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La familia. Introducción
Convergencia y
divergencia de los A l hablar sobre la familia siempre
estamos haciendo una abstracción
modelos familiares ya que más que la familia o las
familias, existen los hogares familiares en los
españoles en el que podemos identificar individuos que tienen
relaciones familiares. Los hogares reflejan las
entorno europeo diferentes formas de convivencia en las que los
individuos se organizan buscando maximizar su
bienestar, o diciéndolo a la manera popular,
buscando su felicidad. La familia es una idea
abstracta que construimos a partir de las rela-
ciones básicas de consanguinidad y de afinidad
que vinculan a unos y otros individuos y que
constituye la base fundamental del orden social.
Las familias estructuran la vida social y dan al
individuo el sentido básico de pertenencia, de
Inés Alberdi incorporación al grupo y a la sociedad. Y en
todas las sociedades existen formas de regula-
ción de estas relaciones familiares.
Lo más interesante de la situación familiar en
las sociedades europeas es el proceso de cambio
tan importante que se ha producido en los últi-
mos años. Tanto desde la perspectiva de las
decisiones individuales como desde los poderes
públicos hemos asistido a un cambio enorme en
los comportamientos y en las responsabilidades
respecto de las familias. El aumento de las
libertades individuales y la conciencia de las
responsabilidades colectivas y públicas respec-
to de la vida cotidiana de los ciudadanos son las
dos ideas impulsoras de los cambios acaecidos.
En el marco de estos cambios vamos a ver la
evolución de los modelos familiares europeos y
las peculiaridades del modelo español, que
comienza su evolución más tarde en dos terre-
nos, en el de la ampliación de las libertades
individuales y en el del desarrollo de un sistema
público de bienestar.
Para comparar los modelos familiares en el
entorno europeo se han de examinar las rela-
ciones de convivencia, en cuanto al tamaño y
la estructura de los hogares en que se organi-
zan. La evolución de los datos demográficos y
de las formas de hogar en unos y otros países
europeos, que han experimentado cambios
importantes en los últimos años, reflejan las
diferencias y las similitudes de su evolución.
Se diversifican las formas de convivencia y se
reduce el tamaño de los hogares familiares,
nacen menos niños y menos hijos conviven

Inés Alberdi, Opto. de Sociología 1, Universidad Complutense Madrid.


Política y Sociedad, 26 (1997), Madrid (PP. 73-94)
hasta la mayoría de edad con ambos progeni- aparece como cuestión de debate público el
tores. La separación y el divorcio, la posibili- declive de la familia (Lamo 1995). Buena
dad de nuevo matrimonio y la vida indepen- parte de este debate se alimenta con la nostal-
diente de los ancianos hasta más avanzada gia de los mayores respecto de sus años jóve-
edad, producen un aumento enorme de los nes y de la añoranza respecto de un pasado
hogares unipersonales y de los hogares en que idealizado que nunca existió.
sólo vive una pareja, llevando consecuente- Las ideas tradicionales juegan su papel al
mente todo ello a una reducción importante del vincular el pasado a una serie de valores clási-
tamaño de los hogares en general. cos que nadie niega como la lealtad, el amor,
Por otra parte veremos las decisiones políti- la compasión, la generosidad, etc. Muchas
cas y económicas que afectan a las unidades veces esos valores que se invocan ocultaron
familiares y a través de ellas trataremos de ideas poco éticas y poco generosas: la inferio-
comparar las políticas familiares en unas y ridad de las mujeres respecto de los hombres,
otras sociedades del entorno europeo. Al hablar la doble moral sexual, la diferencia de clases
de políticas de familia tenemos que tener en sociales, la explotación del servicio doméstico,
cuenta que hay políticas explicitas y políticas la violencia familiar no reconocida ni denun-
implícitas, según se presenten y se argumenten ciada, etc. que se olvidan con el recuerdo nos-
públicamente o no las medidas a tomar y las tálgico de lafamilia de antes, de modo que el
razones de cada una de ellas. Y veremos tam- retrato, al estar sesgado, aparece mucho más
bién cuáles son los rasgos principales de las favorable de lo que fue la realidad.
políticas, es decir las orientaciones ideológicas Es discutible aceptar esa pérdida de lazos
y filosóficas fundamentales que las inspiran. familiares, aunque es evidente la liberalización
Otro aspecto interesante de conocer son los de costumbres que se denuncia. Lo cierto es
debates que existen en cada país, cuales son que, como tendencia general, tanto en las nor-
los temas relacionados con la familia que mas y leyes como en la realidad de oportuni-
importan a la opinión publica y cómo son tra- dades de unos y otros a la vez que se ha ido
tados por los medios de comunicación. En relajando la familia como institución, se han
cada uno de los países europeos estos aspectos ido eliminando discriminaciones que en ella se
cobran sus propios rasgos y habrá que tenerlos producían, sobre todo con las mujeres, los
en cuenta. El debate sobre política familiar niños y los jóvenes. Las sociedades europeas
entendido en su sentido más amplio, es mucho están cada vez más dispuestas a fomentar la
más importante en unos paises que en otros. igualdad de oportunidades al margen del on-
Por ejemplo, los tres países recientemente gen social de cada uno. Pero la familia sigue
incorporados a la Unión Europea, Austria, siendo una institución central en las socieda-
Suecia y Finlandia, destacan por la importan- des actuales. En España los más recientes estu-
cia que han dado a todas las cuestiones rela- dios sociológicos reflejan la importancia tan
cionadas con la familia desde mediados de grande que los ciudadanos dan a la familia y el
siglo y también por la relación que ello ha teni- nivel de satisfacción tan elevada que tienen
do con la transformación de la posición social con ella (CIS 1996).
de las mujeres en dichas sociedades y con el
desarrollo de un amplio Estado del Bienestar.
Comparaciones
Actualidad o decadencia internacionales
de la familia
H ay una serie de aspectos a tener en
cuenta para conocer y evaluar las

L a discusión sobre la supervivencia o


la desaparición de la familia es una
constante. Las nuevas formas de
políticas familiares, como son la
situación demográfica y los cambios acaeci-
dos en la estructura de la familia. Hay que
comportamiento de los jóvenes y los cambios tener en cuenta también el contexto histórico y
legales avivan la polémica y periódicamente las tradiciones culturales del país. La evolu-

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ción social y el desarrollo económico al que ha desarrollado sistemas sociales de seguridad y


llegado, los objetivos que se persiguen con redistribución de oportunidades, así como una
cada política, los instrumentos que se usan red de servicios sociales que atienden la mayor
para ella, así como el debate público y los parte de las eventualidades e infortunios perso-
actores que lo desarrollan. nales. Aunque entre unos y otros países euro-
Si comparamos algunas sociedades a nivel peos hay grandes diferencias, si los vemos en
internacional podemos ver las diferentes res- contraste con las tradiciones y relaciones fami-
ponsabilidades que le toca cumplir a la institu- liares en el sudeste asiático aparecen de forma
ción de la familia según los modelos sociales y más nítida las similitudes.
políticos. Encontramos ejemplos que van Las políticas familiares europeas, que sur-
desde una posición extrema de familia clan, gen con el objeto de proteger al trabajador y a
cuya tradición de ayuda mutua es potente y los miembros de su familia, evolucionan hasta
donde la ausencia de servicios sociales le obli- configurar las redes amplias de seguridad y de
ga a ocuparse totalmente de los mayores, hasta protección individual que, junto a la universa-
los casos más acabados de Sistema Social de lización de programas de educación y de
Bienestar, en que el Estado se ocupa de casi salud, configuran lo que llamamos Estados de
todas las necesidades del individuo y las uni- Bienestar.
dades familiares son responsables en mucha
menor medida del bienestar de sus miembros
dependientes. Un ejemplo extremo del modelo El cambio en las relaciones
primero serian Corea, Taiwan y otros países
del sudeste asiático, con una tradición familiar familiares
muy fuerte en la que la pertenencia de grupo y
el apoyo que de la familia se obtiene es vital
para el desarrollo individual con la contrapres-
tación de las obligaciones de tipo personal y
económico con respecto de los parientes, sobre
p ara entender los diferentes modelos
familiares europeos hay que tener
en cuenta los cambios tan impor-
todo de los mayores, obligaciones a las que, a tantes que se han producido en la institución
lo largo de la vida, el individuo va a tener que familiar en los países europeos en los últimos
hacer frente (Alonso Zaldivar 1996). 40 años. Los cambios sociales que afectan a
Desde una óptica occidental europea nos las relaciones interpersonales dentro de la ins-
asombra de estos paises la ausencia de seguri- titución familiar han sido muy fuertes y las
dad social pública y la reducida intervención nuevas relaciones han configurado formas
del Estado en cuestiones de bienestar. Muy diferentes de organización de la convivencia.
frecuentemente oímos hablar de que no hay Las relaciones entre los cónyuges se han trans-
pensiones ni ayudas públicas en los países del formado a partir del nuevo status social de las
sudeste asiático. Esta seria la cara negativa del mujeres. La igualdad legal entre hombres y
modelo. Pero hay un aspecto favorable a con- mujeres se ha extendido por toda Europa y ello
siderar, como es el aprendizaje de la responsa- ha influido enormemente en las relaciones
bilidad y la fuerza de los lazos personales que matrimoniales y en toda la organización fami-
se fomentan cuando uno se sabe receptor de liar. El desarrollo de la psicología y sus descu-
una ayuda familiar que tendrá que devolver en brimientos acerca de la infancia, de la perso-
el futuro. El respeto a los mayores, las virtudes nalidad y de la importancia de las relaciones
del ahorro y la previsión, la fuerza de las insti- más tempranas, han generado un interés enor-
tuciones familiares, la solidaridad personal me por las relaciones afectivas entre padres e
entre los hermanos y entre las generaciones hijos y ello se ha traducido en más atención a
son valores en retroceso en las sociedades la infancia y en una mayor implicación de los
occidentales, en las que los subsidios de hombres en su entorno familiar y doméstico.
desempleo y las pensiones de jubilación excu- La incorporación de las mujeres al trabajo
san la ayuda a los familiares en momentos de también influye en el sentido de aumentar la
infortunio (The Economist 1994). implicación personal de los varones en las
Las sociedades europeas se sitúan en el actividades y ocupaciones domésticas. La par-
extremo opuesto, aquel en que el Estado ha ticipación de la mujer en el trabajo asalariado

