos horizontes miento de que el establecimiento de este atrevimiento de Marta Ráfols, haya hecho
los relieves de lo que él afirmó, a veces lo
del psicoanálisis. diálogo será fructífero para una y otra. valer también su apuesta por ese diálogo
han matizado, a veces le han otorgado un
entre clínicos y gente culta, programando
El panorama descrito nos devuelve en No es una apuesta novedosa. Pero sí pa- sentido nuevo y, a veces, lo han puesto en
*Directora de Humani- una escenificación del mismo en diversos
cierto modo a las remotas raíces viene- recía extemporánea. Es verdad que ese cuestión.
dades de la Fundación ciclos de conferencias, no es de extrañar
Caixa sas culturales de Freud. Excavador de diálogo se ha dado desde los orígenes de que su iniciativa acabara confluyendo con Algunos de estos hallazgos provienen de
enigmas y mitos, constructor de hipótesis la psiquiatría y la psicología moderna: La la de Átopos en esta publicación. observaciones rigurosas y sistemáticas
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ÁTOPOS ÁTOPOS
del desarrollo humano. Otros del mejor nadie ha integrado como Daniel Siegel,
El trauma masivo causado por el enemigo:
conocimiento de la estructura y funcio- autor de “La mente en desarrollo”. su influencia en la identidad del grupo grande
namiento del sistema nervioso. Otros de
otros avances en el campo de las ciencias Los practicantes del psicoanálisis han sido y sus consecuencias políticas y sociales.
sociales. durante años reluctantes a la práctica de
la investigación empírica. Y los esfuerzos Vamik Volkan M.D.
Los trabajos que se recogen aquí se co- realizados en ese campo han sido con
rresponden con las conferencias imparti- frecuencia poco visibles. Ello ha sido sin
das del ciclo titulado “70 años sin Freud” duda uno de los factores que han facilita-
en el Caixaforum de Madrid a comienzos do la pérdida de hegemonía de las ideas
de 2010. psicoanalíticas en la práctica clínica están-
dar a favor de las de otras escuelas. Sin
El psicoanálisis es, para quien justifica su embargo, ha habido excepciones y, hoy,
existencia, el analizando, una experiencia. cuando el antiguo prejuicio de los profe-
De la experiencia en y con el psicoanáli- sionales parece dar paso a una mayor dis-
sis escribe Miguel Ángel González Torres posición a la búsqueda de contrastación
que, como nadie entre nosotros, ha sabi- empírica más allá de la clínica individual,
do aunar su práctica en la sanidad públi- hay cantidades importantes de trabajo
ca, su actividad docente, la práctica del que sopesar y sobre el que seguir progre-
psicoanálisis, la curiosidad por casi todo, sando. El profesor Horst Kächele y la Uni-
la creatividad y la sabiduría necesaria para versidad de Ulm, cuyo equipo ha liderado
no ahogarse entre tanto elemento. por muchos años han sido líderes en este
Freud intentó desde un principio relacio- modo de proceder.
nar los primeros hallazgos del psicoaná- A Freud no se le pasó desapercibido que
lisis con el conocimiento entonces exis- las ideas surgidas de la práctica clínica
tente del sistema nervioso central. Pero podían arrojar luz sobre los fenómenos
en el punto de su desarrollo en el que sociales. Y dedicó a ello una parte de su
ambos saberes se encontraban entonces obra. También en este terreno se han pro-
el encuentro era imposible. Hoy ese en- ducido desarrollos nuevos e importantes.
cuentro puede aportar enseñanzas a uno El trabajo de Vamik Volkan sobre el trau-
y otro lado. La importancia de las etapas ma masivo causado por otros, es proba- Vietnam, Nick Ut 1972
tempranas del desarrollo fue señalada blemente el mejor ejemplo de esto.
desde sus orígenes por el fundador del

C
psicoanálisis. Pero lo fue a partir de infe- En cualquier caso se trata de aportacio- uando un trauma masivo causado masivo de la generación directamente
rencias realizadas desde el trabajo con nes relevantes, llamadas a suscitar una por el enemigo, termina o se croni- afectada. Estas transmisiones transge-
sus pacientes adultos. Desde entonces reflexión que debería servir para tomar fica, los afectados sufren sus consecuen- neracionales contaminarán los conteni-
se han realizado importantes avances en de Freud aquello que nos parece más cias psicológicas de distintas maneras: dos de la identidad del grupo grande
el conocimiento del desarrollo ontoge- reseñable: su actitud crítica basada en la Primero, muchos individuos presentarán y, con el paso del tiempo, incluso siglos
nético del ser humano que, además han observación de lo nuevo. diversas formas de estrés postraumáu- más tarde, tendrán consecuencias polí-
permitido poner de manifiesto, contra la Alberto Fernández Liria* tico. Segundo, aparecerán nuevos pro- ticas significativas y, a menudo, crearán
escisión cartesiana, el interjuego entre las cesos sociopolíticos en el grupo grande resistencias pertinaces contra soluciones
relaciones establecidas en estos primeros Vamik Volkan, M.D.
*Psiquiatra.Hospital afectado. Y, tercero, las personas trau- pacíficas a los conflictos internacionales Profesor emérito de
años y el desarrollo no sólo de la persona-
Universitario matizadas, de una manera sobre todo del momento. psiquiatría en la Facultad
Príncipe de Asturias. lidad, sino también del sistema nervioso de Medicina de la Uni-
inconsciente, obligarán a sus descen-
Universidad de Alcalá central. Relaciones que probablemente versidad de Virginia.
dientes a resolver las tareas psicológicas Este artículo se centra en las dos últimas
inconclusas relacionadas con el trauma formas de expresión del impacto psico-
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ÁTOPOS ÁTOPOS
lógico que provocan los desastres infligi- símbolo que de forma prácticamente in- religiosos o políticos, y especialmente si díos cuando, como no creyente, nunca
dos por el enemigo, y aporta conceptos consciente, ejerce de figura paterna y/o el grupo sometido se rinde desde la pa- había compartido una fe religiosa o un
psicoanalíticos referidos a asuntos inter- representa la identidad del grupo gran- sividad y la desesperanza, entonces exis- orgullo etno-nacionalista. Sin embar-
nacionales. En este contexto, el grupo de) para muchos miembros del grupo te un grupo grande enemigo, identifica- go, Freud señalaba la “sensación de
grande consiste en miles o millones de grande, provoca respuestas sociológi- ble, que ha infligido dolor, humillación y seguridad procurada por un constructo
personas, la mayoría de las cuales nun- cas (como sucedió con los asesinatos de muerte sobre sus víctimas. Este trauma mental común”, y una clara conciencia
ca se encuentran las unas con las otras, John F. Kennedy en los Estados Unidos se produce porque el grupo afectado y de su identidad interna (¿como judío?)
y que comparten similitudes étnicas, (Wolfenstein and Kilman 1965) e Isaac los perpetradores pertenecen a grupos (Freud 1926, p. 274). Resulta interesante
religiosas, nacionales o políticas—a pe- Rabin en Israel (Erlich 1998; Raviv, et al grandes diferentes, y el asesinato y la que Freud vincule en sus comentarios su
sar de los subagrupamientos familiares 2000), o las muertes de astronautas nor- destrucción se llevan a cabo en nombre identidad individual con la identidad de
y profesionales, del estatus social, y de teamericanos, especialmente del pro- de la identidad del grupo grande (Vo- su grupo grande.
las diferencias de género—así como ca- fesor Christa McAuliffe en la explosión lkan 2006).
racterísticas con los grupos vecinos o los del transbordador espacial Challenger. Aunque no existe una descripción clara
grupos enemigos. (Volkan 1997). Otros traumas masivos se Las cuestiones de identidad de grupo de “identidad” en términos específica-
deben a acciones deliberadas por parte grande también pueden aparecer en mente psicoanalíticos, sí que hay con-
Ya que este artículo va a ser publicado de un grupo enemigo, como sucede en otros tipos de trauma masivo. Por ejem- senso en cuanto a que se refiere a una
en España, debo admitir que no soy un los conflictos étnicos, nacionales, religio- plo, después del terremoto de 1988 en experiencia subjetiva. A diferencia de
experto en las variedades étnicas de sos e ideológicos. Estas catástrofes se Armenia, que resultó en decenas de términos como “carácter” y “persona-
este país, ni otras cuestiones relaciona- comprenden en un espectro que va des- miles de muertos o heridos, la negativa lidad” que los otros pueden observar y
das con grupos grandes, ni con las tra- de la sumisión hasta el maltrato crónico de los armenios a recibir sangre azaja percibir, la identidad se refiere a un mo-
gedias conectadas con éstos. Mis ejem- o la opresión por “el otro” dentro de una tiñó su tragedia de odio al enemigo. El delo interno de trabajo del individuo: él
plos sobre traumas masivos causados misma nación, o los ataques terroristas, grupo-víctima rechazó sangre que nece- o ella, y no un extraño, la siente y la ex-
por el enemigo proceden de otras par- guerras e incluso genocidios, y desde sitaba porque “mezclar las sangres” sig- perimenta. Erik Erikson, un psicoanalista
tes del mundo. Pero estas experiencias el grupo traumatizado que combate nificaría mezclar las identidades de sus que se centró en el tema de la identidad,
humanas son universales, y espero que activamente al enemigo hasta el grupo grupos grandes. primero utilizó el término “identidad
examinando los procesos sociopolíticos traumatizado que se somete de manera del yo”, y después se desprendió de la
conectados con esos traumas en otros pasiva y sin esperanza. La identidad del grupo grande palabra “yo” para emplear únicamente
lugares, también pueda arrojar algo de “identidad” (Erikson 1956). La describió
luz sobre cuestiones referidas a grupos Cuando la naturaleza desata su furia so- Las ideas de Sigmund Freud acerca de como una “semejanza persistente con
grandes en España. bre las personas, las víctimas terminan la psicología del grupo grande (1921) no uno mismo... (y) un compartir de deter-
aceptando lo sucedido como designios concedían demasiada importancia al pa- minadas cosas con los otros” (p. 57).
Tipos de trauma masivo del destino o como la voluntad de Dios pel de la identidad. Sin embargo, se cen-
(Lifton y Olson 1976). En los desastres tró en los miles o millones de personas En este artículo voy a centrarme en la
Los traumas masivos son de distintos ti- debidos a fallos humanos, los supervi- que marchan tras un líder, que se iden- identidad del grupo grande ¿Qué es la
pos. Algunos obedecen a causas natura- vientes culpan del descuido a un número tifican las unas con las otras e intentan, identidad del grupo grande? El término
les, como tormentas tropicales, tsunamis, reducido de personas o a organizaciones asimismo, identificarse con el líder idea- “grupo grande” en la literatura psicoa-
inundaciones, erupciones volcánicas, in- gubernamentales. Cuando un líder mue- lizado. Freud rara vez empleó el término nalítica a menudo se refiere a 30-150
cendios forestales, o terremotos. Otros re asesinado (no por “otros”, sino por un “identidad” como tal y, cuando lo hizo, miembros que se reúnen con el fin de
se deben a errores humanos, como el individuo perteneciente al mismo grupo fue en un sentido coloquial. Una conoci- tratar un tema determinado (Kernberg
accidente de Chernobil del año 1986, grande que el líder) la rabia va dirigida al da referencia de Freud a la identidad es 2003 a, b). Yo empleo el término “gru- Freud señalaba la “sen-
que liberó toneladas de material radiac- asesino y, si la hay, a la organización po- la que puede encontrarse en el discurso po grande” para referirme a decenas, sación de seguridad pro-
tivo a la atmósfera. A veces, la muerte lítica a la que éste pertenece. Si un trau- que dio a B’nai B’rith. En el transcurso cientos de miles, o millones de indi- curada por un constructo
mental común”, y una clara
de una persona que funcionaba como ma es producto de la opresión, la guerra de la conferencia, Freud se preguntaba viduos –la mayoría de los cuales no se conciencia de su identidad
“figura transferencial” compartida (un u otros conflictos étnicos, nacionalistas, por qué él se sentía vinculado a los ju- encontrarán en ningún momento de sus interna.

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ÁTOPOS ÁTOPOS
vidas- que comparten un profundo sen- Bajo la tienda enorme del grupo gran- po grande a expensas de su identidad evitar que puedan volver sobre nosotros.
tido de pertenencia entre ellos desde la de hay subgrupos e identidades de individual. Su preocupación es el “no- Ya sea que la victimización se cronifique
infancia en adelante. Esta definición de subgrupos, como las identidades pro- sotros”, que se desgarre la lona de su o no después de la fase aguda de la ca-
grupo grande se refiere a aquellos gru- fesionales. Una persona puede cambiar tienda de grupo grande, y se preparan tástrofe, los dos principios mencionados
pos caracterizados por su etnia, religión, de identidad de subgrupo sin demasia- emocionalmente para hacer cualquier pueden mantenerse operativos durante
nacionalidad, o ideología política, como da ansiedad, a menos que ese cambio cosa con el fin de proteger su identidad años, o décadas. Cualquier circunstancia
el comunismo. La identidad de grupo esté conectado inconscientemente con de grupo grande y diferenciarla clara- que los amenace genera una ansiedad
grande se refiere a la experiencia sub- un peligro psíquico, como la pérdida de mente de la identidad de los “otros”, masiva, y los grupos grandes pueden
jetiva de miles o millones de personas la propia madre. Pero por motivos prác- incluso si se requiere para ello una tole- sentirse autorizados a hacer cualquier
que, desde la infancia, están unidos por ticos, un individuo no puede cambiar el rancia elevada al masoquismo y sadismo cosa para preservar los principios de di-
un sentimiento persistente de semejan- núcleo de su identidad de grupo gran- compartidos. Cuando encontramos en- ferenciación absoluta –lo que, a cambio,
za, aunque también comparten algunas de. Hablo de situaciones típicas, y no vidia y deseo de ser como el enemigo, protege su identidad de grupo grande.
características con otros que pertenecen tomo en consideración aquí a individuos dichos deseos compartidos se mantie- De este modo, las interacciones hostiles
a grupos diferentes. excepcionales en la sociedad, como nen a un nivel inconsciente. Lo que aquí se perpetúan.
aquellos que han nacido de padres de se describe, se observa con facilidad en
Utilizar una analogía de grandes tiendas diferente grupo étnico, o inmigrantes los campamentos de refugiados o en los Transcurridos unos años después de un
de campañas ayuda a explicar la iden- voluntarios o disidentes. Pensemos en asentamientos de personas desplazadas trauma masivo que no se inició de forma
tidad de grupo grande. Pensemos pri- un hombre –digamos que español- que de su propio territorio. deliberada por parte del enemigo y que
mero en términos de aprender desde es fotógrafo, y que decide abandonar la no está contaminado con humillación, se
niños a llevar dos capas de ropa. La pri- práctica de la fotografía y dedicarse a la Reacciones iniciales al trauma masivo pueden observar signos de los que Wi-
mera capa, la capa individual, se ajusta carpintería. Podrá decir que es carpinte- causado por el enemigo y cuestio- lliams y Parks (1975) denominaron “rege-
a nosotros cómodamente. Es el núcleo ro en lugar de fotógrafo, pero no podrá nes referidas a la identidad de grupo neración biosocial” (p. 304). Por ejemplo,
de nuestra identidad personal, que nos dejar de ser español para convertirse en grande estos autores refirieron que en los cinco
proporciona un sentimiento interno de alemán. Su nacionalidad es parte del nú- años siguientes a la muerte de 116 niños
identidad persistente. La segunda capa cleo de su identidad de grupo grande. Cuando se encarniza un conflicto entre y 28 adultos en los pueblos galeses de
es la lona externa de la tienda, más am- Ambos núcleos de identidad se desa- dos grupos grandes vecinos, hay dos Aberfan y Merthir Vale por una avalancha
plia, pero que permite a la persona com- rrollan en la infancia y se mezclan y cris- principios que gobiernan las relaciones de carbón, se produjo un incremento sig-
partir un sentimiento de identidad con talizan durante la adolescencia (Volkan entre las personas de cada grupo: 1) nificativo en la tasa de nacimientos entre
los otros que están bajo la misma tien- 1997). Los grandes acontecimientos his- Mantener la identidad del grupo grande las mujeres que no habían perdido nin-
da/grupo grande. Se utilizan algunos tóricos modifican la identidad de grupo separada de la identidad del enemigo; 2) gún hijo. Se equilibraron la “pérdida “y
hilos comunes, como las identificaciones grande. Sin embargo, raras veces tiene Mantener a toda costa la frontera psico- la “ganancia” en el número de niños. Sin
con los otros más cercanos, para elabo- lugar el desarrollo de una nueva etique- lógica entre los dos grupos grandes (Vol- embargo, tras el accidente de Chernobil,
rar las dos capas, la de la indumentaria ta de identidad de grupo grande, como kan 1988, 1997, 2006). Cuando la gente las mujeres de Belarus temían engendrar
personal y la lona de la tienda común. sucedió con los eslavos del Sur cuando percibe que esos dos grupos grandes hijos con defectos congénitos debido a
De este modo, el núcleo de la identidad se convirtieron en bosnios bajo el domi- no son iguales, cada parte puede exter- su exposición a la radiactividad, por lo
individual y el núcleo de la identidad del nio del Imperio Otomano. nalizar sus propios aspectos indeseados que la tasa de nacimientos disminuyó. No
grupo grande están interconectados y proyectar con mayor eficacia en el ene- se produjo regeneración biosocial en los
(Volkan 1988, 1997, 2004). Es el mástil de Las identidades de grupo grande se in- migo sus pensamientos inaceptables, lle- años que siguieron al desastre causado
la tienda –el líder- lo que la sostiene en visten de narcisismo compartido (Volkan gando incluso, en ocasiones, a superar en por el hombre.
pie, y es la lona de la tienda (la identi- y Fowler 2009). Resulta interesante ob- varios grados la “deshumanización” del Después de un trauma masi-
dad del grupo grande) la que protege el servar que, cuanto más traumatizados enemigo. La importancia de mantener la Después de un trauma masivo causado vo causado por el enemigo,
es habitual que se rompa
estado psicológico tanto del líder como por el enemigo están los miembros de frontera psicológica entre los dos grupos por el enemigo, es habitual que se rompa
la espina dorsal del grupo
del grupo. un grupo grande, mayor es el narcisismo grandes está al servicio de controlar las la espina dorsal del grupo grande y ten- grande y tenga lugar una
con que se inviste su identidad de gru- externalizaciones y proyecciones, para ga lugar una “degeneración biosocial”. A “degeneración biosocial”.

