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Iglesia Cristiana Berea de Fuerteventura


C/ Juan de Austria, 15
35600 PUERTO DEL ROSARIO
Fuerteventura

Comentario de 2ª Corintios
Serie Discipulado

Pastores: Nicolás García


Andrés Medina
2

2Corintios

Comentario del Pr. Nicolás García a la segunda epístola del


apóstol Pablo a los corintios.

Todas las citas son de la Reina Valera de 1960 a no ser que se


diga otra cosa.

Al estudiar la primera epístola de Pablo a los corintios, ya


estudiamos cómo era la ciudad de Corinto en tiempos del apóstol.
¿Recuerdan? Una metrópolis populosa y próspera.

¿Cómo era la iglesia de Corinto? Era un fiel reflejo de la ciudad.


En ella convivía una gran cantidad y variedad de gentes.

¿Favorecía eso la convivencia? No, sino que provocaba no pocos


problemas.

Haciendo un resumen, diremos que Pablo llegó a Corinto en la


primavera del 50 y permaneció allí durante 18 meses.

Durante ese tiempo se dedicó a predicar el evangelio en la


sinagoga local y, más tarde, en casa de Ticio Justo, Hechos 18.4,
7. Fue aquí donde fundó la primera iglesia cristiana del sur de
Grecia.
3

Cuando Timoteo y Silas vinieron de Macedonia y los cristianos


de Éfeso enviaron a Apolos a Corinto, Pablo dejó la congregación
en manos de ellos y se marchó a Éfeso.

Aun así, él seguía sintiéndose responsable de los corintios,


1Corintios 4.15. Razón por la que procuraba mantenerse
informado sobre la marcha de la Iglesia, aunque fuera por medio
de otras personas o cartas.

Ya estudiamos los problemas que tuvo que tratar en su anterior


carta, para aclarar las dudas y los problemas de orden de los
corintios en diversos temas.

¿Recuerdan algunos de los problemas que había en Corinto y que


Pablo trató en su anterior epístola?

Problemas de divisiones internas, falta de pureza sexual, falsas


doctrinas, acusaciones contra el apóstol, etc., etc. etc.

Después de recibir la carta de Pablo, ¿Qué piensan, se


solucionarían los problemas? No del todo, sino que algunos
siguieron coleteando.

Cuando la situación empeoró, Pablo dejó Éfeso y se fue a


Corinto. Ya veremos que esta visita de Pablo no fue agradable
para el apóstol, sino que le produjo una gran tristeza.

Intentó establecer responsables en la Iglesia, pero no fue


obedecido. Por lo que Pablo se volvió a marchar a Éfeso desde
donde escribió esta carta.

Esta epístola parece haber sido escrita por trozos. Cuando acababa
de terminar el capítulo siete, Pablo se encontró con Tito quien se
había quedado en Corinto intentando arreglar el desaguisado, y
luego fue a ver al apóstol, y le informó de algunas buenas
noticias, que le causaron una gran satisfacción al apóstol.
4

Pero aún tenía dos asuntos que tratar: La ofrenda y la defensa de


su apostolado que seguía soportando oposición.

Al respecto de la ofrenda, en 2Corintios 8.10 parece que habían


pasado varios meses desde que comenzaron a recoger la ofrenda
que Pablo les pidió en 1Corintios 16.1-4.

¿Qué importancia tiene esto? Nos da una orientación sobre la


fecha en que se escribió esta carta. Aunque algunos piensan que
fue escrita bastante tiempo después, hacia el año 56.

Esta segunda carta, a pesar de lo emocional, es más teológica que


la anterior. Aquí tratará sobre el nuevo pacto, las moradas
terrestre y la celestial, el ministerio de la reconciliación, etc.

Pero sobre todo, tratará sobre las motivaciones de su ministerio.

Muchos predicadores famosos escriben libros sobre las claves que


le llevaron al éxito. ¿Quién ha sido el misionero de mayor éxito
en toda la historia de la Iglesia? ¿Podrá alguno de ellos
compararse al apóstol Pablo? ¿Quién extendió el evangelio más
que él que lo extendió por toda Europa?

Podríamos decir que esta carta es autobiográfica, pues, en ella


expone las claves de su propio ministerio. Vamos a ver cómo
expone sus actitudes en cuanto al servicio cristiano y sus
consecuencias.

Si alguno quiere tener un ministerio de éxito debe estudiar esta


carta y seguir las claves que encontramos en ella. Lecciones
prácticas acerca del servicio cristiano.

Ahora bien, la mayoría no son, ni nunca serán, misioneros,


¿Significa eso que esta carta no es para ellos? De ninguna manera.
Recuerden que todos somos, de algún modo, siervos de
Jesucristo.
5

Los principios que encontramos aquí son aplicables a todos los


ministerios y no sólo a la obra misionera.

¿En qué modo sirves a Dios? ¿Eres ujier? ¿Maestra de escuela


dominical? ¿Perteneces al grupo de alabanza? ¿Trabajas como
voluntario en la obra social? Sea cual sea el servicio que prestas a
Dios y a tus semejantes, puedes aplicar los principios que
aprenderás en esta epístola.

Comencemos, pues, a estudiar la carta misma. Leamos los


primeros versos.

1-2. Saludos. El principio de una carta griega casi siempre


comenzaba con la identificación del autor y un saludo cordial.

¿Qué sorprende de este saludo? Que Pablo no sólo se identifica


como persona, sino también como apóstol de Jesucristo.

¿Por qué lo hace? Porque sabía que su ministerio seguía siendo


atacado desde dentro de la propia congregación por algunos
miembros de la misma.

Así que, ya desde el principio estaba enfrentando uno de los


problemas, al que va a dedicar mayor parte de su escrito. ¿A qué
problema me refiero?

Pablo nos lo aclara en 2Corintios 11.13 Porque éstos son falsos


apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles
de Cristo.

¿Qué significa esto? Que en la iglesia se habían introducido


algunos falsos apóstoles que acusaban a Pablo de sacar provecho
de la Iglesia. Cuando en realidad eran ellos quienes lo hacían.
Pero de eso hablaremos más adelante.

No obstante, es habitual que los falsos maestros, pastores o


profetas, acusen a los siervos de Dios, justamente de sus propios
pecados.
6

Dado que no pueden rebatir bíblicamente la verdad, la única


forma en que pueden prosperar los falsos pastores es arrojando
dudas, suciedad sobre el testimonio de los siervos de Dios.

Esto es desgraciadamente es demasiado habitual. No se pueden


imaginar cuánto. Yo lo vivo a diario en las redes sociales.

El apóstol comienza su carta declarando explícitamente que él es


apóstol de Jesucristo por la voluntad de Dios.

Quiere que sus lectores comprendan que él es, sin duda alguna, un
apóstol nombrado y enviado por Jesucristo mismo.

En la mayoría de sus epístolas, y yo diría que a lo largo de todo su


ministerio, tuvo que reivindicar su apostolado a excepción de las
escritas a los Filipenses, Tesalonicenses y Filemón.

Algunos niegan el apostolado de Pablo porque no cumple con los


dos requisitos básicos que el apóstol Pedro señaló para serlo: ser
discípulo durante el ministerio de Jesús y ser testigo de su
resurrección, Hechos 1.21-22.

¿Están de acuerdo?

Es importante tener en cuenta ¿Quién estableció tales requisitos?


¿Los estableció el Señor Jesús? No. Fueron establecidos por el
propio apóstol Pedro, no por el Señor Jesús.

¿Quién había escogido a los doce apóstoles? ¿Pedro o Jesús? Sin


duda, Jesús. ¿Hay algún pasaje en el que el Señor Jesús encargara
al apóstol Pedro que eligieran un sustituto para Judas? No. No
existe.

¿Quién escogió al apóstol Pablo? Jesús mismo.

Hechos 9.1-19 Jesús, llamó a Pablo aunque no reunía los


requisitos que Pedro había establecido.
7

¿Cuántos apóstoles debía haber? Doce. Con Matías, ¿No estaban


ya el grupo de los doce completos? Sí y no. Sí desde la
perspectiva de Pedro y los demás apóstoles.

No desde la perspectiva de Cristo. De lo contrario no habría


llamado a Pablo al apostolado. Por tanto, si se equivocó alguien,
¿Quién fue? Sin duda, el apóstol Pedro.

Así que, Pablo es apóstol de Jesucristo, como él afirma, por la


voluntad de Dios.

Scott J. Hafemann, «The Comfort and Power of the Gospel: The


Argument of II Corinthians 1–3», RevExp 86 (1989): 326.
Afirma: Mientras que otras personas eran comisionadas por la
iglesia para servir como apóstoles, Pablo lo fue por Jesús, por la
voluntad de Dios.

Jesús lo llamó para ser apóstol de los gentiles. Pablo da


testimonio de esto en sus epístolas 1 Timoteo 2.7; 2Timoteo 1.11.

Y el hermano Timoteo. Podemos deducir que Timoteo ya había


regresado de su visita a los corintios, y que ahora estaba con
Pablo cuando escribía la carta. Pues, Pablo la dirige en nombre de
ambos.

Pablo manifiesta un gran aprecio por su colaborador Timoteo, a


quien coloca en el primer versículo. ¿Significa esto que la carta la
escribieron los dos y por tanto tiene dos autores? De ningún
modo, lo que Pablo pretendía era robustecer la relación de los
destinatarios de la epístola con su colaborador, 1Tesalonincenses
3.2.

A la iglesia de Dios que está en Corinto. Desde el punto de vista


del apóstol, la iglesia local es la Iglesia de Dios.
8

Tanto si se reunían en casas privadas, como si lo hacían al aire


libre, los corintios debían considerarse a sí mismos como la
iglesia de Dios localmente ubicada en Corinto.

Eran parte de la iglesia universal, y Pablo continuamente se lo


recordaba, véase por ejemplo 1Corintios 4.17; 7.17; 14.33;
2Corintios 8.18; 11.28. En todos estos pasajes Pablo se refiere a
todas las iglesias.

En otras palabras, Pablo se dirige a una iglesia local, pero también


a la iglesia universal de Dios, que está representada en Corinto,
así como por una multitud de iglesias locales repartidas por el
mundo.

Con todos los santos que están en toda Acaya. Comunica este
mensaje no sólo a la iglesia de Corinto, sino también a todos los
hermanos en la región de Acaya, a quienes desea gracia y paz.

Junto a los cristianos de Acaya la carta puede extenderse a los


santos de todos los tiempos.

La palabra santos aquí no se refiere a gente que haya alcanzado la


perfección, sino a gente que está consagrada a Dios.

En el año 27 a. C., los romanos habían dividido Grecia en dos


provincias: Acaya, en el sur, y Macedonia, en el norte. La capital
de la primera era Corinto, que era la sede del procónsul, Hechos
18.12.

2. Gracia y paz a vosotros, de Dios nuestro Padre y del Señor


Jesucristo. Éste era el saludo habitual de Pablo, y de otros autores
del Nuevo Testamento, a los cristianos primitivos que recibían sus
cartas. Romanos 1.7; 2Corintios 1.2; Gálatas 1.3; Efesios 1.2;
Filipenses 1.2; 2Tesalonicenses 1.2; Filipenses 3; y con
variaciones, Colosenses 1.2; 1Tesalonicenses 1.1; Tito 1.4.
9

La primera palabra: gracia, es traducida del término griego charis


que significa bondad, misericordia, bendición, regalo, don, favor,
gracia.

Este término era usado de forma habitual en los saludos que en


ocasiones se traduce por: salud. Hechos 15.23; 23.26; Santiago
1.1. Sería algo así como decir: espero que estés bien.

Un ejemplo de este saludo lo encontramos en 3Juan 2 cuyo


sentido los falsos predicadores de la prosperidad han torcido,
mintiendo.

Pablo relaciona la gracia con la bendición de Dios.

A este término, Pablo le añade: paz que es la traducción del


saludo hebreo: Shalom. Este término tiene un sentido más
profundo.

La palabra: paz, es también traducida del término griego eiréné


que significa bienestar, tranquilidad, paz,

Shalom, en cambio, es el deseo de que todo te vaya bien, y estés


feliz y bendecido.

Esto no tiene tanto que ver con la ausencia de problemas,


aflicción o conflictos, como con la presencia de Dios. Ambos
términos son relacionados por Pablo con Dios, el origen del que
procede todo don y bienestar.

La expresión Dios nuestro Padre no era habitual en aquella época,


sino que se trata de un concepto netamente cristiano. Ninguna
otra religión concibió a Dios de ese modo tan elevado e íntimo.

Por poner un ejemplo, el Islam tiene 99 nombres para su dios,


pero ninguno de ellos es padre.

3-7. Pablo se dispone a hablar de sus experiencias y aflicciones en


el ministerio, pero no sin antes alabar a Dios por su consolación.
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Para después desarrollar la idea del consuelo, recíproco. Es decir,


el consolar con el consuelo que recibimos en Cristo y que
debemos compartir.

Hay pocas cosas tan necesarias como el consuelo en la vida.


También en la vida cristiana. Especialmente en aquella
congregación griega en la que tantas aflicciones había.

3. Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo. Esta


frase tomada de la liturgia de la sinagoga cuando la gente alababa
al Dios de Israel, es una expresión que se encuentra en muchas de
las epístolas del NT.

Fue cristianizada como fórmula de alabanza y llegó a formar parte


de la doxología o adoración de las iglesias primitivas.

Esta frase de Pablo se refiere al Dios de nuestro Señor Jesucristo.


¿Disminuye Pablo la divinidad de Jesús al afirmar esto? ¿Está
enseñando Pablo con estas palabras que Jesucristo no es Dios? De
ningún modo. Aunque algunos lo han querido ver así.

¿Qué pasajes podríamos citar para demostrar que eso no es así?


Es decir, que Pablo no está enseñando contra la divinidad de
Cristo.

En realidad, Pablo es un defensor a ultranza de la divinidad del


Hijo de Dios. Que se demuestra en la Biblia magistralmente en
multitud de pasajes: ¿Por ejemplo?

Juan 1.1-2; 5.18-19.


Romanos 9.5.
Filipenses 2.5-11.
1Juan 5.20.

Al respecto de la siguiente frase: Padre de misericordias, después


de la Segunda Guerra Mundial, se encontraron las siguientes
palabras escritas en la pared de una celda de una prisión y que
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expresaban dicha confianza, decían: “Creo en el sol aun cuando


no brilla, creo en Dios aun cuando permanece en silencio, creo
en el amor, aun cuando no es evidente”.

Desde luego, lo que sí es evidente es que toda misericordia viene


del amor paternal de Dios. ¿Aun cuando las experiencias de la
vida se vuelven agrias? Sí, aún entonces, podemos confiar en
dichas misericordias.

...y Dios de toda consolación. Estos versículos hablan de dos


conceptos generales: los sufrimientos y la consolación, los cuales
son las dos caras de una misma moneda.

El hijo de Dios siempre puede esperar el consuelo en medio de la


aflicción. Pero, no existe consuelo sin aflicción.

Consideremos algunas verdades acerca de las aflicciones. ¿Qué


son las aflicciones? ¿Cómo entenderlas? ¿Con qué actitud las
enfrentamos? Y lo más importante, Y lo más importante, ¿Con
qué actitud debemos enfrentarlas?

Aflicciones es la traducción a la palabra griega pathéma que da la


idea de un sufrimiento físico que apremia al hombre.

Un erudito del griego cuenta sobre una antigua tortura que


consistía en poner pesas sobre el pecho del acusado. Si el preso
no confesaba, se le aumentaban las pesas, procedimiento que
eventualmente conducía a la muerte.

Esto es una ilustración clara de lo que es la aflicción, en un


sentido metafórico, representa lo que presiona o agobia el espíritu
humano.

¿De dónde vienen las aflicciones? En cuanto a las tribulaciones,


de la que se habla en este pasaje, la Biblia enseña que son fruto
del mundo caído en que vivimos.
12

Jesús mismo lo enseñó sobre esto en Juan 16.33 ¿Cuántos lo


recuerdan? Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz.
En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al
mundo.

Pablo le llama las aflicciones del tiempo presente. Romanos 8.18.

¿A qué aflicciones se está refiriendo Pablo? Por ejemplo a:

Falsos hermanos. Gálatas 2.4 ...y esto a pesar de los falsos


hermanos introducidos a escondidas, que entraban para espiar
nuestra libertad que tenemos en Cristo Jesús, para reducirnos a
esclavitud; También Filipenses 1.16.

Sin duda, el mayor generador de aflicciones es el diablo. El libro


de Job lo deja bien claro. Satanás fue el autor de todas sus
aflicciones.

Sin embargo, me atrevería a decir que la mayoría de nuestras


aflicciones tienen su origen en nosotros mismos. En nuestras
propias obras, sabiduría, estudio, trabajo, riquezas, seguidores,
idolatría, etc., es decir, en las obras de nuestra propia carne.

Como dice el Salmo 25.18 nuestro pecado. Jesús habló de esto al


decir: Porque del corazón salen los malos pensamientos, los
homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos
testimonios, las blasfemias. Mateo 15.19.

Ahora bien, los cristianos también sufriremos por causa de la fe y


del evangelio. Es de lo que Pablo habla aquí: Las aflicciones de
Cristo. 1.5.

¿A qué aflicciones se refiere? A las relacionadas con Cristo.

Pablo anima a Timoteo a participar de las aflicciones por una


buena causa. ¿Qué causa? 2Timoteo 1.8 Por tanto, no te
avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso
13

suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el


poder de Dios.

¿Por qué sufren los siervos fieles? La adversidad viene al que


sirve a Dios, precisamente porque cumple fielmente con su deber.

¿No es una paradoja? Quienes sirven a Dios ¿No deberían estar


exentos de padecimientos? No es esa la voluntad de Dios. Pues,
por medio de los padecimientos Dios trata con nuestras vidas.
¿Para qué? Para perfeccionarnos.

4. El cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones. Pablo


alude a su propio testimonio, a sus tribulaciones y consuelos. A
sus propias experiencias en aquella provincia romana.

En los versos siguientes lo comprobaremos. Por eso sabemos que


Pablo habla en primer lugar de su propia persona, pero también
identificándose con las aflicciones de los corintios.

Para que... ¿Cuál es el propósito de las aflicciones? Cuántas


veces el creyente se pregunta la razón de su sufrimiento y no
encuentra una respuesta satisfactoria, como en el caso de Job en el
AT.

Si captamos la idea de Pablo, de que sufrimos y recibimos la


consolación de Dios, para que podamos consolar a los que están
en tribulación; de esta manera hallamos una respuesta que nos
alienta.

Un pasaje interesante relacionado con esto es: Romanos 15.4-6


Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra
enseñanza se escribieron, a fin de que por la paciencia y la
consolación de las Escrituras, tengamos esperanza. 5Pero el Dios
de la paciencia y de la consolación os dé entre vosotros un mismo
sentir según Cristo Jesús, 6para que unánimes, a una voz,
glorifiquéis al Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo.
14

Percibimos que Dios tiene el propósito de prepararnos para serle


útil en un ministerio de consolación. Los quebrantados de corazón
pueden ser más útiles cuando se trata de sanar a otros igualmente
quebrantados de corazón.

La pregunta que debemos hacernos en medio de la prueba no es


porqué, sino para qué. Pregunta que queda respondida aquí por el
apóstol de los gentiles.

¿Cuál es esa respuesta? Para que podamos consolar a otros con la


consolación con que fuimos consolados.

Con esta frase introduce Pablo el tema de la consolación.

4. Nos consuela en todas nuestras tribulaciones. No hay


escapatoria. Todos, incluso los obreros cristianos, pasaremos por
pruebas y tribulaciones.

¿Qué ocurrirá entonces? Que el Señor estará a nuestro lado para


consolarnos. De hecho, al Espíritu Santo de Dios no ha sido dado
con ese fin. Pues, se le llama en la Biblia El Consolador. El que
nos consuela. Juan 14.16, 26; 15.26; 16.7.

También somos consolados por medio de la Palabra de Dios.


Salmo 119.49-50 Acuérdate de la palabra dada a tu siervo, En la
cual me has hecho esperar. Ella es mi consuelo en mi aflicción,
Porque tu dicho me ha vivificado.

No importa cuán grande o profunda sea nuestra tribulación, si


confiamos en Dios, seremos objeto de la consolación divina.

El que recibe consuelo tiene la responsabilidad de compartirlo y


Pablo se sentía unido con los corintios en sus aflicciones, por eso,
sabía darles consuelo.

A los que están en cualquier tribulación. Pablo sabe que sus


hermanos corintios pasarían por diversas aflicciones, y que en
todas ellas él podría consolarles. ¿Pero cómo?
15

Por medio de la consolación con que nosotros somos consolados


por Dios.

Todo cuanto recibimos de Dios estamos obligados a compartirlo


con nuestros semejantes. De modo que el consuelo que recibimos,
debemos extenderlo a nuestros hermanos que también padecen.

Así que aquí se trata de la responsabilidad colectiva que tenemos


para con nuestros semejantes.

El pronombre nosotros, es esencial cuando hablamos de aflicción


y consolación. El que no ha experimentado la aflicción, la
enfermedad, el abuso o cualquier otra dificultad no está
capacitado para dar consolación.

Cuando uno puede decir nosotros los prisioneros como decía


Bonhoeffer, o nosotros los leprosos como decía un doctor que
contrajo la lepra mientras ministraba a los leprosos, entonces los
demás estarán dispuestos a recibir lo que ofrecemos.

Pablo aquí enfatiza que el recibir consolación nos convierte en un


conducto que canaliza el mismo consuelo con que Dios nos ha
consolado, 4.

El apóstol había aprendido que sus propias tribulaciones no sólo


eran suyas, en cierto modo, también eran la de sus hermanos.
Pues, sus aflicciones eran una escuela mediante la cual aprendía a
consolar a otros.

5. Abundan. Por si alguien todavía no lo tuviera claro, Pablo


repite el Salmo 34.19 Muchas son las aflicciones del justo,
gracias a Dios, el pasaje no se quedaba ahí, sino que continúa:
Pero de todas ellas le librará Jehová.

Así, pues, Dios no sólo nos consuela en las desgracias, sino que
también nos da la capacidad de consolar a otros en las suyas.
16

Las aflicciones de Cristo. No son las que padeció el Señor durante


su ministerio y pasión, para salvarnos. Sino más bien, las que
sufrimos en el transcurso de nuestro servicio a Dios.

No son pocos los problemas. Según el texto, abundan las pruebas.


Seguir a Jesús, inevitablemente provoca, de una forma u otra,
sufrimiento por su causa.

Jesús mismo, ¿No nos avisó de antemano que así sería? Como
está escrito: Juan 15.18-21 Si el mundo os aborrece, sabed que a
mí me ha aborrecido antes que a vosotros. 19Si fuerais del mundo,
el mundo amaría lo suyo; pero porque no sois del mundo, antes
yo os elegí del mundo, por eso el mundo os aborrece. 20Acordaos
de la palabra que yo os he dicho: El siervo no es mayor que su
señor. Si a mí me han perseguido, también a vosotros os
perseguirán; si han guardado mi palabra, también guardarán la
vuestra. 21Mas todo esto os harán por causa de mi nombre,
porque no conocen al que me ha enviado.

Esta es una parte del evangelio que la iglesia apóstata oculta


actualmente, en esta sociedad egoísta que huye de toda
responsabilidad y que sólo busca su propio bienestar personal, sin
importarle para nada la verdad de Dios.

Sin embargo, la Escritura está llena de pasajes que no sólo no


esconden, sino que publican esta verdad. Hechos 14.21-22 Y
después de anunciar el evangelio a aquella ciudad y de hacer
muchos discípulos, volvieron a Listra, a Iconio y a Antioquía,
22
confirmando los ánimos de los discípulos, exhortándoles a que
permaneciesen en la fe, y diciéndoles: Es necesario que a través
de muchas tribulaciones entremos en el reino de Dios.

En varias ocasiones el apóstol Pablo relatará en esta misma


epístola sus propia tribulaciones por causa de la fe en Jesucristo.
1.8-9; 4.7-11; 11.23-29; Y también en Gálatas 6.17; Filipenses
3.10; Colosenses 1.24.
17

Sin duda seguir a Cristo provoca, de una u otra forma, sufrimiento


por su causa. ¿Hablaba Pablo en teoría, o sabía bien de lo que
hablaba? Sin lugar a dudas Pablo había sido experimentado en
quebrantos.

Así abunda también por el mismo Cristo nuestra consolación.


Aquí hay un contraste entre las tribulaciones y la consolación. No
sólo tendremos aflicción, sino que también recibiremos el
consuelo que necesitemos.

Respecto a la consolación no hay duda de que viene de Dios. Él


es el Padre de misericordias y Dios de toda consolación, 3.

En este pasaje, Pablo apunta a que esta consolación nos llega por
medio de Cristo. Es decir, gracias a Él.

Algunos piensan en la consolación como si fuera una droga para


disminuir el dolor, pero el sentido que se le da en el NT es más
bien un sentido de fortalecer a la persona.

No se trata de suavizar la herida, la consolación nos fortalece y


nos ayuda a aguantar el dolor y sobresalir de la aflicción.

La palabra consolación y sus derivados aparecen diez veces en


estos cinco versículos.

Pablo deja claro que así como abundan las aflicciones también lo
hacen las consolaciones por el mismo Cristo Jesús.

Él desea que los creyentes compartan esta abundante consolación


con aquellos otros que también sufren por Cristo.

6. Si somos atribulados. Aquí el apóstol ¿Está constatando una


probabilidad o una realidad? Sin duda es una realidad que
sufrimos tribulaciones. Pues, el mismo contexto inmediato y
remoto hace referencia a sus propias aflicciones en Cristo.
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Hay pasajes que, sacados de sus contextos pueden aparentar que


en la vida cristiana no debe haber padecimientos. Por esa razón
debemos estudiar detenidamente la Escritura para llegar a
entenderla en profundidad.

Veamos un ejemplo: 1Pedro 3.13 ¿Y quién es aquel que os podrá


hacer daño, si vosotros seguís el bien?

¿Dice Pedro aquí que los cristianos si hacemos el bien no


sufriremos aflicciones? De ningún modo. El contexto mismo, nos
enseña que podemos padecer haciendo el bien.

Entonces, ¿Qué está diciendo el apóstol? Que si Dios no lo


permite nadie nos podría dañar. Es decir, que nuestras vidas no
dependen de los demás, sino de Dios.

En el contexto, Pedro explica que hay una enorme diferencia


entre padecer por nuestros pecados, a padecer haciendo la
voluntad de Dios. ¿Creen que es lo mismo? Desde luego que no.

1Pedro 3.17 Porque mejor es que padezcáis haciendo el bien, si


la voluntad de Dios así lo quiere, que haciendo el mal.

Volviendo al pasaje de Pablo en 2Corintios 1.6 sigue diciendo:


...es para vuestra consolación y salvación.

Las dificultades que el apóstol padecía eran para beneficio del


pueblo de Dios, como dice más adelante en el 4.15 Porque todas
estas cosas padecemos por amor a vosotros, para que abundando
la gracia por medio de muchos, la acción de gracias sobreabunde
para gloria de Dios.

Él se había propuesto serles ejemplo en todo. También en su


disposición para padecer por causa de Cristo.

Mucha gente cuando padece pregunta ¿Por qué?, lo importante no


es el porqué, sino el para qué. Pablo lo tenía claro, soportó sus
tribulaciones por el bien del pueblo de Dios.
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Es interesante tener en cuenta el paralelismo, tan habitual en el


lenguaje hebreo, que vemos en este versículo bíblico.

La primera cláusula tiene que ver con la tribulación, la segunda


con la consolación. La tribulación está asociada con el apóstol, la
consolación con los corintios.

Tribulación y consuelo son dos componentes habituales en la vida


de todo cristiano. Como decíamos, dos caras de una misma
moneda.

Quiero llamar vuestra atención sobre el hecho de que las


tribulaciones de las que estamos hablando, son las del tiempo
presente, que nada tienen que ver con la Gran Tribulación.

Lo repito, porque por ahí andan algunos afirmando que la Iglesia


tendrá que sufrir la Gran Tribulación. Lo cual es pura mentira, a
la luz de la Escritura Sagrada.

Otros dicen que ya estamos en la Gran Tribulación. Y no saben


diferencias las tribulaciones del tempo presente con la ira
venidera que ha de manifestarse, para juzgar, no a los creyentes
sino a los incrédulos.

Los lectores de esta epístola pueden sacar consuelo de la vida de


Pablo, ya que él es ejemplo para todos en su forma de apropiarse
de la protectora ayuda del Señor en tiempos de aflicción Hechos
18.9-10.

Ellos, también, deben aceptar el consuelo del Señor en sus


aflicciones.

Los corintios pasan por tribulaciones distintas a las de Pablo;


pero, como aflicción, son exactamente lo mismo.

Algunos tenían que hacer frente a maestros arrogantes entre ellos,


1Corintios 4.18-19; otros, tenían que convivir con una esposa no
20

creyente, 1Corintios 7.15; incluso otros tenían escrúpulos de


conciencia cuando los invitaban a comer carne ofrecida a un
ídolo, 1Corintios 10.27-29.

Todos ellos habían prometido ser sinceros con Cristo, y ahora les
tocaba sufrir las consecuencias de su compromiso.

Pablo identifica sus aflicciones y consolaciones con los corintios.


Aunque, relaciona la aflicción con Pablo, y la consolación y
salvación con los corintios.

Aquí no está diciendo que los padecimientos de Pablo salven a los


corintios, lo cual entraría en contradicción con multitud de
pasajes.

Para eso, para salvar al pecador, el sacrificio de Cristo se basta


solo.

Las aflicciones que Pablo soportó, o que los cristianos soportamos


hoy, por causa de Cristo son incapaces de añadir nada al proceso
de la redención; pero Cristo se vale de esos sufrimientos para
atraer a los pecadores hacia su persona.

Los sufrimientos de Pablo eran siempre para acercar el evangelio


a judíos y a gentiles.

La cual opera. ¿Cómo opera la consolación? En el sufrir las


mismas aflicciones que nosotros también padecemos.

¿Qué quiere decir esto? Que no hay consolación sin aflicción. Es


lo que el apóstol está intentando enseñarles. Por cuanto el que no
padece no necesita consolación. Más el que ha sido consolado,
puede a su vez consolar a otros, con el consuelo con que fue
consolado él mismo.

Así, que, cuando los corintios sufran lo que el apóstol sufrió,


también recibirán la consolación que el apóstol recibió. De este
21

modo los corintios son animados a perseverar en medio de las


dificultades.

7. Y nuestra esperanza respecto de vosotros es firme. Con la vista


puesta en el futuro, expresa una esperanza firme. Confía en que
los corintios soportarán las aflicciones de la vida cristiana.

Pablo sabe que el Señor, que comenzó su buena obra entre los
corintios, nunca abandonará lo que es suyo, Filipenses 1.6.

Pues sabemos. ¿En qué se basa la esperanza de Pablo, según este


pasaje? En el conocimiento que tiene de Dios y de los corintios.

La palabra clave en este verso es compañeros. Pablo nos habla


aquí de la comunión de los santos. Estamos unidos en los
padecimientos y lo estamos en la consolación.

Esto anula la idea de individualismo tan de moda en nuestros días.


Muchos pretenden vivir su fe al margen del pueblo de Dios,
cuando la voluntad Soberana de Dios es que lo vivamos en
comunidad.

Pablo se sentía unido, aún sin estar en corinto, con aquellos


cristianos que padecían por la misma causa que él: la fe en
Jesucristo.

Si padeces, puedes estar seguro de que también serás consolado.


Esa es la esperanza de todo hijo de Dios. Por cuanto está escrito
que: Dios nos consuela, 4.

Los médicos tratan el cuerpo enfermo, los pastores, ayudamos a


quienes son afligidos por diversas causas. Pablo está ayudando a
los corintios a sobrellevar y superar sus aflicciones.

La palabra consuelo, en la Biblia, contiene matices que tienen que


ver con la idea de ánimo, exhortación, e incluso dirección.
22

Aun los siervos de Dios necesitamos consuelo. Aunque en


muchas ocasiones, los siervos, intentamos ocultarlo para no hacer
sufrir a los hermanos.

Aquí pablo habla de sus tribulaciones intencionadamente, para


enseñarles a ellos y a nosotros.

Pablo predicó el evangelio en la sinagoga de Corinto hasta que


recibió la oposición de los judíos, lo que le obligó a marcharse de
la sinagoga y reunirse con los creyentes en casas.

Cuando esto sucedió, y a pesar de los buenos resultados que


seguía cosechando, Pablo se desanimó. Estaba dispuesto a
marcharse a otro lugar, hasta que Jesús le habló y lo consoló con
palabras de ánimo que fortalecieron al apóstol.

Hechos 18.5-11 Entonces el Señor dijo a Pablo en visión de


noche: No temas, sino habla, y no calles; 10porque yo estoy
contigo, y ninguno pondrá sobre ti la mano para hacerte mal,
porque yo tengo mucho pueblo en esta ciudad. 11Y se detuvo allí
un año y seis meses, enseñándoles la palabra de Dios.

De hecho, cuando Jesús le llamó al ministerio le dijo a Ananías,


cuánto le era necesario a Pablo padecer por Su nombre. Hechos
9.15-16. Pero en todas sus pruebas, Jesús estuvo con el apóstol
dándole palabras de ánimo, consuelo, confianza, exhortación, y
dirección.

Aun hoy, Cristo está con sus siervos y con su pueblo, como
anunció: he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin
del mundo. Amén. Mateo 18.10.

Cuando padecemos, seamos pastores, o creyentes, algo


importantísimo es el respaldo de la Iglesia. Pablo menciona esto
en varias partes.

La Iglesia oró por él, 11. Es una verdadera necesidad de todo


siervo.
23

Dio gracias por él y por lo que recibió, 11.

Lo consideraron como su gloria, 14.

Los corintios apoyaron a Pablo en su ministerio por medio de la


oración. ¿Tendría eso alguna repercusión en su ministerio? Sin la
menor duda. No es lo mismo trabajar con el respaldo de la Iglesia
que sin él.

¿Podríamos nosotros hacer lo mismo? ¿Podríamos orar los unos


por los otros? Claro.

El grupo de oración, no es sólo para poner peticiones, es para


manifestar nuestra alabanza a Dios por sus respuestas. Y por
supuesto para que, sabiendo de las necesidades, intercedamos
delante de Dios, por quienes no necesitan.

La oración intercesora es un estrategia divina, para el


establecimiento de su reino.

Ahora bien, ¿Podríamos hacer algo más aparte de orar? ¿Qué


podemos hacer por los afligidos? Una palabra de ánimo,
consuelo, una llamada, una visita.

Los siervos fieles a Dios padeceremos distintas pruebas, pero


mantendremos la fe en todas ellas en el Dios que nos consuela.
Pues, cuando salimos victoriosos el Señor es glorificado por las
acciones de gracias de todos los hermanos.

8-11. Hermanos. ¿Estarán incluidas aquí las hermanas? o ¿Es


Pablo sexista en su lenguaje? Sí y No. Sí, las hermanas están
incluidas. No, no usa un lenguaje sexista. De ninguna manera.

Actualmente, en el afán de parecer políticamente correctos, se


dice: hermanos y hermanas, voluntarios y voluntarias, socios y
socias, miembros y miembras, etc. Lo cual es absolutamente
absurdo. Lo políticamente correcto, no siempre es lo inteligente.
24

Quiera Dios que nuestros políticos actuales dejen de temer al qué


dirán y de hacer el ridículo, en su manera de hablar, para volver a
un lenguaje más acorde con la inteligencia.

No queremos que ignoréis. Este es el deseo de todo siervo de


Dios, que su congregación no sea ignorante, de la verdad, sea
agradable, o no. Porque la verdad siempre será mejor que la
mentira.

No hay que ocultar la verdad a los hermanos. Si lo hacemos, no es


amor, es un evangelio falso. Porque si escondemos los
sufrimientos de la fe, cuando los hermanos padezcan, al no
haberles dado testimonios de nuestras consolaciones, no podrán
ser consolados como nosotros lo fuimos.

El precio de la verdad siempre es menor, más económico, que el


de la mentira.

¿Qué es lo que Pablo no quería que ignorasen? Las tribulaciones


que tuvo que atravesar en Asia.

¿Sabemos a qué tribulación se refería el apóstol? No. No tenemos


muchos detalles. ¿Qué sabemos? Que estuvieron a punto de
morir. Hasta el extremo de perder la esperanza de salir con vida.

Pues fuimos abrumados sobremanera más allá de nuestras


fuerzas. El agobio, y la ansiedad de saberse condenado, hizo que
perdieran toda esperanza de salir con vida.

Los corintios dudaban de su amor y entrega por Cristo, Pablo les


recuerda que debían tener en cuenta las terribles experiencias que
tuvo que soportar por amor de Cristo. La falta de detalle puede
deberse a que los corintios ya supieran a qué se estaba refiriendo
el apóstol.

Es evidente que ninguno de nosotros hemos estado en esa


situación por causa de la fe. Sin embargo, hay hermanos nuestros
25

que lo están ahora mismo. ¿Qué podríamos hacer por ellos?


Debemos redoblar nuestros esfuerzos en oración para que Dios
les fortalezca y consuele en medio de sus tribulaciones.

Como Pablo no aclara cuáles son las tribulaciones que padeció en


Asia, se han propuesto tres posibilidades, basadas en tres pasajes
diferentes:

Hechos 19.23-42 La revuelta instigada por Demetrio el platero.


1Corintios 15.32 La batalla contra las fieras.
2Corintios 11.23 Sus prisiones (romanas).

A cualquiera de ellas podría estar refiriéndose el apóstol. Incluso


hay quien ha apuntado al aguijón de su carne. 2Corintios 12.7-10.

Sea como fuere, lo importante nunca es lo que no sabemos, sino


lo que sí sabemos. Que la padeció y salió airoso, y fue consolado
por el Señor; y ahora puede con su testimonio consolar a los
corintios que padecen por causa del Nombre de Cristo.

9. Tuvimos en nosotros mismos. Una cosa es hablar de los


padecimientos de otros y otra muy diferente de los padecimientos
propios. ¿Podía Pablo hablar en primera persona? Desde luego. Si
alguien sufrió por causa de la predicación del evangelio, ese fue
Pablo.

Sentencia de muerte. ¿Qué significa esto? Lo que dice, que había


sido sentenciado a muerte.

Es interesante resaltar, una vez más, cómo Pablo en todas sus


tribulaciones, siempre ponía el énfasis NO en el porqué, sino en el
para qué.

Para que no confiásemos en nosotros mismos sino en Dios que


resucita de a los muertos. Es impresionante. Poder llegar a tales
conclusiones tratándose de una sentencia de muerte.
26

Pablo había entendido que el propósito de aquella terrible


experiencia fue eliminar toda autosuficiencia en él. Destruir toda
confianza en su propia carne.

¿Qué significa esto? Que Dios lo llevó hasta el punto que tuviera
que depender sólo de la gracia y la misericordia divina.

Una de las cosas más difíciles en la vida cristiana es ceder el


control de nuestras vidas. ¿Estaríamos nosotros dispuestos a
confiar tan plenamente en Dios como tuvo que hacer el apóstol?

Nos gusta tenerlo todo controlado. Saber qué nos depara el


mañana, pero cuando no es posible, ¿Qué ocurre? Que sufrimos
por ello.

Muchos, a penas con cualquier contratiempo y ya está quejándose


y preguntando ¿Por qué? ¿Por qué yo? Por qué a mí? Así nunca
se enteran del para qué.

Las más grandes lecciones de la fe no se reciben en la Iglesia,


estudiando la Biblia. Se reciben en los momentos en que
padecemos con, o por, Cristo.

En medio de la prueba debemos esperar confiando en Dios, quien


tiene poder aun para resucitar de entre los muertos. Aunque Pablo
va más allá, mostrando un entendimiento sobrenatural de estas
cuestiones.

Quizás, cuando somos probados, debiéramos pedir esa


inteligencia espiritual. Porque entender los tiempos y las razones,
nos ayuda a superar las pruebas.

Pablo es un buen ejemplo de esto. Como está escrito: Romanos


5.3 Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en las
tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia; 4y
la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza; 5y la esperanza no
avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en
nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado.
27

¿Confías en Dios hasta el extremo de saber que aun te puede


sostener en la tribulación? ¿Hasta el extremo de poder levantarte
de la muerte? Esa era la confianza que Pablo expresa aquí.

¿Has aprendido a dejar de confiar en ti mismo? Si no dejas de


confiar en ti, no podrás confiar plenamente en el Señor.

10. ¿Significa esto que Dios librará a sus hijos de padecer por
causa de la fe? Desde luego que no. De hecho, Pablo, como otros
muchos hermanos en la fe que nos han precedido, murieron
martirizados.

Aun hoy día, mientras muchas iglesias siguen disfrutando de sus


buenas relaciones con el mundo, y profetizando que lo mejor está
por venir; la persecución contra los verdaderos cristianos se está
recrudeciendo por día.

¿Cómo entender entonces este pasaje? Esperamos, dice Pablo.


Esperar tiene que ver con la esperanza, no con certeza absoluta.
Esperar no es asegurar que no ocurra, sino confianza en que Dios,
si quiere, puede librarle.

Pablo no temía la muerte de lo contrario, no habría seguido


predicando el evangelio, manifiesta su plena confianza en Dios,
de que le librará siempre, hasta que llegue el momento en que,
Dios determine que su tiempo en la tierra habría llegado a su fin.

¿Murió Pablo en aquellas tribulaciones de las que habla? No. De


hecho, Dios le libró de la muerte. Por eso puede testificar. ¿Por
qué, pues, Dios permitió que pasara por tan dolorosa experiencia?

Para que abandonara su autoconfianza, y aprendiera a confiar en


Dios. Cuando se está sentenciado a muerte, esperando la
ejecución, sólo puedes confiar en la capacidad omnipotente de
Dios, para intervenir y hacer un milagro.
28

11. Cuando algún hermano está en una situación como esta, es


una oportunidad para cooperar con él con nuestras oraciones.

Pablo pidió en repetidas ocasiones que se orase por él y su


ministerio. Romanos 15.30-31 Pero os ruego, hermanos, por
nuestro Señor Jesucristo y por el amor del Espíritu, que me
ayudéis orando por mí a Dios, 31para que sea librado de los
rebeldes que están en Judea,

Filipenses 1.19-21 Porque sé que por vuestra oración y la


suministración del Espíritu de Jesucristo, esto resultará en mi
liberación, 20conforme a mi anhelo y esperanza de que en nada
seré avergonzado; antes bien con toda confianza, como siempre,
ahora también será magnificado Cristo en mi cuerpo, o por vida
o por muerte. 21Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es
ganancia.

Lo cual redundará en muchas acciones de gracias a Dios, cuando


el milagro se produzca. En este caso ya se había producido. Pablo
había sido liberado y ahora tenían un motivo mejor para orar, dar
gracias a Dios por su liberación.

La liberación del apóstol es relacionada por él con las oraciones


de los corintios, y el don de Dios. Es decir, su gracia.

En esta perícopa tratando sobre las aflicciones, se nos ha hablado


sobre la interdependencia de los unos con los otros. Nos
necesitamos mutuamente, aun cuando en el mundo exalta la
independencia.

En nuestra relación con Dios y nuestros hermanos de la Iglesia, es


mejor depender unos de otros, que verse solos.

Ya en la primera epístola Pablo habló de la necesidad de


preocuparse los unos por los otros. 1Corintios 12.25.

Dios quiere que dependamos de Él y de nuestros hermanos en la


fe.
29

Hechos 12.6-7 Relata que el apóstol Pedro estaba sentenciado a


muerte por Herodes, custodiado entre dos guardias y sujeto con
cadenas. Mientras que la Iglesia hacía oración a Dios por él.

Sin embargo, cuando Dios envió un ángel para liberarle tuvo que
despertarlo porque estaba tranquilamente durmiendo.

¿Dormirías tú si supieras que al día siguiente te ejecutarían? La fe


y la confianza en Dios, nos fortalece aun en las peores
situaciones. Trae paz y descanso a nuestra alma.

Pablo estuvo en la misma situación, Dios le llevó hasta el extremo


de que perdiera toda esperanza, para que sólo le quedase confiar
en la misericordia de Dios.

Quiera Dios que no necesite ponernos en esa situación para que


confiemos en Dios, sino que lo hagamos de mutuo propio.

12-14. Los falsos maestros que se habían adjudicado el liderazgo


de la iglesia de Corinto durante la ausencia de Pablo, buscaban
cualquier ocasión para calumniar al apóstol y así socavar su
autoridad delante de la asamblea.

Algunos pensaban que destruyendo el testimonio de Pablo, ellos


serían mejor valorados. Al parecer había allí algunos que tenían
más alto concepto de sí que el que debían tener. Romanos 12.3.

En estos versículos se registra la refutación paulina a esa


acusación. Pablo pone en claro sus motivos y su conducta, para
que los corintios tuvieran una base firme para discutir y resolver
los problemas que tenían que enfrentar.

Ciertos malentendidos se propagaron como resultado de las


sospechas y las calumnias de quienes se oponían a Pablo.
Mediante estos versos Pablo rechaza la idea de que hubiese
obrado mal.
30

Es más, el apóstol confía estar preparado para el juicio de Dios.

Nuestra gloria. Puede también traducirse por jactancia u orgullo.


En sentido sano, claro. El orgullo carnal es arrogancia y por tanto
pecado. Porque Dios debe recibir todo honor.

Pablo habla de sentirse orgulloso de Cristo y sus bendiciones.


Romanos 5.11 Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en
Dios por el Señor nuestro Jesucristo, por quien hemos recibido
ahora la reconciliación.

Gálatas 6.14 Pero lejos esté de mí gloriarme, sino en la cruz de


nuestro Señor Jesucristo, por quien el mundo me es crucificado a
mí, y yo al mundo.

Filipenses 3.3 Porque nosotros somos la circuncisión, los que en


espíritu servimos a Dios y nos gloriamos en Cristo Jesús, no
teniendo confianza en la carne.

1Corintios 1.30-31 Más por él estáis vosotros en Cristo Jesús, el


cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría, justificación,
santificación y redención; 31para que, como está escrito: El que
se gloría, gloríese en el Señor.

2Corintios 10.17-18 Más el que se gloría, gloríese en el Señor;


18
porque no es aprobado el que se alaba a sí mismo, sino aquel a
quien Dios alaba.

Esta idea no es paulina, sino que hunde sus raíces en las


enseñanzas del Antiguo Testamento.

Proverbios 27.2 Alábete el extraño, y no tu propia boca;


El ajeno, y no los labios tuyos.

Este es un pasaje que muchas veces me sirvió para mantener el


orgullo a raya. Aunque estoy seguro de que ustedes no tienen el
mismo problema que yo.
31

¿Tendrían los corintios algún problema con esta área de sus


vidas? Sin duda.

De las treinta y ocho veces que se cita ese término, dos las
encontramos en Santiago, las demás en las epístolas paulinas, es
decir, treinta y seis. De las cuales veintinueve aparecen en las
epístolas a los corintios.

¿De qué se gloria tanto Pablo? ¿De qué te glorías tú? ¿Cuál es tu
gloria? Algunos se glorían en lo antiguo o grande de su grupo
religioso; otros de su posición en el grupo; otros, en sus títulos;
otros, en su don o dones; otros, en otras cuestiones.

¿En qué se gloriaba Pablo? En el testimonio de su conciencia, y la


gracia de Dios.

Pablo habla de este tema en Romanos 2:14-16 Porque cuando los


gentiles que no tienen ley, hacen por naturaleza lo que es de la
ley, éstos, aunque no tengan ley, son ley para sí mismos,
mostrando la obra de la ley escrita en sus corazones, dando
testimonio su conciencia, y acusándoles o defendiéndoles sus
razonamientos, en el día en que Dios juzgará por Jesucristo los
secretos de los hombres, conforme a mi evangelio.

Pablo habla aquí del testimonio de nuestra conciencia. No de la


conciencia de los demás. Como está escrito: ¿Por qué se ha de
juzgar mi libertad por la conciencia de otro? 1Corintios 10.29.

¿Cuándo dará testimonio nuestra conciencia? ¿Delante de quién?


Delante del Señor, cuando seamos juzgados.

Según la enseñanza del apóstol en este pasaje, inspirado por el


Espíritu Santo, nos enseña que Dios juzgará los secretos de los
hombres, y que en ese juicio tendrá un papel significativo nuestra
propia conciencia.
32

Pablo la llama la ley escrita en nuestros corazones. Nuestra


conciencia nos defenderá o nos acusará. Dependiendo de si
obramos conforme a ella, o contra ella.

Generalmente damos mucha importancia a lo que los demás dicen


de nosotros. La opinión de los demás es importante, pero lo
realmente importante será el testimonio de nuestra propia
conciencia. Porque a los demás sí; pero, a Dios no podemos
esconderle nuestros pensamientos.

Si te presentaras ahora mismo delante de Él ¿Cuál sería el


testimonio de tu conciencia? ¿Te defendería o te acusaría?

No con sabiduría humana. ¿Qué quiere decir este pasaje? ¿De


qué está hablando Pablo?

El apóstol está hablando de motivación y conducta. Es decir, de


qué le movía a actuar y cómo se conducía él.

Nos hemos conducido en el mundo. Aquí aprendemos cómo


debemos conducirnos tanto en el mundo como en la Iglesia.
Porque el cristiano tiene que marcar la diferencia.

Los enemigos del apóstol le acusaban de carnal, de ministrar en la


sabiduría humana. Pablo aclara que siempre actuó con sencillez y
sinceridad de Dios.

Pablo actúa en la sabiduría celestial, que le llega por la gracia de


Dios, que es la que lo ha capacitado para ser ministro fiel de la
palabra, 1Corintios 15.10.

¿Cómo andas tú, en tu sabiduría humana, carnal, o en la sencillez


y sinceridad de Dios? Dicho de otro modo, ¿Eres un cristiano
hipócrita o eres sincero? Pablo afirma que es sincero por la gracia
de Dios.

Debemos conducirnos en el mundo y la Iglesia con:


33

Sencillez,
sinceridad, y la
gracia de Dios.
Renunciando a la sabiduría humana.

Según Pablo en este pasaje, estas cosas son necesarias para que
nuestra conciencia de buen testimonio de nosotros.

Debemos orar para que la gracia de Dios actúe en nosotros y nos


ayude a obrar como el apóstol.

Ojalá cuando fuésemos presentados ante el tribunal de Cristo


podamos decir lo que Pablo ante el concilio. Hechos 23.1:
Entonces Pablo, mirando fijamente al concilio, dijo: Varones
hermanos, yo con toda buena conciencia he vivido delante de
Dios hasta el día de hoy.

13. Recordemos que Pablo está defendiéndose de las acusaciones


que contra él estaban haciendo, algunos que pretendían
menospreciar al apóstol y su ministerio, para ocupar su lugar.

Esto ocurre en muchos lugares. Siempre encontramos a gente que


intenta ascender a costa de dar pisotones a los demás.

¿De qué le acusaban? Le acusaban de obrar en la carne, de ser


inconstante, de decir una cosa y hacer otra.

En este versículo Pablo aclara que no escribe una cosa a una


congregación y otra diferente a otra. Sus cartas se leían en todas
las iglesias. Colosenses 4.16; 1Tesaloninceses 5.27.

Pablo no era un hipócrita, no decía una cosa y hacía otra distinta.


Dado que los corintios podían examinar en detalle sus epístolas,
debían concluir que era honrado en todo cuanto había escrito y
dicho.

Leyendo sus cartas no se puede llegar a otra conclusión sino a que


era absolutamente sincero, y sus intenciones siempre fueron
34

limpias y correctas.

Estoy seguro de que a alguno de aquellos que le injuriaban


delante de la Iglesia les hubiera gustado encontrar alguna falta en
él o en sus epístolas.

14. Cuando Pablo estuvo entre ellos como maestro, los corintios
habían comprendido perfectamente sus enseñanzas. Pero cuando
se levantaron los falsos testimonios contra él, los corintios
llegaron a confundirse.

El apóstol espera que esta carta les ayude a poner en orden sus
ideas, no sólo sobre el apóstol y su ministerio, sino también las
doctrinas que les había enseñado.

Es evidente que el conocimiento de los corintios era limitado, por


su propia carnalidad, recuerden 1Corintios 3.2.

En la Traducción en Lenguaje Actual se leen estos versos así:


Ahora les escribimos con palabras e ideas fáciles de entender. Y
espero que puedan comprender del todo 14 lo que ahora no
entienden bien. Así, cuando el Señor Jesucristo vuelva, ustedes
podrán estar orgullosos de nosotros, como nosotros lo estamos
de ustedes.

Y en la Nueva Traducción Viviente: Nuestras cartas fueron


transparentes, y no hay nada escrito entre líneas ni nada que no
puedan entender. Espero que algún día nos entiendan
plenamente, 14 aunque por ahora no nos entiendan. Entonces, en el
día que el Señor Jesús regrese, estarán orgullosos de nosotros de
la misma manera que nosotros estamos orgullosos de ustedes.

Los cristianos nunca deben sentirse orgullosos de sí mismos, sino


de los demás, por medio de Jesucristo. Pablo desea que los
corintios se sientan orgullosos de él, así como él de ellos.

Los corintios le debían el reconocimiento y gratitud por su labor,


2Corintios 5.12; Filipenses 2.16; sin embargo, no era eso lo que el
35

apóstol estaba recibiendo de ellos.

En justa reciprocidad, Pablo y sus colaboradores se sentían


orgullosos de los corintios, 2Corintios 7.4; 1Tesalonicenses 2.19-
20.

Para el día del Señor Jesús. Si observan el verbo está en presente.


Dado que habla del día del Señor Jesús, el verbo debería estar en
tiempo futuro, pero no es así.

Por tanto, aclara que los corintios son su gloria para el día del
Señor. Es decir, aquello que le hará sentir que no perdió el
tiempo, y que su trabajo en el Señor no fue en vano. 1Corintios
15.58.

¿Cuál será tu gloria en el día del Señor Jesús? Aquello de lo que


no tendrás que avergonzarte.

15-20. Aquí observamos cómo Pablo alude a la acusación que


había contra él. No lo hace en clave de reproche, sino más bien
les explica que no llegaron a entenderle del todo.

Con esta confianza. La confianza era muy importante para el


apóstol. Esta palabra la repite de manera continua en esta epístola,
3.4; 8.2; Se refiere a la confianza básica en Dios, la gente o en
uno mismo.

Quise ir. Aquí explica su intención. Aunque Pablo venía hablando


en tercera persona, pasa a la primera del singular ya que estaban
dudando de sus palabras quiere expresar que asume su
responsabilidad en los cambios, que más tarde explicará.

Segunda gracia. También puede leerse segunda bendición, favor,


don, regalo. Se refiere a su intención de bendecirlos de nuevo con
su visita.

16. Pablo tenía la intención de ser encaminados por ellos a


Macedonia y volver de nuevo a ellos, y de allí a Judea par llevar
36

la ofrenda a los hermanos de Jerusalén. Ese era el pan de Pablo.

¿Siguió el apóstol su plan? No. ¿Por qué? En realidad no lo


sabemos. Lo que sí sabemos es que cambió sus planes y esta fue
la excusa perfecta para que sus enemigos en la congregación de
Corinto levantaran falso testimonio contra él y su ministerio.

17. Según este pasaje ¿Cuál era una de las acusaciones que se
hacían contra él? Que usaba de ligereza. ¿Qué significa eso? Que
no buscaba suficientemente a Dios. Que andaba en la carne. De
ahí la pregunta siguiente.

Es decir, le acusaban de decir una cosa y hacer la contraria.

¿Qué respuesta demandaban estas preguntas del apóstol?


Evidentemente negativa.

17. Estamos estudiando estos pasajes en los que Pablo se defiende


de sus enemigos, falsos hermanos introducidos en la
congregación de Corinto, que le acusaron de indecisión, diciendo
que era señal de que no se podía confiar en él.

Pablo aclara que no andaba en la carne.

Según la carne. Kata sarka. Esta frase: Según la carne, es


frecuente en la epístola, 5.16; 10.2-3; 11.18. Por tanto, esta
expresión: Según la carne, el apóstol la va a usar frecuentemente.

Como leemos, Pablo aclara que él no vive según la carne. En


Romanos 8.4 lo hace extensivo a todos los creyentes: …no
andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

¿Había demostrado Pablo que su consagración, a Dios y al


ministerio, fue siempre total o tenían derecho a dudar de él y de
su integridad? Lo había demostrado sobradamente. Nadie debía
dudar de su integridad. Y menos que nadie los corintios.

Si había realizado algún cambio en su agenda, los corintios


37

debían entender que no era por malos motivos, ni por carnalidad


ni tampoco por inconstancia, sino por causa de la obra. Por la
voluntad de Dios.

La última frase del verso 17 es una cita de las palabras de Jesús


que aparecen en dos pasajes distintos de la Escritura. Mateo 5.37
y Santiago 5.12.

Con toda probabilidad Pablo les habría enseñado esta expresión


del Señor, mediante la cual enseñaba a sus discípulos a ser
íntegros y a actuar con honestidad.

Esta expresión era tan conocida en la Iglesia que no era necesario


redactarla completa para que la comprendieran, sino sólo hacer
referencia a ella.

Algunos corintios le acusaban ahora de no ser honesto. ¿Qué hace


Pablo? Se defiende.

18-24. Como Dios es fiel. Los estudiosos estiman que al poner a


Dios como testigo, esta frase es una especie de juramento,
mediante el cual Pablo pone a Dios como ejemplo y testigo de su
proceder.

Es el modo de dar énfasis a su propia integridad, afirmándose en


que, lo que les compartió, fue palabra de Dios y él no miente, por
tanto, dice ahí…

Nuestra palabra a vosotros no es Si y No. ¿A qué se refiere con


esta frase? a su predicación y enseñanza, y a la de sus
colaboradores Silvano y Timoteo.

¿Es fiable la Palabra de Dios? Siempre es fiel y verdadera y, por


tanto, digna de plena confianza.

Los ministros de la Palabra debemos reflejar la misma confianza


cuando estamos en el púlpito exponiendo y enseñando la Palabra
de Dios.
38

Pablo, reclama esa confianza para sí mismo. Por cuanto se ha


mantenido en la verdad en todo momento. Y si la Palabra de Dios
es fiel, también él lo es porque no ha predicado otra cosa que la
Palabra de Dios.

Dicho de otro modo, si los corintios confían en Dios deben


aprender a confiar en Pablo, aun cuando cambie sus planes de
viaje.

Aunque Pablo tiene otro argumento por el cual había cambiado


sus planes, primero quiere dejar claro que su integridad está
fundamentada en la integridad de las Palabras de Dios.

19. Esta es una explicación del pasaje anterior. Va a decir lo


mismo desde otro ángulo o perspectiva.

El Hijo de Dios, Jesucristo, no ha sido Sí y No. Cristo ha sido una


realidad clara y manifiesta a sus vidas. Muchos de ellos fueron
transformados por el poder de Cristo. Del Cristo que Pablo y sus
colaboradores les predicaron.

Esta es, también, una clara declaración de la divinidad de Cristo


que, enfatiza, es el Hijo de Dios. Con ello, Pablo está dando valor
e importancia a su declaración. Pues, el Hijo de Dios no dice una
cosa y la contraria.

Del mismo modo, se conduce Pablo y sus colaboradores. Con


honestidad e integridad. Por cuanto son canales por medio de los
cuales Cristo llegó a los corintios.

Desde la perspectiva hebrea, es importante la expresión de los tres


nombres, ¿Por qué? En hermenéutica enseñamos que el
conocimiento del contexto histórico nos ayuda a entender la
Sagrada Escritura.

Conociendo el contexto sabemos que tanto el Antiguo como el


Nuevo Testamento enseñan que es necesario el testimonio de dos
39

o tres testigos para establecer la verdad. Deuteronomio 17.6;


Mateo 18.16.

Así, pues, Pablo, Silvano y Timoteo son suficientes para afirmar


la veracidad de la predicación apostólica.

Pablo termina este versículo afirmando que Jesucristo, la


personificación de la verdad, como enseña en Romanos 15.8,
nunca quebranta su Palabra.

Jesús es inmutable: Es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos.


Hebreos 13.8.

20. Dios ha hecho grandes y numerosas promesas, una vez más


¿Es fiable Dios? ¿Cumple lo que promete? ¿Pueden aportar
alguna evidencia de ello?

El apóstol es testigo de que muchas de las promesas de Dios se


habían cumplido o se estaban cumpliendo en su tiempo.

El apóstol Pedro en 1Pedro 1.10-12 dice: Los profetas que


profetizaron de la gracia destinada a vosotros, inquirieron y
diligentemente indagaron acerca de esta salvación,
11
escudriñando qué persona y qué tiempo indicaba el Espíritu de
Cristo que estaba en ellos, el cual anunciaba de antemano los
sufrimientos de Cristo, y las glorias que vendrían tras ellos. 12A
éstos se les reveló que no para sí mismos, sino para nosotros,
administraban las cosas que ahora os son anunciadas por los que
os han predicado el evangelio por el Espíritu Santo enviado del
cielo; cosas en las cuales anhelan mirar los ángeles.

Todo el AT apuntaba a Cristo en quien se cumplen las antiguas


promesas. Ahora, todo el NT es la demostración de que Dios
cumple sus promesas.

Esta es la más clara demostración de que la fe cristiana es


diferente a todas las demás. El cumplimiento de las promesas que
habían sido antes anunciadas, algunas con siglos de antelación. A
40

pesar de lo cual, todas se cumplieron en Cristo.

Con esto, Dios demuestra su poder y autoridad soberana por sobre


la historia, las naciones, y los reyes de la tierra.

Al escribir sí y amén en este pasaje, Pablo expresa un paralelismo


que era usual en aquellos días. Entre los que usaban tanto el
griego como el arameo, ¿Qué significa el sí y el amén?
Significaban exactamente lo mismo.

Como Pablo indica, cuando los creyentes dicen «amén» a las


promesas de Dios en Cristo, glorifican a Dios.

Por medio de nosotros. ¿A qué se refiere Pablo con estas


palabras? A que los corintios habían recibido las promesas de
Dios por medio de Pablo y sus colaboradores, y enfatiza: para la
gloria de Dios.

21-22. Es evidente que en estos dos versos, Pablo va a concluir la


defensa de su honestidad y fiabilidad.

También observamos aquí la doctrina de la Trinidad, afirmando


que Dios nos confirma en Cristo, nos unge en Dios y nos sella con
el Espíritu.

Todos estos conceptos que aparecen aquí: sellar, confirmar, arras


o garantía, los toma Pablo del ámbito legal y comercial. Un
lenguaje que ellos conocían perfectamente y les ayudaría a
comprender lo que el apóstol pretendía enseñarles.

Tal y como ocurre en nuestros días, es Dios quien crea, fortalece


y sostiene la comunión que los creyentes mantenemos con Cristo
Jesús.

La base de esta comunión es la promesa de Dios hecha a su


pueblo por medio de su Palabra que es indiscutiblemente válida; y
para hacerla inmutable hace un juramento.
41

Hay un pasaje que habla de esto: Hebreos 6.17-18 Por lo cual,


queriendo Dios mostrar más abundantemente a los herederos de
la promesa la inmutabilidad de su consejo, interpuso juramento;
para que por dos cosas inmutables, en las cuales es imposible que
Dios mienta, tengamos un fortísimo consuelo los que hemos
acudido para asirnos de la esperanza puesta delante de nosotros.

Los corintios, lo mismo que Pablo y sus colaboradores pueden


confiar plenamente en las Escrituras. Por cuanto las promesas de
Dios han asumido forma de una garantía legítima y certificada en
Cristo.

El que nos ungió es Dios. Pero, ¿Qué significa ungir? En tiempos


del Antiguo Testamento, profetas, sacerdotes y reyes eran
designados para asumir y desempeñar un oficio y realizar una
labor al servicio de Dios.

Por lo cual eran ungidos con aceite, que simbolizaba el don del
Espíritu Santo, que les capacitaría para tal servicio a Dios y a los
demás.

De modo semejante, Dios ungió a Jesús con el Espíritu Santo y


poder, Isaías 61.1 y Lucas 4.18;

Hechos 4.27; 10.38; Salmo 45.7 y Hebreos 1.9.

En su bautismo, Jesús recibió el Espíritu Santo. ¿Quiere esto decir


que los creyentes, cuando se bautizan, reciben igualmente el
Espíritu, de modo que podemos afirmar que la unción es
equivalente al bautismo? No.

Desde hace unas décadas, los grupos pentecostales pusieron de


moda el tema de la unción. Enseñaron que sólo ciertos “líderes”
tenían la exclusividad de la unción y que ellos podían darla a
quienes quisieran.

Muchos cristianos corrieron de un país a otro, buscando la unción


de este o de aquel. Sin embargo, la verdad es otra muy diferente.
42

Dios unge a su pueblo con el Espíritu Santo, de modo que todos


aquellos que de verdad han nacido de nuevo, ya han sido ungidos
por Dios. Como está escrito en 1Juan 2.20, 27.

Esto ocurre en el momento de la regeneración, Juan 3.5. Por


tanto, no tenemos que andar detrás de nadie para que ore por
nosotros por imposición de manos y nos transmita la unción.

Otra cuestión a tener en cuenta es que no debemos confundir,


como algunos hacen, el bautismo del Espíritu con la llenura del
Espíritu.

Como ya hemos enseñado en otras ocasiones el bautismo se


produce una sola vez cuando creemos; mientras que la llenura en
cambio puede suceder en varias ocasiones especiales, Hechos
4.31.

22. El cual también nos ha sellado. ¿Qué son los sellos y para qué
sirven? Los sellos, tanto en la antigüedad como en la actualidad,
se colocan como garantía de propiedad o de autenticidad.

Un sello declara verdadero a un documento. Dios pone un sello a


su pueblo por dos razones: para confirmar que le pertenecemos,
de manera que quedamos bajo su protección; y para demostrar
nuestra autenticidad.

Es decir, el verdadero cristiano tiene el Sello del Espíritu, que lo


convierte en auténtico hijo de Dios.

El tema del sello en el cristiano, lo cita Pablo en otra de sus


epístolas, Efesios 1.13-14 En él también vosotros, habiendo oído
la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y
habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la
promesa, que es las arras de nuestra herencia hasta la redención
de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria.
43

Este es uno de esos pasajes que a los calvinistas y reformados, les


gustaría quitar de la Biblia. Ellos aman los anteriores que hablan
de elección y predestinación, pero odian este que explica
claramente cómo Dios predestina y escoge a los que serán salvos.

¿Cómo escoge y sella Dios a los que ha de ser salvos, según este
pasaje de Pablo? Aquí queda demostrado que Dios, en su
Soberanía, ha querido escoger a los creyentes. Es decir, a quienes
oyendo el evangelio lo creen.

Porque la fe viene, ¿Por dónde? Por el oír la Palabra de Dios.


Romanos 10.17.

Otro pasaje que no les gusta a los reformados. Que prefieren mal
interpretar es Efesios 2.8 diciendo que la fe es un regalo, cuando
lo que realmente dice Pablo allí es que el regalo es la gracia que
nos otorga la salvación, no la fe. La fe viene… por el oír.

Todo texto debe ser interpretado a la luz de su contexto.


Cuando alguien oye y cree el evangelio de Cristo, ¿Qué ocurre?
Que es sellado por Dios. Y además, sigue diciendo Pablo ocurre
algo más.

…y nos ha dado las arras del Espíritu en nuestros corazones.


¿Qué son las arras?

Las arras son las primicias. Como en algunas bodas se


acostumbra, los novios otorgan a sus cónyuges las arras, ¿Por
qué? ¿Para qué? Como símbolo de que todo lo demás que poseen
pueden dar por seguro que lo recibirán también.

¿Qué significa eso en lo espiritual? Que Dios nos ha dado la


presencia de Su Espíritu Santo, como primicias de que
recibiremos toda nuestra herencia como hijos de Dios, y por tanto,
viviremos por la eternidad delante de Él.

Las arras son la garantía, o el testimonio público de que


recibiremos todo lo demás que nos ha prometido.
44

1.23-24. Invoco a Dios por testigo sobre mi alma. Esta es la


prueba irrefutable de que Pablo tenía buenas razones para no
haber cumplido sus primeros planes.

No duda en poner a Dios mismo por testigo, contra su propia


vida, de sus buenas intenciones. Mostrando así que, lo que motivó
su cambio de planes, no fue el andar en la carne sino otro asunto.

Si en el verso 18 usó el testimonio de la fidelidad de Dios para


reforzar su palabra y la de sus seguidores, ahora aquí es más
enfático, si cabe.

El texto en el original, adquiere un tono aún más vigoroso que en


español. Pablo usa la primera persona del singular para enfatizar
que él, no sus colaboradores, es quien está invocando a Dios por
testigo de sus palabras.

Pablo está insinuando que si lo que dice no es verdad, Dios tiene


todo el derecho y la razón del mundo para castigarlo.

Ante Dios, Pablo desnuda su alma y dice, con toda libertad:


invoco a Dios como testigo sobre mi alma. Siempre se presenta
ante Dios, que lo conoce hasta lo más hondo de su ser. Pablo sabe
que Dios podría quitarle la vida si dijera una sola mentira.

Pablo revela ahora la razón por la que no había vuelto a Corinto.


¿Cuál fue el verdadero motivo por el cual el apóstol no quiso ir a
verlos cuando dijo que lo haría? La indulgencia para con los
mismos corintios.

¿Qué es indulgencia? Es facilidad en perdonar o disimular las


culpas o en conceder gracias. ¿Qué quiso decir Pablo con esto?
Que escogió tener consideración de ellos.

En su primera correspondencia, preguntaba a los corintios si debía


ir con una vara o con amor y espíritu de mansedumbre,
1Corintios 4.21.
45

Pablo no quiso ser duro con los corintios, quiso perdonarles, y


aun disimular sus faltas, pero sabía que era necesario algo de
tiempo para volver a ellos.

Para darles tiempo a que asumieran su error, y pudieran cambiar


de actitud, para que cuando el apóstol les volviera a visitar no
tuviese que ser duro con ellos.

A veces es importante tomarse el tiempo necesario para apaciguar


los ánimos.

24. Aclara que no se trata de soberbia, sino que busca el bien y el


gozo de los corintios. Es decir, no volver a entristecerles con más
reprimendas.

Pablo está mostrando su disposición, y la de sus colaboradores, es


para servicio a los corintios, no para imponerles su voluntad.

Sino que colaboramos para vuestro gozo. He aquí otra muestra de


la bondad del apóstol, preocupándose por aquellos que estaban
injuriándole.

Los creyentes de Corinto deben admitir que Pablo y sus


colaboradores están esforzándose por ellos para que progresen en
su bienestar y gozo espiritual.

Porque por la fe estáis firmes. Sin duda, la fe es lo que fortalece


al cristiano, y le hace estar firme. La fe es también productora de
gozo. Filipenses 1.25; 1Juan 1.4; 2Juan 12.

Fe y gozo son necesarios en nuestra relación con Dios y los unos


con los otros. Teniendo en cuenta las tensas relaciones de Pablo
con lo corintios, expresa exquisito esmero en hablar de estas dos
virtudes.

2.1-4. Estos pasajes son tan claros que casi no necesitan


explicación alguna. Hablando en primera persona, aclara una vez
46

más que la decisión fue suya exclusivamente. Que estaba seguro


de que era correcta, y así se lo comunica a los corintios.

Había sido acusado de falta de fiabilidad en cuanto al


cumplimiento de su palabra, 1.17. Pero habiendo comentado su
costumbre de decir siempre la verdad, declara que había llegado a
la firme decisión de no hacer otra visita a los corintios que
pudiera producirles congoja.

1. Esto, pues, determiné para conmigo. ¿Qué significa esto? Que


se propuso en sí mismo. Se negó algo que hubiera deseado. Él
quería visitarlos, pero se negó a sí mismo esa bendición.

¿Cuál fue el motivo? No ir de nuevo a ellos con tristeza. Es decir,


si hubiese ido, sabia que no habría sido de bendición para los
corintios.

No ir otra vez a vosotros con tristeza. En su anterior visita a la


congregación de Corinto, Pablo les había producido congoja por
causa de la corrección. ¿Sabemos qué les había dicho el apóstol
en su anterior visita? No. No cuenta lo que les había dicho a los
miembros, ni la causa de la tristeza del apóstol.

Desea que reflexionen sobre su congoja, que se arrepientan, y lo


echen de menos. Entonces, su pena se tornará en alegría.

Pablo no quiso visitarles estando triste. ¿Qué aprendemos de este


gesto del apóstol?

Si pudiésemos entender este gesto del apóstol nos sería muy útil
en nuestras relaciones los unos con los otros. Pues, en muchas
ocasiones, cuando estamos afligidos corremos en busca de
alguien sobre quien volcar nuestra frustración, sin tener en cuenta
el efecto que eso pudiera tener en las vidas de los demás.

Proverbios 27.10 No dejes a tu amigo, ni al amigo de tu padre; Ni


vayas a la casa de tu hermano en el día de tu aflicción.
47

2. ¿Qué nos enseña este pasaje? La reciprocidad en las relaciones


dentro de la Iglesia. Es decir, la responsabilidad que tenemos los
cristianos de alentarnos los unos a los otros.

La pregunta retórica de Pablo es bastante lógica. Si entristeces a


alguien, ¿Cómo esperar que luego te pueda alegrar?

Es una explicación del motivo para no visitarlos. Pablo no tenía


intención de afligir a sus lectores y engendrar en ellos
resentimiento.

3. Pablo reclama el derecho a no ser entristecido, sino a gozarse


de los corintios.

Mi gozo es el de todos vosotros. ¿Qué significa esta frase? Pablo


les está diciendo: Si yo estoy contento, vosotros lo estaréis.

Es una frase similar a la que Jesús dirigió a sus discípulos en Juan


15.11 Estas cosas os he hablado, para que mi gozo esté en
vosotros, y vuestro gozo sea cumplido.

4. Algunos teólogos creen que Pablo se está refiriendo a una carta


que les había enviado después de 1Corintios y antes de ésta, pero
que no se conserva.

Que el estado espiritual de la congregación se había deteriorado


hasta el extremo no se puede negar, teniendo en cuenta las cosas
que el apóstol tuvo que corregir en su primera carta, si después de
ésta, la situación no mejoró, es lógico pensar que escribiera otra
intermedia con gran aflicción.

Por lo que aquí dice, la carta salió de un corazón angustiado y fue


escrita entre lágrimas. No se trata de la angustia provocada por la
persecución, sino por la pobre situación espiritual de los corintios.

Pablo confiesa que la escribió no para que ellos sufrieran por él,
sino porque él estaba sufriendo por ellos. ¿Qué era lo que
motivaba el sufrimiento del apóstol? El amor que les tenía.
48

El propósito de la carta intermedia fue que los corintios vieran su


error, reconocieran su culpa, corrigieran su camino y
gozosamente aceptaran el mensaje corrector de Pablo.

5-11. ¿De quién habla el apóstol? En realidad no lo dice, porque


los corintios sabían a quién se refería Pablo. Prefiere no dar
nombres para facilitar la restauración del pecador.

Aunque afectando al apóstol afectaba a toda la iglesia, dado que


no toda la iglesia se sintió afectada, ni entristecida.

Pablo es prudente en su manera de tratar el asunto.

Alguien en la iglesia había causado tristeza a Pablo. La presencia


de esta persona afecta a toda la congregación, de forma muy
parecida a como un poco de levadura acaba leudando toda la
masa (1 Co. 5:6–8).

Los pecados morales no quedan confinados a las personas que


más directamente los cometen, sino que normalmente, afectan de
una u otra forma, a toda la congregación.

6-7. La iglesia tenía que tratar con un pecador que había cometido
un pecado que afectó a toda la congregación y estorbó su labor.
Estamos convencidos de que la iglesia aplicó las normas
disciplinarias prescritas por Jesús (Mt. 18:15–17).

Esto era suficiente. Pero el apóstol tiene especial cuidado en


puntualizar que la disciplina, en la Iglesia, debe ser restaurativa,
como también enseña en Gálatas 6.1-2.

Es verdad que ninguna disciplina al presente parece ser causa de


gozo, sino de tristeza; pero después da fruto apacible de justicia a
los que en ella han sido ejercitados. Hebreos 12.11.

La clave está aquí. La disciplina surte efectos más tarde. Es


entonces que da frutos.
49

“y habéis ya olvidado la exhortación que como a hijos se os


dirige, diciendo: Hijo mío, no menosprecies la disciplina del
Señor, Ni desmayes cuando eres reprendido por él; Porque el
Señor al que ama, disciplina, Y azota a todo el que recibe por
hijo” Hebreos 12.5-6

En estos pasajes el sentido que se le da a la disciplina tiene que


ver no tanto con el instruir, sino con el corregir la conducta.

“Porque Jehová al que ama castiga, como el padre al hijo a


quien quiere” Proverbios 3.11-12

Los padres que quieran ahorrarle a sus hijos la tristeza de ser


disciplinados le estarán acarreando un mal infinitamente mayor
que el que le pueda causar la disciplina.

Sin disciplina, es decir: sin instrucción y sin corrección, la


sociedad se quiebra y desmorona: “Donde no hay dirección
sabia, caerá el pueblo; Mas en la multitud de consejeros hay
seguridad” Proverbios 11.14

También es interesante observar que el autor está hablando de que


es Dios quien disciplina a sus hijos a quienes ama. Esto nos habla
de la disciplina en el seno de la familia. Instrucción y corrección.

La disciplina de corrección debe conllevar la reprensión antes del


castigo como vemos en: “Yo reprendo y castigo a todos los que
amo; sé, pues, celoso, y arrepiéntete” Apocalipsis 3.19

Algunas personas mayores son necios porque no quisieron aceptar


la corrección cuando fueron jóvenes.

El necio menosprecia el consejo de su padre; mas el que guarda


la corrección vendrá a ser prudente. Proverbios 15.5.

Para alcanzar el reposo de Dios en los días de aflicción, y ser


librados del mal: Bienaventurado el hombre a quien tú, Jah,
50

corriges, y en tu ley lo instruyes, para hacerle descansar en los


días de aflicción, en tanto que para el impío se cava el hoyo.
Salmo 94.12-13.

En la Iglesia, para ganar a los hermanos: “Por tanto, si tu


hermano peca contra ti, ve y repréndele estando tú y él solos; si
te oyere, has ganado a tu hermano” Mateo 18:15

Probar nuestra fe: Sabiendo que la prueba de vuestra fe produce


paciencia. Mas tenga la paciencia su obra completa, para que
seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna. Santiago
1.3-4.

Sabemos que pocas cosas prueban nuestra fe como la disciplina.


Pero si nos dejamos corregir, y aceptamos la disciplina, produce
en nosotros el carácter de Cristo.

¿Hasta qué punto debe ser ejercida la disciplina? La Biblia es


clara al respecto: Dios resiste a los soberbios y da gracia a los
humildes. 1Pedro 5.5.

Hasta la reprensión pública: “A los que persisten en pecar,


repréndelos delante de todos, para que los demás también
teman” 1ª Timoteo 5:20

No olvidemos que la disciplina contiene un elemento de


enseñanza. Los demás también deben aprender a temer a Dios.

Nos quedamos en el verso 8 hablando de la disciplina en la


Iglesia.

Vivimos en un tiempo en el que predomina la filosofía de la


tolerancia. Se enseña la tolerancia como un principio, como un
valor que hay que defender a capa y espada.

Ciertos grupos han sido especialmente activos en promover la


tolerancia para sus fines. Sin tolerancia, dicen, no hay
convivencia.
51

Por tanto, según lo que nos quieren hacer creer, hay que tolerar a
todos y todo lo que la gente quiera hacer, sin imponer ningún tipo
de conducta predeterminada como buena sobre las otras.

Por ejemplo, los grupos de gay y lesbianas promueven su derecho


a vivir como quieran, exigiendo tolerancia para sí. Pero no se
quedan ahí, incluso exigen que toleremos que quieran promover
la homosexualidad y el lesbianismo entre los niños, aun en los
colegios de primaria.

Antes se le llamaba corrupción de menores. ¿Debemos tolerar que


perviertan a los niños? Esto es lo que están exigiendo.

De hecho, en este país, lo están haciendo con la connivencia de


los políticos. Asustados por la influencia mediática de estos
grupos. Aunque en realidad son cuatro gatos.

Estos grupos son especialmente críticos con cualquiera que no


piense como ellos. Exigen tolerancia para sí mismos. Pero son
absolutamente intolerantes con cualquiera que les contradiga. Eso
tiene un nombre y es: intolerancia.

Quien exige tolerancia para sí, debe estar dispuesto a ser tolerante
con los demás.

Desgraciadamente, estamos siendo gobernados por gentes que no


tienes principios morales. Personas sin preparación. Jamás hemos
tenido una casta política tan inculta, tan poco preparada, como en
la actualidad.

Esa falta de preparación ha favorecido la propagación de esta


filosofía humanista. Filosofía que está dirigiendo las políticas
sociales, con leyes cada vez más absurdas e injustas, todo lo cual
influye en nuestro estilo de vida.

Por poner un ejemplo: La ley del aborto es responsable del


asesinato de más de trescientas mil personas, todos los años, sólo
52

en este país. Personas a las que los intolerantes les roba el derecho
a vivir. ¿Es eso tolerancia?

El ser humano, enfrascado e su egoísmo, y en su enfermiza


irresponsabilidad, prefiere mirar por sí mismo. Por su beneficio
inmediato, sin preocuparse de las consecuencias.

La filosofía de la tolerancia, ha llevado al ser humano a llamar a


lo bueno malo y a lo malo bueno. Y esto va en aumento.

Por eso no se quiere corregir. Se dice no a la disciplina. La


filosofía de la tolerancia entiende la disciplina como algo
intolerante.

Por esa razón no se quiere corregir ni a los hijos. Y así estamos


formando nuevas generaciones, cada vez más entontecida, más
embrutecida, más intolerante.

Ni tan siquiera en la iglesia se tolera la disciplina. La disciplina en


un par de décadas ha desaparecido de las iglesias. Ya no se quiere
corregir el mal. Cada uno es responsable delante de Dios, se dice.

No queremos corregirnos a nosotros mismos y mucho menos que


nos corrijan. El ser humano cree tener el derecho de hacer lo que
quiera, cuando quiera y como quiera. Sin que nadie le llame la
atención.

Muchos creyentes piensan: Si hay que ser tolerante con todos,


porqué no serlo conmigo mismo. Yo tengo derecho a hacer lo que
me apetezca lo mismo que los demás. Lo cual les lleva a una vida
de pecado. Piensan que Dios será tolerante con ellos.

El mundo en que vivimos es la consecuencia de una filosofía


como esa. Vivimos en un mundo injusto precisamente porque es
tolerante con el mal.
53

Hubo un tiempo en el que se toleraba el bien, pero no el mal. El


mal había que corregirlo. Ahora si intentas corregir el mal, te
llaman intolerante. O peor aún, te denuncian.

Hay que volver a los principios bíblicos, hay que volver a llamar
a las cosas por su nombre. Al mal, mal; y al bien, bien. Hay que
volver a la disciplina para que la sociedad vuelva a la justicia.

Algunos dicen: ¿No es bueno Dios? Y con esto creen que Dios
será tolerante con el mal y con los malos. ¿Será así?

Realmente Dios es bueno, pero también es justo. Un Dios justo


que demanda justicia. Justicia no es hacer lo que te apetezca, es
hacer lo correcto. Y si no lo hacemos, si somos tolerantes con el
mal, Dios no será tolerante con nosotros.

Aunque esto no suene políticamente correcto, es la verdad.


Porque aunque nosotros lo toleremos todo; Dios, no.

Por tanto, la tolerancia es buena cuando se tolera el bien. Pero


cuando se trata de tolerar el mal, la tolerancia es mala.

La Biblia está llena de pasajes que hablan sobre la necesidad de la


disciplina, a nivel personal, familiar y eclesial.

Recordemos las palabras de Pablo en 1Corintios 5.9-13: “Os he


escrito por carta, que no os juntéis con los fornicarios; 10no
absolutamente con los fornicarios de este mundo, o con los
avaros, o con los ladrones, o con los idólatras; pues en tal caso
os sería necesario salir del mundo. 11Más bien os escribí que no
os juntéis con ninguno que, llamándose hermano, fuere
fornicario, o avaro, o idólatra, o maldiciente, o borracho, o
ladrón; con el tal ni aun comáis. 12Porque ¿qué razón tendría yo
para juzgar a los que están fuera? ¿No juzgáis vosotros a los que
están dentro? 13Porque a los que están fuera, Dios juzgará.
Quitad, pues, a ese perverso de entre vosotros”
54

El mundo puede hacer lo que bien le parezca, pero ¿Debe la


Iglesia actuar del mismo modo? De ningún modo. No así en la
Iglesia de Cristo. Dios nos ha dejado claras enseñanzas sobre la
necesidad de corregir el mal y disciplinar a los malos.

¿Era intolerante Pablo por escribir estas palabras? Sí, es


intolerante con el pecado. Por cuanto lo que no es tolerante es
dejar al ciego en las tinieblas teniendo luz para darle.

¿Está mal ser intolerante con el pecado? Desde luego que no. Lo
verdaderamente malo es ser tolerante con aquello que Dios
aborrece.

Dios nos habla con claridad sobre este tema en las Sagradas
Escrituras. Él inspiró a los apóstoles a escribir cosas como esta:

2ª Tesalonicenses 3:6, 14-15 “Pero os ordenamos, hermanos, en


el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que os apartéis de todo
hermano que ande desordenadamente, y no según la enseñanza
que recibisteis de nosotros. Si alguno no obedece a lo que
decimos por medio de esta carta, a ése señaladlo, y no os juntéis
con él, para que se avergüence. 15Mas no lo tengáis por enemigo,
sino amonestadle como a hermano”

Esto son indicaciones claras de que el mal no debe ser tolerado,


sino corregido.

Tito 3:10-11 “Al hombre que cause divisiones, después de una y


otra amonestación deséchalo, sabiendo que el tal se ha
pervertido, y peca y está condenado por su propio juicio”.

Es posible que no nos gusten estos pasajes. Pero déjenme decirles


algo que ustedes ya saben: Son Palabra de Dios. Quizás no
cuadren con la filosofía que la sociedad actual promueve, pero
son palabras de Dios.
55

¿Se equivocará Dios o serán los hombres quienes se equivoquen?


Esto es lo que algunos afirman: Que estos escritos fueron para
otra época. Que no tienen cabida en una sociedad moderna.

Sin embargo, estos teólogos liberales serán juzgados justamente


por estas mismas palabras que hoy rechazan. Porque como está
escrito: El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no
pasarán. Mateo 24.35.

Por tanto, más nos valiera hacer caso a Dios que a los hombres.

Ahora bien, volviendo al texto, disciplina no significa


ensañamiento. Significa instrucción y corrección. La disciplina no
debe ser destructiva, sino constructiva, restauradora.

5-8 A la luz de este pasaje, ¿Cuál debe ser la actitud de la Iglesia


en un caso de disciplina? La de perdonar y consolar al pecador.
Confirmando el amor para con el pecador arrepentido. ¿Cuál es
en general la que se adopta? En muchos casos, se le acosa y
derriba, o se le aparta como a un apestado.

Gracias a Dios eso no ocurre entre nosotros. Pero sé de


congregaciones en las que ocurre.

Evidentemente depende de la actitud del pecador. Si éste


manifiesta arrepentimiento, la labor de la Iglesia es la que hemos
dicho. Pero, ¿Qué hacer cuando no media el arrepentimiento?
Jesús enseña que le tengamos por gentil o publicano. Es decir, por
alguien indigno del reino de los cielos. Mateo 18.17.

Mateo 6:14-15 “Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas,


os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial; 15mas si
no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre
os perdonará vuestras ofensas”.

Si queremos ser perdonados por Dios debemos perdonar a


quienes nos han herido.
56

Mateo 18:21-35 “Entonces se le acercó Pedro y le dijo: Señor,


¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí?
¿Hasta siete? 22Jesús le dijo: No te digo hasta siete, sino aun
hasta setenta veces siete”.

Toda la Biblia trata sobre el perdón de los pecados.

Efesios 4:31-32 “Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira,


gritería y maledicencia, y toda malicia. 32Antes sed benignos unos
con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como
Dios también os perdonó a vosotros en Cristo”

Muchas veces me han preguntado si deben perdonar a quien no se


arrepiente del mal que ha hecho. La respuesta, a la luz de las
enseñanzas de Jesús es no.

No hay nada en todos estos pasajes que hemos leído que indique
que sin arrepentimiento, el ofensor deba ser perdonado.

El perdón sin arrepentimiento no es una doctrina bíblica, sino


humanista.

Sin embargo, si media el arrepentimiento, entonces sí debemos


perdonar, como fuimos perdonados siguiendo el ejemplo de
Cristo... “soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a
otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que
Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros” Colosenses
3:13

Siempre que medie el arrepentimiento y la confesión, ya que es la


condición que Dios pone para perdonar nuestros pecados. Como
está escrito: “Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo
para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad”
1ª Juan 1:9

Si se arrepiente, perdónale. Si no se arrepiente, no se trata de que


le guardes rencor. Pero tampoco merece ser perdonado. Pues, ni
Dios perdona si no media el arrepentimiento del pecador.
57

Los ayes de Cristo sobre Corazín, Betsaida y Capernaúm, en


Mateo 11.20-21, dejan claro que aquellos que no se arrepienten
tendrán un castigo mayor.

Lucas 13.1-5. En este mismo tiempo estaban allí algunos que le


contaban acerca de los galileos cuya sangre Pilato había
mezclado con los sacrificios de ellos. 2Respondiendo Jesús, les
dijo: ¿Pensáis que estos galileos, porque padecieron tales cosas,
eran más pecadores que todos los galileos? 3Os digo: No; antes si
no os arrepentís, todos pereceréis igualmente. 4O aquellos
dieciocho sobre los cuales cayó la torre en Siloé, y los mató,
¿pensáis que eran más culpables que todos los hombres que
habitan en Jerusalén? 5Os digo: No; antes si no os arrepentís,
todos pereceréis igualmente.

Muchos están confundidos en esto. No hay perdón para el


pecador que no se quiere arrepentir. El que no quiere dejar de ser
malo, ¿Merece ser perdonado? Desde luego que no.

Algunos enseñan que debemos perdonar a todo el que nos haga


daño, siempre. Sin importar si se arrepiente o no. Pero no es lo
que nos enseña la Palabra de Dios. Lo que Dios dice es que sin
arrepentimiento no hay perdón.

Es más, como vemos a continuación, no sólo se demanda


arrepentimiento, sino frutos de arrepentimiento. Es decir, la
manifestación de que ese arrepentimiento es genuino.

Como está escrito: Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento.


Mateo 3.8.

¿Perdonará Dios a quien no se arrepienta de sus pecados? Desde


luego que no. Para eso es predicado el evangelio, para proclamar
la necesidad del ser humano de arrepentimiento y confesión de
sus pecados, para obtener el perdón de Dios.
58

Ese fue el mensaje de Cristo Jesús, y el que predicaron los


apóstoles.

Mateo 4.17 Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir:


Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.

Hechos 3.19 Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean


borrados vuestros pecados.

Como también está escrito en Romanos 2.4-5: ¿O menosprecias


las riquezas de su benignidad, paciencia y longanimidad,
ignorando que su benignidad te guía al arrepentimiento? 5Pero
por tu dureza y por tu corazón no arrepentido, atesoras para ti
mismo ira para el día de la ira y de la revelación del justo juicio
de Dios.

Apocalipsis 2.5 Recuerda, por tanto, de dónde has caído, y


arrepiéntete, y haz las primeras obras; pues si no, vendré pronto
a ti, y quitaré tu candelero de su lugar, si no te hubieres
arrepentido.

La falta de arrepentimiento tiene consecuencias. Sin


arrepentimiento no hay perdón. ¿Qué hay? Condenación.

En este caso del que Pablo habla a los corintios, al parecer se


arrepintió de su pecado, de tal forma que Pablo animó a la iglesia
a perdonarle y consolarle y a extenderle consuelo ya que, de
hecho, fueron ellos los agraviados.

La semana pasada estábamos hablando sobre la disciplina en la


Iglesia, y la necesidad de arrepentimiento sin el cual Dios no
perdona al pecador. Ni tampoco nosotros tenemos porqué
perdonar a quienes nos ofenden o agreden, sino media el
arrepentimiento.

Sin embargo, cuando la persona manifiesta su arrepentimiento y


pide ser perdonado,
59

8. Como iglesia, debían confirmar su amor para con ese hermano


cristiano y admitirlo dentro de su comunión.

No se trataba de sólo perdón. Cuando media el sincero


arrepentimiento, debe ser correspondido con el sincero amor que
perdona y deja en el pasado la ofensa.

De este modo, aun cuando la ofensa se recuerde, no causará daño.

Al usar la palabra amor, Pablo les está recordando a los corintios


el resumen de la ley de Dios: Amarás al Señor tu Dios con todo tu
corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el
primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante:
Amarás a tu prójimo como a ti mismo. Mateo 22.37-39.

Cuando un pecador se arrepiente, el perdón, la reconciliación y la


reintegración deben venir como consecuencia. Para mantener un
sano equilibrio, tanto la verdad como la gracia deben aplicarse a
la ofensa y al ofensor.

9-11. El pasaje es claro en demasía. El propósito del apóstol es


someter a prueba a los miembros de la iglesia.

Pues, la preocupación de Pablo en este asunto no era simplemente


una reivindicación personal o que fuera reconvenido un hermano
que estaba en error, sino que la congregación corintia pudiera
demostrar la fuerza de su compromiso con el propio Pablo y su
ministerio.

Pablo está ejerciendo su autoridad apostólica al demandar


obediencia de los corintios, en un asunto tan delicado como la
disciplina en la Iglesia.

Es importante fijar nuestra atención en la demanda del apóstol.


¿En qué les pide obediencia? En todo. No sólo en unas cuantas
cosas.
60

En ocasiones somos obedientes selectivos. Es decir, obedecemos


en algunas cosas y en otras no. Aquellas que nos cuesta,
preferimos restarle importancia. Pero Dios demanda una
obediencia total.

Todas las instrucciones que el apóstol les había dado mediante su


enseñanza, predicación y sus cartas, debían ser tenidas en cuenta
por aquellos cristianos de Corinto. Todas, eran inspiradas por
Dios y por tanto, debían ser obedecidas.

10. Ese agravio produjo pesar en ellos y el arrepentimiento les


llevó al perdón, por lo que Pablo podía perdonar también.

La expresión de solidaridad era completa. Pablo se hace uno con


ellos. Los corintios podrían perdonar al que los había agraviado, y
ofendido a Pablo.

Ni el apóstol ni los corintios debían guardar rencor al pecador


arrepentido.

Por vosotros lo he hecho. ¿Qué quiere decir con estas palabras?


Que lo había perdonado por el bien de la iglesia.

En presencia de Cristo. Cristo estaba donde Pablo se encontraba


al perdonar a aquel pecador. Y también con los corintios, cuando
Pablo les demandaba la misma actitud.

En la presencia de Cristo todo se aclara. Nadie puede guardar


rencor. Porque sabemos que Él nos perdonó a nosotros todas
nuestras ofensas.

11. Era importante que se restaurara la comunión entre Pablo, los


corintios y el ofensor arrepentido, de tal manera que el incidente
no llegara a ser una ocasión para que Satanás provocara un
alejamiento entre la iglesia y Pablo.

De otra manera, Satanás podría hacer surgir un espíritu de


amargura para viciar el ministerio de Pablo o de los corintios.
61

¿De qué forma podía Satanás ganar ventaja? Los rencores en la


congregación son rápidamente explotados por Satán para socavar
la salud espiritual de la iglesia.

Esta era una de las maquinaciones de Satanás, y Pablo había


trabajado intensamente para que no diera resultado.

El Maligno capitaliza los insultos u ofensas que no han sido


resueltos ni perdonados; defraudar a la gente hace que se
produzca en ella un espíritu de animosidad, de división y de
dispersión.

El propósito de Satán es frustrar la obra de Cristo en su iglesia


sobre la tierra. Con la división y dispersión del pueblo de Dios,
Satanás puede bloquear el progreso de la iglesia y el reino de
Cristo.

Abrigar mala voluntad hacia un pecador arrepentido, en vez de


mostrarle amor, misericordia y gracia, son herramientas que el
Maligno sabe manejar. El Diablo aborrece el perdón y el amor
cristiano; lo que a él le gusta ver es abatimiento, desesperación y
tinieblas.

En esa atmósfera, Satanás es capaz de recuperar un pecador


perdonado. En consecuencia, Pablo les enseña a los corintios a
perdonarse unos a otros, en amor, tal como Dios los ha perdonado
a ellos.

En resumen, Pablo había cambiado sus planes, pero fue debido a


que el apóstol quería velar por el bienestar de la iglesia de
Corinto. En lugar de hacerles una visita personal, había enviado a
Tito con una carta y así logró su propósito.

Pero no supo el resultado hasta que se reunió con Tito en


Macedonia. Como indica la sección de 2:12–16, el tiempo que
transcurrió entre tanto, no fue fácil para Pablo.
62

12-13. Pablo fue a Troas ¿Cuál era la clara misión que el apóstol
tenía en mente? predicar el evangelio de Cristo. ¿Qué significa
eso? Esto quiere decir que daba a conocer a Cristo y sus
enseñanzas mediante su predicación. Convirtiéndose en
instrumento de salvación para ellos.

¿Qué significa que se le abrió puertas? Es una frase simbólica que


significa que la gente de Troas fue receptiva al mensaje del
evangelio de Cristo. Dios bendijo su predicación y su ministerio
de predicación.

Aprovecho la oportunidad para aclarar que hay que tener mucho


cuidado con las frases figuradas que encontramos en la Biblia.
Entenderlas de manera literal cambiaría el sentido del pasaje. Por
esa razón debemos estar muy atentos a lo que leemos.

En el Señor, significa que fue Dios quien le abrió las puertas para
la predicación del evangelio.

Cuando es el propio hombre quien quiere abrir puerta, puede


encontrarse con que Dios no se lo permita.

Esto le ocurrió a Pablo en varias ocasiones hasta que llegó


precisamente a Troas. Ya lo estudiamos en el libro de Hechos de
los Apóstoles 16.6-10.

No tuve reposo en mi espíritu. ¿Qué está diciendo el apóstol con


esta frase? Que perdió la paz. ¿Qué hizo después? Tomó la
decisión de ponerse en marcha hacia Macedonia.

No es fácil tomar decisiones en la vida. Especialmente las que son


importantes. Dios ha querido, por medio de su Palabra enseñarnos
cómo debemos tomar decisiones.

Las circunstancias son un elemento importante a tener en cuenta.


Pero no es el único. A veces, las circunstancias no son suficientes
para llevarnos a la decisión correcta.
63

Puede que las cosas salgan bien, y aun así, la voluntad de Dios es
que salgamos de allí. Si algo podemos aprender de este pasaje es
que Pablo no se dejaba engañar por las circunstancias ni aun
cuando le eran propicias.

¿Cómo entonces saber qué es lo correcto? ¿Qué otra cuestión


debemos tener en cuenta a la hora de tomar decisiones
importantes?

Aquí tenemos una de las cuestiones más importantes: La paz de


Dios.

Como está escrito en Colosenses 3.15: Y la paz de Dios gobierne


en vuestros corazones, a la que asimismo fuisteis llamados en un
solo cuerpo; y sed agradecidos.

¿Qué significa gobernar? Que la paz manda. La paz debe


determinar si algo viene o no de Dios.

Y también Salmo 34.14: Apártate del mal, y haz el bien; Busca la


paz, y síguela.

Esto son señales que Dios ha dejado en nuestro camino.


Indicaciones que debemos seguir para conocer su voluntad.

Si al tomar una decisión pierdes la paz de Dios, esa decisión no te


conviene, por muy buena que parezca a todo el mundo.

Si al tomar la decisión sientes verdadera paz con Dios, sabes que


es correcta. Pues, la paz de Dios gobierna nuestros corazones. Por
supuesto esto es en aquellas cuestiones que no están claramente
expuestas en la Palabra de Dios.

Cuando algún asunto está claramente establecido en la Palabra no


necesitamos más prueba, ni más señales. Debemos sencillamente
obedecer a Dios y ya está.
64

Así, pues, en Troas, Pablo reconoce que el Señor bendijo sus


esfuerzos evangelísticos a pesar de que era una colonia romana,
bien próspera, dándole la satisfacción de ver resultados tangibles:
la gente abría su corazón a las enseñanzas del evangelio.

¿Te habrías marchado tú de un lugar en el que tienes éxito? Pablo


lo hizo.

Cualquier otro se hubiera quedado a explotar aquella ciudad.


Podría haber puesto mil excusas a la idea de marcharse de allí.
Que si no podía abandonar a los nuevos convertidos; Que si Dios
le estaba abriendo puertas cómo se atrevía a no obedecer; Que lo
mejor era atender las necesidades de muchos que la de uno solo.

¿Eran lógicas estas posibles explicaciones? Dese luego que sí. Sin
embargo, Pablo se marchó. ¿Fue desobediente a Dios? De ningún
modo.

Fue sensible a la voz del Espíritu Santo que le habló por medio de
uno de sus frutos: La paz, o mejor dicho, la falta de paz.

Por no haber hallado a mi hermano Tito. ¿Tito era hermano de


sangre de Pablo? No. No le llama hermano en el sentido
biológico, sino que era su colaborador. Uno de los más cercanos,
junto con Timoteo.

Fue a estos dos que encargó la difícil tarea de establecer obispos,


ancianos, o pastores, en las nuevas congregaciones. Por lo cual les
explicó cuáles debían ser los requisitos que debían reunir los
candidatos al ministerio. 1Timoteo 3.1-7 y Tito 1.5-9.

El apóstol Pablo llevaba sobre sus hombros el peso de todas las


congregaciones que había fundado, lo cual no era poca
preocupación. Aún así, no descuidó su preocupación por sus
colaboradores más cercanos.

La semana pasada, estábamos en los versos 12-13 ¿Dónde


dejamos a Pablo? En Troas. ¿Qué había ido a hacer allí? Predicar
65

el evangelio de Cristo. ¿Fue rechazado como en otros muchos


lugares? No. Dios le abrió puertas.

Por esa razón estuvimos hablando de la dirección divina. ¿Qué es


la dirección divina? El modo en que Dios nos dirige.

Hablamos de dos cuestiones a tener en cuenta a la hora de


entender la dirección de Dios. ¿Recuerdan? Las circunstancias y
la paz de Dios. Colosenses 3.15.

¿Qué le decían las circunstancias a Pablo? Que se quedara en


Troas, porque había mucha gente recibiendo el evangelio de
Cristo. ¿Qué decidió Pablo y porqué? Decidió ir a Macedonia en
busca de Tito debido a su preocupación por él.

A su preocupación por la congregación de Corinto se unió su


preocupación por la seguridad de Tito.

¿Por qué estaba preocupado por Tito? Había quedado en


encontrarse con él en Troas y al no aparecer, es posible que
pensara que Tito podía haber sido asaltado en el camino.

¿Qué consecuencias tuvo en el apóstol su preocupación por Tito?


Perdió el reposo, la paz de Dios.

¿Qué hizo? Prefirió cambiar sus planes, una vez más.

¿Pablo era un buen o mal cristiano? Un buen cristiano. Había


madurado en su compromiso con Dios, tomando la decisión de
servirle a toda costa. Cuando esto ocurre, acabamos desarrollando
el discernimiento del bien y del mal.

¿Cuántos quisieran alcanzar la madurez? Leamos un pasaje que


nos enseña sobre la necesidad de madurar. Porque algunos aun
actúan como niños. Como está escrito:

Hebreos 5.11-14 Acerca de esto tenemos mucho que decir, y


difícil de explicar, por cuanto os habéis hecho tardos para oír.
66

12
Porque debiendo ser ya maestros, después de tanto tiempo,
tenéis necesidad de que se os vuelva a enseñar cuáles son los
primeros rudimentos de las palabras de Dios; y habéis llegado a
ser tales que tenéis necesidad de leche, y no de alimento sólido.
13
Y todo aquel que participa de la leche es inexperto en la
palabra de justicia, porque es niño; 14pero el alimento sólido es
para los que han alcanzado madurez, para los que por el uso
tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del
mal.

Según este pasaje ¿Con qué tiene que ver la inmadurez? Con no
querer oír: Tardos para oír…

Hacer oídos sordos a Dios. Justamente lo contrario a la dirección


Divina.

Según este mismo pasaje ¿Con qué tiene que ver la madurez? Con
poner por obra la Palabra: Por el uso…

Es un verdadero drama cuando vemos a una persona mayor actuar


como un niño, sin inteligencia. ¿Es normal? No. No lo es. No es
propio.

Según Pablo, en 1Corintios 13.11, lo lógico es que cuando somos


grandes dejemos lo que es de niños.

Si no maduramos debemos pensar si hay algún problema en


nosotros. ¿En qué estamos haciéndonos los sordos? ¿En qué no
queremos oír a Dios?

A veces hay áreas de nuestras vidas que nos negamos a rendir por
completo a la soberanía de Dios. Cuando eso ocurre el resultado
es un estancamiento espiritual que nos roba la madurez.

¿Han visto a algún cristiano con muchos años en el evangelio,


actuar como si fuera un niño inmaduro que no conociera la
voluntad de Dios? Yo sí.
67

¿Qué es lo que produce? Créanme que no es agradable. S un triste


espectáculo de lo que pudiera haber sido y no es.

No podemos vivir toda la vida como si fuésemos niños. Los niños


tienen muchas necesidades, mientras los que son maduros, no
sólo suplen sus necesidades sino que también pueden suplir la de
otros menos maduros.

¿Quieres ser siempre como un niño en Cristo o un cristiano


maduro? Este pasaje nos exhorta a madurar en la fe y a llegar al
punto en que podamos enseñar a otros.

No todos llegarán a ser maestros de la Sagrada Escritura, pero


todos podemos ser maestros de vida cristiana. No todos llegarán a
ser pastores y a exponer la Palabra ante grupos numerosos de
personas, pero todos podemos compartir con alguien lo que Dios
ha hecho en nuestras vidas.

13. Partí para Macedonia. La falta de noticias de Tito le


preocupó hasta el punto de no permitirle poder seguir con su tarea
en Troas, por lo cual se encaminó a Macedonia.

Y eso hizo. Se encaminó a Macedonia esperando, o quizás


sabiendo, que Troas seguiría estando abierta al evangelio para
cuando regresara.

Después del verso 13, se produce una interrupción en la redacción


de la carta. Es como si realmente se hubiera detenido de escribir
para ponerse en camino. De hecho esto es lo que algunos teólogos
y comentaristas piensan. Aunque no hay nada en el texto que así
lo indique.

Lo que sí es evidente es que interrumpe su relato y que no lo


retomará hasta el 7.5.

14-17. Cuando leemos pasajes como este, es de un valor


incalculable el conocer el contexto histórico en que Pablo lo
68

escribió. Ya que nos otorga un cuadro mucho más completo y


vivo de sus palabras.

Con estas palabras Pablo quiere que nos imaginemos la figura de


un victorioso general romano, que marcha delante de sus ejércitos
en un desfile triunfal, en su entrada a la capital del imperio.

¿Cuántos han visto una imagen así? El general desfila por las
calles con sus prisioneros de guerra, y se los muestra a todos los
espectadores, que le vitorean, mientras que la dulce fragancia de
especias aromáticas quemadas llena el aire.

Al final de esta procesión, estos cautivos son normalmente


ejecutados como tributo al conquistador. Para los vencedores, la
fragancia es dulce; para los cautivos, ese olor es olor de muerte.

Dios, por medio de Cristo ha vencido a sus enemigos, y Pablo,


hecho cautivo por Cristo, está presente en la marcha. Sin
embargo, no camina triste hacía la muerte, sino victorioso
volviendo de ella.

¿Cómo era posible que un cautivo que fuera a ser ejecutado


celebre la victoria de quien le venció y le hizo su esclavo? Sólo
había un medio por el cual el esclavo cautivo podía ser librado de
la muerte, por un acto de gracia del vencedor.

Pablo ya sabía que Cristo, que le venció y le tomó a su servicio,


había realizado un acto de gracia sobre él. No sólo librándole de
la muerte, sino premiándolo al tomarlo a su servicio personal.

Aún cuando Cristo lo había hecho libre, él se considerará durante


toda su vida un esclavo voluntario al servicio de Cristo. En
multitud de pasajes Pablo se presenta como siervo de Cristo.

De modo que, lo que Pablo está diciendo es que Dios nos lleva
siempre en triunfo en Cristo Jesús. Por esa razón puede afirmar
que aún en la tribulación, angustia o persecución, somos más que
vencedores por medio de aquel que nos amó. Romanos 8.31-39.
69

15. En una procesión romana triunfal se quemaba incienso. Pablo


comparó ese hecho con el conocimiento de Cristo, el cual, como
un olor, se difundía en todo lugar del mundo por medio de la
predicación del evangelio.

El conocimiento de Dios no es meramente saber que existe un ser


divino. El conocimiento de Dios incluye, además, conocerle
profundamente y servirle obediente, Amarlo con todo el corazón,
alma y mente.

Son muchas las personas, especialmente mayores que se


conforman con decir: Yo sé que “algo hay”. Mi madre solía
decirlo, pero no le preocupaba saber más.

No basta con eso. Si sabes que hay un Dios, tienes el deber, la


obligación, de conocerlo tanto como te sea posible.

Cuando conoces a Dios, no puedes por menos que adorarle y


servirle. Esa es la experiencia de todo aquel que conoce de verdad
a Dios.

La gente necesita del compromiso y del trabajo de la Iglesia para


poder conocer a Dios. Como está escrito: porque todo aquel que
invocare el nombre del Señor, será salvo. ¿Cómo, pues,
invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en
aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les
predique? ¿Y cómo predicarán si no fueren enviados? Como está
escrito: ¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la paz,
de los que anuncian buenas nuevas! Romanos 10.13-15.

¿Das a conocer a Cristo? ¿Hablas de Dios y de lo que Él ha hecho


en ti, o t avergüenzas del evangelio? Pablo dice: no me
avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para
salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y
también al griego. Romanos 1.16.
70

2Timoteo 1.8-12 Por tanto, no te avergüences de dar testimonio


de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las
aflicciones por el evangelio según el poder de Dios, 9quien nos
salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras
obras, sino según el propósito suyo y la gracia que nos fue dada
en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos, 10pero que
ahora ha sido manifestada por la aparición de nuestro Salvador
Jesucristo, el cual quitó la muerte y sacó a luz la vida y la
inmortalidad por el evangelio, 11del cual yo fui constituido
predicador, apóstol y maestro de los gentiles. 12Por lo cual
asimismo padezco esto; pero no me avergüenzo, porque yo sé a
quién he creído, y estoy seguro que es poderoso para guardar mi
depósito para aquel día.

15. El texto mismo habla del aroma de Cristo que se extiende y es


percibido tanto por los que se salvan, como por los que se
pierden. Así es el evangelio, un aroma que da la vida o la muerte
a quienes entran en contacto con él.

16. Por la predicación de las buenas nuevas, Pablo y sus


colaboradores traen vida a los que creen, de modo que todos
juntos se regocijan por la palabra de vida.

Pero la ira de Dios está sobre los que rechazan el mensaje de


salvación, Juan 3.36 El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero
el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de
Dios está sobre él.

Aquí hay una exigencia de parte de Dios. Quiero que presten


atención a este pasaje y me digan ¿Qué es lo que Dios exige? La
fe en Su Palabra.

La palabra rehúsa se traduce del griego apeizeó que significa


desobedecer, no ser fiel, ser incrédulo. ¿Qué nos enseña esto?
Que la fe es una responsabilidad humana.

Así, pues, el que rehúsa creer, es el que desea ser desobediente a


la Palabra de Dios. Pretende seguir siendo infiel, incrédulo.
71

Dios demanda que el ser humano crea en Su Palabra. Exige la fe


que viene del oír Su Palabra. Romanos 10.17.

Para aquellos que rechazaban el mensaje del evangelio y no


creían en el mensaje de Cristo crucificado y resucitado, Pablo y su
evangelio era como hedor de muerte.

Por mucho que pretendan convencernos de que Dios sólo quiere


salvar a unos cuantos, la Biblia dice bien claro que Dios quiere
que todos sean salvos. 1Timoteo 2.4.

Por esa razón manda predicar el evangelio a toda criatura,


afirmando que el que creyere será salvo y el que no, será
condenado. Marcos 16.15-16.

Esto deja la responsabilidad de recibir o rechazar el mensaje en el


destinatario. En el oyente. Por eso, a algunos no les aprovechó el
oír la palabra, por no ir acompañada de fe en los que la oyeron.
Hebreos 4.2.

Tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento Dios ha


dejado claro que no quiere la muerte del ser humano. Veamos:

Ezequiel 18.32: Porque no quiero la muerte del que muere, dice


Jehová el Señor; convertíos, pues, y viviréis.

Según algunos, es imposible que un impío se vuelva de su mal


camino. La Biblia nos dice otra cosa diferente. Dios pone sobre el
ser humano la responsabilidad recibir o rechazar el amor de Dios.

Ezequiel 33.11: Diles: Vivo yo, dice Jehová el Señor, que no


quiero la muerte del impío, sino que se vuelva el impío de su
camino, y que viva. Volveos, volveos de vuestros malos caminos;
¿por qué moriréis, oh casa de Israel?
72

Aquellos que se niegan a obedecer la palabra de Dios, se


encuentran en el proceso de perderse, y perecer por su propia
voluntad.

Como está escrito: Dios no quiere que ninguno perezca, sino que
todos procedan al arrepentimiento. 2Pedro 3.9. Esta es la razón
por la cual Jesús aun no ha regresado.

Está esperando que algunos crean en la Palabra y se salven.


¿Tienes tú seguridad de salvación? Si no la tienes debes creer en
el amor de Dios y en Cristo Su Hijo. Esta es la misión de la
Iglesia: la predicación del mensaje del amor de Dios.

Y para estas cosas ¿Quién es suficiente? Aquí el apóstol pone en


cuestión su propia dignidad y aptitud para esta labor. Esta
pregunta requiere una respuesta negativa: Nadie que confíe en sí
mismo o en sus propias fuerzas.

En el texto griego, la frase empieza con las palabras y para estas


cosas. Estas palabras reciben énfasis porque se refieren a la obra
del ministerio, cuya exigencia lo incluye todo.

Un pastor debe estar preparado para predicar el domingo y,


algunas veces, durante la semana. Además, están sus deberes de
estudio, la enseñanza, la preparación y supervisión de
responsables, las sesiones de planificación, asesoramiento y
consejería, las visitas, las bodas y funerales, la supervisión de los
distintos departamentos de la iglesia, la promoción del
evangelismo, las misiones, y un sin fin más de responsabilidades.

El ministro tendría que estar preparado para decir unas cuantas


palabras y dirigir la oración, en cualquier ocasión, tanto en la
iglesia como en la comunidad ciudadana.

Para quien se dedica por completo al ministerio de la Palabra, el


trabajo parece perpetuo. Pero, ¿Existe en este mundo una labor
más gloriosa y, al mismo tiempo, con mayor carga de
73

responsabilidad que el ministerio de la Palabra? La respuesta es


que no.

Pablo era consciente de que no podía cumplir con sus


obligaciones por sí mismo. Se daba cuenta de que era Dios quien
le había dado los talentos, la capacidad y la perseverancia. Por eso
escribió los pasajes que estudiaremos más adelante en 3.4-6.

En este pasaje responde a su pregunta poniendo como referencia a


Dios, que lo capacita, tanto a él como a otros, para ser ministros
del evangelio.

Cuando alguien conoce a Dios exhala un aroma que es


inconfundible. La gente nota cuando alguien tiene relación con
Dios y cuando no la tiene.

¿Crees que se puede notar cuando realmente tiene una buena


relación con Dios y cuando no la tiene? Quizás algunos no
puedan, pero otros, sí podemos notarlo.

Aunque no me refiero en absoluto a religión alguna. Sino a


relación con Dios.

Muchas personas exhalan un tufo nauseabundo a fanatismo


religioso que molesta. Gente hipócrita que habla mucho de Dios a
otros, pero que no vive lo que exige de los demás.

Estar con alguien así es terrible. Porque acaba desagradando


como un mal olor. El peor que puedas imaginar.

17. ¿Había falsos apóstoles en tiempos de Pablo? Sí. Pablo se


coloca frente aquellos que manipulaban las Escrituras. Tanto en
Corinto como en otros lugares. Predicadores que usaban el
evangelio como negocio.

Los enfrenta, los denuncia y los descubre.


74

Él habla de muchos que medran falsificando la Palabra de Dios.


Esta frase de Pablo requiere una aclaración para entenderla
adecuadamente.

La palabra muchos la entendemos todos, indica que no eran pocos


los que intentaban engañar a los incautos. Como si no tuvieran
bastantes problemas, los corintios tenían que batallar también con
los mercaderes de la religión.

¿Qué es medrar? Es una palabra ya en desuso. Se trata de


falsificar diluir algo por interés. Negociar por lucro. Falsificar
algo para mejorar su situación financiera. La imagen estaba
tomada de aquellos que aguaban el vino para sacarle más
ganancia.

Yo recuerdo cuando era niño, que mi madre se quejaba a la


persona que nos vendía la leche porque la aguaba. Claro que
como la daba a crédito y mi mamá le pagaba cuando cobraba, la
señora se aprovechaba que no podía comprarla en la tienda y
aguaba la leche para sacar más beneficio. Ese es medrar.

¿Qué es lo que, según Pablo, “muchos” falsificaban? ¿Qué


estaban diluyendo? La Palabra de Dios. ¿Ocurren estas cosas en
la actualidad? Desgraciadamente sí. Sin duda.

Actualmente también abundan los falsos apóstoles y falsos


pastores que comercian con la fe de la gente que ignora la Palabra
de Dios.

Más adelante el apóstol volverá a hablar de estos personajes en el


4.2 y en el 11.13-15. ¿Qué implica esto? Que muchos creyentes
están diciendo amén a falsas doctrinas.

¿Cómo es posible esto? Porque viven su fe, sin tomarse la


molestia de comprobar si lo que les predican o enseñan es verdad
o no. Así que, es lógico que sean engañados.

¿Cuántos de aquí quieren ser engañados? Ninguno, espero.


75

¿Me creerían si yo les dijera que somos dioses pequeños?


¿Que tenemos derecho a ser ricos porque somos hijos de Dios?
¿Que si declaras algo sucederá?
¿Qué si te toco recibirás una sabiduría sobrenatural?

Ninguna de estas cosas deben creerse, aunque muchos las creen.


¿Saben por qué no lo creeríais vosotros? Porque están siendo
enseñados en la Palabra de Dios.

¿Qué efecto produce eso en vuestras vidas? Les inmuniza contra


las falsas doctrinas. Un poco de Biblia cada día, nos vacuna
contra los falsos pastores y maestros. Contra los comerciantes de
la fe.

Sólo por la Palabra de Dios podemos saber si una doctrina es


correcta o incorrecta, y en qué medida. Pero no basta con tener la
Biblia, hay que conocerla en profundidad.

Esto es lo que hacemos cada semana en esta clase bíblica.


Profundizamos en las Escrituras para conocer la verdad. Por eso
somos libres de errores doctrinales. Porque la verdad te hace libre.

Desgraciadamente, cada vez hay más falsos que verdaderos


siervos de Dios. Razón por la cual, mucha gente, al descubrirlo
están saliendo de las iglesias.

Tal y como lo veo, está dándose comienzo a un nuevo tiempo en


el que la mayoría de la verdadera Iglesia de Cristo, tendrá que
abandonar los templos y volver a las reuniones por las casas.

No hay más opción para quienes después de visitar una y otra


congregación, comprueban que la mayoría está pervirtiendo la
verdad; adulterando por codicia la Palabra de Dios.

Sin embargo, el gran problema que veo en este movimiento es la


falta de ministros. Personas con llamado y capacitación de Dios,
76

para exponer en profundidad y con seriedad las Sagradas


Escrituras.

Algunos piensan que no necesitamos pastores. Pero, ¿Quién


instituyó los ministerios? Dios. ¿Sabía Él lo que hacía? Sin
ninguna duda.

¿Por qué necesitamos pastores que nos expongan y enseñen la


Palabra de Dios, y supervisen nuestras vidas en Cristo? Porque así
Dios lo ha querido.

Un enorme riesgo que afronta la Iglesia hoy es que, descubriendo


que existen falsos pastores, rechace el ministerio. ¿Debemos
rechazar a los falsos pastores? Desde luego. Pero ¿Debemos
rechazar a los verdaderos siervos de Dios? Por supuesto que no.

Cuando cada grupo se reúne, y cada quien da su opinión sobre la


Biblia, ¿Qué puede ocurrir? Existe un alto riesgo de error.

¿Es pues, correcto menospreciar el ministerio pastoral? No, no es


correcto. ¿Por qué? Porque no cuentan con la voluntad de Dios.
Efesios 5.10 Comprobando lo que es agradable al Señor.

Además, en un grupo de creyentes, ¿Están todos preparados para


interpretar correctamente las Sagradas Escrituras? Desde luego
que no. Aunque muchos piensan que basta con la buena intención.

Un error muy extendido es que teniendo al Espíritu Santo ya


tenemos todo el conocimiento que necesitamos. ¿Es correcto
pensar así? No.

¿Por qué? ¿Cómo podríamos demostrar el error de esta postura de


manera bíblica? Porque el Espíritu Santo inspiró las palabras de
Cristo: Escudriñad las Escrituras. Juan 5.39. Lo cual es un
mandato del Señor.

¿Qué puede ocurrir si varios creyentes sin la preparación


adecuada se ponen a dar su opinión sobre la Biblia? Casi con toda
77

seguridad se desviarán de la verdad, interpretando mal la Palabra


de Dios.

2Timoteo 2.15 nos muestra que Dios está interesado en el buen


uso de Su Palabra. De hecho, Pablo habla en este pasaje de que
todos cuantos exponemos las Escrituras tendremos que pasar por
el tribunal de Cristo, donde seremos aprobados, o reprobados.

Oro por todos aquellos hermanos que están repartidos por toda la
faz de la tierra y que están en esa triste situación. Les aconsejo
que sigan orando y buscando algún grupo, alguna congregación,
aunque sea pequeña, donde se predique y enseñe la sana doctrina.

Si no la encuentran, entonces es cuando deben buscar a otros


creyentes y reunirse juntos en algún hogar. Porque no es bueno
quedarse solos, ya que hay mucho de la vida cristiana que no es
posible vivirla en solitario.

¿Por qué nos puso Dios en comunidad? Porque parte del plan de
Dios es tratar con nuestras vidas. Purificarnos. Lo cual hace por
medio de las relaciones interpersonales con otros creyentes.

Volviendo al pasaje de 2Corintios 2.17, estos falsos profetas


causaban mucho perjuicio a la iglesia de Corinto, por lo que
tenían que ser desenmascarados.

Aunque a algunos creyentes no les guste que se discuta sobre las


cosas de la Palabra de Dios, ¿Qué piensas es bueno o malo
discutir sobre las cosas de Dios? Es necesario hacerlo a fin de
desenmascarar a estos falsos siervos que se benefician de la
ignorancia de los demás.

Si a una persona no le gusta ver, en las redes sociales, discusiones


sobre la Sagrada Escritura, ¿Qué debe hacer? No entrar en las
redes sociales, pues, allí hay mucha gente y por consiguiente es
lógico que se produzcan discusiones sobre lo que es verdad y lo
que no la es.
78

¿Son todos los creyentes llamados a predicar y enseñar las


Sagradas Escrituras? ¿Son todos los creyentes llamados a la
defensa de la fe? Desde luego que no.

Sin embargo, algunos sí lo hemos sido. ¿Deben intentar


desanimarnos en la tarea? Desde luego que no, sino orar por
quienes Dios ha llamado para desenmascarar a estos siervos de
Satanás.

¿Cómo podría evitar la gente que la engañaran con falsedades en


relación a las cosas de Dios? Conociendo la Palabra de Dios.

¿Era Pablo de los que falsificaban la Escritura? Por supuesto que


no. Es interesante leer el verso 17 completo.

Pues no somos como muchos, que medran falsificando la palabra


de Dios, sino que con sinceridad, como de parte de Dios, y
delante de Dios, hablamos en Cristo.

Frente a los falsos apóstoles, Pablo y sus colaboradores ¿Cómo


actúan? Con toda sinceridad. ¿Qué significa sinceridad?

Este término, que se puede traducir también por pureza, significa


examinar algo a la luz del sol. Es decir, que actuaban por
motivaciones puras. Sin intereses personales ocultos.

Pablo y sus colaboradores habían sido encomendados por Dios y


gozaban de la autoridad Divina para presentar la Voluntad de
Dios a judíos y gentiles. Lo que hacían delante de Dios.

¿Existen muchos Pablos hoy? Desgraciadamente no. Hoy sobran


muchos engañadores, comerciantes de la fe, y hacen falta muchos
como Pablo y sus colaboradores.

Como está escrito en 1Pedro 5.2: Apacentad la grey de Dios que


está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino
voluntariamente; no por ganancia deshonesta, sino con ánimo
pronto.
79

3.1-3. La diferencia entre la primera carta de Pablo a los corintios


y la segunda, es que en la segunda debe enfrentarse a los intrusos
que han llegado a Corinto con cartas de recomendación, acusando
al apóstol de ser un impostor.

¿Qué hubiera ocurrido si Pablo no hubiese combatido a los falsos


apóstoles engañadores? Que la Iglesia se hubiera desviado de la
verdad y acabaría convirtiéndose, como muchas hoy, en una
empresa al servicio de quienes las dirigen.

Los cristianos de Corinto se habrían esclavizado a falsas doctrinas


que les prometen bendición a cambio de obras, sacrificios, dinero
o cualquiera otras cosas que jamás podrían salvarles.

¿Conocen a algún grupo así? Desgraciadamente en la actualidad


abundan por todo el mundo. Pues, como decíamos la semana
pasada, el diablo sabe que le queda poco tiempo y ha desatado
todo su poder mentiroso, para engañar a cuantos no conocen la
Palabra de Dios.

De ahí las preguntas retóricas que presenta y que merecen una


respuesta por parte de los corintios. ¿De qué tipo? ¿Positiva o
negativa? Negativa por supuesto.

En contraste con aquellos falsos apóstoles, Pablo vino a Corinto


como apóstol de Jesucristo; aunque la gente sabía que no era
miembro del grupo de los Doce que siguieron a Jesús.

Pablo se ve obligado a defenderse y mostrar una prueba sólida de


su apostolado. ¿Qué podía hacer? ¿Qué pruebas podría presentar?

Sabía que Jesús lo había llamado para ser apóstol a los gentiles,
¿No había bendecido su obra en aquella ciudad? Este es el
argumento del apóstol.

La labor de Pablo demostraba la legitimidad de su oficio


apostólico.
80

Sus aflicciones por Cristo, y el haber engendrado espiritualmente


a los corintios, servían como testimonio de que era,
indudablemente, un apóstol auténtico.

Las cartas de recomendación encajan con las costumbres de su


tiempo, en las que era común usar esta clase de cartas. Véase
Hechos 9.2; 18.27.

El mismo Pablo recomendó a Febe a los romanos, Romanos 16.1;


a Timoteo a los corintios, 1Corintios 16.10-11; y a Onésimo a
Filemón, Filemón 10-17.

Pablo se defendía a sí mismo, y a Cristo que lo había nombrado.


Su comportamiento, apostolicidad, integridad, epístolas, e incluso
su discurso o mensaje estaban en juego.

¿Qué hizo? ¿Evadió el problema? No. Lo enfrentó frontalmente.

Mucha gente huye de la confrontación, y ciertamente hay que


hacerlo en la mayoría de las veces, cuando alguien nos provoca.
Pero cuando están en juego el evangelio, y Cristo mismo, hay que
tener el valor de hacer lo que hizo Pablo. Los enfrentó.

Muchos no entienden que se enfrente cara a cara a todo aquel que


manipule la Palabra de Dios e intente hacer negocio con ella.
Piensan que con ello sólo nos ganamos enemigos. ¿Saben qué?

Pablo mismo escribió en Gálatas 4.16-17 ¿Me he hecho, pues,


vuestro enemigo, por deciros la verdad? Tienen celo por
vosotros, pero no para bien, sino que quieren apartaros de
nosotros para que vosotros tengáis celo por ellos.

Pablo habla de falsos ministros que buscan su propio bien.

También Santiago escribió: ¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que


la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera,
81

pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de


Dios.

Pablo no eludió el problema. Les hizo frente con preguntas


retóricas, a las que forzosamente tenían que contestar en forma
negativa.

Estas preguntas atacan directamente a aquellos falsos apóstoles


que se habían presentado en Corinto con cartas de
recomendación. Presumiendo que Pablo carecía de ellas.

Como traficantes de la palabra de Dios, los impostores no sólo


proclamaban un evangelio distorsionado, sino que también,
atacaban verbalmente a Pablo.

Yo vivo esto continuamente en las redes sociales. Muchos,


cuando son enfrentados con la Palabra de Dios y no pueden
argumentar en contra de la verdad, acaban atacando a la persona.

La pregunta que Pablo hace es si necesita de cartas de


recomendación, ¿Cuando vino a Corinto y les predicó a Cristo
trajo o les presentó carta alguna? Ninguna. Ni los corintios se la
pidieron entonces. No la necesitaron. ¿Por qué pedírselas ahora?

Pablo, que fundó aquella iglesia por medio de la predicación del


evangelio de salvación, pide a los corintios que evalúen su obra
como apóstol misionero.

A los corintios que le reclaman cartas de recomendación, Pablo


les responde:

2. Nuestras cartas sois vosotros. ¿Qué quería darles a entender


con esto? Que ellos mismos eran la prueba viva de que él era
apóstol de Jesucristo. Los mismos corintios son como un libro
abierto que cualquiera podía leer.
82

La carta de recomendación de Pablo, la llevaba escrita en el


corazón. ¿Qué significa esto? Cualquiera podía leer en él como en
un libro abierto. El apóstol llevaba a los corintios en su corazón.

Como su pastor, había mantenido un vivo interés por la vida y la


conducta de los corintios. Oraba por ellos día y noche, les enviaba
a sus colaboradores, y mantenía una estrecha correspondencia con
ellos, en la que los aconsejaba.

Y esta preocupación que el apóstol llevaba en su corazón, ¿Era


sólo por la congregación corintia? ¿No sería también por todas las
iglesias? Desde luego. Lo cual era conocido de todos los hombres.

Él tenía sobre su mismo corazón el peso de la obra de Cristo. De


modo que todo el que entraba en contacto con él, le oía hablar de
las iglesias.

Jesús lo envió como apóstol a los gentiles, y eso era más que lo
que cualquier documento escrito pudiera decir. ¿Creen que Pablo
necesitaba carta alguna de recomendación ante los corintios?
Ciertamente no.

3. En este pasaje Pablo les hace mirarse a sí mismos como la


prueba de su apostolado. A Pablo no le interesa hablar de sí
mismo, porque no necesita una carta personal de recomendación.

Ellos son su mejor carta de recomendación. Es más, los mismos


corintios ahora eran carta de recomendación para otros. Expedida
por Pablo y sus colaboradores.

Expedida por nosotros. Con esta frase hace referencia a la labor


del apóstol y sus colaboradores.

La recomendación de los falsos apóstoles ¿De dónde procedía?


Era humana, ¿Y la de Pablo? Divina, leamos 1Corintios 2.1-5.
83

¿Qué carta tiene más valor la que está escrita con tinta o la que
escribe el mismo Espíritu del Dios vivo? ¿La escrita en piedra o
en el corazón?

¿Qué pasaje está citando Pablo? Está citando Jeremías 31.33,


¿Por qué? Porque por medio de este pasaje, Dios le había dicho al
pueblo de Israel que él pondría su ley dentro de ellos y la
escribiría en sus corazones.

¿Por qué cita este pasaje Pablo? Porque con esto contrasta la ley
del Antiguo Testamento, que había permanecido en lo exterior de
su pueblo, con la ley del Nuevo Testamento, que opera en lo
interno.

Es una clara referencia de Pablo al antiguo pacto, mediante la cual


pone énfasis en el nuevo pacto. ¿Qué implica esto? Lo que esto
implica es que sus opositores eran ministros del pacto antiguo. Es
decir, judaizantes.

Como si un grupo de católicos viniera aquí a convenceros de que


tenéis que volver a un evangelio de obras muertas. Afirmando que
no tengo autoridad del Vaticano para enseñaros la Palabra de
Dios.

En este caso era un grupo de judíos, posiblemente de la sinagoga


de Jerusalén, que intentaban convencer a los corintios que debían
volver al antiguo pacto. A la ley mosaica que no podía salvar
porque nadie podía cumplirla.

Cuando Israel demostró que no estaba dispuesto y que además era


incapaz de permanecer fiel a ese pacto, Dios por su gracia
intervino, y prometió un nuevo pacto. De esto es de lo que habla
Jeremías 31.31-34; 32.40; nuevo kainēs, tanto en tiempo, como en
calidad.

¿Cuándo fue inaugurado el nuevo pacto? Por Cristo al morir en la


cruz.
84

Lucas 22.20 De igual manera, después que hubo cenado, tomó la


copa, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre, que
por vosotros se derrama.

Cuando su sangre fue derramada, se inauguró el nuevo pacto.

¿Cómo se entra a él? Por medio de la fe.

Filipenses 3.8-9 Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como


pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi
Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por
basura, para ganar a Cristo, 9y ser hallado en él, no teniendo mi
propia justicia, que es por la ley, sino la que es por la fe de
Cristo, la justicia que es de Dios por la fe.

¿En qué nos convierte? En justos delante de Dios.

Romanos 7.6 Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como


pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi
Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por
basura, para ganar a Cristo, 9y ser hallado en él, no teniendo mi
propia justicia, que es por la ley, sino la que es por la fe de
Cristo, la justicia que es de Dios por la fe.

¿En qué se traduce en forma práctica? En un andar en el Espíritu.

Romanos 8.3-4 Porque lo que era imposible para la ley, por


cuanto era débil por la carne, Dios, enviando a su Hijo en
semejanza de carne de pecado y a causa del pecado, condenó al
pecado en la carne; 4para que la justicia de la ley se cumpliese en
nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al
Espíritu.

Cuando Dios vio la necesidad de un segundo pacto, ¿Es lógico


pensar que quiera que permanezcamos en el primero? Desde
luego que no. De esto habla la carta a los Hebreos del 7-10.
85

Por tanto, Pablo está apelando a que consideren el resultado de su


ministerio en sus propias vidas. La obra de Dios en sus corazones
habla mucho más fuerte que cualquier carta de recomendación.

¡Qué torpes llegan a ser algunas veces los seres humanos! ¡Con
cuánta facilidad se dejan manipular por los comerciantes de la fe!
Y ¡Cuánto les cuesta seguir la verdad en amor!

Ellos mismos, los corintios, ¿No eran testimonio vivo del


ministerio del apóstol? Sin duda. Carta escrita por Cristo en sus
propias vidas, por medio del Espíritu del Dios vivo.

Fue Pablo el que trajo el evangelio, por primera vez, a los


corintios, Hechos 18.1-5.

Al contrario de aquellos falsos apóstoles que querían robar la


gloria que correspondía al apóstol por su labor. Pablo, por el
contrario, con estas palabras está dando toda la gloria al Señor.

4-6. Empecemos por el versículo cuatro. La palabra clave en este


pasaje ¿Cuál es? Confianza. Esta palabra: pephoizéis, aparece seis
veces en el Nuevo Testamento. Todas en la correspondencia de
Pablo, y cuatro en esta epístola.

¿A qué confianza se refiere aquí? A la confianza en Cristo, para


con Dios.

¿Dudaba el apóstol? De ningún modo. La confianza de Pablo no


se basaba en recomendaciones humanas, ni tan siquiera en sí
mismo. ¿Dónde estaba fundada la confianza del apóstol?
Completamente en Cristo.

Jesús llevó a Pablo a la conversión, Hechos 9.4-6, lo llamó para


ser apóstol a los gentiles, Hechos 9.15, en varias ocasiones lo
animó a proclamar la Palabra, Hechos 18.9-10; 22:18, 21; 23:11,
y constantemente cumplía las promesas que le hacía.
86

Por eso Pablo tenía plena confianza en Jesús, porque sabía que
Dios es verdadero porque le conocía bien.

5. De la misma manera, su propia suficiencia y competencia en el


ministerio se derivaba completamente de Dios, 1Timoteo 1.12-14
Doy gracias al que me fortaleció, a Cristo Jesús nuestro Señor,
porque me tuvo por fiel, poniéndome en el ministerio, 13habiendo
yo sido antes blasfemo, perseguidor e injuriador; mas fui recibido
a misericordia porque lo hice por ignorancia, en incredulidad.
14
Pero la gracia de nuestro Señor fue más abundante con la fe y
el amor que es en Cristo Jesús.

En este versículo, Pablo responde a la pregunta que se había


hecho antes en el 2.16: Y para estas cosas, ¿Quién es suficiente?

Pero Pablo dice que su capacidad no se basa en una seguridad en


sí mismo, pues sabe que sus motivos son pecaminosos y sus
deseos están manchados por el egoísmo.

Frente a la santidad de Dios, las pecaminosas cualidades humanas


de Pablo no valen nada. No puede fiarse de su propia capacidad
para planificar algo que se geste en su interior.

Tiene que volverse hacia Dios y ser consciente de que su


capacidad para predicar el evangelio, ser un siervo y consejero de
la gente de Corinto, proceden de Dios.

Romanos 15.18-19 Porque no osaría hablar sino de lo que Cristo


ha hecho por medio de mí para la obediencia de los gentiles, con
la palabra y con las obras, 19con potencia de señales y prodigios,
en el poder del Espíritu de Dios; de manera que desde Jerusalén,
y por los alrededores hasta Ilírico, todo lo he llenado del
evangelio de Cristo.

Filipenses 2.13 Por tanto, amados míos, como siempre habéis


obedecido, no como en mi presencia solamente, sino mucho más
ahora en mi ausencia, ocupaos en vuestra salvación con temor y
87

temblor, 13porque Dios es el que en vosotros produce así el


querer como el hacer, por su buena voluntad.

6. Nuestra competencia proviene de Dios. Cuando comenzamos a


dar nuestros primeros pasos en el ministerio, al enfrentar la ardua
tarea que representa, viene a nosotros, por el Espíritu, una santa
convicción de incapacidad absoluta.

Esto nos lleva a concederle mucha importancia a la preparación.


Leemos todo cuanto cae en nuestras manos, y asistimos a
congresos y retiros, a fin de conseguir la capacidad espiritual que
necesitamos.

Con el tiempo, vamos descubriendo que no es nuestra capacidad


de almacenar información, o realizar cursos, o leer libros lo que
nos capacita, sino que nuestra competencia proviene realmente de
Dios.

Algunos, que no tienen la paciencia necesaria y que buscan el


éxito en poco tiempo. Aquellos que pretenden rentabilizar sus
esfuerzos cuanto antes, acuden a metodologías mundanas, a fin de
conseguir ser “alguien” en el ministerio.

Estos son los que han introducido en la Iglesia toda clase de


metodologías que nada tienen que ver con la Sagrada Escritura, ni
con Dios mismo.

Aplican a la Iglesia métodos de marketing empresarial. Técnicas


de manipulación de masas. Prácticas paganas para aparentar un
poder que realmente no tienen.

Los verdaderos siervos de Dios no hacemos esas cosas. Nosotros


comprobamos lo que es agradable al Señor, y no participamos de
las obras infructuosas de las tinieblas, sino que más bien las
reprendemos. Efesios 5.11.
88

Pablo no era así. Su mirada no estaba puesta en obtener el éxito


en el ministerio. Pablo no confía en sí mismo, sino en Dios. Sabía
que su competencia provenía de Dios.

Cuando Pablo dice: nos hizo ministros competentes, ¿A quién se


refiere? En realidad los estudiosos no se ponen de acuerdo.
Algunos dicen que se refiere a sus colaboradores inmediatos;
otros que a aquellos de los corintios que participaban de su
ministerio; y por último otros que a aquellos llamados por Jesús al
apostolado.

Sea como fuere, es aplicable a todo aquel que sirve a Dios en


plena confianza en Dios y no en sí mismo.

La semana pasada nos quedamos en el verso 3.6 hablando sobre


los ministros competentes. Ahí seguimos.

Ministros competentes de un nuevo pacto. Así como Moisés fue


ministro profeta y mediador del antiguo pacto, así también Pablo
fue elegido para ser el ministro, profeta y mediador del nuevo
pacto entre los corintios.

Hasta el verso 11 Pablo establece aquí un paralelismo entre


Moisés y él mismo. Mediante Moisés Dios escribió Su voluntad
en piedras; Mediante Pablo lo hace en los corazones.

PACTO ANTIGUO PACTO NUEVO

1. Tablas de piedra (vv. 3, 7) 1. Tablas de carne (v. 3)


2. De la letra (v. 6) 2. Del Espíritu (v. 6)
3. Mata (v. 6) 3. Vivifica (v. 6)
4. Ministerio de muerte (v. 7) 4. Ministerio del Espíritu (v. 8)
5. Minist. de condenación (v. 9) 5. Minist. de Justificación (v. 9)
6. Con gloria (vv. 7, 9, 10, 11) 6. Con más gloria (vv. 8, 9, 10,
11)
7. Perece (v. 11) 7. Permanece (vv. 7, 11, 13)
89

¡Con razón el escritor de Hebreos asevera que el nuevo es “un


mejor pacto”!

Hebreos 7:22 Por tanto, Jesús es hecho fiador de un mejor pacto.

Hebreos 8:6-7 Pero ahora tanto mejor ministerio es el suyo,


cuanto es mediador de un mejor pacto, establecido sobre mejores
promesas. 7Porque si aquel primero hubiera sido sin defecto,
ciertamente no se hubiera procurado lugar para el segundo.

El nuevo pacto de la gracia es infinitamente superior al pacto


mosaico. Todo lo que éste no pudo hacer aquél lo hace. La verdad
gloriosa es que Dios nos ha constituido ministros del nuevo pacto.
¡Qué privilegio más grande!

¿No es extraño que haya personas que quieran volverse al antiguo


pacto que no les puede justificar delante de Dios? ¿Por qué lo
hacen?

Casi seguro porque el ser humano, en su orgullo cree que puede


suplir las demandas de Dios. Algo imposible.

Romanos 8.7-8 Por cuanto los designios de la carne son


enemistad contra Dios; porque no se sujetan a la ley de Dios, ni
tampoco pueden; 8y los que viven según la carne no pueden
agradar a Dios.

Muchos son engañados por un evangelio de obras muertas.


Pretenden que pueden agradar a Dios. Pero ¿Qué dice la
Escritura? Que no lo hacen, ni tampoco pueden.

En cierta medida, todos los cristianos somos siervos del nuevo


pacto. Aunque no hayan sido ordenados por ninguna organización
religiosa.

La pregunta que deben hacerse es si son buenos o malos siervos.


¿Cumplen con su deber?
90

Los falsos apóstoles que habían llegado a Corinto se enfocaban en


el legalismo del antiguo pacto como forma de vida cristiana. Al
igual que ellos, hoy hay muchos que hacen referencia a cuestiones
que pertenecen a las sombras.

Proclaman ayunos comunitarios y pretenden hacer cumplir las


costumbres judías de presentar ofrendas de primicias, y de
cosechas; Piden diezmos y proclaman pactos con Dios que no
pertenecen al periodo en el que estamos de la gracia, sino al de la
ley.

Muchos cristianos, por ignorancia, viven presos de prácticas


judaicas, esperando comprar las bendiciones de Dios con su
dinero. ¿Será posible? ¿Pueden comprarse las bendiciones de
Dios? Desde luego que no.

Como Iglesia de Jesucristo debemos vivir y disfrutar del nuevo


pacto, proclamado mediante la sangre, no de corderos ni becerros,
sino de Jesucristo, el Hijo de Dios.

Volvernos al legalismo del antiguo pacto, como hoy hacen


algunos, ¿Qué supone? Es un claro menosprecio del sacrificio de
Cristo en la cruz del calvario.

Si hubiésemos podido cumplir la ley mosaica ¿Tiene sentido que


Cristo se ofreciera en nuestro lugar para cumplirla por nosotros?
Por su puesto que no.

La confianza de los corintios puesta en las cartas de


recomendación humana, en vez de en la autoridad divina, era una
clara muestra de su miopía espiritual.

Una ceguera del mismo tamaño del que intenta suplir la justicia
de Dios mediante el cumplimiento de la ley mosaica.

Éstos, tarde o temprano, se ven en la obligación de reconocer que


la letra mata. Mientras que los que confían en Cristo y Su Obra,
encuentran al Espíritu de Vida que los libra.
91

Esta diferencia es notable. El texto sólo mata. Mientras El


Espíritu da vida por el texto. Esta es la razón por la cual muchos
están atrapados en teologías denominacionales, huecas, y sin
fruto.

Teologías que no sirven sino para condenación. Mientras el


Espíritu bendice y vivifica, dando significado al texto.

Por tanto, ¿Qué es lo que da vida la justicia por la ley o la justicia


por la gracia? Sin duda la justicia de Dios por la fe en Jesús. Lo
que es gracia inmerecida de Dios al que cree. Gálatas 2.16.

Es el Espíritu el que cambia el corazón humano, no la letra.


Mucho menos, cuando esa letra es parte de la ley mosaica que no
puede hacer justo a ninguno.

Hermenéuticamente hablando, Pablo identifica la letra con el


viejo pacto de la Ley mosaica, mientras que al Espíritu lo
identifica con el nuevo pacto de la gracia.

De modo que el nuevo pacto abroga el viejo, es decir, la Ley.


Como afirma Pablo en Efesios 2.15.

Romanos 8.1-4 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los


que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne,
sino conforme al Espíritu. 2Porque la ley del Espíritu de vida en
Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte.
3
Porque lo que era imposible para la ley, por cuanto era débil
por la carne, Dios, enviando a su Hijo en semejanza de carne de
pecado y a causa del pecado, condenó al pecado en la carne;
4
para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no
andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

¿Qué significa esto? Que ya no estamos bajo la ley del pecado y


de la muerte. No hay ley que nos acuse, ni nos condene.
92

Con todo esto, Pablo está aclarando a los corintios que quienes le
acusaban les estaban presentando un evangelio adulterado, basado
en el antiguo pacto. ¿A dónde les podía llevar dicho evangelio
adulterado? Sólo les podía llevar a la muerte.

7-8. Para subrayar la superioridad del nuevo pacto comparado con


el antiguo, Pablo citó Éxodo 34:29-35.

¿Por qué lo hizo? Su intención era demostrar que el antiguo pacto,


por el hecho de haber venido de Dios era glorioso, pero debido a
que su cumplimiento se basaba en la iniciativa humana, a fin de
cuentas era transitorio, y “tendía a desaparecer” katargeō,
2Corintios 3.7, 11, 13, necesitaba ser reemplazado por el nuevo
pacto, y el ministerio del Espíritu que es eterno, Hebreos 9.14.

Para ilustrar esto, ¿Qué hizo Pablo? Contrastó el brillo de la gloria


de Dios que se iba extinguiendo en el rostro de Moisés, con la
brillantez siempre creciente de los cristianos, v. 18.

El ministerio del antiguo pacto de Moisés trajo muerte al pueblo.


No fue culpa de Moisés ni de la ley, que es “santa, justa y buena”
como está escrito: De manera que la ley a la verdad es santa, y el
mandamiento santo, justo y bueno. Romanos 7.12.

Pero trajo muerte como consecuencia, porque la ley fue dada por
causa del pecado humano.

1Timoteo 1.8 Pero sabemos que la ley es buena, si uno la usa


legítimamente; 9conociendo esto, que la ley no fue dada para el
justo, sino para los transgresores y desobedientes, para los
impíos y pecadores, para los irreverentes y profanos, para los
parricidas y matricidas, para los homicidas, 10para los
fornicarios, para los sodomitas, para los secuestradores, para los
mentirosos y perjuros, y para cuanto se oponga a la sana
doctrina, 11según el glorioso evangelio del Dios bendito, que a mí
me ha sido encomendado.
93

En muy importante hacer hincapié en el verso 9. La ley no es para


el justo, sino para el pecador. ¿Con qué objetivo? Para enfrentarlo
a su pecado.

Una vez que el pecador se ha arrepentido y reconoce que no se


puede justificar delante de Dios, debe depositar fe en la ofrenda
del cuerpo de Cristo, para ser justificado.

Cuando esto ocurre, la ley ya no tiene poder sobre él.

Pues como está escrito: Porque el pecado no se enseñoreará de


vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia. Romanos
6.14.

Nos quedamos meditando en 1Timoteo 1.8 recordemos…

Uno de los temas que más se discuten entre los cristianos y los
que pretenden serlo, es si la ley de Moisés sigue en vigor o fue
abolida.

Se ha discutido hasta la saciedad, y con toda seguridad se seguirá


discutiendo, porque no se estudia en profundidad las Sagradas
Escrituras.

El problema que no se suele tener en cuenta es que hay preguntas


que se responden sí y no.

¿Sigue la ley de Moisés en vigor? Sí y no. Por muy extraño que


les pueda parecer, así es.

Estoy convencido de que ya algunos están pensando en Mateo


5.37 en el que Jesús dijo: Pero sea vuestro hablar: Sí, sí; no, no;
porque lo que es más de esto, de mal procede.

¿Cómo conciliar esto con lo que acabo de decir? Créanme que no


intento liarles, sino enseñarles. Ahora vamos a desbaratar la
madeja. Vamos a aclarar el asunto. Por supuesto lo haremos a la
luz de la Palabra de Dios.
94

Por ella es lámpara a nuestros pies… Salmo 119.105.

1Timoteo 1.8 junto con Gálatas 3.24-25 zanja la cuestión, de


manera fácil de entender.

¿Qué objetivo tiene la ley? Llevarnos a Cristo.

Ahora que estamos en Cristo debemos preguntarnos ¿La ley nos


trae a Cristo para seguir bajo la ley? De ninguna manera. Los
cristianos ya no estamos bajo la ley, sino justificados por la fe.

Volviendo al pasaje de 2Corintios 3.7-8 ¿Entienden ahora las


palabras del apóstol?

Aun cuando Dios se apareció a Moisés para darle la ley, lo hizo


rodeado de gloria. Éxodo 20.18 dice: Todo el pueblo observaba el
estruendo y los relámpagos, y el sonido de la bocina, y el monte
que humeaba; y viéndolo el pueblo, temblaron, y se pusieron de
lejos.

La gloria de Dios se estaba manifestando y la gente huyó de Su


presencia. ¿Se imaginan Si Dios descorriera el velo que le oculta
de nuestros ojos y pudiéramos verle como es?

Con razón está escrito: No podrás ver mi rostro; porque no me


verá hombre, y vivirá. Éxodo 33.20.

Todo lo que Dios hace es glorioso, tanto que, el rostro de Moisés


reflejó dicha gloria, sólo por haber estado ante Su presencia.

Cuando Moisés descendió del monte Sinaí con las tablas de los
diez mandamientos, su rostro era tan brillante, que el pueblo tenía
miedo de acercársele, Éxodo 34.29-30.

¿Por qué temían? A causa de su mala conciencia. Pablo lo


interpreta como la negativa de los israelitas a obedecer a Dios. En
95

cambio, una conciencia limpia siente gozo ante la presencia de


Dios.

El ministerio del antiguo pacto, por medio de los mandamientos,


condenaba a los hombres; a todas las personas. Pero el ministerio
del nuevo, por medio del Espíritu, conduce a los hombres a la fe
en Cristo y a la adjudicación de su justicia.

9-11. Ministerio de condenación. ¿Por qué así? Cuando Pablo


recuerda los efectos del antiguo pacto, debido a la incredulidad y
rebeldía del pueblo, no puede por menos que llamarlo ministerio
de condenación.

Pues, el antiguo pacto sólo sirvió para condenar al ser humano, al


ponerlo bajo pecado. Como está escrito: ¿Qué, pues? ¿Somos
nosotros mejores que ellos? En ninguna manera; pues ya hemos
acusado a judíos y a gentiles, que todos están bajo pecado.
Romanos 3.9.

El nuevo pacto, en cambio, lo justifica por fe en Jesús.

Gálatas 3.21-22 ¿Luego la ley es contraria a las promesas de


Dios? En ninguna manera; porque si la ley dada pudiera
vivificar, la justicia fuera verdaderamente por la ley. 22Mas la
Escritura lo encerró todo bajo pecado, para que la promesa que
es por la fe en Jesucristo fuese dada a los creyentes.

Es importante hacer un alto en el camino para hablar aquí sobre


esa falsa herejía que circula por algunos grupos religiosos que
intentan pasar por cristianos sin serlo. Me refiero a la herejía de
los pactos.

Algunos falsos pastores intentan hacernos creer que el hombre


tiene autoridad de Dios para entrar en pactos con Él. En realidad,
si estudiamos la Biblia, siempre es Dios el que pacta con el
hombre.

La Biblia sólo habla de varios pactos:


96

El de Dios con Noé y su descendencia, Génesis 9.9.


El de Dios con Abram y su descendencia, Génesis 15.18.
El de Dios con David y su descendencia, 1Reyes 2.1-4.
El de Dios con los creyentes, Isaías 61.1-8; Jeremías 31.31; El
Nuevo pacto confirmado por Jesús en su sangre, Mateo 26.28.

Siempre se nos habla de pactos que parten de Dios, no de los


hombres. Jamás se trata de pactos que parten del hombre.

Los pactos entre hombres no cuentan, en este tema.

No hay base bíblica para pactar con Dios. Mucho menos para
pensar que por darle dinero a alguien estás pactando con Dios.
Eso es un evangelio diferente, falso. De mentirosos que
comercian con la fe. No te dejes engañar.

El pacto de la justificación por la ley, aun siendo glorioso, ¿Es


comparable con el pacto de la justicia por gracia? De ningún
modo.

¿Por qué? Primero, porque la gracia es mucho más gloriosa que la


ley. Segundo, porque la ley no justifica a nadie para con Dios.
Romanos 3.28.

Los beneficios del antiguo pacto consistían en las provisiones


diarias de alimento y agua que Dios les daba; protección contra la
enfermedad, fertilidad y gestaciones no interrumpidas, un
promedio de vida largo para cada israelita.

Dios lucharía por ellos expulsando a las naciones fuera de la tierra


prometida, para que su pueblo pudiera tomar posesión desde el
Mar Rojo hasta el Mediterráneo, desde el límite sur del desierto
hasta la parte norte del Éufrates, Éxodo 23.25-31.

El pueblo estaba obligado a obedecer a Dios guardando las leyes


que había dado por medio de Moisés. Deuteronomio 28.
97

Los beneficios del nuevo pacto son el perdón de pecados, una


nueva naturaleza conforme a la voluntad de Dios, por el Espíritu,
y la esperanza de la resurrección, y la glorificación eterna, por fe
en Jesús y Su obra en la cruz del Calvario.

11. Como está escrito: Porque si lo que perece tuvo gloria, mucho
más glorioso será lo que permanece.

12-13. Así que. Por tanto, es decir, por todo lo anterior. Teniendo
tal esperanza.

Lo temporal no puede ser comparable a lo eterno. Sin embargo,


siendo sinceros, solemos darle mucha más importancia a lo
temporal que a lo eterno.

La palabra esperanza siempre genera una expectación positiva de


aquello que es bueno. La esperanza nunca negativa.

Mientras el antiguo pacto sólo puede llevar a la frustración y la


desesperación, porque no te puede justificar delante de Dios, el
nuevo te aporta esperanza.

Por tanto, la gloria que permanece es mucho mayor que la que se


extingue.

Ante esta evidencia, Pablo se permite ser franco y sincero con los
corintios. La expresión es relacionada con no cubrirse el rostro,
como hacía Moisés, sino a cara descubierta. La comparativa del
verso 13 lo deja bien claro.

Más adelante lo dirá en el verso 18.

La palabra que se traduce por franqueza, es parresia, que en otros


pasajes es traducida por denuedo. Hechos 4.13, 29, 31. ¿Qué
significa denuedo? Hablar públicamente con claridad y valor.

Debemos hablar con denuedo, con valor, con claridad, sin tapujos
ni doblez. Como lo hacía Pablo. Con valentía.
98

¿Cuál sería la paráfrasis de este pasaje? No somos como Moisés.


De hecho, algunas versiones lo dicen así en el verso 13.

Hay buenas razones por las cuales debemos ser valientes para
exponer la verdad de la Palabra de Dios, el mensaje del evangelio:

Porque es verdad.
Es seguro.
No cambia.
Aporta solución a la condición humana.
Es permanente.
Merece la pena.
Porque da resultado.

Mientras que la ley sólo condena, la gracia salva.

14-18. Para que… Los verdaderos siervos de Dios no llaman la


atención sobre sí mismos, sino sobre Dios y Su Palabra revelada.

¿Qué es aquello que había de ser abolido? Aquí Pablo se refería al


antiguo pacto. Pero podemos aplicarlo a todo aquello que perece.

¿Dónde fijas tu vista? ¿La tienes en lo temporal o en lo eterno?

El mismo apóstol Pablo nos exhorta: Poned la mira en las cosas


de arriba, no en las de la tierra. Colosenses 3.2

¿Qué quiere decir el apóstol con esta frase? Que debemos fijar
nuestros ojos en lo que permanece, no en lo que perece.

El entendimiento de ellos se embotó. ¿Por qué? Por la dureza de


su corazón rebelde, el entendimiento de los judíos fue embotado.

Romanos 1.21 Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron


como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en
sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido.
99

Podría decirse que están ciegos de modo que viendo no ven. Y


teniendo oídos no oyen. No entienden el mensaje del evangelio
por la dureza de sus corazones.

No fueron capaces, ni son capaces todavía de entender la


naturaleza transitoria del antiguo pacto.

Esto ¿Les pasa sólo a los judíos? De ningún modo. También


igualmente a aquellos gentiles que intentan justificarse delante de
Dios en su propia justicia.

Sin embargo, en este mismo pasaje, tristemente revelador,


permanece el mensaje del evangelio.

Como está escrito: El cual por Cristo es quitado. Es la rebeldía lo


que embota el corazón. La incredulidad, es lo que incapacita al
ser humano para ver y entender la verdad de Dios.

¿Cómo puede el ser humano verse libre de esta ceguera? Por fe en


Cristo. Oyendo y creyendo el mensaje del evangelio. Como está
escrito: En él también vosotros, habiendo oído la palabra de
verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en
él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa. Efesios
1.13.

¿Cuál es la condición? Oír y creer la Palabra de verdad, el


evangelio.

No hay más condición. Esta es la demanda de Dios al ser humano.

15. Hasta el día de hoy. Los judíos del tiempo de Pablo no


pudieron percibir que el antiguo pacto era un mensaje preliminar,
no la palabra final de la revelación de Dios.

El velo, les impedía ver la gloria de Dios. Pero lo prefirieron así


porque temían por su pecado.
100

Éxodo 20.18-20 Lo explica. Estaban rechazando por su pecado, la


gloria de Dios. Se estaban apartando de Dios.

En el corazón de ellos. Cuando Pablo habla del velo que les


impide ver, ¿Se refiere a un velo real, físico? Desde luego que no.
Hablar del corazón es una clara muestra de que se está refiriendo
a una ceguera espiritual, no física.

¡Oh, cuán importante es entender los tropos, las metáforas, los


símiles, las metonimias, y todo el lenguaje figurado! Porque
muchas de las grandes herejías que se han creído y aun se creen
tienen su origen en una mala interpretación de la gramática
bíblica.

No tener en cuenta el contexto gramatical de un texto te impedirá


entenderlo, te llevará a conclusiones equivocadas, y te alejará de
la verdad.

Pablo afirma que, aun en su tiempo, cuando leían a Moisés, no lo


entendían, porque su pecado les impedía ver la gloria de Dios.

Pero eso era en tiempos de Pablo, ¿Hoy también? Es evidente que


a muchos les pasa hoy, como a algunos de entonces. Tienen un
velo puesto sobre su corazón que les impide ver la gracia de Dios
y entenderla.

Muchos en la actualidad no pueden entender que el antiguo pacto


fue sustituido por un nuevo pacto. 1Corintios 11.25.

Otros, no entienden absolutamente nada de la Palabra de Dios, y


permanecen en oscuridad.

16. ¿Cuál es la razón de su ceguera según este pasaje? La razón es


que aun no se han convertido. ¿Qué significa eso? Que continúan
en caminos de rebeldía contra Dios. Resisten a la verdad.
Prefieren creer y practicar la mentira.
101

¿Se puede resistir la gracia de Dios? ¿Se puede resistir la verdad?

Como está escrito: Y de la manera que Janes y Jambres


resistieron a Moisés, así también éstos resisten a la verdad;
hombres corruptos de entendimiento, réprobos en cuanto a la fe.
2Timoteo 3.8.

¿Quién está detrás de todo esto? Veamos lo que el apóstol Pablo


revela en 2Tesalonicenses 2.1-12.

En este pasaje escatológico, hay varias enseñanzas importantes,


en los últimos versos anuncia el engaño del diablo en que caerá
gran parte de la humanidad, con gran poder y señales y prodigios
mentirosos.

¿Por qué permite Dios la mentira, el engaño? La razón por la cual


Dios permitirá este engaño masivo de la sociedad es claramente
desvelado en este pasaje: No recibieron el amor a la verdad.

Dios siempre tiene un motivo por el cual actúa o deja de hacerlo.

¿Quiénes serán engañados? Todos aquellos que no quisieron creer


la verdad serán engañados por el Anticristo. Porque se
complacieron en la injusticia.

Si observamos el mundo de hoy, podemos ver que esto ya es una


realidad evidente. ¿Quién está detrás de todo engaño religioso? El
diablo. 4.4.

¿Cómo consigue el diablo cegar el entendimiento de las gentes?


Estimulando su ego, su orgullo, sus perversiones, haciéndoles
creer que no necesitan aprender, que ya saben todo cuanto
necesitan.

Después del derramamiento del Espíritu Santo, la oposición de la


jerarquía religiosa de Jerusalén produjo una gran persecución
contra la Iglesia, Hechos 8.1. El velo cubría el corazón de la
gente.
102

¿Cómo se cura la ceguera espiritual? Con la conversión. ¿Qué se


necesita para convertirse a Cristo? Cuando el apóstol Pablo fue
llamado por Cristo, lo explicó.

Hechos 26.16-18 Ahí explica Jesús mismo cómo los ciegos


pueden convertirse por la fe. ¿Y cómo viene la fe? Por el oír la
Palabra de Dios, Romanos 10.17.

El mismo Pablo tuvo que salir del antiguo pacto para poder ver la
gloria de Dios. Sólo así pudo entender la gracia de Dios, revelada
para justicia a ¿Quién? A todo aquel que cree.

Como está escrito: Porque la gracia de Dios se ha manifestado


para salvación a todos los hombres. Tito 2.11.

Intentar interpretar esto de otra manera para que diga otra cosa
diferente a lo que dice es manipular, adulterar la Palabra de Dios.
¿Enseña la Biblia que Dios sólo quiera salvar a unos cuantos? De
ningún modo. Eso es totalmente falso. A todos los hombres.

…porque el fin de la ley es Cristo, para justicia a todo aquel que


cree. Romanos 10.4

El Dios de Israel es el mismo Dios del Nuevo Testamento que se


revela en Jesús.

Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su


Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley, para que redimiese a
los que estaban bajo la ley, a fin de que recibiésemos la adopción
de hijos. Gálatas 4.4-7.

Jesús vino a su propio pueblo, pero los judíos no quisieron


reconocerlo, Juan 1.11.

La predicación de la Palabra de Dios demanda fe al ser humano


que la oye. Quienes reciben y creen la Palabra de Dios, el
103

evangelio, se convierten por fe en hijos de Dios. Es lo que dicen


las Escrituras en Juan 1.11-12;

…pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la


ira de Dios está sobre él. Juan 3.18, 36.

Si Dios condena al que rehúsa creer es porque la fe depende del


hombre. No depende de Dios. Dios demanda fe al hombre para
que crea.

Si dependiera de Dios la fe, no condenaría a quien no la tuviera.


Algunos mal interpretan Efesios 2.8 diciendo que la fe es una
gracia. Cuando en realidad lo que dice Pablo ahí es que la gracia
es la salvación.

El velo representa el castigo de Dios ante la rebeldía humana, ante


la negativa del hombre a aceptar el mensaje de Dios. Por eso Dios
lo condena.

El evangelio es el testimonio de Dios, como está escrito: Así que,


hermanos, cuando fui a vosotros para anunciaros el testimonio de
Dios, no fui con excelencia de palabras o de sabiduría.
1Corintios 2.1.

Quien no cree el evangelio no está creyendo a Dios.

1Juan 5.9-12 Si recibimos el testimonio de los hombres, mayor es


el testimonio de Dios; porque este es el testimonio con que Dios
ha testificado acerca de su Hijo. 10El que cree en el Hijo de Dios,
tiene el testimonio en sí mismo; el que no cree a Dios, le ha hecho
mentiroso, porque no ha creído en el testimonio que Dios ha dado
acerca de su Hijo. 11Y este es el testimonio: que Dios nos ha dado
vida eterna; y esta vida está en su Hijo. 12El que tiene al Hijo,
tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida.