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cambia el uso de los tiempos cotidianos y lleva acordes con la legislación. Y no podemos con-
a una reorganización de la vida doméstica. Los siderar estas conductas desviadas pues las
ingresos familiares se acrecientan con ello, la legislaciones y la sociedad, en su conjunto,
autonomía de las mujeres permite en mayor tienen voluntad de integrarlas. Vemos como se
medida la ruptura matrimonial y todo ello multiplican por toda Europa las reformas
tiene un impacto enorme en el significado del legislativas tendentes a reconocer legalmente
matrimonio y de la familia. todo tipo de uniones y a incorporarlas al cauce
Todos estos cambios en la organización normativo y generador de derechos.
familiar han llevado a que la reconciliación Aun cuando se ha reducido la importancia
entre familia y trabajo constituya la clave de de la familia nuclear, ésta es todavía la estruc-
las políticas familiares en la actualidad. «The tura predominante en los hogares europeos.
reconciliación of family and work constitutes a (Eurostat 1997). Un 67,9% del total de los
key issue in family policy architecture» hogares tiene estructura nuclear; un 23,4% son
(Dumon 1994, pág. 308). hogares de una pareja, un 37,1% de una pareja
con hijos y un 7,4% son hogares monoparenta-
les, es decir de un hombre (1,3%) o una mujer
Estructuras familiares de (6,1%) con sus hijos. Sin embargo hay que
señalar la pluralidad de relaciones familiares
convivencia que se producen en el interior de esos hogares,
aun cuando tengan una estructura similar. La

L a formación de la familia ha cambia-


o en cuanto a las fases sucesivas
que la configuran. La fórmula tradi-
definición de las relaciones internas es lo más
sustantivo para definir la familia, más que el
tamaño y la forma que, desde fuera, pueden ser
idénticas para dos realidades familiares muy
cional de sucesión de acontecimientos noviaz-
— desiguales (Flaquer 1991).
go, matrimonio, vida en común, llegada de los Entre estas familias nucleares, la cohabita-
hijos— se ha invertido en buena medida, ocu- ción sin matrimonio y los hogares monoparen-
rriendo frecuentemente que el matrimonio se tales son las formas de hogar que más impor-
pospone a la convivencia o incluso se presctn- tancia adquieren en estos años, por la
de de él (Delgado 1993). Lo más innovador de innovación que suponen en cuanto a formas de
estas tendencias es la aparición de comporta- convivencia y por su enorme crecimiento. La
mientos diferentes y opciones variadas de con- cohabitación se asimila al matrimonio en la
vivencia que coexisten en el tiempo y de los mayoría de las estadísticas europeas. En Espa-
que hacen uso los mismos individuos en dife- ña no se conoce bien en términos cuantitati-
rentes momentos de su biografía. Es decir, uno vos, en 1991 se estimaban en un 1,27% de la
de los cambios más importantes en cuanto al población los que vivían en uniones consen-
ciclo de vida familia es la diversidad y multi- suales (Delgado 1993). Una de los fenómenos
plicidad de situaciones de convivencia que más importantes que van asociados a la coha-
encontramos, que no están ya ligadas a la edad bitación es el de los nacimientos fuera del
de los individuos y que tampoco ofrecen esta- matrimonio, que tienen una importancia cre-
bilidad a lo largo de la biografía de los mismos. ciente en todo Europa. En 1994 fueron el
Se está produciendo una cierta desinstitu- 51,6% de los nacimientos en Suecia, el 46,9%
cionalización de la familia, porque una parte en Dinamarca, el 34,9 en Francia y 32% en
importante de la población se resiste a encua- Inglaterra. En Italia y España los nacimientos
drar sus relaciones de convivencia en los mar- fuera del matrimonio han aumentado en los
cos legales habituales. En estos casos la confi- últimos años pero las cifras no tienen compa-
guración de los hogares se produce en buena ración con las de Europa del norte; en 1992
medida al margen de la ley, pero lo novedoso supusieron un 10,8% de los nacimientos en
de esta situación es que esto no se produce de España y un 7,4% en Italia.
forma soterrada y entre las capas marginales Por otra parte, los nuevos estilos de vida
de la sociedad, sino que lo vemos en todos los hacen aumentar el numero de personas que
niveles sociales y con categoría de conducta viven solas: los separados y divorciados sin
regular, entremezclada con comportamientos hijos, los adultos que deciden no contraer
La familia. Convergenc¡a y divergencia de los modelos... 77

matrimonio y los ancianos que se mantienen La esperanza de vida al nacer ha aumentado


independientes hasta avanzada edad después enormemente para todos los europeos llegando
de la muerte del cónyuge son opciones de vida a ser de 73,3 como media para los varones y de
que han aumentado enormemente en los últi- 80,5 para las mujeres en 1994. (España se sitúa
mos años. Los hogares unipersonales son los en posiciones europeas medias con 73,8 para
que más han crecido en estos años llegando a los hombres y 81,1 para las mujeres en 1992).
suponer en 1991 el 26.7% de los hogares euro- Paralelamente a ello, se produce un cambio de
peos. La tendencia al aumento de hogares uni- calendario con el retraso del matrimonio y el
personales es general pero las diferencias entre retraso del nacimiento de los hijos en todos los
unos y otros paises son grandes, siendo Suecia paises europeos (Eurostat 1997). Los jóvenes
(39,6), Alemania (33,6) y Dinamarca (34,4) se casan a más edad y tienen los hijos más
los países en los que es más frecuente esta tarde, comportamiento coherente con una vida
forma de vida. Los países del sur de Europa, más extensa en la que se prolonga sobre todo
Grecia (16,2), Portugal (13,8), Italia (20,6) y el período inicial de aprendizaje. La extensión
España (¡3,4) son, junto con Irlanda (20,2), los de la educación obligatoria hasta los 16 años
que tienen un menor porcentaje de hogares de es casi general en Europa y, por otra parte, los
personas que viven solas. estudios de carácter profesional y universitario
Las parejas del mismo sexo, que conviven se han extendido extraordinariamente. Ello
de forma estable con un compromiso afectivo, conlíeva que los jóvenes, tanto hombres como
son una forma nueva de convivencia que aspi- mujeres, retrasen el momento de incorpora-
ra al reconocimiento y reivindica un trato legal ción a la vida activa, así como su salida del
similar al que se da a los matrimonios. Por el hogar familiar de origen.
momento apenas hay datos estadísticos de En las últimas décadas ha descendido la
estas unidades de convivencia y sólo en algu- nupcialidad, ya que los hombres y mujeres
nos países europeos como Dinamarca y Suecia europeas mantienen más la soltería y se casan
tienen un reconocimiento legal homologado en menor medida que antes. El matrimonio se
con las parejas matrimoniales. En España está contrae, como media, a edades más avanzadas.
actualmente en trámite en el Parlamento una Si en ¡960 se casaban un hombre de 26,7 y una
Ley de parejas de hecho que trata de ofrecerles mujer de 24,1, como media del primer matri-
una serie de derechos legales, agrupando en monio, en 1993 la pareja media era la de un
esta definición a las parejas heterosexuales que hombre de 28,5 que se casaba con una mujer
conviven de forma estable sin querer contraer de 26,1 años. España se sitúa en un término
matrimonio y a las parejas homosexuales que medio en cuanto a la edad de contraer matri-
conviven y que legalmente no pueden contraer monio y son Suecia (30,8-28,5) y Holanda
matrimonio. (29,3-27) los países donde las parejas contraen
el primer matrimonio a más avanzada edad.
Además de este retraso en la formación de la
pareja, las cifras indican una menor propen-
Cambios en el ciclo sión a contraer matrimonio: si en 1960 hubo
familiar 79 matrimonios por 10.000 habitantes en
Europa, en 1994 la media se ha reducido hasta

E n los últimos años se han producido


cambios importantes en el ciclo de
vida. El aspecto más importante,
52 matrimonios por 10.000 habitantes. Las
tasas más reducidas de matrimonios se dan en
Suecia donde sólo se celebraron 39 matrimo-
nios por cada 10.000 habitantes en 1994. Ello
que anticipa y permite otros cambios, es el de parece guardar una relación importante con el
la prolongación de la vida que dura hasta más número de hogares en los que el hombre y la
edad que nunca en la historia. Un segundo mujer no están casados, es decir, con el
aspecto, relacionado con el anterior, es el cam- aumento de las parejas de hecho como forma
bio de calendario que se está produciendo en estable de convivencia.
las sociedades europeas en los fenómenos Esta reducción de ¡a nupcialidad en Europa
básicos del ciclo familiar: formación de las también puede advertirse a través del porcen-
parejas y nacimiento de los hijos. taje de solteros en cada una de las cohortes de

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población y se confirma que entre las cohortes en 1974 permitiendo el divorcio, aunque con
nacidas después de 1950 se elevan mucho los una fórmula un tanto restrictiva. España lega-
porcentajes de solteros: en 1994 un 37% de los lizó el divorcio más tarde, en 1981, y sin
hombres y un 28% de las mujeres nacidas en embargo implantó una formula más amplia y
1955 no habían contraído matrimonio; Asimís- tolerante del mismo. En 1996 Irlanda ha apro-
mo un 42% de los hombres nacidos en 1960 y bado, mediante un referéndum, la introducción
un 36% de las mujeres de esa promoción tam- del divorcio.
poco habían contraído matrimonio. Parecen Las cifras de divorcio son crecientes en
cifras elevadas de soltería para hombres y toda Europa aunque las diferencias cuantitati-
mujeres que han superado los treinta y los vas entre los países nórdicos, del centro de
treinta cinco anos. Europa y del sur son todavía muy amplias. En
La edad media de la maternidad se ha eleva- 1960 la media europea era de 5 divorcios por
do en Europa desde los 27,1 años de media en 10.000 habitantes mientras que desde media-
1980 a los 28,7 años de 1994. Las mujeres han dos de la década de los ochenta esta media
retrasado el momento de tener hijos y este pro- supera los 17 divorcios por ¡0.000 habitantes.
ceso se advierte más fuertemente en algunos Los países más divorcistas (Datos de 1993)
países europeos en donde la edad media a la son Inglaterra (31), Suecia (25) y Dinamarca
maternidad alcanza casi los treinta años, Espa- (25) que superan la tasa de 25 divorcios por
ña (29,5), Italia (29,6), Holanda (29,9) o inclu- 10.000 habitantes; en las posiciones medias se
so Irlanda que los supera con una media de sitúan los que se acercan a la tasa de
30,3 años en 1994. 20/10000, Bélgica (21), Alemania (19), Fran-
Estos cambios han sido posibles en parte cia (19), Luxemburgo (19), Holanda (20) y
por las reformas legales y los descubrimientos Austria (20); mientras que los paises del sur
científicos en relación con la anticonception y europeo, Portugal (12), Grecia (7), España (7)
el aborto. El uso de los anticonceptivos se ha e Italia (4), presentan cifras más moderadas de
generalizado en Europa a partir de los años divorcialidad.
sesenta y las legislaciones han ido retirando La reducción del número de hijos es la ten-
poco a poco las sanciones penales del aborto. dencia actual que parece más importante como
Con escasas excepciones, la interrupción índicador de cambios en las familias. La nata-
voluntaria del embarazo no está castigada y las lidad ha descendido extraordinariamente en
mujeres recurren a ella en buena medida, a toda Europa en las últimas décadas, lo que pre-
pesar de los avances alcanzados en las técnicas ocupa y se intenta contrarrestar con las políti-
anticonceptivas. Las leyes más estrictas sobre cas familiares. El fomento de la natalidad ha
la IVE son las de Irlanda, donde no existe nin- guiado las políticas demográficos de numero-
gún atenuante posible y el aborto siempre es sos países. En Europa desde los años setenta la
considerado delito. caída de la fecundidad es una tendencia con-
Otra evolución importante ha sido la que sistente. En 1960 la tasa de fecundidad euro-
hace referencia al tratamiento legal y a la opi- pea era 2,59, ascendió suavemente llegando a
nión publica sobre el divorcio. La ruptura ser 2,78 en 1964 y desde entonces no ha deja-
matrimonial se puede legalizar mediante el do de reducirse hasta llegar a una media de
divorcio y, en numerosos países europeos, los 1,45 hijos por mujer en 1994.
procesos de separación y divorcio se centran Los procesos de caída de la fecundidad más
más en la atención a las necesidades económi- espectaculares son los de Italia y España que
cas y psicológicas de los hijos que en la res- tienen desde 1989 un récord de baja fecundi-
ponsabilidades o culpas de cada uno de los dad, habiendo llegado ambos en 1994 a una
cónyuges. La aparición del divorcio sin culpa tasa de 1,22 hijos por mujer. Mientras tanto los
y del divorcio por mutuo acuerdo son una países nórdicos, que tradicionalmente habían
novedad legal que permite reducir las tensio- tenido tasas moderadas de fecundidad, han ido
nes entre los cónyuges pues favorece la nego- recuperando sus cifras de nacimientos y tienen
ciación y el acuerdo en el momento de la mp- actualmente las tasas europeas de fecundidad
tura. Los últimos europeos en legalizar el más elevadas, Suecia (1,88), Finlandia (1,85),
divorcio han sido los países más influenciados Dinamarca (1 ,80) junto con Irlanda (1,86) para
por la Iglesia Católica; Italia reformó sus leyes 1994.