10 11
ÁTOPOS ÁTOPOS
menos que exista una esperanza de sal- y ayuda a los supervivientes a descargar Después de un trauma causado por el que en esta recreación se había distor-
vación compartida. A los turcochipriotas sus emociones, confirmando el hecho de enemigo, el grupo grande victimizado sionado el procedimiento y se había fun-
se los obligó a vivir en unas condiciones que están vivos, y manejando la culpa de desea aferrarse intensamente a sus pro- dido con agresividad dirigida a su propio
inhumanas durante once años en encla- su supervivencia mediante la negación. pios símbolos y costumbres de grupo grupo grande.
ves restringidos al 3% de la isla, desde el Los chistes que siguen a un desastre cau- grande, de manera que prevalezca la
año 1963 hasta que el ejército turco lle- sado por el enemigo son diferentes. La protección y el mantenimiento del gru- También tienen lugar violaciones cre-
gó a la isla en 1974 y dividió Chipre en gente no se ríe de su propia muerte, ni po grande. Volviendo a la analogía con cientes y otros patrones de comporta-
una sección turca al Norte, y secciones de las cosas que pierden. En estos casos, las tiendas de campaña, podemos ima- miento destructivo en áreas donde la
griegas al Sur. Durante los primeros cin- en las bromas hay una referencia directa ginar que sus tiendas tienen pintados opresión a manos del “otro” es crónica.
co años de estar sitiados por el enemigo, a la “maldad” del enemigo. Por ejem- en sus lonas diseños específicos. Estos La literatura sobre el apartheid en Sudá-
hasta 1968, los turcochipriotas no fueron plo, cuando estudié la sociedad kuwaiti motivos son indicadores de la identidad frica así lo ilustra (Sinason 2001). Cundo
capaces siquiera de abandonar sus en- después de la invasión por las tropas de de su grupo grande. Cuando el enemi- visité Sudáfrica en 2006, después del
claves porque mantenían la esperanza de Sadam Hussein, advertí que los chistes se go los rasga o los borra, el grupo gran- apartheid, las estadísticas sobre conduc-
ser salvados por Turquía, su espina dorsal referían a los soldados iraquíes como si de victimizado desea volver a pintarlos. tas violentas indicaban que la agresión
no estaba rota, y adoptaron una forma de no existiera diferencia entre los animales Como ahora están desamparados, humi- se había vuelto hacia el propio grupo
regeneración que consistía en compartir destinados al consumo humano, como el llados y furiosos, volver a pintarlos está grande y continuaba creciendo (Volkan
los símbolos y el desplazamiento. Duran- cordero, y los animales no comestibles del impregnado de una agresividad que se 2009). Algún tiempo antes, Eagle y Watts
te este tiempo desarrollaron un hobby zoo, como los tigres. Los invasores apare- vuelve hacia ellos mismos. Pudimos ver (2002) señalaron datos en Sudáfrica que
que consistía en criar papagayos en jau- cían como unos estúpidos. A nivel super- ejemplos de este fenómeno tras la caída revelaban unas estadísticas inquietantes:
las. Los pájaros enjaulados representaban ficial, degradar al enemigo incrementa el de la Unión Soviética, cuando Georgia una media de 52 asesinatos al día, una
sus self cautivos. Mientras ellos pudieran narcisismo del grupo grande. Una obser- se hizo república independiente y aflo- violación cometida cada 30 minutos, un
cuidar de los papagayos, y mientras los vación más detenida muestra vergüenza raron conflictos étnicos enormemente robo de coche cada 9 minutos y un atra-
papagayos pudieran engendrar crías, so- y degradación entre las víctimas. Parece sangrientos. La guerra entre los georgia- co a mano armada cada 11 minutos. En
brevivir y reproducirse, los turcochipriotas ser que los soldados invasores habían nos y los osetios del Sur traumatizó se- 2006, la Fundación para la Prevención de
serían capaces de tolerar las condiciones abierto las puertas de las jaulas de las veramente a los osetios del Sur así como Accidentes en la Infancia (CAPFSA) sacó
inhumanas en que se encontraban (Vo- bestias en el zoo de la ciudad de Kuwait. a los georgianos. Cuando mi “equipo a la luz unas estadísticas demoledoras
lkan1979). Violaron a mujeres kuwaitíes y encerraron psicopolítico” y yo empezamos a visitar referidas a la violencia infantil: 1200 ni-
a una o dos, desnudas, en esas jaulas. Si con frecuencia esta parte del mundo, du- ños asesinados, 1500 niños víctimas de
Normalmente, después de un trauma esta historia es cierta o no, no importa. rante un periodo de seis años que em- intento de asesinato, 24000 niños asal-
masivo comienzan a circular bromas com- Lo importante es que los kuwaitíes creen pezó a comienzos de los 90, advertí que tados y 22000 niños violados a lo largo
partidas. Después del devastador terre- que estos acontecimientos degradantes en Osetia del Sur se había desarrollado del año anterior (Cape Times, 2006). Me
moto de Méjico en 1985, en el que hubo ocurrieron. Reír de los chistes del zoo ex- un patrón destructivo nuevo. En condi- llamó la atención la transmisión del trau-
aproximadamente 10000 muertos y el ca- presa un intento de negar o dar la vuelta ciones normales, los Osetios del Sur pre- ma masivo de una generación a otra en
pital nacional resultó seriamente dañado, a la humillación de la identidad del grupo sentaban el siguiente fenómeno cultural: Sudáfrica.
la gente de Méjico comenzó a preguntar grande. Los jóvenes kuwaitíes generali- Un joven fingía raptar a una joven –con el
“¿En qué se parecen un donut (un bollo zaron la idea de las violaciones de muje- conocimiento de las familias y amigos de Las transmisiones transgeneraciona-
con un orificio en el centro) y Ciudad de res y, durante algún tiempo, trataron de ambos- antes de casarse con ella. Pero les
Méjico?”. La respuesta era que tanto al retrasar sus matrimonios, con la idea (in- tras el trauma masivo, el número de vio-
donut como a la Ciudad de Méjico les consciente) de que las mujeres con que laciones en la región se había disparado. El conocimiento psicoanalítico sobre la
Cuando la gente hace bro- faltaba la mitad. Cuando la gente hace iban a casarse también habían sido viola- Entrevistamos a docenas de mujeres vio- transmisión del trauma de una genera-
mas sobre sus propias pér- bromas sobre sus propias pérdidas, es un das. La naturaleza de los primeros chistes ladas y a sus familias, y descubrimos que ción a la siguiente procede fundamen-
didas, es un indicador de
indicador de que, con el paso del tiem- después de un trauma masivo puede ser- el principal motivo para esta tragedia era talmente de los estudios realizados con
que, con el paso del tiem-
po, superarán el trauma po, superarán el trauma compartido. La vir de indicador de cómo se recuperará el el deseo de adhesión al indicador cultu- judíos sobrevivientes al Holocausto y
compartido. risa es la otra cara de los afectos tristes, grupo grande a largo plazo. ral del “rapto” de futuras esposas, sólo su descendencia. La literatura sobre el
12 13
ÁTOPOS ÁTOPOS
tema es amplia. (Para consultar estos El trauma elegido como un indicador mea en 1944. Los israelíes y judíos de Lazar, que murió en la batalla- se mez-
estudios recurrir a: Grubich-Smitis 1979; de la identidad del grupo grande todo el mundo, incluso lo que no fueron clan con elementos y personajes del
Kestenberg y Brenner 1996; y Volkan, afectados personalmente por el Holo- Cristianismo. Con el paso de las déca-
Ast y Greer 2002): cuando una sociedad Las imágenes y tareas que incluye la causto, siempre definen su identidad das, el Príncipe Lazar quedó asociado a
se convierte en objetivo de una agre- transmisión transgeneracional del trau- de grupo grande por medio de referen- Jesucristo, y los iconos que muestran la
sión masiva deliberada por parte de los ma contienen referencias a un mismo cias directas o indirectas al Holocausto. representación de Lazar han decorado,
“otros”, el grupo grande victimizado acontecimiento histórico que, con el El Holocausto está aún muy candente de hecho, muchas de las iglesias serbias
tiene que tratar con la vergüenza, la hu- paso del tiempo, hacen que la represen- como para considerarlo un trauma ele- a lo largo de los seis siglos transcurridos
millación y la deshumanización (Bernard, tación mental de dicho acontecimiento gido ya establecido, pero sí que se ha desde la batalla. Incluso durante el régi-
et al 1973), la culpa por la supervivencia una a todos los individuos de ese grupo convertido en un indicador étnico, a pe- men comunista, cuando no se autorizaba
(Niederland 1961), la dificultad para ser grande. De este modo, dicha represen- sar de que los judíos ortodoxos siguen el culto al héroe, los serbios consiguieron
asertivo, las identificaciones indeseadas tación mental deviene en un indicador considerando la destrucción del templo beber (introyectar) un vino tinto llamado
con el agresor (Sebek 1994) y los duelos significativo de la identidad de grupo de Jerusalén por Nabucodonosor en el “Príncipe Lazar”.
complicados de personas, tierra, honor grande. He decidido denominar “el año 586 aJC como el trauma elegido
y prestigio (Volkan 2009): Los miembros trauma elegido” a este evento que, de de los judíos. Algunos traumas elegidos A medida que el sexcentésimo aniversa-
del grupo no pueden revertir las cargas hecho, tuvo lugar en el tiempo de los no son fáciles de detectar porque no rio de la batalla de Kosovo se aproxima-
psicológicas con éxito, y sus mundos ancestros (Volkan, 1991, 2006). El grupo se conectan a un único acontecimiento ba en 1989, con el permiso y el aliento
internos están ocupados por imágenes grande no elige ser victimizado. Lo que histórico. Por ejemplo, el trauma elegi- de Milosevic, los restos de Lazar, que se
dañadas de ellos mismos y de otros elige es hacer un indicador significativo do de los estonios no se relaciona con habían conservado al norte de Belgrado,
pertenecientes a la misma identidad de de su identidad a partir del trauma masi- un acontecimiento específico, sino con se guardaron en un ataúd y visitaron a
grupo grande. Destinan sus imágenes vo causado por el enemigo que sufrieron el hecho de que haber vivido bajo una lo largo de un año prácticamente todos
de self y objeto dañados al desarrollo de sus antepasados. dominación constante durante miles de los pueblos y ciudades serbias, donde
representaciones de ellos y sus hijos y, años (suecos, alemanes, rusos). grandes multitudes vestidas de luto los
de manera casi totalmente inconscien- De forma explícita o tácita, o de ambas recibían. Una y otra vez durante el largo
te, colocan en el yo de sus hijos la tarea formas alternativamente, los traumas La reactivación del trauma elegido viaje, los restos de Lazar se enterraban
de manejar los mencionados malestares elegidos pueden persistir durante siglos. simbólicamente y se volvían a exhumar,
psicológicos compartidos, con el fin de En tiempos “normales” se pueden revi- El trauma elegido como indicador de la hasta que se los enterró definitivamente
resolverlos con éxito. Cundo los indivi- vir de manera ritual en el aniversario del identidad de un grupo grande puede en el campo de batalla original en Ko-
duos de la siguiente generación no tie- acontecimiento original. Los griegos se quedar escondido durante un tiempo o sovo, el 28 de Junio de 1989. Este día,
nen éxito en la resolución de las tareas unen al compartir el “recuerdo” de la reactivarse en determinadas circunstan- el del sexcentésimo aniversario de la
psicológicas que les fueron encomen- caída de Constantinopla (Estambul) a cias. Los líderes políticos utilizan algunas batalla de Kosovo, Milosevic acudió en
dadas, pasarán esas imágenes con las manos de los turcos en 1453; los rusos reactivaciones para promover movimien- helicóptero al lugar donde se habían en-
tareas que llevan asociadas a una nueva rememoran la invasión tártara de siglos tos sociales masivos, algunos de ellos terrado las reliquias y se había erigido un
generación. También pueden aparecer atrás; los checos conmemoran la batalla mortíferos y malvados (Volkan 2004). La enorme monumento en piedra roja que
procesos similares en los descendientes de Bila Hora que los condujo a la sumi- historia de cómo Slobodan Milosevic simbolizaba la sangre vertida. En la mito-
de los verdugos. Por ejemplo, entre los sión durante 300 años bajo el imperio de permitió y alentó la reaparición del trau- logía Lazar había elegido el Reino de los
alemanes de la era posterior a los nazis, los Habsburgo; los escoceses mantie- ma serbio – la representación mental de Cielos sobre el Reino en la tierra. Simbó-
se observó la dificultad o incapacidad nen viva la historia del fracaso de Bonnie la batalla de Kosovo, el 28 de Junio de licamente, Milosevic descendió en heli-
para elaborar duelos, (Mitscherlich and Prince Charlie cuando intentó restituir a 1389 – está bien documentada (Volkan cóptero, representando al Príncipe Lazar
Mitscherlich 1975). Los descendientes Stuart al trono británico; los indios Dako- 1996). De acuerdo con el mito surgido que venía a la tierra a encontrar un nuevo
de los perpetradores se preocupan más ta de los Estados Unidos recuerdan su entre los serbios unos 70 años después reino, la Gran Serbia.
por los sentimientos compartidos de aniquilación en Wounded Knee en 1890; de la batalla de Kosovo, el acontecimien-
culpa que por el sentimiento comparti- los tártaros de Crimea se definen como to y los personajes que en él aparecen De este modo Milosevic y sus socios acti-
do de humillación. un colectivo que fue deportado de Cri- –especialmente el líder serbio Príncipe varon las representaciones mentales del
14 15
ÁTOPOS ÁTOPOS
Príncipe Lazar y de la batalla de Kosovo, que el otro se vincula con un monumen- seos y defensas comunes, asociados al los procesos sociopolíticos, como suce-
y con el pico de emoción que generaron, to distinto. trauma elegido, imágenes sobredimen- de con la comprensión de los procesos
alimentaron un sentimiento de victimiza- sionadas del enemigo y los conflictos y significados de las consecuencias del
ción en primer lugar, y de legitimación Además de erigir monumentos, los gru- actuales. El trauma elegido reactivado trauma masivo causado por el enemigo,
para la venganza a continuación. pos grandes intentan tanto negar las pér- y la ideología legitimadora espoleada que permite al psicoanálisis unirse a otras
didas de sus ancestros como recuperar- aumentan el investimiento narcisista de disciplinas en el examen de las causas de
Las ideologías políticas legitimadoras las mediante el desarrollo de ideologías la identidad del grupo grande. Llama los conflictos de grupo grande y los in-
legitimadoras. Estas ideologías también la atención que, en esos momentos, la tentos de desarrollo de estrategias para
La reactivación de los traumas elegidos se conocen como irredentismo. Esta pa- paz se percibe como un proceso de re- lidiar con ellos (Volkan 1999, 2006).
alimenta las ideologías legitimadoras. labra procede de la “Italia irredenta”, tirada de dicho investimiento narcisista. Traducción, Ana Moro
Una ideología legitimadora se refiere al que alude a los nacionalistas italianos del La reactivación del trauma elegido y la
sentimiento compartido de autorización siglo XIX y a su deseo de anexionar de- ideología legitimadora crean mayores
para recuperar lo que se considera perdi- terminados territorios vecinos a las prin- resistencias hacia la convivencia pacífica Bibliografía
do ante el enemigo. Conecta con la difi- cipales poblaciones italianas, con la idea con el enemigo de siempre.
Bernard, V. W., P. Ottenberg, and F. Redl.
cultad que se ha transmitido de terminar de unificar todas las etnias presentes en (1973). Dehumanization: A composite psycholo-
las tareas inconclusas de los antepasa- el pueblo italiano. La “Megali Idea” de Conclusiones gical defense in relation to modern war. In Sanc-
tions for Evil: Sources of Social Destructiveness,
dos relacionadas con el trauma masivo los griegos (Gran Idea) también es una eds. N. Sanford and C. Comstock, pp. 102-124.
causado por el enemigo, especialmente ideología legitimadora que se refiere al Las cuestiones sobre la identidad del San Francisco: Jossey-Bass.
la necesidad compartida de elaborar el deseo compartido de recuperar lo que grupo grande se plantean siempre tras Cape Times (2006). Editorial: Suffer the Chil-
duelo (Volkan 2007). La realización del ellos consideran territorio griego, y que los traumas masivos causados por el dren, November 22, p.10.
duelo es la respuesta psicobiológica ahora está en poder de otros. La Megali enemigo. Este artículo habla sobre los Eagle, G., and J. Watts (2002). Psychodynamic
obligada para el ser humano que sufre Idea ha desempeñado un papel signifi- cambios sociopolíticos que tienen lugar contributions to formulations of the impact and
una pérdida significativa. Los grupos cativo en la política griega, así como en durante los primeros años transcurridos treatment of traumatic stress incidents: Part 1. Psy-
cho-Analytic Psychotherapy in South Africa, 10:1-24.
grandes también elaboran sus duelos. Lo varios acontecimientos sangrientos de después de un trauma masivo. También
que sucede es que, al estar constituidos la su historia (Hertzfeld 1986; Markides describe los efectos de dicho trauma a Erikson, E. H. (1956). The problem of ego iden-
por miles o millones de personas, cuan- 1977; Volkan e Itzkowitz 1994). Con la largo plazo, y cómo se generan resisten- tity. Journal of the American Psychoanalytic Asso-
ciation, 4: 56-121.
do comparten una actividad mental, ésta reactivación del trauma serbio, Milosevic cias contra las soluciones pacíficas de los
toma la forma de un movimiento social, también alimentó el cristianismo eslavo, conflictos con los enemigos del momen- Erlich, H. S. (1998). Adolescents’ reactions to
Rabin’s assassination: A case of patricide? In Ado-
cultural o político. Por ejemplo, la cons- ideología legitimadora de los serbios. to presente y en ocasiones se convierten lescent Psychiatry: Developmental and Clinical
trucción de un monumento a las perso- en tragedias mayores. Studies, ed. A. Esman, pp.189-205. London: The
nas o las tierras perdidas tras un trauma a El desmoronamiento del tiempo Analytic Press.
manos del enemigo, en un principio pa- Freud, en su carta a Albert Einstein (1932), Freud, S. (1921). Group psychology and the
rece un hábito cultural. Una mirada más Las ideologías legitimadoras pueden du- era pesimista acerca de la naturaleza hu- analysis of the ego. Standard Edition, 18: 65-143.
London: Hogarth Press.
atenta a esos monumentos muestra que rar siglos, y pueden desaparecer y apa- mana y el papel del psicoanálisis en la
están asociados al deseo de completar recer de nuevo cuando las circunstancias detención de las guerras. El pesimismo Freud, S. (1926). Address to the society of B’nai
B’rith. Standard Edition, 20: 271- 274. London:
el duelo del grupo grande, y que ayuda políticas cambian, así como influir en de Freud se contagió a muchos de sus Hogarth Press.
a sus miembros a aceptar la realidad de las relaciones del grupo grande y en los seguidores, y quizá esto desempeñó un
Freud, S. (1932). Why war? Standard Edition,
sus pérdidas. Por otro lado, también se asuntos internacionales. Los esfuerzos papel en las limitadas contribuciones 22:197-215. London: Hogarth Press.
asocia con el deseo de mantener el due- diplomáticos se hacen enormemente que hizo el psicoanálisis a los conflictos
Grubrich-Simitis, I. (1979). Extremtraumatisierung
lo activo, con la esperanza de recuperar complicados cuando la reactivación del de grupo grande, las relaciones interna- als kumulatives Trauma. Psychoanalytische Studien
lo que se ha perdido; este último deseo trauma se acompaña de una ideología cionales y diplomáticas. Esta actitud ha über seelische Nachwirkungen der Konzentra-
alimenta las ansias de revancha. Ambos legitimadora, ya que provoca que el cambiado considerablemente en las in- tionslagerhaft bei _berlebenden und ihren Kindern
(Extreme traumatization as a cumulative trauma:
deseos pueden coexistir: uno puede tiempo se derrumbe –la reactivación de vestigaciones de orientación psicoanalí- Psychoanalytic studies on the mental effects of
asociarse a un monumento, mientras ansiedades, expectativas, fantasías, de- tica realizadas en los últimos años sobre imprisonment in concentration camps on survivors
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ÁTOPOS ÁTOPOS
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clásica de que nuestras experiencias an- predictor del apego que desarrollarán
18 19
ÁTOPOS ÁTOPOS
los hijos hacia sus padres es el sentido de vista propuesto, el modelo conver- tora de la escuela. Mary es una prestigio- bro, los circuitos límbicos, nos ayuda a El cerebro ha evolucio-
nado como un órgano
que se da a estas experiencias. ¡Sorpren- gente de ciencia puede denominarse sa educadora, reconocida por su gran comprender el rasgo mamífero que nos
social del cuerpo. Los
dente, pero cierto!. En este capítulo les “neurobiología interpersonal”, [2], re- capacidad de enseñanza y su poderoso hace necesitar la presencia de los pa- mamíferos son criaturas
invito a sentarse y explorar conmigo las saltando la aplicación de disciplinas in- punto de vista para ayudar a los padres dres para regular la fisiología del niño sociales.
fascinantes ideas y desarrollos prácticos terpersonales (como las perspectivas de a criar a sus hijos enseñando a respetar pequeño. A medida que el mamífero
acerca de la ciencia de la apego. disciplinas tales como la antropología, sus experiencias únicas. No tardamos infante crece, la capacidad de regular su
la comunicación y la psicología social) y en darnos cuenta que nuestros puntos propia fisiología de forma equilibrada
En mis visitas a escuelas médicas y cen- neurobiológicas (como las perspectivas de vista eran muy similares, a pesar de comienza a desarrollarse de forma au-
tros de formación de psiquiatría clínica de la biología evolutiva, y los ámbitos de nuestra distinta formación profesional. tónoma. Algunos estudios acerca de la
y através de la investigación acerca del aplicación de la neurociencia afectiva, El año siguiente organizamos conjun- privación maternal efectuados en ratas
apego, las emociones y la narrativa, me cognitiva y evolutiva). tamente una serie de talleres para los han demostrado la existencia de altera-
he podido dar cuenta de la importancia padres. La respuesta que obtuvimos nos ciones permanentes en la conducta y la
central que tienen las relaciones de ape- ¿Por qué aplicamos la neurobiología in- inspiró a plasmar la integración de nues- respuesta fisiológica al estrés que afec-
go en nuestras vidas. Lo que más me ha terpersonal a los padres? ¿En qué me- tras perspectivas en un libro que desa- tan al funcionamiento social del animal.
fascinado durante los últimos diez años dida la “educación de los hijos con el rrollamos juntos y que titulamos, Paren- Si bien los niños pueden considerarse en
(la llamada “Década del Cerebro”), es cerebro en mente” es diferente de otros ting from the Inside Out: How a deeper términos generales como seres adapta-
cómo podemos mejorar profundamen- modelos destinados a ayudar a los pa- self-understanding can help you raise tivos, las investigaciones realizadas cla-
te nuestra comprensión acerca del pa- dres en la tarea de educar a sus hijos? children who thrive. El libro está dirigido ramente demuestran que experiencias
pel que juegan las relaciones en nuestra ¿Realmente los padres necesitan saber a los padres y ofrece una comunicación tempranas adversas pueden acabar te-
vida cotidiana y subjetiva integrando de neuronas para educar a sus hijos de franca y directa al lector, planteando his- niendo efectos negativos sobre los ce-
las conclusiones objetivas de un am- manera adecuada? La respuesta a las dos torias e invitaciones personales a la in- rebros en desarrollo y efectos persisten-
plio conjunto de ciencias. Al estudiar y primeras preguntas quedará revelada a trospección diseñadas para ayudar a los tes en el funcionamiento fisiológico de
analizar una amplia gama de ciencias, medida que el lector avance en la lectura padres a desarrollar una comprensión los mismos [3].
desde la antropología a la neurociencia, de este capítulo. La respuesta a la última más coherente de sí mismos y de sus
y buscando la convergencia de conclu- pregunta es más sencilla: no. Los padres hijos. Creemos que dicha comprensión A medida que los primates comenzaron
siones que surge de su integración, po- no necesitan tener conocimientos acer- se fortalece y profundiza en la medida a evolucionar, no sólo se convirtieron
demos finalmente llegar a un punto de ca del cerebro. Las investigaciones rea- en que somos capaces de combinar las en animales más sociales y perceptivos
vista consiliente (del inglés consillience: lizadas han demostrado que los padres reflexiones personales subjetivas con un acerca de la situación de los demás;
la “unidad de conocimientos” o “consi- necesitan saber y conocer más acerca de conocimiento científico objetivo. también desarrollaron un sistema de
liencia”, como denominó E.O. Wilson en sí mismos, no necesariamente acerca del neuronas espejo que les permitió res-
1998 [1]). La Enciclopedia Británica defi- funcionamiento de las neuronas. Sin em- Lo que la ciencia nos dice acerca de ponder a los actos intencionados de
ne el concepto de consiliencia como “la bargo, considero que tener conocimien- nuestra herencia interpersonal otros miembros de la especie. Las neu-
coincidencia de generalizaciones que tos actualizados acerca de las ciencias ronas espejo conforman un sistema que
surgen de clases separadas de hechos de la experiencia humana, incluyendo la Para comprender más acerca de nues- vincula la percepción a la acción motora
en inducciones lógicas, de manera que neurobiología de la mente, puede pre- tras vidas sociales subjetivas e interper- [4]. Cuando un acto intencionado es pre-
un conjunto de leyes inductivas sea con- parar a los padres para que se compren- sonales podemos remitirnos a la neu- senciado (como por ejemplo levantar un
cordante con otro conjunto de diferente dan mejor a sí mismos y a sus hijos. rociencia. El cerebro ha evolucionado vaso para beber), la misma neurona es-
origen.” En otras palabras, al igual que como un órgano social del cuerpo. Los pejo se activará en el observador como
en el viejo cuento indio de los hombres Cuando mi libro, The Developing Mind mamíferos son criaturas sociales, con cuando el individuo realiza la misma
ciegos y el elefante, existe una “realidad (2), fue publicado por primera vez, mi hija estructuras límbicas que parecen servir conducta (levanta un vaso para beber).
más extensa” y cualquier perspectiva cursaba educación preescolar y me pi- a un propósito dual que nos permite in- Al responder únicamente a actos inten-
individual sólo constituye una primera dieron que diera algunas charlas acerca tegrarnos en el entorno social al mismo cionados, y no sólo a movimientos, las
descripción del punto de vista personal de la educación de los hijos y el cerebro. tiempo que regulan el estado interno neuronas espejo revelan la manera en la
acerca de la misma. Siguiendo el punto A la charla asistió Mary Hartzell, la direc- del cuerpo. Una parte de nuestro cere- cual nuestra mente responde al estado
intencional de otro ser.
20 21
ÁTOPOS ÁTOPOS
Con nuestra evolución como seres hu- y preguntarnos acerca de la forma en El beneficio del sistema de apego en tér- y de tener un sentido autobiográfico de
manos, hemos llevado a las neuronas es- que las relaciones familiares moldean la minos evolutivos es que motiva al niño sí mismo bien desarrollado. Si los padres
pejo un paso más adelante hacia el mun- capacidad genéticamente heredada de a buscar la proximidad del progenitor, están disponibles para una comunica-
do de la representación más abstracta distintos procesos mentales [6]. La inves- especialmente en momentos de angus- ción contingente y sensible de forma in-
del estado interno de otras personas. tigación sobre apego es un campo de la tia, aumentando las posibilidades de su- consistente, el niño puede desarrollar un
Esta capacidad de tener una percep- psicología del desarrollo que estudia la pervivencia. Más allá de la búsqueda de apego ambivalente, predictivo de incer-
ción acerca de la mente de otra persona forma en que los patrones de comunica- proximidad, el niño utiliza al padre como tidumbre y ansiedad en situaciones so-
ha sido denominada teoría de la men- ción entre los padres y el hijo conforman un refugio seguro, es confortado cuan- ciales. Estas dos formas de inseguridad
te, mentalización, lectura de la mente o y perfilan su desarrollo en distintos ám- do está alterado e internaliza la relación derivadas de una crianza subóptima son
visión mental. La capacidad de “visión bitos, como el social, el emocional y las con los progenitores como una ‘base adaptaciones organizadas, muy diferen-
mental” nos permite intuir la mente de áreas cognitivas. En todas las culturas segura’, brindándole un sentimiento de tes de la siguiente forma de apego, lla-
los demás y ponernos en los “zapatos estudiadas, se ha encontrado un proce- seguridad que le permite salir al mundo mada apego desorganizado.
mentales” de otra persona, algo que so llamado ‘comunicación contingente’ y explorar. Una gran parte de la tarea de
otros primates, aunque pueden imitar, mediante el cual se perciben las señales educar a los niños consiste en alcanzar Cuando el progenitor es la fuente de te-
no son aparentemente capaces de ha- del niño, se les da sentido y respuesta un equilibrio entre la necesidad de cer- rror y alarma, el niño puede desarrollar
cer. Varios autores [5] han sugerido que de una forma oportuna y eficaz. Esta de- canía del hijo y su impulso de explorar un apego desorganizado, predictivo de
esta capacidad de representación sur- licada forma de proporcionar cuidado el mundo. Los padres pueden sentirse posteriores dificultades en sus relaciones
gió al menos hace 10.000–40.000 años, permite al niño sentirse seguro y com- más cómodos en una dimensión que en sociales y en la regulación emocional.
tal como revela y evidencia el arte repre- prendido, que sus necesidades serán la otra, lo cual determina la facilidad con Se ha visto que los niños que presentan
sentacional de la época paleolítica. Más satisfechas y que el padre es una fuente la que un niño se sentirá comprometido esta forma de apego inseguro desarro-
que simplemente una característica in- fiable de cuidado y protección. en una íntima dependencia y una explo- llan formas clínicas disociación en donde
teresante de nuestro pasado, la “teoría ración más autónoma. los procesos cognitivos habitualmente
de la mente” puede haber sido la base Se puede entender el “A-B-C” de la asociados, tales como la consciencia, la
de nuestra capacidad para crear repre- vinculación [7] como cuando el proge- La comunicación contingente estimula emoción y la memoria, se desasocian o
sentaciones más abstractas del mundo nitor entra en sintonía con el niño para el bienestar y sirve como fuente de re- fragmentan. La disociación y las dificulta-
más allá de nuestras interacciones so- posibilitar que alcance una sensación sistencia al estrés des sociales que acompañan las formas
ciales. Estas capacidades emergentes de equilibrio físico que da origen a un de apego desorganizado son posibles
puede ser el origen de la habilidad hu- sentimiento de coherencia interno e in- La investigación sobre apego ha de- factores de riesgo para el desarrollo de
mana para considerar diferentes posibi- terpersonal. (véase Tabla I). Cuando los mostrado que los padres, al menos en un trastorno de estrés post traumático
lidades abstractas, abriendo la puerta a padres son capaces de generar un sen- las culturas occidentales estudiadas, re- si el individuo se expone a una situa-
habilidades cognitivas para manejar el timiento de contingencia predecible, el velan patrones característicos de comu- ción difícil en el futuro. De esta manera,
mundo de las ideas y objetos, más allá niño se siente comprendido, unido y se nicación con sus hijos que promueven cuando el progenitor genera un estado
de lo que jamás llegaron a soñar nues- produce un sentimiento de comunión formas específicas de adaptación. Con de alarma en el hijo, éste se enfrenta a
tros ancestros. Dichas capacidades de entre el padre y el hijo. No es posible una comunicación contingente, el niño una ‘paradoja biológica’: su cerebro le
representación nos permiten comuni- proporcionar este ABC de forma per- desarrolla un vínculo seguro que gene- impulsa a acercarse a su progenitor para
carnos entre nosotros a través de for- manente todo el tiempo, pero sí po- ra bienestar y constituye una fuente de buscar sosiego, pero al mismo tiempo el
mas más complejas y sientan las bases demos ofrecerlo de una manera “sufi- resistencia al estrés. Con distintas for- padre constituye la fuente misma de su
del proceso de evolución cultural. cientemente adecuada”, especialmente mas de comunicación no contingente, alarma. Esto es precisamente lo que los
Cuando el progenitor es la
cuando nuestros hijos más lo necesitan. el niño puede desarrollar alguna de las investigadores Main y Hesse [8] denomi- fuente de terror y alarma,
Cuando cambiamos el foco de atención Cuando perdemos o dejamos escapar llamadas formas “inseguras” de apego. nan ‘temor sin solución’. el niño puede desarrollar
en la evolución de nuestra especie ha- las oportunidades de establecer una Con una relación emocionalmente po- un apego desorganizado,
predictivo de posteriores
cia el desarrollo del individuo en la vida conexión, podemos reparar de dichas bre, el niño puede desarrollar un apego ¿Por qué unos padres pueden actuar
dificultades en sus relacio-
moderna, podemos sumergirnos en el inevitables rupturas de forma oportuna evitativo, predictivo de posteriores difi- de forma que no ayudan a sus hijos? nes sociales y en la regula-
campo de investigación sobre el apego y eficaz. cultades para relacionarse con sus pares Para responder a esta pregunta los in- ción emocional.

22 23
ÁTOPOS ÁTOPOS
vestigadores sobre apego concibieron tienden a tener hijos que se apegan de de vista del cerebro, investigaciones re- nen la formación de los circuitos neu-
un conjunto de preguntas denominado forma ambivalente. Los niños con apego cientes han demostrado que esta situa- ronales en el cerebro en desarrollo del
Adult Attachment Interview (Entrevista desorganizado tienden a tener padres ción extrema de abuso infantil y aban- niño. Este proceso de conformación, por
de Apego Adulto), o AAI, que animaba a con traumas o pérdidas no resueltos. dono se correlaciona con el hallazgo de ejemplo, posibilita que las interacciones
los padres a que reflexionaran acerca de varios daños cerebrales: un tamaño del padre-hijo modifiquen la maduración
la naturaleza de sus propias experiencias Esta última conclusión debe ser una señal cerebro menor, daños en la conexión en- genéticamente programada del cerebro
de niñez. La codificación de este instru- de alerta para los profesionales ya que tre ambos hemisferios a través del cuer- para moldear el desarrollo de procesos
mento de investigación exige un análisis los apegos desorganizados conllevan un po calloso y un insuficiente desarrollo de tan esenciales como la regulación emo-
no sólo de lo que han informado que ha mal pronóstico, es el más grave de todos las conexiones reguladoras GABA con cional, la respuesta al estrés, la memoria
ocurrido sino, más importante, acerca de los tipos de apego; mientras que los trau- el núcleo hipotalámico. El estrés puede autobiográfica e incluso el desarrollo de
cómo ha sido contada cada historia [9]. mas y duelos no resueltos son condicio- dañar el cerebro mediante la producción la mentalización (teoría de la mente).
Con el AAI se puede predecir, ya duran- nes tratables. En consecuencia, es pro- de elevados niveles de la hormona del
te el embarazo, qué tipo de apego desa- bable que el apego desorganizado sea estrés (cortisol), que es tóxica para las Cada uno de estos procesos se encuen-
rrollará el niño con cada progenitor (véa- una condición evitable. La intervención neuronas en crecimiento [10]. tra influenciado en parte por las regio-
se Tabla II). Este hallazgo apoya la idea sobre la falta de resolución de los con- nes prefrontales del cerebro, que se de-
general de que el apego es un reflejo de flictos de los padres y el apego desorga- Apego y desarrollo cerebral sarrollan durante los primeros años de
la experiencia del niño, no una función nizado puede ser una clave para romper vida [13,14]. Dichas regiones son áreas
de la genética ni de otras características el ciclo de trasmisión transgeneracional También podemos remitirnos a ejem- de convergencia que integran zonas am-
constitucionales del niño. El AAI revela de apegos traumatizantes [7]. Cuando plos menos extremos para explorar las pliamente distribuidas del cerebro en un
que la forma característica en la que los Mary Hartzell y yo desarrollamos nues- formas en las cuales el tipo de apego todo funcional. Esta ‘integración neuro-
padres recuerdan, la coherencia de su tro modelo integrador de educación de puede influenciar el cerebro en desa- nal’ permite que se desencadenen pro-
historia autobiográfica, es en realidad el padres, teníamos en mente la importan- rrollo. Como se discutió anteriormente, cesos altamente complejos a partir de
elemento predictor más potente del tipo cia de invitarles a reflexionar acerca de varios estudios independientes coinci- las funciones diferenciadas del cerebro.
de apego que el niño tendrá hacia ellos. éste y otros aspectos de la investigación den en sostener que la empatía del pa- Cuando la diferenciación se combina
sobre apego para ayudar a sus hijos a dre hacia el niño permite al cerebro del con la integración, el sistema complejo
¿Qué significa realmente coherencia del tener un desarrollo adecuado. Cuando infante alcanzar un equilibrio físico y la del cerebro es capaz de alcanzar estados
relato del adulto? Una historia de vida ofrecemos a los padres la oportunidad consiguiente coherencia mental. Nacido de funcionamiento altamente adaptati-
coherente es aquella en la cual el adulto de profundizar en el conocimiento de sí con un número relativamente pequeño vos, flexibles y estables. Puede decirse
ha dado sentido a su propia experien- mismos y de dar sentido a la propia vida, de conexiones neuronales en el cere- que este estado es sinónimo de salud
cia de la niñez y tiene insights acerca de esperamos que puedan tener la opción bro, el niño experimentará un enorme mental. De esta manera, las relaciones
cómo el pasado ha influenciado su de- de mejorar la seguridad del apego de incremento en la complejidad de la co- de apego seguro pueden promover el
sarrollo como adulto y como padre. Este sus hijos y al mismo tiempo crear cohe- nectividad neuronal influenciado tanto bienestar apuntalando la capacidad de
proceso de dar sentido se revela en una rencia y vitalidad en sus propias vidas. por la información genética como por integración del cerebro en desarrollo del
narrativa flexible y reflexiva que predice la experiencia. Sabemos que la expe- niño (véase Tabla III).
que el niño tendrá un vínculo seguro. En Bajo de un apego subóptimo como riencia influencia el cerebro a través de
contraste, una narrativa sin mucho ac- idea, formas organizadas y desorgani- la siguiente secuencia: la experiencia Una posibilidad es que los apegos se-
ceso a detalles autobiográficos o a una zadas, subyace una la realidad de niños conduce a una activación neuronal que guros que se reflejan en narrativas co-
idea de cómo el pasado influencia el expuestos a la abrumadora amenaza del puede activar genes que conducen a la herentes que dan sentido a la propia
presente se observa en los progenitores maltrato infantil. Muchos de estos niños producción de proteínas y que a su vez vida, resultan de un proceso de integra-
padres de niños con apego evitativo. Los pueden tener además un apego desor- permiten la formación de nuevas co- ción neuronal entre los hemisferios ce-
padres que tienen ‘asuntos del pasado ganizado, pero la gravedad de estas si- nexiones sinápticas [11, 12]. Es probable, rebrales. En esta situación sería posible
sin resolver’, situaciones emocionales tuaciones van más allá del niño no mal- aunque aún no se ha demostrado en hu- observar los procesos lógicos y lingüís-
que se inmiscuyen en el presente cuando tratado que se ha desarrollado con un manos, que las experiencias dentro del ticos propios del hemisferio izquierdo
intentan contar la historia de sus vidas, apego desorganizado. Desde un punto marco de relaciones de apego determi- entrelazandose con los procesos auto-
24 25
ÁTOPOS ÁTOPOS
biográficos, tranquilizadores y de men- no es cómodo, pero puede producir un niño de un patrón de evitación rígido. altamente adaptativo. Con esta integra-
talización del hemisferio derecho. Una sentimiento de vitalidad y de apertura a ción se alcanzan con mayor facilidad los
consecuencia de dicha integración de nuevas posibilidades. Convertirse en au- e. Cuando los padres tienen traumas o procesos de razonamiento, autoconoci-
hemisferios diferenciados sería el sur- tor y partícipe de la propia historia vital pérdidas sin resolver, pautas de interac- miento, comunicación sintónica, empatía
gimiento de historias que dan sentido es el objetivo permanente y continuo del ción que han resultado aterradoras o y moralidad. Podemos llamar a esto “vía
a las experiencias vividas. Otra sería la proceso de dar sentido. amenazantes para el niño pueden ser la superior” (“high road”).
capacidad del padre para comprender raíz del desarrollo de un apego desorga-
la experiencia interna de sí mismo y del b. La comunicación emocional entre los nizado. Una propuesta que puede expli- Por el contrario, el cerebro es capaz de
niño y de comunicar dicha comprensión padres y el hijo implica una comunica- car este proceso es la idea de un “modo producir cambios repentinos hacia es-
mediante formas verbales y no verbales ción sintónica que permite a los padres inferior de procesamiento” que se des- tados alterados de activación. Estos es-
de comunicación. Esta integración inter- compartir y amplificar las emociones po- cribe en detalle en la siguiente sección. tados mentales pueden producirse con
na del padre permitiría la comunicación sitivas y también compartir y aliviar las En este estado mental, el funcionamiento bastante rapidez y conllevan cambios en
contingente esencial necesaria para que negativas. La unión contingente genera habitual integrador superior que posibili- nuestro foco de atención, en las habilida-
el niño sea capaz de desarrollar un ape- un sentimiento de integración emocio- ta las interacciones empáticas sintónicas des que utilizamos prioritariamente, en
go seguro y también alcanzar niveles in- nal, la percepción de que uno está den- se encuentran temporalmente suspendi- los sesgos perceptivos que adoptamos,
tegrativos de coherencia. tro de la mente de otro. Este sentimien- das. Tener que responder a estos esta- en los recuerdos que traemos a la mente
to de comunión es el núcleo un apego dos aterradores lleva al niño a desarrollar y en las conductas que seguimos. Este
Ayudar a los padres a dar sentido a seguro. un apego desorganizado. Es imperativo es el cambio normal en el estado mental
sus vidas que los padres sean conscientes de estos que nos permite ser adaptativos y flexi-
procesos y que reciban el apoyo que ne- bles frente a un entorno cambiante. Pero
c. Conflictos del pasado sin resolver
cesitan para ayudarles a modularlas y re- existe una forma de cambio de estado
La apasionante lección que deriva de pueden ocupar la mente de los padres
solver sus propios conflictos pendientes. mental que tiene una cualidad menos
un amplio conjunto de ciencias es que e interferir con la creación de una sensa-
aunque las experiencias determinan e ción de unión entre el padre y el hijo. Las adaptativa. Si las regiones prefrontales
La vía inferior (“low road”)1 del cerebro se aíslan temporalmente,
influencian quienes somos, NO estamos defensas de los padres pueden incluso
destinados a repetir los traumas de nues- acabar de interferir en la percepción pre- interrumpiendo sus habituales funciones
La integración de información proceden-
tro pasado SI damos sentido al impacto cisa de las señales de sus hijos. Sin una integradoras entre los circuitos límbicos
te de observaciones clínicas, informa-
que éstos tienen en nuestras vidas. En introspección, tal preocupación puede y el tronco encefálico, el cerebro entra en
ción aportada por los padres y estudios
nuestra condición de padres, cónyu- crear un sentimiento de ambivalencia en un modo inferior de procesamiento. En
neurológicos y neurobiológicos apunta 1
N de T. Se ha traduci-
ges, amigos y profesionales, podemos el niño que le lleva a sentir ansiedad a la esta “vía inferior” los procesos superio- do “Low road” por “vía
a una explicación de cómo situaciones
ayudar a otros a que den sentido a sus hora de explorar el mundo más allá de res de razonamiento, introspección, sen- inferior” o simplemente
traumáticas y duelos no resueltos en un
vidas a través de relaciones de apoyo y su hogar. sibilización, empatía, e incluso moralidad “inferior” aunque la tra-
padre pueden derivar en conductas ate- ducción literal sería “vía
empáticas que estimulen la autenticidad rradoras y, de alguna manera, alarmantes pueden quedar temporalmente suspen- baja”. Se ha tenido en
y el cuidado, la comunicación directa. d. Patrones previos de adaptación emo- y desorientadoras que pueden acabar didos. cuenta que nombra un
Existen varios conceptos básicos, explo- cionalmente inconexos de los padres modo de funcionamien-
generando desorganización en el niño. to cerebral menos eficaz
rados en profundidad desde un acerca- pueden implicar un bloqueo del acceso La mayoría de nosotros tiene el potencial
y que involucra regiones
miento dentro-fuera (“inside-out”) de la los procesos de su propio hemisferio de- Cuando las zonas superiores del cere- de entrar en la “vía inferior”. Determina- cerebrales inferiores en
parentalidad, se describen brevemente recho. Esta “manera de ser”, si se man- bro (el neocórtex, incluyendo la región das condiciones, como el estar cansado, contraposición a “high
a continuación. tiene sin cambios, puede ser la causa de prefrontal), se encuentran integrados con sensación de hambre o de estar al road” ( traducido como
límite pueden aumentar la probabilidad “vía superior”) que im-
una deficiente estimulación del hemis- con los circuitos límbicos (emociones, plica el neocortex ce-
a. Dar sentido a la propia vida implica es- ferio derecho en el cerebro del niño. La memoria, motivación) y con las zonas de entrar en dicho modo inferior de res- rebral y que promueve
tar abiertos a recuerdos internos y per- inhibición resultante en el desarrollo de inferiores (el tronco encefálico que pro- puesta. Nuestra propuesta en este senti- respuestas más integra-
do es que los traumas o duelos sin resol- das y sanas. (Una de las
mitir que lleguen a formar parte de una procesos fisiológicos, emocionales e in- porciona información del cuerpo y que acepciones coloquiales
historia más extensa y completa de la terpersonales en el hemisferio derecho regula los estados de arousal), el cere- ver involucran a la “vía inferior”, de forma “high road” es “camino
propia vida. Este proceso en ocasiones pueden determinar el desarrollo en el bro como un todo es capaz de alcanzar que ésta a) se activa con mayor facilidad, de éxito”).
un “modo superior” de procesamiento, b) es más rápido entrar en ella, c) perdura
26 27
ÁTOPOS ÁTOPOS
activad a más tiempo y d) conlleva con- promueve cambios en los funcionamien-
ductas más dañinas, e) su recuperación tos “inferiores” y aumentar la probabili-
es más difícil y f) cuando se produce la dad de que se produzca la reparación.
recuperación, la correspondiente repa-
ración -volver a conectar con el niño- es Irónicamente, conocer más acerca del
menos probable que ocurra. cerebro puede mejorara la comprensión
acerca de nuestras emociones subjetivas
Esta situación crearía en el niño un cam- y nuestra vida relacional. Poder comu-
bio de percepción repentino respecto al nicar este conocimiento a los padres ha
padre, quien de otra manera sería muy sido una experiencia profundamente en- Tabla I:
accesible para él. La tendencia innata de riquecedora y satisfactoria.
acercarse a la figura de apego para bus- El ABC de la teoría del apego
car sosiego y encontrar que se trata del Estamos comenzando a descubrir la (adaptado de la tabla V A, de Siegel y Hartzell [7]).
padre que es al mismo tiempo la fuente “unidad de conocimiento” de una am-
de angustia desencadena una respuesta plia gama de disciplinas científicas que
desorganizada. La ausencia de repara- pueden ser de gran ayuda para com-
ción hace que resulte especialmente difí- prender los procesos neuronales subya- El ABC de la teoría del apego consiste en la secuencia de desarrollo de:
cil dar sentido al estado de alarma y a la centes a la forma en la que las relaciones
desorganización en la que el niño entra pueden contribuir de forma positiva o
repetidamente. negativa al desarrollo del niño. Tenemos Sensibilización
Sintonía del propio estado interno de los padres con el de
conocimientos suficientes sobre áreas in- los hijos, normalmente logrado mediante la participación de
Los padres pueden aprender a tomar dependientes como para poder afirmar señales no verbales
conciencia de cuándo entran en un fun- que lo que hacen los padres afecta e im-
cionamiento “inferior”. Se puede mos- porta a los niños y lo que hacen los pa-
trar a los padres los pasos necesarios dres parece estar muy influenciado por Equilibrio
Alcanzar un nivel de equilibrio en la fisiología, las emociones
para modificar este patrón de entrar en cómo ellos han dado sentido a sus pro- y los estados mentales de un niño a través de la sintonía con
“vía inferior”, originar terror en el niño y pias vidas. La clave no es sólo lo que ha los padres
no reparar estas desconexiones tan des- ocurrido a los padres cuando fueron ni-
orientadoras. Es muy importante que ños, sino que lo realmente importante es
comprendamos que incluso los padres cómo ellos han comprendido y asimilado Coherencia El sentimiento de integración que adquiere el niño a través
que tienen las mejores intenciones hacia el impacto de dichos acontecimientos de su relación con sus padres en la cual el niño es capaz de
sus hijos y que los quieren profundamen- en sus vidas. Cuando los padres logran sentirse internamente integrado e interpersonalmente co-
te, pueden tener situaciones traumáticas un autoconocimiento adecuado son ca- nectado con los demás
o de pérdida que los hace más propen- paces de proporcionar la comunicación
sos a estas conductas desorganizadas. emocionalmente sensible y contingente
Los padres que durante nuestras clases que los niños necesitan para crecer. La
se dan cuenta que NO están volviéndose investigación puede profundizar nuestro
“locos”, sino que son personas normales conocimiento acerca de los mecanismos
Cuando los padres logran
con problemas no resueltos, se sienten específicos mediante los cuales las rela-
un autoconocimiento ade- profundamente aliviados y consiguen un ciones estimulan y mejoran la salud men-
cuado son capaces de pro- mayor insight acerca de estos, de otro tal y podemos continuar avanzando en
porcionar la comunicación
modo confusos, cambios en el funciona- nuestro modelo del cerebro social para
emocionalmente sensible
y contingente que los ni- miento mental. Sentimientos anteriores ayudar a otros y mejorar el entorno social
ños necesitan para crecer. de vergüenza y culpa pueden dar origen en el cual habitamos.
a un autoconocimiento compasivo que
28 29
ÁTOPOS ÁTOPOS
Tabla III:

Procesamiento según hemisferio


Tabla II:
(adaptado de la Tabla II de Siegel y Hartzell [7]).

Categorías de apego para niños y adultos
(adaptado de la tabla VI A de Siegel y Hartzell [7]).
Hemisferio No-lineal Especializado en:
derecho Holístico · Información autobiográfica
Visual-espacial-analógico
NIÑO ADULTO · Envío y percepción de señales no
verbales
Apego seguro Libre o autónomo (seguro en cuanto al apego)
· Emociones intensas y primarias
Apego evitativo Rechazo (minimiza la importancia del apego)
· Conciencia, regulación y mapa inte-
grado del cuerpo
Apego ambivalente Preocupado (tiene conflictos sin resolver)
· Cognición social y visión mental:
Apego desorganizado Traumas o pérdidas sin resolver/desorganizado
comprensión de los demás
(problemas no resueltos que conducen a una des-
organización en la narrativa autobiográfica) · Puede involucrar una predominancia
del hemisferio derecho del cerebro en
cuanto al procesamiento
El apego entre adultos puede determinarse por cómo los padres cuentan la histo-
ria de su vida a otro adulto. El conocimiento que tienen los padres de sí mismos se
expresa a través de su comunicación adulto-adulto, no a través de la forma en que
los padres explican sus historias a sus propios hijos. La forma en que la historia es Hemisferio Lineal Especializado en:
narrada, no sólo los contenidos, revela características del estado mental de los pa- izquierdo Lógico · Razonamiento silogístico: búsqueda
dres en relación con la vinculación. Estos patrones narrativos están asociados con la Lingüístico-digital de patrones causa-efecto
situación de apego del niño con el padre tal como se muestra en la tabla anterior.
Algunos estudios a largo plazo han demostrado que las narrativas de los adultos ge- · Análisis lingüístico: utilización de
neralmente corresponden a sus propias categorías de apego de niñez determinadas palabras para definir el mundo
décadas antes. Existe una categoría de ‘seguridad conseguida’ en la cual los adultos
han dado sentido a sus vidas y se han liberado de lo que puede haber sido una ex- · Pensamiento del tipo ‘correcto vs.
periencia subóptima de niñez. Estos adultos tienen relaciones de apego seguras con equivocado’
otras personas.
· Puede incluir una predominancia del
hemisferio izquierdo del cerebro en
cuanto al procesamiento

Traducción, Redacción Átopos

30 31
ÁTOPOS ÁTOPOS
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32 33
ÁTOPOS ÁTOPOS
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del siglo pasado, el psiquiatra japonés tes que cualquier distinción basada en no quería resaltarlo como un método de la terapia propiamente dicha - es bas-
Takeo Doi desarrolló sus ideas basán- las necesidades de pequeños grupos tratamiento sino a causa de las verda- tante cuestionable. Se trata de demasia-
dose en el concepto de amae, que trata internos. des que contiene, a causa de la informa- das preguntas relacionadas con el desa-
“la anatomía de la dependencia” como ción que nos proporciona sobre lo que rrollo de un trastorno (etiología) que no
piedra angular del desarrollo del pen- Las diferencias y similitudes entre el psi- realmente importa a las personas — su pueden aclararse analizando pacientes
samiento psicoanalítico japonés (Doi coanálisis y sus ramificaciones se vienen propia naturaleza — y a causa de las co- independientemente de la frecuencia o
1971). Después de la caída del Telón de discutiendo desde la época de Freud. nexiones que es capaz de revelar entre entorno del análisis. Esto no descarta la
Acero, los psicólogos y psiquiatras rusos Por una parte, Freud habló de que un las más diversas y diferentes actividades idea de que la aclaración de las conexio-
recordaron los primeros logros alcanza- “análisis que conducía a una conclusión “ (Freud 1933a, p. 156). nes biográficas pueda ser terapéutica;
dos por el pensamiento psicoanalítico favorable en un tiempo breve” mejora- en el proceso de revisión y análisis de
(Etkind 2000) y no tardaron en aceptar ba la autoestima del terapeuta. Estos Su gran preocupación, que “la terapia... experiencias pasadas y de exploración
a los predicadores de procedencias pi- tratamientos más cortos – comunmente destruirá la ciencia” (1927a, p. 254), le del inconsciente del paciente, los mo-
coanalíticas diversas. Sin embargo, tam- llamados de orientación psicoanalíti- llevó a plantear el supuesto (actualmen- delos mentales de experiencias inter-
bién concibieron una marca propia con ca o psicodinámicos - han confirmado te rechazado) de que las reglas estrictas subjetivas se ven modificados (Fonagy
el apoyo del presidente Yeltzin, quien el impacto médico del psicoanálisis, y y objetivas de investigación producen 1999a, p. 1011).
en 1993 firmó un documento oficial para de hecho dominan las terapias psicoa- las mejores condiciones científicas para
la reinstalación del “psicoanálisis ruso” nalíticas en la actualidad. El calificarlas la reconstrucción de las primeras me- La principal preocupación de la inves-
(Reshetnikov 1996). En la actualidad como “insignificantes en relación con el morias del paciente, y que la revelación tigación moderna sobre la terapia con-
somos testigos de la implantación del progreso del conocimiento científico” de la amnesia creaba las condiciones siste en comprobar si los cambios te-
psicoanálisis en China, promovida por no hace justicia a la importancia de un óptimas para la terapia (1919e, p. 183). rapéuticos se producen efectivamente
diferentes grupos psicoanalíticos que fundamento científico de los principios Sin embargo, en otro contexto Freud durante el desarrollo de los tratamien-
han estado impartiendo cursos en este del tratamiento psicoanalítico (Galatzer- recomendaba la creación de las circuns- tos psicoanalíticos y en aclarar la rela-
país durante varios años (Gerlach 2005; Levi et al. 2001; Kächele 2001). Muchos tancias más favorables para el cambio ción que existe entre dichos cambios y
Varvin 2008). estudios empíricos acerca de estos tra- en cada situación analítica individual, es las teorías compartidas por el analista,
tamientos cortos han contribuido a una decir, reconocía la necesidad de contar como planteó hace mucho tiempo atrás
Considerando estos desarrollos pare- teoría de la terapia (Fonagy & Kächele con una flexibilidad orientada al pacien- Joseph Sandler, reconocido psicoana-
ce justo hablar de un proceso de glo- 2009); pueden aumentar la compren- te (1910d, p. 145). lista británico y profesor de Sigmund-
balización del psicoanálisis. Desde una sión de la relación que existe entre las Freud en el London University College
perspectiva más cercana es inevitable intervenciones y los resultados de los La creación de una situación terapéutica (1983).
percibir la amplia diversidad que abar- tratamientos. En contraste con este mo- es un requisito previo para poder alcan-
ca el término psicoanálisis en cuanto a delo médico y orientado al tratamien- zar un mayor conocimiento acerca de El público general puede no ser cons-
práctica clínica. ¿Deberíamos trabajar to, Freud deseaba que el “verdadero los procesos psíquicos inconscientes. ciente de lo elaborada que ha sido y
con el supuesto mínimo y más básico análisis” fuera capaz de “descender a Freud subestimó los retos científicos continúa siendo esta discusión: los de-
propuesto por Freud de que cualquiera los estratos más profundos y primitivos para demostrar el cambio terapéutico y bates giran en torno a temas teóricos,
que aplica y utiliza las ideas de transfe- del desarrollo mental y obtener a partir ofrecer una mayor aclaración acerca de prácticos y políticos. ¿Son las diferen-
rencia y resistencia podría denominarse de éstos soluciones para los problemas los factores curativos. En una ocasión cias en cuanto a indicaciones, técnicas
terapeuta psicoanalítico o deberíamos de las formaciones posteriores” (Freud escribió: “Un psicoanálisis no es una y procesos principalmente un asunto
continuar – como muchos hacen – insis- 1918b, p. 10). investigación científica imparcial, sino de grado o más bien de calidad, siendo La dicotomía entre es-
Es inevitable percibir la tiendo en una clara distinción entre el más bien una medida terapéutica. Su esta última una distinción más estricta? tos dos aspectos – que
amplia diversidad que psicoanálisis ortodoxo y los tratamien- Freud sostuvo la misma dicotomía – los esencia no consiste en demostrar nada, Esto constituye un importante proble- el psicoanálisis se ocu-
abarca el término psi- pa de la verdad y la psi-
tos psicoanalíticos. Como más adelan- tratamientos terapéuticos versus la ver- sino simplemente en modificar algo” ma empírico; ¿pueden ser ambos con-
coanálisis en cuanto a coterapia de la terapia
práctica clínica. te indicaré, para el público general los dad - incluso varios años más tarde: “He (1909b, p. 104). La dicotomía entre estos ceptos empíricamente distinguibles? El propiamente dicha - es
elementos comunes de los tratamientos indicado que el psicoanálisis comenzó dos aspectos – que el psicoanálisis se proceso de intentar distinguir el psicoa- bastante cuestionable.

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ÁTOPOS ÁTOPOS
nálisis de la psicoterapia (psicoanalítica) contase con una formación adecuada y de apoyo-estabilización…. y … los re- temente demostrado (Ablon & Jones
ha exigido considerables cantidades de completa”. Sin embargo, en mi opinión sultados globales alcanzados por trata- 2005). Utilizando una descripción opera-
energía e investigación (Kächele 1994). estas distinciones no se sostienen desde mientos analíticos y de apoyo coinciden tiva del proceso psicoanalítico, es posi-
Muchas discusiones apuntan hacia dos ningún análisis empírico. El análisis de más que lo que nuestras expectativas ble determinar que éste efectivamente
alternativas: una de ellas se orienta a un la transferencia ha sido un elemento ex- habituales presagian para las diferentes se lleva a cabo en el marco de la psi-
modelo categórico que sostiene que tensamente estudiado en psicoterapias modalidades; y los cambios alcanzados coterapia analítica, aunque mucho más
el psicoanálisis es diferente de la psi- psicoanalíticas de todo tipo (Luborsky & en el tratamiento desde ambos extre- en el tratamiento psicoanalítico. Por
coterapia psicoanalítica, como indica Crits-Christoph 1998; Hoeglund 2004). mos de este espectro difieren menos ello, algunos investigadores sostienen
y sostiene Kernberg (1999); la segunda Además, el concepto mismo de neuro- en su naturaleza y permanencia que lo que los hallazgos de los estudios de tra-
alternativa se inclina por un modelo di- sis de transferencia ha sido ampliamente que normalmente podría esperarse.” tamiento han sido de vital importancia
mensional que identifica y destaca las di- cuestionado (Cooper 1987), al igual que (Wallerstein 1989, p. 205). para la discusión sobre la psicoterapia
mensiones empíricas del trabajo clínico el tema de una resolución de la neurosis versus el psicoanálisis, poniendo algu-
(Wallerstein 1995). Según este punto de de transferencia mediante numerosos En consecuencia, contrariamente a lo nos hechos empíricos sobre la mesa.
vista, cualquier práctica que cumpla con estudios de seguimiento (Schlessinger & que se espera, no se encontraron dife- “Existe la necesidad de contar con ma-
los criterios indicados a continuación Robbins 1983). Por su parte, el concepto rencias destacables en los resultados yor información empírica” (Grant & San-
puede ser clasificada como psicoanalí- de neutralidad también ha sido amplia- después de una psicoterapia analíti- dell 2004, p. 83).
tica en la medida en que los principales mente debatido (Schachter & Kächele ca, psicoterapia de apoyo-expresiva y
conceptos de la teoría del psicoanálisis 2007). De igual manera, los llamados psicoanálisis y desgraciadamente los En otras palabras, de lo que estoy ha-
son llevados a la práctica. criterios extrínsecos se han incorporado efectos medios de cada uno de los tra- blando es del impacto de la investiga-
en los argumentos de numerosos deba- tamientos fueron bastante modestos; ción sobre tratamientos en el corazón
Desde que el psicoanalista británico Ed- tes mantenidos por distintos grupos de las técnicas de apoyo se revelaron tan de la institución psicoanalítica. En mi
ward Glover investigó la técnica de los opinión. Habitualmente la frecuencia de poderosas como las más interpretati- opinión, éste ha sido el progreso más
psicoanalistas distribuyendo un sencillo las sesiones está dictada por factores vas y los psicoanalistas utilizaron dichas importante. Hace algunos años, el pro-
cuestionario entre los miembros de la económicos o culturales; y la utilización técnicas con mayor frecuencia de lo que fesor Fonagy de Londres destacó en
British Society (Glover & Brierley 1940), del diván como criterio indispensable habría podido suponerse. Incluso si uno una reunión: “Durante mucho tiempo
todos los modelos empíricos conduje- también ha sido puesta en tela de juicio calificara estas conclusiones como no los psicoanalistas con orientación inves-
ron a una escasa evidencia sistemática en numerosas ocasiones (Schachter & válidas desde un punto de vista ecoló- tigadora hemos sido una minoría; aho-
en favor de una estricta distinción entre Kächele 2010). gico – ya que el tipo de pacientes no ra, por el contrario, somos una minoría
el psicoanálisis y la psicoterapia analíti- se corresponde con el modelo habitual significativa“. La investigación del trata-
ca. Hacia mediados de la década de los A modo de ejemplo, el proyecto más de casos de los analistas en la práctica miento psicoanalítico es un campo de
cincuenta del siglo pasado Gill (1954) ambicioso que realiza una comparación privada – los resultados no dejan de ser estudio relativamente joven. Se remon-
planteó una definición de psicoanálisis apreciable - el Psychotherapy Research sorprendentes y conducen a evaluacio- ta a la primera investigación sobre efi-
que diferenciaba los criterios intrínsecos Project (PRP) de la Fundación Mennin- nes secundarias en busca de factores de cacia terapéutica realizada en el Berlin
y extrínsecos, y que posteriormente revi- ger – condujo a la conclusión a favor de moderación. Además de la propia dife- Psychoanalytic Institute en 1930 (Feni-
só en 1984. Como “criterios intrínsecos” difuminar los límites entre las diferentes rencia y variedad en cuanto a persona- chel 1930). Este modelo no tardó en re-
postuló: el análisis de la transferencia, el modalidades de tratamiento: lidad, varios esquemas interpersonales cibir fuertes críticas vertidas por el Prof.
análisis neutral, la inducción de la neu- favorables también facilitaron el cambio Eysenck a comienzos de la década de
rosis de transferencia y la resolución de “Las modalidades terapéuticas de psi- terapéutico en estos pacientes (Blatt los cincuenta y fue finalmente aceptado
Las modalidades tera-
la neurosis artificial mediante la inter- coanálisis, psicoterapia expresiva y psi- 1992; Sharar & Blatt 2005). como una disciplina científica con la fun-
péuticas de psicoanálisis, pretación; como “criterios extrínsecos”, coterapia de apoyo difícilmente existen dación de la Society for Psychotherapy No se encontraron dife-
psicoterapia expresiva y por su parte, mencionó “la frecuencia en estado puro o ideal en el mundo de Por su parte, el argumento de que las Research a principios de la década de rencias destacables en
psicoterapia de apoyo difí- los resultados después de
de las sesiones, la utilización del diván, la práctica real. … (los tratamientos) distinciones cuantitativas y no cate- los setenta. Es a partir de este momento una psicoterapia analítica,
cilmente existen en estado
puro o ideal en el mundo un paciente relativamente bien integra- son combinaciones entremezcladas de góricas pueden ser útiles de cara a la que podemos hablar de una ciencia del psicoterapia de apoyo-ex-
de la práctica real. do (analizable) …, y un psicoanalista que elementos expresivos-interpretativos y diferenciación también ha sido recien- tratamiento psicoanalítico que cada vez presiva y psicoanálisis.