La gente puede comprender el mensaje y cuando depositan su fe


en Cristo, se convierten al Señor.
104

El negarse a creer es rechazar del mensaje del evangelio, el


testimonio que Dios ha dado acerca de Su Hijo.

Hay quien decide creer a Dios, y hay quienes deciden no hacerlo.


¿Qué has hecho tú? ¿Has creído a Dios o le has rechazado?

¿Qué ocurre cuando sucede esto en el corazón de alguien? Que se


endurece y queda en ceguera espiritual. El velo permanece.

En cambio, cuando alguien recibe el testimonio de Dios, es decir,


le cree a Dios, ¿Qué ocurre? Que el velo le es quitado. Esto es lo
que dice Pablo en este pasaje.

17-18. El primero de estos versos es breve y poco complicado,


pero es muy profundo.

El Señor es el Espíritu. ¿Qué dice Pablo aquí? Esta declaración en


la que identifica al Señor con el Espíritu y al Espíritu con el
Señor, es una clara defensa de la deidad del Espíritu Santo. Una
referencia que confirma la doctrina de la Trinidad.

Son muchos los que rechazan esta verdad bíblica. En su mayoría,


porque no conocen suficientemente las Escrituras.

Un resultado del nuevo pacto en el creyente es la libertad. Pablo


comparó a aquellos que estaban bajo el antiguo pacto, con hijos
de esclavitud y a aquellos que estaban bajo el nuevo, con hijos de
libertad. Veamos un pasaje en el que lo aclara con una alegoría.

Gálatas 4.24-31 Decidme, los que queréis estar bajo la ley:¿No


habéis oído la ley? Porque está escrito que Abraham tuvo dos
hijos; uno de la esclava, el otro de la libre. Pero el de la esclava
nació según la carne; mas el de la libre, por la promesa. Lo cual
es una alegoría, pues estas mujeres son los dos pactos; el uno
proviene del monte Sinaí, el cual da hijos para esclavitud; éste es
Agar. Porque Agar es el monte Sinaí en Arabia, y corresponde a
la Jerusalén actual, pues ésta, junto con sus hijos, está en
esclavitud. Mas la Jerusalén de arriba, la cual es madre de todos
105

nosotros, es libre. Porque está escrito: Regocíjate, oh estéril, tú


que no das a luz; Prorrumpe en júbilo y clama, tú que no tienes
dolores de parto; Porque más son los hijos de la desolada, que de
la que tiene marido. Así que, hermanos, nosotros, como Isaac,
somos hijos de la promesa. Pero como entonces el que había
nacido según la carne perseguía al que había nacido según el
Espíritu, así también ahora. Mas ¿qué dice la Escritura? Echa
fuera a la esclava y a su hijo, porque no heredará el hijo de la
esclava con el hijo de la libre. De manera, hermanos, que no
somos hijos de la esclava, sino de la libre.

Es interesante la aclaración de Pablo sobre esta alegoría al decir


que el nacido de la carne persigue al nacido del Espíritu. ¿No
ocurre lo mismo en la actualidad? Los legalistas judaizantes
continúan después de dos mil años persiguiendo a los hijos de la
promesa.

Pretenden esclavizarnos mediante la ley que ni ellos mismos


pueden cumplir. Pero no lo lograrán: Porque el Señor es el
Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad.

El ser humano nunca es completamente libre hasta que tiene al


Espíritu de Dios en su vida. Pero ¿Cuándo viene el Espíritu de
Dios a tu corazón? Cuando oyes y crees en el evangelio de Cristo.

Como está escrito: En él también vosotros, habiendo oído la


palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo
creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa,
14
que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la
posesión adquirida, para alabanza de su gloria. Efesios 1.13-14.

El Espíritu Santo es el Espíritu del Señor. Como está escrito: Mas


vosotros no vivís según la carne, sino según el Espíritu, si es que
el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el
Espíritu de Cristo, no es de él. Romanos 8.9.

Recordemos que el Espíritu lo reciben los que creen en Jesús.


Juan 7.37-39.
106

18. ¿De qué nos habla este pasaje? ¿Por qué escribió el apóstol
Pablo estas palabras? ¿Qué quería decirnos con ellas? ¿Cuál es el
tema del que trata aquí?

Trata de la transformación que se produce, o debe producirse en


la vida de los cristianos.

¿Cuántos de ustedes han sido transformados? ¿En qué lo han


sido? ¿Cómo podríamos comprobar que realmente hemos
cambiado? Sino hemos cambiado todo cuanto quisiéramos
¿Cómo podríamos hacerlo?

Con un estudio detallado de este pasaje podríamos responder


estas y otras preguntas sobre el tema en cuestión.Veamos:

Nosotros todos. ¿De quiénes está hablando el apóstol Pablo? De


todos los cristianos. Todos. ¿Aún los carnales corintios? También
ellos.

Todos estamos en un “proceso de transformación”. Hay algunas


cosas que ocurren inmediatamente que depositas fe en la Palabra
de Dios. Como por ejemplo: Somos perdonados, lavados,
santificados, justificados, etc.

Pero otras van ocurriendo paulatinamente, conforme nos vamos


despojando de las caretas. Esa transformación debe seguir
produciéndose hasta convertirnos en la misma imagen de la gloria
del Señor.

Es delante de Dios, sin caretas, que descubrimos lo que somos. Y


aquellos que se miran en Cristo y se abren al amor de Dios son
transformados a la imagen de Cristo.

Es la obra de regeneración y santificación que el Espíritu Santo va


haciendo en la vida del creyente, la que le libera y transforma por
medio de Sus frutos, hasta llegar a reflejar la imagen de Cristo.
107

La palabra transformados es metamorfoó, es la misma que usó


Mateo 17.2 para expresar la transfiguración, o la misma que usa
Pablo en Romanos 12.2 donde dice: No os conforméis a este
siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro
entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad
de Dios, agradable y perfecta.

Ambas citas hablan de transformación interna, que se hace fácil


de ver; porque produce un cambio, una transformación de la
apariencia externa.

La transformación del creyente comienza siendo interna, pero


debe tener una repercusión externa. Gradualmente más visible.

¿Quién produce el cambio? ¿Cómo se produce? ¿Quiénes están


involucrados?

Por este pasaje debemos entender que es Dios quien produce el


cambio. Pero, ¿Significa eso que debemos cruzarnos de brazos y
esperar que Dios produzca el cambio en nosotros? De ningún
modo.

Dios demanda nuestra colaboración en la transformación. No


porque él la necesite, sino porque ha querido transformarnos en la
medida en la que nosotros respondamos a su llamado.

¿A qué somos llamados por este pasaje? A acercarnos a Dios,


quitarnos las caretas, y mirarnos en la gloria de Dios.

Sólo en la medida en que vayamos siendo capaces de despojarnos


de nosotros mismos y actuar en obediencia a Dios, podremos ver
el cambio en nuestras vidas.

Hay algunos que sólo manifiestan una falsa transformación


externa, ¿Lograrán engañar a Dios? En absoluto. Pretendiendo
engañar a Dios se engañan a sí mismos, porque ni a los demás
consigue engañar. Por cuanto la hipocresía es fácilmente
detectable.
108

Los verdaderos creyentes, son realmente transformados en nuevas


criaturas por el poder de Dios.

Pablo mismo, de un orgulloso y fanático judío fue transformado


en un humilde y obediente siervo de Cristo. Como está escrito: Y
así como hemos traído la imagen del terrenal, traeremos también
la imagen del celestial. 1Corintios 15.49.

Mucha gente está en la “iglesia” sólo porque cree erróneamente


que así puede llegar a “ser alguien”. Algunos se han cambiado de
congregación buscando aquella en la que le puedan dar
oportunidad de demostrar su “saber”.

Es decir, por vanidad. Pretenden que saben algo y hacen alarde de


sí mismos, vanagloriándose de un conocimiento que no tienen.

Éstos, como dice Pablo: malos hombres, engañadores, irán de


mal en peor, engañando y siendo engañados. 2Timoteo 3.13.

Cuando un corazón está lleno de sí mismo, no puede llenarse de


Dios. El proceso de ser llenos del Espíritu Santo requiere que
primero nos vaciemos de nosotros mismos. Razón por la cual el
Señor Jesús dijo: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a
sí mismo, tome su cruz cada día, y sígame. Lucas 9.23.

Aquí vemos, una vez más, cómo Dios requiere de nuestra


colaboración en la transformación de nuestras almas. ¿Podía
hacerlo Él por sí mismo? Claro que sí. Pero, en Su Soberana
Voluntad, ha querido hacerlo en la medida en la que nos
entreguemos sin medida a Él.

Recapitulemos entonces. Hay algunas cosas interesantes en este


pasaje de 2Corintios 3.18:

La transformación es para todos los creyentes: Nosotros todos.


Sean judíos o gentiles. No hay diferencia. Cuando creemos
109

dejamos de ser judíos o gentiles para convertirnos en hijos de


Dios.

Nuestra responsabilidad: Mirando a cara descubierta. Sin velos,


sin caretas. Sin escondernos. Esto es lo mismo que decir sin
hipocresía.

Es progresiva: Mirando…, somos transformados. Vamos siendo


transformados de gloria en gloria.

La obra la hace Dios, pero conforme le dejamos hacerla. Razón


por la cual vemos a cristianos que dan fruto al ciento por uno, o al
sesenta, o al treinta; e incluso algunos que no dan ninguno. Estos
son los que serán cortados y echados al fuego y arden.

Por el Espíritu del Señor. El Espíritu hace la obra. ¿Y cómo la


hace? Por la Palabra:

Santiago 1.18 El, de su voluntad, nos hizo nacer por la palabra


de verdad, para que seamos primicias de sus criaturas. También
1Pedro 1.23.

1Juan 3.1-3 Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que
seamos llamados hijos de Dios; por esto el mundo no nos conoce,
porque no le conoció a él. 2Amados, ahora somos hijos de Dios, y
aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que
cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le
veremos tal como él es. 3Y todo aquel que tiene esta esperanza en
él, se purifica a sí mismo, así como él es puro.

Resumiendo todo esto:

¿Eres sincero con Dios y los demás o eres un hipócrita?


¿Eres valiente para hablar de Dios, o cobarde?
¿Te conocen por tu denuedo, o el desánimo?
¿Vives anclado en el antiguo pacto, o en el nuevo?
¿Qué mensaje cree que debemos predicar?
110

El Señor te transforma, pero sólo si quieres.


Él no te obligará. En Su Soberanía ha querido que así sea.
Nuestra labor está íntimamente ligada a la comprensión de la
Palabra.

¿Estás estudiando las Escrituras, o perdiendo el tiempo?


¿Qué estás haciendo para aumentar tu saber de Dios?
No sigas atajos, esfuérzate y estudia.
Asegúrate de estar en la verdad.

De gloria en gloria. La gloria que se veía en el rostro de Moisés,


era temporal. En contraste con esa gloria pasajera, la gloria de los
hijos de Dios va en aumento.

Como está escrito: Mas la senda de los justos es como la luz de la


aurora, Que va en aumento hasta que el día es perfecto. El
camino de los impíos es como la oscuridad; No saben en qué
tropiezan. Proverbios 4.18-19.

No es gloria humana, no se trata de la gloria del hombre, sino que


la gloria del cristiano siempre es reflejo de la gloria de Dios en él.
Es consecuencia de la presencia de Dios en su vida.

La semana pasada en el 3.18 hablamos sobre la transformación


que Dios quiere producir en todos los cristianos. Hablamos de que
debemos reflejar la gloria de Dios. Y que ese reflejo sólo se
consigue por el Espíritu, mirando la gloria del Señor a cara
descubierta.

¿Creen que todos los que se dicen ser cristianos reflejan la gloria
de Dios? Es evidente que no.

¿No les parece curioso que muchos que pretenden estar sirviendo
a Dios, reflejen más la gloria del mundo, que la gloria de Dios?
¿Recuerdan la tentación de Satanás al Señor Jesús?

Mateo 4.8-10 Otra vez le llevó el diablo a un monte muy alto, y le


mostró todos los reinos del mundo y la gloria de ellos, y le dijo:
111

Todo esto te daré, si postrado me adorares. Entonces Jesús le


dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios
adorarás, y a él sólo servirás.

Muchos falsos pastores y apóstoles, reflejan la gloria de este


mundo: trajes caros, relojes de oro, grandes mansiones, aviones
privados, etc. Hacen alarde de sus riquezas como si una prueba de
la bendición se tratase.

¿Creen que todas las riquezas materiales son prueba de la


bendición de Dios? Es evidente que no. Pues, muchos de los más
ricos de este mundo han conseguido sus riquezas con el negocio
de la muerte.

Drogas, tráfico de personas, prostitución, asesinatos, generando


conflictos para vender armas, provocando guerras, hambres,
provocando enfermedades para después vender medicamentos
que no necesitábamos, etc., etc., etc.

Quizás la peor manera de hacerse rico es negociando con la fe de


las gentes. Porque les arrastra hasta el infierno, haciéndoles creer
que van para el cielo. Me refiero a los falsos pastores y maestros.
A todos estos que ahora les gusta encumbrarse llamándose
apóstoles, cuando no son ni cristianos, sino pecadores no
arrepentidos.

¿Por qué será? ¿Habrán caído en la tentación de buscar la gloria


de la tierra en vez de la gloria de Dios? Algunos con toda
seguridad.

Otros, están tonteando con la tentación. A esos que están jugando


con la idea de que hay que hacer lo que sea para que la “iglesia”
crezca, quiero decirles que Dios no les ha llamado al éxito, ni a la
fama, ni al dinero. Dios les ha llamado a conocerle y entenderle.

A darle a conocer a quienes aún no saben nada de Él. Y que un


día tendrán que rendir cuentas delante de Dios, de cómo han
vivido y qué han enseñado.
112

La semana pasada decíamos que la luz que refleja la Luna no es


suya, sino del Sol. Así tampoco la gloria del cristiano es suya,
sino reflejo de la gloria de su Señor.

La cuestión es saber quién es el “señor” de todos estos que sólo


parecen estar interesados en sacarle dinero a la gente.

A diferencia de la gloria de Moisés que era pasajera, la del


creyente es eterna. No sorprende que Pablo estime como superior
el nuevo pacto sobre el primero.

Ser semejantes a Cristo es la meta de la vida cristiana. Como está


escrito: Porque a los que antes conoció, también los predestinó
para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para
que él sea el primogénito entre muchos hermanos. Romanos 8.29

Es el resultado de la obra de Dios en la vida de los que creen. Por


eso somos exhortados a colaborar con Dios en la tarea.

Ya vimos Romanos 12.2 ¿Qué dice? No os conforméis a este


siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro
entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad
de Dios, agradable y perfecta.

Aquí Pablo pone el énfasis en la participación humana en la


transformación del cristiano. Esto mismo lo hace en otros pasajes.

Efesios 4.22-24 En cuanto a la pasada manera de vivir,


despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los
deseos engañosos, y renovaos en el espíritu de vuestra mente, y
vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y
santidad de la verdad.

¿Quién tiene que despojarse? El cristiano. ¿Dice Pablo aquí, que


Dios le despojará? No. Dice que nos despojemos.
113

Esta implicación humana en la transformación del cristiano, está


presente en toda la literatura paulina.

Colosenses 3.9-10 No mintáis los unos a los otros, habiéndoos


despojado del viejo hombre con sus hechos, y revestido del nuevo,
el cual conforme a la imagen del que lo creó se va renovando
hasta el conocimiento pleno.

Aquí podemos ver una vez más, como la transformación es un


proceso que Dios realiza en nuestras vidas, por Su Espíritu Santo,
en la medida en la que buscamos Su gloria. No la nuestra.

El Nuevo Testamento está lleno de exhortaciones como esta en la


que se nos exige vivir de acuerdo con la Palabra de Dios. Esto es
lo que implica santidad. Alejarnos de todo aquellos que a Dios no
le agrada, y vivir de acuerdo a sus normas, no a las del mundo.

¿Qué haremos? ¿Seguiremos con nuestras vidas como si no


hubiésemos conocido la Palabra de Dios? ¿No sabéis que el
conocimiento nos hace responsables delante de Dios?

Jesús habló de esto cuando dijo: Si yo no hubiera venido, ni les


hubiera hablado, no tendrían pecado; pero ahora no tienen
excusa por su pecado. 23El que me aborrece a mí, también a mi
Padre aborrece. 24Si yo no hubiese hecho entre ellos obras que
ningún otro ha hecho, no tendrían pecado; pero ahora han visto y
han aborrecido a mí y a mi Padre. 25Pero esto es para que se
cumpla la palabra que está escrita en su ley: Sin causa me
aborrecieron. Juan 15.22-25.

¿Qué es lo que está enseñando el Señor Jesús con estas palabras?


Que el conocimiento nos hace responsables delante de Dios. Cada
uno de nosotros somos responsables delante de Dios por lo que
sabemos.

Si alguno de vosotros, que conocéis la Palabra de Dios, que sabéis


del amor de Dios en nuestro favor, lo menospreciare, no
114

importará cuánto sepas, ni cuánto hayas hecho por causa del


evangelio.

Todo el que menospreciare la sangre de Cristo, morirá. Pues,


como está escrito, y vosotros lo sabéis, en Hebreos 10.28-31: El
que viola la ley de Moisés, por el testimonio de dos o de tres
testigos muere irremisiblemente. 29¿Cuánto mayor castigo pensáis
que merecerá el que pisoteare al Hijo de Dios, y tuviere por
inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado, e hiciere
afrenta al Espíritu de gracia? 30Pues conocemos al que dijo: Mía
es la venganza, yo daré el pago, dice el Señor. Y otra vez: El
Señor juzgará a su pueblo. 31¡Horrenda cosa es caer en manos
del Dios vivo!

Porque mejor les hubiera sido no haber conocido el camino de la


justicia, que después de haberlo conocido, volverse atrás del
santo mandamiento que les fue dado. 2Pedro 2.21.

4.1-6. Las divisiones de los capítulos no siempre marcan el


principio y final de un tema. Estos seis primeros versos del
capítulo cuatro pertenecen, en realidad, al mismo tema que se
viene tratando en el capítulo anterior.

1. Por lo cual, teniendo nosotros este ministerio. A la pregunta de


¿Quiénes son estos “nosotros”? ¿Se trata de los mismos del verso
anterior? Debemos responder que no se refiere a todos los
cristianos, como en el 3.18. Aquí se refiere a él mismo y sus
colaboradores.

La clave para la correcta interpretación está en la palabra


“ministerio”. Ahora está hablando de ministros y ministerio, no
de la responsabilidad de acudir a Dios para ser transformados.

De hecho, en el original, no aparece la palabra nosotros. Fue


añadida para aclarar la frase. En el original está escrito: Teniendo
este ministerio…
115

La palabra nosotros se añadió para que se entendiera que Pablo


hablaba de él mismo y sus colaboradores. Aunque soy de la
opinión de que mejor no haberla añadido. Por cuanto realmente
no aclara nada, sino que incluso puede confundirse con el
nosotros del 3.18.

Sin embargo, aquellos hermanos nuestros que revisaron esta


versión, lo creyeron necesario en su tiempo. No hay que
condenarles por ello. Pues lo hicieron al objeto de esclarecer el
texto.

Es evidente que necesitamos una nueva versión de la Reina


Valera que actualice el texto al lenguaje actual y quite aquellos
añadidos que se hicieron para aclarar, dejando el texto más puro.

Desgraciadamente las que se han hecho después de la de 1960 no


son más fiables a los originales, sino menos. Las versiones que se
han hecho desde entones, son más comerciales que otra cosa.

Obedecen al despropósito de acercar los textos a las doctrinas


denominacionales de cada grupo religioso. Lo cual es un terrible
pecado por el que tendrán que pagar todos cuantos han
participado de la adulteración de la Palabra de Dios.

Gracias a Dios, aún tenemos la Reina Valera de 1960, que a pesar


de estos pequeños detalles, es la versión más fiable que existe
hasta el momento. Versión que no ha sido mejorada hasta la
fecha.

A pesar de las muchas propagandas que han hecho las editoriales


para convencernos de lo contrario. Todo cristiano debiera leer un
libro de César Vidal y Domingo Fernández, titulado:
CONSPIRACIÓN CONTRA LAS SAGRADAS ESCRITURAS.

Libro que pueden descargar gratuitamente en formato PDF, desde


nuestra web en el apartado: Enlaces de interés.
116

Hay que orar para que Dios ponga carga en el corazón de algunos
buenos traductores, para hacer una actualización de la RV60 que
sea fiel a los originales del Textus Receptus.

Por tanto, para conocer en profundidad la Escritura nos toca


escudriñar, indagar, investigar a fondo sobre los textos originales.

Algunos, pretenden saber lo suficiente como para interpretar la


Escritura sin estudios ninguno. Les basta bajarse cualquier
artículo que encuentran en la red, y que les llame la atención. Y
ya se consideran teólogos y biblistas.

Sigamos con el texto.

Según la misericordia que hemos recibido. Nadie está en el


ministerio porque lo merezca sino porque Dios, en su
misericordia, lo encomendó.

Ninguno lo está tampoco en base a sus propias capacidades.


Recuerden 3.4-6. Sólo Dios hace ministros competentes.

Sin embargo, uno de los más grandes problemas que se ha


agudizado muchísimo en la Iglesia actual del siglo XXI, es que
muchos están “ministrando” sin tener que hacerlo.

Cualquiera que tenga un poco de “labia”, don de palabra, ya se


cree predicador. Es normal que la Iglesia esté llena de
comerciantes, ya que existen muchos púlpitos en los que no hay
siervos de Dios, sino charlatanes.

Los charlatanes eran vendedores ambulantes que iban de pueblo


en pueblo con su camión lleno de cachivaches para vender, y
comenzaban a pregonar sus mercancías para conseguir hacer sus
ventas.

Esta gente solía hablar con mucha fluidez y muy rápidamente de


las maravillas de sus mercancías, de manera que no dejaba que los
posibles clientes les diera mucho tiempo de pensar, y así
117

engañaban a los pobres sacándoles su dinero, por cosas que no


merecían la mitad de su precio.

Hoy en día hay muchos charlatanes de estos en los púlpitos,


hablando mucho y rápido de manera que la gente no descubra que
les están dando gato por liebre.

Otros, por el contrario, no admiten ningún tipo de ministerios.


Consideran que no son necesarios. Que todo cristiano es un
ministro de Dios. Éstos no saben lo que dicen.

Según el mismo apóstol Pablo, Jesús constituyó los ministerios en


la Iglesia para edificarla. Efesios 4.11-16. Y está clarísimo, por lo
que él mismo enseña que, en la Iglesia no todos son ministros.
1Corintios 12.27-31.

Por tanto, en esto como en todo lo demás, debemos buscar la


verdad. Sin aferrarnos a un texto sacado de contexto. Que es lo
más habitual entre quienes no conocen a fondo la Palabra de Dios.

No desmayamos. Aquí no está hablando de agotamiento físico,


sino del cansancio emocional. Significa abatimiento espiritual,
desaliento, desánimo, depresión.

¿Saben que el desánimo es una característica muy común entre


los ministros? Hay múltiples causas para este fenómeno.

En el ministerio, la tentación del desánimo es enormemente


grande. Los creyentes no siempre son de bendición. A veces no
responden al esfuerzo que realizamos para su bien.

Fulano anda desanimado y no levanta cabeza.


Fulana volvió a romper con el marido y ya van 42 veces.
Mengano volvió a perder su trabajo por su mal carácter.
Mengana la perezosa no hace sino meterse en las vidas ajenas.
Zutano cayó otra vez en adulterio.
Zutana sigue mal criando a sus hijos y quejándose de ellos a Dios.
Un sin fin de motivos para el desánimo.
118

Gracias a Dios que esas cosas no ocurren aquí. Sino yo estaría


desanimado todo el tiempo.

Pero, a pesar de la multitud de tribulaciones y dificultades que el


apóstol sufrió por causa de su ministerio, ¿Está descorazonado?
No. Más adelante lo expresará de manera magistral.

El apóstol en el 11.13 después de la larga lista de sus


padecimientos por la obra de Dios escribe: ¿Quién enferma, y yo
no enfermo? ¿A quién se le hace tropezar, y yo no me indigno?

Una de las cosas más terribles, de las razones más difíciles de


soportar en el ministerio, es la oposición de aquellos a quienes
sirves por amor de Dios. Es un ataque diabólico muy difícil de
soportar y acaba con muchos ministerios.

Es muy curioso saber que cada año, miles de personas que han
sido reconocidos y ordenados al ministerio por sus
congregaciones o instituciones religiosas, acaban abandonando
sus responsabilidades.

Renunciando a sus “ministerios”. Puede haber explicaciones


varias para este fenómeno. Pero sin duda, al margen de las
tensiones que pueda producir la labor pastoral, hay otros motivos.

¿Será porque muchos de ellos nunca debieron asumir tal


responsabilidad? ¿Será que quienes les pusieron en el
“ministerio” no se percataron de que no eran adecuados para tal
fin?

Muchísimos más persisten en su labor, pero mantienen una doble


vida. De cara a la galería son unos y en privado otros. Viven
llenos de estrés, de rencores, amargura, de pecado.

De modo que, en el mejor de los casos, distraen a la gente


mientras caminan hacia el mal; y en el peor de los casos, llenan
las vidas de lo mismo que abunda en su corazones.
119

Últimamente se ha producido un giro dramático al respecto. En


EEUU ha comenzado entre los pastores, una tendencia mortal
hacia el suicidio. Ya son varios los pastores que han acabado así
con sus vidas.

Sinceramente, no me extraña. Hay un programa de Tv en el que


se ve la vida de ciertos “pastores”. Yo los llamaría falsos pastores.
Porque la gente que aparece en ese programa son gente sin moral
que vive en fornicación, adulterio y vicios diversos; practicando
la avaricia y la egolatría humana.

Gente que comercian descaradamente con la fe de las personas,


engañándoles, tomando el ministerio como fuente de ganancia.

¿Saben qué? El diablo no da nada a cambio de nada. Así que al


fin se cobra su factura.

El te puede poner en un falso ministerio, te encumbra y luego te


lleva al pecado, te destruye y te mata, y al destruir al pastor
destruye multitud de vidas.

No quiero con esto decir que todos los que se han suicidado
fueran falsos pastores, no los conozco personalmente. Sé que esa
es la explicación fácil que daría un sectario calvinista o
reformado: Si se suicidó no era cristiano.

Pero no es cierto, los verdaderos cristianos y aun siervos también


se suicidan, y en la Biblia tenemos un caso claro en la persona de
Judas. Aunque estos sectarios lo menosprecien y vituperen
diciendo que jamás fue un verdadero cristiano.

No obstante, aunque los verdaderos siervos de Dios también


pueden caer en depresión e incluso suicidarse, en un momento de
debilidad.
120

Aunque somos llamados a no renunciar a nuestras


responsabilidades, sin tener en cuenta el éxito o fracaso de
nuestro ministerio.

Nos quedamos en el 4.1 hablando del desmayo, desánimo, o


depresión en el servicio a Dios.

Por las palabras de Pablo, se deduce que una comprensión


adecuada de nuestro ministerio y una buena dependencia de Dios,
no nos dejará desmayar. Pero eso no significa que nunca
desmayemos.

Tampoco debe el cristiano pecar y sabemos que ciertamente no


hay hombre justo en la tierra que haga el bien y nunca peque.
Eclesiastés 7.20.

Pablo sabe que Dios mismo lo llamó a este ministerio. Tiene el


alto privilegio y la enorme responsabilidad de proclamar la gracia
de Dios. El más alto honor al que alguien puede ser llamado.

El apóstol sabe que Dios mismo lo sostiene cada día para servirle
con coraje y valentía, a pesar de la oposición. Sólo sucumbimos
cuando nos alejamos de Dios.

Cuando dejamos de orar, o decaemos en la disciplina del estudio


de la Palabra de Dios, o nos apartamos de la comunión con los
hermanos. Sólo entonces, nos debilitamos y desmayamos.

Pablo y sus colaboradores no desmayan, confían en la


misericordia de Dios que les puso en el ministerio.

2. Antes bien renunciamos a lo oculto y vergonzoso. Estas


palabras del apóstol son fuertes intencionadamente. No quiere
dejar lugar a la duda, en cuanto a la integridad de su ministerio.

Al mismo tiempo que está batallando con sus opositores, los


cuales le estaban acusando de falta de integridad.
121

Algunos estudiosos creen que posiblemente, al escribir estas


palabras, el apóstol tenía en mente la colecta para los hermanos de
Jerusalén.

Si los falsos apóstoles sembraban dudas en cuanto a su ministerio,


podrían poner en peligro esa ayuda para los hermanos. Aunque
también cabía la posibilidad de que quisieran administrarla
aquellos quienes acusaban al apóstol, a fin de aprovecharse de la
misma. En cuyo caso, la ayuda a los hermanos también peligraba.

Como siervos de Dios, Pablo es íntegro en su ministerio público y


también en su vida privada. Es transparente.

El apóstol, no especifica con claridad qué es lo oculto y


vergonzoso. Aunque habla de manera general, cuenta lo que él y
sus compañeros no hacen. Dando a entender que se referían a una
cuestión de malas motivaciones.

Algunos grupos tienen prácticas ocultas de las que prohíben


hablar fuera del grupo. Porque no las entenderán, dicen. Pero en
realidad, es porque no quieren ser cuestionados.

La fe cristiana es una fe abierta, clara y transparente. Sin ritos ni


cultos ocultos.

De hecho, somos llamados a llamar a los que están en tinieblas


para que las abandonen: Así dijo Jehová: En tiempo aceptable te
oí, y en el día de salvación te ayudé; y te guardaré, y te daré por
pacto al pueblo, para que restaures la tierra, para que heredes
asoladas heredades; para que digas a los presos: Salid; y a los
que están en tinieblas: Mostraos. En los caminos serán
apacentados, y en todas las alturas tendrán sus pastos. Isaías
49.8-9.

Porque nada hay encubierto, que no haya de descubrirse; ni


oculto, que no haya de saberse. Por tanto, todo lo que habéis
dicho en tinieblas, a la luz se oirá; y lo que habéis hablado al
122

oído en los aposentos, se proclamará en las azoteas. Lucas 12.2-


3.

Hablando de Jesús, está escrito: En él estaba la vida, y la vida


era la luz de los hombres. La luz en las tinieblas resplandece, y
las tinieblas no prevalecieron contra ella. Juan 1.4-5.

Donde está Jesús no puede haber tinieblas, porque Él es la luz del


mundo. Juan 8.12. Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la
luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que
tendrá la luz de la vida.

Jesús enseñó: Así que, no los temáis; porque nada hay encubierto,
que no haya de ser manifestado; ni oculto, que no haya de
saberse. Lo que os digo en tinieblas, decidlo en la luz; y lo que
oís al oído, proclamadlo desde las azoteas. Mateo 10.26-27.

Como está escrito: Este es el mensaje que hemos oído de él, y os


anunciamos: Dios es luz, y no hay ningunas tinieblas en él. Si
decimos que tenemos comunión con él, y andamos en tinieblas,
mentimos, y no practicamos la verdad; pero si andamos en luz,
como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la
sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado. 1Juan
1.5-7.

Pero hay grupos que andan en tinieblas, haciendo cosas ocultas y


vergonzosas, aprovechándose de la ignorancia de la gente.

Pablo y sus colaboradores, no andaban en tinieblas, sino en luz.


Conscientes de su llamado y ministerio. Conscientes de su
responsabilidad ante el Creador que les llamó. Por eso no
desmayaban.

El tener claro que hemos sido llamados por Dios al ministerio, y


saber que nuestra capacidad no depende de nosotros mismos, sino
de Dios que nos hace ministros competentes, nos ayuda a soportar
las presiones y dificultades que enfrentamos que no son pocas.
123

Por mucho que algunos insistan, el ministerio no es para todo el


mundo.

El movimiento del G-12 es responsable de poner en


responsabilidad de “liderazgo” a cientos de miles de personas en
todo el mundo. Entendiendo por liderazgo, pastorear un grupo de
personas, sea grande o pequeño.

Eso es una locura diabólica por múltiples razones:

A.- Porque no han sido llamados por Dios a ello. La Palabra de


Dios no enseña que cada creyente deba ser un líder, o un pastor.
Efesios 4.11-16; 1Corintios 12.27-31 enseña que en el Cuerpo de
Cristo no todos hacen lo mismo.

Por tanto, es un método anti bíblico. No importa que la intención


sea buena. La Biblia enseña que a Dios no le gusta que obremos
movidos por buenas intenciones, sino por lo que Él ha dejado
escrito.

El caso de Saúl lo demuestra: 1Samuel 15.10-26.

El caso de Uza también lo demuestra. 2Samuel 6.1-11.

Aunque los defensores del G-12 tengan buena intención y traten


de que muchos lleguen a la Iglesia, al usar un método piramidal,
están en desobediencia y rebeldía. Están en pecado.

Porque la misión que Cristo encargó a su Iglesia no fue la de


hacerla crecer a cualquier precio. Sino por medio del testimonio
personal de sus discípulos.

Dios no quiso hacer un líder de cada cristiano, ni un pastor de


cada creyente. Eso es responsabilidad de Espíritu Santo, quien
convence de pecado, de justicia y de juicio. Juan 16.8; O del
Señor que añade cada día a la Iglesia los que han de ser salvos.
Hechos 2.47.
124

Hoy las iglesias están llenas de gentes sin convertir, que siguen
viviendo en sus pecados, y a pesar de ello no sólo creen que son
cristianas, sino que además creen que están sirviendo a Dios,
cuando en realidad están sirviendo al falso pastor o apóstol que
les manipula por codicia.

Conozco algunos miembros de esos grupos que siendo líderes,


están viviendo en pecado; en fornicación y adulterio. Personas
que mienten y maldicen; que mantienen una doble vida.

Ponerles a dirigir a otras personas es una locura diabólica:

B.- Porque ni han nacido de nuevo, ni tienen la capacidad, ni el


conocimiento de las Escrituras para saber lo que dicen o hacen.
Son meros loros, reproductores que repiten, como papagayos, lo
que les dejan por escrito.

No pueden salirse ni un punto ni una coma, del guión que tienen


establecido por sus líderes. De ahí que no conozcan las Escrituras.
Aunque conocen muy bien los métodos psicologizados de los
manuales del G-12.

El resultado de todo esto ¿Cuál puede ser sino confusión y falsa


doctrina? Algunos de estos “cristianos” que llevan varios años en
grupos del G-12 tienen una mezcla de textos sacados de contexto,
mezclado con paganismo y superstición, que no sólo les confunde
a ellos, sino también a otros.

Para muchos de ellos la fe cristiana es algo así como un amuleto


que les hace la vida más fácil. Puede que no conozcan los
mandamientos de Dios, pero las promesas se las saben todas.

Eso es una locura diabólica, una tercera razón es porque:

C.- No tienen ni la más remota idea de la responsabilidad tan


enorme que asumen cuando hablan en nombre de Dios, cosas que
Dios no ha dicho. Cuando deciden en su ceguera, guiar a otros
ciegos.
125

¿Qué ocurrirá al final? Como está escrito: Dejadlos; son ciegos


guías de ciegos; y si el ciego guiare al ciego, ambos caerán en el
hoyo. Mateo 15.14.

Éstos, creen que se librarán porque hicieron lo que les enseñaron,


¿Creen que eso es suficiente para ser justificados delante de Dios?
De ningún modo. Están totalmente equivocados, pues, ellos son
responsables delante de Dios, puesto que tienen la Biblia y
debieran conocerla.

Una cuarta razón por la que es una locura diabólica:

D.- Porque creyendo que hacen la obra de Dios, por medio de


ellos muchos son engañados y llevados a vivir en esclavitud
religiosa y fanatizada.

Viven agobiados por multitud de mandamientos humanos sin


fundamento bíblico. Llenos de supersticiones y falsas doctrinas,
de maldiciones generacionales, males de ojo, atemorizados por
demonios, etc., gastando todo su dinero para comprar las
bendiciones de Dios, como si eso fuera posible.

Cosas todas estas que les esclaviza, les roba, les agota y destruye.
Aunque jamás te lo reconocerán mientras estén dentro de esos
grupos.

Cuando salen, destrozados anímicamente, entonces es que te


cuentan una cantidad enorme de desgracias, abusos y
manipulaciones que soportaron en silencio, viviendo bajo una
dictadura religiosa. Así son las sectas, y el movimiento del G-12
lo es.

Ese es el resultado de las iglesias modernas de hoy día: ignorancia


de la verdad, esclavitud religiosa, y fanatismo. Así, es que andan
muchos desanimados sin entender qué es lo que les pasa.
126

¿Por qué? Se preguntan, si se esfuerzan cada día en hacer todo


cuanto sus líderes les dice, ¿Por qué no viven en verdadera
bendición, sino en un espejismo religioso que, cuando pasa el
brillo del primer momento, acaban frustrados y amargados?

Nada que ver con la Iglesia de Cristo, ni la auténtica fe en Jesús.

La fe verdadera te hace libre. Como está escrito: Si el Hijo os


libertare, seréis verdaderamente libres. Juan 16.33.

Pablo se sentía libre, y sabía que sus colaboradores también lo


eran, por eso no desmayaban.

Pablo continúa su defensa ante los corintios. Ya vimos la semana


pasada cómo dijo que él y sus colaboradores habían renunciado a
lo oculto y vergonzoso. Continuamos…

2. No andando con astucia. Algunas versiones modernas traducen


Mateo 10.16 de la siguiente manera: Miren, Yo los envío como
ovejas en medio de lobos; por tanto, sean astutos como las
serpientes e inocentes como las palomas. Nueva Biblia
Latinoamericana de hoy; Biblia de las Américas; entre otras.

Pero la palabra que se traduce aquí como astuto es fronimos cuya


mejor traducción directa al castellano es: sabio, sensato, prudente,
avisado, juicioso, precavido. No astuto que se refiere a la persona
que está dispuesta a usar cualquier medio para lograr su
propósito, generalmente ilegítimo.

La astucia conlleva maldad en la intención y en la acción, para


engañar en beneficio propio.

De hecho, de las seis veces que aparece en el NT sólo en una


ocasión es usada como sinónimo de inteligencia, sagacidad, y
sabiduría, 2Corintios 12.16. Pienso sinceramente que es esta
ocasión los traductores escogieron el sinónimo equivocado.
127

En las cinco restantes tiene una connotación negativa, de maldad:


Lucas 20.23; Hechos 7.19; 1Corintios 3.19; 2Corintios 4.2; 11:3;
Efesios 4.14.

No cabe la menor duda de porqué a algunos les gusta la astucia.


Parece ser la norma de vida de muchos falsos siervos. Emplean el
engaño en beneficio propio.

Pero Pablo y sus colaboradores no andaban ni en tinieblas, ni


tampoco con astucia. ¿Por qué? Porque son conductas impropias
de los verdaderos siervos de Dios.

A continuación va a añadir algo más:

Ni adulterando la Palabra de Dios. Ésta es la única parte en todo


el Nuevo Testamento en que se encuentra esta expresión:
adulterando la palabra de Dios.

Sin duda, Pablo está aludiendo a la crítica que sus adversarios han
lanzado contra él. Lo acusan de que, en su predicación, falsea la
Palabra revelada de Dios; insinúan que ha diluido las exigencias
de la ley en referencia a los cristianos gentiles, Hechos 21.21,
leámoslo.

Pablo no predicaba la necesidad de la circuncisión, ni de guardar


las celebraciones judías, más bien, predicaba del nuevo pacto
como superior al viejo.

¿Significa eso adulterar la Palabra de Dios? Desde luego que no.


Aunque aún hay en nuestros días quienes así lo creen. Muchos
judaizantes que pretenden que los cristianos cumplamos la ley
para poder salvarnos.

Incluso algunos pretenden que celebremos las fiestas judías como


respeto a los mandamientos dados por Dios a Israel.
128

Estos, confunden a la Iglesia con Israel. Llaman a la Iglesia el


Israel espiritual. ¿Es correcta esa interpretación? Desde luego que
no.

Confundir a Israel con la Iglesia y viceversa es un simplismo


teológico que les lleva a errar gravemente en la doctrina y a
apartarse de la verdad.

Hay enormes diferencias entre Israel y la Iglesia, que de no


tenerse en cuenta nos llevará a multitud de contradicciones,
acabando en falsas doctrinas y herejías.

A Israel se pertenece por nacimiento en la carne. A la Iglesia por


nuevo nacimiento espiritual. Juan 1.9-13.

La evidencia de pertenecer a Israel es la circuncisión, la evidencia


de pertenecer a la Iglesia es el Sello del Espíritu Santo. Génesis
17.10-14. Y Efesios 1.13-14.

¿Es lo mismo una cosa que otra? De ningún modo.

Israel está bajo el antiguo pacto, la Iglesia bajo el nuevo pacto.


Hay buenos motivos para no errar en esto: Hebreos 7.18; 8.6-7,
13; 9.15.

Israel bajo la ley que dio Moisés, la Iglesia bajo la gracia de trajo
Jesucristo. Juan 1.17.

¿Será lo mismo? Desde luego que no.

Y así podría seguir con multitud de diferencias que si no las


tienen en cuenta acabarán engañados y engañando a los demás.

Cuando un cristiano dice que pertenece al Israel espiritual comete


un error infantil de interpretación bíblica. Sus postulados son
erróneos, de ahí que llegue a conclusiones también erróneas.
129

Esto quiere decir que la Iglesia, no pertenece al antiguo, sino al


nuevo pacto, por tanto, no está sujeta a la ley de Moisés, sino a la
gracia de Jesucristo. Como está escrito en: Romanos 3.21-26:

Pero ahora, aparte de la ley, se ha manifestado la justicia de


Dios, testificada por la ley y por los profetas; la justicia de Dios
por medio de la fe en Jesucristo, para todos los que creen en él.
Porque no hay diferencia, por cuanto todos pecaron, y están
destituidos de la gloria de Dios, siendo justificados gratuitamente
por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús, a
quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su
sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por
alto, en su paciencia, los pecados pasados, con la mira de
manifestar en este tiempo su justicia, a fin de que él sea el justo, y
el que justifica al que es de la fe de Jesús.

Así, que, no podemos acudir a la ley para justificarnos delante de


Dios, como está escrito en Gálatas 3.10-14: Porque todos los que
dependen de las obras de la ley están bajo maldición, pues escrito
está: Maldito todo aquel que no permaneciere en todas las cosas
escritas en el libro de la ley, para hacerlas. Y que por la ley
ninguno se justifica para con Dios, es evidente, porque: El justo
por la fe vivirá; y la ley no es de fe, sino que dice: El que hiciere
estas cosas vivirá por ellas. Cristo nos redimió de la maldición de
la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito:
Maldito todo el que es colgado en un madero), para que en Cristo
Jesús la bendición de Abraham alcanzase a los gentiles, a fin de
que por la fe recibiésemos la promesa del Espíritu.

Porque cualquiera que guardare toda la ley, pero ofendiere en un


punto, se hace culpable de todos. Santiago 2.10.

Jesús ciertamente vino y cumplió la ley, justamente porque a


nosotros nos era imposible. Romanos 8.1-4:

Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en


Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino
conforme al Espíritu. Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo
130

Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte. Porque


lo que era imposible para la ley, por cuanto era débil por la
carne, Dios, enviando a su Hijo en semejanza de carne de pecado
y a causa del pecado, condenó al pecado en la carne; para que la
justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos
conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

Mi consejo, pues, para quienes no saben discernir entre Israel y la


Iglesia es que dediquen más tiempo a estudiar las Sagradas
Escrituras, para que puedan conocerla mejor, y puedan ser
bendición a otros cuando las citen, con conocimiento de causa.

De lo contrario, no darán buenos consejos, y aun sin querer,


puede que les hagan daño a alguien desviándolos de la verdad.
¿Creen que esto es importante? Desde luego. Es algo que sin duda
tiene consecuencias eternas.

Pablo rechaza rotundamente la acusación de sus opositores, como


ya había hecho antes, 2.17. Pues, no adulteraba la Escritura, sino
que la explicaba. Enseñaba que en Cristo somos libres de la ley.
Porque Él la cumplió por nosotros.

Como dice en Romanos 6.14 Porque el pecado no se enseñoreará


de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia.

Romanos 7.4 Así también vosotros, hermanos míos, habéis


muerto a la ley mediante el cuerpo de Cristo, para que seáis de
otro, del que resucitó de los muertos, a fin de que llevemos fruto
para Dios.

En 2.17 ya respondió, ahora, aquí en el 4.2 vuelve a hacerlo. En el


primero pareciera que le acusaban de falsificarla con fines
oscuros, aquí el énfasis está en la metodología que usaba. No sólo
es importante la motivación, sino también la metodología que se
usa.

Actualmente existe una corriente dentro del movimiento cristiano


que afirma que el fin justifica los medios. Razón por la cual se
131

están empleando en la Iglesia métodos ilícitos. Emociones,


sugestión, psicología conductual, e incluso manipulación mental.

¿Qué piensan al respecto? ¿Creen que el fin justifica los medios?


¿Creen que el uso de estos métodos será bendecido por Dios?
Definitivamente no. ¿Y si dan resultado y hacen crecer la Iglesia?
Tampoco, de ningún modo.

Teniendo en cuenta las palabras de Pablo en su defensa,


podríamos decir que los acusadores del apóstol creían, sin duda,
que el ladrón cree que todo el mundo es de su condición.

Pablo alude a su fidelidad a la Palabra de Dios en el contexto de


su ministerio del nuevo pacto, 1Tesalonincenses 2.3-4: Porque
nuestra exhortación no procedió de error ni de impureza, ni fue
por engaño, sino que según fuimos aprobados por Dios para que
se nos confiase el evangelio, así hablamos; no como para
agradar a los hombres, sino a Dios, que prueba nuestros
corazones.

Desgraciadamente, estamos rodeados de personas que no deberán


estar en el ministerio, porque sólo buscan agradar a los demás. No
agradan a Dios. Porque ni saben, ni pueden. Algunos de ellos, ni
tan siquiera están convertidos. Como decíamos la semana pasada,
charlatanes que venden su producto, y por avaricia hacen
mercadería de la fe.

El engaño no es una característica que deba adornar la persona del


siervo de Dios. Sino de aquellos que sirven al diablo. En nuestro
servicio a Dios debemos rechazar toda metodología que se
caracterice por el engaño o la simulación.

La semana pasada nos quedamos en el verso 2 hablando sobre la


adulteración de la Palabra de Dios.

Hoy la adulteración de la Palabra de Dios está tomando


proporciones desmesuradas. Al principio se hacía de manera sutil.
Actualmente, se manipula y se miente de manera descarada.
132

Sólo tienen que ver el canal Enlace, para darse cuenta del descaro
con el que esos sin vergüenzas exigen dinero a su audiencia.
Prometiéndoles milagros sobre su economía o sobre cualquier
asunto que necesiten.

¿Cuál es la razón por la cual, en la Iglesia actual se propagan tan


fácilmente mentiras descaradas en nombre de Dios, cuando son
abiertamente contrarias a las Sagradas Escrituras? Sin duda por la
ignorancia que existe en la Iglesia actual.

Nada más hay que escuchar a los famosos charlatanes como


Guillermo Maldonado, Cash Luna, o Ana Méndez, para darnos
cuenta del carácter tan atroz que ha tomado la adulteración
bíblica.

Pero el engaño no está sólo de parte del falso evangelio de la


prosperidad. Sino que alcanza dimensiones terribles cuando entra
en el terreno de las miserias humanas.

Mucha gente sufre y padece por multitud de razones. Muchos, por


malas decisiones que han tomado; Otros, por malas decisiones de
otras personas pero que les alcanzaron a ellos; Otros, en cambio,
simplemente por vivir en un mundo deteriorado por causa del
pecado humano.

Unos y otros, sufren, y sufren mucho. Actualmente, hay pastores


que piensan que cuando un cristiano tiene problemas de
sufrimiento, por malas decisiones suyas o de otros; por daños del
pasado; por causa del rencor, o cualquier otro motivo, en vez de
enfrentarlo a su responsabilidad de superar el pasado, creen que
deben ser sometidos a una especie de hipnosis regresiva para
cambiar el motivo, o su recuerdo negativo, por otro más positivo.

Le cambian la verdad que les hizo sufrir por una mentira


imaginaria que les ayude a soportar el daño.
¿Qué piensan al respecto?
¿Creen que eso le ayudará a superar el dolor emocional?
133

Puede que sí, pero estará creyendo una mentira.

¿No sería mejor enfrentarle a la Palabra de Dios? ¿No nos exige


Dios amar aún a nuestros enemigos? ¿Qué dice Mateo 5.43-45?

¿No sería mucho más eficaz enfrentarle a su negligencia y falta


visión cristiana? Como está escrito en Mateo 5.43-45:

Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu


enemigo. Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a
los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad
por los que os ultrajan y os persiguen; para que seáis hijos de
vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre
malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos.

Soy consciente de que esto puede no resultar fácil para aquellas


personas que han sido dañadas profundamente. Y también puede
que no les guste. Sin embargo, la vida cristiana no depende de lo
que nos gusta, sino de la voluntad de Dios.

Que algo no resulte fácil no significa que no pueda hacerse.


Tampoco Dios nos dejó solos ante la tarea, tenemos al Espíritu
Santo que nos ayuda en nuestra debilidad. Como Pablo lo dice en
Romanos 8.26.

Cuando una persona fue dañada en el pasado, debe pasar página.


Óiganlo. Volveré a repetirlo: Cuando una persona fue dañada en
el pasado, debe pasar página.

Por muy dolorosa que fuera la experiencia. Debe dejar el pasado


atrás, o lo que es mejor, en manos de Dios. Debe creer a Dios que
le dice que es una nueva criatura. No la misma que era, mal
reparada.

La persona cristiana no es llamada a vivir en la conmiseración, en


la autocompasión, ni en la depresión por el daño que le causaron.
Somos llamados a vivir como dignos hijos de Dios. En victoria.
134

En ningún pasaje de la Biblia se enseña que tengamos que


cambiar la verdad por la mentira. No es así como se supera el
pasado, sino como enseña el apóstol Pablo en Romanos 12.17-21:

No paguéis a nadie mal por mal; procurad lo bueno delante de


todos los hombres. 18Si es posible, en cuanto dependa de
vosotros, estad en paz con todos los hombres. 19No os venguéis
vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios;
porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor.
20
Así que, si tu enemigo tuviere hambre, dale de comer; si tuviere
sed, dale de beber; pues haciendo esto, ascuas de fuego
amontonarás sobre su cabeza. 21No seas vencido de lo malo, sino
vence con el bien el mal.

Como también dice el autor de Hebreos 12.2: poniendo los ojos


en Jesús, el autor y consumador de nuestra fe, el cual por el gozo
puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y
se sentó a la diestra del trono de Dios.

Todos sabemos que no hubo en el mundo ni habrá después de Él,


ningún otro ser humano como Jesús. Santo, Justo, y Perfecto.
Jamás le hizo daño a nadie. Jamás cometió ningún delito, ni hizo
nada malo; ni tan siquiera mintió sobre ningún tema.

Aún así, fue injustamente acusado, injustamente juzgado; Por


testigos falsos, injustamente condenado; Vil e injustamente
torturado, y aun estando en la cruz, fue capaz de decir: ¡Padre,
perdónalos porque no saben lo que hacen! Lucas 23.34.

A pesar de todo eso, ¿Qué hizo Jesús con el oprobio que recibió?
¿Pagó a sus enemigos con la misma moneda? De ningún modo.

¿Buscó un psicólogo? No.


¿Se sometió a hipnosis regresiva? Desde luego que no.
¿Escribió el daño que le hicieron en un papel para luego
enterrarlo o quemarlo para que el mal desapareciera? En absoluto.
¿Qué hizo? Menospreció el oprobio por el gozo puesto delante de
Él.
135

Que los cristianos sufriremos, es algo que no nos gusta oír. Pero
por poco que nos guste es la verdad, y ningún cristiano debiera
ignorarla. Por ello, tal y como Jesús nos anunció:

En el mundo tendremos aflicción. Juan 16.33;


Seremos aborrecidos por su causa. Mateo 10.22.
Si a Él le persiguieron, también a nosotros. Juan 15.18-21.

¿Qué enseña el apóstol Pablo al respecto de las aflicciones del


tiempo presente?
¿Enseña que es sólo para el que no tiene a Dios en su vida? No.
¿Enseña que en Cristo no hay aflicciones? De ningún modo.

Romanos 8.18 Tengo por cierto que las aflicciones del tiempo
presente no son comparables con la gloria venidera que en
nosotros ha de manifestarse.

Es decir, enseñó lo mismo que Jesús, y lo mismo que enseña el


autor de Hebreos, debemos poner la mirada en la gloria futura.
Así es como se superan los traumas del pasado.

No con hipnosis regresiva a 40 u 80€ la sesión, convirtiendo a los


pastores en seudo psicólogos, que se harán ricos a costa del
sufrimiento de los miembros de la congregación.

Máxime cuando sabemos que la psicología humana es una burda


mentira. Un intrusismo en la consejería pastoral.

Por otro lado, en medio de la apostasía generalizada que existe,


hay un grupo de creyentes que, predican contra dicha apostasía.
Dicen estar aferrados a la Palabra de Dios, y en muchos temas lo
están.

Sin embargo, en realidad, no están aferrados a la Escritura, sino a


la interpretación que de la Escritura hicieron ciertas personas de
renombre allá por el siglo XVI.
136

Me refiero a los calvinistas y reformados, quienes en un gran


porcentaje de su doctrina están acertados. Pero mantienen algunos
errores que no quieren abandonar porque idolatran a aquellos que
hicieron la reforma del catolicismo, pero que no lo abandonaron
totalmente.

Estos, también adulteran la Palabra de Dios cuando la interpretan


no a la luz de la propia palabra de Dios, sino a la luz de los
razonamientos de aquellos hombres del pasado.

Una verdad a medias no es una verdad. ¿Y una verdad al 60%?


Tampoco. ¿Y al 90%? No. No lo es. La verdad de Dios no debe
ser mezclada con ideologías humanas.

Cuando se hace eso, se está adulterando la Palabra de Dios. Pablo


renunció a ello. Yo también. De modo que me mantengo abierto a
seguir aprendiendo cada día, lo que Dios me muestre en Su
Palabra.

No es fácil, porque a veces estudiando la Escritura, descubrimos


que estábamos errados en algún asunto, y debemos reconocer que
estábamos equivocados, y eso choca frontalmente con el orgullo y
la soberbia humana que todos llevamos dentro. Pero debemos
estar dispuestos a ello si realmente queremos estar en la verdad.

Recomiendo a cada cristiano que está aquí, y a todos los que nos
ven desde cualquier parte del mundo, que se atrevan a revisar su
teología a la luz de la Palabra de Dios.

Que se atrevan a hacer preguntas. A cuestionar las enseñanzas


que reciben. Hasta que estén completamente seguros de que están
creyendo la verdad. Porque esa es la voluntad de Dios.

Me encuentro con frecuencia con personas que están


absolutamente seguros de que están en la verdad, sin estarlo.
Porque no han estudiado. Simplemente están confiando en que
quienes les enseñaron les enseñaron bien.
137

Pero ellos mismos no han estudiado. Se fían del estudio de los


demás. Muchos de los cuales tampoco estudiaron. Al menos no
como debían. Sin posturas preconcebidas y con un corazón
abierto a recibir de Dios en la Escritura la verdad.

Millones de personas sinceras están actualmente sinceramente


engañados. No quieran ser de aquellos que al final descubran que
estaban creyendo muchas cosas que no tenían fundamento
bíblico.

Yo lo descubrí cuando llevaba diez años de convertido y ya era


pastor. Cada uno de vosotros tiene la Biblia y tiene también la
responsabilidad de conocerla en profundidad.

Sino por la manifestación de la verdad. Porque la verdad ha sido


manifestada y debe seguir siendo manifestada. Muchos intentan
ocultarla; otros obstaculizar la manifestación de la verdad.

¿Quién estará detrás de ese plan? ¿Quién estará interesado en que


la gente no conozca la verdad? ¿Y por qué? Lo veremos más a
delante, en los siguientes versos.

Por lo pronto, Pablo deja claro que no es la manipulación de la


Escritura, ni la mentira, lo que él maneja. Sino la verdad. Y
sabemos quién es la verdad.

¿Quién se acuerda lo que dice Juan 14.6? Yo soy el camino, y la


verdad… ¿Quién dijo tales palabras? El Señor Jesús.

Pablo camina a la luz de la verdad. Camina ante los ojos de su


Señor. Sabe que la Palabra de Dios es verdad y no la adultera.
Sabe que la Iglesia es y debe ser columna y baluarte de la verdad.
Como está escrito en 1Timoteo 3.15.

Sabe también que lo que necesita el ser humano no es la mentira,


ni una verdad a medias, sino ¿El qué? La manifestación de la
verdad. La pura verdad.
138

Jesús dijo orando al Padre: Santifícalos en tu verdad; tu palabra


es verdad. Juan 17.17. Y en otro lugar dice la Escritura: La suma
de tu palabra es verdad, y eterno es todo juicio de tu justicia.
Salmo 119.160.

Lo que limpia, santifica y ayuda al ser humano es la Palabra de


Dios, la manifestación de la verdad, libre de toda adulteración.
Eso es lo que enseña el apóstol Pedro, como está escrito en
1Pedro 2.1-3:

Desechando, pues, toda malicia, todo engaño, hipocresía,


envidias, y todas las detracciones, desead, como niños recién
nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella
crezcáis para salvación, si es que habéis gustado la benignidad
del Señor.

Actualmente se está cumpliendo la profecía de Pablo en 2Timoteo


4.1-5: Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que
juzgará a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su
reino, que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de
tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y
doctrina. Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana
doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán
maestros conforme a sus propias concupiscencias, y apartarán de
la verdad el oído y se volverán a las fábulas. Pero tú sé sobrio en
todo, soporta las aflicciones, haz obra de evangelista, cumple tu
ministerio.

Hoy hay mucha gente que no soporta la sana doctrina. Me refiero


no a gentes inconversas, es decir, no a personas que no son
creyentes, sino justamente a quienes se consideran cristianos,
Muchos de estos son los que menos soportan la sana doctrina.

Cristianos nominales, Gente que han creído en la fe de otros. No


tienen fe en Dios, sino en aquellas personas que están siguiendo.
139

Tuve que escribir un post en Facebook diciendo: Dedico más


tiempo en predicar y responder preguntas a los que se consideran
cristianos que a aquellos que aun no han dado el paso de fe.
¿Será que hay menos fe en la Iglesia que fuera de ella?
En realidad no sé si habrá menos fe, pero desde luego hay muy
poca preparación bíblica.

Mucha gente que se considera cristiana reacciona mal cuando se


expone la verdad. Esto no me pasa sólo a mí, sino a todos
aquellos que usamos la Palabra de Dios para corregir malas
actitudes o falsas doctrinas.

A Pablo también le pasó. Por esa razón debió escribirle a los


Gálatas 4.16: ¿Me he hecho, pues, vuestro enemigo, por deciros
la verdad?

Os aseguro que tengo muchos enemigos justamente por esta


razón. Pues, como está escrito: ¿Busco ahora el favor de los
hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues
si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo.
Gálatas 1.10

Hablábamos sobre la manifestación de la verdad.

Recordé que alguien escribió: Es más fácil engañar a alguien que


convencerlo de que está engañado.

Estoy totalmente de acuerdo con esta frase. Lo vivo a diario. Me


es mucho más fácil predicarle el evangelio a un ateo que a un
reformado o a un neopentecostal.

En 2Timoteo 3.1-6 Pablo retrata la sociedad actual: También


debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos
peligrosos. Porque habrá hombres amadores de sí mismos,
avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los
padres, ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables,
calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo
bueno, traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los
140

deleites más que de Dios, que tendrán apariencia de piedad, pero


negarán la eficacia de ella; a éstos evita.

Las iglesias están llenas de personas así. Porque se está


predicando una falso evangelio que no convierte a nadie. Sino que
deja a la gente en el mismo estado de pecado que si no le hubieras
predicado.

Los testimonios de estos falsos cristianos no tienen que ver con


una transformación de vida, sino con que han conseguido algo
que querían, algo que deseaban.

Se han cumplido sus sueños, y por carnales que estos sean, lo


cuentan como un testimonio de la bendición de Dios. Eso no es
Iglesia. Es religión hueca y vacía.

Como está escrito en 2Tesalonincenses 2.11-12: Por esto Dios les


envía un poder engañoso, para que crean la mentira, a fin de que
sean condenados todos los que no (¿fueron elegidos? De ningún
modo, no dice eso, sino que dice:) a fin de que sean condenados
todos los que no creyeron a la verdad, sino que se complacieron
en la injusticia.

Cada día más, se hace necesario asegurarse de a quién estamos


oyendo y siguiendo. Cuando un predicador se fundamenta en
psicología y filosofías humanistas, debe ser rechazado
abandonado. Cuando un predicador habla bien fundamentado en
la Palabra de Dios, debe ser recibido y aceptado.

Por eso Pablo dice: Por la manifestación de la verdad. Es la


verdad lo que Dios nos ha dejado. Debemos de aprenderla, para
discernirla; para saber distinguirla de la mentira que abunda en el
mundo religioso.

Quienes no creen que la Biblia deba ser estudiada ni interpretada,


sino tomada literalmente, sin discernir cuándo se usa un lenguaje
literal o figurado, o cuando un texto es histórico y no doctrinal, no
entienden las palabras del apóstol en 2Pedro 1.5-9:
141

…vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo,


añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento; al
conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la
paciencia, piedad; a la piedad, afecto fraternal; y al afecto
fraternal, amor. Porque si estas cosas están en vosotros, y
abundan, no os dejarán estar ociosos ni sin fruto en cuanto al
conocimiento de nuestro Señor Jesucristo. Pero el que no tiene
estas cosas tiene la vista muy corta; es ciego, habiendo olvidado
la purificación de sus antiguos pecados.

A eso es a lo que Pablo se dedica a manifestar la verdad a todas


las personas. A eso es a lo que debemos dedicarnos todos los
predicadores, a exponer la palabra de Dios que es la verdad.

Porque no son los libros de Josh MCwell, ni los de Joel Osten, ni


los de César Castellano, ni los de Calvino, ni John Macarthur los
que debemos leer y propagar, sino la Palabra de Dios. La única
verdad.

Algunos, en su intento de enfatizar la importancia de la ley


afirman que lo que Pablo predicaba era sólo el Antiguo
Testamento. ¿Era el Antiguo Testamento o el Evangelio?

Es muy interesante tener en cuenta que en el contexto de los


versículos 2 y 3, Pablo menciona tres sinónimos: «palabra de
Dios», «verdad» y «evangelio», para describir su proclamación
apostólica.

Por tanto, teniendo en cuenta que más de ochenta y cinco veces


menciona Pablo la palabra evangelio en sus escritos y discursos,
lo que Pablo predicaba era: que las Escrituras del Antiguo
Testamento se habían cumplido en Jesucristo, lo cual se expresa
en el evangelio, y las epístolas que más tarde lo desarrollarían.

Él no ocultó ninguna parte del mensaje de Dios. En Hechos


20.26-27 dice: Por tanto, yo os protesto en el día de hoy, que
142

estoy limpio de la sangre de todos; porque no he rehuido


anunciaros todo el consejo de Dios.

Recomendándonos a toda conciencia humana. Tal era la


sinceridad del apóstol que se recomendaba a toda conciencia
humana.

Pablo está diciendo: Decimos la verdad y todos lo saben. Vuestras


conciencias os lo tienen que decir.

Su conciencia, la de Pablo estaba tranquila. No tiene nada que


ocultar. Por esa razón esta dispuesto a someterse al escrutinio
público. Él sabía que a poco que mirasen en su interior sabrían
distinguirle de aquellos que le acusaban.

Todo el que lo conoce sabe que respira integridad y honradez. Sus


acusadores no pueden mantener sus argumentos a la luz del día, él
en cambio sí.

La semana pasada se terminó hablando del verso 2, meditando la


última frase del apóstol Pablo en la que se recomienda a la
conciencia humana delante de Dios.

¿Qué estaba diciendo el apóstol con estas palabras? Como la Pra.


Kattia explicó muy bien, Pablo estaba tranquilo de que actuó en
todo momento en integridad, por eso se sometía al escrutinio, al
examen o juicio de la conciencia ajena.

¿Creéis que es importante la transparencia en los siervos de Dios?


Desde luego y en todos los cristianos. ¿Por qué? Porque no
faltarán los acusadores que nos señalen como profetizó el mismo
Señor Jesús en Mateo 5.11:

Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os


persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo.
Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los
cielos; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de
vosotros..
143

¿Qué nos dice el Señor Jesús aquí? Que nos vituperarán y


perseguirán. Que mentirán contra nosotros por causa de nuestra fe
en Jesús.

¿Qué debemos hacer, desesperarnos? De ningún modo, gozarnos


y alegrarnos porque nuestra recompensa está en los cielos.

Pablo quería que lo analizaran a conciencia, porque sabía que no


encontrarían en él los pecados de los que le acusaban sus
difamadores.

¿Por qué ocurre esto?


¿Por qué levantan falsos testimonio contra los siervos de Dios?
¿Qué los motiva?
El diablo que los inspira, para destruir su credibilidad.

Esto explica el odio visceral que algunos tienen contra quienes


predicamos la verdad y, especialmente, contra quienes
desenmascaramos a los falsos profetas.

Así que una razón es que el diablo los impulsa. Pero hay otra.
¿Cuál creen que puede ser?
¿Será que les desmontamos el chiringuito?
¿Será que les hacemos peligrar la fuente de sus ganancias
deshonestas? Con toda seguridad.

Desde luego hay una diferencia entre padecer por causa de Cristo
y hacerlo por causa de nuestros pecados. El apóstol Pedro habla
de esto:

1Pedro 2.19-21 Porque esto merece aprobación, si alguno a


causa de la conciencia delante de Dios, sufre molestias
padeciendo injustamente. Pues ¿qué gloria es, si pecando sois
abofeteados, y lo soportáis? Mas si haciendo lo bueno sufrís, y lo
soportáis, esto ciertamente es aprobado delante de Dios. Pues
para esto fuisteis llamados; porque también Cristo padeció por
nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pisadas.
144

Viendo a algunos “ministros” hoy en día, pareciera que servir a


Dios es entrar en una élite de gente rica, y bien considerada. Sin
embargo, Jesús dice otra cosa.

¿De qué está hablando el apóstol Pedro aquí? De padecer por


causa de la conciencia. Padecer por ser cristiano.

Lo sorprendente de este pasaje es que el apóstol dice que esto


ciertamente es aprobado delante de Dios. ¿Aprueba Dios que
padezcamos? Eso es lo que dice.

¿Está Dios aprobando a quienes nos hacen sufrir por causa del
evangelio? Desde luego que no. Aprueba al cristiano que padece,
no a quien le hace padecer.

Otra cosa que sorprende de este pasaje es que para esto fuisteis
llamados. ¿Sabías que al ser llamado a ser cristiano fuiste también
llamado a padecer por causa de Cristo? ¿O te ocultaron esa parte
de la verdad?

¿Se equivocaría el apóstol Pedro? De ningún modo. ¿Por qué


entonces no se predica esta parte de la verdad de Dios? ¿Cuál
creen que es el motivo por el cual se esconde esta verdad? Por
miedo a que los locales se vacíen.

Actualmente, se predica un evangelio diferente. Se hace un


llamado a ser un campeón, a ser próspero, a alcanzar tus sueños.
La pregunta que debemos hacernos es: ¿Es ese el evangelio que
predicó Jesús, Pedro, o Pablo? Desde luego que no. No tiene nada
que ver.

A muchos pastores hoy lo único que les importa es tener mucha


gente que les permita seguir viviendo como reyes, mientras el
pueblo de Dios sufre, padece y perece porque le falta
conocimiento. Oseas 4.6.
145

¿Serán estos verdaderos siervos de Dios? De ningún modo, sino


lobos que esquilman o despojan a las ovejas.

Delante de Dios. Pablo pone a Dios de testigo de su buen


proceder. Pero también se expone a la propia conciencia de ellos.
Él se presenta al escrutinio de los corintios y lo hace delante de
Dios, sin nada que esconder.

Ellos, los corintios, también tendrán que rendir cuenta delante de


Dios por su juicio sobre el apóstol. ¿O los incrédulos no tendrán
que rendir cuentas delante de Dios? ¡Como ellos no creen que
Dios exista! ¿Se librarán por ello? Desde luego que no.

Acusar es fácil, pero después hay saber, y poder, mantener la


acusación delante del Señor.

¡Cuán importante es esto! Entender que siempre estamos delante


de Dios! Algunos creen que pueden acusar, insultar y hasta
agredir a un siervo de Dios y que no pasará nada. Hoy ya no se
respeta nada, ni a nadie.

En el informativo de rtve informaban hoy de una joven concejala


del Ayuntamiento de Alicante, Marisol Moreno que había salido
de la audiencia nacional en la que tuvo que declarar como
imputada, por delitos de injurias contra la corona, y contra los
derechos fundamentales. Ha asegurado que se arrepiente y ha
pedido perdón por los insultos contra el Rey Juan Carlos, que
publicó en redes sociales en 2012.

Comportamientos como este eran impensables hace tan solo unas


décadas. Pero hoy son mucho más habituales de lo que debieran.

La Palabra de Dios nos muestra que el Señor Jesús se identifica


con sus discípulos, de manera que quien les persigue a ellos, le
persigue a él. Eso es lo que Jesús le dijo a Pablo cuando aún
formaba parte de los perseguidores. Hechos 9.1-5.
146

Hay dos extremos en este asunto: Por un lado, los que ven al
siervo de Dios casi como a Dios mismo. Intocable. ¿Conocen a
alguien así? Los seguidores de Guillermo Maldonado son de esta
calaña.

Para este tipo de “creyentes” en los “siervos” o “ungidos”


cuestionar al siervo es igual a que la ira del cielo caiga contra ti, o
buscarse una maldición eterna.

Por otro lado, los que piensan que los siervos de Dios somos
todos un cubo de basura al que pueden patear y escupir sin
miramientos.

Gentes que han descubierto que su pastor era un falso pastor y


ahora está en campaña contra el ministerio. Como si se hubiera
abierto la veda, se lanzan a la caza de cualquier pastor que caiga
en su punto de mira.
¿Conocen a algunos de estos? En las redes sociales hay muchos.

Entre ambos extremos, ¿Es posible el equilibrio? Sí es posible.


Los siervos de Dios merecen ser respetado en razón de su
ministerio. Pero no deben ser tenidos por incuestionables.

Como siempre, la Palabra de Dios nos da la justa medida en


cuestiones de fe.

En caso de que debas cuestionar a un siervo de Dios, hazlo con


respeto, y siempre asegurándote de que estás bien fundamentado
en la Palabra de Dios.

Pero si el llamado “siervo” está fuera de la Palabra de Dios y le


llamas la atención y no se sujeta a las Palabras que Dios ha dejado
escritas, entonces, no es un siervo de Dios al que debas respetar,
es un lobo al que hay que desenmascarar.

Volviendo al pasaje. Pablo está diciendo: delante de Dios.


147

¿Recuerdan el lema que tenemos para este año? ¿Cuál es?


Emanuel: Dios con nosotros. Dios es testigo de todo cuanto
decimos o hacemos; e incluso de todo cuanto pensamos.

3-5. Pero si nuestro evangelio está aún encubierto, Le habían


acusado de predicar cosas ocultas, encubiertas e ineficaces. Pero
también de ocultar la verdad. Pablo lo niega.

¿Qué predicaba Él? El evangelio. ¿Qué evangelio? El de Cristo.


Veamos algunos pasajes:

Hechos 9.20-22 En seguida predicaba a Cristo en las sinagogas,


diciendo que éste era el Hijo de Dios. Y todos los que le oían
estaban atónitos, y decían: ¿No es éste el que asolaba en
Jerusalén a los que invocaban este nombre, y a eso vino acá,
para llevarlos presos ante los principales sacerdotes? Pero Saulo
mucho más se esforzaba, y confundía a los judíos que moraban en
Damasco, demostrando que Jesús era el Cristo.

Pablo afirmaba que la Escritura de los judíos anunciaban al


Mesías y que Cristo era el Mesías esperado. ¿Cómo pensáis que
sonaba este mensaje para los judíos?

Acostumbrados a batallar con los rabinos de la cábala, que de


cada pasaje sacaban significados ocultos, por supuesto,
inventados, los judíos no creían en el mensaje de Pablo, pensaban
que se trataba de algo similar.

A los judíos de entonces, como a los cristianos de ahora no les


gustaba eso de tener que estar escudriñando las Escrituras. Para
estos perezosos, es un trabajo agotador. Prefieren que los rabinos
o pastores les digan lo que tienen que creer, o no.

Pablo no predicaba algo diferente a la Sagrada Escritura, como le


acusaban, sencillamente los judíos no conocían las Escrituras
como Pablo.
148

Hechos 18.5 Y cuando Silas y Timoteo vinieron de Macedonia,


Pablo estaba entregado por entero a la predicación de la
palabra, testificando a los judíos que Jesús era el Cristo.

¿Qué dice Lucas que predicaba Pablo? La Palabra. ¿A qué


Palabra se refería? A la Palabra de Dios. La ley y los profetas del
Antiguo Testamento.

1Corintios 1.22-24 Porque los judíos piden señales, y los griegos


buscan sabiduría; pero nosotros predicamos a Cristo crucificado,
para los judíos ciertamente tropezadero, y para los gentiles
locura; mas para los llamados, así judíos como griegos, Cristo
poder de Dios, y sabiduría de Dios.

2Corintios 4.5 Porque no nos predicamos a nosotros mismos,


sino a Jesucristo como Señor, y a nosotros como vuestros siervos
por amor de Jesús.

Los adversarios de Pablo y sus seguidores públicamente


rechazaban la enseñanza oral de este evangelio.

Para ellos, el evangelio era porque algo oscuro; su legalismo


religioso les cegaba y les impedía ver la verdad. Algo que ya
Jesús mismo había profetizado que ocurriría en Juan 9.39-41:

Dijo Jesús: Para juicio he venido yo a este mundo; para que los
que no ven, vean, y los que ven, sean cegados. Entonces algunos
de los fariseos que estaban con él, al oír esto, le dijeron: ¿Acaso
nosotros somos también ciegos? Jesús les respondió: Si fuerais
ciegos, no tendríais pecado; mas ahora, porque decís: Vemos,
vuestro pecado permanece.

Entre los que se pierden está encubierto. Los reformados quieren


ver en estas palabras de Pablo que los que se pierden no pueden
entender ni recibir el evangelio, porque no pertenecen al grupo de
los escogidos.
149

Ponen el carro delante de los caballos. No es que no entiendan ni


reciban el evangelio porque estén condenados de antemano; sino
que están perdidos porque decidieron no creer en el evangelio de
Cristo.

Para entender este pasaje hay que verlo a la luz del siguiente. Es
en el contexto que podemos hallar el verdadero sentido de los
textos. En el verso siguiente Pablo les llamará incrédulos.

En otro pasaje Pablo aclara la razón por la cual se pierden.


2Tesalonicenses 2.8-12 Y entonces se manifestará aquel inicuo, a
quien el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con
el resplandor de su venida; 9inicuo cuyo advenimiento es por
obra de Satanás, con gran poder y señales y prodigios
mentirosos, 10y con todo engaño de iniquidad para los que se
pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser
salvos. 11Por esto Dios les envía un poder engañoso, para que
crean la mentira, 12a fin de que sean condenados todos los que no
creyeron a la verdad, sino que se complacieron en la injusticia.

Aquellas personas que rechazan conscientemente el evangelio de


Cristo, por su propia elección, siguen el camino que lleva a la
muerte eterna.

Es interesante comprobar que apistos es el mismo término que se


usa en 2Corintios 6.14 donde Pablo avisa a los creyentes que no
se unan a los incrédulos. El termino es aplicable a cuantos
rechazan reconocer a Jesucristo como el Hijo de Dios.

Por tanto, los que se pierden son los incrédulos. Quienes no


quieren creer a Dios, ni su Palabra. Todo lo contrario a la fe.

La perdición es el destino que aguarda al que no se arrepiente de


sus pecados, a quien rechaza el amor a la verdad, rehusando creer
a Dios. Como está escrito: El que cree en el Hijo tiene vida
eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino
que la ira de Dios está sobre él. Juan 3.36.
150

La clave de la interpretación correcta de este pasaje está en la


palabra rehúsa, que en el griego es apeizeó, y que significa
desobedecer, no ser fiel, ser incrédulo.

Los calvinistas dicen que los no elegidos no pueden creer y que


los escogidos no pueden resistir la gracia de Dios. Este pasaje
deja de mentiroso a Calvino y a todos los calvinistas.

Por Pablo sabemos que la gracia de Dios se ha manifestado para


salvación a todos los hombres. Tito 2.11 Y por Juan está claro
que esa gracia puede ser resistida.

Como Eva que prefirió creer a la serpiente en vez de creer a Dios,


y fue condenada por no haber creído en el testimonio de Dios. Del
mismo modo, igualmente, serán condenados y se perderán todos
aquellos que se nieguen a creer en Dios y en Su Palabra escrita.

Entre los que se pierden está encubierto. ¿Qué significa que está
encubierto? Que no lo ven. Que está fuera de su alcance, de su
entendimiento. Muchos en Corinto no querían aceptar el
evangelio de Cristo, por lo que, consecuentemente, permanecía
encubierto para ellos.

Este pasaje es mal usado por Calvino y los reformados, quien


malinterpretando las palabras del apóstol Pablo afirma que
rechazan su doctrina porque son reprobados. Es decir, porque no
pertenecían a los escogidos.

¿Será esto así? Por supuesto que no. En realidad son reprobados
porque rechazan la predicación del evangelio. Es su incredulidad
lo que no les permite entender la verdad de Dios. No al revés.

La causa de este encubrimiento no radica en el evangelio mismo,


que estaba suficientemente claro, ni tampoco en Cristo, que había
enviado a los apóstoles, sino en los oyentes que rechazaban el
mensaje del evangelio.
151

Para ellos, el evangelio estaba encubierto porque su ceguera les


impedía ver la luz espiritual, es lo mismo que les pasaba a los
fariseos de su tiempo.

Juan 9.39-41 Dijo Jesús: Para juicio he venido yo a este mundo;


para que los que no ven, vean, y los que ven, sean cegados.
Entonces algunos de los fariseos que estaban con él, al oír esto,
le dijeron: ¿Acaso nosotros somos también ciegos? Jesús les
respondió: Si fuerais ciegos, no tendríais pecado; mas ahora,
porque decís: Vemos, vuestro pecado permanece.

Por tanto, Pablo se refiere aquí a aquellas personas que rechazan


conscientemente el evangelio de Cristo y, por su propia elección,
siguen el camino que lleva a la muerte eterna.

¿Qué es la perdición? La perdición es el destino que aguarda al


que no se arrepiente, a quienes rechazan el amor a la verdad, a
quienes van por el camino ancho. Porque ancha es la puerta, y
espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los
que entran por ella. Como está escrito en Mateo 7.13.

Para poder entender bien este pasaje debemos tener en cuenta el


contexto inmediato, es decir el texto siguiente, en el que se
explica quiénes son estos que se pierden. Estudiémoslo.

4. En los cuales, el dios de este siglo. ¿Es Satanás un dios? ¿Por


qué Pablo le llama así? En estas cuestiones es muy importante
conocer el contexto histórico porque nos ayuda a entender ciertos
pasajes de la Escritura como este.

Pablo está usando la terminología agnóstica de la época. Los


gnósticos tenían ideas erróneas acerca de Dios y de Satanás.-

Por ejemplo, afirmaban que el mundo no había sido creado por


Dios, sino por un ser maligno. Aun hoy en día hay quienes creen
que el mundo fue la creación de Satanás, en vez de Dios. Toda la
Escritura desmiente esa falsedad.
152

Algunos estudiosos, ante la dificultad de entender bien este pasaje


quisieron cambiarlo para no llamar dios a Satanás, pero el texto
original no deja lugar a la duda. Es un lenguaje claro en el que
Pablo llama dios de este siglo a Satanás.

¿Lo hace para ponerlo al nivel de Dios? Desde luego que no, sino
para mostrarlo como quien gobierna los afanes de este mundo
perverso.

¿Por qué sabemos que se refiere a Satanás y no a Dios mismo?


Porque Dios no quiere que la gente se pierda, ni sea ciega a la
verdad, sino que, como está escrito: Dios quiere que todos sean
salvos y vengan al conocimiento de la verdad. 1Timoteo 2.4.

Esta es la voluntad expresa de Dios. Por este pasaje ¿Qué


personas podemos entender que han sido predestinadas por Dios
a la salvación? Todas las personas.

¿Quiere eso decir que se salvarán todas? No. Algunos


argumentan: Pero si Dios quiere ¿Quién lo impedirá?

¿Cuál es la respuesta correcta para estas cuestiones? Sabemos que


Dios quiere que todos se salven, pero que no todos se salvarán.
¿Por qué? Porque no todos creen en el Hijo de Dios.

¿Cuál es la única condición que Dios, en Su Soberana voluntad,


ha establecido para que el ser humano pueda disfrutar de la
gracia, del regalo, de la vida eterna? La fe. Marcos 16.15-16.

Sólo en Cristo Jesús. ¿Hay vida eterna fuera de Él? No.


Recuerden Hechos 4.12.

Entonces, ¿Porqué Pablo le llama “dios” a Satanás? Porque


Satanás es el adversario de Dios y su pueblo. Pero en este mundo,
ejerce la autoridad que le ha sido dada.

¿Enseña la Biblia eso? Desde luego, en la tentación de Jesús


quedó claro:
153

Lucas 4.6 Y le dijo el diablo: A ti te daré toda esta potestad, y la


gloria de ellos; porque a mí me ha sido entregada, y a quien
quiero la doy.

¿Cómo llama Jesús a Satanás? El príncipe de este mundo;


Veamos otros pasajes: Juan 12.31; 14.30; 16.11; Efesios 2.2. Pero
Pablo lo llama «dios».

Esta interpretación del apóstol al respecto de la figura de Satanás


no debe sorprendernos, pues, para Pablo está claro que el diablo
se disfraza como ángel de luz. Es decir, como un falso dios,
2Corintios 11.14.

Usa falsos milagros, señales con las que engaña a sus víctimas,
que no conocen en profundidad la Palabra de Dios, y se dejan
engañar por las apariencias.

Todo, ¿Para qué? Para cegar el entendimiento de los incrédulos.


¿Quiénes son los incrédulos que Pablo menciona? Debemos
tomarlo como sinónimo de los que se pierden del verso anterior.

Por tanto, ¿A quiénes podríamos aplicar ese término? Es aplicable


a cuantos rehúsan reconocer a Jesucristo como el Hijo de Dios, ya
sean los judíos que rechazaban a Cristo como Hijo de Dios, o los
gentiles corintios que rechazaban el evangelio que Pablo les
presentaba.

Nuevamente llamo vuestra atención sobre el hecho de que


primero es la incredulidad, después la ceguera. ¿Son importantes
estos detalles? Sin ninguna duda.

¿Es importante el orden de los factores? Por supuesto. Aunque los


reformados no lo tengan en cuenta. ¿Qué ocurre si no tenemos en
cuenta el orden? Que se equivocan.
154

¿Qué ocurre cuando una persona cierra su corazón a Dios en


rebeldía e incredulidad? Que queda a merced del enemigo que lo
ciega y le impide ver la verdad.

Pablo hablo de esto en Romanos 1.21-22 Pues habiendo conocido


a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino
que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue
entenebrecido. 22Profesando ser sabios, se hicieron necios.

¿Los hizo necios Dios? De ninguna manera. ¿Qué dice el texto?


Se hicieron necios. Es interesante la palabra que aparece en el
original griego, mórainó, que significa convertir en tontería o
necedad, volverse tonto, hacer insípido, perder el sabor.

Eso es lo que ocurre cuando una persona oye la Palabra de Dios y


cierra su corazón. Se vuelve tonto. ¿Saben lo que dice el
diccionario sobre esta palabra? Tonto: Falto o escaso de
entendimiento, dicho coloquialmente alguien pesado, molesto.

¡Qué contraste entre los predicadores que arrojan la luz del


evangelio, y el diablo que ciega a los incrédulos para que no
puedan verla.

La Palabra de Dios es luz, Salmo 119.105; Cuando se rechaza en


incredulidad la luz, ¿Qué queda? Sólo oscuridad y tinieblas.

La misión de todo siervo de Dios es disipar las tinieblas con la luz


del evangelio de la gloria de Cristo. ¿Cuál es la intención del
diablo? Es justamente la contraria.

A mayor resistencia, mayor oscuridad.


A mayor confianza, mayor luz.
A mayor incredulidad, mayor tinieblas.
A mayor fe, mayor conocimiento.
A mayor rebeldía, mayor pecado.
A mayor obediencia, mayor bendición.
155

Un velo cubre los ojos y la mente de los incrédulos, de forma


similar al caso de los israelitas que no podían ver la gloria de Dios
reflejada en el rostro de Moisés a causa del velo que lo cubría.
Como leímos en el 3.14-15.

Los cristianos vivimos ¿En las tinieblas o en la luz? En luz, como


está escrito Juan 8.12: Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy
la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino
que tendrá la luz de la vida.

Satanás no tiene poder sobre quienes andamos en la luz,


siguiendo a Dios en fe. Aun así, intenta engañarnos de mil formas
diferentes.

Mateo 24.24 Porque se levantarán falsos cristos, y falsos


profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que
engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos.

Es interesante el montón de gentes que ha quedado mal este mes.


Falsos profetas que advirtieron que el día diez, según unos; el
trece, según otros; el veinte, según alguno más; el veintitrés,
otros. Todos anunciaron grandes catástrofes para este mes.

El rapto o arrebatamiento de la Iglesia; La aparición del


Anticristo; El fin del mundo. Es evidente que conforme avance el
tiempo más y más falsos profetas vendrán engañando a la gente.

¿Con qué objetivo creen que el diablo los inspira mediante


espíritus engañadores? A fin de que la gente se canse y desespere
y deje de creer en profecías. Así cuando venga Cristo, nadie lo
creerá.

Alguno piensan que Jesús está diciendo aquí en Mateo 24.24 que
no es posible engañar a los escogidos. ¿Qué pensáis? ¿Será
cierto? De ningún modo.

¿Cómo estar seguros? Por el contexto: Jesús dice en el verso 23 y


26: No le creáis. ¿Para qué la advertencia de Jesús si no fuera
156

posible que engañara a ninguno? Alguno que piensan que no


pueden ser engañados ya lo han sido.

Los creyentes no sólo podemos ver la gloria de Cristo en el


evangelio, y entender la Palabra de Dios, sino que debemos
reflejar la misma luz que nos ilumina, en nuestra vida diaria.

Son dos cosas: poder y deber.

1Juan 1.1-7: Este es el mensaje que hemos oído de él, y os


anunciamos: Dios es luz, y no hay ningunas tinieblas en él. Si
decimos que tenemos comunión con él, y andamos en tinieblas,
mentimos, y no practicamos la verdad; pero si andamos en luz,
como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la
sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado.

Pablo está defendiéndose de sus acusadores, justamente


afirmando su integridad como hijo y siervo de Dios.

Pablo coloca tres genitivos después del sustantivo iluminación, a


saber, «del evangelio», «de la gloria», «de Cristo». Cada genitivo
explica y enfatiza el nombre que lo precede.

De esa manera tenemos la siguiente secuencia: la iluminación que


el evangelio emite proviene de la gloria de Cristo.

El cual es la imagen de Dios. La última frase de este versículo, es


una declaración contundente de que Cristo es la imagen de Dios.

Como está escrito Colosenses 1.15-17: El es la imagen del Dios


invisible, el primogénito de toda creación. Porque en él fueron
creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en
la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean
principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y
para él. Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él
subsisten.
157

Algunos han querido confundirse con este versículo, intentando


enseñar que Cristo fue creado. Pero la Palabra de Dios debe ser
interpretada a la luz de la propia Palabra de Dios.

Justamente lo que este pasaje enseña es todo lo contrario. Es que


Jesús ya existía entes de la creación de todas las cosas y que Él es
el Creador, por el cual todo fue creado. Por tanto, primogénito es
preeminente, es decir, más importante, anterior a todo lo demás.

Si Cristo hubiese sido creado como los ebionitas y arrianos


afirman, Pablo no diría Él es ante de todas las cosas, sino Él es
antes de las demás cosas. Pero no es eso lo que dice.

Esta es una clara expresión de la deidad del Hijo de Dios.

Aquí lo citamos para confirmar la doctrina paulina de que Cristo


es la imagen del Dios invisible. Como también está escrito en:

Hebreos 1.1-3 Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas


maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, 2en estos
postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó
heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo; 3el cual,
siendo el resplandor de su gloria, y la imagen misma de su
sustancia, y quien sustenta todas las cosas con la palabra de su
poder.

También el autor de Hebreos enseña que Cristo es la imagen


misma de la sustancia o naturaleza de Dios.

Filipenses 2.5-8 Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo


también en Cristo Jesús, el cual, siendo en forma de Dios, no
estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se
despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a
los hombres; y estando en la condición de hombre, se humilló a sí
mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.
158

No hace mucho oí a alguien predicando y diciendo que Cristo no


era Dios, porque cuando vino a la tierra se despojó de su
divinidad como de una chaqueta.

¿Es esto lo que dice Pablo aquí? De ningún modo. Jesús no se


despojó de su divinidad, sino que se negó a usar los poderes
sobrenaturales para vivir como un hombre más. Es decir, de lo
que se despojó fue de su derecho de manifestarse como realmente
era.

Este tema es de vital importancia porque la fe cristiana reside


justamente en que Jesús sea realmente Dios hombre, y no
solamente un hombre extraordinario.

Los arrianos y los ebionitas, creían que Jesús sólo era humano y
que no poseía naturaleza divina. De estos descienden los testigos
de Jehová, los adventistas y mormones, y cuantos niegan la
divinidad de Jesús. Todos ellos se equivocan negando la Palabra
de Dios.

Algunos argumentan que Jesús nunca afirmó ser Dios. Es cierto


que no dijo de forma explícita: Yo soy Dios. Sin embargo, si
verdaderamente no fuera Dios, algunas de sus afirmaciones serían
incorrectas.

Pondré algunos ejemplos:

Mateo 13.41-42 Enviará el Hijo del Hombre a sus ángeles, y


recogerán de su reino a todos los que sirven de tropiezo, y a los
que hacen iniquidad, 42y los echarán en el horno de fuego; allí
será el lloro y el crujir de dientes.

Marcos 2.5-7 Al ver Jesús la fe de ellos, dijo al paralítico: Hijo,


tus pecados te son perdonados. 6Estaban allí sentados algunos de
los escribas, los cuales cavilaban en sus corazones: 7¿Por qué
habla éste así? Blasfemias dice. ¿Quién puede perdonar pecados,
sino sólo Dios?
159

En este pasaje, Jesús se abroga la prerrogativa de perdonar los


pecados. Afirmación que le acarreó una acusación de blasfemia.
Lo que sigue es interesante, pues, no corrigió a los escribas por
haberle entendido mal, sino que confirmó sus palabras con una
clara demostración de poder sobrenatural.

Marcos 2.9-12 Y conociendo luego Jesús en su espíritu que


cavilaban de esta manera dentro de sí mismos, les dijo: ¿Por qué
caviláis así en vuestros corazones? ¿Qué es más fácil, decir al
paralítico: Tus pecados te son perdonados, o decirle: Levántate,
toma tu lecho y anda? Pues para que sepáis que el Hijo del
Hombre tiene potestad en la tierra para perdonar pecados (dijo
al paralítico): A ti te digo: Levántate, toma tu lecho, y vete a tu
casa. Entonces él se levantó en seguida, y tomando su lecho, salió
delante de todos, de manera que todos se asombraron, y
glorificaron a Dios, diciendo: Nunca hemos visto tal cosa.

Aunque al principio de su ministerio Jesús se guardó de


proclamarlo abiertamente, no así en la última etapa del mismo en
el que sus afirmaciones era mucho más atrevidas.

Juan 8.58 Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Antes que
Abraham fuese, yo soy.

Declaraciones como esta, provocaron reacciones violentas en los


judíos que comprendían claramente qué significaban.

Juan 8.59 Tomaron entonces piedras para arrojárselas; pero


Jesús se escondió y salió del templo; y atravesando por en medio
de ellos, se fue.

Juan 10.30 Yo y el Padre uno somos.

Vean las reacciones de los judíos:

Juan 10.31-33 Entonces los judíos volvieron a tomar piedras para


apedrearle. Jesús les respondió: Muchas buenas obras os he
mostrado de mi Padre; ¿por cuál de ellas me apedreáis? Le
160

respondieron los judíos, diciendo: Por buena obra no te


apedreamos, sino por la blasfemia; porque tú, siendo hombre, te
haces Dios.

Pero la más clara alusión a su divinidad, la hizo Jesús durante su


proceso judicial. La acusación de los judíos es que se hizo a sí
mismo hijo de Dios, Juan 19.7.

Mateo 26.63-68 Entonces el sumo sacerdote le dijo: Te conjuro


por el Dios viviente, que nos digas si eres tú el Cristo, el Hijo de
Dios. 64Jesús le dijo: Tú lo has dicho; y además os digo, que
desde ahora veréis al Hijo del Hombre sentado a la diestra del
poder de Dios, y viniendo en las nubes del cielo. 65Entonces el
sumo sacerdote rasgó sus vestiduras, diciendo: ¡Ha blasfemado!
¿Qué más necesidad tenemos de testigos? He aquí, ahora mismo
habéis oído su blasfemia. 66¿Qué os parece? Y respondiendo
ellos, dijeron: ¡Es reo de muerte! 67Entonces le escupieron en el
rostro, y le dieron de puñetazos, y otros le abofeteaban,
68
diciendo: Profetízanos, Cristo, quién es el que te golpeó.

Esta es la declaración más clara de su deidad.

Millard Erickson dice en su libro Teología Sistemática, pág. 699,


Podía haber evitado la ejecución simplemente negando ser el Hijo
de Dios, pero no lo hizo.

No sólo no negó el cargo de que afirmaba ser Dios, sino que


aceptó que sus discípulos le atribuyesen deidad. El caso más claro
de esto es la respuesta a Tomás cuando le llama “Señor mío y
Dios mío” en Juan 20.28.

Aquí tuvo una perfecta oportunidad de corregir ese error, si es que


lo hubiera sido, pero Jesús no lo hizo. Aceptó la adoración.

Así, pues, la afirmación de que Jesús nunca afirmó ser Dios es


falsa. Cristo es la imagen misma de Dios. Porque es de la misma
naturaleza divina.
161

¿Dónde nos quedamos la semana pasada?

Nos quedamos hablando de la última frase del 4.4 en el que Pablo


afirma que Cristo es la imagen de Dios. Y vimos cómo a pesar de
ser una de las doctrinas más atacadas, la deidad de Cristo, es
afirmada claramente en la Palabra de Dios.

¿Alguno recuerda algún pasaje en el que se afirme que Cristo es


Dios? Por ejemplo: Romanos 9.5; Tito 2.11-13. Y hay muchos
más. Pasajes que conviene conocer para presentar defensa de
nuestra fe.

El concepto: imagen de Dios, ¿A dónde nos lleva? ¿Dónde


aparece por primera vez en la Biblia este concepto? Nos lleva al
Génesis 1.26-27:

Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen,


conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en
las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo
animal que se arrastra sobre la tierra. 27Y creó Dios al hombre a
su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.

Por tanto, mientras Adán porta la imagen de Dios sólo por


semejanza, Cristo es la misma imagen exacta de su ser, como
hemos leído en Hebreos 1.3.

Por tanto, no es correcto decir que Cristo se despojó de su


divinidad.

¿Podríamos decir que de lo que se despojó fue de su gloria?


Tampoco. Es una frase que he oído en multitud de ocasiones. Sin
embargo, la Biblia no dice eso tampoco, sino lo contrario.

Juan 1.14: Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros
(y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de
gracia y de verdad.
162

Es evidente que si los apóstoles vieron su gloria, es porque no se


había despojado de ella. Quizás no la vieron completa. Pero la
vieron. Los que presenciaron la transfiguración vieron un mayor
grado de la gloria de Cristo.

Entonces, ¿Es correcto afirmar que Jesús al hacerse hombre se


despojó de su gloria? No. Tampoco es correcto decir que Cristo se
despojó de su gloria. Esto es lo que va a decir en el verso 6. Pero
antes, veamos el 5.

Porque no nos predicamos a nosotros mismos. Ya hablamos de


esto cuando comentábamos el verso anterior. ¿Participaba Pablo
de las luchas partidistas que se daban en Corinto? De ningún
modo. ¿Buscaba él honor para sí mismo? Desde luego que no,
sino para su Señor.

Por ese motivo, con mucho énfasis aclara que él y sus


colaboradores no se predicaban a sí mismos. Esto evidencia, no
obstante, que sus acusadores sí lo hacían.

2corintios 10.12 Porque no nos atrevemos a contarnos ni a


compararnos con algunos que se alaban a sí mismos; pero ellos,
midiéndose a sí mismos por sí mismos, y comparándose consigo
mismos, no son juiciosos.

¿Qué quiere decir con esto Pablo? Que quienes le acusaban a él,
era gente que se predicaba a sí misma.

El cristiano no debe compararse a sí mismo, ni medirse por sí


mismo, sino ¿Con quién? Con Jesús, nuestro modelo. Como está
escrito: Dios nos predestinó para que fuésemos conforme a la
imagen de su Hijo. Romanos 8.29.

Pero algunos, no quieren ser como Jesús, sino como Satanás, el


ladrón y el usurpador que quiso arrebatar el trono y la gloria a
Dios. ¿Creen que hay gente así en la actualidad? Sin duda.
163

2Corintios 11.13-15 Porque éstos son falsos apóstoles, obreros


fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles de Cristo. Y no es
maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de
luz. Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan
como ministros de justicia; cuyo fin será conforme a sus obras.

Aquí podemos ver cómo estos falsos apóstoles que hablaban mal
de Pablo, no eran en realidad verdaderos siervos de Dios, sino del
diablo. Gente con apariencia de verdad, pero que no predican a
Cristo sino a sí mismos.

Es una verdadera lástima comprobar cómo tantos púlpitos están


llenos de verborrea humana y tan escaso de la Palabra de Dios.
Una lástima que las librerías cristianas estén llenas de libros que
nada tienen que ver con la Biblia, aunque en escasas ocasiones se
cite algún texto fuera de contexto.

Muchos predicadores hablan y hablan de sí mismos. Sus


sermones están llenos de: Yo creo, yo pienso, a mí me parece, y
frases similares. No hay lugar en el ministerio genuino para
exaltarse a sí mismo. El ministro del evangelio es un fiel siervo
del Señor.

No son pocos quienes tienen habilidades de oratoria. ¿La tienen


los políticos? Algunos, antes más que ahora. ¿La tiene la gente
del espectáculo? También. ¿Qué tal los predicadores? Muchos
pronuncian discursos hermosos. Pero vacíos de la Palabra de
Dios.

Pensemos, ¿Todos los políticos son buenos estadistas que buscan


el bien de su pueblo? De ningún modo. Actualmente abundan los
corruptos. Quienes se involucran en la política con el único fin de
enriquecerse. Muchos sólo son charlatanes que hablan y hablan
sin decir nada.

De los actores y gente del espectáculo no hablo porque su


profesión es hacerse pasar por quienes no son en realidad. Pero…
164

¿Pasará algo similar entre los predicadores? Desgraciadamente


también ocurre.

Cuando un predicador habla bonito, pero no expone la verdad de


la Palabra de Dios, ¿Qué debemos hacer? Da igual lo bonito que
hable, debe ser desechado. ¿Por qué? Porque se ha convertido en
alguien del espectáculo. Alguien que representa un papel, pero
que no es genuino.

Por curioso que pueda parecer Pablo, en 2Timoteo 4.3-4, advierte


de que en este tiempo la gente buscaría predicadores así. Ese es el
tipo de pastores que siguen y el tipo de iglesia que la gente busca
en los tiempos finales.

La única iglesia que toleran es una iglesia que no les acuse, ni les
moleste, sino que les haga sentir bien. Una iglesia que les mienta
diciéndoles que pueden seguir viviendo como quieran y aun así,
creer que serán salvos.

Un verdadero predicador no debe predicarse a sí mismo, sino a


Cristo. Debe decir: Como está escrito…

¿Pablo era de éstos? Sí. Pablo no se predicaba a sí mismo…


Déjenme preguntar a quienes nos ven por la red: ¿A quién predica
tu pastor? ¿Predica a Cristo o se predica a sí mismo? ¿Te enfrenta
con la verdad de la Palabra de Dios, o sólo busca hacerte sentir
bien?

Si predica a Cristo, sigue adelante; pero si se predica a sí mismo,


busca otra congregación. Pues, de lo contrario estás perdido.

Sino a Jesucristo como Señor. ¿Cuál es el contenido de la


predicación el apóstol Pablo? Dado que Pablo ha estado
afirmando que predicaba el evangelio de Cristo, ahora se dedica a
explicarlo.

Pablo presenta a Cristo como el Señor. ¿Recuerdan algún pasaje


en el que Pablo lo presente así? Por ejemplo: Romanos 10.9;
165

Filipenses 2.10-11, con lo que se deduce que tanto él como sus


colaboradores son siervos de los corintios por amor de Cristo.
1Corintios 3.5.

No como otros que “sirven” por codicia.

Las dos últimas palabras son una necesaria aclaración. Porque son
muchos los que predican a Cristo, pero no como Señor.

Le han dado la vuelta al versículo y predican a Cristo como siervo


de los creyentes y a sí mismos como señores de ellos. Meditemos
en esto por un momento. ¿Se dan cuenta del engaño? Te dicen:

Cree en Cristo y solucionará todos tus problemas.


Cree en Jesús y él te concederá las peticiones de tu corazón.
Confiesa al Hijo de Dios y él te sanará. Te hará próspero. Te hará
sentir bien.

Estos falsos mensajes son predicados hoy en día sin pudor, ni


vergüenza, por aquellos que debieran estar predicando a Jesús
como Señor. Estos falsos predicadores han convertido a Cristo en
el siervo obligado a servir a aquellos que ofrendan.

Y a nosotros como vuestros siervos por amor de Jesús. Los


pastores estamos para servir a la Iglesia, no para servirnos de ella.
¿Hay diferencia entre lo uno y lo otro? Sin lugar a dudas. Pongan
algún ejemplo.

¿Es la actitud de Pablo diferente a la que tenían los sacerdotes de


su tiempo? Desde luego que sí. ¿Es diferente a la que tenía Jesús?
En absoluto. De él toma su ejemplo. Juan 13.15-17.

En todas las cosas es fundamental analizar las motivaciones que


nos llevan a hacer algo. Porque una misma cosa se puede hacer
por una razón correcta o por otra incorrecta.

Por ejemplo, veamos lo que dice Pablo en Filipenses 1.15


Algunos, a la verdad, predican a Cristo por envidia y contienda;
166

pero otros de buena voluntad. Los unos anuncian a Cristo por


contención, no sinceramente, pensando añadir aflicción a mis
prisiones; pero los otros por amor, sabiendo que estoy puesto
para la defensa del evangelio. ¿Qué, pues? Que no obstante, de
todas maneras, o por pretexto o por verdad, Cristo es anunciado;
y en esto me gozo, y me gozaré aún.

Aquí vemos dos actitudes diferentes. Dos motivaciones, dos


actitudes, bien distintas. Por un lado unos que predican por una
razón no válida como la envidia o la contienda, y otro que la
predica por amor.

¿Cuál creen que es la apropiada? Sin duda aquella cuya


motivación es el amor.

¿Se podría identificar las motivaciones de alguien? Si se pone


atención y cuidado sí. Es más, es deseable, pues de lo contrario
puede que estés siguiendo a alguien a quien no debieras seguir.

6. ¿De qué creen que está hablando aquí el apóstol Pablo? Esto es
una referencia a la creación del Sol, la Luna y las estrellas.
Lumbreras que iluminan nuestra vida física. Pero también una
referencia a la luz espiritual que Dios aporta a nuestra vida
cuando le abrimos el corazón.

1Juan 1.5-7 Este es el mensaje que hemos oído de él, y os


anunciamos: Dios es luz, y no hay ningunas tinieblas en él. Si
decimos que tenemos comunión con él, y andamos en tinieblas,
mentimos, y no practicamos la verdad; pero si andamos en luz,
como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la
sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado.

¿Recuerdan lo que ocurrió en el camino a Damasco? Dios iluminó


a Saulo de Tarso en su camino a Damasco. Con tal fuerza que su
luz cegó temporalmente al perseguidor de la Iglesia. Pero aquella
luz que le cegó físicamente, fue la misma que iluminó su alma
espiritualmente por el resto de su vida.
167

¿Qué produjo aquella iluminación en el corazón de Saulo? Le


hizo ver lo errado que estaba. Esto es lo primero que hace Dios en
nuestras vidas.

Porque todo ser humano cree saber lo que hace. Y muchos son
capaces hasta de matar convencido de que es lo que tiene que
hacer, para agradar a Dios. Pablo descubrió que no estaba
agradando a Dios.

Aquella luz hizo algo más, transformó al perseguidor en un


hombre nuevo. ¿En qué podía apreciarse esa transformación? Le
iluminó en el conocimiento de la gloria de Dios en la faz de
Jesucristo. Y le cambió la vida.

Recibió una comprensión mucho más profunda de la palabra de


Dios. Comprensión que otros no recibieron al mismo nivel. ¿La
tenían los sacerdotes de su tiempo? Desde luego que no.

Eran los encargados de enseñar la verdad al pueblo, pero ellos


mismos eran ciegos, guiando a otros más ciegos.

Saulo pensaba que agradaba a Dios persiguiendo a los cristianos.


Pero en realidad andaba entre tinieblas. Las mismas en las que
vivían los escribas y sacerdotes, el pueblo entero.

Tenían la responsabilidad de enseñar al pueblo el conocimiento


de Dios, pero ellos mismos no le conocían. No tenían
conocimiento de la Voluntad Divina. De hecho tuvieron delante a
Dios y no supieron verlo.

¿Creen que eso puede suceder hoy? Desde luego. Hay muchos así
que pretenden enseñar a otros, cuando ellos mismos viven en
tinieblas. El ciego guiando a otros ciegos camino al hoyo.

La idea tradicional de la conversión como paso de las tinieblas a


la luz, puede que Pablo la tomara de su propia experiencia en el
camino a Damasco.
168

De hecho, cuando Jesús lo llamó al apostolado le encomendó


diciendo: levántate, y ponte sobre tus pies; porque para esto he
aparecido a ti, para ponerte por ministro y testigo de las cosas
que has visto, y de aquellas en que me apareceré a ti, librándote
de tu pueblo, y de los gentiles, a quienes ahora te envío, para que
abras sus ojos, para que se conviertan de las tinieblas a la luz, y
de la potestad de Satanás a Dios; para que reciban, por la fe que
es en mí, perdón de pecados y herencia entre los santificados.
Hechos 26.16-18.

Aquí tendríamos que hacer un alto en el camino y preguntarnos si


estamos caminando en la luz de Dios, o en tinieblas. ¿Cómo
podríamos saberlo? Los fariseos pensaban que andaban a la luz de
la Escritura, sin embargo, no era así.

Se habían llenado de doctrinas humanas que les habían alejado de


la verdad de la Palabra de Dios.

Debemos buscar una relación personal con Dios mediante la cual,


podamos recibir el testimonio del propio Espíritu de Dios a
nuestro espíritu, a fin de confirmarnos en la verdad.

Es el Espíritu de Dios quien da testimonio a nuestro espíritu de


que somos hijos de Dios; el que nos guía, según Pablo en
Romanos 8.14, a toda la verdad, como está escrito en Juan 16.13.

Sin esa relación personal con Dios, nuestra fe se limita a una


simple religión más, aunque sea la religión cristiana.

Mientras que Dios ilumina nuestro corazón, Satanás ciega a la


gente incrédula, 4, Dios ha brillado en nuestros corazones, para
iluminarnos con el conocimiento de su gloria por medio de la cara
de Jesucristo.

Es muy interesante esta referencia a la faz de Jesucristo. Al rostro,


la superficie, la apariencia, el semblante, la presencia, la persona
de Jesucristo.
169

También debiéramos preguntarnos: ¿Nos iluminó Dios para que


nos sintiéramos mejores que los demás? De ningún modo. ¿Para
qué? El apóstol Pablo responde: alumbrando los ojos de vuestro
entendimiento, para que sepáis cuál es la esperanza a que él os
ha llamado, y cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en
los santos. Efesios 1.18.

Esto tiene que ver con nuestro futuro. No podemos vivir tan
aferrados a las cosas temporales, que perdamos de vista que aquí
sólo somos peregrinos de paso, hacia la ciudad celestial.

¿Sabes cual es la esperanza a la que has sido llamado? La


esperanza de la resurrección y la vida eterna. Esta esperanza debe
ayudarnos a enfrentar las adversidades de la vida con entereza,
sabiendo que nada, ni nadie, nos podrá robar esa esperanza.

Y por si eso fuera poco, Pablo habla de las riquezas de la gloria


de su herencia en los santos. ¿Sabías que tienes una herencia?
¿Sabes cómo es esa herencia? El apóstol Pedro nos lo aclara en
1Pedro 1.3-9:

Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según


su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza
viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos, para una
herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada
en los cielos para vosotros, que sois guardados por el poder de
Dios mediante la fe, para alcanzar la salvación que está
preparada para ser manifestada en el tiempo postrero. En lo cual
vosotros os alegráis, aunque ahora por un poco de tiempo, si es
necesario, tengáis que ser afligidos en diversas pruebas, para que
sometida a prueba vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el
cual aunque perecedero se prueba con fuego, sea hallada en
alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado Jesucristo, a
quien amáis sin haberle visto, en quien creyendo, aunque ahora
no lo veáis, os alegráis con gozo inefable y glorioso; obteniendo
el fin de vuestra fe, que es la salvación de vuestras almas.
170

¿Te ayuda esto? A mí, sí. Desde luego. Me anima aun en medio
de la aflicción, por la esperanza puesta delante de nuestros ojos.

Como está escrito en Filipenses 3.20-21: Mas nuestra ciudadanía


está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al
Señor Jesucristo; el cual transformará el cuerpo de la
humillación nuestra, para que sea semejante al cuerpo de la
gloria suya, por el poder con el cual puede también sujetar a sí
mismo todas las cosas.

Si pensamos sólo en las cosas de la tierra, como sabemos, nos


perderemos lo más importante, las cosas eternas. Debemos
hacernos tesoros en el cielo. ¿Recuerdan?

También el apóstol Pedro responde: Mas vosotros sois linaje


escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por
Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de
las tinieblas a su luz admirable. 1Pedro 2.9.

Este pasaje nos enseña que tenemos una misión que cumplir
mientras estamos aquí en esta Tierra. ¿La cumples? ¿Cómo?
¿Invitas a tus vecinos o compañeros de trabajo a tomar un café en
tu casa para compartir con ellos tu fe? ¿Les invitas a la Iglesia?

En este pasaje de 2Corintios 4.6 el evangelio es la luz por la que


los creyentes podemos contemplar la gloria de Dios revelada en
Jesucristo. La gloria que somos llamados a ver, experimentar y
reflejar. Como vimos en 2Corintios 3.18.

7. Pero tenemos este tesoro en vasos de barro. Con pasajes como


este, Pablo quiere enseñar a los corintios la diferencia entre lo
mortal y lo inmortal. Entre el poder de Dios y la debilidad y
fragilidad humana.

Lo mismo que Jesús enseñó en Mateo 6.25-34, que la vida es más


que el alimento y el cuerpo más que el vestido. Es decir, el
contraste entre lo físico y lo espiritual; lo temporal y lo eterno.
171

Pero tenemos. ¿Se refiere Pablo sí mismo? ¿Se refiere a él y a


sus colaboradores o se refiere a todos los cristianos? Sin duda
alguna se refiere a todos cuantos han creído el evangelio y han
recibido el conocimiento de la gloria de Dios.

Este tesoro. ¿A qué tesoro se refiere el apóstol? Al conocimiento


de la gloria de Dios en Cristo. ¿Cómo recibimos dicho
conocimiento? Por la predicación del evangelio y el estudio de las
Sagradas Escrituras.

¿Por qué Pablo le llama tesoro? Porque es de un valor


incalculable. No hay tesoro más grande que alcanzar el
conocimiento de la gloria de Dios, pues por ella somos salvos, por
medio de la fe en Jesús.

¿Qué vale más que eso? Como está escrito: Porque ¿qué
aprovechará al hombre, si ganare todo el mundo, y perdiere su
alma? ¿O qué recompensa dará el hombre por su alma? Mateo
16.26.

¿Valoras el conocimiento de Cristo como un verdadero tesoro?


Muchos cristianos no lo hacen. Teniendo oportunidad de aprender
sobre la Sagrada Escritura, no asisten a las reuniones de estudio.
Así, su conocimiento de la verdad se mantiene limitado.

Pablo valoró el conocimiento de Cristo más que cualquier otra


cosa. Cuando fue a despedirse de los pastores de Éfeso en Mileto,
les dijo en Hechos 20.22-24: Ahora, he aquí, ligado yo en
espíritu, voy a Jerusalén, sin saber lo que allá me ha de
acontecer; salvo que el Espíritu Santo por todas las ciudades me
da testimonio, diciendo que me esperan prisiones y tribulaciones.
Pero de ninguna cosa hago caso, ni estimo preciosa mi vida para
mí mismo, con tal que acabe mi carrera con gozo, y el ministerio
que recibí del Señor Jesús, para dar testimonio del evangelio de
la gracia de Dios.

¿Cuáles eran las cosas que apreciaba Pablo? Acabar su carrera


con gozo, y el ministerio que recibió del Señor Jesús.
172

En otro pasaje, Pablo revela cuál era su tesoro. Él mismo nos lo


dice en Filipenses 3.7-11 Pero cuantas cosas eran para mí
ganancia, las he estimado como pérdida por amor de Cristo. Y
ciertamente, aun estimo todas las cosas como pérdida por la
excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor
del cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a
Cristo, y ser hallado en él, no teniendo mi propia justicia, que es
por la ley, sino la que es por la fe de Cristo, la justicia que es de
Dios por la fe; a fin de conocerle, y el poder de su resurrección, y
la participación de sus padecimientos, llegando a ser semejante a
él en su muerte, si en alguna manera llegase a la resurrección de
entre los muertos.

Nos quedamos en el 4.7 hablando del tesoro. ¿Qué fue lo que


comentamos al respecto? Que para Pablo no había cosa de más
valor que su conocimiento de Cristo y su misión o ministerio.

Aquello que el Señor Jesús le encomendó. Ese era su tesoro. ¿Era


él mismo, su propia vida? Desde luego que no. ¿Cuál es el tuyo?
¿Cuál es tu tesoro? ¿Para qué vives? ¿A qué le das más
importancia en vida a diario? ¿A qué le dedicas más tiempo y
esfuerzo?

Recuerden que donde esté vuestro tesoro, allí estará también


vuestro corazón.

Algunos sólo viven para sí mismos. Sin entender que fuimos


creados para la alabanza de la gloria de Dios. Efesios 1.12.

Otros sólo viven para trabajar. Mirándoles pareciera que no hay


otra cosa importante en sus vidas.
¿Piensan que a Dios no le importa aquello a lo que tú das más
importancia? ¿Qué dice el gran mandamiento de la ley de Dios?
¿No es que le amemos a Él por encima de todo?

El Señor Jesús dijo en Mateo 10.27-29 El que ama a padre o


madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija
173

más que a mí, no es digno de mí; y el que no toma su cruz y sigue


en pos de mí, no es digno de mí. El que halla su vida, la perderá;
y el que pierde su vida por causa de mí, la hallará.

¿Qué enseña Jesús aquí? Que debemos amarle a Él más que a


cualquier otra cosa. Como está escrito: Amarás al Señor tu Dios
con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este
es el primero y grande mandamiento. Mateo 22.37-38.

En vasos de barro. ¿Quiénes son los vasos de barro? Nosotros


mismos. Dios no depositó el conocimiento de su gloria en vasos
de honra, sino en vasos de barro.

¿De qué nos habla esto? ¿Nos dice que somos importantes para
Dios? ¿Qué somos valiosos? En Face circulan multitud de tarjetas
con mensajes que afirman que tú vales mucho.

El programa de televisión de las iglesias evangélicas de España


siempre termina con la frase de la presentadora que dice:
Recuerda que tú vales mucho para Dios.

¿Realmente somos valiosos? ¿Somos vasos de oro? ¿Qué es lo


valioso que hay en nosotros? El tesoro que guardamos. No
nosotros.

Personalmente este pasaje me habla del amor de Dios. Que me


escogió no por méritos propios, sino por su enorme misericordia.

Como está escrito en 1Corintios 1.26-29: Pues mirad, hermanos,


vuestra vocación, que no sois muchos sabios según la carne, ni
muchos poderosos, ni muchos nobles; sino que lo necio del
mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios; y lo débil del
mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte; y lo vil del
mundo y lo menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para
deshacer lo que es, a fin de que nadie se jacte en su presencia.
174

¿Significa esto que no debemos estudiar la Palabra de Dios?


¿Significa que debemos seguir siendo viles y menospreciables?
De ningún modo.

Entenderlo de ese modo es no comprender que Dios nos toma


siendo viles, pero nos transforma en santos; nos toma en
ignorancia, pero nos hace sabios. Nos toma en pecado y nos
transforma en santos.

Los rabinos judíos solían decir: “Es imposible guardar el vino en


vasijas de oro o plata; pero sí se puede en el más humilde de los
contenedores, en vasijas de arcilla. De modo semejante, las
palabras de la Ley sólo las puede guardar el que sea el más
humilde”.

Es interesante comprobar reflexionar al respecto. ¿Vivían los


judíos de manera humilde? ¿Eran humilde los escribas y
sacerdotes? De ningún modo.

Jesús les habló en Mateo 23.1-12 veamos lo que les dijo: Antes,
hacen todas sus obras para ser vistos por los hombres. Pues
ensanchan sus filacterias, y extienden los flecos de sus mantos; y
aman los primeros asientos en las cenas, y las primeras sillas en
las sinagogas, y las salutaciones en las plazas, y que los hombres
los llamen: Rabí, Rabí.

Hay muchos que, como estos fariseos, aun conociendo la


voluntad de Dios en cuanto a ser humildes, viven en la más
absoluta soberbia, considerándose superiores a todos.

Una analogía al caso, del valor del contenedor o del contenido, la


tenemos en los valiosísimos Rollos del Mar Muerto, que fueron
guardados durante más de dos mil años en vulgares jarros de
barro que, cuando fueron hallados, se encontraban en deterioro,
mientras que los rollos que guardaban permanecían intactos.

Vasos de barro que custodiaban el conocimiento de la gloria de


Dios en la faz de Jesucristo.
175

Pablo pone de relieve el contraste entre el valioso tesoro del


conocimiento de Dios y la fragilidad del vaso que lo contiene. De
hecho, va a llevar ese tema de la fragilidad humana hasta sus
últimas consecuencias en el 5.1 al mencionar la muerte.

La idea del vaso de barro proviene de Isaías 64.8 Ahora pues,


Jehová, tú eres nuestro padre; nosotros barro, y tú el que nos
formaste; así que obra de tus manos somos todos nosotros.

¿A qué se está refiriendo Isaías? A nuestra creación. Es una


referencia al modo en que Dios nos creó, del polvo de la tierra.
Génesis 2.7.

La parábola de Jeremías 18, abunda también en esta ilustración.


En la que Dios nos hizo y a pesar de que nos estropeamos,
muestra el modo en que Dios nos ama y nos vuelve a crear por fe
en Cristo Jesús.

En 2Corintios 5.17 Pablo habla de esto.

El apóstol está exponiendo la fragilidad y las limitaciones del ser


humano. ¿Se enseñan estas cosas en otros pasajes de la Biblia?
Pongan algunos otros ejemplos:

La hierba del campo, Lucas 12.28.


La neblina de la mañana, Santiago 4.14.
El pensamiento, Salmo 90.9.

¿Crees que la muerte es real? A pesar de esto, muchos viven


como si no fueran a morir nunca. Es más, ni siquiera quieren
hablar de la posibilidad de la muerte. Como si fuesen a vivir
siempre.

Sin embargo, la realidad suele salirnos al paso para demostrarnos


que la Palabra de Dios es verdad. Cada vez que nos enteramos de
una muerte, cada vez que asistimos a un funeral, se demuestra que
Dios dice la verdad, y que el ser humano es necio al rechazarla.
176

¿Cuándo fue la última vez que estuviste en un entierro?


¿Cómo te sentiste?
¿Qué piensas de la muerte?
¿Piensas sobre ella?
¿Sabes cuándo vas a morir?
¿Cuánto tiempo crees que te queda de vida?
¿Quién lo sabe?
¿Qué pasaría si supieras que fueras a morir en un año?
¿Y en seis meses?
¿Y si supieras que morirías en tres días?
¿Cómo te afectaría eso?
¿Crees que seguirías viviendo igual?
¿Qué cambiarías?
¿Qué has hecho que no te hubiera gustado hacer?
¿Hay algo de lo que te arrepientas?
¿Qué no has hecho que te gustaría hacer?
¿Hay alguien a quien te gustaría decirle algo antes de morir?
¿Qué le dirías?
¿Por qué no se lo has dicho ya?
¿Podría ser esta nuestra última semana de vida?
¿Qué palabras te gustaría que pusieran en tu lápida?
¿Qué cambiará cuando tú mueras?

Estoy aprendiendo a hacerme y a hacer preguntas, al objeto de


reflexionar sobre todas las cosas importantes.

La semana pasada nos quedamos hablando sobre los vasos de


barro que de alguna manera simboliza la fragilidad de la vida, y
nos hicimos muchas preguntas sobre la muerte.

Esto tiene que ver también sobre el propósito para el cual fuimos
creados. Para cerrar el tema del vaso de barro, en Hechos 9.15
Jesús describe a Pablo como recipiente, como vasija, o
instrumento escogido me es éste, para llevar mi nombre en
presencia de los gentiles, y de reyes, y de los hijos de Israel.

Eso tenía un propósito, un objetivo que Pablo revela en este


177

mismo pasaje: Para que la excelencia del poder sea de Dios y no


de nosotros.

¿Qué significa esta frase? Significa, y debe quedar claro, que no


es el poder humano, sino el poder de Dios lo que respalda su
evangelio. Para que la gloria sea para Dios y no para él mismo.
Por cuanto Él es el Único merecedor de toda gloria.

Por esa razón ha puesto este tesoro en vasos de barro. ¿Sabía Dios
que le podíamos fallar? ¿Qué podríamos quebrarnos? Sin duda.
Aun así, asumió el riesgo con nosotros. ¿No es un motivo para
sentirnos felices?

No escogió a los sabios ni entendidos. A esos los dejó en sus


necedades. Nos escogió a ti y a mí. Que lo único bueno que
tenemos es el tesoro que Dios ha depositado en nuestras vidas.

A continuación el apóstol hará un repaso por las debilidades


humanas y las aflicciones del tiempo presente, y la provisión de
Dios para tales circunstancias, y sus efectos en nosotros.

8-9. En estos versos se encuentran cuatro paradojas que Pablo


presenta de la vida cristiana, en las que vemos cómo Dios nos
ayuda aun en las circunstancias más difíciles.

Por medio de esta lista, Pablo va a exaltar el poder de Dios que


nos sostiene cuando más lo necesitamos. Algunos cristianos se
quejan de que Dios no los ayuda.

¿Te ha pasado alguna vez?


¿Te has sentido solo en la lucha cotidiana de la vida?
¿Cómo te sientes cuando te ves sol@?
¿Te preocupas cuando tus semejantes se sienten solos?
Recordemos la regla de oro:

Aunque a veces los cristianos podemos sentirnos solos ¿Lo


estamos realmente? Desde luego que no. Él es quien nos sostiene
y nos da las fuerzas para resistir la dura prueba.
178

¿Qué sino la presencia y el poder de Dios hace posible que


personas casi sin letras pudieran llevar el evangelio hasta los
confines de la tierra?

Por poner un ejemplo, a Pablo se le acusó de ser poco


convincente en sus discursos, que carecía del don de la oratoria,
pero a pesar de estas calificaciones, ¿Pueden describir al apóstol?
¿Realmente merecía esa calificación? Desde luego que no.

¿Cómo vemos a Pablo en las Escrituras?

Proclamaba el evangelio, fundaba congregaciones, fortalecía a los


creyentes y escribía epístolas que han traído el mensaje de
salvación a incontables multitudes alrededor del mundo. Y esto
por generaciones hasta el día de hoy.

¿Se dan cuenta de cuán diferente vemos las cosas de cómo las ve
Dios? ¿Serán verdad las palabras de Dios en Isaías 55.8? Sin
ninguna duda.

La autoridad del evangelio no radica en el poder de los hombres


que lo predican, sino en el poder sobrenatural de Dios que lo
respalda. Los seres humanos podemos ser débiles y limitados,
pero Dios es todopoderoso y no tiene límite alguno.

Como está escrito en Romanos 11.33-36: ¡Oh profundidad de las


riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán
insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos! Porque
¿quién entendió la mente del Señor? ¿O quién fue su consejero?
¿O quién le dio a él primero, para que le fuese recompensado?
Porque de él, y por él, y para él, son todas las cosas. A él sea la
gloria por los siglos. Amén.

Estos versículos son el eco de un pasaje anterior en el que Pablo


describe algunas de las dificultades por las que tuvo que pasar y
que citó en 1Corintios 4.11-13 Hasta esta hora padecemos
hambre, tenemos sed, estamos desnudos, somos abofeteados, y no
179

tenemos morada fija. Nos fatigamos trabajando con nuestras


propias manos; nos maldicen, y bendecimos; padecemos
persecución, y la soportamos. Nos difaman, y rogamos; hemos
venido a ser hasta ahora como la escoria del mundo, el desecho
de todos.

Hay otros varios pasajes en los que el apóstol relata sus


tribulaciones: 1.8-10; 6.4-10; 11.23-27; 12.10.

Que estamos atribulados en todo. ¿Qué quiere Pablo decir con


todo? Pablo estaba afligido de muchas maneras: física, mental,
espiritual y socialmente.

La palabra tribulación significa congoja, pena, tormento o


aflicción moral, persecución o adversidad. ¿Pasó Pablo por estas
aflicciones? Desde luego. Todos estos significados pueden ser
aplicados a la vida de Pablo.

La vida moderna lleva a muchos a estos extremos. No podemos


evitar ocasiones cuando parece ser que todo se nos viene encima
de repente y nos sentimos incapaces de saber cómo responder.

¿Te has sentido así alguna vez?


¿Cómo sueles reaccionar cuando ocurre?
¿A quién acudes en caso de aflicción?
¿Qué harías si alguien te dice que está atribulado?
¿Qué le aconsejarías?
¿Por qué?

Aquí Pablo nos testifica que aunque estemos atribulados, no hay


necesidad de angustiarnos. En otras palabras, tenemos una salida,
una que el mismo Dios proveerá.

Pablo estaba atribulado, ¿Significa eso que Pablo estaba viviendo


la Gran Tribulación? De ningún modo. Algunos que no creen en
la escatología bíblica, es decir, en las profecías de los tiempos
finales, afirman que todas esas profecías futuras ya se cumplieron
en la Iglesia.
180

¿Será así? Por supuesto que no. Como dijimos anteriormente no


debemos confundir las tribulaciones del tiempo presente, con la
Gran Tribulación, que es futura.

En este tiempo hemos oído y leído profecías de todo tipo acerca


de la aparición del Anticristo y del fin del mundo. No hace
muchos días ante la luna roja por el eclipse, muchos citaban la
profecía del Apocalipsis en cuanto a la luna de sangre.

¿Por qué podíamos estar seguros de que la luna roja no era la luna
de sangre de la que habla la Palabra de Dios? Por dos razones
fundamentales.

I.- La luna de la que habla la Biblia se ponía roja porque el sol se


oscurecerá. Joel 2.31 y Hechos 2.20. ¿Se ha oscurecido el Sol?
Desde luego que no. Hemos tenido unos días de calor infernal. El
Sol sigue alumbrando con todo su esplendor.

II.- Porque la luna de sangre de Apocalipsis ocurre cuando se abre


el sexto sello. Recuerden que los sellos significan los juicios de la
ira de Dios sobre los moradores de la tierra. Apocalipsis 6.

¿Te afectan ese tipo de informaciones?


¿Cómo te sientes cuando las recibes?
¿Por qué?
¿Tienes miedo de los tiempos finales?
¿Tienes fe en tu salvación?

Cuando todas estas cosas ocurran, la Iglesia ya no estará sobre la


tierra, porque habrá sido arrebatada a los cielos antes de que
comiencen los juicios de Dios sobre los moradores de la tierra.

1Tesalonicenses 4.16-18 Muestra que el anuncio del


arrebatamiento debe ser un mensaje alentador.

¿Qué aliento hay en pasar por la tribulación?


¿Te gustaría estar en la tierra cuando la ira de Dios se derramada?
181

¿Crees que estarás aquí y pasarás por la Gran Tribulación?


¿Por qué?

1Tesalonicenses 5.1-11 Deja bien claro que no nos ha puesto


Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro
Señor Jesucristo.

La Gran Tribulación es el juicio de Dios contra Jacob, es decir,


Israel y las naciones que han sido rebeldes al mensaje del
evangelio que es el mensaje del amor de Dios. Jeremías 30.7.

¿Perteneces tú al pueblo judío?


¿Castigaría Dios a los justos junto con los injustos? Desde luego
que no.

Por tanto, confundir las aflicciones del tiempo presente, de las que
habla Pablo en Romanos 8.18 con la Gran Tribulación es no
comprender la revelación de la palabra de Dios.

Mas no angustiados. Los hijos de Dios podemos pasar por


diferentes tribulaciones, congoja, pena, tormento o aflicción
moral, persecución o adversidad, pero no vivimos angustiados.
Porque cuando sentimos venir la angustia, sabemos cuál es la
solución de Dios para eso.

El apóstol Pedro, lo resume en 1Pedro 5.7 …echando toda


vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.

¿Sueles echar tu ansiedad sobre Él o batallas con tus emociones?


¿Te acuerdas de Dios o sueles olvidarlo?

Mil años antes que el apóstol Pedro, el rey David ya nos daba la
solución al contarnos su propio testimonio en el Salmo 34. Un
Salmo que ha aliviado la pesada carga de muchos corazones
acongojados.
182

Si la gente que padece depresión conociera estas palabras de Dios


y siguiera sus consejos, las depresiones no llegarían a convertirse
en patológicas. Es decir, en enfermedades.

En apuros. ¿Qué es estar en apuros? Es estar en aprieto,


dificultad, estrechez, escasez, penuria, en reparo, es estar perplejo,
desorientado.

¿Alguna vez te has visto así?


¿Cuánto hace de eso?
¿Cómo lo superaste?
¿Podrías ayudar a otros que estén tengan la misma experiencia?

Es posible que alguno diga: Yo vivo así. En muchas ocasiones


nos vemos que no sabemos qué hacer, no nos queda más recurso
que confiar depender del amor de Dios para que nos oriente.

Curiosamente cuando estamos en apuros y acudimos a Dios,


encontramos la dirección y las fuerzas necesarias para salir
adelante. Porque Él sabe todas las cosas.

Cuando los compatriotas de la francesa Juana de Arco, la


abandonaron ella dijo: “Es mejor estar sola con Dios. Su amistad
nunca me faltará ni su consejo. Yo me arriesgo una y otra vez”.

¿Te conformarías sólo con Dios?


Hay quienes aun teniendo a Dios se derrumban.

Pablo añade: Mas no desesperado. El apóstol está poniendo en


valor las actitudes del cristiano frente a las dificultades que
encontramos en esta vida.

La fe frente a la adversidad. La convicción de que Dios está


contigo aunque no le veas. La certeza de que está al tanto de lo
que estás pasando. Porque nada de lo que le ocurra a sus hijos se
le escapa a Dios.
183

La desesperación es cuando se llega a un punto en el que pierdes


toda esperanza. El verdadero cristiano jamás debe perder la
esperanza, porque sabe que Dios está por encima de todo y de
todos. La fe, la confianza en Dios, no nos permite llegar a se
extremo de la desesperación.

Pero ¿Qué hacer si estamos así?


¿Si por alguna razón hemos llegado a ese estado?
¿Qué hacer cuando la desesperanza aferró nuestro corazón?
¿Qué hacer cuando ni respirar podemos de angustia?

Pablo nos da la respuesta en Colosenses 3.1-3 Debemos mirar al


cielo. Buscar las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la
diestra de Dios. Poner la mira en las coas de arriba y no en las
de la tierra. Porque hemos muerto, y nuestra vida está escondida
con Cristo en Dios. Cuando Cristo, vuestra vida, se manifieste,
entonces vosotros también seréis manifestados con él en gloria.

9. Perseguidos. Pablo se describe así mismo como un fugitivo que


huye de sus enemigos y que consigue escapar en el último
momento.

Es fácil sentirse desamparado cuando se es perseguido. Esa


sensación es apabullante, y demoledora.

Sentirse solo en medio de la persecución es terrible. Muchos


hermanos nuestros están siendo perseguidos en muchas partes del
mundo, mientras nosotros apenas nos acordamos alguna que otra
vez en nuestras oraciones.

Algunos están viendo cómo crucifican a sus propios hijos delante


de sus ojos, para hacerles abandonar la fe en Cristo. Y si ni aun
así apostatan, les golpean, les torturan, y asesinan cortándoles la
cabeza o prendiéndoles fuego en vida.

Son cosas terribles, imágenes escalofriantes que están sucediendo


a hermanos nuestros en la fe, simplemente por creer en el Jesús de
la Biblia.
184

¿Cómo reaccionarías tú si te dan a elegir?


¿Qué harías ante la amenaza de matar a tu hijo?
¿Qué harías ante la amenaza de cortarte la cabeza?
¿Porqué piensas que actuarías así?

Cuando menos, si fuésemos los perseguidos desearíamos que


todos nuestros hermanos, en el mundo entero, estuviesen uniendo
sus oraciones a las nuestras, rogando la intervención Divina en
nuestro favor.

Si alguien fue alguna vez perseguido, ese fue el apóstol Pablo. En


multitud de ocasiones pasó por muchos peligros, se hicieron
muchos intentos de acabar con su vida.

¿Apostató Pablo de su fe en el Señor Jesús? De ningún modo.

Pero Dios tenía un plan para su vida y no permitió que lo


silenciaran antes de cumplir con su misión. En multitud de
ocasiones, Pablo repitió algo que le ayudó en los malos
momentos.

2Timoteo 4.17-18 Pero el Señor estuvo a mi lado, y me dio


fuerzas, para que por mí fuese cumplida la predicación, y que
todos los gentiles oyesen. Así fui librado de la boca del león. 18Y
el Señor me librará de toda obra mala, y me preservará para su
reino celestial. A él sea gloria por los siglos de los siglos. Amén.

¿Alguna vez, cuando sufrías, sentiste a Dios a tu lado? Yo sí.


¿En qué cambia la situación el saber que Dios está contigo?
¿Te evita el sufrimiento? Puede que no, pero te dará fuerzas para
soportarlo.

Mas no desamparados. Pablo sabía que el Señor nunca desampara


a sus hijos. Como está escrito: Sean vuestras costumbres sin
avaricia, contentos con lo que tenéis ahora; porque él dijo: No te
desampararé, ni te dejaré. Hebreos 13.5
185

Leamos Hechos 16.22-24 Dejemos la lectura ahí.


¿Cómo se sentirían Pablo y Silas después de ser tratados así?
¿Cómo te sentirías tú?
¿Habían hecho algo malo? De ningún modo. Sin embargo fueron
mal tratados duramente.

¿Cómo reaccionaría la mayoría de las personas en esa situación?


¿Qué hicieron Pablo y Silas? Se pusieron a cantar himnos a Dios.

Quizás este sea uno de los medicamentos más poderosos que


existen en el mercado y es gratuito. La alabanza aleja los dolores,
y ahuyenta la amargura; mejora tu estado anímico y por
consiguiente, también físico.

No hace mucho, hablando con la Pra. Kattia de este tema, me


recordó Proverbios 17.22 El corazón alegre constituye buen
remedio; Mas el espíritu triste seca los huesos.

La alabanza no sólo glorifica a Dios, también bendice al creyente.


¿Alguna vez has venido al culto afligido?
¿Qué haces cuando tu problema te quita las ganas de alabar?
¿Dejas de hacerlo o te esfuerzas?
¿Piensas como algunos que alabar a Dios sin ganas es hipócrita?
¿Te has sentido mejor después de alabar a Dios?
¿Has pensado presentar sacrificios de alabanza? Hebreos 13.15.

Derribados. ¿Qué significa esto? Este término es sinónimo de


abatido. Es decir, cuando te han tumbado. Cuando han
conseguido derribarte y te ves en el suelo.

El diablo es especialista en golpes bajos que a veces te dejan


tumbado en el piso. ¿Has caído alguna vez de modo que llegaste a
pensar que no podrías continuar con la batalla?

Yo, sí. Sólo la misericordia de Dios, su infinita bondad, y su amor


incondicional, me pudo levantar. Y por Él hoy estoy aquí.
Mostrando que podemos llegar a estar derribados, pero no
destruidos.
186

Una imagen que puede ayudarnos es la del boxeador que ha


recibido tantos golpes que acaba tumbado en la lona. Queda
aturdido, pero no inconsciente: Con esfuerzo y determinación, se
sacude y vuelve a levantarse. Vuelve a presentar batalla hasta
obtener la victoria.

Así es con el creyente que conoce a Dios, puede que caiga, pero si
su relación con Dios es genuina, volverá a levantarse para
continuar la pelea hasta el día en que el Señor le llame a su
presencia, para otorgarle la corona de vida.

No hay experiencia que a más cristianos tumbe que la experiencia


del pecado. El pecado te derriba. Es demoledor. Te aplasta y
amenaza con destruirte. Aun así, algunos se permiten jugar con el
pecado, como si fuera inofensivo. Recuerda que no lo es.

Sin embargo, recuerda también que aun del pecado que te abatió,
Dios proveyó de liberación por medio del sacrificio de Su Hijo
Jesucristo.

Una derrota no significa la pérdida de la guerra. Sino sólo una


oportunidad para demostrarnos a nosotros mismos y a los demás,
que podemos estar derribados, pero no destruidos.

¿Perder una batalla es perder la guerra? Desde luego que no.


Puede que perdamos una batalla, pero la guerra ya está ganada.
Jesús la ganó por nosotros.

Es más, es posible que sea derrotado una y otra vez, pero cada
una de esas veces, me volveré a levantar y continuaré la lucha sin
darme por vencido.

Recuerden las palabras de nuestro Señor Jesucristo: En el mundo


tendréis aflicción; pero confiad, Yo he vencido al mundo. Juan
16.33.
187

Una vez más, la confianza de Pablo es admirable cuando le


leemos:

Pero no destruidos. Si observamos el proceso que Pablo ha


presentado con estas palabras, comprobaremos que se trata de un
proceso que comienza con tribulación que va en aumento y que
acaba con la destrucción.

¿Te has sentido alguna vez en un proceso así? Cuando esto ocurre
pareciera que no hay salida. Sin embargo, Pablo nos ha estado
mostrando la salida en todas y cada una de esas circunstancias. La
fe es la respuesta ante cualquier ataque del enemigo.

Por esa razón, aún estando derribados, no estamos destruidos.


Pues, Dios proveyó para nuestra victoria en Cristo Jesús. Como
Pablo escribió en Romanos 8.11-13:

Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora


en vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús
vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que
mora en vosotros. Así que, hermanos, deudores somos, no a la
carne, para que vivamos conforme a la carne; porque si vivís
conforme a la carne, moriréis; mas si por el Espíritu hacéis morir
las obras de la carne, viviréis.

¿Qué nos dará la victoria? La plena confianza en Dios y su


provisión para cada situación que atravesemos, por difícil que esta
sea. Eso nos dará la victoria. Porque sabemos que Dios nos
concede el poder para vencer.

Si aun no has experimentado el poder de la victoria en Cristo


quizás sea porque aun no le hayas entregado por entero tu vida a
Dios. Hazlo y experimentarás el poder de Dios obrando en tu
propia vida.

Experimentarás el poder del Espíritu de vida librándote del


pecado y de la muerte. Como está escrito en Romanos 8.1-2
Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en
188

Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino


conforme al Espíritu. Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo
Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte.

10-12. Desde la perspectiva cristiana, ¿Se ve la muerte y la vida


de la misma manera que sin fe? Por supuesto que no. Es
absolutamente diferente a cómo podemos verla sin fe en Jesús.

¿En qué varía? Sin fe no hay esperanza, con fe, se sabe que la
muerte es un dormir del que despertaremos en la presencia de
Dios.

Pablo aquí las usará como otra paradoja mediante la cual


identifica su propio sufrimiento con los de Cristo Jesús, Su Señor.

Esta identificación con Su Señor aun en el sufrimiento y la


muerte, le hacía poder creer y proclamar su fe en la esperanza de
la resurrección y de la vida eterna.

¿Puede haber resurrección sin muerte? Desde luego que no. De


ahí la necesidad de la experiencia de la que Pablo habla aquí. No
hay victoria sin lucha. Ni resurrección sin muerte.

Como escribió a los Romanos 6.8 Si morimos con Cristo, creemos


que también viviremos con él.

¿Por qué dijo Pablo estas palabras? Porque sabía que Jesús no
sólo murió, sino que también resucitó de entre los muertos,
demostrando que era el Hijo de Dios y tenía poder para vencer la
muerte.

Como alguien dijo: Pablo no sólo contaba la historia de la pasión


de Cristo, se identificaba con ella hasta el punto de
experimentarla en sí mismo.

Muchos cristianos actualmente no pueden disfrutar esta


experiencia. Les ha sido negada por falsos predicadores de una
189

vida cristiana sin lucha, onírica, de ensueño, sin problemas, ni


dificultades. Una vida cristiana falsa.

Actualmente tenemos un montón de gente en las iglesias que


creen que son cristianos, pero que son incapaces de identificarse
con el sufrimiento, pasión y muerte del Señor Jesús.

Sólo quieren identificarse con la victoria, pero no con la lucha.


Con lo bueno, pero no con los padecimientos que llevan a ello.

¿Saben qué? Si no te identificas en su muerte, no podrás


identificarte en su resurrección. ¿Entienden la importancia de esta
declaración?

La palabra que Pablo usa aquí para hablar de la muerte de Jesús


no es la normalmente usada en el NT que siempre es thanatos,
aquí el apóstol usa la palabra nekrosis. ¿Por qué razón un detalle
como este puede tener alguna importancia?

¿Hay que darle importancia a los pequeños detalles o no? ¿Qué


piensan? Yo siempre se lo doy, cuando de la palabra de Dios se
trata. Porque un pequeño detalle puede cambiarlo todo.

Curiosamente ambas palabras pueden traducirse muerte. Sin


embargo, la palabra nekrosis hace referencia al proceso de la
muerte, no al momento en que la muerte llega a la persona, que es
thanatos.

Morirse es thanatos y estar muriéndose es nekrosis. De modo que


Pablo estaba hablando del proceso de la muerte. No del acto de
morirse.

Llevando en el cuerpo siempre por todas partes la muerte de


Jesús. ¿Qué quiere decir con esto? Pablo habla de llevar en sí
mismo la muerte de Jesús en su cuerpo.

Como expuesto a la muerte continuamente, por amor del Señor.


190

Todos sabemos que el cuerpo físico se muere poco a poco, en un


proceso de debilitamiento, agonía y descomposición final. Yo he
tenido la oportunidad de experimentarlo en mi propia carne
durante estos días que he estado enfermo.

Sin embargo, no creo que sea a esto a lo que el apóstol se esté


refiriendo con esta frase, sino más bien a su propia experiencia de
identificación con Cristo, como el tema de su predicación.

Pablo está usando estas palabras en sentido figurado, no literal.

A tiempo y a destiempo, proclama la muerte del Señor, estando


dispuesto a padecer y dar su propia vida por tal mensaje. Ya
hemos hablado de las aflicciones de Pablo, en otras ocasiones. De
cuánto tuvo que padecer, como Jesús le anunció en el camino a
Damasco, por causa de su Nombre. Hechos 9.16.

Se trata de ese negarse uno a sí mismo, que es otro tipo de muerte.

El cristiano se mantiene como muriendo todo el tiempo, 6.9. De


esto es de lo que habla el apóstol en 1Corintios 15.31 Os aseguro,
hermanos, por la gloria que de vosotros tengo en nuestro Señor
Jesucristo, que cada día muero.

El apóstol debe tener en mente las palabras del Señor Jesús en


Mateo 16.25 Porque todo el que quiera salvar su vida, la
perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí, la hallará.

Entender esta paradoja es fundamental para la vida cristiana.


Especialmente en tiempos de persecución.

Quizás la mejor explicación de esta frase la tengamos en


Romanos 6.6-11 sabiendo esto, que nuestro viejo hombre fue
crucificado juntamente con él, para que el cuerpo del pecado sea
destruido, a fin de que no sirvamos más al pecado. Porque el que
ha muerto, ha sido justificado del pecado. Y si morimos con
Cristo, creemos que también viviremos con él; sabiendo que
Cristo, habiendo resucitado de los muertos, ya no muere; la
191

muerte no se enseñorea más de él. Porque en cuanto murió, al


pecado murió una vez por todas; mas en cuanto vive, para Dios
vive. Así también vosotros consideraos muertos al pecado, pero
vivos para Dios en Cristo Jesús, Señor nuestro.

¿Entienden esta metáfora? ¿Qué significa considerarse muertos al


pecado? ¿Tiene la tentación efecto sobre la persona que está
muerta? Desde luego que no. Un muerto no puede pecar.

¿Qué significa considerarse vivos para Dios en Cristo Jesús? Que


vivimos sólo para Él. Para servirle y agradarle. Ese es el sentido
de la vida cristiana.

La vida cristiana no tiene como objetivo fundamental hacer feliz a


los discípulos de Cristo, sino que vivan para Él. O mejor aún, que
Cristo pueda vivir por medio de ellos, como Pablo afirma en
Gálatas 2.20.

Esteban, Jacobo, hijo de Zebedeo, y otros, pagaron pronto con su


vida la predicación del evangelio. En cambio, la vida de Pablo fue
guardada sobrenaturalmente por Dios en muchas ocasiones.

¿Estaba Dios haciendo acepción de personas entre ellos? De


ningún modo. No es que Dios haga acepción de personas, sino
que tiene una plan distinto para cada uno de nosotros.

Razón por la cual es un terrible error tratar de imponer a los


demás la experiencia propia, como norma de vida. Este es un
error muy común.

Sabemos que Dios quiere que se evangelice, se predique y enseñe


la Sagrada Escritura. Sin embargo, cada ministro lo hace en su
lugar y tiempo según sus propios medios y métodos.

Existen miles de libros cristianos que intentan exportar métodos


de trabajo que han sido eficaces en otros lugares, con otras
personas. Pero que cuando intentas poner en marcha en tu lugar,
no funciona. ¿Por qué?
192

La razón es que cada persona debe buscar a Dios y su propio


método de llevar a cabo la misión que Dios le ha encomendado.
Porque los planes de Dios para cada lugar o cada persona pueden
variar.

Es como si alguien afirmara: Si tienes fe como la que tenía Pablo,


Dios te guardará siempre de todos tus enemigos como lo guardó a
él.

¿Es esto cierto? De ningún modo. Pablo también murió a manos


de sus enemigos. Por lo que no siempre Dios le libró.

Afirmar eso es acusar a Esteban, Jacobo y otros mártires


cristianos de no haber tenido la fe necesaria. Lo cual es un error
muy común en la interpretación de la Sagrada Escritura.

Se toma un texto, en que Dios salva a alguien de un peligro y se


predica que Dios siempre salvará de peligro a sus hijos. Eso es
enseñar mal la Palabra de Dios. Esto abunda en nuestros días.

Hay que tener en cuenta el contexto no sólo inmediato del pasaje,


sino también el contexto general de la Biblia.

Para el apóstol, la muerte era su continua compañera de viaje. Él


era consciente de ello. Pero también lo acompañaba la vida de
Jesús que lo fortalecía a cada paso de su vida.

Como dice el texto: Para que también la vida de Jesús se


manifieste en nuestros cuerpos.

Las aflicciones de Cristo ahora formaban parte de la vida del


apóstol. Sabía que otros también pasarían por la misma
persecución.

Pero también habla de la manifestación de la vida de Cristo, en


nuestras vidas ahora, como es evidente al usar la palabra cuerpo.
193

La muerte de Jesús ¿Resultó en el final? De ningún modo, sino


que su resurrección marcó más bien el principio de una nueva
vida.

Como está escrito en 2Corintios 13.4 Porque aunque fue


crucificado en debilidad, vive por el poder de Dios. Pues también
nosotros somos débiles en él, pero viviremos con él por el poder
de Dios para con vosotros.

No se trata de nuestro propio poder, que es ninguno, sino del


poder de Dios con nosotros.

11-12. Estos versículos aclaran al anterior. Tanto, que casi no


necesitan mayor explicación.

Durante su vida terrenal Pablo estuvo casi siempre en peligro de


muerte. Romanos 8.36: Como está escrito: Por causa de ti somos
muertos todo el tiempo; Somos contados como ovejas de
matadero.

¿Significa eso que Pablo era un zombi? De ningún modo. Hay


palabras que no pueden ser interpretadas de manera literal, porque
nos llevarían a la locura y la estupidez.

¿Pueden poner algún ejemplo de literalismo mal usado? Por


ejemplo, cuando la iglesia católico romana afirma que las
palabras de Jesús en Mateo 26.26 Esto es mi cuerpo, están mal
interpretando a Jesús y acaban adorando la ostia, simple símbolo
de su cuerpo.

Otro claro ejemplo es cuando los reformados interpretan de


manera literal la palabra muertos de Efesios 2.1, están cometiendo
ese terrible error que les lleva a mal interpretar la Sagrada
Escritura, y caer en falsas doctrinas.
194

En la segunda frase de este verso, en lugar de la palabra cuerpo,


Pablo escribe la frase en nuestra carne mortal. ¿Se refiere a lo
mismo o a otra cosa?

Ambos conceptos son sinónimos, si bien se enfoca en la


característica transitoria de la carne humana, especialmente
cuando ésta viene calificada con el adjetivo de mortal.

Cristo murió y resucitó, y su presencia viva en nuestros corazones


infunde a los cristianos de todos los tiempos la esperanza de la
resurrección y la vida eterna.

Es esta esperanza la que dio valor a los cristianos del primer siglo
para enfrentar la muerte con valor.

¿Qué repercusión tiene en tu vida la muerte y resurrección de


Cristo? ¿Te fortalece y anima o te deja indiferente? Si te deja
indiferente quizás no hayas entendido aun el evangelio.

1Tesalonicenses 4.14 Porque si creemos que Jesús murió y


resucitó, así también traerá Dios con Jesús a los que durmieron
en él.

¿No es una palabra de esperanza? ¿No te anima saber que los


muertos en Cristo resucitarán?

Hay que fijarse en los detalles. ¿Pablo está hablando de esperanza


futura o presente? ¿Cuándo se manifestará la vida de Jesús en
nosotros?

No se trata sólo de una esperanza futura, sino que para el apóstol


es ya una realidad presente: para que también la vida de Jesús se
manifieste en nuestra carne mortal.

Al hablar de carne mortal ¿Está hablando del cielo? No. Allí no


habrá nada mortal. ¿Está hablando de cómo seremos después del
arrebatamiento? No, porque, cuando ocurra, nuestros cuerpos
habrán sido transformados y ya no serán mortales
195

¿Qué significa esto? Que la vida de Jesús se debe manifestar en


nuestra vida aquí y ahora. Sin espera llegar al cielo.

No hay que esperar al futuro eterno. La vida de Jesús ya se está, o


debiera estar, revelando en nuestra carne mortal. No el cuerpo
transformado o resucitado, sino en nuestra carne “mortal”. Este
cuerpo que tenemos actualmente.

¿Qué significa esto de una manera práctica? Lo entenderemos


mejor con un ejemplo.

En la debilidad física de Pablo, Dios perfeccionó el poder de


Jesús, con el resultado de que Pablo pudo gloriarse aun en su
debilidad y dependencia de tal poder, 12.7-10.

Pablo concluye este argumento a modo de resumen con el verso:


12. De manera que la muerte actúa en nosotros, y en vosotros la
vida.

Es interesante prestar atención al hecho de que a lo largo de su


discusión, ha hablado de sí mismo y sus colaboradores, pero
nunca de los destinatarios de esta carta. ¿Por qué lo hace?

Esto presenta la cuestión de por qué, en su declaración final y


concluyente, Pablo distingue, en asuntos de muerte y vida, entre
la primera persona del plural, nosotros, y la segunda persona del
plural, vosotros, en temas de muerte y vida.

¿Qué quiere enseñar con ello? Pablo se enfrentó voluntariamente


a la muerte para estimular la vida espiritual de sus compañeros
creyentes. Como siervo de Cristo, sufrió para que los corintios
tuvieran vida.

Además, Pablo mostró su disposición a enfrentarse a la muerte en


una sincera imitación del Señor Jesucristo. ¿Significa eso que los
corintios no tendrían que sufrir e incluso morir por Jesús? Claro
que no.
196

Numerosos creyentes de todo el mundo diariamente experimentan


severa persecución por la causa de Cristo. En muchos de ellos se
cumple el conocido dicho de que «la sangre de los mártires es la
semilla de la iglesia».

Pero para todos los que hemos nacido de nuevo tenemos claro que
aun la muerte en Cristo, no supone otra cosa que la vida.
¿Recuerdan las palabras del apóstol en Filipenses 1.19-21?

…antes bien con toda confianza, como siempre, ahora también


será magnificado Cristo en mi cuerpo, o por vida o por muerte.
Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia.

13-14. Esto que tenemos aquí es una cita del AT. Pablo está
citando el Salmo 116.8-10: Pues tú has librado mi alma de la
muerte, Mis ojos de lágrimas, Y mis pies de resbalar. Andaré
delante de Jehová En la tierra de los vivientes. Creí; por tanto
hablé, Estando afligido en gran manera.

¿Por qué lo hace? Porque Pablo se identifica con el salmista quien


también estaba en peligro de muerte, pero cuya fe le dio fuerzas
para cumplir con su propósito.

Ambos sufrían y, en medio de su padecimiento, encontraron en la


fe, el poder para superarlos. Por esa razón dice: Pero teniendo el
mismo espíritu de fe. La fe es el poderoso motor que nos impulsa
a pesar de que las circunstancias puedan ser motivo más que
suficiente para desistir.

Tenemos multitud de ejemplos en la Biblia que nos demuestra


que esto es así. ¿Alguien puede citar alguno? Ejemplos en los que
la fe ayudó a superar momentos de sufrimiento.

Por ejemplo cuando Pablo y Silas cantaban himnos a Dios en la


cárcel.
197

¿Alguien puede poner algún ejemplo personal en que la fe le


ayudó a superar algún sufrimiento?

Es evidente que Pablo ha pasado por el oscuro valle del


sufrimiento, pero ahora está saliendo otra vez a la montaña donde
el sol brilla.

Su actitud es la de uno que ha muerto a sus propios deseos y


ambiciones. La siguiente frase lo demuestra con suficiente
claridad.

Creí, por lo cual hablé. La fe resulta en la afirmación de la


resurrección.

Como escribió en otro lugar: Mas ¿qué dice? Cerca de ti está la


palabra, en tu boca y en tu corazón. Esta es la palabra de fe que
predicamos: que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor,
y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás
salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la
boca se confiesa para salvación. Romanos 10.8-10.

La fe es una experiencia interna que debe ser confesada


públicamente.

Nosotros también creemos, por lo cual también hablamos.


¿Hablas de tu fe a otros, o la escondes? ¿Cómo te sientes al
respecto de tu fe, te sientes bien o te avergüenzas de ella?

Cuando yo estaba recién convertido y no me sentía


suficientemente seguro de mi fe, escondía la Biblia cuando iba
por la calle.

No quería que nadie me enfrentara porque no estaba seguro de


saber defender mi fe. ¿Te ha pasado? A mí, sí.

Sin embargo, cuanto más profundicé en el conocimiento de la


verdad, más seguro me hizo estar de lo que creía y comencé a
198

compartir con todos la fe que tenía. Desde hace muchos años lo


hago abiertamente. Sin ningún tipo de complejo.

Nos quedamos en el verso 13 meditando en la frase: Nosotros


también creemos, por lo cual también hablamos.

¿Cuál creen que es la mejor manera de expresar la fe? Sin duda,


mediante un testimonio vivo, continuo en Dios, en obediencia a
Su Palabra. 9.13.

Si analizan las palabras que he usado en esta frase entenderán más


profundamente a lo que me refiero.

Testimonio vivo: Que no es está muerto. Algunos tuvieron


testimonio en el pasado, pero se les murió. El cristiano no puede
vivir de rentas del pasado.

Continuo en Dios: Porque no se trata de algunas veces sí y otras


no. El testimonio debe mantenerse perseverantemente. ¿Cómo se
le llama a alguien que algunas veces dice que es cristiano y otras
actúa como si no lo fuera? Mentiroso o hipócrita.

En obediencia a su Palabra: No se trata de lo que “a mí me


parece” o de lo que le parece a otro, sino de lo que Dios dice.
Sólo por la Palabra de Dios podemos estar seguros de que nuestro
testimonio es el que debe ser.

Porque la fe se prueba con obras. Algunos tienen problemas y se


hacen un verdadero lío con la epístola de Santiago y la de
Romanos. Incluso hay quienes pretenden ver contradicción.
Debemos preguntarnos: ¿Se contradice la Sagrada Escritura? De
ningún modo.

Es importante entender bien el tema, por lo que quiero resumirlo


de manera sencilla para que todos puedan entenderlo.

En Romanos 3.28 Pablo dice: Concluimos, pues, que el hombre es


justificado por fe sin las obras de la ley.
199

Santiago por su parte dice en 2.14: Hermanos míos, ¿de qué


aprovechará si alguno dice que tiene fe, y no tiene obras? ¿Podrá
la fe salvarle?

En un principio pareciera que Santiago contradice a Pablo, sin


embargo no es así. ¿Cómo entender ambas declaraciones? Muy
sencillo.

La salvación es por fe en Cristo, sin las obras de la ley. Porque


por las obras de la ley ninguno será justificado. Sin embargo,
cuando alguien dice que tiene fe, ésta debe manifestarse en obras.

Obras que no salvan, sino que son evidencias de que la persona ha


nacido de nuevo por fe en Jesús.

Son las obras de las que Pablo habla en Efesios 2.10 Porque
somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras,
las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en
ellas.

Estas obras no son para salvación, sino evidencias de la salvación.


A eso es a lo que se refiere Santiago. Quien dice que tiene fe,
debe andar en las obras de Dios. No para salvarse, sino porque es
salvo y la fe tiene frutos que son esas obras. ¿Aclarado? ¿Alguna
pregunta?

14. Presten atención al verbo saber, 14, ¿Qué significa y qué


importancia puede tener?

Está recordando a los lectores las primeras lecciones de Pablo y


de otros maestros. Por ejemplo, en 1Corintios, diez veces plantea
la siguiente pregunta retórica: «¿No sabéis?» A cuya pregunta
espera una respuesta positiva: 3.16; 5.6; 6.2, 3, 9, 15, 16, 19; 9.13,
24.

Durante su ministerio en Corinto, ¿Les instruiría Pablo en las


doctrinas bíblicas? Desde luego.
200

¿Dirían que la resurrección de Cristo era un tema importante en la


predicación de Pablo? Sin la menor duda.

Las epístolas de Pablo revelan frecuentemente la fundamental


verdad de la resurrección de Cristo, Romanos 6.4-5; 8.11;
1Corintios 6.14; 15.15, 20; Efesios 2.6; Filipenses 3.10-11;
Colosenses 2.12; 3.1. Para Pablo, esta doctrina era la esencia de la
proclamación de su mensaje.

Por tanto, los corintios habían sido suficientemente instruidos en


las verdades bíblicas; pero necesitaban que, de vez en cuando,
alguien se las recordara.

¿Nos pasará lo mismo a nosotros hoy? ¿Tendremos necesidad de


que se nos repitan una y otra vez las cosas que sabemos hasta que
las hagamos parte de nuestra vida? Sin la menor duda.

El apóstol Pedro también creía lo mismo. Por eso escribió 2Pedro


1.12-15: Por esto, yo no dejaré de recordaros siempre estas
cosas, aunque vosotros las sepáis, y estéis confirmados en la
verdad presente. Pues tengo por justo, en tanto que estoy en este
cuerpo, el despertaros con amonestación; sabiendo que en breve
debo abandonar el cuerpo, como nuestro Señor Jesucristo me ha
declarado. También yo procuraré con diligencia que después de
mi partida vosotros podáis en todo momento tener memoria de
estas cosas.

14. A nosotros también nos resucitará. ¿Se refiere a los corintios,


a todos los creyentes, o sólo a Pablo y sus colaboradores? Sin la
menor duda, se refiere a Pablo y sus colaboradores. Pero las
siguientes palabras: con vosotros, incluyen también a los corintios
y a todos los demás cristianos.

¿Te incluye también a ti? ¿Te sientes aludido? ¿Eres de los que
saben que el que resucitó al Señor Jesús, a ti también te
resucitará? Dios quiera que así sea. De otro modo estás perdido.
201

15. ¿Qué movía al apóstol Pablo a padecer por lo que hacía?


Pablo les asegura que todos sus padecimientos han sido por amor
a ellos, ¿Serías tú capaz de padecer por amor a tus hermanos?

¿Estarías dispuesto a padecer por causa de la obra de Dios? Les


aconsejo que no respondan demasiado rápido, sino que lo valoren
antes, pues, como está escrito: Más vale no prometer que
prometer y no cumplir. Eclesiastés 5.5.

Porque muchos hacen promesas que después no cumplen. ¿Creen


que eso está bien o mal? Sin lugar a dudas está mal. ¿Cómo se le
llama en la Biblia a lo que está mal? Pecado. ¿Cuál es la paga del
pecado? La muerte.

Así que no es tan sin importancia. Sino que es un tema


importante.

Muchos cristianos estarían dispuestos a luchar por su propio bien,


o el de los suyos; pero, ¿Cuántos lo estarán a sufrir por los de sus
hermanos?

Pablo enseñó en Filipenses 2.3-4: Nada hagáis por contienda o


por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a
los demás como superiores a él mismo; no mirando cada uno por
lo suyo propio, sino cada cual también por lo de los otros.

Colosenses 3.23-25 Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón,


como para el Señor y no para los hombres; sabiendo que del
Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el
Señor servís. Mas el que hace injusticia, recibirá la injusticia que
hiciere, porque no hay acepción de personas.

Para que abundando la gracia por medio de muchos. ¿Qué


piensan que abunda más en el mundo hoy, la gracia de Dios o el
mal? Sin duda, la maldad se ha incrementado.
202

Me pregunto si los cristianos tendremos alguna responsabilidad


en ello. ¿Qué piensan? Jesús habló de que la iglesia es la sal de la
tierra. Mateo 5.13.

Actualmente contamos con frigoríficos y congeladores. Pero


antiguamente la sal ¿Para qué se usaba? Se usaba para conservar
los alimentos. La carne y demás se mantenía en sal sin pudrirse.

Así que ¿Qué creen que significaba la frase de Jesús? Que la


Iglesia debía ser el conservante del mundo. Cabría preguntarse
hoy ¿Qué le ha pasado a la iglesia? ¿Se ha desvanecido?

Cuando miramos a groso modo lo que llamamos la “iglesia” en


realidad la verdadera Iglesia de Cristo está disuelta en medio de la
“iglesia”.

Quiero decir que gran parte de lo que se llama iglesia no lo es.


Por esa razón no está cumpliendo su cometido de conservación.

¿Qué haces tú para frenar el mal en tu entorno? ¿Tratas de influir


a quienes viven a tu alrededor? ¿Te involucras en las cosas que
ocurren en el mundo o te encierras para que no te hagan daño?

El miedo paraliza, la fe moviliza.//

En este pasaje Pablo dice de que la gracia debe abundar por


medio de muchos. Sin embargo, quiero preguntarles ¿Abunda la
gracia de Dios en el mundo? ¿Abunda la gracia de Dios en la
Iglesia?

Si somos sinceros no tenemos más remedio que reconocer que


abunda más el egoísmo, la ignorancia, el miedo paralizante, y la
estupidez humana. Y lo peor es que no estoy hablando sólo del
“mundo”, sino también en la Iglesia.

Egoísmo: ¿Por qué? Por cuanto cada uno va a lo suyo.


Comenzando por los pastores que en su egoísmo no dudan en
203

mentir e incluso manipular la Palabra de Dios para seguir robando


al pueblo.