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La familia. Convergencia y divergencia de los modelos... 79

El Estado y la familia rrente que tiene dos aspectos: por una parte
acerca de las posibilidades del sector público

E
de seguir haciéndose cargo de servicios y aten-
1 contexto económico y social es ciones personales que tradicionalmente corres-
uno de los aspectos fundamentales pondían a las familias y, por otra parte, la dis-
a tener en cuenta en cuanto a las cusión acerca de la legitimidad del modelo, de
políticas familiares. La transformación de las lo adecuado o no de esta socialización de las
familias europeas, los cambios sufridos por funciones de seguridad y de atención personal.
ellas y las evoluciones más recientes sólo se Las posibilidades de emancipación personal
pueden entender con el trasfondo del periodo y de libertad individual van estrechamente uni-
de desarrollo económico sostenido que han das a la puesta en marcha de sistemas públicos
tenido sus economías a partir del final de la de bienestar La existenci4 de una Seguridad
Segunda Guerra Mundial y que ha permitido el Social generalizada, que garantiza la atención
desarrollo de los Sistemas de Bienestar. médica en caso de enfermedad o infortunio y
La historia, las tradiciones religiosas y socia- que asegura unos ingresos mínimos en caso de
les de cada colectividad, tienen una importan- paro, viudedad o jubilación, supone suavizar la
cia enorme a la hora de definir el modelo fami- carga de responsabilidades que las redes fami-
liar que se refleja en el grado de intervención y liares han soportado tradicionalmente.
de responsabilidad del Estado en la seguridad y El gasto social en familia, considerando así
el bienestar de sus ciudadanos. El reparto de todos los gastos sociales que, de alguna forma
responsabilidades entre las unidades familiares ofrecen alternativas a tareas o responsabilida-
y las instituciones publicas en cuanto a la aten- des que tradicionalmente han corrido a cargo
ción a los jóvenes, ancianos o minusválidos, en de las familias, es en la mayoría de los paises
cuanto al amparo de la maternidad y a la pro- europeos un capítulo muy importante. Las
tección de las familias con hijos etc. se hace de ayudas a las parejas con hijos, a los adultos
formas muy diversas en las distintas socieda- solos con cargas familiares, a los niños o adul-
des. Cuanto más amplio y más generoso es el tos minusválidos etc. son actualmente un
sector público para cubrir necesidades indivi- importante capitulo del gasto social, se consi-
duales, mayor libertad y menor responsabilidad dere o no incluido en las políticas familiares.
tienen los individuos con respecto de los miem- Las ayudas a la tercera edad también son una
bros de su familia. alternativa a los cuidados familiares, así como
El desarrollo económico ha coincidido en todas las atenciones personales a poblaciones
Europa con la creación de sistemas de bienes- enfermas o dependientes. Las residencias de
tar y ello ha permitido, en mayor medida que ancianos, los centros para minusválidos, las
en el pasado, la independencia personal, al ate- guarderías, los comedores escolares etc. todo
nuarse las dependencias familiares. La solida- ello se desarrolla enormemente en Europa en
ridad impersonal de los servicios públicos estos últimos años y permite descargar a las
ofrece una alternativa a las obligaciones fami- familias de responsabilidades y trabajos.
liares y permite aliviar a las familias de buena El mayor freno al desarrollo de todos estos
parte de sus responsabilidades. La filosofía servicios es el enorme gasto público que repre-
individualista, en la que la independencia y la sentan. Los enormes gastos sociales que pro-
libertad aparecen como valores supremos, ha ducen estos sistemas de bienestar plantean
respaldado ideológicamente la socialización problemas fiscales en la mayoría de los países
de buena parte de las responsabilidades y obli- europeos. Las tendencias de crecimiento soste-
gaciones que tradicionalmente han atendido nido de la deuda pública amenazan el mante-
las redes familiares. nimiento de los servicios que ofrece el Estado
De todas formas, los servicios públicos no de Bienestar o, como en el caso de España
liberan totalmente de las dependencias perso- donde el Estado del Bienestar se ha desarrolla-
nales y, por otra parte, el enorme crecimiento do más tarde y en menor medida, amenaza con
del gasto público amenaza el futuro de los sis- frenar su pleno desarrollo. Ello tiene una
temas de bienestar poniendo freno al desarro- importancia enorme en cuanto a su repercu-
llo de nuevos servicios sociales. Todo ello sión sobre la organización y la vida cotidiana
plantea en los paises europeos un debate recu- de las familias.

LI
Hay una cuestión que me interesa señalar y menos cambios ambiciosos y difíciles de
es que no considero que, necesariamente, una lograr. Se tiende a las medidas que parten de la
política de apoyo a la familia sea una política aceptación de los cambios sociales ya acaeci-
conservadora. Si bien es cierto que las ideolo- dos. Uno de estos cambios, por ejemplo, es la
gías conservadoras son las que más apoyo teó- desinstitucionalización de la familia. Las polí-
rico dan a la familia y que han sido los gobier- ticas tendrán que establecer los derechos y evi-
nos conservadores, e incluso totalitarios, de la tar las discriminaciones de aquellos que no
historia europea reciente los más beligerantes conviven en formas familiares institucionali-
a favor de la familia, de un tipo determinado zadas. Otro rasgo de las familias actuales es el
de familia, ello no significa que estos gobier- de su diversidad. La diversificación de formas
nos hayan mejorado las relaciones interperso- y estilos de vida y de convivencia ha sido
nales de las familias ni hayan logrado un enorme. Durante mucho tiempo las políticas
mayor bienestar para los miembros de la han tendido a homogeneizar los comporta-
misma. Por el contrario, han sido las socialde- mientos, pero la realidad actual refleja una cre-
mocracias del norte de Europa las que, mucho ciente diversificación en las formas de convi-
~más en nombre del bienestar individual que en vencia. Aceptando esto habrá que buscar, con
nombre de los derechos de la familia, han unas y otras medidas de política familiar, la
ofrecido unas políticas solidarias, generosas atención a las diferentes necesidades que unas
económicamente y amplias en cuanto a la y otras situaciones reclaman.
diversidad de medidas utilizadas. Además, han Históricamente los objetivos demográficos
sido políticas abiertas ideológicamente, que han sido más importantes que los objetivos
han fomentado primordialmente la emancipa- de bienestar en las políticas familiares. La
ción de la mujer y el bienestar de los niños, es política se entiende como instrumental res-
decir han defendido los derechos y las situa- pecto de la evolución de la población, siendo
ciones de los más débiles dentro de los hoga- el aumento o la reducción de la población
res familiares. uno de los objetivos más frecuentes. Las
Los programas de bienestar puestos en mar- políticas familiares se elaboran casi siempre
cha en los paises nórdicos desde mediados del teniendo en cuenta la situación demográfica
siglo XX, unidos a la revisión de todas las nor- aun cuando no está muy claro el impacto de
mas legales que afectaban a la familia, han con- unas y otras medidas en la demografía de
figurado políticas familiares amplias y cohe- cada país.
rentes que no tienen punto de comparación con El problema más importante de estas medi-
las desarrolladas en otros paises, incluso aque- das de carácter demográfico es la dificultad de
líos con un mismo nivel de desarrollo econó- obtener los resultados buscados y la frecuencia
mico. Pero como se han llevado a cabo bajo la con la que se obtienen resultados no buscados
bandera de la libertad individual y no de la ins- ni previstos. Por ejemplo la política de China
titución familiar, el pensamiento conservador Comunista de «un ánico hijo» ha sido muy efi-
no las considera políticas familiares. caz en cuanto al objetivo buscado de reducción
del crecimiento poblacional pero ha tenido un
efecto no previsto y muy peligroso demográfi-
ca y socialmente, como es la reducción del
Objetivos de las políticas número de niñas. La discriminación de genero
familiares y la tradición de valorar más a los varones,
unido a la limitación de la descendencia, ha
llevado a la práctica del aborto de fetos del