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ÁTOPOS ÁTOPOS
genera más resultados ricos y sorpren- del analista, etc. – hacen posible que el prensión y valoración adecuadas de lo o los miles de informes de casos de
dentes. argumento pueda invertirse. Cualquier que los profesionales deben hacer es otros analistas para hacerse con datos
terapeuta que utilice y aplique estos una cosa. Para el investigador de pro- básicos. En otras palabras, estos eran
Ya que no existe una definición con- conceptos básicos – cualquiera que sea cesos y resultados de tratamiento éstos los cuentos infantiles que nos contaban
sensuada del psicoanálisis, acabamos su grado de perfección o intensidad – son exactamente los hechos que debe nuestros profesores. Ellos intentaron
definiendo las terapias psicoanalíticas debería ser llamado terapeuta psicoa- estudiar: “En su trabajo diario el científi- hacer lo mejor y les creímos. La trans-
a través de la actividad que los psicoa- nalítico. co necesita ejercer un alto grado de crí- misión del conocimiento se realizaba a
nalistas realizan en la clínica (Sandler tica y de autocrítica y, en el mundo en el través de medios orales o escritos, pero
1982, p. 44). Thomä & Kächele (1989) El hecho de que estos profesionales que vive, ni los datos ni las teorías de un no existía manera de comprobar lo que
concibieron la “Psychoanalytic Practi- que han trabajado intensamente ha- líder, independientemente del recono- decían los maestros. La ilustración más
ce” (la práctica del psicoanálisis) como yan desarrollado la construcción teóri- cimiento personal que despierte, están reciente de este problema específico
una actividad que aplica recomenda- ca, escrito libros y documentos que la exentas de ser desafiadas y criticadas. de la cultura epistémica psicoanalítica
ciones técnicas consensuadas en una mayoría de nosotros hemos estudiado No hay lugar para la autoridad” (p.4). es el informe elaborado por Heinz Ko-
variedad de encuadres. Cada una de no debe sorprendernos. Pero la actitud hut acerca de un paciente suyo, el Sr. Z.
las recomendaciones deja un amplio reticente de los “verdaderos” maestros En consecuencia, el gran problema que (Kohut 1979). Dicho documento presen-
espacio para modificaciones orientadas del psicoanálisis – como respetuosa- ha impedido al psicoanálisis desarrollar- ta la descripción de dos tratamientos
al paciente. Esto conduce a la opinión mente les llamamos – en relación con se como una profesión más sólida no psicoanalíticos, los cuales difieren con-
de que la práctica psicoanalítica cubre la investigación empírica – en manos es la naturaleza de los datos que ma- siderablemente entre sí en cuanto a su
una extensa gama de ideas sin un valor de otros – es responsable de la brecha neja sino el permanentemente limitado planteamiento técnico.
predeterminado claro. Cada una de di- existente entre los dos tipos de cultura acceso a los mismos. Cuando los pro-
chas representaciones puede estar más científica (Luyten et al. 2006). Dicho dis- fesores alemanes Grimm comenzaron a Recientemente, una biografía sobre
o menos cerca de un prototipo ideal de tanciamiento se explica en parte por la estudiar cuentos infantiles basados en Kohut (Strozier 2001) desvela que el se-
trabajo analítico (Ablon &Jones 2005); combinación de lo que resulta apropia- la tradición oral de las ancianas, la infor- gundo análisis del Sr. Z es una artimaña
desgraciadamente cualquier construc- do para la comprensión del proceso clí- mación disponible era muy escasa. Sin ideada para compensar su mala expe-
ción prototípica se basa en un grupo de nico y lo que resulta apropiado para la embargo, la naturaleza del programa de riencia con con la Sra. Ruth Eissler en un
analistas que trabajan en un determina- comprensión del proceso de evaluación investigación que ellos y otros desarro- primer análisis. En 1984 Kohut insistió en
do marco conceptual. En consecuencia, formal. Sin ninguna duda, el profesional llaron entonces aseguró la considera- su satisfacción con el primer psicoanáli-
lo más probable es que tengamos un en su labor diaria debe funcionar con el ción de ciencia que desde hace tiempo sis ficticio realizado en el mundo. En su
prototipo ego-psicológico, un proto- supuesto – si quiere ser eficaz – de que sostiene un sólido edificio (Propp 1928). opinión, realzaba los cambios consegui-
tipo Kohutiano, Kleiniano, o incuso La- determinados principios y teorías son dos por la psicología del yo. Nada que
caniano. La verdadera pregunta es ¿en válidos y, al decidir cuáles adoptar, es De esta manera uno puede preguntar- hiciera Kohut ilustra con más claridad
qué medida los representantes de los probable que esté guiado por aquéllos se: ¿cuáles son los datos en las terapias su heroico sentido de sí mismo. Incluso
distintos prototipos comparten unas con experiencia y de quienes ha apren- psicoanalíticas? Existen al menos tres en su último trabajo “How does analysis
nociones básicas mínimas acerca de la dido. Es más, puesto que tendemos a fuentes de datos que es necesario con- cure?” (1984) en un debate final con sus
terapia psicoanalítica? Los principales impresionarnos cuando la aplicación de siderar: Las opiniones y puntos de vista críticos escribió:
conceptos del psicoanálisis clínico – es una teoría parece haber sido exitosa, los del paciente, las opiniones del analista
decir, relación terapéutica, transferen- profesionales tienen especial riesgo de y las de los observadores externos. Dos “Las lecciones que se derivan de los
cia, contratransferencia, resistencia, in- conceder mayor confianza a una teoría de estas fuentes de datos son principal- dos análisis del Sr. Z son los siguientes:
Ya que no existe una de-
finición consensuada del sight, mecanismos de defensa – y las re- que lo que la evidencia disponible jus- mente declaraciones en primera perso- El caso no sólo revela cómo los cambios
psicoanálisis, acabamos glas del juego – como invitar al paciente tificaría. Este análisis fue elaborado por na que ninguna persona externa puede teóricos dan competencia al analista. La
definiendo las terapias a la asociación libre, a llevar materiales el ahora famoso psicoanalista británico rebatir; es necesario considerarlas tal percepción de una nueva configuración
psicoanalíticas a través
de la actividad que los
del sueño y centrarse en la interacción e inventor de la teoría del apego John como han sido expresadas. Tradicional- clínica también muestra cómo la com-
psicoanalistas realizan en aquí-ahora, acompañado de una acti- Bowlby 1979 en un artículo sobre arte y mente, el campo de estudio adoptó las prensión del analista de la transferencia
la clínica (Sandler 1982). tud atenta, una neutralidad razonable ciencia en el psicoanálisis (p. 4). La com- palabras de Freuds, o las del M.Klein, self-objeto afecta al manejo del material
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ÁTOPOS ÁTOPOS
clínico y se ve influenciada por el aumen- mes de pacientes que manifiestan una ciones de audio de sus diálogos, tanto para estos fenómenos que necesitamos
to de empatía derivado de la aplicación consideración favorable sobre cómo mejor. Soñar con grabaciones en vídeo diseños de investigación intra-clínicos
del nuevo marco teórico” (Kohut 1984). la terapia psicoanalítica ha cambiado sería algo que sólo los poetas podrían sólidos que no dependan del analista
sus vidas (Schachter 2005). Este podría imaginar, en tanto que los materiales como observador participante.
Los dos análisis del Sr. Z son además ser un fenómeno interesante a investi- psicoanalíticos novelados han estado
una clara demostración de que incluso gar: ¿por qué las personas que tienen durante mucho tiempo en el centro del La batalla de lo que constituye el psicoa-
los editores más distinguidos no son ca- experiencias satisfactorias gracias a la escenario actual. nálisis ha de ser librada sobre terrenos
paces de diferenciar dinámicas clínicas terapia psicoanalítica rara vez escriben empíricos y no en debates acalorados
reales de dinámicas teóricas o hipotéti- lo que han sido sus perspectivas de los Visto desde fuera, la actividad psicoa- con argumentos que no cuentan con
cas; ¿cómo puede un analista determi- procesos de cambio? Nosotros, como nalítica en cada sesión tiene similitudes hechos que los apoyen.
nar si la dinámica desarrollada con un analistas, podríamos aprender mucho evidentes con un mini-drama; en este
paciente es real o teórica? de estas opiniones y podrían enrique- sentido, el filósofo alemán Habermas Es interesante destacar que visto des-
cer enormemente nuestra compren- (1968), hablaba acertadamente del mo- de fuera los distintos grupos de nuestra
En referencia al título del artículo “desa- sión e incluso también podrían reducir delo de escenas del psicoanálisis. Desde profesión se agrupan, constituyendo la
rrollos (posibles) del psicoanálisis” espe- la importancia de algunas de nuestras fuera existen elementos distintivos de práctica psicodinámica-psicoanalítica.
ro haber aclarado a través de este ejem- asunciones (no comprobados) sobre las transacciones que pueden identifi- La herramienta conceptual formulada
plo que la narración de historias tiene cómo funciona el tratamiento. Los con- carse con cualquier tecnología cualitati- por Ford & Urban (1963), “sistemas de
tanta importancia como en la vida diaria tinuos debates acerca de la interpreta- va o ciencia social. Considerar el psicoa- psicoterapia“, podría utilizarse para
(Ehlich 1980) y difícilmente conduce a ción correcta o la teoría adecuada ¿son nálisis dentro de las ciencias naturales identificar los principales sistemas como
nuevos desarrollos del psicoanálisis. Los realmente relevantes desde el punto de es completamente engañoso, parece el psicoanalítico, cognitivo-conductual,
psicoanalistas que narran historias han vista del paciente? No lo sabemos. Mi más adecuado incluirlo dentro del gru- sistémico, etc. Esta distinción concep-
tenido mucho tiempo para convencer al esperanza es que podamos ver una evo- po de ciencias nomotéticas. Limitarlo a tual ha guiado el conocido meta-análisis
mundo; sin embargo sólo han tenido un lución del psicoanálisis que estimule a la hermenéutica no hace justicia a la na- de Grawe et al. (1994) acerca del resulta-
éxito parcial. Sus voces son numerosas los pacientes a escribir sobre e psicoa- turaleza interactiva del proceso. do de los tratamientos. Las terapias psi-
e impregnan la cultura. Las diferentes nálisis. coanalíticas breves, medias y prolonga-
culturas en el psicoanálisis son produc- Es precisamente en este punto donde das pertenecen a ojos de un espectador
to del multilingüismo de los psicoanalis- Recordemos que dije que existen tres veo el potencial para el desarrollo del de mente abierta a un mismo sistema
tas contando sus historias. Últimamente fuentes de datos relevantes para el psi- psicoanálisis. Al grabar las sesiones ob- de psicoterapia.
crece la conciencia de que esto condu- coanálisis y que la tercera fuente tiene tenemos acceso al micro-mundo de in-
ce a una babelización del psicoanálisis tercambio intersubjetivo en los niveles ¿Existe la necesidad de mantener las di-
una naturaleza cualitativa diferente. La
lingüístico y para-lingüístico. Es ahí don- ferencias entre los distintos mundos psi-
(Jiménez 2009). visión de un observador externo es la
de podemos comprender mejor lo que coanalíticos? En nuestra opinión, estas
opinión de una tercera persona acerca
ocurre en una buena terapia y lo que va diferencias no juegan un papel relevan-
¿Qué hay de las opiniones de los con- del proceso terapéutico y ha sido la úl-
mal en una terapia mal conducida (Fo- te en las opiniones de los pacientes y,
sumidores de psicoanálisis? ¿Dónde tima en hacer su aparición en el escena-
nagy 1999b). Es como la invención del basándonos en la evidencia de investi-
encontrarlas? Para ser honestos, no rio psicoanalítico. Aún hoy existen reco-
microscopio en medicina, que permitió gaciones realizadas sobre tratamientos
contamos con ellas. El famoso estudio nocidos analistas que descalifican esta
ampliar nuestra visión. Esta metodolo- breves, no es probable que el papel de
sobre Consumer Reports realizado en perspectiva e indican que el analista es
gía atrae al investigador al campo del la técnica específica, excluyendo la per-
Estados Unidos no esperaba que los la única fuente de conocimiento psicoa-
psicoanálisis que por su propia metodo- sonalidad y el estilo del analista, tenga La batalla de lo que cons-
pacientes psicoanalizados respondie- nalíticamente fiable (Tuckett 1994). Pue- tituye el psicoanálisis
logía enriquece nuestra comprensión. El una especial relevancia en los resulta-
ran y de hecho no lo hicieron (Seligman de que sea evidente que no comparto ha de ser librada sobre
Las diferentes culturas en
filósofo Adolf Grünbaum (1982) insistió dos (Wampold 2001). terrenos empíricos y no
1995). Los informes que disponemos de para nada este punto de vista restringi-
el psicoanálisis son pro- en la realización de pruebas extra-clí- en debates acalorados
pacientes analizados son bastante crí- do. Si dispusiésemos de las notas dia-
ducto del multilingüismo nicas; existen sin embargo muchos fe- Para cualquier observador crítico, la si- con argumentos que no
de los psicoanalistas con- ticos (Drigalski 1980). Existen, pero en rias de los casos de Freud, estaríamos cuentan con hechos que
nómenos que sólo se producen dentro tuación actual del psicoanálisis como
tando sus historias. un número relativamente escaso, infor- mucho mejor y si tuviésemos las graba- los apoyen.
del marco terapéutico. Es precisamente terapia está marcada por “el fallo de la
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ÁTOPOS ÁTOPOS
des separadas que difícilmente existen Bibliografía Fonagy P, Jones EE, Kächele H, Clarkin JF,
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ÁTOPOS ÁTOPOS
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44 I 45
ÁTOPOS ÁTOPOS
ÁTOPOS
Prólogo a la primera edición en español de samiento, proporciona a su obra un círculo de central que dedica a los fenómenos de la sexuali-
las Obras Completas de Sigmund Freud expansión indefinido. Todo el mundo —no dad. Para Freud, neurosis y psicosis son perturba-
sólo el médico o el psicólogo— puede enten- ciones engendradas por conflictos sexuales de la
José Ortega y Gasset der a Freud y, cuando no convencerse, recibir infancia. Freud amplía notablemente el concepto
de sus libros fecundas sugestiones. de la sexualidad que suele llamar “libido”, pero
aun así, ¿no deja su obra siempre la inquietud de
Como en el orden de la funcionalidad corporal o que se nos invita a aceptar una hipótesis desme-
fisiológica casi todos los grandes progresos du- surada? Sin embargo, cualquiera que sea la medi-
rante el siglo XIX han sido debidos a los médi- da dentro de la cual este sexualismo psiquiátrico
cos, esto es, a la necesidad inaplazable de curar de Freud pueda considerarse verídico, ha servido
al enfermo, así estas teorías psicológicas se han para que, al cabo, entre la ciencia a ocuparse se-
originado en la urgencia clínica del psiquíatra. Los riamente del erotismo, tradicionalmente cerrado
laboratorios aprontaban escasísimos recursos al a la investigación. Lo que hasta ahora podía decir-
médico para actuar sobre las enfermedades pro- se de la libido era tan poco que contrastaba ab-
piamente mentales, a las que no se ha logrado surdamente con la innegable importancia de esta
descubrir una base de perturbación somática. función biológica dentro de la vida psíquica.
Muy cuidadosa la investigación de la exactitud
en los métodos que empleaba, prefería ser fiel La necesidad de descubrir los escondrijos del
a ellos que ensayar audazmente procedimientos “alma” donde vienen a ocultarse esos tumores
empíricamente eficaces. Así quedaba demorado afectivos, generadores según Freud de las en-
todo avance clínico hasta las calendas griegas. fermedades mentales le llevó a penetrar en el
territorio de los sueños. Su libro sobre la vida
Freud tuvo la osadía de querer curar, cualquiera de los sueños es una de las producciones más
que fuese la castidad lógica de los procedimien- interesantes del pensamiento contemporáneo.
tos. Para ello se resolvió a tomar en serio el ca- En él desarrolla Freud la idea de que nuestra
rácter de “mentales” y no somáticos, que se atri- conciencia fabrica constantemente símbolos de
buye, a ciertos trastornos. Pensó que, en verdad, la sexualidad, a veces de una pureza sublime y
Café Griensteidl, acuarela por R.Volkel* la psique, como tal, podía hallarse valetudinaria, de una inmaterialidad platónica inefable.
sufrir heridas psíquicas, padecer como hernias
Las obras completas de Freud empiezan a publicarse en España en 1922, en Biblioteca Nueva, por espirituales, a que sólo podía aplicarse una ci- El descubrimiento de este simbolismo permi-
iniciativa de Ortega y Gasset, que ya en 1907 convence a José Ruiz Castillo, director de la editorial rugía psicológica. De aquí nació la psicoanálisis, tió al médico de hoy extender su clínica a los
madrileña para que consiga los derechos de traducción. Este texto corresponde al prólogo que hace terapéutica de sesgo extraño y dramático que tiempos pasados y aplicar la psicoanálisis a los
Ortega al primer tomo, La psicopatología de la vida cotidiana. La traducción corrió a cargo de Luis en tomos sucesivos hallará expuesta el lector. genios del pretérito, a las mitologías, religiones
López Ballesteros. Una traducción que fue aplaudida por el mismo Freud, que al parecer conocía el
y formas sociológicas.
castellano (Nota de la Redacción)**. De tal propósito surgió para Freud la necesidad de
elaborar todo un sistema psicológico, construido El libro presente es el más adecuado para intro-
…h an sido, en efecto, las ideas de Freud
la creación más original y sugestiva
que en los últimos veinte años ha cruzado el
de Freud se fue formando un tropel cuantio-
so de discípulos y fieles, que propagaron por
todo el mundo la nueva fe, fundaron revistas,
con observaciones auténticas y arriesgadas hipó-
tesis. No hay duda de que algunas de estas inven-
ducir en el pensamiento freudiano a las gentes
curiosas que hasta ahora lo desconocían. Poco
ciones —como la “represión”— quedarán afinca- a poco se va viendo en él aparecer el ingenioso
horizonte de la psiquiatría. Su aparición moti- anuarios y bibliotecas. La claridad no exenta das en la ciencia. Otras parecen un poco excesivas edificio de observaciones y supuestos con que
vó ardientes y dilatadas polémicas. En torno de elegancia con que Freud expone su pen- y, sobre todo, un bastante caprichosas. Pero todas Freud pone cerco al secreto palpitante de nues-
son de sin par agudeza y originalidad. tra intimidad psíquica.
* Este café era uno de los centros de tertulias literarias y artísticas de Viena
Lo más problemático en la obra de Freud es, a la
** Véase: Carles F, Muñoz I, Llor C, y Marset P. Psicoanálisis en España (1893-1968).2000. Madrid, AEN.
vez, lo más provechoso. Me refiero a la atención
II III
ÁTOPOS ÁTOPOS
Hipótesis del histerismo español Eran éstas ya como un compás, como un ramo
que daba cierta arquitectura a sus frases del
ocupamos con los napolitanos y los judíos rusos
la primera categoría en el globo.
modo que a un edificio los cantos finos de las
esquinas y los vértices agudos de los frontis. Y Anda hoy sugestionando a gran número de psi-
José Ortega y Gasset, Obras completas, tomo II: El espectador nuestro amigo, visiblemente sentía, cada vez quiatras alemanes y norteamericanos una teo-
(1916-1934), Madrid, Revista de Occidente, 1554, págs. 107-111 que soltaba un taco, cierta fruición y descanso; ría de las psicosis e histerias, debida a Sigmund
se notaba que los había menester como rítmica Freud, médico y profesor en Viena1. Reducida a
purgación de la energía espiritual que a cada términos extremos, la teoría es la siguiente:
instante se le acumulaba dentro, estorbándole.
Tal fenómeno, por lo mismo que su frecuencia ¿No es esto admirable? ¿Por qué sentía mi ami- Toda representación lleva consigo, además de
y extensión parece quitarle importancia, la tie- go tal fruición pronunciando palabras sin senti- una imagen de la cosa o acción representada
ne enorme. do o cuyo sentido le era indiferente? un estado afectivo o energía psíquica con co-
mitante. Un deseo fuerte es una representación
En un momento de dolor dilacerante envía el lastrada con una ingente aglomeración de ener-
alma con premura todas sus reservas de ener- Mi amigo se llama Juan Español. No posee gran-
de entendimiento, administra una moralidad gía psíquica. Lo propio ocurre con la imagen de
gía hacía aquel lugar por donde ha penetrado una escena violenta.
la impresión dolorosa. Queda por un instan- reducidísima, no se conmueve ante una obra
te en suspenso e! resto de la vida psíquica y de arte, es incapaz. de heroísmo, va viviendo
aun la fisiológica disminuye de pulso y el co- hacia la muerte como una piedra hacia el cen- Al presentársenos ciertos deseos, nuestras
razón se contrae y detiene: necesita el alma tro de la tierra. ¿Diremos que a este hombre le convicciones morales o estéticas nos obligan
movilizar toda su emotividad hacia la brecha sobra energía psíquica? ¿No diremos más bien a dejarlos insatisfechos. Pero un deseo que
que en el flanco le han abierto. Ni se piensa, que le falla, que padece astenia espiritual? permanece insatisfecho es, según Freud, una
ni se ve, ni se oye. El alma íntegra es un arco a condensación de afectividad que pugna por
toda tensión de que va a salir como una flecha ¿Será acaso ese abuso de interjecciones, ese expandirse, por actualizarse, gastándose en
contra el enemigo dolor un ¡ay! ¡Cuán breve alarde de energías frecuente en el español, más forma de movimientos musculares o inyec-
e insignificante el cuerpecillo sagitario de esta bien efecto de su debilidad espiritual? tándose en el resto de nuestras ideas y que-
palabra! ¿Qué decimos, qué decimos cuando reres. Esa pugna es dolor para el alma y resul-
decimos ¡ay!? Nada decirnos sobre las cosas Además de las interjecciones, es curioso el pru- ta a menudo insoportable. Entonces nuestra
del mundo, pero decimos toda nuestra alma. rito de nuestra raza por expresarse con gestos conciencia, no contenta con dejar insatisfe-
Esa minúscula ampolluela del ¡ay! lleva a altísi- excesivos. cho el deseo, lo expulsa fuera de sí misma, lo
ma presión, condensada, toda nuestra afecti- aherroja en los sótanos del alma y allí queda
Cartel de Un chien andalou, Luis Buñuel, 1928
vidad, es propiamente una congestión de sen- A lo mejor, un compatriota, para decirnos que “inconsciente”, sin poder volver, por lo co-
timiento que en ella explota. Esta explosión acudamos a una cita a !as cuatro en punto, mún, al plano de la percatación. Con él va de

…C omo en nuestro país se publican tan


pocos libros al cabo del año, si que-
remos averiguar el estado de espíritu nacional
nos liberta del desequilibrio emocional que el
dolor moral o fisiológico sobrevenido nos cau-
acompaña este “punto” con ademán de for-
midable energía, sacude el brazo como si en
la mano llevara un alfanje y bajo el alfanje se
lansquenete o mozo da energía psíquica, el
afecto. Este permanece como un tumor de
emotividad presto a estallar, a liberarse de
sara. Para este uso normal ha puesto Dios en
tenemos que recurrir a la literatura difusa, a la la tierra esas cosas llamadas interjecciones. hallara el cuello de un gigante y se tratara de cualquier modo. Mas habiendo sido expul-
que vive en las conversaciones de los cafés, en degollar a éste. Claro está que después nues- sada la representación en cuyo servicio iba
las aglomeraciones de las plazas, en los tran- PERO ¿qué acontece a este hermano español tro compatriota no acude a la cita. Nadie igno- originalmente, se tiene que buscar otra cuyo
vías, en los pasillos del Congreso. que fué con nosotros ayer en el tranvía de la Ci- ra que también en lo desaforado de los gestos tránsito a la plena conciencia y al mecanismo
beles a la Puerta del Sol?
Esta literatura dicha se caracteriza por un ele-
1) Nótese que hago sólo referencia a aquella parte de las ideas de Freud de positivo valor científico. Para nada aludo a su
mento que da los períodos todo su sabor y Hablamos de cosas indiferentes para ambos: método interpretatorio de los sueños ni a su grotesca ampliación de la génesis sexual a toda la vida de la conciencia. (No se
todo su ritmo: llámenlo ustedes corno quieran, no obstante, nuestro amigo desparramaba olvide que todo esto fue escrito en 1910.)
ajo, taca o interjección. ente sus frases sinnúmero de interjecciones.
IV V
ÁTOPOS ÁTOPOS
van a movimientos injustificados. Los brincos y El chulismo, el flamenquismo, la bravuconería,
gestos absurdos de los histéricos, las manías, la exageración, el retruécano y oirás muchas
obsesiones y tristezas de los neuróticos no son, formas de expresión que se ha creado de una
según Freud, mas que esto. manera predilecta nuestra raza podrían muy
verosímilmente reducirse a manifestaciones de
Esas intromisiones súbitas de afectos y de ideas, histerismo colectivo.
que no tienen que ver con el curso del pensa-
miento, producen, claro está, una frag-menta- No se me oculta que al proyectar dos tipos
ción de la vida intelectiva. Entran en la continui- clínicos de la patología individual como his-
dad de una mente normal como cuñas y la hacen teria y neurosis sobre la espiritualidad colec-
estallar en trozos; se interponen, se intercalan tiva, dejan de ser enfermedades, en un sen-
entre los miembros tido médico. Conste así.
de una construcción Pero se transforman en
intelectual y la hacen enfermedades, según un
imposible. Por eso las sentido histórico. Conste
almas de histéricos y también.
neuróticos viven una
vida discontinua, in- En cierro sentido, encuen-
compatible general- tro en Baroja una manifes-
mente con el edificio tación superior del histeris-
de un ideario unifica- mo nacional. Todos somos
do y resistente. Son un poco como él, pero
almas disgregadas en somos menos sinceros. Lo
átomos, inconexas; mejor y lo peor de la Es-
almas dispersas, cuya paña actual se presenta en
existencia es un na- Baroja a la intemperie, sin
cer y morir a cada pellejo, Y lejos de ser esto
instante, menestero- una censura, repito que se
sas, como efímeras, me aparece como el más
de condensar en esa fecundo punto de vista
vida instantánea toda Un perro andaluz 1929. Dali, Buñuel desde el cual puede salvar-

su vitalidad. Almas inarticuladas que se expresan se su obra, tal y como ésta se presenta. Dentro
en interjecciones, porque ellas mismas lo son. de cincuenta años, los libros de Baroja tendrán
principalmente valor de síntomas nacionales.
Pupila viciosa de nubes.Un perro andaluz 1921 Dalí, Buñuel.
No puedo en este lugar detenerme a la conside-
ración más detallada de este tema. Me basta con Como para Baroja, suele ser para nosotros los
motor de los músculos no ofrezca dificultad. a la conciencia esté permitido, porque su enla- haber sugerido un punto de vista desde el cual demás iberos cada palabra un jaulón, donde
¿Cómo encontrarla? ce con la prohibida es remotísimo. Así penetra se ve España como un paisaje de histerismo, de aprisionamos una fiera, quiero decir un apasio-
la emoción de contrabando, solapada, a una ese histerismo étnico que a veces se ha apodera- namiento nuestro. En general, el humorismo
Las representaciones se hallan asociadas en imagen indiferente, con la cual ya apenas si tie- do de todo un pueblo, que es acaso síntoma de español, del mismo modo que el de Baroja, co-
largas cadenas, que componen la textura de ne que ver. Arribada a la conciencia, explota, y un continente entero. Lo que llamamos África, la mienza por ser malhumorismo.
nuestra alma. Gracias a esto, el afecto puede el espíritu en quien esto acaece se extraña de postura africana ante el universo, quizá no sea, a
saltar de una representación a otra, de ésta a que ideas mansas que le ocurren le angustien o la postre, sino una postura histérica.
otra y así hasta llegar a una inocente, cuyo paso exalten tan desmesuradamente, y hasta le lle-
VI VII
ÁTOPOS ÁTOPOS
Prólogo (fragmento) a Psicoanálisis y política de de tener acceso al mundo exterior sea por la
transformación de los instintos de muerte en
ya rechazar sin más: “…Un Yo normal de esta
clase es, como la normalidad en general, una
Herbert Marcuse*. Carlos Castilla del Pino forma de instancias agresivas (destructivas). ficción ideal. El Yo anormal no es, por desgra-
cia, una ficción. Toda persona normal es de
Esta concepción es la que caracteriza la dife- hecho solamente normal en cuanto pertenece
rencia entre psicoanálisis y freudismo. Mientras a la media. Su Yo se aproxima al del psicóti-
que el primero opera exclusivamente dentro del co en uno u otro aspecto y en mayor o menor
monismo sexual, la consciencia del papel de las cantidad; y el grado de su alejamiento de un
resistencias en la frustración del tratamiento va extremo de la serie y de su proximidad al otro
llevando lentamente a Freud a dar prevalencia nos proporcionará una medida provisional de
cada vez mayor al Yo y a la relación del Yo con lo que hemos llamado con tanta imprecisión
el mundo exterior. En el freudismo aparece ya alteración del Yo».
el binomio instintual, la existencia de un impul-
so de muerte al cual se retrotraería el Yo como Categorías freudianas y democracia de masas
consecuencia de la represión de los impulsos
de vida. De esta forma, el destino de éstos es La dinámica de Freud se basa en la consideración
sobremanera azaroso, por cuanto están sujetos de que la organización de la persona deviene en
a tres pares de antítesis: respecto del sujeto, la Yo y Super-Yo a partir de un Ello indiferenciado.
oposición del mundo exterior; respecto del pla- En el estatuto patriarcal en cual Freud trabajara,
cer, el displacer; respecto de la actividad, la pa- el Super-Yo resulta de la introyección por el niño
sividad. La represión conduce, en el primer caso, de la ideología y racionalización que el padre
al narcisismo; en el segundo, a la aparición de impulsa. El Yo del sujeto queda, pues, en última
sentimientos de odio; en el tercero, a la incapa- instancia, entre dos frentes: por una parte, ante
cidad de donación y a la exigencia de sumisión y los impulsos del Ello, fundamentalmente eróti-
dependencia. Pero en la medida en que las pul- cos y más profundamente destructivos; por otra,
siones instintuales tienden a transformarse todas frente a los embates del mundo exterior. El Yo
ellas en formas más organizadas —afectos—, la reprime al Ello a impulsos del Super-Yo previa-
represión de los mismos da lugar a la aparición mente internalizado. La represión, mayor cada
de la angustia. La organización de los instintos vez, de las instancias del Ello, suscitan la apa-
Decorados de Recuerda de Alfred Hitchcock, (1945), por Dalí
en afectos es debida al Super-Yo, como intro- rición en el plano de la conducta de impulsos
yección de las exigencias de la realidad. Por este agresivos (contra el mundo exterior, esto es, los
Dialéctica de los instintos y pesimismo freudiano tente en cada individuo. Pero al mismo tiempo, camino, el Yo experimenta angustia cada vez otros; mas también contra sí mismo) como ex-
con esta contradicción sustancial, hay la oposi- que ha de contactar con la realidad, si previa- presión de la impotencia del Yo para la solución
ción del sujeto al mundo exterior y la necesidad mente el Super-Yo ha hecho desviar la polariza- de sus propias represiones. La represión de los

L a explicación freudiana es, propia y exclusi-


vamente, psicológica, aunque con una fuer-
te base biológica, oculta tras una terminología
de adecuarse al «principio de realidad». Aho-
ra bien, el hecho de que ambos vectores sean
de naturaleza instintual supone, por un lado, el
ción real de las pulsiones del Ello.

