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EL PODER DE LA GRACIA

Antes de comenzar, es importante aclarar ¿Qué es la Gracia?


En pocas palabras la gracia “Deriva de un amor INCONDICIONAL, INIGUALABLE E INFINITO DE
DIOS POR SUS HIJOS”. Lo que significa que es la “EXPRESIÓN DEL AMOR DE DIOS PARA CON
NOSOTROS”

Es por la gracia, que Dios envió a su único hijo a morir en la cruz. Por así decirlo, Dios se hizo de
la misma condición que nosotros los humanos renunciando a su GRANDESA para venir a ser
humillado, maltratado y calumniado por nosotros los hombres; para después, ser brutalmente
asesinado tomando nuestro lugar en la cruz. Es decir, Jesús vivió una vida de santidad, libre del
pecado, para absorber la ira de Dios que nos correspondía a nosotros.

Pues no podemos olvidar que Dios es un Dios infinitamente JUSTO por lo que el pecado tenía que
ser condenado, pero, también es un Dios infinitamente AMOROSO, por eso es que ante Cristo
somos salvos, pues “El único hombre libre de pecado, que no merecía morir ni llevar ningún tipo
de castigo ni pesar sobre sus hombros; el único hombre que estaba lleno de amor, alegría, paz,
paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio propio. Por amor, decidió
inmerecidamente tomar nuestro lugar sufriendo el peor dolor”.

Es algo tan lleno de Misericordia; porque es tanto el deseo que tiene Dios de estar a tu lado y
tener una relación contigo que “NO DUDO NI UN SEGUNDO EN TOMAR ESE LUGAR DE TORTURA”
Eso, justamente es la GRACIA DE DIOS: UN REGALO INMERECIDO.

¿Pero que significa que Dios (Jesús) halla tomado mi lugar en la cruz?
Significa que el pecado no te condena, significa que el “TE VAS A IR AL INFIERNO” no existe, tienes
ganada la vida eterna.

Dice la palabra de Dios (Juan 3:16) “De tal manera amó Dios al mundo que dio a su Hijo
Unigénito para que todo aquel que en el crea no se pierda más tenga vida eterna”

¿Ganarme algo sin hacer nada, eso es ilógico, así no funciona el mundo?
Justamente eso es la gracia de Dios, pues ningún ser humano es capaz de estar a la altura de LA
SANTIDAD DE DIOS. Entonces dios, decidió derramar su sangre para darte esa “SANTIDAD” por
medio la justicia de Jesús.

ROMANOS 5:18, 19: “Así que, como por la transgresión de uno vino la condenación a todos los
hombres, de la misma manera por la justicia de uno vino a todos los hombres la justificación de
vida. Porque, así como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos
pecadores, así también por la obediencia de uno, los muchos serán constituidos justos”
No podemos olvidar que la Salvación es un regalo que se obtiene por medio de Jesús que es en
sí por medio de Dios, NO POR OBRAS HUMANAS, NADIE ESTA A LA ALTURA.

¿Pero cómo puedo recibir ese regalo?


Aquí entra algo hermosos que se conoce como la FE.

Dice la palabra de Dios (Juan 20:29) “Bien aventurados los que no vieron y creyeron”

Y aquí está pues a continuación el tesoro más hermoso, grandioso, mágico, lleno de
misericordia y amor; algo por lo que no hay que luchar, solo creer. Simplemente gracia en su
más pura expresión:

Romanos 10:9 Dice: Si confiesas con tu boca que Jesús es el Señor y crees en tu corazón que Dios
lo levantó de entre los muertos, serás salvo.

Es decir, los que no tuvieron la oportunidad de presenciar con sus propios ojos la venida de Dios
hecho hombre, pero que tienen FE y creen que Jesús hizo lo que hizo en su infinito amor son
merecedores de todo el amor de Dios, perdón y salvación. ¡Vida eterna les aguarda!

Así que, si quieres recibir este regalo que no te pide nada a cambio, que es: La salvación del
pecado; La vida eterna; Una relación personal con el CREADOR DEL UNIVERSO; que él ESPIRITU
SANTO DE DIOS DESCIENDA DEL CIELO PARA ENTRAR Y HABITAR EN TU CORAZÓN, es decir, que
Dios mismo viva dentro de ti; Que te adopte como su hijo; poder palpar su amor y dirección en
cada momento de tu vida, sin importar que. Simplemente cierra tus ojos y háblale y dile de la
forma en la que tu quieras que aceptas su regalo, que crees que Jesús pago por tus pecados
presentes pasados y futuros, que te arrepientes de haber llevado una vida lejos de Él, pero que
deseas que entre en tu vida y te llene de gozo.

Una vez que hagas eso, nadie te podrá separar del amor y el perdón de Dios ¡Ni tú mismo!
Romanos 8:38-39 Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni
principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna
otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.

¿Ok, ya creí en Él, pero cuando va a impactar en mi vida, cuando me convertiré en


la persona que ÉL quiere que yo sea?
En el libro “El Despertar de la Gracia el autor Charles R. Swindoll” nos cuenta que le gusta mucho
la forma en la que un santo de la antigüedad expresa la forma en la que podemos dejar a Dios
guiar nuestra vida. Que yo personalmente concuerdo.
“AMA A DIOS CON TODO TU CORAZÓN… Y LUEGO HAZ LO QUE QUIERAS”
Básicamente lo que dice ahí es que cuando amas realmente a Dios tu corazón se llena de un gozo
tan grande e incontenible que solo pensaras en hacer cosas que hagan sonreír a nuestro padre
celestial. Es decir, el espíritu santo de Dios que habita dentro de ti dará su FRUTO.

Gálatas 5:22-23
En cambio, el fruto del Espíritu es amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad,
humildad y dominio propio. No hay ley que condene estas cosas.

Diría entonces que amar a Dios con todo nuestro corazón es sinónimo de permanecer en Él, en
su amor. (vivir para Él, renunciar a ti mismo y entregarte a Él, para que haga de ti lo que deseé)

Dijo Jesús que nos ama tanto como Dios lo ama a Él. Lo que significa que el amor que Jesús nos
tiene y tuvo y tendrá siempre es más que infinito.

Y no podemos olvidar tampoco que Jesús nos mando a “Amar a los otros como él nos ha amado
a nosotros” (Juan 13:34)

Lo que significa que Jesús nos dio justificación ante el padre, nos hizo libres del pecado; NOS DIO
LIBERTAD para “RECIBIR EL AMOR INCONDICIONAL DEL PADRE DE FORMA INMERECIDA” y así
SENTIR SU GRACIA en nuestras vidas y así “PODER AMAR A DIOS CON TODO NUESTRO CORAZÓN”
y así “DEJAR AL ESPÍRITU SANTO ACUAR EN NOSOTROS” y así “LLEVAR UNA VIDA DE
PERMANENCIA EN DIOS” y así “NUNCA APARTARNOS DE SU PALABRA NI A DIESTRA NI A
SINIESTRA”. Pero esto no viene de nosotros viene de Dios.

En resumen: “La gracia de Dios nos permite acercarnos a ÉL con Libertad para experimentar su
obra”

P.D. TODO LO DICHO AQUÍ ES DICHO POR EXPERIENCIA PROPIA Y CON MI CORAZÓN ABIERTO; SI
HAS RECÍBIDO ESTE MENSAJE ES PORQUE EN MI CORAZÓN HAYAS UN LUGAR.

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