E 1 objetivo de la política familiar ha


de ser el crear un marco legal y un
entorno social favorable para que
sexo femenino, al abandono de las niñas, a la
desatención de su nutrición y de su salud lle-
gando al infanticidio, con el peligro de dese-
las familias puedan asumir libremente, y con quilibrar la población por sexo en los grupos
menos costes personales, sus opciones perso- de edad más joven.
nales y puedan con ellas cumplir las funciones Por otra parte, en los paises democráticos,
sociales tan importantes que les corresponden. con un nivel de libertades personales muy
Las políticas familiares cada vez se proponen amplio no es fácil tomar medidas demográfi-
cas de carácter estricto con lo que su nivel de tar las oportunidades laborales y educativas
eficacia se hace menor. Se recurre, cuando la para todos ellos. Cada vez las decisiones polí-
motivación poblacional es la razón de ser de ticas van más en esta dirección. Podríamos
las políticas, a incentivos y a subvenciones que decir que las políticas familiares actuales han
fomenten ciertos comportamientos, pero es dejado de plantearse como objetivo lograr
escasa la repercusión que las medidas tienen cambios fundamentales en los comportamien-
en los índices de natalidad. Por ejemplo, Fran- tos colectivos y se conforman con ser medidas
cia, donde siempre se ha defendido explícita- de bienestar.
mente el aumento de la natalidad y donde han La enorme diversidad de políticas, medidas,
habido numerosas medidas de apoyo a la leyes y declaraciones que afectan a los compor-
maternidad, tenía en 1994 una tasa de fecundi- tamientos individuales en cuestiones familiares
dad baja, 1,65 hijos por mujer, que no alcanza hace difícil advertir algún rasgo lo suficiente-
el indice 2,1 de reproducción de generaciones. mente extendido como para presentarlo como
Francia ha respondido a la caída de la natali- una tendencia general en Europa. Nos vamos a
dad con una serie de medidas para que las arriesgar a intentarlo a pesar de ello. La situa-
mujeres se queden en el hogar y tengan más ción es compleja y tanto se escucha decir que la
hijos. En 1985 se estableció una ley por la que familia se desmorono como que hay una vuel-
las mujeres activas con dos hijos recibirían una ta a la familia; lo cierto es que analizando las
subvención si dejaran su trabajo a la vez que sociedades europeas lo que advertimos es un
tuvieran el tercer hijo. En 1994 esta medida se aumento enormede las libertades individualesy
ha ampliado a las madres de un hijo que deci- una tendencia a la individualización, la tenden-
dan tener el segundo. Lo malo, y lo bueno, de cía a que el individuo sea el sujeto fundamental
este tipo de incentivos es que sólo son utiliza- de las medidas y las ayudas de todo tipo. Sobre
dos por aquellas mujeres que ya estaban pen- todo a que sean las características de ese indivi-
sando en tener otro hijo. Es decir, son medidas duo, en las que sus condiciones de vida familiar
con una eficacia muy limitada respecto del tienen importancia, las que le hagan acreedor de
objetivo poblacional que las guía. Estudios una ayuda o un servicio.
franceses reflejan que en los dos años poste- En Europa se advierte la importancia que
riores a esta ley hubo un elevado numero de cobran los niños como justificación política y
casos, pero el uso de la misma se estancó pos- ética principal a la hora de definir las políticas
teriormente (Afsa 1997). Por otra parte esta familiares. El bienestar de los niños y la con-
medida tuvo diferente acogida entre unos y secución de una igualdad de oportunidades
otros entornos culturales. Aquellas poblacio- para ellos, sea cual sea su ambiente familiar,
nes cuyos valores culturales les llevan a prefe- parece cada vez más ser el centro de las políti-
nr un mayor número de hijos, como los fran- cas familiares. Los adultos, y dentro de ellos
ceses de origen magrebí, utilizaron en mayor los ancianos, son también destinatarios de las
medida estas ventajas legales. medidas de política familiar, pero nos parece
Estas experiencias reflejan las limitaciones advertir en los últimos años una tendencia a
de las medidas natalistas. Dada la dificultad poner prioritariamente el foco en los menores
de alcanzar los objetivos precisos que buscan de edad a la hora de decidir sobre políticas
y dado el coste político y social de este tipo de familiares. En este tema se advierte un cierto
medidas cada vez se recurre menos a políticas contraste de Europa con lo que ocurre en los
demográficas y se definen políticas de bienes- Estados Unidos, donde a pesar de la importan-
tar a partir de una situación demográfica dada. cia que tiene la infancia en estas cuestiones, es
Las medidas de subvención a la maternidad sobre todo la tercera edad la principal benefi-
no parecen muy exitosas y tienen más éxito, ciaria de las medidas de ayuda social.
para incentivar la natalidad, las ayudas que Otra cuestión que importa señalar es la inte-
permiten a las mujeres trabajadoras compati- rrelación entre los problemas familiares y la
bilizar los hijos y el trabajo. Las políticas pobreza por lo que muchas veces parece que
familiares que quieren apoyar a las parejas más que medidas de política familiar estamos
jóvenes a tener hijos tendrán que ir en la analizando políticas contra la pobreza y la
dirección de mejorar el bienestar de los padres marginación.
y la calidad de vida de los niños y de aumen-

~PbEUM~
Las medidas de política nen una ayuda al bienestar y reducen la res-
ponsabilidad mutua entre los miembros de la
familiar familia. También hay que tener en cuenta una
serie de medidas laborales que se vinculan a la

L
política familiar. En algunas empresas, a veces
as prestaciones familiares han surgi- a nivel de todo un país, los ingresos económi-
do históricamente a partir del siste- cos del trabajador se consideran salario fami-
ma fiscal en unos estados y a partir liar y se miden de forma diferente según cua-
del modelo de Seguridad Social ligado al trabajo les sean las cargas de la unidad familiar que
productivo en otros. Estas prestaciones tienen on- mantiene. Existen ayudas o incrementos de
ginariamente dos motivaciones fundamentales, salario según el numero de hijos, ayudas para
que pueden o no ir unidas, la lucha contra la los estudios de los hijos, ayudas por mayores
pobreza y la protección de algunos tipos de fami- dependientes, por hijos minusválidos etc.
lias con pmblemas especiales como las familias Otro tipo de medidas, vinculadas al ambiente
numerosas, las monoparentales, las madres solte- laboral, es el de los permisos de trabajo por
ras y otras. Los objetivos de redistribución econó- causa familiar como contraer matrimonio, nací-
mica y la protección a determinados núcleos miento de un hijo, defunción de un pariente etc.
familiares siguen siendo las dos líneas fundamen- que en la mayoría de los países europeos están
tales de justificación de las políticas familiares. establecidos por ley con carácter general para
Las medidas y los instrumentos a través de las todos los trabajadores. La homogeneidad no es
cuales se llevan a cabo las políticas familiares completa, ni incluso en el interior de cada país,
son muy variadas. La utilización de los Presu- porque algunas empresas amplían las ventajas
puestos del Estado y las leyes fiscales aparecen sociales de sus trabajadores y, por el contrano,
como las más importantes. La medidas pueden muchos trabajadores no gozan de este tipo de
tomar la forma de subvenciones directas a insti- ventajas por no tener una situación laboral esta-
tuciones o a personas, incentivos económicos a ble o legalmente reconocida.
ciertas actividades o desgravaciones fiscales por El permiso de maternidad es la primera y prin-
determinadas actividades, entre otras. cipal de las medidas adoptadas históricamente.
Se utilizan los impuestos para ayudar a La excedencia permitida por un día, dos, una
determinadas unidades familiares. Cuando no semana o más a la mujer trabajadora que daba a
hay una definición explícita de las políticas luz fue la primera medida de carácter familiar y
familiares éstas pueden deducirse del análisis laboral que introdujeron las legislaciones socia-
de los impuestos sobre la renta que reflejan les de los países europeos. Estos permisos, sin
apoyos a determinadas formas de convivencia pérdida del puesto de trabajo, suponen una
o, al contrario, retiran su apoyo elevando los garantía importante para las mujeres trabajadoras
impuestos a otras formas de organización fami- que tienen hijos pero, desafortunadamente, no
liar. Con frecuencia encontramos casos de están muy generalizadas fuera de los países euro-
indefinición o medidas contradictorias, en los peos. Son numerosas, aun hoy en día, las muje-
que no se sabe si se ayuda a las familias y a que res que no pueden interrumpir su trabajo por dar
tipo de familia se ayuda. Por ejemplo en Espa- a luz sin an-iesgarse a perder el trabajo. Esto es lo
ña de 1979 a 1989, a la vez que se hacían des- normal en muchos paises subdesarrollados
gravaciones fiscales por hijo y por esposa y se donde las condiciones de trabajo de las mujeres
justificaban como protección al matrimonio, son precarias y en algunos países desarrollados
los impuestos de una pareja conviviendo sin donde no existen este tipo de derechos laborales
matrimonio eran más reducidos que los que y en los que las mujeres han de retirarse tempo-
tendría que pagar esa pareja si estuviera casada. ralmente del trabajo cuando tienen hijos.
La Seguridad Social es otro instrumento El poder ausentarse del trabajo durante un
fundamental de la política familiar. Los dere- período de tiempo después de dar a luz, sin per-
chos de asistencia médica y su regulación, los der el empleo, permite compatibilizar el trabajo
derechos de pensión por el trabajo propio, del con la maternidad y, a la vez, mejora las condi-
cónyuge o del padre, los derechos de jubila- ciones de salud de las mujeres y la de sus hijos.
ción o las pensiones sin prestaciones contribu- Estas medidas, que comenzaron inicialmente
tivas anteriores etc., todas estas medidas supo- por razones de salud e higiene, se han ido exten-
diendo, amparando actualmente a la mayor los países más desarrollados, y que se advierte
parte de las mujeres trabajadoras de los paises de forma dramática en las zonas de margina-
europeos. Los permisos de maternidad han ción de estos últimos, y es la coincidencia
dado paso recientemente a otro tipo de permisos entre la pobreza, la marginación social y la
que pretenden ayudar al conjunto de los traba- desestructuración familiar En algunos casos
jadores a hacer compatible su trabajo con sus se hace difícil distinguir cual es la variable
responsabilidades familiares; son los permisos principal en estas situaciones si la pobreza o la
parentales, que se dan al padre y a la madre desestructuración familiar.
durante un tiempo después del nacimiento o de
la adopción de un hijo; son las excedencias por
un año o más que se ofrecen a los padres y Servicios sociales, antes
madres de hijos pequeños para que puedan que-
darse en casa cuidando de ellos con recupera- familiares, privados
ción de su puesto de trabajo a la vuelta; los per- y públicos
misos por hijo enfermo, un cierto numero de