Ay de éstos, porque tendrán que rendir cuentas ante Aquel que


está preparado para dar a cada uno según merezcan.

Ignorancia: ¿Por qué? Por cuanto ya nadie conoce la voluntad de


Dios. Y lo que es peor, nadie quiere. Nadie se molesta en
comprobar lo que le es agradable. Vivimos en el tiempo en que la
gente no soporta la sana doctrina. Como digo, no ya en el mundo,
sino tampoco en la propia iglesia.

Como está escrito: Se han corrompido, hacen obras abominables;


No hay quien haga el bien. Jehová miró desde los cielos sobre los
hijos de los hombres, Para ver si había algún entendido, Que
buscara a Dios. Todos se desviaron, a una se han corrompido;
No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. ¿No tienen
discernimiento todos los que hacen iniquidad, Que devoran a mi
pueblo como si comiesen pan, Y a Jehová no invocan? Ellos
temblaron de espanto; Porque Dios está con la generación de los
justos. Del consejo del pobre se han burlado, Pero Jehová es su
esperanza.

Pareciera que estuviesen describiendo la sociedad actual, sin


embargo, se trata del Salmo 14.

El miedo: ¿Por qué? Por cuanto no es otra cosa que falta la fe y


amor a Dios. Por cuanto el amor y la fe echan fueran todo temor.

La gente de hoy, más que nunca, teme al que dirán. Miedo que no
les deja ser sinceros consigo mismos. Por eso rechazan a Dios,
aunque ante los problemas importantes, lloran, claman y le
buscan.

La estupidez: ¿Por qué? Por cuanto no es inteligente alejarse del


Creador. Y actualmente son demasiados, muchos más los que se
alejan que los que le buscan.
204

¿Cómo puede ser esto? ¿Cómo es posible que estemos asistiendo


a un panorama tan desolador? Esto puede ser porque gran parte de
lo que llamamos iglesia no lo es. Así que, no es la gracia de Dios
lo que abunda, sino el pecado y la maldad.

A cualquier lugar al que mires, sólo verás pecado y sus


consecuencias. Para poder ver la gracia de Dios, debes seguir
mirando, y mirando, y mirando, hasta que encuentres a alguien en
quien puedas ver la gracia de Dios. Porque desgraciadamente no
abunda.

¿Quiere eso decir que Dios escatima su gracia? De ningún modo.


Dios sigue derramando su gracia sobre aquellos que le tienen en
cuenta. El problema es que cada día son menos los que lo hacen.

Pero no se preocupen, porque todo esto ya estaba anunciado que


así sería. Por lo cual no debemos darnos por vencidos, ni
desesperanzarnos, sino más bien, permanecer firmes en la fe,
sabiendo que todo lo establecido en la Palabra de Dios se está
cumpliendo, tal y como Él predijo.

¿Cuál es el objetivo de que abunde la gracia por medio de


muchos? Que la acción de gracias sobreabunde para gloria de
Dios.

La pregunta que todos los cristianos debemos hacernos es: ¿Está


Dios recibiendo la acción de gracias que se merece? Y si no la
está recibiendo, ¿Tendremos algo que ver en ello nosotros los
cristianos?

Dicho de otro modo: ¿Estoy provocando acción de gracias a


Dios? ¿Cómo podríamos hacerlo? Por medio de la gracia de
muchos. Es decir, por medio de nuestro andar en gracia.

¿Qué haces por quienes te rodean? ¿Te preocupas por tus


semejantes? ¿Amas realmente a tu prójimo? Porque cuando
205

manifestamos nuestro amor al prójimo, provocamos que éste de


gracias a Dios.

Algunos dicen que sí, pero habría que preguntarle a las personas
que conviven a diario con ellos. ¿Es posible que amemos a la
gente con la que no tenemos ningún tipo de relación y no amemos
a aquellos que forman parte de nuestra familia o entorno?

No es posible. El verdadero amor es el que nos lleva a andar en


humildad, a considerar a los demás como superiores, a dejar de
ser egoístas y compartir las bendiciones que de Dios recibimos.

¿Crees que Dios está recibiendo toda la gloria que debiera?


Personalmente creo que no. Debemos glorificar a Dios en
nuestras vidas. Porque pronto viene Jesús y ya nuestra fe no
tendrá más validez. No será necesaria.

La fe sólo es necesaria en este mundo. Aquí y ahora. Cuando


tenemos un reto: Mostrar al mundo la gracia de Dios. Después,
cuando estemos en su presencia ya no necesitaremos fe. Ya
estaremos con Él. Entonces, andaremos por vista y no por fe.

Muchas personas hacen cosas buenas para recibir aplausos, para


conseguir buena fama, o para ser reconocida. ¿Debe el cristiano
hacer lo mismo? No. El cristiano obra bien porque es parte de las
obras que Dios ha preparado de antemano para que ande en ellas.
Efesios 2.10.

Todas las cosas que hace son, no para su propia gloria, sino para
la gloria de Dios.

Basándose en dicha esperanza, anticipa al tema de los vv. 16-18,


donde Pablo pinta un cuadro precioso.

16. Este parece ser un buen resumen de todo lo dicho


anteriormente.
206

Pablo es realista porque destaca que el cuerpo físico o el hombre


exterior, a fin de cuentas, disminuirá en fuerzas; cada día se irá
desgastando.

Esta realidad nos asalta a cada paso que damos en la vida. Un


simple resfriado y nos mete en cama, haciéndonos ver la
fragilidad de nuestro cuerpo mortal. Ni que digamos si tenemos
que enfrentar otras enfermedades peores.

Pero la gloriosa verdad es que aunque así sea, aunque el hombre


exterior se vaya desgastando, el hombre interior, el espíritu, el
hombre del alma viviente, puede renovarse “de día en día”.

Es por eso que no debe haber razón para el desánimo, porque no


importa lo que pase con lo físico, lo espiritual siempre puede y
debe florecer y florecerá.

¿Qué es lo peor que puede pasarnos físicamente? Que muramos.


Pero para el que tiene fe, la muerte es un sueño del que pronto
despertamos en un mundo mucho mejor. Con un cuerpo que ya
jamás volverá a enfermar. Como está escrito en Apocalipsis 21.1-
4.

¿Creen que la vida interior debe notarse de alguna manera en la


exterior? Sin duda. Ya hablamos de esto anteriormente. El mismo
Señor Jesús dijo: Por sus frutos los conoceréis: Mateo 7.16-20.

Ahora, bien, Es importante asegurarnos de que estamos


renovándonos de día en día. Algunos sólo se renuevan de semana
en semana; otros, de mes en mes; y otros de tarde en tarde.

El verdadero cristiano se renueva de día en día. Porque sabe que


necesita su relación con Dios, cada día. ¿Qué ocurre cuando
dejamos de orar, de leer la Palabra de Dios, y de venir a la
Iglesia? Nos enfriamos, nuestra fe se debilita y nos desgastamos
también por dentro.
207

¿Cómo nos renovamos? Hay quienes piensan que basta con hacer
tres o cuatro oraciones al día. Por la mañana, al comer, al dormir,
etc. ¿Basta con cumplir con ciertos ritos religiosos? De ninguna
manera. No se trata de eso, sino de una relación genuina.

Necesitamos ahondar mucho más en nuestra relación con Dios.

17. Aquí se ve la enorme diferencia entre la tribulación temporal


de la que habla el apóstol en este capítulo y la Gran Tribulación.

¿Significa eso que los cristianos no deben afrontar aflicciones o


tribulaciones mientras está en la Tierra? No. Claro que las
sufrimos. Pablo fue experimentado en muchas de ellas. Como ya
hemos estudiado.

Aunque parece increíble que, Pablo, que fue lapidado por los
judíos en Listra, quiera hacernos creer que aquello fue sin
importancia. Pero para poder entender sus palabras hay que
hacerlo en su contexto.

Pablo no minimiza sus dificultades, ya que habla de ellas


continuamente. 1Corintios 4.11; 2Corintios 1.8-10; 4.8-9; 6.4-10;
11.23-27; 12.10.

No cabe duda de que él tuvo su parte de aflicciones, y no lo


escondió para no engañar a nadie.

Aquí puede haber algunos que hemos experimentado muchas


tribulaciones. Pablo la califica de leve, de momentánea,
comparada con la eternidad.

Además, la confronta con el cada vez más excelente y eterno peso


de gloria. La idea es poner en un platillo de la balanza nuestras
aflicciones temporales y en el otro, el excelente y eterno peso
gloria que producen en nuestra vida.

Es el mismo pensamiento que plantea 1Pedro 1.6, como está


escrito: En lo cual vosotros os alegráis, aunque ahora por un
208

poco de tiempo, si es necesario, tengáis que ser afligidos en


diversas pruebas.

También 1Pedro 5.10-11: Mas el Dios de toda gracia, que nos


llamó a su gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis
padecido un poco de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme,
fortalezca y establezca. A él sea la gloria y el imperio por los
siglos de los siglos. Amén.

Nuestros sufrimientos aquí son temporales, y lo que depende de


tiempo se acaba, pero lo eterno, perdura. Nuestras aflicciones
¿Qué son eternas o temporales? Temporales, lo cual quiere decir
que tienen fecha de caducidad.

¿La gloria es temporal o eterna? Eterna, lo que significa que no


tendrá fin.

Llama la atención la marcada diferencia entre la forma de ver y


entender la vida de un hombre sin Dios y del hombre de Dios. El
hombre natural sólo percibe lo temporal y visible. Mientras que el
espiritual es capaz de ver lo invisible.

Al natural cualquier problema lo hunde; al espiritual, las


dificultades le acercan a Dios y por consiguiente, a la gloria.

La segunda frase podemos entenderla mejor a la luz de Romanos


8.18 que ya conocemos. Pues tengo por cierto que las aflicciones
del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera
que en nosotros ha de manifestarse.

Pablo ve esa gloria, como algo que vamos experimentando en


aumento. Cada vez más. Como está escrito en Proverbios 4.18
Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, que va en
aumento hasta que el día es perfecto.

¿Debemos esperar al futuro para experimentar la gloria eterna?


Según el apóstol no. Aquí, en medio de las tribulaciones, es
posible experimentarla.
209

En la Nueva Traducción Viviente de la Biblia dice: Pues nuestras


dificultades actuales son pequeñas y no durarán mucho tiempo.
Sin embargo, ¡nos producen una gloria que durará para siempre
y que es de mucho más peso que las dificultades!

En esta versión también se puede ver que la gloria no tiene tanto


que ver con el futuro, sino que habla en presente: Nos produce.

La Traducción en Lenguaje Actual dice: Las dificultades que


tenemos son pequeñas, y no van a durar siempre. Pero, gracias a
ellas, Dios nos llenará de la gloria que dura para siempre: una
gloria grande y maravillosa.

Aquí parece que habla en futuro: Nos llenará. Sin embargo este
verbo, katergadsomai en griego unas veces es traducido como
pasado, otras como presente, y otras como futuro.

¿Cómo saber interpretarlo adecuadamente? Por el contexto


inmediato del mismo pasaje, que lo coloca en presente del
indicativo, que indica una acción continuada.

Un cada vez más. Da la imagen de ir creciendo en gloria. Algo


que no sucederá en el cielo, sino aquí en la tierra. Allí será plena.
Aquí va en aumento.

No podemos decir que el sufrimiento en sí mismo produzca


gloria, pues, entonces hasta los incrédulos la alcanzarían. Y los
cristianos buscarían las dificultades, a fin de alcanzarla.

En realidad es Dios quien, en su volutnad, permite que la


aflicción que viene a nuestra vida, produzca esa gloria creciente.

Cierra tus ojos y pídele a Dios que te permita ver, o sentir, la


gloria que ya ha producido en tu vida por medio de las pruebas.
Dios está produciendo gloria en ti, cada día. Gloria que otros
deben ver cuando te miran.
210

18. ¿De qué habla Pablo aquí? Justamente de eso. De diferenciar


lo visible de lo invisible. De poner la mirada en lo que no se ve.

No se trata de lo material o espiritual. Ambas cosas son


necesarias. Lo temporal o lo eterno. Cuando fijamos nuestra
mirada en las cosas celestiales, las terrenales dejan de tener
importancia.

De esto, habla Pablo en otros pasajes: Romanos 8.24; Hebreos


11.1, 3; Colosenses 1.16; Y también el apóstol Pedro: 1Pedro 1.8.

Nosotros no nos preocupamos por lo que nos pasa en esta vida,


que pronto acabará. Al contrario, nos preocupamos por lo que nos
pasará en la vida que tendremos en el cielo. Ahora no sabemos
cómo será esa vida. Lo que sí sabemos es que será eterna.

Por tanto, este pasaje habla de ser espirituales, y darle mayor


importancia a lo eterno que a lo temporal. ¿De qué modo podrá
resistir mejor las aflicciones el creyente, mirando lo terrenal o lo
celestial? Desde luego mirando lo espiritual.

Nos identificamos con aquellos personajes de la Biblia que fueron


capaces de ver estas cosas, como está escrito en Hebreos 11.13:
Conforme a la fe murieron todos éstos sin haber recibido lo
prometido, sino mirándolo de lejos, y creyéndolo, y saludándolo,
y confesando que eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra.

¿Qué es más importante las cosas temporales o las eternas? Sin


duda las eternas. Pablo insiste sobre esto en Colosenses 3.1-2 Si,
pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba,
donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. 2Poned la mira en
las cosas de arriba, no en las de la tierra.

Las cosas invisibles son aquellas de las que nos apropiamos por fe
en Dios. Por eso mantenemos nuestros ojos en Jesús, el autor y
consumador de nuestra fe. Hebreos 12.2.
211

El vaso de barro no solamente contiene el tesoro del evangelio;


también contiene todo lo que se acumula por la experiencia de
vivir la vida cristiana, y además la esperanza eterna.

5.1-5. ¿De qué está hablando el apóstol aquí? Aunque lo eruditos


no paran de sacar falsas conclusiones y de plantearse mil y una
pregunta en cada uno de estos versículos, que no saben responder,
y que sólo les vale para acabar confundidos y confundiendo a los
demás, en estos primeros versículos Pablo está concluyendo su
discusión sobre los vasos de barro, la resurrección y lo visible e
invisible.

Las palabras del apóstol sobre el hogar celestial junto al Señor, es


el clímax de esta discusión. Palabras que dejan ver claramente
cómo el apóstol no se deja deslumbrar por las cosas temporales de
la vida, sino que siempre está anhelando lo espiritual y eterno.

Aunque los teólogos se hagan un verdadero lío intentando


interpretar estas palabras según sus propios criterios y no la
misma Sagrada Escritura, la verdad no es tan complicada. Basta
con que no vayamos más allá de lo que está escrito.

1. Porque sabemos. Ya hablamos de esta expresión, ¿Recuerdan?


Pablo no está inventando nada nuevo, ni cambiando su postura
doctrinal, como algunos eruditos malintencionadamente
pretenden, sino que está recordando a los corintios lo que ya les
había enseñado.

Si estudiamos 1Tesalonicenses 4 y 1Corintios 15 comprobaremos


que no se aleja ni un ápice de lo que ya había enseñado. Por tanto,
Pablo no está cambiando en nada su teología.

El conocimiento de las cosas futuras no se origina en la


imaginación del ser humano, como un proceso cognitivo. Es
decir, como un conocimiento que va madurando en su mente, sino
en la revelación de Dios, por medio del Espíritu Santo.
212

Ahora, bien, ¿Qué es lo que sabemos? ¿A qué tabernáculo o


edificio se refiere? Algunos teólogos dicen que se refiere el
tabernáculo que construyó Moisés. ¿Qué piensas?

No creo que estuviera pensando en el tabernáculo que Dios le


encomendó a Moisés, porque realmente era muy complicado
montar y desmontar. Más bien se refería a aquellas tiendas en las
que el pueblo vivía por familias.

Pablo usa en estos pasajes tres metáforas: tienda o tabernáculo


que para el caso es lo mismo, vestidura y vivienda. En las tres se
refiere a una misma cosa ¿A qué cosa se refiere el apóstol?

Al cuerpo humano, esta tienda en la que vivimos unos cuantos


años, antes de abandonarla. Compara nuestro cuerpo físico con
ellas. Como hebreo, conocedor de la historia de su pueblo, Pablo
sabía perfectamente que un tabernáculo o tienda era una vivienda
temporal que se desmonta fácilmente.

Las palabras tabernáculo y edificio, así como desnudos y vestidos


o revestidos, se refieren a lo mismo. ¿A qué hemos dicho? A
nuestro cuerpo.

¿Quién hizo nuestro cuerpo? Dios. Cuando creó a Adán lo hizo


con sus propias manos. Génesis 2.7.

Job dice: Tus manos me hicieron y me formaron. Estas palabras se


repiten en el Salmo 119.73.

El profeta Isaías 64.8 afirma: Ahora pues, Jehová, tú eres nuestro


padre; nosotros barro, y tú el que nos formaste; así que obra de
tus manos somos todos nosotros.

No hecha de manos. Ahora Pablo nos dice que el cuerpo que nos
espera es de Dios, no es hecho de manos. Se refiere a manos
humanas.
213

Eterna. El ser humano lleva mucho tiempo soñando con la


inmortalidad. Esta semana leí una noticia que afirmaba que una
empresa asegura que para el 2030 conseguirá resucitar a los
muertos. Este es el sueño de algunos.

Nosotros, los cristianos no necesitamos soñar con la resurrección


y la vida eterna, sabemos que ya somos eternos. Pues tenemos la
promesa de Dios de que así es. Y tenemos motivos más que
suficientes para creerle.

¿Quién no gime ante el peso de las limitaciones físicas? ¿Quién


no anhela y espera ser librado de todas ellas? El propio Pablo,
anhelaba escapar de la muerte y llegar a la eternidad.

Aunque su cuerpo con frecuencia tenía que soportar dolores


lacerantes y maltratos físicos, su ser interior triunfaba mediante
Jesucristo.

Algunos eruditos creen que Pablo está afirmando que el cuerpo


nuevo lo recibiremos cuando muramos. El argumento que
plantean es que para un judío era inaceptable pensar en un mundo
de espíritus sin cuerpo.

Al parecer la palabra tenemos ha creado algunas discusiones entre


los estudiosos. Pero ya sabemos que éstos discuten por todo. A la
luz de su contexto general, esta es otra de esas cosas que tenemos,
pero aun no.

Podemos asegurar que las tenemos porque son promesas de Dios,


pero es evidente que aún no las disfrutamos. ¿Podemos creer en
sus promesas o no? Desde luego. Por tanto, aunque aun no la
tengamos, podemos decir que la tenemos, en fe. Así que no sé
dónde está el problema.

¿Qué cristiano no conoce las palabras de Jesús en Juan 14.1-3?


¿Qué cristiano dudaría de esto? Espero que ninguno.
214

Con frecuencia este tipo de cuestiones crean problemas a quienes


en su “sabiduría humana” pretenden entender la Palabra de Dios.

Los estudiosos, llegan tan lejos como para acusar a Pablo de estar
adaptando su mensaje a la filosofía griega, que consideraba el
cuerpo como transitorio y el alma como eterna.

Pero no hay fundamento ninguno para pensar eso. Pues, la


Palabra de Dios debe ser interpretada a la luz de todo su mensaje.

Cuando conocemos la cultura y el lenguaje hebreo o de los


hebreos, sabemos que con frecuencia llamaban a las cosas futuras
como presentes. Por ejemplo, cuando Jesús, en Mateo 26.45:
Dormid ya, y descansad. He aquí ha llegado la hora, y el Hijo del
Hombre es entregado en manos de pecadores. Evidentemente iba
a ser entregado pronto, pero aun no. Sin embargo, se expresa
como si ya lo estuviera siendo.

Lo que en teología suele expresarse: Ya, pero todavía no.

Nos quedamos en 2Corintios 5.1 meditando en la palabra


tenemos. Comentamos que hay cosas que tenemos sólo en fe.
Pero que nuestra fe entiende que son seguras. ¿Pueden poner un
ejemplo?

Filipenses 3.20-21 Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de


donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo; el
cual transformará el cuerpo de la humillación nuestra, para que
sea semejante al cuerpo de la gloria suya, por el poder con el
cual puede también sujetar a sí mismo todas las cosas.

¿Podemos en base a este pasaje afirmar que somos ciudadanos del


cielo? Sin duda. Pero aun no estamos allí.

Cuando estudiamos con detenimiento la Palabra, descubrimos que


no hay contradicción alguna en Pablo, como algunos “estudiosos”
quieren hacernos creer. El apóstol habla en 5.1 de nuestra
resurrección.
215

En 1Corintios 15, ya lo vimos, y en otras de sus epístolas, como


Tesalonicenses, también. Pero además, en 2Corintios 4.14 ha
dejado bien claro su fe en la resurrección de Cristo, doctrina que
era odiada y repudiada por los filósofos tanto griegos como
romanos. Pues, para ellos la muerte era librarse de una vez del
cuerpo al que consideraban malo.

En realidad está hablando de la muerte y resurrección del


cristiano. Del cuerpo terrenal y del cuerpo espiritual. ¿Supuso eso
algún cambio en su teología? En absoluto, sino sólo en la
expectativa de su propio paso a la eternidad.

¿Qué nos enseña 2Timoteo 4.6-8 sobre esta cuestión? Por este
pasaje sabemos que Pablo enfrentaba y aceptaba el hecho de que
probablemente moriría antes de la segunda venida.

A estas alturas, probablemente ya había aceptado la idea de su


muerte y con estas palabras expresaba su confianza en el hecho de
que tenía un hogar celestial, al cual marcharía. El verso 1 lo
demuestra.

La idea de que este capítulo es una reformulación de la teología


de Pablo al respecto de la escatología, es falsa. Pues, en este
capítulo siguen existiendo las tres cosas esenciales de la misma:

La segunda venida de Cristo.


La resurrección.
El juicio de los seres humanos.

Por otro lado, sabemos que Pablo no escribía de su propio


corazón, sino inspirado por el Espíritu Santo. Pensar que
cambiara su postura en algo, sería negar dicha inspiración de la
Palabra de Dios.

2. Por esto también gemimos, deseando ser revestidos. ¿A qué se


refiere el apóstol cuando dice por esto? Por esto, se refiere por el
conocimiento de lo que sabemos. Porque sabemos que tenemos
216

esa habitación celestial, es lo que viene a continuación. Porque lo


sabemos, lo esperamos.

La palabra que se traduce por gemimos es stenadsó, que significa:


lamentar, quejarse, suspirar.

¿Alguna vez se han sentido de esta manera? Me recuerda al


enamorado que anhela ver a su amada y no puede esperar. Los
minutos se le hacen eternos, no digamos las horas, o los días.

Pablo, inspirado por el Espíritu Santo, escribió sobre la relación


matrimonial como ejemplo de la relación de Cristo con su Iglesia
y de la Iglesia con Cristo. Efesios 5.21-33.

Deseando se traduce de epipozeó que significa desear con


vehemencia, querer, lamentar intensamente. ¿Deseas de esa forma
ser revestido de aquella habitación celestial, o ni te da igual?

Estas palabras que parecen oscurecer el panorama de la vida


cristiana en la tierra, al hablar del desgaste del cuerpo, aparece
con el halo de la esperanza y la perspectiva futura.

Sería interesante preguntarnos si, como el apóstol, anhelamos el


momento en que estas cosas sucedan. ¿Lo anhelan?

En Romanos 8.22-23 Pablo habla del gemido de la propia


creación. ¿Será posible que algunos cristianos estén tan aferrados
a las cosas terrenales que no tengan el menor deseo de gloria
eterna? ¿Qué piensan?

Sin duda, el modo en que vivimos muestra dónde tenemos la


vista, si en las cosas de arriba, o en las cosas de la tierra.

Algunos creyentes parecen vivir como si no tuviesen temor de


Dios. ¿Conocen a alguno así? Muchos se permiten pecar contra sí
mismo, contra el hermano, e incluso contra Dios mismo, y no
parece que ni tan siquiera se preocupe por ello.
217

Han entendido mal la Palabra de Dios, y con sus actos muestran


poca evidencia de madurez, e incluso algunos poca evidencias de
haber nacido de nuevo.

Tanto la creación, como los auténticos hijos de Dios, soportamos


el dolor y esperamos anhelantes el día en que seremos llevados a
la libertad gloriosa de la que habla Pablo en romanos 8.21.

Mientras tanto, aun en medio del desgaste de éste tabernáculo de


carne, de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra
debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo
sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con
gemidos indecibles. Romanos 8.26.

3. Esta frase es una adaptación de Isaías 25.8 Destruirá a la


muerte para siempre; y enjugará Jehová el Señor toda lágrima de
todos los rostros; y quitará la afrenta de su pueblo de toda la
tierra; porque Jehová lo ha dicho.

¿Os suena? 1Corintios 15.54 y Apocalipsis 21.4. Como también


está escrito: Así que, por cuanto los hijos participaron de carne y
sangre, él también participó de lo mismo, para destruir por medio
de la muerte al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al
diablo, y librar a todos los que por el temor de la muerte estaban
durante toda la vida sujetos a servidumbre.

De aquí viene la frase: Cristo mató a la muerte.

1Corintios 15.16 Y el postrer enemigo que será destruido es la


muerte.

En el verso 4 vuelve Pablo a hablar del gemido sumándole la


angustia. ¿A qué creen que se debe esa angustia de la que habla el
apóstol? Quizás al miedo de ser desnudados.

Esto tiene que ver con la muerte. No con la muerte misma, sino
con el modo de morir. No es lo mismo morir plácidamente en tu
cama mientras duerme, que ser degollado por un musulmán.
218

Por eso Pablo dice estas frases que tenemos en el verso 4 y que
personalmente me parecen una referencia al arrebatamiento.
Cuando seremos revestidos, sin haber sido desnudados.

Tal y como lo muestra en 1Corintios 15.51-53 He aquí, os digo


un misterio: No todos dormiremos; pero todos seremos
transformados, en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la
final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán
resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados.
Porque es necesario que esto corruptible se vista de
incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad.

Tal y como leímos en Colosenses 3.20-21 Mas nuestra


ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al
Salvador, al Señor Jesucristo; el cual transformará el cuerpo de
la humillación nuestra, para que sea semejante al cuerpo de la
gloria suya, por el poder con el cual puede también sujetar a sí
mismo todas las cosas.

Es una clara referencia a la transformación de lo mortal a la


inmortalidad. Ser absorbido por la vida, no por la muerte, sino por
la preparación para el arrebatamiento.

La palabra revestido, significa ponerse algo encima. Por tanto, no


se trata de desnudarse y vestirse de nuevo, sino de ponerse un
traje encima.

Esto me hace recordar la parábola de la fiesta de boda y a aquel


que se coló sin estar vestido apropiadamente. Sólo que Pablo aquí
habla de transformación necesaria para poder vivir la
inmortalidad.

Así, pues, el apóstol expresa su deseo de no pasar por la muerte,


sino más bien ser transformado en vida. Como dice: Para que lo
mortal sea absorbido por la vida.
219

Sin duda alguna la similitud entre los versos dos y cuatro es


innegable. Sin embargo, hay una diferencia, a ver si son capaces
de verla.

En el dos el gemido es fruto del deseo de ser revestido.


En el cuatro el gemido es frente a la idea de ser desvestido.

No cabe duda de que Pablo escogería antes ser transformado en


vida que pasar por la muerte y la resurrección. No creo que nadie
pueda culparle por ello. ¿No es esta también nuestra esperanza?
Que Cristo venga mientras aun estamos vivos. Así no pasaremos
por la experiencia de la muerte.

5. Pablo termina esta perícopa afirmando que para eso fuimos


hechos. ¿Para qué? Para vivir una vida eterna con Él.

¿Quién nos hizo? Dios. De esta forma el apóstol da gloria a Dios


por nuestro futuro eterno.

Las arras del Espíritu. ¿Qué son las arras? Las primicias, la
garantía, una prenda, un anticipo de la gloria venidera, que nos
anuncia una gloria incomprensible desde nuestra perspectiva
actual.

En dos ocasiones más usó Pablo esta idea: 2Corintios 1.22 y


Efesios 1.14.

1Corintios 2.7-10 Mas hablamos sabiduría de Dios en misterio,


la sabiduría oculta, la cual Dios predestinó antes de los siglos
para nuestra gloria, la que ninguno de los príncipes de este siglo
conoció; porque si la hubieran conocido, nunca habrían
crucificado al Señor de gloria. Antes bien, como está escrito:
Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, Ni han subido en corazón de
hombre, Son las que Dios ha preparado para los que le aman.
Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el
Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios.
220

¿Cuántos han estudiado el pasaje que estamos meditando? ¿No


saben que si no estudiáis la Biblia por vosotros mismos, yo os
podría engañar?

¿Cuál creen que es la razón por la cual hay tantas personas


desorientadas y perdidas sin saber qué creer? ¿Por qué piensan
que tantos falsos pastores engañan a tantísima gente?

Si no estudian la Biblia jamás podrán estar seguros al cien por


cien de que están en la verdad. Yo les invito a que dediquen
tiempo a escudriñar las Escrituras, cumpliendo así la voluntad del
Señor Jesús. Juan 5.39.

Seguimos donde lo dejamos: 2Corintios 5.6-9. Leámoslo.

Hasta aquí Pablo ha usado dos metáforas. Hagan un esfuerzo y


díganme cuáles fueron. El apóstol comparó nuestro cuerpo en dos
ocasiones en los versos anteriores y lo hará una tercera vez.
¿Cuáles fueron las anteriores? ¿Qué metáforas usó?

Una tienda o tabernáculo y el vestirse. Ahora habla de una casa.


Los verbos estar presentes o ausentes, significan estar dentro o
fuera de casa. Recuerden que habla de morada. ¿Qué es una
morada? Una casa. Un lugar donde se vive.

6. Así que vivimos confiados siempre. Sin duda se refiere a los


versos anteriores. Confiados ¿En qué? En que tenemos un nuevo
cuerpo esperando en los cielos.

Según el verso cinco ¿Qué es lo que da a Pablo la confianza para


el futuro? La presencia del Espíritu Santo en nuestras vidas.

El creyente debe vivir confiado. No estar confiado, sino vivir


porque dice: siempre. Hay una diferencia en que te digan: Estás
guapa, a que te digan eres guapa. ¿Qué te gustaría que te dijeran?
Estar no es ser.
221

Del mismo modo ¿Hay o no una enorme diferencia entre estar


confiado a vivir siempre confiado? Sin duda.

El término que Pablo usa aquí significa mucho más. Literalmente


vivir confiados, también atrevidos, llenos de buen ánimo, con
alegría. No sólo confianza temporal sino continua, también llenos
de gozo.

Este mismo término es traducido en ocasiones por: Ten ánimo.


Jesús lo usó mucho: Mateo 9.2, 22; 14.27; Marcos 6.50; 10.49;
Juan 16.33; Hechos 23.11;

Pablo también lo usa: 2Corintios 5.6, 8; 7.16. Y no lo vemos en


ningún otro sitio sino en Hebreos 13.6.

Sabiendo que entre tanto que estamos en el cuerpo. Como ven,


Pablo insiste en lo que los corintios ya sabían. Lo que sin duda él
les había enseñado. Ahora bien, es también importante,
preguntarse: ¿Significa que mientras estamos en el cuerpo no
estamos presentes del Señor?

¿Qué significa eso? Que no estamos con él en el cielo. Pero este


pasaje debemos verlo a la luz del 5 en el que se habla de la
presencia del Espíritu de Dios en nuestras vidas.

Por tanto, no debemos vivir pensando que Dios no está con


nosotros, ni que nosotros no estamos ante Dios. Pues Dios es
Omnipresente. Y además ha prometido estar con nosotros.
¿Alguien puede aportar algún pasaje bíblico que lo enseñe?

Salmo 139.7
Mateo 18.20; 28.20
Hebreos 13.5

También Salmo 140.13: Ciertamente los justos alabarán tu


nombre; Los rectos morarán en tu presencia.
222

7 (Porque por fe andamos, no por vista); Este verso le da una


connotación absolutamente cristiana a la frase anterior. El
cristiano debe mirar la vida con los ojos de la fe, no con los del
cuerpo físico.

¿Cuál es la diferencia? La fe en Dios nos ayuda a ver lo espiritual,


los ojos físicos sólo las cosas terrenales. ¿Creen que esto es
importante? Sin duda, lo es.

Por ejemplo, imagina que tienes un problema con alguien debido


a un mal entendido. Alguien hizo un comentario, sin maldad
alguna. Pero a ti te llega ese comentario como una crítica a tu
persona.

¿Habrá diferencia si miras ese asunto con los ojos de la fe, a si lo


miras con los ojos de la carne? Desde luego. En esos casos
siempre es bueno usar la fe para ver quién tira de los hilos.

¡Cuántos problemas nos ahorraríamos si tuviésemos en cuenta el


consejo del apóstol Pablo! ¿Pueden poner otro ejemplo en que
podamos ver la diferencia de andar por fe a andar por vista?

Imagina que tienes un problema de provisión, te has quedado sin


trabajo y temes no tener lo suficiente para mantener a tu familia.

¿Habrá diferencia si miras ese asunto con los ojos de la fe, a si lo


miras con los ojos de la carne? Desde luego. Por esa razón digo
que en esos casos siempre es bueno usar la fe para ver quién
maneja de los hilos.

Si yo pienso que Dios no está conmigo, y me veo solo ante esa


situación ¿Será igual que si creo la promesa de Dios de que nunca
me desamparará ni me dejará? Por supuesto que no será lo
mismo.

Tampoco es lo mismo si pienso en la muerte con fe, que pensar en


ella sin fe. Eso es lo que está diciendo el apóstol en este pasaje.
Que vivamos confiados, que vivamos por fe.
223

Hebreos 11.24-27 Nos muestra el testimonio de un hombre de fe,


Moisés. ¿Hubiera podido hacer lo que hizo si no hubiese vivido
en fe? Desde luego que no.

Las apariencias físicas se oponen a la fe y la confianza plena en


Dios. ¿Recuerdan las palabras del apóstol en 2Corintios 4.18?

Como está escrito en 1Corintios 13.12: Ahora vemos por espejo,


oscuramente; mas entonces veremos cara a cara. Ahora conozco
en parte; pero entonces conoceré como fui conocido.

Los discípulos de Cristo vivimos por fe, no por vista. A lo largo


de todo este discurso Pablo está comparando lo físico con lo
espiritual; lo terrenal y temporal, con lo glorioso y eterno.

Los que se oponían a Pablo argumentaban que el alma estaba


presa en el cuerpo y que la forma de alcanzar la libertad era
liberándose del cuerpo físico. Pablo rechaza este punto de vista.

Ya había rechazado antes a aquellos falsos apóstoles que


predicaban que el creyente podía alcanzar la gloria mediante una
experiencia mística o éxtasis, que se manifestaba en hablar en
lenguas. Para Pablo la gloria vendría con la segunda venida de
Cristo.

Por eso dice lo que viene en el verso siguiente.

8. Pero confiamos, Con esta frase el apóstol refuerza la verdad


expuesta en los versos anteriores. Habla de la esperanza
bienaventurada de los hijos de Dios.

EL verdadero cristiano anhela que llegue el día en que Cristo


venga a por Su Iglesia, para estar siempre con el Señor.

…más quisiéramos estar ausentes del cuerpo, y presentes al


Señor.
224

¿Qué implicación tiene esto? Mucha. Pues, si estar en el cuerpo es


estar ausentes del Señor, como indica el verso 6 estar ausentes del
cuerpo ¿Qué significa? Estar presentes en el Señor.

Esta misma enseñanza la expresa en Filipenses 1.21-23 Porque


para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia. Mas si el vivir
en la carne resulta para mí en beneficio de la obra, no sé
entonces qué escoger. Porque de ambas cosas estoy puesto en
estrecho, teniendo deseo de partir y estar con Cristo, lo cual es
muchísimo mejor;

Teniendo en cuenta que la Palabra de Dios es para aplicarla a


nuestra vida, todos nosotros debiéramos responder una pregunta:
¿Confío como Pablo? O lo que es lo mismo, ¿Tengo fe? ¿Vivo
por fe o por vista?

9. Por tanto procuramos serle agradables. Pablo manifiesta una


fe profunda en la vida eterna al expresar su deseo de abandonar su
cuerpo físico y estar presente en el cielo en la presencia de Dios.

Este era un pensamiento repulsivo para los judíos porque era


contrario a la cultura hebrea. Pero netamente cristiano. Deseaba
estar en casa con Su Señor.

Ahora afirma: Si estamos en el cuerpo o fuera del cuerpo no


importa. Lo que importa es estar conscientes de que vivimos en la
presencia del Señor y que debemos serle agradable.

Sin duda, esto choca con la cultura religiosa de nuestro tiempo, en


el que todo intento de los “pastores” y las “iglesias” es ser
agradables a las gentes, sin importar si lo somos a Dios.

Esta postura anti bíblica es lo que ha llevado a muchos a predicar


evangelios distintos al que tenemos en la Sagrada Escritura. Por
esta razón el apóstol Pablo escribió proféticamente Gálatas 1.6-
10:
225

Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que os


llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente.
No que haya otro, sino que hay algunos que os perturban y
quieren pervertir el evangelio de Cristo. Mas si aun nosotros, o
un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que
os hemos anunciado, sea anatema. Como antes hemos dicho,
también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio
del que habéis recibido, sea anatema. Pues, ¿busco ahora el
favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los
hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería
siervo de Cristo.

Estamos en el verso 5.9 hablando de agradar a Dios. Por tanto,


leamos también: Hebreos 13.20-21:

Y el Dios de paz que resucitó de los muertos a nuestro Señor


Jesucristo, el gran pastor de las ovejas, por la sangre del pacto
eterno, os haga aptos en toda obra buena para que hagáis su
voluntad, haciendo él en vosotros lo que es agradable delante de
él por Jesucristo; al cual sea la gloria por los siglos de los siglos.
Amén.

A la luz de este pasaje ¿Qué debemos hacer para agradar a Dios?


Debemos dejar que Él mismo obre en nuestras vidas, será mejor
que intentarlo por nosotros mismos, en nuestras fuerzas, o en
nuestra carne.

10. Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante


el tribunal de Cristo. ¿Por qué es necesario? ¿No fuimos ya
juzgados en la cruz donde Cristo murió por nuestros pecados? Sin
duda.

La cruz es un juicio. La piedra en la que muchos tropiezan,


porque no llegan a comprender lo que allí ocurrió. Muchos,
muchísimos serán condenados por toda la eternidad por no haber
querido recibir el enorme regalo de amor que Dios nos ofreció en
Su Hijo Jesucristo.
226

Ahora bien, que seamos juzgados en la cruz ¿Significa que ya no


volveremos a ser juzgados? De ninguna manera.

¿A quién dirige Pablo estas palabras, a creyentes o incrédulos? A


la Iglesia de Corinto, es decir, a creyentes. Y ¿Qué les está
diciendo? Leamos 5.10.

¿Quiénes son esos “nosotros”? Sin duda los cristianos. Sin


embargo, muchos cristianos viven hoy como ni no tuviesen que
ser juzgados. Como si ya no hubiese forma de ser castigados.

¿Será que sólo algunos cristianos pasarán por el tribunal de


Cristo? ¿Qué dice el texto? Porque es necesario que todos
nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo.

Hechos 10.42 Y nos mandó que predicásemos al pueblo, y


testificásemos que él es el que Dios ha puesto por Juez de vivos y
muertos.

¿Hay algo en este pasaje que indique que los cristianos no


pasaremos por el juicio? No. No lo hay. ¿Estamos nosotros entre
los vivo y muertos? Desde luego.

Por eso, como está escrito: Temed en su presencia, toda la tierra.


1Crónicas 16.30. ¿Es este el mensaje que hoy se predica en las
iglesias? De ninguna manera. Actualmente sólo se predica el falso
evangelio de cree en Cristo y te hará feliz.

¿Tienen sentido estas palabras de David? Sin duda. ¿Por qué?


Porque Dios ha dispuesto su trono para juicio, y ha establecido
un día en el cual juzgará al mundo con justicia; y a los pueblos
von rectitud. Salmo 9.8.

¿Somos los cristianos parte del mundo? Algunos dirán que no.
Que ya no somos del mundo. Tenemos incluso base bíblica para
afirmarlo, Juan 17.14.
227

Pero, ¿De qué está hablando Cristo aquí, de juicio o de proteger a


los cristianos? El contexto muestra la preocupación de Cristo por
sus discípulos, por los que ora para que el Padre nos guarde y
santifique.

La Escritura no debe ser interpretada a simple vista, sino


profundizando en el estudio de la misma. La Biblia no se escribió
para quienes tienen prisa. Para esos están los libros de bolsillo.

Generalmente libros de autoayuda. Porque necesitan ayuda,


aunque esos libros no les ayudarán en absoluto. La Biblia se
escribió para quienes gustan detenerse y meditar en lo que leen.

Aquellos que por muy ocupados que estén siempre encuentran el


tiempo necesario para detenerse tener una audiencia con el Gran
Rey.

Justamente es ahí, en la presencia de Dios, en intimidad con Él,


que nos son descubiertos los tesoros que la hermosa Palabra de
Dios contiene.

Porque la Biblia es un verdadero tesoro. A poco que escarbes


encontrarás perlas hermosas. Cuanto más escarbas, cuanto más
escudriñas, más rico seremos en el conocimiento de la Palabra de
Dios.

Muchos no quieren cumplir con este mandamiento de Dios de


escudriñar las Escrituras. Muchos predicadores ya no hablan de
las doctrinas fundamentales de la fe cristiana.

Nosotros todos los años hablamos sobre los juicios. Y hablamos


del Tribunal de Cristo, como hablamos de todas las doctrinas
fundamentales de la Palabra de Dios.

¿Por qué creen que en muchos grupos hoy no se predica sobre


estos temas? Porque no son agradables al oído del hombre del
mundo. Y muchos quieren agradar a los hombres, por eso no son
siervos de Cristo. Como vimos en Gálatas 1.
228

Pablo, en cambio, predicaba continuamente sobre este tema.


Como está escrito en Hechos 17.30-31: Pero Dios, habiendo
pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a
todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan; por cuanto
ha establecido un día en el cual juzgará al mundo con justicia,
por aquel varón a quien designó, dando fe a todos con haberle
levantado de los muertos.

Por eso, cuando Pablo dice todos nosotros, sin duda se está
refiriendo también a los cristianos. En la Biblia encontraremos
muchos pasajes de Pablo anunciando el juicio a los cristianos.

Romanos 14.10-12 Pero tú, ¿por qué juzgas a tu hermano? O tú


también, ¿por qué menosprecias a tu hermano? Porque todos
compareceremos ante el tribunal de Cristo. Porque escrito está:
Vivo yo, dice el Señor, que ante mí se doblará toda rodilla, Y toda
lengua confesará a Dios. De manera que cada uno de nosotros
dará a Dios cuenta de sí.

Algunos interpretan pasajes como este como una prohibición de


juzgar las falsas doctrinas. Nada más lejos de la verdad. Pues,
aquí se prohíbe juzgar al hermano no la doctrina que el hermano
predique.

2Timoteo 4.1-4 Te encarezco delante de Dios y del Señor


Jesucristo, que juzgará a los vivos y a los muertos en su
manifestación y en su reino, que prediques la palabra; que instes
a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con
toda paciencia y doctrina. Porque vendrá tiempo cuando no
sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se
amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias,
4
y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas.

También el apóstol Pedro exhorta y corrige: 1Pedro 4.1-5: …pero


ellos darán cuenta al que está preparado para juzgar a los vivos
y a los muertos.
229

Así que hay muchos cristianos equivocados al respecto de esta


verdad. Muchos piensan que no serán juzgados. Que ya lo fueron.
Pablo explica que nadie se librará de comparecer ante el tribunal
de Cristo.

De hecho, el gran problema con el que algunos se encuentran al


estudiar la Biblia es que lo que le han enseñado de ella, no les
permite aceptar las Palabras de Dios porque no cuadra con su
teología.

Por poner un ejemplo, a muchos le han enseñado que una vez


salvo siempre salvos. Si partimos de esa premisa que es errónea,
cuando leemos estos pasajes que hablan de juicio de aquellos que
hemos nacido de nuevo, acaban menospreciando las advertencias
de Dios.

Algunos piensan: Ya somos salvos, así que no puede ser tan malo.
De ese modo, son engañados a vivir laxamente, sin cuidado de su
propia vida.

Algunos enseñan que en este juicio, por el que pasaremos los


creyentes, nadie será condenado, sino que es un juicio para
recompensas. ¿Han oído esto alguna vez? Yo mismo lo he
enseñado en el pasado. ¿Será esto así? Estudiemos en profundidad
el texto.

Esto parece cuadrar con Apocalipsis 22.12 He aquí yo vengo


pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno
según sea su obra.

Pero, ¿Qué significa recompensar a cada uno según sea su obra?


Significa que todos seremos recompensados? Sin duda. Ahora
bien. Cuando se habla de recompensas siempre solemos pensar en
algo bueno. ¿Es lo mismo en la Biblia? Veamos.

Mateo 6.2 Cuando, pues, des limosna, no hagas tocar trompeta


delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las
230

calles, para ser alabados por los hombres; de cierto os digo que
ya tienen su recompensa.

En Mateo 6.16 repite: Cuando ayunéis, no seáis austeros, como


los hipócritas; porque ellos demudan sus rostros para mostrar a
los hombres que ayunan; de cierto os digo que ya tienen su
recompensa.

¿La palabra recompensa en estos pasajes es algo bueno? ¿Se


refiere a algún tipo de premio? De ningún modo. Pero se refiere a
recompensa ¿No? Desde luego ¿A qué tipo de recompensa se
refiere? Recompensar e dar a cada uno lo que merece. Al malo no
le corresponde un premio, sino un ¿Qué? UN castigo.

El problema es que algunos sacan los textos de contexto para


enseñar que los cristianos no seremos juzgados. O que si lo
somos, no será para condenación, ya que ningún cristiano será
condenado.

Esto es lo que se enseña, y hay pasajes que “parecen” decir eso.


Pero que, bien estudiados e interpretados a la luz de su contexto
nos damos cuenta de que están siendo mal usados.

Por ejemplo:

Romanos 8.1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que
están en Cristo Jesús. Este es uno de esos pasajes que se usan
para afirmar que los cristianos no pueden ser condenados. Ahora,
bien, ¿Termina el pasaje ahí? No.

¿Cómo continúa? …los que no andan conforme a la carne, sino


conforme al Espíritu. La cuestión es: ¿Y si un cristiano anda
conforme a la carne y no conforme al Espíritu?

Ahí algunos dirán que entonces no es un verdadero cristiano. Pero


no hay base bíblica para hacer esa afirmación, ya que hay muchos
pasajes en los que se exhorta a los cristianos a abandonar la carne
y a andar en el Espíritu.
231

Si un verdadero cristiano no puede andar en la carne ¿Por qué


Pablo dirige esas palabras a los cristianos de Galacia?

¿Por qué exhortar a alguien que no puede andar en la carne a que


no ande en la carne? ¿Por qué exhortar a alguien que está
andando en el Espíritu a que ande en el Espíritu?

Siempre es importante a la hora de interpretar cualquier pasaje


tener en cuenta el contexto. Pablo sigue diciendo en Romanos
8.12-13 Así que, hermanos, deudores somos, no a la carne, para
que vivamos conforme a la carne; porque si vivís conforme a la
carne, moriréis; mas si por el Espíritu hacéis morir las obras de
la carne, viviréis.

Dos palabras a destacar en este pasaje: Una tiene que ver con a
quiénes está dirigiendo Pablo estas palabras: Hermanos. Así que
no le habla a incrédulos no nacidos de nuevo.

La segunda palabra a destacar tiene que ver con el resultado de


caminar en la carne: Moriréis. Así, pues, Pablo le está diciendo a
los cristianos de Roma que deben cuidar de hacer morir las obras
de la carne, o de lo contrario morirán.

También está escrito en Hebreos 10.26-31:

Porque si pecáremos voluntariamente después de haber recibido


el conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por los
pecados, sino una horrenda expectación de juicio, y de hervor de
fuego que ha de devorar a los adversarios. El que viola la ley de
Moisés, por el testimonio de dos o de tres testigos muere
irremisiblemente. ¿Cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el
que pisoteare al Hijo de Dios, y tuviere por inmunda la sangre
del pacto en la cual fue santificado, e hiciere afrenta al Espíritu
de gracia? Pues conocemos al que dijo: Mía es la venganza, yo
daré el pago, dice el Señor. Y otra vez: El Señor juzgará a su
pueblo. ¡Horrenda cosa es caer en manos del Dios vivo!
232

Quiero hacerles una pregunta: ¿A quién les está hablando el autor


de esta carta a creyentes o incrédulos? Sin duda a creyentes, ya
que dice: El Señor juzgará a su pueblo.

En todos estos pasajes Dios nos está exhortando a no descuidar la


salvación que hemos recibido. Hebreos 2.1-3 Por tanto, es
necesario que con más diligencia atendamos a las cosas que
hemos oído, no sea que nos deslicemos. Porque si la palabra
dicha por medio de los ángeles fue firme, y toda transgresión y
desobediencia recibió justa retribución, ¿cómo escaparemos
nosotros, si descuidamos una salvación tan grande?

2Pedro 2.20-21 Ciertamente, si habiéndose ellos escapado de las


contaminaciones del mundo, por el conocimiento del Señor y
Salvador Jesucristo, enredándose otra vez en ellas son vencidos,
su postrer estado viene a ser peor que el primero. Porque mejor
les hubiera sido no haber conocido el camino de la justicia, que
después de haberlo conocido, volverse atrás del santo
mandamiento que les fue dado.

Este es otro de esos pasajes que quienes no creen que los


cristianos puedan perder su salvación tuercen, porque no cuadra
con sus doctrinas.

Para ayudarles a reflexionar sobre estas palabras, ¿Cuál era


nuestro estado antes de alcanzar el conocimiento de Cristo?
Condenación. Si el postrer estado es peor, ¿Entienden por qué
dice que mejor les hubiera sido no haberlo conocido?

No sólo estos sino que el evangelio está lleno de otros similares.


En los que el mismo Señor Jesús advierte:

Estamos meditando en 2Corintios 5.10 sobre el tribunal de Cristo.


¿Cuántos estudiaron esta epístola esta semana?

¿Qué aprendimos la semana pasada? ¿El tribunal es para los


incrédulos, o los creyentes?
233

Debo confesar que el tema es un poco complicado. Aunque la


mayoría de los comentaristas que he consultado esta semana
parecen tener claro que en este tribunal de Cristo nadie será
rechazado, y que sólo seremos juzgados a fin de ser
recompensados.

Sinceramente no lo tengo tan claro. Por varias razones:

1) Porque el pasaje en sí mismo. Para que cada uno reciba según


lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo, sea bueno o sea
malo.

¿Qué recompensa recibirán los que hayan hecho lo malo? Me


cuesta creer que reciba recompensa que no sea como la que Jesús
prometió a los hipócritas de su tiempo. Mateo 6.1-2.

2) Existen muchos pasajes que demuestran que muchos creyentes


serán juzgados, rechazados y condenados. Mateo 7.23; Hebreos
6.4-6; 2Pedro 2.20-21. Etc.

Así que no aseguraré nada hasta tener más claro el tema. Les
aseguro que no es fácil, porque no hay mucho material bíblico del
que tomar. Y si acudimos a los comentarios teológicos, nos
encontramos cosas como por ejemplo:

En una página encontré esta definición sobre el tribunal de Cristo:


No debemos mirar el Tribunal de Cristo como el juicio de Dios a
nuestros pecados, sino más bien como la recompensa de Dios por
nuestras vidas. Sí, como dicen las Escrituras, tendremos que dar
cuenta de nuestras vidas. Parte de esto seguramente será
responder por los pecados que cometimos. Sin embargo, ese no
va a ser el principal enfoque en el Tribunal de Cristo.

¿Qué piensan al respecto? Personalmente veo como una


contradicción en esta definición. Primero afirma que no debemos
mirarlo como el juicio de Dios a nuestros pecados. Después dice:
parte de esto seguramente será responder por los pecados que
cometimos.
234

Después toma un ramillete de textos fuera de contexto para


afirmar que no seremos condenados sino premiados. Yo me
pregunto ¿En qué quedamos, se juzgarán nuestros pecados sí, o
no?

La mayoría de los comentaristas se acogen a pasajes como


Romanos 8.1 ¿Cómo entender ese pasaje? Pienso que
entendiendo el contexto. Aquellos que no andan en la carne sino
en el Espíritu.

Pablo ya les había dicho en su primera epístola: Porque aunque


de nada tengo mala conciencia, no por eso soy justificado; pero
el que me juzga es el Señor. 1Corintios 4.4.

Sin duda, la teología que recibimos al convertirnos ejerce una


fuerte influencia negativa que no nos permite en muchos casos
ver la verdad de la Palabra de Dios. Pues, nos condiciona.

Dado que hace años que decidí no dejarme influenciar por nada
que no fuera la misma Palabra de Dios, me encuentro con el
problema de que la falta de información bíblica complica bastante
el entendimiento de este asunto.

Algunos afirman que es imposible que un cristiano pueda andar


en la carne, ¿Qué piensan, es posible o no? ¿Qué fundamento
bíblico podríamos aportar para demostrarlo? 1Corintios 3.1 Ahí
Pablo llama hermanos a los corintios y al mismo tiempo los llama
¿Cómo? Carnales.

¿Si algún cristiano anduviera en la carne podría ser condenado?


Claro.

¿Hay base bíblica para afirmar que la salvación puede perderse?


Algunos afirman que de ningún modo. Leamos algunas palabras
del mismo Señor Jesús para comprobarlo.
235

Mateo 8.11-12 Y os digo que vendrán muchos del oriente y del


occidente, y se sentarán con Abraham e Isaac y Jacob en el reino
de los cielos; mas los hijos del reino serán echados a las tinieblas
de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes.

Los hijos del reino ¿Son los incrédulos? Desde luego que no.
¿Qué es el lloro y crujir de dientes? El castigo de los condenados
al infierno. Mateo 13.42, 50; Aunque aquí habla de condenados.
¿No es el mismo castigo que Jesús dice en Mateo 8.12 que
llevarán los hijos del reino?

En la parábola de las bodas en Mateo 22.1-14 encontramos un


pasaje muy interesante, difícil de entender para algunos, pero que
no deja de ser palabra de Cristo. ¿Creen que Jesús sabía lo que
decía, o no tendría tanto conocimiento como éstos que dicen lo
contrario? Desde luego nadie sabe más que el Señor.

Aquí habló de algo que algunos dicen que no puede darse. ¿Ase
equivocará Jesús? Me refiero a que alguien pueda entrar en las
bodas sin el vestido adecuado.

¿Cómo pudo entrar éste en las bodas sin el vestido adecuado?


¿Cómo es posible que estando ya en la presencia del Rey, fuera
echado fuera?

En la parábola de los talentos en Mateo 25.14-30 pasa


exactamente igual. ¿Cómo es posible que alguien a quien Dios le
repartió parte de sus bienes, después fuera echado a las tinieblas
por no haber hecho bien su trabajo?

Quisiera preguntarles ¿Quién dijo todas estas palabras? Fue el


mismo Señor Jesús. Así que debemos preguntarnos ¿Se equivoca
Jesucristo al decir estas cosas? Desde luego que no.

La parábola de la Vid verdadera de Juan 15.1-8 Jesús enseñó


sobre esto mismo. Para entenderla hay que tener en cuenta que un
pámpano es un hijo de la vid. Ningún pámpano nace fuera de la
vid.
236

Así que los pámpanos se refieren a los hijos de Dios. Y nadie es


hijo de Dios sin fe en Jesús. Como dice Juan 1.11-12.

Así, pues, tenemos la Vid verdadera y tenemos los pámpanos.


Pero algunos pámpanos dan fruto y otros no. ¿Qué ocurrirá con
los que den fruto? Verso 2: los limpiará para que lleven más fruto.

¿Qué ocurrirá con los que no permanezcan en la Vid? Verso 6:


Será echado fuera como pámpano (es decir, como hijo), y se
secará; y los recogen, y los echan en el fuego y arden.

¿A qué se refiere Jesús con estas palabras? A que serán


condenados. Aun siendo pámpanos. Hijos, todo aquel que no
permanezca en la Vid verdadera será condenado.

Hay otras muchas escrituras mediante las cuales Cristo enseñó a


Su pueblo y a Sus discípulos, pero que son menospreciadas
cuando no se interpretan adecuadamente, a la luz de su propio
contexto.

Cristo no da talentos, es decir no llama al ministerio, a quienes no


han nacido de nuevo. Ni son pámpanos los que no pertenecen a la
Vid verdadera que es Cristo, es decir la Iglesia. Pues, la Iglesia es
el Cuerpo de cristo.

Sin embargo, a unos y otros, se les advierte que pueden perder su


salvación, ser cortados y echados fuera, echados en el fuego
donde arderán. Donde será el lloro y el crujir de dientes.

¿Significa eso que debemos vivir sin seguridad de nuestra


salvación? De ningún modo. Yo estoy seguro mientras persevero
en la fe de Jesús. Como está escrito: Mas el que persevere hasta
el fin, este será salvo. Mateo 24.13

¿Significa eso que me salvo por obras? De ningún modo, la


salvación es un don de Dios, no por obras, Efesios 2.8, pero nos
corresponde, a la luz de la enseñanza bíblica cuidar y no
237

menospreciar esa salvación tan grande que se nos da por gracia.


Como está escrito: ¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos
una salvación tan grande? Hebreos 2.3.

Así que, la salvación se puede perder, por mucha burla que


algunos hagan intentando manipular las Escrituras con
razonamientos humanos, sin fundamento bíblico.

Pero desde luego en cuanto al tribunal de Cristo, cuándo será,


dónde, y qué ocurrirá allí, es un tema por el que debo orar y
estudiar más profundamente, para llegar a una conclusión segura.
Les ruego que me ayuden orando por mí a Dios, para que el
Espíritu Santo, me guíe en el estudio de este tema.

Para que cada uno reciba según lo que haya hecho. ¿Qué
significa esto? A fin de poder entender esta frase es necesario
preguntarse, ¿Sigue Pablo hablando a los cristianos, o está
hablando a incrédulos? Sigue hablando a cristianos.

¿Quiere decir esto que nuestras obras serán juzgadas, o se referirá


a otra cosa? ¿Qué creen? Sin duda se refiere a nuestras obras. Es
decir, que cada creyente se presenta ante el tribunal y oye el
veredicto, que se basa en su conducta en este mundo.

Todas las obras, buenas o malas, saldrán a la luz.

De nuevo preguntamos: ¿Significa esto que nos salvamos por las


obras? De ningún modo. Repetimos, la salvación sólo se obtiene
por la fe en la obra de Cristo en la cruz del calvario. Esto forma
parte de la teología que el mismo apóstol enseña en todas sus
epístolas.

No existe ninguna contradicción en Pablo, aunque el temor de no


saber explicar esta “aparente” contradicción, es lo que ha llevado
a muchos a no creer en el juicio de los nacidos de nuevo. Ni que
un nacido de nuevo pueda perder su salvación.
238

De hecho han montado todo un andamiaje teológico para negar


esta verdad bíblica, que muchos rechazan sin más.

Dios no nos acepta por buenas obras, ni por ellas nos salva, sino
por la fe en Jesús. Pues está claramente explicado en todas las
epístolas Paulinas. Como por ejemplo en Romanos 3.28, y
también Efesios 2.8-9 La salvación es por gracia, por medio de la
fe.

Sin embargo, un poco más adelante, Pablo afirma que Dios quiere
que andemos en obras que Él mismo ha preparado para nosotros.
De modo que las obras son la evidencia de que nuestra fe es
genuinamente pura. Por esa razón, Dios prueba nuestra fe.

Como está escrito en 1Pedro 1.7-9: …para que sometida a prueba


vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el cual aunque
perecedero se prueba con fuego, sea hallada en alabanza, gloria
y honra cuando sea manifestado Jesucristo, a quien amáis sin
haberle visto, en quien creyendo, aunque ahora no lo veáis, os
alegráis con gozo inefable y glorioso; obteniendo el fin de vuestra
fe, que es la salvación de vuestras almas.

¿Qué significa que la salvación es gratuita sin mérito alguno por


parte del salvado? Que todo el mérito es del Salvador. Pero nos
corresponde a nosotros los salvados, permanecer firmes en la fe.

Siempre digo que la salvación es un don, una gracia, un regalo


que Dios nos da, pero que debemos recibir y apreciar; pues si lo
menospreciamos, lo perderemos.

¿Nos convierte esto en corredentores? De ningún modo. Toda la


gloria es de Dios porque Él la hace posible. Sólo que a nosotros se
nos exige no menospreciar el regalo de la salvación.

Pablo habla de esto cuando dice en Colosenses 1.21-23: Y a


vosotros también, que erais en otro tiempo extraños y enemigos
en vuestra mente, haciendo malas obras, ahora os ha
reconciliado en su cuerpo de carne, por medio de la muerte, para
239

presentaros santos y sin mancha e irreprensibles delante de él; si


en verdad permanecéis fundados y firmes en la fe, y sin moveros
de la esperanza del evangelio que habéis oído, el cual se predica
en toda la creación que está debajo del cielo; del cual yo Pablo
fui hecho ministro.

¿Enseña Pablo en este pasaje que seremos presentados


irreprensibles delante de Él incondicionalmente? No. ¿Hay aquí
algún condicionante? Sí. ¿Cuál? El permanecer fundado y firmes.

La pregunta cae por su propio peso ¿Y si alguno no permanece


fundado y firme en la fe, y sin moverse de la esperanza del
evangelio que oyó? ¿Será presentado santo y sin mancha e
irreprensible delante de Él? ¿Qué piensan? Desde luego que no.

Recordemos las palabras del apóstol que ya estudiamos en


1Corintios 15.1-2: Además os declaro, hermanos, el evangelio
que os he predicado, el cual también recibisteis, en el cual
también perseveráis; por el cual asimismo, si retenéis la palabra
que os he predicado, sois salvos, si no creísteis en vano.

Aquí es donde algunos, comienzan a añadir textos apócrifos a los


pasajes bíblicos. Diciendo, por ejemplo, que no se puede ser un
verdadero creyente y perderse.

O que si alguien no persevera es porque no era un verdadero


nacido de nuevo. Lo cual no está en la Biblia, sino que es un
axioma de fe que, aunque respetable, no tiene fundamento bíblico,
sino que forma parte de la fe personal de quienes no pueden
aceptar la Palabra de Dios.

Lo que sí dice el pasaje es: hermanos. ¿Qué significa eso?


¿Estaba hablando Pablo a personas que no habían nacido de
nuevo? Desde luego que no. Para Pablo eran sus hermanos. ¿Se
refiere a hermanos en la carne? Desde luego que no, hermanos en
la fe. Por tanto, hijos de Dios.
240

También añade: creísteis en vano. ¿Dice el apóstol que nunca


creyeron? No. Dicen que creyeron en vano. Pablo afirma que se
puede creer, en vano. Según el texto bíblico, ¿Cuándo sucede
eso? Cuando se apostata y no se persevera en la fe de la Palabra
de Dios.

Esto demuestra que se equivocan diciendo que si alguien apostata


del evangelio es que nunca creyó.

La cuestión es que Jesús mismo contradice a estos en su


explicación de la parábola del sembrador. Lucas 8.13.

Algunos pastores con buena intención, pero errados enseñan que


cuando se cree ocurren cosas que no pueden deshacerse. Hablan
de justificación, de ser declarados justos; Pero no tienen en cuenta
que se trata de un lenguaje legal.

Porque en esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que se ve,


no es esperanza; porque lo que alguno ve, ¿a qué esperarlo?.
Romanos 8.24.

Tenemos un caso en la Biblia en el que se dice claramente que se


puede declarar a alguien libre de culpa y después volver a
imputarle por su pecado.

Mateo 18.23-35. En primer lugar le fue perdonada la deuda, pero


en segundo lugar, al no perdonar a su deudor, le fue exigido el
pago de toda la deuda que antes le había sido perdonada.

Declarado justo, y vuelto a declarar culpable. Así que no que


algunos dicen que no es posible, la Biblia nos dice que sí lo es.

Después, se burlan diciendo que si el que apostató de la fe y se


perdió vuelve a arrepentirse y vuelve a salvarse y de nuevo
apostata, y con semejantes argumentos anti bíblicos, se ríen de la
verdad que la Palabra de Dios revela.
241

Uno de los pasajes más claros al respecto es Hebreos 4.6-6 que


muchos tuercen por la misma razón. Porque no les cuadra con su
teología. Prefieren vivir pensando que nunca perderán su
salvación hagan lo que hagan.

A la luz de este pasaje ¿Cuántas veces se puede apostatar? Sólo


una. ¿El que pierda su salvación puede arrepentirse para volver a
tomarla, una y otra vez? Por supuesto que no.

Además, está escrito, y para los cristianos, que: Sin santidad


nadie verá al Señor. Hebreos 12.14.

No abundaré más en esto. Aquellos que estén interesados en el


tema pueden descargar desde nuestra web el tema Apostasía, en el
que tienen un estudio bíblico amplio que desarrolla esta cuestión.

También en Preguntas y Respuestas, hay una Sobre si se puede


perder la salvación. Con un estudio que da respuesta a esa
pregunta.

Por ahora, para nuestro estudio de 2Corintios 5.10 baste lo dicho.

11-15. En esta porción Pablo describe los resultados deseables


para quienes tememos a Dios.

Continúa en la defensa de su ministerio, dado que no lo estaban


reconociendo como verdadero apóstol de Jesucristo. ¿Recuerdan?

11. Conociendo, pues, el temor del Señor. ¿A qué temor se refiere


aquí? ¿Al temor reverente de todo cristiano, o al temor
relacionado con el tribunal de Cristo? Sin duda al temor
relacionado con el Tribunal de Cristo, pues, la conexión con el
versículo anterior es evidente.

El cristiano debe vivir siempre sabiendo que sus acciones serán


juzgadas por el Señor. ¿Qué repercusión tendrá esto? ¿A qué le
llevará? Sin duda le llevará a un mayor grado de santidad. Y no
242

sólo a eso, sino también persuadir a otros. ¿De qué debemos


persuadirles? Justamente de esta verdad.

La Biblia está llena de pasajes que nos exhortan a advertir a los


demás del peligro de vivir y morir sin Dios. La predicación del
evangelio es para evitar que la gente muera sin fe.

Cuando predicamos la Palabra de Dios, persuadimos a la gente su


necesidad de Dios. Les damos la oportunidad de reconciliarse con
el Creador.

¿Pasa lo mismo cuando predicamos un evangelio diferente? ¿Qué


ocurre si en vez de predicar del amor de Dios en Cristo,
predicamos que se puede ser feliz viniendo a la Iglesia?
¿Alcanzará la gente la felicidad? ¿Alcanzarán la salvación? Las
gentes descubrirá que es un mensaje mentiroso y acabarán lejos
de Dios, y morirán en sus pecados.

Como está escrito en Hebreos 4.12-13: Porque la palabra de Dios


es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y
penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los
tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del
corazón. Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su
presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a
los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.

Debemos persuadir a todos los creyentes de que pasarán por el


tribunal de Cristo. …por cuanto ha establecido un día en el cual
juzgará al mundo con justicia, por aquel varón a quien designó,
dando fe a todos con haberle levantado de los muertos. Hechos
17.31.

Continúa el texto sagrado: Pero a Dios le es manifiesto lo que


somos. ¿Piensas que alguien puede engañarte a ti? Algunos
afirman que no hay quien les engañe. Pero pudiera ser que alguien
logre engañarte. Pero, ¿Creen que alguien logrará engañar a Dios?
243

Desde luego que no. Como está escrito: No os engañéis; Dios no


puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso
también segará. Gálatas 6.7.

¿Qué pretendía Pablo con estas palabras? El apóstol Pablo sabía


que su vida estaba desnuda delante de Dios. Podría engañar a los
corintios, pero jamás engañaría a Dios. A Él le es manifiesto lo
que somos.

¿Qué implicaciones tiene esta afirmación? Dios te conoce. Te


conoce profundamente. Mejor que tú a ti mismo. No hay nada que
puedas ocultar a los ojos de Dios. Aun cuando lográsemos
engañar a todo el mundo, jamás lograríamos engañarle a Él.

Y espero que también lo sea a vuestras conciencias. Esta frase es


otra clara defensa de la integridad personal del apóstol, que apela
a la conciencia de los corintios, para que reconozcan su honradez.

Pablo sabe que Dios le conoce, y que los corintios también. Por
esa razón apela a sus conciencias. ¿Por qué usa el plural? Porque
espera que todos testifiquen de la sinceridad de sus palabras y
obras.

12. ¿Cómo podemos entender este versículo? El apóstol renuncia


a recomendarse otra vez a los corintios. ¿No lo había hecho
anteriormente? Efectivamente, en el 3.1-3. Si aquí había dicho
que no necesitaba cartas de recomendación, no tenía sentido
volver sobre esto.

No quiere argumentar en su favor. Les da la oportunidad de que


sean capaces por sí mismos de discernir entre él y aquellos que le
menospreciaban, y pudieran gloriarse respecto de Pablo y sus
colaboradores.

¿Busca Pablo su propia gloria? Pablo no busca su propia gloria,


sino que los corintios sean firmes ante quienes le acusaban sin
motivo. Que sean ellos quienes se gloríen de un siervo de Dios
que es fiel al Señor y a su ministerio.
244

Esto es lo que espera todo verdadero siervo de Dios. Que cuando


alguien hable mal de él, aquellos que le conocen le defiendan.
Porque es lo justo delante de Dios. No que murmuren contra él,
como hicieron Aarón y María de su propio hermano, y quedó
leprosa.

Lo curioso del caso es que le criticaron por algo que había hecho
mal Moisés. Números 12. Génesis 28.6. Sin embargo, Dios no
castigó a su siervo, sino a quienes murmuraron contra él.

¿Significa eso que no podemos corregir a un siervo de Dios? No


significa eso. Pero no se debe hacer con un corazón malo,
buscando su posición. El pecado de ellos fue que pretendieron
quitar a Moisés para ponerse en su lugar.

Esta actitud ha provocado no pocas divisiones en la Iglesia. Debe


quedar claro que no es algo que a Dios le agrade.

Si un siervo de Dios está obrando mal debe ser probado por dos o
más testigos, 1 Timoteo 5.9; y corregido con espíritu de
mansedumbre, Gálatas 6.1-5.

Para que tengáis con qué responder a los que se glorían en las
apariencias y no en el corazón. ¿Qué significa esta frase? ¿Qué
pretendía el apóstol? Que los corintios tuvieran munición verbal
para enfrentar a los falsos apóstoles.

Los que se oponían a Pablo valoraban mucho:


las cartas de recomendación, 3.1;
la elocuencia, 10.10; 11.6;
la herencia y el linaje judío, 11.22;
las visiones y las revelaciones, 12.1;
y el hacer milagros, 12.12.

Se gloriaban de poseer estas cualidades externas y se burlaban de


que Pablo no las tuviera. Según Pablo, ¿En qué debe gloriarse el
cristiano? Siempre en el Señor, 1Corintios 1.31.
245

¿Qué hay en nosotros que merezca gloria? En realidad nada.


Como está escrito: Si bien todos nosotros somos como suciedad, y
todas nuestras justicias como trapo de inmundicia; y caímos
todos nosotros como la hoja, y nuestras maldades nos llevaron
como viento. Isaías 64.6

13. ¿Por qué razón dice Pablo estas palabras? A la luz de este
pasaje es lógico pensar que sus adversarios le habían acusado de
estar loco. Esto suele suceder cuando decimos o hacemos algo
que no coincide con lo que los demás entienden que es “normal”.

Desgraciadamente no siempre lo que la sociedad afirma que es


normal, lo es en realidad, al menos a los ojos de Dios. ¿Pueden
poner un ejemplo? Por ejemplo, hoy se entiende el aborto, la
homosexualidad, y otros pecados como esos como normal. ¿Lo
son? Desde luego que no.

El aborto es un asesinato. La homosexualidad una depravación, y


otras muchas cosas que hoy se toleran, son pecados que Dios
aborrece.

¿Quién determina lo que es normal? Antes era Dios por medio de


Su Palabra. Después fueron los estudiosos. Más tarde la misma
sociedad en su depravación demanda que se considere normal lo
que no lo es.

Se está produciendo una verdadera reeducación de las conciencias


para que lo malo sea considerado bueno y lo bueno malo. ¿A qué
es debido esto? Al aumento de la maldad de los últimos tiempos.

En Hechos 26.24-28 Diciendo él estas cosas en su defensa, Festo


a gran voz dijo: Estás loco, Pablo; las muchas letras te vuelven
loco. Mas él dijo: No estoy loco, excelentísimo Festo, sino que
hablo palabras de verdad y de cordura. Pues el rey sabe estas
cosas, delante de quien también hablo con toda confianza.
Porque no pienso que ignora nada de esto; pues no se ha hecho
esto en algún rincón. ¿Crees, oh rey Agripa, a los profetas? Yo sé
246

que crees. Entonces Agripa dijo a Pablo: Por poco me persuades


a ser cristiano.

¿Qué cosas estaba diciendo el apóstol para que Festo le acusara


de locura? Estaba predicando sobre la resurrección de Cristo.

Ya Pablo les había dicho a los corintios que: la palabra de la cruz


es locura a los que se pierden; pero a los que se salvan, esto es, a
nosotros, es poder de Dios. 1 Corintios 1.18.

De hecho, incluso el mismo Señor Jesús fue acusado de loco, y


esto por su propia familia, quien intentó prenderlo.

Marcos 3.20-21: Y se agolpó de nuevo la gente, de modo que ellos


ni aun podían comer pan. Cuando lo oyeron los suyos, vinieron
para prenderle; porque decían: Está fuera de sí.

Es posible que tuvieran miedo de que llamase la atención de los


romanos y les ocasionase problemas irreparables. Sea como fuere,
pensaban que estaba loco, fuera de sí.

Lo interesante es que en los versos del 31 al 35 dice quiénes eran


los suyos. ¿Quiénes eran? Sus hermanos y su madre. Recuerden
que su madre había recibido la visita de un ángel que le anunció
qué ocurriría con su primer hijo Jesús.

¿Cómo llegó a pensar que estaba fuera de sí? Posiblemente la


influencia de sus otros hijos. Su miedo de los romanos y de los
sacerdotes y la guardia del pueblo.

Debemos guardarnos de las influencias. Porque pueden llevarnos


a cambiar de opinión en cosas importantes. ¿Alguna vez te pasó?
¿Alguien te hizo cambiar de opinión sobre algún asunto para bien
o para mal?

Como está escrito en Filipenses 2.12-18: Por tanto, amados míos,


como siempre habéis obedecido, no como en mi presencia
solamente, sino mucho más ahora en mi ausencia, ocupaos en
247

vuestra salvación con temor y temblor, porque Dios es el que en


vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena
voluntad. Haced todo sin murmuraciones y contiendas, para que
seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin mancha en
medio de una generación maligna y perversa, en medio de la cual
resplandecéis como luminares en el mundo; asidos de la palabra
de vida, para que en el día de Cristo yo pueda gloriarme de que
no he corrido en vano, ni en vano he trabajado. Y aunque sea
derramado en libación sobre el sacrificio y servicio de vuestra fe,
me gozo y regocijo con todos vosotros. Y asimismo gozaos y
regocijaos también vosotros conmigo.

Todo el que quiera hacer la voluntad de Dios va a ser tomado por


loco. Porque es una locura ser cristiano hoy. Pero una bendita
locura, que salva. ¿De qué te sirve ir al infierno con el respaldo
de todo el mundo? Mejor ir al cielo con la etiqueta de loco y el
respaldo de nadie.

La semana pasada nos quedamos en el verso 13. Vimos cómo


Pablo había sido acusado de loco, y no sólo él, sino el mismo
Señor Jesucristo. Comentamos que también nosotros debemos
prepararnos porque si a Jesús, el Hijo de Dios lo trataron así,
también con nosotros lo harán.

Jesús no sólo fue acusado de loco, sino aun de cosas peores, vean
el verso siguiente: Pero los escribas que habían venido de
Jerusalén decían que tenía a Beelzebú, y que por el príncipe de
los demonios echaba fuera los demonios. Marcos 3.22.

En el capítulo 11.16ss Pablo volverá sobre este tema.


Aprovechando el cual, se permite comparar sus méritos frente a
los de sus acusadores. Aunque después acaba gloriándose sólo en
sus debilidades.

14-15. El amor de Cristo nos constriñe. ¿Qué significa esta frase?


Que el amor de Cristo nos aflige, nos rodea, nos cerca, nos tiene
preso.
248

Cuando se habla del amor en el Nuevo Testamento es importante


prestar atención a las preposiciones. Porque no es lo mismo
hablar del amor DE que del amor A.

¿Qué importancia tiene esto? No tener en cuenta estos pequeños


detalles posibilita el error de muchos al interpretar las Escrituras.
Por ejemplo: Romanos 8.35-39. Nadie nos separará del amor DE
Cristo.

Observen bien: Pablo no habla del amor A Cristo, sino del amor
DE Cristo.

Nadie nos separará del amor DE Cristo. Pero, ¿Podemos nosotros


mismos separarnos del amor A Cristo? Sin duda. La Palabra de
Dios así lo enseña.

Como está escrito en 1Juan 5.3: Pues este es el amor a Dios, que
guardemos sus mandamientos.

De modo que cuando peco ¿Estoy mostrando el amor a Dios? De


ninguna manera. Me estoy apartando del amor a Dios.

La mentira, la idolatría, el egoísmo, la pereza, y muchas otras


acciones pecaminosas pueden separarte del amor A Cristo. Así,
pues, nadie puede separarte del amor DE Cristo, sino tú mismo, si
no andas en los mandamientos de Cristo.

Volvamos a Romanos 8.35-39 ¿Qué tenemos aquí? ¿Una lista de


pecados? No, sino de circunstancias ajenas a nuestra voluntad.
Pero, ¿Qué ocurre si un cristiano comienza a pecar y se deja
arrastrar por el pecado?

Hay quien afirma que Dios ama al pecador. ¿Qué piensan?


¿Creen que es verdad o no? La verdad es que hay un fallo en esa
declaración.

Según la Biblia, Dios amó al mundo, Juan 3.16, y sabemos que el


mundo era pecador. Pablo en Romanos 5.8 afirma: Más Dios
249

muestra su amor para con nosotros, en que siendo aun


pecadores, Cristo murió por nosotros.

Esto quiere decir que Dios mostró su amor para con el pecador en
la cruz del calvario, dándole la oportunidad al ser humano de
salvarse de sus pecados. Pero, ¿Significa eso que Dios sigue
amando a quien continúa en el pecado sin arrepentirse? De ningún
modo.

Salmo 11.5 Jehová prueba al justo; Pero al malo y al que ama la


violencia, su alma los aborrece.

Proverbios 6.16-19 Seis cosas aborrece Jehová, Y aun siete


abomina su alma: Los ojos altivos, la lengua mentirosa, Las
manos derramadoras de sangre inocente, El corazón que
maquina pensamientos inicuos, Los pies presurosos para correr
al mal, El testigo falso que habla mentiras, Y el que siembra
discordia entre hermanos.

Dios no ama al que peca, lo amó en la cruz y le dio la oportunidad


de librarse del pecado, pero si no lo hace, lo borrece. Por lo que el
pecado sí que te aparta del amor A Dios y DE Dios.

De ahí que en Lucas 9.23-24 se nos exhorta a la muerte de uno


mismo como evidencia del amor a Dios.

Pensando esto: Que si uno murió por todos. ¿No les parece
increíble que haya algunos que llamándose cristianos sean
capaces de afirmar que Cristo no murió por todos? Saben que los
calvinistas enfatizan que Cristo murió sólo por los escogidos, y
que cuando la Biblia dice aquí TODOS, en realidad no se refiere a
todos sino sólo a los escogidos.

¿Hay algo en el pasaje que nos indique que todos no se refiere a


todos? No. De ningún modo.
250

El término que se traduce por “todos” es “pas” en griego que


significa cada, cada uno, toda clase de, todo, pleno, sumo,
absoluto, entero, completo, todo aquel que, todo el mundo.

Curiosamente es el mismo término que se usa en Romanos 3.9


para afirmar que todos, judíos y gentiles, están bajo pecado. No
creo que ningún calvinista sea capaz de decir que este “todo” no
se refiere a todo.

Por tanto, ¿Por qué tener un rasero para unas cosas y otro para
otras, cuando se trata de la misma palabra? La explicación es
sencilla, porque pasajes como este no cuadra con la falsa teología
reformada.

Cuando se encuentran con pasajes como este, intentan


convencerte de que la Biblia no dice lo que dice, sino lo que ellos
quisieran que dijera.

A menos que haya algún indicativo de que el escritor está usando


un lenguaje figurado, la primera y mejor opción, según los
principios de la hermenéutica, es entender que es literal.

¿Por quiénes murió Cristo? Por todos. Entones preguntan:


¿Quiere decir entonces que todos se salvarán? De ningún modo.
¿Por qué, si Cristo murió por sus pecados? Pues, porque Dios ha
puesto una condición para que el ser humano sea salvo.

¿Cuál es esa condición? Que deposite fe en la obra de Cristo Jesús


en la cruz del calvario. Sabemos que no todos quieren creer.
Algunos rehúsan hacerlo, y éstos no alcanzarán la vida, sino que
la ira de Dios está sobre ellos. Juan 3.36.

Luego todos murieron. ¿A qué muerte se refiere aquí el apóstol


Pablo? Se refiere a que la muerte de Cristo fue sustitutoria por
todos los seres humanos. Todos morimos en Cristo. ¿Cuándo
ocurre eso? Cuando nos identificamos con Él.
251

Los cristianos somos los que nos identificamos con Cristo en su


muerte y en su resurrección. Como está escrito en Romanos 6.3-5:
¿O no sabéis que todos los que hemos sido bautizados en Cristo
Jesús, hemos sido bautizados en su muerte? Porque somos
sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin
de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del
Padre, así también nosotros andemos en vida nueva. Porque si
fuimos plantados juntamente con él en la semejanza de su muerte,
así también lo seremos en la de su resurrección;

15. Como dice: y por todos murió. Por mucho que los hombres
pretendan torcer las Escrituras. El calvinismo ese equivoca. Los
reformados equivocan. Se equivocan todos cuantos intentan
interpretar las Escrituras a través de lo escritos de otros hombres.

La Escritura sólo debe ser interpretada a la luz de sí misma.

Para que los que viven ya no vivan para sí… El resto del verso es
tan claro que no requiere de explicación. Haber muerto con
Cristo, nos permite vivir la nueva vida en Dios.

Ya el mundo no nos atrae. ¿Cómo podría atraer a un muerto? El


cristiano ya no vive para sí, sino para Aquel que murió y resucitó
por ellos.

Como está escrito en Romanos 14.7-8: Porque ninguno de


nosotros vive para sí, y ninguno muere para sí. Pues si vivimos,
para el Señor vivimos; y si morimos, para el Señor morimos. Así
pues, sea que vivamos, o que muramos, del Señor somos.

16. ¿Qué quiere decir este pasaje? Que ya no vemos a las


personas como antes las veíamos, cuando estábamos perdidos.
Ahora, ni aun a Cristo le vemos como antes. Ahora le conocemos
de otro modo.

Aquí se trata de la perspectiva. Antes, todo lo veíamos conforme


a una perspectiva mundana y carnal; ahora, todo lo vemos de un
modo diferente, espiritual.
252

La manera en que el apóstol conoce ahora a Cristo no es la


manera como antes le conocía. ¿Cómo veía Saulo de Tarso a
Jesús? Hubo un tiempo en el que Pablo mismo había juzgado a
Cristo según su tradición religiosa, y se había propuesto eliminar
su recuerdo del mundo.

Antes le odiaba y perseguía a sus seguidores. Pero ya no. ¿Cómo


le ve ahora? Ahora, tiene una escala de valores diferente. Ahora le
adora y le sirve.

Aquél que había perseguido y tratado de aniquilar era para él la


persona más maravillosa del mundo. Alguien digno de ser
admirado, seguido y adorado.

Ya nunca más la vida será igual para Pablo. Lo mismo ha de


suceder con nuestras vidas. Ya no debemos juzgar las cosas según
las apariencias ni según la perspectiva del mundo, sino según la fe
en Jesús.

17. Para Pablo, un cristiano es alguien cuya vieja personalidad


murió con Cristo en la cruz, y resucitó con Él a una nueva vida.
De manera que es una nueva criatura y no puede seguir viendo las
cosas del mismo modo. Ni continuar viviendo como antes lo
hacía.

De modo que si alguno está en Cristo. Es la lógica conclusión de


lo que ha venido diciendo.

¿Qué significa estar en Cristo? Tiene que ver con la comunión


íntima que se establece entre el Señor Jesús y aquellos que
creemos en Él.

Íntima relación que transforma nuestra vida, marcando un antes y


un después, en nuestra historia.

Criatura habla de creación. Pablo aquí está hablando de nueva


creación. Lo hace también en Gálatas 6.15 Porque en Cristo Jesús
253

ni la circuncisión vale nada, ni la incircuncisión, sino una nueva


creación.

Isaías 43.18-19 No os acordéis de las cosas pasadas, ni traigáis a


memoria las cosas antiguas. He aquí que yo hago cosa nueva;
pronto saldrá a luz; ¿no la conoceréis? Otra vez abriré camino
en el desierto, y ríos en la soledad.

Para los verdaderamente nacidos de nuevo, las cosas viejas


pasaron. El término pasaron se traduce de la palabra griega
parerjomai que significa, dejar de ser, desaparecer, quebrantar.

¿Qué es lo que ha desaparecido de la vida del cristiano? Todo


aquello que desagradaba a Dios. Lo que antes le atraía del mundo,
los deseos de la carne, y la vanagloria de la vida.

Este pasaje, por sí mismo, junto con Ezequiel 18.20 echan por
tierra la falsa doctrina de las maldiciones generacionales y la falsa
doctrina de que los cristianos necesitan, además de creer en Dios,
pasar por “sanidad interior” donde les harán regresión para
superar traumas del pasado.

El apóstol Pablo, por inspiración del Espíritu Santo, dice que: Si


alguno está en Cristo, nueva criatura es. ¿Se equivocaría el
Espíritu Santo? ¿Se equivocaría el apóstol Pablo? ¿O se
equivocan quienes enseñan que necesitas un encuentro y luego un
reencuentro, y sanidad interior, y recrear tu árbol genealógico
para descubrir los pecados familiares, etc.?

Quienes defienden esas falsas doctrinas afirman que el hecho de


que haya “cristianos” que padecen por traumas pasados demuestra
que necesitan pasar por sanidad interior. ¿Será así? ¿O será que
realmente aun no se ha convertido en una nueva criatura?

¿Qué ocurre cuando una persona afirma ser cristiana y aun se


siente fuertemente atraído por todas las cosas viejas? Pablo habla
de esto más adelante al decir: Examinaos a vosotros mismos si
estáis en la fe; probaos a vosotros mismos. ¿O no os conocéis a
254

vosotros mismos, que Jesucristo está en vosotros, a menos que


estéis reprobados? 2Corintios 13.5.

Así, pues, esa persona debiera examinarse a sí mismo para


comprobar que realmente esté en Cristo. Actualmente, muchos
falsos profetas enseñan falsos evangelios que engendran falsos
hijos de Dios.

Muchos grupos que dicen ser iglesias realmente no lo son. Y


muchos que se consideran cristianos, tampoco.

Aunque las tentaciones siempre nos asedian, los cristianos no


podemos ya vivir en la misma condición en la que estábamos
antes de estar en Cristo. Contamos con numerosos recursos que
nos ayudan en la transformación de nuestra vida.

Nuestra relación íntima con el Señor nos cambia. 2Corintios 3.18.


El Espíritu Santo nos ayuda en nuestras debilidades, Romanos
8.26.
La oración, Mateo 26.41.
La Sagrada Escritura, etc. 2Timoteo 3.15-17.
La Iglesia, 1Tesalonicenses 5.11.

El testimonio del propio apóstol era una clara demostración de


esta transformación real. Él era un vivo ejemplo de lo que Cristo
hace con una persona cuando llega a su vida. La transforma por
completo.

Del Saulo perseguidor al Pablo apóstol, hay un mundo de


diferencia. En realidad son dos personas distintas. No se trata de
que Cristo repare algo dañado en nosotros. Se trata de que nos
hace de nuevo.

Uno andaba en la carne, el otro en el Espíritu. Gálatas 5.24-25.

La manera en que Saulo se relacionaba con Dios no era la misma


en la que lo hacía Pablo. De una vida religiosa llena de ritos y
sacrificios que nunca podían librarle de su pecado, pasó a una
255

vida de completa fe y confianza en base a la obra redentora de


Cristo, que le proporcionó paz para con Dios.

En realidad todas las cosas son hechas nuevas. Una nueva vida,
una nueva relación.

18-21. Y todo esto proviene de Dios. No son los psicólogos los


que nos han cambiado a mejores personas. Ni los psiquiatras, ni
los políticos.

Algunas personas cuando dan testimonio dan la impresión de que


han sido ellos mismos los que han producido el cambio en sus
vidas. Dicen: Porque yo fui, yo hice, yo oré. ¿Creen que el ser
humano puede cambiar por sí mismo? De ningún modo.

El ser humano siempre complica y empeora las cosas.


Gracias a Dios, no depende de nosotros. Porque si dependiera de
nosotros, no habría esperanza alguna. Pero al provenir de Dios, el
que comenzó la buena obra, la perfeccionará hasta el día de
Jesucristo. Filipenses1.6.

¿Creen que hay cosas que aún nos quedan por cambiar? Sin duda.
Dios promete terminar lo que comenzó n nosotros.

¿Puede el hombre conseguir cambiar su vida sin Cristo? Esto fue


lo que intentó el comunismo de Carlos Marc. Un nuevo hombre
cambiando las circunstancias externas. El resultado: Cien
millones de muertos por causa de una filosofía atea.

Chaves intentó mejorar Venezuela, y ¿Cómo está ahora?


Destrozada. Hecha un desastre. No hay alimentos, ni medicinas,
ni las cosas más básicas. El hombre no hace las cosas mejor de lo
que las puede hacer Dios.

Juan 15.5 …separados de mí nada podéis hacer.

Dios es el principio y motor de toda transformación humana.


256

1Corintios 1.26-31 Pues mirad, hermanos, vuestra vocación, que


no sois muchos sabios según la carne, ni muchos poderosos, ni
muchos nobles; sino que lo necio del mundo escogió Dios, para
avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió Dios, para
avergonzar a lo fuerte; y lo vil del mundo y lo menospreciado
escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, a fin de que
nadie se jacte en su presencia. Mas por él estáis vosotros en
Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría,
justificación, santificación y redención; para que, como está
escrito: El que se gloría, gloríese en el Señor.

Quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo. ¿Qué significa


que nos reconcilió? Que éramos enemigos de Dios. Le habíamos
ofendido quebrantando sus mandamientos. Pecamos contra Dios y
nos convertimos en enemigos suyos. Por eso estábamos
Destituidos de la gloria de Dios. Romanos 3.23.

La iniciativa debiera haber partido de nosotros. ¿Fue así? No. No


fue así. Dios tomó la iniciativa.

Cuando estudiamos la historia del ser humano nos damos cuenta


de que el hombre, cuando se aparta de Dios, cuando pierde el
temor de Dios, acaba temiendo a muchas otras cosas.

A las sequías que traen escasez de alimentos; a las fuerzas de la


naturaleza que le asusta, con sus truenos y tormentas; a otros
pueblos más fuertes y poderosos que ellos, etc. Hoy muchos le
temen al mal de ojos.

Nuestros antepasados a lo largo toda su historia han querido


reconciliarse con Dios de mil maneras, por esa razón ofrecían
ofrenda a sus ídolos. Algunos pueblos llegaron a sacrificar vidas
humanas a fin de apaciguar a sus dioses.

¿Pidió Dios que el hombre hiciera esas cosas? De ningún modo.


¿Cómo enseña Dios la manera correcta de reconciliarnos con el
Creador? Por Cristo.
257

Es emocionante pensar que fue Dios mismo quien tomó la


iniciativa para alcanzar nuestra reconciliación con Él. ¿Qué hizo
para conseguirla?

Leamos lo que está escrito en Romanos 5.10-11: Porque si siendo


enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su
Hijo, mucho más, estando reconciliados, seremos salvos por su
vida. Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en Dios por
el Señor nuestro Jesucristo, por quien hemos recibido ahora la
reconciliación.

¿Cómo fuimos reconciliados con Dios? Ni la ley ni los profetas ni


el sistema de sacrificios podían efectuar la reconciliación del
hombre, Dios la efectuó por medio del sacrificio de su hijo
amado.

Por la muerte de su Hijo. ¿Piensan que alguien podrá


reconciliarse con Dios por otro medio? De ningún modo. Sería
como menospreciar la sangre de Cristo.

Podrá alguien haciendo buenas obras conseguir la reconciliación


con Dios? No. Efesios 2.9 …no por obras, para que nadie se
gloríe.

Dios nos reconcilió y nos dio el ministerio de la reconciliación. A


todos los que creemos en Cristo, los que hemos nacido de nuevo,
los que estamos en la fe del Hijo de Dios.

Dios nos llama a reconciliar a la gente con el Creador. ¿Cómo


podríamos conseguir algo así? Por medio de la predicación y la
enseñanza de Su Palabra.

Hay muchas personas que necesitan que cumplamos con nuestro


deber de confesar a Cristo delante de los hombres. Mateo 1.32-33.

Marcos 5.18-20 Al entrar él en la barca, el que había estado


endemoniado le rogaba que le dejase estar con él. Mas Jesús no
se lo permitió, sino que le dijo: Vete a tu casa, a los tuyos, y
258

cuéntales cuán grandes cosas el Señor ha hecho contigo, y cómo


ha tenido misericordia de ti. Y se fue, y comenzó a publicar en
Decápolis cuán grandes cosas había hecho Jesús con él; y todos
se maravillaban.

Debemos llevar a cabo del ministerio de la reconciliación así


como alguien lo hizo con nosotros. Nos habló del evangelio, del
amor de Dios y nos invitó a la iglesia.

Debemos aprovechar las oportunidades que Dios nos da para


compartir con los demás nuestra fe. Porque Dios no quiere que
ninguno se pierda. 2Pedro 3.9.

19. Que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo.


Esta sencilla y clara explicación del apóstol deja bien clara la
intención de Dios de lograr una reconciliación que se extendiera
al mundo entero.

Una vez más, quienes afirman que Dios creó a unos para
salvación y a otros para condenación, se encuentran con un pasaje
que les contradice clara y abiertamente. Pues, el amor de Dios en
Cristo se extiende a judíos y gentiles.

Como está escrito en Romanos 1.16 Porque no me avergüenzo


del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo
aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego.

También Pedro habla de esto cuando dice en 2Pedro 3.9: El Señor


no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza,
sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que
ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.

No tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados. Dios llamó


al ser humano a la reconciliación con Él. Como está escrito en
Isaías 1.18-20:

Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados


fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si
259

fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana. Si


quisiereis y oyereis, comeréis el bien de la tierra; si no quisiereis
y fuereis rebeldes, seréis consumidos a espada; porque la boca de
Jehová lo ha dicho.

Esta invitación perdura en el NT, en el que Pablo contrasta la


ineficacia del sistema judaico con la eficacia de la obra de Cristo.

Por medio de la obra redentora de Cristo, Dios perdona a los


pecadores que se arrepienten y cuya fe está puesta en Jesús, el
autor y consumador de su fe. Hebreos 12.2: …puestos los ojos en
Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto
delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se
sentó a la diestra del trono de Dios.

Hechos 17.30-31: Pero Dios, habiendo pasado por alto los


tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en
todo lugar, que se arrepientan; por cuanto ha establecido un día
en el cual juzgará al mundo con justicia, por aquel varón a quien
designó, dando fe a todos con haberle levantado de los muertos.

Nos encargó a nosotros. ¿A quiénes se refiere el apóstol? Por el


contexto, se refiere a todos los cristianos. De modo que todos
tenemos que hacer lo que podamos por acercar a la gente a Dios.

¿Qué nos encargó? La Palabra de la reconciliación. ¿Necesita el


mundo esta palabra? Sin duda. Esta es la palabra que el mundo
necesita. ¿Por qué? Porque debe reconciliarse con su Creador.

¿Es esta la palabra que hoy se predica? Cada vez menos. Los
mensajes que hoy se escuchan desde la mayoría de los púlpitos
que se hacen llamar cristianos son sobre el bienestar del hombre
sobre la tierra.

Pero no es esa la Palabra que se nos encargó que predicásemos


sino la de la reconciliación. ¿Qué deben hacer los hombres para
reconciliarse con Dios? Deben arrepentirse y convertirse. Hechos
3.19.
260

20. Así que, somos embajadores en nombre de Cristo. Dios no


sólo nos ha salvado, sino que a demás nos ha dado un alto honor.
No hay más alto honor que representar a Aquel que dio su vida
por salvar a la humanidad.

Un embajador es una persona que representa a su propio país,


pero que vive en otro que no es el suyo. Pasa la vida entre
personas que, en algunos casos, hablan un idioma distinto, tienen
costumbres distintas, y una manera de vivir también diferente.

Como cristianos nos encontramos en la misma situación. Vivimos


en el mundo, conscientes de que no pertenecemos a este mundo
porque pertenecemos al cielo donde está nuestra ciudadanía. En
realidad somos extranjeros y peregrinos.

Quien no esté dispuesto a ser distinto al mundo, es porque en


realidad no es verdadero cristiano.

El embajador habla en nombre de su soberano. El cristiano debe


hablar en nombre de Cristo. El honor de su país está en manos del
embajador. De modo que un cristiano puede aportar gloria a Dios,
o profanar el Nombre de Dios.

Debemos prestar especial atención al mensaje. Debemos depositar


fe en la obra de Cristo, y proclamarla a los demás. Tenemos una
misión: reconciliar al mundo con Dios. Lo que Dios ha hecho por
medio de la obra de Cristo merece que sea proclamado a todo el
mundo.

Nunca se trata de que Dios se reconcilie con el mundo, sino al


revés. Es el mundo quien debe reconciliarse con Su Creador.

1Timoteo 2.5-6: Porque hay un solo Dios, y un solo mediador


entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre, el cual se dio a sí
mismo en rescate por todos, de lo cual se dio testimonio a su
debido tiempo.
261

Sólo por la mediación de Cristo podemos ser reconciliados con el


Padre.

No sólo los pastores tenemos el deber de proclamar el mensaje de


amor de Dios por la humanidad. Sino que, en cierto sentido, a
todos se nos ha dado ese honor. Porque hay personas que jamás
tendrán contacto con un pastor, pero lo tendrán contigo.

La semana pasada el Pr. Andrés se quedó en el verso 20, en el que


Pablo dice que somos embajadores en nombre de Cristo. ¿Qué es
lo que hace un embajador? Representa a su Soberano.

Nuestra vida debe ser fiel reflejo de Aquel a quien representamos.

Es impresionante como Pablo lo expresa: Como si Dios rogase


por medio de nosotros. Increíblemente, aun cuando fuimos
nosotros quienes le ofendimos con nuestros pecados, Él ruega por
nuestra reconciliación. ¿No es amor? Sin duda. ¿Qué hicimos
para merecerlo? Absolutamente nada.

¿Entienden lo absurdo de quienes pretenden que nosotros valemos


mucho para Dios? Circulan por la red multitud de mensajes en ese
sentido. ¿Han visto alguno? En el programa de la Ferede en Tve
lo repiten cada domingo: Recuerda: tú vales mucho para Dios.

¿Nos amó Dios por eso? De ningún modo. ¿Cuál es nuestro


valor? Ninguno. Entonces, ¿Por qué nos ama tanto? ¿Por qué
envió a Su Hijo a morir en nuestro lugar? Porque Dios es Amor.
Esa es la palabra que le identifica. 1Juan 4.8. Pero no porque
valgamos nada.

¿Qué son nuestras mejores obras? Trapo de inmundicia. Isaías


64.6.

Os rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios. Algo


importante a lo que hay que prestar atención es que, cuando
hablamos de reconciliación siempre pensamos en inconversos o
262

incrédulos pero, ¿A quiénes les habla Pablo en realidad? El


apóstol Pablo le está hablando a los corintios que eran cristianos.

Es a ellos a quienes les dice que se reconcilien con Dios.


¿Estamos enfrentados con Él? ¿Seguimos siendo sus enemigos?
¿Por qué debemos reconciliarnos con Dios los creyentes? Porque
le ofendemos, y el pecado nos aleja de Él. Corinto era prueba de
ello.

Muchas veces nuestras decisiones nos alejan de Él. Nuestros


pecados generan separación entre Dios y nosotros. Cuando esto
ocurre debemos reconciliarnos con Dios.

En cualquier época de nuestra vida, y en cualquier etapa de


nuestra experiencia, necesitamos reconciliarnos con Dios. Pedro
tuvo que reconciliarse con el Señor, y lo hizo. Judas también tuvo
que reconciliarse con Él. ¿Lo hizo? No. Sino que permitió que el
pecado lo alejara cada día más.

Si tienes algún problema en tu relación con Dios, mejor que lo


soluciones cuanto antes. De lo contrario te puede pasar como a
Judas. Que te parezca una buena idea traicionar al Señor. Y te
aseguro que no lo es. ¿Están de acuerdo?

La reconciliación no debe entenderse como un concepto religioso,


sino como una realidad práctica y personal en nuestra relación
con Dios. Si un creyente ha ofendido a Dios ¿Cómo puede
reconciliarse con Él? Mediante el arrepentimiento y la confesión.
El cambio de mentalidad en cuanto al pecado.

¿Se dirige Pablo sólo a los miembros de la iglesia de Corinto o


está pensando en todos los seres humanos de este mundo? La
respuesta a esta pregunta la encontramos en los versículos
precedentes, donde Pablo primero dice que Dios nos reconcilia
con él (v. 18), y luego que Dios reconcilia al mundo consigo
mismo (v. 19).
263

El imperativo reconciliaos ¿A quién está dirigido? Tanto a


corintios como al resto de la humanidad. Esto es lo que Dios
quiere decirle a todo el género humano sin excepción. Su
demanda es válida para gente de toda condición, edad o lugar; y
siempre es aplicable, en cualquier época.

Como embajadores somos comisionados a buscar la


reconciliación de todos con Dios. Así que este debe ser nuestro
mensaje. Tu mensaje: Reconciliaos con Dios.

21. Al que no conoció pecado. ¿De quién está hablando Pablo? Es


evidente que Pablo está hablando de Jesús, el Hijo de Dios, como
el que no cometió pecado. De ningún otro puede decirse lo
mismo. Pues, aunque nacemos sin pecado, rápidamente la
corriente de este mundo nos arrastra, y nos hace pecar.

Por eso dice Pablo, no hay justo ni aun uno. No que seamos
creados en maldad, o con una naturaleza mala, pues en tal caso la
culpa no sería nuestra sino de quien nos creó. Sino que nos
dejamos llevar por el pecado que nos rodea, y acabamos todos
siendo pecadores.

Hay varios pasajes en los que se afirma la pureza de Cristo,


veamos algunos:
Juan 8.46;
Hebreos 4.15; 7.26; 9.14;
1Pedro 2.22; 3.18;
1Juan 2.1; 3.5;

Por nosotros lo hizo pecado. ¿Quiere decir que Cristo se hizo


pecador? Algunos afirman que cuando cargó sobre sí mismo los
pecados de todos nosotros se hizo pecador. ¿Realmente es así?
¿Dice la Biblia eso? De ningún modo.

Cristo nunca fue pecador, asumió nuestros pecados como


sustituto nuestro, representándonos, pero esta frase debe ser
entendida en modo figurado, y no literal.
264

La pregunta es ¿Somos nosotros justos delante de Dios? Por


nosotros mismos no, pero se nos aplica su justicia. Como está
escrito: Para que nosotros fuésemos justicia de Dios en él.

Se trata de una declaración judicial. A Cristo se le declara


culpable, sin serlo; y a nosotros se nos declara justos sin serlo.
Aun así, Cristo murió en nuestro lugar, y Dios nos absuelve, anula
todos los cargos contra nosotros y nos concede el don de la
justicia.

Este pasaje es como una declaración de fe sobre la obra


sustitutoria de Cristo en nuestro favor. La idea de sacrificio por el
pecado está presente en toda la Biblia, Pablo la tomada de Isaías
53.10 que habla del siervo sufriente que pone su vida en
expiación por el pecado.

Cada vez que un judío traía un cordero para el sacrificio


simbolizaba la transferencia de pecado poniendo sus manos sobre
la cabeza del animal en señal de identificación.

Todo el que pretenda salvarse y obtener la vida eterna, debe


identificarse con Cristo en su muerte y resurrección. ¿Cómo
hacemos esto? De dos formas diferentes:

En primer lugar, reconociendo y aceptando que Cristo nos


redimió con su sangre. De este modo nos identificamos con el
Cristo crucificado.

En segundo lugar, por medio del bautismo que es nuestro


testimonio de fe pública. Por medio de él mostramos al mundo
nuestra identificación con el Cristo muerto, sepultado y
resucitado.

En esta última perícopa del 17-21 Pablo centra su discurso en tres


cuestiones claras: Nueva creación; reconciliación; y justicia de
Dios.
265

6.1-2 Así, pues, nosotros. ¿Quiénes son estos “nosotros” Pablo y


sus colaboradores.

Como colaboradores suyos. Colaboradores de Dios. ¿Recuerdas


lo que Pablo les había dicho en 1Corintios 3.9? Porque nosotros
somos colaboradores de Dios, y vosotros sois labranza de Dios,
edificio de Dios.

Dios usa a sus siervos como instrumentos para edificar la Iglesia.


En 1Tesalonicenses 3.2 dice Pablo: …y enviamos a Timoteo
nuestro hermano, servidor de Dios y colaborador nuestro en el
evangelio de Cristo, para confirmaros y exhortaros respecto a
vuestra fe.

Os exhortamos. Como servidores y colaboradores de Dios,


tenemos una misión. ¿Cuál es? Exhortar a los hermanos en la fe.

¿Qué significa exhortar? Rogar, alentar, infundir ánimo, pedir,


suplicar, consolar, confortar, animar, mandar. Es decir, actuar de
cierta forma, mediante razones o ruegos. ¿Cuál era la
exhortación?

¿Te han exhortado alguna vez?


¿Te ayudó, fue de edificación?
¿Por qué?
¿Qué determinó que te ayudara o no?
Y tú, ¿Has exhortado a alguien?
¿Por qué lo hiciste?
¿Cómo lo hiciste?
¿Fue de edificación?
¿Cuáles pueden ser las consecuencias de la exhortación?
¿Cuáles las de no exhortar?

Gálatas 6.1 Hermanos, si alguno fuere sorprendido en alguna


falta, vosotros que sois espirituales, restauradle con espíritu de
mansedumbre, considerándote a ti mismo, no sea que tú también
seas tentado.
266

En este caso en concreto, ¿Cuál fue la exhortación de Pablo y sus


colaboradores a los corintios?

A que no recibáis en vano la gracia de Dios. ¿Acaso es posible?


Sin duda. Cuando el apóstol inspirado por el Espíritu Santo les
escribe esta exhortación a los corintios es porque es posible.

¿Cómo es posible recibir la gracia de Dios en vano? No cabe la


menor duda de que Pablo está hablando de la gracia de Dios que
salva, el verso 2 lo aclara.

Algunos dicen que la gracia de Dios es irresistible. Es decir, que


si Dios quiere bendecir a alguien, esa persona no puede rechazar
la bendición. Que si la rechaza es porque Dios no quería
bendecirla. ¿Qué creen? ¿Puede el ser humano rechazar las
bendiciones de Dios?

Veamos qué dice la Biblia. Deuteronomio 11.26-28 He aquí yo


pongo hoy delante de vosotros la bendición y la maldición: la
bendición, si oyereis los mandamientos de Jehová vuestro Dios,
que yo os prescribo hoy, y la maldición, si no oyereis los
mandamientos de Jehová vuestro Dios, y os apartareis del
camino que yo os ordeno hoy, para ir en pos de dioses ajenos que
no habéis conocido.

¿Quería Dios bendecir a su pueblo? Sin duda, pero en Su


Soberanía quiso poner condición a su bendición. Así que la gracia
que Dios ofrece se puede recibir o se puede rechazar mediante la
desobediencia.

Ese es el tema que se desarrolla en el capítulo 28 de


Deuteronomio, la bendición o la maldición. Dios en su soberana
voluntad ha querido bendecir al ser humano. Pero también que el
ser humano decida si quiere o no la bendición de Dios.

Deuteronomio 30.19 enseña que el hombre puede escoger entre


recibir o rechazar la gracia de Dios. Recibir o rechazar, bendición
o maldición.
267

El Salmo 145.16-20 Abres tu mano, y colmas de bendición a todo


ser viviente. Justo es Jehová en todos sus caminos, y
misericordioso en todas sus obras. Cercano está Jehová a todos
los que le invocan, a todos los que le invocan de veras. Cumplirá
el deseo de los que le temen; Oirá asimismo el clamor de ellos, y
los salvará. Jehová guarda a todos los que le aman, mas
destruirá a todos los impíos.

Isaías 30.15 Porque así dijo Jehová el Señor, el Santo de Israel:


En descanso y en reposo seréis salvos; en quietud y en confianza
será vuestra fortaleza. Y no quisisteis, 16sino que dijisteis: No.

Volviendo de nuevo al pasaje, es evidente que el ser humano


puede resistir la gracia de Dios. ¿Significa eso que el hombre es
más poderoso que Dios? De ningún modo. ¿Por qué? Porque si el
ser humano puede resistir la gracia de Dios es porque Dios se lo
ha permitido.

Dios ofrece su gracia, perno no obliga a nadie a recibirla. Si Dios


quisiera forzar a alguien podría hacerlo? Sin ninguna duda. Pero,
¿lo hace? No.

Apocalipsis 3.20-22 He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si


alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él,
y él conmigo. Al que venciere, le daré que se siente conmigo en
mi trono, así como yo he vencido, y me he sentado con mi Padre
en su trono. El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las
iglesias.

Dios llama a la Iglesia a tener comunión con Él, ¿La fuerza? No.
Dios ofrece Su gracia, pero no te obliga a recibirla. Si el hombre
rechaza la gracia de Dios no es porque Dios lo haya determinado.
Lo que Dios ha determinado es que el hombre decida si quiere
recibir, o no, la gracia que Dios le ofrece.
268

Si fuera cierto que la gracia de Dios es irresistible, Pablo estaría


equivocado. O lo que es peor, el Espíritu Santo que lo inspiró. Es
decir, nadie podría RECIBIR la gracia de Dios EN VANO.

La pregunta que debemos hacernos es: ¿Se equivocará el Espíritu


Santo y Pablo, o se equivocan quienes afirman que la gracia de
Dios es irresistible? Sin duda, El Espíritu de Verdad no se
equivoca.

En 2Corintios 6.1 Pablo afirma que no recibamos la gracia de


Dios en vano. Las buenas nuevas de la gracia de Dios incluye la
salvación por medio de la fe en Jesús.

Vayamos a Efesios 2.8 ¿Cómo dice que somos salvos? Por


gracia. ¿Quiénes pueden salvarse? Todo el mundo. ¿Qué dice
Tito 2.11 de la gracia de Dios? Porque la gracia de Dios se ha
manifestado para salvación a todos los hombres.

Entonces, ¿Por qué no todos se salvan? Porque la gracia de Dios


puede ser resistida. Porque Dios ha puesto una condición para la
salvación, ¿Cuál es? La fe en Jesús.

Recibir la gracia de Dios y que no te sirva. ¿Cómo es esto


posible? Ya Pablo habló de esto antes, cuando dijo: Además os
declaro, hermanos, el evangelio que os he predicado, el cual
también recibisteis, en el cual también perseveráis; por el cual
asimismo, si retenéis la palabra que os he predicado, sois salvos,
si no creísteis en vano. 1Corintios 15.1-2.

Sin duda, todo el que contradiga la Sagrada Escritura se equivoca.


Como está escrito: Antes bien sea Dios veraz, y todo hombre
mentiroso. Romanos 3.4.

Los falsos apóstoles que se habían presentado en Corinto y que


acusaban al apóstol, con toda seguridad eran judaizantes que
negaban la salvación por fe en la obra de Cristo. Si los corintios
que habían creído el mensaje de Pablo, de salvación por fe en
269

Jesús, se volvían finalmente al judaísmo legalista, habrían


recibido la gracia de Dios en vano.

El problema es menospreciar la gracia de Dios. Como está


escrito: Porque mejor les hubiera sido no haber conocido el
camino de la justicia, que después de haberlo conocido, volverse
atrás del santo mandamiento que les fue dado. 2Pedro 2.21.

¿Es posible recibir la gracia de Dios y que al final no te sirva?


Desde luego.

Si recibes la gracia de Dios que te salva, pero al final te pierdes.


Algunos dicen es que nunca creyeron. ¿Dice eso la Escritura? No.
Lo que dice la Escritura es que la gracia de Dios te salva. Efesios
2.8; así que si al final te pierdes no es porque no creyeras, sino
porque no perseveraste hasta el fin en la fe. Mateo 10.22.

Y todo el que lo niegue está negando la verdad de la Palabra de


Dios. Aquí se desmoronó el calvinismo y la herética teología
reformada, que tanto daño está haciendo a la obra de Dios,
fabricando falsos cristianos que consideran que hagan lo que
hagan no se pueden perder.

¿Se dan cuenta de la importancia de prestar atención a la Escritura


Sagrada? No basta con leer por encima. Hay que escudriñar.

2. Esta es una cita del profeta Isaías 49.8, aunque todo el capítulo
es una llamada a Israel a que no creyera que Dios se había
olvidado de él. Dios tenía su tiempo aceptable, su día de
salvación.

Quería recordarles que Dios siempre había estado ahí. Siempre


había estado al cuidado de su pueblo. ¿Conocen algún pasaje que
demuestre que Dios no nos ha dejado solos?

Juan 14.18 No os dejaré huérfanos; vendré a vosotros.

Hebreos 13.5 No desampararé ni te dejaré nunca.


270

Salmo 27.10 Aunque mi padre y mi madre me dejaran, Con todo,


Jehová me recogerá.

Daniel 3.25 Esta historia demuestra que Dios no nos deja en


ninguna circunstancia por difícil que esta sea.

Muchos creyentes se desesperan cuando quieren algo y no lo


reciben. No entienden que los tiempos de Dios no son nuestros
tiempos. Algunos, como Abram y Sara no tienen la paciencia
necesaria y buscan atajos.

¿Recuerdan el afán de Sara de tener descendencia? Al ver que la


edad se le había pasado, a pesar de la promesa de Dios, siguió las
costumbres del mundo y dio a su criada a Abram para que le diera
descendencia. ¿Fue una buena decisión? De ningún modo.

¿Cuáles fueron las consecuencias? La eterna enemistad de dos


grandes naciones: Israel y los países árabes.

Algunos hombres anhelan tener pareja, casarse, tener familia, y


establecen relación con mujeres no cristianas, a las que no
conocen suficientemente, en la esperanza de que se convertirá.
Después deben pagar las consecuencias de su mala decisión.

De ahí que debemos aprender a ser entendidos en los tiempos de


Dios. Ser pacientes es mejor que pagar las consecuencias de
nuestra impaciencia.

En tiempo aceptable, en día de salvación. Vivimos en el tiempo


aceptable; el día de salvación es hoy. Ambas frases se refieren a
la época de la gracia y no a un día o tiempo específico. Cristo ya
realizó la obra de redención. A nosotros nos toca esparcir su
mensaje. Darlo a conocer.

Mediante este pasaje Pablo nos exhorta a ser fieles en la


proclamación del mensaje de la reconciliación. Vivimos en el
tiempo aceptable. Este es el día de salvación para alguna persona.
271

Te he oído, te he socorrido. Dios oye y Dios socorre. ¿Qué tiene


que oír Dios para socorrernos? Nuestro arrepentimiento y
confesión de fe. Como está escrito Romanos 10.8-10: Mas ¿qué
dice? Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Esta
es la palabra de fe que predicamos: que si confesares con tu boca
que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le
levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se
cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.

He aquí ahora. ¿Recuerdan que cada cosa tiene su tiempo?


¿Quién dice eso? Salomón en su libro el Eclesiastés 3.

Hay tiempo de hablar y de callar. Si no tomamos las decisiones


correctas en el momento apropiado, podemos cometer errores que
tengan terribles consecuencias.

La Palabra de Dios nos muestra la importancia de entender los


tiempos de Dios, en 1Crónicas 12.32 De los hijos de Isacar,
doscientos principales, entendidos en los tiempos, y que sabían lo
que Israel debía hacer, cuyo dicho seguían todos sus hermanos.

Todos los días tomamos decisiones, muchas decisiones. Algunas


sencillas y otras no tanto. Pero la mejor de las decisiones que
debemos tomar en la vida es esta. Decidirnos por Cristo.

Por medio de la venida de Cristo y la obra redentora efectuada por


él, Dios ofrece al mundo su salvación. Con el repetido uso de la
palabra “ahora”, Pablo enfatiza en su predicación la importancia
de tomar una decisión por Cristo.

Hoy es día de salvación. ¿Y mañana, seguirá siéndolo? Desde


luego, hasta que oigamos la trompeta anunciando la llegada de
Cristo a por su Iglesia. La cuestión es si nosotros estaremos aquí
mañana.

Porque, ¿Qué ocurrirá si esta misma noche viene Cristo y aun no


te has decidido? ¿Crees que podrás hacerlo a última hora? Esto es
272

lo que algunos parecen creer. Pero para entonces ya será


demasiado tarde. Por esa razón el apóstol insiste por dos veces:
Ahora. Ahora.

La urgencia de estas palabras se debe a que Dios ha establecido


un tiempo límite para el arrepentimiento. Para nosotros, ese
tiempo comienza en el momento en que escuchamos las buenas
nuevas de salvación, y acaba cuando somos llamados por Dios.

¿Cuántos saben cuándo nacieron? Algunos sólo saben el año.


Otros incluso el día y hasta la hora. Pero, ¿Cuántos saben el
momento en que morirán? Ninguno. ¿No sería una completa
necedad, no aprovechar este tiempo? Más allá de la muerte, ya no
hay salvación.

Ahora. Todos cuantos me escuchan en este momento. Recuerden,


Este es el tiempo aceptable, este es el día de salvación. Si no lo
aprovechan no podrán culpar a nadie más. Es vuestra decisión.

¿Cómo podemos aprovechar el tiempo aceptable, el día de


salvación? Creyendo y predicando el mensaje del evangelio a
quienes no lo conocen. Aprovechemos el tiempo. No en las cosas
del mundo, sino en las eternas.

Si crees te salvas, y si rehúsas creer te condenas. Juan 3.36.

Seamos colaboradores con Cristo. Ahora, no lo dejemos para


mañana.

Si te das cuenta de que no estás aprovechando el tiempo


aceptable, que no estás haciendo la voluntad de Dios, hoy tienes
la oportunidad de hacerlo. Hoy, ahora.

6.3-10. No damos a nadie ninguna ocasión de tropiezo. ¿Creen


que es fácil esto que dice Pablo? De ningún modo. Se requiere un
alto grado de disciplina personal. Pero sobre todo dependemos de
la gracia de Dios, sin la cual, seríamos como el tamo que arrebata
el viento. Salmo 1.4.
273

¿Es fácil? No. ¿Es posible? Sí.

Hay personas con doblez. Que sonríe en la iglesia y ladran en


casa. Creyentes que dan mal testimonio y son tropiezo para otras
personas. Cuando un creyente da mal testimonio no sólo aleja a la
gente de la Iglesia, las aleja de Dios y por consiguiente de su
salvación eterna.

Debemos cuidar nuestro testimonio, porque podemos ser tropiezo


para otros, si no nos conducimos adecuadamente. Y todos
conocemos las Palabras del Señor Jesús que dijo: Y cualquiera
que haga tropezar a alguno de estos pequeños que creen en mí,
mejor le fuera que se le colgase al cuello una piedra de molino de
asno, y que se le hundiese en lo profundo del mar. ¡Ay del mundo
por los tropiezos! porque es necesario que vengan tropiezos, pero
¡ay de aquel hombre por quien viene el tropiezo! Mateo 18.6-7.

Hasta aquí Pablo ha defendido su honorabilidad y la de sus


colaboradores. No hacían nada que pudiera hacer tropezar a otros.
¿Por qué creen que esto es importante?

Porque los ministros del evangelio deben esforzarse en ser


intachables en su conducta, de modo que sean irreprensibles.
Pues, ese es uno de los requisitos bíblicos para el ministerio.
1Timoteo 3.2.

¿Significa eso que somos, o debemos ser, infalibles? De ningún


modo. Ni el Papa lo es, por mucho que insistan. Pero no podemos
dar lugar a las habladurías. Ninguna ofensa, de ninguna manera.

¿Qué se necesita para esto? ¿Cómo podemos evitar el fallo, la


caída, y obtener la victoria? Por medio del poder que Dios da en
Su presencia, y el ejercicio del dominio propio.

¿Cómo podemos obtener el dominio propio? Por medio del


Espíritu Santo, Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía,
sino de poder, de amor y de dominio propio. 2Timoteo 1.7.
274

¿Con qué tiene que ver el dominio propio? Con la disciplina


personal. ¿Es fácil la disciplina personal? Desde luego que no. Es
más fácil dejarse arrastrar por la corriente de este mundo.

¿Cómo puede un cristiano normal conseguir ser disciplinado? La


disciplina personal comienza por pequeñas cosas que nos ayudan
a ejercer el poder que Dios nos ha dado para obtener el dominio
propio. Debemos aprender a usarlo.

Como está escrito en 2Pedro 1.3-7: Como todas las cosas que
pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su
divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó
por su gloria y excelencia, por medio de las cuales nos ha dado
preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a
ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la
corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia;
vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo,
añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento; al
conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la
paciencia, piedad; a la piedad, afecto fraternal; y al afecto
fraternal, amor.

Así que, nos han sido dadas pero se nos exhorta. y debemos poner
diligencia en ello, a practicarlo. Esto es un buen motivo para
ayunar. No de comida, sino de aquello que nos domina. Aquello
que nos afecta y molesta a nuestra relación personal con Dios, o
que puede ser tropiezo para los hermanos.

Ante reto tan grande algunos se desaniman, pero no deben.


Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder,
de amor y de dominio propio. 2Timoteo 1.7.

Siguiendo con el verso 3 ¿Por qué está Pablo tan interesado en no


ofender a nadie? Para que nuestro ministerio no sea vituperado.
Para el apóstol es más importante el ministerio que su propia
persona.
275

Ya el diablo se encargará de que hablen de nosotros sin motivos.


¿Qué pasaría si encima le damos motivos? Acrecentaría la
acusación, y lo que es peor, daría base al vituperio de la obra de
Cristo.

Como está escrito en Mateo 5.11-12: Bienaventurados sois


cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda
clase de mal contra vosotros, mintiendo. Gozaos y alegraos,
porque vuestro galardón es grande en los cielos; porque así
persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros.

Un buen siervo de Dios puede ser instrumento en manos de Dios


para salvar a algunos. Pero ¿Qué puede ser un mal ministro?
Puede ser un buen instrumento en manos del diablo para arrastrar
a muchos a la condenación.

De esto hablaba el martes en la reflexión diaria. Mateo 11.12


Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los
cielos sufre violencia, y los violentos lo arrebatan.

Hay quienes ni entran ni dejan entrar. Así eran los religiosos del
tiempo de Jesús. Un siervo de Dios no debe ser así.

Debemos asegurarnos que todo cuanto creemos, pensamos,


hablamos y hacemos, está colaborando a la edificación del reino
de Dios. ¿Qué es lo contrario a edificar? Destruir.

Todos los que servimos a Dios debemos tener el mismo interés


que Pablo en salvaguardar el ministerio. Personalmente reconozco
que hubo un tiempo, hace muchos años, en que no tenía esto
claro.

Cometí errores que no se esperan en un siervo de Dios. Pero


cuando eres sincero en tu arrepentimiento, Dios te toca y te da
conocimiento espiritual y poder, y todo cambia.
276

Algunos podrán tomar estas palabras mías y usarlas contra mí,


diciendo, está reconociendo que fue pecador, y es verdad. Lo fui,
pero ya no lo soy. Cristo me salvó perdonando todos mis pecados.

Justamente es mediante el reconocimiento de nuestra culpa y


sincero arrepentimiento, que quebrantamos nuestro corazón para
que Dios pueda darnos uno nuevo.

Suya es la gloria, porque suya es también la obra. ¿Cómo


podemos ser íntegros? Cada uno de nosotros debemos ponernos
cada día en las manos de Dios para que nos guarde de todo mal y
del maligno.

4. Antes bien, nos recomendamos en todo como ministros de


Dios. ¿Qué quería decir Pablo con esta frase? Está reforzando lo
que dijo en el verso anterior. Que no daban ocasión de tropiezo.
Que en todo lo que hacían, demostraban que eran verdaderos
ministros de Dios.

Se recomiendan, no tanto como personas, sino como ministros de


Dios. ¿Recuerdan lo que significa la palabra ministro? Como
esclavos de Dios.

Personas conscientes del llamado de Dios a su servicio, y al


servicio de los demás. Pero, el ministerio aporta reputación, fama
y poder ¿No? En realidad, no. Si rechazaron a Cristo, también a
sus ministros. Muchos no apreciarían los esfuerzos de Pablo y sus
colaboradores.

¿Por qué muchos ven el ministerio como una buena oportunidad?


Porque no lo conocen desde dentro.

A continuación Pablo hará una larga lista de circunstancias, en


todas las cuales habían demostrado sobradamente que eran
honrados e íntegros, en su fe personal y ministerio. Cada una de
estas circunstancias que Pablo menciona, tiene una enseñanza
para nuestras vidas.
277

En mucha paciencia. También puede entenderse: en mucha


perseverancia, persistencia, constancia, esperanza. ¿Por qué creen
que es necesario esta cualidad en un siervo de Dios? Sin duda,
porque va a necesitarla.

Paciencia, para soportar; perseverancia, para no desmayar; y


esperanza, para recobrar ánimo.

¿Son pacientes los jefes en el trabajo? Generalmente no. Pero


ellos no tienen que edificar el reino de Dios, sino el suyo propio.
Por eso no son pacientes. Les da igual perder a un trabajador,
piensan que pueden conseguir a otros que los sustituya.

¿Puede un verdadero ministro de Cristo perder almas? De ningún


modo, porque tendremos que rendir cuentas delante del Príncipe
de los pastores, Hebreos 13.17.

Cada alma es insustituible, por esa razón debemos ser pacientes;


muy pacientes. Pablo y sus colaboradores lo fueron. Por eso se
recomendaban como ejemplo en mucha paciencia.

En tribulaciones. ¿Por qué Pablo se recomienda en tribulaciones?


Porque a pesar de ellas, que no fueron pocas, se mantuvo siempre
firme, siempre fiel a Dios y a su ministerio.

2Corintios 1.8-10 A cualquier lugar que llevara el evangelio, tenía


que pasar por muchas tribulaciones. En Pisidia de Antioquía,
Iconio, Listra, Filipos, Tesalónica, Berea, Corinto y Jerusalén.

En cada uno de estos lugares siempre supo que la tribulación le


esperaba, especialmente en su ultimo viaje a Jerusalén, Hechos
20.23.

A los cristianos, como a todo el mundo, no nos gustan las


tribulaciones, aun así, Pablo seguía, como está escrito:
confirmando los ánimos de los discípulos, exhortándoles a que
permaneciesen en la fe, y diciéndoles: Es necesario que a través
de muchas tribulaciones entremos en el reino de Dios.
278

Por eso se recomienda como ejemplo. Un ejemplo a seguir. ¿Te


recomendarías tú en tribulaciones? ¿Cómo actúas cuando lo estás
pasando mal? ¿Te controlas o haces daño a los que te atribulan?
Pablo se recomienda como ejemplo.

En necesidades. Hoy son muchas las personas que se hacen


llamar siervos de Dios y que piensan que un verdadero siervo de
Dios no puede estar en necesidad. Es más, afirman que si está en
necesidad es que está en pecado.

A la luz de lo que enseña aquí el apóstol Pablo, ¿Qué crees de


éstos? ¿Estaba Pablo en continuo pecado? ¿Sería por eso por lo
que pasó por tantas necesidades? Desde luego que no. La
necesidad forma parte del trato de Dios con nuestras vidas.

A veces, Dios permite la necesidad para probar nuestra fe. ¿Has


pasado alguna necesidad por causa de Cristo, por ser cristiano?
¿Cómo saldrías de esa prueba?

En Lucas 8.13-14 Jesús explicando la parábola del Sembrador,


dice: Los de sobre la piedra son los que habiendo oído, reciben la
palabra con gozo; pero éstos no tienen raíces; creen por algún
tiempo, y en el tiempo de la prueba se apartan. La que cayó entre
espinos, éstos son los que oyen, pero yéndose, son ahogados por
los afanes y las riquezas y los placeres de la vida, y no llevan
fruto.

Dos ejemplos que no debemos seguir. Uno tiene que ver con la
prueba y el otro con los afanes, las riquezas y los placeres.
¿Conocen a personas que han pasado por estas experiencias?
¿Lleva fruto alguno de estos? No.

Es necesario que cada uno de nosotros meditemos en nuestros


caminos. ¿Estamos siendo nosotros como alguna de esas
personas?
279

¿Qué hizo Pablo? ¿Qué hacemos nosotros? Pablo no sólo sufrió


necesidades, sino que afirmó que pudo hacerlo porque Cristo le
fortaleció. Filipenses 4.10-13:

En gran manera me gocé en el Señor de que ya al fin habéis


revivido vuestro cuidado de mí; de lo cual también estabais
solícitos, pero os faltaba la oportunidad. No lo digo porque tenga
escasez, pues he aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi
situación. Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y
por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener
hambre, así para tener abundancia como para padecer
necesidad. Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.

¡Cuán mal interpretado es este pasaje! ¿Tiene algo que ver con

El término que se usa en griego significa padecer situaciones


apretadas en las que no hay escapatoria, a menos que Dios haga
un milagro.

Por eso Pablo se recomendaba en las necesidades, porque él las


había sufrido, y las había superado en Cristo.

En angustias.

Lo arriesgaban todo por servir a Dios. En multitud de ocasiones


estuvo en peligros, no sólo de las autoridades judías que le
perseguían, sino que también enfrentó en varias ocasiones
peligros de la naturaleza, calamidades. Naufragó tres veces, una
noche entera estuvo en alta mar, etc.

Sin embargo, Dios le respaldó de todo ello. Cuando Pablo clamó,


le oyó Dios, y lo libró de todas sus angustias. Salmo 9.9; 34.6.

En medio de la angustia no estaremos solos. Dios estará a nuestro


lado. Él suele cumplir lo que promete. ¿Sí o no? Por supuesto.

En azotes.
280

¿Alguno de vosotros ha sido azotado? Yo sí, cuando era pequeño


más de una vez, me llevé unos buenos correazos, y fui azotado
con vara.

Lucas cuenta cómo Pablo y Silas fueron azotados con varas ante
los magistrado romanos de Filipos, Hechos 16.22. ¿Era Pablo un
delincuente para que lo azotaran? Desde luego que no. ¿Por qué
entonces le azotaron? Leamos Hechos 16.16-23.

Y Pablo revela que, en total, los judíos lo azotaron cinco veces y


los romanos lo golpearon con varas otras tres, 2Corintios 11.24-
28.

Por eso Pablo podía decir que había sido azotado más
severamente que cualquier otro.

En cárceles.

¿Alguno de vosotros ha sido encarcelado? ¿Alguno ha visitado


una cárcel? Hoy en día las cárceles no son como entonces. Si
ahora son malas, en aquella época aun era peor.

Lucas relata los detalles del encarcelamiento de Pablo y Silas en


Filipos, Hechos 16.23-34. No tenemos más información de otros
encarcelamientos, aunque Pablo afirma que fue encarcelado
frecuentemente, 2Corintios 11.23.

En tumultos.

¿Sabe lo que es un tumulto? Un jaleo, un alboroto, una revuelta


que debía ser reprimidas por los invasores romanos.

La Palabra de Dios provoca tumultos. La gente incrédula, y los


que hacen negocio con la religión, se soliviantan cuando es
predicada la Palabra de verdad.

La oposición al ministerio de Pablo frecuentemente degeneraba


en disturbios que debían ser reprimidos por las autoridades. Estos
281

desórdenes limitaban la eficacia de Pablo como misionero,


Hechos 19.23-32.

El peor caso de agitación ciudadana ocurrió en Jerusalén, en el


atrio de los gentiles. Allí la muchedumbre intentó matar a Pablo,
pero un comandante romano, con doscientos soldados, impidió
que lo asesinaran, Hechos 21.27-32.

A pesar de todo, y sabiendo Pablo lo que le podía pasar, él no


cesaba de predicar a Cristo.

En trabajos.

Pablo usa una palabra que no se refiere sólo a trabajar, sino a


trabajo pesados, duros, a penalidad, molestia.

¿Tenía Pablo derecho a ser sostenido por la Iglesia? Sí. Así lo


enseñó Cristo Jesús. Como está escrito en 1Corintios 9.14 Así
también ordenó el Señor a los que anuncian el evangelio, que
vivan del evangelio.

Sin embargo, ¿Recibió Pablo salario de ellos? No. ¿Por qué? Por
las circunstancias que existían en la congregación de Corinto, por
amor a la obra, aun teniendo derecho a ser sostenido por la
Iglesia, renunció a ello porque no quería ser tropiezo para nadie.

¿Qué hizo para mantenerse a sí mismo y a sus colaboradores?


Trabajó haciendo tiendas, sin abandonar sus responsabilidades
ministeriales. Hechos 18.1-4; 20.34-35.

Teniendo esto en cuenta nos daremos cuenta de lo duro de su


esfuerzo personal.

El esfuerzo mental, y sobre todo espiritual, con frecuencia resulta


mucho más duro que soportar un trabajo físico. ¿Saben que unas
de las profesiones de mayor riesgo en EEUU es la de psiquiatras y
psicólogos? Dos de las profesiones en las que se da mayor índice
de suicidios. ¿Por qué creen que ocurre esto?
282

Porque reciben continuamente problemas de todo el mundo, lo


cual ejerce una terrible presión sobre ellos. Lo que les produce
una enorme tensión. Especialmente si no pueden ayudar a la
gente, porque no tienen cómo; o porque no pueden deshacerse de
la ansiedad que produce tanto conflictos humanos.

Algo similar está ocurriendo con el ministerio pastoral. El año


pasado se suicidaron cuatro pastores de renombre en EEUU. No
seré yo quien los juzgue, porque no me corresponde a mí hacerlo.

Pero no cabe la menor duda de que el esfuerzo mental y espiritual


que el ministerio produce es inmenso, sobre todo cuando por el
paso del tiempo se va haciendo más difícil.

Pablo escribe que nunca dejó de amonestar a los efesios, noche y


día, con lágrimas, Hechos 20.31.

Por su propio testimonio, sabemos que trabajaba más duro que los
demás apóstoles, 1Corintios 15.10. Aquí, pues, tenemos una
muestra de que el trabajo pesado se refiere a la labor misionera de
Pablo.

Acudir cada día al Señor, nos alivia de nuestras propias cargas y


de todas las que recibimos a diario de los demás. Estoy
convencido de que esa es la clave para mantenerse firme en el
ministerio y no desmayar. Sin duda, Pablo es un buen ejemplo a
seguir.

En desvelos.

¿Qué son desvelos? Es velar en la noche. Permanecer despierto,


alerta, ocupado en alguna cosa, cuando todos los demás duermen.

A todo el tiempo que dedicaba al trabajo de hacer tiendas y al


ministerio, hay que sumarle el del estudio personal, el de la
oración, y el de la preocupación por las iglesias.
283

Posiblemente quitado de las preciosas horas nocturnas que


necesitaba para descansar.

Pablo seguía el ejemplo de Jesús, cuando dedicaba la noche y la


madrugada para orar, Marcos 1.35; Lucas 6.12. Pablo demostraba
que era un luchador de oración, que buscaba al Señor en las
tranquilas horas de la noche.

En ocasiones, he estado hasta altas horas de la noche


respondiendo correos, llenos de preguntas y consultas de personas
que no tienen quien les responda. También respondiendo
comentarios que las gentes hace a nuestros más de 430 vídeos que
tenemos en YouTube y en nuestra web.

Trabajo que no se ve, pero que los pastores hacemos por amor a la
obra de Dios.

En ayunos.

En ocasiones, ayunamos para ejercitar nuestra autodisciplina.


Para tener un tiempo con el Señor, o para abstenernos de alguna
cosa que nos domina. Pero no todos los ayunos son por decisión
propia.

Pablo escribe que frecuentemente no tenía con qué cubrir sus


necesidades básicas de comida y bebida, 11.27. En otro lugar
revela que sabía lo que era pasar hambre unas veces, y estar en la
abundancia otras, Filipenses 4.12; 1Corintios 4.11. Por lo cual le
tocó ayunar en muchas ocasiones, 11.27.

Bien, los versículos anteriores cuentan nueve ocasiones difíciles


de la vida de Pablo, ahora continúa con una lista de ocho regalos
divinos.

En pureza. Esta palabra ocurre sólo aquí en el Nuevo Testamento.


No obstante, el concepto no deja de ser familiar, ya que el
adjetivo hagnos (puro, sincero) aparece ocho veces en el Nuevo
Testamento.
284

Este vocablo se refiere a la pureza en el sentido de las relaciones


sexuales y morales, y también en el de la conciencia personal.

Una persona que es pura muestra inocencia e integridad (véase


7:11; 11:2; Fil. 4:8).

Así, pues, Pablo se está poniendo como ejemplo en pureza, en


limpieza, en santidad.

En ciencia. Esto se refiere al conocimiento. No se refiere al


conocimiento intelectual que envanece, 1Corintios 8.1. ¿A qué
conocimiento se refiere Pablo? Está pensando en el conocimiento
de Dios y de la salvación por Jesucristo. Al conocimiento de la
Palabra de Dios. 2Timoteo 3.15.

Veamos el 4.6 Antes Pablo había escrito: Porque Dios, que


mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz, es el que
resplandeció en nuestros corazones, para iluminación del
conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo.

El conocimiento espiritual que tenemos de Dios es el que Él nos


ha revelado en la vida y obra de Jesús. Pablo fue bendecido con el
don del conocimiento, de manera que pudiera compartir con los
corintios la profunda visión que tenía del evangelio.

¿Tienes tú ese conocimiento? Espero que sí. Díganme si es


verdadero o falso. Yo les diré una frase y vosotros me respondéis
lo que pensáis: El conocimiento de la verdad nos guarda de la
mentira. ¿Verdadero o falso? Sin duda, verdadero.

Porque si viene alguno predicando a otro Jesús que el que os


hemos predicado, o si recibís otro espíritu que el que habéis
recibido, u otro evangelio que el que habéis aceptado, bien lo
toleráis; y pienso que en nada he sido inferior a aquellos grandes
apóstoles. Pues aunque sea tosco en la palabra, no lo soy en el
conocimiento; en todo y por todo os lo hemos demostrado. 11.4-
6.
285

Por tanto, Pablo se pone también como ejemplo en ciencia.

Seguimos estudiando la defensa que Pablo hace de su integridad y


la de sus colaboradores. Él se está recomendando como ejemplo
en tribulaciones, y ahora también en virtudes. Seguimos donde lo
dejamos, en el verso 6.

En longanimidad. Aquí significa grandeza, constancia de ánimo


en las adversidades, benignidad, clemencia, tolerancia, y
generosidad, en definitiva tiene que ver con la misericordia.
¿Necesitamos estas cosas? ¿Necesitamos ese fruto del Espíritu
Santo? Sin duda.

La longanimidad puede describirse como el autocontrol o


dominio propio que nos impide reaccionar sin pensar; tomar
venganza sin pensarlo dos veces. Es la fortaleza que permite
soportar las injusticias sin llegar a sentir odio.

Los autores del Antiguo Testamento describen a Dios como lento


para la ira, grande en misericordia. Éxodo 34.6; Números 14.18;
Sal. 103.8.

Una de las características del amor, es la paciencia, dice Pablo en


1Corintios 13.4, 7 El amor es sufrido, es benigno; el amor no
tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; Todo lo
sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.

La paciencia, junto con el amor y la bondad, pertenecen a los


frutos del Espíritu Santo, Gálatas 5.22 y tienen que ver con la
longanimidad.

Pablo habla de la longanimidad de Dios, Romanos 2.4. En el


pasaje de hoy, Pablo se recomienda a sí mismo y a sus
colaboradores como ejemplo de longanimidad. ¿Podríamos hacer
nosotros lo mismo?
286

En 2Timoteo 3.1-10 Pablo hace una comparativa entre los


hombres de los últimos tiempos y él mismo y Timoteo.

Si aun no podemos recomendarnos a nosotros mismos como


ejemplo de longanimidad, debiéramos hacer algo al respecto.
Pues, la Escritura está escrita para exhortarnos a ser mejores cada
día.

En bondad. Esto tiene que ver con la misericordia, el bien, lo


bueno, lo correcto, la tolerancia y la paciencia. Todas estas, son
cualidades que podemos encontrar en Dios, para que nos
arrepintamos, Romanos 2.4; comparar con Romanos 11.22.

La palabra griega jrestotes que significa bondad incluye las


cualidades de tranquilidad, simpatía y amabilidad.

¿Con quien prefieres encontrarte, con gente tranquila, simpática y


amable, o todo lo contrario?

Cuando en nuestras vidas diarias, ejercitamos el fruto de la


bondad, la gente enseguida nos acepta bien y se siente atraída por
nuestro agradable temperamento.

David proclama y exalta la inmensa bondad de Dios. Salmo


145.7.

Sin embargo, como está escrito: Muchos hombres proclaman


cada uno su propia bondad, Pero hombre de verdad, ¿quién lo
hallará? Proverbios 20.6.

También la bondad es un fruto del Espíritu Santo, Gálatas 5.22.


Por esa razón Pablo nos exhorta: Vestíos, pues, como escogidos
de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de
benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia;
Colosenses 3.12.

¿Es posible que tengamos que orar más para que Dios nos
conceda un carácter como el de Pablo? Sin duda.
287

En el Espíritu Santo. El Espíritu Santo, es la fuente de toda buena


dádiva o don, 1Corintios 12.11.

El apóstol ha mencionado algunos de los frutos del Espíritu, que


ha relacionado en otro lugar: amor, paciencia, bondad; Gálatas
5.22-23, Efesios 5.9.

En el Espíritu Santo. Ahora, Pablo no menciona otro fruto del


Espíritu, sino al propio Espíritu Santo de Dios.

¿Qué significa recomendarse en el Espíritu Santo? Significa ser


ejemplo en docilidad a su voz, obediencia y sujección. Ejemplo
en andar en el Espíritu.

Pablo sabe que el Espíritu de Dios lo dirige en la obra de su


ministerio apostólico, como él mismo escribió: Porque todos los
que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios.
Romanos 8.14.

¿Eres ejemplo en dejarte guiar por el Espíritu Santo? ¿Andas en el


Espíritu o en la carne?

Como está escrito: Si vivimos por el Espíritu, andemos también


por el Espíritu. Gálatas 5.25.

En amor sincero. ¿Es lo mismo amor que amor sincero? Desde


luego que no. ¿Cuál es la diferencia? El amor puede ser genuino o
imitado.

¿Por qué le añade el término sincero, genuino, sin hipocresía, no


fingido? Porque el amor puede imitarse, fingirse. Como está
escrito: El amor sea sin fingimiento. Aborreced lo malo, seguid lo
bueno.

Al añadir sincero, revela la verdadera cualidad de su amor;


veamos 1Pedro 1.22 Habiendo purificado vuestras almas por la
obediencia a la verdad, mediante el Espíritu, para el amor
288

fraternal no fingido, amaos unos a otros entrañablemente, de


corazón puro;

El amor a Dios siempre debe ser genuino, no fingido; lo mismo


que la fe, 1Timoteo 1.5-6 Pues el propósito de este mandamiento
es el amor nacido de corazón limpio, y de buena conciencia, y de
fe no fingida, 6de las cuales cosas desviándose algunos, se
apartaron a vana palabrería, 7queriendo ser doctores de la ley,
sin entender ni lo que hablan ni lo que afirman.

¿Cuáles son las consecuencias de fingir el amor o la fe? Desviarse


y acabar como aquellos religiosos de la época de Pablo cuyas
palabras estaban vacías de verdad.

Cuando falta la autenticidad, virtudes tales como el amor y la fe


se convierten en palabras vacías, inútiles, carentes de sentido y
contradicen lo que pretenden ser.

El amor auténtico hacia nuestros semejantes es el cumplimiento


de la ley real, Santiago 2.8-9 Si en verdad cumplís la ley real,
conforme a la Escritura: Amarás a tu prójimo como a ti mismo,
bien hacéis; 9pero si hacéis acepción de personas, cometéis
pecado, y quedáis convictos por la ley como transgresores.

Pablo ubica al amor como el fruto espiritual más preeminente que


el Santo Espíritu Santo otorga a los creyentes, 1Corintios 13;
Gálatas 5.22.

Pablo sigue poniéndose de ejemplo, recomendándose a los demás.

7. En palabra de verdad. Los traductores entienden que el


significado de esta frase es en decir la verdad o en proclamar la
verdad.

¿Está Pablo defendiendo su sinceridad para convencer a sus


lectores de que es digno de confianza? ¿O se está refiriendo a su
ministerio, que para él consiste en la fiel predicación del
evangelio de Cristo?
289

En primer lugar, esta frase aparece en otros cuatro lugares, en


todos ellos con referencia a la predicación: Efesios 1.13;
Colosenses 1.5; 2Timoteo 2.15; Santiago 1.18.

En segundo lugar, los cristianos de la iglesia primitiva sabían que


esta conocidísima expresión se refería al ministerio de la Palabra.
Por último, el contexto inmediato del discurso de Pablo es la
defensa de su ministerio y su persona, así como de sus
colaboradores. 6.3.

Cuando hablas ¿Comunicas verdad? ¿Te aseguras de que lo que


dices es conforme a la verdad de Dios?

Pablo no hablaba de su propia sabiduría, sino lo que había


recibido. Gálatas 1.11-12 Mas os hago saber, hermanos, que el
evangelio anunciado por mí, no es según hombre; 12pues yo ni lo
recibí ni lo aprendí de hombre alguno, sino por revelación de
Jesucristo.

Pablo se recomienda en palabra de verdad. Como está escrito: Si


alguno habla, hable conforme a las palabras de Dios; si alguno
ministra, ministre conforme al poder que Dios da, para que en
todo sea Dios glorificado por Jesucristo, a quien pertenecen la
gloria y el imperio por los siglos de los siglos. Amén. 1Pedro
4.11.

Muchos hablan palabras que no están en la Biblia. Hay incluso


quienes citan algún refrán popular creyendo que es Palabra de
Dios.

Yo quisiera hacer un llamado, especialmente a todos aquellos que


sirven a Dios en el ministerio de la Palabra. Darles un consejo
desde la experiencia. Quiero decirles: Asegúrate de cuánta verdad
hay en lo que comunicas.
290

Cada día recibimos cartas de personas que descubren que no les


están predicando la verdad de la Palabra de Dios, y nos piden
ayuda.

Actualmente en la mayoría de las congregaciones se predica más


psicología humana y autoayuda que la Biblia. Como está escrito:
Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro
evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema.
9
Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os
predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema.
Gálatas 1.8-9.

Asegúrate de que lo que crees es verdad. Porque todos enseñamos


lo que nos enseñaron, eso justamente es lo que hacen los niños.
Pero como Pablo escribió, dejemos lo que es de niños.

No tenemos excusas. Todos contamos con la Palabra de Dios y, si


verdaderamente eres discípulo de Cristo, cuentas también con el
Espíritu de Dios. Permite que Él te dirija en tu estudio personal de
las Escrituras Sagradas.

No sigas transmitiendo lo que te enseñaron a menos que te hayas


asegurado de que es cien por cien verdad.

A todos los creyentes que nos ven y escuchan por las red, decirles
igualmente, asegúrate de que lo que te están enseñando es verdad.
¿Es pecado poner en duda lo que oyes? Desde luego que no.
Hechos 17.10-11 lo demuestra.

Es pecado transmitir algo que no estás seguro de que sea verdad.


Pues, puedes estar haciendo la labor de un falso maestro. O un
falso cristiano.

En poder de Dios. Es interesante notar que el concepto palabra


refiriéndose al evangelio, y poder, a veces aparecen juntos en las
epístolas de Pablo, en no pocos pasajes: 1Corintios 2.4;
1Tesalonicenses 1.5; Romanos 1.16.
291

Dios manifiesta su poder en el ministerio de Pablo, al valerse de


un hombre poco llamativo, y físicamente débil. 1Corintios 2.3-5;
2Corintios 4.7; 10.10; 11.6; 12.9-10).

Denney, en Segunda de Corintios, p. 232, dice: «De todos los


hombres de este mundo, él era el de aspecto más débil, el más
apaleado, el más cargado y el más deprimido; no obstante, no
hubo nadie como él que mostrara tener en su vida una fuente
poderosa de fortaleza y bondad».

7. Con armas. ¿Quiénes son los que usan armas? Los soldados.

Pablo evoca la imagen de un soldado con armas en ambas manos.


¿Por qué? Porque está inmerso en una batalla, que sabe que es a
muerte.

Pablo es consciente de estar en guerra, pero no con la gente, y


mucho menos con los corintios; ni tan siquiera contra los falsos
apóstoles que le injuriaban en 2Corinto. 11.13-14.

La guerra que él enfrenta es espiritual contra los poderes de las


tinieblas. Efesios 6.12. Pablo lo sabe bien. Aun cuando tiene
delante a personas que le hacen la guerra, a él no se le escapa
quién tira de los hilos.

¿Somos conscientes de que también nosotros estamos en guerra?


¿Con qué armas peleamos, con las carnales o las espirituales?
Debemos tomar conciencia y usar nuestras armas espirituales.

Una guerra que ha de pelearse con armas espirituales, como les


dirá más adelante: porque las armas de nuestra milicia no son
carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de
fortalezas, 5derribando argumentos y toda altivez que se levanta
contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo
pensamiento a la obediencia a Cristo, 6y estando prontos para
castigar toda desobediencia, cuando vuestra obediencia sea
perfecta. 10.4-6.
292

Este es un pasaje maravilloso en el que se nos muestra la guerra y


cómo ganarla; las armas y cómo usarlas.

¿Qué claves destacarías de este pasaje? La importancia de la


preparación en el conocimiento de la verdad, para combatir los
falsos argumentos, y el control de lo que pensamos, que sea
conforme a la voluntad de Dios.

Él es consciente de que está en juego su honra, su fama. ¿Por qué


dice Pablo estas palabras? Porque él y sus colaboradores estaban
siendo injustamente acusados de engañadores, de impostores,
pero siendo hombres de verdad.

Cuando la disposición, la sinceridad y la lealtad son reconocidas y


apreciadas, el resultado es honor y buena fama. Pero, ¿Qué ocurre
cuando la gente está mal informada y es malevolente o
manipulada? Sólo se recibe injusta ofensa y atropellos.

¿Obtuvo el Señor Jesús el aprecio de todos? Ni el mismo Señor


Jesús obtuvo el aprecio de todos. Recuerden como hablaron de él
como de un impostor, Mateo 27.62-63 Al día siguiente, que es
después de la preparación, se reunieron los principales
sacerdotes y los fariseos ante Pilato, 63diciendo: Señor, nos
acordamos que aquel engañador dijo, viviendo aún: Después de
tres días resucitaré.

En este pasaje ponen a Jesús de engañador, de mentiroso.

Por esta razón, como Jesús mismo dijo y así está escrito: De
cierto, de cierto os digo: El siervo no es mayor que su señor, ni el
enviado es mayor que el que le envió. Juan 13.16.

Así, que, ¿Qué debemos esperar todos los que servimos a Dios?
Exactamente eso. Obtendremos apoyo de algunos y el
menosprecio de otros. Porque el siervo no es mayor que su Señor.

Cada una de estas cosas fueron acusaciones que el apóstol y sus


colaboradores sufrieron por amor a Dios y al ministerio, pero el
293

carácter impecable del apóstol y sus colaboradores desmentía con


absoluta claridad tales acusaciones.

9. Como desconocidos. La palabra “como” especifica que lo que


viene a continuación es una metáfora. Es decir, va a usar un
lenguaje figurado.

A Pablo le acusaban de ser un don nadie, de no ser conocido, de


no tener autoridad apostólica; pero los corintios le conocían
perfectamente. Nadie sino él les había predicado el evangelio en
el que habían sido engendrados a la fe. 1Corintios 4.15.

¿Cómo te sientes cuando alguien que te conoce perfectamente te


trata como si no te conociera? Es triste, y duele.

Uno de los mayores pecados que practican algunos grupos que se


hacen llamar cristianos es el menosprecio de aquellos que por
años formaron parte de ellos, y por alguna causa dejaron el grupo.
Los tratan como desconocidos. Algunos, peor aún, como
extraños, o enemigos.

¿Creen que esto debe ser así? Desde luego que no. ¿Por qué se
produce? Por la falta de verdadero amor en esos grupos. El amor
se finge. Se da, de manera condicional: Mientras seas parte del
grupo.

1Pedro 1.22 Habiendo purificado vuestras almas por la


obediencia a la verdad, mediante el Espíritu, para el amor
fraternal no fingido, amaos unos a otros entrañablemente, de
corazón puro;

Si de verdad hemos nacido de nuevo hemos sido capacitados para


amar sin fingimiento, entrañablemente, de corazón puro.

A la luz de Juan 13.34-35 ¿Es sincero el amor que se da


condicionalmente? Por supuesto que no. ¿Debemos los cristianos
actuar de ese modo? Desde luego que no. Actuar así es pecado y
294

no agrada a Dios, quien nos amó incondicionalmente, y nos dijo


que nos amásemos los unos a los otros, como Él nos ama.

Quienes actúan de ese modo hipócrita, debe conocer lo que Juan


escribió en 1Juan 4.20-21 Si alguno dice: Yo amo a Dios, y
aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a su
hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no
ha visto? 21Y nosotros tenemos este mandamiento de él: El que
ama a Dios, ame también a su hermano.

Pero bien conocidos. A Pablo le quedaba la esperanza de que en


verdad los corintios le conocían. Pero aunque actuaran como si no
lo conocieran, Pablo sabía que era bien conocido de Dios.

Muchos son bien conocidos de las gentes, aunque lo


verdaderamente importante es ser conocidos de Dios.

¿Recuerdan las palabras del Señor Jesús en Mateo 7.22-23?


Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en
tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu
nombre hicimos muchos milagros? 23Y entonces les declararé:
Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad.

¿Quiere esto decir que Jesús no sabía quiénes eran? De ningún


modo. Jesús sabe quienes somos todos y cada uno de nosotros.
Pero les estaba diciendo que no les reconocía como discípulos ni
siervos suyos.

Nada más tristes que vivir creyendo que mantienes una relación
con Dios y que el Señor te responda de esa manera.

Como moribundos. Recuerdo que la palabra como, siempre indica


que lo que viene a continuación es?... Una metáfora. Es decir, no
se debe interpretar literalmente.

¿Estaba Pablo muriéndose? Desde luego que no. Pero, casi


siempre estaba a un paso de la muerte por amor de Cristo. Sin
embargo seguía vivo. El poder de Dios que levantó de los muertos
295

a Jesús, libró a Pablo de una muerte prematura, no una vez, sino


muchas.

Como si se burlase de sus acusadores, les dice: Mas he aquí que


vivimos. Seguimos vivos. Como si citase las palabras del salmista:
No moriré, sino que viviré, Y contaré las obras de JAH. Salmo
118.17.

Por eso pudo escribir en Romanos 8.11: Y si el Espíritu de aquel


que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que
levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros
cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros.

¿Tienes tu la misma fe que tenía Pablo? Quiera Dios que así sea.

Como castigados. Una nueva metáfora. Una vez más parece citar
al Salmista: Me castigó gravemente JAH, Mas no me entregó a la
muerte. Salmo 118.18.

¿Estaba siendo castigado Pablo y sus colaboradores? No. Pero lo


pareciera, por cómo lo trataban. ¿Te has sentido así alguna vez?
No es agradable. Especialmente si no hay motivos.

Mas no muertos. El peor castigo de entonces era la muerte. Pablo


aclara que ellos aun no estaban muertos. Así que no han sido
castigados realmente. Como posiblemente le estaban acusando
aquellos falsos apóstoles que habían llegado a Corinto y que
batallaban contra él.

10. Como entristecidos. Sin duda, tenían motivos para sentir


tristeza. Es posible que sus acusadores hablaran mal de ellos por
eso. Pero Pablo responde, más siempre gozosos.

Porque el gozo del Señor es nuestra fortaleza.

Como pueden ver, siempre la primera parte de estas frases que


usa el apóstol tiene que ver con la manera en que los demás
296

estaban viendo su ministerio. La segunda, por el contrario, tiene


que ver con la manera en como lo veía el mismo Pablo.

Como pobres. Los pobres siempre fueron menospreciados. Los


judíos, como muchos equivocados hoy, asociaban la pobreza a la
falta de bendición de Dios. Así como la riqueza a la bendición.

Sin embargo, como muchas veces he dicho, las más grandes


fortunas están en manos de gente que son cualquier cosa menos
agradable a los ojos de Dios.

¿Crees que la riqueza fruto del tráfico de trata, o drogas es una


bendición? Desde luego que no. Sin embargo, hay grandes
fortunas por esos motivos.

¿Creen que la esclavitud de los niños en países subdesarrollados,


que ha hecho multimillonarios a algunos magnates de la industria
es bendición de Dios? Sería absurdo mantener ese argumento. Sin
embargo, aun hoy muchos siguen relacionando la prosperidad
económica a la bendición de Dios, y la pobreza a la falta de
bendición.

Hoy en día, muchos “cristianos” están obsesionados con el tener.


Con la prosperidad y la riqueza. ¿Por qué creen que puede estar
pasando esto? Por los falsos apóstoles y pastores, que predican
falsas doctrinas, como el evangelio de la prosperidad.

Mas enriqueciendo a muchos. Quizás no tenía una gran fortuna,


porque todo cuanto tenía lo había tenido por basura por amor de
Cristo, Filipenses 3.8. Sin embargo, fue promotor y portador de
una generosa ofrenda que ayudó y alivió a muchos pobres de
Jerusalén.

Pero sobre todo, enriqueció a muchos con algo mejor que el oro y
la plata, ¿Saben qué es? La fe en Cristo Jesús que les convertiría
en hijos de Dios, y si hijos, también herederos. Herederos de Dios
y coherederos con Cristo. Romanos 8.17.
297

Como no teniendo nada. Pablo sigue poniendo contrastes con los


cuales enfrenta las acusaciones de sus detractores.

Aquí Pablo quiere llevar su pobreza al máximo. Porque aun los


pobres tienen algo que consideran de valor. Sin embargo, él
afirma: como no teniendo nada. Mas poseyéndolo todo.

Porque el que está en Cristo, sabe que está completo en Él.


Colosenses 2.10.

¿Te has parado a pensar en el valor que le das a las cosas, al


tener? Muchos no están en el evangelio de la prosperidad, pero
son gente codiciosa que aman tener. Trabajan más de lo
necesario. Nunca están conformes con lo que tienen. Siempre
quieren más.

Quizás no crean en la prosperidad como bendición de Dios. Pero


creen en la prosperidad como fruto de su propio esfuerzo. Lo cual
les lleva a la codicia.

Recuerden las palabras de Pablo a Timoteo: porque nada hemos


traído a este mundo, y sin duda nada podremos sacar. 8Así que,
teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto. 9Porque
los que quieren enriquecerse caen en tentación y lazo, y en
muchas codicias necias y dañosas, que hunden a los hombres en
destrucción y perdición; 10porque raíz de todos los males es el
amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la
fe, y fueron traspasados de muchos dolores. 1Timoteo 6.7-10.

Quienes no creen en Dios ni tienen a Jesús en sus corazones,


jamás entenderán como un siervo de Dios puede sufrir tanto como
Pablo y aun así seguir adelante con su ministerio.

Más fácil sería darse por vencido y dedicarse a otro trabajo que
requiera menos esfuerzos y mejor pagado.

¿Por qué no nos tomamos un rato para comparar nuestra vida


cristiana con la de Pablo? No es que todos tengamos que ser
298

apóstoles, ni tener el ministerio de Pablo, pero ¿No es su vida un


auténtico ejemplo de entrega y consagración a Dios?

¿Lo pasas bien o sufres penalidades como buen soldado de


Jesucristo? 2Timoteo 2.3.

¿Hay alguna cosa en su vida que sea de tropiezo, o puedes decir


como Pablo “nos recomendamos en todo como ministros de
Dios”?

11-13. Quiero que lo lean detenidamente y me digáis qué pensáis


que Pablo les está diciendo a los corintios con estas palabras.

Pablo usa dos imágenes para ilustrar su actitud para con los
corintios: la boca y el corazón.

Hay quien sólo habla con la boca, Pablo les está diciendo aquí
que les ha abierto la boca, pero también ensanchado el corazón.

¿A qué se refiere Pablo con esta frase? A la sinceridad del apóstol


y sus colaboradores, y el amor que siempre les han mostrado a los
corintios. 2.4.

Veamos 2Corintios 7.2-3 Admitidnos: a nadie hemos agraviado,


a nadie hemos corrompido, a nadie hemos engañado. 3No lo digo
para condenaros; pues ya he dicho antes que estáis en nuestro
corazón, para morir y para vivir juntamente.

Pablo no era de los que se aprovechan de la Iglesia, no los trataba


como si fuera su amo, sino como si fuera su padre. Pablo estaba
totalmente entregado a los corintios. Su principal preocupación
eran ellos y no él mismo.

Los corintios, lejos de actuar como Pablo, habían cerrado sus


corazones para con él y sus colaboradores. Ya estaban siguiendo a
otros maestros. Por esa razón los acusa de falta de sinceridad.
299

12. Este versículo podría ser más fácil de entender si realizamos


una paráfrasis del mismo. ¿Cómo lo diríais vosotros? ¿Cómo
podríais expresar esta misma idea de otra manera que se
entendiera mejor?

Por ejemplo: “Nosotros no hemos sido estrechos para vosotros.


Pero vosotros sí lo habéis sido para nosotros”.

“Nosotros os hemos amado; pero vosotros, os hacéis de rogar”.

Pablo y sus colaboradores habían amado a los corintios y


esperaban que hubieran respondido de la misma manera. Pero es
evidente que no fue así. Aun así, el apóstol les dice que aun tiene
suficiente espacio en su corazón para ellos, porque los ama.

Les está invitando a que abran sus corazones como él y sus


colaboradores abrieron el suyo.

La Traducción en Lenguaje Actual dice: Nosotros los amamos


mucho, pero ustedes no nos corresponden con el mismo amor.

La Nueva Traducción Viviente dice: No hay falta de amor de


nuestra parte, pero ustedes nos han negado su amor.

Al parecer, los acusadores de Pablo había tenido éxito al poner el


corazón de los corintios contra el apóstol y sus colaboradores. Los
corintios habían cerrado sus corazones para con ellos.

¿No es sorprendente que aun así, en medio del rechazo de sus


discípulos, Pablo siga amándoles? ¿Qué ejemplo creen que
debemos seguir el de los corintios o el de Pablo? Ese es el
ejemplo que debemos seguir, el del apóstol.

13. Pablo, hablándoles y exhortándoles como a hijos, les está


exigiendo la respuesta correcta. Debieran amarle como él les ama.
Corresponderle del mismo modo.
300

14-18. Este pasaje revierte de un interés especial que requiere de


mayor detenimiento. Si tuviésemos que resumirlo ¿Cómo
podríamos hacerlo? Por ejemplo diciendo: Sed santos, apartaos
para Dios. Aquí se trata de santidad.

¿Qué significa santidad? Apartarse para Dios. ¿De qué debemos


apartarnos? De todo lo que desagrade a Dios.

Cuando Dios escogió a Israel, les dijo en Deuteronomio 7.6:


Porque tú eres pueblo santo para Jehová tu Dios; Jehová tu Dios
te ha escogido para serle un pueblo especial, más que todos los
pueblos que están sobre la tierra.

Sabemos por la historia bíblica que Israel le falló a Dios. Por eso
Dios escogió otro pueblo. ¿Cómo se llama el nuevo pueblo
escogido por Dios? ¿Colombia, Venezuela, España? La Iglesia.

Por eso Pedro escribió: Mas vosotros sois linaje escogido, real
sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que
anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su
luz admirable; vosotros que en otro tiempo no erais pueblo, pero
que ahora sois pueblo de Dios; que en otro tiempo no habíais
alcanzado misericordia, pero ahora habéis alcanzado
misericordia. 1Pedro 2.9-10.

¿Qué significa adquirido? Quiere decir que le pertenecemos.


Somos de su posesión, de su propiedad. Por esta razón Él tiene
derecho a decirnos cómo desea que vivamos. Toda la Biblia nos
muestra el estilo de vida que Dios desea para su Iglesia.