Todo este análisis confirma a Freud su prime-


impulsos eróticos viene a desvelar, pues, otros
impulsos más hondos, cuales son los destructi-
vos, que en último término implicarían la vuelta
humanística. Por una parte, frente a los instin- que ambos puedan intercambiarse, sobre todo rizo hallazgo de que las categorías normal y al estado originario de la aniquilación inorgáni-
tos de vida existen los instintos de destrucción cuando los requerimientos del mundo exterior anormal son apenas válidas. Prácticamente, en ca. Freud consideraba que, al ser los impulsos
y de muerte. Eros frente a Thanatos. Ésta es la inhiben en demasía las instancias del placer; y nuestra cultura, entre el Yo normal y el anor- tanáticos más elementales aún que los impulsos
dialéctica instintual, la contradicción preexis- por otro, el que en tal caso la única posibilidad mal sólo hay diferencias cuantitativas. Todo vitales, la represión de éstos posibilita, en un pri-
Yo es un Yo alterado de alguna manera. Así, mer momento, una aproximación entre ambos
en 1936, le es posible escribir estas palabras, (dando lugar, por ejemplo, a la interferencia de
* Marcuse H. Psicoanálisis y política. 1969. Barcelona, Nueva Colección Ibérica. que cualquier psiquiatra advertido no puede pautas sádicas en conductas posesivas) y, al fin,
VIII IX
ÁTOPOS ÁTOPOS
incluso a la aparición del componente destruc- zamiento de la opresión paterna a la menos os- constante desde su primera a su última época2.
tivo puro, si la asfixia de los impulsos vitales al- tensible opresión colectiva. La más trivial reflexión El trabajo, para Marx, es trabajo alienado pre-
canzaba mayor relevancia. Hasta ahora, según sobre nuestra época inmediatamente anterior nos cisamente por las condiciones objetivas en las
pienso, no hay hipótesis de trabajo que expli- lleva a la conclusión de que, en efecto, la libertad cuales se verifica. Pero la esencia del quehacer
que con mayor lucidez las pautas de conducta sexual era menor que ahora, pero, contrariamen- humano es precisamente el trabajo no alienado.
del hombre. te, las posibilidades de individuación eran mucho Es decir, aquel que se hace posible merced a
mayores (hablo de nuestras clases burguesas; instancias creadoras, a través de cuyo producto
La inflexión que el pensamiento marcusiano entre nosotros ese cambio se inicia ya también el hombre va a alcanzar más y mayor liberación
verifica en la antropología de Freud radica para la clase obrera). De este modo, la mayor frente a la naturaleza y frente a sí mismo. Para
en su análisis de la democracia de masas. En liberalización erótica es tan sólo — si no se vive ello es elemental condición el que ese producto
ésta, la superación del complejo edípico se protestativamente — una liberación falseada, una del trabajo sea, en primer lugar, propio y no de
verifica a través de la liberalización erótica apariencia de libertad. En último término, se trata otro; y, en segundo lugar, que en modo alguno
manifiesta, hoy existente en la sociedad de de una libertad consentida, no conquistada y, en se convierta en objeto extraño al propio sujeto
consumo. Por este lado, las posibilidades de consecuencia, en riesgo siempre da constituirse creador, susceptible de convertirse en mercan-
perpetuación de un inmovilismo patriarcal se por sí misma en una forma de alienación y de su- cía y en fetiche que domina así mismo al propio
hacen más remotas. Pero al propio tiempo misión final al sistema que la hace posible. creador. En una palabra, el trabajo no alienado
que el papel parental pierde prevalencia, la es el trabajo propiamente creador3.
constitución del Super-Yo se lleva a cabo a Ahora bien, es a esta democracia de masas, que
expensas del aparato social sensu stricto, el ha hecho posible la alienación en el trabajo, a Fotograma de Recuerda (Spellbound) Hay un punto, no obstante, sobre el cual yo
cual homogeneiza a la totalidad de sus com- la que se debe el logro que la cultura actual en- Alfred Hitchcock, 1945
quisiera llamar la atención del lector que ha
ponentes. El aparato social, obvio es decirlo, traña. Contrariamente a la postulación de Freud, seguido atentamente las líneas del pensa-
soluble ni implicaba, en consecuencia, represión
lo componen los grupos tecnocráticos al ser- de que la cultura nace de Eros y que el traba- miento marcusiano. Me refiero a aquel en el
alguna. Si de hecho ha ocurrido así, al modo de
vicio del poder (grupos económicos, adminis- jo se inicia porque en él el hombre aumenta su que Marcuse acentúa cómo el trabajo, al ser
un acontecer natural, es por el hecho de que la
trativos, militares, etc.). La homogeneización placer, la cultura actual —concebida como esla- trabajo social, sólo excepcionalmente deja de
cultura creada ha sido una cultura del poder. El
se provoca merced a la conversión de todo bón hasta ahora final de un proceso histórico de tener el carácter de impuesto y se vive como
organismo se ha concebido como instrumento
hombre en objeto de la administración. Para duración inequívoca— ha deparado al hombre trabajo propio (no alienado). A mi modo de
del trabajo alienado, y la falta de libertad como
Marcuse, la gravedad de la alienación conse- cada vez mayor represión, de manera que la cul- ver, del hecho que del principio del placer se
una natural carencia subsiguiente a la posesión
guida radica en que, de esta forma, las masas pa lejos de decrecer ha aumentado en el hom- derive la extensionalidad del carácter erógeno
de la cultura en general, y no, como realmente
no son ya dominadas sino, al mismo tiempo, bre contemporáneo, incluso al propio tiempo a cualquiera zona del cuerpo, se hace posible
es, como específica de esta forma de cultura que
dominadoras y, en consecuencia, no se opo- que decrecía el sentimiento religioso. Ha sido la que la mera espontaneidad en la acción sea,
es la cultura de la dominación. En esta conside-
nen al orden establecido. conciencia de la inadaptación la que ha depara- por sí, una fuente del placer. La sublimación en
ración del trabajo actual como trabajo alienado,
do este sentimiento de culpa, porque ahora la el sentido freudiano tiene otro alcance que la
frente al trabajo originario como instancia lúdi-
Para decirlo con otras palabras: la cultura del de- culpa no es, como anteriormente, culpa frente mera suplantación de instancias erógenas por
ca, el pensamiento de Freud, reactualizado en
sarrollo hace menos viable la represión encarnada al padre, sino culpa ante los otros (fracaso por la no erógenas. Según mi punto de vista, lo que
la crítica de Marcuse, está íntimamente ligado al
en la figura paterna. Las posibilidades, pues, de inobtención del logro, ostracismo por la inadap- caracteriza a las instancias vitales no es tanto
pensamiento de Marx, precisamente a una con-
satisfacción de las instancias del Ello, la gratifica- tación a la norma social, etcétera1) . Para Marcu- que sean inherentes a la satisfacción de impul-
cepción marxiana del trabajo que se mantiene
ción erótica, es mucho más hacedera. De hecho, se, la crítica freudiana de la cultura procede del
el propio padre vive ya la escasa relevancia de hecho de que contraría ese principio de que el 2
Es indudable la adscripción de Marcuse en la línea del pensamiento marxista, que reitera a lo largo de su obra. Para
su papel represor en edades cada vez más tem- trabajo ha sido iniciado como resultado de una más detalles a este respecto puede consultarse el libro de J. M. CASTELLET, Lectura de Marcuse, Barcelona, 1969. Pero
pranas de su hijo. Pero esta gratificación erótica instancia de Eros, de manera que en tal etapa su engarce con el premarxismo hegeliano es conocido no sólo a través de sus ensayos reunidos en el volumen Cultura y
no se verifica al modo de una liberación sino tan originaria la contradicción, hoy visible, entre prin- Sociedad, (trad. cast. 2a. ed. Buenos Aires, 1968), sino explícitamente en su obra • Reason and Revolution, 1941, reeditada
en tercera reimpresión en paperback en 1966. (trad. cast. Alianza Editorial, 1971).
sólo como precio que hay que paga por despla- cipio del placer y principio de realidad no era in-
3
Vid. MARX, Manuscritos económico-filosóficos, Madrid, 1968, y también, “El fetichismo de la mercancía”, en t. I de El
Capital (trad. cast. México, 1964).
1
Cf. a este respecto mi libro La Culpa , Madrid, 1968. Especialmente me importa recabar la atención del lector sobre mi denun-
cia de la posibilidad de inducción de culpas a través de la introyección de los valores del sistema contra el cual se protesta
X XI
ÁTOPOS ÁTOPOS
sos erógenos, cuanto que se posibiliten en la se pertenece. Pero —y he aquí el punto más de- misma libertad en el orden más total de su rendi- ductor posee de vender sus productos. De esta
espontaneidad. Cualquiera acción que cumpla cisivo que caracteriza a nuestra sociedad de con- miento para el productor. forma, independientemente de que ello suponga
el requisito —si le es posible cumplirlo— de sumo— a través de nuestra fijación fetichista en en algún concepto lo que, con término más am-
la espontaneidad, deviene en sí misma como los objetos, el sujeto queda dominado por ellos Con otras palabras, la libertad ha sido sustituida biguo de lo que se imagina, se denomina eleva-
instancia placentera, mediata o inmediata- y por el poder que los produce. El bienestar ob- por la seudoliberación y, si me es posible expresar- ción del nivel de vida (¿de qué vida?) se cierra al
mente ligada con la satisfacción de impulsos tenido es, pues el precio que hay que pagar por me así, en cualquier caso se trata de una libertad círculo de la dominación — de una dominación, a
vitales. Por eso, la comunicación interpersonal la pérdida de libertad que asimismo depara. Pero condicionada, merced precisamente al costo de mayor abundamiento, oscura e inasible. La expro-
sólo puede ser plena si se lleva a cabo en la esto es meramente un aspecto de la cuestión. El un requerimiento ulterior de otra nueva seudone- piación de la vida de uno por la dominación del
espontaneidad. Y lo mismo en el trabajo, que otro, el anverso, es el siguiente: por bienestar no cesidad. Lo que diferencia en última instancia a la otro, del colectivo, que sume en el vaciamiento
sólo puede ser no alienado si se efectúa en la debe entenderse simplemente la supresión del necesidad real de la seudonecesidad, es el hecho dorado, que incita a la competencia banal de las
espontaneidad, dando rienda suelta a instan- esfuerzo. Si ello fuera así, es decir, si fuera sim- de que en la primera de ellas la superación es ne- posesiones objetuales, conduce al fin a la soledad
cias lúdicas. La propia psicología genética nos plemente esto, es obvio que, como tal necesi- gación y deja paso a otra, mientras que en la se- y al hastío de vidas no logradas. El precio último es
aproxima a este punto de vista. El niño es en dad satisfecha, dejaría paso a una instancia po- gunda no cesa a pesar de la aparente satisfacción — sobre ello no hay duda alguna — la elevación
nuestra cultura el que todavía dispone de tiem- sitiva ulterior, merced a la cual, tras el bienestar de forma que simplemente se busca otra porque simultánea de la criminalidad y el suicidio, de la
po libre. Su tiempo libre, que es toda su vida, obtenido, las disponibilidades para la realización la de ahora cansa, aburre. Piénsese las «ilusiones» neurosis, del «desajuste».
diurna y nocturna, es aprovechado en la espon- productiva y creadora experimentarían un no- habidas antes de la posesión de cosas banales y el
taneidad. El trabajo no alienado devendría así table crecimiento, por lo menos en proporción aburrimiento que de inmediato acontece una vez Pero, volviendo ahora a la línea de nuestro pen-
no como un acto de voluntad, ni como resulta- al esfuerzo negado. Si la seudonecesidad de la que ya se saben nuestras: ¿a qué requerimientos samiento anterior, es evidente que en la rela-
do de un esfuerzo, sino como consecuencia de posesión de los objetos puede perpetuarse has- responde en realidad?; ¿respondían a necesidades ción consumidor-productor contactamos con
ta convertirse en la tela de araña que aprisiona reales?; ¿no entraña la mera expresión, «ilusiones», unas típicas formas de estructuración social que
la libre, espontánea decisión, y por añadidura
precisamente la real posibilidad del hombre, ello el ser sencillamente falsas necesidades? La socie- dependen, inequívocamente de las relaciones
se le reputaría resultado de la acción de la per-
es debido a que aparte la supresión del esfuerzo, dad de consumo ha conseguido la mayor destreza de producción suscitadas. La deuda que en este
sona total. La inespontaneidad conduce a la
los logros tecnológicos ofrecen al hombre que en orden a la provocación de seudonecesidades, sentido tenemos contraída con el vasto grupo
disociación4.
los posee unas disponibilidades hasta entonces que instan al sujeto a su satisfacción sin un para de sociólogos que han sabido detectar este he-
insatisfechas, que gratifican en la medida en que qué realmente preciso, y que, por tanto, incitan cho —en modo alguno con solo Marcuse; hay
Pero lo que caracteriza al trabajo en la socie-
adoptan la apariencia de libertad. Piénsese en lo de nuevo a la búsqueda de otro objeto con la pre- que contar aquí con Axel Korsch, Bloch y Fis-
dad de consumo es la suplantación del fin por
que significa la posesión de un automóvil en una tensión de que ese nuevo objeto satisfaga al fin. cher, Mitscherlich, Walther Benjamín, W. Reich,
el medio. Más claramente, se trata de que a
sociedad como la nuestra, de la que no puede Frente a la necesidad, que tiene su objetivo, y que Adorno y Horkheimer, con la ulterior evolución
través del elevado nivel de los logros tecno-
decirse que todavía sea veterana del consumis- se supera cuando a la instancia se la complementa de Caruso, y, más anteriormente, con Packard,
lógicos, la obtención de los mismos, en forma
mo. De pronto, el poseedor del mismo amplía su con el objeto que lo satisface, la seudonecesidad Riesman, Meton, Wright Mills, entre otros— es
objetos, se ha constituido en aspiración, con
radio de acción y sus posibilidades de ubicación se inspira en el objeto mismo, y una vez poseído importante, porque al margen de que en la ma-
detrimento de la liberalización que precisa-
en los lugares más diversos. Adquiere así la falsa aburre en la medida en que no viene a satisfacer yor parte de los casos no han sabido —o ra-
mente a expensas de ellos puede lograrse.
conciencia de una libertad que no posee, tan sólo nada. El hombre uni-dimensional de la sociedad cionalizadamente no han querido, en aras de
Los objetos no son medios o vehículos tras los
por el mero cambio topográfico, que le dispone de masas aparece así inmerso en el entramado de una aséptica división del trabajo— establecer
que, mediante la consecución del bienestar,
a ver nuevas cosas y a vivirlas con la falsa ilusión la red en que las paradójicamente imperiosas seu- la conexión entre unas formas de producción
es decir, de la negación de la opresión de las
de su posesión. La libertad que cree vivir es una donecesidades le contiene. y la ideología (y la conducta) subsiguiente, nos
fuerzas naturales, se saltaría hacia la libertad
mera distracción de una necesidad real, a saber, la han hecho ver con toda la compleja trama
—sea cualquiera el sentido que a esta pala-
la de ser real poseedor de aquello de que dis- Pero está claro que una sociedad de masas es una de mediaciones obligadas. He aquí el punto en
bra pueda darse en este momento—, sino todo
fruta, en tanto que miembro de una comunidad, sociedad estratificada, en la que la dirección del que el análisis de la sociedad avanzada puede
lo contrario, fines en sí mismos, que no de paran
que ha sido suplantada por la simple traslación, consumo se hace por la clase dirigente y se impo- insertarse en la metapsicología y la antropolo-
tan sólo bienestar, sino Insatisfacción por su po-
cuando realmente yace tras él la hipoteca de su ne al consumidor, que queda como mero sujeto gía freudianas.
sesión misma, como distintivos del status a que
hipotecado por sus objetos. Mas la dirección del
consumo se impone, según hemos visto, no a tra-
4
Sobre esta cuestión, a la que he dedicado una reflexión más detenida, puede consultarse mi libro La incomunicación, vés de la concienciación de las necesidades rea-
Peninsula, 1970. les del consumidor, sino de la que el propio pro-
XII XIII
ÁTOPOS ÁTOPOS
Macbeth. (fragmento). DAMA
Es un gesto habitual como si se las lavara. Así la he visto hacer durante horas.
William Shakespeare. Escena XIV
LADY MACBETH
Otra mancha.

MÉDICO
¡Silencio! Habla.

LADY MACBETH
¡Fuera, fuera, mancha maldita! ¡Fuera te digo!... – ¡Dang! una, ¡Dang!
Dos: bien, es hora de hacerlo… ¡Qué oscuro es el infierno…
¡Vergüenza, mi señor, vergüenza! ¿Tener miedo un soldado?... ¿Por qué temer que se sepa
cuando nadie nos puede pedir que le rindamos cuentas? …¿Quién se iba a imaginar que
el viejo tuviera tanta sangre en el cuerpo?

MÉDICO
¿Os dais cuenta?

LADY MACBETH
El señor de Fife tenía una mujer. ¿Dónde está ahora?... -¡Oh! ¿No quedarán nunca lim-
Fragmento pias estas manos? Basta. Deja eso, mi señor; deja eso.
de Macbeth,
Lo echas todo a perder con tus delirios. Todavía el olor de la sangre.
Orson Welles,
1952 Todos los perfumes de Arabia no podrán desinfectar esta pequeña mano.
¡Oh! ¡Oh! ¡Oh!

Entran un MÉDICO y una DAMA de compañía. MÉDICO


¡Cómo suspira! Su corazón sufre de angustia.
MÉDICO
Soñar y actuar como el que está despierto es grave perturbación de la naturaleza. DAMA
No quisiera tener en mi pecho un corazón así ni por todos los títulos que tuviera su cuerpo.
Entra LADY MACBETH con una vela.
LADY MACBETH
DAMA Lávate las manos, desvístete, no estés tan pálido. Te lo repito: Banquo está enterrado;
¡Doctor, miradla!, ¡Ahí viene!. Ese es su aspecto habitual y, por mi vida, que duerme hon- no puede salir de la tumba.
do. Observadla.
MÉDICO
MÉDICO ¿También eso?
Mirad, tiene sus ojos abiertos.
LADY MACBETH
DAMA ¡Al lecho, al lecho! Llaman a la puerta. Vamos, vamos, dame tu mano. Lo que está he-
Sí, pero no ve. cho, hecho está. ¡Al lecho, al lecho!

MÉDICO (Salen)
¿Qué hace ahora? Mirad se restriega las manos.
XIV William Shakespeare. Macbeth. Madrid, Aguilar Ediciones 1951 XV
ÁTOPOS ÁTOPOS
Edipo Rey (Fragmento),
Sófocles PASTOR:
Se decía que era hijo de Layo. Pero ella está en casa, tu mujer, te diría mejor que nadie
cómo fue eso.

EDIPO:
¿Te lo dio ella?

PASTOR:
Sí, rey.

EDIPO:
¿Para qué?

PASTOR:
Para que lo hiciera desaparecer.

EDIPO:
¿Una madre? ¡desgraciada!

PASTOR:
Por miedo de horribles oráculos.

EDIPO:
¿Qué decían esos oráculos?

PASTOR:
Que aquel niño debía matar a sus padres; así se decía.

EDIPO:
Pero tú, ¿por qué se lo entregaste a este anciano?

PASTOR:
Edipo Rey, el hijo Por piedad, señor. Pensaba que se lo llevaría a otra comarca, a la isla donde él vivía. Mas
de la fortuna, Pier él, para las más grandes desgracias, lo guardó junto a sí. Porque si tú eres el que él dice,
Paolo Pasolini,
1967
has de saber que eres el más infortunado de los hombres.

EDIPO:
¡Ay! ¡Ay! Todo se ha aclarado ahora. ¡Oh luz, pudiera yo verte por última vez en este
instante! Nací de quien no debería haber nacido; he vivido con quienes no debería estar
viviendo; maté a quien no debería haber matado.
PASTOR:
¡Ay!, ¡heme aquí ante una cosa horrible de decir!
(EDIPO entra precipitadamente al palacio.
Los dos pastores se marchan, cada uno por su lado)
EDIPO:
Y para mí también horrible de oír. Pero, sin embargo, tengo que oírla.
XVI XVII
ÁTOPOS ÁTOPOS
CORO: PAJE:
¡Ay, generación de mortales! ¡Cómo vuestra existencia es a mis ojos igual a la nada! Una cosa muy breve de decir y de saber. Yocasta, nuestra reina sagrada, Yocasta ya no
¿Qué hombre, qué hombre ha conocido otra felicidad que la que él se imagina, para existe.
volver a caer en el infortunio después de esta ilusión? Tomando tu destino como ejemplo,
infortunado Edipo, no puedo mirar como dichosa la vida de ningún mortal. CORIFEO:
¡Oh, la muy infortunada! Y ¿cuál ha podido ser la causa de su muerte?
«Su arco había lanzado la flecha más lejos que ninguno; había conquistado una felicidad,
la más afortunada, ¡oh Zeus!; había hecho perecer ignominiosamente a la doncella de los PAJE:
dedos en garra, la de los cantos enigmáticos; se había erigido en nuestro país como una Nada, sino ella misma. De todo lo que aconteció, lo más horrible te ha sido ahorrado,
torre contra la muerte. pues de ello tus ojos no han sido testigos. Sin embargo, vas a saber todo lo que ha
sufrido la desgraciada, según lo que yo pueda recordar. Alocada, apenas pasó el vestí-
«Desde entonces, Edipo, se te llamaba nuestro rey, y habías recibido los más grandes bulo, se precipitó en la cámara nupcial, mesándose con ambas manos los cabellos. Tan
honores como amo y soberano de la poderosa Tebas. luego como entró, cerró de golpe las puertas y, llamando a Layo, muerto desde hace
tiempo, evocando el recuerdo del hijo, que había nacido desde hacía años, al hijo a
«Y hoy, ¿quién es aquel cuya desgracia sea más lamentable de oír? ¿Quién vive en su hogar una cuyas manos Layo había de morir, dejando a esa madre añadir hijos, si tal nombre me-
vida más trastornada, más llena de aflicciones y atroces tormentos? recían, de su propio hijo. Gemía sobre el lecho en donde, doblemente miserable, había
engendrado de su esposo un esposo, e hijos de su propio hijo. No sé cómo después se
«¡Oh, ilustre Edipo, el mismo puerto bastó para hacer encallar al padre y al hijo en el seno mató. Pues Edipo, gritando, llegó precipitadamente, y ya no pude ver la muerte de la
del mismo lecho! ¡Cómo, cómo los surcos fecundados por el padre pudieron, ¡desgracia- reina. Nuestros ojos estaban fijos en el rey, que corría alocado, pidiéndonos una espada
do!, aguantarte tanto tiempo en silencio! y que le indicásemos dónde se hallaba su mujer, que no era su mujer, si no el campo
maternal doblemente fecundado del cual habían salido él mismo y también sus hijos. En
«Pero bien a pesar tuyo, el tiempo, que lo ve todo, lo ha descubierto al fin, y de aquí ese momento, un dios sin duda secundó su furor y le condujo hacia ella, pues nadie de
que condena tu himeneo demasiado monstruoso, que te hizo hacer madre a la que lo los que estábamos allí presentes le facilitamos ninguna indicación. Entonces, dando un
fue tuya. ¡Ay!, ¡ay!, hijo nacido de Layo, ¡pluguiera a los dioses que jamás te hubiese yo horrible grito, se lanzó, como si alguien le hubiera guiado, contra la doble puerta, hizo
conocido! Pues desde el fondo de mi pecho grito y me lamento sobremanera, y mi boca saltar de sus goznes los herrajes labrados, y se precipitó en el interior de la habitación.
no puede exhalar, sino gritos de dolor. Y, sin embargo, para decir la verdad, gracias a ti Allí vimos a su mujer colgando, todavía sostenida por un cordón trenzado. En cuanto la
he podido respirar y sentir que el sueño cerraba mis ojos. vio, el desventurado Edipo, lanzando espantosos rugidos, deshizo el nudo que la man-
tenía en el aire y la desgraciada cayó al suelo. Entonces vimos cosas horribles: Edipo le
(Entra desolado un PAJE que llega de palacio.) arranca de los vestidos los broches de oro que los adornaban, los coge y se los hunde
en las órbitas de sus ojos, gritando que no serían ya testigos ni de sus desgracias ni de
PAJE: sus delitos: «En las sombras, decía, no veréis ya los males que he sufrido ni los críme-
Vosotros, que en esta tierra continuáis siendo siempre los más dignos de estima, ¡qué ac- nes de que he sido culpable. En la noche para siempre, no veréis más a los que nunca
tos vais a saber, qué actos vais a contemplar, y que lúgubre dolor vais a soportar si, como deberíais haber visto, ni reconoceréis a los que ya no quiero reconocer». Lanzando tales
fieles a vuestra raza, guardáis aún el mismo afecto a la casa de los Labdácidas! imprecaciones, levantaba sus párpados y se los golpeaba con golpes repetidos. Sus pu-
Pues nunca, a mi entender, ni el Istro ni el Fasis, con sus aguas, podrán lavar ni purificar pilas sangrantes humedecían su barba. No eran gotas de sangre las que de ellos fluían
este palacio de la abominación que lo llena. Pero pronto van a salir a plena luz otras des- unas tras otras; de ellos brotaba una lluvia sombría, una granizada sangrienta. Estos
gracias voluntarias y no impuestas. Ahora bien, de todos sufrimientos, los más crueles son males han estallado por culpa del uno y de la otra, y el hombre y la mujer mezclaron sus
aquellos de los que nosotros mismos somos autores. desgracias. Antes gozaban, es verdad, de una larga herencia de segura felicidad; pero
hoy no hay más que gemidos, maldiciones, muerte, ignominia; en una palabra, todas las
CORIFEO: calamidades que llevan tal nombre, ni una sola falta.
No nos hace falta añadir nada a lo que sabíamos para gemir profundamente; ¿qué nos
vas a anunciar aún ahora? CORIFEO:
¿Y ahora, el desgraciado está más tranquilo, en medio de sus males?

XVIII XIX
ÁTOPOS ÁTOPOS
PAJE: CORIFEO:
Grita que se abran las puertas, y que se muestre a todos los cadmeos al matador de ¡Oh, qué acción la tuya! ¿Cómo has tenido valor para apagar así tus ojos, y qué divinidad
su padre, al hijo cuya madre ..., pero no puedo repetir sus palabras impías. Dice que ha podido forzarte a ello?
quiere huir de esta tierra y no permanecer nunca más en su hogar, cargado de las
maldiciones que él mismo pronunció. Necesita, sin embargo, un guía y un apoyo, EDIPO:
pues su dolor es demasiado grande para que pueda soportarlo. El mismo te lo va a Apolo, amigos míos; sí, Apolo, él fue el instigador de los males y de los tormentos que
mostrar. He aquí que los cerrojos de las puertas se han corrido. Vas a ser testigo de padezco. Pero ninguna otra mano, ninguna otra, sino mía, ha reventado mis ojos, ¡desdi-
un espectáculo que conmovería el corazón aun del más cruel enemigo. chado de mí! ¿Por qué tenía yo que ver, cuando de todo lo que podía ver nada podía ya
ser agradable a mi vista?
(Entra EDIPO, guiado por un servidor;
tiene los ojos reventados, y el rostro, cubierto de sangre.) CORIFEO:
¡Ay! Efectivamente, sería como dices.
CORIFEO:
¡Oh sufrimiento espantoso para ser contemplado, el más atroz de cuantos hasta ahora EDIPO:
he podido ser testigo! ¿Qué locura se abatió sobre ti, infortunado? ¿Qué dios vengador ¿Qué me queda que ver o querer? ¿De quién, ¡oh amigos míos!, si me dirijo a él, podría
ha puesto el colmo a tu fatal destino, abrumándote con males que sobrepasan el dolor escuchar la palabra con alegría? Alejadme en seguida lejos de aquí. Alejad, amigos míos,
humano? ¡Ah!, ¡ah desgraciado! No puedo posar mi mirada en ti; yo que quería interro- esta plaga perniciosa, a este maldito a quien los dioses odian como nunca ningún mortal
garte largamente, hacerte hablar, mirarte de frente, no sé ante ti más que estremecerme fue odiado.
de horror.

EDIPO (A tientas.):
¡Ay!, ¡ay!, ¡qué infortunado soy! ¿A qué rincón de la Tierra me iré así, desgraciado? Fragmento de Edipo Rey. Sófocles. Madrid, Gredos, 2010.
¿Dónde mi voz podrá llegar? ¡Ay!, destino mío, ¿dónde me has hundido?

CORIFEO:
En una horrorosa desgracia, inaudita, espantable.

EDIPO:
¡Oh nube de tinieblas!, ¡nube aborrecida que ha caído sobre mí!, ¡nube indecible, indoma-
ble, empujada por el viento del desastre! ¡Desdichado de mí!, ¡desdichado mil veces! ¡Con
qué dardos a la vez me traspasan el aguijón de mis heridas y el recuerdo de mis desgracias!

CORIFEO:
Sufriendo lo que sufres, no es de extrañar que redobles tus quejas y que tengas doble
dolor al sobrellevarlas!

EDIPO:
¡Ay, amigo mío; tú eres el único compañero que me queda, puesto que consientes en
ocuparte aún del ciego que soy ahora! ¡Ay!, ¡ay! Sé que estás ahí, pues, a pesar de estar
sumido en las tinieblas, reconozco tu voz.

XX XXI
ÁTOPOS ÁTOPOS
El mal oscuro (fragmento)*
Giuseppe Berto
El mal oscuro muestra de forma magistral el modo en que uno se construye como individuo, es de-
cir, por identificación con lo que han sido las figuras fundamentales de su vida. Esa identificación,
que no suele aparecer en los rasgos superficiales de la conciencia, va trabajando en las regiones
psíquicas más inaccesibles y, al igual que un mecanismo de relojería, como en el caso de Edipo,
estalla cuando el individuo se creía más alejado de ese peligro. Así le sucede al sujeto de El mal
oscuro: cuanta más pasión pone en huir de la figura del padre, más cerca se encuentra de él, aun
sin saberlo (… ) El mal oscuro es la segunda gran novela italiana en la que literatura y psicoanálisis
se alían para dar lugar a una obra de arte. La primera, como es sabido, fue La conciencia de Zeno,
de ítalo Svevo, a quien se rinde homenaje en alguna de las páginas del relato de Berto. Es posible
que el psicoanálisis y la literatura persigan el mismo objeto, aunque sus caminos para llegar a él
sean diferentes. No olvidemos lo que ayudó a Freud la lectura de los mitos griegos, y de las grandes
obras de la literatura universal, en su personal exploración de los mecanismos del alma.

