EDUCAR HACIENDO UNA PEDAGOGIA DIDACTICA

Y DEL EJEMPLO

Cuando comenzamos a hablar o a pronunciar nuestras primeras palabras lo hacemos por

referencia de nuestros padres; ellos, en medio de su cariño y ternura, lo que están haciendo es estimular
de forma lúdica nuestros primeros pasos en el largo camino del aprendizaje. Palabras básicas que de
uno u otra forma van construyendo una realidad que se fundamentará más adelante con experiencias
sonidos, imágenes, olores y sentimientos. Cuando este proceso comienza, el ser humano inicia una
escala de construcción personal, creando cognoscitivamente un comportamiento que va de acuerdo a
su entorno familiar e intelectual. Podemos decir que el ejemplo y la imagen son nuestros primeros
maestros de la realidad inicial en nuestras vidas.

Este periplo, largo en muchos aspectos, es alimentado por toda esa información que se presenta
en los extremos de este camino, tortuoso y difícil, que de acuerdo a su habilidad y observación, se
sorteara de manera inteligente o instintiva. Cada pedazo de información entrara a en la mente en
formación, sin ningún prejuicio o dogma, ya que en estos inicios, la recepción se convierte más en una
pesca desmesurada que una selección drástica. Para esto último, es importante el proceso educativo. En
los primeros años, nuestra mente, está sujeta a un constante devenir de conocimiento básico que por
normas históricas y políticas se deben tener en cuenta para un desarrollo cognitivo temprano. En esta
etapa inicial los procesos de enseñanza están destinados a proporcionar, de forma ágil y práctica, la
información que se está mostrando y que esta misma, se mantenga en el consiente de la persona en
formación. Cabe anotar que los elementos externos de enseñanza, son válidos y necesarios para este
proceso inicial; estos elementos, que pueden ser naturales o artificiales, serán los facilitadores y
detonantes para la captura y procesamiento de información en una mente temprana. Los mecanismos
de utilización en la muestra de información, serán de vital importancia para el complemento de estas
herramientas o sea no vale tener la herramienta sino como utilizarla dentro de un contexto de enseñanza.
Y en este punto del proceso, entra formar parte esencial el docente. Este elemento de primordial
necesidad para la formación mental y intelectual del individuo, le mostrara a este, las maneras más
fáciles de entender, asimilar y procesar los bloques informativos mostrados en la senda de la formación
cognoscitiva. Es en esta etapa, en donde el maestro, figura central en el espacio académico, toma
estrategias mentales y estructuras teóricas verídicas, que con elementos dinámicos, iniciara la
acomodación del conocimiento nuevo en la mente del individuo. El docente simplemente colocara el
conocimiento nuevo en un cerebro ávido de información.

Esta dinamización de la información hará más efectiva la llegada de elementos cognoscitivos en el

estudiante, éste comenzara a asimilar dichos enfoques de manera más rápida y precisa, ya que las
formas lúdicas y activas hacen que se forme una relación memoria y movimiento o experiencia,
haciendo que la aprensión del conocimiento nuevo sea más fácil y rápido para el individuo y más
cómoda y con mayores resultados y satisfactorias experiencias para el docente. Es importante aclarar
que para estas estrategias metodológicas es imprescindible tener a un lado, de parte del docente, los
procesos teóricos que rodean estas estrategias, conllevando al mismo maestro, alimentar su
metodología instructiva y poder , de manera más equilibrada, formar desde la parte más temprana hasta
las más madura individuos con fundamentos intelectuales definidos y procesados con un único fin de
utilizar esos bloques, que tantos hemos hablado, en ladrillos que cimente de manera clara y activa la
personalidad cognoscitiva del ser humano del presente y el ser humano social del futuro.

OSCAR AUGUSTO PALMA BARRERO

ESPECIALIZACION EN PEDAGOGIA