Desgraciadamente, muchas congregaciones están más interesadas


en agradar a la gente que en agradar a Dios. Ya no se canta para
alabar a Dios, ahora se canta para distraer a la gente. Ya no se
predica para conformar a los hombres a la Palabra de Dios, sino
que se conforma la Palabra de Dios a los hombres.

Fíjense en lo que dice Pablo en 1Timoteo 6.3-5 Si alguno enseña


otra cosa, y no se conforma a las sanas palabras de nuestro
301

Señor Jesucristo, y a la doctrina que es conforme a la piedad,


4
está envanecido, nada sabe, y delira acerca de cuestiones y
contiendas de palabras, de las cuales nacen envidias, pleitos,
blasfemias, malas sospechas, 5disputas necias de hombres
corruptos de entendimiento y privados de la verdad, que toman la
piedad como fuente de ganancia; apártate de los tales.

Hoy respondí un correo en el que una hermana, cuyo nombre no


diré, me decía que su pastor es una persona con muy mal carácter
y que le gusta gritar, ofender y humillar públicamente a las
personas; Que ese pastor les había dicho que no pueden
marcharse de ese grupo porque estarían en rebeldía y además,
Dios les había dado una visión de que ese grupo es el arca de Noé
y sólo quienes estén ahí serán salvos.

Esta hermana temía seriamente que ofenderían a Dios si se


marchaban. Por eso pedía consejo. Le aconsejé que se alejara de
ese sectario.

¿Qué dice Pablo aquí? Apártate de los tales. Aquí está implícita la
doctrina dela separación, de la que no hace mucho tiempo les
prediqué.

No os unáis en yugo desigual con los incrédulos. ¿Cuántas veces


han oído este pasaje exhortando a los jóvenes a no buscar pareja
entre los incrédulos?

Esta aplicación es correcta, porque se entendía el matrimonio


como poner a dos personas bajo un mismo yugo. Por este motivo,
aun cuando el matrimonio terminaba con la muerte del marido, si
la viuda quisiera volver a casarse debía ser “en el Señor”,
1Corintios 7.39.

También puede ser aplicado a los negocios. Pues, del mismo


modo, dos personas que se asocian en los negocios se están
poniendo bajo un mismo yugo.
302

Sin embargo, este pasaje no se refiere ni al matrimonio ni a los


negocios, sino a la fe y la relación con Dios.

Aunque podemos aplicarlo a todas aquellas otras cosas que


tengan relación con unirse un creyente y un incrédulo.

Unirse a un incrédulo es ser infiel a Dios. Romper el pacto que


tenemos con Él. Pues, los cristianos somos de Él, le
pertenecemos; mientras que los incrédulos son paganos que no
sirven al Señor. 1Corintios 6.20; 7.23.

Porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo. 17Y si


invocáis por Padre a aquel que sin acepción de personas juzga
según la obra de cada uno, conducíos en temor todo el tiempo de
vuestra peregrinación; 18sabiendo que fuisteis rescatados de
vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros
padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, 19sino con la
sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin
contaminación. 1Pedro 1.16-19.

Con este pasaje de 2Corintios 6.14-18, Dios deja bien claro que
no ve con buenos ojos las mezclas. No le agradan las fusiones.
Por esa razón, hay varios pasajes en el AT que, como este,
exhortan a la separación de las cosas consideradas puras de las
impuras.

Levítico 19.19 Mis estatutos guardarás. No harás ayuntar tu


ganado con animales de otra especie; tu campo no sembrarás con
mezcla de semillas, y no te pondrás vestidos con mezcla de hilos.

Es evidente que algunas de estas prohibiciones, tan sólo tenían el


objetivo de hacer respetar la idea de que no estaba bien mezclar lo
bueno con lo malo. Por supuesto, ya no estamos bajo la ley, pero
debemos tener en cuenta la enseñanza que está encerrada en estos
pasajes. Enseñanza que tienen que ver no tanto con la letra, sino
el Espíritu de la misma.
303

Como estás escrito en Isaías 52.11: Apartaos, apartaos, salid de


ahí, no toquéis cosa inmunda; salid de en medio de ella;
purificaos los que lleváis los utensilios de Jehová.

Pablo habla de compañerismo. La justicia y la injusticia no


pueden caminar juntas de la mano. Antes, sin fe y sin Dios,
caminábamos en la injusticia en el pecado y la maldad.

Como dice Pablo en Romanos 6.17-19 Pero gracias a Dios, que


aunque erais esclavos del pecado, habéis obedecido de corazón a
aquella forma de doctrina a la cual fuisteis entregados; 18y
libertados del pecado, vinisteis a ser siervos de la justicia.
19
Hablo como humano, por vuestra humana debilidad; que así
como para iniquidad presentasteis vuestros miembros para servir
a la inmundicia y a la iniquidad, así ahora para santificación
presentad vuestros miembros para servir a la justicia.

Por esta razón, porque hemos sido justificados por fe en Jesús,


como afirma Pablo en Romanos 5.1, debemos ser capaces de
discernir y diferenciar lo justo de lo injusto, lo bueno de lo malo.

No debemos asociarnos con quienes practican la maldad. Nuestra


asociación es con Cristo, somos llamados a permanecer en Él,
¿Cómo podríamos también estar asociados con quienes practican
la maldad y la injusticia?

Salmo 45.7 Has amado la justicia y aborrecido la maldad; Por


tanto, te ungió Dios, el Dios tuyo, Con óleo de alegría más que a
tus compañeros.

Este pasaje es refrendado en el Nuevo Testamento, en Hebreos


1.9 Has amado la justicia, y aborrecido la maldad, Por lo cual te
ungió Dios, el Dios tuyo, Con óleo de alegría más que a tus
compañeros.

La justicia es la norma en el reino de Dios, ¿Le pertenece la


maldad también? Desde luego que no. La maldad no es obra de
Dios, sino de… Satanás.
304

Por tanto, ¿Cómo debemos responder la pregunta de Pablo: qué


compañerismo tiene la justicia con la injusticia? Nada
absolutamente.

¿Y qué comunión la luz con las tinieblas? Tampoco ninguna. La


luz y las tinieblas tampoco pueden estar juntas; o hay tinieblas, o
hay luz.

1Juan 1.5-7 Este es el mensaje que hemos oído de él, y os


anunciamos: Dios es luz, y no hay ningunas tinieblas en él. 6Si
decimos que tenemos comunión con él, y andamos en tinieblas,
mentimos, y no practicamos la verdad; 7pero si andamos en luz,
como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la
sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado.

¿No les parece que hay muchos mentirosos por ahí? Sin duda.
Muchos afirman que tienen comunión con Dios, pero andan en
tinieblas, todos estos son mentirosos.

Si la luz representa a Dios ¿A quién representan las tinieblas? A


Satanás. ¿Puede haber comunión entre Dios y Satanás?
Evidentemente no. Por esa razón el apóstol Juan dice esto que
acabamos de leer.

Pablo dice en Colosenses 1.13-14 que Dios nos ha librado de la


potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo,
en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados.

¿Creen que un hijo de Dios que ha sido librado de las tinieblas


debe seguir caminando entre ellas? Desde luego que no. Las
tinieblas siempre fueron símbolo de condenación. Mateo 8.12;
22.13; 25.30;

Además, somos llamados por Jesús a caminar en luz y no andar


en tinieblas. Como está escrito en Juan 8.12 Otra vez Jesús les
habló, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no
andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida.
305

Romanos 13.11-14 Y esto, conociendo el tiempo, que es ya hora


de levantarnos del sueño; porque ahora está más cerca de
nosotros nuestra salvación que cuando creímos. 12La noche está
avanzada, y se acerca el día. Desechemos, pues, las obras de las
tinieblas, y vistámonos las armas de la luz. 13Andemos como de
día, honestamente; no en glotonerías y borracheras, no en
lujurias y lascivias, no en contiendas y envidia, 14sino vestíos del
Señor Jesucristo, y no proveáis para los deseos de la carne.

Efesios 5.6-10 Nadie os engañe con palabras vanas, porque por


estas cosas viene la ira de Dios sobre los hijos de desobediencia.
7
No seáis, pues, partícipes con ellos. 8Porque en otro tiempo erais
tinieblas, mas ahora sois luz en el Señor; andad como hijos de luz
9
(porque el fruto del Espíritu es en toda bondad, justicia y
verdad), 10comprobando lo que es agradable al Señor.

Una de las experiencias más difíciles que vivimos al llegar a la


Iglesia es comprobar que también en ella hay gente que no es
sincera. Falsos hermanos. Gente hipócrita. Cizaña sembrada por
el enemigo para dañar al trigo.

En dos ocasiones, Pablo habla de los falsos hermanos, como de


un peligro del que nos debemos cuidar. 2Corintios 11.26 y
Gálatas 2.4.

¿Recuerdan lo que estudiamos en 2Corintios 5.9-11? Os he


escrito por carta, que no os juntéis con los fornicarios; 10no
absolutamente con los fornicarios de este mundo, o con los
avaros, o con los ladrones, o con los idólatras; pues en tal caso
os sería necesario salir del mundo. 11Más bien os escribí que no
os juntéis con ninguno que, llamándose hermano, fuere
fornicario, o avaro, o idólatra, o maldiciente, o borracho, o
ladrón; con el tal ni aun comáis.

2Tesalonicenses 3.6 Pero os ordenamos, hermanos, en el nombre


de nuestro Señor Jesucristo, que os apartéis de todo hermano
306

que ande desordenadamente, y no según la enseñanza que


recibisteis de nosotros.

Lucas 11.35. Mira pues, no suceda que la luz que en ti hay, sea
tinieblas.

Una cuestión importante a tener en cuanta en cuanto a la luz y las


tinieblas es que la Escritura nos revela que el mismo Satanás se
disfraza de ángel de luz, para engañar a la gente. Como está
escrito: Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza
como ángel de luz. 15Así que, no es extraño si también sus
ministros se disfrazan como ministros de justicia; cuyo fin será
conforme a sus obras. 2Corintios 11.14-15.

Como consecuencia de esta realidad, muchos viven en completa


oscuridad, creyendo que están disfrutando de la luz. 4.3-6, pero
no se enteran porque han sido cegados.

¡Cuánta gente no está siendo engañada por estos falsos ministros!


Éstos se disfrazan, se visten de lo que no son, para no ser
reconocidos.

¿Alguno de vosotros se ha disfrazado de verdadero cristiano?


¿Conocen a alguno que es un falso creyente disfrazado?
¿Estamos apartando de aquellos hermanos que andan
desordenadamente?

Si tenemos en cuenta la Palabra de Dios no seremos engañados.


1Tesalonicenses 5.5 Porque todos vosotros sois hijos de luz e
hijos del día; no somos de la noche ni de las tinieblas.

15. Por supuesto, esta tercera pregunta retórica de Pablo, con la


que continúa el contraste entre un yugo y otro, tampoco requiere
respuesta, porque lleva incluida la negativa en su contexto.

Pablo usa el término Belial en vez de Satanás o diablo. Esta es la


única vez que usa este vocablo. Esta palabra significa inutilidad.
307

Pablo la aplica al adversario, que no tiene ninguna armonía ni


concordia con el Señor. La antítesis de Cristo.

No hay nada en lo que pueda parecerse. ¿Por qué hace Pablo estas
comparaciones? Porque quiere que los corintios se decidan de una
vez por Cristo, y abandonen todo lo que tenga que ver con Belial
o Satanás. Es decir, debían escoger la fe y no la incredulidad.

Si trasladamos esta pregunta a nuestro tiempo, nosotros también


debemos decidirnos. ¿Qué escoges tú? Los corintios debían
escoger, pero tú también. Hoy más que nunca se hace necesario
escoger a Cristo.

Dios no quiere tibios, quiere que te decidas de una vez.

Por eso les hace la cuarta pregunta retórica ¿Qué parte el creyente
con el incrédulo?

Así como no hay nada de común entre Cristo y Satanás, tampoco


debe haberlo entre el creyente y el incrédulo. Desgraciadamente,
las diferencias no se hacen tan notables en algunos “creyentes”.
Aunque debiera notarse porque no debe haber parecido alguno
entre ellos.

El creyente no debe hablar como el incrédulo. Ni actuar del


mismo modo. Ni pensar igual.

1Corintios 2.16 Porque ¿quién conoció la mente del Señor?


¿Quién le instruirá? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo.

Filipenses 4.8-9 Por lo demás, hermanos, todo lo que es


verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo
amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si
algo digno de alabanza, en esto pensad. 9Lo que aprendisteis y
recibisteis y oísteis y visteis en mí, esto haced; y el Dios de paz
estará con vosotros.

Debemos ser diferentes los incrédulos y los creyentes.


308

Pero recuerden que aquí no sólo se habla de similitudes o, mejor


dicho diferencias, sino de relación. Creyentes e incrédulos no
deben unirse en yugos desiguales.

¿Significa eso que no podemos relacionarnos con incrédulos?


Desde luego que no. Ya dijimos, citando 1Corintios 5.9-11 Os he
escrito por carta, que no os juntéis con los fornicarios; 10no
absolutamente con los fornicarios de este mundo, o con los
avaros, o con los ladrones, o con los idólatras; pues en tal caso
os sería necesario salir del mundo. 11Más bien os escribí que no
os juntéis con ninguno que, llamándose hermano, fuere
fornicario, o avaro, o idólatra, o maldiciente, o borracho, o
ladrón; con el tal ni aun comáis.

Lo que Pablo enseña no es que no tengas relación alguna con


incrédulos, sino que te guardes de ellos, no participes en su estilo
de vida, ni mucho menos hagas alianzas con ellos.

Recuerden también las palabras del Señor Jesús quien orando por
la Iglesia dijo en Juan 17.15 No ruego que los quites del mundo,
sino que los guardes del mal.

Por tanto, aquellos grupos que te separan de todos aquellos que no


piensan como ellos, incluso de tu familia, son una secta y debes
alejarte de ellos. La verdad no te esclaviza, sino que te libera.

Dios quiere que marquemos la diferencia. Andando en el Espíritu


y no en la carne. Porque debemos ser luz a cuantos nos rodean.

16. ¿Cuál es el templo de Dios? Pablo dice: Vosotros. Es una


enorme responsabilidad ser templo de Dios, el Creador, el
Salvador, el Dios Altísimo.

¿Cómo está esa morada o templo de Dios? ¿Está ordenada? ¿Se


sentirá Dios a gusto en nuestras vidas? La respuesta debería ser sí.
309

Nosotros, la Iglesia, somos el templo de Dios. ¿De qué Dios? Del


Dios viviente. Del Único Dios que tiene vida. Porque es el Único
real. Todos los demás son falsos.

¿Qué son los ídolos? Vanas representaciones sin vida de las


divinidades paganas. Un chico comentaba que en la India hay más
de ocho mil dioses. Pero ¿Saben qué? Todos son falsos.

¿Quién habita en el templo de Dios? Dios mismo. ¿Quién está


detrás de las imágenes religiosas? Demonios, 1Corintios 10.20.
Según este pasaje, Pablo afirma que quien practica la idolatría se
hace partícipe con los demonios.

Recuerden lo que dijo Pablo en el Areópago ateniense, Hechos


17.24-25 El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él
hay, siendo Señor del cielo y de la tierra, no habita en templos
hechos por manos humanas, 25ni es honrado por manos de
hombres, como si necesitase de algo; pues él es quien da a todos
vida y aliento y todas las cosas.

¿Te ha dado Dios vida y aliento? Amén. ¿Y todas las cosas?

En todos sus escritos, el apóstol de los gentiles citaba


continuamente las Sagradas Escrituras del Antiguo Testamento,
pero de modo que reforzaba con ellas su mensaje. Aun cuando
Pablo disponía de algunos libros, no es correcto pensar que Pablo
tuviera acceso directo a todas las Escrituras, como hoy lo tenemos
nosotros.

¿Cómo creen que Pablo podía entonces hacer tantas citas de las
Escrituras? Haciendo gala de una muy buena memoria.

Porque Dios es real, él puede habitar y andar entre nosotros. ¿No


prometió Jesús que estaría con nosotros hasta el fin del mundo?
¿Qué otro dios puede hacer esa promesa y cumplirla? Ningún
otro. Porque no hay ninguno que tenga vida. Todos son falsos
dioses.
310

Dios, no sólo puede habitar y andar entre nosotros, sino en


nosotros. Pablo refuerza esa idea en varios pasajes de las
Escrituras. Romanos 8.11; 1Corintios 3.16; 6.19.

Y seré su Dios. ¿Quién es tu Dios? Para muchos, su dios es una


muñeca de madera de cincuenta centímetros, con ojos que no ven
y boca que no habla. Como dice el Salmo 115.4-8.

Otros, que afirman no creer en ningún dios, se idolatran a sí


mismos. Ellos son su propio dios, sacerdote, y religión. Los
astros, la naturaleza, al pastor, etc. Hay muchos tipos de
idolatrías.

Mi Dios es el Creador, manifestado por medio de la creación, la


Biblia y Su Hijo Jesucristo. Nuestro Dios está en los cielos, todo
lo que quiso ha hecho. Salmo 115.3.

Nosotros somos Su pueblo. Dios expresa de esta manera su


autoridad sobre nuestras vidas. Le pertenecemos. Por esa razón
nos cuida y nos bendice.

17. Por lo cual. Pablo lleva el tema a una conclusión lógica.


Citando a Isaías 52.11 y Jeremías 51.45 leamos éste último: Salid
de en medio de ella, pueblo mío, y salvad cada uno su vida del
ardor de la ira de Jehová.

Estos pasajes están ubicados en el tiempo de la salida del pueblo


del cautiverio de Babilonia. Gracias al decreto que Dios inspiró a
Ciro que les permitió regresar a su tierra.

¿Por qué habían estado cautivos en Babilonia? Por causa de la


rebeldía del pueblo para Dios y Su Palabra. La rebeldía siempre
tiene consecuencia, ¿Sí o no? Sin duda.

Babilonia era una ciudad pagana, que representaba la esclavitud


como consecuencia del pecado de Su pueblo. Generalmente el ser
humano no se detiene a pensar en las consecuencias de sus actos.
Pero ¿Tienen consecuencias lo que hacemos? Desde luego.
311

Podemos escoger nuestras decisiones, pero no las consecuencias


que cada decisión conlleva en sí misma. Algunos están enojados
con Dios por esto. Pero su enojo, ¿Hará que sea distinto? No.

Cuando salieron de Babilonia, se les permitió llevarse los vasos


que pertenecían al templo de Jerusalén, pero no se les permitió
llevarse ninguna cosa que hubiera pertenecido al culto de los
ídolos paganos.

Una vez liberados del exilio, debían guardarse de toda


contaminación y de pecado, y ser puros y santos para Dios.

Los judíos no debían mezclar lo santo y lo pagano. Eso mismo es


lo que Pablo les está enseñando a los corintios al citar estos
pasajes.

Los corintios habían salido de la idolatría, del paganismo griego,


pero ahora debían ser un pueblo temeroso de Dios. Dedicado al
Señor Jesucristo.

Muchos no entienden la importancia que esto tiene.


Especialmente los católicos, porque les han enseñado mal. No dan
importancia a que las Escrituras enseñen claramente que Dios
aborrece la idolatría. Creyendo que agradan a Dios le ofenden
gravemente.

Dios ordena a sus hijos pureza y fidelidad exclusiva. Como Él es


Santo, espera que su Iglesia también lo sea. Como está escrito en
1Pedro 1.13-16 Por tanto, ceñid los lomos de vuestro
entendimiento, sed sobrios, y esperad por completo en la gracia
que se os traerá cuando Jesucristo sea manifestado; 14como hijos
obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais
estando en vuestra ignorancia; 15sino, como aquel que os llamó es
santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de
vivir; 16porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo.
312

Apartaos, dice el Señor. Realmente debemos apartarnos de todo


aquello que desagrada a Dios. También, como vimos la semana
pasada, de aquellas personas que nos arrastran al mundo y al mal.
Que causan divisiones y no se corrigen por mucho que les
intentes ayudar.

Son muchos los cristianos que actualmente se ven en la


obligación de apartarse de aquellos que hasta hace poco fueron
sus hermanos, porque descubren que están totalmente errados.
Siguiendo tradiciones y mandamientos humanos que nada tienen
que ver con Dios. Y en muchos casos lo ofenden gravemente.

Pero es nuestro deber apartarnos del mal. Como está escrito en


1Pedro 3.10-12 Porque: El que quiere amar la vida Y ver días
buenos, Refrene su lengua de mal, Y sus labios no hablen engaño;
11
Apártese del mal, y haga el bien; Busque la paz, y sígala.
12
Porque los ojos del Señor están sobre los justos, Y sus oídos
atentos a sus oraciones; Pero el rostro del Señor está contra
aquellos que hacen el mal.

No toquéis lo inmundo. Quisiera preguntaros ¿Qué es algo


inmundo? En griego es akazartos, y significa impuro, sucio, no
purificado. Se decía de los animales que estaban prohibidos por la
ley. Algo inmundo es algo que a Dios no le agrada.

¿Le hubiera agradado a Dios que los judíos al salir de Babilonia


se llevasen consigo los ídolos paganos? Yo creo que Dios nos
habla por Su Espíritu Santo que está presente en la vida de la
Iglesia. Por tanto quiero preguntarles, ¿Y si alguno hubiese dicho
que no los adoraba, sino que quería tenerlos sólo como objeto de
decoración? ¿Hubiera agradado a Dios?

Desde luego que no. ¿Qué se nos dice aquí que debemos hacer en
cuanto a lo inmundo? Que ni lo toquemos.

¿Cómo se le llama a la desobediencia a Dios en la Biblia? Pecado.


Porque infringimos los mandamientos de Dios.
313

¿Qué debe hacer un cristiano que ha cometido pecado?


Confesarlos y apartarse. ¿Qué ocurre si un cristiano peca y no lo
reconoce?

Dios sigue diciendo: Y yo os recibiré. La promesa está en futuro,


¿Por qué? Porque depende de la obediencia del pueblo de no tocar
lo impuro. ¿Habría bendición sin obediencia? Por supuesto que
no. Dios la exige de su pueblo.

18. Y seré para vosotros por Padre. Prestando atención al texto,


¿Podemos afirmar que estas palabras debemos tomarlas
literalmente? ¿Es Dios nuestro Padre? Desde luego que no.

¿Qué importancia tiene esto? Desde la perspectiva de la teología


bíblica, mucha. Pues, ya saben que algunos falsos pastores están
enseñando que si tú eres hijo de Dios tú eres igual a él: un dios.
Lo cual es una falsa doctrina.

La primera definición del Diccionario de la Real Academia de la


Lengua Española dice: Varón o animal macho que ha engendrado
a otro ser de su misma especie.

La pregunta que debemos hacernos es; ¿Somos los seres humanos


de la misma especie de Dios? De ningún modo.

Quienes entienden estas metáforas de manera literal se equivocan


y por ese motivo luego tienen problemas para entender el resto de
la Palabra de Dios, y acaban creyendo herejías deformadas.

Evidentemente, es un modo de hablar figurado. Pues, como


criaturas, no podemos ser familia de Dios literalmente porque no
somos de su misma naturaleza. Dios pertenece a la naturaleza
Divina, nosotros a la humana. Por tanto, somos hijos adoptivos
por medio de la fe. Efesios 1.5.

18. Hijos e hijas. Este pasaje está tomado de 2Samuel 7.14 en el


que Dios habla a David por medio del profeta Natán en cuanto a
314

su hijo Salomón, su heredero al trono. Sin embargo, Pablo lo


adapta aquí pasándolo del singular al plural.

¿Tiene esto importancia? Claro. ¿Por qué? Pues, no olvidemos


que Pablo está citando el Antiguo Testamento y al escribir esta
carta inspirado por el Espíritu Santo, está incluyendo una enorme
modificación en el pensamiento del pueblo de Dios.

Pablo incluye a la mujer en la bendición de Dios. ¿Creen que era


normal en aquella época? Desde luego que no. Esto debió ser un
revulsivo en su tiempo. Pues, si aun lo sigue siendo hoy,
imagínate entonces.

El ser humano siempre hizo diferencia entre hombres y mujeres, a


pesar de que Dios jamás hizo acepción de personas. ¿Creen que
este asunto es muy importante? Por supuesto.

Muchos de los que hacen excesivo énfasis en algunas doctrinas,


no le dan ninguna importancia a temas como este. Veamos qué
importancia le da Dios a esta verdad de que Él no hace acepción
de personas.

Antes de ver los pasajes ¿Entienden lo que significa hacer o no


acepción de personas? Se trata de hacer o no diferencias entre
personas por razón de origen, color de piel, género, o cualquier
otra causa.

Veamos entonces qué enseña la Escritura en cuanto a esto. Como


está escrito: Deuteronomio 10.17; 16.18-19; 2Crónicas 19.7;
Proverbios 24.23; 28.21; Malaquías 2.9; Hechos 10.34; Romanos
2.11; Gálatas 2.6; Efesios 6.9; Colosenses 3.25; Santiago 2.1, 9;
1Pedro 1.17.

¿Es posible conocer algo y no tenerlo en cuenta? Por su puesto.


Mucha gente, tiene conocimiento de la voluntad de Dios, pero no
todos la practican.
315

El ser humano continua haciendo diferencia entre unos y otros por


motivos errados. Por color de piel; por cuestión de origen o
nacionalidad; entre intelectuales e ignorantes; entre ricos y
pobres; entre hombres y mujeres; y todo esto aun en las iglesias.

Cuando compartimos sobre el ambiente en el hogar, llamé la


atención sobre el hecho de que todos sabemos qué cosas
enrarecen el ambiente; y qué otras, lo mejoran. Pero que aun
sabiéndolo, no siempre las tenemos en cuenta. No siempre
obramos por lo que es correcto, aun sabiéndolo. ¿Es cierto o no?
Desde luego.

Tenemos un problema que no es nuevo. Ocurre en muchas áreas


de la vida. Saber lo correcto no es garantía de hacerlo. Ni tan
siquiera de aceptarlo. Pero de una cosa podemos estar seguros, de
que no tener en cuenta a Dios y lo que enseña es pecado.

Como está escrito en Santiago 4.13-17 es verdad: ¡Vamos ahora!


los que decís: Hoy y mañana iremos a tal ciudad, y estaremos
allá un año, y traficaremos, y ganaremos; 14cuando no sabéis lo
que será mañana. Porque ¿qué es vuestra vida? Ciertamente es
neblina que se aparece por un poco de tiempo, y luego se
desvanece. 15En lugar de lo cual deberíais decir: Si el Señor
quiere, viviremos y haremos esto o aquello. 16Pero ahora os
jactáis en vuestras soberbias. Toda jactancia semejante es mala;
17
y al que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado.

Por tanto, debemos estar seguros de que hemos entendido estos


pasajes. No sólo basta con conocer la voluntad de Dios, sino que
hay que estar dispuesto a practicarla. De lo contrario estamos en
pecado.

Así, que, si sabemos que Dios no hace, ni quiere que hagamos


acepción de personas, ¿Qué creen que debemos hacer, le
obedecemos o le discutimos a Dios? Es evidente que los
verdaderos discípulos de Cristo le obedecerán.
316

¿Qué podemos pensar de alguien que conociendo esta verdad


bíblica, hiciera diferencia entre blancos y negros? ¿Podríamos
decir que es un buen cristiano? Desde luego que no.

Y si no hace diferencia entre blancos y negros, pero lo hace entre


ricos y pobres, ¿Qué pensarían entonces, estarían siendo buenos
cristianos? Tampoco.

Y si no hicieran diferencias entre blancos y negros; ni ricos y


pobres, pero la hicieran entre hombre y mujer, ¿Creen que serían
buenos cristianos? Por supuesto que no.

¿Por qué razón no son buenos cristianos los que hacen diferencia
entre hombres y mujeres? Porque están desobedeciendo a Dios.

Debemos preguntarnos: Si nunca fue deseo de Dios hacer


diferencia de personas ¿De dónde procede tal doctrina? De Dios,
desde luego que no.

Cuando Pablo, citando a Dios, dice aquí: Y vosotros me seréis


hijos e hijas. ¿Podemos decir que está haciendo diferencia alguna
entre hombre y mujer? De ningún modo.

No encontrarás en la Biblia ningún fundamento para hacer


acepción de personas. Porque sería una verdadera contradicción, y
sabemos que Dios no se contradice.

Uno de los temas por los que continuamente recibo consultas es


por la participación de la mujer en la Iglesia. Mucha gente se
aferra a textos, fuera de contexto, como pretexto para su
misoginia.

La misoginia es aversión, hostilidad, rivalidad, contra la mujer. Es


una postura que menosprecia a la mujer a favor del hombre.
¿Creen que eso agrada a Dios? ¿Creen que Dios defiende la
postura que afirma que el hombre es mejor que la mujer? No la
hay. Ya hemos visto que Dios no hace diferencia entre unos y
otros.
317

Lo que no deja de llamarme la atención es que muchísimas


mujeres apoyen tales posturas anti bíblicas, y anti lógicas. La
única explicación que se me ocurre es que lo hacen por ignorancia
o fanatismo religioso.

Tomar algunos textos históricos, sacados de algunas cartas, que


tratan algunos problemas puntuales, que hubo en la iglesia del
primer siglo, y tratar de imponerlos como fundamento de una
doctrina es no entender ni a Dios, ni las Escrituras.

Ya en tiempos del profeta Joel 2.28-29 Dios dijo: …después de


esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán
vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños,
y vuestros jóvenes verán visiones. 29Y también sobre los siervos y
sobre las siervas derramaré mi Espíritu en aquellos días.

¿Hay alguna diferencia por razón de género en la Escritura?


Ninguna. Dios promete derramar su Espíritu sobre hombres y
mujeres. Esto sucedió en Pentecostés, donde se cumplió esta
profecía. Hechos 1.14-15; 2.1, 17-18 lo confirma.

Sin embargo, actualmente sigue existiendo una tendencia


machista contra la mujer dentro de la iglesia que continua, contra
la voluntad de Dios, haciendo acepción de personas, por razón de
sexo.

Gentes que niegan la verdad de la Palabra de Dios, prohibiendo a


Dios llamar, y usar, a mujeres. Negándose a aceptar que en Cristo
no hay diferencias.

Como está escrito en Gálatas 3.26-29: pues todos sois hijos de


Dios por la fe en Cristo Jesús; 27porque todos los que habéis sido
bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. 28Ya no hay
judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer;
porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús. 29Y si vosotros
sois de Cristo, ciertamente linaje de Abraham sois, y herederos
según la promesa.
318

Cabría preguntarse:
¿Son las mujeres hijas de Dios, o sólo los hombres?
¿Son de Cristo las mujeres o no?
¿Son por, la fe, linaje de Abraham?
¿Son herederas de la promesa, o ellas no?

Porque si lo son, ¿Qué diferencia hay? Recuerden que Dios no


hace diferencias de personas. Lo cual es una clara evidencia de
que también Juan Calvino se equivoca al hablar de dos creaciones
humanas: una para salvación y otra para condenación. Algo que
no está en la Biblia.

La Biblia demuestra que, a lo largo de la historia, Dios ha llamado


tanto a hombres, como también a mujeres, para lo que Él ha
querido. Y cuando Dios ha querido usar a una mujer, lo ha hecho.

¿Se habría equivocado Dios cuando usó a María, hermana de


Moisés y Aarón, como profetisa? Éxodo 15.20. Profetizar se
trataba de dar un mensaje en nombre de Dios al pueblo. Algunos
creen que la mujer no debe predicar a los hombres.

Repito: ¿Se equivocó Dios al capacitar a María para profetizar en


Su Nombre? Desde luego que no.

Algunos enfatizan que una mujer no debe estar en autoridad sobre


los hombres. Toman textos que hablan de la sujección de la mujer
al esposo, y lo interpretan como conviene a sus doctrinas
machistas.

Sin embargo, Dios puso sobre todos los hombres de Israel a una
mujer, Débora, quien lideró y juzgó al pueblo de Israel como
profeta y gobernante. Jueces 4.4. Una mujer mandando con
autoridad sobre todos los hombres, conforme a la voluntad de
Dios.

¿Se equivocó Dios? Desde luego que no.


319

No faltan los ejemplos y testimonios de la Sagrada Escritura que


muestran con absoluta claridad lo que muchos niegan, que Dios
no hace diferencia entre hombres y mujeres.

Recordar que hasta aquí, hemos demostrado que la Biblia enseña


que Dios no hace acepción de personas.

Ahora estamos demostrando que Dios ha usado a mujeres como a


hombres, en puestos de responsabilidad y autoridad.

Nos quedamos hablando de Hulda. ¿Recuerdan?

La Biblia nos sigue hablando de la profetisa Hulda. 2Reyes 22.3-


20. Esta historia es muy interesante, porque había rey, sacerdotes
y escribas, pero para oír la Palabra de Dios debieron acudir a una
mujer, la profetisa Hulda.

¿Cuántos habrán oído hablar de esta mujer, sierva de Dios? No


muchos. Estoy seguro de que muchos predicadores no sólo no
quieren hablar de ella, sino que no quieren ni oír hablar de ella,
porque contradice todo lo que creen.

Porque lo que muchos predicadores creen son tradiciones


humanas que no están fundamentadas en la Escritura, sino en las
doctrinas de sus denominaciones, apoyadas en su propio
machismo.

También se nos habla de la esposa de Isaías, que compartía su


mismo ministerio. Isaías 8.3. Algunos dicen la mujer del médico
no es médico. Y tienen razón. Porque normalmente para casarse
con un médico no hay que estudiar medicina.

Pero, no olvidemos que el reino de los cielos no funciona como el


mundo. Intentar interpretar y entender las cosas de Dios por como
funciona el mundo es absurdo.
320

Muchas mujeres de pastores conocen mejor las Escrituras tan


bien, o mucho mejor que sus propios maridos. ¿No es el
conocimiento lo que capacita a alguien para servir?

Si la mujer del pastor tiene el conocimiento necesario ¿Debería


guardárselo y no usarlo? De ningún modo. ¿O podría usarlo en
beneficio de la Iglesia? Desde luego.

Algunos dirán, pero estos textos pertenecen al AT, y es verdad,


pero también en el NT se mencionan mujeres que ocuparon
puestos de responsabilidad en la Iglesia como por ejemplo:
profetisas, antes de que las Escrituras fueran acabadas.

Ana, una mujer de más de cien años, quizás la primera


predicadora del evangelio. Pues, hablaba del niño (Mesías) a
todos los que esperaban la redención de Jerusalén. Lucas 2.36-38.

También se nos habla en el NT de aquellas mujeres que seguían a


Jesús en su ministerio y le servían. Mateo 27.55-56. Si Cristo
permitió que estas mujeres le sirvieran, ¿Estaba haciendo mal? Si
entonces, las mujeres podían servir a Dios, ¿Por qué hay quienes
pretenden prohibírselo?

Lucas nos habla de las cuatro hijas doncellas del diácono y


evangelista Felipe, que profetizaban. Es decir, que hablaban en
Nombre de Dios. ¿Creen que sólo a las mujeres y niños, como
algunos pretenden? No hay ningún fundamento para creer tal
tontería. Hechos 21.8-9.

Estas mujeres no eran profetas en el sentido del AT sino como


personas que Dios usaba para edificación, exhortación y
consolación. Durante un tiempo en el que la Escritura aún se
estaba escribiendo. 1Corintios 14.3.

1Corintios 14.31 Porque podéis profetizar todos uno por uno,


para que todos aprendan, y todos sean exhortados.
321

Habría que preguntarse si dentro de estos “todos” estaban también


las mujeres o no. Porque, ¿Quiénes eran los profetas? Les
recuerdo que el profeta es quien expone la voluntad de Dios al
pueblo.

La Iglesia no es una comunidad masculina, sino la comunidad de


todos los cristianos, y la mitad o más, está formada por mujeres.
¿No creen que ya va siendo hora de que nos tomemos la molestia
de estudiar la Palabra de Dios para ver si lo que nos han enseñado
al respecto de las mismas es correcto o falso? Yo creo que sí.

El libro de los Hechos confirma algo interesante, leamos Hechos


8.12 Pero cuando creyeron a Felipe, que anunciaba el evangelio
del reino de Dios y el nombre de Jesucristo, se bautizaban
hombres y mujeres.

¿Qué podemos deducir de este pasaje? Que se convertían


hombres y mujeres.

Desde los primeros siglos, hombres y mujeres eran igualmente


mártires potenciales de la fe. Porque ambos tenían la misma fe, y
del mismo modo la compartían. Hechos 8.3; 22.4.

En Romanos 12.3-10 Pablo habla del Cuerpo de Cristo y de la


gracia que Él derrama sobre sus miembros. Ahí dice que cada
miembro tiene su función. ¿Las mujeres no reciben dones? Y si lo
reciben, ¿No deben ministrarlos?

Un pasaje conocido es 1Pedro 4.10-11 Cada uno según el don que


ha recibido, minístrelo a los otros, como buenos administradores
de la multiforme gracia de Dios. 11Si alguno habla, hable
conforme a las palabras de Dios; si alguno ministra, ministre
conforme al poder que Dios da, para que en todo sea Dios
glorificado por Jesucristo, a quien pertenecen la gloria y el
imperio por los siglos de los siglos. Amén.

Talentos
322

Si Dios da un don de predicación a una mujer ¿No podría


ministrarlo por ser mujer? La capacitación espiritual y la posesión
de un don exige que se use para la edificación de la Iglesia.

Como está escrito: ¿Qué hay, pues, hermanos? Cuando os reunís,


cada uno de vosotros tiene salmo, tiene doctrina, tiene lengua,
tiene revelación, tiene interpretación. Hágase todo para
edificación. 1Corintios 14.26.

¿Alguno de estos pasajes hace diferencia entre hombres y


mujeres? Ninguno. ¿Alguno limita a la mujer para recibir algún
don o ejercer algún servicio dentro de la Iglesia? Ninguno.

1Corintios 14.26 ¿Qué hay, pues, hermanos? Cuando os reunís,


cada uno de vosotros tiene salmo, tiene doctrina, tiene lengua,
tiene revelación, tiene interpretación. Hágase todo para
edificación.

El caso de Ananías y Safira, Hechos 5 demuestra que ambos,


hombres y mujeres tienen la misma responsabilidad moral ante
Dios y la Iglesia.

Un caso notorio y que muchos intentan tergiversar sin lograrlo es


el de Priscila, Hechos 18.24-26 Llegó entonces a Efeso un judío
llamado Apolos, natural de Alejandría, varón elocuente,
poderoso en las Escrituras. 25Este había sido instruido en el
camino del Señor; y siendo de espíritu fervoroso, hablaba y
enseñaba diligentemente lo concerniente al Señor, aunque
solamente conocía el bautismo de Juan. 26Y comenzó a hablar con
denuedo en la sinagoga; pero cuando le oyeron Priscila y Aquila,
le tomaron aparte y le expusieron más exactamente el camino de
Dios.

Aquí vemos a Priscila involucrada en el ministerio, preparando


obreros, lo cual demuestra la relevancia de su ministerio.

De hecho en este pasaje y también en Romanos 16.3-5, Priscila es


mencionada antes que su esposo, lo cual era absolutamente
323

inusual en aquella época. Algunos teólogos piensan que es porque


en realidad ella tenía mayor peso en el ministerio que su propio
esposo.

En este capítulo se mencionan a muchas mujeres que tenían una


labor destacada en la iglesia del primer siglo:

1.- Febe
3.- Priscila
6.- María
7.- Junia
12.- Trifena y Trifosa, Pérsida
13.- La madre de Rufo
15.- Julia y la hermana de Nereo

Muchos teólogos concuerdan en la autoridad de Febe en la Iglesia


de Cencrea.

Priscila pastoreó junto a su esposo la Iglesia que estaba en su


casa. 1Corintios 16.19 Las iglesias de Asia os saludan. Aquila y
Priscila, con la iglesia que está en su casa, os saludan mucho en
el Señor.

Todo el libro de los Hechos de los Apóstoles es un testimonio


vivo de la presencia del ministerio de la mujer en la Iglesia.

Puedo imaginarme a muchos que estén viendo este vídeo poner el


grito en el cielo. O decidiendo no seguir viéndolo. No porque no
sea verdad lo que expongo, que es la Palabra de Dios, sino porque
lo que la Palabra de Dios dice, no concuerda con lo que les han
enseñado. Con su doctrina denominacional, o su machismo.

Quiero hacer una aclaración. No creo que una mujer deba


pastorear sola una congregación, si no tiene marido. Pero junto a
su esposo, en pareja, una mujer puede ser tan pastora como su
marido.
324

Quiero hacer un llamamiento claro a todos a estudiar más


profundamente las Escrituras. A no dejarse llevar por las
tradiciones de los hombres, ni por explicaciones superficiales de
la Palabra de Dios.

Les aconsejo que estudien detenidamente, palabra a palabra las


Escrituras para comprobar todas y cada una de las cosas que
creen, para ver si realmente concuerdan, o no, con lo que Dios ha
dejado escrito.

Hagamos un breve resumen de lo que hemos visto hasta ahora al


respecto de este pasaje.

1.- Dios no hace acepción de personas. ¿Están seguros de que eso


es conforme a la Palabra de Dios? ¿Lo dice un solo versículo? No
sino muchos.

2.- Dios usa a hombres como también a mujeres. ¿Están de


acuerdo? ¿Ha usado Dios alguna vez a mujeres para anunciar al
mundo su Voluntad? Desde luego.

3.- Si lo ha hecho algunas veces puede volver a hacerlo. ¿Qué


creen? ¿Es Dios capaz de seguir usando a mujeres para lo que Él
quiera, o tiene que pedirle permiso al hombre? Desde luego que
no.

4.- Hemos visto cómo Dios usó mujeres en el AT. ¿Recuerdan


algún nombre? Hay muchas.

5.- Hemos visto cómo Dios usó mujeres en el NT. ¿Recuerdan a


alguna en particular? También hay muchas.

6.- Hemos comprobado que es Dios quien llama y capacita. ¿O lo


hacen los pastores? ¿Qué dice la Biblia? ¿Dónde? 1Corintios
12.11.
325

7.- Hemos visto también que cuando alguien tiene un don de Dios
debe ejercerlo. Porque esa es Su voluntad Soberana. ¿Estaría bien
que lo ocultara? No. ¿Y si fuera mujer? Tampoco.

8.- Hoy veremos las objeciones teológicas y filosóficas de


algunos que niegan estas verdades.

Es muy importante que presten atención a lo que viene a


continuación, porque vamos a hablar de algunos pasajes y
debemos estar atentos para entenderlos adecuadamente. Pues de
ellos dependerá nuestra actitud hacia el servicio de la mujer en la
Iglesia.

Después de estudiar estos pasajes, deberemos tomar una decisión.


Si seguir creyendo en el machismo o en Dios. Si seguimos a Dios
o a los hombres. Razón por la cual es muy importante no
despistarse.

Antes incluso de que los estudiemos ¿Qué creen? ¿A quien


debemos obedecer, a Dios o a los hombres? Espero que estén de
acuerdo conmigo de que a Dios.

1Corintios 14.33-34: Como en todas las iglesias de los santos,


vuestras mujeres callen en las congregaciones; porque no les es
permitido hablar, sino que estén sujetas, como también la ley lo
dice.

Algunos citan este pasaje como la prueba indubitable de que la


mujer no puede tener un ministerio de autoridad en la Iglesia.

No canten victoria. Un texto no puede contradecir tantos como


hemos visto hasta ahora. Cuando un pasaje “parece” contradecir a
tantos como hemos visto, es evidente que no lo estamos
interpretando adecuadamente.

Si quieren entender bien este pasaje deberán tener en cuenta el


contexto, y entender que se trata de un pasaje histórico, no
doctrinal.
326

No saber la diferencia entre uno y otro, lleva a muchos al error.


Este es un pasaje de una carta que Pablo está escribiendo a una
congregación en concreto ¿A cuál? A la de Corinto.

¿Por qué escribió Pablo esta carta? Porque mediante ella estaba
corrigiendo una serie de problemas puntuales de esa congregación
concreta.

Aunque está dirigida a los Corintios, nosotros la tenemos por


Palabra inspirada por Dios, para nuestra enseñanza. Solo que
debemos cuidar de interpretarla correctamente, para no
equivocarnos en su interpretación.

Aplicar este pasaje a la Iglesia universal es un error de


proporciones también universales.

Fíjense bien, la palabra que es traducida por mujeres es guné que


en griego se traduce por esposa.

Si aplicamos, pues, esta palabra a todas las mujeres estaríamos


cometiendo un primer error. Porque no todas las mujeres son
esposas.

Además, pondría a toda la Iglesia bajo la ley, sacándola de la


gracia.

Pablo, de ningún modo estaba dando una norma para la Iglesia


actual como algunos han querido hacernos creer. ¿Cómo lo
sabemos? Respóndanme a una pregunta ¿Está la Iglesia bajo la
ley, o bajo la gracia? ¿Cómo podemos demostrarlo? Pablo lo
aclara en Romanos 6.14;

También en Romanos 7.4 Pablo afirma que los cristianos hemos


muerto a la ley. ¿Cómo podría el mismo Pablo poner a toda la
Iglesia bajo la ley en este asunto?

Es evidente que debe interpretarse de otra manera.


327

En Efesios 2.14-15 el mismo apóstol afirma que Cristo abolió en


su carne las enemistades, la ley de los mandamientos expresados
en ordenanzas.

Y en Gálatas 3.10-14: Porque todos los que dependen de las


obras de la ley están bajo maldición, pues escrito está: Maldito
todo aquel que no permaneciere en todas las cosas escritas en el
libro de la ley, para hacerlas. 11Y que por la ley ninguno se
justifica para con Dios, es evidente, porque: El justo por la fe
vivirá; 12y la ley no es de fe, sino que dice: El que hiciere estas
cosas vivirá por ellas. 13Cristo nos redimió de la maldición de la
ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito
todo el que es colgado en un madero), 14para que en Cristo Jesús
la bendición de Abraham alcanzase a los gentiles, a fin de que
por la fe recibiésemos la promesa del Espíritu.

Así, pues, aplicar este pasaje de 1Corintios 14.34 a toda la Iglesia


es un error teológico que llevaría a la Iglesia a la maldición de la
ley.

Si estudiamos el contexto nos daremos cuenta de que Pablo, como


hemos dicho, ni tan siquiera habla de todas las mujeres, sino de
aquellas que estaban casadas.

¿Por qué sabemos que se refiere a las casadas solamente? No sólo


porque la palabra que se traduce por mujeres tiene una mejor
traducción que es esposas, sino también porque dice: que estén
sujetas, como también la ley lo dice.

¿A qué se refiere con que estén sujetas? ¿Sujetas a quien? A sus


maridos.

El verso 35 dice: Y si quieren aprender algo, pregunten en casa a


sus maridos; porque es indecoroso que una mujer hable en la
congregación.
328

Muchos cristianos suelen cometer un error infantil a la hora de


interpretar las Sagradas Escrituras. Suelen pensar que toda la
Biblia fue escrita originalmente para él.

En realidad, la Biblia está formada por sesenta seis libros,


ninguno de los cuales se escribió pensando en nosotros.

Dios sí pensó en nosotros. Pero, ¿Pensaba Moisés en nosotros


cuando escribió el Pentateuco? Desde luego que no. ¿Pensaba
Pablo en nosotros cuando escribió a los corintios? Tampoco.

Ninguno de los escritores.

Por tanto, las epístolas o cartas que están en la Biblia fueron


originalmente dirigidas a otras personas. Cristianos del primer
siglo. Cuyas circunstancias debemos tener en cuenta, sino
queremos cometer errores de exégesis. Es decir, de interpretación.

Otra cosa que también hay que tener en cuenta, la congregación


de corinto estaba compuesta por judíos o gentiles? En ese tiempo
las congregaciones estaban compuestas por judíos y gentiles. Por
los dos.

Así, pues, Pablo estaba hablando de una ley judía. ¿Estaba


hablando a todos los creyente de corinto o a un sector de la
congregación? No es posible que quisiera poner a todos bajo la
ley.

En el concilio de Jerusalén Pablo defendería que no se impusiera


la ley a los gentiles. ¿No sería una completa contradicción que
aquí estuviera sosteniendo la postura contraria?

Para explicar esto, veamos algunos ejemplos de que no toda la


carta estaba dirigida a todos los corintios, y mucho menos a
nosotros.

Por ejemplo, cuando Pablo dice: De manera que yo, hermanos, no


pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a
329

niños en Cristo. 1Corintios 3.1 ¿Estaba hablando a todos los


corintios, o sólo a un sector de ellos? Si tenemos en cuenta el
contexto comprobaremos que estaba refiriéndose a aquellos que
estaban causando divisiones.

Otro ejemplo, cuando escribió: Os alabo, hermanos, porque en


todo os acordáis de mí, y retenéis las instrucciones tal como os
las entregué. 1corintios 11.2 ¿Se refería a todos los corintios y a
nosotros, o sólo a algunos de entre ellos? Es indudable que a
algunos corintios. En caso contrario no habría sido necesario
corregir tantos errores.

Así, pues, que una frase esté en una carta, no significa que esté
dirigida a todos los destinatarios. Mucho menos, cuando no
somos los destinatarios originales, y estamos a casi dos mil años
de diferencia.

Y si seguimos profundizando más, descubriremos que tampoco se


refiere a todas las casadas, sino a algunas casadas.

¿A qué casadas se referiría Pablo? Lean el contexto, a ver si


descubren de qué estaba hablando el apóstol a los corintios. ¿Cuál
era el tema que estaba desarrollando por lo cual dijo estas
palabras?

Ya hemos dicho muchas veces que no tener en cuenta el contexto


de un pasaje lleva generalmente al error, y a las falsas doctrinas.

Aquí Pablo estaba hablando de los profetas. Así, que, se refiere a


las que estaban casadas con los que enseñaban en la Iglesia,
quienes entonces eran llamados profetas.

Estudien todo el contexto de ese pasaje y entenderán que Pablo


estaba hablando justamente de la profecía. ¿Entienden la
importancia de estudiar y profundizar fijándose bien en el
contexto de los pasajes?
330

Recuerden una de las normas de la hermenéutica: Un texto sin su


contexto es un pretexto. En este caso ¿Un pretexto para qué? En
este caso para evitar que la mujer pueda igualar al hombre,
prohibiéndole servir en la Iglesia.

¿Cuál era el problema de Corinto? El problema consistía en que


cuando los maestros estaban enseñando en la Iglesia, eran
interrumpidos por sus mujeres, de ahí la corrección del apóstol.
Puesto que podían preguntar en casa a sus maridos.

Pero ¿Y las solteras? ¿Podrían hablar en la Iglesia? Teniendo en


cuenta todos los pasajes que hemos visto, en los que se enseña
que Dios no hace acepción de personas, y que no hay ninguno que
lo prohíba, sí.

El verso 40 demuestra que se trataba de un asunto de orden en esa


congregación. No un problema de toda la Iglesia Universal.

En cuanto a 1Timoteo 2.11-12 pasa exactamente igual. Pablo


escribió esta carta a Timoteo que estaba en ese tiempo ejerciendo
como pastor en una congregación. ¿Saben cual? Estaba
pastoreando la Iglesia en Éfeso.

Vamos a leer 1Timoteo 1.3-11 Este pasaje demuestra que en


Éfeso había un problema con algunas mujeres judías que estaban
enseñando falsa doctrina relacionada, ¿Con qué? Con las
genealogías judías.

Al parecer, pretendían enseñar sin entender de lo que hablaban.


Intentaban imponer la ley sin entender que la ley no era para los
justos sino para los transgresores.

Si alguna mujer enseña esas cosas aquí también yo le prohibiría


enseñarlas. Pero eso no tiene que ver con que las mujeres no
puedan enseñar. Sino aquellas que no han sido llamadas por Dios
ni tienen la preparación adecuada.
331

Si tuviésemos que tomar este pasaje de manera literal para toda la


Iglesia, deberíamos interpretar el verso 15 del mismo modo. La
pregunta es lógica, ¿Se salvan las mujeres por engendrar hijos o
por fe en Jesús?

Así que se trataba de un problema puntual de una congregación


puntual en el NT. No es una doctrina para la Iglesia Universal,
porque contradeciría toda la Biblia.

Así que, es parte de una carta que hace referencia a un problema


que había en una iglesia concreta, la de Éfeso, y que debe ser
interpretado bajo esa premisa. Dentro de su propio contexto.

Las mujeres, como los hombres, nos salvamos por fe en la obra de


Cristo en la cruz. Por tanto, cuidemos de no interpretar la Palabra
de Dios, a nuestra conveniencia, sino siguiendo las normas de la
hermenéutica. Teniendo en cuenta el texto y su contexto, histórico
y gramatical.

Por esa razón escribió Pablo a los Efesios 4.14-15. Porque habían
mujeres enseñando herejías. La palabra hombre en el verso 14 es
anzrópos que se debe traducir por persona, ser humano, gente,
etc.

Un comentarista afirma: No podemos pasar por alto que en aquel


momento, en aquel lugar, se estaba desarrollando entre la
población judía (de la que, recordemos, todavía no se había
desligado completamente la iglesia cristiana) la filosofía
gnóstica, una mezcla de conceptos, muchos de ellos helenísticos,
que, entre otras cosas, negaban la resurrección del cuerpo,
rechazaban el matrimonio, se entregaban a prácticas
deshonrosas y consideraban que había sido Eva la que había
traído el verdadero conocimiento a la raza humana (Muñiz,
2010).

Noa Alarcón Melchor añade: Lo cierto es que tiene mucho sentido


que Pablo niegue aquí, con la intención de contener el error, que
estas mujeres llevadas por creencias contrarias a la verdad
332

expandiesen sus enseñanzas. De hecho, si ordena que no lo hagan


solo puede deberse a que era una práctica extendida que sí lo
hicieran. Con unas mujeres que en la enseñanza a los recién
llegados les estuvieran compartiendo estas herejías, yo también
las habría hecho callar, y estoy totalmente de acuerdo con Pablo
en que estas mujeres deben aprender en silencio, y no intentar
imponerse con una falsa autoridad sobre ningún hombre.

Ahora bien, aplicar este pasaje puntual a la Iglesia universal es no


tener en cuenta todo el contexto de la Palabra de Dios, y
concretamente el Nuevo Testamento, con el que chocan
inexorablemente, quienes hacen acepción de personas. Pues,
como ya hemos dicho Dios no hace diferencia alguna por razón
de género o sexo.

Veamos 1Pedro 2.9 Mas vosotros sois linaje escogido, real


sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que
anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su
luz admirable;

¿Podríamos interpretar que ese “vosotros” sólo se refiere a los


hombres? ¿No sería absurdo? ¿No está el apóstol Pedro poniendo
a las mujeres también en el sacerdocio del Nuevo Testamento?
¿No tenían ellas también que anunciar las virtudes de Aquel que
las salvó?

Seguimos en 2Corintios 6.18 en la frase: Y vosotros me seréis


hijos e hijas, dice el Señor Todopoderoso. ¿Cuál es el tema que
estamos tratando? ¿Qué hemos visto hasta ahora? Hagamos un
resumen y sigamos.

En el Nuevo Testamento, ¿Quién fue la primera persona que


habló a todos de Cristo? ¿No fue una mujer? Ana la profetisa.
Lucas 2.36. Recién había nacido. Cuando Jesús sólo contaba con
cuarenta y un días de edad, y aun no podía predicar él. Levítico
12.3-8.
333

Por cierto, aquí se tira por tierra la falsa doctrina de la Iglesia


Católico Romana que afirma que María sigue siendo virgen
porque Cristo nació sin romper la matriz. Literalmente dicen:
Como la luz atraviesa el cristal.

Si así hubiera sido, ¿Qué necesidad tenía María de purificarse de


su sangre? Estas son las incongruencias en las que caen aquellos
que no profundizan en su fe.

Siguiendo con el tema, ¿Quién fue la primera persona que


evangelizó a todo un pueblo? ¿No fue una mujer? La mujer
Samaritana. Juan 4.28-30; 39-42.

¿Quiénes fueron las primeras personas que predicaron la


resurrección del Señor? ¿No fueron dos mujeres? Así, es. María
Magdalena y la otra María. Mateo 28.1-10. También fueron las
mujeres quienes primero vieron a Jesús resucitado.

¿Quién fue la primera persona que adoró a Dios en Europa? ¿No


fue No fue una mujer? Lidia Hechos 16.14-15.

Han sido muchos casos, en los que Dios mismo puso a las
mujeres delante de los hombres en su llamado; y muchas las
veces que las mujeres adelantaron a los hombres en su respuesta
al Evangelio; en su entrega y servicio a Dios.

No cabe duda de que Dios no hace acepción de personas. Aunque


muchos pastores la hagan, desobedeciendo la Palabra de Dios.

El valor que damos a las palabras determinará el éxito o fracaso


de nuestra exégesis bíblica. Es decir, de nuestra interpretación de
la Palabra de Dios.

Otro pasaje que se pone como argumento en contra del servicio


de las mujeres en la Iglesia es 1Timoteo 3.1-2. Es cierto que ahí
se habla de varones. Por cuanto dice: marido de una sola mujer.
334

Sin embargo, el ejemplo que Pablo usa es determinado por la


costumbre de la época. Siempre se usaba la figura masculina para
poner un ejemplo. No obstante, la palabra que aparece en el
original y que se traduce por alguno es anzrópos que significa
literalmente ser humano, ser viviente, persona.

Por lo que Pablo está diciendo que el obispado puede anhelarlo


tanto un hombre como una mujer. Así que, si es hombre debe ser
marido de una sola mujer. ¿Y si fuera mujer? Debiera ser esposa
de un solo hombre.

Para entender bien este tema debemos ver otros ejemplos del uso
de éste término. Por ejemplo, en 1Timoteo 2.4 Pablo dice: el cual
quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al
conocimiento de la verdad.

Si tomamos literalmente este pasaje ¿A quiénes querría Dios


salvar? A los hombres. ¿Querría Dios salvar a las mujeres? Si lo
tomamos literalmente, no. Pero, espero que entiendan que
estaríamos cometiendo un error de interpretación.

La palabra que aparece en el original griego es la misma que


vimos en 1Timoteo 3.1, anzrópos, que significa literalmente ser
humano, ser viviente, persona. No sabemos qué fue lo que
inclinara al traductor a escoger la palabra hombre. Quizás el
hecho de que por aquel entonces, muy pocas mujeres sabrían leer.
Pero la elección de la palabra no fue la más apropiada. Podría
haber usado persona.

En la Biblia encontramos muchos ejemplos del uso de esta


expresión: hombres en sentido general. Textos en los que se
debiera decir persona, pero se usa la palabra hombre. A eso se le
llama Sinécdoque, el uso de una parte por el todo. Por ejemplo:

Mateo 5.16 Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para
que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre
que está en los cielos.
335

¿Sólo delante de los hombres debemos ser luminares? ¿Delante


de las mujeres no? Aquí la palabra que aparece en el original
también es la misma.

Mateo 6.14-15 Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os


perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial; 15mas si
no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre
os perdonará vuestras ofensas.

¿Sólo hay que perdonar a aquellas personas que nos ofenden si


son hombres? ¿No sería absurdo tomar literalmente estas cosas?

Hechos 17.30 Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos
de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo
lugar, que se arrepientan;

¿Sólo a los hombres exige Dios que se arrepientan? ¿Las mujeres


no necesitan arrepentirse de sus pecados?

Aun hoy día seguimos usando esas expresiones. Solemos usar el


masculino para generalizar. Decimos: No hay hombre justo.
¿Significa eso que podremos hallar justicia entre las mujeres? O
la palabra hombre es genérica y se refiere a todas las personas?

Hay que tener mucho cuidado a la hora de estudiar la Biblia para


no cometer errores de interpretación. Ya sea por no tener en
cuenta la gramática o la historia alrededor del pasaje que estemos
estudiando.

Por tanto, el método histórico gramatical es el mejor modo de


interpretación de la Palabra de Dios. Lo que quiere decir es que
debemos tener en cuenta la historia que rodea el pasaje y su
gramática, para saber si lo estamos entendiendo correctamente.

Cuando no se tienen en cuenta estas cosas acabamos imponiendo


nuestro machismo, y nuestras acepciones de personas, contra la
voluntad de Dios, expuesta de manera clara y manifiesta en Su
palabra.
336

Paulo Branco, presidente de las Asambleas de Dios de Portugal,


en un artículo para Foro Cristiano, hace una fantástica defensa del
ministerio de la mujer señalando que: En la carta de Plinio el
Joven a Trajano, a principios del siglo II (años 111 ó 112), en la
que este pide instrucciones sobre como proceder, menciona que
en el transcurso de sus investigaciones torturó a dos esclavas, a
quienes llamaban ministras (lat. ministrae)? La epístola de
Ignacio a María de Neapolis, (sea ó no genuina del mártir del
siglo II, al propósito de nuestros efectos es igualmente valida)
reconoce a ésta mujer cristiana su excelencia en palabra y obra,
y su capacidad para amonestar a otros, y menciona que su fama
ha llegado hasta la iglesia de Roma.
Verdaderamente las mujeres tienen un gran protagonismo en las
iglesias hasta que irrumpe Tertuliano a finales del siglo II,
criticando a Montano, porque este acoge a las mujeres en plano
de igualdad.

Refiriéndose a Tertuliano dice: En sus escritos se opone a quienes


afirman que las mujeres puedan enseñar o bautizar, lo cual era
admitido en muchos lugares (De baptism, 17; Adv. Marc. I-14).

Termina diciendo: Justamente la oposición y anatema que lanzan


estos escritores sobre los ministerios femeninos de las iglesias,
son la evidencia más fuerte de cómo esa práctica antigua existió
y fue reprimida con el paso del tiempo.

Pero durante siglos se intentó eliminar cualquier vestigio relativo


al protagonismo de las mujeres en el cristianismo de los primeros
siglos. Un ejemplo de esta manipulación puede encontrarse en la
basílica de Roma dedicada a las santas Pudenciana y Práxedes,
en la Via Urbana 160, en la que entre otros antiguos mosaicos,
existe uno en la capilla de S. Cenón, donde aparecen
representadas cuatro mujeres; una es María, la madre de Jesús,
las otras dos son los rostros de las santas a quienes está dedicada
la iglesia, pero la cuarta es una mujer cubierta con un velo y
tiene una aureola cuadrada alrededor de la cabeza, y posee una
inscripción que dice: Theodora episcopa. Alguien con celo
337

misógino, deseando suprimir una tan evidente referencia, raspó


las dos últimas letras del nombre intentando evitar que se leyese
claramente el nombre femenino, y sugiriendo que era el de
Theodoro, nombre de varón, pero por ignorancia mantuvo
episcopa, que es el femenino de obispo, mientras que el
masculino en latín es episcopus, permitiendo reconocer esta
referencia al obispado de la tal Theodora.

Bernard Coster en El Ministerio de la mujer en la Iglesia, pág. 11-


25 dice: Según Calvino, las mujeres han nacido para que se
reconozcan inferiores como consecuencia de la superioridad del
género masculino.

Este tipo de argumentos, aun perdura en la Iglesia como residuos


de una época de oscurantismo intelectual que azotó al pueblo
cristiano, durante el tiempo en que la iglesia católico romana
impuso su hegemonía. Oscurantismo que aun perduraba durante
el tiempo de la reforma protestante.

En realidad, como hemos visto a los largo de este estudio, la


Biblia enseña sin ningún género de dudas la igualdad entre
hombres y mujeres en todos los sentidos. Especialmente a la hora
de servir a Dios.

Las prohibiciones bíblicas del ministerio de la mujer deben ser


consideradas como lo que son, trozos de la historia, que hacen
referencia a una situación que se dio en aquella época, pero que
no tienen vigencia en la Iglesia actual. Tales pasajes no pueden
bajo ningún concepto ser aplicados a la Iglesia Universal.

La igualdad entre hombres y mujeres exige que haya también


igualdad de ministerios.

Personalmente creo que el tema del ministerio en la mujer se


aclara mucho cuando nos preguntamos: ¿Puede Dios usar a una
mujer para exponer su Palabra? Y ¿Quién se atreverá a decir que
el Dios TODOPODEROSO no puede hacer algo?
338

El gran problema que veo con esta cuestión es: ¿Por qué limitar a
Dios? ¿Quiénes somos nosotros para decirle a Él a quien puede o
no usar? ¿No es Él Omnipotente? Si el ángel Gabriel afirmó
que nada hay imposible para Dios, ¿Tendremos que sacar al
ángel del error, será verdad como algunos afirman que DIOS NO
PUEDE USAR A LA MUJER EN EL MINISTERIO?

Espero que esta pequeña reseña sobre el verso 18: Y vosotros me


seréis hijos e hijas, nos haya ayudado a profundizar un poco más
en la cuestión de la injusta misoginia dentro de la Iglesia.

No obstante deseo cerrar este tema aclarando que la igualdad


entre hombre y mujer, tanto en dignidad como en valor; así como
su igualdad ministerial de cara a la Iglesia, no significa que hay
que desechar el orden establecido por Dios para la familia.

Como está escrito: Pero quiero que sepáis que Cristo es la cabeza
de todo varón, y el varón es la cabeza de la mujer, y Dios la
cabeza de Cristo. 1Corintios 11.3.

¿Cómo debemos entender esto? Desde luego, no como una


jerarquía de mandato ni de capacidad, como se ha querido ver,
sino de responsabilidad, servicio y sacrificio, porque los maridos
deben amar a sus mujeres como Cristo amó a la Iglesia y se
entregó así mismo por ella. Efesios 5.25.

No se trata de poder sobre la mujer, sino que hay que


comprenderlo dentro de un compromiso de amor mutuo. En ese
sentido, el hombre ama y se responsabiliza de su esposa, y ésta se
sujeta voluntariamente a su esposo. Ambos, andando en el temor
de Dios como enseña Pablo en Efesios 5.21.

Por fin llegamos al final de este tema. Ahora, como dije


anteriormente, nos toca tomar postura. ¿Seguiremos haciendo
acepción de personas, sabiendo que es contrario a la voluntad de
Dios, o comenzaremos a ver a la mujer como un canal, igual al
hombre, por el cual Dios puede hablarnos?
339

Yo hace tiempo tomé mi decisión siguiendo las instrucciones de


la Palabra de Dios, de no contradecir a Dios. Y cuando los
hombres dicen una cosa y Dios otra, prefiero creer a Dios que
nunca se equivoca.

Curiosamente, este pasaje de 2Corintios 6.18 que hemos


estudiado termina con la frase: Dice el Señor Todopoderoso. Así
que, si lo dice Él, ¿Qué dices tú? ¿Seguirás haciendo acepción de
personas ahora que sabes que no es la voluntad de Dios?
¿Contradecirás a Dios siguiendo los dictados de las tradiciones
humanas?

El resumen de lo que el apóstol ha dicho hasta aquí en la última


perícopa, es que quien desea obtener la victoria en la vida
cristiana debe salir, apartarse, y no tocar nada que pertenezca al
culto y doctrina paganos.

Esto molesta mucho a algunos pastores que han hecho del número
de sus seguidores, la meta de su “ministerio”. A éstos, les molesta
que digamos públicamente, y además por las redes sociales, que
se salgan de aquellos lugares en los que no se predique la sana
doctrina.

Muchos están enojados conmigo por el vídeo titulado: Por qué ya


no soy evangélico. En el que explico mis razones por las cuales
no me identifico con éste término.

Muchos me escriben indignados, pero también confundidos.


Porque yo no digo que la gente se salga de todas las iglesias
evangélicas. Digo que se salgan de aquellos grupos en los que la
Palabra de Dios no sea el fundamento.

Digo que no me identifico con los evangélicos. Porque bajo esa


denominación existen multitud de cosas que no son cristianas.
Todo el mundo sabe esto. Porque es notorio.
340

Díganme alguna cosa que se esté practicando en los grupos que se


hacen llamar evangélicos y que no sean conforme a la voluntad de
Dios expresada en Su Palabra. Por ejemplo:

• Evangelio de la prosperidad.
• Compra de bendiciones mediante diezmos, pactos,
primicias, siembras, etc.
• Emocionalismos extremos, más acorde con cultos paganos
como el kundali, etc.

Todo eso se está enseñando bajo el paraguas de evangélico, sin
que los “evangélicos” hagan nada para desmarcarse de esas falsas
doctrinas.

En nuestra web, junto a ese vídeo he publicado las cartas que he


cruzado con el Consejo Evangélico de las Islas Canarias en las
que se demuestran que quienes representan a los evangélicos
están más interesados en la política que en la verdad.

Pablo dice: No seáis, pues, partícipes con ellos. 8Porque en otro


tiempo erais tinieblas, mas ahora sois luz en el Señor; andad
como hijos de luz 9(porque el fruto del Espíritu es en toda
bondad, justicia y verdad), 10comprobando lo que es agradable al
Señor. 11Y no participéis en las obras infructuosas de las
tinieblas, sino más bien reprendedlas; Efesios 5.7-11.

¿Qué otra cosa podíamos hacer? ¿Quedarnos dentro significaría


participar de los pecados de todos los neopentecostales que
comercian con la fe de la gente.

No juzgues. –Me dicen. ¿Quién eres tú para decirle a los


creyentes que se salgan de las iglesias evangélicas? Cuando yo en
realidad siempre he dicho que se salgan de aquellos lugares en los
que no se les predique la sana doctrina.
341

Pero en última instancia no soy yo quien les dice que se salgan,


sino Dios mismo. Lo tenemos aquí en 2Corintios 6.17-18.
Sigamos, pues, con el estudio de la Escritura.

7.1 Así, que. En otras versiones dice: Por tanto. Este pasaje es una
clara conclusión de la perícopa anterior. Una oportuna conclusión.

Amados. Una vez más, Pablo expresa su amor por los corintios, a
pesar de todo. ¿A pesar de qué? A pesar de su actitud para con el
apóstol, que no era correcta.

Es fácil amar a quienes nos aman. ¿Sí o no? Claro. Pero ¿Resulta
fácil amar a quienes nos juzgan mal y nos rechazan? Desde luego
que no. La Palabra de Dios muestra que Jesús amó aun a quienes
le habían crucificado.

Jesús, en Mateo 5.43-48 dijo: Oísteis que fue dicho: Amarás a tu


prójimo, y aborrecerás a tu enemigo. 44Pero yo os digo: Amad a
vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a
los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os
persiguen; 45para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los
cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace
llover sobre justos e injustos. 46Porque si amáis a los que os
aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen también lo mismo
los publicanos? 47Y si saludáis a vuestros hermanos solamente,
¿qué hacéis de más? ¿No hacen también así los gentiles? 48Sed,
pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los
cielos es perfecto.

Si Dios nos amó aun cuando él sabía perfectamente que la


mayoría de la gente le rechazaría. ¿Qué debiéramos hacer
nosotros? ¿No debemos amar a todos? Pablo siguió el ejemplo de
Jesús, y amó a los corintios cuando bien mirado no lo merecían.

¿Amamos a quienes no nos aman? Seguramente no. Debemos


orar para que Dios nos de la capacidad y el amor necesario para
hacerlo.
342

Puesto que tenemos tales promesas. Porque las tenemos, ¿o no?


Claro que las tenemos.

¿A qué promesas se refiere? Se refiere a los versos anteriores en


los que Dios promete:

6.16 Su presencia.
6.17 Recibirlos como hijos.
6.17 Su paternidad, ser su Padre.

Algo que a veces olvidamos los cristianos es que las promesas de


Dios son condicionales. Muchos “creyentes” aman las promesas
de Dios, pero no quieren ni oír hablar de las condiciones que Dios
exige para que te beneficies de ellas.

¿Cuál es la condición que Dios puso aquí para recibirte como hijo
y tratarte con tu Padre? Salir del paganismo; no tocar lo inmundo.
¿Nos recibirá Dios si seguimos asociándonos con los incrédulos?
No. ¿Si seguimos practicando la idolatría? No.

Por esta razón el apóstol ordena: Limpiémonos. Esta es una justa


correspondencia para con Aquel que tanto nos da. Sabiendo como
sabemos que Él es Santo, justo es que también nosotros andemos
en santidad, a fin de agradarle.

Es interesante notar cómo el mismo Pablo se incluye en esta


exhortación que hizo a los corintios al decir: limpiémonos. ¿Qué
significa esto? Que él mismo reconoce cuán fácilmente nos
contaminamos con el pecado del mundo.

¿Qué debemos hacer si alguno se ha contaminado con algún


pecado? Como está escrito en 1Juan 2.1-3: Hijitos míos, estas
cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere
pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el
justo. 2Y él es la propiciación por nuestros pecados; y no
solamente por los nuestros, sino también por los de todo el
mundo. Recuerden también 1Juan 1.9.
343

1Tesalonicenses 3.13 para que sean afirmados vuestros


corazones, irreprensibles en santidad delante de Dios nuestro
Padre, en la venida de nuestro Señor Jesucristo con todos sus
santos.

1Tesalonicenses 4.7-8 Pues no nos ha llamado Dios a


inmundicia, sino a santificación. 8Así que, el que desecha esto, no
desecha a hombre, sino a Dios, que también nos dio su Espíritu
Santo.

1Juan 3.3 Y todo aquel que tiene esta esperanza en él, se purifica
a sí mismo, así como él es puro.

Me llama la atención cómo Pablo especifica: De toda


contaminación de carne y de espíritu. ¿Qué significa eso? Pablo
está usando la combinación total de la naturaleza humana. De ese
modo Pablo incluye toda clase de impureza.

Podemos entender que hay impureza de la carne y hay impureza


del espíritu. O también que la impureza afecta tanto a la carne
como al espíritu. Es decir, a la totalidad del ser. Por tanto,
debemos limpiarnos de toda contaminación externa e interna.

Esto no tiene nada que ver con ve demonios por todos lados. Hay
quien ve contaminación espiritual en todo. En una circunstancia
como la pobreza, o la enfermedad; en un objetos, como un libro
de otra religión; en multitud de cosas. ¿Se refiere a eso Pablo?
Desde luego que no.

Porque no toda contaminación se ve. Hay ciertos pecados que son


visibles. Pongan un ejemplo: Un cristiano se emborracha y se ve.
El borracho no puede ocultar la borrachera. Habla mal, camina
peor y da mal testimonio.

Pero hay contaminación que no se ve. Pongan un ejemplo: Un


cristiano es un hipócrita y puede ocultarlo, al menos a lo hombres.
¿Engañará a Dios? No, a Dios no podrá engañarlo.
344

Puede que alguien aparente ser cristiano, pero que en su corazón


siga siendo idólatra. Conozco a algunas personas que aun después
de estar muchos años en la Iglesia, seguían guardando alguna
imagen en su cuerpo o en su casa.

Por esa razón somos llamados a mantenernos en santidad, por


fuera y por dentro. De ahí que Pablo aboga por la separación de
todo aquello que no agrade a Dios. ¿Qué acuerdo hay entre Dios
y los ídolos?

Dios no tolera la infidelidad espiritual Éxodo 20.3-6 No tendrás


dioses ajenos delante de mí. 4No te harás imagen, ni ninguna
semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra,
ni en las aguas debajo de la tierra. 5No te inclinarás a ellas, ni
las honrarás; porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que
visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y
cuarta generación de los que me aborrecen, 6y hago misericordia
a millares, a los que me aman y guardan mis mandamientos.

Hay quienes no le da importancia a estas cosas, sin embargo ¿Se


las da Dios? Desde luego. Lo considera una infidelidad.

Pero no debemos confundir esta exhortación de Pablo con el tema


de la santidad completa e instantánea. Es más bien una
exhortación a la santidad progresiva. Como escribió a la Iglesia
en Filipo.

Filipenses 3.12-15 No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea


perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo
cual fui también asido por Cristo Jesús. 13Hermanos, yo mismo
no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago:
olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo
que está delante, 14prosigo a la meta, al premio del supremo
llamamiento de Dios en Cristo Jesús. 15Así que, todos los que
somos perfectos, esto mismo sintamos; y si otra cosa sentís, esto
también os lo revelará Dios.
345

Seguimos en 7.1 Meditando de manera sistemática la Palabra de


Dios.

Por eso dice: Perfeccionando la santidad en el temor de Dios.


¿Qué indica esta frase? Dos cosas: Primera, que la santidad se
puede perfeccionar. Segunda, cómo debe hacerse. El modo de
perfeccionarla. En el temor de Dios.

La palabra perfeccionando es un verbo presente activo. Lo cual da


la idea de seguir perfeccionando. La idea de crecer en santidad
concuerda con la idea y práctica de consagrarse al Señor cuantas
veces haga falta, a lo largo de la vida.

Esto también coincide con la idea de separarse del mundo. 6.17.

Nuestra relación con Dios debe estar fundamentada en un intenso


respeto y una profunda reverencia a Dios. Todo el tiempo de
nuestra vida. No se trata de respetarlo una vez y ya está, resuelto
el problema para siempre. Tampoco se trata de respetarlo el
domingo por la mañana, sino siempre.

¿Por qué razón hace Pablo estas advertencias? ¿No eran cristianos
los corintios?

Hay que tener en cuenta el contexto histórico de este pasaje.


Recuerden que muchos de los corintios venían de cultos paganos
de adoración a ídolos. Una vez en la Iglesia, por compromisos
con la familia, u otros motivos, seguían participando de alguna
manera.

Parte del culto pagano que se celebraba en Corinto consistía en la


práctica de la prostitución religiosa. De ahí que Pablo advirtiera
que quien se une a una ramera, una carne es con ella. 1Corintios
6.16.

Pablo les advierte aquí que todo eso les contaminaba y debían
limpiarse de todo ello. Dios es celoso de su pueblo, y demanda
exclusividad. Por esa razón había citado las Escrituras del AT en
346

2Corintios 6.16. Y por esa misma razón ahora les dice:


Esforcémonos por lograr una perfecta santidad.

En 1Corintios 1.2 ¿No les había llamado antes santos? ¿Eran o no


santos los corintios? Habían sido santificados por la obra de
Cristo, pero la santificación es también un proceso continuo en el
que los creyentes debemos estar involucrados.

También se nos dice cómo conseguirlo: En el temor de Dios. El


temor reverente, el respeto a Dios, es lo que motiva al creyente a
perfeccionar su santidad.

Como está escrito en: 1Pedro 1.17 Y si invocáis por Padre a


aquel que sin acepción de personas juzga según la obra de cada
uno, conducíos en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación;

Ya no se trata de separarse de… sino de separarse para.


Separarnos de toda falsa doctrina y prácticas paganas. Todo eso
es separarse de. Pero también debemos entender que debemos
perfeccionar la santidad en el temor de Dios. Esto es separarse
para.

¿Qué caracteriza al verdadero discípulo de Cristo? ¿El tiempo que


lleva de discípulo? ¿El conocimiento que tiene de las doctrinas?
Nada de esto. El verdadero discípulos se caracteriza por el respeto
reverente que guarda a su Señor. El deseo de un verdadero
discípulo es honrar y servir a Aquel que dio su vida por él.

Por cierto, ¿Se dan cuenta que he dicho discípulo? Pregunto: ¿Las
discípulas no deben honrar a Dios? También, desde luego. Pero
en esto se demuestra lo que decíamos.

Nuestro lenguaje da por sentado que aun cuando hablamos en


términos masculinos, nos referimos a todos en general: hombres y
mujeres. Así construimos el lenguaje.

De lo que Pablo habla aquí es de una santidad progresiva que va


desarrollándose a lo largo de toda la vida cristiana.
347

Como está escrito en 1Tesalonicenses 4.1-8 Por lo demás,


hermanos, os rogamos y exhortamos en el Señor Jesús, que de la
manera que aprendisteis de nosotros cómo os conviene
conduciros y agradar a Dios, así abundéis más y más. 2Porque ya
sabéis qué instrucciones os dimos por el Señor Jesús; 3pues la
voluntad de Dios es vuestra santificación; que os apartéis de
fornicación; 4que cada uno de vosotros sepa tener su propia
esposa en santidad y honor; 5no en pasión de concupiscencia,
como los gentiles que no conocen a Dios; 6que ninguno agravie ni
engañe en nada a su hermano; porque el Señor es vengador de
todo esto, como ya os hemos dicho y testificado. 7Pues no nos ha
llamado Dios a inmundicia, sino a santificación. 8Así que, el que
desecha esto, no desecha a hombre, sino a Dios, que también nos
dio su Espíritu Santo.

Es interesante meditar en lo subrayado. Pues, nos ayuda a


entender mejor el texto.

Así, pues, pertenecer a la familia de Dios significa buscar la


pureza moral y esforzarse por una santidad más perfecta cada día.

2. Aquí es donde lógicamente debería haber comenzado el


capítulo siete, ¿Por qué? Porque el versículo anterior pertenece al
capítulo 6 siendo su lógica conclusión.

Es conveniente que leamos, pues, este capítulo completo, aunque


después lo iremos estudiando paso a paso. Pero para mejor
entenderlo, debemos leerlo primero completo.

En este capítulo se percibe un cambio en el tono del apóstol.


Haciendo un breve repaso, habían surgido grandes conflictos
entre Pablo y los corintios, debido a que se habían mal
interpretado las enseñanzas de Pablo sobre la libertad en Cristo.

Algunos paganos usaron aquellas enseñanzas para dar rienda


suelta a su libertinaje, convirtiendo el cristianismo en una
anarquía.
348

mientras que los judaizantes le acusaron de libertino, asalariado y


muchas cosas, más.

Todas estas eran acusaciones totalmente falsas. El apóstol para


acláralo, había realizado un breve viaje, pero en vez de arreglar
los problemas, más bien se habían agudizado.

Por esa razón escribió una carta reprendiéndolos severamente.


Carta que envió por medio de su colaborador Tito.

Al no tener noticias de Tito, estaba muy preocupado, por lo que


viajó hasta Macedonia donde se encontró con él, quien le dio
buenas noticias de los corintios. Al parecer, se habían arrepentido
y sujetado a su exhortación.

La mayoría de los comentaristas están de acuerdo en que estas


palabras que siguen, las escribió después de encontrase con Tito.

Admitidnos. Haced un lugar para nosotros en vuestros corazones.


Habiéndoles mostrado su amor, les pide que ellos hagan lo
mismo. Que actúen recíprocamente.

Ya lo había hecho antes, en el 6.13. Ahora, repite su petición a la


luz de su última reflexión.

Si Dios está entre ellos y ellos son sus hijos, Satanás no debiera
tener ningún lugar entre ellos, ni en sus corazones.

Pablo enumera algunos otros argumentos en su favor y a favor de


sus colaboradores.

A nadie hemos agraviado, a nadie hemos corrompido, a nadie


hemos engañado. Tres acusaciones que había contra ellos.
¿Tenían fundamento tales acusaciones de sus enemigos? Por su
puesto que no.
349

Pablo había estado año y medio, dieciocho meses entre los


corintios y ninguno podía acusarle de estas cosas. Hechos 18.11.

Agraviado, es adikeó en griego y significa hacer alguna injusticia,


maltratar o hacer daño a alguien. Ningún corintio podía acusarle
de esto.

En Mateo 20.13-15 Jesús dijo: Él, respondiendo, dijo a uno de


ellos: Amigo, no te hago agravio; ¿no conviniste conmigo en un
denario? 14Toma lo que es tuyo, y vete; pero quiero dar a este
postrero, como a ti. 15¿No me es lícito hacer lo que quiero con lo
mío? ¿O tienes tú envidia, porque yo soy bueno?

Aquellos jornaleros de la parábola entendían que su Señor estaba


cometiendo una injusticia con ellos. ¿Era correcta su percepción?
No. Se trataba de una acusación sin fundamento. Lo mismo le
estaba pasando a Pablo. Estaba siendo acusado sin fundamento.

Pablo no había actuado mal para con los corintios. Ni tan siquiera
quiso cobrar su justo salario. Corinto fue la única congregación en
la que Pablo se negó a recibir dinero de la congregación.

1Corintios 9.18 ¿Cuál, pues, es mi galardón? Que predicando el


evangelio, presente gratuitamente el evangelio de Cristo, para no
abusar de mi derecho en el evangelio.

Quiero llamar vuestra atención sobre las últimas palabras de este


pasaje. Porque por ahí hay muchos afirmando que los siervos de
Dios no debemos cobrar de la Iglesia. Por cuanto Pablo no lo
hizo.

Pablo habla aquí de su derecho en el evangelio. ¿A qué derecho


se refiere? A ser sostenido por la Iglesia. Leamos el contexto de
este pasaje. Recuerden que la mejor manera de interpretar
adecuadamente la Escritura es teniendo en cuenta su contexto.

1Corintios 9.3-14. Contra los que me acusan, esta es mi defensa:


4
¿Acaso no tenemos derecho de comer y beber? 5¿No tenemos
350

derecho de traer con nosotros una hermana por mujer como


también los otros apóstoles, y los hermanos del Señor, y Cefas?
6
¿O sólo yo y Bernabé no tenemos derecho de no trabajar?
7
¿Quién fue jamás soldado a sus propias expensas? ¿Quién
planta viña y no come de su fruto? ¿O quién apacienta el rebaño
y no toma de la leche del rebaño? 8¿Digo esto sólo como
hombre? ¿No dice esto también la ley? 9Porque en la ley de
Moisés está escrito: No pondrás bozal al buey que trilla. ¿Tiene
Dios cuidado de los bueyes, 10o lo dice enteramente por
nosotros? Pues por nosotros se escribió; porque con esperanza
debe arar el que ara, y el que trilla, con esperanza de recibir del
fruto. 11Si nosotros sembramos entre vosotros lo espiritual, ¿es
gran cosa si segáremos de vosotros lo material? 12Si otros
participan de este derecho sobre vosotros, ¿cuánto más nosotros?
Pero no hemos usado de este derecho, sino que lo soportamos
todo, por no poner ningún obstáculo al evangelio de Cristo.
13
¿No sabéis que los que trabajan en las cosas sagradas, comen
del templo, y que los que sirven al altar, del altar participan?
14
Así también ordenó el Señor a los que anuncian el evangelio,
que vivan del evangelio.

Así, que, aunque Pablo no quiso usar de su derecho en Corinto,


¿Significa eso que no lo usó en otros lugares? De ningún modo.
Veamos por ejemplo cómo recibió dinero de los de Filipo.

Filipenses 4.10-20 En gran manera me gocé en el Señor de que


ya al fin habéis revivido vuestro cuidado de mí; de lo cual
también estabais solícitos, pero os faltaba la oportunidad. 11No lo
digo porque tenga escasez, pues he aprendido a contentarme,
cualquiera que sea mi situación. 12Sé vivir humildemente, y sé
tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para
estar saciado como para tener hambre, así para tener
abundancia como para padecer necesidad. 13Todo lo puedo en
Cristo que me fortalece. 14Sin embargo, bien hicisteis en
participar conmigo en mi tribulación. 15Y sabéis también
vosotros, oh filipenses, que al principio de la predicación del
evangelio, cuando partí de Macedonia, ninguna iglesia participó
conmigo en razón de dar y recibir, sino vosotros solos; 16pues
351

aun a Tesalónica me enviasteis una y otra vez para mis


necesidades. 17No es que busque dádivas, sino que busco fruto
que abunde en vuestra cuenta. 18Pero todo lo he recibido, y tengo
abundancia; estoy lleno, habiendo recibido de Epafrodito lo que
enviasteis; olor fragante, sacrificio acepto, agradable a Dios.
19
Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus
riquezas en gloria en Cristo Jesús. 20Al Dios y Padre nuestro sea
gloria por los siglos de los siglos. Amén.

Así, pues, Pablo no codició los bienes de los corintios. Como


estaba escrito en el décimo mandamiento de la ley de Dios: No
codiciarás la casa de tu prójimo, no codiciarás la mujer de tu
prójimo, ni su siervo, ni su criada, ni su buey, ni su asno, ni cosa
alguna de tu prójimo. Éxodo 20.17.

Él no actuó injustamente para con los corintios. Nadie podía


acusarle de predicar por dinero. No abusó de ellos. Ni tan siquiera
les exigió lo necesario para su mantenimiento, a pesar de que era
mandamiento de Cristo para todos los cristianos.

Su conducta estaba por encima de todo reproche. Actuó


irreprensiblemente.

En cambio, ¡Cuántas injusticias se cometen actualmente en la


Iglesia de Cristo! Por ejemplo: Cuando algunos pastores exigen
diezmos de la Iglesia, presionándola vilmente poniéndola bajo
maldición.

¿Se os ocurre otras? Cuando los falsos ministros cobran por las
bendiciones que Dios da.

Muchos serán acusados delante del Señor, el día en que


comparezcan ante Él. ¿Qué creen que les pasará? ¿Serán
aprobados o reprobados? Absolutamente reprobados.

Corrompido, fdseiró en griego, que significa extraviar, viciar,


destruir. Tampoco de esto podía acusarle ningún corintio. Tal
acusación era absolutamente ridícula. Aun así, los corintios se
352

estaban dejando manipular por los judaizantes que habían subido


desde Jerusalén, por lo cual habían cerrado sus corazones al
apóstol y sus colaboradores.

Sin embargo, ¿Hay quienes estén practicando este pecado en la


actualidad? Sin duda, y no son pocos los que están practicando
este pecado, y además, extraviando a otros de la verdad, ya
buscando fama o mantener su estatus social. Sin importarles
viciar o destruir a los hijos de Dios.

¿Creen que Dios permanecerá impasible ante estos farsantes del


evangelio? De ningún modo. En Ezequiel 34 habla contra tales
personas. Los falsos pastores que se aprovechan del pueblo de
Dios.

Engañado, pleonekteó en griego, que significa engañar, abarcar


demasiado, ganar ventaja. ¿Tenían fundamento para acusar de
esto a Pablo o sus colaboradores? De nuevo, la respuestas es
negativa. De ningún modo. Pero lo estaban haciendo.

Por esa razón Pablo les dirá en 2Corintios 12.17-19 ¿acaso os he


engañado por alguno de los que he enviado a vosotros? 18Rogué a
Tito, y envié con él al hermano. ¿Os engañó acaso Tito? ¿No
hemos procedido con el mismo espíritu y en las mismas pisadas?
19
¿Pensáis aún que nos disculpamos con vosotros? Delante de
Dios en Cristo hablamos; y todo, muy amados, para vuestra
edificación.

Es muy interesante descubrir lo que significaba esta palabra


pleonekteó en griego, porque es lo que muchos, que dicen servir a
Dios, hacen. Es decir, engañar abarcando demasiado para ganar
ventaja. ¿En qué os hace pensar esto?

Personalmente me parece una clara referencia a aquellos que se


apropian de las almas como si fueran suyas. Les engañan no
queriendo desprenderse de ellas; las acumulan en grandes macro
iglesias, con el único fin de sacar ventaja personal con ello.
Piénsalo.
353

Además de éste, ¿Qué otro sentido puede tener el engañar


abarcando demasiado en la Iglesia de Cristo? Creo que también
puede referirse a aquellos que pretenden estar en todo, sin dar
participación a otros. Ya sea por miedo a que le quiten el lugar, o
porque tienen miedo de no perder lo que consideran “su derecho”.

Con el repetido uso del pronombre nadie en las tres afirmaciones:


a nadie hemos agraviado,
a nadie hemos corrompido,
a nadie hemos explotado,
Pablo responde a sus acusadores, negando abierta y claramente
tales pretensiones.

Así que, estas declaraciones deben entenderse a la luz de su


petición a los corintios de que le hagan un lugar en sus corazones.
6.11-13.

Actualmente existen multitud de problemas en las iglesias,


muchos de los cuales, provocados por quienes las dirigen. Tales
problemas demandan, hoy más que nunca, la aplicación de estos
principios que ha enumerado Pablo en este pasaje.

El agravio, la corrupción, y el engaño, abundan en muchas


comunidades de “fe”, pero no deben formar parte de la
ministración de quienes dicen servir a Dios y Su Iglesia. ¿Están
de acuerdo o no? Sin duda.

Por todo esto, si quisieran volver a la pureza del evangelio ¿Qué


deberían hacer? Se hace necesario volver a los principios
establecidos en la Palabra de Dios, a fin de que la Iglesia pueda
cumplir con su función y objetivos de ser sal y luz a este mundo
perdido.

Frente al agravio: Justicia. Bien hacer, aunque suponga la


renuncia de los propios derechos.
354

Frente a la corrupción: Integridad, transparencia. Manteniendo en


todo momento, con generosidad, la fidelidad a Dios y su llamado.

Frente al engaño: Verdad, pura y sin adulterar. Sana doctrina,


sabiendo que un día tendremos que rendir cuentas delante de
Dios.

3. No lo sigo para condenaros. La intención del apóstol no era la


de responder al mal con mal, aunque eso es lo más fácil.
Especialmente cuando el mal que recibes es absolutamente
injustificado.

¿Te ha pasado alguna vez que te has sentido mal tratado? ¿Te has
sentido tentado de responder el mismo modo? ¿Qué hizo Pablo en
esa situación? Responder al mal con el bien.

¿No escribió Pablo esto mismo a los romanos? Leamos Romanos


12.17-21 Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en
paz con todos los hombres. 19No os venguéis vosotros mismos,
amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito
está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor. 20Así que, si tu
enemigo tuviere hambre, dale de comer; si tuviere sed, dale de
beber; pues haciendo esto, ascuas de fuego amontonarás sobre su
cabeza. 21No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el
mal.

¿No es eso lo que enseñó el mismo Señor Jesús? El apóstol en


1Pedro 2.19-23 nos relata el ejemplo de nuestro Señor Jesucristo:
Porque esto merece aprobación, si alguno a causa de la
conciencia delante de Dios, sufre molestias padeciendo
injustamente. 20Pues ¿qué gloria es, si pecando sois abofeteados,
y lo soportáis? Mas si haciendo lo bueno sufrís, y lo soportáis,
esto ciertamente es aprobado delante de Dios. 21Pues para esto
fuisteis llamados; porque también Cristo padeció por nosotros,
dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pisadas; 22el cual no
hizo pecado, ni se halló engaño en su boca; 23quien cuando le
maldecían, no respondía con maldición; cuando padecía, no
amenazaba, sino encomendaba la causa al que juzga justamente.
355

Posteriormente, Pablo resume las tres afirmaciones del verso


anterior. Les está asegurando que lo que dice es siempre movido
por el amor que siente por ellos. Buscando el bien de los
corintios.

Sea que el apóstol va a exhortarles con severidad, o sea que vaya


a decirles otra cosa, se encarga siempre primero de mostrarles su
profundo afecto.

Queridos amigos, hermanos, amados, incluso, hijos. Son


expresiones habituales en los escritos paulinos. ¡Cuánto tenemos
que aprender de Pablo! ¿No creen?

Si dijésemos de vez en cuando algo amable, nuestras relaciones


con los demás mejorarían considerablemente.

3. Ahora se trata de dejar atrás los desacuerdos, las acusaciones


que se le habían hecho, y todas las desavenencias, así que, una
vez más, les da muestra de su amor por ellos, con esta aclaración.

¿Qué les dice con esta frase? Les dice que se siente íntimamente
unidos a ellos, ya sea para morir o para vivir. O vivimos juntos, o
morimos juntos.

Una vez más, en su habitual maestría del uso del lenguaje, vuelve
a cambiar el pronombre, pasando del plural al singular. Habla en
primera persona a fin de estrechar lazos con los corintios.

Dicho en una paráfrasis, Pablo les está diciendo que su amor por
ellos es tan grande que, pasando por alto los insultos que había
recibido, aun estaba dispuesto a morir con ellos.

Pablo, antes moriría con los corintios que renunciar a su amor por
ellos. ¿No debiéramos todos los pastores tener el mismo amor?

Jerome Murphy-O’Connor afirma que Pablo invierte el orden de


las palabras: moriríamos o viviríamos, como una sutil invitación a
356

morir al pecado y vivir para Cristo, haciendo que el versículo 3


sea una referencia al 5.15 y por todos murió, para que los que
viven, ya no vivan para sí, sino para aquel que murió y resucitó
por ellos.

He aquí un claro ejemplo de lo que significa practicar el


mandamiento de la ley de Dios de: amarás a tu prójimo como a ti
mismo.

Santiago 2.8 Si en verdad cumplís la ley real, conforme a la


Escritura: Amarás a tu prójimo como a ti mismo, bien hacéis.

Este pasaje me recordaba las palabras de Itai a David, en 2Samuel


15.21 Y respondió Itai al rey, diciendo: Vive Dios, y vive mi señor
el rey, que o para muerte o para vida, donde mi señor el rey
estuviere, allí estará también tu siervo.

También las palabras que Ruth, la Moabita, dirigió a Nohemí, su


suegra: Pero Rut le respondió: Respondió Rut: No me ruegues
que te deje, y me aparte de ti; porque a dondequiera que tú
fueres, iré yo, y dondequiera que vivieres, viviré. Tu pueblo será
mi pueblo, y tu Dios mi Dios.

Los cristianos del primer siglo vivían con una constante amenaza
de martirio. De nuevo, después de mucho tiempo como entonces,
el peligro de morir por causa de la fe es un peligro real.

Hoy mismo, me enviaron una fotografía en la que los miembros


del mal llamado Estado Islámico, estaban decapitando a
cuatrocientas personas, sin que las autoridades internacionales
hagan nada para evitarlo. Ni tan siquiera sale en los medios de
comunicación. Como si no estuviera pasando.

¿Estarían dispuestos a morir por vuestra fe? No me respondan a


mí, sino respóndanse a sí mismos.

Siendo sinceros con nosotros mismos, algunos, ni tan siquiera


están dispuestos a esforzarse por ser fieles a Dios en la asistencia
357

a los cultos y estudios, o en ser puntuales para mostrar respeto a


Dios. Cristianos de ese tipo, ¿estarían dispuestos a morir por su
fe? ¿Qué creen?

Muchísimas personas que se hacen llamar cristianos ni tan


siquiera se han arrepentido de sus pecados, siguen practicándolos
en privado. ¿Qué significa eso? Significa que ni tan siquiera son
verdaderos creyentes.

Aun entre aquellos que son verdaderos cristianos, es difícil hallar


a personas comprometidas con su fe, hasta el extremo de
esforzarse por conocer más a Dios. Muchos menos por servirle.
¿Estarán esos cristianos dispuestos a confesar su fe en un entorno
contrario?

Creo que todos nosotros debemos meditar sobre estas cuestiones,


porque estamos es un tiempo en que necesitamos definir nuestra
posición. ¿Hasta dónde llega tu fe? ¿Hasta qué punto llega tu
determinación de confesar a Cristo delante de los hombres?
Mateo 10.32-33.

¿Asumirías riesgos? Y si alguno osa afirmar que sí, ¿Por qué


entonces les cuesta tanto cumplir en las cosas pequeñas? Si no
son fieles en lo poco, ¿creen que Dios les pondrá sobre lo mucho?
Mateo 25.20, 23. De ninguna manera.

Pablo se estaba identificando con los corintios para morir y para


vivir juntamente con ellos. Quiera Dios que también nosotros nos
identifiquemos con el apóstol ya sea para morir o para vivir.

4. Mucha franqueza tengo con vosotros. ¿Qué les está diciendo


Pablo con esta expresión? Que es sincero al hablarles lo que sigue
a continuación.

¿Creen que la sinceridad es importante en una relación? Sin duda.


¿Suelen ser sinceros en vuestras relaciones? Más os vale, de lo
contrario, vuestras relaciones no prosperarán.
358

Hay que ser sinceros y hablar la verdad. Como está escrito en


Efesios 4.25 Por lo cual, desechando la mentira, hablad verdad
cada uno con su prójimo; porque somos miembros los unos de los
otros.

Esto es un mandamiento apostólico. Sin embargo, damos mucha


importancia a ciertos mandamientos, y sin embargo a otros no.
¿Eres selectivo en el cumplimiento de la voluntad de Dios?

Esto pasa mucho en la secta de los judíos mesiánicos. Escogen


algunos mandamientos y desechan otros sin tener en cuenta que la
Ley es un bloque. O te justifica por la ley, o te justificas por la fe
en Cristo.

¿Qué se necesita para que en una relación haya franqueza,


sinceridad? Confianza. ¿Qué ocurre cuando en una relación, ya
sea de pareja o de hermanos no hay confianza? Que no prospera;
se estropea, por temor al engaño.

Como ya dijimos anteriormente, cuando Pablo se encuentra con


Tito y recibe información de los corintios y de su cambio de
actitud para con el apóstol, Pablo les podía hablar con toda
sinceridad.

Pablo se congratulaba de dicho cambio, ¿Qué le aportó al apóstol


el cambio operado en los corintios? Consolación y gozo
sobreabundante, aun en sus tribulaciones. Por eso les dice:

Mucho me glorío con respecto de vosotros. Es decir: Me siento


orgulloso de vosotros. ¿Es bueno o malo que te digan algo así?
Sin duda, es bueno.

Sabiendo que es bueno ¿Te agradaría recibir tales palabras?


¿Acostumbras a decirlo a otros; a tu pareja, a tus hijos, o a
algunos hermanos, incluso a compañeros de trabajo?

¿Qué efecto produciría en ellos? El mismo que en nosotros. ¿No


se sentirían reconfortados? Desde luego. ¿Por qué no practicarlo
359

más a menudo? Alentémonos unos a otros, con palabras


estimulantes.

Pablo dice aquí: lleno estoy de consolación. La palabra griega que


se traduce por consolación es kaleó, que se traduce también de
diferentes maneras según el contexto. Significa: alentaos,
consolaos, animaos, exhortaos... Veámosla en algunos pasajes.

2Corintios 13.11 Por lo demás, hermanos, tened gozo,


perfeccionaos, consolaos, sed de un mismo sentir, y vivid en paz;
y el Dios de paz y de amor estará con vosotros.

Este pasaje ¿A qué nos llama? A responsabilizarnos por los


demás. A ocuparnos en la perfección de los hermanos, en su
consolación, en alcanzar un mismo sentir y la presencia del Dios
de paz y amor.

Me recuerda también el pasaje de Efesios 4.11-12 que enseña el


objetivo de los ministerios: Y él mismo constituyó a unos,
apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros,
pastores y maestros, 12a fin de perfeccionar a los santos para la
obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo.

1Tesalonicenses 4.18 Por tanto, alentaos los unos a los otros con
estas palabras.

Estos textos contienen un mandato apostólico, inspirado por el


Espíritu Santo.

1Tesalonicenses 5.11 Por lo cual, animaos unos a otros, y


edificaos unos a otros, así como lo hacéis.

¿Qué es lo contrario a edificar? Destruir. ¿En qué nos ocupamos


más? Esta es una reflexión que todos debemos hacer.

Hebreos 3.12-13 Mirad, hermanos, que no haya en ninguno de


vosotros corazón malo de incredulidad para apartarse del Dios
vivo; 13antes exhortaos los unos a los otros cada día, entre tanto
360

que se dice: Hoy; para que ninguno de vosotros se endurezca por


el engaño del pecado.

Así que tenemos este mandamiento: Consolarnos, alentarnos,


animarnos, exhortarnos los unos a los otros cada día. La cuestión
es: ¿Lo hacemos?

Hay otros términos que también nos exhortan a lo mismo. Como


por ejemplo oxus en Hebreos 10.24 Y considerémonos unos a
otros para estimularnos al amor y a las buenas obras.

Así que, cuando Pablo, como un padre con sus hijos, se siente
orgulloso de ellos y les dice: Mucho me glorío de vosotros. Les
está consolando, alentando, animando, exhortando y estimulando.

Al mismo tiempo les dice: Lleno estoy de consolación. ¿No os


recuerda esto a 2Corintios 1.3-7? Bendito sea el Dios y Padre de
nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda
consolación, 4el cual nos consuela en todas nuestras
tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los
que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación
con que nosotros somos consolados por Dios. 5Porque de la
manera que abundan en nosotros las aflicciones de Cristo, así
abunda también por el mismo Cristo nuestra consolación. 6Pero
si somos atribulados, es para vuestra consolación y salvación; o
si somos consolados, es para vuestra consolación y salvación, la
cual se opera en el sufrir las mismas aflicciones que nosotros
también padecemos. 7Y nuestra esperanza respecto de vosotros es
firme, pues sabemos que así como sois compañeros en las
aflicciones, también lo sois en la consolación.

Muchas de las aflicciones por las que pasamos, son en realidad la


escuela de Dios en la que nos capacita para ayudar a nuestros
hermanos en la fe. ¿Por qué permite Dios que un siervo suyo
padezca? ¿Por qué padecemos los hijos de Dios? ¿No podría Dios
evitarlo? Sí, Dios podría evitar el sufrimiento de sus hijos, pero
debemos entender tres cosas:
361

1.- No sufrimos por causa de Dios. Sino de nuestros pecados o del


pecado de otros.

2.- Si Dios interviniese en cada asunto nuestro, también nos


quejaríamos de su intervencionismo. Nos sentiríamos demasiado
controlados.

3.- Aunque Dios no es el causante de nuestros sufrimientos, los


usa en nuestro beneficio y el de otros. Pues, cuando sufrimos
contamos con su consuelo, lo cual nos capacita para consolar a los
demás.

En todas las aflicciones por las que Pablo atravesó, recibió


consolación. Por eso dice: Lleno estoy de consolación. Lo que le
capacitó para poder consolar a los hermanos.

¿Qué debemos hacer a la luz de un pasaje como este? Cumplir


con la voluntad de Dios, consolándonos mutuamente. ¿Has
consolado a alguien? ¿Cómo te sentiste?

Más adelante, el apóstol abundará en este tema en los versos 6-7.

Sobreabundo de gozo en todas nuestras tribulaciones. Tal


consuelo, le llenó el corazón de gozo aun en medio de las
tribulaciones.

¿Has tenido alguna vez esa experiencia? Cuando todos esperaban


que estuvieras derrumbado, tú mantenías la calma, y la paz, y aún
el gozo de Dios gobernaba tu vida. Sólo Dios puede hacer algo
así.

Hasta aquí hemos visto el problema de los corintios, y el obrar de


Dios, por la carta de Pablo y la intercesión de Tito; hemos visto el
arrepentimiento de la iglesia y el gozo de Pablo. Como si de un
cierre feliz, a un mal capítulo se tratara.

¿Habría sido posible ese final si Pablo no hubiera obrado como lo


hizo? Desde luego que no. Como está escrito en Hebreos 12.11 Es
362

verdad que ninguna disciplina al presente parece ser causa de


gozo, sino de tristeza; pero después da fruto apacible de justicia a
los que en ella han sido ejercitados.

¿A quién le gusta que le llamen la atención, o lo reprendan? A


nadie le gusta la disciplina. Pero ¿Qué hubiera sido de nuestra
vida si nunca nos hubieran disciplinado?

Actualmente muchos padres están en contra de la disciplina en el


hogar, dejan a los hijos hacer lo que quieran por temor a
traumatizarlos. ¿Qué creen que pasará con ellos? Al final los
traumatizados son los padres, porque no podrán controlar a esos
niños cuando crezcan.

Lo malo no es que eso ocurra en cualquier familia, lo malo es que


ocurra también en familias cristianas. Cuando un padre cristiano
no disciplina a sus hijos está pecando de soberbia, creyéndose
más sabio que Dios. Pues, Dios al que ama disciplina. Hebreos
12.6. ¿Se habrá equivocado Dios? ¿Tendrán razón los psicólogos?
¿Qué creen? ¿Qué dice la Escritura?

Leamos Proverbios 13.24 El que detiene el castigo, a su hijo


aborrece; Mas el que lo ama, desde temprano lo corrige.

Hay hijos que cuando llegan a la adolescencia creen que ya saben


todo cuanto deben saber. Piensan que saben más que sus padres y
madres, y se rebelan contra toda disciplina. No quieren cumplir
con sus estudios, ni a obedecer en casa, se rebelan contra todo y
contra todos. ¿Qué futuro creen que les espera?

Yo se lo diré. Leamos Proverbios 29.1 El hombre que reprendido


endurece la cerviz, De repente será quebrantado, y no habrá para
él medicina.

Si esto le ocurre al hombre, ¿qué le ocurrirá al muchacho?


363

En cambio para el hijo que escucha y recibe los consejos, está


escrito el Proverbio 4.10 Oye, hijo mío, y recibe mis razones, Y se
te multiplicarán años de vida.

Para unos y otros, para padres e hijos, está escrito el Proverbio


19.2-3 El alma sin ciencia no es buena, Y aquel que se apresura
con los pies, peca. La insensatez del hombre tuerce su camino, Y
luego contra Jehová se irrita su corazón.

Pablo tuvo que disciplinar a los corintios. Fue necesario


entristecerlos con una palabra clara, directa, dura, pero fue
necesario para que reaccionaran y abandonaran la necedad. De lo
contrario ¿Qué hubiera pasado? Hubieran seguido en sus pecados,
y se podrían haber perdido.

Actualmente los distintos grupos religiosos están llenos de


pleitos, gente enfrentada y resentida, heridas abiertas y amargura
de alma.

Gran parte de esta situación tiene que ver con el tipo de ministros
que están al frente de los diversos grupos. Unos porque son los
causantes de tales conflictos; y otros porque aunque no los
provoquen ellos, tampoco se atreven a enfrentarlos.

Ya no se practica la disciplina en las iglesias. ¿Saben por qué?


Porque han hecho del número de miembros su único objetivo, y
todo lo que sea reducir ese número lo desechan. Por esa razón,
consienten el pecado y el mal.

Muchos grupos están llenos de gentes que llevan mucho tiempo


“supuestamente” siendo creyentes, pero que viven peor que
muchos que no son cristianos. ¿Por qué razón ocurre esto?
Precisamente porque no hay quien les llame la atención, ni les
corrija.

Después de Cristo, Pablo es el ejemplo a seguir. En 1Corintios


11.1 Pablo dijo: Sed imitadores de mí, así como yo de Cristo.
364

También dijo en Filipenses 3.17-19 Hermanos, sed imitadores de


mí, y mirad a los que así se conducen según el ejemplo que tenéis
en nosotros. 18Porque por ahí andan muchos, de los cuales os dije
muchas veces, y aun ahora lo digo llorando, que son enemigos de
la cruz de Cristo; 19el fin de los cuales será perdición, cuyo dios
es el vientre, y cuya gloria es su vergüenza; que sólo piensan en
lo terrenal.

Sin embargo, en Gálatas 2.20 dijo algo aún mejor, más profundo
y maduro, dijo: ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí. Todos
conocen esta frase.

¿Se imaginan una Iglesia llena de cristianos a través de los cuales


Cristo pudiera obrar con libertad, una Iglesia en la que todos
pudieran decir esto mismo?

Muchos quieren poder decirlo, pero no pueden. ¿Cuál creen que


es el problema? El pecado. ¿Dónde creen que está la clave de la
victoria en la vida cristiana y en el ministerio? No en esta frase de
ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí, sino en la anterior. Con
Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive
Cristo en mí.

Sin cruz, no hay vida de Cristo en nosotros. Sin lucha no hay


victoria. Sin muerte no hay resurrección. El cristianismo sin
Cristo es un fraude. Desgraciadamente es el que más abunda hoy.

Actualmente abunda el cristianismo de nombre, compuesto por


mucha gente que habla de Cristo, sin conocerle; cuando citan la
Biblia lo hacen de oídas, porque no tienen cultura bíblica, no
estudian; gente que no quiere ni oír hablar de la cruz con Cristo,
sino sólo de promesas, bendiciones y beneficios.

¿Has encontrado alguna vez un fruto vacío? ¿Un cacahuete, una


pipa de girasol sin nada dentro? Cuando un fruto sólo tiene
cáscara, ¿Qué decimos de él? Se dice que es vano. No sirve para
nada. Para perder el tiempo. Todo esfuerzo que realices con él es
365

inútil. Así hay muchos creyentes hoy, sólo son cáscara que no
tienen nada por dentro.

Personas así, suelen repetir como papagayos: Amén, a todo


cuanto le dicen sin saber si es verdad o mentira. Amén, repiten.
Amén. Mientras los verdaderos cristianos, conocedores de la
Palabra de Dios, nos asombramos de cuánto fanatismo religioso
es posible encontrar en gente así.

Hoy se predican muchos falsos evangelios, con nombre de


cristianos, pero sin los frutos del Espíritu Santo. Vanidad de
vanidades, todo es vanidad. Un grupo así es el resultado de un
ministerio también vacío, vano; de gente que no tiene nada que
dar.

Ministros que para esconder su ignorancia, disfrazan sus errores


de nueva revelación. “No hace falta estudiar tanto”, te dicen.
¿Hermenéutica, qué hermenéutica estudió Pedro o Juan? De ese
modo, excusan su falta de preparación.

En estos días me dijo un supuesto pastor: “usted lo que tiene que


hacer es orar más y buscar al Espíritu Santo para que le de
revelación”. Con eso me estaba diciendo que no debía estudiar
tanto.

Si yo no orase, sino buscara al Espíritu Santo, seguramente no


enseñaría lo que enseño, sino que estaría propagando los mismos
errores que ellos propagan de oídas.

Como suelo decir, algunos se han preparado en la universidad de


la campana. Con eso quiero decir que se dejan llevar del oído, sin
comprobar si lo que oyen es verdad o no.

En Mateo 7.15-20 Jesús dijo: Guardaos de los falsos profetas,


que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son
lobos rapaces. 16Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen
uvas de los espinos, o higos de los abrojos? 17Así, todo buen
árbol da buenos frutos, pero el árbol malo da frutos malos. 18No
366

puede el buen árbol dar malos frutos, ni el árbol malo dar frutos
buenos. 19Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y echado
en el fuego. 20Así que, por sus frutos los conoceréis.

¿Estaba hablando de frutos? Por supuesto que no. ¿De qué estaba
hablando Cristo? De profetas. Falsos profetas que aparentan ser
siervos de Dios, pero que en realidad son lobos rapaces. Aquellos
que clamarán diciendo: Señor, Señor…

¿Cuál será la recompensa de tales profetas? Será oír de Jesús:


Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad. Mateo
7.21-23.

¿Qué hubiera sucedido con los corintios si hubiesen seguido


creyendo a los falsos apóstoles y profetas que habían llegado de
Jerusalén? Se hubieran perdido. Con Pablo, en cambio, estaban
siendo guiados a la cruz de Cristo.

Actualmente también hay falsos apóstoles y profetas. Gente


perversa que negocia con la fe de los demás. Gente que por
enriquecerse se convierten en piedras de tropiezo para todos
aquellos que quieren acercarse a Dios.

También sabemos cuál será la recompensa de estos. Mateo 18.6-


7.

Ante los conflictos debemos mirar las vidas de las personas. Su


estilo de vida dice mucho de ellos. Los frutos hablan más fuerte
que las palabras.

Pablo se sentía feliz, no tanto porque su ministerio se estaba


viendo reconocido, sino porque se habían reconciliado con Dios.
Lo que alegra el corazón de los verdaderos siervos de Dios no es
una iglesia con mucha gente, ni un local grande y cómodo, ni el
respaldo de las autoridades políticas o civiles, ni la fama, ni el
poder, ni el dinero que tengan en su cuenta bancaria.
367

Lo que alegra el corazón de un verdadero siervo de Dios es ver


que los cristianos permanecen fieles a Dios, andando en la verdad.
Esto es lo que vemos en las Escrituras en aquellos auténticos
hombres de Dios, que dieron sus vidas por el evangelio. 2Juan 4;
3Juan 3-4.

Por eso Pablo les escribe a los Filipenses 2.14-18 Haced todo sin
murmuraciones y contiendas, 15para que seáis irreprensibles y
sencillos, hijos de Dios sin mancha en medio de una generación
maligna y perversa, en medio de la cual resplandecéis como
luminares en el mundo; 16asidos de la palabra de vida, para que
en el día de Cristo yo pueda gloriarme de que no he corrido en
vano, ni en vano he trabajado. 17Y aunque sea derramado en
libación sobre el sacrificio y servicio de vuestra fe, me gozo y
regocijo con todos vosotros. 18Y asimismo gozaos y regocijaos
también vosotros conmigo.

Pablo no les dice: asidos a las revelaciones del Espíritu, sino de la


Palabra de vida. Toda la revelación que necesitamos para nuestra
salvación está contenida en este maravilloso libro. La Biblia.

5-7. En los versos que siguen, Pablo vuelve al plural para


manifestar la agonía que habían sufrido, tanto él como sus
colaboradores.

¿Por qué estos cambios continuos del apóstol del singular al


plural y viceversa? Tiene un sentido. Cuando Pablo les va a
exhortar, usa el singular; cuando va a hablar de méritos usa el
plural. Para no abrogarse la gloria él solo.

La razón, pues, es la humildad del apóstol. Sello inigualable de


auténtico siervo de Dios.

Ningún reposo tuvo nuestro cuerpo. Aun cuando puedo


comprenderlo, no me hace ninguna gracia los comentarios que
algunos hacen contra los siervos de Dios.
368

Puedo comprender que debido a los falsos pastores, la gente esté


alerta y traten de discernir qué pastor sirve a Dios y cuál pretende
servirse de él.

Sin embargo, algunos están llegando demasiado lejos, pues, en su


celo y poco conocimiento, están negando el ministerio que Dios
mismo constituyó. “No necesitamos pastores”, dicen. Aun cuando
está escrito que Dios enseña justamente lo contrario. Efesios 4.11-
16.

¿Hemos llegado a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo


de Dios? Desde luego que no. ¿Hemos llegado a un varón
perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo?
Tampoco.

¿Es la Iglesia lo suficientemente madura como para no dejarse


llevar por todo viento de doctrina? Dese luego que no. ¿Sigue la
verdad en amor? Tampoco. Todas estas cosas hacen necesarias
que aun siga existiendo el ministerio pastoral. Esa es la voluntad
de Dios.

Es fácil comprender que no nos gusta tener a alguien que nos


enseñe, y mucho menos que nos corrija. Pero esa es la voluntad
del Señor.

Pablo cuando estuvo en Macedonia, aprovechó bien su tiempo, de


modo que no tuvo ningún reposo. ¿Qué le aportó tanto trabajo y
desvelo? Tribulaciones.

Sino que en todo fuimos atribulados. No es lo que alguien puede


esperar de su afán y trabajo. Pero es lo que Pablo recibió.

Hablemos ahora de ¿Cuáles fueron las razones de sus


tribulaciones? Cuando dice: De fuera, conflictos; ¿A qué se
refiere Pablo con esta expresión? A las circunstancias adversas
que enfrentó en Macedonia a causa de sus adversarios.
369

Hechos 16.23 Después de haberles azotado mucho, los echaron


en la cárcel, mandando al carcelero que los guardase con
seguridad.

Gracias a Dios sabemos cómo acabó esta historia. Lo recuerdan?


Con la conversión y el bautismo del carcelero y los que estaban
en su casa. Hechos 16.32-34.

¿Podemos deducir que siempre que un cristiano sufra persecución


y cárcel por causa de la fe, Dios intervendrá y le librará
milagrosamente con poder? Desde luego que no.

El libro de los Hechos es un libro histórico. Si lo tomamos como


doctrinal cometeremos errores como quienes pretenden repetir
cada día el pentecostés; o la elección de apóstoles; o cualquier
otro de los eventos que narra.

Hechos no fue escrito para que la Iglesia supiera cómo debe


conducirse, para eso están las Palabras del Señor Jesús y las
epístolas que desarrollan la doctrina cristiana. Hechos fue escrito
para dar testimonio de que el encargo que Cristo dio a los
apóstoles fue cumplido.

Sin embargo, en esta ocasión Dios respaldó a sus siervos, porque,


como está escrito: a los que aman a Dios, todas las cosas les
ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son
llamados. Romanos 8.28.

Sea que Dios intervenga, o no; sea que seamos liberados, o no; lo
que sí sabemos es que nada ocurre sin que Dios lo sepa.

Hay muchos que no han sido llamados conforme al propósito de


Dios. Sino que se han colocado así mismos en el púlpito.

¿Qué puede mover a estas personas a constituirse a sí mismos


como pastores? Unos que desean hacer comercio con la fe de las
gentes ignorantes; otros, la ambición de notoriedad.
370

¿Cuál será el fin de aquellos que se autoproclaman pastores y


apóstoles, y otros títulos más? Éstos, como los hijos de Coré,
tendrán que enfrentar el justo juicio de Dios. Número 16.

Hay otros pasajes, que ya hemos visto sobradamente, en los que


el apóstol habla de sus tribulaciones, como Hechos 17.5 y
1Corintios 15.30-32.

En muchos países, es fácil ser pastores. En EEUU, aquí en


España, o en Latino América es relativamente fácil. Actualmente
incluso muchos se autoproclaman pastor. Claro que, ¿Es pastor
quien se pone a sí mismo de pastor? Desde luego que no.

¿Qué les parece? ¿Se autoproclamarían estos falsos pastores en


países como Corea del Norte, Irak, Afganistán, o Siria? ¿Qué
piensan? Imagino que no. ¿Por qué no? Porque allí los pastores no
se hacen ricos predicando falsos evangelios de prosperidad, allí
son perseguidos por predicar la fe en Jesús.

¿Es el ministerio visto desde fuera igual que desde dentro? Desde
luego que no. Pues, conlleva aflicciones, conflictos, temores, y
otras muchas cosas. Tribulaciones.

Muchas personas me escriben buscando respaldo para que les


ayude a comenzar una iglesia. Que les ayude a ser pastores. Para
que les de “cobertura ministerial”.

Algunos son tan descarados que incluso me piden que les respalde
económicamente. Cuando les digo que deben prepararse para el
ministerio, la mayoría afirma que ya está suficientemente
capacitado.

Que ya saben cuanto deben saber para estar en el ministerio. Sin


embargo, por sus escritos, puedo saber que no es así. No lo saben
pero están llenos de falsas doctrinas aprendidas de oídas, pero no
del estudio serio de las Escrituras.
371

Pablo dice en todo fuimos atribulados. En 1Corintios 16.9 dijo:


porque se me ha abierto puerta grande y eficaz, y muchos son los
adversarios.

Si no hay nada de malo en el evangelio ¿Por qué razón levanta


tantos adversarios? Porque siguen la corriente de este mundo, y
huyen de la luz porque sus obras son malas. Juan 3.20.

Siempre que queramos exponer la verdad del evangelio,


encontraremos adversarios que nos atribularán, o al menos lo
intentarán. Lo cual demanda de todo verdadero cristiano, valor.

Por ese motivo Pablo les dijo a los Filipenses 1.27-30 Solamente
que os comportéis como es digno del evangelio de Cristo, para
que o sea que vaya a veros, o que esté ausente, oiga de vosotros
que estáis firmes en un mismo espíritu, combatiendo unánimes
por la fe del evangelio, 28y en nada intimidados por los que se
oponen, que para ellos ciertamente es indicio de perdición, mas
para vosotros de salvación; y esto de Dios. 29Porque a vosotros
os es concedido a causa de Cristo, no sólo que creáis en él, sino
también que padezcáis por él, 30teniendo el mismo conflicto que
habéis visto en mí, y ahora oís que hay en mí.

¿Qué se necesita para permanecer firme combatiendo por la fe del


evangelio a pesar de los conflictos externos? Hace falta valor y
también dignidad.

Pablo sigue diciendo: de dentro, temores. ¿Podía Pablo temer?


Desde luego. Por mucha fe que tuviera, es lógico que enfrentara
temores. El miedo de lo que pudiera ocurrirle, no sólo a él sino
también a sus colaboradores, debía provocarle un estado de estrés
continuo.

En toda aquella región tuvo que enfrentar una oposición terrible.


En Troas, Éfeso, Macedonia, etc. Sin duda, un verdadero
conflicto interno.
372

La Escritura está llena de exhortaciones diciendo: No temas. ¿Por


qué será? ¿No será porque el ser humano teme muchas cosas?
¿Han tenido temores? Algunos incluso siguen teniéndolos.

Hay quiénes piensan que si tienen algún temor es porque están en


pecado. ¿Qué creen? Algunas de estas exhortaciones a no temer
se hicieron a buenos siervos de Dios, también a Pablo se le dijo:
No temas, Hechos 18.9; 27.22-24.

Muchas veces vamos a tener motivos para temer, cuando estés en


una de esas situaciones, recuerda estas palabras del Señor: No
temas.

En los Salmos tenemos algunas de las frases más hermosas de


Dios, diciéndole a su pueblo que no tema:

Isaías 41.10 No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes,


porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré,
siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.

Yo no sé si les pasa igual, pero a mí personalmente me encanta y


me anima saber que el mismo Dios que dijo estas palabras a
Israel, es el que le dijo a Pablo: No temas.

Isaías 41.13 Porque yo Jehová soy tu Dios, quien te sostiene de tu


mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudo.

Saber que el Dios de Israel, el Dios de Pablo, es nuestro propio


Dios, me llena de ánimo y aliento. Yo puedo hacer mías estas
palabras.

Isaías 43.1-3 Ahora, así dice Jehová, Creador tuyo, oh Jacob, y


Formador tuyo, oh Israel: No temas, porque yo te redimí; te puse
nombre, mío eres tú. 2Cuando pases por las aguas, yo estaré
contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el
fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti. 3Porque yo
Jehová, Dios tuyo, el Santo de Israel, soy tu Salvador;
373

¡Qué bueno saber que tenemos un Señor que es real! Dios es


todopoderoso, Omnipotente, y nos ha prometido no
desampararnos ni dejarnos nunca. Hebreos 13.5.

6. Pero Dios… ¡Qué bueno que siempre esté Dios de por medio!
Pero Dios, que consuela a los humildes, nos consoló con la
venida de Tito.

¿Abandonaría Dios a sus siervos en medio de la tribulación?


Jamás nos abandona. Aun cuando no intervenga directamente. Si
tenemos que pasar por experiencias fuertes y dolorosas, nos dará
la fuerza y el valor para hacerlo, de manera que le glorifiquemos.

¿No hizo eso mismo con Su propio Hijo Jesús? ¿Cuántas veces
oró Cristo que el Padre pasara de Él aquella copa? Hasta tres. ¿Le
libró el Padre de tener que ser prendido, torturado y morir en la
cruz? Gracias a Dios, no. Pues de haberlo hecho, ahora nosotros
seguiríamos perdidos en nuestros pecados.

¿Qué hizo entonces Dios? Lo fortaleció. Lo consoló. Así mismo


también a nosotros nos consolará cuando tengamos que atravesar
algunas tribulaciones.

¿No llamó Jesús al Espíritu Santo, el Consolador? Juan 14.16-18


Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté
con vosotros para siempre: 17el Espíritu de verdad, al cual el
mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero
vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en
vosotros. 18No os dejaré huérfanos; vendré a vosotros.

¿Han sentido alguna vez el profundo consuelo del Espíritu de


Dios aliviando vuestro dolor? Yo le he sentido en momentos en
que le fallé al Señor y acudí a Él en arrepentimiento y súplica. El
Espíritu de Dios trajo a mi corazón palabras de consuelo y ánimo
que me devolvieron la fe y el amor por su obra.

Juan 14.26-27 Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el


Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os
374

recordará todo lo que yo os he dicho. 27La paz os dejo, mi paz os


doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro
corazón, ni tenga miedo.

Para el apóstol no cabía la menor duda, Dios era la fuente de su


consolación. Por eso en Efesios 1.3 escribió: Bendito sea el Dios
y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda
bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo.

7. El informe de Tito muestra a una iglesia en la que Dios está


obrando, donde la reconciliación se efectúa por obra del Espíritu
Santo, y donde el amor hace posible la reconciliación y la paz,
entre sus miembros.

¡Qué triste cuando no dejamos que el Espíritu de Dios obre en


nuestros corazones, cuando nos resistimos a su voluntad y
actuamos en la carne! Pero ¡Qué bueno ver la mano de Dios
obrando en las vidas! ¡Qué esperanza al ver vidas cambiadas!
¡Dios sigue vivo!

En ocasiones los conflictos vienen a nuestras vidas para


ayudarnos a crecer y madurar en la fe. He visto a muchos
cristianos desanimarse y darse por vencido justo en la prueba.
Cuando más fe necesitaron, les falló.

Justo antes de avanzar se dieron por vencidos. Se estancaron y no


siguieron adelante. ¡Triste error!

Que metas la pata, cometas un error, falles, ya sea a un hermano,


a la Iglesia, o al mismo Dios, no es motivo para darse por
vencido. Sino para aprender.

¿Qué actitud adoptas cuando estás siendo tratado por la mano de


Dios? ¿Cuántos conocen Romanos 8.28? ¿Cuántos conocen como
sigue? Es decir, ¿Cuántos conocen Romanos 8.29? Qué
enseñanza sacas de las palabras de Pablo en este pasaje?
375

Recuerda que Dios es el Buen Alfarero que nos modela, porque


quiere hacernos a la imagen de Cristo. Para ello, nos trata por
medio de las circunstancias, ya sean de un tipo o de otro.

Por esa razón dice Proverbios 30.8-9: Vanidad y palabra


mentirosa aparta de mí; No me des pobreza ni riquezas;
Manténme del pan necesario; 9No sea que me sacie, y te niegue, y
diga: ¿Quién es Jehová? O que siendo pobre, hurte, Y blasfeme el
nombre de mi Dios.

No es la riqueza ni la pobreza, sino nuestra actitud ante éstas.


Como siempre digo, no son las circunstancias que rodean nuestra
vida, sino cómo reaccionamos ante las circunstancias.

La severa carta de Pablo y la mediación del ministerio de Tito


habían surtido efecto. El resultado: Arrepentimiento de los
corintios, bendición que alegraba el corazón del apóstol del
Señor.

No cabe duda de que Tito trajo a Pablo un buen informe. Un


informe consolador. Los corintios seguían decididos a permanecer
en el camino correcto, amando a Dios y Su Palabra; así como
reconociendo el trabajo y labor de los siervos de Dios.

La labor de Tito fue impecable. Había cumplido sobradamente la


misión que se le había encomendado. ¡Cuán pocos siervos fieles
quedan entre las filas de la Iglesia! ¡Qué difícil encontrar personas
dispuestas a servir a Dios, de verdad!

Muchos emprenden el servicio por las luces, pero no quieren


saber nada de las sombras. Toda luz produce sombras. Es cierto
que el ministerio tiene algo que atrae a muchos. Pero también
tiene mucho que hace huir a demasiados.

Ya he dicho en otra ocasión que sólo en los EEUU más de 1500


pastores abandonan el ministerio cada año. Pasa como con el
matrimonio, cada año se casan multitud de parejas, pero tampoco
son pocos los que cada año acaban divorciándose.
376

Se buscan los beneficios del ministerio, pero no la


responsabilidad. Igualmente pasa en el matrimonio. Se buscan los
beneficios, pero no el compromiso que eso supone. Recuerden
siempre que no hay beneficios sin compromiso.

Hoy en día no es fácil encontrar a personas dispuestos a negarse a


sí mismas para servir a otros. Especialmente difícil es cuando
aquellos a quienes debes servir, no son agradecidos, sino más bien
todo lo contrario.

Tito estaba al tanto del trato de los corintios al apóstol. Aun así,
fue el fiel portador de la carta que Pablo les había escrito. Carta
que con toda seguridad Tito conocía. Cuyo contenido no era grato
de oír para los corintios.

Tito debió leer la carta de Pablo públicamente en la asamblea y


responder las dudas y preguntas que le hicieran, intentando que
comprendieran las verdaderas intenciones del apóstol, expresadas
en el 2.3-4.

¿Creen que le resultaría fácil a Tito? De ningún modo. La


responsabilidad asusta. En multitud de ocasiones nos vemos
enfrentados a situaciones difíciles que demandarán de cada uno
de nosotros un esfuerzo sincero, un compromiso de fidelidad a
Dios y a la Iglesia. No será fácil, pero si respondemos como Dios
quiere, saldremos fortalecidos y bendecidos.

Tito no sólo debió leer la carta de Pablo en público, sino que


además, debió presidir el asunto disciplinario de aquel que estaba
en pecado con su madrastra. 2.5-11.Temas nada sencillos de
dirimir.

Por si todo esto fuera poco, llevaba el encargo de preparar la


ofrenda para los hermanos de Jerusalén, que Pablo se había
comprometido a recoger, 8.6. Todo esto, después de una breve
visita que Pablo les había hecho y que no resultó ser nada grata,
2.1.
377

Aun así, a pesar de que su tarea no era nada fácil, ¿Cumplió Tito
su cometido? Sin duda, sobradamente. Ayudó a que los corintios
cambiaran su actitud para con el apóstol. Realmente fue un
instrumento en las manos del Señor para la edificación de la
Iglesia.

Un informe brillante en pocas palabras. Tito dijo a Pablo que


había sido consolado por los corintios; ¿Creen que no debieron
surgir voces en contra de Pablo? Con toda seguridad.

Aun así, Tito sólo le hizo saber del afecto que los corintios le
tenían al apóstol; El llanto que sin duda era fruto del
arrepentimiento; la solicitud que tenían por Pablo. Es decir,
cumplió su cometido.

¿Cuántos desean servir a Dios? Mucha gente afirma esto.


¿Cuántos desean ser probados? Creo que esto es distinto.

Uno de los requisitos que han de reunir aquellos que deseen servir
lo encontramos en 1Timoteo 3.10 Y éstos también sean sometidos
a prueba primero, y entonces ejerzan el diaconado, si son
irreprensibles.

¿Qué significa esto? Que Dios, el pastor y la Iglesia, nos probarán


de distintas maneras para ver si somos fieles a Dios. Y si lo
somos, seremos puestos en responsabilidad. ¿Qué ocurrirá si
ponemos en responsabilidad a alguien que no fue probado?
Posiblemente dañará la obra de Dios.

Nos quedamos hablando de Tito, de su personalidad, ministerio y


comprometido con la obra del Señor.

¡Cuántos Titos necesitamos hoy en el mundo! La Iglesia llora, se


lamenta clamando por hombres y mujeres que sean capaces de
pagar el precio de servir fielmente a Dios. Por todos lados se
levantan voces que ruegan por verdaderos siervos de Dios.
378

¿Dónde están esos pastores de sana doctrina? ¿Dónde? ¿Dónde


esas congregaciones en las que poder vivir la fe auténtica?
¿Dónde?

Los pastores actuales sólo están interesados en sí mismos. En sus


logros y sus éxitos. Sus grupos, siguiendo sus pasos, demasiado
entretenidos con sus espectáculos de luces de colores. Mientras
tanto la Iglesia llora, gime y se lamenta.

Voces que cada día pesan más en mi alma. Voces que parecen
llamarme al mundo. A ir a las naciones, sean las que sean a
predicar las buenas nuevas de salvación por fe en Cristo Jesús,
que nada tiene que ver con los falsos evangelios, interesados, que
hoy se predican. ¡Dios reprenda a todo falso ministro!

Hay tantas almas hambrientas, y tanta mies por recoger, hay tan
poco tiempo para hacerlo antes de que vuelva el Señor, que estoy
por salir corriendo por todo el mundo dando voces de alerta, para
que todos se preparen. Para que no sean sorprendidos dormidos,
cuando debían estar velando.

Como está escrito: Mas vosotros, hermanos, no estáis en


tinieblas, para que aquel día os sorprenda como ladrón. 5Porque
todos vosotros sois hijos de luz e hijos del día; no somos de la
noche ni de las tinieblas. 6Por tanto, no durmamos como los
demás, sino velemos y seamos sobrios. 7Pues los que duermen, de
noche duermen, y los que se embriagan, de noche se embriagan.
8
Pero nosotros, que somos del día, seamos sobrios, habiéndonos
vestido con la coraza de fe y de amor, y con la esperanza de
salvación como yelmo. 9Porque no nos ha puesto Dios para ira,
sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor
Jesucristo, 10quien murió por nosotros para que ya sea que
velemos, o que durmamos, vivamos juntamente con él.
1Tesalonicenses 5.4-11.

Por esa razón estamos aquí, estudiando la Palabra de Dios,


llenando nuestras lámparas de aceite para mantener viva la llama
de la fe para que no se apague, hasta que Cristo venga.
379

Fíjense que el cambio que se produjo en Corinto por la carta de


Pablo, y la ministración de Tito, muestra el camino al bienestar
espiritual de una congregación que estaba dividida, quebrantada,
enferma, y casi muerta espiritualmente hablando.

Hay muchas congregaciones en el mismo estado de decadencia


espiritual en el que estaba la de Corinto. Pero no hacen nada para
cambiar su situación. Simplemente disimulan sus problemas y
fingen una espiritualidad religiosa. Si siguieran los pasos de los
corintios saldrían a mejor condición.

Se necesita compromiso, sin el cual no se avanza. No se crece, no


se madura.

El compromiso con Dios y los demás debe llevarnos a la


manifestación del amor, de los unos para con los otros, lo cual
aporta sanidad espiritual. Digo manifestación del amor. Porque
muchas congregaciones se han roto, no porque no se amaran, sino
porque no se comunicaban dicho amor. Es decir, les faltaba
compromiso que les llevara a actuar.

¡Cuán importante es reconocer la necesidad que todos tenemos


del amor! Reconocerlo y practicarlo. Pues, muchos sólo se
quedan en “saber” lo que deben hacer, pero no lo hacen.

Recuerden que el amor no tiene que ver con las emociones,


aunque las provoque. El amor tiene que ver con la voluntad activa
de agradar y hacer bien a aquellos a quienes amamos.

¿Qué significa voluntad activa? Es la voluntad de actuar. De


hacer lo que sea por y para las personas a las que amamos.

No sólo el amor. ¿Qué otra cosa es importante, yo diría


indispensable para una buena recuperación de la espiritualidad?
El arrepentimiento. Porque ayuda a sanar las heridas producidas
por el roce del día a día.
380

Esto que ocurre en las iglesias, lo mismo pasa en las relaciones


matrimoniales, y en las familias. ¡Cuántas relaciones se secan por
falta de expresarse el amor mutuo! ¡Cuántas se rompen por falta
de arrepentimiento genuino, y de perdón!

Se van dejando de comunicar el amor. Se acostumbran a dar por


sentado que el otro debe saber que lo ama. Pero el amor debe
expresarse siempre, continuamente. Un amor que no se expresa
crea dudas.

¿Cuántos han tenido que perdonar a alguien alguna vez? Todos.


¿Cuántos hemos tenido que pedir perdón? Todos. Es normal en
las relaciones personales que nos tengamos que pedir perdón y
perdonarnos los unos a los otros. Especialmente si nos amamos de
verdad.

Por eso el apóstol Pablo escribió a los Efesios 4.1-3 Yo pues,


preso en el Señor, os ruego que andéis como es digno de la
vocación con que fuisteis llamados, 2con toda humildad y
mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros
en amor, 3solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo
de la paz;

Sólo de ese modo podemos recuperar la salud espiritual, para ser


útiles a Dios y a los demás. Cuando no expresamos el amor, o no
practicamos el arrepentimiento y el perdón, nuestro corazón se
endurece. Nuestra fe se estanca, y nuestra espiritualidad se
desmorona.

Una Iglesia sana, debe impactar a la sociedad que la rodea. La


Iglesia no es llamada a encerrarse entre cuatro paredes, sino a ser
luz para alumbrar a los que están en tinieblas. Dios nos viene
hablando de esto, una y otra vez.

Me llama poderosamente la atención que en EEUU y algunos


países latinoamericanos se estén dando cifras astronómicas del
crecimiento de la iglesia y al mismo tiempo tengan índices
381

altísimos de criminalidad. Lo considero una verdadera


contradicción, sin sentido. ¿Están de acuerdo? Espero que sí.

Algo está fallando. O fallan las cifras de crecimiento de la Iglesia,


o fallan las cifras de criminalidad en el país. Pero ambas no es
posible, porque se contradicen entre sí.

Por mucho que los ateos quieran convencernos de que cada cual
tiene su propia verdad, dos verdades contrarias no pueden ser
verdad.

¿A qué creen que puede deberse esa contradicción entre


crecimiento de Iglesia y criminalidad al mismo tiempo? Con toda
seguridad, a que muchas de esa gente no se ha convertido de
verdad. Posiblemente esté creyendo en un religión, pero no en
una relación real con Dios.

¿Qué es lo que distingue a un verdadero hijo de Dios? Su


conversión. La transformación que se produce en su vida.
2Corintios 5.17 Esto es lo que impresiona. Cristo en nosotros.
Como dice Pablo en Gálatas 2.20 Con Cristo estoy juntamente
crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí.

Por esta razón Pablo oró por los Gálatas 4.19 Hijitos míos, por
quienes vuelvo a sufrir dolores de parto, hasta que Cristo sea
formado en vosotros.

¡Cómo impresionó al mundo antiguo el amor de los cristianos!


Amor a Su Dios, pero también amor al prójimo. Aún sus
enemigos los admiraban por ello. Eso explica el rápido desarrollo
del evangelio en aquella época. ¡Cuánta necesidad hay de
auténtico amor en el mundo actual!

Es posible que el problema esté en el tipo de evangelio que se


predica hoy, que no llega a cambiar las vidas. Un evangelio que
no transforma corazones es un evangelio falso.
382

El verso 7 termina diciendo: De manera que me regocijé aun más.


Sí, el apóstol estaba feliz.

No cabe duda de que el apóstol se regocijó. El motivo lo explicará


a continuación.

8-14. En muchas ocasiones somos conscientes de que nuestras


palabras contristarán el corazón de algún hermano, incluso
podemos lamentar que sean contristados, pero si son motivadas
para producir arrepentimiento y un cambio de actitud para con
Dios y Su Palabra, nos damos por satisfechos.

¿Sabía Pablo el efecto que sus palabras podrían causar a los


corintios? Sin duda. Pero creyó que eran necesarias, aun a riesgo
de contristarles.

Como Pablo a los corintios, muchas veces los padres debemos


corregir a nuestros hijos, o a nuestros hermanos, o nuestras
parejas. Debemos corregirnos los unos a los otros, aun cuando les
podamos causar cierta tristeza en el momento, si es para que no se
pierdan, debemos estar dispuestos a sufrir el riesgo de su
incomprensión.

¿Cuál creen que es la razón por la cual Muchos padres no


corrigen a sus hijos? Por temor a perder su cariño. Un temor muy
difundido, pero falso. ¿Qué creen que hace más daño, el causado
por la disciplina del amor, o el que produce la desidia del temor?

¿Qué puede ocurrir si no corregimos a nuestros hijos? Se


convertirán en malas personas. Rebeldes, egoístas, ególatras.
¿Entienden porqué Dios también nos exhorta y corrige? Él desea
lo mejor para nosotros.

Dios nos pedirá cuenta si no corregimos a los hijos.

Nos quedamos hablando de que, como Pablo corrigió a los


corintios, también nosotros debemos corregir a nuestros hijos.
383

Los corintios se arrepintieron del dolor que habían causado al


siervo de Dios durante la breve visita que relata en el 2.1-2.

El Salmo 51.17 dice: Al corazón contrito y humillado no


despreciarás tú, oh Dios.

¿Suelen las personas reaccionar bien cuando se les corrige?

Lastimosamente no siempre. Con frecuencia, exhortamos a


alguien con Palabra de Dios, y se enoja con nosotros, como si lo
que le dijimos fuera para hacerle mal. Cuando en realidad, el
deseo de todo pastor es ver que sus discípulos sigan a Jesús.

No sólo el deseo de todo pastor, sino el de todo cristiano.


¿Alguna vez corregiste a un hermano por su bien y se lo tomó
mal? Desgraciadamente pasa con demasiada frecuencia.

La inmadurez, el sentido del ridículo y la vergüenza, les hace


reaccionar mal. Cuando deberían estar agradecidos de la
corrección del hermano.

¿Qué piensan de aquel que viendo a su hermano en la fe obrando


mal no le dice nada? ¿Actúa bien o mal? Desde luego mal.

Aunque cada vez son más los que afirman que no hay que meterse
en las vidas de los demás. Que no debemos inmiscuirnos. La
verdad es que la palabra de Dios nos enseña que debemos
exhortarnos los uno a los otros. Hebreos 3.13.

8. Siempre digo que el verdadero problema no es que un cristiano


peque, pues, tarde o temprano todos fallamos de un modo u otro,
sino que lo verdaderamente trágico es que no reconozca su
pecado.

¿Qué pasará cuando un cristiano peca y al ser reprendido lo


reconoce y se aparta del mal? Que le irá bien. Pero si no lo hace,
¿Cómo le irá? Mal. Como está escrito: El que encubre sus
384

pecados no prosperará; Mas el que los confiesa y se aparta


alcanzará misericordia. Proverbios 28.13.

No cabe duda de que no es agradable que nos corrijan, como está


escrito en Hebreos 12.11: Es verdad que ninguna disciplina al
presente parece ser causa de gozo, sino de tristeza; pero después
da fruto apacible de justicia a los que en ella han sido
ejercitados.

Cuando alguien te corrija, dale las gracias. Porque es alguien que


te ama y se preocupa por tu bienestar espiritual. Siempre que lo
haga de manera correcta, claro está. Gálatas 6.1.

9. ¿Por qué razón creen que Pablo hace esta aclaración? No quiere
que quede ningún mal entendido. Pretende clarificar todas sus
palabras para no dar lugar al diablo.

Sin embargo, cuando vemos que la Palabra, aun produciendo


tristeza, produce cambios en las vidas, entonces nos gozamos. No
porque le hayamos contristado, sino porque fueron movidos al
arrepentimiento.

Si no tienes quien te corrija, o no hay quien se atreva a hacerlo,


Dios lo hará, para que entres en razón.

La parábola del hijo pródigo ilustra bien esta vuelta a la cordura.


Las dificultades a las que Dios lo enfrentó como resultado de sus
malas decisiones, hicieron que el joven volviera en sí y
reflexionara.

En Lucas 15.17-19: ¡Cuántos jornaleros en casa de mi padre


tienen abundancia de pan, y yo aquí perezco de hambre! 18Me
levantaré e iré a mi padre, y le diré: Padre, he pecado contra el
cielo y contra ti. 19Ya no soy digno de ser llamado tu hijo; hazme
como a uno de tus jornaleros.

Aquí tenemos un claro ejemplo de lo que es el arrepentimiento


genuino. El arrepentimiento nos lleva del dolor y la tristeza de la
385

locura, al gozo de la sabiduría. El arrepentimiento nos devuelve la


razón y la inteligencia. Nos cambia la dirección de nuestros pasos.
Nos aleja del mal y nos vuelve a Dios, y a quienes nos aman.

¿Qué ocurre cuando no se produce el arrepentimiento? Que se


produce pérdida. Por esa razón, si un padre no amonesta a su hijo,
o un pastor a los miembros de su congregación, ambos son
responsables de la degradación espiritual que se produce en ellos.

Como está escrito en Hebreos 3.12-13: Mirad, hermanos, que no


haya en ninguno de vosotros corazón malo de incredulidad para
apartarse del Dios vivo; 13antes exhortaos los unos a los otros
cada día, entre tanto que se dice: Hoy; para que ninguno de
vosotros se endurezca por el engaño del pecado.

Quisiera que entendieran que esto es un mandamiento divino.


Tenemos el deber escritural de exhortarnos lo unos a los otros
cada día.

Lo único que debemos cuidar es la motivación y la actitud con la


que lo hagamos. Recuerden Gálatas 6.1.

10. Como ya dije, una de las cosas más difíciles del ministerio es
tener llamar la atención a alguien. Sobre todo, porque no todos
reaccionan bien.

Sin embargo, animo a los pastores jóvenes que nos ven a no


arrepentirse de producir tristeza a alguien, siempre que sea para
bien y salvación. Porque esa tristeza no es como la que el mundo
produce para muerte, sino para vida.

Esta es una palabra que, especialmente los padres, debemos tener


en cuenta, a la hora de educar a nuestros hijos. No debemos
arrepentirnos de producirles esta tristeza, si lleva a nuestros hijos
al arrepentimiento y la salvación de su alma.

Quiero hacerles una pregunta y quiero pedirles que me sean


sinceros. Muchos padres saben que corregir a los hijos no es
386

garantía de que se arrepientan para salvación, así que, ¿Y si le


causamos esa tristeza al corregirles y al final no se arrepienten,
debemos arrepentirnos de haberles entristecido? Personalmente
creo que no.

Como padres, debemos cumplir con nuestro deber sea cual sea el
resultado. Esa es nuestra responsabilidad. La de nuestros hijos es
tener en cuenta los consejos de sus padres. Como está escrito
numerosas veces en el Libro de los Proverbios de Salomón.

Como está escrito: De manera que cada uno de nosotros dará a


Dios cuenta de sí. Romanos 14.12

Los padres rendiremos cuenta delante de Dios de cómo criamos a


nuestros hijos; y ellos darán cuenta a Dios de si siguieron, o no,
los consejos que les dimos.

11. De que los corintios se habían arrepentido no cabe la menor


duda, porque produjo en ellos un cambio de corazón con respecto
al apóstol, pero también porque cambiaron en cuanto a su celo por
el evangelio de Jesucristo.

La tristeza, como cualquier otra emoción es difícil de manejar.


Muchas personas se confunden. Creen que cualquier tipo de
tristeza es mala. Por esa razón se le enseña a los niños que no
deben llorar, y tonterías similares.

Muchas personas cuando están tristes por alguna causa creen que
están en pecado. No entienden que la tristeza es normal. Lo que
debemos analizar es qué la produce, y cuáles son lo resultados de
la misma.

Es interesante el hecho de que mucha gente no sabe que Jesús


también se puso triste, muy triste, tanto que lloró ante la tumba de
su amigo Lázaro. Juan 11.35.
387

En otra ocasión se deprimió tanto que quiso morirse. Mateo


26.38. Pero superó su tristeza aceptando las circunstancias como
parte del plan del Padre celestial para su vida.

Del mismo modo podemos los seres humanos superar nuestras


tristezas. Buscando al Padre en oración y aceptando lo que no
podemos cambiar.

Este pasaje nos habla de dos tipos de tristeza, una que es del
mundo y produce muerte, y otra que es según Dios, y produce
cambios de vida. ¿De cuál de las dos hay que arrepentirse? De la
que es según el mundo, no de la que es según Dios.

La tristeza que es según Dios, es la causada por el pecado


cometido, esta debe llevarnos al arrepentimiento. Por ejemplo,
cuando Pedro negó al Señor y lloró amargamente. Mateo 26.74-
75.

La carta del apóstol produjo esa reacción en los corintios. ¡Cuánto


se necesita en la Iglesia del siglo XXI hombres como Pablo,
capaces de hablar o escribir como él, de tal modo que produzca
arrepentimiento en aquellos que le escuchan o leen!

Nunca como hoy los creyentes han estado tan expuestos a tantos
mensajes relacionados con la Biblia y con Dios. Sin embargo,
nunca como ahora hay tantos “creyentes” falto de
arrepentimiento. Viviendo vidas carnales, y llenas de pecado.

Hay un pasaje en el Antiguo Testamento digno de conocer. Se


encuentra en Ezequiel 18.20-24 El alma que pecare, esa morirá;
el hijo no llevará el pecado del padre, ni el padre llevará el
pecado del hijo; la justicia del justo será sobre él, y la impiedad
del impío será sobre él. Mas el impío, si se apartare de todos sus
pecados que hizo, y guardare todos mis estatutos e hiciere según
el derecho y la justicia, de cierto vivirá; no morirá. 22Todas las
transgresiones que cometió, no le serán recordadas; en su
justicia que hizo vivirá. 23¿Quiero yo la muerte del impío? dice
Jehová el Señor. ¿No vivirá, si se apartare de sus caminos?
388

24
Mas si el justo se apartare de su justicia y cometiere maldad, e
hiciere conforme a todas las abominaciones que el impío hizo,
¿vivirá él? Ninguna de las justicias que hizo le serán tenidas en
cuenta; por su rebelión con que prevaricó, y por el pecado que
cometió, por ello morirá.

Lucas 15.7 Os digo que así habrá más gozo en el cielo por un
pecador que se arrepiente, que por noventa y nueve justos que no
necesitan de arrepentimiento.

¡Qué bueno es Dios que no nos dejará llegar más allá de lo que
podemos resistir! Pablo había sufrido sobre manera por causa de
la obra de Dios en Corinto. Pero llegado el momento, Dios lo
consoló.

12-16. No cabe la menor duda de que hay pasajes que son más
sencillos de entender que otros. Pero si prestamos atención a lo
que se dice y al contexto inmediato y general de la Palabra de
Dios, siguiendo los principios de la hermenéutica podemos llegar
a entenderlo.

¿Qué creen que Pablo está diciendo aquí? En este versículo 12


Pablo sigue explicando por qué escribió la carta severa, su
propósito no era difamar o destruir al ofensor o mortificar al
ofendido.

Ahora, ¿Quién es quién? ¿Quién es el que cometió el agravio y


quién lo padeció? Hay quienes piensan que se refiere a los judíos
que acusaban a Pablo. Pero éstos eran varios, no uno, y Pablo
habla aquí del que padeció el agravio como no tratándose de él,
sino de otro.

Así que, sin duda, se refiere a aquel que se acostaba con su


madrastra. Y, ¿Quién lo padeció? Su padre, el agraviado.

Pablo aclara que ninguno de éstos fueron el motivo de su carta,


¿Cuál fue la verdadera motivación de su carta? Mostrar su amor e
interés por los corintios.
389

A Pablo no le preocupaba tanto la difamación de aquel pobre


hombre, sino más bien la difamación de la obra de Dios en
Corinto.

13-16. El resto del capítulo, tiene que ver con el efecto que la
visita a Corinto tuvo en Tito, el portador del mensaje y mediador
entre Pablo y la iglesia.

Fiel al estilo hebreo de literatura, Pablo da un resumen al


principio del verso 13 diciendo: Por eso hemos sido consolados
en vuestra consolación. Para después cerrar este capítulo
gloriándose por un lado de los corintios y por otro de Tito.

La frase en la que Pablo reconoce que había hablado bien a Tito


de los corintios, en realidad habla más del carácter de Pablo que
de los corintios.

¡Qué actitud más digna! Sin duda, manifiesta un verdadero


ejemplo de cómo debe ser el carácter cristiano. ¿Podría el apóstol
haber puesto a Tito sobre aviso contra las malas actitudes de los
corintios? Sin duda. ¿Fue eso lo que hizo? De ningún modo.
Pablo se glorió con Tito respecto de los corintios. Es decir, le
habló bien de ellos.

En la Iglesia de Jerusalén, Satanás había intentado destruirla por


medio de la hipocresía de Ananías y Safira. Por cierto, aprovecho
para aclarar que el pecado de Ananías y Safira no fue el negarse a
dar el diezmo, como algunos pastores mal formados, o mal
intencionados, afirman. No se trataba de eso, sino de que
mintieron a los apóstoles y al Espíritu Santo.

Ese fue el pecado por el cual ambos murieron. Hechos 5 da


testimonio de ello.

Como decía, Satanás intentó destruir la Iglesia de Jerusalén con


hipocresía religiosa, en cambio en Corinto, lo había intentado por
medio de otra estrategia. Mediante aquellos que subieron de
390

Jerusalén para menospreciar el ministerio del apóstol, y por uno


que practicaba abiertamente el pecado y que la iglesia no había
corregido.

Pero todo había terminado. Las acusaciones habían sido


confrontadas, el pecado había sido enfrentado y corregido. La
tranquilidad había vuelto a la congregación, y la Iglesia de
Corinto seguía a salvo de los ataques diabólicos.

El apóstol se alegra enormemente con Tito por las noticias de que


los miembros de la iglesia corintia han puesto en práctica cuanto
se les pidió que hicieran. Cinco veces repite la palabra gozo en
este capítulo. En el verso 4, 7, 9, 13, 16.

Es fácil imaginarse a Pablo y Tito conversando sobre su estancia


entre los hermanos de Corinto. Las palabras del apóstol
manifiestan un gozo y una confianza renovadas en aquellos
discípulos corintios. Así termina éste capítulo 7.

A lo largo del capítulo 8 y 9 hablaremos ampliamente de la


ofrenda y por consiguiente de la mayordomía de la Iglesia. Será
interesante, enfrentar ese falso evangelio que se predica en todo el
mundo y que llaman de la prosperidad.

8.1-7. Pablo habla en estos versos de la gracia de Dios. Siempre


que hablamos de este tema, pensamos en beneficios y
bendiciones, ya sean espirituales, o materiales. ¿Habías pensado
alguna vez en la ofrenda como una gracia de Dios?

Para muchos, más que una gracia, pareciera que dar dinero para la
obra de Dios es una desgracia. Actualmente hay un riesgo
manifiesto en las iglesias cristianas. Consiste en que debido al
enorme abuso que los falsos pastores han hecho exigiendo
injustamente el diezmo, muchos han adoptado la postura de no
querer dar a la Iglesia de Cristo. Lo cual tampoco es correcto.

Ni exigir el diezmo, ni negarse a ofrendar para sostener la obra de


Dios, ambas posturas son erróneas y quienes lo hacen pecan.
391

Todo cuanto tenemos lo hemos recibido de Dios, aun nuestras


propias vidas le pertenecen; y él nos pide un poco, como veremos
más adelante, para su obra. Algunos “cristianos” incluso se
atreven a pretender administrar ellos su propia ofrenda,
decidiendo por sí mismos en qué invertirla. Lo cual tampoco es
correcto.

La Iglesia como comunidad tiene compromisos y proyectos que


no podrían ser una realidad si cada uno administra las ofrendas a
su antojo. Para eso están los que administran, 1Corintios 12.28.

No todos los cristianos son llamados por Dios a administrar los


fondos de la Iglesia. En el grupo de Cristo, Judas lo administraba.
En cada congregación se nombra un tesorero para tal fin. Aunque
el presupuesto se hacen mancomunadamente. Es decir, con la
supervisión del cuerpo ministerial de la congregación.

Ahora, por lo pronto, es importante que entendamos que la


ofrenda es una gracia que Dios nos da. ¿Por qué? Porque si
podemos ofrendar es porque ya Dios nos dio primero.

Cuando le decimos a alguien que hace alarde de alguna bendición


que dé gracias a Dios, algunos responden: Gracias a Dios, no.
Gracias a mí. Éstos no saben lo que dicen.

Como está escrito: ¿qué tienes que no hayas recibido? Y si lo


recibiste, ¿por qué te glorías como si no lo hubieras recibido?
1Corintios 4.7.

Si nuestras vidas y hasta el aire que respiramos es de Dios,


¿Cómo no darle gracias por todo cuanto tenemos? ¿No podría Él
quitarnos todo, aun la vida? Sin duda. Así, que cada cosa que
disfrutamos es una gracia de Dios. ¿Qué es una gracia? Un don,
un regalo.

El origen de esta ofrenda, está en uno de los viajes de Pablo a


Jerusalén, como él mismo relata en Gálatas 2.1-10 donde dice:
392

Solamente nos pidieron que nos acordásemos de los pobres; lo


cual también procuré con diligencia hacer.

¿Cuál era el motivo por el cual fue necesaria esa ofrenda para los
santos de Jerusalén? Algunos han propuesto varias cuestiones,
como el aumento de los ancianos y viudas que pertenecían a la
Iglesia y que agotaba los recursos para las ayudas.

En realidad la espera del pronto regreso de Cristo llevó a los


apóstoles a una especie de “comunidad de amor” (ver Hechos
2:44, 45; 4:32–35) que pudo parecer una buena idea, hasta que
agotaron los recursos de la iglesia.

Eso, sumado a las sequías y escasas cosechas registradas en esa


región durante esos años, provocaron una situación calamitosa
que obligó a los creyentes de Jerusalén a pedir ayuda a sus
hermanos entre judíos y gentiles de la diáspora.

Diáspora se refiere a los que no vivían en Jerusalén, sino que


habían sido dispersados por el mundo.

Esta ofrenda fue la semilla que dio origen a la que ahora se recoge
cada primer día de la semana cuando celebramos culto, para la
mayordomía de la Iglesia y la unidad cristiana.

Como está escrito en 1Corintios 16.1-4 En cuanto a la ofrenda


para los santos, haced vosotros también de la manera que ordené
en las iglesias de Galacia. 2Cada primer día de la semana cada
uno de vosotros ponga aparte algo, según haya prosperado,
guardándolo, para que cuando yo llegue no se recojan entonces
ofrendas. 3Y cuando haya llegado, a quienes hubiereis designado
por carta, a éstos enviaré para que lleven vuestro donativo a
Jerusalén. 4Y si fuere propio que yo también vaya, irán conmigo.

¿Se especifica cuánto debían dar cada uno de los miembros de la


Iglesia? De ningún modo. No hay cantidad ni porcentaje.
393

La semana pasada estábamos estudiando 2Corintios 8.1-7 y


aunque nos quedamos en el verso 1 comentamos que:

1.- La ofrenda es una gracia que Dios nos concede, aunque


algunos lo vean más bien como una desgracia.

2.- Que existe el riesgo de que caigamos en la ley del péndulo. De


hecho, muchos están cayendo en eso. Me refiero por un extremo:
a) los falsos pastores que abusan del tema para robar a la Iglesia.
b) De otro extremo, algunos no quieren ni ofrendar a Dios.
Ambas posturas erróneas.

3.- Vimos en 1Corintios 16.1-2 que la ofrenda que Pablo recogió


para los hermanos de Jerusalén sirvió como origen de la que
recogemos cada domingo en la Iglesia.

4.- Por último vimos que no se especifica la cantidad que cada


uno debía dar. Pablo jamás habló de diezmo. De hecho, hice
hincapié en el hecho de que no existe en toda la Biblia ni un solo
versículo que relacione el diezmo con la Iglesia.

Así, que, hoy continuaremos con el tema donde lo dejamos. Verso


1. Pero antes, veamos que Pablo aclara algo más en relación a
esto en:

Romanos 15.25-29: Mas ahora voy a Jerusalén para ministrar a


los santos. 26Porque Macedonia y Acaya tuvieron a bien hacer
una ofrenda para los pobres que hay entre los santos que están en
Jerusalén. 27Pues les pareció bueno, y son deudores a ellos;
porque si los gentiles han sido hechos participantes de sus bienes
espirituales, deben también ellos ministrarles de los materiales.
28
Así que, cuando haya concluido esto, y les haya entregado este
fruto, pasaré entre vosotros rumbo a España. 29Y sé que cuando
vaya a vosotros, llegaré con abundancia de la bendición del
evangelio de Cristo.

Es interesante notar algo que Pablo dice aquí y que suele pasar
desapercibido para quienes sólo leen y no prestan atención a la
394

Escritura. Me refiero al objetivo de Pablo para ir a Jerusalén.


¿Cuál era? Él dice: para ministrar a los santos.

No son pocos los que piensan que ministrar es sólo exponer la


Palabra de Dios, o cantar. ¿Cómo iba a ministrarles el apóstol?
Mediante una ofrenda. ¿Qué quiere decir eso? Que supliría para
sus necesidades primarias.

Porque los creyentes no sólo necesitan “palabra” aunque sea de


Dios, también necesitan ¿Qué más? Comer. ¿Recuerdan las
multiplicaciones de alimentos que el Señor Jesús hizo? ¿Se limitó
Jesús sólo a predicarles, o también se preocupó y ocupó de darles
de comer? Por supuesto.

Así que la ofrenda no sólo es una gracia que Dios nos concede,
sino que también es una oportunidad de ministrar a otros, de las
bendiciones que Dios nos concede.

Muchos prestan tanta atención a la parte “espiritual” que se


olvidan de la material. Aunque algunos lo nieguen, Cristo nos
encargó las dos: El alcance de la obra del evangelio es espiritual,
pero también social.

La Iglesia tiene el deber de ocuparse de atender al ser humano de


manera íntegra. Soy consciente de que muchos no creen esto.
Huir de la falsa doctrina católico romana de la salvación por las
obras, ha llevado a posturas anti bíblicas, a muchos cristianos.

Vamos a leer Mateo 25.31-46 Después les haré un pregunta. A la


luz de este pasaje del evangelio, en palabras del Señor Jesús, ¿Es
la obra social una opción o una obligación de las iglesias? Sin
duda alguna es una obligación.

Así lo entendió el apóstol Pablo, y por eso se ocupó también de


las necesidades materiales de los hermanos en la fe que estaban
en Jerusalén.
395

Casi con total seguridad, cuando Tito daba el informe de su


estancia en Corinto a Pablo, le dijo que en cuanto a la ofrenda de
la que Pablo ya les había hablado desde el año anterior, no
estaban aun preparados. De ahí, esta exhortación del apóstol.

Presten especial atención a los dos últimos versículos que hemos


leído en el pasaje de Mateo. Si realmente es tan importante la
obra social en la vida práctica de la Iglesia, ¿Por qué entonces
muchos no le dan importancia? Como en otras muchas cuestiones,
en esta también suelen ir de un extremo a otro.

Algunos, al ver a la secta católico romana que hace obra social y


se olvida de la espiritual, es decir, la predicación del evangelio de
la salvación por fe en Jesucristo; se pasan al otro extremo y
predican el evangelio olvidándose de la obra social. Ambas
posturas son erróneas y están mal.

¿Por qué creen que a lo material se le da menos importancia?


Porque es temporal. Pero ¿Significa eso que no es importante? De
ningún modo. Vamos a ver algunos textos que nos muestran la
importancia de la obra social de la Iglesia.