Juan José Millás (fragmento del prólogo)

H abría hecho cualquier cosa con tal de no


disgustar a mi médico analista, y ésta, entre
muchas otras razones, enfurecía por lo general a
después de todo, parecía que para él los pecados
no existieran, por lo menos los míos, o sea parecía
que siempre había realizado mis malas acciones
mi mujer, la que afirmaba que tenía más conside- condicionado por algo, lo que quería decir que
raciones por aquel fulano que me estaba sacando en determinadas circunstancias no habría podido
un montón de dinero sin hacer otra cosa que no actuar mejor que de la manera en que lo había he-
fuera oírme hablar que por ella, lo cual era abso- cho, así afirmaba el médico analista, y estoy segu-
Diván de Freud
lutamente falso, pero la verdad es que mi mujer, ro de que lo habría afirmado también en el caso
además de su incompetencia en relación a los de que hubiera estuprado a mis cinco hermanas, atribuirme culpas gratuitamente era para él una debió de haberse semejado a mí, también en el
temas psicoanalíticos, estaba muy enamorada de y eso lo hacía diferente a mi padre verdadero, y maniobra evasiva con el fin de descargar aunque sentimiento exorbitante de culpa, aun cuando soy
mí, o así parecía, y en realidad era posesiva, ego- también a mi mujer, se comprende, pero aquí en sólo fuera ficticiamente una conciencia demasia- consciente de que en este asunto de la semejan-
céntrica y descuidada, como me lo explicaba muy esta historia el personaje que interesa es más mi do cargada de sentimientos de responsabilidad, za juegue mucho el proceso de identificación ya
bien el médico, y le molestaba cualquier persona, padre que mi mujer, y él especialmente en la pri- diciendo la verdad, por mucho tiempo y aún des- iniciado, y me atrevo también a correr el riesgo de
y hasta cualquier cosa o actividad, que me sustra- mera fase de nuestra lucha, tenía siempre propen- pués de su muerte he pensado que él se conside- identificarme con un padre absolutamente imagi-
jera de ella aunque fuese sólo temporalmente, sión a descubrir, en las distintas cosas que entre raba el hombre justo y sabio por excelencia, y por nario, o tal vez también con una proyección idea-
y en lo referente al psicoanálisis intuía que, por nosotros no funcionaban bien, mi culpa, aunque ende libre de culpas, semejante al Padre eterno, lizada de mí mismo, aunque mi fe y mis esfuerzos
medio de una transferencia, me había llegado a muchas de esas cosas, especialmente las que se pero después no estuve ya tan seguro, es más no encuentran un sostén en la indudable, objetiva,
conseguir el padre que me convenía, un padre a referían a la convivencia familiar y a la marcha de estuve nada seguro, y esto no tanto porque hu- espantosa semejanza de aspecto, a propósito
quien podía amar incondicionalmente, desde el los negocios, funcionaban mal sin que yo tuviera biera descubierto documentos antes ignorados de la cual podría exponer, aunque fuera a modo
momento en que no me fastidiaba de continuo la menor participación en ellas. A saber qué era o porque hubiesen surgido nuevos elementos de ejemplo, el asunto de las fotografías. Cuando
como mi verdadero padre a pesar de haber muer- lo que él pensaba de sí mismo, es decir si se aso- de juicio, sino porque después de las vicisitudes murió mi padre llegué naturalmente tarde, o sea
to; por el contrario, éste me perdonaba de buena ciaba aunque fuera parcialmente en las numero- de la enfermedad sucedió que tuve que revisar cuando ya estaba tendido en una de las cinco o
gana todos mis pecados, también debido a que, sas culpas que me atribuía o si por el contrario de arriba a abajo todos mis puntos de vista; has- seis mesas de mármol de la sala mortuoria, afeita-
ta un grado tal vez excesivo, ya que si por medio do perfectamente, vestido con el traje negro con
*Madrid, Debate, 1991 (Edición original Rizzoli Ediitore, Milán, 1964) de todo un cuadro complejo de comparaciones el que se había casado cuarenta años atrás, que
resultaba que yo me parecía a mi padre, se des- todavía estaba flamante si es que así puede decir-
prendía sin lugar a dudas que en vida mi padre se, un poco porque mi padre al igual que yo era
XXII XXIII
ÁTOPOS ÁTOPOS
parsimonioso y se vestía siempre con la ropa más seguro de que marca también el inicio aunque La herencia del psicoanálisis:
vieja, y también porque después de su matrimonio ahora lejano y recóndito de la oscura enfermedad
engordó mucho y el traje no le quedaba ya bien, que aquejó mi espíritu, es más, puedo decir que Clínica y teoría para el siglo XXI
y en realidad para poder vestirle en esa ocasión indudablemente de allí provino este horrible mal,
tuvieron que descoserlo casi completamente por ya que la comprobación de una culpa objetiva Miguel Angel Gonzalez Torres*
atrás, lo que sin embargo no se veía porque yacía como en realidad era mi ausencia en el momento
en posición supina, digno y solemne en su paz de- de su muerte provocó la sacudida entonces inad-
finitiva, y yo que en aquella época no estaba aún vertida que puso en movimiento todos los demás
enfermo de la obsesión de la muerte y de otras sentimientos de culpa reprimidos y depositados
semejantes, no sentía desagrado al contemplar- en el subconsciente, en espera de asaltarme. En
lo tal como estaba, encontraba que era uno de efecto, yo, cuando mi padre tuvo aquel accidente
los cadáveres más hermosos que había visto en mortal, estaba bastante bien tanto de alma como
mi vida, y por ello se me ocurrió mandarle tomar de cuerpo, vivía en Roma, libre ya de problemas,
unas fotografías. Ahora, expuesta de este modo, ganaba buen dinero trabajando para el cine, y es-
la explicación resulta tal vez demasiado clara, pero taba siempre enredado en líos de faldas, aunque
de ninguna manera exhaustiva, y en efecto no es jamás me haya gustado, por el contrario de otros,
que hubiese querido tomar, como puede parecer, tener más de una mujer a la vez, de modo que
una fotografía de recuerdo o alguna otra cosa por cuando encontraba una nueva debía por fuerza
el estilo, sino que a través de su imagen quería despachar a la precedente, y había disgustos, pero
rendirle, digamos, un homenaje, aunque después disgustos interesantes y en el fondo agradables
en el inconsciente llegara a obtener resultados como son los referentes a los asuntos amorosos.
entonces nebulosos, son hoy sin embargo per- Le escribía a mi padre regularmente dos veces al
fectamente nítidos y estrechamente relacionados año, la primera en Navidad para decirle que des-
con el difuso sentimiento de culpa que como es graciadamente no podría ir a verlo pero que nos
del todo evidente se ha desarrollado en mí de un veríamos en la Semana Santa, y la segunda en Se- El comité secret: de
izquierda a derecha
modo desmesurado gracias sobre todo al peso mana Santa para decirle la misma cosa, es decir, O. Rank, R. Abraham,
de la influencia paterna, de manera que en aque- que nos veríamos en Navidad, y en ambas ocasio- M. Eitington, E.Jones.
lla ocasión habría debido desinteresarme, de ha- nes metía en el sobre un giro postal, pequeño en Delante Freud, S. Ferenci y
ber sabido lo que me iba a ocurrir, del hecho de relación con lo que me costaba, por ejemplo, des- H Sachs. Berlin. 1922.
haber llegado tarde, aunque subsista una culpa pedir a una vieja amante para sustituirla por una
concreta de mi parte, ya que tenía presentimien- nueva, pero grande si se tiene en consideración, Introducción entre paciente y paciente, hablando de
tos o cosas de este género, siempre que se con- como es justo, sus escasas necesidades económi- lo divino y lo humano y dibujando es-
sidere un delito llegar tarde en una circunstancia cas, ya que aparte de todo, disfrutaba de dos pen-
como ésa y en verdad mi médico, si vamos a ello,
era del parecer de que no había falta alguna en
siones, podían ser todo lo exiguas que se quiera
pero eran dos, y si bien la suma que yo le enviaba
E n 1977, siendo estudiante de Medi-
cina, pedí a un psiquiatra amigo que
me dejara estar a su lado cuando pasa-
quemas en hojas de notas, esquemas
que incluso hoy todavía utilizo cuan-
do doy clases. Entonces me llamaba la
llegar cuando el padre ya había muerto, pero se era realmente ridícula, unas diez mil y a veces sólo
entiende que él debía tenderme la mano para li- cinco mil, entonces para sentirme con la concien- ba consulta. acudí casi todas las tardes y atención la jovialidad y la energía con
berarme de aquel desproporcionado sentimiento cia tranquila bastaba que pensara en alguna de observaba con los ojos muy abiertos lo la que aquel hombre encaraba cada
de culpa, y por tanto se esforzaba en persuadirme las muchas cosas que en él me fastidiaban, no sé, que hacía: cómo preguntaba, qué cosas jornada. Su profesión, mi profesión de
de mi inocencia también cuando como en el caso su obstinación en firmar con el apellido y luego el le llamaban la atención, cómo construía hoy, le seguía fascinando ya cerca de
*Centro Psicoanalítico de
de mi ausencia en el momento de la defunción, la nombre en vez de hacerlo con el nombre y luego los diagnósticos, qué medicamentos la jubilación. Era capaz de escuchar a Madrid
culpa subsistía, y de qué manera... el apellido, o la importancia que se daba cuando utilizaba, cuándo daba consejos y sobre los pacientes, aunque fuera los pocos Departamento de Neuro-
desfilaba en las ceremonias patrióticas llevando la qué temas. Se llamaba Amadeo Hermo- minutos disponibles en aquel horario ciencias. Universidad del
País Vasco
Quisiera ser claro en este punto que es capital en bandera de la Sección Local de la Asociación Na- so y con los años he ido valorando cada descabellado y al terminar la jornada Servicio de Psiquiatría.
la historia ya que marca el inicio del paso de la cional de Carabineros Retirados, y al fin de cuen- vez más lo que ya entonces me pare- no estaba enfadado ni criticaba el siste- Hospital de Basurto
segunda a la tercera fase en la lucha con el padre tas, no resultaba demasiado espléndido tener un cía un regalo. Recuerdo perfectamente ma, ni se quejaba de la falta de tiempo Bilbao
y en otras palabras el retorno de su poder y estoy padre carabinero, aunque estuviese retirado. muchas de las cosas que me explicaba o de recursos constantemente. Parecía
XXIV 45
ÁTOPOS ÁTOPOS
que él, cada día, iba contento a trabajar Una entrevista con un paciente, con convierte en algo mucho más difícil de labras de un periódico. Dirigido a per-
y desde luego yo acuda entusiasmado otra persona que nos habla de su vida y encontrar de lo deseable. El interés no sonas que nunca hubieran oído hablar
a su lado cada tarde, sintiéndome en el sus sentimientos nos permite entrar en puede fingirse ni se entrena, está o no de esta curiosa profesión. Podríamos
umbral de un mundo que iba a ser mi un mundo desconocido para la mayo- está ahí. Si un médico o psicólogo lle- decir algo así:
carrera profesional. ría, misterioso y secreto. Nos permite, ga a la clínica, y especialmente al psi-
si escuchamos con atención, percibir coanálisis, sin un interés genuino por el “Se ofrece una relación larga en la que
Pocos años después, cuando empezaba matices y detalles nuevos a veces para otro, jamás va a poder ayudar a sus pa- un experto en el funcionamiento psí-
a trabajar en Psiquiatría, pensaba que el quien los relata. El conocido dictum de cientes. No es fácil que alguien desinte- quico le dedicará profunda atención y
Dr. Hermoso me había enseñado algo Terencio: “nada humano nos es ajeno” resado por la vida de los demás acabe le escuchará con respeto para ayudarle
importante: que es posible después de cobra aquí una importancia clave. Cada dedicándose a la psicoterapia, pero si a descubrir el motivo de su malestar, a
muchos años vivir con entusiasmo esta paciente es un individuo único, y a la vez se diera el caso, haría bien en alejarse revisar las alternativas posibles y a de-
profesión, propiciar que el paciente nos representante de todas las personas. El de la clínica antes de sufrir o hacer sufrir cidir los caminos más acordes con sus
relate su historia y construir con él el interés por el paciente no deja de ser a otros. intereses. A lo largo de este proceso, el
mejor tratamiento posible y. si las cosas un interés por todo el género humano y experto se abstendrá de imponerle sus
no van bien, intentar al menos estar a su desde luego por nosotros mismos. El respeto, en cambio, exige un entre- criterios o utilizarle en cualquier modo
lado también en los momentos difíciles. namiento y una actitud de constante vi- para resolver sus propias dificultades. A
El psicoanálisis lleva al extremo ese gilancia a lo largo de los años. Cuando cambio de esto usted se limitará a en-
Más tarde, después de la larga forma- respeto por el otro que debiera ser un paciente me habla de su hijo ado- tregar el pago acordado”
ción en Psicoanálisis, de años de semi- consustancial a cualquier profesión de lescente, me gustaría hablarle del mío
narios, de supervisiones, de pacientes ayuda y en especial a cualquier prácti- y mis propias dificultades, me gustaría Cuando doy seminarios sobre funda-
atendidos, de buenos y malos resulta- ca clínica. Respeto por las decisiones a veces compartir opiniones o, por qué mentos básicos en psicoanálisis suelo
dos, he vuelto a ese primer encuentro del paciente, por sus opciones de vida, no, buscar su consejo en los muchos te- describir a los alumnos una escena co-
profesional de mi carrera encontrando por sus preferencias. El paciente no es mas de los que sabe más que yo. No mún para situarles en lo que es una at-
allí algo todavía más valioso que lo que como nosotros, no tiene por qué serlo debo hacerlo por respeto; porque él o mósfera terapéutica propia de nuestro
acabo de contar. En aquella pequeña y probablemente no debe serlo. El res- ella no están ahí para resolver mis du- trabajo como analistas. Les digo:
consulta del seguro en los años 70, con peto obliga a una actitud “en negativo” das, ni para hacerme sentir buen pro-
escasos minutos para cada paciente, un al profesional, señalando sobre todo lo fesional, ni para que me sienta aprecia- “Imaginad que una persona, aún poco
psiquiatra veterano, sin diván ni enar- que debemos evitar y no tanto lo que do. Mi respeto implica dedicarme a sus conocida, nos invita a su casa. Entramos
bolando grandes teorías, me enseñó sí debemos hacer. El respeto pasa por problemas, dejando mis propias nece- con el respeto lógico, esperando que
los dos ingredientes básicos de la labor no imponer al paciente nuestra idea de sidades a un lado hasta que termine la ella tome la iniciativa para mostrarnos
clínica en psiquiatría, que son los dos salud, que puede no ser la suya y por sesión y vuelva a mi mundo social, fami- los distintos espacios de la vivienda. Le
ingredientes sobre los que el Psicoaná- no situarnos como modelo de vida en liar, de pareja… Ese respeto fundamen- seguimos con educación y observamos
lisis desarrolla su práctica: el interés y el ningún aspecto. Nuestra tarea consis- tal constituye la base de la neutralidad con atención los objetos que nos va se-
respeto. te en ayudar al paciente a que vea con o la abstinencia, que son los términos ñalando. Puede que le hagamos algu-
claridad sus preferencias, las examine técnicos con los que nos referimos a los na pregunta sobre lo que nos muestra,
No se puede ser psiquiatra, y mucho y decida cuál debe ser su camino. Los matices del respeto fundamental que pero siempre de modo tentativo y cui-
menos psicoanalista, sin ser curioso, sin consejos sobre la ruta y el destino de- debe guiar nuestro trabajo. dando de no ser invasores. La anfitriona
estar genuinamente interesado en el ben quedar sólo para aquellas personas quizá nos enseñe las fotografías sobre
otro. Sólo la fascinación continuada por que por su fragilidad precisan muletas y ¿En qué consiste el Psicoanálisis? la cómoda y nos hable de los distintos
el ser humano nos permite seguir año una compañía amable hasta ser capaces personajes que han poblado su vida,
tras año al lado del paciente con ese es- de caminar por sí solas. ¿Y qué es en realidad lo que hacemos pero no tomamos las fotos ni abrimos
Interés y respeto como
píritu jovial del Dr. Hermoso, encontran- los psicoanalistas? Tiempo atrás pensé los cajones que están cerrados. Cuando
ingredientes básicos del do en cada detalle vital algo que nos Hay un problema, sin embargo, con en cómo podría ofrecerse nuestro tra- me pide mi opinión se la doy y poco a
psicoanálisis. interpela, nos enseña o nos conmueve. estos dos requisitos básicos, que los bajo en la sección de anuncios por pa- poco voy preguntando con cuidado so-
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bre aquello que falta. Puedo proponerle nas, el mundo de las pulsiones que tra- no es posible sostener esas afirmaciones ocurrir incluso lo contrario pues una
que abramos algún armario y miremos ta de expresarse en la vida diaria. Para de modo tajante pues ya disponemos vida más plena en el sentido de un ma-
en su interior. Yo estoy ahí para ayu- otras los vínculos reales entre las per- de numerosos trabajos de investigación yor contacto con los deseos y temores
dar, pero no para atropellar ni invadir. sonas ejercen una poderosa influencia demostrando con suficiente contun- más profundos y una mirada más abier-
Al final de la visita nos despedimos con sobre ese mundo pulsional, facilitando dencia que también para muchos sínto- ta sobre la realidad pueden de hecho
educación hasta un próximo encuentro o no su expresión y control. Una y otra mas el psicoanálisis puede ser útil. Sin llevar a insatisfacciones y decepciones.
en el que si ella quiere, podemos seguir posición, con obvios matices, conduce embargo, reconozcámoslo de entrada, Quien desea la felicidad por encima de
observando, examinando y compren- a variantes en el trabajo terapéutico, en hay una cierta razón en esos comenta- cualquier otra cosa no debería recurrir
diendo qué hay en su vivienda, qué la consideración que se da a la transfe- rios desfavorables. No me refiero tanto al psicoanálisis; otras vías podrán acer-
echa de menos, qué ha perdido y con rencia en el proceso y a la diferente im- a una supuesta ineficacia de las terapias carle mejor a ese objetivo.
qué desea llenar los espacios vacíos. Yo portancia que se otorga a la figura real psicoanalíticas sino a que la verdadera
soy un visitante y estar allí es un privile- del terapeuta en la práctica clínica. diana de nuestro trabajo es algo que se ¿Merece la pena ese esfuerzo para lo-
gio que esa persona me concede. sitúa más allá de los síntomas: la identi- gar un conocimiento sin duda valioso,
Los objetivos del Psicoanálisis dad del sujeto. pero que no siempre ni necesariamen-
El psicoanálisis, 70 años después de la te nos va a llevar hacia la felicidad? No
muerte de Freud sigue siendo básica- Se atribuye a Freud la frase de que la Cada persona guarda en su interior una tengo la respuesta, pero recuerdo que
mente ese encuentro pactado entre dos finalidad del Psicoanálisis es que el pa- imagen de sí, compuesta de diferentes un amigo hace años, reflexionando con
personas, en el que una de ellas autori- ciente pase de la “miseria neurótica a partes más o menos integradas. Desde esa seriedad que solo permite la juven-
za a la otra a entrar en su mundo interno la infelicidad común”. Escuchar esta esa identidad se relaciona y se vincu- tud me dijo que cuando le llegara la
y a ayudar a cambiarlo aliviando el sufri- afirmación por primera vez nos deja la afectivamente, desde esa identidad hora, quería marcharse de la vida como
miento que le hizo acercarse. Es cierto un regusto un tanto amargo y pesimis- construye sus sueños y expresa sus de- un torero honrado, que ha lidiado el as-
que en todo este tiempo el Psicoaná- ta, pero la frase en sí encierra una gran seos y sus temores. El objetivo del psi- tado que le ha caído en suerte ponien-
lisis ha ido creciendo hasta convertirse verdad: la salud y la felicidad son con- coanálisis es ayudar al paciente a exa- do en juego todo su valor, su esfuerzo,
en “los psicoanálisis”, un conjunto de ceptos diferentes y el psicoanálisis no minar su identidad más profunda y en su arte. Quería dejar el ruedo con la ca-
propuestas terapéuticas que conservan tiene como objetivo ninguna búsqueda alguna medida transformarla. Una per- beza alta, exitoso o no, pero arropado
algunas líneas básicas comunes pero de la felicidad, sino la exploración del sona no debería ser la misma después por el respeto del público y su propio
que de ninguna manera constituyen mundo interno de cara a una vida más de un proceso de análisis. Más allá del respeto. Convinimos entonces que hay
un corpus doctrinal homogéneo. Por auténtica. alivio de síntomas, de la estabilización formas de vivir, y morir, mejores que
ello hoy es legítimo preguntarse ante emocional, de las mejoras en la funcio- otras, y que un hombre puede acercar-
cualquier profesional que habla de psi- A lo largo de los años se ha producido nalidad o en la capacidad relacional en se si quiere a algunas de ellas.
coanálisis a qué psicoanálisis se refiere. un debate más o menos larvado en tor- el mundo social, familiar o de pareja,
Posiblemente no es este el momento ni no a los fines del psicoanálisis. Muchos la verdadera meta es la transformación Cuenta Dante Alighieri, en su narración
el lugar para entrar a describir en deta- le achacan a nuestra disciplina que no de la identidad del sujeto. Alguien que sobre el Infierno, que Ulises arengaba a
lle las principales corrientes psicoanalí- es útil para luchar contra los síntomas termina un proceso analítico debe ser sus hombres cuando estos dudaban, te-
ticas que hoy se desarrollan con mayor que llevan al paciente a pedir ayuda. y sentirse, en cierta medida, diferente. merosos de cruzar las columnas de Hér-
fuerza. Baste decir que hoy igual que Para eso, dicen, hay otras terapias más El Psicoanálisis sería entonces una “te- cules y adentrarse en el mar tenebroso
ayer la mayoría de las propuestas teó- eficaces, más rápidas, que requieren rapia modificadora de la identidad”. que les aguardaba “No fuisteis hechos
ricas pueden situarse a lo largo de un menos entrenamiento de los profesio- La pregunta por antonomasia a la que para vivir como bestias, sino para per-
eje que señala la mayor o menor impli- nales… más coste-efectivas. paciente y terapeuta deben buscar res- seguir la virtud y el conocimiento” o en
cación de la relación interpersonal en la puesta es ¿quién soy? o mejor, ¿quién el bellísimo italiano del florentino Fatti
construcción de la identidad del indivi- Es cierto que el olímpico desdén con el soy , de verdad? nos foste a viver come bruti, ma per se-
duo. Para algunas escuelas, el otro es que se ha visto desde el Psicoanálisis la guir virtute e conoscenza. El psicoaná-
Que se sitúa más allá de
un elemento colaborador en el proceso investigación hasta fechas recientes ha Obviamente ser diferente no implica lisis puede ser una valiosa herramienta los síntomas: la identi-
de gestión de poderosas fuerzas inter- favorecido estas críticas. Hoy en día ya necesariamente ser más feliz. Podría para acercarse a la verdad, a nuestra dad del sujeto.

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verdad interior, propia y personal, no a sus semillas a América y muchos años no se fuerzan bastante las cosas- asig- ¿no tendrían derecho a pedir ayuda y
esa Verdad con mayúsculas de la Reli- después las dictaduras de Argentina narles una etiqueta diagnóstica con encontrarla? Bajo esta crítica subyace
gión o algunas Ciencias Y recordemos y Chile nutrieron con un vendaval de confianza. Ello tiene que ver con la in- también una idea peculiar de la terapia
que otro poeta nos dice: es amarga la conocimiento y sangre nueva el frágil evitable disposición de las clasificacio- analítica, considerando la sesión como
verdad, quiero echarla de mi boca, por- panorama del legado freudiano entre nes que manejamos en la clínica hacia un momento de disfrute en el que el
que la verdad puede que nos haga más nosotros. No podemos considerar hoy lo categórico, a dividir en áreas precisa- paciente aprovecha para hablar de sí
libres, pero sin duda a menudo supone al psicoanálisis como una herramienta mente delimitadas lo que en la realidad mismo pasando un buen rato al ser es-
abrir heridas y sentir dolor, aunque sean para el cambio político y el avance de la son terrenos que se solapan, áreas de cuchado con atención. La realidad es
dolores que sanan. democracia, pero desde luego sí puede sombra, dimensiones en una palabra. que muchas de las sesiones abren heri-
ser, también hoy, una herramienta para das dolorosas y nadie soporta un dolor
Quizá esa relación con la verdad, aun- cuestionarnos y cuestionar, para ob- Con frecuencia las personas que aten- repetido solo a cambio de un supuesto
que sea con esa verdad pequeña, pro- servarnos y observar, para cambiarnos demos son hombres y mujeres que placer por ser escuchado.
funda y personal, permite explicar las y cambiar. desde el comienzo del tratamiento o
tribulaciones que el psicoanálisis y los al cabo de no mucho tiempo muestran Por tanto hoy encontramos en las con-
psicoanalistas han vivido en momen- ¿Para quién el psicoanálisis? niveles funcionales básicamente nor- sultas de psicoanálisis sobre todo seres
tos y países donde la libertad ha sido males pero presentan una profunda humanos en situación de sufrimiento.
perseguida. No deja de ser una para- ¿Quiénes son hoy nuestros pacientes?, sensación de malestar respecto a su Algunos portando los diagnósticos tra-
doja que un grupo de médicos y psi- ¿a quién ofrecemos nuestro trabajo? vida, una necesidad de explorarla y una dicionales de la psiquiatría, otros sin
cólogos, la mayoría con un indudable disposición a modificar algunas de las ellos y todos con un profundo malestar
estilo burgués y conservador, de cos- Digámoslo de entrada, el perfil de nues- cosas que encuentren. En la literatura que les empuja hacia una exploración
tumbres morigeradas y vida metódica tros pacientes desborda con mucho el anglosajona a veces se caricaturiza este larga, dolorosa y difícil. Nadie acude a
despierten tantos recelos de dictado- estrecho corsé de las clasificaciones in- grupo de personas, denominándolas nosotros y persiste en la tarea si no hay
res y tiranos de cualquier lugar. Hitler ternacionales al uso. Por supuesto que los “worried well”, aquellos que pre- una clara “presión de sufrimiento” que
encontró la excusa del judaísmo de muchos problemas que figuran en es- sentan un nivel de salud psíquica acep- le empuja al cambio.
sus fundadores para erradicar algo que tos catálogos de patología pueden ser table pero están insatisfechos con su
quizá hubiera perseguido de todos mo- abordados mediante el psicoanálisis en vida. Subyace a este calificativo burlón ¿Cuál es la labor del psicoanalista en
dos. La consiguiente emigración a Gran su modalidad más clásica con varias se- una idea curiosa de que estas personas la sesión hoy?
Bretaña o las Américas supuso una se- siones semanales, diván y largos perío- son sujetos tratados demasiado bien
milla fructífera que de hecho extendió dos de trabajo o bien con las modalida- por la vida y que llevan una existencia Definir la tarea del analista es fácil y di-
esa “peste” que irónicamente señalaba des en formato más contemporáneo de tan libre de preocupaciones exteriores fícil a la vez. El papel fundamental del
Freud a Jung en su viaje a Nueva York. duración más corta y con encuadres de que pueden permitirse el lujo de mirar analista es proveer al paciente de un es-
El cuestionar, observar, preguntar, nun- menor intensidad y frecuencia. Dispo- en su interior y abordar cambios. Ante pacio y un tiempo donde la exploración
ca ha gustado demasiado a caciques nemos de evidencias suficientes, ade- este comentario podríamos decir aque- de su mundo interno sea posible. Ello
de diversa especie y unidos todos ellos más de la amplísima experiencia clínica llo de “non e vero, ma e ben trovato”, se logra gracias a diferentes herramien-
por encima de ideologías han encon- acumulada a lo largo de 100 años para no es verdad pero está bien contado. tas.
trado una curiosa unanimidad en la per- poder recomendar con confianza esta Hay mucho mito respecto a estas per-
secución del psicoanálisis. Desde Stalin terapia a numerosos pacientes con tras- sonas y los clínicos podemos asegurar Por un lado el tiempo. Las terapias bre-
a Videla, de Honeker a Franco o Pino- tornos de ansiedad, depresivos, trastor- que detrás de muchas vidas aparente- ves no existen y las terapias psicoanalí-
Podemos considerar el
chet hay una curiosa coincidencia en la nos de la personalidad…así como servir mente normales, si normal es trabajar, ticas breves aún menos. A menos, claro
psicoanálisis una herra- consideración de una técnica de psico- de complemento a otras alternativas te- ganar un sueldo, poseer una familia y está que consideremos breves trata- El papel fundamental
mienta para cuestionar- terapia como dañina y perseguible. De rapéuticas en muchas otras patologías, alguna vida social o de pareja, hay ma- mientos que requieren 6 u 8 meses de del analista es proveer al
nos y cuestionar, para ob- paciente de un espacio y
hecho el psicoanálisis español, peque- a veces de elevada complejidad. Pero lestares muy profundos y deseos muy trabajo intenso. Obviamente si lo que
servarnos y observar, para un tiempo donde la ex-
cambiarnos y cambiar. ño pero enérgico en sus primeros años, es cierto que a algunas de las personas claros de buscar cambios relevantes. se pretende es un cambio significati- ploración de su mundo
fue empujado por Franco a trasladar que acuden al psicoanalista es difícil –si Además, esas personas, si existieran, vo en la identidad del individuo, como interno sea posible.