H
días que se otorgan sin sanción a aquellos tra-
bajadores que tengan que quedar cuidando de ay una serie de servicios que vie-
un hijo de forma eventual; los permisos por nen a descargar a las familias de
asuntos familiares o asuntos propios, con un buena aprte de sus tareas y respon-
máximo de días al año, que dan algunas empre- sabilidades. Es principalmente en las áreas de
sas a los trabajadores para que atiendan obliga- la educación y de la salud en las que más tem-
ciones de carácter familiar, defunciones, enfer- pranamente se han ido desarrollando servicios
medades, traslados etc. En toda Europa son de los que en tiempos pretéritos se ocupaban
sobre todo los trabajadores del sector público, o las familias.
de las empresas estatales, los que tienen mayor Las administraciones públicas europeas han
numero de ventajas familiares de este tipo. desarrollado enormemente los servicios socia-
Hay otra serie de medidas de carácter social les que ofrecen a sus ciudadanos y ello reper-
que quedan a medio camino entre las ayudas de cute muy favorablemente en la vida familiar, a
carácter familiar y las ayudas en situación de la vez que actúa como una forma de redistri-
necesidad. Algunas de ellas se conceden en fun- bución económica pues, dado que se financian
ción de la situación familiar de la persona nece- con las aportaciones fiscales de todos, son
sitada. Como son las ayudas para integrarse al sobre todo las familias con menos medios las
trabajo, orientadas a colectivos marginados dán- que más se benefician de ellos.
doles un salario que va unido a un plan de for- La extensión de estos servicios depende del
mación profesional o a la escolarización de los nivel de desarrollo de cada sociedad, del nivel
hijos. Así se organiza por ejemplo el IMI, Ingre- impositivo y, también, de la orientación ideo-
so Mínimo de Integración, que se ha creado en lógica de los gobiernos. La socialización de
algunas Comunidades Autónomas españolas y una serie de tareas que se hacían dentro del
que persigue a la vez la integración social, la hogar, como el cuidado de los enfermos, de los
estabilidad familiar y la salida de la pobreza. minusválidos, la atención a los niños, a los
También entrarían en este grupo las ayudas ancianos, la educación básica, la enseñanza de
a madres solteras, a mujeres separadas con las profesiones etc, ha ido avanzando en las
hijos sin ayuda del cónyuge, o las ayudas a sociedades europeas hasta llegar a considerar-
mujeres solas con cargas familiares que persi- se derechos colectivos irrenunciables.
guen al mismo tiempo la integración laboral de A lo largo del siglo XX se ha producido una
las mismas y el mantenimiento del núcleo creciente socialización de estos trabajos, antes
familiar. Tienen una importancia cuantitativa considerados domésticos, que han salido al
muy elevada en algunos paises europeos. exterior a través de las administraciones publi-
Todas estas medidas son principalmente cas y también han ido saliendo de los hogares a
medidas contra la pobreza y la marginación través del mercado. La oferta de una serie de ser-
pero muy frecuentemente se usan como ayu- vicios, considerados domésticos, ha ido crecien-
das familiares pues hay una constante, que se do y extendiéndose hasta el extremo de que hoy
repite tanto en los paises más pobres como en en día se nos hace extraño pensar que algunas de

ppwrL&
84 Inés Alberdi

esas tareas se realizaban solamente en el interior juntas para el futuro. El Año Internacional de
de los hogares. El desarrollo de la manufactura, la Familia en 1994 supuso, a nivel de la Comu-
del comercio y de los servicios han aligerado nidad Europea, la puesta en marcha de una
extraordinariamente las ocupaciones domésticas serie de mecanismos de estudio y reflexión
y ello ha permitido la salida del hogar de las sobre la familia. Se creó el «Observatorio de
mujeres que desean obtener un salario. las familias», un grupo de estudio en el que
El desarrollo de los servicios privados de aten- están representados todos los países miembros
ción personal también ha sido extraordinario en y que lleva a cabo la revisión de las políticas
estos últimos años, más aún en aquellos países familiares con vistas no sólo a conocerlas y
de elevado nivel de vida en los que los sistemas discutirías, sino también a promover y a
de bienestar no se han desarrollado demasiado. homogeneizar las intervenciones públicas que
Por ejemplo en los Estados Unidos no se ofrecen se consideren más oportunas. Periódicamente
tantos servicios públicos como en Europa, pero las Comunidades Europeas realizan una serie
el desarrollo de los servicios de atención perso- de encuestas con carácter general, los Euroba-
nal y doméstica ha sido enorme por parte del rómetros, y en los últimos años han dedicado
sector privado y por parte de organizaciones de varios de ellos a conocer el estado de opinión
carácter voluntario y sin animo de lucro. de los europeos acerca de la institución fami-
1-lay también una serie de servicios que pro- liar y ácerca de las políticas familiares.
liferan últimamente tanto como oferta del sec- Examinando las políticas familiares de los
tor privado como por parte de las administra- 15 países europeos es difícil hacer un análisis
ciones públicas o de las instituciones de ayuda comparativo de sus logros dada la diversidad
voluntaria y son los servicios de asesoramien- de las actitudes, las formas y las actuaciones
to, apoyo legal, información, apoyo psicológi- políticas con las que se enfrentan las cuestio-
co o tratamiento psiquiátrico a las familias o a nes familiares. Los aspectos a considerar son
algunos de sus miembros en momentos de numerosos: los objetivos que se proponen, las
necesidad. Las consultas por malos tratos den- medidas que se utilizan, las poblaciones a las
tro de la familia, la información acerca de sus que se dirigen estas políticas, los valores que
derechos o acerca de recursos sociales que pue- se invocan y finalmente, los resultados obteni-
den obtener, la asistencia social de carácter dos. Pensando en objetivos vemos por ejemplo
informativo, la asistencia en momentos de mp- el objetivo de aumento de la natalidad en Fran-
tura matrimonial etc. son algunas de las tareas cia, el de la redistribución de las rentas en Ale-
que realizan agencias especializadas ya sea por mania o el de la igualdad de oportunidades
cuenta del gobierno, de asociaciones volunta- sociales en España. Pero hay muchos otros que
rias o con carácter privado y a cargo del intere- se invocan en unos y otros momentos como los
sado que se inscriben en el marco de las servi- valores del bienestar de niños y ancianos, la
cios familiares que se desarrollan en unas y justicia social, la prevención de la pobreza etc.
otras sociedades. Buena parte de estos recursos Cada país, en cada momento histórico, y cada
van a los sectores más pobres y marginados de gobierno, según sus orientaciones políticas,
la sociedad pero no necesariamente ocurre introducen innovaciones en la política familiar
siempre así, la utilización de servicios profe- que vienen a sumarse a las peculiaridades que
sionales de asesoramiento familiar es cada vez el modelo de ese país ya tenía. Esto se puede
más frecuente en todas las clases sociales. observar analizando la situación en algunos
paises europeos como Dinamarca, Inglaterra,
Alemania, Suecia y Francia.
Dinamarca, por ejemplo, no ha tenido nunca
Los diferentes modelos una política de familia de manera explícita
europeos aunque el modelo de Estado de Bienestar
adoptado desde los años cincuenta incorpora

E
las necesidades de la familia como una preo-
n 1994 se celebró en Bonn, bajo la cupación política central. El hogar familiar
presidencia alemana, un Congreso que se propone como óptimo es el de la fami-
de la Familia que se dedicó princi- lia trabajadora en la que tanto el hombre como
palmente a estudiar posibles actuaciones con- la mujer son activos y que viven con sus hijos.
Los servicios y ayudas que ofrece a las fami- ral. Los permisos de trabajo se ofrecen por
lias son numerosos y pueden optar a ellos tanto igual a hombres y mujeres; son numerosos los
las parejas estables no casadas como los matri- permisos de trabajo para cuidar de los hijos en
monios. La familia simétrica, en la que ambos el hogar, que se dan cobrando al menos el 80%
cónyuges comparten las cargas laborales y las del subsidio de paro. Con ellos se pretende
cargas domésticas, domina el marco teórico y ofrecer la alternativa hogareña a los padres o
real de la institución familiar en Dinamarca, madres de niños menores de 8 años, con reser-
como puede verse por numerosos indicadores, va del puesto de trabajo durante un máximo de
el más claro de todos la elevada tasa de activi- tres años. Con ello se pretende también alige-
dad femenina, especialmente la tasa de activi- rar plazas de las guarderías y ofrecer una flexi-
dad de las mujeres con hijos menores. La aten- bilidad entre trabajo y familia a las parejas con
ción social respecto de la familia se centra, hijos pequeños (Pruzan 1994).
crecientemente, en el bienestar de los niños. La política familiar del Reino Unido es un
Las medidas sociales conceden una atención tanto errática y se ha situado en los últimos
especial a los niños y, por lo tanto, a los hoga- años a medio camino entre una configuración
res con hijos menores de edad. La descentrali- individualista y una familiar, pues según en
zación de los servicios de apoyo a la familia es qué aspectos se antepone la institución o el
muy amplia. La responsabilidad pública es individuo. Esta es una de las críticas que ha
asumida políticamente por el Estado pero la llevado al gobierno laborista a emprender una
mayoría de los servicios están organizados y reforma a fondo del sistema de protección
gestionados a nivel local (Pruzan 1994). familiar. Los impuestos han ido evolucionando
Entre las medidas más importantes de la desde 1960 hacia un sistema basado en el indi-
política familiar danesa podemos señalar la viduo y no en la unidad familiar. Ello ha pro-
puesta en marcha de una red extensísima de ducido que las familias con hijos soporten una
guarderías públicas para cuidar a los niños mayor carga fiscal que los solteros o los matri-
mientras el padre y la madre trabajan. En las monios sin hijos (The Economist 1995). Los
guarderías la garantía de calidad en el servicio críticos de este sistema han señalado como
se superpone al compromiso de ofrecer un esto no favorece los matrimonios estables con
puesto para cada niño que lo necesite. hijos. Se reducen los impuestos para los padres
En Dinamarca existe actualmente un debate o madres solos con hijos e incluso hay una
importante acerca del papel de los hombres en sene de subvenciones directas para las mujeres
la familia. La opinión pública se ocupa de la solas con hijos. Se ha calculado que en los
figura del padre y la importancia que tiene para niveles de ingresos más bajos resulta más ren-
la formación de los niños y de los jóvenes. En table para la pareja vivir por separado. Los
este debate se plantea también la necesidad de padres que viven con sus hijos no pueden aspi-
involucrar a los varones en los cuidados perso- rar a estas subvenciones y, por ejemplo, las
nales más elementales y de integrarlos en todo madres adolescentes pierden esta ayuda si se
lo doméstico. La necesidad de armonizar la casan o se ponen a vivir de forma estable con
vida laboral y la vida familiar aparece como el padre de las criaturas. En parte como conse-
uno de los objetivos más importantes de la cuencia de ello, el Reino Unido tiene la tasa
política social. En este sentido el Estado más elevada de madres solteras adolescentes,
fomenta que las empresas permitan el trabajo de una forma similar a lo que ocurre en Esta-
flexible, así como el trabajo a tiempo parcial y dos Unidos donde el welfare desanima del
otras medidas que ayuden a esta compatibili- matrimonio o de la pareja estable a las mujeres
dad. Las familias se apoyan cada vez más en la pobres que viven con sus hijos lo que, de
oferta de servicios personales y domésticos de forma no prevista por el legislador, fomenta la
carácter público y a la vez se discute el enorme ausencia de los hombres de estos hogares y la
coste financiero que este Estado de Bienestar continuidad en situaciones de marginación ya
supone para todos. Se argumenta también la que el subsidio también se pierde cuando se
responsabilidad que deberían tomar las empre- consigue un puesto de trabajo estable.
sas privadas respecto de los problemas familia- Inglaterra tiene una tasa elevada de hogares
res de sus trabajadores y la incorporación de monoparentales (9%), de los hogares con hijos
los aspectos familiares en la legislación labo- un 20% son monoparentales y de estos más del
86 Inés Alberdi