Muchos me escriben poniendo mucho énfasis en las actividades


“espirituales” como la oración y el ayuno. Me preguntan sobre
estas cosas y suelo llevarles a la Palabra de Dios. Porque a los que
hacen mucho énfasis en el ayuno y muy poco énfasis en lo
material, Dios les dice en Isaías 58.5-10: ¿Es tal el ayuno que yo
escogí, que de día aflija el hombre su alma, que incline su cabeza
como junco, y haga cama de cilicio y de ceniza? ¿Llamaréis esto
ayuno, y día agradable a Jehová? 6¿No es más bien el ayuno que
yo escogí, desatar las ligaduras de impiedad, soltar las cargas de
opresión, y dejar ir libres a los quebrantados, y que rompáis todo
yugo? 7¿No es que partas tu pan con el hambriento, y a los
pobres errantes albergues en casa; que cuando veas al desnudo,
lo cubras, y no te escondas de tu hermano? 8Entonces nacerá tu
luz como el alba, y tu salvación se dejará ver pronto; e irá tu
justicia delante de ti, y la gloria de Jehová será tu retaguardia.
9
Entonces invocarás, y te oirá Jehová; clamarás, y dirá él: Heme
396

aquí. Si quitares de en medio de ti el yugo, el dedo amenazador, y


el hablar vanidad; 10y si dieres tu pan al hambriento, y saciares
al alma afligida, en las tinieblas nacerá tu luz, y tu oscuridad
será como el mediodía.

¿Qué es lo que dice el Señor aquí? Que debemos darnos menos


golpes de pecho y ser más generosos con los necesitados. Como
está escrito: si un hermano o una hermana están desnudos, y
tienen necesidad del mantenimiento de cada día, 16y alguno de
vosotros les dice: Id en paz, calentaos y saciaos, pero no les dais
las cosas que son necesarias para el cuerpo, ¿de qué aprovecha?
17
Así también la fe, si no tiene obras, es muerta en sí misma.
Santiago 2.14-17.

Quiero que esto quede bien claro, la fe que no obra es falsa. No


sirve ni salvará a nadie. La fe genuina nos lleva a practicar la
voluntad de Dios. No para salvación. Pues, ya somos salvos sólo
por fe en Jesús. Pero las obras muestran si de verdad hemos
nacido de nuevo. Son la evidencia de la verdadera fe.

Mediante la predicación apostólica del evangelio, los creyentes


fueron exhortados a demostrar su amor cristiano a todas las
personas, especialmente a los miembros de la familia de Dios.
Como está escrito en Gálatas 6.10: Así que, según tengamos
oportunidad, hagamos bien a todos, y mayormente a los de la
familia de la fe.

Ahora bien, la obra social hay que hacerla por, y con, amor. No
por obligación. Pues, como está escrito: Y si repartiese todos mis
bienes para dar de comer a los pobres, y si entregase mi cuerpo
para ser quemado, y no tengo amor, de nada me sirve. 1Corintios
13.3.

En Romanos 15.27 dice: porque si los gentiles han sido hechos


participantes de sus bienes espirituales, deben también ellos
ministrarles de los materiales.
397

Aquí Pablo cita un argumento que repetirá en 1Corintios 9.11-14


y que ya estudiamos, la justa correspondencia entre lo espiritual
que recibimos y lo material que debemos dar. Es el principio que
el mismo Señor Jesús usara, al afirmar que el obrero es digno de
su salario.

1-7. ¿Qué te parece el testimonio de las iglesias de Macedonia?


¿Dieron de lo que les sobraba? Muchos hacen esto. Sólo dan unas
cuantas monedas que más bien les molestan en los bolsillos. En
cambio, Dios es generoso con nosotros.

Usando el testimonio de los hermanos de Macedonia, Pablo


anima a los corintios a seguir su ejemplo, y no quedarse sólo en
buenas intenciones, sino llegar a la acción a favor de los que más
lo necesitan.

Porque algunos siempre están hablando de lo que quieren hacer


por los demás, pero nunca hacen nada. Como dice 1Juan 3.16-18
En esto hemos conocido el amor, en que él puso su vida por
nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por los
hermanos. 17Pero el que tiene bienes de este mundo y ve a su
hermano tener necesidad, y cierra contra él su corazón, ¿cómo
mora el amor de Dios en él? 18Hijitos míos, no amemos de
palabra ni de lengua, sino de hecho y en verdad.

Debemos demostrar que nuestro amor al prójimo no son sólo


palabras. El amor nunca lo es. El amor tiene que ver con lo que
hacemos, no con lo que sentimos.

Ahora, bien, quiero aclarar aquí algo importante. No es correcto


hacer obra social a cambio de otra contraprestación. Algunos
pastores dicen: No se puede dar algo a cambio de nada, porque la
gente se acostumbra. Considero que es poco realista, interesado y
falto de amor. Pero sobre todo, poco cristiano, porque no se ajusta
a la voluntad de Dios.

Nadie quiere pasar por necesidad, pero si la tiene, no es lógico


que una iglesia le dé de comer a cambio de que cambie su forma
398

de pensar o su religión. Lo diré bien alto para que todos lo


entiendan: La obra social como medio de proselitismo no es obra
social, es chantaje religioso.

Aquí en España, se comenzó ese chantaje en la década de los


ochenta con los centros de rehabilitación de toxicómanos. Cada
día se abrían nuevos centros, porque decían: Son un buen medio
para atraer gente a la Iglesia. Repito, eso es chantaje religioso.

Cristo nos exhorta a dar no a cambio de otra cosa, sino a dar


generosamente, sin esperar recibir nada. En Mateo 5.42-48 está
escrito: Al que te pida, dale; y al que quiera tomar de ti prestado,
no se lo rehúses. Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y
aborrecerás a tu enemigo. 44Pero yo os digo: Amad a vuestros
enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que
os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen;
45
para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que
hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre
justos e injustos. 46Porque si amáis a los que os aman, ¿qué
recompensa tendréis? ¿No hacen también lo mismo los
publicanos? 47Y si saludáis a vuestros hermanos solamente, ¿qué
hacéis de más? ¿No hacen también así los gentiles? 48Sed, pues,
vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es
perfecto.

Aquí, el Señor Jesús nos enseña a amar no sólo a quienes nos


aman, sino también a aquellos que no lo hacen. Es decir, dar a
cambio de nada.

Recuerden que amar es actuar en beneficio de otros. Dicho de


otro modo: Si damos a quienes nos dan ¿Qué recompensa
tendremos? ¿No hacen eso mismo los que no tienen a Jesús?

Los cristianos, por difícil que nos parezca, debemos dar sin
esperar recibir nada a cambio. Al que te pida, dale. Claro que
hablamos siempre de lo que tenemos, no de lo que no tenemos.
Como dice el verso 12: Porque si primero hay la voluntad
399

dispuesta, será acepta según lo que uno tiene, no según lo que no


tiene.

Estamos en 2ª Corintios 8.2, y nos quedamos hablando de la


ayuda a los necesitados. ¿Recuerdan que dijimos la semana
pasada?

Vimos el ejemplo de los hermanos de Macedonia y que debemos


compartir con aquellos que padecen necesidad. Que algunos sólo
se quedan en las intenciones.

¿Es correcto dar a cambio de…? Desde luego que no. No se


puede hacer obra social como medio de proselitismo. Es decir, a
cambio de que la gente venga a la Iglesia.

Vimos que la obra social es importante, por cuanto si no la


hacemos, seremos castigados por ello.

Ahora bien, veamos lo que dice Proverbios 19.17: A Jehová


presta el que da al pobre, Y el bien que ha hecho, se lo volverá a
pagar.

¿Quién se lo pagará, el pobre? No, el Señor. A Dios nadie le gana


a dar. Esta frase que algunos usan para mal, es verdad, pero
debemos usarla para lo correcto.

Es fácil pensar: Si doy lo que tengo me quedo sin nada. En


cambio Dios nos lleva a confiar en su provisión.

Proverbios 28.27 El que da al pobre no tendrá pobreza; Mas el


que aparta sus ojos tendrá muchas maldiciones.

¿Podemos creer en las promesas de Dios? Sin duda.

¿Qué haces tú cuando ves a alguien con necesidad? ¿Suples su


necesidad o apartas tus ojos?
400

Creo sinceramente que nosotros, como congregación, somos un


claro testimonio de esto. Desde que comenzamos a hacer obra
social, Dios nos ha ganado siempre. Cuanto más damos, más nos
provee Él.

Entiendan que digo esto de la ofrenda para los santos. No estoy


hablando ahora de la ofrenda para la Iglesia. Hablo de obra social,
no de sostenimiento de la Iglesia. Aunque nosotros lo hacemos
todo con una misma y sola ofrenda.

Esto es algo que sorprende a muchos y me escriben diciendo que


no es posible. Yo quisiera pedirle al hermano Oscar que amplíe el
plano de la cámara para que pueda recoger también a la Iglesia,
porque quiero hacer una pregunta y quiero que las personas que
nos ven puedan ver la respuesta de todos.

La pregunta es la siguiente: ¿Cuántas ofrendas recogemos en esta


congregación? Una sola. ¿Se recogen ofrendas en las reuniones de
oración por las casas? Ninguna. ¿Se recogen ofrendas en estas
reuniones de estudio bíblico? Tampoco.

¿Recogemos primicias o pactos, o siembras? Tampoco.

Con una sola ofrenda, recogemos lo necesario para cubrir los


gastos y ayudar a quienes lo necesitan.

2. ¿Eran ricos los hermanos de macedonia? De ningún modo.

El teólogo y comentarista Betz dice: Dos siglos antes que Pablo


viniera a Macedonia, las minas de oro en esa provincia proveían
cierto grado de riqueza a su población. Pero durante el siglo
primero de la era cristiana, la economía se había deteriorado y la
provincia había caído en una profunda pobreza. Las guerras, las
invasiones de los bárbaros, la presencia de Roma y la
reestructuración de la provincia contribuyeron a deteriorar su
situación financiera. No solo se empobrecieron las zonas rurales
sino también los centros urbanos, incluyendo «las ciudades
romanizadas de Filipos, Tesalónica y Berea»
401

Por el contrario, la ciudad de Corinto floreció financieramente


debido al volumen de comercio que generaban sus dos puertos,
Cencrea y Lejaión. En resumen, había en términos económicos
una notable diferencia entre Macedonia y Corinto. Pablo alude a
este contraste. Ya que los madeconios fueron generosos en su
pobreza, mientras los corintios sólo se habían comprometido, pero
sin hacer nada al respecto.

Sin ningún tipo de presión de parte del apóstol o de sus


colaboradores, los hermanos de Macedonia estuvieron dispuestos
a dar cuanto podían, para ayudar a los hermanos de Jerusalén.

Así, pues, ¿Qué nos enseña este pasaje? Que cuando ofrendaron
estaban en grande prueba de tribulación. Es decir, pasándolo mal.
Hay varios pasajes que nos ayudan a entender a qué tribulación
hace referencia el apóstol.

Filipenses 1.28 …y en nada intimidados por los que se oponen,


que para ellos ciertamente es indicio de perdición, mas para
vosotros de salvación; y esto de Dios.

Por este pasaje sabemos que en Macedonia se estaba


desarrollando una gran oposición contra el evangelio y los
cristianos.

1Tesalonicenses 1.6-8 Y vosotros vinisteis a ser imitadores de


nosotros y del Señor, recibiendo la palabra en medio de gran
tribulación, con gozo del Espíritu Santo, 7de tal manera que
habéis sido ejemplo a todos los de Macedonia y de Acaya que han
creído.

Aclaro aquí que esta gran tribulación no es la Gran Tribulación,


con mayúsculas, que ha de venir sobre el mundo entero para
probar a los que moran sobre la tierra, como afirma Apocalipsis
3.10. Se trataba de una gran tribulación que estaban sufriendo los
de Tesalónica.
402

Algunos acostumbrados a interpretar las Escrituras como bien les


parece, sin tener el más mínimo cuidado, sacan textos como este
de su contexto para enseñar lo que quieren, no la verdad que no
llegan a entender por falta de un estudio serio de las Escrituras.

Por esa razón algunos afirman que la Iglesia pasará la Gran


Tribulación, lo cual no es verdad. Si quieren saber más sobre este
tema, en nuestra web tienen un estudio sobre el mismo en
Preguntas y Respuestas.

1Tesalonicenses 2.14-16 Porque vosotros, hermanos, vinisteis a


ser imitadores de las iglesias de Dios en Cristo Jesús que están
en Judea; pues habéis padecido de los de vuestra propia nación
las mismas cosas que ellas padecieron de los judíos, 15los cuales
mataron al Señor Jesús y a sus propios profetas, y a nosotros nos
expulsaron; y no agradan a Dios, y se oponen a todos los
hombres, 16impidiéndonos hablar a los gentiles para que éstos se
salven; así colman ellos siempre la medida de sus pecados, pues
vino sobre ellos la ira hasta el extremo.

Aun así, a pesar de estar padeciendo toda estas tribulaciones, no


sólo no perdieron su fe, sino que dieron de su profunda pobreza
para los hermanos. Y abundaron en riquezas de su generosidad.

Pablo hace aquí un juego de palabras, para afirmar que en los


hermanos se daban cita la riqueza y la pobreza. La riqueza de su
generosidad, en medio de la pobreza económica. ¡Qué ejemplo!

¿Qué haces tú cuando estás en tribulación y tienes dificultades


económicas? ¿Te preocupas y ocupas de las necesidades de los
demás, o sólo de las tuyas propias?

¿Qué nos debe enseñar esto? A vivir con fe, compartiendo lo que
tenemos. En la confianza de que Dios nos provee, sea cual sea
nuestra situación.
403

Es irónico que aquellos que menos recursos poseen sean, por lo


general, quienes más generosidad manifiestan. No cabe duda de
que existen honrosas excepciones, pero por lo general es así.

Esta forma de dar sólo es posible por la gracia de Dios, gracia que
transforma las actitudes y la vida misma del cristiano.

Ahora bien, hay que prestar atención a las motivaciones por las
cuales se recogen las ofrendas. Pues, no es lo mismo para ayudar
a los santos pobres, que para la construcción de una catedral a la
egolatría humana. O para un nuevo vehículo, o jet privado para el
“siervo” de Dios.

Seguimos en 2Corintios 8.2 hablando de las ofrendas para los


santos. Es decir, de la mayordomía en la Iglesia. Del modo en que
se maneja el dinero, o mejor dicho, del modo en que se debería
administrar el dinero en la Iglesia.

Algunos, ante el claro y manifiesto robo que muchos falsos


pastores hacen, afirman que no debemos preocuparnos sino de
dar, y que ya Dios juzgará a los pastores por como administren
los recursos de la Iglesia.

¿Qué creen? ¿Es así? ¿Debemos dar sin preocuparnos de a dónde


va ese dinero? Personalmente, creo que no. Considero que los
cristianos tenemos el deber de asegurarnos de que las cosas se
hacen debidamente en la iglesia.

A mi casa llegan con frecuencia algunas personas, pidiendo en


nombre de Dios, para un grupo que dice estar ayudando a
personas indigentes, y a toxicómanos. Vienen con unas macetitas
que te regalan a cambio de alguna ofrenda, no menor de cierta
cantidad.

Me consta que tal practica no es correcta por varias razones.

a) Quienes vienen pidiendo en nombre de Dios son los mismos


indigentes a los que se dice estar ayudando. Por lo que
404

sencillamente, más que ayudarles, se les están utilizando


para conseguir dinero.
b) Quienes tienen problemas con las drogas, y consiguen
dinero mediante ese método, son con frecuencia tentados a
gastar dicho dinero para su consumo. El grupo les exige que
al menos lleven una cantidad mínima.
c) Me consta, que tales personas son tratadas no muy
cristianamente, en dicho centro.

La pregunta es, ¿Debemos dar dinero sólo porque se pida en


nombre de Dios? La respuesta es no.

Lo mismo ocurre cuando un pastor pide dinero porque quiere un


local más grande o más lujoso, o cuando pide para cosas que
realmente no son necesarias, ni tienen que ver con el plan de
Dios.

Somos responsables de administrar los recursos que Dios nos da.


Y debemos colaborar con la obra de Dios, pero no con las obras
de los hombres.

Las personas deben ser puestas siempre por delante de las cosas.
Y eso, desgraciadamente no siempre es así.

¿Recuerdan la responsabilidad que tenemos los cristianos de


exhortarnos los unos a los otros, a permanecer en la verdad de
Dios? Como está escrito en Hebreos 3.12-13: Mirad, hermanos,
que no haya en ninguno de vosotros corazón malo de
incredulidad para apartarse del Dios vivo; 13antes exhortaos los
unos a los otros cada día, entre tanto que se dice: Hoy; para que
ninguno de vosotros se endurezca por el engaño del pecado.

Todos somos responsables delante de Dios, no sólo de nuestras


propias vidas, sino también de la de los demás hermanos nuestros
en la fe. Recuerden Mateo 18.15-18.

Además, es responsabilidad de los cristianos asegurarse de que


todo cuanto le enseñan y practican es bíblico.
405

3. Pues doy testimonio. ¡Qué importante que otros puedan dar


testimonio de que hacemos las cosas conforme a la voluntad de
Dios. Sobre todo si quienes dan testimonio son los propios siervos
de Dios.

Pablo testificó a favor de los hermanos de Macedonia, y su


testimonio es verdadero.

Con agrado. ¿Qué significa eso? Con gusto, con alegría,


satisfacción, deleite, complacencia, contento. No dieron por
obligación, sino por amor a los hermanos que lo estaban pasando
mal en Jerusalén.

Como dice en 2Corintios 9.7: Cada uno dé como propuso en su


corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al
dador alegre.

Necesidad se traduce del término griego ananké que significa


malestar o aflicción. Así que el apóstol está diciendo, no
lamentándose, molesto o con aflicción.

Algunos cristianos dan de ese modo. Como si le estuvieran


haciendo un favor a Dios que les cuesta. Cuando en realidad, no
están dando sino de lo que Dios ya les dio de antemano a ellos.

Conforme a sus fuerzas, y aún más allá. Considerando un


privilegio participar de la ofrenda para los santos.

El diablo ha querido estorbar la obra de Dios. Dejarla sin recursos


para que no avance, ¿Cómo lo ha hecho? Por medio de falsos
ministros que, sin conciencia, se han enriquecido a costa de
aquellos que se han dejado manipular, por no conocer las
Sagradas Escrituras.

¡Ah, si el pueblo de Dios conociera más y mejor la Biblia! ¡Cuán


distinta hubiera sido la historia! ¿No creen? Pero todo esto debía
cumplirse porque ya estaba profetizado que muchos, no queriendo
406

oír la verdad, serían engañados por espíritus de mentira. Como


está escrito en 2Tesalonicenses 2.11.

Dar más allá de sus fuerzas significa dar con generosidad y fe.
Sabiendo que hoy los necesitados son otros, pero que mañana
podemos ser nosotros mismos.

Recuerden la regla de oro: Así que, todas las cosas que queráis
que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros
con ellos; porque esto es la ley y los profetas. Mateo 7.12.

4. Los macedonios no dieron por obligación, sino que pidieron


con muchos ruegos que se les concediese el privilegio de
participar de ese servicio para los santos.

Para ellos participar de la ofrenda era considerado como un


privilegio. Es decir, como una gracia, como un favor. Es más, lo
consideraban un modo de servir a sus hermanos en necesidad.

Muchos quieren “servir” a Dios, pero no a los hermanos. Otros,


entienden la ofrenda como una cargar, no la entienden como un
“servicio”. Este pasaje de Pablo aclara que es un buen modo de
servir, ayudando a quienes lo necesitan. Un servicio humilde al
Señor y a los demás. Pero un servicio al fin.

Pues, recuerden que, en palabras del mismo Señor Jesús, quien da


de comer al pobre, le da de comer a él. Mateo 25.31-46.

Un servicio que ayuda a la unidad de la Iglesia. Pues, cuando hay


amor y ayuda mutua, se establecen lazos fuertes y duraderos.

Su reacción, una súplica ardiente para que se les permitiera


compartir sus bendiciones materiales con las personas necesitadas
en Jerusalén, conmovió profundamente el corazón del apóstol.

Normalmente quienes piden con ruego son quienes padecen la


necesidad, aquí son los de Macedonia quienes ruegan que les
407

permitan participar de la ofrenda para los necesitados. ¿Qué


demuestra esto? Que su generosidad era genuina y sincera.

Pero también, que habían entendido a cabalidad lo que significa


ser miembros de una misma familia. La familia de Dios.

Nos quedamos estudiando el final del verso 4. Los macedonios


rogaban por dar.

El adjetivo calificativo de “santos” es usado frecuentemente por


Pablo para referirse a todos los creyentes en Cristo, sean judíos o
gentiles. Aquí, lo aplica a los cristianos de Jerusalén que estaban
viviendo en pobreza material.

Evidentemente, no se refiere a santos en el sentido en que lo


entienden los católicos romanos, que nada tiene que ver con lo
que la Palabra de Dios enseña. No se trata de dar ofrenda a los
santos de madera, ni para los que ya están muertos.

Para la iglesia católico romana el Papa es quien declara santo a


alguien, y exige que haya hecho cuando menos uno o dos
milagros. Que generalmente suelen ser falsos testimonios.

Pablo, inspirado por el Espíritu Santo, declara santos a todos


aquellos que creen en Cristo como su Señor y Salvador personal y
han nacido de nuevo por fe en Jesús. Ya estudiamos en 1Corintios
1.1-3 Pablo, llamado a ser apóstol de Jesucristo por la voluntad
de Dios, y el hermano Sóstenes, 2a la iglesia de Dios que está en
Corinto, a los santificados en Cristo Jesús, llamados a ser santos
con todos los que en cualquier lugar invocan el nombre de
nuestro Señor Jesucristo, Señor de ellos y nuestro: 3Gracia y paz
a vosotros, de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo.

Aquí enseña que todos los cristianos somos santos. Pues hemos
sido santificados en Cristo Jesús. No necesitamos que ningún
Papa nos declare santos. Ya lo hace Dios mismo en Su Palabra. Y
no necesitamos hacer ningún milagro para ello. Basta con que
408

hayamos sido perdonados y apartados para Dios. Porque eso es lo


que en definitiva significa ser santos.

Nada tienen que ver con que después de muerto podamos seguir
atendiendo a las oraciones de los creyentes, lo cual sólo Dios
puede hacer. Ni que podamos conceder peticiones. Lo cual es
prerrogativa única de Dios.

Si oramos por una persona para que sane y sana, no la sanamos


nosotros, sino Dios mismo. Nuestro abuelito que está en el cielo
no es quien nos ayuda a todo nos vaya bien. Si nos va bien, es
porque Dios es bueno.

¿Se dan cuenta de cuántas falsas doctrinas se enseñan en la mal


llamada iglesia católico romana? Por eso es tan importante
conocer la verdad.

5. Primeramente al Señor. Así mismos se dieron. Se dieron al


Señor, y luego a sus siervos. Sin esta entrega no se hubiera
producido la ofrenda.

Siguieron el ejemplo de Cristo, quien se dio a sí mismo por


nuestros pecados. Gálatas 1.4; 1Timoteo 2.6; y Tito 2.14.

¿Nos damos nosotros a Dios y a los demás? ¿No debiéramos


seguir también el ejemplo de Cristo y de los macedonios? Sin
duda.

¿Qué significa esto? Que la mayordomía es una cuestión


espiritual. Algo del corazón que es conforme a la voluntad de
Dios.

Nada tiene que ver con el dinero que tengas, sino con el hecho de
haber nacido de nuevo. Quienes no lo han hecho, no pueden
entender las cosas de Dios, que han de discernirse
espiritualmente. 1Corintios 2.14-15.
409

¿Qué grado de entrega tenemos en relación a Dios, y al prójimo?


Hay quienes pretenden someterse a Dios y no a los hombres, pero
Dios ha puesto hombres a quienes sino nos sometemos, no
estamos sometiéndonos a Dios.

Por la voluntad de Dios. ¿Qué quiere decir esto? Que la


generosidad de los macedonios fue la respuesta a lo que
consideraban que era la voluntad de Dios.

El compromiso con Dios no lleva a comprometernos con nuestros


semejantes.

Podemos afirmar que Dios sigue vivo y que sigue moviendo a Su


pueblo a hacer Su voluntad Divina. Por esa razón, el proceder de
los cristianos habla más fuerte que las palabras que pronuncien.

Cuanto más cerca está una congregación de Dios, tanto más se


aferrará a Su voluntad, y tanto más manifestará un amor auténtico
por los demás.

Por eso es necesario que cada día nos acerquemos más a Dios.
Dejando a un lado la pereza, el egoísmo, el yo, y acercarnos más
al Señor. Porque en su presencia Él nos cambia para que seamos
como Él es.

Debemos ser diferentes en nuestra manera de actuar, aún de


opinar sobre los temas de los que hablemos. Los macedonios no
eran oidores sino hacedores de la Palabra.

Debemos vivir cada palabra que Dios nos habla cada domingo o
cada jueves o cada día.

6. Este pasaje da a entender que Tito ya había comenzado su labor


en relación con la ofrenda. Tito les había recordado el tema de la
ofrenda para los cristianos de Jerusalén y animó a los corintios a
participar de ella.
410

¿Por qué lo sabemos? Porque al leer la carta anterior de Pablo


debió exponer el tema, al leer 1Corintios 16.1-4. Así, también
ahora, Pablo lo exhorta para que acabe lo que comenzó.

¿Qué significa esto? Que Tito debía volver a Corinto a recoger la


ofrenda para los hermanos de Jerusalén.

7-8. Las primeras palabras del apóstol en este pasaje son de


elogio. ¿Por qué? Porque no quiere que al compararlos con los
macedonios se sientan menospreciados.

En lugar de eso, los alaba por lo que habían alcanzado en muchas


áreas; de hecho, deliberadamente Pablo les escribe diciendo que
abundaban en todo. Sugiriendo de este modo que también podían
hacerlo en la ofrenda.

El siervo de Dios debe ser especialmente cuidadoso en no poner a


competir a los creyentes. Algo que se fomenta en los nuevos
grupos religiosos que predican la falsa doctrina de la prosperidad,
pero que es contraproducente.

La Iglesia no es un concurso a ver quién trae más gente a la


Iglesia; ni a ver quien sabe más, o canta mejor, o ayuna más días.
¿Por qué? Porque crea mal ambiente entre los cristianos. Fomenta
el orgullo y la soberbia de los más preparados, contra el
menosprecio y maltrato de aquellos menos agraciados.

Los elogios de Pablo tienen que ver con la abundancia de fe,


palabra, ciencia y solicitud o diligencia de los corintios. Esto nos
recuerda las palabras del apóstol en 1Corintios 1.4-9 Gracias doy
a mi Dios siempre por vosotros, por la gracia de Dios que os fue
dada en Cristo Jesús; 5porque en todas las cosas fuisteis
enriquecidos en él, en toda palabra y en toda ciencia; 6así como
el testimonio acerca de Cristo ha sido confirmado en vosotros,
7
de tal manera que nada os falta en ningún don, esperando la
manifestación de nuestro Señor Jesucristo; 8el cual también os
confirmará hasta el fin, para que seáis irreprensibles en el día de
411

nuestro Señor Jesucristo. 9Fiel es Dios, por el cual fuisteis


llamados a la comunión con su Hijo Jesucristo nuestro Señor.

Todos nosotros podemos dar testimonio de que hemos sido


enriquecidos por el Señor.

8. Pablo tiene especial cuidado en no “ordenar” que ofrenden,


sino más bien los estimula a la participación, como quien prueba
la sinceridad de su amor.

La autoridad apostólica es una realidad en las epístolas de Pablo.


En distintas ocasiones hace uso de esa autoridad delegada de Dios
a sus siervos los apóstoles, que después ellos delegaron en los
pastores, como sucesores de los mismos.

Escribiendo sobre las relaciones matrimoniales, el apóstol en


1Corintios 7.17 dice: Pero cada uno como el Señor le repartió, y
como Dios llamó a cada uno, así haga; esto ordeno en todas las
iglesias.

Este es uno de esos pasajes que muchos pastores deberían estudiar


en profundidad para no ser piedra de tropiezo a muchas parejas.
Pasaje que ya estudiamos en su momento.

1Corintios 16.1 En cuanto a la ofrenda para los santos, haced


vosotros también de la manera que ordené en las iglesias de
Galacia.

Como vemos, aquí Pablo recuerda a los corintios su orden o


mandamiento en cuanto a la ofrenda, sobre la que ahora no les
quiere mandar, sino poner a prueba.

También a sus colaboradores dio el apóstol mandamientos.

1Timoteo 6.13-14 Te mando delante de Dios, que da vida a todas


las cosas, y de Jesucristo, que dio testimonio de la buena
profesión delante de Poncio Pilato, 14que guardes el
412

mandamiento sin mácula ni reprensión, hasta la aparición de


nuestro Señor Jesucristo.

En cuanto a disciplina eclesiástica.

2Tesalonicenses 3.6 Pero os ordenamos, hermanos, en el nombre


de nuestro Señor Jesucristo, que os apartéis de todo hermano que
ande desordenadamente, y no según la enseñanza que recibisteis
de nosotros.

A pesar de esta autoridad, el apóstol tiene especial cuidado en no


mandar siempre sino, cuando es preciso.

Romanos 12.1 Así que, hermanos, os ruego por las misericordias


de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo,
agradable a Dios, que es vuestro culto racional.

Romanos 15.30-31 Pero os ruego, hermanos, por nuestro Señor


Jesucristo y por el amor del Espíritu, que me ayudéis orando por
mí a Dios, 31para que sea librado de los rebeldes que están en
Judea, y que la ofrenda de mi servicio a los santos en Jerusalén
sea acepta;

Aun en los casos de disciplina, Romanos 16.17 Mas os ruego,


hermanos, que os fijéis en los que causan divisiones y tropiezos
en contra de la doctrina que vosotros habéis aprendido, y que os
apartéis de ellos.

1Corintios 1.10-11 Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de


nuestro Señor Jesucristo, que habléis todos una misma cosa, y
que no haya entre vosotros divisiones, sino que estéis
perfectamente unidos en una misma mente y en un mismo
parecer.

Hablando de las relaciones conyugales Pablo dice en 1Corintios


7.6 Mas esto digo por vía de concesión, no por mandamiento.
413

1Corintios 7.25 En cuanto a las vírgenes no tengo mandamiento


del Señor; mas doy mi parecer, como quien ha alcanzado
misericordia del Señor para ser fiel.

1Corintios 16.15-16 Hermanos, ya sabéis que la familia de


Estéfanas es las primicias de Acaya, y que ellos se han dedicado
al servicio de los santos. 16Os ruego que os sujetéis a personas
como ellos, y a todos los que ayudan y trabajan.

La semana pasada, el Pr. Andrés se quedó en el verso 8, donde


vimos que Pablo tiene especial cuidado en no “ordenar” que
ofrenden, sino más bien los estimula a la participación, como
quien prueba la sinceridad de su amor.

Vimos que la autoridad apostólica es una realidad en las epístolas


de Pablo. En distintas ocasiones hace uso de esa autoridad
delegada de Dios a sus siervos los apóstoles, que después ellos
delegaron en los pastores, como sucesores de los mismos.

Pero, cuando se trata de la ofrenda, no manda, aunque tiene


autoridad para ello, sino que más bien usó el entusiasmo de otros
como una norma para probar y retar a los corintios.

2Corintios 10.1-6 Yo Pablo os ruego por la mansedumbre y


ternura de Cristo, yo que estando presente ciertamente soy
humilde entre vosotros, mas ausente soy osado para con
vosotros; 2ruego, pues, que cuando esté presente, no tenga que
usar de aquella osadía con que estoy dispuesto a proceder
resueltamente contra algunos que nos tienen como si
anduviésemos según la carne. 3Pues aunque andamos en la carne,
no militamos según la carne; 4porque las armas de nuestra
milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la
destrucción de fortalezas, 5derribando argumentos y toda altivez
que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo
todo pensamiento a la obediencia a Cristo, 6y estando prontos
para castigar toda desobediencia, cuando vuestra obediencia sea
perfecta.
414

La autoridad debe ser siempre ejercida conforme a la voluntad del


que la delegó, como está escrito: Porque aunque me gloríe algo
más todavía de nuestra autoridad, la cual el Señor nos dio para
edificación y no para vuestra destrucción. 2Corintios 10.8.

2Corintios 13.10 Por esto os escribo estando ausente, para no


usar de severidad cuando esté presente, conforme a la autoridad
que el Señor me ha dado para edificación, y no para destrucción.

No podemos pasar a otra cosa sin citar al apóstol una vez más en
cuanto a este tema. Como está escrito en Romanos 13.2 De modo
que quien se opone a la autoridad, a lo establecido por Dios
resiste; y los que resisten, acarrean condenación para sí mismos.

Estamos en un tiempo que el mismo apóstol Pablo profetizó que


serían tiempos peligrosos. Recordemos sus palabras en 2Timoteo
3.1-5 También debes saber esto: que en los postreros días
vendrán tiempos peligrosos. 2Porque habrá hombres amadores de
sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos,
desobedientes a los padres, ingratos, impíos, 3sin afecto natural,
implacables, calumniadores, intemperantes, crueles,
4
aborrecedores de lo bueno, traidores, impetuosos, infatuados,
amadores de los deleites más que de Dios, 5que tendrán
apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos
evita.

En estos tiempos, abundan los que tienen apariencia de piedad


pero que en realidad niegan la eficacia de ella. Muchos de éstos
falsos están hoy luchando contra el ministerio dentro de la Iglesia.
No necesitamos pastores, dicen. Pero fue Dios mismo quien los
constituyó, como enseña Efesios 4.11; y los sigue constituyendo.

Que falsos pastores se hayan levantado, y estén engañando a


muchos, no significa que debamos desechar a todos los pastores.
Es muy importante que tengamos cuidado no sea que estemos
batallando contra Dios mismo y Su voluntad específica para su
Iglesia.
415

¡Qué más quisiera el diablo que la Iglesia no tuviera pastores! Así


podría atacar al rebaño impunemente, sin haber quien le haga
frente.

Por tanto, queridos hermanos, como escribió Pablo: no seáis


insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor.
Efesios 5.17.

Nadie tira todo su dinero porque sepa que hay dinero falso.
Sencillamente, lo somete a prueba para discernir si es bueno o
malo. Eso mismo debemos hacer con los ministerios hoy.

9. Porque ya conocéis la gracia de nuestro Señor Jesucristo. Los


corintios habían experimentado la gracia de Dios en sus propias
vidas. Sin duda estaban en condiciones de hablar de la gracia de
Dios, la habían recibido, y con ella, muchas bendiciones.

¿Conoces tú la gracia de Dios para con tu vida? Hay personas


incapaces de reconocer la gracia de Dios. Pero como hemos dicho
muchas veces, aun el aire que respiramos es parte de la
manifestación de la gracia de Dios.

La gracia está íntimamente enraizada en nuestra salvación,


proclamada en el evangelio. La gracia incluye el mensaje de la
muerte y resurrección de Jesús, la obra expiatoria de Cristo, la paz
con Dios, la remisión de nuestros pecados y la presencia
permanente del Señor en nuestras vidas. Y otras muchas cosas
más.

Por amor a vosotros. Así como los corintios habían recibido la


gracia de Dios, ellos mismos debían mostrar gracia para con los
hermanos. Debían ser un canal por medio del cual la gracia de
Dios pudiera alcanzar a aquellos que estaban pasándolo mal.

Pablo sigue presentando argumentos razonables para incentivar la


generosidad de los corintios para con sus hermanos en Cristo.
Después de haberles hablado de los macedonios como ejemplo a
416

seguir, ahora les pone el más sublime ejemplo de generosidad del


que podamos tener noticias.

¿Cuál es? El del dueño de todas las riquezas espirituales, nuestro


Señor Jesucristo, quien por amor no dio riquezas, sino que se dio
a sí mismo por todos nosotros.

Así que, la gracia de los macedonios sólo era un débil reflejo de la


gracia de Dios que se manifestó por medio de Su Hijo Jesucristo,
para bendecirnos a todos los seres humanos.

¿Qué significa: siendo rico? No que se hiciera rico, como Donald


Trump, sino que siempre fue rico, desde la eternidad. Por cuanto
era Dueño y Señor de todo cuanto existe. Aquí hay una
declaración de reconocimiento de la divinidad de Cristo. De su
preexistencia desde la eternidad. Juan 17.5.

Recuerden las palabras de Dios dichas por medio del profeta


Hageo 2.6-8 cuando anunciaba la llegada de Su Hijo al mundo:
Porque así dice Jehová de los ejércitos: De aquí a poco yo haré
temblar los cielos y la tierra, el mar y la tierra seca; 7y haré
temblar a todas las naciones, y vendrá el Deseado de todas las
naciones; y llenaré de gloria esta casa, ha dicho Jehová de los
ejércitos. 8Mía es la plata, y mío es el oro, dice Jehová de los
ejércitos. La gloria postrera de esta casa será mayor que la
primera, ha dicho Jehová de los ejércitos; y daré paz en este
lugar, dice Jehová de los ejércitos.

¿Por qué dijo eso el Señor? Porque quería que restaurasen el


templo de Salomón que estaba en ruinas.

¿Se pueden imaginar lo que supuso la encarnación para Cristo?


Fue un empobrecimiento en todos los sentidos. ¿Cuál fue el
sentido de su empobrecimiento? ¿Por qué se encarnó Jesús?
Algunos afirman, mal interpretando este pasaje que para hacernos
ricos materialmente, pero eso es no querer entender el verdadero
sentido de estas palabras.
417

Pablo no se está refiriendo a enriquecimiento material, sino


espiritual. Utilizar estas palabras de pablo para sostener el falso
evangelio de la prosperidad es indigno de un verdadero estudiante
de la Palabra de Dios.

Las palabras de Pablo en Filipenses 2.5-8 dejan claro que Cristo


se hizo hombre para morir en la cruz por nuestros pecados. La
historia de la religión humana es el relato del esfuerzo inútil del
hombre por llegar a ser Dios; La historia del evangelio de
Jesucristo, nos relata cómo Dios se hizo hombre.

Pablo, como siempre, lo resume magistralmente en 1Corintios


15.1-4 Además os declaro, hermanos, el evangelio que os he
predicado, el cual también recibisteis, en el cual también
perseveráis; 2por el cual asimismo, si retenéis la palabra que os
he predicado, sois salvos, si no creísteis en vano. 3Porque
primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo
murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras; 4y que
fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las
Escrituras.

Romanos 8.16-17 El Espíritu mismo da testimonio a nuestro


espíritu, de que somos hijos de Dios. 17Y si hijos, también
herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que
padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos
glorificados.

Como podemos ver, Pablo no habla de riquezas materiales aquí y


ahora, sino riquezas espirituales cuando estemos con el Señor,
glorificados.

Este es el verdadero evangelio. Cristo no murió para que tú


tuvieses dinero, sino para que obtuvieras el perdón de tus
pecados. Esta es la historia que transforma el corazón humano.

1Timoteo 6.3-10 Si alguno enseña otra cosa, y no se conforma a


las sanas palabras de nuestro Señor Jesucristo, y a la doctrina
que es conforme a la piedad, 4está envanecido, nada sabe, y
418

delira acerca de cuestiones y contiendas de palabras, de las


cuales nacen envidias, pleitos, blasfemias, malas sospechas,
5
disputas necias de hombres corruptos de entendimiento y
privados de la verdad, que toman la piedad como fuente de
ganancia; apártate de los tales. 6Pero gran ganancia es la piedad
acompañada de contentamiento; 7porque nada hemos traído a
este mundo, y sin duda nada podremos sacar. 8Así que, teniendo
sustento y abrigo, estemos contentos con esto. 9Porque los que
quieren enriquecerse caen en tentación y lazo, y en muchas
codicias necias y dañosas, que hunden a los hombres en
destrucción y perdición; 10porque raíz de todos los males es el
amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la
fe, y fueron traspasados de muchos dolores.

En el verso 7 Pablo lleva la ofrenda mucho más allá, y habla de


ella como de una gracia. Pablo pone la gracia de Cristo como
ejemplo y motivación para la ofrenda. Podríamos hablar
eternamente de la gracia de Dios para con nosotros y lo que ésta
supuso, supone y supondrá en nuestro beneficio. Pablo quiere que
los corintios ofrenden siguiendo el ejemplo de generosidad de
Cristo Jesús.

1Corintios 15.10 Pero por la gracia de Dios soy lo que soy; y su


gracia no ha sido en vano para conmigo, antes he trabajado más
que todos ellos; pero no yo, sino la gracia de Dios conmigo.

Cristo se despojó de sí mismo para bendecirnos a todos nosotros,


y lo hizo sin esperar nada a cambio. Entender el ofrendar desde la
perspectiva de la gracia es algo completamente diferente y alejado
de la práctica que se ve hoy en día.

10-12. En esto de la ofrenda, Pablo no quiso dar un mandato


apostólico que podría haberlo dado sino que, guiado por el
Espíritu Santo, prefirió en un asunto tan delicado, dar su consejo.

Todos hemos aconsejado en alguna ocasión. Nos gusta más dar


consejos que recibirlos. Algunos cuando piden consejo, en
realidad están pidiendo apoyo para decisiones que ya tomó.
419

¿Sueles seguir los consejos que te dan? La consejería es muy


delicada, porque hay quienes les encanta aconsejar pero no tienen
la preparación adecuada.

1Reyes 12.1-20 Roboam no quiso seguir el consejo de los


ancianos, consejeros experimentados y conocedores del reino,
sino el de los jóvenes que se habían criado con él sin necesidades,
y no tenían la sabiduría necesaria.

Aconsejar es muy delicado porque los consejos que damos


pueden tener repercusión en el bien o mal de otras personas.

Algunos en vez de dar consejos dan órdenes. Eso no es correcto.


Y se enojan cuando no se siguen sus consejos. 2Samuel 17.1-23.

1Pedro 4.11 Si alguno habla, hable conforme a las palabras de


Dios; si alguno ministra, ministre conforme al poder que Dios da,
para que en todo sea Dios glorificado por Jesucristo, a quien
pertenecen la gloria y el imperio por los siglos de los siglos.
Amén.

No debemos aconsejar de nuestro propio corazón, sino de la


Palabra de la Palabra de Dios. 2Timoteo 3.16-17 Toda la
Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para
redargüir, para corregir, para instruir en justicia, 17a fin de que
el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda
buena obra.

Hay quienes son expertos en opinar sobre cosas que no entiende.


Pablo aconseja por inspiración de Dios. Escogiendo sus palabras
con cuidado para no dañar a nadie.

Nadie puede acusar a Pablo de falta de tacto. En todos los asuntos


delicados, escoge sus palabras, para no ser mal interpretado. ¡Ah,
si todos hiciéramos lo mismo, cuántos problemas nos
ahorraríamos!
420

Porque esto os conviene a vosotros. Es interesante cómo Pablo da


la vuelta a las cosas. Pareciera que estuviese buscando el bien de
los hermanos de Jerusalén. ¿No eran ellos los necesitados? Pues,
bien, Pablo le da la vuelta al asunto y les dice que es a los
corintios a quienes les conviene dar. Pues, no en vano, al parecer
fueron de los primeros que se ofrecieron a colaborar. Ahora, pues,
les convenía cumplir con lo que habían dicho.

Al parecer, Pablo había puesto a los corintios de modelo, ante los


de Macedonia, y resultó porque los macedonios dieron con
generosidad, como ya vimos. Ahora, el problema estaba en que
Pablo no quería ser avergonzado. Ver 2Corintios 9.3-4.

El verso 11 no deja lugar a la duda. ¿Qué les dice Pablo ahí? Que
cumplan lo que prometieron. Porque algunas personas no lo
hacen. ¿Eso está bien o mal? Sin duda, que está mal. Como está
escrito en Eclesiastés 5.5 Mejor es que no prometas, y no que
prometas y no cumplas.

No es bueno dejar las cosas a medias. Además, no está bien.


Cuando en una boda se prometen fidelidad deben cumplirlo. Lo
mismo ocurre en las empresas, te prometen que trabajarás poco
con muy buen suelo, y luego resulta todo lo contrario.

“Nos vemos a las 4 en el centro comercial” Son las 5,30 y no han


llegado. “Présteme eso que mañana sin falta se lo devuelvo”
Todavía está esperándolo. Sin tan descarados que hasta juran.

Cuando prometas algo, aunque sea a tu hijo, cumple. Sobre todo


si es a tu hijo. Pues estás educando a una persona para el futuro.
¿Quieres que tu hijo sea una buena o mala persona? Un buen o
mal cristiano? Dale el ejemplo adecuado.

Mateo 5.37 Pero sea vuestro hablar: Sí, sí; no, no; porque lo que
es más de esto, de mal procede.
421

Cuántas veces hemos prometido, aún a Dios, y no lo cumplimos.


“Te prometo que mañana voy a ser fiel” Si me ayudas en esta, a
partir de ahora te prometo fidelidad absoluta”

Mateo 26.33-35 Respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos se


escandalicen de ti, yo nunca me escandalizaré. 34Jesús le dijo: De
cierto te digo que esta noche, antes que el gallo cante, me
negarás tres veces. 35Pedro le dijo: Aunque me sea necesario
morir contigo, no te negaré. Y todos los discípulos dijeron lo
mismo.

Mateo 26.69-75 Le negó no una ni dos, sino tres veces.

Recuerden Eclesiastés 5.5. Mejor es que no prometas, y no que


prometas y no cumplas.

Jesús hizo muchas promesas, y las cumplió. Prometió dar su vida


por el pecado del mundo, y lo hizo. Prometió resucitar al tercer
día, y o hizo.

Los colombianos tienen un dicho: Este no cumple ni años. ¿En


qué lugar dejamos a Dios si, llamándonos cristianos, prometemos
y no cumplimos?

Nuestros hijos aprenden de nuestras acciones. Aumentamos o


perdemos nuestra autoridad en base a nuestra integridad.

12. Según lo que uno tiene, no según lo que no tiene. Actualmente


es muy habitual en algunos grupos religiosos que comercian con
la fe de la gente, comprometerles a dar lo que no tienen. “Haga un
pacto con Dios”, les dicen. Comprométase a dar “tanto”.

¿Qué pensáis de esta práctica a la luz de este pasaje de Pablo?


Desde luego no es correcto. A nadie se le debe llevar a
comprometerse con lo que no tiene. Muchas personas, en el fragor
de la emoción, manipulada por la música y el ambiente eufórico,
se comprometen más allá de lo razonable y después les manipulan
422

para hacerles sentir mal; porque se comprometieron y no


cumplieron.

¿Te has sentido alguna vez obligado a ofrendar para dar? ¿Te has
sentido alguna vez manipulado para que des? Desde luego que no.

He oído hablar de que algunos le deben a la Iglesia tanto dinero


de “compromisos de fe” Y de falsos pastores que reclaman estos
compromisos a la gente. Todo eso es falso. Es manipulación y
tiene que ver más con el diablo que con Dios.

Pablo no quiere poner en los corintios más presión de la


necesaria. No quiere forzarles más allá de sus posibilidades. Pablo
da su consejo, como dice el verso 10.

Jesús mismo, aclaró sobre el tema de la ofrenda para el templo en


Lucas 21.1-4 Levantando los ojos, vio a los ricos que echaban sus
ofrendas en el arca de las ofrendas. 2Vio también a una viuda
muy pobre, que echaba allí dos blancas. 3Y dijo: En verdad os
digo, que esta viuda pobre echó más que todos. 4Porque todos
aquéllos echaron para las ofrendas de Dios de lo que les sobra;
mas ésta, de su pobreza echó todo el sustento que tenía.

A Cristo no le sorprenden las grandes ofrendas, sino las sinceras.


Un corazón agradecido y dispuesto. Para Jesús no es lo mismo dar
de lo que le sobra que dar de lo que se tiene.

¿Cómo ofrendas tú de lo que te sobra o de lo que tienes?

Ahora bien, Jesús no está enseñando aquí que debemos dar todo.
No se trata de un mandamiento. Alaba a la viuda porque dio de lo
que tenía, pero no dijo que debíamos hacer lo mismo.

Usar este pasaje para obligar a la gente a darlo todo, es manipular


las Escrituras. Esto es lo que muchos hacen hoy en día, manipular
las Escrituras y a las gentes para beneficio propio.
423

En el tema de la ofrenda lo importante no es la cantidad que des


sino el cómo lo des; la calidad de tu ofrenda. Los cristianos
debemos dar de lo que tenemos no de lo que nos sobra. Y por
supuesto no podemos dar lo que no tenemos.

13-15. Estos pasajes debería hacer caer la cara de vergüenza a


más de un predicador de la prosperidad. Pues, las diferencias
entre su estilo de vida y el de los miembros de sus congregaciones
son demasiado evidentes.

Copeland dijo: No se puede hablar con Dios en un avión


comercial. El mundo está de tal manera que no podemos llegar sin
esto. Debemos tener un jet, así podemos orar con Dios
libremente.

Después, añadió que él no quería volar con un montón de


demonios. Aunque momentos más tarde afirmó que necesitaba el
jet privado para alcanzar a los perdidos. ¿Qué les parece?

Otro predicador, que enseña que Dios quiere bendecir a los fieles
con riquezas terrenales, ha generado gran polémica tras el anuncio
en su página web, pidiendo una donación para adquirir un nuevo
jet.

El tele evangelista Creflo Dólar, ha pedido donaciones para


adquirir un lujoso avión valorado en más de 65 millones de
dólares.

Dólar fue objeto de numerosas críticas, cuando una periodista,


reveló que Dólar tiene una fortuna personal de US $ 27 millones,
"200 veces más que el ingreso anual promedio de la iglesia, que
es de $ 29,640".

Estos pasajes hablan de proporcionalidad. Para que haya igualdad.


Equidad, equilibrio. De modo que los creyentes que han sido
bendecidos en exceso estén dispuestos a compartir sus bienes con
otros que carecen de lo necesario para vivir.
424

¿Creen que en esas congregaciones hay igualdad? ¿No hay una


enorme diferencia entre lo que gana el predicador y lo que ganan
los miembros de su grupo.

Como está escrito en Deuteronomio 15.3-4 Del extranjero


demandarás el reintegro; pero lo que tu hermano tuviere tuyo, lo
perdonará tu mano, 4para que así no haya en medio de ti
mendigo; porque Jehová te bendecirá con abundancia en la
tierra que Jehová tu Dios te da por heredad para que la tomes en
posesión.

Compartir lo que tenemos con quien no tiene mucho, o que tiene


poco, o no tiene nada. El verdadero cristiano no puede hacer la
vista gorda ante la necesidad de los demás.

Esta congregación Berea no hace la vista gorda ante quienes


tienen necesidad. Compartimos con quienes no tienen.

1Juan 3.17 Pero el que tiene bienes de este mundo y ve a su


hermano tener necesidad, y cierra contra él su corazón, ¿cómo
mora el amor de Dios en él?

Pasajes como este nos exhortan a compartir con el que tiene


necesidad. A tenderle la mano, a ayudarle. Si vemos al hermano
padecer no debemos darle la mano y decirle que Dios te bendiga,
sino que, pasajes como este nos habla de ponernos en acción.

Como está escrito en Santiago 2.15-16 Y si un hermano o una


hermana están desnudos, y tienen necesidad del mantenimiento
de cada día, 16y alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos
y saciaos, pero no les dais las cosas que son necesarias para el
cuerpo, ¿de qué aprovecha?

¿De qué le aprovechará? A Dios le agrada cuando demostramos


amor a nuestro prójimo de una manera práctica, aliviando sus
necesidades. Cuando sufrimos con el que sufre. Cuando aliviamos
sus cargas. Así que, según tengamos oportunidad, hagamos bien a
todos, y mayormente a los de la familia de la fe. Gálatas 6.10.
425

¿Demuestras tú el amor al prójimo? ¿Alivia las necesidades de


quienes las padecen o hacemos la vista gorda?

Las personas en las iglesias cristianas tienen el deber de ayudarse


mutuamente. La mutua preocupación debe ser una característica
distintiva de toda verdadera congregación. Pero sobre todo, tienen
el deber de ayudar al pobre, al necesitado.

Ayuda al necesitado, pero hazlo bien. No busques algo a cambio.


Hazlo por amor, desinteresadamente. Algunos ayudan a otros por
intereses personales. Porque más adelante sacará provecho de
ello.

Hay pastores que como los políticos sólo se preocupan de la gente


por lo que después sacarán de ellos. Por llenar sus iglesias, pero
no se preocupan sinceramente de la gente. Nosotros debemos
seguir el fiel ejemplo de nuestro Señor Jesucristo.

Si conocemos a un hermano que no tiene coche y tiene que ir al


hospital ¿Qué debemos hacer? Si tenemos la posibilidad de
llevarlo, lo llevamos. Si vemos a un hermano cargado con la
compra y podemos ayudarle, debemos hacerlo. Si vemos a un
necesitado debemos prestarle ayuda.

Debemos marcar la diferencia, poner por encima la voluntad de


Dios que nuestros propios intereses o deseos.

Juan 15.12-13 Este es mi mandamiento: Que os améis unos a


otros, como yo os he amado. 13Nadie tiene mayor amor que este,
que uno ponga su vida por sus amigos.

El ejemplo de Cristo nos habla de que no debemos ser egoístas.


Porque somos un Cuerpo, somos una familia. De distintas
naciones, pero somos una sola familia.

Como dice Filipenses 2.4 no mirando cada uno por lo suyo


propio, sino cada cual también por lo de los otros.
426

En la actualidad muchas congregaciones, aprovechándose de las


ayudas sociales de los distintos gobiernos, han bajado la guardia
en el cuidado de los demás. Algunos incluso llegan a sostener que
no es tarea de la Iglesia ayudar al necesitado, sino sólo predica el
evangelio.

Hay congregaciones que tienen una ONG pero cobran por la


ayuda al necesitado, 3 € cada vez que se le entrega alimentos a la
gente, para costear gastos de papelería y demás, aun cuando ya
recibían una subvención para ello.

Jamás debemos aprovecharnos de la necesidad de otros para


beneficiarnos, para lucrarnos, para sacar dinero a costa de la
necesidad de otros, para nuestro propio beneficio y nuestros
propios intereses y bolsillos.

Otras congregaciones incluso llegan a sostener que no es tarea de


la Iglesia ayudar al necesitado, sino sólo predica el evangelio. Eso
es religiosidad e ignorancia bíblica.

¿Qué piensan al respecto? Desde luego las palabras del Señor que
ya hemos leído muchas veces en Mateo 25.31-46, dejan claro que
es una responsabilidad obligada de la Iglesia ayudar al que lo
necesita.

En el verso 15 Pablo, como acostumbra, apoya su discurso con las


Escrituras del Antiguo Testamento. Concretamente está citando
Éxodo 16.18 Y los hijos de Israel lo hicieron así; y recogieron
unos más, otros menos; 18y lo medían por gomer, y no sobró al
que había recogido mucho, ni faltó al que había recogido poco;
cada uno recogió conforme a lo que había de comer.

De este modo, fija la atención de los corintios en Dios que es


quien provee más allá de la lógica. Pues, en medio de un desierto
suplió alimento para una multitud, durante cuarenta años.
427

La lección aquí es que todos tengan lo necesario. No se trata de


empobrecer al rico para enriquecer al pobre, sino que aquellos
que más tienen, compartan con los que tienen menos. Para que
haya igualdad.

16-17. Ahora veremos tres verdades que encontramos en estos


versos.

A.- Dios es el que pone en el corazón.

¿Qué puso Dios en el corazón de Tito? Exhortar y animar a los


corintios para que fueran generosos para hacer una ofrenda para
sus hermanos de Jerusalén.

Algunos pueden pensar que es un texto histórico, y es así. Pero


también es un testimonio, un ejemplo. Algo que se nos redacta, y
sabemos que da un fundamento bíblico por el cual también
nosotros somos exhortados a hacer lo mismo.

Filipenses 2.13 …porque Dios es el que en vosotros produce así


el querer como el hacer, por su buena voluntad.

Entendemos que Dios es el que actúa, el que obra en nosotros. El


que produce en nosotros lo que debemos hacer o desear. Pero,
¿Desear el qué? ¿Pone Dios los malos deseos en nosotros? De
ningún modo. Pablo se refiere a los buenos deseos. No es que
Dios ponga nuestro deseo, sino su deseo.

Dios pone el querer y el hacer, y esto es así porque Él tiene el


poder para hacerlo.

Proverbios 21.1 Como los repartimientos de las aguas, Así está el


corazón del rey en la mano de Jehová; A todo lo que quiere lo
inclina.

¿Qué quiere decirnos Dios con este pasaje? Que Dios inclina aun
el corazón de un rey cuando quiere que éste haga alguna cosa.
428

Dios movió el corazón de Faraón, a pesar de su rebeldía, para que


dejara partir a su pueblo.

Faraón estaba decidido a no hacerlo. Pero Dios le obligó. Mostró


su poder y venció la resistencia del Faraón. Dios tiene poder para
hacer que cualquier persona, no importa lo dura que sea, hará lo
que él quiere.

Esto no significa que Dios siempre lo haga. Sólo lo hace cuando


considera que es necesario dentro de su macro plan. Pero cuando
quiere hacerlo lo hace porque tiene poder para hacerlo.

Sabemos que los reyes son poderosos y suelen hacer lo que les
viene en gana, sin embargo, veamos una historia real que sucedió
para nuestra enseñanza:

2Crónicas 36.22-23 Mas al primer año de Ciro rey de los persas,


para que se cumpliese la palabra de Jehová por boca de
Jeremías, Jehová despertó el espíritu de Ciro rey de los persas, el
cual hizo pregonar de palabra y también por escrito, por todo su
reino, diciendo: 23Así dice Ciro, rey de los persas: Jehová, el
Dios de los cielos, me ha dado todos los reinos de la tierra; y él
me ha mandado que le edifique casa en Jerusalén, que está en
Judá. Quien haya entre vosotros de todo su pueblo, sea Jehová su
Dios con él, y suba.

¿Era un rey judío? No. Ahí se dice que era rey de los persas. ¿Qué
dice en el verso 23? El Señor del cielo me ha dado todos los
reinos de la tierra. ¿Qué significa esto?

En primer lugar que aun siendo pagano, estaba reconociendo la


realidad, que hay un Dios en los cielos. Uno, y solo uno. El
auténtico. Todos los demás son fraudes, inventados por los
hombres.

Además nos dice que Ciro era un rey con mucho poder, el rey de
un gran imperio. Muy poderoso. Sabemos que los reyes son gente
ególatra y que hacen lo que ellos quieren. Aun así dice aquí:
429

Jehová despertó el espíritu del rey. Porque quiso. Porque pudo


hacerlo. Dios es Soberano e inclina el corazón de todos los reyes
de la tierra. Pues, no en vano es el Rey de reyes.

Si Dios quiere, lo hace; y si Dios no quiere, no lo hace y permite


que los reyes tomen decisiones y hagan lo que quieran, aunque
después les juzgará por lo que hayan hecho.

Isaías 40.12 ¿Quién midió las aguas con el hueco de su mano y


los cielos con su palmo, con tres dedos juntó el polvo de la tierra,
y pesó los montes con balanza y con pesas los collados?

Si Dios tiene poder para inclinar el corazón de un rey ¿Cuánto


más el nuestro?

B. Tito no se quedó en el querer.

Sabemos que Dios no puso en el corazón de Tito sólo el deseo,


sino que lo impulsó a llevarlo a cabo. Lo llevó a Corinto. Aunque
Pablo dice que lo hizo por propia voluntad, nosotros ya sabemos
quién puso esa voluntad en Tito.

Filipenses 2.13 porque Dios es el que en vosotros produce así el


querer como el hacer, por su buena voluntad.

Dios tiene poder y nos motiva porque sabe que lo haremos,


porque es Él mismo quien nos da las ganas y la capacidad para
hacerlo.

Debemos estar dispuestos a hacer la voluntad de Dios. Lo cual


habla de la importancia de la obediencia. Se nos anima a
obedecer. Porque Dios puede poner las ganas y nosotros
resistirlas. Como está escrito en el Salmo106.43 Muchas veces los
libró; Mas ellos se rebelaron contra su consejo, Y fueron
humillados por su maldad.

Ezequiel 20.7-8 Cada uno eche de sí las abominaciones de


delante de sus ojos, y no os contaminéis con los ídolos de Egipto.
430

Yo soy Jehová vuestro Dios. 8Mas ellos se rebelaron contra mí, y


no quisieron obedecerme; no echó de sí cada uno las
abominaciones de delante de sus ojos, ni dejaron los ídolos de
Egipto; y dije que derramaría mi ira sobre ellos, para cumplir mi
enojo en ellos en medio de la tierra de Egipto.

Eclesiastés 7.29 He aquí, solamente esto he hallado: que Dios


hizo al hombre recto, pero ellos buscaron muchas perversiones.

El ser humano resiste la buena voluntad de Dios. Como quien


rehúsa creer a Dios. Juan 3.36.

Si tenemos la oportunidad de suplir la necesidad de otros,


hagámoslo, no nos quedemos en las palabras solamente, ni en las
meras intenciones.

Volviendo al tema en cuestión, Pablo nombró a Tito para llevar a


cabo una misión, pero no tuvo que insistirle demasiado porque él
mismo ya estaba ansioso por realizarla.

17. ... pero estando también muy solícito, por su propia voluntad
partió para ir a vosotros.

El resto del capítulo 8 tiene que ver con la ejecución del proyecto
de promover y planificar la ofrenda de la iglesia gentil a la iglesia
judía en Jerusalén.

Pablo demostró, como siempre, su capacidad de animar y


organizar esta tarea de recolectar eficientemente a través de
nombramientos y planes logísticos para garantizar la
administración responsable de lo que llegó a ser una considerable
ofrenda.

18. Enviamos juntamente con él al hermano cuya alabanza en el


evangelio se oye por todas las iglesias; (en la esfera del
evangelio)
431

Este pasaje nos habla claramente que Tito no fue solo, no se le


dejo esa tarea a una sola persona. Pablo sabía que no era una tarea
fácil, sino varios temas muy delicados como los problemas que
habían surgido, la recogida de la ofrenda, etc., y por eso no envió
a Tito sólo, sino que enviaron juntamente con él al “hermano”.

Es decir, Pablo proveyó para Tito ayuda, respaldo, apoyo,


compañerismo y mucho más para la tarea del ministerio que le
había encargado. No sólo en el plano espiritual sino también en el
físico.

Hay cosas que no podemos hacer si estamos solos, necesitamos


ayuda, apoyo, respaldo. Para mover un coche, para subir un
mueble o una nevera a un primer piso. Podría ponerles muchos
ejemplos.

Como está escrito en Eclesiastés 4.9-12: Mejores son dos que


uno; porque tienen mejor paga de su trabajo. 10Porque si
cayeren, el uno levantará a su compañero; pero ¡ay del solo! que
cuando cayere, no habrá segundo que lo levante. 11También si
dos durmieren juntos, se calentarán mutuamente; mas ¿cómo se
calentará uno solo? 12Y si alguno prevaleciere contra uno, dos le
resistirán; y cordón de tres dobleces no se rompe pronto.

¿Cuántos creen que es necesaria la ayuda dentro de la iglesia?


¿Cuántos creen que es necesario la ayuda en el ministerio?
¿Creen que es necesario el apoyar a quienes sirven en el
ministerio? ¿A quienes se preocupan por las almas? ¿Por qué
crees que es necesario?

Porque los pastores no somos súper manes. No sé ustedes pero


como pastor les digo, que es fundamental, sobre todo contar con
la ayuda de Dios primeramente porque sin él nada sería posible.
Pero hablando claro, también es necesario contar con hermanos
que estén dispuestos, no solo a servir a Dios, sino también para
ayudar y apoyar las diferentes actividades.
432

Como decía el diácono Óscar Molina, debemos esforzarnos para


apoyar y respaldar la obra de Dios. Somos un cuerpo y nos
necesitamos todos. Necesitamos a la mano, los dedos, la nariz, la
boca, los hombros, las piernas,

En esta iglesia que estamos siempre activos, es bueno apoyar,


ayudar, animarnos, compartir las cargas. Porque la Biblia dice:

Gálatas 6.2 Sobrellevad los unos las cargas de los otros, y


cumplid así la ley de Cristo.

Esto significa quitar las cargas del hombro de mi hermano. Sacar,


recoger, apoyar.

Hebreos 10.24 Y considerémonos unos a otros para estimularnos


al amor y a las buenas obras.

Considerar, es fijarse en, ver, observar, mirar, darse cuenta,


comprender, el esfuerzo que hace el otro, y disponerse a ayudarlo.

Nosotros decidimos que clase de iglesia queremos tener, lo que


hacemos o decimos marca la diferencia en la iglesia. Si participas,
animas a otros a participar; si apoyas la obra, te apoyarán, si
ayudas quitando cargas, te quitaran cargas; si animas, te
animarán; si oras por los demás, éstos orarán por ti; si das
testimonio, animas a otros a darlo. Así es como funciona.

Mateo 7:12 Así que, todas las cosas que queráis que los hombres
hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque
esto es la ley y los profetas.

Es necesario no solo estar dispuestos a ser generosos como las


iglesias que querían colaborar con la ofrenda para los necesitados.
No es solo dar, ser generosos, sino también ayudar, a participar, a
colaborar , a apoyar.

Las cargas deben ser compartidas, no es lo mismo hacer uno solo


el trabajo que hacerlo varios, porque abarcan más, ocupan más,
433

incluyen más, se distribuye mejor y se cansan menos; no podemos


ser siervos orquesta.

Estuvimos en la recogida de alimentos la semana pasada y eso no


hubiese sido posible sin la ayuda de los voluntarios, de todos los
colaboradores.

Vine 2 días y no pude venir más porque estaba estudiando y de


niñero porque los 2 niños se pusieron malos pero fue suficiente
para darme cuenta de que es mucho trabajo. Pero si ellos no
ayudan, no es posible la obra social, no es posible la entrega de
alimentos, porque Dios puede hacer los montones pero es nuestra
responsabilidad el ayudarnos, el quitarnos cargas.

Es importante, es necesario que nos apoyemos los unos a los


otros, que vivamos el evangelio de una manera práctica, que no
nos quedemos en las buenas intenciones sino que nos pongamos
en marcha, que pasemos a la acción.

Hebreos 13.16 Y de hacer bien y de la ayuda mutua no os


olvidéis; porque de tales sacrificios se agrada Dios.

Pablo tuvo cuidado de que varios hermanos se encargaran de lo


que pasaba en Corinto y de animar para la recolecta de las
ofrendas.

8.18 enviamos juntamente con él al “hermano”. La intrigante


pregunta sobre ¿Quién es este hermano? existe desde los días de
la iglesia primitiva.

Se han propuesto numerosos candidatos, entre los cuales están


Lucas, Bernabé, Timoteo, Silas, Aristarco y Apolos, por
mencionar sólo a algunos. No somos nosotros quienes vamos a
entrar en discusiones y nos vamos a montar en el caballo de la
imaginación, pues, conocemos las palabras de Pablo en
1Corintios 4.6 …para que en nosotros aprendáis a no pensar más
de lo que está escrito.
434

El hermano, fuera quien fuera, viajaba con Tito, para enfrentar a


los corintios y animarles a la ofrenda para los hermanos de
Jerusalén.

La gente que envió Pablo estaba bien recomendada. La iglesia no


tuvo que preocuparse de que los portadores de su carta hicieran
un mal trabajo.

Lo importante no es saber quién era específicamente el


“hermano” que acompañó a Tito, sino saber ¿cómo era? ¿cómo
estaba su corazón? ¿que decían los otros de él? No es importante
su nombre, rasgos o aspecto físico sino su calidad espiritual.

Quienquiera que fuese, había sido incluido en la delegación para


asegurarse de que su carta fuera leída en la Iglesia, y se
estimulase a los hermanos a prepararse para la ofrenda que Pablo
recogería.

8.18…al hermano, cuya alabanza en el evangelio se oye por


todas las iglesias;

En otra traducción dice que: en todas las iglesias se habla bien de


él. Por el lenguaje da a entender que era una persona bien
conocida de las iglesias que había fundado Pablo.

Conocidos y respetados grandemente y de buen testimonio entre


las iglesias. Personas íntegras.

Pasajes como éstos nos hablan de que esa debe ser nuestra marca
como cristiano, el buen testimonio, la manera como nos deben
identificar, respecto a las cosas de Dios, de buen testimonio.

Van a hablar de nosotros igualmente pero nosotros no debemos


dar lugar a que hablen mal, por mal testimonio, o por mala
conducta, el apóstol no envió a los hermanos secretamente sino
quería que supieran quiénes eran, y con cuánta seguridad se
podía confiar en ellos.
435

Es un deber de todos los cristianos actuar con prudencia para


evitar, en lo que podamos, toda sospecha injusta. En primer lugar,
es necesario actuar rectamente ante Dios. Pero las cosas honestas
ante los hombres también deben recibir atención.

El carácter puro y la conciencia limpia son un requisito para ser


útiles. La buena opinión que el prójimo tenga de nosotros, debiera
ser un argumento para que nosotros hagamos el bien.

¿Te gustaría que donde quiera que vallas, o donde quiera que te
envíen, hablaran así de ti en todas las iglesias? A mí, sí.

Que podamos decir a los hermanos de Fusagasugá allá te envío al


pastor Oscar cuya alabanza en el evangelio se oye por todas las
iglesias aquí en Fuerteventura.

Por eso es necesario seguir dando buen testimonio de las obras


maravillosas de Dios.

8.19 y no sólo esto, sino que también fue designado (Designar,


escoger (por levantar la mano) por las iglesias como compañero
de nuestra peregrinación para llevar este donativo, que es
administrado por nosotros para gloria del Señor mismo, y para
demostrar vuestra buena voluntad;

Fue designado. Esto significa que fue elegido. Se elegía


escogiendo, por mano alzada. Un hombre que fue elegido por las
Iglesias.

Lo importante es que el “hermano” no fue designado por Pablo,


sino por las iglesias a quienes representó en el proceso de la
colecta. Literalmente significa que fue aprobado por mayoría de
votos; es decir, escogido, elegido.

El énfasis que Pablo pone en “las iglesias”. Varias


congregaciones participaron en el nombramiento de el “hermano”
para llevar la ofrenda a Judea.
436

Es necesario poner personas dignas de confianza para tan alta


responsabilidad. Debemos estar seguros de que los hermanos de
la iglesia tienen confianza en los designados, porque si esta
confianza no existe, no ofrendarán como deben de hacerlo.

Podemos tener mucha confianza en lo que se predica, pero si


sabemos que el tesorero mete mano de lo que se recoge, ¿Estarán
los hermanos confiados de que va a tener buena administración la
ofrenda recogida?

¿Sabemos realmente donde van las ofrendas que se recogen en las


iglesias? ¿Cuál es el paradero final?

No era cualquier persona la que iba, entre muchos candidatos el


“hermano” reunía los requisitos, y no era poca su responsabilidad
ni la de Tito

…como compañero de nuestra peregrinación para llevar este


donativo, Como compañero de viaje.

Que es administrada por nosotros” (v. 19d) involucra a Pablo a


fin de cuentas en la responsabilidad, juntamente con los demás
que también fueron designados, para la entrega y para rendir
cuentas ante las iglesias por los fondos encargados a ellos.

Pablo consideraba este proyecto como algo que harían para la


gloria de Dios, por lo tanto, toma toda precaución para evitar
cualquier posibilidad de censura.

La cantidad de fondos, las fuentes de donde vinieron y el


propósito para el cual fueron dados, demandaba que no hubiera
sospecha de las personas ni de mal manejo, motivación errónea o
riesgo de pérdida de los fondos.

…que es administrado por nosotros para gloria del Señor mismo,


y para demostrar vuestra buena voluntad;
437

Para gloria del Señor mismo, v. 19. Si las ofrendas son mal
administradas, el nombre del Señor será blasfemado en vez de
glorificado.

Testifica asimismo de su rectitud de intención en la


administración de la ofrenda, pues sólo piensa en que sea «para
gloria del Señor mismo ¿Conoce alguna iglesia u organización
evangélica que ha traído reproche sobre el nombre del Señor por
causa de su mala administración financiera? ¿Qué puede hacer
para evitar que esto suceda en su iglesia?

Para demostrar la buena voluntad de los donantes, v. 19. Se sabe


que había algo de animosidad entre los creyentes gentiles, los
donantes, y los hermanos judíos, receptores del donativo. Este
serviría para demostrar a los judíos creyentes que en realidad los
gentiles les amaban en el Señor.

Vimos la semana pasada 2Corintios 8.18 y parte del 19.

- Hablamos de la Ayuda, respaldo, apoyo, para una tarea


encomendada, para una tarea en el ministerio, en este caso
para recolectar una ofrenda a una iglesia que lo necesitaba.
- Es necesaria la ayuda dentro de la iglesia y del ministerio.
- Gálatas 6.2 Sobrellevad (quitar, sacar, recoger) los unos las
cargas de los otros.
- El buen testimonio debe ser la marca que nos caracterice,
que nos debe identificar como cristianos, respecto a las
cosas de Dios.
- Pablo se cuidaba de dar un buen testimonio en cuanto a la
ofrenda recibida y a la administración de la misma y todo lo
hace para gloria del Señor mismo.

Testifica asimismo de su rectitud de su buena intención en la


administración de la ofrenda, pues sólo piensa en que sea «para
gloria del Señor mismo.
438

Quiero terminar con la parte del final del v 19, para ahondar un
poco más en las dos últimas frases de este versículo para gloria
del Señor mismo. Porque en este caso, se habla de la ofrenda para
los necesitados en la iglesia de Jerusalén pero no solo en la
ofrenda sino en todos los casos, todo lo que hagamos debe ser
para la gloria de Dios.

Hebreos 13:20-21 Y el Dios de paz que resucitó de los muertos a


nuestro Señor Jesucristo, el gran pastor de las ovejas, por la
sangre del pacto eterno, 21os haga aptos en toda obra buena para
que hagáis su voluntad, haciendo él en vosotros lo que es
agradable delante de él por Jesucristo; al cual sea la gloria por
los siglos de los siglos. Amén.

1Pedro 4:11 Si alguno habla, hable conforme a las palabras de


Dios; si alguno ministra, ministre conforme al poder que Dios da,
para que en todo sea Dios glorificado por Jesucristo, a quien
pertenecen la gloria y el imperio por los siglos de los siglos.
Amén.

2Tesalonicenses 1:11-12 Por lo cual asimismo oramos siempre


por vosotros, para que nuestro Dios os tenga por dignos de su
llamamiento, y cumpla todo propósito de bondad y toda obra de
fe con su poder, 12para que el nombre de nuestro Señor Jesucristo
sea glorificado en vosotros, y vosotros en él, por la gracia de
nuestro Dios y del Señor Jesucristo.

Mateo 5:16 Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para
que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre
que está en los cielos.

Todo cuanto hagamos, todo proyecto que emprendamos, todo lo


que decimos, todo lo que hacemos debe ser para la gloria del
Señor mismo, porque el Señor se lo merece, ha dado su vida para
rescatarnos y es digno de exaltar, digno de ser reconocido por
todos, en todas las cosas,
439

Que cuando nos vean por la calle puedan dar gloria a Dios por
nuestro testimonio, que en todo lo que hayamos hecho, el nombre
del Señor sea glorificado.

Todo lo que haces, ¿Lo haces para la gloria del Señor?


Lo que dices, ¿Lo dices para que la gloria del Señor?
Cuando planeas llevar a cabo un proyecto, ¿Lo haces para que el
Señor se lleve la gloria o para que te den palmaditas?.
Cuando compartes algo con alguien, tu testimonio, lo que Dios ha
hecho en tu vida o algún pasaje de la palabra, ¿Haces alarde de lo
que sabes, o lo compartes de tal manera que el Señor sea
glorificado?

La verdadera motivación de tu vida debe ser que el Señor sea


glorificado?

Es muy necesario reflexionar siempre en estas cosas en nuestra


vida porque nos podemos equivocar y perder el horizonte y en
vez de exaltar el nombre del Señor, mas bien lo estamos
ensuciando con nuestro propio testimonio.

Los hermanos responsables de administrar la ofrenda lo hacían


para la gloria de Dios y para demostrar la buena voluntad de los
hermanos que hicieron esa generosa ofrenda.

Pablo no quería ocultar ni pasar por alto de ninguna manera, esa


muestra de afecto, amor y compenetración que tenían los
hermanos de las diferentes iglesias a la hora de dar esa ofrenda de
amor a los hermanos que estaban pasando necesidad, sino mas
bien quería expresar la buena voluntad de ellos, su buena
disposición como hermanos en cristo. Más adelante también lo
reconoce.

2Corintios 9.1-2 Cuanto a la ministración para los santos, es por


demás que yo os escriba; 2pues conozco vuestra buena voluntad,
de la cual yo me glorío entre los de Macedonia, que Acaya está
preparada desde el año pasado; y vuestro celo ha estimulado a la
mayoría.
440

Y para demostrar (exhibir, manifestar, exponer, expresar) vuestra


buena voluntad.

Efesios 6:5-7 Siervos, obedeced a vuestros amos terrenales con


temor y temblor, con sencillez de vuestro corazón, como a Cristo;
6
no sirviendo al ojo, como los que quieren agradar a los
hombres, sino como siervos de Cristo, de corazón haciendo la
voluntad de Dios; 7sirviendo de buena voluntad (de buena gana),
como al Señor y no a los hombres.

¿Sirves al Señor? Y si le sirves, ¿Cómo lo haces? De buena


voluntad, de buena gana, o por obligación, porque no te queda de
otra? ¿O eso no es para ti?

No es lo mismo servir a Dios de buena voluntad, de buena gana o


servir a Dios porque no te queda de otra. La actitud y la
motivación son diferentes y los resultados también lo serán.

Se ve claramente cuando alguien sirve de buena voluntad al Señor


y cuando lo hace por cumplir, o por llenar el hueco, o porque no
le queda de otra, porque no hay más personas.

Sobre todo en el tema de la ofrenda, se ve cuando hay un corazón


agradecido a Dios por las bendiciones recibidas y cuando no hay
una buena disposición, cuando no hay un corazón agradecido o
dispuesto para servir.

Todos de los que estamos aquí, responsables o creyentes y


también los que nos ven por internet día a día, los que visitan las
diferentes casas de oración, en Puerto del Rosario, los hermanos
en Gran Tarajal, en Morro Jable, en México, en Perú, en Estados
Unidos o Londres, TODOS debemos reflexionar sobre cómo
estamos sirviendo a Dios, de qué manera estamos ayudando en su
obra, con qué actitud se sirve a Dios si pachucho o de buena
voluntad, para la gloria de los hombres o para la gloria de Dios.
441

Si miramos a nuestro alrededor, ¿Cuántas personas sirven a Dios


de corazón y cuantos se sirven de Dios? Se aprovechan para
sacarles dinero a las gentes?

Dios siempre ha estado dispuesto para nosotros, para ayudarnos,


consolarnos, para rescatarnos; envió a su Hijo a morir por todo el
mundo.

Para todo cuanto necesitemos y para compartir con otros ha


suplido, siempre, siempre, siempre. Dios ha estado ahí cuando lo
hemos necesitado. No hay una sola ocasión que podamos decir
que Dios nos halla desamparado.

Pero, nosotros, ¿Tenemos esa misma disposición? ¿Servimos de


buena voluntad, de buena gana, o a regañadientes?

¿Tienes tú una buena voluntad para servirle, igual que Él te ayuda


diariamente?

Jesús se negó así mismo y se entrego por nosotros. Aunque le


costó, lo hizo de buena voluntad; oró para que el Padre pasara de
Él esa copa. Pero caminó hacia la cruz de una manera firme,
perdonando a quienes le ofendían; perdonando a quienes se
arrepentían de sus pecados como el malhechor que estaba a su
lado.

¿Tienes la misma disposición de Jesús?


¿Haces las cosas de buena voluntad?
¿O hay que estar arreándote como a los burros?

Pareciera que hoy en día fuera una carga muy pesada el servir a
Dios, como que es algo tan difícil que nadie quiere mojarse.

La población mundial (el número total de seres humanos viviendo


en la Tierra) era de 7,349 millones al 1 de Julio de 2015; la
población española vuelve a caer: somos 46,4 millones de
habitantes. De tantos habitantes, aún quitando a los bebes, queda
442

una cantidad importante, pero de todos ellos Dios me ha llamado


a mí a servirle.

Por eso cada vez que comparto la Palabra de Dios, doy gracias
porque es un privilegio compartirla, un alto honor. Servimos a un
Dios tan grande, infinito, eterno, majestuoso, glorioso, hermoso,
que nos cuida, protege, sustenta, nos sana, nos fortalece medio de
la prueba, y por si fuera poco, entregó a Su Único Hijo por mí, y
por ti, para que le sirvas de buena voluntad.

Deberíamos pelearnos (en el buen sentido de la palabra) por


servir, deberíamos ofrecernos voluntariamente por el solo hecho
de agradecerle todo lo que ha hecho por nosotros.

En vez de jugar a piedra papel o tijera; o tin marin, tú no te la


quedas. Y a quien le toque ahhhhhhhh, pareciera como si fuese un
castigo, una penitencia.
Como si servir a Dios fuese una maldición en vez de una enorme
bendición. Como cuando un padre poco formado en la fe le dice a
los niños, si te portas mal te llevo a la iglesia.

Si se portan mal los pongo a predicar. Como si servir a Dios fuese


una carga, un peso imposible de llevar, o una tarea imposible de
hacer. No debiera ser así, pero para muchos lo es.

Mateo 11:30 porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.

Reconozco que ser cristiano no es fácil, y más cuando se vive sin


Cristo, pero con Cristo, todo es más fácil, la carga es ligera,

Aunque vengan “euroclidones”, Jesús los calma; cuando vienen


tempestades Él las detiene; cuando no vemos con claridad, Él trae
luz, y esperanza. Por eso quiero animarles primero a servir a Dios
y segundo a servirle de buena voluntad, de buena gana.

No a regañadientes porque ustedes saben que esa no es la


voluntad de Dios para sus vidas, ese no es el carácter que debe
443

tener un cristiano verdadero, que dice servir a Dios, o que dice


que permanecer en él,

1Juan 2:6 El que dice que permanece en él, debe andar como él
anduvo.

No debe ser una carga pesada, el ayudar a otros, el ofrendar como


estos hermanos lo hicieron de su pobreza, debe ser un privilegio,
una oportunidad, una muestra de nuestra gratitud a Dios.

Este testimonio de los hermanos del primer siglo nos debe servir
de ejemplo a nosotros de su buena voluntad para ofrendar y servir
a Dios en todas las áreas de nuestra vida.

V 20 evitando que nadie nos censure (Critique, vitupe) en cuanto


a esta ofrenda abundante que administramos.

8.20 De nuevo Pablo muestra su preocupación por evitar críticas


innecesarias (censura).

Pablo tenía cuidado de guardar su reputación en cuanto a las


ofrendas que se recaudaban, por eso se designaron varios
hermanos para recoger la ofrenda y llevarla.

Pablo tenía una alta responsabilidad porque la ofrenda que se


había recogido y que tenía que administrar era abundante, es decir
estaban administrando una ofrenda generosa, por encima de lo
ordinario, y debía ser muy cuidadoso para evitar criticas de
algunos que pudieran pensar que él se podía quedar con algo de lo
recogido.

Esto nos enseña que en lo que dependa de nosotros, no debemos


dar lugar a la crítica, a la murmuración, debemos seguir siendo
íntegros, puros, sinceros no solo en cuanto a la administración de
las ofrendas para los santos sino también debemos ser cuidadosos
e íntegros con el testimonio que damos como cristianos.
444

Es nuestro deber ser ejemplo a los demás, para que nadie nos
censure (critique) con justo juicio, debemos ser buenos
administradores del dinero y no dar lugar al diablo para que nos
censuren.

Muchos obreros cristianos han perdido su reputación y testimonio


debido al mal uso del dinero no solo de la iglesia sino fuera de
ella y al mal testimonio que dan de cara al mundo, o al descuido
en el manejo del dinero del Señor.

Pablo deseaba ardientemente que nadie lo acusara de malversar


esos fondos misioneros, de modo que hizo que las iglesias
designaran tres mensajeros para que manejaran el dinero.

21 …procurando hacer las cosas honradamente, no sólo delante


del Señor sino también delante de los hombres.

Este versículo comienza con la palabra “procurando”. Este verbo


significa “pensar con anticipación”. Tratar de hacer, procurar,
proveer, cuidar o velar por.

Es nuestro deber procurar, hacer siempre las cosas bien, porque


las cosas bien hechas Dios las bendice.

Hechos 24.15-16 teniendo esperanza en Dios, la cual ellos


también abrigan, de que ha de haber resurrección de los muertos,
así de justos como de injustos. 16Y por esto procuro tener siempre
una conciencia sin ofensa ante Dios y ante los hombres. Pablo
ante el gobernador

Romanos 12.14-21 Bendecid a los que os persiguen; bendecid, y


no maldigáis. 15Gozaos con los que se gozan; llorad con los que
lloran. 16Unánimes entre vosotros; no altivos, sino asociándoos
con los humildes. No seáis sabios en vuestra propia opinión. 17No
paguéis a nadie mal por mal; procurad lo bueno delante de todos
los hombres. 18Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad
en paz con todos los hombres. 19No os venguéis vosotros mismos,
amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito
445

está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor. 20Así que, si tu


enemigo tuviere hambre, dale de comer; si tuviere sed, dale de
beber; pues haciendo esto, ascuas de fuego amontonarás sobre su
cabeza. 21No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el
mal

¿Procuras hacer siempre las cosas bien, honradamente, o sólo


mientras te ven?

2Pedro 3.14 Por lo cual, oh amados, estando en espera de estas


cosas, procurad con diligencia ser hallados por él sin mancha e
irreprensibles, en paz.

Si buscamos la palabra procurar comprobaremos que se repite


muchas veces sobre todo en el Nuevo Testamento: Procuraban
matarle, la muerte, prenderle, etc.
Lucas 11.54 acechándole, y procurando cazar alguna palabra de
su boca para acusarle.

Procuraban apedrearle, sacarle del pueblo.

¿Y tú que haces? ¿Procuras hacer Su voluntad? ¿Procuras hacer lo


que te pide de una manera honrada, o te da igual?

Y hay que tener cuidado de eso, de hacer las cosas siempre,


siempre, te vean o no, de manera honrada.

El propósito de Pablo era que todos los involucrados demostraran


que eran “intachables” no sólo delante del Señor sino también
delante de los hombres. No debe haber oportunidad para
acusaciones, ni de Dios ni de los hombres.

La honradez tiene que ver con la rectitud. La semana pasada


estuvimos meditando extensamente en el v 21, procurando hacer
las cosas honradamente, no sólo delante del Señor sino también
delante de los hombres.
446

Meditamos en la necesidad como cristianos de hacer las cosas


siempre, siempre, siempre, honradamente, nos vean o no. Porque
en realidad, hay una nube de testigos que nos están viendo y es
necesario dar un buen testimonio.

Debemos hacer las cosas honradamente delante del Señor y


también delante de los hombres, porque sino daremos un mal
testimonio y el nombre de Dios no será exaltado, no será alabado,
sino vituperado, manchado, ensuciado y eso no es la voluntad de
Dios para nosotros.

Imagínense, dar un mal testimonio delante de los hombres,


¡Miren a ese que se dice cristiano! Hay quienes dicen: ¡Conozco a
una persona que dice que es cristiano y miente constantemente
para salir como los gatos, paradito, y eso no esta bien!
Debemos ser imitadores de Cristo en todo, así como algunos
hermanos del primer siglo, a los cuales Pablo nombra en esta
epístola y reconoce su labor y testimonio como digno de seguir.

8:22 Enviamos también con ellos a nuestro hermano, cuya


diligencia hemos comprobado repetidas veces en muchas cosas, y
ahora mucho más diligente por la mucha confianza que tiene en
vosotros.

Pablo nos habla del hermano, no sólo en el v 18 sino que vuelve y


nos lo recalca en este versículo. Es necesario recordar parte de lo
que estuvimos viendo en el v 18.

Es fundamental, es necesario contar con hermanos que estén


dispuestos no sólo a servir a Dios, sino también para ayudar, para
apoyar las diferentes actividades, para servir a otros. Somos un
cuerpo y nos necesitamos, necesitamos unos a otros, y no
podemos decir que no nos necesitamos.

En esta iglesia siempre estamos activos. Es bueno apoyar, ayudar,


animarnos, compartir las cargas. Porque la Biblia dice en Gálatas
6.2: Sobrellevad (quitar, sacar, recoger) los unos las cargas de los
otros, y cumplid así la ley de Cristo.
447

Hebreos 10.24 Y considerémonos (Considerar, fijarse en, ver,


observar, mirar, darse cuenta, comprender) unos a otros para
estimularnos al amor y a las buenas obras;

¿Cuántos creen que es necesaria la ayuda dentro de la iglesia?


¿Creen que es necesario la ayuda en el ministerio?
¿Creen que es necesario el apoyar a quienes sirven en el
ministerio?
¿Creen que es necesario brindar ayuda a quienes se preocupan por
las almas?

Pablo lo creía necesario, por eso en el v18 y en este v 22 nos


recuerda que en la Iglesia primitiva había hermanos fieles y que
querían seguir sirviendo al Señor y que no sólo eran de muy buen
testimonio para otros, sino que ayudaban en lo que hiciera falta,
en este caso en la ofrenda.

Pablo ve necesario el ayudar, respaldar, apoyar y por supuesto, el


servir a otros. Por eso reconoce, no sólo dice, que lo ayudan sino
también habla positivamente del testimonio de estos hermanos,
para no dejar nuevamente lugar a la duda, de que estos hermanos
podían, junto con él, administrar las ofrendas recogidas.

8:22 Enviamos también con ellos a nuestro hermano, cuya


diligencia hemos comprobado repetidas veces en muchas cosas, y
ahora mucho más diligente por la mucha confianza que tiene en
vosotros.

…cuya diligencia hemos comprobado repetidas veces en muchas


cosas. Pablo habla de quienes habían escogido eran diligentes,
servían con diligencia, diligentemente.

Diligencia significa eficiencia con que se lleva a cabo una


gestión: servían con prontitud, agilidad y eficiencia; Atención,
celo, cuidado, esmero, interés, premura, animo pronto.
448

No esperando que otro lo haga sino siendo diligentes,


responsables con la tarea que Dios les había encomendado. Esto
nos habla de cuan necesario es seguir sirviendo a Dios, no de
cualquier manera sino como la semana pasada vimos,
honestamente y ahora vemos como los hermanos también sirven
con diligencia.

…cuya diligencia hemos comprobado repetidas veces en muchas


cosas. El apóstol habla de primera mano. No dice: “es que me
dijeron que ellos eran diligentes”, sino: cuya diligencia hemos
comprobado repetidas veces en muchas cosas.

No una ni dos sino repetidas veces. Pareciera como si Pablo les


estuviese diciendo: No sólo con el tema o en el área de la ofrenda
sino también en muchas otras áreas.

¿Cómo eres en el trabajo? ¿Eres diligente, responsable o


negligente?
¿Cómo eres con las cosas que tienes que hacer en casa, diligente o
negligente?
¿Cómo eres con tu esposa?
¿Cómo eres con tus hijos e hijas, diligente o negligente?
¿Cómo eres cuando se trata de la iglesia, diligente o negligente?
¿Cómo eres con Jesús?
¿Cómo sirves a Dios?
¿Cómo sirves a los hermanos, eres diligente o negligente?
¿Cómo administras tu tiempo, siendo diligente o negligente?

Colosenses 4.5 Andad sabiamente para con los de afuera,


redimiendo el tiempo. Aprovechándolo bien.

¿Cómo administras los recursos que Dios te ha dado, diligente o


negligentemente?

Romanos 14:12 De manera que cada uno de nosotros dará a


Dios cuenta de sí.

Al negligente, le da igual todo porque es perezoso.


449

Pablo nos menciona el ejemplo de los hermanos que en muchas


ocasiones habían sido probados, examinados, observados en
muchas cosas y habían salido aprobados, siendo diligentes en
todo lo que se les había encomendado, no sólo una vez, sino
repetidas veces, en muchas cosas.

¿Puede decir alguien eso de ti, de tu vida?


¿Cómo sirves al Señor?
Pongamos nuestros nombres antes de la coma: Enviamos a
nuestro hermano José Luís, cuya diligencia hemos comprobado
repetidas veces en muchas cosas, y ahora mucho más diligente
por la mucha confianza que tiene en vosotros.

Analiza tu vida hoy, delante del señor, quienes te rodean ¿Pueden


decir eso de ti?
¿Podrá decir eso Dios de ti? Este es mi hijo amado, en quien
tengo complacencia.

Pablo nos exhorta en libros anteriores a ser diligentes, por


ejemplo en Romanos 12:11: En lo que requiere diligencia, no
perezosos; fervientes en espíritu, sirviendo al Señor;

“Acuérdate que hoy debes compartir algo en la oración” “Sí, ya


voy, más tarde estudio”

“¿Que pasó?, ¿Fuiste a la entrevista? “Ahhhhh es que estaba muy


liado y no pude”

Proverbios 19:15 La pereza hace caer en profundo sueño, Y el


alma negligente padecerá hambre.

Proverbios 19:24 El perezoso mete su mano en el plato, Y ni aun


a su boca la llevará.

“¿Me puedes hacer el favor de llevarme a tal sitio? “Es que estoy
ocupado” Aunque en realidad no esta haciendo nada.
450

Chiste del que esta acostado y ve a una serpiente que va bajando


por la hamaca y le grita a la mujer: María ¿Qué es bueno para la
picada de culebra?

“Hijo, arregla la habitación” “Ya vaaaaa, todavía noooo, estoy


ocupadooooo”

“¿Lavaste los platos?” “Ya vaaaaa, ahoritaaaaaaaaaa”

“¿Llamaste a tal persona? “Ya vaaaa ahoritaaaaaaa”

“Venga que nos vamos a la iglesia” “Ya vaaaaaaa, ahorita nos


vamoooosss, déjame dormir otro ratito más, que no he dormido
nada”

¿Quién quiere compartir algo? Y nos escondemos.


“¿Ya hiciste las tareas?” “Ya vaaaaaa ahoritaaaaaaaa”

“¿Leíste la Biblia hoy?” “No, es que no tuve tiempo”

“Apúrense que nos invitaron a comer en casa de fulano, y ya


están en el coche apurándonos para salir”

“Nos invitaron los vecinos al cine” “Fuuaaaaa”

A veces se ve eso, para servir a Dios qué problema. Pero para una
fiesta, comida, ir al fútbol o charlas por whatsapp todo lo que
quieras.

Romanos 12:11 En lo que requiere diligencia, no perezosos;


fervientes (Con entusiasmo, con espíritu fervoroso) en espíritu,
sirviendo al Señor.

Proverbios 13:4 El alma del perezoso desea, y nada alcanza; Mas


el alma de los diligentes será prosperada.

Debe haber una diferencia. Debemos animarnos los unos a los


otros a servir al Señor. Es un privilegio que tenemos de servirle;
451

hagámoslo bien, cada día mejor, de buen ánimo; que los demás
puedan decir de nosotros lo que Pablo decía de los hermanos.

Siendo diligentes, no negligentes, ni perezosos porque la pereza te


estanca, la diligencia edifica, la pereza destruye.

Debemos seguir el ejemplo de estos hermanos que a pesar de las


críticas que había recibido Pablo anteriormente, de las luchas y
los problemas, pruebas y dificultades, seguían sirviendo a Dios
con diligencia.

Hebreos 6:11-12 Pero deseamos que cada uno de vosotros


muestre la misma solicitud hasta el fin, para plena certeza de la
esperanza, 12a fin de que no os hagáis perezosos, sino imitadores
de aquellos que por la fe y la paciencia heredan las promesas.
2Pedro 1.3-9 Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a
la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el
conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia,
4
por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas
promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la
naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el
mundo a causa de la concupiscencia; 5vosotros también,
poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe
virtud; a la virtud, conocimiento; 6al conocimiento, dominio
propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad; 7a
la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor. 8Porque si
estas cosas están(tener, viven) en vosotros, y abundan (Crecer,
aumentar, multiplicarse), no os dejarán estar ociosos (inactivos)
ni sin fruto en cuanto al conocimiento de nuestro Señor
Jesucristo.

Pedro habla aquí de avance, de progreso, de mejora. Debemos


hoy más que nunca, abundar en lo espiritual, en el conocimiento,
en el dominio propio, en la piedad, en el afecto fraternal, en el
amor. Dejar la pereza a un lado y servir a Dios.

¿Se imaginan que a Jesús le hubiese dado pereza ir a la cruz?


¿Dónde estaríamos ahora? Perdidos, sin esperanza y sin Dios. Ese
452

era el motor que tenían los hermanos y Pablo para servir a los
demás.

2Corintios 8:22 Enviamos también con ellos a nuestro hermano,


cuya diligencia hemos comprobado repetidas veces en muchas
cosas, y ahora mucho más diligente por la mucha confianza que
tiene en vosotros.

Pablo pareciera como si les dijera: él ha sido diligente, pero ahora


lo es más por la confianza que ha depositado en ustedes.

La diligencia lleva sus frutos, trae bendición a quienes le rodean.


En este caso, la confianza es un fruto de lo que Dios puede hacer
en una vida. El fruto de su buen testimonio, de hacer las cosas
diligentemente.
La confianza que habían depositado las demás iglesias en estos
siervos era una responsabilidad altísima que no debía ser
defraudada de parte de aquellos que la habían recogido y la
administraban.

Esto nos habla de que si somos siervos diligentes, se nos va a


depositar más confianza y tendremos más responsabilidad y
debemos tener mucho cuidado de no traicionar esa confianza, y
más cuando se habla de un tema tan delicado como la ofrenda y
también del testimonio.

Debemos cuidarnos cada día de hacer las cosas bien, honesta,


correcta y diligentemente y de no defraudar la confianza que otros
ponen en nosotros.

8:23 En cuanto a Tito, es mi compañero y colaborador para con


vosotros; y en cuanto a nuestros hermanos, son mensajeros de las
iglesias, y gloria de Cristo.

Mi compañero. Pablo estimaba a sus colegas más como


copartícipes en la obra que como ayudantes. No pretende llevarse
la gloria y menospreciar el trabajo de sus compañeros; no
453

pretendía opacar, ocultar el trabajo que otros ya habían realizado


y estaban realizando.

En pablo vemos ese espíritu, ese corazón agradecido con otros


por la ayuda que ellos estaban dando, la cual abundaba para la
gloria de Dios. No sólo lo reconoce en este pasaje, sino en
muchos otros, donde reconoce el trabajo arduo de otros y la ayuda
que recibió de ellos.

Filipenses 2.25 Mas tuve por necesario enviaros a Epafrodito, mi


hermano y colaborador y compañero de milicia, vuestro
mensajero, y ministrador de mis necesidades.

Colosenses 4:7-11 Todo lo que a mí se refiere, os lo hará saber


Tíquico, amado hermano y fiel ministro y consiervo en el Señor,
8
el cual he enviado a vosotros para esto mismo, para que conozca
lo que a vosotros se refiere, y conforte vuestros corazones, 9con
Onésimo, amado y fiel hermano, que es uno de vosotros. Todo lo
que acá pasa, os lo harán saber. 10Aristarco, mi compañero de
prisiones, os saluda, y Marcos el sobrino de Bernabé, acerca del
cual habéis recibido mandamientos; si fuere a vosotros,
recibidle; 11y Jesús, llamado Justo; que son los únicos de la
circuncisión que me ayudan en el reino de Dios, y han sido para
mí un consuelo.

Han sido para mí un consuelo, alivio, bálsamo. Es un privilegio,


un descanso cuando tienes hermanos que te consuelan, que te
animan a seguir adelante, que te dan una palabra de ánimo, de
aliento en los tiempos de desierto. ¿Has sido de consuelo a otros?

Romanos 16.1-12 Os recomiendo además nuestra hermana Febe,


la cual es diaconisa de la iglesia en Cencrea; 2que la recibáis en
el Señor, como es digno de los santos, y que la ayudéis en
cualquier cosa en que necesite de vosotros; porque ella ha
ayudado a muchos, y a mí mismo. 3Saludad a Priscila y a Aquila,
mis colaboradores en Cristo Jesús, 4que expusieron su vida por
mí; a los cuales no sólo yo doy gracias, sino también todas las
iglesias de los gentiles. 5Saludad también a la iglesia de su casa.
454

Saludad a Epeneto, amado mío, que es el primer fruto de Acaya


para Cristo. 6Saludad a María, la cual ha trabajado mucho entre
vosotros. 7Saludad a Andrónico y a Junias, mis parientes y mis
compañeros de prisiones, los cuales son muy estimados entre los
apóstoles, y que también fueron antes de mí en Cristo. 8Saludad a
Amplias, amado mío en el Señor. 9Saludad a Urbano, nuestro
colaborador en Cristo Jesús, y a Estaquis, amado mío. 10Saludad
a Apeles, aprobado en Cristo. Saludad a los de la casa de
Aristóbulo. 11Saludad a Herodión, mi pariente. Saludad a los de
la casa de Narciso, los cuales están en el Señor. 12Saludad a
Trifena y a Trifosa, las cuales trabajan en el Señor. Saludad a la
amada Pérsida, la cual ha trabajado mucho en el Señor.

Pablo reconoce que lo que ha podido llegar a alcanzar, el trabajo


que ha podido tener alguna recompensa, no ha sido un trabajo de
solista, o de solitario. El no dijo: La fuerza de mi mano a
conseguido esto.

Pablo se cuidaba de no llevarse el la gloria que no le pertenecía,


sino darle la gloria a Dios y reconocía el duro trabajo que no sólo
él hacía, sino también los hermanos.

Hermano, colaborador, compañero de batalla. Es de suma


importancia reconocer que no hacemos solo el trabajo, que hay
muchísima gente, detrás de las bambalinas que ayuda y que presta
un servicio que a veces no se ve pero que hay que reconocer.

En los telediarios que vemos por la televisión, vemos a dos o tres


dando las noticias, la cara vista de la televisión, pero hay un
trabajo enorme, en cada serie de televisión, en la radio pasa lo
mismo, en el cine, el guionista, los dobles.

En cada caricatura que vemos, en los cortos de películas, hay un


equipo de trabajo que no se ve pero que está ahí, si alguno falla,
no seria posible. En la iglesia pasa exactamente lo mismo.

Es necesario reconocer a los que trabajan entre nosotros, como


está escrito en 1Tesalonicenses 5.12 Os rogamos, hermanos, que
455

reconozcáis a los que trabajan entre vosotros, y os presiden


(Tienen autoridad sobre, cuidan, ayudan, se ocupan en, practican,
dirigen,) en el Señor, y os amonestan; 13y que los tengáis en
mucha estima y amor por causa de su obra. Tened paz entre
vosotros.

Hoy mas que nunca es necesario reconocer el trabajo que algunos


hacen a pesar de sus propias vidas, de sus problemas, de los hijos,
no es fácil pero están ahí, llegan temprano un domingo, organizan
todo para que todo esté listo para que el local este limpio y
ordenado, los que preparan el café, el sonido, los que colaboran
en la alabanza, los que tocan los instrumentos, quien prepara el
mensaje, quien ora por el culto,

1Corintios 3:9 Porque nosotros somos colaboradores de Dios, y


vosotros sois labranza (cultivo, campo) de Dios, edificio de Dios.

Colaboradores: son aquellos que sirven a otros y no se sirven de


otros. Hoy en día en muchas iglesias no se reconoce la labor que
otros realizan porque uno solo es quien quiere llevarse las
medallas del fruto del trabajo de todos.

El colaborador muchas veces no descansa, Persona que está


siempre dispuesta a ayudar a otros.

Cada vez hay menos colaboradores entre nosotros, el mismo


Señor Jesús reconoció la necesidad de gente consagrada al
servicio de Dios y de los demás.

Lucas 10:2 Y les decía: La mies a la verdad es mucha, más los


obreros pocos; por tanto, rogad al Señor de la mies que envíe
obreros a su mies.

Hoy en día hay cada vez menos personas que quieran colaborar
con la obra de Dios, aunque la biblia dice que somos
colaboradores de Dios, hay muchos que debiendo ser
colaboradores y ayudar, son destructores de la obra.
456

¿Eres de los pocos obreros que quieren trabajar?


¿O prefieres estar en el paro y no ser un colaborador de Dios?
¿Colaboras con Dios a tiempo completo?
¿O sólo a medio tiempo, o unas horitas?
¿Reconoces a quienes trabajan a tu alrededor?
¿O no es necesario?
¿Reconoces el trabajo arduo de quienes te sirven?
¿O crees que no hacen nada?
¿Estas agradecido por los colaboradores que Dios te ha dado?
¿O solo reniegas de ellos?

Yo hoy quiero reconocer públicamente el trabajo, la disposición,


la paciencia, la entrega de unos colaboradores que tengo, son
compañeros de batalla, son buenos compañeros, son de buena
compañía, han sido de buena influencia, de buen testimonio, que
así como Pablo lo dijo de Tito, yo debo reconocer la ayuda y el
compañerismo de ellos, y aplicar este versículo como si las
palabra de Pablo fueran mías.

En cuanto a Nicolás y montaña, son mis compañeros y han sido


colaboradores para con vosotros. Y aunque para muchos sea una
noticia de alegría que se van, para otros quisiéramos que se
quedaran, pero Dios los necesita en otro lado.

Pero ya que siguen entre nosotros, mi familia y yo queremos


reconocer su arduo trabajo en el Señor, y que el trabajo y el
testimonio que ellos nos han dado, no ha sido en vano.

Aunque ustedes no quieran seguir adelante, yo quiero seguir


adelante, con el testigo, ellos nos lo han entregado, y la carrera
continua, la iglesia sigue adelante, ellos siguen adelante.

Yo he decidido no tirar la toalla, tomar la cruz y seguir. Soy su


colaborador, su compañero y cuenten conmigo, así como Pablo
contó con Tito. También espero contar con ustedes, y ustedes
conmigo.
457

No obstante, hay que reconocer que a pesar de esto, nada sería


posible sin Dios. Así que no se trata de llevarse la gloria, sino de
reconocer el trabajo de los demás.

1Corintios 3.9 Porque nosotros somos colaboradores de Dios, y


vosotros sois labranza de Dios, edificio de Dios.

Hay un trabajo que realmente no es para hombres sino para Dios


El crecimiento lo da Dios, no el pastor. La gloria es para Dios

Hechos 2.46-47 Y perseverando unánimes cada día en el templo,


y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y
sencillez de corazón, 47alabando a Dios, y teniendo favor con
todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día a la iglesia los que
habían de ser salvos.

La iglesia no es la que añade a los que han de ser salvos.


Es nuestro deber como cristianos invitar a la iglesia a quienes no
conocen el evangelio, es nuestro mandato como cristianos dar
testimonio, confesarle delante de los hombres. Pero debemos ser
conscientes de que será Dios quien añadirá.

La semana pasada estuvimos meditando que Pablo habla de


quienes habían escogido eran diligentes, servían con diligencia,
diligentemente, servían con prontitud, agilidad y eficiencia,
atención, celo, cuidado, esmero, interés, premura, ánimo pronto.
Hablamos de ser diligentes en todas las áreas de nuestra vida:
- En el trabajo,
- Con la esposa, los hijos,
- Con la iglesia, con Jesús,
No sólo con nuestras vidas sino todo y cuanto incluye:
- tiempo, recursos y talentos que dios nos ha dado
- no debemos ser perezosos.

Romanos 12.11 En lo que requiere diligencia, no perezosos;


fervientes (Con entusiasmo, con espíritu fervoroso) en espíritu,
sirviendo al Señor;
458

2Corintios 8.23 En cuanto a Tito, es mi compañero y colaborador


para con vosotros; y en cuanto a nuestros hermanos, son
mensajeros de las iglesias, y gloria de Cristo.

Vimos varios pasajes en los que Pablo reconoce el trabajo de


otros a lo largo de sus escritos y no se pone como solista sino que
reconoce el trabajo del conjunto, del equipo.

8:23 En cuanto a Tito, es mi compañero y colaborador para con


vosotros.

Pablo nos habla de Tito, compañero y colaborador fiel del apóstol


Pablo. Tito era griego. Pablo lo define en Tito 1.4 como:
verdadero hijo en la común fe: Gracia, misericordia y paz, de
Dios Padre y del Señor Jesucristo nuestro Salvador.

Es evidente que Pablo lo apreciaba, lo amaba, así también como a


otros colaboradores, reconocía la capacidad de servicio y el haber
podido contar con ellos en sus viajes misioneros.

Verdadero hijo en la fe, autentico, sincero, fiel. Lo que significa


que pablo seguramente lo guiara en la fe, lo vio crecer, madurar y
comprometerse con la obra. Había también estado en otras
ocasiones (mandado por pablo) a Corinto 2Corintios 2:13; 7:13,
8:16.

2Corintios 7.6 Pero Dios, que consuela a los humildes, nos


consoló con la venida de Tito

Aunque aquí Pablo le llama hijo es notable que en 2Corintios 2.13


lo llama su “hermano”. En 8.23 “compañero” y “colaborador”,
lo cual también se evidencia en las encomiendas que le asigna a lo
largo de la carta, confirmando el gran aprecio que le tenía.

Sin duda, Tito fue uno de los muchos discípulos de Pablo que le
proporcionaron grandes satisfacciones, pues luego de haber sido
su hijo en la fe, llegó a ser su hermano y colaborador en esa
459

misma fe. Es decir, Pablo pudo ver a tito crecer y madurar y fue
capaz de ocupar su lugar en el trabajo de las iglesias.

Pablo pude pedirle que se encargara de tareas ministeriales como


parte de un equipo de iguales en el ministerio. Esa es una
experiencia hermosa para cualquier ministro.

Vemos en Tito modelo de discípulo que cumple fielmente el


llamado que se le hace, cumple su función, su misión
obedeciendo a su maestro. Podemos ver en Tito todas estas
cualidades y características dignas de un obrero de Dios.

Cómo creció, maduró y ayudó luego a otros que como él estaban


creciendo; fue de menos a más. Dios le ayudó, y Pablo de alguna
manera vio su crecimiento y estaba agradecido a Dios por tan fiel
siervo.
8:23 En cuanto a Tito, es mi compañero (participe) y
colaborador para con vosotros.

Tito un siervo ejemplar, tanto en las alegrías como en los


padecimientos, en las tristezas, en las victorias pero también en
las batallas. ¿Se puede decir eso de ti?
¿Eres un modelo a seguir de discípulo como Tito?
¿Se pueden ver estas características o cualidades de Tito en ti?
¿Eres un siervo fiel, que crece, madura y ayuda como lo hacía él?
¿Se puede decir que eres un buen compañero como tito?
¿Participas de la obra de Dios, o eres solo un espectador?
¿Cómo Participas en la obra activamente o pasas desapercibido?
¿Eres un modelo de discípulo?
¿Ven en ti los demás a Cristo?
¿Eres de los discípulos fiables?
¿Eres fiel. o de aquellos con los que hay que tener cuidado?
¿Eres un verdadero (autentico, sincero, fiel) hijo en la fe?
¿Has crecido como hijo, o comenzaste a crecer pero te estancaste?

En tito hubo un crecimiento progresivo hasta ser un buen


compañero de milicia, un verdadero hermano.
¿ Has madurado o estas en ese proceso?
460

¿Quieres seguir creciendo, quieres seguir madurando como Tito?


¿Das satisfacción a tu maestro, o sólo dolores de cabeza?
¿Eres sincero como compañero, como discípulo?

Tito fue fiel, verdadero, autentico, sincero, un modelo a seguir,


participantes de la obra de Cristo.

Tito 1.5 Por esta causa te dejé en Creta, para que corrigieses lo
deficiente, y establecieses ancianos en cada ciudad, así como yo
te mandé.

Podemos ver que Pablo depositó confianza en Tito para poner


orden en Creta, no cualquier cosa, no cualquier tarea, y Pablo
sabía que Tito era la persona idónea y preparada para esa tarea.
¿Estas preparado como siervo para corregir lo deficiente?

Según 2Timoteo 3.17 ¿Estas enteramente preparado para toda


buena obra? Tito lo estaba y por eso el apóstol lo llamaba …mi
compañero (participe) 8:23.

Tito no sólo era un compañero de batalla, de milicia, de trabajo


sino que era una muy buena compañía, una persona con un buen
testimonio y era de influencia a su entorno, toda su vida lo era.

Pablo mismo daba testimonio de que era fiel y se podía confiar en


él, sino no hubiese depositado esa confianza en él y no lo hubiese
dejado en Creta.

Pablo lo reconoce en pasajes como estos, se identificaba con


quien era, como era, lo que hacia para la obra de Dios. Tito era
una persona que había crecido, que era madura, que se desarrolló
y que seguía ayudando a otros, que seguía tendiendo la mano, que
sigue afianzándose en los caminos del Señor y cosas como esas.

Sus buenas actitudes hay que reconocerlas y destacarlas, y Pablo


lo hace en pasajes como estos. ¿Y qué de nosotros?
¿Somos una buena compañía?
¿Somos buenos compañeros?
461

¿Somos de buena influencia para otros?


¿Somos aquellos con que la gente desea estar?

Veo a Pablo como sacando pecho, como sintiéndose orgulloso de


Tito al decir: Es mi compañero. ¿Se puede decir lo mismo de ti?
Como pastores ¿Podemos decir ahí esta fulano mi compañero?
¿O tal vez: Ahí esta fulano, ese dice que es mi compañero?

Es importante meditar en estas cosas, porque hay personas que no


son buenos compañeros ni son buena compañía, no son de buena
influencia. Eso no pasa solo fuera de la iglesia sino también a
veces dentro, aquí también.

Qué creen que son buenos compañeros, buena compañía, trigo


limpio, pero que en realidad sus vidas dicen otra cosa. Son de mal
testimonio a otros. De mala influencia para los nuevos discípulos.
Porque la influencia que ejercen es carnal y no espiritual. Como
verdaderos cristianos debemos marcar la diferencia.

Dime: ¿Eres de buena compañía?


¿De buena influencia?
¿Eres un buen compañero?
¿O de mala influencia para otros?

Tito aprovechó bien el tiempo, aprovechó todos los recursos y


Pablo pudo decir de él que era un verdadero hijo en la fe, un
hermano que se podía confiar en él porque era su compañero, y
no solo era fiel para con Pablo, sino también para con los
hermanos.

8.23 Nos quedamos hablando de Tito. De su compañerismo y


colaboración con el ministerio apostólico de Pablo. Ahora bien,
¿Significa eso que Tito era un ser especial, distinto a nosotros, y
por eso reunía esas cualidades? No.

Era igual a nosotros. Pero había tomado la decisión de servir a


Dios y a sus hermanos en la fe, y es a eso a lo que se dedicaba.
462

Tito es un ejemplo a seguir porque sabía quien era y a qué quería


dedicar su vida.

¿Lo sabes tú? ¿Sabes quien eres, y a qué quieres dedicar tu vida?
Estas son preguntas que todos debiéramos hacernos alguna vez.
Porque si no lo sabes, sólo perderás el tiempo; y cuando te vengas
a dar cuenta ya será tarde para todo.

Cada uno de nosotros debemos tomar decisiones y esas decisiones


marcarán la diferencia, o no, con el resto de la gente. Puedes
decidir ser uno más del montón de gente que vive porque está
vivo. Que ama a quienes le aman y odia a quienes le odian. O
puedes ser diferente. Ser como Tito, o mejor aún, ser como Jesús.

No te hablo de imitarle sino de invitarle a que viva en ti. A través


de ti. ¿Creen que eso es posible? Yo creo que sí, porque eso es lo
que hizo el apóstol Pablo, cuando dijo: Con Cristo estoy
juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí;
Gálatas 2.20.

¿A cuántos les gustaría que Cristo viviera por medio de ellos?


¿Saben dónde está la clave? En la primar frase: Con Cristo estoy
juntamente crucificado.

Así que Tito era un ejemplo a seguir porque tenía a Cristo libre en
su corazón, mientras que él mismo, se mantenía crucificado con
Cristo.

Como está escrito: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese


a sí mismo, tome su cruz cada día, y sígame. Lucas 9.23

Pablo sigue diciendo: y en cuanto a nuestros hermanos, son


mensajeros de las iglesias, y gloria de Cristo.

Quiero llamar vuestra atención sobre la palabra mensajero que en


el original griego es apostolos y que en otros lugares se traduce
por apóstoles.
463

¿Quiere decir que todos los colaboradores de Pablo eran apóstoles


como él?
¿Quiere decir que entonces había muchos más apóstoles?
¿Significa que también hay apóstoles en el día de hoy?

La respuesta correcta es: Sí, y no. Me explico en dos pasos:

a) Como la palabra apostolos significa mensajero, enviado,


embajador, comisionado, etc. En ese sentido sí. Había y
aun hay muchos apóstoles.
b) Pero hay que aclarar que no son apóstoles en el sentido de
que participen del ministerio apostólico.

Es decir, estos mensajeros o enviados, no forman parte del


ministerio apostólico. Son mensajeros de las iglesias. Pero de
ningún modo forman parte del limitado grupo de trece apóstoles a
los que llamó Jesús para establecer el fundamento sobre el que se
sustentaría la Iglesia.

Como está escrito: Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos,


sino conciudadanos de los santos, y miembros de la familia de
Dios, 20edificados sobre el fundamento de los apóstoles y
profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo,
21
en quien todo el edificio, bien coordinado, va creciendo para
ser un templo santo en el Señor; 22en quien vosotros también sois
juntamente edificados para morada de Dios en el Espíritu.
Efesios 2.19-22.

Actualmente son muchos los que les gusta hacerse llamar


apóstoles y andan por ahí haciendo proclamas proféticas que no
son sino sacar textos de su contexto para decirles a la gente lo que
quieren oír.

A estos les gusta citar textos como Hechos 14.14 y Romanos


16.7; 1Corintios 4.9, y otros en los que se usa la palabra apóstol
en el sentido de mensajero para enfatizar que aun siguen habiendo
apóstoles.
464

Algunos han comentado nuestro vídeo sobre los apóstoles y


profetas, con estos pasajes. Intentando demostrar que el ministerio
apostólico sigue en vigor.

Quizás el pasaje que más citan es el de Efesios 4.11 Y él mismo


constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros,
evangelistas; a otros, pastores y maestros.

Afirman que todos estos ministerios siguen en vigor en la Iglesia.


Es más, algunos creen que si una congregación no está bajo la
cobertura de un apóstol no es Iglesia, ni puede ser bendecida por
Dios.

Es interesante notar que el verbo: constituyó aoristo. Lo cual en


resumidas cuentas viene a significar que se refiere a un acto
pasado. Es decir, indica una acción que se toma una sola vez o de
una vez por todas.

Realmente, Cristo sólo llamó a trece apóstoles, incluyendo a


Pablo que sustituyó a Judas después de su traición y suicidio. De
hecho, la Biblia termina con sólo doce apóstoles, cuando en
Apocalipsis 21.14 dice: Y el muro de la ciudad tenía doce
cimientos, y sobre ellos los doce nombres de los doce apóstoles
del Cordero.

Así que una cosa es ser apóstoles en el sentido de ser mensajeros


y otra muy distinta en el sentido ministerial de la palabra. En el
sentido del término enviado, todos somos apóstoles. Porque
todos, en algún momento somos enviados.

Más, hoy no existe el ministerio apostólico y todo aquel que se


haga llamar apóstol es un completo ignorante o un falso ministro
de Satanás. No hay más posibilidades.

Como está escrito en 2Corintios 11.13-15 Porque éstos son falsos


apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles
de Cristo. 14Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se
disfraza como ángel de luz. 15Así que, no es extraño si también
465

sus ministros se disfrazan como ministros de justicia; cuyo fin


será conforme a sus obras.

Así, pues, una cosa es ser mensajero y otra muy distinta haber
sido llamado por Cristo al ministerio apostólico. Que quede claro:
En toda la historia de la Iglesia, sólo trece personas han sido
llamadas por Cristo al ministerio apostólico. No hay más.

Siguiendo con el pasaje, Pablo se refiere a ellos como mensajeros,


embajadores o representantes de la Iglesia, designados para
recibir y llevar las ofrendas para los santos de Jerusalén.

Estos hermanos, como Tito, también debían ser de buen


testimonio, personas de confianza, personas de fiar, no solo de las
iglesias sino también de Pablo.

¿Eres tú un buen mensajero de la Iglesia Cristiana Berea?


¿Podríamos enviarte a algún otro lugar en la confianza de que
serías un buen embajador? ¿Eres un buen representante de Cristo?

¿Recuerdan que ya hablamos de esto cuando meditamos en


2Corintios 5.20? Leámoslo: Así que, somos embajadores en
nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros; os
rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios.

¿Que clase de mensajero eres? ¿Que clase de mensaje anuncias?


Muchos viajan por todo el mundo y no anuncian la verdad sino la
mentira.

Quiero llamar vuestra atención hacia algo que dice Pablo en este
pasaje: Y gloria de Cristo.

No solo eran mensajeros de la Iglesia, sino también eran gloria de


Cristo. Siempre que tengamos delante a alguien que afirme ser
mensajero de Cristo, debemos analizar si realmente glorifica a
Cristo o se glorifica a sí mismo. Porque hay una gran diferencia,
¿O no? Desde luego que sí.
466

Quien se glorifica a sí mismo, profana el bendito Nombre de


Cristo. Quien glorifica a Cristo lo santifica.

Pablo escribió estas palabras para resaltar la confianza que debían


tener en ellos; que eran personas de fiar; que era gente
transformadas por Cristo. ¿Se podría decir algo así de ti?

Nuestras actitudes y nuestras acciones, más que nuestras palabras,


lo dicen con voz potente.

24. Mostrad, pues, para con ellos la prueba. Pablo se había


gloriado de los corintios delante de los hermanos de Macedonia.
Ahora les pedía a los corintios, y no solo a ellos, sino a todos los
cristianos de la provincia de Acaya, que no lo dejaran mal. Que
mostraran la prueba de su disposición.

Para con ellos, se refería a Tito y a los hermanos que le


acompañaban.

¿La prueba de qué? Del amor. ¿Cómo se prueba el amor? Con


hechos, con acciones.

¿Cómo esperaba Pablo que lo mostraran? Con su ofrenda. El


amor que sólo consta de palabras no sirve de nada. No es
verdadero amor. El verdadero amor es el que actúa a favor de la
persona, o personas, a quien se ama.

Pablo estaba siendo muy sincero con los corintios, mostrándoles


su temor de que no estuvieran a la altura de lo que la situación
demandaba. Pablo sabe que cuando se expresa amor, si después
tales palabras no están respaldadas por la acción, éstas sonarán
huecas y vacías.

¿Cómo llamamos a un cristiano que dice y no hace? Hipócrita.


¿Nos gustan los hipócritas? Realmente no.
467

También dice: la prueba de nuestro gloriarnos respecto de


vosotros. ¿Qué quería decir Pablo con estas palabras? Que
demostraran que el apóstol no se había gloriado en vano de ellos.

Estamos estudiando paso a paso la Escritura y vamos viendo


cómo tenemos muchas cosas que aprender de ella, a poco que nos
detengamos a pensar sobre lo que estamos leyendo.

Hay bendición en el estudio de la Palabra de Dios. Nuestra alma


se alimenta, nuestra fe se fortalece, y adquirimos conocimiento
que nos protege de las falsas doctrinas y de los perros, los malos
obreros.

9.1-5 La tentación a no dar es tan poderosa que por ese motivo el


apóstol Pablo dedicó dos capítulos completos de esta epístola a
tratar este tema.

¿Qué nos demuestra esto? Que no es un asunto sin importancia.


Dar o no dar conforme a la voluntad de Dios es un asunto que a
todos los cristianos nos compete. Y al que debiéramos dar más
importancia. Pues conocer la voluntad de Dios es importante por
dos buenas razones:

La primera, para que no nos tomen el pelo y el bolsillo. No son


pocos los sinvergüenzas que roban descaradamente en nombre de
su falso dios. ¿Los hay o no? Sin duda y muchos.

La segunda, para que tampoco nos vayamos al otro extremo y


pensemos que no debemos dar nada. Pues, tampoco es esa la
voluntad de Dios. ¿También hay de estos, o no? También

Todos tenemos el deber de apoyar a nuestros hermanos que sufren


y todos tenemos el deber de colaborar para que la obra de Dios
siga adelante. ¿Sí o no? Desde luego.

De otro modo ¿Cómo podían ser sustentados los siervos de Dios,


conforme al mandamiento del Señor, que estudiamos en
1Corintios 9.14?
468

¿Es o no un mandamiento de Dios que los siervos sean


sustentados? Pues, si sabemos que lo es, debemos colaborar al
objeto de que los pastores puedan dedicarse a la obra del Señor.

Que haya algunos que abusan no significa que debamos dejar de


apoyar la Iglesia y al ministerio. En todo hay que buscar el
equilibrio.

El falso evangelio de la prosperidad ha hecho que muchos


cambien de idea en cuanto a la codicia y la avaricia. Siempre han
sido tenidos por los cristianos como pecados, por cuanto así los
presenta la Biblia, en cambio, ahora son presentados como
virtudes.

Hay que ser ambiciosos, te dicen. Querer tener más, codiciar y


ambicionar riquezas no es malo. Debes ser un hombre o mujer de
éxito.

¿Cómo interpretan estos falsos maestros el éxito? Como personas


que no carecen de nada. Gente próspera y rica. ¿Es correcto este
enfoque de la verdad bíblica? De ningún modo.

¿Pueden presentar algunos pasajes que demuestren que la codicia


y la avaricia de las cosas materiales es pecado? Por ejemplo:

Jeremías 6.12-13 Y sus casas serán traspasadas a otros, sus


heredades y también sus mujeres; porque extenderé mi mano
sobre los moradores de la tierra, dice Jehová. 13Porque desde el
más chico de ellos hasta el más grande, cada uno sigue la
avaricia; y desde el profeta hasta el sacerdote, todos son
engañadores.

Como vemos, Dios castiga la avaricia.

Mateo 4.18-19 Estos son los que fueron sembrados entre espinos:
los que oyen la palabra, 19pero los afanes de este siglo, y el
469

engaño de las riquezas, y las codicias de otras cosas, entran y


ahogan la palabra, y se hace infructuosa.

Aquí vemos cómo las riquezas y las codicias engañan al ser


humano, haciendo infructuosa la Palabra de Dios en su vida. Por
ese motivo Jesús enseñó contra la avaricia.

Lucas 12.15 Y les dijo: Mirad, y guardaos de toda avaricia;


porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los
bienes que posee.

1Timoteo 6.8-10 Así que, teniendo sustento y abrigo, estemos


contentos con esto. 9Porque los que quieren enriquecerse caen en
tentación y lazo, y en muchas codicias necias y dañosas, que
hunden a los hombres en destrucción y perdición; 10porque raíz
de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando
algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos
dolores.

1Juan 2.15-17 No améis al mundo, ni las cosas que están en el


mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él.
16
Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los
deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del
Padre, sino del mundo. 17Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el
que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.

Hay muchos más pasajes que demuestran que este evangelio que
se está enseñando en muchos grupos religiosos, es el falso. Esto a
pesar de que la Biblia enseña con claridad en Proverbios 1.19:
Tales son las sendas de todo el que es dado a la codicia, La cual
quita la vida de sus poseedores.

Colosenses 3.5-8 Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros:


fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y
avaricia, que es idolatría; 6cosas por las cuales la ira de Dios
viene sobre los hijos de desobediencia, 7en las cuales vosotros
también anduvisteis en otro tiempo cuando vivíais en ellas.
470

El falso evangelio de la prosperidad ha provocado una reacción


generalizada, no solo contra el diezmo, sino también contra las
ofrendas en las Iglesias. De modo que ya muchas voces se
levantan afirmando que en la Iglesia no se deben recoger
ofrendas.

Es combatir un mal con otro mal. La mentira no debe combatirse


con más mentira, sino con verdad. Y la verdad es que la Palabra
de Dios nos habla abundantemente sobre la necesidad de la
ofrenda en el pueblo de Dios.

En los primeros versos Pablo dice que no necesita hablarles de la


ofrenda para los santos, pues conocía la buena voluntad de los
corintios al respecto. No obstante, lo hace. Les escribe y
abundantemente sobre el tema.

Pablo esperaba volver a Corinto con algunos hermanos de


Macedonia y no quería sentirse defraudado por los de Corinto.
Teme por el testimonio de los mismos corintios delante de los de
Macedonia.

¿Por qué tanto interés de Pablo en cuanto a esta ofrenda? ¿Estaba


Pablo preocupado por conseguir dinero para sí mismo? ¿Cual era
el verdadero interés del apóstol? Debemos meternos en la piel de
Pablo para entender cómo pensaba y sentía.

La verdadera preocupación del apóstol era crear lazos de


confianza, amor y compañerismo entre las iglesias judías y
gentiles. Había mucho en juego, la supervivencia del mismo
evangelio.

Si el egoísmo tomaba lugar entre los hermanos de aquella época,


seguramente no estaríamos hoy aquí hablando de las cosas que
tienen que ver con fe cristiana. El egoísmo y la avaricia pueden
afectar notablemente al crecimiento de la Iglesia, haciéndole daño
y frenándola.
471

Hoy, como entonces, la colaboración entre los hermanos de


distintos lugares sigue siendo vital para la supervivencia de la fe y
la extensión de la verdad de Dios.

Para que podamos viajar a otros países y ayudar a los hermanos


que están sin congregación es necesario encontrar los fondos para
esos viajes.

Son mucha gente las que tras salir de grupos religiosos apóstatas
nos piden ayuda para responder sus dudas, para que le enseñemos,
para que les ayudemos a organizarse, prepararse y para que
puedan seguir adelante predicando el evangelio de Cristo.

Ya hemos ayudado a hermanos de varias partes del mundo, y


seguimos recibiendo invitaciones de otros muchos lugares. Pero,
puesto que son grupos pequeños, no tienen muchos medios,
nosotros debemos ayudarles, y aquellos que ya han sido
ayudados, también deben colaborar para que el evangelio siga
extendiéndose por el mundo.

Queremos fundar muchas Iglesias Cristianas Berea en todo el


mundo. No para crear otra denominación, sino iglesias
independientes que expongan y enseñen la sana doctrina, y vivan
en una verdadera fraternidad cristiana.

Para que alumbremos los ojos de los ciegos. Para que llevemos
esperanza a los desesperados. Para que ayudemos a quienes lo
necesitan. Para que podamos ser instrumentos en las manos de
Dios para la edificación de Su Iglesia.

Para todo ello necesitamos recursos económicos. Debemos orar a


Dios para que nos inquiete y que, como los corintios, seamos
capaces de entender la Escritura que nos enseña a ayudar a
quienes lo necesitan.

Muchos hermanos nuestros en la fe están hoy como aquellas


multitudes que miró Jesús y las vio desamparadas, como ovejas
que no tienen pastor. La gente clama por verdaderos pastores.
472

Hombres y mujeres de Dios que no hagan, como al Pr. Salvador


Jasaui le gusta decir, de la piedad ganancia.

Nuestra misión no es conseguir dinero para tener más, nuestra


misión es llevar la verdad donde ahora no hay nadie que la
predique. Pero estamos limitados porque somos pocos los que
queremos hacerlo, y no disponemos de los medios necesarios.

Nosotros no pretendemos forzar a nadie con mentiras, como


otros, hacen, Pablo no quería forzar a los corintios, sino que la
ofrenda fuera fruto de amor por los demás hermanos en la fe.
Como un fruto de la generosidad de los corintios y no de la
imposición apostólica.

La semana pasada nos quedamos hablando de la necesidad de


ofrendar, no sólo para ayudar a los necesitados, sino también para
apoyar la obra de Dios, vamos a continuar donde lo dejamos.

Algunas personas defienden que las ofrendas de la Iglesia sólo


deben recogerse para los pobres. Pero que los pastores no deben
ser sostenidos. Que ellos deben “trabajar” para sostenerse a sí
mismos y a sus familias.

Todo el Antiguo Testamento da testimonio de que Dios quiso que


sus siervos fueran sostenidos por el pueblo, en aquel tiempo
Israel. Y no sólo que tuviesen para comer, sino también un techo
que les cobijara y donde poder vivir con su familia.

Pues, aunque no se le permitió tener tierras que trabajar, porque el


ministerio era su trabajo, sí tenían que vivir. La cuestión es:
¿Cambió la posición de Dios al respecto en el Nuevo Testamento?
¿Qué piensan?

Ya hablamos la semana pasada de 1Corintios 9, hoy lo veremos


más detenidamente. 1Corintios 9.3-18.

Aunque esto ya lo estudiamos, viene a colación con el tema de


hoy, pues, aquí cabe destacar seis cosas de este pasaje:
473

1.- Pablo está poniendo el ejemplo del AT y aplicándolo a la


Iglesia, en cuanto al deber del sostenimiento de los siervos. No el
modo.

Sabemos que en el AT el modo era por medio de diezmos y


ofrendas. En el NT el modo sigue siendo la ofrenda, pero no el
diezmo.

2.-¿Qué trata de enseñar el apóstol con estos ejemplos del


soldado, el labrador, el pastor, y aun el buey? Son claros ejemplos
de apoyo al sostenimiento de los siervos de Dios.

Lo curioso es que Pablo pone estos ejemplos en defensa del


ministerio del Nuevo Testamento, es decir, de la Iglesia.

3.- El ejemplo de los “otros” que participan del mismo derecho.


Para Pablo ¿Los siervos de Dios tenemos menos, el mismo, o más
derecho que ellos? Según las palabras de Pablo, tenemos más
derecho.

4.- Pero Pablo dice: No hemos usado de este derecho. ¿Significa


eso que nunca usó ese derecho? No. Pues sí lo usó para con otras
congregaciones.

Jesús y sus apóstoles también usaron de ese derecho. Durante tres


años y medio vivieron de su ministerio. Recordemos que algunos
tenían familia, como Pedro, y que de alguna manera debían
mantenerlas.

5.- Tenemos un mandamiento de parte del Señor. ¿Debemos


cumplir este mandamiento o no es necesario? Por supuesto. Todos
los mandamientos de Dios en el Nuevo Testamento son para la
Iglesia.

De hecho, como está escrito: Pues este es el amor a Dios, que


guardemos sus mandamientos; y sus mandamientos no son
gravosos. 1Juan 5.3.
474

No guardamos los mandamientos para salvarnos, sino porque


somos salvos.

6.- Pablo afirma que presenta el evangelio gratuitamente. ¿No


deberíamos todos los pastores hacer lo mismo? Sí, en Corinto,
pero eso no significa que no recibiera sostenimiento de otras
congregaciones.

No debemos dejarnos engañar por los falsos ministros. Pero


debemos sostener los ministerios que sirven a Dios porque esa es
la voluntad de Dios.

Barclay indica que hay cuatro maneras de dar:


1) por deber, como cuando pagas los impuestos;
2) por satisfacción propia, porque te hace sentir bien;
3) por prestigio, como Ananías y Safira; ver Hech. 5.1-11; y
4) por amor, porque ves la necesidad te conmueve el alma y no
puedes hacer menos que dar; porque Dios te amó primero.

Creo que el cristiano debe dar por amor. Por amor a los hermanos
que lo necesitan, pero sobre todo por amor a Dios. Y no olviden
que, como hemos leído, el amor a Dios es guardar sus
mandamientos. Dios nos manda dar para ayudar a los hermanos y
a su obra.

Por tanto, es también un deber. Muchas veces hemos dicho al


recoger la ofrenda: No se sientan obligados. Por tanto, ¿Es, o no
es, una obligación? Cuando decimos eso, nos referimos a los que
nos visitan, pero los cristianos sí tenemos una obligación para con
Dios y su obra. Es un mandamiento que debemos cumplir.

1.- En cuanto a la ministración. En el original, diaconía. Es decir,


servicio, ministerio. Todos los cristianos podemos ministrar a
otros, servirles. Cuando compartes tu pan con el hambriento.
475

Muchos me preguntan sobre la validez del ayuno en el día de hoy.


A todos ellos les llevo a leer y meditar en Isaías 58. Ahí está
escrita la voluntad de Dios en cuanto al ayuno. Como está escrito:

¿No es más bien el ayuno que yo escogí, desatar las ligaduras de


impiedad, soltar las cargas de opresión, y dejar ir libres a los
quebrantados, y que rompáis todo yugo? 7¿No es que partas tu
pan con el hambriento, y a los pobres errantes albergues en casa;
que cuando veas al desnudo, lo cubras, y no te escondas de tu
hermano? 8Entonces nacerá tu luz como el alba, y tu salvación se
dejará ver pronto; e irá tu justicia delante de ti, y la gloria de
Jehová será tu retaguardia. Isaías 58.6-8.

Este es el verdadero ayuno que Dios escoge para nuestras vidas.


Porque a Dios no le vale de nada que te abstengas de comer, si
mantienes tu egoísmo en el corazón.

También me han preguntado muchos si en vez de diezmar puede


dar sus diezmos a los pobres. Aquí hay dos cosas importantes a
tener en cuenta.

A.- La primera, que el diezmo no tiene relación algún con el


cristiano, sino con los judíos. Por tanto no tienes que dar tu
diezmo ni a la Iglesia, ni a los pobres.

B.- Segunda, claro que puedes ayudar a los pobres, pero eso no te
exime de sustentar la obra de Dios, y al ministerio que Dios ha
establecido a fin de perfeccionarte para la obra.

Lo que vemos en la Biblia es que la Iglesia es la que atendía las


necesidades de los pobres. No los cristianos a nivel individual,
sino la congregación como tal. Así lo hicieron en Jerusalén, y así
lo ha hecho la Iglesia a lo largo de los siglos.

Para los santos. Este verso deja claro que la ofrenda que Pablo
estaba esperando de los corintios en esta ocasión era para los
santos. No era para otra cosa. Aunque como ya hemos visto,
también debemos mantener el ministerio.
476

Los santos de Jerusalén tenían necesidad de alimento y cosas


básicas, pero también de pastores y maestros que les alimentasen
no sólo de pan, sino de toda Palabra que sale de la boca de Dios.
Pues así dice la Escritura: Escrito está: No sólo de pan vivirá el
hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios. Mateo
4.4.

Es por demás que yo os escriba. Es curioso que aun diciendo que


no necesitaba escribirles sobre este tema, dedicara nada menos
que dos capítulos completos al mismo. ¿No os parece? ¿Por qué
lo hace entonces? Quizás para recordarles lo que espera de ellos.

Es como cuando en consejería le decimos a alguien: Yo no te voy


a decir que necesitas orar más, porque ya tú lo sabes. Pero se lo
estamos diciendo, o recordando.

2. Pues, conozco vuestra buena voluntad. ¿Creen que es


importante la buena voluntad? Sí, siempre que vaya acompañada
de la disposición de pasar a la acción. Que no se quede sólo en la
voluntad.

¿Es posible que alguien tenga buena voluntad y se quede sólo en


eso? Sin duda. De hecho, mucha gente ha hecho grandes
proyectos al comienzo del año, y muchos de ellos se quedaron
sólo en eso, en buena voluntad, pues, hasta el día de hoy no han
pasado a la acción. Todavía están diciendo: Mañana.

Esta frase de Pablo nos enseña algo importante sobre la buena


voluntad, ¿Saben qué es? Que anima a otros.

Por ese motivo, Pablo, hablando de los siervos escribió en Efesios


6.7-8 …sirviendo de buena voluntad, como al Señor y no a los
hombres, 8sabiendo que el bien que cada uno hiciere, ése recibirá
del Señor, sea siervo o sea libre.

No quería que los efesios, ni los corintios se quedasen sólo en la


voluntad, por eso dice: el bien que cada uno hiciere; no, deseare.
477

Los versos del 3-5 repiten el mismo mensaje del 8.24.

3. Para que estéis preparados. Siempre debiéramos estar


preparados para el bien. Porque Dios aborrece: El corazón que
maquina pensamientos inicuos, Los pies presurosos para correr
al mal. Proverbios 6.16-19.

Hablando de preparación, son muchos los que quieren servir a


Dios e incluso dedicarse a la predicación del evangelio, sin
embargo, no son tantos los que están dispuestos a prepararse para
tal bien.

¿Creen que es necesario, e incluso importante, prepararse para


predicar el evangelio? ¿Por qué motivo? Porque de lo contrario,
acabaremos como Apolos, debiendo ser corregidos. Hechos
18.26.

Nos quedamos en el verso tres hablando de la necesidad de estar


preparados. Y concretamente, hablamos sobre la preparación de
los pastores para enseñar.

Aunque Pablo aquí estaba hablando de que los corintios debían


estar preparados para cuando se recogiera la ofrenda, aplicamos
este tema al ministerio. Porque hay una enorme necesidad de
preparación entre los pastores. Son demasiados los que están
“ministrando” sin la debida preparación.

Nadie debería ponerse en un púlpito sin estar suficientemente


preparado. Y no me refiero a tener titulación alguna. Pues, hay
gente con muchos títulos que no tienen ni la más remota idea de
la verdad. Y gente que carece de títulos pero que son libros
abiertos.

Alguno de los apóstoles, como Pedro, no sabían ni leer ni escribir,


aún así, expusieron fielmente el evangelio de Cristo sin caer en
errores doctrinales.
478

Me refiero a tener la disposición necesaria para pasar tiempo con


Dios y la Escritura, orando y meditando en ella.

Ahora bien, como decía, Pablo se refería a estar preparados para


cuando se recogiera la ofrenda. Quisiera preguntaros si ¿creen que
es importante estar preparados para compartir con quienes
padecen necesidad?

¿Vienen preparados para ofrendar a la Iglesia, o no? Porque si no


te preparas, no lo harás, o no lo harás bien.

¿Qué debemos hacer para prepararnos para la ofrenda? En primer


lugar, analizar nuestro corazón para que comprobemos si
realmente amamos a Dios, y creemos que su obra es necesaria.

Seguramente podemos dar sin amor. Pero lo que no podremos


hacer de ningún modo es amar sin dar. Esta frase la leí hoy en el
el Facebook de una hermana de Lima, Perú.

Además de comprobar si amamos a Dios y su obra, debemos


también asegurarnos, antes de salir de casa, de que llevamos la
ofrenda que hayamos decidido entregar. Pues, si no la llevamos
no podremos colaborar.

Algunos sólo se acuerdan de la ofrenda cuando están en el


templo, y claro, se dejaron la billetera en casa.

4. ¿Quién quedaría peor si los corintios no daban la talla, ellos o


Pablo? Sin duda, la vergüenza de Pablo no sería realmente suya
sino de los corintios, si éstos finalmente no cumplían con lo que
había prometido. Aún así, él mismo está dispuesto a asumir su
parte de responsabilidad.

¿Alguna ve has hablado a favor de alguien y te ha dejado en mal


lugar? Eso es lo que Pablo quería evitar. Por eso, cuando
hablamos a favor de alguien haríamos bien en asegurarnos que no
nos defraudarán, ni nos dejarán en mal lugar.
479

Como está escrito en Proverbios 6.1-5: Hijo mío, si salieres fiador


por tu amigo, Si has empeñado tu palabra a un extraño, 2Te has
enlazado con las palabras de tu boca, Y has quedado preso en los
dichos de tus labios. 3Haz esto ahora, hijo mío, y líbrate, Ya que
has caído en la mano de tu prójimo; Ve, humíllate, y asegúrate de
tu amigo. 4No des sueño a tus ojos, Ni a tus párpados
adormecimiento; 5Escápate como gacela de la mano del cazador,
Y como ave de la mano del que arma lazos.

Dios nos muestra aquí que salir fiador por alguien es enlazarte
con tus propias palabras; si lo hacemos, debemos entender que
estamos en sus manos, y debemos asegurarnos de no quedar mal,
y librarnos lo antes posible de nuestro compromiso.

Eso es justamente lo que el apóstol intentaba, salir bien del


compromiso en el que había quedado atrapado con los dichos de
su propia boca, al hablar a favor de los corintios.

5. Pablo quiere prepararlos, para que nadie salga avergonzado. De


este pasaje podemos deducir que Pablo pensó ampliamente en
este asunto. Tanto que le preocupó y por eso tomó medidas.

¿Qué hizo? Exhortó a los hermanos a ir antes para prepararlos.


Porque si la promesa de los corintios no se cumplía todos saldrían
mal parados.

6. Este proverbio agrícola es uno de esos pasajes peor


interpretados de la Escritura. Algunos falsos apóstoles, y los no
menos falsos predicadores de la prosperidad lo han usado,
sacándolo de contexto, para apoyar en él esa falsa doctrina, de la
siembra y la cosecha; y otras tantas cosas que nada tienen que ver
con lo que realmente dice el texto.

Es muy interesante notar que en el original griego las palabras


que se traducen por generosamente, son en realidad dos palabras
epi eulogia, que literalmente significa elogio, adoración,
bendición, consagración, beneficio, generosidad, alabanza,
bendecir. Por lo que bien pudiera traducirse por:
480

El que siembra escasamente, escasamente también cosechará; el


que siembra bendiciones, bendiciones también cosechará.

Hay quien lo ha traducido de este modo: El dador generoso


responde con agradecimientos y alabanzas a Dios por las
numerosas bendiciones materiales y espirituales que recibe.

Esta traducción se fundamenta en Deuteronomio 15.10 que


hablando de los pobres o menesterosos dice: Sin falta le darás, y
no serás de mezquino corazón cuando le des; porque por ello te
bendecirá Jehová tu Dios en todos tus hechos, y en todo lo que
emprendas.

Aunque bien es cierto que la mayoría de las versiones escogen el


término abundantemente, que contra resta el de escasamente.

No sabemos si Pablo estaba aquí citando Proverbios 11.24-25


Hay quienes reparten, y les es añadido más; Y hay quienes
retienen más de lo que es justo, pero vienen a pobreza. 25El alma
generosa será prosperada; Y el que saciare, él también será
saciado.

Realmente hay un gran parecido entre una cita y otra. En otro


lugar, hace una cita similar sobre la siembra y la cosecha. En
Gálatas 6.7 No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo
lo que el hombre sembrare, eso también segará.

Aquí, pablo no habla de dinero, sino de todo. ¿Qué podemos


incluir en ese todo? Por ejemplo, cualquiera patrones de conducta
pecaminosos.

También podría estar pensando en las palabras de Jesús que


encontramos en Lucas 6.38 Dad, y se os dará; medida buena,
apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo; porque
con la misma medida con que medís, os volverán a medir.
481

Lo que está claro es que nada tiene que ver con lo que hoy se
enseña. De lo que Pablo está hablando aquí es de la reciprocidad
de la generosidad. Es decir, si tú eres generoso con los demás,
cuando tú necesites, los demás estarán dispuestos a ayudarte.

Las recompensas en el Nuevo Testamento no tienen que ver con


ninguna ganancia material, sino con beneficios espirituales.

¿Es correcto convertir a Dios en una entidad financiera que da


beneficios a cambio de ciertas cantidades de dinero? Desde luego
que no. Es blasfemo y sólo puede tener relación con mentes
depravadas que usan las cosas de Dios para hacer negocio en
beneficio propio.

Santiago 1.17 Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende


de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni
sombra de variación.

Esto quiere decir que Dios es generoso y como tal, desea que sus
hijos también lo seamos. Esa es la verdadera doctrina de este
pasaje.

Se trata de un principio que se cumple tanto en la esfera natural


como en la espiritual: el tamaño de una cosecha se corresponde
con la amplitud de la siembra.

Dos personas tienen cada uno un saco de grano, uno siembra la


mitad y la otra mitad la usa para alimentar a su familia. El otro, no
siembra nada, lo usa por entero para alimentar a su familia. ¿Qué
pasará al año siguiente? El que se comió la mitad del grano y
sembró la otra mitad, tendrá para recoger al menos veinte sacos
más. Mientras el que usó todo el grano para alimentar a su familia
y no pensó en trabajar ni sembrar, no tendrá más, que hambre.

Recuerda: El tamaño de una cosecha se corresponde con la


amplitud de la siembra.
482

Este pasaje de Pablo a los corintios es un desafío a creer a Dios y


seguir su ejemplo de amor para con todos. Pues, cuando somos
generosos, glorificamos a Dios, y hacemos que otros también le
glorifiquen a Él.

El egoísmo de la sociedad del siglo XXI ha infectado a la Iglesia,


llevándola a descuidar la mayordomía, un problema infinitamente
mayor que hace dos mil años. Pues, contamos, no sólo con los
medios necesarios, sino también con el conocimiento de la
historia.

Como el mismo Señor Jesús enseñara: El afán de este siglo y el


engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se hace infructuosa.
Mateo 13.22.

¿Será por eso que muchas congregaciones quedan sin fruto, por
puro egoísmo? Algo tendrá que ver. Están tan centradas es sí
mismas que se niegan a ver las necesidades que abundan a su
alrededor; y en no pocos casos, en su propio interior.

Recibo muchos correos de personas que testifican que tras toda


una vida de dar a la iglesia, cuando han tenido un problema
puntual y han necesitado ayuda de la congregación, se han
encontrado con la negativa de ésta a ayudarles.

Algunos incluso han tenido que soportar que le insultaran


diciéndoles que a ver en qué tipo de pecados andarán metidos
cuando Dios no les bendice. ¿Creen que eso es practicar el amor
de Dios entre los hermanos? Desde luego que no.

Otros tuvieron que oír que la Iglesia no es una ONG. No son


pocos los que piensan que ayudar al necesitado y la fe no se
llevan bien. Es decir, que no debemos mezclar la obra social con
el evangelio. Que la Iglesia es llamada a predicar el evangelio no
a ayudar al necesitado, que para eso están las autoridades.

¿Qué piensan al respecto? ¿Creen que esto debe ser así? De


ningún modo. La Iglesia debe ser una ONG, más que una ONG.
483

No sólo debe ayudar al necesitado, sino ponerse en su lugar,


como hizo el Señor Jesús, dándonos ejemplo. Pues, de lo
contrario no es Iglesia.

En Mateo 25.31-46 Cristo deja bien claro que quien no ayuda al


necesitado irá al castigo eterno.

Por tanto, la Iglesia tiene una doble misión en el mundo. Por un


lado tiene que predicar el evangelio de Jesucristo, pero por otro
lado, tiene el deber de practicar el evangelio de Jesucristo.
Predicar y practicar, son dos cosas distintas, pero no antagónicas.

La ofrenda que Pablo estaba levantando para los hermanos pobres


de Jerusalén es un claro ejemplo de la obligación de la Iglesia de
atender la necesidad de otros.

Si vamos a ser coherentes con nuestra fe más nos vale que


incluyamos la generosidad como parte de nuestra vida cristiana.
Porque Dios bendice a quienes son generosos.

7. Aquí está la doctrina cristiana de la mayordomía de la Iglesia.


Quiero enseñarles un principio o norma de la hermenéutica que
no deben olvidar.

Como les he enseñado, la hermenéutica es la ciencia que estudia


los principios y normas que son necesarios aplicar para hacer una
correcta interpretación de la Palabra de Dios.

Uno de esos principios que no deben olvidar es que: Ningún


pasaje del Antiguo Testamento es válido para sustentar la doctrina
de la Iglesia, sino tiene sustento en el Nuevo Testamento.

¿Por qué creen que esto es así? Porque el Antiguo Testamento no


habla de la Iglesia, sino de la nación de Israel, y no debemos
confundir Israel con la Iglesia. Quienes caen en ese error, caen en
otros muchos errores doctrinales.
484

Para quienes estén interesados en estas diferencias, les invito a


visitar nuestra web en la que podrán encontrar un estudio sobre el
tema en el apartado de Preguntas y Respuestas.

Teniendo en cuenta esa perspectiva, ¿Debe el diezmo ser


enseñado como doctrina cristiana? Desde luego que no.

Si no es doctrina cristiana ¿Qué es? Es doctrina judía. ¿Por qué


entonces tantos pastores la han estado imponiendo a la Iglesia?
Esa pregunta sólo se puede responder de dos maneras: Por
ignorancia de las Escrituras, o por mala fe.

¿Conocen alguna otra posibilidad? Yo no.

Hasta aquí hemos visto que damos a Dios para ayudar a los
hermanos y para sustentar la obra de Dios, pero, ¿Cuánto
debemos dar? Damos sin que nadie nos tenga que decir cuánto
debemos dar, sino siguiendo algunas pocas indicaciones bíblicas,
como por ejemplo:

a) Según haya prosperado. 1Corintios 16.2. Esto ya lo


estudiamos. Porque no podemos dar lo que no tenemos.

b) Cada uno dé como propuso en su corazón. 2Corintios 9.7.

Uno puede proponer dar un uno por ciento y otro un treinta o


sesenta por ciento. Puede que no siempre de lo mismo, pero cada
cual haga como propuso en su corazón.

¿De quién debe ser la propuesta? ¿Debe la Iglesia o el pastor,


proponer que se de un porcentaje concreto? No, no debe. La
propuesta es personal, como está escrito: cada uno de cómo
propuso en Su corazón.

¿Qué pasa si yo, como pastor, propongo que debes dar como
mínimo el diez por ciento? Que te estaría poniendo bajo la ley
mosaica y obligándote a cumplirla toda. Pues, la ley es un bloque
del cual no podemos desgajar algunos mandatos que nos interese
485

y dejar el resto. O nos justificamos por las obras de la ley o por fe


en Jesucristo.

¿Qué piensan? ¿Podrá alguno justificarse por las obras de la ley?


De ningún modo. Como está escrito: Pero sabemos que todo lo
que la ley dice, lo dice a los que están bajo la ley, para que toda
boca se cierre y todo el mundo quede bajo el juicio de Dios; 20ya
que por las obras de la ley ningún ser humano será justificado
delante de él; Romanos 3.19-20.

Concluimos, pues, que el hombre es justificado por fe sin las


obras de la ley. Romanos 3.28.

Algunos me han preguntado: Aunque yo sepa que el diezmo no es


una obligación para la Iglesia, ¿Qué tiene de malo que yo diezme?
Si yo decido diezmar por mí mismo no es pecado, ¿O sí? ¿Qué
tiene de malo? La respuesta es simple. Tiene lo mismo de malo
que si te circuncidas sabiendo que no estás bajo la ley de Dios.

Gálatas 5.1-6 Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo


nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud.
2
He aquí, yo Pablo os digo que si os circuncidáis, de nada os
aprovechará Cristo. 3Y otra vez testifico a todo hombre que se
circuncida, que está obligado a guardar toda la ley. 4De Cristo os
desligasteis, los que por la ley os justificáis; de la gracia habéis
caído. 5Pues nosotros por el Espíritu aguardamos por fe la
esperanza de la justicia; 6porque en Cristo Jesús ni la
circuncisión vale algo, ni la incircuncisión, sino la fe que obra
por el amor.

De modo que ¿Qué tiene de malo que alguien diezme? La


respuesta es: que está obligado a guardar toda la ley. 4De Cristo
os desligasteis, los que por la ley os justificáis; de la gracia
habéis caído. Esto es lo que tiene de malo.

Si adquirimos conocimiento y seguimos viviendo como si no lo


tuviésemos, merecemos el castigo de ser esclavizados por
mercaderes de la fe, y después ser excluidos de la gloria de Dios.
486

Volviendo al pasaje que meditamos, Pablo enseña aquí sobre algo


importante que a veces no se tiene en cuenta: la actitud del que
da. El apóstol da importancia no sólo a cuánto debemos dar, sino
al cómo.

El apóstol enseña que debemos hacerlo sin tristeza, ni por


obligación; sino con alegría. ¿Qué significa esto? Que debemos
estar contentos de poder colaborar con Dios en su obra, y
debemos hacerlo contentos, no a regañadientes.

Mejor no dar que hacerlo con mala actitud. ¿Será nuestra ofrenda
acepta delante de Dios si la presentamos de mala gana? ¿No fue
eso lo que hizo la diferencia entre la ofrenda de Caín y Abel?

¿Fue reprendido Caín por no presentar ofrenda a Dios? De ningún


modo. Caín también presentó su ofrenda delante de Dios, como lo
hizo Abel. ¿Por qué, pues, fue reprendido por Dios? Por la actitud
con la que la presentó. Eso fue lo que hizo que Dios rechazara y
condenara su ofrenda; mientras aceptó la de su hermano Abel.

Quizás debemos analizar cómo doy a Dios. ¿Cuál es mi actitud a


la hora de ofrendar?
¿Lo hago con tristeza?
¿Lo hago por obligación?
¿Ofrendo con alegría?
¿Doy a regañadientes?
¿Doy para que Dios me de más? o
¿Lo hago por gratitud, porque Dios ya me dio antes?

Todos estos temas son importantes y debemos analizarlos y


reflexionar sobre ellos. No hacerlo, puede llevarnos a estar
haciendo mal las cosas delante de Dios. ¿De qué servirá nuestra
ofrenda si al final Dios la rechaza?

¿No debe ser nuestra ofrenda parte de nuestra adoración a Dios?


¿No debemos agradecer a Dios por todo lo que de Él recibimos?
¿No refleja mi confianza en Dios?
487

¿Todo lo que tengo no es suyo?


¿Qué tenemos que no hayamos recibido?
¿Tengo fe en que Dios me seguirá proveyendo o temo que al
ofrendar esté perdiendo mi dinero?

Es posible que en algunos grupos religiosos que sólo se


preocupan de dinero sea así, que estés perdiendo tu dinero, tu
tiempo y hasta poniendo en peligro tu salvación. Pero no así en
una congregación conforme a las Sagradas Escrituras.

Otra razón para dar generosamente es que Dios ama la


generosidad. Dios premia, no el tamaño de la ofrenda, sino la
sinceridad del dador. Recuerda que Dios ama al dador alegre.

8. ¿Qué es lo que dice aquí el apóstol? Que Dios es poderoso para


proveer a la Iglesia para que la Iglesia de a otros. O lo que es lo
mismo, que no debemos temer quedarnos sin recursos si
ofrendamos.

Esto no debe ser usado para manipular a la gente y hacerle dar lo


que no tiene, pero sí debe ser un estímulo para los verdaderos
cristianos, pues, sabemos por estas palabras que Dios tiene el
poder de proveernos.

¿Alguno de vosotros puede testificar de alguna provisión


sobrenatural de Dios? Yo sí. A pesar de que tenía un buen empleo
cuando Dios me llamó a servirle, lo dejé para ir a otro lugar a
pastorear una congregación que nació de nuestro ministerio.

Cuando mi esposa Montaña y yo, tomamos la decisión, todos nos


acusaron de estar locos. ¡Cómo éramos capaces de abandonar un
buen empleo para irnos a otro lugar, un pueblo de 10.000
habitantes, donde no había posibilidad de salir adelante! Familia,
compañeros de trabajo, amigos, e incluso no pocos creyentes,
intentaron disuadirnos. Pero lo hicimos. Nos trasladamos a a
pastorear una pequeña congregación; y allí fuimos probados.
488

Sin embargo, puedo decir que Dios jamás nos desamparó. Aún
cuando llegamos a pasarlo mal, Dios siempre proveyó. Y sigue
haciéndolo desde entonces hasta el día de hoy. A Él sea la gloria.

En todos estos años de ministerio, hemos vivido humildemente,


pero jamás nos faltó lo necesario. Estoy convencido de que aquí,
y entre quienes nos ven desde internet, hay muchos que podrían
dar testimonio similar de la fidelidad de Dios, que siempre
cumple lo que promete. Bendito sea el Señor.

Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda


gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo
suficiente, abundéis para toda buena obra;

Quizás no tengamos más. Pero tampoco lo necesitamos. ¿Qué


necesitamos? Lo suficiente, y eso es lo que Dios promete. Dios
proveerá para nosotros, no riquezas, pero sí para que podamos
compartir con otros.

Todo cuanto tenemos lo recibimos de Dios, y Dios tiene el


derecho de pedirnos “algo” para ayudar a otros. Ni siquiera nos
dice cuánto, sino que seamos generosos, confiando en nuestra
generosidad y su segura provisión.

¿Confías tú en la provisión de Dios? Antes de que respondas,


piénsalo bien. Y medita en qué es lo que pasa por tu mente
cuando estás a punto de ofrendar. ¿Ofrendas con fe o con dudas?

¿Crees de veras que Dios es poderoso para proveer para tus


necesidades, o piensas que eso era para otra época, o sólo es para
otros?

¿Será que Dios lo dejó así, al criterio personal de cada uno para
probar nuestra fe y compromiso con Él y su obra? Hay quien dice
que lo último que se convierte es la cartera.

9. Esta es una cita del AT que se incluye aquí para aclarar la


buena obra, del verso anterior.
489

La expresión clave es los pobres. El hombre justo en el AT era


conocido por la forma de ayudar al necesitado.

Proverbios 19.7 A Jehová presta el que da al pobre, Y el bien que


ha hecho, se lo volverá a pagar.

Recuerden las palabras del Señor Jesús en las que se identifica


con el pobre y el necesitado. Como está escrito: De cierto os digo
que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más
pequeños, a mí lo hicisteis. Mateo 25.40.

Pablo espera que los corintios imiten este modelo en su respuesta


a los pobres de Jerusalén.

Como pobres, mas enriqueciendo a muchos; como no teniendo


nada, mas poseyéndolo todo. 2Corintios 6.10.

Pero debemos cuidar de no ser hipócritas, pues escrito está:


Guardaos de hacer vuestra justicia delante de los hombres, para
ser vistos de ellos; de otra manera no tendréis recompensa de
vuestro Padre que está en los cielos. Mateo 6.1.

Nos quedamos en el capítulo 9 verso 9 con la cita del AT,


hablando de la atención a los pobres. Decíamos que debemos
cuidar de hacerlo no de manera hipócrita.

Seguiremos con otra cita del AT.

10-12. En el verso 10 Pablo está citando Isaías 55.10, para


enseñar que Dios nos sostendrá y nos sustentará, si confiamos en
Él.

¿Confías en la provisión de Dios? ¿Crees que él sigue pudiendo


hacerlo? Sin duda. La semana pasada hablábamos de esto, y
decíamos que cualquier verdadero cristiano puede dar testimonio
de esta verdad.
490

Como está escrito en Oseas 10.12 Sembrad para vosotros en


justicia, segad para vosotros en misericordia; haced para
vosotros barbecho; porque es el tiempo de buscar a Jehová, hasta
que venga y os enseñe justicia.

11-12. Este es otro de los pasajes que algunos usan para enseñar
la falsa doctrina de la prosperidad. Prestemos atención. ¿Debemos
entender aquí que Pablo esté hablando de un método para ser
prospero, o hacer riqueza en el sentido material de la Palabra?
Desde luego que no.

¿Saben qué significa liberalidad? Generosidad, dar donativo


copioso, sincero. ¿Cuáles son los frutos de nuestra generosidad?
La acción de gracias a Dios.

El objetivo de la bendición de Dios no es que seamos prósperos o


ricos, sino que Dios reciba acciones de gracia por nuestro cuidado
de los demás. Por lo que el propósito final de toda ofrenda no es
ni la vanagloria del que la da, ni el beneficio del que la recibe,
sino las acciones de gracias que provocarán y que redundarán
para la honra y la gloria de Dios.

13-15. La obediencia al evangelio de Cristo es una experiencia


que glorifica a Dios. La ofrenda sería recibida en Jerusalén como
una prueba de la obediencia de los corintios al evangelio de
Cristo.

Una evidencia de que el evangelio rompe barreras racistas, de


origen nacionalistas, culturales o religiosas. Mostrando que el
evangelio es universal y para todos, sean judíos o gentiles. Como
está escrito en Efesios 2.11-19:

Por tanto, acordaos de que en otro tiempo vosotros, los gentiles


en cuanto a la carne, erais llamados incircuncisión por la
llamada circuncisión hecha con mano en la carne. 12En aquel
tiempo estabais sin Cristo, alejados de la ciudadanía de Israel y
ajenos a los pactos de la promesa, sin esperanza y sin Dios en el
mundo. 13Pero ahora en Cristo Jesús, vosotros que en otro tiempo
491

estabais lejos, habéis sido hechos cercanos por la sangre de


Cristo. 14Porque él es nuestra paz, que de ambos pueblos hizo
uno, derribando la pared intermedia de separación, 15aboliendo
en su carne las enemistades, la ley de los mandamientos
expresados en ordenanzas, para crear en sí mismo de los dos un
solo y nuevo hombre, haciendo la paz, 16y mediante la cruz
reconciliar con Dios a ambos en un solo cuerpo, matando en ella
las enemistades. 17Y vino y anunció las buenas nuevas de paz a
vosotros que estabais lejos, y a los que estaban cerca; 18porque
por medio de él los unos y los otros tenemos entrada por un
mismo Espíritu al Padre.

Quienes confunden la Iglesia con Israel debieran estudiar


detenidamente pasajes como este que tira por tierra la falsa
doctrina de la suplantación.

Esta era una de las motivaciones del apóstol para promover esta
ofrenda. Su importancia no radicaba tanto en el dinero sino en la
oportunidad de reconciliar su pueblo, Israel, con el resto del
mundo gentil bajo la cobertura de la Iglesia. Todos, sin importar
de dónde sean, formando parte de una misma familia. La familia
de Dios.

El evangelio de Cristo demanda fe, Juan 3.36, pero también


obediencia. Como está escrito: Así también la fe, si no tiene
obras, es muerta en sí misma. Santiago 2.17.

Cuando respondemos con fe y obediencia al evangelio, la gracia


de Dios se manifiesta en nosotros, llegando a alcanzar también a
otros.