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antes señalábamos, si lo que se busca ra de él y que teme, qué desea y que sentimientos o sus acciones y , sobre je freudiano. La investigación se relajó
tiene que ver con el modo de pensar o sueña. Otros colegas detienen su mira- todo, que interpreta poco, consideran- hasta quedar convertida en un mero
incluso sentir, el tratamiento debe ser da no en el paciente sino en la relación do sus interpretaciones como hipótesis desfile de opiniones, entre las que los
muy largo. Es sencillamente imposible que existe entre los dos participantes en que deben ser confirmada o refutadas interesados debían escoger no tanto
que no lo sea. Siempre podemos pedir este extraño juego. Analista y paciente después utilizando la opinión del pa- basándose en el mayor o menor con-
al paciente que se disfrace, pero eso no intercambian deseos y experiencias en ciente y otras muchas fuentes de datos tenido de verdad de las proposiciones,
es psicoanálisis una relación asimétrica no por ello me- y dejando estas hipótesis para momen- sino en el carisma e influencia de los
nos intensa. De ese modo, la pregunta tos en los que el decir del analista supo- autores que las respaldaban. El contac-
Por otro lado la actitud o disposición que el clínico se hace no es qué ocurre ne un pequeño y último empujón hacia to con otras ciencias fue también aban-
del terapeuta. Éste, básicamente, esco- en el mundo interno del paciente, sino la adquisición de un conocimiento casi donándose; eran las demás disciplinas
ge observar, escuchar, callar mucho y qué está ocurriendo entre nosotros. En al alcance del paciente. las que debían nutrirse del psicoanálisis
no interferir en la vida del paciente. De el primer caso el analista se sitúa más para enriquecer sus propuestas y no al
hecho, buena parte del entrenamiento en el papel de observador externo de Los problemas del Psicoanálisis hoy. revés. Cualquier dato obtenido fuera de
del futuro psicoanalista pasa por ense- un fenómeno y en el segundo juega las sesiones se convertía en sospecho-
ñarle a no intervenir, a frenar a menu- además el papel de participante en un Muchos son los problemas que ace- so o en inútil. La Universidad fue tam-
do la tendencia natural a convertirse en encuentro. chan hoy al psicoanálisis. Son producto bién abandonándose, por desinterés
el guionista de la novela personal del algunos de ellos del enorme éxito que de los analistas y poco a poco primero,
paciente y no resignarse a ser un mero En ambos casos el inicio del proceso a nivel internacional logró nuestra dis- abruptamente y por rechazo de los uni-
personaje de una trama diseñada por pasa porque el paciente coloque al te- ciplina en décadas pasadas. El psicoa- versitarios después. Finalmente, la inte-
él. Hace ya mucho tiempo que quedó rapeuta en una posición de autoridad nálisis reinó solitario entre las psicotera- gración del psicoanálisis dentro de los
atrás la idea de que había que recuperar y confianza que permite el comienzo. pias en muchos páises. Sus practicantes sistemas públicos de salud mental fue
el recuerdo reprimido de una experien- Obviamente además de esta disposi- en Estados Unidos, Francia, Inglaterra, quedándose reducida a casi la nada,
cia traumática infantil. Hoy la mayoría ción hacia la colaboración y la confianza Argentina o Italia poseían una consi- salvo excepciones en algunos países de
de los analistas ponen su atención no muy pronto surgirán cosas que vienen deración de sabios capaces de orien- elevadísimo nivel de renta y un sistema
tanto en el pasado sino en el llamado de la biografía del paciente, de su ex- tar a la sociedad sobre problemas muy público de salud que cubría incluso los
“aquí y ahora” de la terapia, en lo que periencia vital, de las dificultades que alejados de la práctica clínica en salud largos tratamientos psicoterapéuticos
sucede a cada momento en esa isla del ha tenido previamente y de los encuen- mental. Su influencia en la esfera inte- de base psicoanalítica. Se buscó ade-
espacio y del tiempo que conforma la tros que le han marcado. En alguna me- lectual de esos países era enorme y casi más, partiendo desde la desconfianza y
consulta y sus dos habitantes. dida, la persona del analista es también no podía concebirse una crítica literaria el desdén, que la formación de nuevos
factor importante en el proceso, tanto o de una obra artística, un trabajo an- psicoanalistas se llevara a cabo en ins-
Dentro de ese “aquí y ahora” son dos para que se produzca esa cierta quími- tropológico y hasta una obra cinema- tituciones fuera de las redes docentes
los modos fundamentales de observa- ca imprescindible entre ambos como tográfica que no tuviera en cuenta de universitarias o sanitarias, controladas
ción que hoy podemos encontrar den- para determinar las reacciones que va algún modo los conceptos de Freud y por pequeños grupos de psicoanalis-
tro de las diferentes escuelas, grupos y a experimentar ante lo que el paciente sus seguidores. Entre los pacientes del tas que en base a criterios a veces poco
subgrupos del universo psicoanalítico. le atribuye y ante la persona, muy real, psicoanálisis se contaron la flor y nata claros, determinaban quién, cuándo y
Algunos terapeutas posan su mirada en del paciente. de la intelectualidad, incluyendo una cómo sin dar explicaciones en cuanto al
el paciente y sobre todo en el material mayoría de creadores que exploraban por qué.
que éste pone en juego en la sesión. En todos los casos, el analista hoy es al- su mundo interno en un diván.
Pueden ser las palabras dichas o no di- guien que señala mucho, animando al Esto ha llevado a la paradójica situación
chas que nos revelan conflictos incons- paciente a mirar con detenimiento de- Esa posición de preeminencia conllevó actual. Por una lado la psicoterapia en
cientes claves para entender lo que le terminados aspectos del material que una dolorosa penitencia al provocar una general y algunas propuestas psicoa-
ocurre. Pueden ser los sentimientos que va presentando. También confronta a altanería antipática y una pérdida de nalíticas en particular (como la Psicote-
el paciente despliega en la sesión hacia menudo, situando al paciente ante as- esa capacidad de cuestionamiento que rapia Focalizada en la Transferencia de
el clínico, dónde le coloca, qué espe- pectos contradictorios de su relato, sus constituía la esencia misma del mensa- Kernberg & Clarkin o la Terapia Basada
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en la Mentalización de Bateman & Fo- dejaron de ejercer una influencia signi- Una mirada al futuro la marina británica, jamás podría hundir-
nagy) gozan de una acogida y respeto ficativa en nuestro país. Hasta los años se. ¿Qué investigación es necesaria?. La
entre psiquiatras y psicólogos como ja- 70, en España se vivió un período de No es fácil determinar cuál va a ser el respuesta es concisa: toda. Es preciso
más se había visto en los últimos trein- verdadera hibernación, con muy pocos papel del Psicoanálisis en los próximos continuar con los valiosos esfuerzos de
ta años. Por otro lado, las instituciones profesionales, formados en el extranje- años, tanto a nivel internacional como los analistas de Suecia, Estados Unidos,
psicoanalíticas viven una cierta langui- ro y con una organización escasa y sin en España. Partiendo, sin embargo de el Reino Unido o Alemania que contra
dez que en algunos países llega a ser influencia. Mientra el resto del mundo la curiosa situación actual en la que se viento y marea han puesto en marcha
trágica por la falta de candidatos y la occidental incluyendo de forma desta- combina una pérdida generalizada de Ensayos Clínicos Randomizados (ECR) y
enorme distancia que les separa de los cada la América hispana hervía de in- la pujanza de las insituciones psicoana- los han publicado en las mejores revis-
centros de poder e influencia en los ám- terés por un psicoanálisis que agigan- líticas junto a un creciente y renovado tas de Psiquiatría y Psicología Clínica del
bitos científico, educativo o sanitario. taba su influencia hasta niveles jamás interés por las técnicas psicoanalíticas, mundo. Esos son los cimientos sobre la
soñados por Freud, en España nuestra podemos esbozar algunas ideas sobre que podemos construir una base empí-
Podríamos resumir diciendo que el pa- disciplina se mantenía en animación lo que puede ocurrir y cómo debería- rica que demuestre no solo la eficacia
pel del Psicoanálisis como herramienta suspendida. Ese estado cambió radical- mos actuar los psicoanalistas para fa- de nuestros tratamientos sino la perti-
capaz casi de condicionar una weltans- mente a raíz de dos acontecimientos: la vorecer un mejor desarrollo de nuestra nencia de los conceptos que emplea-
chauung particular ha desaparecido, llegada de la democracia a nuestro país disciplina. Es necesario señalar que la mos. Y para profundizar en este esfuer-
probablemente para no volver, pero y el surgimiento de las dictaduras en el situación española en el contexto inter- zo, es imprescindible la colaboración
en cambio las intervenciones terapéuti- Cono Sur. nacional, secundaria a ese desacompa- entre grupos. El eterno problema de
cas derivadas del mismo gozan de una samiento antes citado, ofrece algunas los ECR en psicoterapia, y especialmen-
atención y un interés mayor que nunca. Este juego de acontecimientos deter- posibilidades extra pues si bien algunos te en Psicoanalisis es el del bajo núme-
Las instituciones del psicoanálisis se en- minó el particular recorrido del Psicoa- de los institutos españoles han perdido ro de sujetos incluidos en los estudios,
frentan a retos complejos desde una po- nálisis entre nosotros, muy diferente al la fuerza de antaño creo que en nuestro el bajo tamaño muestral. Cada analista
sición mucho más humilde que antaño. de los países del entorno. Mientras en país no podemos hablar de una deba- ve pocos pacientes muy intensamente y
Y esta posición humilde tiene evidentes Francia, el Reino Unido o sobre todo cle institucional como la producida en por tanto se necesitan muchos analistas
consecuencias a la hora de atraer a esta Estados Unidos veían como caía en pi- otras tierras. Ello puede permitir a las para conseguir muestras relevantes. De
formación y a esta práctica, difícil pero cado la influencia del psicoanálisis y los instituciones españolas jugar un papel ahí que la colaboración entre grupos
apasionante, a algunos de los mejores psicoanalistas, en España florecían ins- en el futuro próximo mucho más impor- diferentes de analistas no sea algo me-
entre las nuevas generaciones de clíni- titutos y grupos de estudio, se hablaba tante que sus organizaciones hermanas ramente conveniente sino vital para la
cos, ofreciéndoles una formación atrac- de integrar el psicoanálisis en la asis- en otros lugares. supervivencia de nuestro trabajo.
tiva, exigente, en una disciplina basada tencia pública e incluso algunos osados
en pruebas, contrastable, dispuesta al entraban tímidamente en la universidad En primer lugar debemos hablar de in- Sin embargo, los ECR no bastan para
cuestionamiento y al debate y no some- sin esconder sus convicciones. En este vestigación. El futuro del Psicoanálisis abordar la compleja realidad del pa-
tida a un control ciego por un pequeño tema, como en tantos otros, los años como área de conocimiento y como dis- ciente psicoanalítico. Los analistas de-
de grupo de practicantes alejados de de Franco supusieron un desacompasa- ciplina capaz de influir en la Ciencia, la bemos elevar varios escalones el nivel
la ciencia, la sanidad, la educación y la miento entre nuestros vecinos y noso- sanidad y la educación universitaria de- de exigencia de nuestras publicaciones
cultura. tros. Es así que los analistas en España pende, sencillamente, de la investiga- tradicionales. Los estudios de caso úni-
hemos asistido a una curiosa experien- ción que los analistas seamos capaces co, o aquellas reflexiones teóricas a par-
El panorama español presenta algunas cia: sentirnos felices aquí por la salud y de desarrollar. Quien no comprenda tir de un pequeño número de viñetas
peculiaridades por nuestra propia his- pujanza de algunos grupos nacionales y esto se coloca en el papel de aquellos clínicas, que han constituido el núcleo
toria. Como antes hemos señalado, la encontrarnos en las reuniones interna- pasajeros de Titanic que prefirieron ter- de las publicaciones en psicoanálisis
dictadura tras la Guerra Civil determinó cionales con la sonrisa forzada de co- minar su copa de Champgne en el Sa- han ido perdiendo rigor y fuerza, con-
Paradoja: instituciones
la práctica desaparición del incipiente legas extranjeros inmersos en un tobo- lón de Primera Clase en vez correr hacia virtiéndose demasiadas veces en una Sin preguntas no hay
en declive y técnicas de movimiento psicoanalítico en España. gán de pérdidas de ideas, candidatos e los botes salvavidas, confiados en que exposición de opiniones muy propias búsqueda y sin ella no
aceptación creciente. Los escasos practicantes emigraron o influencia. aquella máquina maravillosa, orgullo de no siempre bien argumentadas y con el hay Psicoanálisis.

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ÁTOPOS ÁTOPOS
apoyo de una bibliografía escasa, unila- Existen hoy programas de grado en reales. Con frecuencia los pacientes cuada para formarse en psicoanálisis, a
teral y antigua. No deberíamos aceptar Psicología, en España y en el mundo, atendidos de hecho no precisan inter- qué instituto les recomiendo que se di-
publicaciones científicas psicoanalíticas que dedican menos de 10 horas al Psi- venciones analíticas clásicas (alto nú- rijan, cuáles son los autores que hay que
en las que las referencias posteriores a coanálisis y sus desarrollos. En Medici- mero de sesiones y duración ilimitada) leer y cuáles obviar. No puedo contes-
los 70 se limiten a un pequeño grupo na la situación tampoco es halagüeña, sino aplicaciones psicoterapéuticas que tar con rotundidad a esas preguntas ni
de autores casi siempre pertenecientes pues en la mayoría de las Facultades se sí son más adaptables al contexto públi- a ellos ni aquí. Mi repuesta es que yo he
al Instituto del autor. Lejos de abando- presta poca atención a nuestro trabajo, co. Y por supuesto los abordajes grupa- encontrado un espacio para la reflexión
nar la tradición investigadora en Psi- dependiendo siempre de profesores les de raíz psicoanalítica pueden ocupar libre en el instituto al que pertenezco,
coanálisis deberíamos ahondar en ella concretos con interés particular. Esta si- un lugar importante en el arsenal tera- el Centro Psicoanlítico de Madrid, pero
y revigorizarla. tuación, muy patente en España, tiene péutico público de una forma además estoy seguro que hay otros espacios
raíces históricas, académicas y sociales muy coste-efectiva. Obviamente no hay donde también es posible una forma-
Así mismo, existe hoy una oportunidad complejas que trascienden esta exposi- integración posible del Psicoanálisis en ción rigurosa. Mi consejo fundamental
de integrar nuevas metodologías de ción. Sin embargo, quiero señalar una la asistencia pública en salud mental si es que observen, escuchen, lean y si-
investigación que han sido poco ex- doble tarea pendiente para nosotros: la mayoría de los analistas optan única- gan una regla práctica: si encuentran a
plotadas entre nosotros (hay honrosas ofrecer investigación sólida que obli- mente por la práctica en solitario tan algún analista o alguna institución ana-
excepciones), como las técnicas cuali- gue a los docentes a tener en cuenta habitual. lítica que cree poseer las respuestas,
tativas, muy apropiadas para el tipo de nuestras aportaciones y a la vez animar deben alejarse rápidamente pues con
contacto clínico, largo e intenso, propio a nuestros colegas, especialmente a los Podemos dedicar también algunas lí- seguridad habrán dejado de hacerse
de nuestro trabajo. Estas metodolo- más jóvenes, a desarrollar una vocación neas al movimiento psicoanalítico en sí preguntas. Sin preguntas no hay bús-
gías, nuevas para el psicoanálisis, están universitaria sin renunciar en absoluto al mismo. Hoy existe demasiada disgre- queda y sin ésta, sencillamente no hay
siendo desarrolladas desde otras áreas modelo psicoanalítico en el que están gación, pues los analistas nos hallamos análisis. Las certezas en Psicoanálisis
de conocimiento. Acercarnos a ellas es formados, sino más bien difundiendo divididos en una variedad de orienta- suelen conducir a caminos peligrosos.
también vital para nuestra superviven- su conocimiento y contribuyendo a sus ciones y escuelas, separadas muchas
cia. Los esfuerzos actuales, desarro- aportaciones. Es muy posible que el pa- veces más por motivos personales que El Psicoanálisis en el Siglo XXI puede
llados entre otros por algunos de los tente desamor que ha existido desde científicos, que muestran una escasa ser y debe ser una disciplina dedicada
ponentes que van a intervenir en este la Universidad hacia el Psicoanálisis en colaboración y a veces incluso cues- al examen y cuestionamiento sistemá-
ciclo, están permitiendo al psicoanálisis países como el nuestro se torne así en tionan el mutuo reconocimiento. A mi tico del mundo interno de las personas
recuperar esa posición de cuestiona- colaboración y respeto. modo de ver es preciso establecer unos y de sus relaciones. Desde ahí formará
miento y búsqueda constante que nun- crierios mínimos compartidos, buscan- parte activa del mundo de la Clínica, de
ca debió abandonarse. Estoy seguro También merece la pena reflexionar do un lenguaje común por un lado y la Cultura y de la Ciencia. Janet Mal-
que algunos colegas no valoran el que sobre la participación del psicoanálisis estableciendo por el otro reglas para colm definió años atrás al Psicoanálisis
aparezcan analistas entre los autores de en la asistencia sanitaria en Salud Men- decidir sobre el contenido de verdad como “la profesión imposible”. Ade-
trabajos en Science, Nature, JAMA o en tal. El Psicoanálisis puede contribuir de las distintas proposiciones en caso más de imposible es una profesión ma-
las mejores revistas internacionales de sin duda a una mejor organización de de disparidad de criterios. Hoy, sien- ravillosa, fascinante para el terapeuta
humanidades. Quizá piensen que bas- los dispositivos sanitarios, a una mejor do sinceros, no es posible hablar del y útil para el paciente. No siempre va
ta con seguir intercambiando guiños formación de los profesionales y a una psicoanálisis, sino más bien de los psi- a compañarnos hacia la felicidad pero
unos con otros, en las publicaciones de mejor atención a los pacientes. Pero no coanálisis, ese conjunto de propuestas sí, sin dudas hacia espacios de libertad
nuestros grupos locales, amparados en se trata de que el sistema sanitario se teóricas y prácticas que comparten el donde la vida pueda ser vivida con una
el calor de lectores amigos y confronta- adapte a las necesidades de los analis- legado freudiano y algunos conceptos mayor autenticidad.
ción escasa. tas, sino más bien al revés: estos pue- muy básicos centrados en la clínica y
den reflexionar sobre la mejor forma sus grandes principios.
La siguiente cuestión a considerar es la de apoyar la atención en salud mental,
influencia del Psicoanálisis en el mun- desde las propuestas psicoanalíticas, A veces los estudiantes se acercan y me
do académico de educación superior. con los recursos reales en situaciones preguntan cuál es la escuela más ade-
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ÁTOPOS ÁTOPOS
El psicoanálisis desde el paradigma de la complejidad Complejo, complejidad, los sistemas complejos sus elementos se
encuentran entretejidos de manera irre-
* Nicolás Caparrós Sistemas complejos
Psiquiatra, Psicoanalista.
Nicolás Caparrós* ductible. El propio campo de la comple-
jidad implica la inseparable relación de
Abordemos los inicios del problema a
través de un ejemplo. Sea un conjun- ciencias dispares: física, biología, evolu-
to de hormigas relativamente peque- ción, neurociencias, economía, psicoa-

S etenta años después de la muerte de Freud la tensión no cesa, la reflexión tampo- ño. Observaremos un comportamiento nálisis, computación, filosofía y un largo
co. Naturalmente la vigencia del psicoanálisis está en juego, siempre lo está. errático, carente de objetivos pero, si etcétera.
incrementamos su número hasta alcan-
zar una masa crítica1, aquel colectivo se Una primera aproximación a lo que de-
autoorganiza2 y ofrece un comporta- bemos entender por Complejidad sería
miento diferente. Emergen3 cualidades definirla como «ciencia de los sistemas
o propiedades nuevas. El ejército de complejos».
hormigas que ahora es, aparentemen-
te surgido del aumento de su número, Constantemente se engrosa la lista de
constituye un ejemplo de organización los sistemas que merecen ese nombre;
formidable, donde el todo rebasa con en ellos destacan una serie de propie-
mucho a las partes. dades comunes que los identifican:

La cantidad muda en cualidad; a las a).-Poseen un comportamiento colectivo


nacientes cualidades las denominamos complejo. Adoptan la forma de red con
emergentes. elementos dispuestos según fórmulas 1
En sociología se define
de relativa simplicidad –Simple no es lo como masa crítica de un
Un paso más. Pensemos ahora en el opuesto de Complejo- carentes de jerar- fenómeno el número de
nivel de integración psicosocial del de- quía y de control centralizado. Esta última individuos involucrados
a partir del cual dicho
sarrollo, en la noción de masa. Freud característica es de suma importancia.
fenómeno adquiere una
(1921), siguiendo a Darwin, escribe que dinámica propia que le
la masa es una «resurrección de la horda b).- Presentan la capacidad de procesar permite sostenerse y cre-
primitiva»; según Le Bon, «ávida de au- señales e información provenientes tan- cer por sí mismo.

toridad, tiene una inagotable sed de so- to del medio interno como del exterior. 2
Proceso en el que la
metimiento». La masa también supera al organización interna de
comportamiento de los elementos que c).- Son adaptativos. Lo que supone un sistema, por lo co-
mún abierto, aumenta
la integran. En este nivel Freud se en- que modifican su conducta para opti- de complejidad sin la in-
frenta y contrapone el «Yo» y la «Masa», mizar sus posibilidades de superviven- tervención de un agente
resulta un panorama contradictorio y cia. En la medida en que cambian, son externo. Normalmente,
los sistemas autoorgani-
fantasmagórico. dinámicos. La adaptación sucede a
zados exhiben propieda-
través del aprendizaje y/o de los pro- des emergentes.
Estas cuestiones, de disciplinas tan dife- cesos evolutivos.
Sin título, Jean-Michel 3
Con el término emergen-
Basquiat, 1982 rentes, constituyen temas fundamenta-
cia significamos aquellas
les en los Sistemas Complejos. Sistemas que se organizan desde la propiedades de un sis-
simplicidad, no centralizados y sujetos a tema que no caben ser
El vocablo Complejo -Complectere, pro- procesos adaptativos. Tal es la segunda reducidas a las que son
propias de los elemen-
cede de la raíz latina plectere, a su vez aproximación al concepto de Sistema tos que le constituyen.
del indo-iraní plek- que significa tejer. En Complejo.
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ÁTOPOS ÁTOPOS
La ausencia de control externo les confie- y en los sistemas matemáticos. Parece nomina caótico. Una propiedad que ca- Por su parte, las ecuaciones diferenciales
re la propiedad de ser Auto-organizados. preferible, aunque menos llamativa, la racteriza a un sistema dinámico en el cual no lineales poseen variables que interac-
noción «caos determinista» a la de sim- la mayoría de las órbitas muestran una túan de manera compleja y no sumatoria.
La sucesión de conceptos nucleares ple «caos». dependencia sensible es el llamado caos Son típicas de todos los sistemas vivos.
prosigue: «reglas simples producen total. El caos limitado es aquella propie-
comportamientos complejos por cami- La Royal Society definió en 1986 la fron- dad que caracteriza a un sistema dinámi- Un sistema no lineal puede contar con va-
nos de ardua predicción; el comporta- tera del caos como «aquel comporta- co en el que algunas órbitas especiales rios atractores, que a su vez sean de tipos
miento macroscópico de tales sistemas miento estocástico que acontece en un son no-periódicas, aunque la mayor par- diferentes. Todas las trayectorias que co-
se suele denominar emergente». (Mit- sistema determinista». Orden y desor- te son cuasiperiódicas o periódicas. mienzan en una determinada región del
chell, 2009, p.13). den en intrincada relación. Las fronteras espacio de fase conducen, más tarde o
del caos constituyen un tramo de sumo El caos designa también el comportamien- más temprano, al mismo atractor, esta re-
Esta misma autora proporciona otra defini- interés en los sistemas complejos, allí to impredecible de determinados sistemas. gión se denomina «cuenca de atracción»
ción de sistema complejo: «el que muestra se producen los cambios y los procesos de éste. Así el espacio de fase de un sis-
emergentes no triviales y comportamien- emergentes más cruciales. La imposibilidad de predecir, aunque tema no lineal queda dividido en diversas
tos auto-organizados». (Ibid. p. 13). el sistema esté regido por ecuaciones cuencas de atracción, que se clasifican
Cuando los ordenadores pudieron ma- deterministas, es el rasgo distintivo de según sus características topológicas. El
Teoría del caos nejar las enormes dificultades que en- todo sistema caótico. Pero, esto no sig- resultado es un cuadro dinámico de la
trañaba la resolución de las ecuaciones nifica que la Teoría del caos sea incapaz totalidad del sistema llamado «retrato
En estrecha relación con la Complejidad diferenciales de tipo no lineal, se hizo de realizar predicciones. De hecho se de fase». Los métodos matemáticos para
aparece en 1971 la Teoría del Caos, cuya accesible la descripción de la interacción hacen, aunque conciernen a rasgos cua- analizarlos se basan en el trabajo pionero
versión popular se ha simplificado en ex- de las múltiples variables que integran un litativos generales del comportamiento de Poincaré, actualizado por el topólogo
ceso produciendo errores de bulto. En sistema complejo. Las interacciones son del sistema y no a valores precisos de norteamericano Stephen Smale (1930- ) a 5
La noción topológica
síntesis es una rama de la matemática y uno de los fenómenos más frecuentes de sus variables en un instante determina- comienzos de los sesenta. La solución que de homotopía manifies-
de la física que se ocupa de los aspec- la naturaleza, pero la simple constatación do. De modo inesperado, encontramos aporta a la conjetura de Poincaré muestra ta que dos aplicaciones
continuas de un espacio
tos impredecibles de los sistemas diná- de su existencia no supone la capacidad nuevas posibilidades en este desarrollo que una variable diferenciable de dimen- topológico en otro se
micos. Sistemas estos que se dividen en de operar con ellas. Esta oportunidad se matemático con el análisis cualitativo. sión n cuyos grupos de homotopía5 son dicen homotópicas (del
estables, inestables y caóticos. presentó con el desarrollo de las ecua- Los sistemas dinámicos, esos que están los mismos que los de la n-esfera, -esfera griego homos = mismo
y topos = lugar) si una
ciones diferenciales no lineales. sujetos a cambio, tratan de cualidades y de n dimensiones- es homeomorfa6 con de ellas se puede defor-
J. Yorke, matemático de la Universidad de modelos, ese es el espacio del análi- la n-esfera, mientras n no sea superior a mar continuamente en la
de Maryland, puso ese nombre en 1975 a Una lista parcial de las disciplinas que sis cualitativo. cuatro. otra.
la evolución temporal de un sistema con han incorporado el estudio del Caos
4
Rama de las matemá- 6
Homeomorfismo (del
ticas puras que estudia dependencia sensitiva de las condicio- determinista incluye a: las Matemáticas El empleo de ecuaciones diferenciales Smale analizó sistemas descritos por un griego ὅή о ι о ç (ho-
las propiedades de los nes iniciales. –sobre todo a la Topología y a la Teoría ha permitido abordar desde la matemá- conjunto dado de ecuaciones no linea- moios) = misma y ҷ о ǫ φ ή
n ú m e r o s , en particular de los números4– , la Física –con la Mecá- tica el análisis del proceso de un siste- les, para estudiar cómo se comportan (morphȇ) = forma) es el
los enteros, pero más en isomorfismo entre dos
general, se interesa por El término Teoría del caos es engañoso, nica cuántica y la Mecánica de fluidos–, ma, su movimiento y su misma consti- éstos tras pequeñas modificaciones de espacios topológicos:
las propiedades de los puesto que no implica un azar absolu- la Biología –Ecología, Fisiología, Teoría tución. Antes del advenimiento de las las ecuaciones. Mientras los parámetros una aplicación continua
elementos de Dominios to. Reiteraremos esta observación a lo de la evolución– Medicina –Neurología, computadoras estas ecuaciones habían de éstas cambian ligeramente el retrato de uno en otro, cuyo
Enteros (Anillos conmuta- recíproco es continuo.
largo del artículo. Además no es sólo Neurofisiología, Neurociencias, Psiquia- de ser lineales, su expresión gráfica son de fase -es decir, la forma de los atrac-
tivos con elemento unita- En este caso, los dos
rio y cancelación) así como una teoría, ya que pueden reproducir- tría, Cardiología, Epidemiología–, la rectas, curvas regulares, sinusoides, etc. tores y sus respectivas cuencas- obser- espacios topológicos se
en diversos problemas se de manera experimental las oscila- Metereología y la Astronomía, la Econo- Pero los sistemas complejos no pueden van, por lo común, leves alteraciones sin dicen homeomorfos. Las
derivados de su análisis. ciones de los sistemas no lineales entre mía, la Psicología y el Psicoanálisis. ser descritos por esos procedimientos; cambios en sus características básicas. propiedades de estos es-
Este campo se ocupa de pacios que se conservan
los problemas que sur- extremos que no están cercanos a la en primer lugar, hubo que acudir a aña- Smale ha utilizado para estos casos el bajo homeomorfismos se
gen con el estudio de los periodicidad y a la proximidad al caos. Avancemos en el Caos. El movimiento dir constantes correctoras. término «estructuralmente estable». denominan propiedades
números enteros. Ambos se encuentran en la naturaleza alrededor de un atractor extraño se de- topológicas.

