IMPORTANCIA DE LOS MINERALES Y VITAMINAS COMO

ELEMENTOS ESENCIALES DE LA VIDA ANIMAL

Son nutrientes requeridos por el organismo en muy pequeñas cantidades, pero que no por
eso dejan de ser esenciales y de vital importancia para el buen funcionamiento del mismo. Según su
naturaleza química se clasifican en minerales y vitaminas. Estos nutrientes participan en muchas
rutas metabólicas, por lo que de no haber un aporte adecuado a través de la dieta se van a ver
afectadas diversas funciones biológicas.

Un mineral es un elemento inorgánico que, en los tejidos animales y en los alimentos se

encuentran al menos 45 de ellos en cantidades y concentraciones muy variables.

De estos 45 elementos, 22 han demostrado ser esenciales mediante estudios y pruebas

realizados en las dietas de los distintos animales, las cuales se basan en suministrarlos todos y omitir
el mineral en estudio y así determinar si su ausencia causa algún efecto en el animal.

Se han clasificado por su cantidad en los organismos:

• (>70mg / Kg P.V) Macro – minerales: Ca, P, Mg, Na, K, Cl, S.

• (<70mg / Kg P.V) Micro – minerales o Trazas: Cu, Co, Mn, F, Fe, Se, Zn, Mo, I, Cr, As, Sn, V,
Ni, Si.

Poseen tres funciones generales:

1. El Ca y P – principales componentes estructurales de los huesos y dientes – proporcionan

rigidez y dureza; el Mg, F y Si presentes en los huesos y dientes, también colaboran con la
estabilidad mecánica del cuerpo.
2. Solo pequeñas fracciones de Ca, Mg, y P, y la mayor parte del Na, K, Cl se encuentran como
electrolitos en los líquidos orgánicos y en los tejidos blandos. Los electrolitos presentes en
líquidos como la sangre o el líquido cefalorraquídeo realizan importantes funciones en el
mantenimiento del equilibrio acido – base y la presión osmótica; regulan la permeabilidad
de la membrana y ejercen efectos característicos sobre la excitabilidad de los músculos y
nervios. Las sales de la saliva, jugos gástricos e intestinales y liquido ruminal, proporcionan
al tracto digestivo el medio adecuado para la actuación de las enzimas y el crecimiento de
los microorganismos.
3. Los elementos traza esenciales son componentes integrales de ciertas enzimas y otros
compuestos biológicamente importantes, como el hierro en la hemoglobina, el cobalto en la
vitamina B12 y el iodo en la hormona tiroxina, asimismo, los elementos trazas funcionan como
activadores enzimáticos.

El contenido mineral del cuerpo y sus órganos tiene muy pocas variaciones en los animales
adultos de especies mamíferas. El mantenimiento de las concentraciones de minerales en el medio
interno a niveles constantes se le conoce como homeostasis.

Los animales domésticos obtienen la mayoría de estos minerales mediante el consumo de

concentrados o forrajes. Otra fuente son los suplementos minerales de origen animal (harina de
huesos), de origen geológico (fosfatos de calcio, cloruro sódico), mediante BMN. El agua de bebida
es otra forma de mediante la cual los animales obtienen minerales, la contaminación con tierra en
ella puede considerarse como una fuente adicional para los animales en pastoreo. El contenido
mineral en las plantas es muy variante, este depende de las condiciones agrologicas en las que
crecen, por ello se recomienda realizar mantenimientos a los predios (abonado).

Los minerales se absorben principalmente como iones. Los principales lugares de absorción
hasta la circulación sanguínea con el intestino delgado y la porción anterior del intestino grueso. En
los rumiantes cierta absorción se realiza en el rumen y las grandes cantidades de minerales que
llegan al tracto digestivo con los jugos gástricos, se reabsorben con los procedentes directamente
de los alimentos.

El modo de excreción de los minerales por las heces o la orina varia con la especie animal y
la composición de la ración: Los rumiantes tienden a excretar el Ca y P por las heces, los
monogástricos excretan elementos principalmente por la orina.

Algunos elementos como el cobalto a los rumiantes y el hierro en toda clase de animales
domésticos, son esenciales, pero la ingestión de estos por encima de ciertos niveles produce
síntomas de intoxicación. En caso de ingestión prolongada de raciones deficientes y desequilibradas
determinan cambios en la concentración en los tejidos animales, por debajo o por encima de los
límites permisibles. En ese punto las funciones fisiológicas pueden verse afectadas negativamente.
Los trastornos nutricionales además de síntomas externos, también conllevan a enfermedades
subclínicas: Retrasos del crecimiento y desarrollo, mala utilización de los alimentos, problemas de
fertilidad y productividad, etc.

Además de las proteínas, grasas, carbohidratos, minerales y agua. Las vitaminas son
compuestos orgánicos necesarios para el crecimiento normal y el sostén de la vida de los animales,
son de función catalítica, son efectivas en pequeñas cantidades, no suministran energía y no se
utilizan como unidades estructurales en el organismo, pero son imprescindibles para la
transferencia de energía y en general para la regulación del metabolismo.

Están divididas por su solubilidad:

• Hidrosolubles: B, C.
• Liposolubles: A, D, E, K.

Deben proporcionarse a partir de fuentes exógenas, principalmente con la ración, algunas

proceden de la síntesis por microorganismos que se encuentran en el aparato digestivo, como es el
caso de los rumiantes adultos que sintetizan vitamina K y las del grupo B en el rumen en cantidades
suficientes para satisfacer sus necesidades.

La mayoría de los animales no poseen la capacidad de sintetizar vitaminas, pero la mayoría

de los vegetales y microorganismos si pueden sintetizar vitaminas, aunque hay microorganismos
hospedantes que compiten con el hospedador por ellas.

Las vitaminas son de vital importancia ya que participan en reacciones metabólicas

especificas en el interior de las células, entonces su omisión de la ración traerá como consecuencia
la no realización de la reacción bioquímica y da lugar a la aparición de los síntomas de la
avitaminosis.
 Las vitaminas liposolubles realizan funciones específicas e independientes: la vitamina A es
necesaria para el mantenimiento de la visión, la vitamina D para la utilización del calcio en el
organismo y la vitamina K forma parte del sistema encargado de la coagulación de la sangre.
Además, estas vitaminas participan en alguna fase de la síntesis de ciertas proteínas que tienen
importantes funciones biológicas. Las vitaminas C y E tienen acciones más generales evitando la
oxidación de sustancias biológicas sensibles que se encuentran en las células.

Los tejidos que contienen grasas (hígado, adiposo) pueden almacenar vitaminas
liposolubles, que sirven al organismo como aporte durante los periodos de depleción. Las vitaminas
hidrosolubles, por el contrario, no se acumulan en el organismo en cantidades significativas, es por
ello que deben suministrarse frecuentemente para evitar las deficiencias.

MALA
INGESTION

PERDIDA DEL
DEFICIENCIA
APETITO

E.
E. CLINICA
SUBCLINICA
CLICLO DE PROBLEMAS ASOCIADOS A LA PRODUCCION