El recibir esta ayuda, inspiraría a los judíos cristianos en Jerusalén


a glorificar a Dios, haciéndolos conscientes de que la ofrenda
había sido un acto de obediencia que demostraba la fe de los
corintios.
492

Como en el caso del sostenimiento ministerial, los corintios


siembran lo material y cosechan lo espiritual, es decir, acciones
de gracias y gloria para Dios, por su ministerio de mayordomía.

14. Que los judíos acabaran amando a los gentiles por su


generosidad para con ellos, ya merecía la pena. Cuando
sembramos generosidad sembramos amor, y segaremos lo mismo.
Además la generosidad provoca oraciones a favor de los que
ayudan.

Esto es así yo lo veo cada día en la gratitud de aquellos a los que


ayudo por medio de la Consejería pastoral y la enseñanza de la
Palabra de Dios. Muchos dan gracias a Dios y oran por mi, mi
familia, y esta congregación, a quienes bendicen por la gracia de
Dios que compartimos.

15. ¡Gracias a Dios por su don inefable! ¿Cuál es ese don


inefable? Muchísima gente está errada en cuanto a este tema. Los
reformados y calvinistas creen que el don es la fe. Pero eso no se
sostiene bíblicamente.

¿Cuál es entonces el don inefable? La salvación por medio de


Cristo. Por que de tal manera amó Dios al mundo que ha dado a
su Hijo… Juan 3.16; Recuerden Romanos 6.23 La dádiva de
Dios…

De igual manera mal interpretan Efesios 2.8, creyendo que el don


es la fe, cuando el pasaje enseña otra cosa. ¿Qué enseña este
texto? ¿Cuál es el don y cuál es el medio por el cual el don se
recibe?

Esta perícopa sobre la ofrenda termina donde comenzó, hablando


de la gloria de Dios, 8.1 y 9.15.

10.1- En este pasaje el apóstol cambia de tercio. Adopta una


actitud distinta, mostrando su seriedad para con las cosas de Dios.
Aun cuando comienza con un ruego o súplica, lo que dice a
493

continuación debió estremecer el corazón de los corintios al oír


estas palabras.

Ya se acabó el tiempo de las afirmaciones cariñosas y la


misericordia, ahora es tiempo de enfrentar definitivamente a
aquellos que se oponen al evangelio de Cristo y atacan a los
siervos de Dios con mentiras.

Eclesiastés 3 dice que: Todo tiene su tiempo. También hay un


tiempo para enfrentar el mal y la mentira. Algunos piensan que
los cristianos no debemos defendernos de los ataques que
recibimos. Que debemos poner siempre la otra mejilla. Pero como
dijo alguien, los cristianos, como todo el mundo, sólo tenemos
dos mejillas.

Llega un momento en que debemos reaccionar. Defendernos de


los ataques injustos que recibimos de los enemigos de Dios y de
la verdad.

En los capítulos que quedan, Pablo vuelve a la defensa de su


ministerio contra las falsas acusaciones de algunos en Corinto.
Por este motivo, algunos estudiosos creen que entre el capítulo
nueve y diez, pasó un cierto tiempo, y que en ese intervalo Pablo
volvió a recibir noticias de los que se oponían.

Es una explicación que está dentro de la lógica, pues,


generalmente Pablo pasa de las malas noticias a las buenas y no al
revés. Pero también hay quien cree que no es así, pues, en
ocasiones Pablo comienza con halagos para por último poner los
puntos sobre las íes.

Sea como fuere, aquí están ambos capítulos, para nuestra


reflexión. Como siempre digo, no debemos pensar más de lo que
está escrito. Así que, meditaremos en las palabras de Pablo, sin
pretender entender lo que no está escrito.

1. No hay nadie más manso y humilde que Cristo.


494

Mateo 11.29-30 Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de


mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso
para vuestras almas; 30porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.

¿Somos nosotros mansos y humildes como Jesús? Si no lo somos,


debiéramos serlo, pues la mansedumbre es un fruto del Espíritu
de Dios en nuestras vidas.

Gálatas 5.22-23 Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz,


paciencia, benignidad, bondad, fe, 23mansedumbre, templanza;
contra tales cosas no hay ley.

Efesios 4.1-2 Yo pues, preso en el Señor, os ruego que andéis


como es digno de la vocación con que fuisteis llamados, 2con toda
humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a
los otros en amor.

Colosenses 3.12-13 Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos


y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de
humildad, de mansedumbre, de paciencia; 13soportándoos unos a
otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra
otro.

¿Cómo se visten los escogidos de Dios? ¿Con altivez, arrogancia,


orgullo? ¿Es así como debemos vestirnos los cristianos? De
ningún modo, sino como está escrito aquí en la Palabra.

1Timoteo 6.11 Mas tú, oh hombre de Dios, huye de estas cosas, y


sigue la justicia, la piedad, la fe, el amor, la paciencia, la
mansedumbre.

El verdadero siervo de Dios es manso y humilde. ¿Por qué nos


dice estas cosas la Biblia? ¿Están escritas porque sí, o tienen un
objetivo?

Romanos 15.4-6 dice: Porque las cosas que se escribieron antes,


para nuestra enseñanza se escribieron, a fin de que por la
paciencia y la consolación de las Escrituras, tengamos
495

esperanza. 5Pero el Dios de la paciencia y de la consolación os dé


entre vosotros un mismo sentir según Cristo Jesús, 6para que
unánimes, a una voz, glorifiquéis al Dios y Padre de nuestro
Señor Jesucristo.

Están escritas para nuestra enseñanza, para que glorifiquemos a


Dios. ¿Cómo glorificaremos a Dios, sólo por saberlo o con algo
más? Sin duda, no basta con saber. Porque como está escrito: al
que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado. Santiago
4.17.

Os ruego por la mansedumbre de Cristo, dice Pablo. Pero


también dice y “ternura”, ¿Qué significa esto? ¿Qué es ser tierno?
Que tiene amor, que es dulce, clemente, cordial, etc.

¿Realmente se refleja en nuestras vidas ese carácter de Cristo?


Como dice el apóstol: Examinaos a vosotros mismos. 2Corintios
13.5. Examinémonos todos.

¿Cómo somos nosotros en verdad en lo secreto, cuando nadie nos


ve? ¿Somos mansos y tiernos? ¿Somos humildes y bondadosos?
¿O sólo cuando dormimos?

Cuando te toca corregir a alguien que ha cometido un error


¿Cómo lo haces? ¿Con mansedumbre? ¿Con ternura? ¿Somos
humildes al corregir a otros, o nos subimos por las paredes porque
tenemos razón?

¿Se ve la mansedumbre y la ternura cuando nos toca enfrentar el


error? ¿Realmente somos mansos y humildes como Cristo?

Gálatas 6.1 Hermanos, si alguno fuere sorprendido en alguna


falta, vosotros que sois espirituales, restauradle con espíritu de
mansedumbre, considerándote a ti mismo, no sea que tú también
seas tentado.
496

¿Somos tiernos cuando hablamos con nuestra pareja? ¿Lo somos


en momentos puntuales o siempre? ¿Lo somos con nuestros
compañeros de trabajo, o con quienes nos rodean? ¿Somos tiernos
con nuestros hijos o ásperos como una lija? ¿Cómo somos con
nuestras esposas? ¿Las tratamos como a vaso más frágil? 1Pedro
3.7. ¿Qué dicen las esposas? ¿Hablamos con mansedumbre? ¿Las
esposas son mansas y humildes?

Es importante meditar en estas cosas porque si no lo estamos


siendo, debemos tener claro que nuestro objetivo debe ser el que
expresa 1Juan 2.6 El que dice que permanece en él, debe andar
como él anduvo.

¿Tendremos el mismo resultado diciendo las cosas de una manera


áspera que con ternura? De ningún modo.

Todos hemos pedido favores alguna vez, ¿Cómo lo hacemos?


¿Cuál es nuestra actitud cuando pedimos un favor a alguien? ¿Lo
hacemos de manera áspera o con humildad? Si lo pidiésemos de
manera áspera, no lo obtendríamos.

¿Somos humildes como Cristo o altivos y arrogantes?

Yo que estando presente ciertamente soy humilde entre vosotros,


mas ausente soy osado para con vosotros.

Parece que esta era una de las acusaciones que se hacía contra el
apóstol. Pablo, la responde con un ruego mediante el cual deja
claro que está dispuesto a ser osado también cuando esté presente.

¿A quién dirige este ruego? A los corintios. ¿Qué quiere decir con
esto? Que está dispuesto a enfrentar a sus enemigos cara a cara y
sin temor alguno.

Algunos afirmaban que Pablo era de apariencia débil, (10.10)


pequeño, y no muy atractivo. Sumado a esto, hay quienes creen
que además era corto de vista, debido a comentarios como el que
aparece en Gálatas 6.11; 4.13-15.
497

La gente le estaba jugando por las apariencias. A veces nos


dejamos llevar de lo externo. ¿Es cierto, o no? Por supuesto.
Todos lo hemos hecho en algún momento.

¿Creen que es correcto, que se debe hacer eso? Desde luego que
no. ¿Por qué? Porque Cristo así lo enseñó en Juan 7.24: No
juzguéis según las apariencias, sino juzgad con justo juicio.

Hay personas bajitas, pero peligrosas; y personas altas,


inofensivas.

En otras ocasiones juzgamos a los demás por nuestros propios


errores. Fulano es orgulloso. El otro es arrogante, presumido. ¿Te
ha ocurrido que te hablaron mal de alguien y después
comprobaste que no era como te lo habían pintado?

En realidad quien te habla mal de alguien es quien


verdaderamente está mal. ¿Alguna vez, al conocerte
personalmente, te dijeron: Yo tenía otra idea sobre ti? Ya sabes de
dónde viene eso.

A veces hacemos juicios sin causa. Juzgamos por las apariencias.


¿Han oído la frase de: Las apariencias engañan? Con frecuencia
esto es verdad, por eso no debemos dejarnos arrastrar de las
apariencias.

También se da el caso de ver en los demás lo que nos parece que


es una paja en su ojo, sin percatarnos de que es el reflejo de la
viga que hay en el nuestro. El Señor Jesús habló de esto en Mateo
7.3-5.

Pablo era de poca apariencia, y estas circunstancias las


aprovechaban sus enemigos para menospreciar al siervo de Dios.
Esta táctica la usan quienes no pueden demostrar que la doctrina
que predicas es errónea. Entonces acaban atacando a la persona,
ya sea con insultos o mentiras.
498

Pablo les ruega que se corrijan para no tener que ser severo con
ellos. Porque como está escrito: Todo tiene su tiempo, y todo lo
que se quiere debajo del cielo tiene su hora. Eclesiastés 3.1.

En el verso 7 dice: …tiempo de callar, y tiempo de hablar.

Hay quien piensa que los cristianos siempre debemos estar


poniendo la otra mejilla, pero la verdad es que sólo tenemos dos.
No siempre ante las falsas acusaciones debemos guardar silencio.

¿Alguna vez te han atacado injustamente? Muchos juzgan a los


siervos de Dios por las apariencias. ¿Te han acusado de algo
mintiendo?

Tanto el Señor Jesús, como Pablo, fueron acusados falsamente.


Ambos, guardaron silencio cuando debieron hacerlo, pero en su
momento, abrieron sus bocas para afirmar la verdad. Porque hay
un tiempo para cada cosa.

2. Como si anduviésemos en la carne. Esta era otra acusación que


hacían contra el apóstol. ¿De qué le acusaban? De andar en la
carne.

¿Andaba Pablo en la carne? Desde luego que no. ¿Quiénes lo


hacían? Justamente quienes le acusaban y los mismos corintios.
¿No les corrigió Pablo por ello en 1Corintios 3.1? Así es.

Los que andaban en la carne eran otros, precisamente los que le


acusaban, no Pablo. Si hubiera andado en la carne, los apóstoles
no le hubieran encargado que recogiera la ofrenda para los pobres
de Jerusalén, Gálatas 2.10.

Pablo era acusado injustamente de andar en la carne. No porque


anduviese en la carne, sino porque lo jugaban de esa manera. No
con justo juicio, sino según las apariencias.

Por esta razón es muy importante que todos los cristianos demos
buen testimonio, como está escrito en 1Pedro 2.11-16 Amados, yo
499

os ruego como a extranjeros y peregrinos, que os abstengáis de


los deseos carnales que batallan contra el alma, 12manteniendo
buena vuestra manera de vivir entre los gentiles; para que en lo
que murmuran de vosotros como de malhechores, glorifiquen a
Dios en el día de la visitación, al considerar vuestras buenas
obras. 13Por causa del Señor someteos a toda institución humana,
ya sea al rey, como a superior, 14ya a los gobernadores, como por
él enviados para castigo de los malhechores y alabanza de los
que hacen bien. 15Porque esta es la voluntad de Dios: que
haciendo bien, hagáis callar la ignorancia de los hombres
insensatos; 16como libres, pero no como los que tienen la libertad
como pretexto para hacer lo malo, sino como siervos de Dios.

Como también dijo el mismo Señor Jesús en Mateo 5.11-12:


Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os
persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo.
12
Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los
cielos; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de
vosotros.

La gente hablará mal de los siervos e hijos de Dios, pero que


nosotros no le demos motivos para ello andando en la carne, sino
en el Espíritu. Como dijo Pablo en Gálatas 5.16 Digo, pues:
Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne.

Algunos se gloriaban en sí mismos y otros en quienes acusaban al


apóstol de Jesucristo. Por ese motivo les escribió diciendo: Así
que, ninguno se gloríe en los hombres; porque todo es vuestro:
22
sea Pablo, sea Apolos, sea Cefas, sea el mundo, sea la vida, sea
la muerte, sea lo presente, sea lo por venir, todo es vuestro, 23y
vosotros de Cristo, y Cristo de Dios. 1Corintios 3.21-23.

3. ¿Qué enseña Pablo aquí? Una cosa es andar y otra muy distinta
militar. Todos andamos en la carne, nos referimos a que estamos
en carne física. No dejamos de ser seres humanos por ser
cristianos.
500

Pero los hay que militan en la carne. Es decir, Pablo estaba


diciendo: Es cierto que somos humanos, pero no luchamos como
lo hacen los humanos.

Militar significa servir como soldado, luchar, pelear. Por lo que el


apóstol les está diciendo es que él y sus colaboradores no están
sirviendo a Dios en la carne, sino en el Espíritu.

Pablo está diciendo como Jesús enseñó: No ruego que los quites
del mundo, sino que los guardes del mal. Juan 17.15.

El cristiano no deja de estar en el mundo, ni de ser humano, pero


vivimos de otro modo, no según los parámetros de este mundo,
sino conforme a la voluntad de Dios. Debe haber una diferencia
en el modo en que vivimos los cristianos y en el que viven los no
cristianos.

Si no se aprecia esa diferencia, es porque hay un problema. ¿Cuál


es el problema? Que no se está viviendo en el Espíritu, sino en la
carne.

Como está escrito en Romanos 8.14-16 Porque todos los que son
guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios. 15Pues
no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en
temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el
cual clamamos: ¡Abba, Padre! 16El Espíritu mismo da testimonio
a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios.

Cada día más se está perdiendo esa capacidad de entender esto.


Cada día es más difusa la línea que separa a los cristianos de los
que no lo son. ¿Debe haber diferencias o no?

¿Sabe igual el agua dulce y la salada? No. No es o mismo el


azúcar que la sal. Debe haber una diferencia entre quienes
tenemos a Cristo y quienes no lo tienen en sus vidas. No sólo
cuando estamos en la iglesia, sino también cuando estamos en la
calle, en casa, el trabajo, etc.
501

Debemos andar diferentes, reaccionar diferente, actuar de manera


diferente. Corremos por el camino estrecho. Y aunque tengamos
dificultades e incluso penurias, seguimos por el camino estrecho.
El resto de la gente va por el camino ancho, pero nosotros
sabemos a dónde llega ese camino. A la perdición.

La semana pasada, el Pr. Andrés se quedó en el verso 3, hablando


de las claras diferencias que debe haber entre el vivir de los
cristianos y de aquellos que no lo son. Leamos del 3 al 6.

¿Por qué creen que debe haber diferencia? Porque es lo que


hemos aprendido de Cristo. Como Pablo le escribió a los efesios.

Efesios 4.17-25 Esto, pues, digo y requiero en el Señor: que ya no


andéis como los otros gentiles, que andan en la vanidad de su
mente, 18teniendo el entendimiento entenebrecido, ajenos de la
vida de Dios por la ignorancia que en ellos hay, por la dureza de
su corazón; 19los cuales, después que perdieron toda sensibilidad,
se entregaron a la lascivia para cometer con avidez toda clase de
impureza. 20Mas vosotros no habéis aprendido así a Cristo, 21si en
verdad le habéis oído, y habéis sido por él enseñados, conforme a
la verdad que está en Jesús. 22En cuanto a la pasada manera de
vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los
deseos engañosos, 23y renovaos en el espíritu de vuestra mente,
24
y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y
santidad de la verdad.

¿Debemos los cristianos confraternizar con el modo de actuar de


los no cristianos? Esto es lo que parecen creer muchos grupos
religiosos que, cada vez más, se parecen al mundo no cristiano.

Muchos locales, a los que llaman templos o catedral, se parecen


más a una discoteca que a una iglesia. Lo que algunos llaman
servicio religioso son en realidad culto, no a Dios, sino al
humanismo más extremo.
502

Se idolatra al hombre, se adora la avaricia, se persiguen quimeras


que nada tienen que ver con lo que tenemos escrito en la Palabra
de Dios.

Es cierto que en la Biblia tenemos escrito que Jesús llegó a ser


espectáculo al mundo. En Lucas 23.47-48 se dice: Cuando el
centurión vio lo que había acontecido, dio gloria a Dios,
diciendo: Verdaderamente este hombre era justo. 48Y toda la
multitud de los que estaban presentes en este espectáculo, viendo
lo que había acontecido, se volvían golpeándose el pecho.

En este pasaje, la muerte de Cristo estaba siendo vista como un


espectáculo. Pero en realidad allí el Hijo de Dios, no estaba
actuando como una súper estrella, sino como dice Pablo en
1Timoteo 2.6: estaba dándose a sí mismo en rescate por todos, de
lo cual se dio testimonio a su debido tiempo.

También los apóstoles llegaron a ser espectáculo, veamos


1Corintios 4.9 Porque según pienso, Dios nos ha exhibido a
nosotros los apóstoles como postreros, como a sentenciados a
muerte; pues hemos llegado a ser espectáculo al mundo, a los
ángeles y a los hombres.

¿Tiene esto algo que ver con los espectáculos musicales, de


chicas bailando, de falsos predicadores luciendo trajes y joyas,
junto a su completa ignorancia de las Sagradas Escrituras? Desde
luego que no.

Algunos lo justifican afirmando que de ese modo llegan a más


gente con el mensaje. La cuestión es: ¿Con qué mensaje? Si vives
como si no tuvieras a Cristo en tu vida, ¿Qué tienes para ofrecer a
los no creyentes? Absolutamente nada.

¿Paz? ¿Una vida cómoda y feliz? Eso te lo ofrecen muchos otros


grupos y no son cristianos. ¿Murió Cristo para darnos paz? NO.
¿Murió Cristo para darnos una vida cómoda y feliz? De ningún
modo. Todo eso es falsa doctrina.
503

La enseñanza de Jesús es justamente la contraria a todo eso. Jesús


enseñó, Mateo 10.34-38 No penséis que he venido para traer paz
a la tierra; no he venido para traer paz, sino espada. 35Porque he
venido para poner en disensión al hombre contra su padre, a la
hija contra su madre, y a la nuera contra su suegra; 36y los
enemigos del hombre serán los de su casa. 37El que ama a padre
o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija
más que a mí, no es digno de mí; 38y el que no toma su cruz y
sigue en pos de mí, no es digno de mí.

Cree en Cristo y tendrás paz. ¿Da paz Cristo? Sí, desde luego, en
Juan 16.33 dice: Estas cosas os he hablado para que en mí
tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he
vencido al mundo.

Pero no es ese el mensaje del evangelio. Cristo no vino para


darnos paz, al menos no la paz de la que los falsos predicadores
hablan, una paz mundana, sino para librarnos del pecado que nos
condenaba, destituyéndonos de la gloria de Dios. Romanos 3.23.

La paz que ofrece Jesús es para con Dios, no para con los
hombres. Como escribe Pablo en Romanos 5.1 Justificados, pues,
por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor
Jesucristo.

Mientras otros desean agradar y caer bien al mundo, Pablo


marcaba la diferencia. Somos cristianos y en algo se tiene que
notar. Pablo no era un carnal. Carnales son los que quieren
parecerse al mundo.

En la oración de Jesús él dijo: No son del mundo, como tampoco


yo soy del mundo.

Pablo enfrentó toda falsa doctrina que se levantara contra Dios o


Su Palabra. Hoy en día, ni los cristianos ven bien que se defienda
la verdad. A pesar de que es un mandato bíblico. Claramente
expresado en:
504

Filipenses 1.6-7 …estando persuadido de esto, que el que


comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día
de Jesucristo; 7como me es justo sentir esto de todos vosotros, por
cuanto os tengo en el corazón; y en mis prisiones, y en la defensa
y confirmación del evangelio, todos vosotros sois participantes
conmigo de la gracia.

Defensa y confirmación del evangelio. Ya sabemos qué es


defender, confirmar significa establecer lo que es correcto y lo
que no lo es. Los siervos de Dios somos llamados a hacer la
diferencia entre la verdad y la mentira.

Más adelante, el mismo apóstol dice en Filipenses 1.16-17: Los


unos anuncian a Cristo por contención, no sinceramente,
pensando añadir aflicción a mis prisiones; 17pero los otros por
amor, sabiendo que estoy puesto para la defensa del evangelio.

¿Para qué estaba puesto el apóstol? Para la defensa del evangelio.


También Pedro habla de esto cuando escribe:

1Pedro 3.14-16 Mas también si alguna cosa padecéis por causa


de la justicia, bienaventurados sois. Por tanto, no os amedrentéis
por temor de ellos, ni os conturbéis, 15sino santificad a Dios el
Señor en vuestros corazones, y estad siempre preparados para
presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el
que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros;
16
teniendo buena conciencia, para que en lo que murmuran de
vosotros como de malhechores, sean avergonzados los que
calumnian vuestra buena conducta en Cristo.

Algunos creyentes hoy en día, en aras de una execrable tolerancia,


afirman que defender la fe es intolerancia hacia los no creyentes.
Con esta estupidez, el diablo pretende tapar la boca de los
cristianos para que no defendamos la verdad. En cambio ellos sí
que defienden la mentira.
505

¿Saben por qué ocurren estas cosas? Porque estamos en guerra.


Pero no se trata de una guerra contra las personas, que nadie se
equivoque.

Como está escrito en Efesios 6.12 Porque no tenemos lucha


contra sangre y carne, sino contra principados, contra
potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo,
contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes.

La mentira pretende hacer callar la verdad. Pero Dios nos ha dado


armas, no sólo una armadura, como dice en Efesios 6.13-19 Por
tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir
en el día malo, y habiendo acabado todo, estar firmes. 14Estad,
pues, firmes, ceñidos vuestros lomos con la verdad, y vestidos con
la coraza de justicia, 15y calzados los pies con el apresto del
evangelio de la paz. 16Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con
que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno. 17Y
tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la
palabra de Dios; 18orando en todo tiempo con toda oración y
súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y
súplica por todos los santos.

Estamos meditando en 2Corintios 10.3-5 Seguimos en el verso 3.


La principal estrategia del diablo contra la Iglesia es la mentira, el
engaño.

Juan 8.43-45 ¿Por qué no entendéis mi lenguaje? Porque no


podéis escuchar mi palabra. 44Vosotros sois de vuestro padre el
diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. El ha sido
homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad,
porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo
habla; porque es mentiroso, y padre de mentira. 45Y a mí, porque
digo la verdad, no me creéis.

Como meditaremos más adelante, Satanás y sus ministros usan la


mentira como estrategia contra la humanidad y contra la obra de
Dios. Es decir, contra la Iglesia. Para esclavizar a las gentes y
llevarlos a la condenación eterna.
506

Estamos hablando de una guerra que no es física, sino espiritual.


Tanto interna como externa. Porque en ambas esferas trabaja el
enemigo.

Una batalla en la que se involucran:


Argumentos
Conocimientos
Pensamientos

Una batalla en la que nos sumimos cuando queremos acercarnos a


Dios, o ayudar a alguien a que lo haga. Una verdadera batalla.

¿Te has enfrentado alguna vez a esa batalla? ¿Alguna vez al oír la
Escritura te han surgido pensamientos contrarios? ¿Argumentos
que trataban de contradecir la Palabra de Dios?

¿Te han hecho preguntas difíciles cuando has intentado acerca a


alguien a Dios? ¿Te han retado dialécticamente, filosóficamente,
o con la ciencia? Como dice Pablo es una batalla.

Satanás ha tejido un entramado de mentiras para convencer a la


gente de que no le interesa acercarse a Dios. De que le iría mejor
sin Dios. De que sería más libre sin tener que rendir cuentas. Pero
es mentira. El ser humano no es más libre sin Dios, sino más
esclavo de otros y de sí mismo.

Nuestra arma contra la mentira es la verdad. Como está escrito en


Juan 8.31-32: Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído
en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis
verdaderamente mis discípulos; 32y conoceréis la verdad, y la
verdad os hará libres.

La Palabra de Dios es la verdad. La verdad libera. Es un arma


poderosa en Dios. Si tuviésemos que relacionar la Palabra de Dios
con un arma ¿con cuál la relacionaríamos? Con una espada, como
afirma Pablo.
507

Efesios 6.17 La espada del Espíritu, que es la Palabra de Dios.

Hebreos 4.12-13 Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y


más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir
el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los
pensamientos y las intenciones del corazón. 13Y no hay cosa
creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas
las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien
tenemos que dar cuenta.

Dios ha querido salvar a la humanidad y por eso nos ha dejado Su


Palabra. Como está escrito:

Santiago 1.21 Por lo cual, desechando toda inmundicia y


abundancia de malicia, recibid con mansedumbre la palabra
implantada, la cual puede salvar vuestras almas.

¿Cómo nos salva la Palabra de Dios? Por medio de la fe.

Pablo afirma en Romanos 1.18-20 que el ser humano al oír hablar


de Dios debiera creer. La misma creación le habla del Creador, de
modo que no tiene excusa.

Romanos 10.17 Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra


de Dios.

Aun así, hay quienes se niegan a creer. Rehúsan creer el


testimonio que Dios ha dado. Juan 3.36 Por eso verán la ira de
Dios.

Por tanto, no debemos ignorar sus maquinaciones, como vimos


que dice Pablo en 2Corintios 2.11.

4. Nuestras armas no son carnales. Actualmente hay que tener


mucho cuidado al hablar de armas. Pues, algunos falsos pastores
del movimiento por la renovación del ministerio apostólico y
profético, mal interpretan estos pasajes, Efesios 6.17 y Hebreos
4.12, que hablan de la Espada del Espíritu y la Palabra de Dios.
508

Éstos falsos maestros acaban creyendo que hay que interpretarlo


literalmente y usan espadas de verdad, en sus rituales. Se
nombran caballeros entre ellos, y los unos a otros se otorgan
títulos y poderes que en realidad no tienen. Fantasías de hombres
corruptos como dice Pablo en:

1Timoteo 6.3-10 Si alguno enseña otra cosa, y no se conforma a


las sanas palabras de nuestro Señor Jesucristo, y a la doctrina
que es conforme a la piedad, 4está envanecido, nada sabe, y
delira acerca de cuestiones y contiendas de palabras, de las
cuales nacen envidias, pleitos, blasfemias, malas sospechas,
5
disputas necias de hombres corruptos de entendimiento y
privados de la verdad, que toman la piedad como fuente de
ganancia; apártate de los tales. 6Pero gran ganancia es la piedad
acompañada de contentamiento; 7porque nada hemos traído a
este mundo, y sin duda nada podremos sacar. 8Así que, teniendo
sustento y abrigo, estemos contentos con esto. 9Porque los que
quieren enriquecerse caen en tentación y lazo, y en muchas
codicias necias y dañosas, que hunden a los hombres en
destrucción y perdición; 10porque raíz de todos los males es el
amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la
fe, y fueron traspasados de muchos dolores.

Éstos falsos apóstoles caen en el esperpento y la pantomima;


algunos incluso se disfrazan de reyes y usan coronas, y se sientan
en tronos que son alzados como si de una divinidad se tratara.

¿Es correcto todo esto? De ningún modo, todo eso es falsa


doctrina que nada tiene que ver con la verdad que se nos revela en
la Palabra de Dios. Falsas doctrinas que deben ser
desenmascaradas para que la gente no caiga en ellas.

Por ese motivo estamos predicando sobre estas falsas herejías,


para desenmascarar a los falsos pastores y maestros, a fin de que
la gente se aperciba del engaño y no caiga en las redes de estas
empresas religiosas.
509

Para deshacer el poder de la mentira es que Pablo declara:

Porque las armas de nuestra milicia no son carnales. Y con esta


sola frase tira por tierra todo ese lenguaje pseudo militar que usan
algunos afirmando por ejemplo:

Eres un guerrero de Dios.


Eres una princesa guerrera de Cristo.

Y dibujan una chica con armadura literal y armas literales. Hay


quienes acaban creyéndose que son verdaderos soldados. De
hecho, hay una secta brasileña que está formando un ejército de
jóvenes, vestidos de soldados. Dicen que para predicar. Pero de
ahí a mandarlos a pelear, no hay mucho.

¿Es correcto? Nada de eso es correcto. Pablo lo aclara. Nuestras


armas no son carnales.

¿Qué quiere decir que no son carnales? No son humanas. La


palabra en el original griego que se traduce por carnales es
sarkikos, que literalmente significa: perteneciente a la carne,
temporal, animal, no regenerado, material. Es decir, que no son
armas para combatir a las personas, sino a la mentira, y otras
cosas que veremos a continuación.

¿Qué es lo que debemos combatir los cristianos? ¿A los


musulmanes? Desde luego que no. Eso pensaron en la edad media
los católicos; por eso el Papa tomó la espada y lanzó un ejército
contra los árabes.

Lo mismo piensan los terroristas del mal llamado Estado


Islámico, que no es ningún estado, sino un grupo de terroristas
armados que piensan que deben convencer a los demás por medio
de la fuerza bruta y del terror.

Nuestras armas no son para eso. Nuestras armas no son carnales.


510

Sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas. Una


fortaleza es un lugar de protección. ¿Por qué debemos demoler
fortalezas? ¿A qué se refiere el apóstol con estas palabras? ¿Qué
es una fortaleza? Debemos estudiar el contexto para no acabar
como muchos, diciendo tonterías, ni lanzando un ataque terrorista
contra nadie.

Si hemos de demoler o destruir fortalezas, debemos entender que


se está refiriendo a fortalezas que protegen lo malo, no lo bueno.

En el contexto inmediato Pablo aclara a qué se refiere. El verso


siguiente lo aclara. ¿A qué se refiere concretamente el apóstol?

5. Derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el


conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la
obediencia a Cristo.

Así, pues, no está hablando de una guerra literal sino espiritual.


Contra argumentos, conocimientos, y pensamientos, contrarios a
la voluntad de Dios, que son contrarios a lo revelado en la
Escritura y que llevan a la desobediencia de ésta.

Actualmente muchos creen estar en la verdad, conocer la verdad,


pero, ¿cómo interpretamos la verdad? ¿cómo nos la revela Dios?
Por medio de Su Palabra.

De modo que todo argumento que no se someta a lo revelado en


la Biblia, la Palabra de Dios, debe ser derribado, destruido, y
llevado cautivo a la obediencia a Cristo.

¿Qué debemos aprender de esto? Que entender la Escritura en su


propio contexto es fundamental para no caer en errores absurdos.
Ni acabar en la locura.

Algunos tienen fortalezas religiosas, filosóficas, cientificistas, etc.


Pero si contradicen a Dios, son fortalezas que deben ser
destruidas.
511

Muchos usan armas carnales, títulos, credenciales, prestigio,


riqueza, fama, etc. Incluso las mismas fortalezas: La religión, la
filosofía, la pseudo-ciencia, etc.

Hablando de la batalla espiritual y de las armas a usar, debemos


tener en cuenta que ninguna de estas armas tienen en realidad
poder contra el mal. ¿Eran estas las armas de Pablo? De ninguna
manera. Sus armas eran el testimonio fiel de una vida sujeta al
Espíritu, la oración y el conocimiento de la Escritura. De ese
modo no había fortaleza que se le resistiera.

La batalla a la que Pablo se refiere no es otra que la que se


desarrolla en el campo de las ideas, relacionadas con lo espiritual.
Si tú admites en tu corazón un argumento contrario a la verdad de
Dios, creas una fortaleza en la que el diablo se sentirá seguro, y
desde la cual te hará la guerra.

Te pondré un ejemplo sencillo y claro para que lo puedas


entender. Si piensas que la mentira no es tan mala, que todo el
mundo la practica, y que delante de Dios no tiene importancia.
Ese argumento dará lugar al diablo para entrar en tu corazón y
sentirse seguro. Después, de que un demonio de mentira entre en
ti, te llevará a aceptar otras cosas contrarias a la voluntad de Dios,
para seguir dominándote, y así, sucesivamente.

Posteriormente, desde ahí, tratará de convencerte de otra falsa


doctrina contraria a la verdad, para que caigas en ella y llevarte
poco a poco a una vida de esclavitud. Pues, su deseo no es otro
que destruirte, y él sabe que sólo podrá hacerlo si te aleja de Dios.

Efesios 6.10-18 Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el


Señor, y en el poder de su fuerza. 11Vestíos de toda la armadura
de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del
diablo. 12Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino
contra principados, contra potestades, contra los gobernadores
de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de
maldad en las regiones celestes. 13Por tanto, tomad toda la
armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y
512

habiendo acabado todo, estar firmes. Estad, pues, firmes, ceñidos


vuestros lomos con la verdad, y vestidos con la coraza de justicia,
15
y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz.
16
Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar
todos los dardos de fuego del maligno. 17Y tomad el yelmo de la
salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios;
18
orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu,
y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los
santos.

La armadura de Dios te protege contra las asechanzas del


maligno. Pero, ¿la vestimos de manera práctica? Porque la teoría
no sirve si no llega a practicarse. ¿Creemos que funciona esta
armadura? ¿Nos protege realmente contra el maligno?

Las armas espirituales te servirán para destruir las fortalezas en tu


vida, del mismo modo, si las usas. No basta con tenerlas si no las
usas. Debes aprender a manejarlas y usarlas siguiendo las
instrucciones de la Palabra de Dios.

Porque todo esto tiene que ver con la altivez. El orgullo humano
que se levanta contra el conocimiento de Dios. Contra la fe.
Contra la verdad.

El apóstol Pablo había aprendido que no podía fiarse ni de él


mismo. Conocía las palabras del profeta Jeremías 17.9 Engañoso
es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo
conocerá?

Por esa razón no confiaba en su carne, sino que dependía de su


relación personal con Su Señor. En todo lo que hacía, él mostraba
su dependencia de Dios. Aun en la enseñanza.

1Corintios 2.3-5 Y estuve entre vosotros con debilidad, y mucho


temor y temblor; 4y ni mi palabra ni mi predicación fue con
palabras persuasivas de humana sabiduría, sino con
demostración del Espíritu y de poder, 5para que vuestra fe no esté
fundada en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios.
513

¿Dónde estaba fundada la fe de Pablo en su conocimiento? No.


¿En su experiencia? Tampoco. Veamos lo que dice en:

Filipenses 3.3-8 Porque nosotros somos la circuncisión, los que


en espíritu servimos a Dios y nos gloriamos en Cristo Jesús, no
teniendo confianza en la carne. 4Aunque yo tengo también de qué
confiar en la carne. Si alguno piensa que tiene de qué confiar en
la carne, yo más: 5circuncidado al octavo día, del linaje de Israel,
de la tribu de Benjamín, hebreo de hebreos; en cuanto a la ley,
fariseo; 6en cuanto a celo, perseguidor de la iglesia; en cuanto a
la justicia que es en la ley, irreprensible. 7Pero cuantas cosas
eran para mí ganancia, las he estimado como pérdida por amor
de Cristo. 8Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como
pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi
Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por
basura, para ganar a Cristo.

Las armas espirituales pueden parecer inofensivas, pero tienen el


poder de derribar fortalezas, argumentos y altivez de los enemigos
de Dios.

Hechos 6.8-15 Y Esteban, lleno de gracia y de poder, hacía


grandes prodigios y señales entre el pueblo. 9Entonces se
levantaron unos de la sinagoga llamada de los libertos, y de los
de Cirene, de Alejandría, de Cilicia y de Asia, disputando con
Esteban. 10Pero no podían resistir a la sabiduría y al Espíritu con
que hablaba. 11Entonces sobornaron a unos para que dijesen que
le habían oído hablar palabras blasfemas contra Moisés y contra
Dios. 12Y soliviantaron al pueblo, a los ancianos y a los escribas;
y arremetiendo, le arrebataron, y le trajeron al concilio. 13Y
pusieron testigos falsos que decían: Este hombre no cesa de
hablar palabras blasfemas contra este lugar santo y contra la ley;
14
pues le hemos oído decir que ese Jesús de Nazaret destruirá
este lugar, y cambiará las costumbres que nos dio Moisés.
15
Entonces todos los que estaban sentados en el concilio, al fijar
los ojos en él, vieron su rostro como el rostro de un ángel.
514

Juan 16.13 El Espíritu Santo nos guía a toda la verdad, por medio
de la Escritura, Salmo 119.160.

Por medio del Espíritu Santo y la Escritura, descubrimos nuestras


fortalezas y las de los demás. Actitudes y pensamientos que
debemos enfrentar: La altivez, la vanagloria, la soberbia, el
egoísmo, la lujuria, crean fortalezas en el corazón no regenerado.

En Cristo hay esperanza, porque podemos y debemos derribar


todas estas fortalezas. Porque crean malos hábitos que producen
pecado y por el pecado la muerte.

Sin el Espíritu Santo que convence de pecado, de justicia y de


juicio, sería imposible librarnos de las fortalezas.

6. La desobediencia en la vida de los cristianos no debe ser


tolerada. Debe ser enfrentada, y sometida a disciplina para
fortalecer la fe y el espíritu.

La desobediencia tiene sus consecuencias. Deuteronomio 28 da


muchas pruebas de dichas consecuencias.

Obedecer la Escritura es una decisión voluntaria que todo hijo de


Dios debe tomar, sin la cual no podrá derribar sus propias
fortalezas.

Era necesario que la iglesia de Corinto expresara su sujeción y


obediencia Cristo, al demostrar lealtad al apóstol que les había
llevado al Señor.

Aunque eso no significaba que él estaba interesado en sujetarlos a


sí mismo, ni a ningún otro hombre, ni institución, según el estilo
del mundo, sino a Cristo.

Como está escrito en 2Corintios 1.24 No que nos enseñoreemos


de vuestra fe, sino que colaboramos para vuestro gozo; porque
por la fe estáis firmes.
515

También 2Corintios 11.20-21 Pues toleráis si alguno os


esclaviza, si alguno os devora, si alguno toma lo vuestro, si
alguno se enaltece, si alguno os da de bofetadas. 21Para
vergüenza mía lo digo, para eso fuimos demasiado débiles.

Esto esta basado en las palabras del Señor Jesús quien dijo en
Lucas 22.25-26 Pero él les dijo: Los reyes de las naciones se
enseñorean de ellas, y los que sobre ellas tienen autoridad son
llamados bienhechores; 26mas no así vosotros, sino sea el mayor
entre vosotros como el más joven, y el que dirige, como el que
sirve.

La humildad del apóstol de los gentiles está sobradamente


probada. Su sencillez y paciencia con los rebeldes judaizantes y
los corintios, había sido puesta aprueba una y mil veces. Pero
todo tiene su límite. Aún la paciencia de los siervos de Dios.

Porque también la paciencia de Dios tiene límites. No porque


Dios no pueda tener más, sino porque llegará un momento en que
decidirá no seguir soportando la maldad, y juzgará a quienes no se
hayan querido arrepentir de sus pecados.

La pasada semana nos quedamos en el verso 6 y hoy


continuaremos donde lo dejamos. Vamos a leer del 7 al 11, a ver
si somos capaces de estudiar esta perícopa, o porción. Hasta
donde nos de el tiempo.

7. ¿Qué está pasando aquí? Pablo está enfrentando el mal


proceder de los corintios y de sus acusadores. Lo ha venido
haciendo en los capítulos anteriores, en el 3:1, 7-18; 4:2-4; 5:12,
16; 6:14 este no había sido el objetivo principal de su discurso,
pero ahora le dedicaría un poco más de atención, para dejar las
cosas claras.

¿Ha sido duro el apóstol en su trato para con los corintios? De


ningún modo. Ha sido claro, paciente y amoroso más allá de lo
razonable. Pero es que a veces, los creyentes, en su inmadurez,
516

son incapaces de reconocer sus propios errores, y tratan siempre


de culpar a alguien más de sus problemas.

El problema de las excusas nos viene de lejos. ¿Recuerdan de


dónde? Desde el mismo huerto del Edén. Lo comprobamos en
Génesis 3 donde Adán culpó a Eva, Eva a la serpiente, y con esto
en realidad ambos estaban culpando a Dios.

¿Ha cambiado algo a lo largo de la historia o seguimos


excusándonos? La verdad es que el ser humano continua
practicando el deporte de la excusa.

Por cierto, ¿Cuándo fue la última vez que te excusaste? ¿Cuándo


fue la última vez que desviaste la responsabilidad hacia otro?
¿Cuándo fue la última vez que culpaste a otro de un problema
propio?

¿Es correcto mantener un estilo de vida con semejantes


costumbres? Desde luego no para los discípulos de Cristo. Los
cristianos somos llamados a dejar la vieja vida y vivir conforme a
la voluntad de Dios.

¿Recuerdan algún pasaje que nos enseñe ese principio? Por


ejemplo Efesios 4.22-24 En cuanto a la pasada manera de vivir,
despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los
deseos engañosos, 23y renovaos en el espíritu de vuestra mente,
24
y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y
santidad de la verdad.

Los corintios había permitido que hombres carnales, religiosos


legalistas, farsantes que pretendían pasar por ministros de Cristo,
les pusieran contra aquel a quien Dios había usado para llevarlos
a Cristo.

Por medio de estos falsos ministros, el diablo no sólo los había


llevado a menospreciar al apóstol, frente a otros con muchos
menos méritos espirituales que él, sino que además, los había
llevado a enfrentarse contra Pablo.
517

Como veremos en el próximo capítulo, esto forma parte de las


maquinaciones del enemigo de nuestras almas. ¿Cómo podríamos
descubrir y prevenir este ataque contra la obra de Dios? Viviendo
espiritualmente. Manteniendo una buena relación personal con
Dios que nos permita discernir a los verdaderos de los falsos
ministros.

Hablando de los sacerdotes de Israel, Dios dice en Ezequiel 44.23


Y enseñarán a mi pueblo a hacer diferencia entre lo santo y lo
profano, y les enseñarán a discernir entre lo limpio y lo no
limpio.

¿Cómo podemos hacer esto hoy en día los pastores? Enseñando la


verdad de la Palabra de Dios, para que sepáis por vosotros
discernir entre lo santo y lo profano.

Animándoos a ser espirituales porque: el hombre natural no


percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son
locura, y no las puede entender, porque se han de discernir
espiritualmente. 1Corintios 2.14.

Los corintios llegaron a rechazar al siervo de Dios. Y lo peor de


todo, es que menospreciando y desobedeciendo a Pablo, estaban
también menospreciando y desobedeciendo a Dios mismo, quien
lo había llamado y puesto en el ministerio.

Cuando Samuel era ya viejo, el pueblo pidió un rey como las


demás naciones. Veamos el pasaje:

1Samuel 8.4-7 Entonces todos los ancianos de Israel se juntaron,


y vinieron a Ramá para ver a Samuel, 5y le dijeron: He aquí tú
has envejecido, y tus hijos no andan en tus caminos; por tanto,
constitúyenos ahora un rey que nos juzgue, como tienen todas las
naciones. 6Pero no agradó a Samuel esta palabra que dijeron:
Danos un rey que nos juzgue. Y Samuel oró a Jehová. 7Y dijo
Jehová a Samuel: Oye la voz del pueblo en todo lo que te digan;
518

porque no te han desechado a ti, sino a mí me han desechado,


para que no reine sobre ellos.

Es evidente que a Samuel no le pareció bien la decisión del


pueblo. ¿Cómo la interpretó? Como un rechazo a su ministerio.
Todo el trabajo que había realizado con ese pueblo rebelde y
ahora que llegaba al final de sus días, menospreciaron el ser
especiales, el tener un Rey Majestuoso que les gobernaba
invisible. Pretendían ser como todas las demás naciones.

Esta afrenta contra Samuel y su labor a lo largo de todos sus años


de ministerio, ¿Cómo la interpreta Dios? Como un afrenta contra
Sí mismo.

Todo tiene un límite, el apóstol Pablo está ahora decidido a


enfrentar a sus enemigos con toda la autoridad que de Dios había
recibido para la edificación de la Iglesia.

Porque todo tiene su tiempo, y después de haber soportado con


paciencia los pecados de los acusadores y de los mismos corintios
contra su persona, ahora llegado el momento, defiende su
ministerio y con él al Señor que lo puso.

Los opositores acusaban a Pablo de que su experiencia con Cristo


no era lo bastante válida como para calificarlo como apóstol, ni
aun para ser cristiano. Era un ataque en toda regla.

Pablo los acusará de mirar las apariencias. No pregunta, ni


insinúa, sino que afirma: Miráis las cosas según la apariencia.
¿Qué significa esto? Que no tenían una visión espiritual de las
cosas, sino carnal.

¿Creen que es correcta la actitud de los corintios en este asunto?


Ya sabemos que no lo es. ¿Por qué no es correcta? Porque las
apariencias engañan.

Ya meditamos antes sobre el hecho de que los corintios se


dejaban llevar de las apariencias, no volveremos a citar Juan 7.24,
519

ni todos los demás versos que ya citamos, que tienen que ver con
dejar de ver la paja en el ojo ajeno.

Pero el argumento de Pablo es incontestable, como está escrito: Si


alguno está persuadido en sí mismo que es de Cristo, esto
también piense por sí mismo, que como él es de Cristo, así
también nosotros somos de Cristo.

Este pasaje recuerda el informe que la familia de Cloé le había


traído al apóstol, de que había cuatro grupos bien diferenciados en
Corinto, 1Corintios 1.11-12 por el que uno de esos grupos
afirmaban que eran de Cristo.

Sea que se trate de ese grupo, o de una sola persona que afirmara
lo mismo, lo cierto es que se trataba de un ataque contra la
persona y el ministerio del apóstol, y así lo interpreta Pablo.

A éste o éstos, ¿Cómo responde el apóstol? Pablo no pone en


duda que pertenezcan a Cristo, pero le manda a pensar que como
él es de Cristo, así también nosotros somos de Cristo.

Si el acusador confía en su relación personal con Cristo, no debe


ignorar que Pablo tiene el mismo derecho, incluso más aun, de
pertenecer a Cristo.

No es bueno alabarse uno mismo. La egolatría no es aconsejable a


los creyentes. Como está escrito en el Proverbios 27.2 Alábete el
extraño, y no tu propia boca; El ajeno, y no los labios tuyos.

¿Cuenta Pablo con toda la autoridad de presentar a Cristo a los


corintios y de defenderse? Sin duda. ¿Por qué? Por que él los
había llevado al evangelio, no quien acusaba al apóstol.

Por otro lado, el llamado, el apostolado, y la autoridad de Pablo


eran especiales, pues, después de él nadie más fue llamado a ese
ministerio. ¿Existen hoy los apóstoles? Desde luego que no.
Existen falsos apóstoles, pero no auténticos apóstoles. Jesús sólo
nombró a trece porque uno de ellos le traicionó.
520

Quien negaba el ministerio de Pablo debería, si fuera un


verdadero cristiano, o siervo de Dios, colaborar con él no
oponérsele.

No cabe duda de que el ministerio implica exponerse a la opinión


y crítica de los demás. Una de las situaciones más difíciles de
enfrentar son los ataques infundados de nuestros oponentes.
Especialmente cuando son llevados a lo personal y no tanto con
respecto a lo que decimos o enseñamos.

¿Saben porqué ocurre eso? Es es la típica reacción de muchos,


cuando no tienen argumentos teológicos en los que fundamentar
su crítica, acaban atacando al siervo de Dios. ¿Es correcto? Desde
luego que no. Es algo inmoral e indigno.

De esto podría hablarles largo y tendido. Pues, como saben, he


sido objeto de esto muchas veces, y sigo siéndolo cada día. Pero
doy gracias a Dios que me tiene por digno de padecer por amor al
evangelio y la fidelidad a Su Palabra.

En este acaso el ataque contra Pablo era integral, se atacaba la


persona además del ministerio como veremos en los textos
siguientes. ¿Te has sentido atacado por alguien alguna vez?
¿Cómo te sentiste? ¿Le diste importancia o no? ¿Qué pasaría si el
ataque en vez de cesar, continuara repitiéndose?

Lo que muchos no entienden es que cuando se oponen a aquellos


que sirven a Dios fielmente conforme a Su Palabra, se enfrentan
al mismo Señor. Pues, escrito está en Lucas 10.16: El que a
vosotros oye, a mí me oye; y el que a vosotros desecha, a mí me
desecha; y el que me desecha a mí, desecha al que me envió.

¿Qué está enseñando aquí el Señor Jesús? Que él se identifica con


sus discípulos. Pablo aprendió esto desde antes de su misma
conversión, cuando él mismo perseguía a la Iglesia de Cristo.
Hechos 9.1-5.
521

Perseguir a los discípulos de Cristo es perseguir al mismo Señor


Jesús. Del mismo modo, atacar a los siervos de Dios es atacar a
Dios mismo, como está escrito en referencia a Jerusalén en Isaías
54.17 Ninguna arma forjada contra ti prosperará, y condenarás
toda lengua que se levante contra ti en juicio. Esta es la herencia
de los siervos de Jehová, y su salvación de mí vendrá, dijo
Jehová.

¿Quiere esto decir que no debemos levantar la voz contra los


malos siervos de Dios? Por supuesto que no. Esto nada tiene que
ver con el batallar contra los falsos pastores y maestros que tanto
abundan en la actualidad. A los cuales ya Dios mismo les anuncia
su recompensa, cuando habla de los pastores de Israel en Ezequiel
34.

Para quienes estén pensando que estos son textos del AT y que no
tienen que ver con la Iglesia, déjenme citarles uno de Pablo.

Hablábamos la semana pasada sobre la oposición y ataques contra


los siervos de Dios. Veíamos que quien ataca a un siervo de Dios
ataca a Dios mismo. Pero, ¿significa eso que no podemos
desenmascarar a los falsos ministros? Veíamos que no se trata de
eso. Sigamos donde lo dejamos.

Vimos como el diablo quería poner separación entre los creyentes


y sus pastores. Esa es una de sus estrategias para destruir la obra
de Dios. Por lo cual debemos estar atentos contra toda tentación
en ese sentido.

Debemos acercarnos cada día más a Dios para no caer en esas


tentaciones. Debemos amarnos cada día más los unos a los otros,
y vencer así al enemigo. Pablo estaba dispuesto a enfrentar a los
suyos.

Tito 1.10-11 Porque hay aún muchos contumaces, habladores de


vanidades y engañadores, mayormente los de la circuncisión, 11a
los cuales es preciso tapar la boca; que trastornan casas enteras,
enseñando por ganancia deshonesta lo que no conviene.
522

Como vemos en este pasaje a los es necesario taparles la boca.


Estoy convencido de que para la moral de muchos, esta frase no
es políticamente correcta. Pero es bíblica. Evidentemente no se
trata de otra cosa que de enfrentar la mentira con la verdad.

Realmente en muchos casos es la envidia lo que está detrás de los


ataques contra los verdaderos siervos de Dios. Hay muchos que
esconden una crítica velada contra Dios quien llamó a su siervo al
ministerio y a ellos no.

Hay casos en los que también algunos que fueron llamados al


ministerio, puesto que no todos los ministerios son iguales, ni
tienen la misma repercusión, les lleva a este tipo de conductas y
enfrentamientos. Por causa de una actitud mal sana de
competencia.

Desgraciadamente, actualmente la competencia no se ve como


algo malo, sino que incluso se fomenta en las iglesias como en las
empresas, tratando con ello de conseguir más productividad en las
actividades y mejores resultados en la labor de los obreros.

¿Nos ha llamado Dios a la competencia? De ningún modo. Nos ha


llamado a servir, no a ser servido.

¿Es correcto eso en la Iglesia? Todos conocemos el afán que


anidaba en el corazón de algunos de los apóstoles del Señor, y
cómo pretendían ser mayores y más importantes que los demás
apóstoles. También sabemos cómo trató Jesús ese asunto. ¿Lo
recuerdan? Mateo 20.20-28.

Sin duda, cuando un verdadero siervo de Dios enfrenta oposición


y es atacado injustamente, se encuentra en una situación que no
es fácil de manejar. En los versos siguientes Pablo nos enseñará
cómo afrontar tales situaciones.
523

8. Lejos de amilanarse, Pablo se jacta de la autoridad que Dios le


ha dado, aunque aclara que la usa para edificación y no para
destrucción.

¡Qué fácil le resultaría al apóstol actuar de manera autoritaria y


destructiva! ¿No creen? Así actúan muchos, aprovechando la
información que tienen de los demás; sin embargo, ese no es el
modo de proceder de Pablo. Él no abusa de su ministerio ni de su
autoridad. Pero tampoco está dispuesto a avergonzarse de su
posición, ministerio e integridad.

2Corintios 13.10 Por esto os escribo estando ausente, para no


usar de severidad cuando esté presente, conforme a la autoridad
que el Señor me ha dado para edificación, y no para destrucción.

Este es y debe ser el único objetivo de la autoridad, la edificación


y no la destrucción.

Hay muchos pasajes que hablan de la obligación de los siervos y


los creyentes en general de edificar y no destruir. Por ejemplo:

Efesios 4.12 …a fin de perfeccionar a los santos para la obra del


ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo.

Efesios 4.29 Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca,


sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar
gracia a los oyentes.

1Corintios 14.12 Así también vosotros; pues que anheláis dones


espirituales, procurad abundar en ellos para edificación de la
iglesia.

¿Cómo podemos edificarnos los unos a los otros de manera


práctica? Con nuestras actitudes, con nuestro testimonio, todo lo
que hacemos afecta al Cuerpo de Cristo, para bien o para mal.
524

Si hablo lo que no es correcto ¿Qué hacemos edificar o destruir?


Destruimos. ¿Algunos otros ejemplos? Sirviendo a nuestros
prójimos. Ayudando quien lo necesita.

En la versión Nueva Traducción Viviente, éste versículo ocho


dice: Pareciera que estoy jactándome demasiado de la autoridad
que nos dio el Señor, pero nuestra autoridad los edifica a ustedes,
no los destruye. Así que no me avergonzaré de usar mi autoridad.

No me avergonzaré. Con esta última frase está dejando claro que


está dispuesto a seguir con su defensa. No se trata sólo del
descrédito de su ministerio o su persona, sino que había algo
mucho más importante en juego.

¿Saben de qué se trataba? Se trataba de la obra misionera de toda


la región, así como sus planes de ir a Roma y España; sin
mencionar la ofrenda para Jerusalén de la que ya hablamos largo
y tendido. Por tanto, no se iba a quedar quieto ni callado. Llegó el
momento de enfrentarlos.

9-11. Pablo les advierte que no pretende asustarlos por carta. ¿Por
qué dice esto? Porque era otra de las acusaciones que habían
hecho contra él, verso 10.

Es evidente que Satanás pretende desanimar al apóstol. ¿Por qué


pensáis que Satanás estaba interesado en desanimar al apóstol?
Para que cesara en su empeño de extender la obra de Dios en
todas aquellas regiones. Esa era su estrategia.

Pablo, por el sagrado llamamiento y la autoridad que ha recibido


del mismo Dios, está llevando luz donde antes sólo había
tinieblas. Tinieblas que favorecían el plan del diablo, el avance de
la maldad.

Ahora, Pablo está poniendo en peligro su malévolo plan de alejar


a la gente de Dios para destruirlos. Por esa razón, pone a algunos
contra él, y provoca al apóstol, para hacerlo desanimarse y caer.
525

Está tratando de dividir a la Iglesia, alejar a los creyentes de sus


siervos, a fin de desanimar al apóstol para que tire la toalla.

Esto nos afecta a todos, porque todos seremos tentados a tirar la


toalla, a desanimarnos, a venirnos a bajo, a no continuar, a
abandonar el camino.

Vamos a ser tentados a destruir, a no edificar, a seguir el camino


fácil, el camino ancho. Seremos tentados a seguir la oscuridad y
no la luz. Vamos a ser tentados a criticar la obra de Dios, a los
siervos de Dios, a los hermanos, a competir; a ser orgullosos, a
querer ser más que los demás; Vamos a ser tentados a ser
religiosos y espiritualistas, a vivir de apariencias.

Vamos a ser tentados a todo eso, Pablo lo fue, pero ¿Qué hizo él?
Él no quiso depender de sí mismo ni de su propia capacidad, sino
que decidió no dejarse tumbar por el desánimo. No se dejó
amedrentar por las críticas a pesar de que se le criticó en todo. Él
se mantuvo firme.

¿Qué haces tú cuando eres tentado por el desánimo? ¿Qué vas a


hacer a partir de ahora? La vida cristiana es una continua lucha y
debemos estar preparados para todo. ¿Qué haremos cuando
aparezca la lucha, nos vendremos abajo, o nos mantendremos
firmes en el Señor? Debemos permanecer firmes.

Nos quedamos en el versículo 9. El pr. Andrés comentó que Pablo


estaba enfrentando los ataques que había recibido y que por
medio de tales ataque el diablo trataba de desanimar a Pablo. Pero
que él no estaba dispuesto a dejarse desanimar, sino que estaba
poniendo las cosas en su lugar. Seguimos donde lo dejamos.

10. Esto no hay forma de disimularlo. Se trata de un ataque en


toda regla, abierto y directo, contra el siervo de Dios. No se trata
de un mal entendido, porque estas cosas no se pueden entender de
otra manera. ¿O sí?
526

La primera frase de este pasaje es una crítica contra las cartas de


Pablo. ¿De qué le acusaban? De ser demasiado autoritario, de ser
muy severo. Se trataba de un comentario peyorativo, despectivo,
insultante.

Todo escrito es susceptible de ser interpretado, de ahí la


necesidad de investigar bien antes de llegar a ninguna conclusión.
Debemos intentar conocer a la persona, al escritor, su contexto
personal, para poder entender sus palabras.

¿Alguna vez has sido objeto de mala interpretación? A mí


personalmente me han malinterpretado muchísimas veces. Por ese
motivo procuro ser claro, sencillo y directo, para que la gente me
conozca y no se de a mal interpretarme.

Quien se acerca a mí, me acaba conociendo rápido, ¿cierto? Sin


duda. Yo voy por derecho. No uso subterfugios, ni sutilezas,
rodeos, ambages, procuro ser lo más claro y directo posible. Aún
así, siempre hay quien se confunde.

¿Creen que el que acusaba a Pablo le conocían bien? Desde luego


que no.

Si los corintios hubieran conocido mejor a Pablo ¿se habrían


dejado engañar por los judaizantes? Desde luego que no.

La segunda frase contrasta claramente con la primera. En una, sus


cartas; en la otra, su aspecto personal. ¿Cómo catalogaban sus
cartas? Como duras y fuertes? ¿Cómo catalogaban su aspecto?
Como débil y menospreciable. ¿Notan el contraste?

¿Era correcta esa apreciación sobre el apóstol? De ningún modo.


¿Por qué? Porque no tiene nada que ver con la realidad. El apóstol
había soportado muchas veces el ser expulsado de las sinagogas;
¿Qué más?
527

Palizas de los judíos y romanos. Apedreado, dado por muerto,


naufragios, y muchas cosas más que ya sabemos porque las
hemos estudiado.

¿Qué creen que pretendían con esta acusación? No sólo insultar,


sino menospreciar al apóstol ¿Con qué objeto? Con el de exaltarse
a sí mismos a costa del siervo de Dios.

Toda la labor que hizo Pablo fue a golpe de viajes y cartas. Cartas
que han llegado hasta nosotros y que tenemos la bendición de
poder meditar. Justamente es lo que estamos haciendo, analizar
una de sus cartas.

En cuanto a sus escritos, están entre los mejores, los más


hermosos y profundos, de la historia de la humanidad. La Carta a
los Romanos, Corintios o a los Gálatas, por poner dos ejemplos,
son documentos históricos de un valor incalculable.

¿Recuerdan de manera especial algún pasaje de Pablo que les


haya ayudado o impresionado por algún motivo?

¿Quién escribió más profunda y llanamente a la vez sobre


cosmovisión, que Pablo en Romanos 1?

¿Quién no recuerda la maravillosa descripción que hace el apóstol


sobre el amor en 1Corintios 13?

¿Quién escribió una apología más acertada contra su propia


cultura religiosa en que la había sido criado, que Pablo en Gálatas
3?

Sus motivaciones siempre fueron las mejores. No era una persona


soberbia ni ególatra, no buscaba fama ni riquezas, aunque hubiera
podido hacerlo. A todos los llevaba a los pies de la cruz de Cristo,
a quien exaltaba siempre que tenía oportunidad. Jamás pretendió
robarle la gloria al Señor.

¿Conocen a muchos así? Realmente no hay muchos como Pablo.


528

Estas cartas del apóstol han sido, son y seguirán siendo hasta la
venida del Señor, una verdadera fuente de sabiduría e inspiración,
para millones de personas a lo largo de la historia de la Iglesia.

Pero no sólo criticaron la palabra escrita del apóstol, también se


atrevieron a ir más lejos, criticaron aún la apariencia física del
apóstol. ¿Qué les parece esa acción de los enemigos de Pablo?
Indignante, vergonzoso, menospreciable.

Pablo demostró ser un hombre de integridad moral, e intachable;


y en cuanto a su resistencia física, es cierto que pasó por
enfermedades, de hecho, escribiendo a los gálatas les dice:

Pues vosotros sabéis que a causa de una enfermedad del cuerpo


os anuncié el evangelio al principio; 14y no me despreciasteis ni
desechasteis por la prueba que tenía en mi cuerpo, antes bien me
recibisteis como a un ángel de Dios, como a Cristo Jesús.
15
¿Dónde, pues, está esa satisfacción que experimentabais?
Porque os doy testimonio de que si hubieseis podido, os hubierais
sacado vuestros propios ojos para dármelos. 16¿Me he hecho,
pues, vuestro enemigo, por deciros la verdad? Gálatas 4.13-16.

Por este pasaje se cree que Pablo tenía algún problema que afectó
su visión. Las palabras del apóstol en Gálatas 6.11 parece
corroborarlo: Mirad con cuán grandes letras os escribo de mi
propia mano.

No sabemos si realmente fue así que tuviese problemas de visión


o que se tratase de otra enfermedad, lo cierto y verdad es que
tarde o temprano todos enfermamos, de una cosa u otra. ¿Alguien
aquí no ha enfermado nunca? Si alguno dice que no, que le de
gracias a Dios, pero que se prepare porque no es extraño si
enferma. Como digo, todos lo hacemos.

A pesar de ello, incluso si Pablo fue una persona enfermiza, que


distinto a pasar por una enfermedad, aunque fuera una persona
enfermiza, Pablo fue un hombre fuerte más allá de toda duda.
529

Pues, si enfermo fue capaz de hacer lo que hizo, ¿se imaginan


sino hubiera estado enfermo?

Por lo que la acusación contra él era totalmente errónea e


infundada. ¿saben lo que significa infundada? Que no tiene
fundamento.

El apóstol Pablo es y seguirá siendo, después de Cristo, el mejor


ejemplo que tenemos en toda la historia de la Iglesia en fe, amor,
entrega y sacrificio. Predicó y estableció iglesias allá por medio
mundo. A todo lugar donde Dios lo mandó, fue. Hizo todo cuanto
el Señor le demandó, fue obediente. Sirvió a Dios en todo, hasta
la muerte.

Hoy dicen que es jueves santo y para muchos cristianos estamos


en “semana santa”. No está mal aprovechar estas fechas para
meditar en el sacrificio de nuestro Señor Jesucristo.

Ya quisiera yo que, al menos todos los cristianos, meditaran en el


por qué Cristo se entregó en la cruz. Aunque mucho me temo que
para la mayoría, tanto de católicos como evangélicos, la semana
santa ha pasado a ser sólo una celebración más.

Sinceramente es triste que algunos cristianos continúen


celebrando la semana santa como si fueran católicos romanos.
Para nosotros todas las semanas son santas.

Dado que para nosotros todos los días y las cincuenta y dos
semanas del año son santas, aprovecharemos este jueves “santo” y
seguiremos con nuestro estudio sistemático de las Escrituras,
donde lo dejamos.

Estábamos hablando en el verso 10 de las respuesta de Pablo a las


acusaciones que hicieron contra él, su ministerio y su persona. Ya
hablamos en cuanto a sus cartas y su apariencia personal, hoy
seguiremos hablando de su palabra.
530

En cuanto a su elocuencia, le acusaban de ser un mal orador, y de


no lograr ser eficaz a la hora de transmitir el evangelio. ¿Qué
creen, era Pablo eficaz o no en su ministerio? ¿Hablaba con
claridad o se andaba por las ramas? Sin la menor duda era eficaz
y hablaba con claridad.

¿Creen que Pablo no sabía hablar? De ningún modo, habló con


gente sencilla, enrevesados religiosos, complicados filósofos,
interesados políticos y hasta con soberbios reyes y emperadores.
A todos los enfrentó con sus pecados y les predicó el evangelio de
manera clara y los exhortó a creer y a obedecer al Señor
Jesucristo.

¿Es fácil hacer estas cosas? No, no lo es. Aún así, el apóstol lo
hizo. Fue el responsable de que el evangelio llegara y se
extendiera al continente europeo. ¿Lo hizo bien o mal? ¿Fue
eficaz o no? Desde luego que lo fue. Sin embargo ¿qué decían
que eran sus palabras? Menospreciable. ¿Qué significa eso?

Menospreciar es tener a alguien, o algo, en menos valor de lo que


merece. Así que estaban dando menos valor del que tenían a las
palabras del apóstol Pablo.

Hoy sabemos que las palabras de Pablo, al menos las de sus


cartas, fueron inspiradas por el Espíritu Santo. ¿Estarían
inspirados también sus acusadores? Desde luego que no. Así que
en realidad estaban menospreciando las palabras de Dios en
Pablo.

Por eso el apóstol no está dispuesto a permitirlo. No soportará por


más tiempo que menosprecien las Palabras de Dios, aunque
fueran pronunciadas o escritas por él mismo. Por eso continúa…

11. En este pasaje, advierte al cabecilla de sus acusadores que está


dispuesto a enfrentarse cara a cara con él también en persona.
Está dispuesto a enfrentarle y refutar todas sus acusaciones
delante de él y de toda la congregación.
531

¿Estaba Pablo confiando en sí mismo, en sus fuerzas físicas o


sabiduría humana? De ningún modo. Él sabía que Dios le
respaldaría en su enfrentamiento con aquellos falsos apóstoles,
que pretendían destruir su reputación.

Nunca resulta fácil equilibrar el amor y la mansedumbre, con la


fuerza y el poder de la autoridad espiritual, cuando tenemos que
enfrentar a un pecador.

Hay quien confunde el amor, la humildad y la mansedumbre de


los siervos, con debilidad o temor. ¿Es lo mismo? Por su puesto
que no. Quien tal hace, comete un terrible error y puede
sorprenderse al descubrirlo.

El mal uso de la fuerza y la autoridad ha ocasionado no pocos


problemas a la obra de Dios. Pero, bien usados, son instrumentos
de bendición para la edificación del Cuerpo de Cristo.

Aunque también, el ejercicio de la autoridad ministerial es a veces


mal interpretado como falta de humildad o autoritarismo. Por ese
motivo hay que ser paciente, y realmente Pablo lo fue hasta donde
pudo.

A partir de ahí, cuando se cruza la línea y se pone en peligro la


obra de Dios, ningún siervo de Dios está obligado a seguir siendo
paciente, sino a exponer la verdad, aunque ésta pueda molestar a
los ignorantes o carnales.

En este pasaje Pablo ha reaccionado en contra de algunas


personas que lo estaban criticando duramente, aunque al parecer,
el ataque estaba liderado por uno que, en particular, había sido
más directo en sus acusaciones.

Al dirigirse con claridad a la Iglesia de Corinto, Pablo espera que


los hermanos se opongan a las malas influencias de aquellos
intrusos de mala fe.
532

Hasta aquí, hemos podido ver cómo Pablo nos deja, con su propio
testimonio personal, algunas pautas de cómo reaccionar
“cristianamente” ante la dura crítica de los demás. Porque somos
cristianos y tenemos el deber de defender la verdad.

Pero sabemos que hay una manera natural de hacer las cosas y
hay una manera cristiana de hacerlas. ¿Hay diferencias entre las
dos, sí o no? Debe haberla. Observemos, pues cómo Pablo
reacciona ante las críticas.

Verso 1, tiene en cuenta la ternura de Cristo.


Verso 2, sin que eso signifique cobardía.
Verso 3, no anda en la carne, ni pelea en la carne.
Verso 4, usa las armas espirituales.
Verso 5ª, derriba los argumentos y la altivez.
Verso 5b, lleva todo pensamiento cautivo a la obediencia a Cristo.
Verso 6, usa de la autoridad de Dios.
Verso 7, tiene clara su pertenencia a Cristo.
Verso 8, usa su autoridad para edificar, no para destruir.
Verso 9, se preocupa de su efecto en otros.
Verso 10, soporta hasta donde puede los insultos.
Verso 11, está dispuesto a enfrentar a los oponentes, cara a cara.

¿Qué les parece el modo de proceder del apóstol? ¿Actuamos


nosotros de esta manera, o lo hacemos de otra? ¿Podemos
aprender algo del modo de actuar de Pablo cuando es atacado?
Sin duda.

12-14. ¿Qué les parece este versículo? ¿Alguien que lo entienda


puede explicárnoslo? Aunque parezca un poco enrevesado, un
trabalenguas, este verso es interesantísimo.

Pablo usa un juego de palabras similares para afirmar que no se


atreven, ni él ni sus colaboradores, a actuar igual que sus
atacantes. ¿Qué hacían estos que le acusaban? Alabarse a sí
mismos.
533

¿Realmente no se atrevían? ¿Por qué no se atrevían a compararse


con ellos? La ironía del apóstol es indiscutible. Pues,
humillándose así mismo, y a sus colaboradores, deja en evidencia
la soberbia y egolatría de sus oponentes.

¿Saben lo que es la ironía? Es una expresión que da a entender


algo contrario a lo que se está diciendo, como una burla refinada,
disimulada.

Pablo está ridiculizando a sus enemigos y se mofa de ellos


sarcásticamente, por pretender destruir la reputación del apóstol
para engrandecerse así mismos.

¿Es correcta la actitud de sus atacantes? Desde luego que no. Lo


hemos dicho y repetido una y mil veces. Desgraciadamente esto
es más habitual de lo que sería deseable.

¿Qué podemos aprender de estas cuestiones? ¿Por qué nos habla


la Escritura de estas malas actitudes, de aquellos cristianos, si es
que lo eran?

De estas cosas debemos aprender que hay cosas que no se deben


hacer. Estas cosas están escritas para nuestra enseñanza. Romanos
15.4.

Es muy importante estudiar bien a la persona de la que tratemos,


pues, de lo contrario, ciertas connotaciones de su lenguaje o
escritura nos pasará desapercibido y será mal interpretado.

Actualmente a este tipo de personas, malos cristianos, ¿Cómo se


les llama? Trepas. Porque pretenden promocionarse y ascender en
su carrera a costa de pisotear a los demás.

Ellos hablaban mal de Pablo y sus compañeros de ministerio y


hablaban bien de sí mismos, de ese modo pretendían que los
corintios dejaran de apreciar y amar a Pablo y sus colaboradores,
para recibirlos ellos.
534

¿Qué enseña la Escritura al respecto de ese tema? Veamos:


Proverbios 27.2 Alábete el extraño, y no tu propia boca; El ajeno,
y no los labios tuyos.

No está bien alabarse uno a sí mismo. El problema del ególatra, es


que se compara así mismo, consigo mismo; de modo que todos
los demás les parecen indignos comparados con él. Lo cual no es
juicioso, según el apóstol.

Pablo no quiso entrar en ese juego de actuar como los otros. Él no


hablaría mal de ellos. No quería ponerse a su mismo nivel de
carnalidad.

Yo siempre pongo un ejemplo sencillo pero que ilustra bien la


vanidad de la soberbia y la egolatría. Me refiero al ejemplo del
que barriendo el suelo piensa para sí mismo: Esto no hay quien lo
haga mejor que yo. Cuando en realidad cualquiera puede hacerlo,
al menos tan bien como él o, mejor aún.

No hay dos personas iguales, ¿por qué deberíamos pensar, hablar


y actuar igual a alguien más ? Cada cual es distinto, y en todos y
por todos, Dios puede enseñarnos algo.

No tengo porqué exigirle al Pr. Andrés que piense, hable y actúe


como yo, porque el Pr. Andrés no es el Pr. Nicolás. Somos
diferentes y ambos hemos sido amados por Dios, perdonados por
Dios, llamados al ministerio por Dios, y capacitados por Dios.

Pero somos distintos. Él tiene una personalidad y yo otra. Si yo


pretendiera que él hiciera las cosas como yo las hago, le estaría
poniendo en un aprieto. No sería justo por mi parte. O si él me
pidiese que yo hiciera las cosas como las hace él, me estaría
poniendo en un aprieto. No sería justo por su parte.

Pero somos dos pastores, que servimos a Dios como un equipo.


Ni yo tengo que menospreciarlo a él para que me amen a mí, ni él
tiene que menospreciarme a mí para que le amen a él.
535

Ambos somos dos miembros de esta congregación a los que Dios


nos ha llamado para serviros. Por tanto, del mismo modo, a
ambos, deben recibirnos como instrumentos de Dios para la
edificación de la Iglesia.

Ni yo soy mejor que él, ni él es mejor que yo. Somos distintos, y


ambos nos complementamos. Gracias a Dios por ello.

La semana pasada nos quedamos diciendo que no debemos


compararnos a otros, ya que somos únicos. Los atacantes de Pablo
se comparaban consigo mismos.

Ya que te vas a comparar a alguien, compárate con Cristo.

Este asunto tiene que ver con la imagen que queremos que los
demás tengan de nosotros. El diablo sabe lo frustrante que es las
comparativas, y por ese motivo las promueve aún dentro de la
Iglesia.

Incluso los padres comparan a sus hijos unos con otros, o con
algún familiar u otros niños. Hay una frase conocida que dice que
las comparaciones son odiosas.

Es verdaderamente absurdo caer en esa trampa infantil de


Satanás. Pablo habló de esto cuando escribió en 1Corintios 12.14-
22: Además, el cuerpo no es un solo miembro, sino muchos. 15Si
dijere el pie: Porque no soy mano, no soy del cuerpo, ¿por eso no
será del cuerpo? 16Y si dijere la oreja: Porque no soy ojo, no soy
del cuerpo, ¿por eso no será del cuerpo? 17Si todo el cuerpo fuese
ojo, ¿dónde estaría el oído? Si todo fuese oído, ¿dónde estaría el
olfato? 18Mas ahora Dios ha colocado los miembros cada uno de
ellos en el cuerpo, como él quiso. 19Porque si todos fueran un
solo miembro, ¿dónde estaría el cuerpo? 20Pero ahora son
muchos los miembros, pero el cuerpo es uno solo. 21Ni el ojo
puede decir a la mano: No te necesito, ni tampoco la cabeza a los
pies: No tengo necesidad de vosotros. 22Antes bien los miembros
del cuerpo que parecen más débiles, son los más necesarios.
536

Por mucho que el pie quisiera jamás podrá ser igual a la mano; ni
la oreja como el ojo. Pero todos somos necesarios porque juntos
formamos el Cuerpo de Cristo.

Si alguno quiere tener una buena idea o imagen de sí mismo, de


su valía como persona, como cristiano, ¿Qué puede hacer?
¿Cómo podemos evaluarnos adecuadamente sin pecar?

El que quiera evaluarse debe compararse con Jesucristo, el Hijo


de Dios. Ahí se acaban todas las tonterías y la buena imagen que
tenemos de nosotros mismos.

Mas adelante, en el verso 18 Pablo les dirá: porque no es


aprobado el que se alaba a sí mismo, sino aquel a quien Dios
alaba.

Esta es la aprobación que todo siervo de Dios debe buscar. ¿cuál


es la aprobación que tú buscas?

En las iglesias de Galacia tuvo el apóstol que enfrentar el mismo


problema.

Gálatas 1.10, Pablo les dirá a los creyentes: Pues, ¿busco ahora el
favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los
hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería
siervo de Cristo.

Una vez mas, ¿Cuál es el favor que buscas el de los hombres o el


de Dios? Pablo estaba interesado en la aprobación de Dios.

Santiago 4.4 ¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del
mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera
ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios.

Como está escrito: Digo, pues, por la gracia que me es dada, a


cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto
concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con
cordura, conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada
537

uno. 4Porque de la manera que en un cuerpo tenemos muchos


miembros, pero no todos los miembros tienen la misma función,
5
así nosotros, siendo muchos, somos un cuerpo en Cristo, y todos
miembros los unos de los otros. Romanos 12.3-5.

Volviendo al pasaje de 2Corintios 10.12, la palabra algunos,


demuestra que los intrusos en Corinto eran pocos, pero su
presencia y malas artes, distorsionaba el desarrollo espiritual de la
congregación. Como suele decirse, una sola manzana podrida
puede echar a perder toda la cesta. ¿Se imaginan qué no hará un
grupo de manzanas podridas?

Esta gente llega a fracasar porque confían en sí mismos, y en su


propio entendimiento, pero carecen de sabiduría Divina para el
servicio a los demás. Estos sólo quieren servirse de los demás,
muy diferentes a los verdaderos siervos de Dios.

Nunca cambian, ni maduran, porque al compararse a sí mismos


consigo mismos, no sienten la necesidad de mejorar, ya que se
consideran los mejores. Así pueden pasar la vida entera.

¿Cuál es el veredicto del apóstol? Que no son juiciosos.

¿De cuáles creen que existen hoy más, de los que se parecen a
Pablo o de los que se parecen a sus acusadores? Sin duda de los
que se sirven de los demás. ¿Por qué abunda más lo malo que lo
bueno? Porque estamos en los últimos tiempos.

Debemos meditar en estas cosas, ¿Qué tipo de creyente soy yo?


¿Hay áreas que puedo mejorar? ¿Con quién me estoy
comparando, conmigo mismo o con Cristo? ¿Con quién te
comparas tú? O ¿Crees que ya eres perfecto?

13-14. En la primera frase es innegable la comparativa que el


apóstol hace con sus adversarios. ¿Qué quiere decir la palabra
desmedidamente? Quiere decir más allá de lo razonable.
538

Ellos lo hicieron, ¿lo haría Pablo? No, él no lo haría. De ese modo


el apóstol está dejando al descubierto la actitud anticristiana de
sus adversarios. Estaban guiándose por una norma que no era
correcta. Pablo no se gloría en sí mismo, sino ¿en quién? En el
Señor.

La versión Traducción en lenguaje Actual dice: Tampoco voy a


presumir de lo que no he hecho. Si de algo voy a sentirme
orgulloso, es del trabajo que Dios me mandó hacer. ¡Y ustedes
son parte de ese trabajo! 14 No voy a presumir más de lo que
debo, pero fui de los primeros en llegar a Corinto y en
anunciarles la buena noticia de Jesucristo.

La versión Nueva Traducción Viviente dice: Nosotros no nos


jactaremos de cosas hechas fuera de nuestro campo de autoridad.
Nos jactaremos sólo de lo que haya sucedido dentro de los límites
del trabajo que Dios nos ha dado, los cuales incluyen nuestro
trabajo con ustedes. 14 No traspasamos esos límites cuando
afirmamos tener autoridad sobre ustedes, como si nunca
hubiéramos ido a visitarlos. Pues fuimos los primeros en viajar
hasta Corinto con la Buena Noticia de Cristo.

Por tanto, Pablo y sus colaboradores obraron dentro de los límites


del trabajo que le había sido ordenado por Dios mismo. Pero ellos
procuraban gloriarse del trabajo que Pablo había hecho con los
corintios.

Gálatas 2.7-9 Antes por el contrario, como vieron que me había


sido encomendado el evangelio de la incircuncisión, como a
Pedro el de la circuncisión 8(pues el que actuó en Pedro para el
apostolado de la circuncisión, actuó también en mí para con los
gentiles), 9y reconociendo la gracia que me había sido dada,
Jacobo, Cefas y Juan, que eran considerados como columnas, nos
dieron a mí y a Bernabé la diestra en señal de compañerismo,
para que nosotros fuésemos a los gentiles, y ellos a la
circuncisión.
539

Aquí podemos ver que Pablo apela al respaldo apostólico de


Jacobo, Cefas y Juan, las columnas de la Iglesia en Jerusalén,
como testigos de que Dios le había enviado a predicar a los
gentiles. Es decir, a ellos, a los corintios.

Dios le dio al apóstol un trabajo dentro de un área determinada,


por ello Pablo puede gloriarse acerca de la iglesia de Corinto, tal
como lo hace en otros lugares, porque no se salió del trabajo que
Dios le había encomendado.

¿Eres tú fiel al trabajo que Dios te ha encomendado? Estás siendo


fie a tu llamado? ¿Eres de edificación para la Iglesia, o estás
pudriendo los frutos? Debemos meditar en estas cosas.

Como también escribió a los Romanos 15.15-20 Mas os he


escrito, hermanos, en parte con atrevimiento, como para haceros
recordar, por la gracia que de Dios me es dada 16para ser
ministro de Jesucristo a los gentiles, ministrando el evangelio de
Dios, para que los gentiles le sean ofrenda agradable, santificada
por el Espíritu Santo. 17Tengo, pues, de qué gloriarme en Cristo
Jesús en lo que a Dios se refiere. 18Porque no osaría hablar sino
de lo que Cristo ha hecho por medio de mí para la obediencia de
los gentiles, con la palabra y con las obras, 19con potencia de
señales y prodigios, en el poder del Espíritu de Dios; de manera
que desde Jerusalén, y por los alrededores hasta Ilírico, todo lo
he llenado del evangelio de Cristo. 20Y de esta manera me esforcé
a predicar el evangelio, no donde Cristo ya hubiese sido
nombrado, para no edificar sobre fundamento ajeno.

En pasajes como este Pablo nos dice que no está dispuesto a


gloriarse de lo que no le corresponde, pero si alguien tiene de qué
gloriarse, él también. Pero en trabajos ajenos, como aquellos
judíos que pretendían gloriarse en el trabajo de Pablo.

La pregunta es inevitable, ¿nosotros lo hacemos así? ¿somos


fieles y todo lo hemos llenado del evangelio de Cristo? ¿estás
cumpliendo con el mandato de testificar de tu fe en Cristo?
540

Sigamos el ejemplo de Pablo.

15-18. En esta perícopa o porción bíblica vemos que el apóstol va


a plantear dos argumentos irrefutables, que veremos a
continuación.

Pablo continúa redarguyendo a sus acusadores. ¿Saben qué es


redargüir? Es decir, devolviéndoles la acusación que habían
lanzado contra él. Eso es redargüir.

¿Han oído o leído esa palabra antes? El apóstol Pablo la usa en


2Timoteo 3.16-17: Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil
para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en
justicia, 17a fin de que el hombre de Dios sea perfecto,
enteramente preparado para toda buena obra.

Ya saben qué es redargüir.

El apóstol usa de nuevo la misma frase que en el verso 13. ¿Por


qué repite el apóstol una misma frase en un mismo argumento? Se
trata del estilo literario hebreo de aquella época. Mucha gente
cree que se trata de meras repeticiones, pero en realidad los
hebreos usaban ese método cuando querían dejar algo bien claro.

¿Pueden poner un ejemplo? Cuando Jesús decía en Juan 5.24-25:


De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que
me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha
pasado de muerte a vida. 25De cierto, de cierto os digo: Viene la
hora, y ahora es, cuando los muertos oirán la voz del Hijo de
Dios; y los que la oyeren vivirán.

Hay incluso quienes piensan Que Dios creó civilizaciones, porque


en Génesis 1.27 dice: Y creó Dios al hombre a su imagen, a
imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.

Más tarde en Génesis 2.18-19 dice: Y dijo Jehová Dios: No es


bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él.
541

19
Jehová Dios formó, pues, de la tierra toda bestia del campo, y
toda ave de los cielos, y las trajo a Adán para que viese cómo las
había de llamar; y todo lo que Adán llamó a los animales
vivientes, ese es su nombre.

¿Se dan cuenta de la importancia que tiene el conocer bien las


Escrituras e incluso la cultura hebrea, para no caer en malas
interpretaciones de la Palabra de Dios?

¿Está bien gloriarse en demasía? Desde luego que no. ¿Se


gloriaba Pablo desmedidamente en trabajos ajenos? Por supuesto
que no, sino que sus opositores eran quienes pretendían gloriarse
en el trabajo del apóstol y sus colaboradores.

Así, pues, una de las credenciales del siervo de Dios es el trabajo


realizado. No el trabajo de los demás, sino el propio. Aquel que se
promociona a sí mismo en base al trabajo ajeno no sirve a Dios,
sino que se sirve a sí mismo.

Así que sólo podemos gloriarnos del trabajo realizado por


nosotros. Y aun así con medida.

Es agradable la sensación del trabajo realizado, pero no


olvidemos las palabras del Señor en Lucas 17.10 Así también
vosotros, cuando hayáis hecho todo lo que os ha sido ordenado,
decid: Siervos inútiles somos, pues lo que debíamos hacer,
hicimos.

Sólo cuando hubiéramos hecho todo cuanto se nos demandó, de


lo contrario, si tan siquiera llegaríamos a siervos inútiles.

Pues, como dice el versículo 14 él fue el primero en llegar a los


corintios con el evangelio de Cristo.

Pablo esperaba que una vez que la fe de los corintios creciera,


también creciera el aprecio por el apóstol y sus colaboradores. Por
el trabajo desinteresado realizado, y que eso les permitiera seguir
ampliando el radio de acción de las misiones.
542

De ese modo podrían seguir avanzando en la extensión de la


buena nueva a quienes no la habían recibido aún. Pablo no está
interesado en entrar en campos ajenos, por eso dice que nadie les
puede acusar de eso.

En definitiva quería que la fe los corintios fuera tan sólida que


ellos mismos colaborasen en las misiones con Pablo. La torpeza
de los corintios estaba frenando el avance de la Palabra de Dios.

Si bien es cierto que hay algunos que animan a sus seguidores a


sacar gente de otros grupos para adherirlos al suyo, lo cual está
mal; no es menos cierto que hay algunos falsos pastores que se
apropian de las almas y enseñan que cuando un creyente se
convierte en un lugar ahí debe permanecer siempre, aun cuando
estén enseñando falsa doctrina.

Quiero dejar claro que jamás trataré de sacar gente de otras


congregaciones, pero si alguno viene a nosotros pidiendo ayuda
porque han descubierto que en el lugar en el que estaban les
predican herejías, no los echaré fuera. Sino que, como dijo el
mismo Señor Jesús: Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; y
al que a mí viene, no le echo fuera. Juan 6.37.

Actualmente se ha predicado el evangelio del reino en todo el


mundo. Por todos lados abundan creyentes e iglesias, pero no
todos permanecen en la verdad revelada en la Palabra de Dios.
Por tanto, si un creyente de esta congregación quiere marcharse a
otra, tiene la puerta abierta y se marchará con nuestra bendición.

Como está escrito en 1Corintios 3.10: Conforme a la gracia de


Dios que me ha sido dada, yo como perito arquitecto puse el
fundamento, y otro edifica encima; pero cada uno mire cómo
sobreedifica.

Jamás pondré trabas a nadie que pretenda marcharse por la razón


que sea. No es legal hacerlo, al menos en este país. Pero si alguien
543

es maltratado en su congregación siempre tendrá las puertas


abiertas en este ministerio.

Lo que no es correcto es apropiarse del mérito de otro, que es


justamente lo que estaban haciendo aquellos judíos en Corinto.

16. Pero él estaba listo para seguir predicando el evangelio mas


allá de los propios corintios. Él no se conformaba con el trabajo
realizado, sino que seguía trabajando por la extensión del
evangelio.

No sólo pensaba en los corintios, sino en los que estaban más allá
de ellos. Pablo pensaba en Roma, el corazón del imperio, e
incluso más allá aun, pues pensó en llegar incluso a España.
Como está escrito en Romanos 15.22-26: Por esta causa me he
visto impedido muchas veces de ir a vosotros. 23Pero ahora, no
teniendo más campo en estas regiones, y deseando desde hace
muchos años ir a vosotros, 24cuando vaya a España, iré a
vosotros; porque espero veros al pasar, y ser encaminado allá
por vosotros, una vez que haya gozado con vosotros. 25Mas ahora
voy a Jerusalén para ministrar a los santos. 26Porque Macedonia
y Acaya tuvieron a bien hacer una ofrenda para los pobres que
hay entre los santos que están en Jerusalén.

De este modo se desarrollaba la obra misionera en aquel tiempo.


Pablo y Bernabé, habían sido enviados por la iglesia de Antioquía
para extender el evangelio por el mundo, Hechos 13.2.

Ellos fueron fieles y llevaron el evangelio a judíos y gentiles, y


muchos de los que escucharon la Palabra, creyeron, fueron
bautizados y formaron congregaciones, entre las que se hallaba la
iglesia de Corinto.

Cuando los corintios crecieran en su fe, debían colaborar


enviando a los hermanos hacia su siguiente destino, más allá de
Corinto.
544

Pablo fue un hombre de visión y fiel a su llamado extendió el


evangelio allá por donde fue. Para poder seguir adelante con su
tarea, necesitaba que los creyentes colaborasen apoyando sus
esfuerzos misioneros.

17. En este pasaje en el que está citando de manera libre al profeta


Jeremías 9.23-24, poniendo de relieve la regla de la gloria
humana. Es habitual en Pablo que citara las Escrituras del AT
para respaldar sus palabras, cumpliendo así el mandato que
tenemos en 1Pedro 4.11.

Ahora volviendo sobre sus pasos, recuerda lo que ya les había


dicho en 1Corintios 1.31 …como está escrito: El que se gloría,
gloríese en el Señor.

Con estas citas del AT Pablo está poniendo a Jesús, Su Señor, al


mismo nivel de Jehová. Pues mientras Jeremías se refiere a
Jehová, él usa esta misma cita hablando de Jesús.

Hay dos posturas heréticas en cuanto a esto:


1.- No reconoce la Divinidad de Cristo.
2.- No reconoce las diferencias entre Cristo y Jehová, como
personas distintas.

Ambas posturas son heréticas, pues la Palabra de Dios deja bien


claro que Jesús es Dios, pero que Jesús y el Padre son dos
personas distintas. Quienes afirman que la Biblia no dice que
Jehová sea una persona, no tiene ni la menor idea de lo que
significa ser persona.

Tiene que ver con las características que nos hace personas, la
capacidad de pensar, sentir, entender, discernir, decidir, ser
responsable, etc. Es evidente que Dios es persona, no es una cosa,
tiene características personales.

Pero la persona de Dios Padre es distinta a la de Dios Hijo, y la


del Espíritu Santo. Por más que esto cueste entenderlo a mentes
finitas, tenemos en la Palabra de Dios multitud de pasajes que lo
545

dejan bien claro. Para aquellos que quieran profundizar en el


tema, en nuestra web tienen varios vídeos que tratan sobre la
Divinidad.

Volviendo al texto de hoy, lo que debe hacer todo verdadero


siervo de Dios es darle la gloria al Único que la merece, al Señor.
Y eso es lo que hace Pablo. Todo cuanto hace lo hace para honrar
a Dios; no como sus atacantes que pretendían gloriarse a sí
mismos, Pablo glorifica a Cristo.

Como también escribió en Gálatas 6.14: Pero lejos esté de mí


gloriarme, sino en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por quien
el mundo me es crucificado a mí, y yo al mundo.

Jesús habló de eso cuando en Lucas 18.9-14 dijo: A unos que


confiaban en sí mismos como justos, y menospreciaban a los
otros, dijo también esta parábola: 10Dos hombres subieron al
templo a orar: uno era fariseo, y el otro publicano. 11El fariseo,
puesto en pie, oraba consigo mismo de esta manera: Dios, te doy
gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones,
injustos, adúlteros, ni aun como este publicano; 12ayuno dos veces
a la semana, doy diezmos de todo lo que gano. 13Mas el
publicano, estando lejos, no quería ni aun alzar los ojos al cielo,
sino que se golpeaba el pecho, diciendo: Dios, sé propicio a mí,
pecador. 14Os digo que éste descendió a su casa justificado antes
que el otro; porque cualquiera que se enaltece, será humillado; y
el que se humilla será enaltecido.

La semana pasada terminábamos el capítulo diez hablando sobre


dos credenciales del verdadero siervo de Dios. La primera que
vimos era que no se gloría en sí mismo sino que debe gloriarse en
el Señor. Citamos el pasaje de Lucas 18.9-14, me gustaría que lo
viésemos para recordar lo que aprendimos.

Esta parábola es tan sencilla en sí misma y su conclusión tan clara


que no precisa de mucha explicación. Aquellos que acusaban al
apóstol ¿No se parecían a este fariseo? Sin duda.
546

El fariseo ¿qué credenciales presentaba delante de Dios para


justificarse?
Yo no robo,
Yo no hago mal a nadie,
No soy un adúltero,
No soy como los demás, soy mejor,
Cumplo con la religión,
Ayuno,
Doy diezmos,

¿Les suena este tipo de actitudes? ¿Justificaría Jesús a alguien así,


por estas cosas? Desde luego que no. ¿Por qué? Porque en el
fondo no son como creen que son. En realidad son mentirosos,
falsos, y son peor que los demás porque roban, son injustos,
adúlteros, e hipócritas.

¿Se justificaba el publicano? No. Pablo, como el publicano, no


intenta justificarse en cuanto a sus buenas obras, reconoce sus
pecados y acude confiado sólo en la misericordia de Dios.
Mantiene una actitud mucho más humilde y sensata.

¿A cuál de los dos justificó Cristo al fariseo que se alababa así


mismo, por sus ayunos y diezmos, o al publicano? Sin duda
justificó al publicano, y condenó la hipocresía del fariseo.

Como está escrito: porque no es aprobado el que se alaba a sí


mismo, sino aquel a quien Dios alaba. 2Corintios 10.18.

Por tanto, sólo el ministerio o la obra misionera que glorifique a


Dios permanecerá en el tiempo. Un ministerio mediante el cual
Dios sea honrado y por medio del cual Dios sea dado a conocer.

La autorecomendación no tiene ningún valor. ¿Cuál es la obra


misionera digna de ser respaldada, aquella que alaba a Dios o la
que se alaba a sí misma? Lógicamente la que alaba a Dios. Esta es
la primera credencial del verdadero ministro.
547

La segunda credencial del verdadero siervo de Dios es el respaldo


de Dios sobre su vida y ministerio.

Puede que los corintios alabaran a quien no correspondía. Pero,


aquellos a los que los corintios elogiaban ¿Tenían la aprobación
de Dios? No. ¿Qué aprobación buscaba Pablo? Para Pablo lo
importante era la aprobación de Dios, más incluso que la
aprobación de la propia iglesia, es decir, de los propios corintios.

Muchos pastores por ser fieles a la congregación acaban siendo


infieles a Dios. Por agradar a los hombres, dejan de agradar a
Dios.

Por cierto, ¿Sabían que hay ministros y ministerios que incluso


contratan agencias publicitarias para su propia promoción? En
internet pueden ver cómo algunos ministerios se promocionan,
como si se tratasen de clubes sociales.

“Contamos con parking gratuito, campos de golf, colegios etc.”

Puede que lleguen a mucha gente y consigan el aprecio de


muchos. Pero la verdadera medida de un ministerio es el respaldo
de Dios.

Ahora bien, ¿Cómo se mide el respaldo de Dios?


¿Por la cantidad de las finanzas que manejan?
¿Por el número de propiedades que poseen?
¿Por el número de personas que siguen ese “ministerio”?
¿Cuál es la medida? ¿En qué consiste?
¿Cómo podemos estar seguros de que un ministerio tiene o tendrá
el respaldo de Dios?

Vivimos en un tiempo en que parece que cuanto más grande


mejor. Conozco a siervos de Dios que han caído en el engaño de
los números. Han caído y llegado a practicar la mentira, en el afán
de aparentar mayor éxito en su ministerio.
548

Conozco a un par de pastores, que siempre andan inflando los


números, y no son los únicos. Son muchos los que dan más
importancia a los número que al estado espiritual de los miembros
de su congregación. ¿Es correcto eso? ¿Qué creen? De ningún
modo.

Hay ministros que trabajan en las juntas directivas de ciertas


denominaciones que en su afán de “crecimiento” están a la caza y
captura de todo grupo que crezca, para adherirlo a la
denominación.

De ese modo, denominaciones, que en otro tiempo fueron de sana


doctrina, se están convirtiendo en grupos religiosos que nada
tienen que ver con el evangelio de Cristo, pues se han apartado de
la verdad en pos de un crecimiento numérico. Crecer a cualquier
precio.

Esto es algo de lo que debemos cuidarnos todos. Porque es fácil


caer en ese pecado de creer que el número nos avala.

El mundo mide el éxito por los resultados. Pero, ¿Hay otro modo
de hacerlo? Sí. Porque el reino de Dios no es como el mundo. El
reino de Dios es una paradoja.

El respaldo de Dios se mide por la fidelidad a Su Palabra y la


perseverancia en hacer aquello que Dios encargó,
independientemente de los resultados. Esto puede que muchos no
lo entiendan, pero es así.

Todos podemos comprobar la enorme labor que realizaron el


apóstol Pablo y sus colaboradores en la extensión del evangelio,
aún así, ellos no se jactaron de sus logros, todo cuanto hicieron, lo
hicieron por amor a Dios y a los perdidos. Actuaron siempre en
dependencia y el poder de Dios, por ese motivo le dieron siempre
la gloria a Él.

Nosotros debemos hacer lo mismo. Debemos gozarnos de que


cada día sean más los que ven nuestros vídeos de sermones y
549

estudio, no porque interpretemos que eso supone que Dios nos


está respaldando. Porque entonces nos estaríamos gloriando a
nosotros mismos y robándole la gloria a Dios.

Debemos alegrarnos porque más gentes están despertando a la


necesidad de estudiar y conocer en profundidad la Palabra de
Dios, para comprobar si lo que creen es verdad. Pero siempre
dando la gloria a Dios.

11.1-6. Pablo les pide un poco de paciencia para poder expresar lo


que siente en su corazón por causa del celo por sus vidas. Celo
que tiene de Dios. No por su propia reputación, sino por la de
Cristo, con quien los unió mediante la predicación del evangelio.

2. El celo de Dios nada tiene que ver con los celos de los
hombres. Es muy importante aclarar esta cuestión. Porque algunas
personas mal interpretan los celos humanos creyendo que está
relacionado con el amor, cuando no es así.

¿Han oído, si me cela es porque me quiere? ¿Creen que es


verdad? ¿Por qué? Es una absoluta mentira que no deben creer.
¿Saben con qué están relacionados los celos humanos? Con la
desconfianza.

Si te celan es porque desconfían de ti. No porque te amen, sino


porque se aman a sí mismos; son egoístas y no desean tu felicidad
sino que buscan la suya propia.

En la Biblia, los celos son una muestra de carnalidad y llevan a la


contienda, las disensiones, 1Corintios 3.3 porque aún sois
carnales; pues habiendo entre vosotros celos, contiendas y
disensiones, ¿no sois carnales, y andáis como hombres?

De hecho está en la lista de obras de la carne: Gálatas 5.19-21 Y


manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio,
fornicación, inmundicia, lascivia, 20idolatría, hechicerías,
enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones,
herejías, 21envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas
550

semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os


lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán
el reino de Dios.

Uno de los pasajes más conocidos respecto de los celos es:


Cantares 8.6 Ponme como un sello sobre tu corazón, como una
marca sobre tu brazo; Porque fuerte es como la muerte el amor;
Duros como el Seol los celos; Sus brasas, brasas de fuego, fuerte
llama.

Aquí Salomón le dice a la Sunamita que se ponga una señal de


que le pertenece a él. Porque sabe lo duros que son los celos y no
quiere sentir su fuerza.

Los celos humanos llevan al furor y la venganza: Proverbios 6.34


Porque los celos son el furor del hombre, Y no perdonará en el
día de la venganza.

Llevan a la blasfemia: Hechos 13.44-45 El siguiente día de


reposo se juntó casi toda la ciudad para oír la palabra de Dios.
45
Pero viendo los judíos la muchedumbre, se llenaron de celos, y
rebatían lo que Pablo decía, contradiciendo y blasfemando.

Santiago 3.14-16 dice: Pero si tenéis celos amargos y contención


en vuestro corazón, no os jactéis, ni mintáis contra la verdad;
15
porque esta sabiduría no es la que desciende de lo alto, sino
terrenal, animal, diabólica. 16Porque donde hay celos y
contención, allí hay perturbación y toda obra perversa.

No nos engañemos, ni permitamos que nadie nos engañe. Los


celos no son buenos. Claro está que nos referimos a los celos
humanos. No al celo de Dios.

El celo de Dios es totalmente distinto, nada tiene que ver con el


egoísmo sino justamente con el amor incondicional. Busca el bien
del otro, por eso Pablo dice: os celo con celo de Dios.
551

Él no busca el amor de los corintios ara sí mismo, sino ¿para


quién? Para Cristo. Lo que Pablo quiere es que sean la novia
perfecta de Cristo, lista para las bodas del Cordero. Aquella novia
sin mancha ni arrugas ni cosa semejante, sino pura y sin manchas.

¿Qué significa esto? El apóstol expresa temor de que todo su


trabajo se pierda por causa de aquellos que sólo buscan gloriarse a
sí mismos y no a Cristo.

Pablo habló de esto a los pastores cuando se despidió de ellos en


Mileto, Hechos 20.30 Y de vosotros mismos se levantarán
hombres que hablen cosas perversas para arrastrar tras sí a los
discípulos.

Desgraciadamente hay muchos que arrastran a los discípulos de


Cristo tras de sí mismos, y no del Señor Jesús, ¿Qué dice la
Escritura en Hechos 4.12? Y en ningún otro hay salvación;
porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en
que podamos ser salvos.

Oyendo hablar a algunos predicadores de hoy, pareciera que sólo


ellos son quiénes te pueden ayudar, bendecir e incluso salvar.
Pero, no es así, como está escrito: Porque hay un solo Dios, y un
solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre.
1Timoteo 2.5.

Las semana pasada nos quedamos en el 11.3 hablando de un


cierto temor que Pablo tenía.

3. Pablo teme, ¿qué es lo que teme el apóstol? ¿Perder su


prestigio? ¿Perder su gloria? ¿Perder seguidores de su doctrina?
Nada de esto. Lo que teme es que los corintios sean tan torpes que
se dejen extraviar de la sincera fidelidad a Cristo.

La Traducción en Lenguaje Actual dice: Pero tengo miedo de que


les pase lo mismo que a Eva, que fue engañada por la astuta
serpiente. También ustedes pueden ser engañados y dejar de
pensar con sinceridad y pureza acerca de Cristo.
552

Es fácil desviarse de la verdad. Es relativamente fácil salirse del


camino, extraviarse y perderse. Pablo estaba preocupado, no por
sí mismo, sino por los corintios.

Hay quienes están interesados en que los cristianos no


perseveremos en sincera fidelidad a Cristo. El diablo usa a
muchos que, vestidos con pieles de ovejas, se hacen pasar por
verdaderos siervos de Dios, sin serlo.

Es una enorme responsabilidad la que tenemos los pastores de


guardar y proteger al rebaño. Pablo tenía y manifiesta corazón de
pastor, de ahí su celo por lo corintios.

Hoy hay muchos que afirman servir a Dios, pero cuya única
preocupación es sus propios intereses, de fama, economía, etc.
Pablo no era así, ni nosotros tampoco debemos serlo.

¿Qué significa eso? Que debemos permanecer en sincera fidelidad


a Cristo. ¿Se puede ser fiel sin ser sincero? Sí, por hipocresía,
buscando prestigio humano, fama o poder.

Pablo habla de esto cuando escribe Filipenses 1.15-18 Algunos, a


la verdad, predican a Cristo por envidia y contienda; pero otros
de buena voluntad. 16Los unos anuncian a Cristo por contención,
no sinceramente, pensando añadir aflicción a mis prisiones;
17
pero los otros por amor, sabiendo que estoy puesto para la
defensa del evangelio. 18¿Qué, pues? Que no obstante, de todas
maneras, o por pretexto o por verdad, Cristo es anunciado; y en
esto me gozo, y me gozaré aún.

Todos podemos ser tentados a apartarnos de la verdad. Ninguno


estamos exentos de ello. Debemos estar alertas, pendientes a las
tentaciones del enemigo. No sólo los creyentes pueden desviarse
de la verdad, también los siervos. Judas era apóstol y se desvió. Si
a él le pasó, también a nosotros puede ocurrirnos.
553

¿Qué debes hacer si ves a tu hermano que se está desviando de la


verdad?

Santiago 5.19-20 Hermanos, si alguno de entre vosotros se ha


extraviado de la verdad, y alguno le hace volver, 20sepa que el
que haga volver al pecador del error de su camino, salvará de
muerte un alma, y cubrirá multitud de pecados.

¿Qué debes hacer si tú mismo te das cuenta de que te estás


desviando?

Isaías 44.22 Yo deshice como una nube tus rebeliones, y como


niebla tus pecados; vuélvete a mí, porque yo te redimí.

1Pedro 5.8 Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el


diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien
devorar.

¿Qué ejemplo puso el apóstol? El de Eva cuando se dejó engañar


por la astucia de la serpiente.

4. Les acusa de soportar las tonterías y mentiras de cualquier


persona, aun si les predican un falso evangelio, pero no soportan
la sana doctrina.

Esto es algo que profetizó que se convertiría en una actitud


generalizada en la iglesia de los últimos tiempos. 2Timoteo 4.1-5
Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que juzgará
a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su reino, 2que
prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo;
redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina.
3
Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino
que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme
a sus propias concupiscencias, 4y apartarán de la verdad el oído
y se volverán a las fábulas. 5Pero tú sé sobrio en todo, soporta las
aflicciones, haz obra de evangelista, cumple tu ministerio.
554

¿Está ocurriendo esto en nuestros días? Sin la menor duda. Hoy la


gente no quiere oír la verdad, sino que buscan que le digan lo que
quieren oír. Prefieren las fábulas a la verdad.

Pablo le dice a Timoteo: Desecha las fábulas profanas y de


viejas. Ejercítate para la piedad. 1Timoteo 4.7.

A los gálatas les advertirá: Mas si aun nosotros, o un ángel del


cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos
anunciado, sea anatema. 9Como antes hemos dicho, también
ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que
habéis recibido, sea anatema. 10Pues, ¿busco ahora el favor de
los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres?
Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de
Cristo. Gálatas 1.8-10

Algunas personas acostumbran a abrir las puertas de su casa y de


su corazón a cualquiera que aparezca hablando de Dios. Muchos
de ellos me han preguntado sobre ¿qué tiene de malo hacer eso?
¿Qué tiene de malo recibir a cualquiera que hable de Dios?

Siempre les respondo con 2Juan 9-11 Mirad por vosotros mismos,
para que no perdáis el fruto de vuestro trabajo, sino que recibáis
galardón completo. 9Cualquiera que se extravía, y no persevera
en la doctrina de Cristo, no tiene a Dios; el que persevera en la
doctrina de Cristo, ése sí tiene al Padre y al Hijo. 10Si alguno
viene a vosotros, y no trae esta doctrina, no lo recibáis en casa,
ni le digáis: ¡Bienvenido! 11Porque el que le dice: ¡Bienvenido!
participa en sus malas obras.

Porque no todo el que habla de Dios dice la verdad.

El mismo Señor Jesús había antes anunciado: Y muchos falsos


profetas se levantarán, y engañarán a muchos; 12y por haberse
multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará. 13Mas el
que persevere hasta el fin, éste será salvo. Mateo 24.11-13.
555

Así que, lo que el apóstol está enseñando está perfectamente


fundado en las enseñanzas de Jesús. Esto es algo que todos
debemos confirmar.

¿Estás seguro de que lo que crees está bien fundamentado en las


doctrinas del Hijo de Dios? ¿Cómo puedes asegurarte? Por medio
de las Escrituras. Interpretándolas en su propio contexto histórico
y gramatical.

El Pr. Andrés se quedó en el verso 4 ¿Qué es lo que el apóstol


estaba diciendo en ese versículo? Pablo recriminaba a los
corintios porque estaban dispuesto a recibir a cualquiera que le
hablase de Dios, aunque lo que le dijera no tuviera nada que ver
con el evangelio que él les había predicado.

¿Hay hoy en día personas que presentan evangelios distintos al


que predicó Jesús? Sí, los hay, y mucho. ¿Qué aprendimos la
semana pasada sobre este tema? ¿Qué debemos hacer cuando
alguien viene a nosotros con un evangelio distinto? No recibirlo
en casa.

¿Recuerdan algún pasaje que nos enseñe al respecto de eso? Sí los


hay, por ejemplo 1Juan 4.1 Amados, no creáis a todo espíritu,
sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos
profetas han salido por el mundo.

5. ¿A qué grandes apóstoles se refiere Pablo? Hay quienes creen


que se refiere a los doce apóstoles, pero el contexto inmediato lo
desmiente, por cuanto el verso anterior habla de alguien que
predica a un Jesús distinto.

Por otro lado, Pedro, Santiago y Juan, pilares de la Iglesia,


llegaron a un acuerdo con Pablo en cuanto a la división del
trabajo entre Pedro y Pablo, Gálatas 2.7-9.

A parte del problema que surgió entre ambos en Antioquía, y que


se relata en Gálatas 2.11-14, no se lee de ningún otro problema
entre ellos. Por consiguiente no se trata de que Pablo estuviese
556

hablando de los doce, sino de aquellos que se halagaban a sí


mismos como grandes apóstoles, sin serlo.

En realidad, la frase de Pablo es sarcástica mediante la cual


dejaba de manifiesto la absurda vanagloria de sus acusadores, a
quienes desenmascara en el verso 13.

Ante el evidente menosprecio que aquellos judíos hacían de su


persona y ministerio, Pablo deja claro que no considera ser
inferior a ellos, aunque se ufanaban o presumían de ser súper
apóstoles. Él no se siente intimidado ni acomplejado en absoluto.

Hay que aclarar que no se trataba de apóstoles auténticos, sino de


falsos apóstoles. Ya los había por aquel entonces. Apocalipsis 2.2
Yo conozco tus obras, y tu arduo trabajo y paciencia; y que no
puedes soportar a los malos, y has probado a los que se dicen ser
apóstoles, y no lo son, y los has hallado mentirosos;

¿Los hay hoy? Desgraciadamente también abundan.

Uno de los problemas graves que están afectando al ministerio


hoy en día es la competencia entre ministros. Se comparan unos
con otros y compiten entre sí para ver quién consigue más títulos,
más adeptos, más recursos económicos o más propiedades. Esa
competencia ha dividido la Iglesia y ha ocasionado graves daños
al prestigio de la obra de Dios.

Es evidente ante la enseñanza de la Palabra de Dios que no todos


somos iguales. Que Dios no nos ha creado en serie, sino con
diferencias bien notorias, aun entre gemelos idénticos, hay cosas
que les diferencia.

Dios ama la unidad, pero no la uniformidad. Él ha hecho el


cuerpo poniendo cada miembro en particular como Él quiso. Y a
cada miembro le ha dado funciones distintas.

Todos tenemos dos manos, pero no funcionan igual. Siempre hay


una con la que podemos hacer más cosas que con la otra. Del
557

mismo modo, dos pastores no tienen por qué ser iguales ni hacer
las cosas del mismo modo. Por tanto, competir no es lo
aconsejable.

Si pretendes ser como tu pastor, puedes estar negándote el


privilegio de ser especial, incluso mejor que él. Tú no debes ser
él, tú debes ser tú mismo.

Pablo afirma que no se sentía inferior, ¿Por qué expresa este


pensamiento? Porque habían puesto en duda su valía. A
continuación, va a exponer racionalmente las razones de su
postura.

6. Puede que Pablo no fuera tan sofisticado, pero no era un


ignorante, ni un torpe expositor por causa de falta de
conocimiento. Ya hemos hablado de esto con anterioridad. Pablo
era un buen orador, y además, temeroso de Dios y conocedor de
las Escrituras, tanto o más, que cualquiera de ellos.

¿Es importante el conocimiento en un siervo de Dios? Sin le


menor duda. ¿Por qué? Porque sin conocimiento el pueblo se
pierde.

Mucha gente me escribe afirmando que quiere servir a Dios, pero


cuando les digo que deben prepararse, parece que pierden todas
las ganas de servir. Porque dejan de escribir.

¿No basta con el deseo de servir a Dios? ¿No ayudará el Espíritu


Santo a quienes deseen servirle, sin necesidad de que tenga que
prepararse? No. De ningún modo.

Una cosa es que no tenga oportunidad de prepararse y otra es que


sea perezoso o negligente. El Espíritu Santo te ayuda cuando tu
llegas al límite de tus posibilidades. Pero Él no hará un milagro
para tapar tu pereza o desgana.
558

Cuando el apóstol dice: Os lo hemos demostrado. ¿A quién o


quiénes se refiere? A él y sus colaboradores. ¿Qué habían
demostrado? Ser gente preparada en el conocimiento de Dios.

¿Tienes tú conocimiento de Dios? ¿Puedes afirmar que no eres


tosco en el conocimiento de la Palabra de Dios? ¿Qué significa
ser tosco en el conocimiento? No conocer suficientemente la
Sagrada Escritura.

¿Puede haber cristianos toscos en el conocimiento? Los hay, y


muchos. Son los que más abundan. Lo raro es encontrar gente que
no sea tosca en el conocimiento de Dios.

¿Cómo podemos evitar ser toscos en el conocimiento de la


verdad? Estudiando la Palabra de Dios. Algunos quisieran poder
contar en sus congregaciones con la oportunidad de conocer en
profundidad las Sagradas Escrituras, pero no todos tienen esa
oportunidad.

En esta congregación damos a todos la oportunidad de aprender.


¿La aprovechan todos? No. ¿Creen que tiene importancia el
conocer las Escrituras? Sin duda.

¿Cuáles son las desventajas de no conocerla? Te pueden engañar.


De hecho, muchos están engañados y no se enteran jamás, por
ignorancia.

¿Cuáles son las ventajas de conocerla?


Que puedes amar a Dios más profundamente.
Que puedes servir a Dios con inteligencia.
Que puedes ayudar a otros a conocer.

La semana pasada nos quedamos en el verso 6, leámoslo.

Terminamos hablando sobre la importancia de estudiar la Palabra


de Dios. Dijimos que no todos los que quieren estudiar pueden
hacerlo. ¿Por qué? Porque no en todos los grupos se enseña la
Sagrada Escritura.
559

¿Por qué creen que sucede eso? Porque hay quienes les dan más
importancia a otras cosas como las experiencias personales, las
emociones, la música, la imagen del grupo, el local, el número de
personas que asiste, las filosofías de autoayudas, los falsos
evangelios de prosperidad, súper fe y metafísica, etc.

Esta mañana respondí a una postal en Facebook que decía: Un


corazón lleno de amor puede ayudar a alguien mucho más que
una mente llena de conocimiento.

Mi respuesta fue, y cito textualmente: Pero si el corazón lleno de


amor va acompañado de una mente llena de conocimiento es
mucho mejor que sólo un corazón lleno de amor.
CUIDADO: Hay una falsa doctrina que se está extendiendo cada
vez más. Se trata de la falsa creencia de que el conocimiento no
es necesario, lo cual es MENTIRA.
Por falta de conocimiento es que el pueblo perece.
En realidad no hay porqué escoger entre lo uno y lo otro, hay que
buscar el conocimiento como el amor y el amor como el
conocimiento.

Hasta aquí la cita. Cada día se levantan nuevas voces contra el


conocimiento ¿Quién creen que está detrás de ese movimiento y
por qué? Sin duda, el diablo. Porque de ese modo puede
manipular a los creyentes.

Cuando el diablo tentó al Señor Jesús en el desierto, El Señor se


defendió mediante su conocimiento de las Escrituras. Si tú no
cuentas con ese conocimiento, ¿Cómo te defenderás de sus
ataques?

Es por eso que durante siglos, Satanás persiguió el estudio de las


Escrituras en Europa. Porque la ignorancia favorece la
manipulación y la esclavitud.
560

Así que, no tiene tanta importancia si como Pablo somos tosco en


la Palabra, pero no debemos serlo en el conocimiento. ¿Tenía
conocimiento el apóstol de las Sagradas Escrituras? Sin duda.

7-9. La pregunta del apóstol es retórica y no necesita respuesta.


Pero si tuviésemos que responderla ¿Cuál sería la respuesta? La
respuesta sería: No.

No se peca por predicar el evangelio de balde. Al parecer le


acusaban de que, puesto que no recibió sustento de la Iglesia, su
evangelio no era digno.

Para comprender eso debemos tener en cuenta que los mejores


maestros estaban mejor considerados y “pagados” de sus
discípulos. Es decir, recibían más “paga”. El hecho de que Pablo
no recibiera salario de los corintios les hacía creer que su
enseñanza no era merecedora de ello. Es decir, menospreciaban
su evangelio.

Pablo no quiso recibir apoyo de los corintios. Muchos siervos de


Dios lo han hecho a lo largo de todo su ministerio. Que el pastor
no reciba salario es prerrogativa o privilegio del mismo pastor.
Yo le hice durante tres décadas.

Actualmente es más frecuente que para oír el evangelio, o asistir a


cualquier evento relacionado con la Palabra de Dios hay que
pagar. Lo cual nada tiene que ver con el sustento de los siervos de
Dios, sino con el negocio que gira en torno a lo que hacen.

Ahora bien, no obstante, estos pasajes suelen ser


malinterpretados, precisamente porque algunos los usan para
sustentar que el apóstol Pablo jamás cobró por predicar el
evangelio. ¿Es eso lo que dice el texto? De ningún modo.

¿Cobró Pablo de los corintios? No. ¿Cobró de otras


congregaciones? Por supuesto que sí. Aquí mismo lo confiesa.
561

8-9 He despojado a otras iglesias, recibiendo salario para


serviros a vosotros. 9Y cuando estaba entre vosotros y tuve
necesidad, a ninguno fui carga, pues lo que me faltaba, lo
suplieron los hermanos que vinieron de Macedonia, y en todo me
guardé y me guardaré de seros gravoso.

Pasajes como este parece que no estuvieran en la Biblia. La


mayoría lo desconocen, o los ignoran intencionadamente.

De manera sencilla, Pablo reconoce que recibió salario de algunas


congregaciones. Repito. ¿Qué hizo Pablo? Recibió salario. ¿Está
claro? Debe quedar claro.

¿Pecó Pablo por predicar el evangelio de balde a los corintios? De


ningún modo. ¿Pecó por cobrarlo de otras congregaciones?
Tampoco.

Ya les había dejado claro en 1Corintios 9.14 que: Así también


ordenó el Señor a los que anuncian el evangelio, que vivan del
evangelio.

No hay problema en que un pastor reciba salario de la Iglesia,


siempre que lo haga honradamente. Lo que no es correcto es que
ese pastor pretenda cobrar por cada evento que organice en su
congregación, ya sean seminarios, conciertos, conferencias, etc.

Tampoco es correcto se quede con todo el dinero de la iglesia. Ni


es correcto que él se ponga el salario a sí mismo. Ni es correcto
que viva muy por encima de la media de la congregación.

Todas esas malas prácticas han hecho que se vea mal que un
siervo de Dios sea sostenido por la iglesia. Pero no olvidemos que
así lo ordenó ¿Quién? El Señor. Por tanto, es bíblico que los
pastores sean sostenidos por sus congregaciones.

El siervo de Dios puede, porque tiene ese derecho, y a la luz de


1Corintios 9.14, el deber, de ser sustentado por la Iglesia. Los
problemas surgen cuando se abusa de la Iglesia. Cuando los
562

“siervos” son asalariados y sólo piensan en el dinero. Ahí es


cuando se peca.

Dicho esto, no es bíblico afirmar que los pastores no deben recibir


salario. El mismo Señor Jesús mandó que así debía hacerse. La
característica negativa del asalariado del que habla Jesús, no es
que reciba salario. Veamos el texto en Juan 10.11-13:

Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas.


12
Mas el asalariado, y que no es el pastor, de quien no son
propias las ovejas, ve venir al lobo y deja las ovejas y huye, y el
lobo arrebata las ovejas y las dispersa. 13Así que el asalariado
huye, porque es asalariado, y no le importan las ovejas.

¿Qué es lo que condena el Señor Jesús a la luz de este pasaje?


¿Condena Cristo que el pastor reciba salario? No. ¿Qué es lo que
condena? Condena que no le importen las ovejas. Es muy
importante que esto quede claro de una vez por todas.

No vamos a abundar mucho sobre este tema que ya hemos


aclarado en otras ocasiones, pero sí quiero citar Filipenses 4.10-
20, en el que Pablo reconoce haber recibido dinero de los
filipenses, una y otra vez, para sus necesidades.

Pablo mismo lo reconoce aquí en 2Corintios 11.8 He despojado a


otras iglesias, recibiendo salario para serviros a vosotros.

Quiero llamar vuestra atención al plural que Pablo usa en este


pasaje. Porque aunque en sus escritos se habla sobre todo de las
iglesias de Macedonia, y más concretamente la de los filipenses,
con estas palabras aclara que recibió salario de más de una
congregación.

Sostener lo contrario es sostener una falsa doctrina. Debemos


tener cuidado con la ley del péndulo. Todos los extremos son
malos. Porque podemos estar luchando contra la verdad de Dios
mismo.
563

Lo que debemos perseguir no es que un pastor viva de su trabajo


en la Iglesia, algunos trabajamos honradamente, y nos ganamos
sobradamente el salario que recibimos.

Lo que hay que perseguir son los abusos. Aquellos que sólo se
preocupan de sí mismos, y se llevan el dinero sin trabajar.

Cuando los intrusos llegaron a Corinto y se enteraron que Pablo


no recibía salario por su labor espiritual, cuestionaron los motivos
del apóstol y, lograron conseguir así un grupo de seguidores.

Las palabras de Pablo en 1Tesalonicenses 2.5-10 expresan con


claridad su postura: Porque nunca usamos de palabras lisonjeras,
como sabéis, ni encubrimos avaricia; Dios es testigo; 6ni
buscamos gloria de los hombres; ni de vosotros, ni de otros,
aunque podíamos seros carga como apóstoles de Cristo. 7Antes
fuimos tiernos entre vosotros, como la nodriza que cuida con
ternura a sus propios hijos. 8Tan grande es nuestro afecto por
vosotros, que hubiéramos querido entregaros no sólo el evangelio
de Dios, sino también nuestras propias vidas; porque habéis
llegado a sernos muy queridos. 9Porque os acordáis, hermanos,
de nuestro trabajo y fatiga; cómo trabajando de noche y de día,
para no ser gravosos a ninguno de vosotros, os predicamos el
evangelio de Dios. 10Vosotros sois testigos, y Dios también, de
cuán santa, justa e irreprensiblemente nos comportamos con
vosotros los creyentes.

Terminamos el verso 8 hablando sobre el modo en que el apóstol


Pablo sostuvo su ministerio. ¿Sirvió Pablo a Dios de balde o
recibió salario? Recibió salario. No de los corintios, pero sí de
otras iglesias. ¿Es pecado que un pastor reciba salario de la iglesia
que pastorea? No. Pues, el mismo Señor Jesús así lo mandó.
Seguimos, pues.

9. Es interesante cómo el apóstol confiesa que ha padecido


necesidad. Pregunto: ¿Estaría el apóstol en pecado? ¿Cómo Dios
no lo prosperó en su vida y ministerio? ¿Los cristianos no
564

debemos ser todos prósperos? ¿Entienden la ironía de mis


palabras? ¿No es eso lo que muchos predican?

Creo que, teniendo en cuenta lo que se predica hoy en muchos


lugares, muchos pastores e incluso muchos creyentes, sí
atravesaran por necesidad, abandonarían la fe.

Porque muchos siguen a Jesús por el pan que reciben, como está
escrito en Juan 6.26-27: Respondió Jesús y les dijo: De cierto, de
cierto os digo que me buscáis, no porque habéis visto las señales,
sino porque comisteis el pan y os saciasteis. 27Trabajad, no por la
comida que perece, sino por la comida que a vida eterna
permanece, la cual el Hijo del Hombre os dará; porque a éste
señaló Dios el Padre.

Hoy pasa exactamente lo mismo. Muchos buscan en Jesús


mejorar su situación económica. Tanto pastores como creyentes,
llenan hoy locales, no buscando con sinceridad a Dios, sino las
bendiciones de Dios.

Es más, algunos son tan descarados que cuando alguien pasa por
alguna necesidad le acusan de estar en pecado. Sólo quieren una
vida de lujos, pero ni hablar de necesidad. Huyen de ella como del
diablo. En cambio Pablo reconoce abiertamente que tuvo
necesidad.

Pensemos ¿Cuándo tuvo Pablo necesidad? Mientras estaba entre


los corintios. ¿Es normal, o mejor aún, es justo que el pastor de
una congregación en la que la mayoría de sus miembros tienen
una economía bien saneada pase necesidad? No debiera serlo.

No sólo el pastor, sino que nadie debería pasar necesidad, cuando


los demás tienen con qué suplirla. Cuando eso ocurre, cuando
alguien pasa necesidad y sus “hermanos” en la fe no la suplen,
avergüenzan el Santo Nombre de Dios.

Como está escrito en Santiago 2.15-17: Y si un hermano o una


hermana están desnudos, y tienen necesidad del mantenimiento
565

de cada día, 16y alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos


y saciaos, pero no les dais las cosas que son necesarias para el
cuerpo, ¿de qué aprovecha? 17Así también la fe, si no tiene obras,
es muerta en sí misma.

¿Acudió Pablo a los corintios para que cumplieran con su deber


de sustentar al siervo de Dios? No. ¿Hubiera podido hacerlo?
Desde luego. Es más, los corintios debieran haberlo ayudado
antes de que él se viera en la obligación de pedir ayuda.

Porque escrito está en 1Juan 3.16-18 En esto hemos conocido el


amor, en que él puso su vida por nosotros; también nosotros
debemos poner nuestras vidas por los hermanos. 17Pero el que
tiene bienes de este mundo y ve a su hermano tener necesidad, y
cierra contra él su corazón, ¿cómo mora el amor de Dios en él?
18
Hijitos míos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho
y en verdad.

Juan habla de ver al hermano tener necesidad. ¿Qué significa


eso? Que debemos estar pendientes unos de otros. Procurar saber
si alguien tiene necesidad es algo normal en la Iglesia de Cristo.

Algunos lo hacen para criticar a los hermanos necesitados,


preguntando en qué habrán pecado. ¿Eso es lo que enseña la
Palabra de Dios? De ningún modo. Sino verlo para suplir su
necesidad.

Es más, el apóstol dice: también nosotros debemos poner nuestras


vidas por los hermanos. ¿Poner la vida es más o menos que
ayudar? Es mucho más, es darlo todo. Darnos por entero al otro.
Es considerar a los demás como más importantes que a ti mismo.

Esto no es a lo que estamos acostumbrados. No es lo que se


enseña. Pero, ¿Es palabra de Dios? Sin duda. Recuerden que el
reino de los cielos es una paradoja.

Mateo 16.25-26 Porque todo el que quiera salvar su vida, la


perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí, la hallará.
566

26
Porque ¿qué aprovechará al hombre, si ganare todo el mundo,
y perdiere su alma? ¿O qué recompensa dará el hombre por su
alma?

Juan 12.25 El que ama su vida, la perderá; y el que aborrece su


vida en este mundo, para vida eterna la guardará.

Así es el reino de Dios, y lo mejor es que funciona.

¿Por qué no quiso Pablo recibir salario de los corintios? Por los
problemas que allí había. Sabía que siendo una congregación
dividida, podría ser perjudicial para ellos, y prefirió padecer él
que hacer padecer a la Iglesia.

Pero recibió salario de los hermanos de Macedonia,


concretamente de los filipenses. Quiero llamar vuestra atención
hacia un asunto importante que no podríamos conocer sin tener en
cuenta el contexto de estos textos.

Me refiero a que curiosamente los macedonios no eran tan


prósperos como los corintios. Puesto que Corinto era un centro
importantísimo de comercio. Por tanto, una ciudad rica. Mientras
que los macedonios dieron en medio de su profunda pobreza, 8.2.
¿Qué quiere decir eso? Que eran muy pobres.

Refiriéndose a esto, dicen que Juan Calvino escribió: ¡Cuán pocos


macedonios hay en el día de hoy, y cuántos corintios por todos
lados! ¿Entienden a lo que Calvino se refería? Que existen
muchos que no están dispuestos a colaborar con sus hermanos y
la obra de Dios, y pocos que sí lo están.

Pablo prefirió recibir la ayuda de los pobres filipenses que de los


ricos corintios. Pero la recibió, de lo contrario no hubiera podido
ministrar a los Corintios y continuar con sus viajes misioneros.

Aunque sea una paradoja, con frecuencia encontramos más


generosidad en quienes menos tienen. Aun cuando hay sus
honrosas excepciones, normalmente están más dispuestos a
567

colaborar con la obra de Dios los que menos tienen, que aquellos
a quienes les sobra.

Como digo hay sus excepciones, pues, hay hermanos con mucho
dinero que colaboran sobradamente con la obra de Dios. Dan y
mucho a sus hermanos y a la iglesia. Pero son los menos.
Generalmente los que más tienen y más cómodamente viven,
menos comparten y menos aportan. El ejemplo de los filipenses y
los corintios lo de muestra.

¿Qué es ser gravosos? Ser carga. Pablo se guardó y promete


guardarse en el futuro de ser carga a los corintos. Esto quiere
decir que no pensaba cambiar de idea.

Veamos, ¿Pecó Pablo al predicarle a los corintios gratuitamente?


No. ¿Hubiera pecado si hubiera recibido de ellos salario?
Tampoco.

Es importante que prestemos atención a algo que pasa


desapercibido. Os ayudaré a descubrirlo con una pregunta ¿Cómo
podría la iglesia sostener a los siervos de Dios? Algunos afirman
que dejándole un lugar dónde dormir y el pan necesario para cada
día. ¿Qué piensan?

¿Recuerdan las palabras de Pablo en 1Corintios 9.3-10? Contra


los que me acusan, esta es mi defensa: 4¿Acaso no tenemos
derecho de comer y beber? 5¿No tenemos derecho de traer con
nosotros una hermana por mujer como también los otros
apóstoles, y los hermanos del Señor, y Cefas? 6¿O sólo yo y
Bernabé no tenemos derecho de no trabajar? 7¿Quién fue jamás
soldado a sus propias expensas? ¿Quién planta viña y no come
de su fruto? ¿O quién apacienta el rebaño y no toma de la leche
del rebaño? 8¿Digo esto sólo como hombre? ¿No dice esto
también la ley? 9Porque en la ley de Moisés está escrito: No
pondrás bozal al buey que trilla. ¿Tiene Dios cuidado de los
bueyes, 10o lo dice enteramente por nosotros? Pues por nosotros
se escribió; porque con esperanza debe arar el que ara, y el que
trilla, con esperanza de recibir del fruto.
568

¿No tenemos derecho los siervos de Dios de tener familia? Y si la


tenemos, ¿No tenemos derecho a mantenerla? Sin duda, a pesar
de los abusos que han sido cometidos por algunos falsos pastores,
nadie que conozca el NT puede en justicia negar esta verdad.

Por tanto, ¿Cómo puede la Iglesia sostener a los ministerios? Por


medio de la ofrenda que recoge la Iglesia cada primer día de la
semana. Así se sostuvo el ministerio de Cristo y el de Pablo, con
ofrendas voluntarias de sus seguidores.

Ahora bien, quiero que presten atención a algo importante. ¿Está


hablando Pablo en estos pasajes de la ofrenda para los pobres de
Jerusalén? No, sino del sostenimiento de los siervos de Dios.

Para aquellos que afirman que las ofrendas eran solo para los
pobres de Jerusalén, es evidente que Pablo aquí no está hablando
de ese tipo de ofrenda, sino que habla del sostenimiento de su
propio ministerio.

¿Cómo podría la Iglesia pagar salario al apóstol sino se recogen


ofrendas para ello? En la Iglesia del Nuevo Testamento no se
practicaba el diezmo, que era una practica judía. Por tanto, para
sostener a los siervos de Dios debían recogerse ofrendas para tal
fin. Algo que algunos, mal informados y peor formados, sostienen
en su ignorancia.

De modo que Pablo recibió ofrendas de los corintios para los


hermanos pobres de Jerusalén, pero no quiso recibirla para el
sustento de su ministerio y de aquellos que estaban con él.
Aunque sí la recibió de otras congregaciones.

Concluyamos este tema haciendo otra pregunta. El sostenimiento


pastoral ¿es optativo o es un mandamiento del Señor? Es un
mandamiento del Señor, según 1Corintios 9.14.

Haré, pues, otra pregunta. Los mandamientos del Señor ¿son


optativos o de obligado cumplimiento? De obligado
569

cumplimiento. Sino los cumplimos no tenemos derecho a llamarlo


Señor.

Lucas 6.46 ¿Por qué me llamáis, Señor, Señor, y no hacéis lo que


yo digo?

Tal y como yo lo veo, si no proveemos para los siervos no


estamos siendo buenos discípulos de Cristo. ¿Recuerdan que
leímos que debemos poner nuestras vidas por los hermanos?
Déjenme preguntarles, ¿El pastor es tu hermano en Cristo?

Corremos el riesgo de pensar que debemos ayudarnos los unos a


los otros, siempre que el otro no sea pastor. ¿Eso es correcto? No
lo es. El Señor ha ordenado que los pastores vivamos de nuestro
trabajo pastoral.

La semana pasada quedamos en responder a una pregunta: Las


ofrendas ¿son voluntarias u obligatorias? Esta pregunta vino
porque hace unas semanas me discutía un hermano que no hay
que hablar de obligación en cuanto a la ofrenda.

Porque decía que es exactamente lo mismo que si estuviésemos


engañando y robando con el diezmo. ¿Qué creen? ¿Es así? ¿Es la
ofrenda como el diezmo, o hay diferencia? ¿Es la ofrenda
obligatoria o voluntaria? ¿Qué enseña la Biblia? ¿Son todas las
ofrendas iguales o hay diferencia entre ofrenda y ofrenda?

Esta es la cuestión que debemos responder. Aunque antes hay otra


cuestión más importante que debemos decidir. Me refiero es ¿en
base a qué vamos a llegar a una conclusión? Es decir, ¿en qué nos
vamos a basar para decidir si es voluntaria u obligatoria? ¿A
quién podemos consultar?

Gracias a Dios contamos con la Biblia, la Palabra de Dios, ella es


la única base para la doctrina cristiana. ¿Sí o no? ¿Puede
fundamentarse una doctrina sobre la opinión de alguien? Puede,
pero no es seguro que fuese una sana doctrina. Para asegurarnos
de la verdad debemos consultar la Escritura.
570

¿Puede fundamentarse una doctrina en la tradición? Puede, pero


tampoco hay certeza de estar en la verdad siguiendo una
tradición. El Señor Jesús batalló contra las tradiciones de su
propio pueblo en Marcos 7.1-9.

Por tanto, la Palabra de Dios es la única fuente de autoridad en


materia de fe. Por lo que las doctrinas, al menos las cristianas no
deben basarse en la opinión de nadie, ni en el hecho de que
siempre se ha hecho así, o siempre se ha enseñado lo mismo, sino
en lo que esté escrito.

Siempre me habían dicho y enseñado que para hablar con Dios


debía ir a la Iglesia y ponerme ante una imagen. Pero cuando
conocí la Sagrada Escritura descubrí que eso es mentira.

Cuando me convertí en cristiano, siempre me habían enseñado


que para tomar la comunión debía estar bautizado. Pero cuando
conocí la Escritura descubrí que esa doctrina no está fundada en
la Palabra de Dios sino en la tradición evangélica.

También había oído que las mujeres no deben hablar en la Iglesia,


pero cuando conocí las Escrituras y las estudié a fondo descubrí
que se trataba de una norma social o cultural y no de un
mandamiento de Dios.

Siempre me enseñaron que debo hacer todo lo que está en la


Biblia, hasta que descubrí que Caín mató a su hermano Abel y
que Dios me dice que no debo matar. También descubrí que Por
lo que descubrí que no todo lo que está en la Biblia es una
doctrina para mí.

Siempre me enseñaron que el diezmo era una obligación de todo


cristiano. Que era anterior a la ley de Moisés porque Abraham
diezmó y él es el padre de la fe. Por tanto, yo debía diezmar
porque él lo hizo.
571

Pero cuando conocí las Escrituras y me dediqué a estudiarlas


descubrí que eso es mentira. Que se trata de un mandamiento de
Dios a Israel, que nada tiene que ver con la Iglesia de Cristo.
Además descubrí que Abraham se acostó con su criada y sé qu
eso no agrada a Dios que prohíbe el adulterio.

Por eso debemos conocer bien las Escrituras para analizar lo que
creemos y discernir si tiene verdadero fundamento bíblico o no.

En cuanto al tema que nos compete sobre la voluntariedad u


obligación de la ofrenda, debemos asegurarnos de que lo que
creemos tiene verdadero fundamento bíblico.

Mientras la obligación del diezmo no es aplicable a la Iglesia, las


ofrendas sí. ¿Por qué? Porque también en el Nuevo Testamento se
enseña a la Iglesia que debe recogerse ofrendas.

¿Se enseña en el Nuevo Testamento a la Iglesia que debe


diezmar? De ningún modo. El Señor Jesús habla en Mateo 23.23
con los sacerdotes de Israel, pero jamás exhortó a sus discípulos
que debían darlo. ¿Por qué los sacerdotes sí? Porque eran judíos y
enseñaban a los demás que debían guardar la ley.

Hay muchos pasajes en la Biblia que hablan sobre las ofrendas.


¿Han llegado a alguna conclusión sobre el tema? ¿Creen que son
voluntarias u obligatorias? ¿Por qué?

Veamos qué dice la Biblia:

En Levítico 7.37-38 dice: Esta es la ley del holocausto, de la


ofrenda, del sacrificio por el pecado, del sacrificio por la culpa,
de las consagraciones y del sacrificio de paz, 38la cual mandó
Jehová a Moisés en el monte de Sinaí, el día que mandó a los
hijos de Israel que ofreciesen sus ofrendas a Jehová, en el
desierto de Sinaí.
572

Conforme a este pasaje la ofrenda es voluntaria u obligatoria? Sin


duda es obligatoria. Es una ley y un mandato. Las leyes deben
cumplirse y los mandamientos de Dios también.

Ahora bien, ¿esta ley es para Israel, para la Iglesia, o para ambos?
Sólo para Israel.

No todos los mandamientos de Dios son para todos. Pongamos


algunos ejemplos:

Levítico 22.17-18 También habló Jehová a Moisés, diciendo:


18
Habla a Aarón y a sus hijos, y a todos los hijos de Israel, y
diles: Cualquier varón de la casa de Israel, o de los extranjeros
en Israel, que ofreciere su ofrenda en pago de sus votos, o como
ofrendas voluntarias ofrecidas en holocausto a Jehová.

¿Aquí se habla de ofrendas voluntarias u obligatorias? De las dos.


Los votos eran voluntarios, pero una vez hechos, las ofrendas que
había que presentar en pago de los votos eran obligatorias; y
también se habla de ofrendas voluntarias.

También se habla de ofrendas obligatorias en 1Samuel 2.29: ¿Por


qué habéis hollado mis sacrificios y mis ofrendas, que yo mandé
ofrecer en el tabernáculo; y has honrado a tus hijos más que a
mí, engordándoos de lo principal de todas las ofrendas de mi
pueblo Israel?

2Crónicas 24.8-14: Mandó, pues, el rey que hiciesen un arca, la


cual pusieron fuera, a la puerta de la casa de Jehová; 9e hicieron
pregonar en Judá y en Jerusalén, que trajesen a Jehová la
ofrenda que Moisés siervo de Dios había impuesto a Israel en el
desierto. 10Y todos los jefes y todo el pueblo se gozaron, y
trajeron ofrendas, y las echaron en el arca hasta llenarla. 11Y
cuando venía el tiempo para llevar el arca al secretario del rey
por mano de los levitas, cuando veían que había mucho dinero,
venía el escriba del rey, y el que estaba puesto por el sumo
sacerdote, y llevaban el arca, y la vaciaban, y la volvían a su
lugar. Así lo hacían de día en día, y recogían mucho dinero, 12y el
573

rey y Joiada lo daban a los que hacían el trabajo del servicio de


la casa de Jehová; y tomaban canteros y carpinteros que
reparasen la casa de Jehová, y artífices en hierro y bronce para
componer la casa. 13Hacían, pues, los artesanos la obra, y por
sus manos la obra fue restaurada, y restituyeron la casa de Dios
a su antigua condición, y la consolidaron. 14Y cuando terminaron,
trajeron al rey y a Joiada lo que quedaba del dinero, e hicieron
de él utensilios para la casa de Jehová, utensilios para el
servicio, morteros, cucharas, vasos de oro y de plata. Y
sacrificaban holocaustos continuamente en la casa de Jehová
todos los días de Joiada.

¿Quién le dijo a Moisés que mandara e impusiera al pueblo a dar


ofrendas? Dios mismo, para el sustento del culto y de los
sacerdotes. Lo hemos visto en Levítico 7.37.38.

En este tiempo se consideraba un privilegio colaborar con la obra


de Dios.

También hay muchos pasajes que hablan de ofrendas voluntarias,


como por ejemplo: Levítico 23.38 además de los días de reposo
de Jehová, de vuestros dones, de todos vuestros votos, y de todas
vuestras ofrendas voluntarias que acostumbráis dar a Jehová.

Así, pues, en el Antiguo Testamento encontramos tanto ofrendas


obligatorias como ofrendas voluntarias. Pero, ¿qué enseña el
Nuevo Testamento? ¿son voluntarias o son una obligación de
todo cristiano?

Vamos a estudiar un texto que ya hemos visto antes. Todos lo


conocemos, pero hoy vamos a profundizar algo más. ¿Creen que
es posible aprender algo más de un pasaje que ya conocemos y
hemos estudiado? Por supuesto.

Comprobémoslo. Me refiero a 1Corintios 16.2 Cada primer día


de la semana cada uno de vosotros ponga aparte algo, según
haya prosperado, guardándolo, para que cuando yo llegue no se
recojan entonces ofrendas.
574

Para poder entender este pasaje debemos hacer tres preguntas:


¿De qué ofrendas está hablando Pablo? ¿De las ofrendas del
Antiguo Testamento relacionada con los sacrificios por el pecado
o la culpa, las consagraciones, el sacrificio de paz o los votos?
De ningún modo.

¿De qué está enseñando el apóstol Pablo en este pasaje? Porque


no debemos confundirnos. No todas las ofrendas son iguales.
Pablo está hablando aquí de las ofrendas para los santos de
Jerusalén.

¿Estas ofrendas eran obligatorias o voluntarias? Aquí vienen las


otras dos preguntas:

Lo de cada primer día de la semana ¿Significa todos los primeros


días de la semana, es decir, todos los domingos, o sólo algunos?
¿A qué se refiere “cada”? Cada es todos.

Por tanto, cada uno de vosotros ¿Se refiere a todos o sólo a


algunos? A todos. Por tanto, es voluntaria u obligatoria? Es una
obligación de toda la Iglesia.

¿Todos tenían que dar lo mismo? No. ¿Cuánto debía dar cada
uno? Según hubiesen prosperado. La cantidad era un asunto entre
Dios y el cristiano. Como el darla o no. Pero que hay una
obligación es evidentemente claro.

Ya vimos la semana pasada cómo debíamos ayudar al necesitado.

Ahora bien, esto es en cuanto a la ofrenda para los santos. La


cuestión es: ¿Qué pasa con la ofrenda para sustento de los
pastores? Pues recordarán que: Así también ordenó el Señor a los
que anuncian el evangelio, que vivan del evangelio.

¿Cómo podrá la Iglesia cumplir con este mandamiento del Señor;


cómo podrán ser sostenidos si en la Iglesia no se recogen ofrendas
para los pastores?
575

En realidad no encontrarás ni un solo versículo bíblico que afirme


que las ofrendas en la Iglesia sean voluntarias. No es algo
optativo, sino un mandamiento del Señor. Si es un deber sostener
los ministerios, es un deber recoger una ofrenda para ello.

La cantidad que des, es un asunto entre Dios y tú. La Palabra de


Dios dice que debe ser según hayas prosperado. Tú lo propones
en tu corazón. Pero es tu obligación como cristiano.

Déjenme ahondar un poco más. ¿Es correcto dar poco cuando


Dios te provee mucho? No. No lo es.

Debemos cuidar de no caer en los extremos. Porque de haber


estado dando diezmos, primicias, ofrendas de todo tipo, siembras
y pactos, no podemos caer en no querer dar nada para la obra de
Dios, o dar sólo miserablemente las pequeñas monedas que nos
molestan en el bolsillo.

Por eso Pablo dice en 2Corintios 9.6-7: El que siembra


escasamente, también segará escasamente; y el que siembra
generosamente, generosamente también segará. 7Cada uno dé
como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad,
porque Dios ama al dador alegre.

10. Esta expresión de Pablo, en opinión de la mayoría de los


estudiosos, suena a juramento. Como si Pablo estuviese
declarando solemnemente que nadie le quitará el sentirse
orgulloso de su actitud y conducta en todas aquellas regiones de
Acaya.

A pesar de todo lo que estaba pasando, se sentía orgulloso de su


proceder y no estaba dispuesto a cambiar por las críticas. Estaba
firme en su postura, sabía que era la correcta.

Hoy hay muchos mensajeros, pero Pablo era un auténtico


mensajero de Cristo. Por eso tenía la verdad de Cristo en él. No
era portador de un evangelio diferente. Gálatas 1.8-10.
576

¿Está la verdad de Cristo en nuestras vidas? ¿Nuestro estilo de


vida lo demuestra? ¿Nuestro modo de vestir, de hablar, nuestras
actitudes y reacciones, demuestran que la verdad de Cristo está en
nosotros?

¿Cuál puede ser la consecuencia de no tener la verdad de Cristo


en nuestras vidas? ¿Hay diferencia entre quienes tienen la verdad
de Cristo y los que no?

Pablo se gloria, no sólo de sus propios hechos, sino también en


los de los corintios. 1Corintios 1.14; 7.4; 9.2…

Gálatas 6.14 Pero lejos esté de mí gloriarme, sino en la cruz de


nuestro Señor Jesucristo, por quien el mundo me es crucificado a
mí, y yo al mundo.

¿Había obrado mal el apóstol? De ningún modo. ¿Tenía algo de


qué avergonzarse? Tampoco. No sólo no había hecho nada malo,
sino que en todo obró conforme a la verdad de Cristo, y como un
ejemplo intachable, sin exigir nada a cambio.

11. Ha mostrado su determinación a no dejarse amilanar, a no


estar dispuesto a que le roben su reputación. A continuación hace
dos preguntas y una afirmación.

Las preguntas tienen que ver con la acusación de que pablo no


amaba a los corintios, por eso establece a Dios como testigo de la
verdad.

Generalmente en cuestiones de amor lo que solemos preguntar es


¿me amas? Pablo hace la pregunta al revés. ¿No os amo? Dando
por sentado que ellos sabían que sí.

2Corintios 7.3-4 No lo digo para condenaros; pues ya he dicho


antes que estáis en nuestro corazón, para morir y para vivir
juntamente. 4Mucha franqueza tengo con vosotros; mucho me
577

glorío con respecto de vosotros; lleno estoy de consolación;


sobreabundo de gozo en todas nuestras tribulaciones.

Pablo había demostrado innumerables veces el amor que sentía


para con los corintios. Todo cuanto hizo en Corinto fue por amor
a ellos. Si no los hubiera amado no los hubiera soportado, ni se
hubiera interesado por su bienestar espiritual.

Esta conclusión a la que llega el apóstol es lógica. Está


evidenciando que las acusaciones de las que ha sido objeto son
sin fundamento.

Poner a Dios como testigo de la verdad era un recurso que solía


acabar con las discusiones más enconadas. Cualquiera que pusiera
en duda las palabras del apóstol se las vería con Dios mismo, ante
el cual debería rendir cuentas.

¿Alguna vez has puesto a Dios como testigo de tus palabras? Más
te vale que fueran ciertas, pues de lo contrario, él te lo reclamará.
Más tarde o temprano tendremos que estar delante de él, y los
libros serán abiertos, y Dios juzgará todo lo que hicimos se bueno
a sea malo.

Como está escrito en 2Corintios 5.10: Porque es necesario que


todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo, para
que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en
el cuerpo, sea bueno o sea malo.

Nos quedamos en 2Corintios 11.11 y hoy continuaremos donde lo


dejamos.

12. El lenguaje que usa Pablo y el modo en que ha sido traducido


hace que en ocasiones sea algo difícil entender sus palabras. Ya el
apóstol Pedro lo señaló cuando escribió en 2Pedro 3.15-16: Y
tened entendido que la paciencia de nuestro Señor es para
salvación; como también nuestro amado hermano Pablo, según
la sabiduría que le ha sido dada, os ha escrito, 16casi en todas sus
epístolas, hablando en ellas de estas cosas; entre las cuales hay
578

algunas difíciles de entender, las cuales los indoctos e


inconstantes tuercen, como también las otras Escrituras, para su
propia perdición.

Así que es normal que casi dos mil años después nos cueste aun
más entenderlas. ¿Qué debemos hacer con las cosas difíciles de
entender, ¿las saltamos y pasamos por alto? No. De ningún modo.

Que sean difíciles de entender no es una excusa para pasar por


encima de ellas. Debemos profundizar, estudiando el contexto
histórico y gramatical, si queremos llegar a entender las Sagradas
Escrituras. Estudiemos, pues.

Mas lo que hago, lo haré aún. ¿Qué quiere decir Pablo con estas
palabras? Que no piensa cambiar su modo de actuar por las
acusaciones de sus enemigos. Que Él piensa seguir haciendo
exactamente lo mismo. Porque no entiende que él esté obrando
mal, sino los otros.

¿Qué hubiera pasado si Pablo hubiera cambiado su modo de


proceder? Le habría dado la razón a sus acusadores. Pero no había
motivo alguno por el cual debía cambiar.

A veces dejamos de hacer lo correcto por agradar a los demás, por


el qué dirán. ¿Eso está bien o mal? Desde luego está mal. Pablo
dijo en Gálatas 6.9 No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque
a su tiempo segaremos, si no desmayamos.

2Tesalonicenses 3.13 Y vosotros, hermanos, no os canséis de


hacer bien.

Hebreos 13.16 Y de hacer bien y de la ayuda mutua no os


olvidéis; porque de tales sacrificios se agrada Dios.

¿Qué quiere decir este pasaje? Que hacer el bien, a veces cuesta, e
incluso puede llegar a ser un verdadero sacrificio. ¿Se dan cuenta
cómo es importante hacer preguntas cuando estamos estudiando
la Escritura?
579

Cuando pensamos que pueden criticarnos por nuestro estilo de


vida cristiana, algunos pueden ser tentados a actuar como si no
fueran verdaderos cristianos. ¿Recuerdan algún personaje bíblico
que actuara de ese modo? ¿Recuerdan el caso de Pedro? Por dos
veces obró así.

Primero, cuando negó al Señor delante de la gente, Mateo 26.69-


75. Más tarde cuando en Antioquía se apartaba de los gentiles
por causa de los judíos de Jerusalén. Gálatas 2.11-14.

¿Porqué están estas cosas escritas? ¿No podían haberse pasado


por alto para no avergonzar a un apóstol? Eso lo hacen los
hombres, cuando escriben sus propias biografías o las historias de
sus ídolos.

La Escritura no esconde la grandeza de sus personajes, pero


tampoco la bajeza de sus pecados. Se nos habla con claridad de
las luces y sombras de hombres como Abraham, Moisés, David,
Salomón, Pedro, Pablo, etc. Sólo el Señor Jesús, fue tentado en
todo según nuestra semejanza, pero sin pecado. Hebreos 4.15.

En ocasiones, el enemigo nos acusa con la esperanza de que


dejemos de cumplir con nuestra obligación. Eso es lo que estaba
sucediendo con Pablo. Satanás no estaba contento con su
ministerio, por esa razón quiso acabar con él.

Cuando somos eficaces en las cosas de Dios, el diablo intentará


usar aun a tus propios hermanos en la fe para acabar contigo, o a
falsos hermanos, que también los hay, para desanimarte.
2Corintios 11.26 y Gálatas 2.4

Lo vemos a diario en las redes sociales, cómo algunos son usados


como marionetas para ser piedra de tropiezo a la obra de Dios.
Para entorpecer el avance de la verdad e intentar destruir la
Iglesia.
580

Creyentes e incluso pastores que batallan contra la verdad, por


mantener la amistad y su compromiso con el mundo. Cada uno de
nosotros debemos decidir de qué lado queremos estar, si de
aquellos que hacen la obra de Dios, como Pablo, o de aquellos
que pretenden frenarla como sus acusadores.

¿Qué hacer cuando eso sucede? No debemos temer ni hacer caso


a los que se oponen a la voluntad de Dios, o a la verdad. Como
Pablo debiéramos decir: Mas lo que hago, lo haré aún.

Pablo supo discernir la estrategia de sus oponentes y no cayó en la


trampa, por eso dice: para quitar la ocasión a aquellos que la
desean, a fin de que en aquello en que se glorían, sean hallados
semejantes a nosotros.

En la Traducción en Lenguaje Actual, dice: Voy a continuar como


hasta ahora, sin recibir dinero de ustedes. Así esos falsos profetas
no podrán sentirse importantes. Andan engañando a la gente
diciendo que son apóstoles de Cristo y que sirven a Dios igual
que nosotros.

Los acusadores de Pablo quería que él abandonara su postura de


no recibir compensación económica por su ministerio, porque así
se sentían acusados por la conducta del apóstol. Su intención era
rebajar al apóstol al nivel de ellos y así ellos poder destruir su
apostolado, y ocupar su lugar.

¿Se han percatado de que, en ocasiones, la sola presencia de un


cristiano hace que los pecadores se sientan mal? Aun cuando no
abra la boca, su sola presencia les hace sentirse incómodos.

¿Por qué? Porque la buena conducta juzga y condena a la mala.


Es decir, el malo se siente juzgado y condenado por la sola
presencia de alguien que no obre como él.

¿Entienden por qué los malos quieren que todo el mundo haga lo
mismo que ellos? Para no sentirse condenados por su maldad. De
ahí, actividades como la marcha por “el orgullo gay”. Algo
581

totalmente depravado, indigno y degradante, pero que ellos hacen


al objeto de conseguir aceptación.

Cuando alguien alza su voz y les dice que lo que hacen está mal,
reaccionan con toda violencia. ¿Por qué? Porque en el fondo ellos
mismos saben que es verdad, pero quieren vivir ignorándolo.

Al no caer Pablo en la trampa de los judíos, pudo demostrar que


su amor por los corintios era genuino, y que los falsos apóstoles
eran en realidad unos explotadores. v. 20; véase también
1Corintios 9.12.

13-15. Lo que sucedió en la iglesia de Corinto deja ver claramente


que hay un intento de Satanás por dañar y destruir a la Iglesia de
Cristo por medio de la intrusión de falsos ministros.

Actualmente hay ministros auténticos y falsos, eso es una


realidad, fácilmente comprobable. Algunos rechazan la fe por eso.
Pero sería como rechazar todo el dinero porque sabemos que
existe el dinero falso. ¿Qué hacemos con el dinero, nos
deshacemos de él cuando nos enteramos que existe dinero falso?
Desde luego que no. Lo que hacemos es comprobarlo.

Del mismo modo, se debe discernir entre los verdaderos siervos


de Dios y aquellos falsos que procuran aprovecharse de la fe de
los demás.

La iglesia también debe aprender a discernir entre los unos y los


otros. El conocimiento de la Escritura es el medio adecuado para
hacerlo.

Algunos “creyentes” nos demandan tolerancia y no juzgar. Pero


no es eso lo que la Palabra de Dios enseña. ¿O sí? De ningún
modo. La tolerancia sin discernimiento no es señal de ser buenos
cristianos, al contrario, es señal de inmadurez, de infantilismo
espiritual, y de falta de conocimiento bíblico.
582

Dicho en lenguaje académico, es evidencia de torpeza notable a la


hora de comprender las cosas. Dicho en lenguaje andaluz, es
evidencia de estupidez, que es justamente eso, una torpeza
notable a la hora de comprender las cosas.

Puede sonar a insulto, dependiendo de cómo lo digamos, pero en


realidad no lo es, se trata de la descripción de muchas personas,
incluso de muchos cristianos, que no dan la talla en cuanto a
comprensión de las Escrituras.

El estúpido no es quien no sabe porque no puede o no tiene


medios para saber, sino aquel que no sabe porque no se preocupa
de saber.

El caso de los corintios es clamoroso. No estaban entendiendo, no


por falta de capacidad para hacerlo, sino porque se estaban
dejando engañar vilmente por falsos ministros.

El caso de la iglesia de Corinto que estamos estudiando es


evidencia de la enorme lucha de Pablo contra los falsos ministros.
Aunque la iglesia es susceptible de ser engañada, es tiempo de
que la iglesia discierna entre sus ministros. Estudiando la Palabra
de Dios podemos aprender a diferenciar entre los buenos y malos
siervos.

Deuteronomio 18.20-22 El profeta que tuviere la presunción de


hablar palabra en mi nombre, a quien yo no le haya mandado
hablar, o que hablare en nombre de dioses ajenos, el tal profeta
morirá. 21Y si dijeres en tu corazón: ¿Cómo conoceremos la
palabra que Jehová no ha hablado?; 22si el profeta hablare en
nombre de Jehová, y no se cumpliere lo que dijo, ni aconteciere,
es palabra que Jehová no ha hablado; con presunción la habló el
tal profeta; no tengas temor de él.

Guillermo Maldonado hizo una profecía sobre el jugador de


fútbol Falcao, y todos no se cumplió, la pregunta es sencilla y la
respuesta mas, ¿Es Guillermo Maldonado un verdadero o falso
583

profeta? Sin ninguna duda es más falso que una moneda de


chocolate.

1Juan 4.1 Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los


espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han
salido por el mundo.

Esta advertencia ¿es hoy necesaria? Más que nunca antes.

1Timoteo 4.1-5 Pero el Espíritu dice claramente que en los


postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a
espíritus engañadores y a doctrinas de demonios; 2por la
hipocresía de mentirosos que, teniendo cauterizada la conciencia,
3
prohibirán casarse, y mandarán abstenerse de alimentos que
Dios creó para que con acción de gracias participasen de ellos
los creyentes y los que han conocido la verdad. 4Porque todo lo
que Dios creó es bueno, y nada es de desecharse, si se toma con
acción de gracias; 5porque por la palabra de Dios y por la
oración es santificado.

Los Papas católicos prohíben casarse a los sacerdotes, ¿Son los


Papas verdaderos o falsos siervos de Dios? Falsos como la falsa
moneda.

Helena G de White, la profeta de los adventistas, prohíbe comer


ciertos alimentos, y afirmaba, como se creía por entonces en
EEUU que ser negro era evidencia de maldición. ¿Es una
verdadera o falsa profeta? Sin duda igual de falsos que los
anteriores.

La semana pasada hablamos del intento del diablo de dañar la


obra de Dios en Corinto. ¿Cómo pretendía hacerlo? Por medio de
falsos apóstoles.

Así que hablamos de auténticos y falsos siervos de Dios, porque


también los hay auténticos, ¿o no? Por supuesto.
584

Es frecuente que cuando alguien es defraudado por ser


excesivamente crédulo, se vaya al otro lado y se convierta en un
incrédulo.

Continuamente recibo correos en los que la gente me dice que


todos los pastores son falsos, ¿lo serán? Desde luego que no.
Toda generalización es falsa.

Es cierto que, desgraciadamente, son muchos los que venden su


dignidad al precio de un plato de lentejas, pero no somos todos.

Hablamos de la necesidad de aprender a discernir entre unos y


otros. Entre los siervos del Dios y los falsos siervos de Satanás.
Sin embargo, cuando denunciamos a algún ministro, nos tenemos
que defender de aquellos que exigen tolerancia para los malos.

Es muy curioso que nos critican por juzgar a los falsos, y para
hacerlo, nos juzgan a nosotros. Pero claro no se dan cuenta de la
terrible incoherencia de su postura.

Quiero hacerles un pregunta y quiero que piensen la respuesta


antes de darla, ¿Es Dios tolerante con los malos? Rotundamente
no.

¿Qué dice Isaías 48.22? No hay paz para los malos, dijo Jehová.
Otra pregunta, Si no hay paz para ellos ¿qué habrá? Castigo.

Una pregunta más, ¿qué es mejor avisarles de que están en el


error, o dejarles ir al castigo eterno?

Por último dijimos que la Palabra de Dios nos enseña a discernir


entre el verdadero y el falso ministro, ¿recuerdan algún ejemplo
que pusimos de falso profeta, y porqué sabemos que lo son?

Sigamos, pues, donde lo dejamos.

Gálatas 1.8-10 Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os


anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado,
585

sea anatema. 9Como antes hemos dicho, también ahora lo repito:


Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido,
sea anatema. 10Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres, o el
de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía
agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo.

El movimiento del G-12, el movimiento por la renovación del


ministerio apostólico y profético, la cadena de televisión TBN y
otros similares, ¿son verdaderos o falsos siervos de Dios? Sin
duda falsos, porque enseñan evangelios distintos

¿No resulta realmente curioso que a lo largo de dos mil años de


cristianismo no hubiera ningún apóstol, más que el falso Papa de
Roma, y de pronto, en la década de los ochenta, un americano
constituyera un nuevo apostolado distinto al que Jesús instituyó?

Desde entonces, el virus de la apostolitis ha contagiado a muchos


otros. ¿Por qué creen que proliferan tantos falsos apóstoles en
nuestros días? ¿Por qué ocurre esto? Porque la Iglesia está
dejando de lado la Escritura. Y porque muchos falsos siervos han
entrado a la iglesia y sólo buscan sacar provecho económico de
ella.

A muchos no les gusta estudiar la palabra de Dios y cuando los


falsos apóstoles les presentan falsos argumentos sacando textos de
su verdadero contexto, caen en sus mentiras. Voy a ponerles un
ejemplo:

Hechos 14.14, cuando muchos lo leen creen ver un fundamento


para ese falso ministerio del apostolado actual. ¡Cómo es posible
que lo niegues si aquí está escrito, dicen!

La respuesta es bien sencilla: Hay que profundizar en lo que


leemos, para saber si estamos entendiendo la Escritura. El Señor
Jesús no mandó leer, sino escudriñar las Escrituras. ¿Es lo mismo
leer que escudriñar? No, no lo es. Escudriñar es escarbar,
profundizar, investigar.
586

Vivimos en la sociedad del microondas. Todo lo queremos rápido


y sin el menor esfuerzo. Pero cuando nos esforzamos por conocer
y obedecer a Dios, es que obtenemos la recompensa. Dios nos
bendice con mayor conocimiento.

Porque el conocimiento está al alcance de todos. ¿Lo reciben


todos? Desde luego que no. Algunos piensan que basta con orar,
pidiéndolo, pero no estudian. Pero cuando estudias, descubres
cosas tan sorprendentes y sencillas como que la palabra apóstol
tiene dos significados en la Biblia; y que dependiendo del
contexto podremos descubrirlo.

En Hechos 14.14 aparece la palabra apostoloi que significa


embajador, comisionado o mensajero. Cuando estudiamos el
contexto descubrimos que, efectivamente, el Espíritu Santo había
apartado a Bernabé y a Saulo para “enviarlos” a las misiones.

Enviado es igual a apóstol. No en el sentido de aquellos que


fueron llamados por Cristo para establecer el fundamento de la
Iglesia.

Pasa lo mismo que con Efesios 4.11, lo sacan de contexto y


hablan de los cinco ministerios. Haciendo énfasis en que los cinco
deben estar presentes en toda congregación. Sin tener en cuenta
que ese pasaje debe interpretarse a la luz de su contexto histórico
de 2.20,

Por otro lado, nadie puede demostrar que en el primer siglo


hubiera los cinco ministerios en todas las iglesias. Porque se trata
de una falsa doctrina.