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Sin embargo, en muchos sistemas no La presencia de los sistemas caóticos per- Pero si empezamos con valores X0= 0.2 predecible, pero cuando R alcanza la
lineales, ligeros cambios de ciertos mite afirmar que «la linealidad es un sueño obtendremos mediante la citada ecua- cifra aproximada de 3.569946 abando-
parámetros producen dramáticas mo- reduccionista y la no-linealidad es a veces ción los valores siguiente: namos las oscilaciones periódicas para
dificaciones en las características fun- una pesadilla». (M. Mitchell 2009, p. 23). entrar en un espacio caótico. El atractor
damentales del retrato de fase. Los X0= 0.2 correspondiente se denomina extraño.
atractores desaparecen o cambian y En los años ochenta el físico Mitchell X1= 0.32
surgen otros nuevos. Estos sistemas Feigenbaum demostró que existían X2= 0.4352 La presencia del caos en un sistema
son «estructuralmente inestables» y los propiedades universales comunes a X3 = 0.4916019 hace que la predicción perfecta sea
puntos críticos de inestabilidad reciben una amplia categoría de sistemas caó- X4= 0.4998589 imposible.
el nombre de «puntos de bifurcación». ticos, sobre todo a través de mapa lo- X5 =0.5 Feigenbaum calculó una serie de valores de
Aparecen entonces súbitos cambios, gístico, una ecuación asombrosa, que X6=0.5 R para los que acontece una bifurcación:
que inauguran nuevas formas de orden. sirve para estudiar la tasa de crecimien-
I. Prigogine (1985, 1986) ha mostrado to de una superpoblación. El modelo Hemos alcanzado el resultado 0.5 tras R1≈ 3.0
que las citadas inestabilidades sólo su- combina las «tasas de nacimiento y cinco iteraciones. R2 ≈ 3.44949
ceden en sistemas que operan lejos del muerte» en un número que llamaremos R3 ≈ 3.54409
equilibrio. «R». El «tamaño de la población» se Mientras R sea igual a dos la cifra a la que R4 ≈ 3.564407
expresa mediante un concepto deno- se estabiliza la ecuación será siempre 0.5 ....
Dado que existen un número relativa- minado «fracción de la capacidad de –valor que se denomina punto fijo-. R8 ≈ 3.569934
mente pequeño de clases de atracto- carga» denominado «X». .........
res, es lógico que sólo contemos con Podemos seguir calculando la ecuación R ≈ 3.569934
un escaso número de tipos de bifurca- Al analizar los aspectos puramente ma- para distintos valores de R.
ción. Las bifurcaciones, como los atrac- temáticos de la ecuación, que surgió en Donde R1 corresponde al periodo 2 1= 2;
tores, pueden clasificarse topológica- 1971 de manos de Robert May, apare- Con valores de R=3.1 se observa que R2 al periodo 22= 4, etc.
mente. cen extrañas propiedades: la ecuación no alcanza nunca un punto
fijo, en su lugar oscila entre dos valo- A medida que el periodo aumenta,
El matemático francés R. Thom (1988) La ecuación es como sigue. res: 0.5580141 y 0.7645665. los valores de R se aproximan, lo que
fue uno de los primeros en ocuparse de significa que para cada bifurcación
esta cuestión. Utilizó el término «catás- Xt+1 = Rxt(1-Xt) Tanto al punto fijo como a la oscilación pe- el incremento de R disminuye. Fei-
trofe» en lugar de «bifurcación» e iden- riódica se les denomina atractores. Cual- genbaum midió la tasa a la cual las
tificó siete tipos fundamentales. Hoy se Donde Xt representa el valor actual de X y quier condición inicial llevará a ellos. bifurcaciones se hacen cada vez más
conocen muchas más. Xt+1 el que adquiere en el paso siguiente. próximas, la tasa hacia la que conver-
Seguimos adjudicando nuevos valores gen y que resultó ser, aproximada-
La Teoría del caos eliminó los restos Si variamos el valor de R nos encontra- a R y encontramos que en el intervalo mente, 4.6692016.
de esperanza de realizar una predic- mos con lo siguiente: [3.4-3.5] acontece una nueva sorpresa.
ción exacta en los sistemas comple- Utilizando otros mapas similares –de tipo
jos. Existen sistemas que llamaremos Comencemos por R=2, al mismo tiempo Así adjudicando a R =3.49 y X0 =0.2 el unimodal, es decir en forma de parábo-
caóticos, en los que pequeñas incerti- empezaremos otorgando un valor entre atractor periódico alcanza un valor de la– comprobó que la anterior cifra reapa-
dumbres en relación con la medida de 0 y 1 a X, sea, por ejemplo, Xo = 0.5. cuatro, en vez del anterior dos. recía; en el futuro recibió el nombre de
sus condiciones iniciales en posición constante de Feigenbaum, de importan-
o momento, desembocan en grandes Aplicando esos valores al mapa logístico En algún lugar entre R= 3.54 y R=3.55 el cia capital para entender el caos.
desviaciones acerca de las posibles veremos que X1=0.5, X2=0.5 y así sucesi- periodo se dobla de nuevo.
predicciones. Lo que se conoce como vamente. Todo es monótono. La gráfica Feigenbaum llegó a la constante con la
dependencia sensible a las condicio- resultante es una línea recta. En todos estos casos se considera que única ayuda de métodos matemáticos,
nes iniciales. el mapa logístico es sustancialmente sin el concurso de la física.
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ÁTOPOS ÁTOPOS
Hoy sabemos que los atractores exis- aspectos de nivel superior de carácter o menos detenimiento, de interrogar un inconfeso sentimiento de inferiori-
ten como una abstracción, en realidad más general, sujetos a la predicción. al psicoanálisis a la luz de los sistemas dad ante las ciencias fundamentales.
operan como una conexión de puntos complejos y, por mejor decir, de carac-
sucesivos, cada uno de los cuales re- Las oscilaciones dentro y fuera del desor- terizar al psicoanálisis mismo como un Freud, hijo de su tiempo, pertenecía
presenta las interacciones de todos los den son características de todos los siste- sistema complejo: Galatzer-Levy, R. M. al periodo de optimismo positivista. La
valores del sistema. Estas abstracciones mas complejos, sus variaciones, su natura- (1976), Wallerstein, (1986), Shashin, J. I., propia entraña psicoanalítica le abocó
pueden existir como términos puramen- leza y posiblemente sus funciones, están Callahan, J. (1990), Pragier, G., Faure- a encontrar dificultades en algunos tra-
te matemáticos, pero también muchos empezando a generar nuevas investiga- Pragier, S. (1990), Cruz Roche, R. (1990), mos de su propia andadura para mante-
de ellos describen modelos de hechos ciones en disciplinas de estirpe muy dife- Grotstein, J.S. (1990). Caparrós, N. (1991, ner tal posición.
reales que acontecen en la naturaleza. rente. 1994, 2008), Massicotte, W. J. (1995),
Quinodoz, 1997), Palombo, S. R. (1999) Poco a poco, el psicoanálisis ha ido re-
En rigor, Poincaré es el inventor del También conviene recordar que las mis- Eckardt, M.H. (2000), Levin, F.M. (2000). conociendo la importancia del contex-
atractor extraño que dará luz al proble- mas ecuaciones diferenciales de tipo no Galatzer-Levy, R. M. (2004, 2009). to, junto con los hechos intrapsíquicos:
ma de los tres cuerpos, o conjetura de lineal son aplicables a sistemas que, en cultura/medio, el cuidado materno, etc.,
Poincaré; encontró que obedecen a la su apariencia, son totalmente diferentes La mayoría de las aportaciones proce- en una suerte de consideraciones antro-
ley de la gravitación universal y que bajo y que de hecho constituyen el objeto de den de Estados Unidos, sin duda porque pológicas (Eckardt 2000).
ciertas condiciones para una trayectoria estudio de disciplinas muy alejadas en- los orígenes de la Complejidad radican
de las condiciones iniciales, una peque- tre sí. Todo sigue un curso inexorable. en los trabajos del Instituto Santa Fe. Quizá Freud no tuviese en cuenta en el
ña perturbación afecta grandemente el- manifiesto la capacidad creadora de la
curso de las mismas. Psicoanálisis y el paradigma de la com- Hasta ahora lo fundamental se interesa metáfora, pero sí lo hizo de manera in-
plejidad por una serie de conceptos o sobre la directa.
El Caos presenta una serie de concep- naturaleza misma del psicoanálisis, en
tos de gran interés para el campo de la Interludio.- Un cuento infantil cualquie- su eterna duda acerca de su estatuto de La orientación antropológica demanda
complejidad que nos ocupa: ra: el niño, encarnación indefensa del ciencia o de tecnología. la aproximación al paciente como si fue-
bien, yace aislado o abandonado ante ra un territorio desconocido que precisa
-Comportamientos azarosos similares el mal. Cuando el peligro aumenta, las En gran medida, en el transcurso del últi- ser explorado.
emergen de sistemas deterministas sin fuerzas del mal se despliegan en una lid mo siglo, el psicoanálisis ha pugnado en
el concurso de fuentes externas de alea- previsible. Tras dudas, ansiedades y ti- lograr su propia identidad liberándose T. Kuhn (1970) afirma que el cambio de pa-
toriedad. tubeos, el bien se impone. de la tutela de disciplinas hegemónicas radigma sucede cuando el tiempo es pro-
tales como la psiquiatría y la neurología. picio para ello, cuando surge el apropiado
-El comportamiento de algunos sistemas Cualquier analisis de pareja revela que el Este discurrir tiene su razón de ser histó- contexto del descubrimiento7. E. Kandel
deterministas simples es imposible de nudo malo/bueno no hace justicia a la rea- rica mientras el paradigma científico po- (1999) dirá más tarde que el psicoanálisis
predecir a largo plazo debido a su de- lidad: algo desafortunado, quizá nimio, sitivo, con sus exigencias de linealidad, puede adquirir un nuevo vigor apartir de
pendencia de las condiciones iniciales. sucedió en un principio sobre el terreno capacidad de predecir, determinismo y los recientes hallazgos de la biología. El 7
Conjunto de factores que
sensible del otro que recibe, deforma y experimentación, ha sido el dominante; dorado aislamiento que caracterizó sus influyen en la creación
de una teoría científica.
-Aunque no se puede adelantar el com- contrataca. Al siguiente enfrentamiento sin embargo, las cosas han ido modifi- orígenes no puede sostenerse ya. En el contexto del des-
portamiento detallado de los sistemas operan multitud de interrelaciones sólo cándose, sobre todo a partir de que las cubrimiento hay que in-
caóticos, existe un cierto orden en el entendibles mediante la no linealidad. ciencias llamadas duras, matemáticas y El filósofo Jonathan Lear (1998) declara cluir elementos no estric-
tamente racionales o no
caos, común a muchos sistemas caóti- No es posible comprender mediante la física, decretan el ocaso del mecanicis- que existe algo muerto, tanto en la filo- estrictamente científicos
cos como la duplicación periódica en el clásica sucesión causa/efecto. mo. Las Geisteswissenschaften –cien- sofia como en el psicoanálisis, en rela- -psicológicos, filosóficos,
camino hacia el caos y la constante de cias del espíritu en el sentir de Dithley–, ción con una falta de apertura mental. culturales, políticos, etc.-
Feigenbaum. La consecuencia es que, El contexto filosófico y los primeros han mostrado cierta inercia timorata al Lo achaca al proceso de profesionaliza- que pueden influir en el
éxito de una teoría ante
aunque en el nivel del detalle la predic- alientos psicoanalíticos.- Diversos psi- persistir en las ideas reduccionistas, la ción; por mi parte, lo adjudico a la hi- la comunidad científica.
ción se torna imposible, existen algunos coanalistas se han ocupado, con más predicción y el determinismo, quizá por perespecialización. Para Sócrates la vida
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ÁTOPOS ÁTOPOS
consistía en convivir de manera abierta fica de la representación. Las represen- una especie de metáfora tal y como lla- pias y las de los pacientes son elemen-
con las preguntas, sin ansiedad por en- taciones llevan a verificar su valoración, marlos átomos psicológicos o electrones tos fundamentales a tomar en conside-
contrar respuestas, añado yo. la negación de su significado y otras re- psíquicos», (Bion 1992, p. 15). ración en el trabajo psicoanalítico; en la
acciones emocionales, antes y después filosofía analítica se suele experimentar
Lear se opone a lo que denomina «deni- de su introyección. Además, se puede decir que dos son incomodidad cuando se comprueba
grar a Freud», lo entiende como la con- las formas del realismo en relación a los que muchos de sus pensadores se apo-
junción de una falta de consideración La filosofía moral se implica en el psi- criterios utilizados por el psicoanálisis: yan en la fenomenología para fundar su
hacia las contribuciones freudianas junto coanálisis, porque ésta requiere tratar el realismo psicológico, para el que es discurso.
con la ausencia de perspectiva histórica. con trazo fino a las personas. «Fuerza deseable que una persona perciba de
de carácter» y «Yo fuerte» son dos di- forma no excesivamente distorsionada El propio Husserl (1859-1938) dijo que
El desafío que se presenta es aceptar e ferentes denominaciones de lo mismo. por las fantasías. El núcleo de todo psi- ciertos aspectos del auto-conocimiento
integrar complejidad y mutidimensiona- Cuando el carácter se deforma, tanto el cótico alberga un temor-odio acerca de eran obtenibles a través del psicoanálisis,
lidad. Nuestra disciplina tiene que su- placer como el dolor pueden ser experi- la realidad. El segundo tipo se denomi- aunque más tarde muchos de sus segui-
perar el elitismo, el aislamiento, el dog- mentados de manera diferente. na realismo científico: deseamos que dores quisieron pensar que su trabajo era
matismo y la ritualización. Se precisan las teorías psicoanalíticas conciernan una alternativa a este. La fenomenología
cambios conceptuales. Aristóteles en Ética a Nicomaco afirma: a algo real y no a un ente imaginario, de Husserl es estrictamente coincidente
toda nuestra búsqueda [ética] debe ha- producto de la proyección de sucesos en el tiempo al psicoanálisis de Freud.
En el sentir de Eckardt (2000), es preciso cerse sobre éstas emociones; ya que internos. Su concepción del auto-conocimiento es
no confundir el conocimiento psicoa- sentir placer o dolor, de manera acerta- diferente a la de los griegos, que usual-
nalítico con los dogmas y ritos oficiales da o errónea ejerce un efecto no des- La controvertida y eterna verdad.- Tam- mente lo entendían como el conocimien-
acerca del mismo; las teorías no quedan preciable sobre nuestras acciones. bién aguarda el problema de la verdad. to de la propia situación en la sociedad;
definitivamente establecidas sino como Dos tipos de teorías se ciernen a ese para Husserl la pregunta básica consiste
medios de exploración de un territorio Prosiguen las consideraciones filosóficas: respecto: las que buscan la coherencia en averiguar qué oscuros fundamentos
ignoto; la necesidad de ser interdisci- el Realismo y el Psicoanálisis mantienen –de índole menos realista- y las que se explican por qué estoy aquí, ¿qué me
plinarios y permeables a las ciencias, la estrechas relaciones, el primero acecha fundan en la correspondencia. trajo a este lugar? «Las motivaciones es-
literatura y el arte. al segundo. Un aserto es realista si se re- tán a veces enterradas en lo profundo
fiere de forma correcta a un estado del Bien es cierto que los progresos en el pero pueden ser sacadas a la luz por el
El psicoanálisis es filosóficamente com- entorno, pero cabe ser realista y al mis- terreno psicoanalítico se efectúan sin psicoanálisis», (Husserl 1928). La tenden-
plejo, aunque se haya tardado en reco- mo tiempo irrealista en ciertos aspectos. tener que recurrir constantemente a cia de las distintas escuelas de pensa-
nocerlo así, (Massicotte, 1995). una Teoría General de la Verdad o del miento a ignorar lo que las demás hacen
Freud se consideraba realista y pensa- Realismo. o pronuncian permite que estas y otras
Pensemos en algunos casos: por ejem- ba que no serlo era incompatible con la afirmaciones queden relegadas al olvido
plo, si pretendemos hablar de introyec- ciencia. Las cosas han cambiado hoy, al- En lo que se refiere a la filosofía de la por los respectivos seguidores.
tos para caracterizar nuestro mundo gunos físicos no son realistas; también es ciencia, muchos psicoanalistas piensan
interno, debemos preguntarnos: ¿qué el caso de Bion con respecto al psicoa- que sólo la epistemología importa y nu- El psicoanálisis, pese a las protestas de
es un introyecto? y no sólo ¿qué se in- nálisis. Los elementos α y β son un buen merosos filósofos opinan que el psicoa- su fundador, está muy ligado a la filo-
troyecta? Los introyectos no se pueden ejemplo. En sus propias palabras: «para nálisis representa un problema menor sofía.
asimilar a simples recuerdos, sin imáge- este propósito he utilizado dos recursos para la filosofía de la ciencia. Dos pos-
nes mentalmente activas. Si, por otra carentes por entero de significado: los turas extremas. Dada la complejidad de los seres huma-
parte, sabemos que las imágenes que elementos-beta, que no pertenecen al nos, así como sus también complejas es-
interesan al psicoanálisis, son las repre- dominio del pensamiento y los elemen- Diversos filósofos, como es el caso de tructuras físicas no debería sorprender-
sentaciones de personas, de parte de tos-alfa, que están incluidos en aquel. H. Putnam y otros tantos psicoanalistas, nos que el psicoanálisis en tanto estudia
las mismas o de cosas, tendremos así No hay evidencia alguna de que los ci- utilizan conceptos que provienen de la al individuo se las haya de ver también
que habérnoslas con la vertiente filosó- tados elementos existan, sino es como fenomenología. Las experiencias pro- con problemas de índole filosófica.
68 69
ÁTOPOS ÁTOPOS
El psicoanálisis en el nuevo paradig- con una estructura no lineal». Es decir poco difundido y de gran calado, puso Cuando las bifurcaciones se suceden y
ma Caos determinista. estos principios al servicio del estudio el lapso temporal entre ellas disminuye,
de los afectos. nos acercamos a las fronteras del caos,
Como Vann Spruiell (1993) señala, no La comprensión del papel que desem- lugar del cambio y de la creación. Pa-
tenemos que preocuparnos tanto de peñan las fluctuaciones caóticas acaba En mi trabajo de 1991 señalé que las es- lombo (1999) se ha ocupado in extenso
averiguar si el psicoanálisis es o no una de comenzar. No obstante, las simili- tructuras disipativas deparan importan- de este aspecto. Basta con ello recordar
ciencia, sino de interrogarnos acerca de tudes que presentan los sistemas ce- tes y sorprendentes hallazgos de gran la noción de Grupo interno en intrincada
qué manera el psicoanálisis se relaciona rebrales y los sistemas psicológicos, utilidad para el psicoanálisis: relación con la fundación de una Nueva
con otros sistemas no lineales. que pueden ser entendidos desde los familia, el entrecruzamiento que resulta
límites que marcan la metáfora y el iso- «La conmutatividad, que es una propie- es un exponente acabado de un sistema
Utilizamos este tipo de procesos de morfismo, van más allá de la pura coinci- dad conocida en los sistemas reversi- no lineal.
manera constante al ocuparnos de las dencia. Ni la mera analogía –las nuevas bles, no tiene aplicación en la psicología
asociaciones, afectos, imágenes, tanto metáforas- ni la trasposición mecánica dinámica y ello se debe a que necesita- «Otro problema surge con el fenóme-
en nosotros mismos como en nuestros safisfacen estos puntos comunes. Hay mos en este terreno incluir la flecha del no de la Repetición. Se intuye sin mucho
pacientes. que acudir, una vez más, al concepto de tiempo. esfuerzo, que lo repetitivo posee una
emergente que, con toda su potencia, complejidad mayor de lo que pudiera
El psicoanálisis tiene argumentos que da cuenta cabal de las líneas de investi- La contraposición entre regularidades parecer a primera vista.
aportar en la Teoría de la complejidad. gación que nos aguardan. y singularidades, moneda común en el
Por ejemplo, en lo que concierne a las ámbito de lo humano y fuente de tantas Los sistemas biológicos permanecen
oscilaciones dentro y fuera del caos. Pe- No solamente vale decir que principios controversias estériles, es la representa- estables porque frustran a la mayoría
queñas perturbaciones iniciales en es- matemáticos similares gobiernan todos ción del modo de operar entre el caos y de los efectos pequeños, excepto en
tos sistemas tienen mucho que ver con los sistemas, sino que las mismas ecua- el orden. Las estructuras disipativas son aquellas zonas de conducta en donde
importantes divergencias finales. El co- ciones encuentran aplicación en siste- abiertas y esta condición impide la esta- se requiere un alto grado de flexibilidad
razón adopta un ritmo regular, muy le- mas totalmente diferentes. bilidad reversible de los planteamientos y creatividad (Briggs y Peat 1990).
jos de las fronteras del caos, cuando la clásicos.
muerte se aproxima, (Lombardi, F, 2000). Galatzer-Levy (1978, 1986, 1998, 2009), Desde otros puntos de vista, Freud
«Un tacograma de 24 horas muestra cla- un psicoanaconalista pionero en los El establecimiento de relaciones no li- (1892, 1893, 1895, 1920) y Cannon
ramente que el periodo cardíaco fluctúa menesteres de la complejidad, ha neales –cuyas características ya hemos (1932) han enunciado conceptos tales
no solamente en respuesta a los facto- puesto en claro las contribuciones de explicado– produce la realimentación y como Principio de constancia, Princi-
res ambientales, tales como la postura la computación al psicoanálisis. La ob- la iteración entre sus elementos, lo que pio de inercia neurónica, Principio de
o la actividad física, sino también en si- servación de cómo los cambios cuanti- tiene inmediata aplicación en procesos Nirvana, Compulsión a la repetición, y
tuaciones estacionarias. Esa ritmicidad, tativos devienen en cualitativos. V. gr. tan importantes como la comunicación Homeostasis, que abordan de una ma-
que representa múltiples interacciones la responsabilidad en su exceso muda y nuestra conocida transferencia/contra- nera u otra el proceso equilibrio/des-
con otros ritmos fisiológicos, como la en hipercontrol anancástico. Esas muta- transferencia, no sólo como reviviscen- equilibrio.
respiración, puede afectarse mediante ciones son observables en topología. La cia de hechos anteriores, sino también
pequeñas perturbaciones: contraccio- mente trabaja en ocasiones por medio como sucesos inéditos potencialmente Quiero llamar la atención sobre el he-
nes ventriculares prematuras, bloqueo de la lógica difusa, más allá de la lógica correctores de historias ya vividas. cho de que Freud albergó la curiosa in-
aurículo-ventricular... esas alteraciones formal. También la elaboración psíquica tuición de que la energía circula por las
no se explican por entero dentro de la –working through– en estrecha relación La novela familiar en un sentido más bifurcaciones sucesivas de las neuronas
linealidad. Los sistemas no lineales pa- con la inteligencia artificial. La teoría de amplio a como lo vio en su tiempo Man- en función de la resistencia, barrera de
recen satisfacer de forma más apropiada las catástrofes sirve para estudiar las rique Solana (1987) representa un siste- contacto o de la facilitación. Son las con-
estos complejos fenómenos. El compor- discontinuidades que se presentan en ma complejo que lleva en su entraña la diciones iniciales de las vías neuronales
tamiento aparentemente errático puede la naturaleza. La progresión deja espa- condición de abierta y la consecuencia las que deciden las sendas concretas en
ser gestado por un sistema determinista cio al salto. Sashin (1985) en un trabajo de la bifurcación». (Caparrós 1991). las bifurcaciones», Caparrós (1991).
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ÁTOPOS ÁTOPOS
La repetición, compulsión a la repeti- «La sensibilidad a las condiciones ini- cioculturales del medio. El estrés es un apuntado nosotros en reiteradas ocasio-
ción: una ventana a la complejidad ciales es un rasgo característico de la padecimiento sin sujeto: la vida, en for- nes, «... el caos se ha convertido en una
impredicibilidad de comportamiento ma de fatum, se ensaña sobre un cuer- metáfora y a menudo en una metáfora
El problema de la compulsión a la re- humano y del funcionamiento psíquico» po que inexorablemente sufre las con- equivocada... se utiliza como excusa ante
petición se encuentra inextricablemen- (Quinodoz 1997). secuencias. El síndrome de adaptación la ausencia del orden y el control, en lugar
te unido a la pulsión de muerte. Surge de Selye (1936) describió hace tiempo de ser una técnica para establecer la exis-
también en los ceremoniales obsesivos Incluso en las circunstancias en que se las vicisitudes hormonales de la biología. tencia de un orden escondido o un méto-
y en la esencia misma del síntoma, en pueden detectar componentes repetiti- Existen equivalentes más actuales como do para controlar un sistema que, en un
el retorno de lo reprimido y en la reac- vos que permiten predicciones a corto el síndrome metabólico (Haller 1977, principio, se nos antoja incontrolable».
tualización de las relaciones objetales plazo, éstas se hacen imposibles a me- OMS 1998) que apunta a situaciones pa-
(transferencia) y desde luego en el con- dida que el tiempo avanza. «Sólo será recidas. En estricto paralelo se describen Cabe pensar que en la vida psíquica, don-
siguiente proceso de la cura. Todos posible reconstruir la sucesión de los las condiciones modernas de vida que de se desempeñan tal cantidad de varia-
ellos son segmentos psicoanalíticos en hechos cuando las decisiones ya se han propician estos síndromes. Falta señalar bles, deben existir estructuras psíquicas
los que la repetición está presente de tomado o ha tenido lugar la acción... esta cómo emerge en el orden de lo psíqui- comparables a los atractores extraños.
un modo un otro. propiedad de ser sensible a las condicio- co, es decir en el individuo, el estrés en
nes iniciales, que permite la divergencia, cuanto dimensión del sujeto. Esta encru- En algún espacio abstracto, equiva-
La dialéctica principio del placer-prin- subyace al efecto sorpresa de lo nuevo», cijada es un ejemplo acabado del com- lente al espacio de fases, deben existir
cipio de realidad es irresoluble dentro (Pragier & Faure-Pragier, 1990). portamiento de los sistemas complejos. estructuras psíquicas equivalentes que
de los espacios de la individualidad, integren datos antagónicos –tanto di-
pertenece a la especie, al indiferente La vida psíquica parece poseer una me- El caos determinista encuentra aplica- vergentes como reductivos– cuya varia-
decurso de la materia orgánica, y aún nor tendencia a la divergencia que ha- ción en los sistemas que regulan el afec- ción sea a un tiempo, de índole impre-
de la orgánica, cara a ella la existen- cia la atracción, debido a su propiedad to, la atención, el ánimo, la acción, etc. decible y al mismo tiempo relativamente
cia no es más que un espejismo, una disipativa que se expresa en la propen- Todas estas reflexiones a propósito del predecible.
ilusión de dominio, un fantasma de la sión de las trayectorias a converger en psicoanálisis llevan a nuevas considera-
omnipotencia. el atractor. La atracción se manifiesta en ciones a propósito del caos. Las estructuras que denominamos fanta-
el psiquismo mediante la repetición. El sías tienen una organización funcional se-
La vida psíquica comprende un nú- referido Quinodoz señala que cuando El caos innato precede al orden, pero la mejante a la de los atractores extraños.
mero muy elevado de variables inde- la repetición tiende a la destrucción de predicción del orden se mantienen me-
pendientes, que implican un número la vida psíquica se convierte en compul- diante la simplicidad, a veces a costa de Por otra parte, la interpretación muy bien
igualmente grande de grados de li- sión a la repetición, fenómeno que se una rigidez maladaptativa, como vimos puede significar la expresión por parte
bertad, las citadas variables se com- opone a la divergencia. a propósito de la repetición. del analista, acudiendo a un menor nú-
ponen de información, que se renueva mero de variables que las que la reali-
de manera constante, proveniente del El Estrés: un sistema complejo de nues- La predictibilidad es una rareza tanto en dad presenta y que están seleccionadas
exterior y del mundo interno (Quino- tro tiempo ciencia como en las interacciones huma- por un modelo –una versión simplificada
doz 1997). La vida psíquica exhibe a un nas. de aquella– del sentido de la conflictiva
tiempo cierta permanencia junto con El proceso que conocemos como estrés o del déficit del paciente para hacerlas
una transformación incesante. Aunque no pertenece a un nivel de integración Los atractores se expresan también en accesibles a éste. En este sentido, el psi-
parte de la vida psíquica lleva en sí un concreto, sino que es producto de la in- psicoanálisis a través de la transferencia. coanalista trata de identificar el hecho
grado de repetición, que asegura su tegración de la biología, la psique y el elegido, llamado así por el matemático
continuidad y la hace predecible hasta orden de lo social. Me limitaré a señalar Los espacios del caos y de la teoría de H. Poincaré y aplicado a nuestro espacio
cierto punto, está sujeta ante todo a aquí los trazos gruesos del problema. las relaciones de objeto plantean dudas por W. Bion. Esta perspectiva permite se-
la sensibilidad a las condiciones inicia- En su formulación más clásica el estrés acerca de las limitaciones de los mode- leccionar las fantasías inconscientes más
les, propiedad genérica de los siste- resulta de la yuxtaposición entre el su- los científicos precedentes. Sin embargo, significativas, las estructuras subyacentes
mas dinámicos. frimiento biológico y las condiciones so- como Sandor (1998) señala y como hemos que se encargan de organizar la realidad
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ÁTOPOS ÁTOPOS
miento emerge de la interrelación de cífico acerca de las interacciones con el La contratransferencia es también un
los elementos, cada uno de estos puede medio, organizan y regulan las auto-ex- atractor periódico que se expresa en con-
ser a su vez un sistema complejo adap- periencias y el afecto, atribuyen un sig- textos similares a la relación terapéutica.
tativo de nivel más bajo. nificado a la experiencia organizada, son
capaces tambien de efectuar inferencias Para mantener su específica organización,
El sistema de representaciones menta- sobre adaptaciones pasadas y futuras. un sistema adaptativo complejo se esfuer-
les que configura la actividad mental de za en maximizar su adaptación al medio
un paciente es un subsistema que per- En un nivel básico la manera en que se or- (Kauffman, 1995); dado que los sistemas
tenece a otro de orden superior forma- ganiza un auto-esquema refleja la influen- encarnados por el paciente y el analista
do por la interaccion analista/paciente. cia de los otros implicados en crear la ex- son adaptativos, han de adaptarse entre
El estado óptimo de un sistema se pue- periencia que abarca el citado esquema. sí para alcanzar sus estados de funciona-
de considerar como una organización miento óptimo. La relación diádica analis-
adaptativa que quede lejos de un es- Los modelos de organización que se ta/paciente es, en resumidas cuentas, un
tado rígido que le permita organizar forman en un sistema en desarrollo se sistema complejo adaptativo.
aspectos de su organización interna y utilizan como futuros modelos para el
de los paralelos cambios del contexto desarrollo del mismo. Este proceso se Como consecuencia diremos que los
(Kauffman 1995). conoce bajo el nombre de auto-simila- sistemas que imponen reglas rígidas a
Jean-Michel Basquiat, Masque
ridad o recursividad. Cuando la adapta- las interacciones de sus elementos son
psíquica del paciente y trasmitirlas me- Desde esta perspectiva se borran las di- ción modifica ciertos aspectos de los ci- menos adaptativos y en esa carencia se
diante las interpretaciones. ferencias entre la psicología unipersonal tados modelos estas modificaciones se alberga la esencia de su patología.
y la bipersonal (Miller 1999), la actividad llevan adelante de forma recursiva. Así
Los sistemas complejos adaptativos y mental de un paciente no puede ser en- se mantiene la cohesión y la estabilidad Psicoanálisis y matemáticas
el psicoanálisis tendida fuera del contexto al que este en un medio sujeto a cambios.
se está adaptando; por ejemplo, la inte- Las matemáticas de la complejidad, de
Un sistema complejo adaptativo con- racción con el analista. Desde una perspectiva dinámica, la reciente desarrollo, llegarán a ser una
siste en un estado ordenado de ele- transferencia es un atractor periódico potente herramienta para la evolución
mentos que componen un medio. Así Este mismo autor añade: «Conceptúo a que organiza la interacción con el medio del psicoanálisis una vez vencidas las
la experiencia del amamantamiento se los seres humanos como sistemas com- de una forma concreta. En el marco del iniciales suspicacias hijas ante todo del
convierte en algo organizado a través plejos adaptativos que se auto-organi- psicoanálisis la transferencia se define desconocimiento. El libro del matemáti-
de la interacción madre-bebé. Un sis- zan en interacción con el entorno físi- como la forma en la que el paciente in- co John Allen Paulos, El hombre anumé-
tema de este tipo requiere un continuo co y social. Los esquemas mentales se terpreta y organiza su interacción con el rico (1988) es de imprescindible lectura
aporte de energía o información para suponen ser los elementos básicos del analista. Esta formulación es compatible para todos aquellos que deseen disolver
el mantenimiento de las conexiones sistema complejo adaptativo humano, con puntos de vista contemporáneos las fobias generadas en el ambiente hos-
cuyas interacciones forman el sistema representaciones psíquicas o redes sobre el problema, que consideran a la til que rodea a los no iniciados en esta
(Kauffman 1995). Si el medio cambia y neurales activadas (Schore 1994)». transferencia como principios organi- ciencia. Los pioneros psicoanalistas en
el sistema se adapta ello significa evo- zadores inconscientes –Dorpat y Miller este campo, sin pretender ser exhausti-
lución. El sistema es adaptativo tam- El Self y el otro forman un sistema di- (1992) – y los enfoques clásicos que la vos, son W. Bion, R. Galatzer- Levy, Jerry
bién porque influye en su medio. Evo- námico entre ambos organizado por un tratan como la proyección de deseos y Sashin y desde luego I. Matte Blanco,
lucionan hacia un orden y complejidad intercambio de información recíproco temores intrapsíquicos o esa otra, pro- también yo mismo en el año 1988.
crecientes, no en pos de un pretendido sobre su experiencia individual de un pia de la teoría de las relaciones de ob-
estado óptimo. suceso fragmentario. jeto –Kernberg (1975), Sandler (1990) –, Shashin manifestó en 1990: «los modelos
que la definen como las diversas formas derivados de la Teoría de las catástrofes
Un sistema complejo adaptativo contie- Los esquemas son modelos para pro- de cumplimiento de necesidades y de forman un puente entre la psicología y
ne muchos tipos de elementos, no está cesar información en un contexto espe- relaciones del self con el objeto. la correspondiente neurología. Cuando
controlado centralmente, el comporta-
74 75
ÁTOPOS ÁTOPOS
se estudia la dinámica de los sistemas sistema caótico al que llamamos self, po- Secundario, Afecto/Cognición, binomios FREUD, S. (1921). Psicología de las masas y análi-
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comportamientos explicables a través Galatzer-Levy (1997) sostiene que la paradigma puede reestablecer puentes a historical perspective. Annu. Psychoanal, 4: 41-
64.
de modelos extraídos de la Teoría de las mente es un sistema complejo en las con otras ciencias hace tiempo perdidos
catástrofes. Lo que esto sugiere, dado fronteras del caos. Es decir, que experi- y encaminar a una visión más acabada de GALATZER-LEVY, R. M. (1976). Psychoanalysis and
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