80% están encabezados por mujeres, coinci- sidades de todos los niños de seis años en ade-
diendo a su vez con que tres cuartas partes de lante, Alemania tiene el horario escolar más
estas familias monoparentales viven de los reducido de Europa y los niños salen de la
subsidios sociales. Más de la mitad de los escuela a la una de la tarde, lo que es muy difí-
niños que viven en la pobreza pertenecen a cil de compatibilizar con horarios laborales
hogares monoparentales. Para evaluar estas completos del padre y de la madre.
cifras, en comparación a las de otros países De una forma un tanto diferente, la política
europeos, hay que tener en cuenta que los naci- familiar sueca es un ejemplo de política familiar
mientos fuera del matrimonio pueden respon- diseñada a partir del individuo más que desde la
der a situaciones familiares muy distintas. Por tnstitución. Las subvenciones o ayudas tienen
ejemplo en los paises nórdicos, en los que la siempre un carácter individual. El diseño de los
cohabitación sin matrimonio es muy elevada, servicios y la definición de los derechos es per-
la mitad de los niños no son hijos matrimonia- sonal y busca preferentemente el bienestar indi-
les pero en su mayoría pertenecen a un hogar vidual. A partir de los años 50 se diseñaron polí-
con una pareja estable. ticas para animar a las mujeres a entrar en el
Alemania tiene una política familiar explíci- mercado laboral y para facilitar la convivencia
ta y definida a partir de la defensa de la insti- en los hogares familiares cuando tanto el hom-
tución familiar. El gobierno federal tiene bre como la mujer trabajaran fuera de casa. Se
incluso un Ministerio de Asuntos Familiares crearon numerosos servicios sociales, principal-
que pretende dar coherencia a sus diferentes mente de atención a niños y a mayores, que
formas de apoyo a las familias. Las medidas de liberaron a las mujeres de buena parte de su
ayuda a la familia son muy numerosas y diver- tiempo de trabajo doméstico.
sas. Existen ventajas fiscales por matrimonio y Suecia es el primer país en el que aparecieron
se ofrece un descuento fiscal si la esposa se los apoyos fiscales al trabajo de las mujeres.
queda en casa cuidando de los hijos. En este Los impuestos personales tienen carácter indi-
caso a la mujer se le mantiene sus derechos de vidual, con lo que se incentivan los ingresos de
pensión y el puesto de trabajo durante tres las mujeres. Por otra parte, con el aumento del
años. Para evitar el abandono y la pobreza de consumo y el progresivo aumento de los
los hijos de divorciados el Estado garantiza el tmpuestos, la mayoría de los hogares necesitan
pago de las pensiones de divorcio y se encarga dos sueldos. Como resultado de todo ello las
luego de cobrarías. Los impuestos contemplan tasas de actividad femenina se han elevado
una serie de descuentos por tener personas enormemente. En los años sesenta se redujeron
dependientes y familiares a cargo. Además mucho los nacimientos y sólo a mediados de los
existe un subsidio directo por cada hijo. ochenta se empezó a recuperar la tasa de fecun-
En Alemania la tasa de nacimientos fuera didad que, actualmente, es más elevada que la
del matrimonio no es muy elevada para el con- de los países mediterráneos España, Italia o
texto europeo, ha pasado de un 7,6 en 1960 a Grecia (Eurostat, 1997). Esta situación contra-
ser un 15,4 en 1994 y sin embargo, a pesar de dice la interpretación frecuente de que es el tra-
las subvenciones directas por hijo, la tasa de bajo de las mujeres el factor más importante
natalidad es bastante reducida (1.26 en 1994). para explicar la caída de la natalidad. El cambio
Tiene una tasa de divorcios media y un núme- de los estilos de vida y de las mentalidades
ro moderado de hogares monoparentales femeninas es muy importante, pero más deter-
(6,3%). La diferencia más fuerte al comparar minante parece ser el tipo de organización y de
su situación con la de los países nórdicos, con servicios que se ponen en marcha para ayudar a
los que comparte muchos indicadores econó- compatibilizar la familia y el trabajo. La activi-
micos, es que tiene una proporción menor de dad femenina es importante, pero es cuando no
mujeres activas y que en gran parte las muje- existe reparto de tareas entre los cónyuges y son
res trabajan en empleos a tiempo parcial. Se caros y escasos los servicios de cuidados infan-
fomenta la vuelta al hogar de las mujeres que tiles cuando las mujeres que quieren compatibi-
tienen hijos y, si ello no es posible, se favore- lizar la profesión y la maternidad optan por
ce el trabajo a tiempo parcial. Hay que tener en reducir el numero de hijos.
cuenta que, aun cuando las guarderías son Un cambio significativo en la sociedad
numerosas y el sistema escolar cubre las nece- sueca ha sido el aumento de las parejas que

~PbtL¶s?4
La familia. Convergencia y divergencia de los modelos... 87

conviven sin casarse y la cantidad de hijos no El caso español


matrimoniales: la mitad de los niños nacidos

H
en los últimos diez años no son hijos de pare-
jas casadas. Sin embargo, hay pocos naci- istóricamente la política familiar
mientos de madres adolescentes. Existen ayu- española ha estado marcada por la
das económicas para evitar la pobreza de las dictadura franquista con toda su
familias con un solo progenitor y el Estado retórica acerca de la excelencia de la familia.
protege fuertemente la obligación de pago de Su impulso natalista contrastaba con la escasez
pensiones y alimentos al progenitor obligado de ayudas o servicios para las familias de ver-
a ello. No existen beneficios fiscales por hijo dad y se acompañaba de una legislación repre-
pero, de un modo similar al caso danés, son siva del uso de anticonceptivos y del aborto, la
numerosas las ayudas familiares en el terreno prohibición del divorcio y una serie de normas
laboral: permisos parentales para hombres y restrictivas de la actividad de las mujeres fuera
para mujeres, subsidios al cuidado infantil, del marco del hogar.
guarderías publicas y permisos por enferme- Con la transición política a la democracia se
dad de un hijo. produjo un cambio radical en el modelo de
En Francia la política familiar ha sido tradi- familia y sin embargo no hubo una definición
cionalmente un aspecto fundamental de su pública de política familiar. Los cambios se
política social. La defensa de la familia y el realizaron en nombre de la libertad individual,
fomento de la natalidad es una constante que de la equiparación de derechos entre mujeres y
supera las diferencias entre unos y otros hombres, y de la búsqueda del bienestar de los
gobiernos a lo largo del siglo. Institucional- niños. Aunque la Constitución de 1978 le ha
mente siempre se le ha dado relevancia al tema dado a la familia un lugar de primera catego-
de la familia. Existen numerosas asociaciones ría, considerándola una institución a proteger,
y movimientos sociales en tomo a cuestiones no explicita que tipo de familia se defiende.
familiares y el estudio y la investigación acer- Ello ha permitido la enorme evolución de acti-
ca de la familia y de la población tienen un tudes y comportamientos a la vez que ha
gran apoyo público. supuesto contradicciones y dificultades en la
La política familiar francesa ha tenido siem- definición legal acerca de la familia.
pre una concepción ideológica general de En los últimos años se ha producido una
defensa de la institución y se guía, para aplicar cierta racionalización de las medidas que afec-
sus ayudas concretas, por la estructura y el tan a las familias. En ningún momento se han
tamaño de las familias, al margen de la situa- definido como política familiar, sino que se
ción económica de las mismas. Todas las fami- han enmarcado entre las medidas redistributi-
lias francesas reciben ayuda en función del vas y el compromiso con una política de igual-
número de hijos que tengan y es a través de dad de oportunidades entre hombres y mujeres
otros mecanismos como se atienden estados de (Fernández Cordón 1994). Se han tomado una
necesidad y pobreza. Actualmente hay un sede de medidas que tratan de armonizar los
fuerte debate sobre ello; hasta ahora no ha apoyos fiscales y de servicios sociales a las
existido una preocupación redistributiva en su personas que tienen hijos, medidas favorables
política familiar y el nuevo gobierno socialista a compatibilizar el trabajo y las responsabili-
ha planteado la necesidad de introducir cam- dades familiares y se ha desarrollado campa-
bios en este sentido. ñas favorables al reparto de las responsabilida-
Las medidas de ayuda familiar son numero- des domésticas entre los hombres y las
sas; subvenciones directas por hijo, que mujeres. Estas políticas han coincidido con las
aumentan con el número de hijos, ayudas a orientaciones más recientes de política social
familias monoparentales y ayudas especiales a de las Comunidades Europeas.
las familias con tres hijos o más, desgravacio- La familia desempeña un papel central en la
nes fiscales por tamaño de la familia y otras. sociedad española y sin embargo apenas exis-
Por otra parte hay una serie de ayudas econó- ten, de forma explícita, declaraciones y medi-
micas muy importantes para la vivienda de das de política familiar. En los años de la
familias con muchos hijos y escasos recursos democracia no se han escuchado en España
económicos. manifestaciones acerca de la política familiar