Además, si vamos a Apocalipsis 21.14 comprobaremos que el


muro de la ciudad no tenía trece cimientos, ni veinte, ni miles,
sino doce. Como está escrito: y sobre ellos los doce nombres de
los doce apóstoles del Cordero.

Unos fueron llamados para establecer el fundamento, Pablo llegó


a formar parte de ellos, no en vano escribió trece de los veintisiete
587

libros del Nuevo Testamento. Pero no Bernabé, ni ninguno otro,


aunque fueran apóstoles en el sentido de que fueron enviados.
También los setenta, fueron enviados por Cristo, y a ninguno de
los falsos apóstoles actuales se les ocurre decir que son como
ellos, sino que reclaman autoridad como Pablo.

Así que hoy nadie debería adoptar ese nombre para su ministerio,
por mucho que fueran enviados por la Iglesia. Porque
confundimos a la propia Iglesia, y no tenemos el derecho de
hacerlo.

La característica fundamental que debía tener un apóstol era el


haber sido llamado por Cristo a formar parte del grupo de los
doce. Y nadie puede abrogarse ese llamado sin mentir. Porque se
estaría abrogando una gloria que no le corresponde.

El Señor Jesús en el evangelio ¿a qué nos llama a ser humildes o


soberbios? Sin duda a ser humildes. Digan la verdad, cuando hoy
ven a estos apóstoles modernos ven humildad en ellos? No, la
hay, sino orgullo carnal y vanidad.

Desgraciadamente mucho han sido inoculados con el virus de la


titulitis. Es increíble el montón de apóstoles que hoy salen por
todos lados. Entre los pastores también pasa. Jamás ha habido
tantos falsos pastores como en la actualidad. Abundan aquellos a
los que les gusta que le llamen siervo, pastor, ministro, reverendo,
etc.

Cualquiera alquila un local y comienza a hacer reuniones y exige


que le llamen pastor. ¿Pero lo es? No, a menos que haya sido
llamado por Dios y reúna los requisitos bíblicos y tenga las
evidencias de su ministerio.

Pretender ser apóstol y tener la misma autoridad de aquellos que


fueron constituidos por Cristo es una verdadera herejía de la que
estos obreros fraudulentos que se disfrazan como apóstoles de
Cristo tendrán que rendir cuentas.
588

Esto es lo que Pablo les dice aquí a los corintios que aquellos
judíos que habían llegado dándoselas de apóstoles, eran en
realidad un fraude. Gente mentirosa y aprovechada que no ama la
verdad.

Estafadores que tienen a Satanás como modelo, el cual se disfraza


como ángel de luz, para dárselas de “dios”. Porque Dios es luz,
1Juan 2.8; 5.1; Juan 8.12.

El mismo Señor Jesús lo anunció y nos advirtió contra ellos.


¿Recuerdan Mateo 7.13-15? Entrad por la puerta estrecha;
porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la
perdición, y muchos son los que entran por ella; 14porque
estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y
pocos son los que la hallan. Guardaos de los falsos profetas, que
vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son
lobos rapaces.

Aquí en este pasaje el Señor nos anunciaba que siempre serían


más los malos que los buenos. La mayoría están errados. La
mayoría van para el infierno, creyendo que van en la dirección
apropiada.

En los pasajes siguientes Mateo 7.15-23, el Señor Jesús continúa


advirtiendo sobre los falsos profetas.

Pablo también lo hizo en Hechos 20.28-31 Por tanto, mirad por


vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha
puesto por obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la cual él
ganó por su propia sangre. 29Porque yo sé que después de mi
partida entrarán en medio de vosotros lobos rapaces, que no
perdonarán al rebaño. 30Y de vosotros mismos se levantarán
hombres que hablen cosas perversas para arrastrar tras sí a los
discípulos. 31Por tanto, velad, acordándoos que por tres años, de
noche y de día, no he cesado de amonestar con lágrimas a cada
uno.
589

Nos quedamos hablando de los falsos profetas. Ese tipo de


personas que hacen de la fe ganancia. Pablo los retrata
perfectamente en Filipenses 3.17-19 al decir: Hermanos, sed
imitadores de mí, y mirad a los que así se conducen según el
ejemplo que tenéis en nosotros. 18Porque por ahí andan muchos,
de los cuales os dije muchas veces, y aun ahora lo digo llorando,
que son enemigos de la cruz de Cristo; 19el fin de los cuales será
perdición, cuyo dios es el vientre, y cuya gloria es su vergüenza;
que sólo piensan en lo terrenal.

En este pasaje tenemos algunas características que identifica a


estos falsos ministros, siervos de Satanás.

También el apóstol Pedro nos advirtió contra el peligro de esta


plaga que amenazaría la Iglesia.

2Pedro 2.1-3 Pero hubo también falsos profetas entre el pueblo,


como habrá entre vosotros falsos maestros, que introducirán
encubiertamente herejías destructoras, y aun negarán al Señor
que los rescató, atrayendo sobre sí mismos destrucción repentina.
2
Y muchos seguirán sus disoluciones, por causa de los cuales el
camino de la verdad será blasfemado, 3y por avaricia harán
mercadería de vosotros con palabras fingidas. Sobre los tales ya
de largo tiempo la condenación no se tarda, y su perdición no se
duerme.

¿Conocen a alguno de estos que por avaricia hacen de la piedad


ganancia? No teman reconocerlo por nombre. A los falsos hay
que denunciarlos a fin de que no engañen.

Respóndanme una pregunta: ¿Creen que es importante este tema


de los falsos profetas? Sin ningún lugar a dudas. Si no lo fuera
¿por qué creen que hay tantas advertencias contra ellos en la
Biblia? Sin duda porque iba a ser un asunto muy importante del
que debemos ocuparnos, porque hay tres cosas en juego:

La gloria de Dios.
La verdad.
590

La supervivencia de la Iglesia.

Aunque a algunos no les guste que se discutan estas cosas, en


realidad es nuestro deber. Si no lo hiciéramos no estaríamos
honrando a Dios, sino desobedeciéndole. Judas 3.

Por ese motivo quiero decirle a esas personas que no ven bien que
se juzgue la mentira, que no juzguen quienes defendemos la
verdad. Si no les gusta que se critique a los falsos apóstoles,
pastores y maestros, que no critiquen ellos a los verdaderos
siervos de Dios.

Si Dios no los llamó a ellos a realizar esta labor que no sean


estrobo a quienes hemos recibido ese llamado.

Una cosa es respetar las creencias de la gente y otra muy distinta


acomodar el evangelio a lo que la gente cree. Esto es lo que hacen
los falsos ministros.

En cierta ocasión me preguntaron ¿Por qué existían tantos falsos


profetas? La respuesta está en la Biblia, en 2Tesalonicenses 2.11
Pablo, hablando de la llegada del Anticristo, escribió: Por esto
Dios les envía un poder engañoso, para que crean la mentira, 12a
fin de que sean condenados todos los que no creyeron a la
verdad, sino que se complacieron en la injusticia.

A la luz de este pasaje, ¿quiénes, y por qué, son engañados?


Aquellos que no creen a la verdad. Si rechazas la verdad, acabarás
engañando y siendo engañado. 2Timoteo 3.13.

14 En este verso Pablo explica que no debe sorprendernos, pues


no se trata de otra cosa que de un engaño más del diablo.
Sabemos que el diablo es mentiroso y padre de mentira. Juan
8.44.

¿Qué hace un mentiroso? Mentir.


¿Qué hace un padre? Engendrar.
¿Qué engendra Satanás? Mentiras. Es decir, las inventa.
591

Si observamos la historia de la Iglesia podremos comprobar cómo


a lo largo del tiempo ha estado mintiendo descaradamente sobre
Dios y la Iglesia.

Mintió a nuestros primeros padres diciéndoles que no morirían,


pero murieron. ¿Engaña Satanás hoy a las gentes o ya convirtió?
Sigue engañando y engañado. Satanás no se convierte. Ahora se
disfraza de ángel de luz para engañar a las gentes.

¿Saben? Es muy curioso estudiar la historia, se descubren cosas


muy interesantes.

José Smith, el fundador de los mormones, decía que le había


aparecido un ángel que lo guió hasta el lugar donde encontraría
un libro escrito en planchas de oro y junto a él, el Urin y el
Túmin, las piedras preciosas que el sumo sacerdote de Israel
llevaba en el pectoral y que le servían para consultar a Dios.

Smith dijo que aquel libro estaba escrito en una lengua que nadie
conocía. De hecho, aunque hubiera estado escrito en inglés, su
lengua materna, tampoco lo hubiera entendido porque él era
analfabeto.

Smith afirma que colocándose el Urin y el Tumin ante los ojos él


podría entender lo que allí estaba escrito. Dijo que él dictó a su
cuñado, que no vio el libro, en realidad nadie lo vio jamás. Así
que de la lectura de aquellas planchas de oro surgió el Libro de
Mormón.

¿A qué le suena todo esto? A fábulas. Semejantes mentiras sólo


puede salir de una mente enferma, o dominada por un espíritu de
mentira. ¿Qué clase de personas puede caer en estas patrañas?
Aquellas que no hay creído la verdad, o que aún no la han oído.

Cuando alguien oye la verdadera Palabra de Dios, debe abandonar


sus propios errores. Hay algunos que piensan que no debemos
592

predicar a gentes que están en otros grupos religiosos, aunque


estos sean falsos.

Jesús predicó a las gentes de su tiempo que practicaban un


judaísmo falso. Pablo predicó a los griegos y romanos que creían
en una religión falsa.

Actualmente llamar falsa a una religión no es políticamente


correcto, aunque esa religión lleve a la gente a cortar cabezas.
Pues, lo siento. La verdad es verdad y la mentira es mentira.

Aquel ángel que le apareció a José Smith, cuyo nombre dijo que
era Moroni, era en realidad, si es que existió, un demonio que le
engañó con falsas doctrinas, que ha apartado a muchos de Dios.
Creyendo que van al cielo, en realidad van al infierno, donde
acabarán los espíritus que les sirven de guía.

El caso de los mormones no es el único. Los adventistas veneran


a una mujer llamada Elena G. White que afirmaba tener el
“espíritu de la profecía”. Otro demonio engañador.

Así han surgido muchas religiones y sectas: El catolicismo, el


Islam, el budismo, todos ellos tienen algo en común, fueron
fundados a partir de ciertas visiones de “espíritus” que les
“inspiraron”.

Con razón el apóstol Juan escribió: Amados, no creáis a todo


espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos
falsos profetas han salido por el mundo.

15. Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan


como ministros de justicia. Lo interesante de este verso y que los
falsos apóstoles, profetas, pastores y demás mentirosos no tienen
en cuenta, es que aquí se profetiza su fin, el cual será conforme a
sus obras.
593

16. A partir de aquí, Pablo decide comparar a quienes decían ser


mejores apóstoles que él, con su ministerio como siervo de Dios.
Él sabe que si juega a lo que ellos juegan él ganará.

Si se trata de gloriarse él también sabe hacerlo, pero lo considera


una locura, por lo que pedirá que ya que lo consideran un loco, le
concedan algo de locura, para demostrar lo errados que estaban
sus acusadores.

Como siempre el apóstol, con la sabiduría que le caracteriza,


redarguye a sus enemigos volviendo sus propios argumentos
contra ellos.

Por eso exige que le toleren un poco de locura para gloriarse a sí


mismo, aunque sólo para desbaratar las acusaciones que hicieron
contra él.

Aquellos falsos apóstoles no podrán llegar jamás a la altura de


entrega y sacrificio que el apóstol tiene en su currículum.

17-18. Pero aclara que habla como hombre, y no como cualquier


hombre, sino como un loco. Para que no crean que su pretensión
es gloriarse a sí mismo, sino que lo hace por el motivo ya
explicado.

No obstante, no debemos interpretar de estas palabras, como que


no cuenten con la inspiración de Dios, sino que él sabe que no es
correcto gloriarse así mismo, pero debe hacerlo para demostrar a
los corintios la vanidad de aquellos que le acusaban falsamente.

Aun cuando no sea la voluntad de Dios el gloriarse a sí mismo, el


registro de estas palabras, es fruto de la inspiración del Espíritu
Santo y no carecen de autoridad Divina.

Puesto que lo habían provocado, ahora que aguanten, si pueden,


el chaparrón. Pablo aclara que estos falsos apóstoles estaban en la
carne. ¿Qué significa esta expresión? Que no están obrando en
manera espiritual, sino mundana, pagana.
594

Pablo contrapone la carne al espíritu. No en un sentido literal,


como lo hacía la filosofía helena, sino en el sentido figurado.

En el verso 18 Pablo explica porqué se gloría. Ya que sus


acusadores se quieren poner al nivel de Pablo, éste les aclara que
él si tiene motivos para gloriarse, si quisiera, y lo demuestra,
adoptando un papel de necio, como el de ellos.

Hay que tener en cuenta que el apóstol sólo se gloría para


demostrar lo absurdo de hacerlo.

19. Al parecer la iglesia de Corinto recibía a cualquiera que


viniera hablando de Dios, dispuesto a predicar y enseñar, pero sin
ejercer discernimiento de la verdad.

De buena gana, describe la calurosa bienvenida que le daban a los


recién llegados. Los corintios se mostraban dispuestos a tolerar y
adaptarse con facilidad a las nuevas tendencias religiosas.
Pasando por alto la conducta abusiva y las posturas torcidas de
aquellos falsos apóstoles.

Aquí Pablo llama necios a sus enemigos. ¿Recuerdan la que se lió


en las redes sociales cuando llamé dije que algunos merecen ser
llamados necios? Escribí: No hay peor ignorancia que la
voluntaria. Aquel que conociendo la verdad actúa como si no la
conociera merece que le llamen necio.

La semana pasada nos quedamos en el verso 19 viendo cómo los


corintios recibían y toleraban de buena gana a los necios.
Seguimos hoy en el…

20. Esto nunca ha sido más real que en la actualidad. Con el


movimiento del G-12 y canales de televisión como Enlace, que
han propiciado el avance de la apostasía, la gente se auto
esclaviza a prácticas que ni tan siquiera tiene un origen religioso,
sino absolutamente pagano.
595

El verbo esclavizar en griego posee una fuerza intensa que


comunica la idea de estar bajo un fuerte yugo. La gente de
Corinto estaba bajo el yugo de los impostores.

Si bien es cierto que el texto no ofrece demasiados detalles,


deducimos que la esclavitud se refiere a las falsas doctrinas,
imposiciones religiosas y exigencias económicas y financieras.

En completo contraste, Pablo había llegado a Corinto no para ser


servido sino para servir a la gente, de acuerdo al ejemplo y
obediencia de su Maestro, 20.25-28. Se hizo a sí mismo esclavo
de todos por causa del evangelio 1Corintios 9.19.

En cambio ¿Cuál estaba siendo la reacción de los corintios para


con Pablo? Rechazo. Mientras que toleraban a quienes les
esclavizaban, devoraban y tomaban lo suyo. ¿Qué significa que
tomaban lo de ellos? Que les robaban. Además, por si fuera poco
abuso, les daban de bofetadas.

¿No es un cuadro de absurdo e irracional? ¿Cómo es posible que


la gente soporte un trato vejatorio de quienes se supone que están
para servirles?

No habla Pablo aquí sólo de abuso espiritual, sino que llega al


abuso físico. Algo que los corintios toleraban. ¿Por qué creen que
lo hacían? ¿Cómo es posible que alguien tolere algo así? ¿Qué les
podía mover? Posiblemente el creer que era lo que Dios les
mandaba.

Circula un vídeo por internet en el que Guillermo Maldonado


rodeado en todo momento de sus guarda espaldas, que no dudan
en tirar a la gente al suelo de un empujón si pretenden acercarse al
“ungido”, provoca una histeria colectiva en medio de la cual la
gente salta y brinca.

En medio de ese desenfreno espiritualista, que no espiritual,


comienza lo que se ha llamado la unción de la bofetada. Es decir,
se pone a dar de bofetadas a la gente.
596

La unción de la bofetada le dicen. En el vídeo se ve como una


jovencita iba acercándose a él saltando y cuando ve que da de
bofetadas a la gente, se vuelve y se marcha saltando
disimuladamente. Se ve que lo pensó mejor y decidió que no
necesitaba recibir la “unción” de la bofetada.

Actualmente hay “unciones” para todos los gustos y disgustos.

Una de las cuestiones más trágicas que ha provocado el diablo en


la Iglesia ha sido el despegue de ésta con la Sagrada Escritura. Lo
que ha propiciado que los creyentes pierdan el discernimiento del
bien y del mal, y confundan el paganismo con la fe bíblica.

Por ejemplo: La unción de la bofetada ya existían en África, hace


cientos de años. También la unción del humo de tabaco. Todo
este tipo de falsas unciones podemos verlas en internet. ¿Qué
ocurre en la mente de un “cristiano” para que confunda la santería
con la voluntad de Dios?

El Tabaco es un elemento fundamental dentro de la Santería, y


también en todas las religiones afroamericanas. Usado como
purificador, mientras se invoca a los muertos, mientras se realizan
trabajos santorales, el tabaco siempre estará presente en la boca
de muchos santeros junto con el Ron.

Indispensable para ofrendas a los falsos dioses, tanto soplado


como ofrecido. También a través del tabaco y mediante unos
rituales afirman poder conseguir: dinero, protección, suerte, amor,
dominio sobre alguien, etc.

¿Entienden porqué se usa en algunos grupos “evangélicos”


actualmente? Porque se ha convertido en una falsa religión más, a
la que la gente acude para conseguir sus objetivos; ya sean
librarse de sus miedos o conseguir salud, dinero y amor.

Este pasaje muestra con total transparencia el proceder de muchos


falsos ministros que hacen de la piedad ganancia maltratando a
597

aquellos que quieren conocer de Dios, pero que no tienen la


disposición suficiente para comprobar si lo que les predican y
enseñan es correcto o no lo es. De ahí que acaben esclavizados,
robados y abofeteados.

También se habla de la unción del chapuzón, que consiste en


tirarse a una piscina hinchable y zambullirse siete veces, como
Eliseo le dijo a Naamán el sirio, para librarse de la lepra.
Malinterpretando el pasaje histórico en cuestión, afirman que la
pobreza es una lepra de la que puedes librarte zambulléndote siete
veces en el agua. Si lo haces, serás rico.

¿Cómo es posible que gente medianamente inteligente acabe


creyendo semejantes patrañas? La respuesta es siempre la misma:
Porque no buscan realmente a Dios, sino lo que de Dios pretenden
obtener. Es decir, por codicia nada más.

Los apóstoles no integraron el evangelio al paganismo, ni el


paganismo al evangelio. La posición de ellos fue bastante radical.
Hechos 14.15: os anunciamos que de estas vanidades os
convirtáis al Dios vivo, que hizo el cielo y la tierra, el mar, y todo
lo que en ellos hay.

La verdad no debe ser mezclada con la mentira para hacerla


atractiva. Pero seamos sinceros, en estos días, el catolicismo
romano ya no tiene la exclusiva del sincretismo religioso.

Sincretismo es una palabra que significa mezclar distintas teorías,


actitudes, u opiniones. Se trata de un sistema filosófico que
intenta conciliar doctrinas diferentes.

La secta católico romana lo ha hecho mezclando las religiones


paganas de los pueblos con la fe cristiana. Actualmente sigue
intentándolo, ahora con el ecumenismo. Eso es sincretismo.

La cuestión es, ¿No está haciendo eso mismo actualmente la


iglesia evangélica? ¿Qué diferencia hay? Algunos han deformado
598

tanto la fe que más que predicadores, parecen practicantes de ritos


mágicos.

Uno de los temas de los que menos se habla en las iglesias es el


del abuso espiritual. El verdadero siervo de Dios no abusará de su
congregación. Pero hay muchos que abusan porque no son
verdaderos siervos.

El abuso espiritual es terrible. Ay de aquellos que apaciblemente


aceptan el error sin preocuparse de comprobar la veracidad o
falsedad del mismo. Pero sobre todo, ay de aquellos que abusan
de la credulidad de la gente.

El verdadero siervo de Dios debe proteger a su congregación del


abuso. De los falsos ministros que la dañan y perjudican.

Todo esto ocurre por falta de conocimiento, tanto del pueblo


como de los pastores. La semana pasada hablaba con algunos
hermanos de que actualmente se glorifica más la ignorancia que el
conocimiento, y así les va.

Hay un falso pastor chileno que vosotros conocéis, que es en


realidad un ladrón disfrazado de pastor. Al que sólo le interesa el
dinero y que no se preocupa de la gente para nada. Éste lleva años
abusando de la gente. Les roba y se marcha abandonándolos a su
suerte. Cuando quiere vuelve y puesto que la gente se lo permite,
vuelve a robarles y se vuelve a marchar, demostrando que su
único interés es el dinero. Esto lo ha hecho varias veces, y aún la
gente sigue consintiendo y tolerando que les esclavice, que los
devore, que tomen lo suyo y que le den de bofetadas.

Quizás sea que algunos merecen ese tipo de falsos pastores.

Ese individuo, malinterpreta el pasaje de Pablo en el que dice:


porque la letra mata, mas el espíritu vivifica. 2Corintios 3.6. Se
atreve a hablar contra el conocimiento de la Palabra de Dios.
¿Saben cuál es la razón? Que si la gente conociera las Escrituras,
él no podría seguir engañándola.
599

Por eso, este tipo de personas, no quiere que conozcan la verdad,


así ellos pueden seguir manipulándolos a su antojo. Como la secta
católico romana en la antigüedad, que prohibía la lectura de la
Biblia, para que no descubrieran sus pecados.

Pero en Oseas 4.6 Dios dijo a Israel, y con ellos a todos los falsos
pastores que hoy se niegan a estudiar y prohíben que la iglesia lo
haga: Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento. Por
cuanto desechaste el conocimiento, yo te echaré del sacerdocio; y
porque olvidaste la ley de tu Dios, también yo me olvidaré de tus
hijos.

Nos quedamos hablando de aquellos falsos pastores que ni


quieren estudiar ni quieren que los creyentes lo hagan,
¿Recuerdan la razón? Para que no descubran que son unos
impostores.

En Jeremías 3.14-15, le dijo a Israel: Convertíos, hijos rebeldes,


dice Jehová, porque yo soy vuestro esposo; y os tomaré uno de
cada ciudad, y dos de cada familia, y os introduciré en Sion; 15y
os daré pastores según mi corazón, que os apacienten con ciencia
y con inteligencia.

Según Dios, es necesaria la ciencia que es conocimiento, y la


inteligencia, que es la capacidad para entender y exponer la
ciencia, para servirle. Ya está bien de que cualquier ignorante se
erija así mismo en pastor. Si quieres servir a Dios, primero
prepárate.

Si cualquier empresa del mundo exige la mejor preparación,


¿Acaso crees que para servir a Dios basta con la buena intención?
La Biblia está llena de ejemplos que demuestran que Dios no
acepta las buenas intenciones cuando éstas vienen acompañadas
de la ignorancia o la rebeldía a Su Palabra.

Un caso claro de ello es el de Uza. 2Samuel 6.1-11. Dios castigó a


David, y a Uza por ignorar sus instrucciones. David quedó
600

avergonzado porque no pudo llevar el Arca para sí, como


pretendía. Y Uza pagó con su vida el tocar el Arca que Dios había
dicho que sólo los sacerdotes debían tocarla.

Es posible que nos parezca una decisión dura. Pero Dios es justo
y todo lo que hace lo hace bien, aunque no lo entendamos. Él
tiene razones que no entendemos. Como dice Isaías 45.9 ¡Ay del
que pleitea con su Hacedor! ¡el tiesto con los tiestos de la tierra!
¿Dirá el barro al que lo labra: ¿Qué haces?

Dios le quitó el reino a Saúl porque no obedeció al guardar las


vacas para el sacrificio a Dios. Su intención fue buena, pero Dios
lo desechó como inservible, para dirigir a su pueblo. 1Samuel
15.17-23.

El verso 22 es muy interesante: ¿Se complace Jehová tanto en los


holocaustos y víctimas, como en que se obedezca a las palabras
de Jehová? Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios,
y el prestar atención que la grosura de los carneros.

No basta con las buenas intenciones. Números 16 muestra como


los hijos de Coré quisieron ofrecer incienso a Dios y fueron
tragados vivos por la tierra. Porque con las cosas de Dios no se
debe jugar. No basta con buenas intenciones, debemos recuperar
el temor de Dios.

En nuestro afán por hacer atractivo a Dios para el mundo, le


hemos despojado de Su autoridad y soberanía. De su terrible
poder, lo cual es un lamentable error que hay que corregir.

Dios debe ser temido, es decir, respetado. Y quienes no lo


respetan, pagarán por ello. Les guste o no, esta es la verdad. ¿Por
qué creen que ha avanzado tanto el pecado y la maldad, sino
porque el mundo ha dejado de temer a Dios?

Nos han convencido e que Dios sólo es bueno. Y al engrandecer


ese atributo de la naturaleza Divina, han empequeñecido otros
601

como su Poder y Autoridad ; Su Santidad y su Justicia. Debemos


volver a las Escrituras y retomar la verdad donde la dejamos.

21. Pablo reconoce que no fue lo suficientemente fuerte como


para hacer lo mismo que aquellos sinvergüenzas. Él no fue lo
suficientemente fuerte como para mentir, engañar, y estafar a los
corintios.

Hay personas que son fuertes para ese tipo de cosas. Es decir,
para lo malo. Después para lo bueno no tienen la misma fuerza.
Gracias a Dios, él escogió lo débil del mundo para avergonzar a
los poderosos. 1Corintios 1.26-29.

Es evidente que el ministerio de Pablo no estaba enfocado en sí


mismo y sus propios intereses, como los de estos falsos
acusadores.

Pero ha llegado el momento de cumplir con su obligación. Como


dirían en las películas: “un hombre tiene que hacer lo que tiene
que hacer”.

Pablo afirma su disposición a ser osado. De modo que, ya que


ellos se atreven a jactarse, él va a demostrar que también puede
hacerlo. Si los demás afirman tener méritos, él también los tenía.

Pero no lo hará como los falsos para gloriarse a sí mismo y


menospreciar a los demás, sino para ayudar a los corintios a
liberarse del yugo de maldad de aquellos que los explotaban.

El problema es que, como escribió Mark Twain, es más fácil


engañar a alguien que convencerlo de que está engañado. Pero
Pablo era un hombre de recursos y estaba dispuesto a
demostrarlo, a fin de que los corintios comprendieran
completamente el daño que se ocasionaban a sí mismos al dejarse
manipular y abusar de aquellos judíos.
602

Actualmente, enfrentamos situaciones similares. Multitud de


falsos apóstoles y pastores se han adueñado de las almas y las
están explotando vilmente.

Estos charlatanes religiosos arrastran tras de sí a multitud de


seguidores, hombres y mujeres demasiado crédulos que se dejan
esclavizar de sus falsas doctrinas. Llegando incluso a idolatrar a
su “líder”.

Lo triste no es que la gente siga la mentira. Lo realmente triste es


que algunos cristianos se dejen engañar de la misma manera,
alejándose de la verdad para seguir el error.

A partir de aquí, Pablo hará una lista de sus méritos como siervo
de Jesucristo, que incluyen el haber sufrido arduamente por amor
del evangelio.

22-31. Pablo pasará a continuación a comparar las obras de los


charlatanes, con sus propias obras, como ministro del evangelio.
Sus muchos sufrimientos por amor de Dios y de aquellos a los
que Dios le envió a servir.

Ministerio que contrasta enormemente con el de aquellos que sólo


se limitaban a criticarle a él con la esperanza de que los corintios
les mantuviesen.

¿Qué les parece las experiencias del apóstol Pablo? ¿Creen que
fue fácil para él la vida y el ministerio cristiano? Es evidente que
no.

¿Qué les parece si comparamos a Pablo y su ministerio con los


que actualmente se apropian indebidamente del título de apóstol?
¿Tendrán éstos falsos apóstoles actuales experiencias similares a
las de Pablo? De ninguna manera.

¿Cómo son los apóstoles actuales? ¿Son gente dispuesta a sufrir y


aún morir por el evangelio como Pablo? De ningún modo. Éstos
obreros fraudulentos hablan de promesas y prosperidad. Se
603

ufanan de llevar una buena vida de lujos, como evidencia de la


bendición de Dios.

Actualmente hay muchos falsos siervos que están arruinando a los


hijos de Dios con sus mentiras y falsas doctrinas. Ha llegado la
hora de que el pueblo de Dios despierte del letargo y aprenda a
discernir entre el bien y el mal.

Reconozcan que le han engañado y que se aparte de todo aquel


que le está mintiendo por avaricia.

¿Creen que Pablo estaba fuera de la voluntad de Dios por haber


sufrido tanto? ¿Murió Pablo por estar en pecado? En absoluto.
Pablo demostró con su vida y ministerio su total dedicación y
entrega a Dios y su ministerio.

Aun hoy, en pleno siglo XXI el testimonio de Pablo sigue


asombrando por su ejemplo. No hay entre los apóstoles quien
pueda hacerle sombra. Ni siquiera entre los verdaderos apóstoles,
mucho menos entre los falsos.

¿Se quejó Pablo de sus experiencias? ¿De sus sufrimientos por


amor de Dios? Nunca, más bien se glorió de ellos. Pero no cabe la
menor duda de que servir a Dios, en contra de lo que algunos
enseñan hoy en día, conlleva un alto precio.

Nos quedamos haciendo una comparativa entre ministros. Pablo


se está comparando con aquellos que le acusaban de no ser un
buen apóstol de Cristo.

Dijimos que debemos aprender a discernir entre quienes sirven a


Dios y quienes se sirven de Dios, y les encargué un trabajo
¿recuerdan en qué consistía? En leer el libro de Malaquías.
Debíamos tener dos preguntas en mente, ¿recuerdan cuáles eran?

¿A quiénes les está exhortando Dios por medio del profeta? Y


¿Por qué? ¿Lo han descubierto? Perfecto, ahora comprobaremos
si hicieron bien el trabajo.
604

Les anuncié que este pequeño ejercicio sería revelador. Un


ejercicio que todo cristiano debiera hacer, pero que muy pocos
hacen. Me refiero a leer algunos pasajes y prestar atención a lo
que dicen con respecto al tema que estamos tratando. Comparar a
los verdaderos siervos de Dios con los falsos.

Malaquías es un libro pequeño. ¿Cuántos capítulos tiene? Sólo


tiene cuatro capítulos. Aún así, muy pocos han leído. Y eso que es
mal citado por muchos pastores. ¿Lo leyeron completo? Espero
que sí.

¿Qué han aprendido con ese trabajo? Espero que descubrieran


cómo al comparar a los sacerdotes de Israel, con Pablo. Ahí
tenemos dos estilos de ministerios bien distintos.

Como todos saben, Malaquías es un libro muy citado por algunos


falsos pastores, que se dedican a robar a la gente que no conoce la
Palabra de Dios. Se aprovechan de la ignorancia de la mayoría.

¿Cuál es la frase que más se conoce del libro de Malaquías?


Malditos sois con maldición, porque vosotros, la nación toda, me
habéis robado. Traed todos los diezmos al alfolí. Malaquías 3.9-
10.

Hagamos un repaso breve entonces, y respondamos: ¿A quiénes


les está reprendiendo Dios por medio del profeta? Veamos:

Malaquías 1.6-8 ¿A quiénes les está hablando Dios? A los


sacerdotes. Esto es muy importante porque es el contexto del
pasaje 3.9-10 que hemos leído antes. Para poder entender aquellas
palabras, debemos tener en cuenta éstas.

Dios no estaba reprendiendo al pueblo porque no diezmara, sino a


los sacerdotes.
605

¿Estaban haciendo bien o mal estos sacerdotes? Si estaban siendo


reprendidos, sin duda que estaban actuando mal. ¿Qué estaban
haciendo mal? Teniendo en cuenta estos tres versículos:

• No tenían temor de Dios.


• Menospreciaban el Nombre de Dios.
• Ofrecían pan inmundo sobre el altar.
• Pensaban que la mesa del Señor era despreciable. ¿Qué
significaba eso? Que hablaban mal de la provisión de Dios.
• Sacrificaban a Dios los peores animales y se quedaban con
los buenos para ellos.
• Apreciaban más al príncipe humano que a Dios.

Si comparamos a estos sacerdotes y lo que hacían con Pablo y su


ministerio, ¿Eran iguales? No. ¿Quién obraba bien y quién mal?
Los sacerdotes de Israel obraban mal y Pablo bien.

¿Creen que si los corintios hubieran hecho este ejercicio se


hubieran dejado engañar de aquellos falsos apóstoles? Desde
luego que no. ¿Creen que si los cristianos de hoy día hicieran
ejercicios de estudio como este se dejarían engañar como lo
hacen? Por supuesto que no.

Pero ahí no terminaban los pecados de estos malos siervos. La


lista de sus pecados continúa. Leamos ahora Malaquías 1.11-14 y
respondamos ¿qué estaban haciendo mal:

• Profanaban el Nombre de Dios entre las naciones.


• Veían el ministerio como un fastidio, no como un privilegio.
• Ofrecían a Dios lo hurtado, lo cojo y enfermo.

Seguimos descubriendo más pecados de esos malos siervos en


Malaquías 2.7-8, ¿qué más hacían mal?

• No cumplían las expectativas de Dios.


• Se apartaron del camino.
• Usaban la ley para tropiezo de la gente.
606

• Habían corrompido el pacto de Dios con Leví.

Sigue la larga lista de maldades, asómbrense, en Malaquías 2.14:

• Cometían adulterio.

Y por si fuera poco, en Malaquías 2.17:

• Enseñaban falsa doctrina.

Parece increíble, pero aún hay más: Malaquías 3.5:

• Practicaban la hechicería,
• el adulterio,
• juraban en mentira,
• defraudaban a los jornaleros,
• no atendían a las viudas, ni a los huérfanos,
• hacían injusticia al extranjero,
• no tenían temor de Dios.

Como muchos hoy, han dejado la Palabra de Dios y se han vuelto


a los pensamientos de su malvado corazón y a lo pagano.

Y lista no termina, sigue, Malaquías 3.7:

• Se habían apartado de las leyes de Dios y no las guardaban.

Seguían tradiciones humanas, pero no los mandamientos de Dios.

Aunque parezca mentira, hay más: Malaquías 3.8:

• Robaban de los diezmos y ofrendas del pueblo.


• Contaminaban al pueblo con su mal ejemplo.

Claro que aquí Dios culpabiliza a todo el pueblo, pero ¿Por qué el
pueblo pecaba? Por el mal ejemplo de sus sacerdotes. Si quienes
tienen que enseñar y dar ejemplo, mienten, roban y manipulan,
607

¿cómo no va a pecar el pueblo? Generalmente el pueblo sigue los


pasos de quienes le enseñan.

Bueno al menos de quienes enseñan lo malo. Porque es mucho


más difícil conseguir que sigan el buen ejemplo.

Por último, Malaquías 3.13-14:

• Hablaron violetamente contra Dios.


• Menospreciando el ministerio.
• Quejándose de sus aflicciones.

¿Qué enseña Malaquías 3.16-18? Entonces os volveréis, y


discerniréis la diferencia entre el justo y el malo, entre el que
sirve a Dios y el que no le sirve.

Enseña que los que tememos a Dios aprenderemos a discernir


entre los buenos y malos siervos de Dios.

Gracias a Dios no son todos. Malaquías 2.4-6 De ahí la


importancia de no generalizar cuando vemos algún mal en el
pueblo de Dios. Aunque eran más los malos que los buenos, no
todos eran malos.

Así pasó en tiempos de Malaquías, en tiempos de Pablo, y así


también pasa actualmente. Muchos caen en sus redes de engaño
porque no conocen la Palabra de Dios. Creyendo que hacen bien,
se están alejando de Dios.

¿Les resultó interesante el ejercicio? Siempre es interesante


estudiar la Palabra de Dios. Os invito a que hagáis otro ejercicio.
Se trata de estudiar Ezequiel 34. En ese capítulo, Dios habla a los
pastores de Israel, y les reprende usando un lenguaje figurado.
Sería muy interesante que estudiaran ¿cómo discernir un buen de
un mal pastor, teniendo en cuenta lo que Dios enseña ahí.
608

Sería bueno que hicieran una lista de las cosas que hacía mal y
qué cosas debían haber hecho en su lugar. La próxima semana les
preguntaré sobre esa lista. Es un buen tema para estudiar, así
conseguirán aprender a discernir entre el bueno y mal ministro.

La semana pasada hicimos un ejercicio práctico de estudio


mediante el cual aprendíamos a discernir entre un verdadero
siervo de Dios y falso obrero. Lo hicimos estudiando el libro de
Malaquías.

También os aconsejé estudiar un capítulo que os ayudaría a


ahondar en el tema ¿Recuerdan qué capítulo era? Ezequiel 34.
¿Cuántos lo estudiaron? ¿Hicieron dos listas de características de
un buen y un mal siervo de Dios?

Sigamos donde lo dejamos.

22. Es evidente que Pablo era hebreo, israelita, descendiente de


Abraham y más concretamente de la tribu de Benjamín.
Filipenses 3.5.

No obstante, actualmente se está dando un fenómeno curioso.


Muchos que no son hebreos, israelitas, ni descendientes de
ninguna tribu, están judaizándose y judaizando a otros.

Hasta el extremo de convertirlo en un requisito para hablar con


supuesta autoridad de cualquier tema relacionado con la Escritura.
Algo demencial y sin ningún fundamento bíblico.

Es muy importante que respondan una pregunta. Presten atención


y respondan con claridad. ¿Hay algún texto en la Biblia que
indique que los cristianos debemos convertirnos al judaísmo? La
respuesta es: obviamente que no.

En cambio, sí hay pasajes en las epístolas paulinas que llaman a


los judíos a convertirse a Cristo. Juan 3.3; Hechos 3.19.
609

Esto es muy importante. No debemos confundir el atún con el


betún.

Escuchen bien: Para ser un buen cristiano no es necesario hacerse


judío, ni hablar hebreo, ni “spanbreo” que es una mezcla de
español y hebreo, que muchos judaizantes practican.

Es absurdo y un infantilismo teológico pretender que tengamos


que llamar a nuestro Señor Jesús, Yeshua Hamashíaj. Le
llamamos Jesús, como en la Palabra de Dios está escrito. A Dios
le podemos llamar Hehová, Yahweh, Altísimo, Padre, o de
cualquier otra manera de las que vemos que en la Biblia se le
denomina. Que no es una sola, como algunos pretenden.

Nosotros ¿somos judíos o gentiles? Somos gentiles. ¿Nos


convertimos a la fe de Cristo o de los hebreos? Sin duda a la de
Cristo.

¿Creemos en el judaísmo mosaico que aun espera la llegada de


Meshías o en la fe depositada en el Hijo de Dios, que ya vino y
regresará a por su Iglesia y no por Israel? Es evidente que lo
segundo.

Confundir a Israel con la Iglesia y viceversa es un simplismo


teológico que lleva a errar gravemente en la doctrina y a apartarse
de la verdad. Pues, hay enormes diferencias entre Israel y la
Iglesia, que de no tenerlas en cuenta entrará en multitud de
contradicciones, acabando en falsas doctrinas y herejías.

A Israel se pertenece por nacimiento en la carne. A la Iglesia por


nuevo nacimiento espiritual. Juan 1.9-13.

La evidencia de pertenecer a Israel es la circuncisión, la evidencia


de pertenecer a la Iglesia es el Sello del Espíritu Santo. Génesis
17.10-14. Y Efesios 1.13-14.
610

Israel está bajo el antiguo pacto, la Iglesia bajo el nuevo pacto.


Como está escrito en Romanos 3.21-26; Hebreos 7.18; 8.6-7, 13;
9.15.

Israel bajo la ley de Moisés, la Iglesia bajo la gracia de Jesucristo.


Juan 1.17.

Y así podría seguir con multitud de diferencias que si no las


tienen en cuenta acabarán engañados y engañando a los demás.

Cuando un cristiano dice que pertenece al Israel espiritual comete


un error de interpretación bíblica. Sus postulados son erróneos, de
ahí que llegue a conclusiones también erróneas.

Mi consejo, pues, para quienes no saben discernir entre Israel y la


Iglesia es que dediquen más tiempo a estudiar las Sagradas
Escrituras, para que puedan conocerla mejor, y puedan ser
bendición a otros cuando las citen, con conocimiento de causa.

De lo contrario, no darán buenos consejos, y aun sin querer,


puede que les hagan daño a alguien desviándolos de la verdad.
Algo que sin duda tiene consecuencias eternas.

Así que, aunque Pablo fuera hebreo, israelita, y descendiente de


Abraham, eso no quiere decir que también nosotros debamos
serlo.

Algunos preguntan: Pero Jesús era hebreo ¿no? Sí, pero que
Cristo se manifestara en la cultura hebrea no diviniza esa cultura.
No la convierte en la cultura de Dios. Dios no tiene cultura.

Es muy importante entender esto, para no acabar imponiendo a


los creyentes del siglo XXI el modo de vivir de los judíos del
siglo I.

Quienes no tienen en cuenta estas cuestiones, es decir, entender el


contexto histórico de la Palabra de Dios, acaban cometiendo
611

enormes errores doctrinales y llenando las iglesias de herejías


legalistas.

La imposición del velo a la mujer, la prohibición del uso de joyas,


el que la mujer calle en la iglesia, y cuestiones similares, tienen
que ver con textos históricos que tratan asuntos de la cultura de
aquella época, que nada tiene que ver con la Iglesia misma, sino
con aquella iglesia, en aquel tiempo histórico, y bajo aquellas
circunstancias. Circunstancias que si desconoces, te llevan al
error.

23. La pregunta del apóstol en este pasaje es la que estamos


dilucidando en este tema. ¿Son ministros de Cristo? Todos los
cristianos debiéramos poder discernir si alguien que afirma servir
a Dios es, o no, ministro de Cristo.

En esta lista de penurias y penalidades, Pablo evidencia la


autenticidad de su ministerio. Él lo pasó realmente mal, aun así,
consideraba aquellas experiencias como parte del propósito
Divino para su vida y su ministerio.

Él no predicaba para hacerse rico, ni para conseguir tener una


mansión terrenal, ni gran influencia a nivel político, como
pretenden los pastores españoles al visitar al rey. Pablo predicaba
a Cristo porque realmente era un ministro del Señor.

La semana pasada terminé preguntando:

¿Se quejaba Pablo de todas estas penalidades que tuvo que sufrir
por causa de su ministerio? No. No le vemos quejarse como a los
sacerdotes de Israel a los que Dios les reprendió por medio del
profeta Malaquías, por menospreciar el ministerio diciendo: Por
demás es servir a Dios. ¿Qué aprovecha que guardemos su ley, y
que andemos afligidos en presencia de Jehová de los ejércitos?
Malaquías 3.14.

¿Exigía un trato especial por ser “el siervo”? Desde luego que no.
Tampoco le vemos exigiendo que lo traten a cuerpo de rey, por
612

ser el “siervo” de Dios, como hacen muchos falsos apóstoles en la


actualidad, sino que le vemos, aceptando sus circunstancias como
parte del plan de Dios.

Cuando estudiamos el libro de los Hechos de los Apóstoles,


pudimos comprobar la vida de este siervo de Dios. Aunque aquí
se nos da menos detalles que en Hechos. Es interesante
comprobar qué cosas se dicen en Hechos que aquí no se
mencionan, y meditar en ellas.

Los últimos versos de esta perícopa, son una verdadera expresión


de amor de un verdadero pastor. Creo sinceramente que Pablo
cumplió ampliamente las recomendaciones de Pedro a los
pastores.

Como está escrito en 1Pedro 5.1-4: Ruego a los ancianos que


están entre vosotros, yo anciano también con ellos, y testigo de
los padecimientos de Cristo, que soy también participante de la
gloria que será revelada: 2Apacentad la grey de Dios que está
entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino
voluntariamente; no por ganancia deshonesta, sino con ánimo
pronto; 3no como teniendo señorío sobre los que están a vuestro
cuidado, sino siendo ejemplos de la grey. 4Y cuando aparezca el
Príncipe de los pastores, vosotros recibiréis la corona
incorruptible de gloria.

¿Abundan este tipo de pastores? Desgraciadamente no. No hay


muchos pastores que reúnan estos requisitos hoy en día. Abundan
más los que buscan ganancias deshonestas, y ejercen señorío
sobre la Iglesia.

¿Qué podemos hacer al respecto? Algunos pensarán que nada.


Pero siempre hay algo que podemos hacer. Podemos orar para
que Dios quite a los malos obreros, y levante verdaderos siervos.

30-33. ¿De qué te glorías tú de tus éxitos o fracasos?


Generalmente todos nos gloriamos de nuestras victorias. En
cambio, es muy curioso que Pablo termine este capítulo relatando
613

un hecho que podría interpretarse como bochornoso. La huida en


una canasta.

Los soldados romanos siempre contaban cómo habían escalado


los muros enemigos para luchar y vencer; Pablo relata, no su
escalada, sino su descenso. ¿Qué les sugiere esto?

Es como si el apóstol quisiera menospreciar el orgullo y la


vanagloria. Justamente, los judíos que se consideraban mejores
que Pablo le acusaban de ser débil, sin entender que esa es la
clave que distingue a los verdaderos siervos de Dios.

Aquellos que no se glorían en lo que hacen ni en lo que han


conseguido, sino en Dios. Conscientes de que es el único modo de
dar toda gloria a Dios, cuando somos débiles para lo malo.

Isaías 5.20-23 ¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno


malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que
ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo! 21¡Ay de los
sabios en sus propios ojos, y de los que son prudentes delante de
sí mismos! 22¡Ay de los que son valientes para beber vino, y
hombres fuertes para mezclar bebida; 23los que justifican al
impío mediante cohecho, y al justo quitan su derecho!

Pablo se gozaba en su debilidad. ¿Recuerdan el verso 21? Para


vergüenza mía lo digo, para eso fuimos demasiado débiles. ¿Para
qué fue débil? Para haber actuado como aquellos sinvergüenzas.
Para haber hecho lo malo. Para menospreciar a un hermano o
compañero de ministerio. Para vanagloriarse exaltándose así
mismo.

¿Recuerdan el Proverbios 27.2? Alábete el extraño, y no tu propia


boca; El ajeno, y no los labios tuyos.

Y escapé de sus manos. ¿Se avergüenza Pablo de reconocer que


escapó? De ningún modo. En ocasiones la huida es el camino
correcto.
614

Como cuando Pablo escribe en 2Timoteo 2.22: Huye también de


las pasiones juveniles, y sigue la justicia, la fe, el amor y la paz,
con los que de corazón limpio invocan al Señor.

¿Qué nos está enseñando Pablo aquí? Que no siempre huir es de


cobardes. Hay cosas de las cuales debemos huir o de lo contrario
pagaremos las consecuencias.

En Génesis 39.12 se nos relata cómo José huyó de la esposa de


Potifar. Muchos habrían caído en la tentación y lo habrían
justificado.

¿Acaso no soy yo un hombre y ella una mujer?


¿No soy yo un esclavo y ella mi ama?
¿Qué podría hacer yo si ella me buscó? Además,
¿Quién podría enterarse? No había nadie en la casa.

Estas y muchas más excusas hubiera podido poner José, sin


embargo, él prefirió respetar a aquella mujer y a su amo. Pero
sobre todo, quiso respetar a Dios. En el verso 9 dice: ¿cómo, pues,
haría yo este grande mal, y pecaría contra Dios?

Aún cuando aquello le llevó a la cárcel, José hizo lo correcto, y


por cuanto fue fiel en lo poco, y huyó del pecado, Dios lo puso en
lo más alto.

Como digo, no siempre huir es de cobardes. También Lot huyó.

Todos conocemos el pasaje de Génesis 19 en el que se nos habla


de la destrucción de Sodoma y Gomorra. De cómo Dios libró a
Lot y su familia de la destrucción por medio de ángeles.

En el verso 17 dice: Y cuando los hubieron llevado fuera, dijeron:


Escapa por tu vida; no mires tras ti, ni pares en toda esta
llanura; escapa al monte, no sea que perezcas.

A veces, debemos huir para salvar la vida.


615

Ante la inminente catástrofe que se avecinaba, Dios evacuó a


quienes debían salvarse para que no perecieran. En tales casos, es
muy importante seguir las instrucciones, pues lo contrario puede
ser muy peligroso.

La historia de Lot contiene numerosas enseñanzas que


debiéramos estudiar, meditar y no olvidar. Por ejemplo: ¿Por qué
Lot estaba en aquella tierra perversa? Porque fue egoísta.

Cuando los pastores de Lot tuvieron disputa con los pastores de


Abram, en Génesis 13.8-13 dice: Entonces Abram dijo a Lot: No
haya ahora altercado entre nosotros dos, entre mis pastores y los
tuyos, porque somos hermanos. 9¿No está toda la tierra delante
de ti? Yo te ruego que te apartes de mí. Si fueres a la mano
izquierda, yo iré a la derecha; y si tú a la derecha, yo iré a la
izquierda. 10Y alzó Lot sus ojos, y vio toda la llanura del Jordán,
que toda ella era de riego, como el huerto de Jehová, como la
tierra de Egipto en la dirección de Zoar, antes que destruyese
Jehová a Sodoma y a Gomorra. 11Entonces Lot escogió para sí
toda la llanura del Jordán; y se fue Lot hacia el oriente, y se
apartaron el uno del otro. 12Abram acampó en la tierra de
Canaán, en tanto que Lot habitó en las ciudades de la llanura, y
fue poniendo sus tiendas hasta Sodoma.

Muchas personas, incluso cristianas son como Lot, se dejan


seducir por el egoísmo. Ahora bien, ¿Qué dice el verso siguiente?
13
Mas los hombres de Sodoma eran malos y pecadores contra
Jehová en gran manera.

Así que, si no quieres tener que huir de la destrucción, huye


primero de los deseos mundanos de esta vida. No seas egoísta.

1Juan 2:15-16 “No améis al mundo, ni las cosas que están en el


mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él.
Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los
deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del
Padre, sino del mundo”.
616

Lot amó las cosas de este mundo permitió que su familia


conviviera con una sociedad perversa y mala. Incluso había
desposado a sus hijas con gente de aquella ciudad perversa.

Génesis 19.14 Entonces salió Lot y habló a sus yernos, los que
habían de tomar sus hijas, y les dijo: Levantaos, salid de este
lugar; porque Jehová va a destruir esta ciudad. Mas pareció a
sus yernos como que se burlaba.

La Palabra de Dios nos advierte contra el hacer amistad con el


mundo, al decir:“¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad
del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que
quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios”.
Santiago 4:4.

Lot tenía que haber huido al percatarse de la falta de calidad


moral de aquella tierra. Pero el egoísmo y el afán de las riquezas
le mantuvo allí y por aquella causa finalmente lo perdió todo.

Todo aquello por lo que había trabajado; todos sus bienes


materiales, incluso su mujer. Por cuanto no siguió las
instrucciones que los ángeles le dieron cuando huían.

Génesis 19.17 Y cuando los hubieron llevado fuera, dijeron:


Escapa por tu vida; no mires tras ti, ni pares en toda esta
llanura; escapa al monte, no sea que perezcas.

Génesis 19.26 Entonces la mujer de Lot miró atrás, a espaldas de


él, y se volvió estatua de sal.

¿Por qué no siguió las instrucciones? No eran difíciles de seguir.


La incredulidad, la desobediencia, y el apego a las cosas
terrenales, son motivos de grave daño y perjuicio. La mujer de
Lot fue desobediente y pagó por ello.

Lot huyó. Aunque no siempre huir es de cobardes, sino de


inteligentes, y en ocasiones, de espirituales. Pablo huyó, y no se
617

avergonzaba de ello; más bien se gloriaba de haber huido. Las


cosas no se ven del mismo modo cuando tienes fe.

Volviendo a 2Corintios, el siguiente capítulo después de contar


cómo descendió en méritos delante de los hombres, contará cómo
ascendió ante la mirada de Dios.

Porque hay dos tipos de victorias, una en la carne y otra en el


espíritu. Algunos se ufanan de sus victorias carnales, Pablo de las
suyas espirituales. ¿De cuáles te alegras más?

12.1 En este capítulo encontraremos el corazón del evangelio y


ministerio de Pablo: gracia suficiente para la salvación, y poder
en la debilidad para enfrentar la vida cristiana.

Pablo comienza este capítulo reconociendo que no es conveniente


gloriarse, pero echa esta aclaración, continúa defendiendo que la
responsabilidad de su jactancia estaba en la de sus adversarios.

En el 12.11 dice: Me he hecho un necio al gloriarme; vosotros me


obligasteis a ello, pues yo debía ser alabado por vosotros; porque
en nada he sido menos que aquellos grandes apóstoles, aunque
nada soy.

Es evidente que Pablo estaba dispuesto a tapar la boca de sus


adversarios, quienes se jactaban de experiencias místicas y
revelaciones, por lo cual el apóstol se sube al carro y entra en ese
mismo terreno y demostrará que él tiene más razones que ellos
para ufanarse de tales experiencias, pues llegó hasta el mismo
cielo.

¿Qué hace un profesional médico, abogado, arquitecto u otro,


cuando enfrenta la acusación de ser un impostor o un
incompetente? Presenta sus credenciales para demostrar que tiene
la capacitación adecuada y el derecho de ejercer su profesión.

Pablo hace lo mismo aquí. Esta es la razón por la cual saca a


relucir estas experiencias de sus visiones y revelaciones.
618

Es conveniente aclarar que una cosa son las visiones y otra las
revelaciones. Las visiones tenían que ver con una especie de
sueño, dormido o despierto, mediante el cual Dios mostraba su
voluntad a alguien.

Mientras que las revelaciones siempre implican el desvelar algún


misterio escondido. Tanto la palabra visiones como revelaciones
son usadas con frecuencia en relación con el apóstol, por ejemplo:

Hechos 16.6-10 Y atravesando Frigia y la provincia de Galacia,


les fue prohibido por el Espíritu Santo hablar la palabra en Asia;
7
y cuando llegaron a Misia, intentaron ir a Bitinia, pero el
Espíritu no se lo permitió. 8Y pasando junto a Misia,
descendieron a Troas. 9Y se le mostró a Pablo una visión de
noche: un varón macedonio estaba en pie, rogándole y diciendo:
Pasa a Macedonia y ayúdanos. 10Cuando vio la visión, en seguida
procuramos partir para Macedonia, dando por cierto que Dios
nos llamaba para que les anunciásemos el evangelio.

Como podemos ver en este pasaje, Dios usó esta visión para dar
dirección al apóstol sobre a dónde debía dirigirse para predicar el
evangelio.

No debía ser fácil para el apóstol haber realizado tres viajes


misioneros en aquella época, sin tener claro dónde ir ni qué se
encontraría allí. Un ministerio de fe.

Algunos me han preguntado si Dios habla hoy por medio de


visiones. La respuesta es que no. No lo hace de manera general
porque las visiones fueron usadas por Dios para guiar a sus
siervos cuando aun la Escritura no estaba terminada.

Gracias a Dios, ahora no dependemos de visiones, sino que


tenemos la Palabra de Dios clara y precisa que nos indica qué
tenemos que hacer, cómo debemos hacerlo y por qué.
619

Aunque en ciertas cuestiones debemos orar a Dios para que nos


de dirección, él lo hará, no tanto por visiones, sino por el Espíritu
Santo que da testimonio a nuestro espíritu fe cuál es su voluntad.
Romanos 8.16; 9.1;

También ha puesto a siervos que nos ministren y aconsejen sobre


cómo tomar decisiones sabias.

1Samuel 9.9 (Antiguamente en Israel cualquiera que iba a


consultar a Dios, decía así: Venid y vamos al vidente; porque al
que hoy se llama profeta, entonces se le llamaba vidente.)

Lo de vidente no significa que tuviera dos dientes, sino que tiene


que ver con las visiones mediantes las cuales Dios mostraba Su
voluntad en aquella época.

Hoy tenemos la bendición de poder consultar la voluntad de Dios


sin tener necesidad de visiones, videntes, ni profetas, porque
como dice 1Pedro 1.19-21 Tenemos también la palabra profética
más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una
antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día
esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones;
20
entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura
es de interpretación privada, 21porque nunca la profecía fue
traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios
hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.

¿Eso quiere decir que Dios no puede dar una visión a alguien en
la actualidad? De ningún modo. No podemos limitar a Dios, ni
encasillarlo. Dios es todo poderoso y ¿Qué significa eso? Que
puede hacer lo que quiera.

Pero toda experiencia mística debe ser filtrada por la Palabra de


Dios. De tal modo que debemos tener claro que Dios no dirá
jamás nada que contradiga lo que ya está revelado en las Sagradas
Escrituras; y lo que ya está en las Escrituras no lo dirá por
revelación, pues, no es necesario, pues ya fue revelado.
620

En cuanto a revelaciones, la idea usada aquí es abrir la mente a


una verdad o interpretación nueva. Todo el que venga con nuevas
revelaciones debemos decirle que no las necesitamos. Si
contradicen la Biblia no las necesitamos. Y si dicen lo mismo que
está en la Biblia tampoco.

Además, ya no quedan misterios que descubrir en cuanto a


nuestra salvación. Al respecto de esto es importante entenderlo
para que no seamos engañados, por falsos profetas de nuevas
revelaciones.

No son pocos los que hablan de nuevas revelaciones. Incluso


menosprecian la Palabra de Dios en pro de que la gente se aleja
de la verdad y dependa de sus falsas revelaciones.

De entre estos, Guillermo Maldonado es uno de los que afirman


que la Palabra de Dios escrita está bien, pero que es mejor una
revelación “fresca”. Algo que sólo te alejará de la verdad para
poder manipularte.

En Romanos 16.25-27 Según el apóstol Pablo: el misterio que se


había mantenido oculto desde tiempos eternos, ha sido
manifestado ahora por las Escrituras, y se ha dado a conocer a
todas las gentes para que obedezcan la fe.

Toda sabiduría oculta ya nos ha sido revelada por el Espíritu,


1Corintios 2.6-10 Sin embargo, hablamos sabiduría entre los que
han alcanzado madurez; y sabiduría, no de este siglo, ni de los
príncipes de este siglo, que perecen. 7Mas hablamos sabiduría de
Dios en misterio, la sabiduría oculta, la cual Dios predestinó
antes de los siglos para nuestra gloria, 8la que ninguno de los
príncipes de este siglo conoció; porque si la hubieran conocido,
nunca habrían crucificado al Señor de gloria. 9Antes bien, como
está escrito: Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, Ni han subido en
corazón de hombre, Son las que Dios ha preparado para los que
le aman. 10Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu;
porque el Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios.
11
Porque ¿quién de los hombres sabe las cosas del hombre, sino
621

el espíritu del hombre que está en él? Así tampoco nadie conoció
las cosas de Dios, sino el Espíritu de Dios.

De modo que, puedes estar absolutamente seguro de que, todos


los grupos gnósticos que enfatizan que mediante sus cursos y
libros puedes alcanzar la sabiduría arcana, que ha permanecido
oculta por los siglos, y reservadas para los que aman la gnosis,
sólo son charlatanes, dementes, o malas personas que sólo buscan
tu dinero.

Efesios 3.3-6: Que por revelación me fue declarado el misterio,


como antes lo he escrito brevemente, 4leyendo lo cual podéis
entender cuál sea mi conocimiento en el misterio de Cristo,
5
misterio que en otras generaciones no se dio a conocer a los
hijos de los hombres, como ahora es revelado a sus santos
apóstoles y profetas por el Espíritu: 6que los gentiles son
coherederos y miembros del mismo cuerpo, y copartícipes de la
promesa en Cristo Jesús por medio del evangelio.

Los misterios ya fueron revelados. Están escritos en la Palabra de


Dios, por los apóstoles y profetas.

Colosenses 1.26-27: El misterio que había estado oculto desde los


siglos y edades, pero que ahora ha sido manifestado a sus santos,
27
a quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas de la gloria de
este misterio entre los gentiles; que es Cristo en vosotros, la
esperanza de gloria.

Los santos, sabemos que no quedan misterios por resolver.

1Timoteo 3.16: E indiscutiblemente, grande es el misterio de la


piedad: Dios fue manifestado en carne, Justificado en el Espíritu,
Visto de los ángeles, Predicado a los gentiles, Creído en el
mundo, Recibido arriba en gloria.

El único misterio que quedaba por desvelar está relacionado con


la iniquidad, y también fue desvelado, como está escrito en
2Tesalonicenses 2.7-8: Porque ya está en acción el misterio de la
622

iniquidad; sólo que hay quien al presente lo detiene, hasta que él


a su vez sea quitado de en medio.

La semana pasada estuvimos hablando sobre las visiones y


revelaciones y las diferencias entre estas dos experiencias
místicas.

Hablamos sobre los misterios ¿Qué fue lo que vimos en la


Escritura respecto de los misterios? Que todos los misterios de la
sabiduría necesaria para la salvación del ser humano, habían
quedado revelados en la Palabra de Dios.

Afirmamos con Pedro que tenemos la Palabra profética más


segura. ¿Cuál es esa Palabra? La de Dios.

¿Qué debemos pensar de cualquiera que hable de alcanzar


distintos niveles de sabiduría arcana mediante cursos y libros?
Que estaría engañado o engañando. Hoy seguiremos meditando
en este capítulo.

Es evidente que los versos 2 y 3 Pablo reconoce que no sabe si tal


visión fue en el cuerpo o fuera de él, pero de lo que no le cabía la
menor duda es de que había estado en la presencia del Señor.

Arrebatado al paraíso. Hay quienes afirman que no existe en la


Biblia la doctrina del arrebatamiento. Otros, afirman que habrá un
arrebatamiento, pero después de la Gran Tribulación, haciendo
que la Iglesia pase por el juicio de la ira de Dios.

Este es un tema importante porque ha dividido a la Iglesia por


mucho tiempo. Toda doctrina que cause división debe ser
estudiada en profundidad, para no hablar sin conocimiento de
causa.

¿Creen que es posible que un cristiano hable de estos temas sin el


necesario conocimiento? Sin duda. La mayoría de los que hablan
de estos temas lo hacen sin conocimiento. Sin haber realizado un
623

estudio en profundidad. Generalmente han oído a su pastor y se


han dado por satisfechos.

¿Sólo los pastores debemos estudiar la Biblia? De ningún modo,


es responsabilidad de todo cristiano.

Un estudio exhaustivo de la Escritura nos muestra lo errado de


algunas posturas concernientes al rapto o arrebatamiento.

El arrebatamiento lo vemos ya aquí prefigurado en Pablo. Aunque


por distinto motivo, no deja de ser un arrebatamiento, que
demuestra que Dios tiene poder para hacerlo, a uno o a millones
de personas al mismo tiempo.

Éste no es el único pasaje que lo muestra. Génesis 5.21-24 Vivió


Enoc sesenta y cinco años, y engendró a Matusalén. 22Y caminó
Enoc con Dios, después que engendró a Matusalén, trescientos
años, y engendró hijos e hijas. 23Y fueron todos los días de Enoc
trescientos sesenta y cinco años. 24Caminó, pues, Enoc con Dios,
y desapareció, porque le llevó Dios.

Así como llevó a Enoc, y lo libró de los males de este mundo, nos
llevará a la Iglesia y nos librará de la hora de prueba que ha de
venir sobre el mundo, para probar a los moradores de la tierra.

En Hebreos 11.5 se dice que fue traspuesto: Por la fe Enoc fue


traspuesto para no ver muerte, y no fue hallado, porque lo
traspuso Dios; y antes que fuese traspuesto, tuvo testimonio de
haber agradado a Dios.

La palabra que se traduce como traspuesto en el original griego es


metezéken que significa cambiar de lugar.

Otro personaje histórico de la Biblia que fue traspuesto o


arrebatado, prefigurando el futuro arrebatamiento de la Iglesia,
fue el profeta Elías. Lo encontramos en 2Reyes 2.11-12: Y
aconteció que yendo ellos y hablando, he aquí un carro de fuego
con caballos de fuego apartó a los dos; y Elías subió al cielo en
624

un torbellino. 12Viéndolo Eliseo, clamaba: ¡Padre mío, padre


mío, carro de Israel y su gente de a caballo! Y nunca más le vio;
y tomando sus vestidos, los rompió en dos partes.

Este episodio es otro pasaje claro tipo del arrebatamiento de la


Iglesia. Arrebatamiento que Pablo anuncia claramente en
1Tesalonicenses 4.15-18 Por lo cual os decimos esto en palabra
del Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado
hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron.
16
Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel,
y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en
Cristo resucitarán primero. 17Luego nosotros los que vivimos, los
que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos
en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos
siempre con el Señor. 18Por tanto, alentaos los unos a los otros
con estas palabras.

Este pasaje es muy mal interpretado por aquellos que afirman que
la Iglesia pasará la gran tribulación. Se aferran a que Pablo está
hablando de la segunda venida de Cristo que será después de la
tribulación.

Pero no tienen en cuenta lo que realmente dice Pablo aquí. ¿Está


hablando Pablo de la venida de Cristo? Sí, pero ¿está hablando
del regreso de Cristo a la tierra? Desde luego que no, sino de su
venida para recoger o arrebatar a la Iglesia. Por eso algunos se
equivocan.

El encuentro del que habla Pablo aquí ¿Dónde se produce? No es


en la tierra, sino en el cielo. Así que la venida de Cristo de la que
habla Pablo no se refiere al regreso de Cristo a la tierra.

Confundir esto ha llevado a muchos al error teológico de hacerles


creer que la Iglesia seguirá en el mundo cuando Dios esté
juzgando a Israel y las naciones incrédulas. Algo que no tiene
fundamento bíblico y que contradice abiertamente multitud de
pasajes del Antiguo y Nuevo Testamento.
625

Por otro lado, fíjense en las palabras finales. Respondamos


primero: ¿A quiénes está hablando Pablo a los incrédulos o a los
creyentes? Sin duda a los creyentes de Tesalónica.

¿Está dando un aviso que deba preocuparles a ellos y a nosotros?


De ningún modo, las palabras finales dejan bien claro que Pablo
está anunciando un evento glorioso, no un juicio de la ira de Dios
contra la Iglesia. Por eso termina diciendo: alentaos los unos a los
otros con estas palabras.

El apóstol Pablo, gran conocedor de la Sagrada Escritura, tenía


bien claro que la Gran Tribulación no era un juicio para la Iglesia,
sino para el Israel que rechazó al Mesías y para las naciones que
prefirieron quedar en su rebeldía y no reconocer al Salvador del
mundo. Por esa razón escribió:

1Tesalonicenses 5.9-10: Porque no nos ha puesto Dios para ira,


sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor
Jesucristo, 10quien murió por nosotros para que ya sea que
velemos, o que durmamos, vivamos juntamente con él.

Es muy interesante estudiar este pasaje lentamente, asimilando lo


que dice paso a paso. Después de leerlo detenidamente ¿De veras
creen que Pablo esperaba que la Iglesia pasaría la Gran
Tribulación? Desde luego que no.

La postura de Pablo estaba fijada en la misma Palabra de Dios


que conocía muy bien. Jeremías 30.7: ¡Ah, cuán grande es aquel
día! tanto, que no hay otro semejante a él; tiempo de angustia
para Jacob; pero de ella será librado.

Este pasaje aclara sin ningún lugar a dudas de que el juicio de


Dios que vendrá sobre la tierra no tiene que ver con la Iglesia,
sino con Jacob. Y no es el único. De este juicio hablará Jesús más
adelante, y ya veremos con quiénes y qué les decía.

Sofonías 1.14-18 Cercano está el día grande de Jehová, cercano


y muy próximo; es amarga la voz del día de Jehová; gritará allí
626

el valiente. 15Día de ira aquel día, día de angustia y de aprieto,


día de alboroto y de asolamiento, día de tiniebla y de oscuridad,
día de nublado y de entenebrecimiento, 16día de trompeta y de
algazara sobre las ciudades fortificadas, y sobre las altas torres.
17
Y atribularé a los hombres, y andarán como ciegos, porque
pecaron contra Jehová; y la sangre de ellos será derramada
como polvo, y su carne como estiércol. 18Ni su plata ni su oro
podrá librarlos en el día de la ira de Jehová, pues toda la tierra
será consumida con el fuego de su celo; porque ciertamente
destrucción apresurada hará de todos los habitantes de la tierra.

Algunas cosas importantes en este pasaje. La Gran Tribulación de


la que habla Sofonías es llamada “Día de la ira de Dios”. Es
interesante comprobar el motivo de la tribulación de la que habla
el verso 17. ¿Cuál es el motivo de esa gran tribulación? porque
pecaron contra Jehová.

Los pecados de la Iglesia ¿No fueron pagados por Cristo?


Ciertamente. 1Juan 3.5 Y sabéis que él apareció para quitar
nuestros pecados, y no hay pecado en él.

Otra cosa interesante del pasaje de Sofonías es la última frase que


leíamos: porque ciertamente destrucción apresurada hará de
todos los habitantes de la tierra. Si la destrucción será sobre
todos los habitantes de la tierra, es evidente que para ese entonces
la Iglesia ya no estará sobre la tierra, porque la Iglesia no será
destruida por su pecado.

Escrito está en Romanos 8.1-2: Ahora, pues, ninguna


condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no
andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. 2Porque la
ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley
del pecado y de la muerte.

Daniel 12.1 En aquel tiempo se levantará Miguel, el gran


príncipe que está de parte de los hijos de tu pueblo; y será tiempo
de angustia, cual nunca fue desde que hubo gente hasta entonces;
627

pero en aquel tiempo será libertado tu pueblo, todos los que se


hallen escritos en el libro.

Como pueden ver estas palabras hablan del juicio de Dios sobre
su pueblo de Israel. También se especifica que los que estén
escrito en el libro serán librados.

Pablo escribió en 1Tesalonicenses 1.10 y esperar de los cielos a


su Hijo, al cual resucitó de los muertos, a Jesús, quien nos libra
de la ira venidera.

También a los Romanos 5.8-10: Mas Dios muestra su amor para


con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por
nosotros. 9Pues mucho más, estando ya justificados en su sangre,
por él seremos salvos de la ira. 10Porque si siendo enemigos,
fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho
más, estando reconciliados, seremos salvos por su vida.

¿De qué dice Pablo que seremos salvos? De la ira de Dios. No


existe anuncio de que la ira de Dios vaya a ser volcada contra la
Iglesia. Ni un solo pasaje en toda la Biblia. Por tanto es una falsa
doctrina afirmar que la Iglesia pasará por la Gran Tribulación.

1Tesalonicenses 5.2-4 Porque vosotros sabéis perfectamente que


el día del Señor vendrá así como ladrón en la noche; 3que cuando
digan: Paz y seguridad, entonces vendrá sobre ellos destrucción
repentina, como los dolores a la mujer encinta, y no escaparán.
4
Mas vosotros, hermanos, no estáis en tinieblas, para que aquel
día os sorprenda como ladrón.

El pasaje no puede ser más revelador. Recuerden que el día del


Señor es una referencia al día en que Dios juzgará al mundo por
su incredulidad. Pero como Pablo dice, ese día no sorprenderá a
los creyentes porque no estamos en tinieblas.

El Señor Jesús, habló de la Gran Tribulación en Mateo 24.20-22


Orad, pues, que vuestra huida no sea en invierno ni en día de
reposo; 21porque habrá entonces gran tribulación, cual no la ha
628

habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni la habrá. 22Y


si aquellos días no fuesen acortados, nadie sería salvo; mas por
causa de los escogidos, aquellos días serán acortados.

Aquí Jesús ¿hablaba a los cristianos o a los judíos? Sin duda a los
judíos que serían librados durante la Gran Tribulación. Porque la
Tribulación, la ira de Dios está reservada para los judíos que le
rechazaron, no para los que creyesen en él.

Por esa razón a los cristianos Pablo les dice: y esperar de los
cielos a su Hijo, al cual resucitó de los muertos, a Jesús, quien
nos libra de la ira venidera.

Aquí Pablo habla a la Iglesia, y también lo hace cuando escribe


Romanos 8.1-2: Ahora, pues, ninguna condenación hay para los
que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne,
sino conforme al Espíritu. 2Porque la ley del Espíritu de vida en
Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte.

El pasado jueves nos quedamos hablando del arrebatamiento de


Pablo al tercer cielo, y aprovechamos para hablar del
arrebatamiento de la Iglesia y la Gran Tribulación.

¿Qué fue lo que aprendimos? Que la Iglesia será arrebatada antes


de la Gran Tribulación.

Que la Gran Tribulación es el juicio de Dios contra Israel, no


contra la Iglesia.

Que hay multitud de pasajes que nos transmiten estas verdades.

¿Quiere decir esto que Cristo vendrá dos veces más a la tierra,
tres en total? No, de ningún modo. La Biblia sólo habla de un solo
regreso de Cristo a la tierra.

¿Cómo conciliar entonces las dos verdades; por un lado que


Cristo vendrá a recibir a Su Iglesia, y que regresará a establecer
su reino en la tierra, en una sola venida?
629

Realmente es fácil, cuando se conoce la Palabra de Dios. Algunos


han optado por decir que la Iglesia será arrebatada al final de la
tribulación. De ese modo violentan la correcta interpretación de
todos los pasajes que ya vimos, y de otros muchos.

En realidad no es difícil de conciliar ambas verdades sin someter


a la Iglesia al terrible juicio de Dios. Se trata de que cuando Cristo
viene a por Su Iglesia no puede ser considerado un regreso a la
tierra porque, de hecho, no llega a la tierra; se reúne con la Iglesia
en los aires, desde donde la llama.

¿Qué pasa con Apocalipsis 1.7 que afirma que cuando Cristo
vuelva todo ojo le verá? Cuando todo ojo le verá será en el
regreso a la tierra para establecer su reino, no en el
arrebatamiento.

Así, que, de acuerdo a la Biblia, las bodas del Cordero se llevará a


cabo en el cielo antes de que Jesús regrese a pelear la batalla del
Armagedón al final del periodo de la Tribulación, Apocalipsis 19.
7-21.

¿Qué significa esto? Esto significa que la Iglesia va a ir al cielo


arrebatada, para las bodas del Cordero, antes de la segunda venida
de Cristo a la tierra.

De hecho, después del capítulo 4 de Apocalipsis, no se vuele a


nombrar a la Iglesia en la tierra. Como si el arrebatamiento de
Juan, simbolizara el de la Iglesia, antes de que comience a
derramarse la copa de la ira de Dios.

Resulta interesante meditar sobre las palabras de Jesús en Lucas


21:36 ….orando que seáis tenidos por dignos de escapar de todas
estas cosas que vendrán, y de estar en pie delante del Hijo del
Hombre.
630

¿De qué estaba hablando Jesús? Sobre el periodo de la Gran


Tribulación. ¿Qué pide? Que seamos tenidos por dignos de
escapar.

Si la Iglesia no escapara a la Gran Tribulación, ¿Os parece


razonable creer que Jesús diría a la Iglesia que orase por algo que
no sucedería? ¿Miente Jesús? Si Jesús no miente es que los
creyentes escaparemos de todas estas cosas que sucederán.

También es interesante meditar en las expectativas del apóstol


Pablo. Cuando Pablo está hablando de lo que le espera dice en
2Timoteo 4.7-8: He peleado la buena batalla, he acabado la
carrera, he guardado la fe. 8Por lo demás, me está guardada la
corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel
día; y no sólo a mí, sino también a todos los que aman su venida.

¿Qué le esperaba al apóstol, la Gran Tribulación de la Ira de


Dios? Desde luego que no. La corona de justicia. ¿Sólo a él? No,
sino también a todos los que aman su venida.

Así que, según Pablo ¿Pasaríamos los cristianos por la Gran


Tribulación? De ningún modo.

En todos estos pasajes se nos anuncia bendición, y no ira, ni juicio


para la Iglesia, sino para Israel y las naciones rebeldes al
evangelio.

Apocalipsis 3.10-11 Por cuanto has guardado la palabra de mi


paciencia, yo también te guardaré de la hora de la prueba que ha
de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran
sobre la tierra. 11He aquí, yo vengo pronto; retén lo que tienes,
para que ninguno tome tu corona.

Estas palabras escritas sobre la iglesia de Filadelfia, la iglesia fiel


de los últimos tiempos, muestran que la Iglesia será librada de la
Gran Tribulación.
631

Pero si hay un pasaje que por excelencia nos enseña esta verdad,
es 1Tesalonicenses 5.1-11 Pero acerca de los tiempos y de las
ocasiones, no tenéis necesidad, hermanos, de que yo os escriba.
2
Porque vosotros sabéis perfectamente que el día del Señor
vendrá así como ladrón en la noche; 3que cuando digan: Paz y
seguridad, entonces vendrá sobre ellos destrucción repentina,
como los dolores a la mujer encinta, y no escaparán. 4Mas
vosotros, hermanos, no estáis en tinieblas, para que aquel día os
sorprenda como ladrón. 5Porque todos vosotros sois hijos de luz e
hijos del día; no somos de la noche ni de las tinieblas. 6Por tanto,
no durmamos como los demás, sino velemos y seamos sobrios.
7
Pues los que duermen, de noche duermen, y los que se
embriagan, de noche se embriagan. 8Pero nosotros, que somos
del día, seamos sobrios, habiéndonos vestido con la coraza de fe
y de amor, y con la esperanza de salvación como yelmo. 9Porque
no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por
medio de nuestro Señor Jesucristo, 10quien murió por nosotros
para que ya sea que velemos, o que durmamos, vivamos
juntamente con él. 11Por lo cual, animaos unos a otros, y
edificaos unos a otros, así como lo hacéis.

Así, que, todos los cristianos que afirman que pasarán la Gran
Tribulación, están errando en su interpretación bíblica. Recuerden
que un pasaje no puede contradecir a otro; mucho menos a tantos
y tantos pasajes como hemos visto. Ni una doctrina puede
contradecir las Escrituras. Y si lo hace, ¿Cómo debemos juzgarla?
Como falsa.

Pero si algunos creyentes quieren quedarse en la tierra a pasar la


Gran Tribulación, que la pasen. No seré yo quien les contradiga,
ni quien se lo impida.

Sin embargo estoy seguro, por el conocimiento que tengo de la


Palabra de Dios que los cristianos verdaderos no pasaremos por la
hora de prueba que ha de venir sobre el mundo entero para
probar a los que moran sobre la tierra. Porque por ese entonces,
ya no moraremos sobre la tierra. ¿Dónde estaremos? En el cielo
con el Señor.
632

Volviendo a 2Corintios 12.3. Repite por segunda vez que no sabe


si su experiencia fue en el cuerpo o fuera del cuerpo. Es evidente
que no lo tenía claro. Pero lo que sí sabía es que Dios lo sabe.
Para él eso era suficiente.

El tercer cielo es una referencia a la morada de Dios. Así, pues, la


Biblia nos habla de tres cielos. En Génesis 1.1 dice: En el
principio creó Dios los cielos y la tierra.

Es interesante notar el plural aplicado a los cielos, y el singular a


la tierra.

Deuteronomio 10.14 He aquí, de Jehová tu Dios son los cielos, y


los cielos de los cielos, la tierra, y todas las cosas que hay en
ella.

Como verán, la Palabra de Dios nos revela que hay más de uno.

1º Cielo.- Nuestra atmósfera, en la que vemos las nubes y en la


que vuelan los pájaros. Génesis 1.26 Entonces dijo Dios:
Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra
semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los
cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se
arrastra sobre la tierra.

Salmo 77.16-18 Te vieron las aguas, oh Dios; Las aguas te


vieron, y temieron; Los abismos también se estremecieron. 17Las
nubes echaron inundaciones de aguas; Tronaron los cielos, Y
discurrieron tus rayos. 18La voz de tu trueno estaba en el
torbellino; Tus relámpagos alumbraron el mundo; Se estremeció
y tembló la tierra.

¿De qué cielo se habla aquí en este pasaje? Del primer cielo, el de
las nubes.
633

2º Cielo.- El espacio o universo en el que vemos las estrellas y


planetas. Salmo 8.3 Cuando veo tus cielos, obra de tus dedos, La
luna y las estrellas que tú formaste.

Aquí se está haciendo referencia al universo. El cielo en el que


cuelgan las estrellas y los planetas. Los elementos, como le llama
el apóstol Pedro en su segunda epístola.

Todos conocen el Salmo 19.1-6 Los cielos cuentan la gloria de


Dios, Y el firmamento anuncia la obra de sus manos. 2Un día
emite palabra a otro día, Y una noche a otra noche declara
sabiduría. 3No hay lenguaje, ni palabras, Ni es oída su voz. 4Por
toda la tierra salió su voz, Y hasta el extremo del mundo sus
palabras. En ellos puso tabernáculo para el sol; 5Y éste, como
esposo que sale de su tálamo, Se alegra cual gigante para correr
el camino. 6De un extremo de los cielos es su salida, Y su curso
hasta el término de ellos; Y nada hay que se esconda de su calor.

Aquí vemos una clara alusión al firmamento, como el segundo


cielo.

3º.- Cielo. No se refiere a un cielo físico, sino a la morada de


Dios. Por lo que es un cielo espiritual.

1Reyes 8.30 Oye, pues, la oración de tu siervo, y de tu pueblo


Israel; cuando oren en este lugar, también tú lo oirás en el lugar
de tu morada, en los cielos; escucha y perdona.

Salmo 102.19 Porque miró desde lo alto de su santuario; Jehová


miró desde los cielos a la tierra, 20Para oír el gemido de los
presos, Para soltar a los sentenciados a muerte; 21Para que
publique en Sion el nombre de Jehová, Y su alabanza en
Jerusalén, 22Cuando los pueblos y los reinos se congreguen En
uno para servir a Jehová.

Salmo 103.19 Jehová estableció en los cielos su trono, Y su reino


domina sobre todos.
634

Hebreos 9.24 Porque no entró Cristo en el santuario hecho de


mano, figura del verdadero, sino en el cielo mismo para
presentarse ahora por nosotros ante Dios;

Este es el tercer cielo del verso 4. Es a este tercer cielo al que fue
arrebatado el apóstol Pablo, que lo llamó paraíso.

La semana pasada nos quedamos hablando de los distintos cielos


de los que habla la Biblia. ¿Cuántos cielos dicen los rabinos
judíos que existen? Siete. ¿Existe fundamento bíblico para ello?
No. ¿De cuántos cielos habla la Biblia? Sólo de tres.

Hemos visto cómo Pablo fue arrebatado hasta el tercer cielo. De


eso estuvimos hablando la semana pasada. Hoy continuamos
donde lo dejamos.

Todos sabemos lo grande que son los cielos. El primero está


formado por nuestra atmósfera, la hidrosfera, heterosfera,
troposfera, estratosfera, ozonosfera, mesosfera, ionosfera o
termosfera, y la exosfera, que rodean la Tierra, protegen la vida
sobre la tierra, de las radiaciones solares.

¿Sabían que nuestra atmósfera recibía tantos nombres? Yo no, ni


que tuviera en total casi 1000 kilómetros de altitud, hasta donde
se funde con el espacio. Es decir, el segundo cielo. Aunque he
leído otros estudios que hablan de hasta 10.000 kilómetros.

Sea como fuere, la atmósfera, actúa como escudo protector contra


los meteoritos, los cuales se desintegran en polvo a causa de
la fricción que sufren al hacer contacto con el aire.

El aire que circula alrededor de la tierra, permite que las noches


no sean tan gélidas ni los días tan calurosos. Y esto es sólo el
primer cielo. ¿Se imaginan la grandeza del segundo? Los hombres
a lo largo de la historia, y hasta el día de hoy, sólo podemos
hablar de infinitud. Los cielos son infinitos.
635

Hay un vídeo en YouTube sobre el tamaño de la tierra en


comparación con el resto del universo, que es alucinante. Les
recomiendo que lo vean, porque nos da una mejor imagen de
nosotros mismos.

Al observar el universo, ¿No es grande nuestro Dios? Sin duda.


Es absolutamente increíble que ante la majestad del universo,
mucha gente sea incapaz de ver en ella la mano de Dios. La
grandeza de la creación habla de la grandeza y majestad del
Creador. Claro que muchos tuvieron ante sí al mismo Dios y
tampoco fueron capaces de conocerlo.

Como está escrito: A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron.


12
Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre,
les dio potestad de ser hechos hijos de Dios; Juan 1.11-12.

4. Palabras inefables. Lingüísticamente parece una contradicción.


Porque inefables significa que no se puede expresar con palabras,
pero Pablo le llama palabras inefables. Quiere decir que oyó cosas
tan secretas y sagradas como para ser pronunciadas por hombre
alguno.

Pablo no puede describir lo que ha visto en el paraíso. Como dijo


en su anterior carta, 1Corintios 2.9, citando a Isaías 64.4: Antes
bien, como está escrito: Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, Ni han
subido en corazón de hombre, Son las que Dios ha preparado
para los que le aman.

Si Érika viene extasiada de Londres, donde ha tenido experiencias


maravillosas y se ha podido sacar hermosas fotografías de una
naturaleza exuberante, ¿Se imaginan lo que sería vivir en el
paraíso?

¿Les hubiera gustado vivir en el paraíso terrenal? Creo que sí.


Pero aún hay un paraíso mucho mejor: el paraíso celestial.

5. Me gloriaré. Hay quienes se glorían de sí mismos por haber


tenido alguna experiencia mística, por alguna capacidad o don, a
636

pesar de que le fue dado. Más Pablo se gloría de haber tenido


aquella experiencia, pero no de sí mismo.

Es decir, por difícil que resulte entenderlo, parece que Pablo está
marcando la diferencia entre aquel Pablo que subió al tercer cielo
y el Pablo que ahora se encontraba en la tierra escribiendo a los
corintios.

Sabemos que ambos eran el mismo Pablo, pero se niega a


vanagloriarse de una experiencia que sólo por la gracia de Dios,
pudo experimentar, sin que hubiera ningún mérito en él.

En lugar de gloriarse en sus visiones y revelaciones como


hicieron aquellos falsos apóstoles, él se gloría más bien en sus
debilidades. ¡Qué actitud tan distinta! Como dijo en 2Corintios
11.30 Si es necesario gloriarse, me gloriaré en lo que es de mi
debilidad.

¿Por qué el Señor le permitió a Pablo esta experiencia celestial, si


después no podría revelarla? Aquel arrebatamiento tenía el
propósito de animar a Pablo mismo en la labor que realizaba para
el Señor, durante la cual enfrentaría multitud de pruebas y
sufrimientos.

En Hechos 9.16 vemos que cuando fue llamado por Dios, se le


dijo por medio de Ananías: porque yo le mostraré cuánto le es
necesario padecer por mi nombre.

Sin duda, a lo largo de su ministerio debió enfrentar momentos de


mucha tensión, miedo e incluso desaliento. Pero una experiencia
como aquella, le daría las fuerzas necesarias para continuar
sabiendo en quién había creído.

Como está escrito en 2Timoteo 1.12 Por lo cual asimismo


padezco esto; pero no me avergüenzo, porque yo sé a quién he
creído, y estoy seguro que es poderoso para guardar mi depósito
para aquel día.
637

6. Este pasaje se explica por sí mismo. En la Traducción en


Lenguaje Actual dice: Claro que hablar bien de mí no sería una
locura, porque estaría diciendo la verdad. Pero no lo voy a
hacer, porque no quiero que, sólo por las cosas que hago o digo,
o por las cosas maravillosas que Dios me ha mostrado, alguien
piense que soy más importante de lo que en realidad soy.

Porque el gloriarse implica llamar la atención hacia uno mismo.


Pablo rehúsa hacer eso, para gloriarse en el Señor, como dijo en
1Corintios 1.31y 2Corintios 10.17.

Sin duda, si hay alguien en la Iglesia que pudiera gloriarse en sí


mismo sería Pablo. Había fundado iglesias en Asia Menor,
Macedonia y Grecia. Había trabajado arduamente por amor a
Dios y la extensión de su obra.

Había sufrido intensamente más que cualquiera. Tuvo una


experiencia celestial que lo colocó muy por encima de todos sus
colaboradores y por su puesto, por encima de sus acusadores.

Aún así, rehúsa gloriarse a sí mismo, hasta verse retado por


quienes le acusaban. No pretende mostrarse como un pedante que
se jacta irracionalmente como otros.

Este argumento debemos entenderlo en el contexto en que está


enfrentando a unos adversarios que para gloriarse en sí mismos
estaban menospreciando al apóstol, a quien obligan a mostrar sus
credenciales.

En la segunda parte del verso 6 Pablo no se dirige a sus


acusadores, sino a los corintios, para que no piensen de sí más de
lo que en él ven u oyen.

Pablo era un hombre, y no pretendía ser otra cosa. No quiere que


le vean como un súper héroe espiritualista, sino como un hermano
en Cristo, como un siervo, con quien contar. ¿Se mostró Pablo
alguna vez con altivez? De ningún modo. Siempre se mantuvo en
638

humildad y honestidad, reconociendo sus propias limitaciones


humanas.

Hechos de los Apóstoles relata un acontecimiento que si se diera


hoy con algunos de los supuestos apóstoles actuales, el resultado
hubiera sido muy distinto.

Hechos 14.8-18 ¿Cómo hubiera actuado en esa misma situación


Cash Luna o Guillermo Maldonado? Hubieran pedido más
sacrificios, especialmente de dinero.

Cuando Pablo habla en Romanos 7.14-25 o en 1Corintios 2.1-5,


lo hace abriendo su corazón, como un hombre que se siente
intimidado ante la magnitud de la obra a la que es llamado, pero
que obedece en absoluta sumisión a Dios que le rescató.

7. Por esta razón Pablo se gloría, no en sus fortalezas, sino más


bien en sus debilidades, de ahí que confiese y hable abiertamente
su aguijón.

¿Cuál era el aguijón en su carne del que habla Pablo? Mucho se


ha especulado sobre éste aguijón en su carne. Unos afirman que
se trataba de:

Epilepsia
Histeria
Neuralgia
Depresión
Malaria
Lepra
Reumatismo
Problemas del habla
Enemigos personales
Tormentos de un demonio

También hay quienes afirman que se trataba de que era poco


agraciado físicamente; es decir, de aspecto poco atractivo, y que
por eso no se llegó a casar.
639

Otros, en cambio, afirman que se trataba de un defecto en la


visión, por lo cual alegan, escribía con grandes letras, Gálatas 4.4-
15; 6.11

Otros han llegado más allá y han especulado que se trataba de una
tentación, o pecado dominante. Pero no hay absolutamente ningún
fundamento bíblico para ninguna de estas afirmaciones. Ni el más
mínimo. Sólo son especulaciones.

¿Es correcto especular sobre temas que la Palabra de Dios no


habla? De ningún modo. ¿Por qué? Porque lleva a discusiones
bizantinas que no llevan sino a la división de los hermanos.

¿Es fácil o difícil que se presenten conflictos entre los hermanos


en la fe? Es realmente fácil entrar en conflictos con los hermanos.
Muchas veces por cuestiones sin importancia, lo realmente difícil
es trabajar juntos por la conquista de metas comunes.

Hay una palabra griega que es Koinoneim, que significa: juntos


con un propósito. ¿Se puede estar juntos e ir cada uno a lo suyo?
Sin duda alguna. Veamos algunos pasajes que nos hablan de la
necesidad de actuar juntos en un mismo propósito.

1Corintios 1.10-12 Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de


nuestro Señor Jesucristo, que habléis todos una misma cosa, y
que no haya entre vosotros divisiones, sino que estéis
perfectamente unidos en una misma mente y en un mismo
parecer. Porque he sido informado acerca de vosotros, hermanos
míos, por los de Cloé, que hay entre vosotros contiendas. Quiero
decir, que cada uno de vosotros dice: Yo soy de Pablo; y yo de
Apolos; y yo de Cefas; y yo de Cristo.

¿Cuál era la causa del conflicto en esta ocasión? Los partidismos


en cuanto a los ministerios. ¿Puede suceder esto hoy en día? Sin
duda. Pero no debiera. Porque no es conforme a la voluntad de
Dios.
640

2Corintios 13.11 Por lo demás, hermanos, tened gozo,


perfeccionaos, consolaos, sed de un mismo sentir, y vivid en paz;
y el Dios de paz y de amor estará con vosotros.

1Pedro 3.8-9 Finalmente, sed todos de un mismo sentir,


compasivos, amándoos fraternalmente, misericordiosos,
amigables; no devolviendo mal por mal, ni maldición por
maldición, sino por el contrario, bendiciendo, sabiendo que
fuisteis llamados para que heredaseis bendición.

Hay otros muchos pasajes que enfatizan esto mismo. ¿Creen que
será un tema importante? Sin duda. La unidad del Cuerpo de
Cristo siempre lo es.

A lo largo de la historia de la Iglesia, el libro de Nehemías ha sido


usado muchísimas veces para hablar de la importancia de la
unidad en el pueblo de Dios.

Nehemías nos muestra que el pueblo, cuando se une en una meta


común, es capaz de conseguir lo que se propone a pesar de las
dificultades.

¿Cuál fue el proyecto que se plantearon? La reconstrucción de los


muros de la ciudad que habían sido destruidos durante la invasión
babilonia. ¿Lo consiguieron? Sin duda, en cincuenta y dos días.
Nehemías 6.15. Algo que parecía imposible se consiguió.

No fue fácil, tuvieron que enfrentar, muchas dificultades. El


trabajo era duro y costoso, y por si fuera poco estaban los que
trataban de impedirlo.

Siempre que tengamos planes, tendremos que enfrentar a gentes


que pretenderán persuadirnos de que no hagamos lo que debemos
hacer. Es decir, personas que pretenden estorbar las planes de
Dios, enemigos.

Nos tratarán de convencer de que el proyecto no es necesario. Nos


hablarán de lo difícil que resultará llevarlo a cabo. Intentarán
641

asustarnos, e incluso pretenderán sembrar dudas entre el pueblo, y


si nada de eso les funciona, intentarán crear división entre los que
hacen la obra.

Porque su único objetivo es que no hagamos lo que debemos.


Esto, sumado a la dureza de todo tipo de trabajo que de por sí,
puede llegar a desanimar, hace que cualquier proyecto espiritual
sea difícil de llevar a cabo.

Sin embargo, si algo nos enseña el libro de Nehemías, es que si


tenemos en cuenta a Dios y nos mantenemos firmes en Su
voluntad, obtendremos la victoria en todo cuanto nos
propongamos.

En Nehemías se nos dan las claves para obtener la victoria.

En primer lugar nos muestra la importancia de la dirección. Toda


obra debe tener quien la dirija. Vivimos tiempos en los que la
gente rehúye de la autoridad. Nadie quiere estar bajo autoridad,
sino que todos quieren mandar en todo, y nadie quiere servir.

Jesús habló de esto en Mateo 20.25-28 cuando dijo: Mas entre


vosotros no será así, sino que el que quiera hacerse grande entre
vosotros será vuestro servidor, 27y el que quiera ser el primero
entre vosotros será vuestro siervo; 28como el Hijo del Hombre no
vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en
rescate por muchos.

El mismo Señor Jesús nos dio ejemplo de sencillez y humildad,


de sujección al Padre. Los cristianos debemos aprender a estar
bajo autoridad. Porque como está escrito en Romanos 13.1:
porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por
Dios han sido establecidas.

Pablo en Efesios 4.11-16 explica con claridad que es Dios mismo


quien instituye los ministerios que hoy tanto se rechazan.
642

Hasta cierto punto es comprensible, porque hay muchos falsos


apóstoles, profetas, y pastores, pero debemos tener mucho
cuidado para no rechazar a los verdaderos siervos de Dios, porque
cuando eso ocurre, estamos rechazando la propia voluntad de
Dios que los instituyó.

Es deber de todo cristiano orar por los pastores y quienes les


ayudan en el ministerio y defenderles de todo ataque. Porque la
Iglesia necesita una dirección sabia y el apoyo de todos.

En ocasiones, hay personas que obran con muy buena intención,


pero con muy poca sabiduría. La Iglesia no es una empresa, ni un
club social, ni funciona por democracia, sino que es el Cuerpo de
Cristo. Debemos entender que Dios mismo ha dejado establecido
en Su Palabra cómo quiere que funcione.

Ningún proyecto funciona si cada uno está interesado sólo en sí


mismo y en sus propias opiniones. Los proyectos que funcionan
son aquellos en los que todos se esfuerzan en la misma dirección.

Nehemías puso al pueblo de acuerdo para hacer la obra de


restauración de los muros de la ciudad.

Además de la necesidad de una dirección espiritual clara y


basada, por supuesto, en la Palabra de Dios se precisa de
organización.

Debemos comenzar con un recuerdo para nuestros hermanos


mejicanos, por quienes hemos orado para que Dios les guarde a
ellos y sus familias. Desde aquí queremos decirles que estamos
con ellos y elevamos nuestras plegarias a Dios en su favor.
Especialmente por nuestros hermanos en la fe.

La semana pasada hablábamos de si es correcto o no especular


sobre cuestiones que la Palabra de Dios no aclara. ¿Qué pensáis?
¿Es correcto o no discutir sobre temas que no están claros en la
Biblia? Desde luego que no.
643

También hablábamos de que tales discusiones, cuando se dan,


¿Qué producen? Divisiones. De hecho, el nacimiento de las
denominaciones surge a raíz de las divisiones de opinión sobre
temas secundarios. Aunque a veces también sobre temas
fundamentales. Pues, algunas personas sin la debida preparación
se aferran a sus errores.

Estuvimos estudiando sobre un personaje importante en la historia


del pueblo judío, y un proyecto que llevó a cabo con gran éxito.
¿Recuerdan de quién estuvimos estudiando la semana pasada? De
Nehemías.

¿Cuál fue su proyecto? Reconstruir las murallas y portones de


Jerusalén. ¿Lo consiguió? Sin duda, ¿Recuerdan en cuánto
tiempo? En cincuenta y dos días.

Vimos que la dirección fue fundamental para unir y realizar la


tarea que se propusieron. Pero también fue necesaria la
organización. Poner de acuerdo a todos en lo que s debía hacer.

¿Por qué es importante la organización? Porque sin organización


no se consiguen finalizar los proyectos. Puede haber mucha
ilusión y ganas de hacer algo, pero sin dirección y sin
organización no se conseguirá.

Dejarse arrastrar por el emocionalismo y la improvisación no


glorifica a Dios. Las cosas necesitan de estudio, planificación y
conocimiento de lo que se pretende, no sea que nos encontremos
yendo por donde no queramos ir. O que pretendamos hacer tantas
cosas que no hagamos ninguna.

Para construir una casa hace falta un maestro de obras, pero


también un proyecto claro, que contenga los planos, las medidas,
la calidad de los materiales, etc. No podemos hacer una casa sin
saber cómo la queremos ni para qué.

Tampoco se espera que cada miembro de la Iglesia desarrolle un


plan de actuación. Sino que respalden y sigan el plan que Dios
644

estableció en Su Palabra, en la que nos enseña que puso a los


pastores, para dirigir la obra, si es que éstos están siguiendo
fielmente la Palabra de Dios.

Si no siguen la Escritura, sálganse de ese grupo y váyanse a otro.


Pero si estás en una congregación en la que se obra conforme a la
Palabra de Dios, no pretendas que los pastores sigan tu plan, sino
súmate al que ellos han recibido de Dios.

Como está escrito en Hebreos 13.7: Acordaos de vuestros


pastores, que os hablaron la palabra de Dios; considerad cuál
haya sido el resultado de su conducta, e imitad su fe.

Hebreos 13.17-18 Obedeced a vuestros pastores, y sujetaos a


ellos; porque ellos velan por vuestras almas, como quienes han
de dar cuenta; para que lo hagan con alegría, y no quejándose,
porque esto no os es provechoso. 18Orad por nosotros; pues
confiamos en que tenemos buena conciencia, deseando
conducirnos bien en todo.

Así que, necesitamos alguien que dirija, y saber hacia dónde nos
encaminamos. Pero donde hay muchos, hace falta ponerse de
acuerdo.

¿Por qué las sociedades legislan? ¿Por qué existen las leyes? Para
regular la convivencia. Las normas son necesarias si queremos
convivir en paz. Cuando las normas no se respetan surgen los
conflictos de convivencia.

Lo único que debemos cuidarnos es de que las normas y leyes


sean conforme a la voluntad de Dios. Cuando no lo son, la
Palabra de Dios está por encima de toda ley humana.

Una congregación en la que cada uno va por su propio camino,


siguiendo las directrices de su propio corazón, y pretendiendo
poner en marcha su propia visión de todas las cosas, ¿Hacia
dónde ira? Hacia el desastre. Jamás será una congregación
cristiana, sana. Será una casa de locos.
645

Gracias a Dios, esta congregación ha conseguido muchas cosas,


porque hemos tenido claro desde un principio que la Palabra de
Dios es, y debe ser en toda circunstancia, la base de nuestro
caminar en Cristo.

Cuando tenemos en cuenta la Palabra de Dios todo funciona como


Dios quiere que funcione.

Un aspecto que vale la pena resaltar es que, la autoridad y el


respaldo provienen de Dios, no de nuestras capacidades y fuerzas
humanas. Sólo si estamos en el centro mismo de la voluntad de
Dios, Él obrará a nuestro favor.

Como está escrito en Proverbios 16.7: Cuando los caminos del


hombre son agradables a Jehová, Aun a sus enemigos hace estar
en paz con él.

Pero si queremos que todo funcione como debe, todos tenemos


que remar en el mismo sentido y la misma dirección. No es el
compromiso sólo de los pastores, sino de toda la congregación.
Porque de otra manera no conseguiríamos otra cosa que dar
vueltas sobre el mismo lugar.

Como está escrito en Colosenses 3.12-17: Vestíos, pues, como


escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia,
de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia;
13
soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si
alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os
perdonó, así también hacedlo vosotros. 14Y sobre todas estas
cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto. 15Y la paz de
Dios gobierne en vuestros corazones, a la que asimismo fuisteis
llamados en un solo cuerpo; y sed agradecidos. 16La palabra de
Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos y
exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con
gracia en vuestros corazones al Señor con salmos e himnos y
cánticos espirituales. 17Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de
646

hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias


a Dios Padre por medio de él.

Aquí se nos habla de la necesidad de una convivencia en paz, en


la que todos arriman el hombro, colaboran y trabajan como un
equipo.

Si algo nos muestra con claridad el libro de Nehemías es que


permaneciendo firmes en comunión los unos con los otros, y
todos con Dios, no hay nada que no podamos hacer.

¿Qué pasará con los enemigos? Nuestros enemigos serán


vencidos y conseguiremos levantar las murallas y restituir la
adoración a Dios en nuestras vidas y los demás. Lo que nos
llevará a una nueva dimensión de bendición.

¿Cómo acaban los enemigos? Yo os lo diré: caídos, vencidos y


avergonzados.

¿Se dan cuenta de la importancia de no caer en especulaciones?


De no andar según nuestras propias opiniones, sino según la
Palabra de Dios. En aquello en que no esté claro en la Escritura,
ni tan siquiera discutamos, porque no es la voluntad de Dios.

Hablábamos de la importancia de no pensar más de lo que está


escrito. Pues, las discusiones bizantinas, es decir, fútiles, sin
sentido, no llevan sino a las divisiones del Cuerpo de Cristo. Por
eso hablamos sobre la denominaciones.

¿Por qué creen que existen tantas denominaciones “cristianas”?


Porque no conocen suficientemente la Palabra de Dios y la
malinterpretan. O aun conociéndola, se embarcan en discusiones
sobre temas que la Palabra de Dios no aclara.

Hay asuntos importantes y otros que no lo son. Los importantes


están claros en las Escrituras, los otros, no. ¿Debemos ponernos
de acuerdo en los temas importantes? Sin duda. Esa es la voluntad
de Dios.
647

La Palabra de Dios ¿de cuántas fe habla? Efesios 4.5-6 dice: un


Señor, una fe, un bautismo, 6un Dios y Padre de todos, el cual es
sobre todos, y por todos, y en todos.

Una sola fe, en la cual nos debemos poner de acuerdo. Al menos,


en los temas fundamentales. ¿Verdad que observando al pueblo
“cristiano” pareciera que no sólo hay una fe?

¿Cuántos grupos que se denominan cristianos y que enseñan


cosas distintas conocen? Sin duda, muchos. Están los bautistas,
los pentecostales, los metodistas, los presbiterianos, los
reformados, y así podríamos seguir largo y tendido.

Esto lo usan los católicos romanos para afirmar que la iglesia


“evangélica” está tan dividida que no puede ser la Iglesia de
Cristo. Pero, ¿no pasa lo mismo dentro del catolicismo romano?
¿En cuántas denominaciones está dividida la secta de Roma?

Franciscanos, Dominicos, Jesuitas, Opus Dey, Neocatecomenales,


Marianos como la Legión de María, Apostólico Regnun Christi,
Caballeros de Colón, Movimiento familiar, Santísima Comunión,
Servidores del Altar, Movimiento Monacal, Hermanitas de la
Caridad, Carmelitas, etc., todos ellos con fundamentos, doctrinas
y objetivos muy distintos.

Aun así, afirman: Somos una sola Iglesia. Pero es mentira.


Algunos de esos grupos están tan alejados de los otros, que han
provocado verdaderos cismas (división) entre ellos, de tal modo
que aun se han perseguido y excomulgado los unos a los otros. La
historia está llena de evidencias que lo demuestran.

Pero además de los católicos, podemos contar las numerosas


sectas que se hacen llamar cristianas, aunque desde la perspectiva
bíblica no lo son, como el Movimiento de la Prosperidad, los
Adventistas, los Testigos de Jehová, los Mormones, etc.
Todos afirmando que tienen y defienden la verdadera fe cristiana.
¿Cómo es posible? Porque no son la misma fe, y según la Palabra
648

de Dios, sólo hay una. ¿Cuál será la verdadera? La que más se


ajuste a las Escrituras. De ahí que debamos conocerla
profundamente.

De ahí, también que los cristianos tengamos el deber de ponernos


de acuerdo en las doctrinas fundamentales. Las cuestiones que no
están claras en la Biblia no deben dividir a la Iglesia. Pero las
fundamentales deben ser las mismas. Como hemos visto en otras
ocasiones.

Dios exige que su pueblo hablemos todos una misma cosa; que
no haya entre nosotros divisiones, sino que estemos
perfectamente unidos en una misma mente y un mismo parecer.
1Corintios 1.10.

¿Creen que esto se está cumpliendo? Desde luego que no. Cada
día se producen fracciones en la Iglesia, algunas porque los
creyentes no somos capaces de ponernos de acuerdo en los tema
fundamentales, pero en otras ocasiones por cuestiones sin la
menor importancia.

¿Por qué ocurre eso? Porque entre los creyentes predomina el


orgullo y la soberbia, y falta la humildad y el amor. Porque se
necesita humildad para aceptar el hecho de que podemos estar
equivocados. Se necesita también la disposición para el diálogo
con otras personas para que juntos nos enseñemos los unos a los
otros.

Pero que quede claro que no debemos especular sobre temas que
no están claramente revelados en la Palabra de Dios, sino seguir
la exhortación del apóstol que nos dice en 1Corintios 4.6: para
que en nosotros aprendáis a no pensar más de lo que está escrito,
no sea que por causa de uno, os envanezcáis unos contra otros.

Hablábamos sobre todas estas teorías que se han planteado sobre


el aguijón de Pablo. Todas han sido hábilmente defendidas por
eruditos que están familiarizados con la literatura hebrea y la vida
649

de Pablo descrita en el libro de Los Hechos y las epístolas. Sin


embargo, son contradictorias entre sí.

Dios no ha dejado una Biblia para cada grupo o denominación,


sino una sola. Por eso está escrito en Judas 3 y 4 Amados, por la
gran solicitud que tenía de escribiros acerca de nuestra común
salvación, me ha sido necesario escribiros exhortándoos que
contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los
santos. 4Porque algunos hombres han entrado encubiertamente,
los que desde antes habían sido destinados para esta
condenación, hombres impíos, que convierten en libertinaje la
gracia de nuestro Dios, y niegan a Dios el único soberano, y a
nuestro Señor Jesucristo.

Decía que Dios no ha dejado una Biblia para cada grupo o


denominación, sino una sola. Sin embargo, actualmente las
Sociedades Bíblicas están prostituyendo los textos sagrados, y
mezclándolos con otros paganos, a fin de hacer “biblias” al gusto
del consumidor.

Por eso hay “biblias” adaptadas a las doctrinas de las Asambleas


de Hermanos, a los pentecostales, etc. Incluso, a los defensores de
la Ideología de género.

Pero esto no debería ser así. ¿No creen?

No obstante, la mayoría de los eruditos concuerdan con que el


aguijón debe ser traducido literalmente, es decir, que se trataba de
un dolor físico, como de un pinchazo. Además, esa es la
interpretación más cercana al texto.

La alusión al mensajero de Satanás, ha sugerido a algunos que se


trataba de un demonio que le visitaba para atormentarle de vez en
cuando, como a Saúl. 1Samuel 16.14. Pero la alusión al aguijón
en “su carne” parece desechar esta idea.

En realidad no sabemos con seguridad de qué se tratase ni cuál


fuese ese aguijón que a Pablo le abofeteaba, todo intento de
650

explicar lo que no está revelado en la Palabra de Dios es entrar en


el terreno de las conjeturas o, como yo le llamo, montarse en el
caballo de la imaginación y galopar sin rumbo fijo hacia el
horizonte.

También es evidente por las repetidas oraciones del apóstol que él


sabía bien que Dios está al control no Satanás. Por tanto Dios
podía librarle, aunque no quiso hacerlo por buenas razones.

Por tanto ante este tema del aguijón ¿Qué debemos decir? ¿De
qué se trataba el aguijón de Pablo? La Biblia no lo revela, así que
no lo sabemos.

Lo que sí sabemos es que se le dio a Pablo un aguijón, una espina


en su carne. Esta referencia a su carne nos deja ver que se trataba
de algo físico que le hacía daño y le mostraba la fragilidad de su
cuerpo.

Otra cosa que sí sabemos es cuál era el motivo por el cual era
molestado por aquel aguijón y porqué Dios no se lo quitó.

¿Cuál era la razón de su aguijón? Para que no se exaltase


desmedidamente; para que no se enalteciera sobremanera. ¿Por
qué razón es importante para un siervo de Dios que se mantenga
en humildad? Porque el orgullo le aleja de Dios.

Como está escrito en Salmo 138.6: Porque Jehová es excelso, y


atiende al humilde, Mas al altivo mira de lejos.

Si el apóstol Pablo se hubiera convertido en una persona


insoportablemente arrogante, la Iglesia de Cristo habría sufrido un
daño irreparable, pero no fue así, porque Dios cuida de sus
siervos limitando los ataques del enemigo, cuando Él quiere.

Muchos grandes hombres de Dios han caído en pecado por no


cuidarse de andar en humildad. De ahí que Dios permitió que
Pablo tuviese ese aguijón que no sabemos cuál fuera, para
mantenerlo en sumisión.
651

Algo a lo que llamó su aguijón le mortificaba, humillándolo,


amenazando el éxito de su ministerio y destruyendo sus
aspiraciones.

8. Por tres veces oró al Señor para que lo librara de aquel mal,
¿No te recuerda esto a las tres oraciones de Cristo en Getsemaní?
Leamos Mateo 26.36-46. Realmente son paralelas en el sentido de
que humanamente hablando mantienen similitudes.

¿En qué eran parecidos ambos casos? Pablo tenía un aguijón en


su carne que le molestaba, Jesús enfrentaba el momento más
difícil de su vida terrenal. Ambos acudieron a Aquel que podría
librarles. Ninguno de los dos recibieron lo que pidieron.

Sin embargo, es interesante leer Hebreos 5.7-10 Cristo, en los


días de su carne, ofreciendo ruegos y súplicas con gran clamor y
lágrimas al que le podía librar de la muerte, fue oído a causa de
su temor reverente. 8Y aunque era Hijo, por lo que padeció
aprendió la obediencia; 9y habiendo sido perfeccionado, vino a
ser autor de eterna salvación para todos los que le obedecen; 10y
fue declarado por Dios sumo sacerdote según el orden de
Melquisedec.

Jesús fue a morir en la cruz, y Pablo continuó con su sufrimiento


físico hasta el final de su vida. Pero ambos fueron perfeccionados
en la obediencia.

¿Oyó Dios su oración? Sin duda. Dios siempre oye nuestras


oraciones, pero no siempre responde como esperamos.

¿Te ha ocurrido alguna vez que Dios respondiera tus oraciones? A


mí, sí. Dios ha respondido muchas de las oraciones que he hecho.
Pero no siempre como esperaba.

¿Te ha ocurrido que Dios no te haya respondido alguna oración?


Bienvenido al club.
652

Dios no siempre responde a nuestro gusto, sino al suyo. A veces


responde pero no en el tiempo que queremos. ¿A ti te ha ocurrido
alguna vez? Estoy seguro de que sí.

A veces Dios no me respondió. O pensé que no me respondió.


Aunque cuando Dios guarda silencio, no es que no esté
respondiendo. En ocasiones, esa es su respuesta.

Dios oye nuestras peticiones pero las cumple solamente cuando


concuerdan con su voluntad.

9-10. Y me ha dicho. La respuesta que Dios le dio a Pablo no sólo


le sirvió a él, sino que ha servido a millones de cristianos en todas
las edades desde entonces.

Bástate mi gracia. Estas palabras de Dios sirven para todos y en


todo tiempo. Aun cuando la respuesta es negativa en el sentido de
que no le concede lo que le pide, sin embargo, le da a Pablo la
certeza de que Dios está con él y le sostiene en su dolor.

No siempre Dios nos libra de nuestros problemas, pero siempre


nos da las fuerzas necesarias para soportar las circunstancias por
difíciles que estas sean.

Bástate significa que el poder de Dios es suficiente. Es cuanto


necesitamos para enfrentare enfermedades, especialmente las que
son crónicas, o sin solución; los problemas familiares, de trabajo
o financieros, etc. Siempre tendremos motivos para el
sufrimiento, pero en esas circunstancias es importante no olvidar
que contamos con la gracia de Dios que nos fortalece. La gracia
que es suficiente para superar o soportar todo mal.

Porque mi poder se perfecciona en la debilidad. ¿Es posible que


se perfeccione el poder o cualquier cosa de Dios? Desde luego
que no. Se trata de una mala traducción del término teleióo que
debiera haberse traducido como que se consuma, se ejecuta, se
cumple, se hace visible, se satisface, es suficiente.
653

¿Por qué no es correcto afirmar que el poder de Dios se


perfecciona? Porque eso supondría que no es perfecto. Todo en
Dios lo es.

Poder en la debilidad, otra paradoja del reino de Dios. Hay


cuestiones que las que encontramos en la Palabra de Dios que son
difíciles de comprender para la mente humana, pero que podemos
entender desde la perspectiva de la fe. Las paradojas del reino son
parte de esas cuestiones.

El propio apóstol Pablo testificó en distintas ocasiones de la


gracia de Dios. En Filipenses 4.19-20 escribió: Mi Dios, pues,
suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en
Cristo Jesús. 20Al Dios y Padre nuestro sea gloria por los siglos
de los siglos. Amén.

¿Sabía Pablo lo que decía al escribir estas palabras? Sin ninguna


duda. Lo sabía porque lo había aprendido en su propia
experiencia. El Señor no quitó su aguijón pero le alivió por medio
de su gracia suficiente.

Pablo no era como los falsos apóstoles que se jactaban de su


fortaleza y habilidades, sino que él humildemente, al mismo
tiempo que reconocía su debilidad y necesidad de Dios,
testificaba de la gracia de Dios que le sostenía.

Por tanto. Por medio de la segunda frase de este verso, Pablo


responde a las palabras que el Señor le diera en respuesta a su
oración.

La palabra debilidad que Pablo había usado varias veces, ahora


repetida por el mismo Señor en su contestación, la recibe el
apóstol justamente como la respuesta de Dios para él.

¿Qué creen que provocaron en la mente y el corazón del apóstol


las palabras del Señor, frustración o paz? Creo sinceramente que
paz y gozo.
654

Quejas y disgustos son la respuesta que Dios recibe en multitud


de ocasiones en las que no responde como sus hijos le piden. Pero
Pablo, ¿Reaccionó mal el apóstol? De ningún modo.

Como está escrito: Por tanto, de buena gana me gloriaré más


bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de
Cristo.

¿Cómo es posible que Pablo se gozara en su debilidad?


Precisamente porque cuando era más débil más podía ver el poder
de Dios obrando en su vida.

De modo que soporta su debilidad sabiendo que en ella se


manifiesta el poder de Dios. Aunque la respuesta del Señor es
negativa, le otorga a Pablo la seguridad de que Jesús suple todas
sus necesidades. Lo cual, alegra su corazón en medio de la
prueba.

Hay expertos en griego que afirman que la última frase de este


verso debiera traducirse: para que el poder de Cristo instale su
tienda de campaña sobre mí.

La imagen que se describe es la de Dios descendiendo del cielo


para habitar en el tabernáculo en medio del desierto, donde estaba
el pueblo de Israel. Éxodo 40.34.

Juan 1.14 Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros
(y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de
gracia y de verdad.

Jesús habita en nosotros, y está lleno de gracia para darnos. La


cuestión es: ¿Acudimos a la presencia de Dios en nuestras
circunstancias? ¿Esperamos en su gracia?

La gracia de Dios fue la única esperanza para Pablo, y lo es para


cada uno de nosotros, los que seguimos a Cristo en el siglo XXI;
Dios nos dice a todos: mi poder se perfecciona en la debilidad.
Una paradoja más del reino de Dios.
655

La gracia de Dios es lo único que ayudó a Pablo en su situación, y


es lo único que nos queda a los creyentes en medio de nuestras
necesidades, sean cuales sean, en un mundo convulso y
depravado.

La gracia de Dios es suficiente para enfrentar los ataques de la


vida. El apóstol fue capaz de soportar el dolor de su aflicción
debido al alivio que el Señor le dio. Jesús no quitó la espina del
cuerpo de Pablo, sino que lo alivió por medio de su suficiente
gracia. Igualmente nos aliviará de cualquier carga que tengamos
que sobrellevar.

Cuanto más débil se sentía, más fuerte era el poder de Cristo que
obraba en él. Jesús quería usarlo como un mensajero que fuera no
por su propia fuerza sino que supiese que dependía totalmente del
Señor y su poder.

Introducción: Isaías 35.3-6 este pasaje que habla de lo que


ocurrirá durante el tiempo del milenio, nos anima anunciando la
pronta venida de nuestro Señor Jesucristo. Alabémosle por ello.

Estamos meditando en 2Corintios 12.9. Decíamos la semana


pasada que las visiones y revelaciones que recibieron los
apóstoles en aquella época pudieron generar orgullo en sus
corazones. Así fue en aquellos falsos apóstoles que acusaban
injustamente a Pablo.

La tentación de elevarse por sobre los demás, es una constante en


la vida de todos aquellos que servimos a Dios. Muchos sucumben
ante el pecado y acaban considerándose superiores a sus
semejantes, sin motivo alguno que lo sustente.

Pues, como el mismo Pablo escribiera en 1Corintios 4.7: Porque


¿quién te distingue? ¿o qué tienes que no hayas recibido? Y si lo
recibiste, ¿por qué te glorías como si no lo hubieras recibido?
656

Este es un pasaje que todo aquel que ejerce una labor de autoridad
ante otros semejantes debe recordar continuamente. ¿Somos
diferentes a los demás? Desde luego que no. ¿Hay algo que nos
distinga? Nada nos distingue de ellos.

El orgullo es siempre una tentación continua que los siervos de


Dios debemos mantener a ralla, o nos hará caer en pecado. ¿Es
fácil o difícil caer en el orgullo? Demasiado fácil.

De hecho, algunos de los mismos apóstoles sucumbieron a esa


tentación dando origen a uno de los pasajes más necesarios de
recordar en estos días. Me refiero a Mateo 20.25-28, que ya
conocemos.

El ser humano es tan dado a la vanagloria y la soberbia que no


necesita estar en autoridad para inflarse de orgullo. En ocasiones
basta que escuche la voz del diablo. Aún haciendo aquello que
todos pueden hacer nos creemos mejores y superiores a los
demás. ¿Debe ser así en los hijos de Dios? Por supuesto que no,
mucho menos en aquellos que le sirven.

Por esa razón la Palabra de Dios nos alerta contra el pecado de


orgullo en multitud de ocasiones, y nos insta a mantenernos en
humildad. ¿Recuerdan algún pasaje que lo haga?

Quizás el más hermoso es Filipenses 2.5-11, que nos muestra el


ejemplo de nuestro Señor Jesucristo.

10. Por lo cual. Estas palabras unen a las que siguen con las que
anteceden. Por cuanto Dios le habló en medio de su tribulación y
le confortó por medio de su gracia. Por eso. Por lo cual, por amor
a Cristo me gozo en mis debilidades.

Este pasaje es un paralelo al anterior. Se trata de la costumbre


hebrea de enfatizar una verdad repitiéndola de otra manera, pero
diciendo exactamente lo mismo. Quienes conocen la literatura
hebrea saben que son dados al énfasis de aquellas verdades que
consideran importantes.
657

Por ejemplo en cierta ocasión me consultaron si Dios creó a dos


parejas, pues, así lo entendía él al leer Génesis 1.27 y Génesis 2.7.
Como podemos ver, se trata de la importancia de conocer el
contexto gramatical de los pasajes que estamos estudiando. Si no
los tenemos en cuenta ¿Qué puede ocurrir? Que malinterpretamos
la Escritura.

Por esa razón, Pablo repite lo mismo que ya había dicho en el


verso anterior, que se gloría en sus debilidades.

En las debilidades. Ya sea en debilidad del cuerpo o de la mente.


¿Qué son debilidades? Limitaciones, cuestiones que nos afectan
de manera que nos debilitan del algún modo.

En afrentas. Es cuando nos injurian, nos insultan o nos causan


perjuicio. ¿Resultaría fácil actuar como Pablo? Desde luego que
no. ¿Por qué él puede actuar así? Porque ha entendido que seguir
y servir a Cristo es lo mejor, aun cuando se padezca por ello.

En necesidades. Aquí es cuando la fe es probada para muchos. El


pasaje que a muchos le gusta y que la mayoría malinterpreta de
Filipenses 4.13 es coherente con esta afirmación de Pablo. Él sabe
y puede soportar las necesidades por cuanto Cristo lo fortalece.

En persecuciones. Hay muchos tipos de persecuciones, algunas


directas y otras indirectas. Pero persecuciones al fin. Muchos
cuando son perseguidos abandonan la fe. Otros en cambio, como
Pablo, se gozan en ella. ¿Cómo actúas tú?

En angustias. Una de las cosas más difíciles de soportar es la


angustia. La ansiedad que puede estar provocada por mil motivos,
pero que produce tal desánimo y desesperanza que cierra los ojos
a las salidas.

La depresión es una de las experiencias más desoladoras que


podemos enfrentar en la vida. Muchos sucumben ante ella. Pero
Pablo no. ¿Su secreto? Su fe en Cristo.
658

La fe es justamente lo contrario a la angustia. Cuando los


problemas de la vida llamen a tu puerta puedes abrirle con
depresión o con fe. Si lo haces con depresión, la angustia se
clavará en tu garganta, y tus problemas crecerán hasta hacerse
gigantes.

Si lo haces con fe, sencillamente no verás problemas. Porque


cuando la fe responde no encuentra angustia, sino que llena el
corazón de gozo y paz.

Pablo acepta la enfermedad, los insultos, persecuciones y la


dureza de la vida, porque en medio de todo eso ve la mano de
Dios obrando en su favor, aun cuando no le de lo que pide.

¿Cómo es posible que haga esto? Por Cristo. Por causa de su


amor al Hijo de Dios. Le fue anunciado que le era necesario
padecer por causa de Su Nombre, de modo que lo asume gozoso,
como un privilegio que no todos tienen.

Este pasaje muestra la total rendición del apóstol a Cristo, aunque


no le de lo que necesitaba. ¡Cuán distinta es la imagen que
muestra Pablo de los falsos cristianos que hoy si Dios no
responde una oración suya egoísta abandonan la fe.

Algunos son capaces de seguir el diablo si le da lo que piden. Así


muchos falsos pastores están siguiendo al que dice: Todo esto te
daré si postrado me adorares. Mateo 4.9.

Pablo decidió servir a Dios no por lo que recibía a cambio, sino


porque entendió que le necesitaba. Aún cuando creer y servir a
Dios fuera contra sus propios intereses.

Aunque se viera solo y abandonado aún por sus hermanos en la


fe, como está escrito en 2Timoteo 4.16-18 En mi primera defensa
ninguno estuvo a mi lado, sino que todos me desampararon; no
les sea tomado en cuenta. 17Pero el Señor estuvo a mi lado, y me
dio fuerzas, para que por mí fuese cumplida la predicación, y que
659

todos los gentiles oyesen. Así fui librado de la boca del león. 18Y
el Señor me librará de toda obra mala, y me preservará para su
reino celestial. A él sea gloria por los siglos de los siglos. Amén.

Aquí es oportuno el Salmo 27.10-14 Aunque mi padre y mi madre


me dejaran, Con todo, Jehová me recogerá. 11Enséñame, oh
Jehová, tu camino, Y guíame por senda de rectitud A causa de
mis enemigos. 12No me entregues a la voluntad de mis enemigos;
Porque se han levantado contra mí testigos falsos, y los que
respiran crueldad. 13Hubiera yo desmayado, si no creyese que
veré la bondad de Jehová En la tierra de los vivientes. 14Aguarda
a Jehová; Esfuérzate, y aliéntese tu corazón; Sí, espera a Jehová.

Porque cuando soy débil, entonces soy fuerte. Esta es la


conclusión a la que llegó el apóstol mediante aquella experiencia.
Muy distinta de la que estaban presentando sus oponentes.

11-13. ¿A quién hace Pablo este reproche? A los corintios. Lo de


grandes apóstoles a quiénes se refiere? Es una frase sarcástica en
la que se refiere a los falsos apóstoles que le acusaban. 11.13.

Pablo usa con tal maestría el sarcasmo que hay quien considera
sus palabras de forma literal, sin entender el verdadero propósito
del apóstol. Esto lleva a numerosos errores doctrinales.

El sarcasmo es la ironía, es decir, una frase contraria a la que se


quiere dar a entender, empleando un tono que insinúa la
interpretación que debe darse.

Por ejemplo en 1Corintios 4.8 Ya estáis saciados, ya estáis ricos,


sin nosotros reináis. ¡Y ojalá reinaseis, para que nosotros
reinásemos también juntamente con vosotros!

En esta frase es evidente que Pablo está usando de su sarcasmo, al


dar a entender que los corintios no estaban ni tan saciados, ni
ricos, ni reinando, como ellos se creían.
660

Actualmente la falsa doctrina del reino ahora, sigue circulando


entre quienes no conocen este pasaje.

Gálatas 2.15 Nosotros, judíos de nacimiento, y no pecadores de


entre los gentiles.

Es otra es otra frase repleta de sarcasmo del apóstol, mediante la


cual corregía la falsa creencia de los judíos de ser especiales, no
como los pecadores gentiles.

Quizás uno de los pasajes sarcásticos de Pablo que peor se


interpreta es 1Corintios 14.2 Porque el que habla en lenguas no
habla a los hombres, sino a Dios; pues nadie le entiende, aunque
por el Espíritu habla misterios.

Este pasaje dice exactamente lo contrario a lo que muchos creen.


No se olviden que la ironía consiste justamente en decir lo
contrario a lo que se piensa.

¿Cómo sabemos que es ironía y no doctrina cristiana? Por el


contexto. Siempre el contexto. Todo este capítulo está escrito para
exhortar a aquellos de los corintios que por pronunciar palabras
incoherentes, creían que eran superiores a los demás.

Pablo desmonta esa falsa doctrina afirmando que tal pretensión es


falsa y lo hace de este modo. No entraremos a estudiar todo el
contexto de este pasaje que ya lo vimos en su día. Si alguno
quiere conocer la correcta interpretación en su contexto debe ir a
nuestra web y buscar los vídeos de estudio en los que hablamos
de este pasaje.

No obstante, sólo quiero llamar vuestra atención sobre el verso 9


que aclara el sarcasmo de Pablo en el verso 2.

Así también vosotros, si por la lengua no diereis palabra bien


comprensible, ¿cómo se entenderá lo que decís? Porque
hablaréis al aire.
661

Como puede verse no habla a Dios, ni grandes misterios, que era


el falso argumento de los corintios, sino que el que pronuncia
palabras sin sentido simplemente habla al aire.

¡Cuán importante es tener en cuenta los principios y normas de la


hermenéutica para no errar en nuestro uso de la Palabra de Dios!

El sarcasmo y la ironía es mucho más habitual en las Escrituras de


lo que se quiere entender. Dios mismo usa el sarcasmo y la ironía
en distintas ocasiones.

Isaías 47.13 Te has fatigado en tus muchos consejos.


Comparezcan ahora y te defiendan los contempladores de los
cielos, los que observan las estrellas, los que cuentan los meses,
para pronosticar lo que vendrá sobre ti.

El sarcasmo de Dios en este pasaje es evidente, pues, los


astrólogos con su falsa sabiduría y sus horóscopos no pueden en
realidad conocer el futuro. Sólo Dios lo conoce.

Jeremías 2.26-28 Como se avergüenza el ladrón cuando es


descubierto, así se avergonzará la casa de Israel, ellos, sus reyes,
sus príncipes, sus sacerdotes y sus profetas, 27que dicen a un
leño: Mi padre eres tú; y a una piedra: Tú me has engendrado.
Porque me volvieron la cerviz, y no el rostro; y en el tiempo de su
calamidad dicen: Levántate, y líbranos. 28¿Y dónde están tus
dioses que hiciste para ti? Levántense ellos, a ver si te podrán
librar en el tiempo de tu aflicción; porque según el número de tus
ciudades, oh Judá, fueron tus dioses.

La pregunta del verso 28 es claramente sarcástica. Pues, ninguno


de aquellos falsos ídolos podrían levantarse ni librarles en el
tiempo de su aflicción, a pesar de que eran muchos.

Si no tuviésemos en cuenta estos principios de la hermenéutica, es


decir, si no tuviésemos en cuenta el contexto gramatical, ¿Qué
puede ocurrir? Fallaremos en nuestra interpretación de la Palabra
de Dios.
662

En 2Corintios 12.11 Pablo está usando la misma ironía que en


2Corintios 11.5, al llamar grandes apóstoles a aquellos que en
realidad eran falsos apóstoles, pero que se las daban de grandes.

La semana pasada hablamos del sarcasmo o la ironía que usa


Pablo para referirse a aquellos falsos apóstoles que le acusaban
falsamente. Vimos algunos textos en los que no sólo Pablo, sino
incluso Dios usa de ironía.

¿Qué aprendimos con esto? Aprendimos a tener en cuenta, por


tanto, el contexto gramatical de las Escrituras. ¿Por qué es
importante esto? Para no perdernos el verdadero sentido de la
Palabra de Dios.

Volviendo al texto, es evidente que los corintios no estaban


teniendo en cuenta el amor y la entrega del siervo de Dios. Fueron
engañados por aquellos que hablaron mal de Pablo y olvidaron
todo cuanto el apóstol había sufrido por causa de ellos.

Debieron haber salido en defensa de quien Dios había puesto a su


servicio, ¿Lo hicieron? De ningún modo. Lo que hicieron fue
justamente lo contrario. Se pusieron del lado de sus acusadores.
¿Fue una actitud justa? No. No lo fue. Pablo merecía respeto de
todos los corintios y no lo recibió.

¿Qué nos enseña esto? Esto nos enseña a los siervos de Dios que
debemos trabajar por amor a Dios y no esperando recibir la
gratitud de los demás. Porque a la menor de cambio te retiran su
confianza y te menosprecian, olvidándose de todo tu trabajo y
esfuerzo en su favor.

La ingratitud humana es una realidad con la que debemos contar.


Para luego no ser defraudados. De modo que todo lo que hagamos
debemos hacerlo como para el Señor. Pues, Pablo después de su
experiencia escribió Colosenses 3.23-24.
663

Los corintios habían llegado a olvidar todo cuanto el apóstol


había hecho por ellos, llegando incluso al menosprecio, no sólo de
su ministerio, sino incluso de su propia vida. Pablo fue obligado a
presentar sus credenciales de apóstol.

Por ese mismo motivo se sentía mal, al haberse visto obligado a


defenderse de aquellos que debían haberlo defendido a él.
Repetidamente había reconocido lo necio de la jactancia. Pero lo
consideró un mal necesario debido a la situación que existía en
Corinto.

Pablo no tenía más alto concepto de sí mismo del que debía tener.
Por ese motivo llegó a decir que no se sentía digno de ser llamado
apóstol.

1Corintios 15.9 Porque yo soy el más pequeño de los apóstoles,


que no soy digno de ser llamado apóstol, porque perseguí a la
iglesia de Dios.

El apóstol jamás mantuvo una actitud soberbia ni orgullosa, sino


más bien todo lo contrario. Efesios 3.8 A mí, que soy menos que el
más pequeño de todos los santos, me fue dada esta gracia de
anunciar entre los gentiles el evangelio de las inescrutables
riquezas de Cristo.

Ningún orgulloso hubiera escrito 1Timoteo 1.15 Palabra fiel y


digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo
para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero.

Pero era apóstol de Jesucristo, no autonombrado, sino llamado a


ser apóstol, apartado para el evangelio de Dios, como dice en
Romanos 1.1. Por la voluntad de Dios. 1Corintios 1.1.

No como los que ahora se autoproclaman o buscan que por


50.000 $ alguien lo proclame apóstol. Todos ellos son falsos
ministros, no de Dios, sino de Satanás.
664

12. Las señales de apóstol. Aquí muchos se equivocan porque


señalan Hechos 1.21-22 como las señales que debe cumplir los
apóstoles. Pero esto es la opinión de Pedro. Pero Pedro estaba
usurpando un lugar que no le correspondía, al ponerse en el lugar
de Cristo mismo para nombrar al sucesor de Judas.

Veremos cómo el apóstol Pedro, llevado de su carácter impulsivo


metió la pata y se equivocó por no conocer suficientemente la
Escritura. Lo cual nos enseña que todos debemos poner especial
cuidado al interpretarlas, para no cometer error.

El apóstol Pedro, interpretó mal dos pasajes del Antiguo


Testamento, y en base a su mala interpretación hizo algo que no
debía haber hecho. Malinterpretó el Salmo 69.25 y el Salmo
109.8. ¿Qué dicen realmente estos pasajes? Veámoslos.

Salmo 69.25 Sea su palacio asolado; En sus tiendas no haya


morador.

¿De qué está hablando este Salmo? Si tenemos en cuenta el


contexto desde el verso 19 descubrimos que aquí David está
hablando de sus adversarios y de cómo lo trataban, pero al
mismo tiempo, como muchos otros pasajes de la Escritura tienen
un doble sentido. Es una profecía que habla del rechazo del
Mesías por Israel. La pregunta que debemos hacernos es ¿Qué
tiene esto que ver con Judas? Absolutamente nada. Pedro
malinterpretó este pasaje.

Como malinterpretó también el Salmo 109.8 Sean sus días pocos;


Tome otro su oficio.

¿De qué habla David aquí? Se queja de alguien que le injuriaba, y


que no podía ser Judas porque habla de su mujer e hijos. Judas no
los tenía. Además, en el verso 20 lo aclara David.

Nuevamente debemos preguntarnos, ¿Qué tiene esto que ver con


Judas? Nada. Pedro, como otras tantas veces, se equivocó y
665

poniéndose en el lugar de Cristo quiso elegir a un sustituto para


Matías, cuando no había sido llamado a ello.

El libro de los Hechos de los Apóstoles nos muestra con claridad


dos cosas importantes. La primera, que Cristo sigue vivo. Que se
marchara al Padre no significa que no esté presente en su Iglesia,
cuidándola como él había prometido.

La segunda, que Él y sólo Él, es decir, Cristo, es quien llama a los


apóstoles. Jesús escogió como sustituto de Judas a Saulo de Tarso
a quien llamó Pablo.

Es evidente que si tuviésemos que tener en cuenta las señales que


Pedro en su sola voluntad puso, Pablo no habría sido apóstol. Sin
embargo lo fue. Por tanto, ¿se equivocó el Señor Jesús o se
equivocó el apóstol Pedro? Sin duda, fue Pedro.

De modo que las condiciones para ser apóstol no son las que dice
Pedro, en Hechos 1.21-22 sino que la única condición para ser
apóstol es haber sido llamado por Cristo. Ahora, bien, por la
Escritura sabemos que Cristo sólo llamó a trece personas al
ministerio apostólico.

En ocasiones, la visión romántica que tenemos de los personajes


bíblicos nos impide ver la realidad de que eran gentes normales
como nosotros, sólo que fueron escogidos por Dios para el
ministerio al que fueron llamados.

No eran súper hombres que jamás se equivocasen ni metiesen la


pata. Pedro lo hizo con relativa frecuencia debido a su
temperamento impulsivo, y su falta de preparación y teológica.
Ya hemos hablado de esto en anteriores ocasiones, así que no
perderemos tiempo en detenernos en los errores de Pedro que no
fueron pocos, a pesar de ser apóstol de Jesucristo.

Por tanto, ¿a qué señales de apóstol se refería Pablo? Las señales


se refiere a hechos portentosos o maravillosos que por su
666

característica demostrarían de algún modo que Dios estaba


respaldándolo.

Hay que comenzar por decir que, la exigencia de mostrar señales


se trataba de un requisito de los gobernantes de Israel.

Mateo 12.38-39 Entonces respondieron algunos de los escribas y


de los fariseos, diciendo: Maestro, deseamos ver de ti señal. 39El
respondió y les dijo: La generación mala y adúltera demanda
señal; pero señal no le será dada, sino la señal del profeta Jonás.

Para los escribas y fariseos cualquiera que viniera como profeta


de parte de Dios debía contar con el respaldo del poder de Dios.
Es decir, con prodigios y milagros. Señales y prodigios es una
frase que aparece en 17 versículos. De manera que se refiere a
milagros que mostraban el respaldo de Dios.

El Señor Jesús nunca sació la curiosidad morbosa de éstos


gobernantes, a pesar de que realizó muchos y grandes milagros
poderosos, jamás los hizo para ellos, sino para bendecir a alguien.

Cuando los apóstoles comenzaron a predicar el evangelio, aunque


hicieron milagros, los miembros del Sanedrín judío cuestionaron
la autoridad y el poder en que lo habían hecho. ¿Por qué? ¿No
mostraron el poder de Dios? Sin duda. Pero cuando alguien no
quiere creer, ningún milagro le hará cambiar su postura.

Como solía decir mi madre: Cuando no aprecias a alguien aunque


pinte angelitos, tú verás demonios.

En Lucas 16.27-31 El Señor fue claro al respecto de esta verdad.


Quien no cree la Escritura no creerá aunque alguno se levantare
de los muertos.

De modo que Pablo estaría hablando de algunas señales y


prodigios que hubieran sido realizados por Dios, por medio de él
en Corinto. Aunque algunos “estudiosos” afirman que Pablo
nunca hizo milagros.
667

Como saben, para preparar este estudio, dedico mucho tiempo al


estudio de la Palabra de Dios y a la investigación. Sinceramente
no me explico como algunos escriben libros hablando de la Biblia
sin conocerla. Es evidente que quien afirma que Pablo no hizo
milagros no conoce en absoluto la Biblia.

Hechos 14.8-10 Y cierto hombre de Listra estaba sentado,


imposibilitado de los pies, cojo de nacimiento, que jamás había
andado. 9Este oyó hablar a Pablo, el cual, fijando en él sus ojos, y
viendo que tenía fe para ser sanado, 10dijo a gran voz: Levántate
derecho sobre tus pies. Y él saltó, y anduvo.

Hechos 19.11 Y hacía Dios milagros extraordinarios por mano de


Pablo, 12de tal manera que aun se llevaban a los enfermos los
paños o delantales de su cuerpo, y las enfermedades se iban de
ellos, y los espíritus malos salían.

Hechos 20.10 Y hacía Dios milagros extraordinarios por mano de


Pablo, 12de tal manera que aun se llevaban a los enfermos los
paños o delantales de su cuerpo, y las enfermedades se iban de
ellos, y los espíritus malos salían.

Todos estos milagros los hizo Dios por medio de su siervo Pablo.

¿Cómo puede alguien escribir un comentario de la Biblia y


afirmar que el apóstol Pablo nunca hizo milagros, cuando la
Escritura nos muestra sobreabundantemente que los hizo?

Hay que tener en cuenta lo que escribió en Romanos 15.18-19


Porque no osaría hablar sino de lo que Cristo ha hecho por
medio de mí para la obediencia de los gentiles, con la palabra y
con las obras, 19con potencia de señales y prodigios, en el poder
del Espíritu de Dios; de manera que desde Jerusalén, y por los
alrededores hasta Ilírico, todo lo he llenado del evangelio de
Cristo.
668

Cumpliéndose lo que está escrito en Hebreos 2.4 testificando Dios


juntamente con ellos, con señales y prodigios y diversos milagros
y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad.

Dios respaldó la predicación del apóstol Pablo con señales y


prodigios verdaderos.

Como decíamos, ni Jesús ni los apóstoles hicieron milagros para


saciar la curiosidad de la gente, sino más bien como respaldo de
Dios a la predicación del evangelio.

Jamás, ni Jesús ni los apóstoles hicieron señales para que la gente


creyera en los milagros. Para Pablo, la fe viene por el oír de la
Palabra de Dios. Romanos 10.17.

De ahí que Dios mandase que se predicase el evangelio a toda


criatura. Marcos 16.15-16, llamando a todos a creer. Romanos
10.18-17.

Hablábamos sobre las señales de apóstol y hablamos de los


prodigios y milagros que los escribas y fariseos reclamaban como
demostración de que el poder de Dios actuaba por medio de ellos.

Recordemos lo que Juan nos dice sobre el encuentro de Nicodemo


con Jesús, en Juan 3.1-2 Había un hombre de los fariseos que se
llamaba Nicodemo, un principal entre los judíos. 2Este vino a
Jesús de noche, y le dijo: Rabí, sabemos que has venido de Dios
como maestro; porque nadie puede hacer estas señales que tú
haces, si no está Dios con él.

Aquí vemos cómo predominaba entre los fariseos la idea de que


aquellos que hablaban de parte de Dios, sino era un descendiente
de Leví debía manifestar prodigios o señales como evidencia del
respaldo de Dios.

Esa falsa postura aún predomina hoy en algunos grupos,


especialmente pentecostales, en los que hacen hincapié en las
señales, como evidencia del respaldo de Dios.
669

Generalmente suelen citar Marcos 16.17-18 Y estas señales


seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios;
hablarán nuevas lenguas; 18tomarán en las manos serpientes, y si
bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre los enfermos
pondrán sus manos, y sanarán.

Claro que, no tienen en cuenta dos cosas: La primera que estas


palabras fueron dirigidas a sus doce apóstoles; y que 1Corintios
12.27-31 demuestra que no todos somos apóstoles, ni todos
hacemos milagros.

La segunda que el libro de los Hechos de los Apóstoles de


muestra que esto ya se cumplió, en quien debía cumplirse, y que
no podemos exigir esto mismo a todo el mundo.

Es importante aclarar que los prodigios y milagros tampoco son,


en realidad, una garantía del obrar de Dios. Recuerden las
palabras del Señor Jesús que dijo en Mateo 24.24 Porque se
levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes
señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere
posible, aun a los escogidos.

¿Qué estaba enseñando Jesús con estas palabras? De este modo,


Jesús estaba enseñando que no debíamos poner la mirada en las
manifestaciones de “poder”. Es decir, en las señales, prodigios o
milagros.

Según este pasaje ¿En qué debemos prestar atención? En lo que


enseñan. Para lo cual debemos contrastar sus palabras y
enseñanzas con las Escrituras.

El mismo apóstol pablo advirtió en 2Tesalonicenses 2.7-12


Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad; sólo que hay
quien al presente lo detiene, hasta que él a su vez sea quitado de
en medio. 8Y entonces se manifestará aquel inicuo, a quien el
Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el
resplandor de su venida; 9inicuo cuyo advenimiento es por obra
670

de Satanás, con gran poder y señales y prodigios mentirosos, 10y


con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto
no recibieron el amor de la verdad para ser salvos. 11Por esto
Dios les envía un poder engañoso, para que crean la mentira, 12a
fin de que sean condenados todos los que no creyeron a la
verdad, sino que se complacieron en la injusticia.

Por lo que no debemos dejarnos arrastrar por la apariencia de


poder, sino más bien, como enseña el apóstol: examinarlo todo.
1Tesalonicenses 5.21.

De modo que los actos milagrosos por sí solos no eran las únicas
señales de un verdadero apóstol ni necesariamente las más
importantes. Su ministerio altruista de servicio y amor a los
corintios debería ser la evidencia convincente de su autenticidad
como un verdadero apóstol.

13. En realidad, debido a sus muchos problemas, Pablo había


dedicado más tiempo a la congregación de Corinto que a las
demás de Asia Menor. ¿Recuerdan cuánto tiempo pasó Pablo en
Corinto? Año y medio. Hechos 18.10.

Sin embargo, fue la única congregación de la que no quiso recibir


salario, ¿Por qué? Para no dar lugar a engaño. Que no
malinterpretaran sus intenciones.

Los muchos problemas que se dieron en Corinto hicieron


necesarias las cartas que estamos estudiando y que han servido no
sólo para solucionar los problemas de los corintios, sino también
como base para la teología de todas las congregaciones cristianas.

La petición del apóstol de perdón por ese “agravio” es una nueva


muestra de la ironía del apóstol. ¿A qué agravio se refiere el
apóstol? A no haberles cobrado por sus servicios.

¿Qué era lo normal en aquella época, cobrar o no, por sus


servicios? Lo normal en aquella época era cobrar. Todos los
maestros, filósofos, etc. Incluso los escribas, recibían salario por
671

sus servicios. Así que no era ilógico pensar que Pablo tenía todo
el derecho del mundo a recibirlo por su trabajo.

El mismo Señor Jesús dijo: el obrero es digno de su salario.


Lucas 10.7. Así también ordenó el Señor a los que anuncian el
evangelio, que vivan del evangelio. 1Corintios 9.14.

Es importante recordar aquí 2Corintios 11.8-9 He despojado a


otras iglesias, recibiendo salario para serviros a vosotros. 9Y
cuando estaba entre vosotros y tuve necesidad, a ninguno fui
carga, pues lo que me faltaba, lo suplieron los hermanos que
vinieron de Macedonia, y en todo me guardé y me guardaré de
seros gravoso.

De ahí el sarcasmo con que les escribe al decirles: ¡Perdonadme


este agravio! Con el que deja bien claro que les trató siempre, en
todo momento, con un amor y cuidado mayor aún, si cabe, a las
demás congregaciones.

14-15. La tercera vez. Algunos quieren interpretar aquí que es el


tercer intento de ir por segunda vez. ¿Qué cree? ¿Se refiere Pablo
a otro intento de ir por segunda vez o se refiere a que es la tercera
visita que les hará?

Más adelante el mismo Pablo aclara la cuestión al decir en


2Corintios 13.1 Esta es la tercera vez que voy a vosotros. Por
tanto, ¿Hablaba de un tercer intento o una tercera visita? Sin duda
de una tercera visita.

Al preparar su próxima visita a Corinto, Pablo aclara su


planificación financiera para la misma, diciendo:

No os seré gravosos. ¿Cambió Pablo su forma de proceder por las


acusaciones de que fue objeto? De ningún modo. Siguió fiel a sus
principios. Algo digno de imitar, y bastante alejado de la arpía
artimaña que tejieron contra él.
672

La falsa acusación de aquellos disfrazados de apóstoles de que no


recibió salario por su falta de competencia, no sólo era mentira,
sino un insulto malicioso y sin fundamento.

Aquella acusación sólo demostraba el interés de aquellos de


encubrir su verdadera intención de estafar a los corintios.

También es bastante alejado del modo de proceder que muchos


“siervos” de Dios tienen en la actualidad, cobrando hasta por oír
el mensaje de la Palabra de Dios.

Cada vez es más habitual que los pastores realicen eventos a los
cuales traen algunos invitados, con el fin de cobrar por unas
conferencias, que al fin y al cabo, no debiera ser otra cosa que una
exposición de la Palabra de Dios.

En realidad, hoy dista mucho de ser eso. En la mayoría de los


casos son exposiciones pseudo-psico-filosóficas. Es decir, una
mezcla de filosofías humanistas y psicología barata.

De modo que ¿Tendrían los corintos que pagar entrada para ver a
Pablo? De ningún modo, ni tan siquiera tendrían que ocuparse de
los gatos de su viaje, estancia, alimentación o remuneración.

Porque no busco lo vuestro. ¡Cuán clara y meridianamente se


expresa el apóstol! ¿No les parece? Sin la menor duda. ¿Qué es lo
que realmente buscaba Pablo? A ellos. A los corintos.

El argumento o la razón que da es absolutamente lógica. Los


padres deben preocuparse de sus hijos. De su presente y de su
futuro.

Esto ¿Les parece lógico o no? Sin duda. Lo es. ¿Por qué, pues,
tantísimos padres no se preocupan de sus hijos? Por que no son
verdaderos discípulos de Cristo.

¿Puede, a la luz de Juan 8.31.32, alguien ser un irresponsable para


con sus hijos y a la vez decir que es cristiano? De ningún modo.
673

Los padres son responsables delante de Dios, ante quien tendrán


que rendir cuentas por el modo en que proveyeron o dejaron de
hacerlo para con sus hijos.

¿Qué debe proveer un padre a sus hijos? ¿Sólo alimento? Algunos


ni tan siquiera les proveen de lo necesario para su alimentación.
¿Cómo es posible que aun así, estén en una iglesia cantando a
Dios y diciéndole que quieren agradarle?

Cada día hay más niños que crecen sin la presencia de alguno de
sus padres. Actualmente, debido al feminismo descarnado que
estamos padeciendo, hay quienes ven a los hijos como una carga.
Pero no lo son, sino una bendición de Dios.

Salmo 127.3-5 He aquí, herencia de Jehová son los hijos; Cosa


de estima el fruto del vientre. 4Como saetas en mano del valiente,
Así son los hijos habidos en la juventud. 5Bienaventurado el
hombre que llenó su aljaba de ellos; No será avergonzado
Cuando hablare con los enemigos en la puerta.

Nos quedamos en 12.14 hablando del cuidado que los padres


deben tener de los hijos. Observamos que cada día hay más niños
que crecen sin uno de los padres en el hogar.

¿A qué creen que esto es debido? A la falta de responsabilidad a


la que llega una ley de divorcio demasiado simplista. A la falta de
compromiso de las parejas para afrontar juntos los problemas, y
debido a la huida del ser humano de todo aquello que le haga
sentir mal.

El hedonismo, la búsqueda del placer personal por encima de las


responsabilidades sociales, está llevando al mundo por un camino
desastroso.

¿Creen que las familias son más felices ahora que las de antes?
No. ¿Por qué? Porque la maldad se está multiplicando y
perdiendo el amor. El mundo es más egoísta cada día.
674

Antes el interés de los hijos estaba por encima de los intereses


personales de los padres. Desde la aprobación del aborto libre, el
egoísmo y el interés de los padres ha quedado definitivamente por
encima del de los hijos, a los cuales no se duda en asesinar si es
preciso.

Oí en cierta ocasión a alguien decir, que abortaba porque tenía


derecho a cuidar su cuerpo. ¿Dónde dejaba el derecho de su hijo a
vivir? No le importó lo más mínimo.

La Palabra de Dios enseña que los padres deben preocuparse por


el bienestar de los hijos.

1Timoteo 5.7-8 Manda también estas cosas, para que sean


irreprensibles; 8porque si alguno no provee para los suyos, y
mayormente para los de su casa, ha negado la fe, y es peor que
un incrédulo.

Cuando alguien afirma que se ha convertido a la fe de Cristo, y


sigue sin preocuparse de sus propios hijos, ¿Qué demuestra?
Demuestra que su conversión es pura religión vacía y que no sirve
para nada. Pues, una religión que no cambia los principios y
valores, no sirve, al menos para salvarse.

Veamos algo que Dios dice sobre Abraham, en Génesis 18.17-19


Y Jehová dijo: ¿Encubriré yo a Abraham lo que voy a hacer,
18
habiendo de ser Abraham una nación grande y fuerte, y
habiendo de ser benditas en él todas las naciones de la tierra?
19
Porque yo sé que mandará a sus hijos y a su casa después de sí,
que guarden el camino de Jehová, haciendo justicia y juicio, para
que haga venir Jehová sobre Abraham lo que ha hablado acerca
de él.

¿Qué podemos aprender de este pasaje en relación a los padres?


Que Dios sabía que Abraham sería responsable y enseñaría a sus
hijos sus caminos. Pero también que Dios sabe qué hacemos
como padres, sea bueno o sea malo.
675

¿Qué sabe Dios de ti? ¿Sabe Dios que eres un buen padre, una
buena madre?

Proverbios 5.21 Porque los caminos del hombre están ante los
ojos de Jehová, Y él considera todas sus veredas.

Hebreos 4.13 Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su


presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a
los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.

Sabemos que todos podemos cometer errores en nuestra vida en el


cumplimiento de nuestra responsabilidad para con nuestros hijos.
Pero jamás debemos practicar tales errores. Debemos luchar
contra ellos. Procurar superarlos. Aprender y continuar con la
tarea de manera responsable.

Sabemos por Deuteronomio 6.6-7 que Dios pone en los padres la


responsabilidad de educar en la fe a sus hijos. En ambos, padre y
madre.

Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón;


7
y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa,
y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes.

Pero no es esa la única responsabilidad de los padres para con los


hijos. Los padres deben enseñar y educar. ¿Cuál creen que es
actualmente el mayor problema que los padres tienen a la hora de
educar a los hijos?

El mayor problema es que ellos mismos no tienen educación. Los


propios padres deben ser educados. Ese es el verdadero problema,
que nadie puede dar lo que no tiene.

¿Qué puede hacer unos padres que no ha sido bien educados y


desean educar bien a sus hijos? Procurar una buena educación
para sí mismos.
676

Las iglesias deben proveer la instrucción necesaria para que los


padres puedan adquirir el conocimiento que necesitan para educar
a sus hijos conforme a la voluntad de Dios.

Los pastores, según Pablo en Efesios 4.11 son también maestros.


Si en tu congregación el pastor no enseña sobre la familia, la
paternidad, o maternidad, la obediencia de los hijos hacia los
padres, etc. exhorta a tu pastor a que lo haga. Es su deber.

Es triste que algunas iglesias no den importancia a estos temas a


los que la Palabra de Dios sí le da importancia. Pero también es
triste que haya congregaciones en las que se de esa enseñanza y
haya algunos padres que por inmadurez o irresponsabilidad no la
aproveche.

Los padres deben estar preparados para educar a sus hijos en el


temor a Dios. No hay nada peor que exigir a nuestros hijos lo que
nosotros mismos no estamos dispuestos a dar. Ni corregir en ellos
nuestros propios errores.

¿Creen que los hijos se dan cuenta de la incoherencia que eso


supone? Desde luego que sí. Si hay algo a los que los niños son
inmune es a la hipocresía. Ellos la detectan de lejos.

Según Dios enseña en su Palabra, los padres tienen la obligación


de corregir y disciplinar a sus hijos. Vamos a ver un pasaje de la
Escritura en que comprobaremos que Dios no resta importancia a
estos temas.

1Samuel 3.11-14 Y Jehová dijo a Samuel: He aquí haré yo una


cosa en Israel, que a quien la oyere, le retiñirán ambos oídos.
12
Aquel día yo cumpliré contra Elí todas las cosas que he dicho
sobre su casa, desde el principio hasta el fin. 13Y le mostraré que
yo juzgaré su casa para siempre, por la iniquidad que él sabe;
porque sus hijos han blasfemado a Dios, y él no los ha estorbado.
14
Por tanto, yo he jurado a la casa de Elí que la iniquidad de la
casa de Elí no será expiada jamás, ni con sacrificios ni con
ofrendas.
677

Es interesante en este pasaje que Dios señala que Elí sabía que
estaba haciendo mal. Fíjense en los versos 1Samael 3.15-18. Elí
no sólo sabía que estaba haciendo mal. Fue advertido por Dios.
Como Nabucodonosor lo fue un año antes de su caída.

En 1Samuel 3.2 Dios le advierte por medio de Samuel cuando sus


ojos comenzaban a oscurecerse.

En 1Samuel 4.15-18 cuando sus ojos ya se habían oscurecido, se


produce el juicio de Dios, por cuanto no tuvieron temor de Dios,
no se tomaron en serio su advertencia, y al final lo pagaron
gravemente.

¿Qué quiere decir esto? Que el juicio de Dios no se produjo


inmediatamente. Pasó bastante tiempo entre la advertencia y el
juicio.

Dios castigó severamente la irresponsabilidad de Elí. Y no


perdonó su pecado, por cuanto no hubo arrepentimiento en él.

Algunos pueden ser tentados a pensar que como pecan y parece


que no pasa nada, nada pasará. Pero llegado el cumplimiento del
tiempo el juicio de Dios llegará para cada uno.

La semana pasada nos quedamos en el verso 14, con la frase de


Pablo: pues no deben atesorar los hijos para los padres, sino los
padres para los hijos.

¿De qué nos habla esa frase? De la responsabilidad de los padres


para con los hijos. Dicha responsabilidad ¿Consiste sólo en
atesorar? Es decir, ¿Consiste sólo en proveer recursos para su
educación y su futuro, o va mucho más allá de atesorar?

Por supuesto. La responsabilidad de los padres no es sólo proveer


recursos económicos. Aunque eso parece que entienden muchos.
Cada día hay más personas que dedican tanto tiempo y esfuerzo
678

por buscar recursos económicos para el bienestar de sus hijos que


se olvidan que necesitan más que eso.

La semana pasada hablamos de Deuteronomio 6 en el que Dios


pone sobre los padres, la responsabilidad de enseñarles los
principios de la Palabra de Dios.

Vimos el ejemplo de Elí como padre. ¿Fue un buen o mal ejemplo


de paternidad? Verdaderamente un mal ejemplo. ¿Recuerdan por
qué fue un mal ejemplo? Porque no corrigió a sus hijos cuando
anduvieron mal.

A muchos padres les cuesta corregir a sus hijos. Se sienten mal


cuando deben hacerlo. Sienten como que al corregirlos no los
están amando lo suficiente. Algunos incluso temen perder el
cariño de sus hijos si los disciplinan.

¿Cuáles fueron las consecuencias del mal proceder de Elí? Que


murieron tanto sus hijos, como el propio Elí. ¿Fue inmediato el
juicio de Dios sobre Elí? No. Vimos que Dios le advirtió por
medio de Samuel y aun así, no rectificó su conducta.

¿Qué nos enseña eso? Que el mal siempre tiene consecuencias; y


que aunque tarde, las consecuencias de nuestros actos siempre nos
alcanzan.

Sigamos hoy donde lo dejamos. Pues, es un tema interesante del


que aun tenemos algo más que meditar.

Hechos 17.30-31 Pero Dios, habiendo pasado por alto los


tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en
todo lugar, que se arrepientan; 31por cuanto ha establecido un
día en el cual juzgará al mundo con justicia, por aquel varón a
quien designó, dando fe a todos con haberle levantado de los
muertos.

Aunque Pablo no está hablando aquí de la responsabilidad que


tenemos como padres, sino en cuanto a Dios y la salvación de
679

nuestra alma, queda claro por este pasaje que llegará el día en que
seremos juzgados por Dios. Entonces, todos nuestros pecados
serán pesados en la balanza.

¿Qué quiere decir esto? Que puede que tarde el juicio de Dios,
pero llegará. El mal siempre alcanza a aquel que lo practica.
Aunque no se cumpla en el momento mismo en que hacemos el
mal, el juicio de Dios, tarde o temprano siempre llega.

Veremos algunos pasajes en los que Dios advierte contra aquellos


que no sean responsables para con sus hijos, de tal modo que
quienes no cumplan con su deber de padres o madres, recibirán su
castigo.

Existen muchísimos casos de irresponsabilidad paterna o materna.


Especialmente en nuestros días en que el ser humano se ha vuelto
tan egoísta y sólo piensa en su propia felicidad y no en la de sus
hijos.

Hoy en día las parejas se juntan y desjuntan y no tienen en cuenta


las repercusiones que esto tiene para con sus hijos. Hoy es
frecuente que en una misma familia se junten los hijos de ella, los
hijos de él y los hijos comunes.

Esto provoca numerosos conflictos en los hijos. Cuando se dan


estas circunstancias, los padres deben ser muy sabios para no
favorecer a unos frente a otros. Pero sobre todo, para no
perjudicar a ninguno.

Yo veo esto a diario en las consultas de consejería que me hacen


desde todo el mundo. En todo lugar se repiten los mismos
pecados de egoísmo que lleva a la gente a ser irresponsables con
los hijos.

Déjenme decirles que cuando un hombre se casa con una mujer


que ya tiene hijos de otro y convive con ellos, debe asumir la
responsabilidad de la paternidad de esos hijos como si fueran
680

suyos propios. Igualmente la mujer que se casa con un hombre


que tiene hijos de otro matrimonio anterior.

Por otro lado, la responsabilidad de los hijos no desaparece


porque los hijos no convivan con el padre o la madre. Si un
hombre contrae un segundo matrimonio, los hijos habidos en el
primero, siguen siendo su responsabilidad aunque no convivan
con él.

Puedes divorciarte de tu esposa, aunque no es esa la voluntad de


Dios, pero si lo haces, no puedes divorciarte de tus hijos.
Igualmente las mujeres. Puedes divorciarte de tu marido, aunque
el divorcio no es la voluntad de Dios, pero si te divorcias de tu
marido, no significa que te divorcies de tus hijos.

Los hijos siempre seguirán siendo responsabilidad de ambos


padres, hagan lo que hagan ellos. Todos tendremos que dar
cuentas delante de Dios. Dios jugará si hemos sido o no,
responsables para con nuestros hijos.

Actualmente existe un tendencia dentro de la teología liberal a


considerar que basta con decir que lo sientes y que Dios te
perdonará automáticamente. Por tanto, muchos creyentes hacen lo
que quieren en la esperanza de que Dios no tendrá nada que decir
al respecto porque “supuestamente” se arrepintieron.

Por ese motivo, algunos se juntan y desjuntan estableciendo y


rompiendo matrimonios como si a Dios no le importase lo más
mínimo.

¿Creen que esa actitud es correcta? Desde luego que no. Créanme,
el pecado sólo es perdonado por Dios cuando verdaderamente hay
un arrepentimiento genuino.

Quiero recordar las palabras del apóstol Pablo en Gálatas 6.7-9


No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el
hombre sembrare, eso también segará. 8Porque el que siembra
para su carne, de la carne segará corrupción; mas el que siembra
681

para el Espíritu, del Espíritu segará vida eterna. 9No nos


cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si
no desmayamos.

Algunos me han preguntado ¿Hasta dónde, o hasta cuándo llega


la responsabilidad de los padres sobre los hijos? Es decir,

¿Qué ocurre cuando un hijo ya tiene una cierta edad y no quiere


obedecer a los padres, e incluso se mete en líos?

¿Qué ocurre si un hijo ya tiene treinta años y sigue viviendo con


los padres?

¿Qué ocurre con los hijos que ya se han casado y formado su


propia familia?

¿En todos estos casos los padres siguen siendo responsables de


los hijos?

¿Qué piensan al respecto? Intentemos dar respuesta a estas


cuestiones:

Cuando los hijos tienen una cierta edad y no quieren obedecer a


los padres e incluso se meten en líos. Los padres somos
responsables de ellos hasta que son adultos.

Una vez que son adultos toman sus propias decisiones, pero si aun
no están considerados adultos, los padres seguimos siendo
responsables de ellos.

Ahora bien, si son adultos para meterse en líos, que lo sean para
salirse de ellos.

Si son adultos y no quieren someterse a los padres, que se


busquen un lugar donde vivir, y asuman sus propias
responsabilidades como adultos. Pues, mientras estén en bajo su
techo deberían someterse a las normas establecidas en el hogar.
682

Así que, aunque tengan treinta o cuarenta años, siguen estando


sometidos a los padres mientras vivan bajo su techo.

En cuanto a los que ya se han casado y formado su propia familia,


los padres pueden aconsejar, pero no deben inmiscuirse más allá
de donde se les requiera.

Muchas familias se han roto por la intromisión de los padres en


los asuntos de sus hijos. Hay madres que no quieren soltar a los
hijos y aun cuando tienen cuarenta años, y cinco hijos, siguen
diciéndoles cómo tienen que ser las cosas en su hogar y familia,
entrando en conflicto con la nuera. Eso no debe pasar.

Por eso las suegras tienen mala fama. Pero no ocurre sólo con las
suegras, también con los suegros. De tal modo que nuestra
responsabilidad termina cuando ellos se independizan.

No obstante, si nos necesitaran y pidieran ayuda, nuestro deber es


acudir en su ayuda, hasta donde nos sea posible. Jamás dejamos
de ser padres.

Como decía, hay muchos pasajes bíblicos que nos hablan de la


responsabilidad de los padres para con los hijos. Algunos nos
exhortan a educar a nuestros hijos, como por ejemplo:

Proverbios 22.6 Instruye al niño en su camino, y aun cuando


fuere viejo no se apartará de él.