~9bMSb
88 Inés Alberdi

por parte de los partidos políticos o lideres que en los precios de los transportes etc. y ha sido
han gobernado ni tampoco por parte de los de criticada por su escaso efecto redistributivo.
la oposición. Se pueden ir conociendo sus La familia ha estado en la «agenda oculta»
posiciones a través de las medidas que se han del gobierno. Al no tener muy claros los prin-
tomado, tanto en el terreno legislativo como en cipios que se defienden sobre la institución
cuanto a servicios que se han creado, los cam- familiar en relación al individuo se evita
bios fiscales que se producido etc. hablar de ello, se obvia como si fuera algo ine-
Muy frecuentemente las medidas concretas xistente. Ello ha ocurrido porque se ha acepta-
que afectaban a las familias han sido contra- do acriticamente que la familia era una institu-
dictorias, ya que en ellas coexistían dos lineas ción conservadora, se ha dejado su defensa en
de justificación ideológica diferentes: la que manos de la derecha y se teme que el hablar y
defiende la familia como unidad y consecuen- el defender la familia se interprete como invo-
temente la hace acreedora de la ayuda pública lución ideológica. Desde una perspectiva polí-
y la que pone el énfasis primordialmente en el tica sólo los partidos nacionalistas catalanes,
individuo y en sus derechos al bienestar y tiene Convergencia i Unió, han asumido posiciones
preferentemente un carácter redistributivo. Si explicitas de defensa de la familia. Consecuen-
vemos con detalle las medidas de política fis- temente han presentado, tanto a nivel regional
cal de los últimos años aparecen una y otra como a nivel nacional, proyectos legislativos
filosofía detrás de cada una de ellas, e igual de apoyo a la familia y a la maternidad. En
ocurre con el seguro de desempleo o con las Cataluña en 1993 se aprueba un Plan Integral
regulaciones sobre los ancianos para entrar en de Apoyo a las familias que presentaba doce
una residencia pública, el contar o no con Programas de Actuación en una red integrada
familiares directos que tengan recursos se de recursos y de servicios para «fortalecer a las
entiende como una ventaja que el Estado tiene familias y mejorar su calidad de vida». Este
que teneren cuenta a la hora de preferir la soli- Plan comprometía a toda la Administración de
citud de uno o de otro; sin embargo las des- la Generalitat y su presentación pública contó
gravaciones fiscales por hijo no varían según con el respaldo del Presidente Pujol.
el nivel de ingresos de la familia, sino que, por En el conjunto de sus posiciones los grupos
el contrario, las familias de menores ingresos catalanes han planteado la necesidad de ar¡noni-
no llegan a hacerse acreedores de esas desgra- zar la familia y el trabajo propugnando la retira-
vaciones. Es decir, que los objetivos de redis- da de las mujeres al hogar, al menos en período
tribución horizontal de las rentas y oportunida- de maternidad y minoría de edad de los hijos.
des sociales, los objetivos de estabilidad y Fueron ellos los impulsores de alargar de dos a
bienestar de los núcleos familiares y la defen- tres años la excedencia por maternidad para las
sa de los derechos individuales de las personas mujeres activas. A veces sus posiciones han sido
aparecen tenidos en cuenta de forma contra- contradictorias ya que fueron ellos también los
dictoria en unas y otras medidas. Sucede esto que impusieron al Partido Socialista la marcha
porque los objetivos de dichas medidas son atrás en las medidas de liberalización de hora-
muy variados y no siempre convergentes y nos comerciales, medida que se había introduct-
también porque no ha habido una definición de do en 1995 y que es una de las que más facilita
política familiar que ayude a encauzar las dife- la convivencia de las parejas jóvenes y la com-
rentes medidas de política social en favor de la patibilidad de trabajo laboral y doméstico. Los
convivencia familiar. Por ejemplo esto se ha horarios tradicionales del comercio, rígidamente
planteado con una medida tomada reciente- establecidos, son adecuados para familias en las
mente, en la Ley de Presupuestos de 1994, la que hay un reparto de roles y en las que la mujer
de asimilar el carácter de familia numerosa a se dedica enteramente al hogar.
las familias con tres hijos (anteriormente se Un rasgo a destacar en España en su políti-
consideraba familia numerosa aquella que ca social reciente ha sido la descentralización;
tuviera cuatro hijos o tres hijos en el caso de los servicios sociales han sido trasferidos en
que uno de ellos fuera minusválido). Este cam- buena medida a los gobiernos regionales y a
bio supone un aumento de gasto público, por los ayuntamientos, con lo que se ha acercado
los descuentos que se hacen a las familias en gran medida la gestión de los mismos a los
numerosas sobre todo en materia educativa y ciudadanos (Fernández Cordón 1994).
La familia. Convergencia y divergencia de los modelos... 89

En relación a las vivencias de los ciudada- «deben ser las familias más necesitadas las que
nos acerca de la familia podemos señalar dos más se beneficien». Pide que se supriman los
rasgos que se advierten en nuestra sociedad. obstáculos que se oponen a la libertad en las
Las ideas acerca de la familia son mayoritaria- decisiones acerca del número y secuencia de
mente positivas. La familia es una institución los hijos. Propone una política pluralista del
muy popular y la gente le da una importancia bienestar, llamando a la colaboración entre el
muy significativa en su vida (Alberdi 1995). sector público, el sector privado, las asociacio-
Por otra parte, cuando se pregunta acerca de nes voluntarias y la ayuda informal de los
las medidas que podrían tomarse en favor de la miembros de las familias. Hace, además, un
familia los españoles se muestran partidarios llamamiento en pro de la igualdad de hombres
de tomarlas todas. Los españoles se muestran y mujeres en cuanto a sus roles familiares ya
partidarios de introducir todo tipo de servicios que considera necesario, como medio para
sociales, seguramente porque cuando se les fomentar la natalidad, el «llevar a sus últimas
pregunta sobre ellos en abstracto sólo piensan consecuencias la igualdad entre los hombres y
en las ventajas inmediatas de los mismos sin las mujeres y la consecución de un nuevo
apenas relacionarlos con su coste fiscal. Com- modelo de relaciones entre ellos. Solo desde la
parando las consultas sobre estos temas con las igualdad efectiva, promoviendo las condicio-
realizadas en otros paises europeos podemos nes que posibiliten una sociedad compartida es
decir que los españoles parecen los más gene- posible abordar el problema de la natalidad en
rosos, mostrándose partidarios de tomar todo una sociedad moderna: compartir las responsa-
tipo de medidas que ayuden al bienestar de las bilidades familiares y compartir el trabajo para
familias: subvención por tener más hijos, ayu- así promover un nuevo marco de convivencia
das a los jóvenes que deseen poder contraer en un modelo de familia sin discriminaciones
matrimonio, ayudas para las viviendas, servi- ni repartos coactivos de responsabilidades»
cios para compatibilizar trabajo doméstico y (Congreso de los Diputados 1997).
empleo etc. (Arango y Delgado 1995). Ello no En cuanto al debate público hay dos cues-
obstante, las numerosas críticas que se han tiones que tienen relación con la familia y que
hecho de estas actitudes en el sentido de que lo han tenido una gran presencia en estos años en
que reflejan es una conciencia fiscal muy los medios de comunicación; uno ha sido el de
débil, es decir que no están acostumbrados a la igualdad entre los hombres y las mujeres,
relacionar los servicios públicos con los unido a la cuestión del trabajo y de las respon-
impuestos que han de pagar por ellos (Arango sabilidades familiares, y otro ha sido el de las
1994). El gasto social se ve como algo del parejas de hecho, el de los derechos de las
Estado que apenas se relaciona con el presu- parejas de hombre y mujer que conviven sin
puesto personal. matrimonio y las parejas de homosexuales que
En los últimos años se advierte un pequeño no pueden contraerlo.
cambio en cuanto que el Parlamento ha La igualdad de derechos y de oportunidades
comenzado a debatir cuestiones relativas a la de las mujeres ha sido una cuestión amplia-
familia. En 1994, Año Internacional de la mente debatida en la sociedad española en los
Familia, se creó en el seno del Congreso de los últimos años y, en cierta manera, es a través de
Diputados una Ponencia Parlamentaria para el este debate como se ha ido elaborando implí-
estudio de la misma y de las medidas a adop- citamente una política sobre la familia. De una
tar. Fue la primera iniciativa de este tipo que se forma similar a como ha ocurrido en Dinamar-
producía y sus trabajos estuvieron encamina- ca, este debate ha llevado a la conclusión de
dos a adoptar de forma consensuada una polí- que una de las cuestiones fundamentales de
tica familiar. En Mayo de 1997 ha presentado hoy día para la familia y su bienestar es la que
sus conclusiones y propuestas que han sido hace referencia a la forma de conciliar la vida
aprobadas en el Pleno del Congreso de los familiar y la vida laboral tanto de los hombres
Diputados. Es de señalar lo amplias y progre- como de las mujeres.
sivas que parecen las conclusiones de esta El debate acerca de las parejas de hecho ha
Comisión. Apuesta decididamente por una mezclado, innecesariamente, la cuestión de los
política redistributiva en la aplicación de hombres y mujeres que conviven de forma
medidas de apoyo a la familia señalando que estable pero sin contraer matrimonio y que rei-

POL
vindican una serie de derechos similares a los feminista sobre la familia caló públicamente
de los casados, sin contrapartida de las obliga- en la sociedad en los años setenta con sus
ciones matrimoniales, con la cuestión de las demandas de libertad, sus exigencias de legali-
parejas homosexuales a las que la ley no per- zar los anticonceptivos, de introducir el divor-
mite legalizar su unión, que presentan una cio, de despenalizar el aborto, así como sus
situación de discriminación en tanto en cuanto peticiones de igualdad de todos los hijos ante
no pueden adquirir los derechos que la ley da la ley, poniendo de relieve la estructura jerár-
a los matrimonios aun cuando ellos estarían quica de la familia y la desigualdad entre el
dispuestos a aceptar las obligaciones que el hombre y la mujer en el matrimonio. Todo ello
matrimonio conlíeva. ayudó a estigmatizar la institución familiar
como la fuente de la sujeción femenina (Esca-
rio, Alberdi y López-Accotto 1996).
De algún modo, la ideología franquista y el
Debate sobre demografía pensamiento feminista colaboraron, paradóji-
y familia camente, al desprestigio de la institución fami-
liar en nuestro país. La izquierda aceptó acriti-
camente que la familia era conservadora y no