Pareciera a la luz de pasajes como éste que el éxito estuviese


asegurado, pero, ¿Es siempre así? ¿Qué piensan? La verdad es
que no. Porque los hijos, cuando crecen, toman sus propias
decisiones. Toda verdad debe ser equilibrada con otra verdad.
Esto tiene que ver con cómo interpretamos las Escrituras.

Es cierto que si le hemos educado bien, estarán más preparados y


mejor equipados para enfrentar el mundo con sus presiones. Pero
debemos tener en cuenta que nuestros hijos no sólo reciben
nuestra influencia.
683

Desde el momento en que los inscribimos en un centro de


educación fuera de casa, le estamos poniendo bajo la influencia
de otras personas: Maestros, compañeros, etc. Por lo que la
educación que reciben en casa no es garantía de que no serán
influidos por el mal ni se dejarán arrastrar por la corriente de este
mundo.

Les pongo un ejemplo, sobre cómo equilibrar una verdad con


otra: Salmo 37.25-26 Joven fui, y he envejecido, Y no he visto
justo desamparado, Ni su descendencia que mendigue pan. 26En
todo tiempo tiene misericordia, y presta; y su descendencia es
para bendición.

¿Significa esto que los cristianos jamás pasarán por necesidades


económicas? De ningún modo. Esta verdad de que Dios provee
para nuestras necesidades debe ser equilibrada con otra verdad de
que Dios permite que a veces podamos pasar por necesidad.

El hambre que se extendió entre los creyentes de Jerusalén y que


hizo necesaria la ofrenda de la que hemos estudiado en estas
epístolas de Pablo a los Corintios, da testimonio de ello. El propio
Pablo testifica en Filipenses 4.10-20 que sufrió penalidades y
tribulación por falta de dinero.

Repito: toda verdad debe ser equilibrada con otra verdad. La


Palabra de Dios, nos muestra que en esta tarea de educar a
nuestros hijos hay sus excepciones en cuanto a los resultados.

En 1Samuel 8.4-5 leemos: Entonces todos los ancianos de Israel


se juntaron, y vinieron a Ramá para ver a Samuel, 5y le dijeron:
He aquí tú has envejecido, y tus hijos no andan en tus caminos;
por tanto, constitúyenos ahora un rey que nos juzgue, como
tienen todas las naciones.

¿Porque Samuel no fue advertido del pecado de sus hijos? ¿Por


qué Dios no castigó a Samuel como a Elí? Porque con toda
684

seguridad él conocía lo que sus hijos hacían y los amonestó y


corrigió, aún cuando sus hijos no hicieran caso.

Samuel es uno de los pocos personajes de la Biblia de los que no


se nos muestra ningún pecado. Eso no significa que no cometiera
ninguno, sino que era un hombre justo ante los ojos de Dios. De
tal modo que podemos usarlo como tipo de Cristo como juez,
profeta, siervo y sacerdote.

Así, que, podemos observar la enorme diferencia entre ambos


casos, entre Elí y Samuel. Los hijos, tanto de uno como de otro,
pagarían por sus propios pecados. Pero Samuel libró sus manos,
por cuanto él les advirtió.

Ezequiel 3.16-21 Y aconteció que al cabo de los siete días vino a


mí palabra de Jehová, diciendo: 17Hijo de hombre, yo te he
puesto por atalaya a la casa de Israel; oirás, pues, tú la palabra
de mi boca, y los amonestarás de mi parte. 18Cuando yo dijere al
impío: De cierto morirás; y tú no le amonestares ni le hablares,
para que el impío sea apercibido de su mal camino a fin de que
viva, el impío morirá por su maldad, pero su sangre demandaré
de tu mano. 19Pero si tú amonestares al impío, y él no se
convirtiere de su impiedad y de su mal camino, él morirá por su
maldad, pero tú habrás librado tu alma. 20Si el justo se apartare
de su justicia e hiciere maldad, y pusiere yo tropiezo delante de
él, él morirá, porque tú no le amonestaste; en su pecado morirá, y
sus justicias que había hecho no vendrán en memoria; pero su
sangre demandaré de tu mano. 21Pero si al justo amonestares
para que no peque, y no pecare, de cierto vivirá, porque fue
amonestado; y tú habrás librado tu alma.

Si Dios no amonestó a Samuel advirtiéndole del pecado de sus


hijos, ni lo condenó por ello, fue porque Samuel actuó de manera
diferente a Elí, de lo contrario, también habría padecido el mismo
castigo que él.
685

El caso de Samuel nos demuestra que, aun teniendo un mal


ejemplo en casa, recuerden que Samuel fue criado con Elí en el
templo, se puede hacer lo correcto.

El mal ejemplo de un padre no obliga a los hijos a seguir sus


pasos. Recuerden lo que está escrito en Ezequiel 18.20 El alma
que pecare, esa morirá; el hijo no llevará el pecado del padre, ni
el padre llevará el pecado del hijo; la justicia del justo será sobre
él, y la impiedad del impío será sobre él.

De modo que los hijos no pueden poner el mal ejemplo de los


padres como excusa para su mal proceder.

No obstante, es una obligación de los padres corregir a los hijos, y


aquellos que no lo hagan, pagarán la consecuencias delante de
Dios. Los hijos que sean desobedientes también pagarán. De ahí,
que tratemos este asunto con cuidado, porque el mal siempre tiene
consecuencias.

Siguiendo donde lo dejamos, sobre la responsabilidad de los


padres para con los hijos, decíamos que algunos padres piensan
que por no castigar a sus hijos son mejores padres. ¿Es eso así?
Desde luego que no. La Palabra de Dios nos enseña otra cosa bien
distinta.

Proverbios 13.24 El que detiene el castigo, a su hijo aborrece;


Mas el que lo ama, desde temprano lo corrige.

La pregunta que debemos hacernos es ¿Seremos nosotros mejores


padres que Dios? De ningún modo. Si Dios castiga para nuestro
bien, también debemos hacerlo nosotros.

¿Cuándo es desde temprano? Algunos dicen que hasta que


cumplan cuatro o cinco años; que corregir a un niño antes puede
traumatizarlo. Pero para entonces, ya su personalidad está
formada, o casi, y si le hemos acostumbrado a salirse con la suya,
después no podremos cambiar eso.
686

La ley del péndulo ha llevado a muchos a cometer errores de


interpretación bíblica. Huyendo de la falsa imagen de un Dios
cruel que la iglesia católico romana ha presentado, algunos han
llegado a enseñar que Dios no castiga al pecador, lo cual es
absolutamente mentira.

Porque escrito está: Porque el Señor al que ama, disciplina, y


azota a todo el que recibe por hijo. Hebreos 12.6.

El término griego que aquí se traduce por disciplina es paideuei


que significa: enseña, corrige, disciplina, castiga. Por tanto, Dios
sí que castiga al que hace mal. No olviden que el Señor Jesús
habló frecuentemente del infierno, que no es otra cosa que un
castigo eterno. Mateo 25.46. También Judas 7.

Los padres deben disciplinar a los hijos. Obviamente, siempre con


cuidado, sabiendo que el castigo debe cumplir un objetivo: que
los hijos aprendan obediencia y disciplina. Y una de las lecciones
más importantes que aprenderán en la vida: Que el mal siempre
tiene consecuencias.

¿Has enseñado eso a tus hijos? Si tú no se lo enseñas, otros lo


harán, tarde o temprano. Pero lo aprenderá.

Efesios 6.4 Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros


hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor.

Amamos tanto a nuestros hijos que no hay mal que no


quisiéramos evitarle. Estos sentimientos son naturales.
Comprendemos a los padres que consienten a su hijo, pero no le
hacen ningún favor.

Proverbios 29.15 La vara y la corrección dan sabiduría; Mas el


muchacho consentido avergonzará a su madre.

Pasajes como este, que hablan de vara y corrección, ya no se citan


porque no son políticamente correctos. Pero es la pura verdad.
687

Cuando un niño no es corregido, sino consentido, acaba


produciendo la vergüenza de los padres.

A nosotros nos corresponde decidir si queremos que nuestros


hijos nos avergüencen públicamente o que nos hagan sentirnos
orgullosos de ellos.

Ejemplos podríamos poner cientos de ellos, todos verdad, porque


todos hemos sido testigos de la perreta de niños que querían algo
que los padres no podían o no querían darle, y que por no haber
sido adecuadamente educado y corregido a tiempo, acabó
avergonzándoles públicamente.

¿Has sido testigo de un episodio de esa índole? ¿Qué sentiste?


¿Qué pensaste? En ocasiones cuando vemos a un niño portándose
mal y a los padres que no consiguen dominarlos, pensamos
aunque no lo digamos: Ese niño necesita disciplina.

Estas experiencias se dan en personas que generalmente creen que


basta con hablar pausadamente y razonar con los niños. Algo que
es bueno y conveniente. Pero tú y yo sabemos que no siempre los
niños están dispuestos a oír las razones por las cuales los padres
no están dispuestos a concederle todos sus deseos. A veces, aun
queriendo, porque no siempre se puede.

Cuando una persona crece sin disciplina, acostumbrado a


conseguir lo que quiere como sea, no le importará hacer daño a
los demás si se ponen en su camino o se oponen a sus deseos.

Cuando un niño es consentido y no consigue lo que quiere, pierde


los estribos. Grita y patalea hasta obtenerlo. Luego van al colegio
y la maestra no tiene recursos para mantener la disciplina. Los
padres no quieren que sus hijos sean contrariados.

En el hogar, en el colegio, en el trabajo, incluso en la iglesia una


sana disciplina es imprescindible. Cuanto antes lo entienda y
practique, mejor.
688

Porque los hijos se convierten en adultos y tendrán problemas con


cualquiera que les contraríe. Y si llegan a convertirse al Señor
acabarán pensando que Dios tiene el deber de consentirles, como
sus padres; y cuando no lo haga, su fe se resentirá. Pero la
Escritura nos dice en Hebreos 12.6-11:

Porque el Señor al que ama, disciplina, Y azota a todo el que


recibe por hijo. 7Si soportáis la disciplina, Dios os trata como a
hijos; porque ¿qué hijo es aquel a quien el padre no disciplina?
8
Pero si se os deja sin disciplina, de la cual todos han sido
participantes, entonces sois bastardos, y no hijos. 9Por otra parte,
tuvimos a nuestros padres terrenales que nos disciplinaban, y los
venerábamos. ¿Por qué no obedeceremos mucho mejor al Padre
de los espíritus, y viviremos? 10Y aquéllos, ciertamente por pocos
días nos disciplinaban como a ellos les parecía, pero éste para lo
que nos es provechoso, para que participemos de su santidad.
11
Es verdad que ninguna disciplina al presente parece ser causa
de gozo, sino de tristeza; pero después da fruto apacible de
justicia a los que en ella han sido ejercitados.

Este es uno de esos pasajes en los que nunca se medita


suficientemente. No basta con leerlo. Ni debemos dar por sentado
que lo estamos entendiendo en toda su dimensión sin la adecuada
reflexión.

La Escritura está llena de pasajes que exhortan a los padres a


educar y disciplinar a sus hijos, conforme a la voluntad
claramente revelada:

Efesios 6.1-4 Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres,


porque esto es justo. 2Honra a tu padre y a tu madre, que es el
primer mandamiento con promesa; 3para que te vaya bien, y seas
de larga vida sobre la tierra. 4Y vosotros, padres, no provoquéis a
ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación
del Señor.

Esto no son consejos, sino mandamientos divinos que debemos


cumplir si pretendemos seguir llamándonos cristianos. Aún
689

cuando los psicólogos nos digan que podemos traumatizarles, lo


cual es falso.

Un niño se traumatiza mucho más cuando está acostumbrado a


salirse con la suya y al hacerse mayor ve que no siempre puede
hacerlo.

Criar incluye todas las áreas de la vida de los hijos, la espiritual,


emocional, física, material, social, etc. Es decir, incluye
instrucción, entrenamiento, corrección y disciplina.

1Tesalonicenses 2.10-12 Vosotros sois testigos, y Dios también,


de cuán santa, justa e irreprensiblemente nos comportamos con
vosotros los creyentes; 11así como también sabéis de qué modo,
como el padre a sus hijos, exhortábamos y consolábamos a cada
uno de vosotros, 12y os encargábamos que anduvieseis como es
digno de Dios, que os llamó a su reino y gloria.

Aquí podemos ver cómo Pablo pone la tarea de los padres como
ejemplo de su trabajo entre los hermanos. Se trata de estar a su
lado, no sólo para regañar, sino para apoyar, consolar, instruir,
etc. Especialmente con el ejemplo. Esa es también la labor
pastoral.

Encárgale tareas específicas a tus hijos; exígele que las cumpla;


reconoce el trabajo que hace; permíteles hacer tareas en la casa, y
recuerda que ellos aprenderán haciendo, no sólo oyendo.

Quiero terminar el verso 14 aclarando que Pablo, al decir que: no


deben atesorar los hijos para los padres, sino los padres para los
hijos, no está diciendo de ningún modo, que los hijos no deban
ayudar a los padres cuando éstos lo necesiten. Especialmente
cuando son mayores y carecen de recursos.

Porque no todos los padres tienen el privilegio de poder atesorar


para sus hijos. Algunos, por más que han trabajado durante toda
su vida, apenas logran poder alimentarles pobremente.
690

Después de tanto esfuerzo, cuando esos hijos han logrado


establecerse y tienen la oportunidad de hacerlo, tienen el deber de
ayudar a aquellos que les ayudó durante toda su vida.

Actualmente se está produciendo una deshumanización de la


sociedad. Cada vez es más frecuente el abandono de los mayores
en instituciones geriátricas, o incluso en sus propias casas, donde
se consumen de tristeza, porque aquellos hijos por los que tanto
trabajaron, ahora ni se acuerdan de ellos para hacerles una visita.

La intención de Pablo con esta frase era decirles a los corintios


que para él eran como sus hijos y que estaba dispuesto a todo por
amor a ellos.

Recuerden 2Corintios 6.13 Pues, para corresponder del mismo


modo (como a hijos hablo), ensanchaos también vosotros.

1Tesalonicenses 2.10-12 Vosotros sois testigos, y Dios también,


de cuán santa, justa e irreprensiblemente nos comportamos con
vosotros los creyentes; 11así como también sabéis de qué modo,
como el padre a sus hijos, exhortábamos y consolábamos a cada
uno de vosotros, 12y os encargábamos que anduvieseis como es
digno de Dios, que os llamó a su reino y gloria.

¿Exhortas y consuelas a tus hijos, o sólo los exhortas? Pablo no


fue padre, no estaba casado, ni tuvo hijos. Pero sabía actuar como
un padre para con sus hijos. ¿Actúas como Pablo o ni tan siquiera
exhortas ni consuelas a tus hijos? Recuerda que Dios también es
testigo de todo cuanto hacemos.

¿Cuál será el resultado de una conducta así? ¿Saldrán buenos


hijos de padres irresponsables? Si aun de padres responsables
como Samuel pueden salir malos hijos, se imaginan de padres
irresponsables?

Así, pues, Pablo trataba a los corintios como si fueran hijos suyos.
Ahora, bien, estos pasajes no dan derecho a ningún pastor para
691

exigir que los creyentes le llamen padre. Pues escrito está en


Mateo 23.11-12:

Pero vosotros no queráis que os llamen Rabí; porque uno es


vuestro Maestro, el Cristo, y todos vosotros sois hermanos. 9Y no
llaméis padre vuestro a nadie en la tierra; porque uno es vuestro
Padre, el que está en los cielos. 10Ni seáis llamados maestros;
porque uno es vuestro Maestro, el Cristo. 11El que es el mayor de
vosotros, sea vuestro siervo. 12Porque el que se enaltece será
humillado, y el que se humilla será enaltecido.

Es realmente increíble que con la claridad con la que la Palabra de


Dios nos habla al respecto de temas como estos, actualmente haya
gente que exijan ser tratados como padres.

Peor aún, que demanden ser honrados como tales. Entendiendo


como honrar, darles dinero. Nada de eso está en la Biblia, sino
como ven, justamente todo lo contrario.

Necesitamos conocer bien la Escritura para que nadie nos engañe.

15. La declaración que Pablo hace en este pasaje deja clara la


postura del apóstol con respecto a sus motivaciones. De ningún
modo buscaba el dinero de la iglesia, como muchos hacen
actualmente, sino que más bien estaba dispuesto a darlo todo por
amor de ellos.

El apóstol estaba siendo vilmente calumniado, pero responde con


claridad a la acusación: Gastaré lo mío y aún yo mismo me
gastaré.

¿Qué demuestra Pablo con esta respuesta? Su disposición a darlo


todo por amor a los hermanos, aun cuando el darse por completo
acabara en el menosprecio de aquellos por los que se daba. Un
verdadero ejemplo de amor.

Hay mucha gente dispuesta a darse a causas que pueden aportarle


bienestar de algún tipo, ya sea financiero, de fama, o de cualquier
692

otro tipo, pero no hay muchas personas que estén dispuestas a


darse por nada.

¿Por qué habla Pablo aquí de dinero? A la luz de este pasaje, la


afirmación de que él no buscaba su dinero sino a ellos mismos
deja entrever, o más bien hace evidente, que el dinero estaba
detrás de este asunto.

Aquellos falsos apóstoles que acusaban a Pablo buscaban el


dinero de los corintios. El ejemplo que supone al actitud del
apóstol Pablo en relación al dinero, debería avergonzar a cuantos
hoy sólo buscan lo material en las iglesias.

No cabe duda de que la Escritura contiene instrucción clara


respecto a que el obrero es digno de su salario. Pero la prueba de
un auténtico siervo consiste en saber si está dispuesto a servir con
el mismo amor sin recibir dinero a cambio.

Actualmente yo soy sostenido por la iglesia, pero durante más de


tres décadas serví a Dios y a mis hermanos en la fe sin recibir
nada a cambio. Es más, ayudando, e incluso sosteniendo casi en
solitario los gastos de la Iglesia en numerosas ocasiones.

No digo esto para vanagloriarme sino que, como Pablo aclara, yo


no buscaba lo material sino lo espiritual.

¿Creen que abundan o escasean éstos testimonios?


Desgraciadamente, a la luz de la multitud de correos que recibo,
quejándose de la avaricia de los pastores actuales, abundan más
los que pretenden hacer de la piedad ganancia que, quienes como
Pablo, buscaban el bien de la Iglesia.

Todos ellos debieran avergonzarse al leer pasajes como este. Pero


¿Creen que lo harán? ¿Se avergonzarán? Casi con toda seguridad
muchos de ellos no sabrán ni lo que es la vergüenza.

Conozco a algunos pastores que consideran que son dignos de


todo lo que puedan sacarle a los creyentes. No tienen el menor
693

escrúpulo. Pues, consideran que lo que ellos hacen por la gente es


mucho más valor.

¿Creen que Dios lo verá del mismo modo? Estoy convencido de


que no. Una cosa es que el obrero sea digno de su salario y otra
muy diferente lo que estos ladrones hacen, robando los cristianos.
Algunos llegando incluso a engañar a las viejitas para quedarse
con sus bienes y hasta con sus casas.

¿Cuál creen que es la motivación de los pastores que actúan así?


La avaricia, la codicia de ganancias deshonestas. ¿Actuaba Pablo
de ese mismo modo? Desde luego que no.

1Tesalonicenses 2.3-8 Porque nuestra exhortación no procedió


de error ni de impureza, ni fue por engaño, 4sino que según
fuimos aprobados por Dios para que se nos confiase el evangelio,
así hablamos; no como para agradar a los hombres, sino a Dios,
que prueba nuestros corazones. 5Porque nunca usamos de
palabras lisonjeras, como sabéis, ni encubrimos avaricia; Dios es
testigo; 6ni buscamos gloria de los hombres; ni de vosotros, ni de
otros, aunque podíamos seros carga como apóstoles de Cristo.
7
Antes fuimos tiernos entre vosotros, como la nodriza que cuida
con ternura a sus propios hijos.

Pablo tenía derecho de haber exigido el salario que como siervo


de Dios le correspondía, pero no lo hizo así, sino que tuvo otra
motivación para su ministerio, que él mismo revela en este pasaje.

Por amor de vuestras almas. Esta es la clara motivación que


incentivaba al apóstol. A pesar de las numerosas calumnias que
habían lanzado contra él, Pablo les recuerda su firme compromiso
con la integridad moral y espiritual.

Pablo tuvo el suficiente discernimiento necesario para


comprender el peligro que se cernía sobre su persona y ministerio
y decidió renunciar a su derecho de recibir salario de los corintios.
Aunque los recibiera de otras congregaciones.
694

Su postura nos enseña tres cosas importantes:

* La entrega al ministerio no debe estar condicionada a la paga


que recibirá.

Algunas personas acuden al ministerio pensando, no en la gente y


sus necesidades, sino en las personales. Pensando en lo que
cobrará.

* Nos enseña también que no es el dinero sino el amor la correcta


motivación para el servicio a Dios.

Si no amas a Dios, y te preocupan las almas que se están


perdiendo, no deberías acceder al ministerio. Mantente alejado de
los púlpitos. Porque no estás haciendo el bien sino el mal.

Recuerda las palabras del Señor en Salmo 1.5-6 Por tanto, no se


levantarán los malos en el juicio, Ni los pecadores en la
congregación de los justos. 6Porque Jehová conoce el camino de
los justos; Mas la senda de los malos perecerá.

* Y que esa entrega a Dios y los demás debe ser auténtica y


completa, aún cuando las expectativas no sean halagüeñas, ni las
esperadas.

Repito, y no es que no tengamos derecho a recibir salario, como


está escrito en 1Corintios 9.10-12 porque con esperanza debe
arar el que ara, y el que trilla, con esperanza de recibir del fruto.
11
Si nosotros sembramos entre vosotros lo espiritual, ¿es gran
cosa si segáremos de vosotros lo material? 12Si otros participan
de este derecho sobre vosotros, ¿cuánto más nosotros?

Pero Pablo añade: Pero no hemos usado de este derecho, sino que
lo soportamos todo, por no poner ningún obstáculo al evangelio
de Cristo.

La semana pasada hablábamos de las motivaciones para el


servicio. ¿Son correctas cualquier motivación para el ministerio o
695

el servicio a Dios? No, no lo es. Hay motivaciones correctas y las


hay incorrectas.

¿Qué motivaciones pueden ser incorrectas y por qué? Por ejemplo


servir por dinero. Porque acabará convirtiendo la Iglesia en una
empresa en vez de en el Cuerpo de Cristo. Alejándola de la
verdad de la Sagrada Escritura, y de lo espiritual y eterno.

¿Qué motivaciones pueden ser válidas para el ministerio? El amor


a Dios y por las almas perdidas, el deseo irrefrenable de servicio
al prójimo, etc.

Sigamos pues, donde lo dejamos, verso 15.

Aunque amándoos más sea amado menos. Esta declaración del


apóstol es similar a la que hace en 1Tesalonicenses 2.8 Tan
grande es nuestro afecto por vosotros, que hubiéramos querido
entregaros no sólo el evangelio de Dios, sino también nuestras
propias vidas; porque habéis llegado a sernos muy queridos.

¿Observamos una mala motivación en quien escribió estas


palabras? Desde luego que no. El escritor fue el mismo Pablo.

De ese mismo modo les dice a los corintios que los amaba
profundamente. En 2Corintios 11.11 donde Pablo defendía su
derecho a predicar de balde preguntó: ¿Por qué? ¿Porque no os
amo? Dios lo sabe.

Los corintios debían haber correspondido al apóstol con afecto


genuino, pero no fue así. Pablo recibió más aprecio de otras
congregaciones a las que dedicó mucho menos atención y
esfuerzo. Curiosamente eso sigue pasando hoy en día.

En muchas ocasiones los pastores reciben más aprecio,


consideración y reconocimiento de otras personas que de los
miembros de su propia congregación a quienes sirven de
continuo. ¿Creen que esto es correcto? No lo es.
696

Déjenme hacerles algunas preguntas, sin que perciban ninguna


mala motivación en ellas. Las hago sólo para vuestra reflexión y
la de todos cuantos nos ven por las redes sociales.

¿Aprecias a tu pastor o pastores?


¿Les has mostrado alguna vez, de alguna manera tu aprecio?
Algunos pastores piden que se lo muestren con regalos o dinero,
lo cual no es correcto. Pero hay muchas maneras de mostrar
afecto, respeto y consideración por alguien.

Los pastores estamos para servir y ayudar a las personas en su


encuentro y relación personal con Dios. Nos animan cuando lo
necesitamos, nos instruyen, nos guian y corrigen, etc.

¿Alguna vez te has preocupado tu pastor y su familia?


¿Has pensado alguna vez que tu pastor puede tener problemas?

Hay dos posturas habituales en cuanto a los pastores.

a.- Quienes piensan que todos son falsos.

b.- Quienes piensan que los pastores somos como los personajes
de la Biblia, algo así como súper héroes, que nunca tenemos
problemas.

¿Has pensado alguna vez que tu pastor podría necesitar ánimo?


Cuando le preguntas cómo está, ¿Lo haces sinceramente o sólo
por compromiso?

Todas estas preguntas tienen que ver con la respuesta que dimos a
la primera de si aprecias a tu pastor o pastores. Podemos decir que
sí, que lo apreciamos, pero si nunca mostramos interés por su vida
¿En qué modo lo estamos apreciando?

La historia del apóstol Pablo con los corintios nos enseña que el
amor no siempre es correspondido, cuando eso ocurre algunos
exigen esa correspondencia. Exigen que se les ame, que se les
honren.
697

Hay pastores que están siempre exigiendo muestras de respeto y


“honra”. Es decir, que sus seguidores han de estar siempre
alimentando su ego. ¿Pablo hacía eso? Desde luego que no.
Pablo está dispuesto a amar aun cuando no sea amado.

¿Entienden cómo podemos distinguir a un verdadero siervo de


otro que no lo es? La Escritura nos da muchas señales. El
verdadero siervo sigue sirviendo sea, o no, reconocido; sea, o no,
valorado.

Aunque eso no quita la responsabilidad de la Iglesia de mostrar


interés por aquel o aquellos que siempre le están sirviendo.

16-19. Todo cuanto estamos estudiando en estos capítulos es fruto


de la respuesta del apóstol a un informe que recibió de Corinto en
el que se le comunicó acerca de los comentarios que algunos
adversarios estaban haciendo en la Iglesia.

Aquí tenemos otra de las acusaciones que hacían sus enemigos.


Pablo les dice: Vale, si es así que porque soy astuto os engañé,
¿dónde está el engaño?

Estos pasajes se entienden mejor si consultamos otras versiones y


las comparamos.

La Traducción en Lenguaje Actual: Ustedes saben que no quise


que se preocuparan por darme dinero. Sin embargo, hay quienes
dicen que con mucha astucia los hice caer en una trampa. 17 Pero
yo no los engañé por medio de las personas que les envié. 18
Cuando les pedí a Tito y al otro hermano de la iglesia que fueran
a verlos, ellos no se aprovecharon de ustedes. ¿No es verdad que
Tito y yo nos hemos portado con ustedes de la misma manera?
¿No pensamos lo mismo acerca de este asunto?

Nueva Traducción Viviente: Algunos de ustedes admiten que no


les fui una carga, pero otros todavía piensan que fui muy astuto y
que me aproveché de ustedes con engaños. 17 ¿Pero cómo?
698

¿Acaso alguno de los hombres que les envié se aprovechó de


ustedes? 18 Cuando le pedí a Tito que los visitara y envié con él al
otro hermano, ¿acaso Tito se aprovechó de ustedes? ¡No!,
porque ambos tenemos el mismo espíritu y caminamos sobre las
pisadas del otro y hacemos las cosas de la misma manera.

El falso testimonio, la calumnia, es un pecado terrible porque


mancha tu nombre y tu testimonio, te roba la reputación ganada
con mucho esfuerzo y te atrapa en el menosprecio, el desprecio y
la burla de quienes se dejan llevar por la mentira de la calumnia.

Hay pocas cosas tan demoledoras como la calumnia, ¿Debemos


los cristianos soportar la calumnia en silencio como una prueba
que debemos soportar, poniendo la otra mejilla? ¿Qué creen?

La Escritura nos enseña que no es así. Es cierto que Eclesiastés


3.6 dice que: hay un tiempo para callar, pero también dice
igualmente que: hay un tiempo de hablar.

La Escritura nos muestra cómo Pablo nos enseña a defenderse de


las falsas acusaciones, y hacerle frente a la calumnia con la
verdad y la integridad de su testimonio.

El rumor de que no se podía confiar en Pablo había estado


circulando abiertamente en Corinto. Es interesante conocer el
trasfondo de todo esto.

Como saben, Pablo se negó a recibir salario por su labor, pero


envió a Tito para recoger una ofrenda para los necesitados. Los
enemigos del apóstol, malintencionados, diseminan el rumor de
que, bajo el pretexto de ayudar a los creyentes que sufren de
pobreza en Jerusalén, Pablo y Tito tramaban llenarse sus propios
bolsillos.

Estos desconfiados sospechan que el dinero no irá a los pobres


sino que se quedará en posesión de Pablo y Tito. De ahí que le
acusen de astuto.
699

Como podemos comprobar Pablo enfrenta el problema de cara.


Del amor y la amabilidad pasa ahora a la autoridad y la franqueza.
Debe responder a las acusaciones y lo hace por medio de cuatro
preguntas retóricas que en realidad no exigen una respuesta ya
que ellos la conocían y cuyo fin era sólo hacerlos reflexionar.

Del mismo modo que reconocieron que Pablo no había sido una
carga económica para ellos, deben reconocer que ni Pablo ni sus
enviados manipularon jamás a los corintios para su propio
beneficio.

Explotar a los creyentes es el modo de actuar de los falsos


apóstoles, pero ¿Era el proceder de Pablo y sus colaboradores?
Por supuesto que no. Su testimonio de integridad es impecable al
respecto, especialmente lo fue con los corintios.

Es cierto que hay muchos falsos “apóstoles y pastores” que roban


a la gente, en Corinto los había, pero ni Pablo ni sus
colaboradores, ni todos los pastores lo somos.

Es este asunto hay que tener mucho cuidado. Porque cada día más
se está propagando la idea de que todos los pastores son falsos y
todos roban. ¿Creen que esto es verdad? No. No lo es.

Toda generalización es pecado, porque toda generalización es


mentira e injusta; y sabemos que los injustos no heredarán el
reino de Dios. 1Corintios 6.9-11. No podemos pensar que todos
los pastores son buenas personas, pero tampoco que todos seamos
malas personas.

Ni todos los argentinos saben jugar fútbol como Messi, ni todos


los colombianos se dedican a traficar cocaína como Pablo
Escobar, ni todos los andaluces sabemos cantar flamenco como
Camarón de la Isla. Las generalizaciones no son justas, por tanto,
generalizar es pecado.

Ya lo dijo antes en 2Corintios 7.2 Admitidnos: a nadie hemos


agraviado, a nadie hemos corrompido, a nadie hemos engañado.
700

Los corintios lo sabían porque conocían a Pablo y a Tito y los


demás colaboradores del apóstol. ¿Vosotros me conocéis?
¿Conocen a vuestros pastores? Es importante.

Los cristianos deben conocer a sus pastores, así como los pastores
deben conocer a su congregación. No hay mejor ejemplo en esto
del pastoreo que el de nuestro Señor Jesucristo.

Juan 10.14-15 Yo soy el buen pastor; y conozco mis ovejas, y las


mías me conocen, 15así como el Padre me conoce, y yo conozco al
Padre; y pongo mi vida por las ovejas.

El deber de los pastores es conocer a las personas a las que


pastorea; y el deber de los creyentes es conocer a sus pastores. Si
no conoces a tu pastor o pastores, debes intentar conocerlos.

Conociéndolos puedes analizar sus motivaciones.


¿Es un auténtico siervo de Dios o un falso pastor?
¿Sirve a Dios o se sirve de Dios?
¿Sirve a la congregación por salario o por amor?
¿Cuando acudo a él puedo contar con su ayuda o no?

19. La última pregunta de su argumentario, deja claro que él no


está pidiendo disculpas, porque no reconoce que les haya fallado
en nada de lo que le acusaban.

Su proceder y su hablar había sido siempre delante de Dios en


Cristo. No habían hecho nada para sí mismos, sino para la
edificación de los creyentes corintios.

Lo que está diciendo es que dedica su labor entera a la edificación


espiritual de ellos.

20-21. Estos versos relacionan las actitudes que pueden destruir la


comunión y el compañerismo dentro de la Iglesia, destruyéndola.
701

1) “Contiendas”, un sinónimo de la palabra discordia, con énfasis


en la contienda, el pleito, la pelea.

2) “Envidias”, una palabra similar para la contienda, relacionada a


la idea de fervor o fanatismo en el mal sentido. Es decir, arrebatos
de celo por lo suyo.

3) “Iras”, ardor, refleja no un enojo duradero, más bien el enojo


de una persona que explota con facilidad, que reacciona con poca
provocación. La ira subyace en el corazón humano no regenerado
que se deja controlar por el pecado. La ira sólo puede ser vencida
por el poder del Espíritu Santo que transforma nuestro corazón en
obediencia a Su Palabra.

4) “Divisiones”, disensiones, intrigas, facción, manifestadas en


intereses propios, egoísmo. La pereza de los corintios a la hora de
responder a la ofrenda para los santos a la que se habían
comprometido con el apóstol, muestra esa condición de los
corintios.

5) “Maledicencia”, difamación, calumnia, que es hablar mal de


otro sin verdaderos motivos. Les reprendió por estas actitudes que
se produjo entre ellos, 1Corintios 1.11.

6) “Murmuraciones”, susurros, detracción secreta, que es


chismear, rumores. Este pecado de hablar a espaldas de la persona
afectada se describe como susurrar en los oídos de alguien.

Tanto la calumnia como la murmuración son pecados condenados


por Dios en Su Palabra. Éxodo 20.16; Números 12.

7) “Soberbias”, insolencias, altanería, prepotencia, arrogancia,


hincharse de orgullo y vanidad, término que habla de personas
que son infinitamente orgullosas de sí mismas.

8) “Desórdenes”, sedición, tumulto, confusión, o caos; una


palabra también usada más para describir disturbios políticos. Se
refiere a situaciones de desgobierno. En los que la gente no se
702

sujeta a autoridad alguna, algo que aparentemente ocurría con


frecuencia entre ellos.

Todas estas cosas que el apóstol enumera dejan ver claramente


que los corintios en general, lejos de haber cambiado
abandonando su pasado y vivir vidas santas, aún eran
superficiales y carnales como les dijo en 1Corintios 3.1-4.

¿Creen que las contiendas, envidias, iras, divisiones,


maledicencias, murmuraciones, soberbias y desórdenes, traen
bendición a la obra de Dios? Ninguna.

¿Ayudan estas cosas a la convivencia entre nosotros? Desde luego


que no. ¿Se imaginan que una persona nueva llegue a la
congregación y que se esté dando un tumulto, bullicio, alboroto, o
desorden de este tipo, ¿Cómo saldrá de allí esa persona? Sin
ganas de volver a la Iglesia; y lo peor es que no sólo saldrá sin
ganas de volver a la Iglesia sino que lo peor será que se alejará de
Dios.

La gente cuando ve cosas como esas entre los cristianos, lo


agarran como excusa para rechazar a Dios, y eso no está bien.
Estas cosas, por desgracia abundaban en la iglesia de Corinto.

Cosas como estas no favorecen nuestra vida como congregación.


No contribuían a la paz y la mutua edificación. Imagínense que
estas cosas se dieran aquí, aquí sí edificaría ¿no? Desde luego que
no. Aquí tampoco.

Estas cosas no deberían estar en nuestras vidas, ni en la de ningún


cristiano. Ni tan siquiera una pincelada de ninguna de ellas.
Debemos pensar si alguna de estas cosas están en nuestras vidas.
Porque ninguna de estas debe gobernar nuestras vidas.

Cuando hablas, cuando te expresas y te diriges a alguien ¿Qué es


lo que sale de tu boca, ira, odio, rechazo, murmuración, qué sale
de tu boca?
703

Como está escrito en Mateo 15.18-20 Pero lo que sale de la boca,


del corazón sale; y esto contamina al hombre. 19Porque del
corazón salen los malos pensamientos, los homicidios, los
adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios,
las blasfemias. 20Estas cosas son las que contaminan al hombre;
pero el comer con las manos sin lavar no contamina al hombre.

¿Qué sale a veces del corazón de un cristiano? Muchas veces sale


amor, gozo, paz, paciencia, bondad, pero aunque no aquí, a veces
¿puede salir algún mal pensamiento, homicidio, adulterio,
fornicación, hurtos, falsos testimonios, blasfemias? Cosas como
estas son las que contaminan al hombre.

¿Algunas de estas cosas están en ti? Cada día que medito en estas
cosas, debo analizar mi corazón para ver si estas cosas están en
mí. Porque si están en mí ¿Qué debo hacer? ¿Practicarlas o
desecharlas? Pedirle a Dios que me ayude para no tenerlas en mi
vida.

¿Por qué? Por una sencilla razón que conocen: porque nosotros
debemos ser diferentes, marcar la diferencia. Algunos de los
corintios eran de esta manera. Lo cual entorpecía la obra de Dios.

Como cristianos en casa, en el trabajo, en la Iglesia; bueno en la


Iglesia todo el mundo es bueno, o al menos, pone carita de bueno.
¿Cómo somos en el trabajo, en casa o en la calle?

¿Tenemos actitudes semejantes a las de los corintios? No


debemos. Debiéramos tener la actitud de Cristo. ¿Qué gobierna en
cada uno de nosotros? De esto se preocupaba Pablo.

Algunos son unos angelitos en la calle y en la Iglesia, pero en


casa son como el endemoniado gadareno; o el demonio de
Tasmania. ¿Cómo somos en casa? ¿Qué abunda en tu vida?

¿Hablas bien o mal? ¿Y de los demás, calumnias o eres un


verdadero cristiano y no hablas mal de nadie?
704

Contiendas, envidias, todas estas cosas abundaban en la iglesia de


Corinto, de tal modo que hacia final del siglo I Clemente de
Roma dirigió una carta a la iglesia de Corinto en la que aparecen
con frecuencia las palabras envidia, rivalidad y pelea, algo que
indica que estos pecados continuaban en dicha iglesia.

Lo que es peor, no tenían ninguna intención de cambiar.


Consentir estos pecados entre ellos y permitir que los dominase,
debilitó la congregación y provocó que la paz se desvaneciera.

Porque el pecado tiene consecuencias, no bendición. El pecado


nos aleja de la voluntad de Dios, destruye. Pablo estaba
preocupado por eso.

Si nosotros no le damos importancia al pecado también


pagaremos las consecuencias. ¿Qué creen que conlleva el pecado
vida eterna o condenación? Sin duda, condenación.

Nos hace menos espirituales, más carnales. Nos estropea la


comunión con Dios. Por eso hay que prestarle atención. En
algunas iglesias no se corrige el pecado porque aleja a los
“clientes”, perdón, a los creyentes.

Al hablar de la urgente visita a Corinto que debía hacer, enumeró


estos malos aspectos de la congregación, que temía encontrar,
consciente de que, de haberlos, debería tratar “de nuevo” temas
tan sensibles.

De ahí que muestre un cierto temor, ya que se había propuesto no


volver a ellos con tristeza, como indica en 2Corintios 2.1. Ya les
había advertido que, de ser necesario, estaba dispuesto a ser
severo, 2Corintios 10.2, 11, aunque espera no verse en esa
necesidad.

21. Había gente en Corinto que después de haber pecado no se


habían arrepentido. En 1Corintios 6.11 Pablo hablaba de estas
cosas: Y esto erais algunos; mas ya habéis sido lavados, ya
705

habéis sido santificados, ya habéis sido justificados en el nombre


del Señor Jesús, y por el Espíritu de nuestro Dios.

Pasajes como este nos hablan de que había un antes y un después


en la vida de quienes creían el evangelio. Sin embargo en
2Corintios 12.21 vemos otro tipo de creyentes que aun no se han
arrepentido de sus pecados.

En 1Corintios 6.18-20; 2 Corintios 7.1; y otros pasajes similares,


Pablo les exhorta a dejar el pecado, advirtiéndoles que estaban
poniendo en peligro su salvación.

A Pablo le preocupaba que no sólo los corintios, sino todos los


cristianos, pudieran no andar de la manera correcta. Gálatas 5.19-
22.

Efesios 5.3-5 Pero fornicación y toda inmundicia, o avaricia, ni


aun se nombre entre vosotros, como conviene a santos; 4ni
palabras deshonestas, ni necedades, ni truhanerías, que no
convienen, sino antes bien acciones de gracias. 5Porque sabéis
esto, que ningún fornicario, o inmundo, o avaro, que es idólatra,
tiene herencia en el reino de Cristo y de Dios.

También Colosenses 3.5-17.

Si analizamos las palabras de Pablo en 2Corintios 12.21, les


estaba diciendo que él lamentaría enormemente la pérdida de
cualquiera de ellos. Por eso, el apóstol espera que enmienden sus
caminos y rectifiquen su proceder a fin de no tener que volver a
enfrentarlos con dureza, aunque estaba dispuesto a hacerlo.
1Corintios 4.21.

Ha llegado el momento de rectificar lo malo. Los corintios ya


habían tenido bastantes oportunidades, ya era hora de cambiar de
actitud por el siervo de Dios; pero sobretodo por Dios mismo.
Porque como veremos en el siguiente capítulo, Dios al que ama
disciplina. Pablo estaba dispuesto para enfrentar la situación,
aunque quería evitarla.
706

Todos tenemos que detenernos en el camino para corregir lo


deficiente. Porque aún hay cosas que no son como debieran ser.
¿O ya somos perfectos en todo? Desde luego que no. Debemos ir
a Dios y que nos ayude a corregir lo deficiente.

¿Qué pasa si el pecado se consiente, si no se corrige? El diablo


toma cada día más terreno, se estanca nuestra vida y nos podemos
condenar.

Algunos corintios habían pecado y no se habían arrepentido. Hay


muchas personas en las iglesias que viven vidas de hipocresía. En
la Iglesia oran y lloran, pero después se olvidan pronto de Dios y
vuelven sobre sus propias pisadas al mal.

Estas personas puede que nunca se hayan convertido de verdad.


Porque la evidencia de un nuevo nacimiento es la conversión, es
decir, la transformación que se produce en un corazón cuando
Dios está en él.

Muchos hemos dejado detrás la inmoralidad y hemos sido lavados


y santificados, 1Corintios 6.11, en cambio, algunos de los
corintios seguían practicando la inmoralidad.

Aquí Pablo no se refiere a los falsos apóstoles que le acusaban,


sino a aquellos de entre los mismos corintios que no se
arrepentían de sus malas acciones.

De la misma manera hay personas que llevan años asistiendo a la


Iglesia, oyendo estudios y sermones, pero cuyas vidas no cambian
jamás. ¿Creen que es la voluntad de Dios para el cristiano? Por su
puesto que no. Hay personas que realmente nunca se han
convertido de verdad.

Si continúan pecando después de haber recibido repetidas


advertencias, mostrarán que están espiritualmente muertos, y peor
aún no han nacido de nuevo y que, por tanto, son del diablo.
707

¿Creen de verdad que el que está en Cristo nueva criatura es y


que las cosas viejas pasaron? 2Corintios 5.17 ¿Tiene Dios poder
para transformar nuestras vidas? Sin duda.

¿Es todo poderoso para algunas personas, pero a otras no? Claro
que no. Dios tiene poder para cambiar todas las vidas. El
problema es que algunos no se arrepienten de sus pecados.

Toda la Biblia da testimonio de que no hay perdón de pecados si


no hay arrepentimiento. Todos debemos tenerlo claro. Hay
quienes piden perdón a Dios, pero no están realmente
arrepentidos de su pecado. Si arrepentimiento no hay perdón.

El que practica el pecado demuestra que no está arrepentido.


Arrepentimiento no es sentirse mal por haber pecado, sino dejar
de hacerlo. Cambiar de rumbo.

En cuanto al pecado, no basta sólo con confesarlo, sino apartarnos


de él. El arrepentimiento es la firme decisión de no seguir
caminando en la dirección del pecado. Cambiar de dirección.

Dios no perdona a quienes no se arrepienten. Hechos 3.19-21 Así


que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros
pecados; para que vengan de la presencia del Señor tiempos de
refrigerio, 20y él envíe a Jesucristo, que os fue antes anunciado;
21
a quien de cierto es necesario que el cielo reciba hasta los
tiempos de la restauración de todas las cosas, de que habló Dios
por boca de sus santos profetas que han sido desde tiempo
antiguo.

Hay quienes menosprecian el pecado y no tiene en cuenta estas


cosas. “No pasa nada”, dicen, “unos minutos antes de morirme
me arrepiento y ya está” ¿Han oído a alguien decir eso?

Como está escrito en Gálatas 6.7 No os engañéis; Dios no puede


ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también
segará. 8Porque el que siembra para su carne, de la carne segará
708

corrupción; mas el que siembra para el Espíritu, del Espíritu


segará vida eterna.

¿Dónde siembras más, en la carne o en el espíritu? Debemos


procurar ser sinceros con nosotros mismos con estas cuestiones.
Porque Dios quiere que todos nosotros, no sólo los corintios nos
arrepintamos de nuestros pecados.

2Pedro 3.9 El Señor no retarda su promesa, según algunos la


tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no
queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al
arrepentimiento.

Está casi terminando el año que se nos ha ido como agua entre los
dedos. A lo largo de este año Dios nos ha hablado muchas veces y
de muchas maneras, por medio de sermones, estudios, personas,
etc. Ahora bien, ¿Sigue habiendo pecado en nuestras vidas o lo
hemos dejado atrás?

Este no es un mensaje para tu esposo ni para tu hija, sino para ti.


Si Jesús viniera hoy nos hallaría andando en la carne o en el
espíritu? ¿En las actitudes de los corintios o en las de Jesús.
Sigamos sembrando para el Espíritu.

De esta manera Pablo concluye la larga defensa de su apostolado.

La semana pasada hablamos sobre la necesidad del


arrepentimiento sin el cual no hay perdón de pecados. Que el
pecado tiene consecuencias y que a Dios no le agrada el pecado.

Hoy seguimos donde lo dejamos.

13.1-2. Esta es la tercera vez que voy a vosotros. Ninguna


congregación de las que fundó Pablo recibió tanta atención del
apóstol como la de Corinto. Permaneció con ellos por espacio de
18 meses, Hechos 18.11.
709

Mientras residió en Éfeso siguió atendiendo sus necesidades por


medio de cartas. Les visitó por dos veces. La segunda visita fue
dolorosa, 1Corintios 2.1 y ahora estaba dispuesto a volver a
visitarles, lo cual nos habla de la importancia que esta
congregación llegó a tener para el apóstol.

Este pasaje nos enseña que a pesar de todos los problemas que
tuvo que corregir, Pablo seguía preocupado por el bienestar de la
iglesia en Corinto.

No quería dejar cabos sueltos, pretendía arreglar lo que aun


quedase por arreglar, al objeto de que los corintios pudieran
continuar con su vida cristiana en santidad.

Esta preocupación de Pablo debe enseñarnos a tener la misma


solicitud, la misma preocupación por el bienestar de nuestros
hermanos. ¿Te preocupas tú por esas cosas?
¿Te preocupa que alguno de tus hermanos no sigan fieles a Dios?
¿Es importante para ti o no te interesa los problemas que tengan
los demás?
Cuando un hermano tiene problemas ¿Te preocupa o no?

Pablo se preocupaba cuando los corintios se desviaban de la


verdad. Él quería que enfrentaran sus problemas y los superasen,
a fin de no desviarse del camino de la verdad.

Pablo no desmayó, siguió a pesar de las dificultades; a pesar de


los contratiempos; de las falsas acusaciones y de que parte de la
Iglesia estuviese contra él, continuó en su preocupación haciendo
lo correcto; lo que él sabía que era la voluntad de Dios.

Cuando hablan mal de ti ¿Te preocupas por el bienestar de


aquellos que te critican o te pones en contra de ellos?

Siguió animando y consolando a los hermanos de Corinto,


corrigiendo lo deficiente e incluso disciplinando a quienes debían
ser disciplinados. Porque él no estaba dispuesto a consentir el
pecado.
710

Dios no consiente el pecado ni se alegra del mal. Por eso Pablo


actuaba y hacía lo que hacía. Para establecer y dejar clara la
voluntad de Dios para la congregación de Corinto.

Por boca de dos o de tres testigos se decidirá todo asunto. Esto es


una cita del Antiguo Testamento, concretamente de
Deuteronomio 17.6 y 19.15; una ley Mosaica que es refrendada
en el Nuevo Testamento por el mismo Señor Jesús cuando dijo:
Por tanto, si tu hermano peca contra ti, (Ponlo en el Facebook,
Instagran, en el Washap, el el grupo de oración que tenemos para
que todos lo sepan? ¿No?; Si tu hermano peca contra ti hay un
orden ¿qué debemos hacer los cristianos? ¿Qué dice el pasaje?)
ve y repréndele (¿Qué quiere decir esta palabra “reprendele”? Si
el hermano peca contra mí ¿debo decirle: Te reprendo? ¿Qué
significa eso? Llamarle la atención, mostrarle la falta y corregirle)
estando tú y él solos; (No delante de todo el mundo) si te oyere,
(Si te escucha, si acepta la reprensión, si se deja corregir) has
ganado a tu hermano. (Hasta aquí es si todo va bien; si el
hermano reconoce su falta y se corrige) 16Mas si no te oyere,
(¿Ahí sí podemos publicarlo en las redes sociales? Claro que no.
¿Qué debemos hacer?) toma aún contigo a uno o dos, para que en
boca de dos o tres testigos conste toda palabra. (¿Qué escogemos
a las personas más carnales o espirituales? ¿A quienes nos den la
razón? Debemos procurar que sean personas que sepan edificar,
no destruir) 17Si no los oyere a ellos, dilo a la iglesia; y si no
oyere a la iglesia, tenle por gentil y publicano. (¿Qué significa
eso? Tenerlo como un no creyente; un no convertido) 18De cierto
os digo que todo lo que atéis en la tierra, será atado en el cielo; y
todo lo que desatéis en la tierra, será desatado en el cielo. 19Otra
vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la
tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por
mi Padre que está en los cielos. 20Porque donde están dos o tres
congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos. Mateo
18.15-20.
711

Este pasaje establece el modelo de disciplina que debe haber


dentro de la Iglesia. Cuatro pasos establecidos por Dios para
amonestar, para corregir.

Pablo estaba indicándole a los corintios que estaba dispuesto a


aplicar las Escrituras a aquellos que no se arrepintieran, por lo
cual les estaba dando una oportunidad antes de llegar a Corinto.
Estaba diciéndoles que si seguían en malos caminos les corregiría
tal y como Dios lo estableció en Su Palabra.

Para que lo entendieran les cita la ley de Moisés, Deuteronomio


19.15 No se tomará en cuenta a un solo testigo contra ninguno en
cualquier delito ni en cualquier pecado, en relación con
cualquiera ofensa cometida. Sólo por el testimonio de dos o tres
testigos se mantendrá la acusación.

En los tiempos bíblicos para ir a juicio contra alguien se debía


llevar como mínimo dos o tres testigos; si no se contaba con
testigos, era rechazada cualquier demanda. Igualmente si alguien
te acusaba si tú tenía dos o tres testigos que te respaldaban, tu
demandante se marchaba sin conseguir sus objetivos.

Esto se hacía para proteger a los inocentes y conseguir un juicio


justo. Aunque nosotros sabemos por las mismas Escrituras que en
ocasiones había quien estaba dispuesto a comprar testigos falsos.
Aunque estas personas debían enfrentarse después al juicio de
Dios.

El contexto de Deuteronomio 19.15-21 deja claro que Dios ya


preveía que esto pudiera pasar. Por lo cual dice: Y los jueces
inquirirán bien; y si aquel testigo resultare falso, y hubiere
acusado falsamente a su hermano, 19entonces haréis a él como él
pensó hacer a su hermano; y quitarás el mal de en medio de ti.
20
Y los que quedaren oirán y temerán, y no volverán a hacer más
una maldad semejante en medio de ti.

Es evidente que al citar estos pasajes, Pablo estaba dando


oportunidad a los corintios de rectificar. Así como también estaba
712

dando claramente a entender que estaba dispuesto a poner por


obra la autoridad Sagrada Escritura. No quería actuar por sí
mismo, sino conforme a lo que estaba escrito.

En todo este asunto Pablo estaba dejando claro que el pecado no


debe ser consentido sino corregido. Además, estos pasajes nos
muestra claramente cómo debemos actuar en semejantes casos.

Cuando surgen conflictos en la congregación.


Cuando alguien obra mal.
Cuando surgen malos entendidos.
Cuando alguien peca contra Dios o sus hermanos.

Así que no sólo sirvieron para corregir a los corintios sino que
también han servido para la corrección y disciplina de la Iglesia
desde entonces hasta nuestros días.

Nosotros debemos aprender cómo tratar ciertas actitudes de


pecado, a fin de corregirlas para que no se propague entre la
congregación. Porque si el pecado se consiente se propaga con
rapidez.

¿Han visto un cesto de manzanas? ¿Qué haces cuando descubres


una podrida? Pues, eso mismo debemos estar dispuestos a hacer si
el que se está corrompiendo no quiere o no está dispuesto a
corregirse. No podemos consentir que estropee a otras manzanas
o perderemos todo el cesto.

¿Están de acuerdo o no? ¿Crees que si alguien no está obrando


bien debe ser corregido? Antes de responder piensa que puedes
ser tú quien deba ser corregido. ¿Si fueras tú quien está actuando
mal ¿Crees que se te debe corregir o no?

Hebreos 12.11 Es verdad que ninguna disciplina al presente


parece ser causa de gozo, sino de tristeza; pero después da fruto
apacible de justicia a los que en ella han sido ejercitados.
713

¿De qué habla la palabra ejercitados? De ejercicio. De una y otra


vez. Esto quiere decir que vamos a necesitar que se nos corrija en
más de una ocasión.

Para que la disciplina surta el efecto deseado debemos corregir de


la manera adecuada. Como nos enseña Gálatas 6.1-2 Hermanos,
si alguno fuere sorprendido en alguna falta, vosotros que sois
espirituales, restauradle con espíritu de mansedumbre,
considerándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado.
2
Sobrellevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley
de Cristo.

Cuando hacemos las cosas bien, podemos ganar al hermano,


restaurarle para el Señor.

Por todo esto podemos comprobar que para Dios es muy


importante la disciplina. Dios es un Dios de orden y quiere que
hagamos las cosas muy bien.

La Palabra de Dios nos da muchísimos pasajes que nos hablan de


este tema de la disciplina. Por ejemplo Proverbios 15.32 El que
tiene en poco la disciplina menosprecia su alma; Mas el que
escucha la corrección tiene entendimiento.

Proverbios 29.15 La vara y la corrección dan sabiduría; Mas el


muchacho consentido avergonzará a su madre.

¿Han visto esto? Un hijo consentido acaba siempre haciendo


avergonzar a los padres. Es posible que si preguntamos a los
padres si alguno quiere un hijo consentido y mal criado nos digan
todos que no. ¿Por qué entonces hay hijos consentidos? Porque
los padres no se percatan de que poco a poco están
consintiéndolo.

Ningún niño llega a ser un mal criado de la noche a la mañana,


sino que es un proceso por medio del cual se va consintiendo. Si
los padres no le prestan atención a cómo están educando a sus
hijos, puede que acaben con un hijo consentido.
714

A veces no son los padres, sino los abuelos los que consienten a
los niños. Pero sea como fuere debemos educar a nuestros hijos
como dice Pablo en Efesios 6.4 Y vosotros, padres, no provoquéis
a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación
del Señor.

Proverbios 3.11-12 No menosprecies, hijo mío, el castigo de


Jehová, Ni te fatigues de su corrección; 12Porque Jehová al que
ama castiga, Como el padre al hijo a quien quiere.

Cuando un padre realmente quiere a su hijo lo corregirá. La


corrección es necesaria, aunque no sea fácil. Si nosotros no
enseñamos a nuestros hijos la calle le enseñará y no precisamente
lo que le conviene.

Las cárceles están llenas de hijos e hijas desobedientes que


pasaron de todo; o cuyos padres pasaron de todo. Ahora, están
pagando las consecuencias.

Hebreos 12.5-11 y habéis ya olvidado la exhortación que como a


hijos se os dirige, diciendo: Hijo mío, no menosprecies la
disciplina del Señor, Ni desmayes cuando eres reprendido por él;
6
Porque el Señor al que ama, disciplina, Y azota a todo el que
recibe por hijo. 7Si soportáis la disciplina, Dios os trata como a
hijos; porque ¿qué hijo es aquel a quien el padre no disciplina?
8
Pero si se os deja sin disciplina, de la cual todos han sido
participantes, entonces sois bastardos, y no hijos. 9Por otra parte,
tuvimos a nuestros padres terrenales que nos disciplinaban, y los
venerábamos. ¿Por qué no obedeceremos mucho mejor al Padre
de los espíritus, y viviremos? 10Y aquéllos, ciertamente por pocos
días nos disciplinaban como a ellos les parecía, pero éste para lo
que nos es provechoso, para que participemos de su santidad.
11
Es verdad que ninguna disciplina al presente parece ser causa
de gozo, sino de tristeza; pero después da fruto apacible de
justicia a los que en ella han sido ejercitados.
715

¿A quién le gusta la disciplina? ¿A quién le gusta que le corrijan?


A nadie, pero es necesaria la disciplina. Si no lo hacemos, mal
criaremos a nuestros hijos y acabarán donde no deben.

¿Qué ocurre si un pastor no corrige a aquellos de la congregación


que no actúan mal? Acaban yendo por caminos que no deben.
Acaban convirtiéndose en niños malcriados.

Por eso es necesario que los pastores corrijamos a quienes se


desvían, porque no queremos que acaben mal. Para que se
corrijan, para ganarlos.

El creyente debe aceptar la corrección, porque los pastores


debemos dar cuenta de vuestras almas, y no queremos que
ninguno se pierda. Por esa razón nos vemos obligados a ejercer la
disciplina.

Enseñarles, corregirles y disciplinarles es parte de nuestra labor


pastoral. Labor que desarrollamos para vuestro bien. Aunque
cuando les disciplinemos no les guste, deben entender que es por
su propio bien.

Es importante porque Dios al que ama disciplina. Si no se nos


corrige nuestra vida sería un desorden y acabaríamos perdidos.

Pablo no iba a corregir a nadie arbitrariamente, pero si había dos


o tres testigos, actuaría por el bien de la Iglesia, conforme a las
Escrituras.

2. En este verso Pablo enfatiza una vez más, de distinta manera,


como era habitual en la literatura hebrea, cuál era su intención.
No estaba dispuesto a dejar pasar el mal, sino a corregirlo.

Advierte que no tendrá se abstendrá ni evitará, ni tratará el asunto


con indulgencia. La indulgencia tiene que ver con la capacidad de
perdonar o pasar por alto las ofensas. Pablo ya no estaba
dispuesto a seguir soportando el pecado de los corintios.
716

Como dice Tito 1.13 Este testimonio es verdadero; por tanto,


repréndelos duramente, para que sean sanos en la fe.

¿Te ha tocado corregir alguna vez a alguien?


¿Cómo actúas cuando tienes que corregir?
¿Eres recto, o blando?

Es una de las situaciones más incómodas y difíciles que tenemos


que enfrentar los pastores, pero hay que hacerlo. ¿O no?

Cuando tus hijos se portan mal lo dejas pasar o lo corriges?


¿Eres indulgente con el pecado o lo corriges?

Estas cosas son serias. Por eso debemos meditarlas. Porque Dios
al que ama disciplina. Dios nos corrige, pero ¿Le estamos
haciendo caso a Dios en lo que nos dice, o no le damos
importancia?

Prestemos atención a estas cosas. Los corintios no lo estaban


haciendo, por eso debieron ser corregidos por Pablo.

La voluntad de Dios es que andemos en santidad. Que Él pueda


decir de cada uno de nosotros: Este es mi hijo amado en quien
tengo complacencia. Sigamos, pues, perseverando en la verdad de
la Palabra de Dios.

La semana pasada el Pr. Andrés estuvo hablando de los dos


primeros versos de éste capítulo y enfatizó la firme decisión de
Pablo de corregir a los corintios. ¿Por qué lo hizo? Porque les
estaba dando la oportunidad de arrepentirse de antemano, para
que no fuera necesario que él los corrigiera en persona.

¿Estaba dispuesto el apóstol a corregirlos? Sí, lo estaba.

Su aviso de que no será indulgente dejaba clara su firme


determinación, de hacer ¿Qué? De hacer frente al pecado y a los
pecadores. De esto también habló el Pr. Andrés, sobre la
necesidad de corregir el pecado.
717

¿Creen que es necesario corregir el pecado, las malas actitudes,


las malas acciones? ¿No será mejor, como dicen los liberales,
dejar a cada cual vivir su propia vida? Desde luego que no.

¿Por qué corregir a quienes pecan? ¿No tiene todo el mundo


derecho a hacer lo que quiera? Sí, y no. En primer lugar, cuando
lo que tú haces afecta a otras personas, no tienes derecho a
hacerlo. Tus derechos están limitados por los derechos de los
demás.

Esta es una norma de la ética que están tratando de anular cada


día con leyes injustas que anteponen los derechos de unos sobre
los demás.

Por ejemplo, hay leyes que anteponen los derechos de las mujeres
sobre los derechos de sus hijos no nacidos. Lo cual es una
verdadera injusticia. Porque niega a sus propios bebés derechos
tan elementales como el derecho a la vida, asesinándolos en su
propio vientre.

Cuando lo que haces no afecta a otras personas sino a ti mismo,


tienes derecho a hacerlo, pero si practicas el pecado, no tienes
derecho a llamarte cristiano. Porque el verdadero cristiano es el
que vive como Cristo.

Como está escrito en 1Juan 2.6 El que dice que permanece en él,
debe andar como él anduvo.

Recuerden las palabras del Señor en Juan 8.31-32 Si vosotros


permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis
discípulos; 32y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.

Pero si alguno no persevera en las enseñanzas de Jesús y se hace


llamar cristiano realmente está mintiendo. Y no tiene derecho a
llamarse cristiano porque está pervirtiendo la verdad de Dios.
718

Así que, como Iglesia de Cristo ¿Por qué debemos corregir a


quienes pecan? Por dos razones fundamentales, porque si el
pecado no se corrige, se extiende. Se propaga entre los miembros
de la Iglesia, como una manzana podrida echa a perder las demás
que están con ella.

Pero además, porque la paga del pecado es muerte. Y si realmente


nos importara la gente, no la dejaríamos morir en sus pecados.
Sino que la corregiríamos para apartarla de las consecuencias del
mismo.

Estas cosas son muy importantes porque, aunque a nadie le guste,


en ocasiones todos necesitamos que se nos corrija. Por nuestro
propio bien.

De eso habló el Pr. Andrés la semana pasada. De la


responsabilidad que tenemos los pastores de ejercer la disciplina
en la Iglesia. Algo que hoy no está muy bien visto, ni se considera
políticamente correcto, pero que es parte de nuestra
responsabilidad ministerial.

Si un pastor no corrige el pecado ¿Sería un buen siervo de Dios?


Por supuesto que no. ¿Qué podría motivar a un pastor para que no
quisiera corregir el mal en la Iglesia? El que él mismo estuviera
practicando ese mal. O que no quiera que la gente se le vaya.
¿Son correctas esta motivaciones? De ningún modo.

Sigamos, pues, donde lo dejaron.

3-4. Al parecer, los corintios demandaron pruebas del poder de


Dios en Pablo. Algo así como los pentecostales exigen a los que
no lo somos.

Ellos dicen: “¿Dónde está tu poder? Demuestra el poder de Dios


hablando en lenguas o haciendo milagros” como si esas cosas
dependieran de los creyentes y no de Dios mismo.
719

En realidad, la mayoría de las veces, lo que los pentecostales


hacen, nada tiene que ver con el poder de Dios, sino con la
imitación del mismo. Es decir, con verdaderas falsificaciones.

Son tantos los fraudes que he presenciado en relación al supuesto


“poder de Dios pentecostal” que me han llevado a desconfiar de
toda manifestación espiritual, y ahora lo examino todo. Como está
escrito: Examinadlo todo; retened lo bueno. 22Absteneos de toda
especie de mal. 1Tesalonicenses 5.21-22.

Esta última frase es una advertencia a no andar falsificando las


cosas de Dios, como algunos hacen descaradamente.

Ciertas cosas que he visto en algunas congregaciones me han


llevado a sentir vergüenza de identificarme con lo “evangélico”.
Por esa razón hice el vídeo: Porqué ya no soy evangélico.

Algunos se confunden pensando que me he apartado de la fe.


Nada más lejos de la verdad, precisamente por respeto a mi fe en
Dios y Su Palabra es que prefiero apartarme de aquello que hacen
llamar evangélico pero que deshonra a Dios.

Todos saben a qué cosas me refiero. Burdas falsificaciones del


poder de Dios.

Falsos pastores que empujan a la gente para después decir que las
tumbó el poder de Dios. He visto al falso evangelista Dionny que
con un infantil experimento de química trata de convencer a la
gente que estaba convirtiendo el agua en vino. Falsificando así un
milagro de Cristo, y arrojando vergüenza al Señor.

¿Han visto cosas semejantes? Yo sí, y me da asco. Siento


repugnancia ante tales manifestaciones de la hipocresía religiosa.

He visto a predicadores como Epi Limiñana agitando un jersey de


lana lleno de virutas de falso oro, para afirmar que estaba
lloviendo oro del cielo. Podría hacer una larga lista de fraudes que
avergonzarían aún a los más crédulos.
720

Lo peor de todo es que la gente crédula les cree. Y aquellos que


llegan a probar su fraude acaban, no dejando de creer en estos
farsantes, sino dejando de creer en Dios.

Estos sinvergüenzas que comercian con la fe de la gente,


haciendo de la piedad ganancia no hacen sino arrojar basura al
Nombre de Cristo. Porque la gente al ver a estos charlatanes con
sus absurdas patrañas, acaban creyendo que todo es mentira.

No es que yo no crea en el poder de Dios. ¿Has visto tú el poder


de Dios en acción? Yo sí. Lo veo a diario, en mi vida y en las
vidas de mucha gente. Vidas que cambian y son transformadas
precisamente por el poder de Dios. Pero ese poder nada tiene de
espectáculo, de Show.

La prueba de que Dios está en una persona, la prueba de que en


esa persona se manifiesta el poder de Dios, no está en que hable
en lenguas extrañas, sino en que sea capaz de controlar su propia
lengua.

Cuando un chismoso o una chismosa, alguien acostumbrado a


levantar falsos testimonios, es transformado y deja de criticar a
sus semejantes, ¿No está demostrando el poder de Dios? Mucho
más que si repitiera palabras sin sentido auto engañándose
haciéndose creer que el poder de Dios está actuando en él o ella.

Quizás no sea tan espectacular como ver una pierna o un brazo


crecer. ¿Pero acaso los vídeos en que afirman que han hecho
crecer una extremidad no son verdaderos fraudes para engañar a
bobos e incautos?

Los corintios querían pruebas de la autoridad de Pablo. Pero


Pablo ya había demostrado el poder de Dios actuando por medio
de paciencia, señales, prodigios y milagros. 12.12.

Sinceramente creo que la mayor de estas cosas es la paciencia.


Pues, se necesita mayor poder para se paciente con los carnales, e
721

incrédulos, que para hacer señales, prodigios y milagros. La


paciencia es una clara demostración del poder de Dios actuando
en la vida de sus siervos.

Ellos habían visto en acción el poder del Espíritu Santo


manifestándose en el apóstol. Aun así, como si no lo hubieran
visto, influenciados por los falsos apóstoles que habían llegado a
Corinto, demandaban pruebas de que Cristo hablaba por medio de
Pablo.

Pablo ya había dicho en 1Corintios 15.9-11 Porque yo soy el más


pequeño de los apóstoles, que no soy digno de ser llamado
apóstol, porque perseguí a la iglesia de Dios. 10Pero por la
gracia de Dios soy lo que soy; y su gracia no ha sido en vano
para conmigo, antes he trabajado más que todos ellos; pero no
yo, sino la gracia de Dios conmigo. 11Porque o sea yo o sean
ellos, así predicamos, y así habéis creído.

En este pasaje, aunque Pablo afirma que es el menor de los


apóstoles porque persiguió a la Iglesia del Señor, no obstante,
reconoce que es apóstol igual que los demás. Lo cual le confiere
el derecho a ser tenido entre los doce.

Porque como escribió en Gálatas 1.1: Pablo, apóstol no de


hombre ni por hombre, sino por Jesucristo y por Dios el Padre
que lo resucitó de los muertos).

Esta es la razón por la que Pablo no será indulgente, porque era


apóstol de Jesucristo y como tal tenía autoridad para ello.

Lo que Pablo plantea en este pasaje de hoy es un paralelo entre


Cristo y nosotros. Ambos débiles, pero ambos también vivimos
por el poder de Dios.

Cristo era visto como débil por aquellos incrédulos que esperaban
que él descendiera de la cruz sano y salvo. Pero aun cuando
entregó su vida por nosotros y murió, hoy vive por el poder de
722

Dios. Pues, como había profetizado antes, resucitó de entre los


muertos de manera victoriosa, triunfando sobre la misma muerte.

Si se hubiera bajado de la cruz ¿Habría demostrado poder? Sin


duda, cierto poder. Pero al resucitar de entre los muertos mostró
aún un poder mayor, al vencer a la misma muerte. Algo que nadie
sino Él, pudo hacer.

Los corintios estaban viendo debilidad en el apóstol y ciertamente


era débil. Por eso tuvo que enfrentar muchas veces la muerte
cuando lo apalearon con varas, fue perseguido, flagelado y
apedreado. Pero Dios lo rescató, para que la vida de Jesús pudiera
manifestarse en él.

Como les había dicho en el 4.10 llevando en el cuerpo siempre


por todas partes la muerte de Jesús, para que también la vida de
Jesús se manifieste en nuestros cuerpos.

Y a lo largo de su vida, Cristo fortaleció y renovó a Pablo en una


forma real y profunda. Las debilidades del apóstol fueron
compensadas por la evidencia del poder de Cristo que obraba en
su vida.

Porque le fue dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se


perfecciona en la debilidad. 2Corintios 12.9.

¿Alguna vez te has sentido realmente débil, sin fuerzas alguna?


Estando en esa situación, ¿Has experimentado el poder de Dios
obrando en ti, fortaleciéndote y levantándote?

Esto es de lo que habla Isaías 40.28-31 ¿No has sabido, no has


oído que el Dios eterno es Jehová, el cual creó los confines de la
tierra? No desfallece, ni se fatiga con cansancio, y su
entendimiento no hay quien lo alcance. 29El da esfuerzo al
cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas. 30Los
muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen;
31
pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas;
723

levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán;


caminarán, y no se fatigarán.

Realmente es fantástico cuando crees que ya no puedes más y


buscas a Dios y en su presencia recuperas, no las fuerzas que
perdiste, sino aún mayores. Un poder sobrenatural que te hace
levantar y ser capaz de todo.

Muchas veces en la vida nos vamos a sentir así, y cuando eso


sucede es bueno recordar cuántas veces Dios nos ha fortalecido en
tales situaciones.

Volviendo al texto de hoy ¿Qué quiere decir el apóstol con la


frase: pero viviremos con él por el poder de Dios para con
vosotros? Se refiere al poder de Dios que actúa en Pablo, y no
sencillamente para obtener fortaleza personal o mayor energía,
sino también para que pueda aplicar la disciplina a los rebeldes
corintios.

Tal como ya ha indicado en los primeros versículos de este


capítulo, aplicará la disciplina de ser necesario, y lo hará no en su
propio nombre, ni en su propia fuerzas, sino por el poder de Dios.

Hablábamos de la fortaleza y la debilidad humana y espiritual.

De modo que aunque seamos débiles en nosotros mismos, los


cristianos vivimos por el poder de Dios. Así que, como Pablo,
tenemos la capacidad de enfrentar nuestros retos sabiendo que no
estamos solos.

¿Cuál era el reto que se le planteaba a Pablo? Corregir a los


corintios si no se arrepentían de su actitud pecaminosa. Aquellos
que pecaban y no se arrepentían.

¿Por qué era un reto para el apóstol? Por que no es fácil llamar la
atención a alguien, y mucho menos corregirle después de haberle
llamado la atención de distintos modos. La disciplina nunca es
fácil. Pero es necesaria.
724

Todos enfrentamos retos en la vida.


¿Cuál fue el último al que te enfrentaste?
¿Cuál es el reto al que te enfrentas ahora?

La vida está llena de retos. Los retos podemos buscarlos o nos los
encontramos sin querer. Por ejemplo, hay quienes sencillamente
buscan retos con afán de superación; ya sea en el terreno
profesional, o de las artes, etc.

Yo me he propuesto aprender a tocar el violín. Para mí es todo un


reto, porque yo no sé solfeo, toco de oído, y mi oído cada día es
peor. Pero poco a poco lo voy consiguiendo.

También hay adictos a la adrenalina que buscan retos peligrosos.


¿Han visto a esos locos que siempre están poniendo en riesgo sus
vidas con el “más difícil todavía”? Todos estos son retos
buscados.

Pero hay situaciones que nos desafían y amenazan de alguna


manera, ya sea nuestra capacidad física, intelectual, emocional e
incluso espiritual, que no son retos buscados, sino que nos
encontramos con ellos, aun sin querer. Algunos retos son más
difíciles y complicados que otros. Pero todos son retos al fin.

¿Tienes retos que enfrentar que te asustan?


¿Has enfrentado alguna vez una situación que te inquietaba?
¿Cuál es el mayor reto al que te has enfrentado?
Quizás te estés enfrentado a un reto en estos momentos y no sepas
cómo superarlo. Déjame decirte que el valiente no es el que no
tiene miedo, sino el que es capaz de vencerlo y hacer lo que debe.

Los chicos se enfrentan a sus exámenes escolares. Algunos se


pasan horas y horas, incluso noches enteras estudiando, porque
quieren sacar buenas calificaciones.
725

Para otros, en cambio, los estudios no suponen ningún reto porque


tienen una capacidad intelectual privilegiada, ¿Conocen a alguien
así, alguien a quien no le cuesta aprender?

Para otros, los estudios no suponen tampoco un reto, no porque


sean superdotados, sino simplemente porque no comprenden la
importancia de una buena preparación. Es decir, no quieren
estudiar, no le dan importancia. Éstos, generalmente después,
lamentan no haberse tomado en serio sus estudios.

¿Eres buen estudiante, o un negligente? ¿Cómo enfrentas el reto


de tus estudios? Hay adultos que quieren predicar, pero cuando se
enfrentan al reto de aprender, no tienen la suficiente
perseverancia.

Es en la niñez que adquirimos los hábitos y la capacidad de


catalogar nuestras prioridades, nuestros intereses personales, y
aquellas cosas a las que daremos importancia, o no.

Si como padres permitimos que un niño no de importancia a lo


que estudia, cuando sea grande, ¿Le afectará? Sin duda, será un
irresponsable. Los padres deben interesarse por lo que sus hijos
aprenden en las escuelas. No basta con que lo inscriban y se laven
las manos.

La educación es responsabilidad de los padres más que de los


profesores. Porque es en el hogar donde los niños aprenden a
responder a sus propios retos, viendo a sus padres cómo enfrentan
los suyos.

Si los padres eluden sus responsabilidades ¿Qué harán los hijos?


Exactamente lo mismo. ¿Y si son responsables? También los
hijos lo serán.

Estoy seguro de que en estas vacaciones algunos padres no se han


preocupado lo más mínimo por ponerle tareas a los chicos
mientras que otros, han tenido ese cuidado y han procurado que
sus hijos no olviden lo que están aprendiendo en el colegio.
726

Recuerden siempre que el ejemplo es lo que cuenta, aún más que


las palabras que les pretendas enseñar a tus hijos. Si tú eres un
miedoso y evitas enfrentar tus miedos, tus hijos te seguirán en el
mal ejemplo. Si eres valiente, como Pablo, enfrentarás tus miedos
y conseguirás lo que te propongas.

¿Era Pablo Todopoderoso? Desde luego que no. Sólo Dios lo es.
Pero el apóstol creía firmemente que el poder de Cristo reposaba
sobre él. Por esa razón sabía que podría enfrentar la situación de
Corinto.

¿Crees tú lo mismo que Pablo?


¿Crees que el poder de Dios reposa sobre ti?
¿Podrás tú enfrentar tus retos? Sin duda, si tienes a Cristo en tu
corazón.

Quizás te sientas débil, pero si Cristo está en tu vida, puedes vivir


con el poder de Dios. La cuestión que debemos plantearnos todos
nosotros es si realmente creemos en el poder de Dios.

¿Crees tú en el poder de Dios? Esto es fundamental en la vida de


los cristianos, pues, es el creer, la fe, el medio y la razón por la
cual Dios nos adopta como hijos suyos. Juan 1.11-12; y por
medio de la fe recibimos poder para vivir la vida cristiana. Como
está escrito: Mas el justo por la fe vivirá. Romanos 1.17. A fin de
que también nosotros andemos en vida nueva. Romanos 6.4

Cristo fue crucificado en debilidad, pero el poder transformador


de Dios fue manifestado en la resurrección de Cristo; y no sólo lo
alcanzó a Él, sino que también nos alcanza a nosotros, mediante
la fe.

Porque Pablo así lo enseña en Colosenses 2.12 sepultados con él


en el bautismo, en el cual fuisteis también resucitados con él,
mediante la fe en el poder de Dios que le levantó de los muertos.
727

De modo que cuando nos identificamos con Cristo en su muerte,


necesariamente lo hacemos también en su resurrección. Por lo que
cuando Cristo resucitó, también nosotros lo hicimos con él en fe.

Y sabemos que aunque aun no hemos muerto, cuando lo


hagamos, resucitaremos por el mismo poder de Dios que levantó
de los muertos a Jesús.

2Corintios 4.13-14 Pero teniendo el mismo espíritu de fe,


conforme a lo que está escrito: Creí, por lo cual hablé, nosotros
también creemos, por lo cual también hablamos, 14sabiendo que
el que resucitó al Señor Jesús, a nosotros también nos resucitará
con Jesús, y nos presentará juntamente con vosotros.

El poder de Dios único, inagotable, inigualable, está con nosotros


para darnos las fuerzas necesarias para enfrentar las situaciones o
circunstancias que nos encontremos en la vida. Por eso podemos
enfrentar nuestros retos, sean cuales sean.

Como Cristo no quedó muerto en el sepulcro, sino que conforme


a su Palabra, Dios lo resucitó, así también Dios no nos dejará
perecer, sino que nos sacará a luz. Nos dará la victoria por medio
de la fe en Su Hijo Jesucristo. Ante cualquier reto que tengamos
que enfrentar.

No se trata de malinterpretar las Escrituras afirmando que


nosotros tenemos el poder de Dios, como algunos falsos maestros
afirman. El poder de Dios sólo Dios lo tiene. Nosotros, como
Pablo reconoce, somos débiles, pero viviremos con él por el poder
de Dios para con nosotros.

Algo de lo que debemos tener especial cuidado los cristianos es


de no robarle la gloria a Dios. Actualmente no se le da
importancia a esto, pero Dios nos enseña en su Palabra que es
algo que él se toma muy en serio.

Todos conocemos el capítulo 12 de Hechos de los Apótoles, que


comienza diciendo: En aquel mismo tiempo el rey Herodes echó
728

mano a algunos de la iglesia para maltratarles. 2Y mató a espada


a Jacobo, hermano de Juan. 3Y viendo que esto había agradado a
los judíos, procedió a prender también a Pedro. Hechos 12.1-2.

Continúa diciendo que Dios libró a Pedro de la cárcel de manera


milagrosa. Por lo que Herodes mandó matar a los guardias que le
custodiaban. Aun cuando Dios dice: No matarás.

No contento con eso, en los versos del 21-24 se nos relata cómo
medió entre dos pueblos que tenían un litigio y cómo su actitud de
orgullo y el robarle la gloria a Dios lo mataron.

Y un día señalado, Herodes, vestido de ropas reales, se sentó en


el tribunal y les arengó. 22Y el pueblo aclamaba gritando: ¡Voz de
Dios, y no de hombre! 23Al momento un ángel del Señor le hirió,
por cuanto no dio la gloria a Dios; y expiró comido de gusanos.
24
Pero la palabra del Señor crecía y se multiplicaba.

Quizás Dios no envíe un ángel a matar a quienes le roban la


gloria, pero llegado su momento les juzgará y recibirán un castigo
peor.

Los cristianos somos llamados a ser humildes, no orgullosos.


Somos llamados a reconocer que vivimos por el poder y la
misericordia de Dios.

La semana pasada hablamos del reto que Pablo tenía por delante,
y de su disposición a enfrentarlo por el poder de Dios para con
nosotros. Hablamos también de nuestros propios retos y de cómo
enfrentarlos. Díganme, ¿cómo es más fácil con Cristo o sin Él?
Sin duda, con Cristo.

Teniendo esto en mente, y siguiendo con el texto, hay algo de lo


que nos tenemos que asegurar. Un examen que debemos superar y
del que el apóstol habla en los versos siguientes, leamos.

5-6. Examinaos, probaos. ¿Qué quiere decir Pablo con estas


palabras? ¿Se han hecho alguna vez un chequeo médico? Como si
729

de un chequeo médico se tratara, cada uno de nosotros debemos


estudiarnos a nosotros mismos.

¿Cuál es el objetivo del examen del que habla Pablo? Comprobar


si realmente estamos en la fe. ¿Qué es estar en la fe? Es saber si
somos verdaderos discípulos de Cristo, o si por el contrario sólo
hemos caído en las redes de la religión.

El domingo hablábamos de este tema. ¿Recuerdan? Hablamos de


la diferencia de la religión y la espiritualidad. Porque podemos
caer en el engaño ¿Sí o no? Sin ninguna duda. De ahí la necesidad
de pasar ese examen.

¿Qué es la religión? La religión es el falso convencimiento de que


somos hijos de Dios sin serlo. ¿Creen que se puede caer en esto?
Desde luego. Hay muchas personas que han caído en esta mentira.

¿Sabrían poner un ejemplo práctico de religión? Un claro ejemplo


de esto es el catolicismo romano, que enseña como doctrina que
todos los seres humanos somos hijos de Dios. ¿Es esto verdad?
De ningún modo.

¿A qué lleva esa falsa doctrina? A creer que como somos hijos de
Dios, y todo el mundo quiere a sus hijos, ninguno será castigado
por Dios. Ninguno será condenado. ¿Es verdad eso? De ningún
modo.

¿Alguien puede poner otro ejemplo de lo que supone religión?


Los seguidores de los falsos pastores evangélicos que predican
falsos evangelios, como Guillermo Maldonado, Cash Luna,
Benny Hinn, Ana Mendez, Rony Chaves, Joel Osten, Petter
Wagner, Jesús Adrián Romero, César Castellano, Aquiles Azar,
Alberto Mottesi, y la lista sigue y sigue.

Muchos de estos están engañando a la gente haciéndoles creer que


están en la fe, sin estarlo. De ahí la necesidad de asegurarnos de
no haber caído en el engaño o el auto engaño.
730

¿Qué es estar en la fe? Es haber entendido y aceptado el mensaje


del evangelio de Jesucristo.

Pero ellos afirman predicar ese evangelio, ¿Cómo saber si es


verdad o no lo que enseñan? Por medio del conocimiento de la
Escritura. Sobre esto hemos estado predicando y enseñando a lo
largo de todo el año pasado.

Los falsos maestros hacen creer a la gente que pueden ser hijos de
Dios sin arrepentirse de sus pecados, sin convertirse, ni nacer de
nuevo. Basta con que crean que Dios les ama y sostengan
económicamente sus supuestos “ministerios”.

¿Puede alguien que no se arrepiente de sus pecados y vive según


el mundo ser hijo de Dios? Desde luego que no. Estos son como
los católicos romanos que no han creído en el evangelio, ni se han
convertido e sus malos caminos y aun así creen que son hijos de
Dios.

Por tanto, una cosa es ser criaturas de Dios y otra muy distinta ser
hijos de Dios. Somos criaturas por cuanto hemos sido creados por
Dios. Pero para ser adoptados como hijos, hay unos requisitos
imprescindibles, sin los cuales nadie lo es realmente.

Todos conocemos los pasajes de Juan 1.11-13 A lo suyo vino, y


los suyos no le recibieron. 12Mas a todos los que le recibieron, a
los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos
de Dios; 13los cuales no son engendrados de sangre, ni de
voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios.

Todos entendemos los versos 11 y 12, pero, ¿Qué quiere decir el


verso 13? Según los calvinistas que todo lo malinterpretan al
objeto de hacer coincidir la Biblia con sus falsas doctrinas, dicen
que se refiere a que el ser humano no puede hacer nada para ser
hijo de Dios.

¿Es correcta esta interpretación? De ningún modo. Esa afirmación


contradice abierta y claramente el mismo texto que estudiamos.
731

En primer lugar, si algo afirma este pasaje es que ser adoptados


como hijos de Dios demanda que el ser humano reciba a Cristo y
crea en Su Nombre. Es decir, que crea en el evangelio que en su
Nombre se predica.

Así que ¿qué quiere decir el verso 13? Este pasaje afirma que así
lo ha querido Dios. Que el que quiera ser hijo suyo debe recibir a
Jesús y creer en el evangelio. Esta es la soberana voluntad de
Dios. Por esta voluntad de Dios somos engendrados y nacemos de
nuevo aquellos que le recibimos y creemos en él.

De esto estuvimos hablando en el sermón sobre Gálatas 1.6-10


sobre el verdadero evangelio de Cristo. ¿Se dan cuenta de lo
fácilmente que caemos en el error por no prestar la atención
debida a los pasajes que estudiamos.

Con razón el Señor Jesús le dijo a los judíos que procuraban


matarle: Escudriñar las Escrituras. Juan 5.39.

Todo el que pretenda entender las Escrituras debe dedicar tiempo


y esfuerzo en estudiarlas de manera específica y detallada.

¿Qué riesgos asume quien no presta atención a las Escrituras?


Que se trague cualquier falsa doctrina y sea arrastrado por el
error.

Pablo enseña sobre esto en Efesios 4.12-15 cuando dice: para que
ya no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo
viento de doctrina, por estratagema de hombres que para
engañar emplean con astucia las artimañas del error, 15sino que
siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es
la cabeza, esto es, Cristo.

Uno de los temas menos conocidos de la Biblia, a pesar de que es


de los que más se habla, es el tema de la fe. Muchos habla de la
fe, citan textos que hablan de la fe, pero se confunden al no
entender que hay cuatro tipos de fe de los que habla la Biblia.
732

a) La fe del que dice creer por lo que ve. ¿Han oído a alguien
afirmar: No creo en lo que no veo; o sólo creo en lo que veo.

Esta es la fe de los demonios. Como está escrito en.


Santiago 2.19 Tú crees que Dios es uno; bien haces.
También los demonios creen, y tiemblan.

Esta fe la tiene todo el mundo. Todos somos capaces de


creer en lo que vemos. Es raro encontrar a alguien que esté
sano y no crea en lo que ve. Aunque también debe haberlos.
Espero que ninguno de vosotros seáis de éstos.

b) Esta es la fe que Dios demanda de todos aquellos que oyen


la exposición de Su mensaje, su evangelio. La fe que salva.
La fe del que cree a Dios.

Dios exige esta fe a todos. Es una fe que parte del ser


humano. Dios la demanda, la exige. Todos deben creer a
Dios, deben creer a Su Palabra. Pero no todos la tienen, sino
aquellos que deciden voluntariamente depositar confianza
en Dios.

Juan 3.36 El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el


que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira
de Dios está sobre él.
Este pasaje demuestra con absoluta claridad que todo el
mundo puede creer o rehusar hacerlo. También nos enseña
sobre las consecuencias de cada decisión. Si decides creer
tendrás vida eterna. Si decides rehusar creer, ya sabes lo que
te espera.

Para tener esta fe es necesario que conozcas el evangelio de


Jesucristo. Como está escrito en Romanos 10.13-14 porque
todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo.
¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído?
¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo
oirán sin haber quien les predique?
733

¿Tienes tú esa fe?


¿Ya te predicaron el evangelio?
¿Has tomado la decisión de creer a Dios?
Es tu responsabilidad. No debes esperar a que Dios te de esa
fe. Dios te la demanda.

c) La fe fruto del Espíritu que viene a ayudarnos. Esta es la que


produce el Espíritu de Dios en nosotros, para capacitarnos y
mantener nuestra comunión con Dios. Gálatas 5.22 Mas el
fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad,
bondad, fe…

Esta fe sólo la tienen los hijos de Dios, aquellos que


decidieron depositar confianza en la Palabra de Dios, le es
dada esta fe en una cierta medida para que le ayude en la
vida cristiana. Romanos 12.3 Digo, pues, por la gracia que
me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no
tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino
que piense de sí con cordura, conforme a la medida de fe
que Dios repartió a cada uno.

Es aquella fe que nos es dada, no para salvación, dado que


ya somos salvos, sino para vivir conforme a la voluntad de
Dios y la perseverancia en la fe.

¿Tienes tú esta fe?


¿En qué medida?
¿Crees de verdad que has sido adoptado por Dios?
¿Crees que puedes agradarle en el poder del Espíritu?
Si las respuestas a estas preguntas es sí, es porque Dios te ha
dado esa fe para creerlo.

Recuerden, para recibir esta fe, primero debes haber


decidido creer a Dios. Es decir, tener la fe anterior que es la
que salva.
734

d) La fe como don. 1Corintios 12.8-9 Porque a éste es dada


por el Espíritu palabra de sabiduría; a otro, palabra de
ciencia según el mismo Espíritu; 9a otro, fe por el mismo
Espíritu; y a otro, dones de sanidades por el mismo
Espíritu.

Esta fe también es dada, aunque sólo a algunos discípulos de


Cristo para hacer cosas sobrenaturales, o perseverar más allá
de la lógica humana.

Muy poca gente puede decir que tiene esta fe sobrenatural,


pero sobre todo, muy poca gente puede demostrar que la
tiene.

No saber distinguir entre estas diferentes fe, lleva a algunos a


cometer errores de interpretación bíblica. De ahí que debemos
siempre tener en cuenta el contexto de cada pasaje para saber de
que fe se está hablando en cada uno de ellos.

Pablo dice aquí que debemos examinarnos a nosotros mismos. Un


autoexamen de la vida espiritual, en el que debemos evitar
engañarnos a nosotros mismos. Porque no estaremos haciéndonos
ningún favor.

La semana pasada estuvimos hablando de la necesidad de


examinarnos a nosotros mismos para comprobar ¿Qué? ¿Qué
quería Pablo que comprobásemos? Si estábamos en la fe.

Comentamos que debido a que muchos confunden la religión con


la espiritualidad, estuvimos hablando de la necesidad de
profundizar en el conocimiento de la fe. Por eso hablamos de
cuatro tipos diferentes de fe. ¿Recuerdan cuáles eran?

La fe del que sólo cree en lo que ve.


La fe que Dios demanda de todo ser humano para salvación.
La fe que es fruto del Espíritu Santo.
La fe como don.
735

Algunas personas me han pedido que haga aclaración de esto, y


quiero hacerlo aportando algunos pasajes que nos ayuden a
entenderlo más profundamente. Lo haré por medio de un ejercicio
práctico. Citaré algunos pasajes y vosotros me diréis a qué fe
pertenece. ¿Les parece? Por ejemplo:

Juan 3.16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado
a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se
pierda, mas tenga vida eterna.

¿De qué fe nos está hablando aquí el Señor Jesús? De la fe que


Dios exige a todo ser humano. El que oye el evangelio ¿Debe
esperar que Dios le de esa fe para creer? No.

Esta no es una fe que tengas que esperar que Dios te de, sino que
debes depositarla tú. Es tu responsabilidad creer a Dios. Dios lo
exige.

¿Cómo sabemos esto? Por el contexto, Juan 3.18 El que en él


cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido
condenado, ¿Por qué? porque no ha creído en el nombre del
unigénito Hijo de Dios.

Según este pasaje ¿Cuál es el medio para salvarse? La fe. ¿Sobre


quién recae la responsabilidad de creer? Sobre el ser humano.

Como podemos comprobar, Dios manda a todos a creer. Si Dios


lo manda es porque las personas pueden depositar confianza en el
evangelio que se les predica.

Algunos piensan que el hombre no puede creer porque Pablo dice


que está muerto en sus delitos y pecados y un muerto no puede
creer. Es evidente que un muerto no puede creer. Pero Pablo no
está hablando en sentido literal, sino espiritual.

Cuando oíste el evangelio estabas literalmente muerto? No. De lo


contrario no hubieras podido oír el evangelio. Porque los muertos
no oyen. ¿Entienden lo absurdo de interpretar mal la Escritura?
736

No podemos interpretar literalmente una palabra para una cosa y


figuradamente para otra. O es lenguaje literal o es figurado. Pero
no puede ser ambos.

Veamos otro ejemplo: Lucas 17.5 Dijeron los apóstoles al Señor:


Auméntanos la fe.

¿De qué fe nos habla este pasaje?


¿Se trata de la fe que Dios exige para salvación? No.
¿Se trata del don de fe? No.
Se trata de la fe que es fruto del Espíritu Santo.

¿Cómo lo sabemos? Estudiemos el pasaje.


¿Eran ellos de los que sólo creían en lo que veían? No. Al menos
no todos.
¿Quiénes eran los que hicieron esta peculiar petición al Señor?
Los apóstoles, por lo cual se supone que ya habían creído en el
evangelio.
¿Eran de los que tenían el don de fe? No, de lo contrario no
habrían hecho esa petición.

Por lo cual sabemos que se trataba de la fe que produce el Espíritu


Santo en los hijos de Dios. Es decir, la fe que pertenece a los
frutos del Espíritu Santo. Otro ejemplo:

1Corintios 13.2 Y si tuviese profecía, y entendiese todos los


misterios y toda ciencia, y si tuviese toda la fe, de tal manera que
trasladase los montes, y no tengo amor, nada soy.

¿Esta fe es la que produce el Espíritu Santo como fruto en la vida


del creyente? No, es la fe que se recibe como don sobrenatural
para creer más allá de toda lógica.

Sigamos con el ejercicio para que aprendamos a discernir entre


una fe y otra.

Marcos 4.40-41 Y les dijo: ¿Por qué estáis así amedrentados?


¿Cómo no tenéis fe? 41Entonces temieron con gran temor, y se
737

decían el uno al otro: ¿Quién es éste, que aun el viento y el mar


le obedecen?

¿Qué fe es ésta? La fe como fruto del Espíritu. Ahora vosotros


solos.

Lucas 8.48 Y él le dijo: Hija, tu fe te ha salvado; ve en paz.

¿De qué fe habla aquí el Señor? De la que Dio demanda para


salvación. Otro ejemplo:

Romanos 10.17 Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra


de Dios.

¿Qué fe es la que vemos en este pasaje? De la fe que Dios


demanda.

Hebreos 4.2 Porque también a nosotros se nos ha anunciado la


buena nueva como a ellos; pero no les aprovechó el oír la
palabra, por no ir acompañada de fe en los que la oyeron.

¿Pueden decir de qué fe se habla aquí y por qué? También de la fe


que Dios demanda. Porque por no creer no les aprovechó el
evangelio.

Efesios 2.8 Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y
esto no de vosotros, pues es don de Dios.

¿De qué fe habla Pablo aquí? De la misma fe que Dios exige a


todos los que oyen el evangelio. ¿Dice este pasaje que la fe es un
don de Dios? No. Dice que la salvación es un don de Dios. La fe
es el medio para conseguirla.

La semana pasada realizamos un pequeño ejercicio mediante el


cual pudimos profundizar en la diferencia entre las diferentes fe
que aparecen en la Biblia. ¿Es importante saber esto o no; y por
qué? Es importante porque conociendo que hay diferentes tipos
de fe, no nos confundiremos a la hora de interpretar la Sagrada
738

Escritura como muchos hacen por no prestar atención a estos


detalles.

Siguiendo con el texto que estudiábamos, verso 5, también es


importante que nos demos cuenta de algo. ¿Se nos exhorta a
examinar al hermano? ¿Dice Pablo que debemos examinarnos los
unos a los otros? No, sino que el examen es a nosotros mismos.

Por dos veces usa Pablo el “a vosotros mismos”, ¿Por qué lo


hace? ¿Por qué se repite lo mismo? Lo hace siguiendo la
costumbre hebrea de repetir la misma verdad de forma distinta.
Algo que vemos a lo largo de toda la Escritura. Es una
característica que forma parte de la literatura hebrea.

¿Por qué es importante saberlo? Para no confundirnos en la


interpretación de la Palabra de Dios. ¿Recuerdan que comenté en
cierta ocasión que me preguntaron sobre las dos creaciones de
Dios? Porque esa persona entendía que el relato de Génesis 1 y 2
eran relatos de creaciones distintas.

¿Lo son? De ninguna manera. Es el mismo relato, sólo que en el


primero se hace mención de forma genérica y en el segundo se
puntualiza algunas cosas que en el primero no se dijo. Los
Proverbios están llenos de frases que se repiten de manera
distintas. Es decir, con otras palabras. Se hace para enfatizar la
verdad que transmiten.

Los corintios, pretendían examinar a Pablo para comprobar si


Cristo hablaba por él; ahora Pablo les devuelve la pelota
exhortándoles a examinarse a sí mismos, para que comprobaran si
estaban en la fe. A esto ¿Cómo se le llama? ¿A volver el
argumento contra el que lo plantea? Redargüir.

Pablo da aquí una gran lección a todos aquellos que tienen la


costumbre de examinar las vidas de los demás, pero cuyas vidas
son un verdadero desastre. Un llamado claro y explícito para que
se examinen a sí mismos.
739

¿Conocen los reporteros “evangélicos”? Me refiero a algunas


personas que están siempre pendiente de la noticia. Observando
las vidas ajenas para ver qué pueden sacar de provecho para su
murmuración.

Estos, cuando no tienen nada que decir, se lo inventan, levantando


verdaderos falsos testimonios contra cualquiera que ose ponerse
en su camino. Llevan cuenta de la vida de todo el mundo.
Conocen cada detalle de cada escándalo, pero cuando les llamas
la atención, nunca se enteraron de que estaban dando mal
ejemplo.

Aquí tenemos una de las lecciones más difíciles de aprender.


Porque siempre es más fácil ver el fallo de los demás que los
propios. El Señor Jesús habló de esto cuando en Mateo 7.1-5 dijo:

No juzguéis, para que no seáis juzgados. 2Porque con el juicio


con que juzgáis, seréis juzgados, y con la medida con que medís,
os será medido. 3¿Y por qué miras la paja que está en el ojo de tu
hermano, y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo? 4¿O
cómo dirás a tu hermano: Déjame sacar la paja de tu ojo, y he
aquí la viga en el ojo tuyo? 5¡Hipócrita! saca primero la viga de
tu propio ojo, y entonces verás bien para sacar la paja del ojo de
tu hermano.

Nosotros tenemos un mandato del Señor para todo este año,


¿Recuerdan cuál es? Me refiero al lema que hemos adoptado este
año para la Iglesia: Hebreos 12.14 Seguid la paz con todos, y la
santidad, sin la cual nadie verá al Señor.

Díganme, ¿Creen que al diablo le gusta que nosotros queramos


seguir los mandamientos del Señor? Desde luego que no. Si tú
actúas mal y haces daño a otras personas ¿Cómo reacciona el
diablo? Se divierte, porque es malo y desea tu propio mal. De
modo que si le haces su trabajo, él encantado.

Pero si te empeñas en hacer lo correcto ayudando a los demás y


procurando hacer el bien, ¿Cuál será su reacción? Se enojará
740

contigo y te hará sentir mal. Procurará que veas a tus propios


hermanos como estorbo para ti, para tu propia promoción
personal.

De ahí que es muy importante que no ignoremos sus


maquinaciones. Porque él maquina, planea nuestra caída, para
hacer daño a la obra de Dios.

Debemos entender que todos somos llamados a examinarnos a


nosotros mismos, aún los pastores, como enseña el apóstol en
Hechos 20.28, Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el
rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para
apacentar la iglesia del Señor, la cual él ganó por su propia
sangre.

Yo me examino con frecuencia, especialmente cuando tengo


algún tipo de contratiempo siempre estoy diciéndole a Dios lo
mismo que David en el Salmo 139.23-24 Examíname, oh Dios, y
conoce mi corazón; Pruébame y conoce mis pensamientos; 24Y ve
si hay en mí camino de perversidad, Y guíame en el camino
eterno.

Porque ninguno estamos exentos de caer en el error. Razón por la


cual, si tenemos dudas al respecto debemos consultar con
hermanos que sean maduros en la fe. Para que nos ayuden a auto
examinarnos a nosotros mismos. Recuerden que el mandamiento
no es examinar al otro, sino a sí mismo.

Pablo no pretendía poner en duda la fe o la experiencia de los


corintios, puesto que les llama hermanos, sino que les advierte de
la necesidad de examinarnos para asegurarnos de que estamos en
la fe de Cristo y no nos hemos alejado de ella.

La verdadera fe convierte el alma, la acerca a Dios y la


transforma, evidenciando de ese modo la comunión íntima del
creyente con Dios. Dios nos viene hablando de esta verdad
bíblica. No es posible que alguien afirme que tiene fe y su estilo
de vida no lo refleje.
741

¿O no os conocéis a vosotros mismos, que Jesucristo está en


vosotros, a menos que estéis reprobados? Esta pregunta que
Pablo les hace es retórica, pero es una clara apelación a las
conciencias de los corintios.

Reprobado es adokimoi en griego que significa rechazado,


eliminado. Es aquel que no da la talla. ¿Recuerdan las palabras de
Pablo en 2Timoteo 2.5? el que lucha como atleta, no es coronado
si no lucha legítimamente.

Puede que algunos se encuentren corriendo la carrera y no lleguen


a la meta; pero también es posible que aun llegando a la meta
algunos sean descalificados, porque no lo hicieron legítimamente.

¿De qué nos habla esto? Nos habla de apostasía. Es decir, de la


posibilidad de que algunos sean eliminados. Este es un asunto
importante porque hay quienes creen que no es posible, pero la
Palabra de Dios los desmiente.

También de integridad, de honestidad, de sinceridad, autenticidad


y cosas semejantes. Los hipócritas no serán coronados. ¿Podrá
alguien engañar a Dios? Desde luego que no. A los hombres sí,
pero a Dios no hay quien le engañe. Gálatas 6.7.

En Hechos 20.24 Pablo dijo a los pastores en Mileto que sabía


que le esperaban prisiones y tribulaciones, más añadió: Pero de
ninguna cosa hago caso, ni estimo preciosa mi vida para mí
mismo, con tal que acabe mi carrera con gozo, y el ministerio que
recibí del Señor Jesús, para dar testimonio del evangelio de la
gracia de Dios.

Pablo había entregado su vida a Dios y a Su obra, por


consiguiente, él no está preocupado por las consecuencias de
andar en la voluntad de Dios. Él tiene que hacer lo que tiene que
hacer, sea que lo aplaudan, o sea que lo torturen y le corten la
cabeza, como hizo Nerón en el año 67, según los historiadores.
742

Él corría su carrera legítimamente. Estaba seguro porque se


examinaba así mismo para no desviarse de su objetivo. ¿Lo haces
tú? ¿Te examinas a ti mismo? ¿Sabes si estás corriendo la carrera
legítimamente o si estás haciendo trampas?

Examinaos a vosotros mismos si estáis en la fe; probaos a


vosotros mismos. ¿O no os conocéis a vosotros mismos, que
Jesucristo está en vosotros, a menos que estéis reprobados?

Al parecer, la frase que contiene la pregunta de Pablo: “Que


Jesucristo está en vosotros” era comúnmente usada por la Iglesia
primitiva, en base a la enseñanza del mismo Señor Jesús
registrada en: Juan 14.20 En aquel día vosotros conoceréis que yo
estoy en mi Padre, y vosotros en mí, y yo en vosotros.

Esta misma frase es usada por Pablo en distintas ocasiones, como


por ejemplo en: Gálatas 2.20 Con Cristo estoy juntamente
crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que
ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual
me amó y se entregó a sí mismo por mí.

Efesios 3.17 para que habite Cristo por la fe en vuestros


corazones, a fin de que, arraigados y cimentados en amor.

¿Tienes a Cristo en tu corazón? ¿Cómo llegó a ti, según este


pasaje bíblico? Por medio de la fe. Por cierto, ¿A cual de los
cuatro tipos de fe se refiere? A la que Dios exige para salvación.

Colosenses 1.27 a quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas


de la gloria de este misterio entre los gentiles; que es Cristo en
vosotros, la esperanza de gloria.

Hay frases en la Biblia que muchos cristianos suelen pasar por


encima porque no la entienden. Quiero preguntarles: ¿Entienden
esta última frase: Cristo en vosotros, la esperanza de gloria? ¿Qué
quiere decir?
743

Que los que tenemos a Cristo en nuestros corazones tenemos la


esperanza de que compartiremos la gloria con Él. Un día
estaremos con Él en la gloria, porque a eso hemos sido llamados
por Dios.

La semana pasada dijimos que somos invitados a la gloria. Pero


que era necesario comprobar que reunimos las condiciones
necesarias que nos aseguren que nos dejaran entrar. ¿Recuerdan
que citamos un pasaje?

1Pedro 5.10-11 Mas el Dios de toda gracia, que nos llamó a su


gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis padecido un poco
de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme, fortalezca y
establezca. 11A él sea la gloria y el imperio por los siglos de los
siglos. Amén.

¿Estamos ya en su gloria? Desde luego que no. Pero hemos sido


llamados a ella. A la luz de este pasaje ¿Qué es necesario que
ocurra en nosotros para que disfrutemos de su gloria? Que seamos
perfeccionados, afirmados, fortalecidos y establecidos.

¿Quién hace esto y cómo? Lo hace Dios por medio de diversas


pruebas que nos pueden llevar a padecer por un poco de tiempo.
¿Lo hace Dios por fastidiarnos? Desde luego que no. ¿Por qué
somos probados? A fin de comprobar quiénes dan la talla.

¿Por qué es necesario que seamos perfeccionados? Porque


ninguno en nuestro actual estado damos la talla para vivir con el
Señor en Su gloria. La vida es una escuela en la que es posible
que padezcamos un poco, pero estamos siendo perfeccionados,
afirmados, fortalecidos y establecidos, para poder vivir con Cristo
en la gloria del Padre.

¿Estás siendo perfeccionado? Es decir, ¿Se evidencia en ti algún


cambio a mejor? ¿Te pareces cada día más a Jesús? ¿Qué ocurre
en la vida de un creyente que no avanza en su santificación? Que
algo no marcha bien.
744

Lo normal es que el cristiano vaya perfeccionando su santidad


delante de Dios y de los hombres. No es normal que un niño no
crezca. Cuando eso ocurre es porque hay algún problema que hay
que tratar.

El ser humano crece física emocional, intelectual, y es llamado


también a crecer espiritualmente. Si se produce avance en un área
pero no en otra, algo no está funcionando como debiera.

Habiendo sido llamados a la gloria, debemos prepararnos para


que ese día no seamos rechazados por nuestra negligencia. Es
necesario que no sólo tú mismo, sino que todos puedan ver la
madurez y el avance de tu vida espiritual.

¿Tienes tú esa esperanza? Esperas llegar algún día a compartir la


gloria de Dios? Yo sí, y espero que también tú. Así que no te
dejes desanimar por el hecho de que mientras tanto, lo que
vivimos aquí no se parezca en nada a la gloria.

Porque el padecimiento es necesario, para ayudarnos a ser


mejores, más perfectos, firmes y fuertes.

Hebreos 3.14 Porque somos hechos participantes de Cristo, con


tal que retengamos firme hasta el fin nuestra confianza del
principio.

Según este pasaje desde el verso 7 hasta el 19, existe una


condición para ser hechos participantes de Cristo, ¿Cuál es?
retener firme hasta el fin nuestra confianza del principio. ¿Qué es
la confianza? La fe.

Aquí hay una nueva y clara advertencia contra la apostasía, el


abandono de la fe. ¿Qué ocurrirá con aquellos que se den por
vencidos y no retengan la fe hasta el fin? Que no serán hechos
partícipes de Cristo.

1Pedro 1.3-9 Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor


Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer
745

para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los


muertos, 4para una herencia incorruptible, incontaminada e
inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros, 5que sois
guardados por el poder de Dios mediante la fe, para alcanzar la
salvación que está preparada para ser manifestada en el tiempo
postrero. 6En lo cual vosotros os alegráis, aunque ahora por un
poco de tiempo, si es necesario, tengáis que ser afligidos en
diversas pruebas, 7para que sometida a prueba vuestra fe, mucho
más preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba
con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea
manifestado Jesucristo, 8a quien amáis sin haberle visto, en quien
creyendo, aunque ahora no lo veáis, os alegráis con gozo inefable
y glorioso; 9obteniendo el fin de vuestra fe, que es la salvación de
vuestras almas.

La fe permite que el poder de Dios nos guarde. En este pasaje se


vuelve a decir: por un poco de tiempo. Cuando estamos en la
prueba parece que el tiempo no pase, pero en relación a la
eternidad, las pruebas sólo duran un poco de tiempo. La idea es
que soportemos en fe hasta el fin.

En todas estas frases aparece la misma idea: Cristo en nosotros.

Jesucristo está en vosotros, a menos que estéis reprobados. Esta


parte, enfrenta a los corintios a la necesidad de meditar sobre la
posibilidad de que no superen la prueba, el examen.

¿Es posible que alguno de los corintios, a los que Pablo llama
hermanos en la fe, no supere esa prueba de la presencia de Cristo
en su vida? Sin ningún género de duda. Como ya hemos dicho
antes, muchos han sido engañados, o auto engañados cayendo en
las redes de la religión, pero lejos de una genuina experiencia de
conversión en Cristo. El autoexamen les sacaría del error y les
daría la oportunidad de arrepentirse y buscar de corazón a Jesús.

Pablo enseñó sobre el autoexamen cuando al hablar de la Santa


Cena dijo en 1Corintios 11.28-29 Por tanto, pruébese cada uno a
sí mismo, y coma así del pan, y beba de la copa. 29Porque el que
746

come y bebe indignamente, sin discernir el cuerpo del Señor,


juicio come y bebe para sí.

¿Qué quiere decir esto? Que quienes se presentan ante Dios sin la
debida preparación, están en realidad buscando el juicio de Dios
sobre sí mismos. Algo realmente peligroso. Un peligro real con
consecuencias eternas.

En la antigüedad los sacerdotes debían realizar un detallado ritual


de purificación antes de entrar ante la presencia de Dios. Tales
rituales tenían por objeto enseñar simbólicamente la necesidad de
la santidad, sin la cual, como está escrito: nadie verá al Señor.
Hebreos 12.14.

No solamente nos debemos preparar para celebrar la Santa Cena,


sino que también debemos constantemente probar nuestros
corazones, nuestros actos, nuestras palabras y tendencias. ¿Por
qué creen que debemos hacerlo? Porque vivimos siempre en la
presencia de Dios. Ante sus ojos. A él nada se le escapa.

Cuando hacemos lo correcto Él se entera, está ahí donde tú estás.


Cuando hacemos lo malo también se entera porque él está
presente. Toda la tierra está llena de Su gloria. Isaías 6.3.

¿Qué quiere decir este texto? Que Dios está en toda la tierra.

Salmo 139.1-10 Oh Jehová, tú me has examinado y conocido. 2Tú


has conocido mi sentarme y mi levantarme; Has entendido desde
lejos mis pensamientos. 3Has escudriñado mi andar y mi reposo,
Y todos mis caminos te son conocidos. 4Pues aún no está la
palabra en mi lengua, Y he aquí, oh Jehová, tú la sabes toda.
5
Detrás y delante me rodeaste, Y sobre mí pusiste tu mano. 6Tal
conocimiento es demasiado maravilloso para mí; Alto es, no lo
puedo comprender. 7¿A dónde me iré de tu Espíritu? ¿Y a dónde
huiré de tu presencia? 8Si subiere a los cielos, allí estás tú; Y si
en el Seol hiciere mi estrado, he aquí, allí tú estás. 9Si tomare las
alas del alba Y habitare en el extremo del mar, 10Aun allí me
guiará tu mano, Y me asirá tu diestra.
747

¿De qué nos habla este Salmo? De la Omnipresencia de Dios.


Dios está en todo lugar. No hay ningún sitio al que podamos huir
de su presencia. Nadie, pero mucho menos los cristianos. ¿Por
qué? Pablo nos da la respuesta en:

1Corintios 6.19 ¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del


Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y
que no sois vuestros?

Donde quiera que vayamos Dios está allí. Con nosotros, en


nosotros. Al estar en nuestro interior conoce aun nuestros
pensamientos más íntimos. De ahí que antes de ver el mal en los
demás, debemos prestar atención a lo que hay dentro de nosotros
mismos.

Seguimos hablando de la necesidad del autoexamen y citamos a


Pablo hablando de la Santa Cena, y también un Salmo que habla
de la omnipresencia de Dios; así como al hecho de que Dios
habita en los creyentes, de modo que es testigo de cuanto
hacemos.

Seguimos donde lo dejamos, porque es un tema muy importante.


Pablo dio mucha importancia al autoexamen, por eso habló de
ello en otras ocasiones, como por ejemplo en: Gálatas 6.1-5:

Hermanos, si alguno fuere sorprendido en alguna falta, vosotros


que sois espirituales, restauradle con espíritu de mansedumbre,
considerándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado.
2
Sobrellevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley
de Cristo. 3Porque el que se cree ser algo, no siendo nada, a sí
mismo se engaña. 4Así que, cada uno someta a prueba su propia
obra, y entonces tendrá motivo de gloriarse sólo respecto de sí
mismo, y no en otro; 5porque cada uno llevará su propia carga.

Pablo dice esto en el marco de la disciplina. Cuando alguien es


sorprendido en alguna falta, muchos son tentados de hacer leña
748

del árbol caído. He visto en algunas congregaciones cómo de


ceban contra el hermano que cayó en algún pecado.

No se le disciplina con el objetivo de restaurarlo, como el Señor


nos enseña aquí, sino con la intención de machacarlo. Con la
hipocresía del que cree que está por encima del pecado. Pablo
enseña que debemos tener cuidado, porque ninguno de nosotros
somos totalmente inmune al pecado. ¿O sí? Desde luego que no.

En la Biblia hay un proceso claramente establecido en cuanto a la


disciplina en la Iglesia, ya hemos hablado de esto en anteriores
ocasiones y no lo vamos a repetir. Para aquellos que lo deseen
pueden meditar sobre el tema profundizando en Mateo 18.15-18.

En Gálatas 6.1 nos está diciendo: no sea que tú también seas


tentado. De modo que nos recuerda, sin mencionarla, la regla de
oro que encontramos en Mateo 7.12 Así que, todas las cosas que
queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced
vosotros con ellos; porque esto es la ley y los profetas.

No obstante, todos los extremos son malos. Es malo hacer leña


del árbol caído y es malo no corregir a quien lo necesita. ¿No
creen? ¿O es mejor no hacerlo? ¿Debemos, o no, corregirnos unos
a otros? Pablo dice que sí. Pero con espíritu de mansedumbre.

Ahora, bien, hay quienes se les disciplina una y otra, y otra vez y
aún así no cambian sus actitudes, provocando divisiones en el
seno de la iglesia. ¿Qué se debe hacer con estas personas? Éstas
personas deben ser enfrentadas, como el Señor Jesús enseña.

¿No sería falta de amor? De ningún modo. Ejercer la disciplina


con el pecador reincidente no es falta de amor, es obediencia a la
Voluntad de Dios.

La Biblia hace una gran diferencia entre el que peca y el que


practica el pecado. Para mí cuando una persona que ha pecado y
al ser enfrentada lo reconoce, ya no necesita más disciplina. En
749

todo caso necesitarán ayuda para mantenerse alejado del pecado.


La disciplina es para aquellos que no reconocen su propio mal.

Si prestamos atención a Mateo 18.15 Por tanto, si tu hermano


peca contra ti, ve y repréndele estando tú y él solos; si te oyere,
has ganado a tu hermano.

Quiero hacerles un par de preguntas y quiero que pienses bien la


respuesta. Jesús está hablando de alguien que, ¿pecó o no pecó?
Sí, de alguien que pecó.

Fíjense bien en los pasos a dar. ¿Dice el Señor que lo pongamos


en disciplina por haber pecado? No. Dice que le reprendamos a
solas. ¿Qué quiere decir: Si te oyere? Si aceptara la corrección.

En el caso de que no acepte la corrección deberíamos seguir con


los siguientes pasos. Es decir, tomar a dos o tres testigos, etc.
Pero en el caso de que acepte la corrección ¿Qué más hay que
hacer? En todo caso, dar gracias por haber ganado al hermano.
Aceptar su arrepentimiento y recibir al hermano.

Repito: ¿Hay que ponerlo en disciplina por haber pecado? De


ningún modo. Cuando una persona reconoce que pecó y se
arrepiente, ya no hay más que hacer que restaurarle.

Desgraciadamente, en muchas congregaciones, parece gustarles


vapulear a los pecadores aunque éstos se hubieren arrepentido.
Como si de un deporte se tratara, les gusta ponerlo delante y
golpearlos como si fueran un saco de boxeo. Eso no está bien.

¿Por qué ocurre entonces estas cosas en la Iglesia de Cristo?


Porque es más fácil ver la paja en el ojo ajeno que en el propio.
Mateo 7.1-6. Disfrutamos hablando mal de los demás, cuando
nuestros pecados son tan grandes o más que los de ellos. ¿Creen
que eso es correcto? No. Eso no está bien. No en la Iglesia de
Cristo.
750

Cuando vinimos a Dios arrepentidos de nuestros pecados, Dios


nos perdonó y recibió como a hijos. No nos puso en disciplina, a
pesar de que nuestros pecados eran muchos y muy graves. Nos
restauró y transformó.

Todo esto nos enseña que debemos profundizar más en la Palabra


de Dios y no tomarla a la ligera. Pues, en vez de glorificar a Dios
con nuestros hechos, podemos estar profanando su Santo Nombre.

La debilidad humana, sumada a la corriente de este mundo que


nos distrae, muchas veces provoca que no le demos importancia
al peligro de vivir sin examinarnos a nosotros mismos. Sin tener
en cuenta que Cristo vive en nosotros.

¿Verdad que es mucho más fácil examinar a los demás que a uno
mismo?
Díganme: ¿Somos ya perfectos y jamás fallamos? No.
¿Cuándo fue la última vez que examinaste tu vida en la presencia
de Dios?
¿Reconoces tus propios pecados o sólo los de los demás?
¿Lo haces con frecuencia, te examinas a ti mismo o no?
¿Estás seguro de que Cristo vive en ti? ¿Realmente estás en la fe?
¿Crees que es importante o no? Sin la menor duda, lo es.

Si fallamos en esta responsabilidad, nuestra negligencia nos


llevará a alejarnos poco a poco de nuestras responsabilidades para
con Dios y su Iglesia, y finalmente caeremos en debilidad o
hipocresía religiosa.

¿Qué es la debilidad o hipocresía religiosa? ¿Qué la caracteriza?


Se caracteriza por no orar, no rendir culto a Dios, desobedecer el
mensaje de la Escritura y alejarse de los demás creyentes. Viendo
el pecado en los demás, pero no en uno mismo.

La hipocresía religiosa suele manifestarse en un legalismo que


exige a los demás lo que el religioso mismo no está dispuesto, ni
puede aunque quisiera, hacer.
751

Hay una enorme diferencia entre alejarse de los falsos creyentes,


a hacerlo de aquellos que son auténticos cristianos y cuyas vidas
son un reto para nosotros.

Es muy triste ver en la iglesia a personas que descuidan la


práctica de la espiritualidad, para ir abandonando con el tiempo la
fe. Por lo cual está escrita la advertencia de Hebreos 3.12-13
Mirad, hermanos, que no haya en ninguno de vosotros corazón
malo de incredulidad para apartarse del Dios vivo; 13antes
exhortaos los unos a los otros cada día, entre tanto que se dice:
Hoy; para que ninguno de vosotros se endurezca por el engaño
del pecado.

Si no hubiera posibilidad de apartarse del Dios vivo, ¿Sería


necesaria esta advertencia? Ciertamente no. ¿Te has aparatado
alguna vez de Dios?
¿Te estás apartando ahora?
¿Sabes que el pecado te endurece y engaña?

Sigamos, pues, con Hebreos 4.1 Temamos, pues, no sea que


permaneciendo aún la promesa de entrar en su reposo, alguno de
vosotros parezca no haberlo alcanzado.

Innumerables cristianos se alejan gradualmente del Señor y,


después de un tiempo, dejan de tener una relación con él. Los
calvinistas se consuelan diciendo: Nunca fueron verdaderos
cristianos. Aunque esa postura no soporta el más mínimo examen
bíblico.

Todo creyente debe responder a la pregunta en cuanto a si se


encuentra en la fe o no. Y si se encuentra en la fe, si es la de
Cristo u otra cualquiera.

Ahora bien, ¿Qué significa estar en la fe de Jesús?


¿Cómo nos debemos probar a nosotros mismos?
Debo asegurarme de que:
Rechazo el pecado, las obras de la carne y del maligno.
Ofrezco mi corazón y mi vida a Dios con sinceridad;
752

Dedico mi vida a ser su fiel servidor.


Pertenezco a Cristo en esta vida y la venidera. Por lo cual deseo
estar eternamente con Jesús.

6. En este pasaje Pablo expresa su esperanza de que, al


examinarse a sí mismos, los corintios puedan reconocer que él no
estaba reprobado, es decir, rechazado por Dios. No en vano, ellos
habían nacido de su ministerio, de modo que si Pablo estaba
reprobado, también ellos lo hubieran estado. Pero si ellos son
verdaderos cristianos, su apostolado también es verdadero.

Si ellos estaban en la fe de Cristo, es porque Pablo les había


llevado hasta ella, por lo cual, no podía caber duda en cuanto a
que su apostolado era del Señor.

Los corintios estaban acorralados. Al poner en duda la validez de


su apostolado, ellos, como iglesia, perdían su validez como una
comunidad de fe porque él les llevó a Cristo.

Esta es la tercera vez que Pablo se vale de los mismos corintios


como evidencia de la autenticidad de su ministerio:

1Corintios 9.2 Si para otros no soy apóstol, para vosotros


ciertamente lo soy; porque el sello de mi apostolado sois vosotros
en el Señor.

2Corintios 3.2-3 Nuestras cartas sois vosotros, escritas en


nuestros corazones, conocidas y leídas por todos los hombres;
3
siendo manifiesto que sois carta de Cristo expedida por
nosotros, escrita no con tinta, sino con el Espíritu del Dios vivo;
no en tablas de piedra, sino en tablas de carne del corazón.

Es fácil aparentar ser un verdadero cristiano, pero si engañamos a


alguien, en realidad nos estamos engañando también a nosotros
mismos. Pues, a Dios nadie le engaña, y si tu fe no es verdadera,
entonces te quedarás sin participar de la gloria de Cristo. De
modo que nos conviene examinarnos y ser sinceros con nosotros
mismos.
753

Como está escrito en 1Corintios 11.31 Si, pues, nos


examinásemos a nosotros mismos, no seríamos juzgados.

7. La aclaración de Pablo en este verso despeja toda clase de


duda sobre la auténtica motivación por la cual expresa su deseo
de que no hagan nada malo.

¿Cuál es la preocupación de Pablo? Él no está preocupado por sí


mismo sino que, su sincero interés es por el bienestar de los
mismos corintios. Pablo siempre había buscado el bien espiritual
de los corintios. Por eso en este verso les recuerda que ora por
ellos.

¿Era raro esto en Pablo? De ningún modo, continuamente Pablo


oraba por los creyentes. Este compromiso de Pablo con aquellos a
quienes había predicado el evangelio lo mostraba por medio de su
continua oración a Dios por ellos.

Romanos 1.9 Porque testigo me es Dios, a quien sirvo en mi


espíritu en el evangelio de su Hijo, de que sin cesar hago
mención de vosotros siempre en mis oraciones.

Filipenses 1.3-5 Doy gracias a mi Dios siempre que me acuerdo


de vosotros, 4siempre en todas mis oraciones rogando con gozo
por todos vosotros, 5por vuestra comunión en el evangelio, desde
el primer día hasta ahora.

¿Sueles orar por tus hermanos en Cristo? ¿Te gozas cuando oras
por tus hermanos, o lo haces como una obligación pesada? Todos
debiéramos orar los unos por los otros. ¿No creen? ¿Por qué?
Porque de ese modo nos estaríamos ayudando mutuamente. Pablo
lo hacía.

1Tesalonicenses 1.2-3 Damos siempre gracias a Dios por todos


vosotros, haciendo memoria de vosotros en nuestras oraciones,
3
acordándonos sin cesar delante del Dios y Padre nuestro de la
754

obra de vuestra fe, del trabajo de vuestro amor y de vuestra


constancia en la esperanza en nuestro Señor Jesucristo.

¿De qué te acuerdas cuando oras por tus hermanos?


¿Te acuerdas de la obra de su fe o de su falta de la misma?
¿De su trabajo de amor o de sus fallos?
¿De su constancia o de su falta de ella?

Nos quedamos en el verso 7 hablando de la importancia de la


oración mutua. La necesidad de orar los unos por los otros, y
cómo eso bendice a la Iglesia. Porque nos necesitamos los unos a
los otros. ¿O no? Sin la menor duda.

Cuando tienes un problema y sabes que hay personas que están


orando por ti, el problema parece menor. Es un gozo y una
tranquilidad saber que importas a otros. La Iglesia es una
comunidad, una familia. La familia de Dios. Debemos
preocuparnos los unos por los otros.

2Timoteo 1.3 Doy gracias a Dios, al cual sirvo desde mis


mayores con limpia conciencia, de que sin cesar me acuerdo de ti
en mis oraciones noche y día.

Filemón 4 Doy gracias a mi Dios, haciendo siempre memoria de


ti en mis oraciones.

Cuando oramos podemos hacerlo de dos formas: De manera


egoísta pensando sólo en nosotros mismos y nuestros intereses, o
de manera generosa pensando también en los demás. Pablo no era
egoísta.

En esta ocasión ruega a Dios para que los corintios no hagan nada
malo; y aclara que no lo hace porque en ese caso él quedaría mal,
sino simplemente para que hagan lo bueno. Aunque pudiera
parecer que él no hubiera hecho bien su trabajo.

Como hemos dicho, la preocupación de Pablo no es por su propio


prestigio, sino por el bien de los corintios. Quiere que hagan lo
755

correcto, que reflexionen y abandonen su postura contra él, de


manera que no le obliguen a usar la disciplina que dijo que estaba
dispuesto a ejercer sin indulgencia.

Todo padre quiere que sus hijos se comporten debidamente


porque sabe que si sus hijos se portan mal, ellos quedan mal. Sin
embargo, la preocupación de Pablo no era por sí mismo, sino por
los corintios. Su oración no tenía ningún fin egoísta.

El testimonio en juego no era en realidad el del apóstol, sino el de


los corintios. Pablo sabía que si los corintios no cambiaban su
actitud saldrían perdiendo ellos, no él. En todo esto podemos ver
la preocupación pastoral del apóstol por el bienestar de sus
hermanos corintios. Anhelaba verlos en comunión con Dios y con
él mismo.

El hablar de aparecer aprobados, es una clara referencia al


escrutinio que Dios realizará en su juicio de todos nosotros.
Porque todos compareceremos ante el Tribunal de Cristo.
Romanos 14.10.

Es Dios quien debe aprobar o reprobar a los cristianos. Pablo


manifiesta su preocupación por los corintios. Por esa razón, como
un padre a sus hijos, les advierte antes de tener que ejercer la
disciplina, o sean presentados delante de Dios.

8. Porque nada podemos contra la verdad, sino por la verdad.


Pablo, al hablar de la verdad, no está usando aquí ningún tipo de
expresión figurada. Cuando habla de la verdad lo hace de manera
absolutamente literal y práctica.

Les está llamando a no dejarse engañar por lo que es aparente,


sino a buscar la verdad en todas sus acciones, y en la de los
demás. Los corintios, y con ellos todos los cristianos, somos
llamados a ser capaces de observarlo todo a la luz de la verdad. A
no dejarnos engañar por las apariencias.
756

Los verdaderos siervos de Dios promueven la verdad en todo


tiempo, mientras que los falsos siervos siempre están alterándola
en su propio beneficio. Eso estaba pasando en Corinto, de ahí la
advertencia de Pablo en este pasaje.

Pablo ya les había advertido que sus adversarios proclamaban


otro Jesús que no es el bíblico, y que ellos les estaban tolerando.
Como hoy pasa en muchos lugares, en que se predican falsos
evangelios y los creyentes por falta de conocimiento de la verdad
y madurez espiritual los toleran.

Todos hemos sido testigos de la multitud de herejías que se están


predicando en muchos grupos religiosos y cómo la gente gritan
“amén” sin el menor discernimiento.

Defender la verdad requiere de valor en medio de un mundo que


ama mucho más la mentira. Los cristianos somos llamados a
entender que nada podemos contra la verdad. Todo el que luche
contra la verdad perderá la batalla.

En multitud de ocasiones nos vemos atacados por gente mala que


no duda en usar de la mentira para hacernos daño. Pero tarde o
temprano Dios hará relucir la verdad como la luz del sol y
descubrirá la vergüenza de quienes la atacaron y prefirieron la
mentira.

Salmo 37.5-6 Encomienda a Jehová tu camino, Y confía en él; y


él hará. 6Exhibirá tu justicia como la luz, Y tu derecho como el
mediodía.

Esto es algo que yo he podido comprobar en numerosas


ocasiones. Esta es una alentadora que te sostiene en los momentos
difíciles. Porque cuando quienes te atacan son gente poderosa y
usan la mentira sin escrúpulos para hacerte daño, corres el riesgo
de perder la esperanza.

Gracias a Dios la Escritura nos consuela con pasajes como este en


el que se nos declara que nada se puede contra la verdad. Cuando
757

dejamos que sea Dios quien nos defienda, tarde o temprano todo
sale a la luz, y los malos son castigados.

Todo este pasaje hay que entenderlo en el contexto de lo que


estaba sucediendo en Corinto. Las mentiras que se estaban
lanzando contra el apóstol serían desenmascaradas. La segunda
parte de este verso 8 dice: Sino por la verdad.

Porque la verdad debe ser defendida. Aquellos que se involucran


en la mentira serán castigados, porque la Palabra de Dios es clara
al afirmar en Proverbios 12.22: Los labios mentirosos son
abominación a Jehová; Pero los que hacen verdad son su
contentamiento.

Apocalipsis 21.7-8 El que venciere heredará todas las cosas, y yo


seré su Dios, y él será mi hijo. 8Pero los cobardes e incrédulos,
los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los
idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que
arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda.

Buscar y defender la verdad puede involucrar confrontación,


corrección y disciplina. Defender la verdad es una tarea que no lo
entusiasma, pero que quizá deba hacer.

Teniendo en cuenta que estaba dispuesto a ir y aclarar todas las


cosas, hay que tener en cuenta el verso 1: Esta es la tercera vez
que voy a vosotros. Por boca de dos o de tres testigos se decidirá
todo asunto. Pablo estaba seguro de que la verdad prevalecería.

Cuando tenemos esta certeza, no nos importa tanto lo que los


mentirosos puedan decir. Algunos pierden la paz cuando se
enteran de que están mintiendo contra él. Pero si sabes que al fin
la verdad se sabrá, descansas en Dios, hasta el momento en que Él
te hará justicia.

Salmo 37.7-9 Guarda silencio ante Jehová, y espera en él. No te


alteres con motivo del que prospera en su camino, Por el hombre
que hace maldades. 8Deja la ira, y desecha el enojo; No te excites
758

en manera alguna a hacer lo malo. 9Porque los malignos serán


destruidos, Pero los que esperan en Jehová, ellos heredarán la
tierra.

A los corintios les tocaba, como a los cristianos de hoy en día nos
toca, asegurarnos de que se nos está predicando y enseñando la
verdad de Dios. Porque nada podemos contra la verdad, sino por
la verdad.

Aquí vemos la exhortación de Pablo que se parece mucho a la de


Jeremías 29.8-9 Porque así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios
de Israel: No os engañen vuestros profetas que están entre
vosotros, ni vuestros adivinos; ni atendáis a los sueños que
soñáis. 9Porque falsamente os profetizan ellos en mi nombre; no
los envié, ha dicho Jehová.

9. De nuevo descubrimos el uso que el apóstol hace del sarcasmo.


Pretender interpretar estas palabras de manera literal violentaría la
correcta interpretación del pasaje.

Tanto este versículo como el anterior están dando respuesta al


verso 7. De modo que la primera parte del verso 7 queda
respondida por Pablo en el 8 y la segunda en este verso 9.

Pablo se goza de la verdad porque el amor no se goza de la


injusticia, mas se goza de la verdad, como enseña en 1Corintios
13.6.

Los falsos apóstoles habían hablado de la debilidad de Pablo para


exaltarse así mismos y su supuesta fortaleza, frente a la del
apóstol. En realidad no hay mayor expresión de debilidad que la
de quien alardea de ser fuerte.

El orgullo y la soberbia son actitudes que no le sientan bien a un


verdadero cristiano. Sabemos que tales actitudes no ayudan a
seguir la paz con todos, ni la santidad. Por ese motivo debemos
rechazarlas de nuestra vida.
759

La debilidad de Pablo y la fortaleza de los corintios es motivo de


alegría para Pablo, porque la fortaleza de ellos demuestra que él
es un apóstol por medio del cual Cristo habla: Ver el verso 3. Y la
fortaleza espiritual de ellos habla mejor de lo que su propia
fortaleza podría hacerlo.

Así, que, Pablo se permite la licencia de darles un mejor ejemplo


del que sus acusadores estaban dando, al decirles a los corintios
que aun oraba por la perfección de ellos, en la confianza de que
Dios podía terminar la obra que había comenzado en cada uno.

Estamos en el verso 9, terminando la Segunda Epístola del


apóstol Pablo a los Corintios. Aquí vemos cómo Pablo ora por la
perfección de los corintios.

Que los corintios estaban andando mal quedó en evidencia en


2Corinitos 12.20-21, razón por la cual Pablo oraba a fin de que
Dios cambiara aquellas actitudes. Porque eran malas.

Pablo entiende la necesidad de la oración a favor de los corintios


como algo que podía cambiar la actitud de sus corazones. Algo
que podía cambiar la situación de aquella congregación y volverla
al buen camino. Al camino de la perfección.

¿Qué es la perfección? La perfección no se refiere a la ausencia


de pecado. No tiene que ver con no fallar. Aunque así la
interpretan muchas personas.

¿Es posible para el ser humano ese tipo de perfección? Es decir,


que no falle jamás? Desde luego que no. Somos seres falibles.
Conocemos el pasaje que dice: Ciertamente no hay hombre justo
en la tierra, que haga el bien y nunca peque. Eclesiastés 7.20.

La perfección tiene que ver con la condición de estar sometidos a


la voluntad de Dios y dispuestos para servir. Algunas personas no
quieren servir a Dios ni a sus hermanos hasta que alcancen cierto
grado de perfección, lo cual les impide servir a Dios.
760

La perfección siempre es fruto de un proceso mediante el cual


Dios nos transforma para que seamos semejantes a Su Hijo
Jesucristo. Ese es el fin, la meta. Romanos 8.29.

La palabra que se traduce por perfección es muy interesante,


porque significa equiparse por completo. Los corintios habían
estado fallando, controlados temporalmente por actitudes de
rebeldía y necesitaban remediar la situación, para ser útiles en las
manos de Dios.

¿Quieres ser útil para Dios? Es tu decisión. Puedes ser útil o ¿Qué
sería lo contrario de útil? Inútil. ¿Qué deseas ser? Yo prefiero ser
útil que inútil. Por esa razón, aún reconociendo que no soy
perfecto, me someto a la voluntad de Dios y me dispongo a
servirle a Él y a mis hermanos.

En el proceso de someterme a Dios y tener la disposición de


servir, es que Dios me va perfeccionando cada día. ¿Tú quieres
ser perfeccionado? La mejor manera es someternos a Dios y
disponernos al servicio.

Esta palabra que se traduce por perfección tiene la misma raíz que
la que aparece en Mateo 4.21: Pasando de allí, vio a otros dos
hermanos, Jacobo hijo de Zebedeo, y Juan su hermano, en la
barca con Zebedeo su padre, que remendaban sus redes; y los
llamó.

Esta palabra: remendaban, significa completar, hacer apto,


constituir, perfeccionar, preparar, remendar, restaurar, unir. Es
muy interesante meditar en cada uno de estos significados. Porque
al hacerlo descubrimos que Dios quiere hacer esto con nosotros.
Es decir, Dios quiere perfeccionarnos mediante estas acciones.

Dios quiere completarnos, hacernos aptos, constituirnos,


perfeccionarnos, prepararnos, remendarnos, restaurarnos, unirnos.
Él no espera a que lo hagamos por nosotros mismos, porque nadie
puede hacerlo por sí solo. ¿O sí? ¿Qué piensan? ¿Puede el ser
761

humano perfeccionarse a sí mismo sin la ayuda de Dios? Puede


que cambie algo, pero no la perfección.

Él nos llama para que nos pongamos en sus manos y Él pueda


hacerlo en nosotros. Él es el Artífice que modela nuestras vidas,
como el alfarero al barro. Como ya vimos, su propósito es
hacernos semejantes a Cristo.

Este término también se usa en Gálatas 6.1 Hermanos, si alguno


fuere sorprendido en alguna falta, vosotros que sois espirituales,
restauradle con espíritu de mansedumbre, considerándote a ti
mismo, no sea que tú también seas tentado.

Restauradle. Aquí está el término perfeccionar. Para que seamos


perfeccionados debemos ser corregidos, restaurados. Lo
interesante de este pasaje es que podemos participar en el
perfeccionamiento del hermano.

Tú puedes ayudarme a perfeccionarme y yo puedo ayudarte a


perfeccionarte a ti. Nos podemos ayudar mutuamente, cuando nos
corregimos con amor y mansedumbre. Es una nueva forma de ver
este pasaje.

¿Cómo reaccionas cuando alguien te corrige? Porque para que


realmente seamos perfeccionados debemos procurar reaccionar
con buena actitud.

En Efesios 4.11-16 el mismo término se usa como preparar. Así


que remendar, restaurar, preparar. Siempre encierra la idea de que
aún nos falta algo, para ser perfectos. La idea principal es hacer
apto, capacitar.

Se trata de que para ser perfectos, Dios ha puesto los pastores y


maestros que nos ayudan en la tarea de ser mejores personas y
mejores discípulos de Cristo.

La semana pasada hablábamos de la oración de Pablo por la


perfección de los corintios. Vimos que la palabra que se traduce
762

por perfección tiene varios significados y estuvimos viendo


algunos, ¿Los recuerdan? Remendar, completar, hacer apto,
constituir, perfeccionar, restaurar, preparar, unir.

Vimos en Efesios 4.11 que Dios constituyó el ministerio pastoral


para enseñar, preparar, a los creyentes. Comenté que actualmente
se está levantando todo un movimiento que rechaza el ministerio
pastoral.

Algo que no deja de ser paradójico puesto que ha sido Dios


mismo quien lo ha instituido.

Algunos discuten si debe haber uno o más pastores o ancianos en


las congregaciones, lo cual no es importante. De lo que no cabe
duda es que el ministerio pastoral sigue siendo necesario.

Como está escrito en Efesios 4.13: hasta que todos lleguemos a la


unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón
perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo.

En definitiva Pablo está orando para que los corintios tomaran las
medidas necesarias para volver a ser útiles en el Señor, cuando
sean perfeccionados conforme a la voluntad de Dios.

Porque el mundo necesita una Iglesia útil.


¿Qué te falta a ti?
¿Qué necesitas para estar plenamente capacitado para ser útil en
las manos de Dios?
¿Quieres ser perfeccionado?
¿Dejarás que te corrijan?
Los corintios lo necesitaban ¿Y tú, lo necesitas?
¿Necesitas preparación?

En muchas congregaciones los cristianos sufren de desnutrición.


Se mueren de hambre de conocimiento. Queriendo prepararse, sus
pastores no son capaces de hacerlo. Unos por ignorancia y otros
por egoísmo o miedo a que le quiten su lugar.
763

¿Para qué dice la Escritura que Dios constituyó el ministerio


pastoral? A fin de perfeccionar a los santos. Recuerden: Preparar,
enseñar.

Necesitamos ser lo suficientemente humildes como para


reconocer nuestra necesidad de aprender. Dios nos ayude para que
todos seamos perfeccionados. Entendiendo, por supuesto, que se
trata de un proceso que sólo termina cuando lleguemos a la
presencia de Dios.

Es decir, que siempre vamos a estar en el proceso de


perfeccionarnos cada día más. Como está escrito en Gálatas 6.9
No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo
segaremos, si no desmayamos.

Por otro lado, nos encontramos congregaciones en las que los


pastores quieren enseñar y los creyentes no se disponen. Gracias a
Dios, en esta congregación hay muchos que quieren conocer la
Escritura y por eso tenemos una buena asistencia al estudio a
mitad de semana.

Pero el conocimiento no es sólo para ser almacenado, sino para


ser compartido. La Iglesia universal necesita de hombres y
mujeres conocedores de la Palabra de Dios para que les ministre
la verdad.

Como decía, en muchas congregaciones no hay la preocupación


que había en el corazón del apóstol por la preparación o
perfección de los hermanos. Han dejado de ejercer disciplina y no
se tiene en cuenta que las personas necesitamos perfeccionarnos.
¿Por qué creen que puede suceder esto? ¿Por qué motivo en
algunas congregaciones se ha dejado de disciplinar y corregir el
mal?

Por temor a perder a los miembros o ver las ofrendas menguar.


¿Cuáles pueden ser las consecuencias de esto? Cuando esto
ocurre la iglesia corre un terrible peligro de desviarse de la
764

verdad. ¿Es posible que eso suceda? Sin duda. Muchas han caído
en eso.

Si tenemos un hueso roto y no lo componemos todo el cuerpo lo


sufrirá; ignorarlo no nos hará bien. Del mismo modo, si sabemos
que no somos perfectos, reconozcámoslo y ayudémonos los unos
a los otros a ser mejores cada día.

Si queremos ser útiles en las manos de Dios, debemos estar


dispuestos y preparados para servir. La Iglesia que no disciplina
es como la red que estando rota no sirve para pescar. Necesita ser
remendada.

Como el que quiere enseñar sin estar suficientemente preparado,


¿A qué lleva eso? Al error y la locura. ¿Han visto algunas cosas
que están sucediendo en algunos grupos religiosos? ¿No son
verdaderas locuras? Gente revolcándose por los suelos, gritando y
corriendo de un lado para otro, etc.

10. Llegando al final de su epístola aclara, una vez más, la razón


de su carta. ¿Cuál es? No quiere tener que corregirles cuando les
visite, razón por la cual lo hace por escrito, para que tengan
tiempo de meditar todas las cosas antes de que él llegue de nuevo
a Corinto. Para no usar de severidad cuando esté presente.

La alusión a la autoridad recibida del mismo Señor es la


explicación del porqué estaba dispuesto a corregirlos y a no ser
indulgente con el pecado. El Señor mismo le había dado autoridad
para edificación. Aunque también aclara que no para destrucción.

Algunas personas inmaduras no saben manejar bien la autoridad y


cuando son puestos en responsabilidad, acaban abusando de su
posición, destruyendo en vez de edificar. Ese tipo de inmadurez
abunda en las iglesias, especialmente evangélicas. Aunque
también en las católicas y sobre todo en las sectas.

¿Han observado a los niños cuando juegan entre ellos? Bueno,


eso era en el siglo pasado cuando aún no tenían tabletas digitales
765

y teléfonos móviles de última generación. Pero cuando los niños


jugaban entre ellos podías ver cómo imitaban a los adultos.

Se ponían en actitud autoritaria, mandando y dando órdenes a


todo el mundo. Esto es porque de algún modo ellos nos observan
y así es como nos ven. Usando mal la autoridad.

Mucha gente no soporta ningún tipo de autoridad, son anarquistas


de corazón. Pero sin autoridad, sin normas, el pueblo se
desenfrena y reina el caos y la ley del más fuerte, llamada la ley
de la jungla.

Pablo, escribiendo a Timoteo le dijo en 1Timoteo 3.14-15: Esto te


escribo, aunque tengo la esperanza de ir pronto a verte, 15para
que si tardo, sepas cómo debes conducirte en la casa de Dios, que
es la iglesia del Dios viviente, columna y baluarte de la verdad.

Por eso nos ha sido dada la Palabra de Dios, que contiene normas.
Para que sepamos cómo debemos conducirnos.

Proverbios 28.19 Sin profecía el pueblo se desenfrena; Mas el


que guarda la ley es bienaventurado.

La ley y las normas son necesarias. Aunque también lo es saber


distinguir entre ellas. No confundir las leyes de los hombres con
los mandamientos de Dios, o con las normas sociales.

¿Podrían poner un ejemplo de confusión en ese sentido? Por


ejemplo, una ley humana que se confunde con una ley de Dios:
La ley seca.

Otra, que los no bautizados no participen de la comunión.

Un ejemplo de norma social que se confunde con un


mandamiento divino:
El velo en la mujer.

Otra, que sin la ceremonia matrimonial, no se está casado.


766

Dios mismo ha sido quien ha puesto normas que regulen nuestra


convivencia, tanto a nivel social como a nivel de comunidad
cristiana. Pero debemos saber discernir entre los mandamientos
de Dios y los humanos. Un error en ese sentido lleva a la división.

La autoridad, en sí misma no es mala. Dios la ha instituido y nos


exhorta a obedecerla. Como está escrito en Romanos 13.1-3:

Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no


hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han
sido establecidas. 2De modo que quien se opone a la autoridad, a
lo establecido por Dios resiste; y los que resisten, acarrean
condenación para sí mismos. 3Porque los magistrados no están
para infundir temor al que hace el bien, sino al malo. ¿Quieres,
pues, no temer la autoridad? Haz lo bueno, y tendrás alabanza de
ella.

Terminamos la semana pasada en 13.10 donde Pablo habla de la


autoridad que El Señor le ha dado y leyendo Romanos 13 sobre la
autoridad. Seguimos donde lo dejamos.

Todos hemos sido testigos, y a veces víctimas, de algún tipo de


abuso de autoridad. ¿Significa eso que la autoridad debe ser
rechazada? De ningún modo. No al menos, la autoridad legítima.

El abuso está mal, pero no debe llevarnos a rechazar la autoridad


misma, sino el abuso de ella.

Es importante aclarar que todo tipo de abuso, incluido el


espiritual es pecado. Especialmente el abuso espiritual. ¿Están de
acuerdo? Sin duda.

¿Es correcto que un jefe presione a sus empleados para que


trabajen más horas aunque no se las pague? Por supuesto que no
es correcto.
767

Hay algunos empresarios que se consideran cristianos y aun así


abusan de sus empleados. ¿Conocen algunos? Actualmente con la
excusa de la falsa crisis, muchos están esclavizando a sus
empleados. Para esos quiero leerles un pasaje de las Escrituras
Sagradas.

Jeremías 22.13 ¡Ay del que edifica su casa sin justicia, y sus salas
sin equidad, sirviéndose de su prójimo de balde, y no dándole el
salario de su trabajo!

¿Qué significa esta expresión con la que comienza el profeta?


¡Ay! Significa que se dolerá del resultado de su pecado. Pues,
Dios le castigará sobradamente por haber abusado de su
autoridad.

¿Se librará alguno de sus fechorías? Desde luego que no. Puede
que aquí disfrute del resultado de sus robos. Pero tarde o
temprano pagará lo que hizo, con creces.

De todos los abusos, el espiritual es el peor de ellos, ¿Sabrías


explicar por qué? Porque utilizan a Dios mismo como
instrumento de engaño. ¿Respaldará Dios al que abusa de su
posición o autoridad? Desde luego que no. Todos tendremos que
rendir cuentas delante de Dios.

Éstos, que son abusadores, deberían tener en cuenta las palabras


de Dios en Eclesiastés 5.8-9 Si opresión de pobres y perversión
de derecho y de justicia vieres en la provincia, no te maravilles
de ello; porque sobre el alto vigila otro más alto, y uno más alto
está sobre ellos.

¿Qué significa esto? Que todos cuantos están en autoridad serán


juzgados por el Altísimo. Aquel que está por encima de todos. De
modo que debemos cuidar de cómo usamos nuestra autoridad.

No hay nada nuevo en esto del abuso espiritual. Jeremías ya lo


denunciaba, cuando Dios habla por medio del profeta, contra
768

aquellos pastores que abusan de su pueblo, pretendiendo


bendecirlo.

En el NT se habla de lobos rapaces, de asalariados. La historia de


la Iglesia nos ilustra sobradamente sobre el problema. La reforma
es la historia de la lucha contra un poder abusivo por parte de una
casta religiosa que imponía cargas injustas a la gente, vendiendo
supuestos beneficios que ellos no podían dar; engañando.

Como hoy, también entonces se vendían las bendiciones de Dios


a cambio de unas monedas. En realidad no ha cambiado mucho.

Los abusadores, consumidos por la ambición, convencen a la


gente de que su poder es divino, cuando lo que buscan es su
propio beneficio. Es contra éstos, que Jesús también se enfrenta,
cuando advierte no sólo sobre los fariseos, sino contra aquellos
lobos rapaces que se presentan como siervos ungidos de Dios.

La idea del ministerio es a veces, tan personal, que algunos no


pierden la perspectiva y acaban por no saber separar la voluntad
de Dios de sus propios deseos y pensamientos.

Abusan espiritualmente de otros, cuando en vez de servir,


edificar, o preparar al pueblo de Dios, para que sea más libre para
hacer la voluntad de Dios, lo hacen más dependiente de ellos. Lo
cual es un método claramente sectario.

¿Saben cuál es la causa principal del abuso espiritual? Lo hemos


repetido hasta la saciedad en este púlpito, es la ignorancia de la
Sagrada Escritura. Eso hace que la gente acabe siendo víctima de
los abusadores que se enriquecen injustamente, mientras el pueblo
muere lejos de Dios.

Nadie abusa espiritualmente de quienes conocen la verdad


revelada en la Biblia. La Biblia nos enseña y previene contra los
abusadores.
769

Ezequiel 34.1-16 Vino a mí palabra de Jehová, diciendo: 2Hijo de


hombre, profetiza contra los pastores de Israel; profetiza, y di a
los pastores: Así ha dicho Jehová el Señor: ¡Ay de los pastores de
Israel, que se apacientan a sí mismos! ¿No apacientan los
pastores a los rebaños? 3Coméis la grosura, y os vestís de la
lana; la engordada degolláis, mas no apacentáis a las ovejas. 4No
fortalecisteis las débiles, ni curasteis la enferma; no vendasteis la
perniquebrada, no volvisteis al redil la descarriada, ni buscasteis
la perdida, sino que os habéis enseñoreado de ellas con dureza y
con violencia. 5Y andan errantes por falta de pastor, y son presa
de todas las fieras del campo, y se han dispersado. 6Anduvieron
perdidas mis ovejas por todos los montes, y en todo collado alto;
y en toda la faz de la tierra fueron esparcidas mis ovejas, y no
hubo quien las buscase, ni quien preguntase por ellas. 7Por tanto,
pastores, oíd palabra de Jehová: 8Vivo yo, ha dicho Jehová el
Señor, que por cuanto mi rebaño fue para ser robado, y mis
ovejas fueron para ser presa de todas las fieras del campo, sin
pastor; ni mis pastores buscaron mis ovejas, sino que los pastores
se apacentaron a sí mismos, y no apacentaron mis ovejas; 9por
tanto, oh pastores, oíd palabra de Jehová. 10Así ha dicho Jehová
el Señor: He aquí, yo estoy contra los pastores; y demandaré mis
ovejas de su mano, y les haré dejar de apacentar las ovejas; ni
los pastores se apacentarán más a sí mismos, pues yo libraré mis
ovejas de sus bocas, y no les serán más por comida. 11Porque así
ha dicho Jehová el Señor: He aquí yo, yo mismo iré a buscar mis
ovejas, y las reconoceré. 12Como reconoce su rebaño el pastor el
día que está en medio de sus ovejas esparcidas, así reconoceré
mis ovejas, y las libraré de todos los lugares en que fueron
esparcidas el día del nublado y de la oscuridad. 13Y yo las sacaré
de los pueblos, y las juntaré de las tierras; las traeré a su propia
tierra, y las apacentaré en los montes de Israel, por las riberas, y
en todos los lugares habitados del país. 14En buenos pastos las
apacentaré, y en los altos montes de Israel estará su aprisco; allí
dormirán en buen redil, y en pastos suculentos serán apacentadas
sobre los montes de Israel. 15Yo apacentaré mis ovejas, y yo les
daré aprisco, dice Jehová el Señor. 16Yo buscaré la perdida, y
haré volver al redil la descarriada; vendaré la perniquebrada, y
770

fortaleceré la débil; mas a la engordada y a la fuerte destruiré;


las apacentaré con justicia.

Si prestamos atención este texto nos ayuda a identificar a aquellos


falsos pastores que son abusadores.

Verso 2. Se apacientan a sí mismos. Egocentrismo. Éstos no


sirven sino que se sirven (3).

Verso 4. Se enseñorean de las ovejas. Manipulación.

Interpretan su posición como de poder no de servicio. Mateo


20.25-28. La idea de una iglesia jerarquizada no es bíblica.

Ahora, bien, hay que aclarar que el hecho de que alguien use mal
la autoridad no significa que la autoridad en sí misma sea mala,
sino que es malo quien abusa de ella.

1Pedro 5.1-4 dice: Ruego a los ancianos que están entre vosotros,
yo anciano también con ellos, y testigo de los padecimientos de
Cristo, que soy también participante de la gloria que será
revelada: 2Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros,
cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por
ganancia deshonesta, sino con ánimo pronto; 3no como teniendo
señorío sobre los que están a vuestro cuidado, sino siendo
ejemplos de la grey. 4Y cuando aparezca el Príncipe de los
pastores, vosotros recibiréis la corona incorruptible de gloria.

Así como algunos recibirán coronas de gloria, otros recibirán el


castigo que haya merecido su mal proceder, cuando abusaron de
su autoridad.

¿Abusaba el apóstol pablo de su autoridad? De ningún modo.


Pablo era un hombre temeroso de Dios, por eso entiende que la
autoridad que el Señor le ha dado es para edificación y no para
destrucción.
771

¡Qué maravilloso ejemplo para los siervos del siglo XXI! Para
nosotros que vivimos hoy, tan lejos de aquel primer siglo, pero al
mismo tiempo, en la misma fe y verdad establecida por Dios en
Su Palabra.

Todos debiéramos tener esto en cuenta. Porque todos tenemos


cierta cota de autoridad, y por tanto, la capacidad de edificar o de
destruir. El padre sobre los hijos; el encargado sobre sus
compañeros de trabajo; el jefe sobre sus empleados; el pastor
sobre los miembros de su congregación, etc.

Miremos y asegurémonos de estar edificando conforme a la


voluntad de Dios, porque como está escrito en 1Corintios 3.17 Si
alguno destruyere el templo de Dios, Dios le destruirá a él;
porque el templo de Dios, el cual sois vosotros, santo es.

11. Por lo demás. Esta expresión es una fórmula habitual que el


apóstol usa al final de sus cartas como podemos ver en:

Filipenses 3.1 Por lo demás, hermanos, gozaos en el Señor. A mí


no me es molesto el escribiros las mismas cosas, y para vosotros
es seguro.

1Tesalonicenses 4.1 Por lo demás, hermanos, os rogamos y


exhortamos en el Señor Jesús, que de la manera que aprendisteis
de nosotros cómo os conviene conduciros y agradar a Dios, así
abundéis más y más.

2Tesalonicenses 3.10; 2Timoteo 4.8, etc.

Hermanos. Es importante comprobar que al final de la carta, sigue


llamándoles hermanos; una expresión que denota el cariño que
Pablo tenía a aquella congregación que tantos dolores de cabeza
le daba.

Terminando su larga carta, les hace algunas recomendaciones que


conviene analizar, aunque sea brevemente:
772

1.- Tened gozo. ¿Por qué les hace esta recomendación? Esta
expresión también era usada como saludo al encontrarse o
despedirse. Como cuando nosotros decimos. Bendición, o, que
Dios te bendiga.

No obstante, puesto que no está al final del todo, creo más bien
que se trataba de un genuino deseo del apóstol de que tuvieran
gozo. Porque Pablo es consciente de que con su carta ha podido
causarles tristeza, incluso desánimo. Aunque, ¿Creen que esa fue
la intención del apóstol? Desde luego que no.

¿Recuerdan las palabras del autor bíblico? Como está escrito en


Hebreos 12.11 Es verdad que ninguna disciplina al presente
parece ser causa de gozo, sino de tristeza; pero después da fruto
apacible de justicia a los que en ella han sido ejercitados.

Por esto Pablo les recomendó: Tened gozo. Y si se preparaban


para su visita, así podría ser. El tiempo de este verbo griego indica
que el gozo debía seguir formando parte de la vida cristiana.

2.- Perfeccionaos. Ya hablamos antes de la perfección en el verso


anterior. Pero aquí está en su forma reflexiva. Como si les dijera:
Arréglense. Enmienden sus caminos. Ajusten su situación a la
voluntad de Dios para que sean útiles.

3.- Consolaos. Es una expresión que significa rogar, alentar,


amonestar, animar, confortar. De modo que el apóstol les está
diciendo, anímense. Es como cuando les digo: Ánimo valiente;
que no es lo mismo que decirles: Valiente ánimo.

4.- Sed de un mismo sentir. La unanimidad es importante en una


comunidad, especialmente cuando hablamos de una comunidad
cristiana. El problema de la división siempre es una amenaza que
debe ser seriamente valorada y combatida.

Esto es algo a lo que Pablo daba gran importancia en sus cartas.


773

Romanos 12.16 Unánimes entre vosotros; no altivos, sino


asociándoos con los humildes. No seáis sabios en vuestra propia
opinión.

Romanos 15.5-6 Pero el Dios de la paciencia y de la consolación


os dé entre vosotros un mismo sentir según Cristo Jesús, 6para
que unánimes, a una voz, glorifiquéis al Dios y Padre de nuestro
Señor Jesucristo.

5.- Vivid en paz. Esto era especialmente importante en una


congregación como la de Corinto en la que se habían producido
tantos conflictos entre los hermanos, por diferentes motivos.

Toda la Biblia nos exhorta a buscar la paz y seguirla. Salmo


34.14; 1Pedro 3.11.

¿Cuál sería el resultado de seguir estas recomendaciones del


apóstol? Que el Dios de paz y de amor estará con vosotros. Esto
es significativo en una congregación ¿No creen? Puede marcar la
diferencia entre la vida y la muerte; la bendición y la maldición.

12. Saludaos unos a otros con ósculo santo. Esto era un saludo
habitual en algunas culturas de aquel tiempo, como la judía.
Romanos 16.16; 1Corintios 16.20; 1Tesalonicenses 5.26; 1Pedro
5.14, son textos que contiene esta invitación al saludo con ósculo
santo.

Yo me convertí en una congregación en la que todo el mundo


practicaba el beso como saludo. No uno, sino dos.

Sinceramente, en nuestra cultura actual no es algo muy bien visto


que todos los hombres se besen al llegar a la iglesia, o al terminar
el culto. En algunos casos era incómodo.

Pero sobre todo para algunas hermanas a las que al saludarlas


sentían que el ósculo no tenía nada de santo. También es un
problema para algunos que a un montón de hombres estén
besando continuamente a su esposa.
774

Interpretar este pasaje como un mandamiento no sólo es erróneo,


sino que carece de sentido exegético.

Ya que este pasaje es cultural, y no contiene un mandamiento


para todos en todo tiempo, lo importante es que nos saludemos de
manera santa, teniendo en cuenta la cultura en la que vivimos.

13. Pablo se refiere a los hermanos de Macedonia desde donde


estaba escribiendo su carta.

14. Por último, tenemos la bendición apostólica. Una de las más


significativas del Nuevo Testamento, porque incluye a las tres
personas de la Divinidad.

La Divinidad es trina y cada una de las personas participa de las


mismas virtudes, porque no son tres divinidades sino una sola.

Quizás lo más significativo de esta bendición es a quién va


dirigida: Sean con todos vosotros. Pablo desea que la bendición
de Dios llegue a todos los corintios. Aún a aquellos que estaban
siendo tropiezo para el apóstol y su ministerio.

¿Qué nos dice esto? Que Pablo no guardaba rencor en su corazón,


sino que deseaba que la gracia, el amor y la comunión de Dios
alcanzara a todos los miembros de la congregación, no sólo a
aquellos que siempre estuvieron con él.

A pesar del estado lamentable de la congregación de Corinto,


Pablo alberga esperanzas de que si se arrepienten de sus pecados
y se aferran a la fe en Cristo y a Su Palabra, alcanzarán la
restauración espiritual que necesitan y la perfección y santidad a
la que han sido llamados. Ellos y nosotros.

Como está escrito en romanos 15.4: Porque las cosas que se


escribieron antes, para nuestra enseñanza se escribieron, a fin de
que por la paciencia y la consolación de las Escrituras, tengamos
esperanza.
775

De modo que cualquiera que sea la situación espiritual de una


vida, e incluso de una congregación, hay esperanzas de que
alcance el propósito y la bendición de Dios.

No sé que harás tú, ni qué harán los demás, pero sí sé que yo he


tomado la decisión de hacerlo. Sintonizarme con la voluntad de
Dios. Sincronizarme con la Escritura.

Sin embargo, es importante que no nos engañemos a nosotros


mismos. No lo conseguiremos a menos que acudamos cada día a
la presencia de Dios, buscando en Él y no en nosotros, la
sabiduría y el poder necesario para vivir conforme a Su voluntad.

Es importante reconocer la lección que nos da la historia. Pues,


una fuente no canónica, 1Clemente, escrita hacia el año 96 d.C
nos da la triste noticia de que Corinto había vuelto a las andadas.

Finalmente, la congregación de Corinto desapareció, según se


cree en el siglo II.

Pablo hizo su parte. No escatimó ningún esfuerzo para ayudarles


a acercarse a Dios. Pero lo que hacemos los siervos no es todo. Lo
verdaderamente importante es qué haces tú.

Dios nos de sabiduría para que el conocimiento de estas cosas nos


proteja de cometer los errores que los corintios cometieron, y nos
acerque a Dios y Su voluntad.

Es el deseo del Pr. Andrés Medina y de un servidor vuestro, que


hemos dedicado muchas horas de estudio a lo largo de casi tres
años, comenzamos el 16 de abril del 2015, para poder ayudaros a
entender esta carta del apóstol Pablo. Dios permita que no haya
sido en vano.

Aquí termina el estudio de la Segunda Carta del apóstol Pablo a


los Corintios.
776

Pr. Nicolás García


Pr. Andrés Medina

Bibliografía:

Biblia Reina Valera de 1909. Broadman & Holman Publisher,


2004.

Biblia Pastoral Reina Valera de 1960. Sociedades Bíblicas


Unidas, 2008.

Biblia, Biblioteca de Autores Cristianos, 1966.

Biblia de estudio esquematizada, Sociedades Bíblicas Unidas,


2007.

La Biblia al día, Paráfrasis, Living Bibles International, Unilit,


1973.

Biblia La Palabra, El mensaje de Dios para mí, Primera edición


Sociedad Bíblica de España, 2010.

Biblioteca Pastoral, Digital Libronix, Sofware Bíblico Logos,


versión 3, y Logos 5.

New Testament Commentary: II Corinthians, Simon J.


Kistemaker, Publicado por Baker Book House, Grand Rapids,
Michigan © 1997. Traductores: Ricardo Cerni, Eugenio Orellana
y Alejandro Pimentel.<<<
777

Comentario Bíblico Mundo Hispano, Tomo 20: 1 y 2 Corintios.

El Conocimiento Bíblico, un comentario expositivo: Nuevo


Testamento, tomo 3: 1Corintios-Filemón.

El ministerio de la mujer, Bernard Coster, junio 2011.

Diccionario Bíblico Ilustrado Vila Santa María, Clíe, 1981.

Comentario Bı́blico Mundo Hispano 1 y 2 Corintios (1. ed.) (58).


El Paso, TX: Editorial Mundo Hispano.

Comentario al Nuevo Testamento, Clie, de William Barclay,


volumen 9, Corintios.

(Comentario de Juan Calvino a la 1Corintios, traducido por John


W Fraser. – reimpreso por Grand Rapids: Eerdmans, 1976.

John Albert Bengel, Bengel’s New Testament Commentary,


traducido por Charlton T. Lewis y Marvin R. Vincent, 2 vols.
(Grand Rapids: Kregel, 1981).

Los orígenes históricos del Cristianismo, José Miguel García,


Ediciones Encuentro, 2007.

Simon J. Kistemaker, Comentario al Nuevo Testamento:


2Corintios.
778

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