E l debate sobre la evolución demo-


gráfica y sobre la familia ha sido
siempre muy débil en España. Los
quiso tenernada que ver con ella. En ese cami-
no encontró la colaboración del pensamiento
feminista que denunciaba la familia patriarcal y
cambios demográficos han sido muy profun- autoritaria como responsable fundamental de la
dos, sin embargo los estudios sobre ellos son opresión de las mujeres y del mantenimiento de
escasos y apenas existe una conciencia del su situación de dependencia. Cuando cambia-
problema. No parecen importantes estas cues- ron las leyes sobre el matrimonio y la familia,
tiones en la agenda política de nuestra socie- fundamentalmente a partir del mandato consti-
dad, al menos por el momento. Esta situación tucional de igualdad entre hombres y mujeres,
española adquiere su verdadera dimensión si la no se reconsideraron los ataques perpetrados a
comparamos con la sociedad francesa donde la institución de la familia y tanto la izquierda
se produce una reflexión constante sobre los como los grupos progresistas de la sociedad
cambios demográficos, sobre las políticas de española no recompusieron su discurso y opta-
la familia y sobre las relaciones entre unas y ron por eludir el tema de la familia.
otras. En los años ochenta, y a partir del triunfo
La tradición de protección a la familia se electoral del Partido Socialista, se produce la
terminó en España con la caída del régimen de situación paradójica de que los sucesivos
Franco. No es que dicho régimen protegiera gobiernos que más y más profundas reformas
verdaderamente ni a las familias ni a los indi- introducen en favor de las familias lo hacen
viduos que las formaban, pero ideológicamen- sin aludir nunca a la institución. Es casi impo-
te se pagaba un tributo teórico a «lafamilia» y sible encontrar alusiones a la familia en los
a la exaltación de sus valores más tradiciona- discursos políticos del Partido Socialista. Las
les. No existió apenas en aquellos años protec- sucesivas medidas de protección social, aten-
ción social ni defensa de las mujeres ni de los ción al desempleo, mejora de las pensiones y
menores; toda suerte de injusticias y discnmí- generalización de las mismas, creación de
naciones sociales se mantenían sólidamente pensiones no contributivas, equiparación del
unidas al concepto de familia, sin que por ello derecho de viudedad para hombres y mujeres,
se quebrara la aparente coherencia del discur- protección a la maternidad etc. se presentaron
so tradicional que identificaba familia, orden y siempre como derechos individuales sin refe-
prosperidad. rencia a la vinculación que potencialmente
Al comienzo de los años setenta la defensa tienen los individuos con un hogar familiar.
de los derechos de las mujeres chocaba con las Solo parece que existen los hogares familiares
normas familiares tradicionales y el movi- cuando se legisla el impuesto personal sobre
miento feminista atacó fuertemente la institu- la renta. Mientras tanto la familia, como insti-
ción familiar con sus reivindicaciones de liber- tución básica de convivencia, sigue existiendo
tad y de igualdad de las mujeres. El debate y evolucionando, cambia de tamaño y estruc-
La familia. Convergencia y divergencia de los modelos... 91

tura, se refuerza como lazo de unión frente a que se ha dado una enorme relevancia política
las dificultades económicas y los infortunios a su estudio e investigación.
personales, pero no aparece en el discurso de El carácter científico y el enorme desarro-
la política. llo de la investigación dedicada a estas cues-
La derecha nos hizo creer que la familia era tiones ha producido una secularización de los
suya y la izquierda aceptó este disparate sin temas familiares y ha dado una alternativa
protestar. En Europa no ha sido así, la mención liberal al oscurantismo católico que había
política a la familia tiene connotaciones positi- presidido anteriormente el debate sobre la
vas y no hay miedo a hablar de ella. Tanto los familia (Chauviére y Frotiée 1997). Los
gobiernos socialdemócratas del norte como los aspectos demográficos y económicos de la
conservadores centroeuropeos han defendido familia han tomado preeminencia sobre los
la institución. Por ejemplo, en Francia los polí- aspectos morales y religiosos de la misma y
ticos nunca han tenido reparos en defender la ello a pesar de que los principales impulsores
familia y tanto sus gobiernos conservadores de estas medidas y de estas instituciones fue-
como los socialistas han mantenido políticas ran católicos. La utilización de argumentos
familiares activas. Lo que comenzó con el siglo demográficos en la política francesa es cons-
como política natalista, por entender que era tante y sustenta las actuaciones en defensa de
necesaria una acción pública en cuestiones de unas y otras políticas.
población, ha continuado en una defensa de las Las diferencias en el tratamiento de las
unidades familiares, una serie de medidas de cuestiones familiares entre la sociedad españo-
apoyo a la natalidad y una clara y decidida pre- la y la francesa son amplias. No sólo en cuan-
sencia de la familia en los discursos de sus líde- to a las ayudas económicas destinadas a las
res políticos. (Chauviére y Frotiée 1997). En familias, sino en todo el conjunto de las insti-
Francia, desde comienzos del siglo, ha existido tuciones que se ocupan de este tema. En Fran-
un lobby familiar muy activo que ha ido consi- cia hay numerosos subsidios familiares direc-
guiendo sucesivas reformas de ayuda a la insti- tos como los ingresos durante los primeros
tución. Su primer éxito público fue la aproba- años de los hijos y las ayudas económicas para
ción de la ley de familias numerosas en 1913. la vivienda. También tienen un mayor desarro-
Su actividad se mantuvo constante y después lío las ayudas sociales de atención personal,
de la Segunda Guerra Mundial se reforzó su las residencias de jubilados, las guarderías y
influencia política. Una serie de personalida- los cuidados de enfermos y mayores. Hay tam-
des, como Adolphe Landry y Alfred Sauvy, bién un mayor desarrollo de las instituciones
que tuvieron a la vez carácter político y cientí- políticas relacionadas con la familia; Asocia-
fico, supieron combinar el apoyo decidido a las ciones y Fundaciones de carácter familiar,
políticas familiares con la puesta en marcha de confesionales y no confesionales, así como
instituciones científicas para el estudio de la instituciones públicas que se ocupan de cues-
población y la familia. La personalidad de tiones familiares. Por otra parte el desarrollo
Sauvy, economista y demógrafo, influyó deci- de las instituciones científicas de estudio e
didamente en la implantación de las dos lineas investigación sobre Población y Familia ha
fundamentales de lo que va a ser la política sido muy importante. El reconocimiento de la
francesa sobre la familia desde los años treinta: institución familiar como objeto de estudio y
por una parte se da una importancia enorme a la dedicación de fondos públicos a la investi-
la natalidad y se realizan esfuerzos sucesivos gación demográfica no tiene comparación con
para animar a la población a tener hijos, princi- la situación española, en la que los análisis
palmente por la vía de ayudas económicas y demográficos apenas reciben atención, englo-
sociales a las familias con hijos, y por otra bándose en los análisis estadísticos generales,
parte se seculariza y se tecnifica el tratamiento y donde apenas se han realizado investigacio-
político del tema. En 1945 se creó el INED, el nes que aborden directa y abiertamente el estu-
Instituto Nacional de los Estudios Demográfi- dio de la familia.
cos y en 1946 el INSEE, el Instituto de Estu- Otro contraste con España, en cuanto al tra-
dios Estadísticos. Las cuestiones de Familia y tamiento de las cuestiones familiares, es que
Población se han tratado de una forma conjun- en Francia no hay una línea muy clara de divi-
ta y han recibido una gran atención, a la vez sión en cuanto a posiciones ideológicas sobre

~RSfiDM
la familia entre los conservadores y la izquier- Dirección General de Protección Jurídica del
da. En la sociedad francesa todas las adscrip- Menor a ser Dirección General del Menor y de
ciones políticas defienden la familia y la nata- la Familia, superando con dicho cambio la
lidad; incluso encontramos dentro de la incongruencia de una administración que se
derecha francesa posiciones públicas de defen- ocupaba de los niños, de los jóvenes, de las
sa de los derechos individuales y de apoyo a mujeres y de los viejos, pero nunca los rela-
las legislaciones progresistas. El ejemplo más cionaba entre si como si entre ellos no forma-
interesante es el de Simone Veil, Ministra de ran, necesariamente, familias.
Asuntos Sociales con un gobierno conserva- Además de esta inhibición ideológica res-
dor, que ha sido una gran defensora de la liber- pecto al tema, la ausencia de datos, o la esca-
tad en cuestión de interrupción del embarazo y sez de los mismos, se ha sumado para explicar
que es a la vez la ministra que presentó la Ley esta dificultad del debate social. Apenas
de la familia que, entre otras medidas, propo- hemos podido saber qué pasaba, qué estaba
nía ofrecer un subsidio a las mujeres que ocurriendo en el interior de las familias, cuáles
teniendo dos hijos decidieran tener un tercero eran las estructuras y las relaciones internas
y dejar de trabajar para dedicarse a cuidarlo. dentro de ellas, cuáles podían ser las motiva-
En España, por el contrario, la izquierda ha ciones de los nuevos comportamientos que se
creído necesario no hablar de cuestiones fami- advertían.
liares y dejarle estos temas a la derecha, Como resultado de estas diferencias en el
hablando sólo de defensa de derechos indivi- tratamiento de las cuestiones familiares hay un
duales cuando se realizaban reformas tan nivel de interés y de atención pública a estos
importantes como la liberalización de los anti- temas muy distinto por parte de la sociedad
conceptivos, la despenalización del aborto o la francesa y la española. En Francia ha existido
legalización del divorcio, cuestiones que a la y existe un debate público sobre cuestiones
vez que favorecen una liberalización de las demográficas y familiares. La actividad de
relaciones personales transforman las formas numerosas asociaciones, la existencia de datos
de convivencia. La izquierda española tampoco abundantes y de estudios sobre comportamien-
ha sabido rentabilizar como política familiar su tos familiares, así como el posicionamiento
labor de establecimiento del Estado de Bienes- público de los partidos y de los líderes políti-
tar que ha sido, en realidad, un esfuerzo políti- cos, que no evitan estas cuestiones anima el
co fundamental de apoyo a los hogares familia- debate sobre la fecundidad, las relaciones
res. En los años de gobierno socialista es familiares, las ayudas sociales a las familias,
cuando más se ha legislado en favor de las etc., en un nivel mucho más general y profun-
familias y de su bienestar. El desarrollo del sis- do que en España. Entre nosotros el debate
tema de pensiones, la generalización de la edu- sobre la demografía, la familia y las formas de
cación obligatoria, el subsidio de desempleo, la convivencia apenas ha comenzado. La mayo-
creación de las pensiones no contributivas, la ría de los partidos políticos laicos evitan hablar
retribución y la ampliación del permiso de de la familia como si la institución no existie-
maternidad para las mujeres trabajadoras, etc. ra, prefiriendo referirse a los ciudadanos y sus
ha contribuido de una forma indudable al man- derechos, como si hubiera incompatibilidad
tenimiento del equilibrio familiar en las clases entre una cosa y otra. Esta situación ha dejado
medias y trabajadoras de nuestra sociedad. Sin en manos de los conservadores, y sobre todo
embargo, nunca se han explicado estas políti- de los grupos confesionales, la defensa teórica
cas utilizando la referencia a la vida familiar. de los intereses familiares, la defensa de una
El discurso político del Partido Socialista institución que tiene una importancia capital
sólo se ha atrevido a hablar de la familia cuan- en la vida cotidiana y en el desarrollo personal
do en 1994 las Naciones Unidas declararon el de los individuos.
Año Internacional de la Familia y pareció La inhibición de los lideres políticos respec-
necesario incorporar el tema a los asuntos de la to de las cuestiones familiares tiene una expli-
Administración Pública. Solo en vísperas de cación histórica, pero seria quizás el momento
esa celebración se transformó el nombre de de superarla, para no dejar en manos de los
una de las direcciones generales del Ministerio conservadores unos argumentos y unos valores
de Asuntos Sociales, que pasó de llamarse profundamente arraigados en nuestra sociedad
La familia. Convergencia y divergencia de los modelos... 93

y que son para una gran parte de ciudadanos CHAUVIÉRE, M. y FROTIEE, B. (1997): «De la demogra-
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