Cuando explorar el mundo
La mejor ayuda
se vuelve adicción
Al adolescente, como niño que empieza a
caminar, todo la parece nuevo. Al entrar en
contacto con el mundo adulto, querrá probar
el cigarro, el alcohol, las sustancias ilegales y
el sexo. En este descubrir, se enfrenta a la
pregunta “¿Quién soy?” sorteando obstácu-
los como peligros y su discernimiento, límites
o libertad. Esta última se confunde con
“hacer todo lo que quiero, cuando quiero y
porque quiero”, cuando en realidad la adultez
no es solamente sostener un cigarro o tener
relaciones sexuales. El grupo de amigos aquí
juega un papel importante, ya que satisfacer
la necesidad de pertenencia servirá como
plataforma para “dejar el nido”, ya sea de for-
ma positiva o negativa.
¿Cómo reconozco una adicción? Cuando tu
hijo pasa de la simple experimentación a un
estado de necesidad que afecta su salud,
relaciones personales, intereses y/o ambicio-
nes personales. Desde lejos, es fácil juzgar a
un adicto, pero de cerca podrías encontrar a
un joven que perdió ¿Qué hacer?
a un amigo y siente
Tres preguntas te guiarán en esta búsqueda
compañía con el al-
de alternativas:
cohol, a una joven
que siente excepcio- 1. ¿Qué está sustituyendo la adicción?
nal cariño y atención 2. ¿Qué siente cuando fuma, bebe, se droga,
en la comida, una etc.?
joven bulímica que
3. ¿Cuál es la necesidad insatisfecha? ¿Qué
encontró en sus há-
hay en el “corazón” de la adicción?
bitos la única forma
de sentirse conectada con ella misma o sim-
plemente un joven que se refugia en el ciga-
Con ayuda profesional, llegando al “corazón”
rro porque no sabe cómo expresar miedos.
de la adicción, podrás salir avante.
La raíz de las adicciones
El adicto necesita sanar a nivel físico y emo-
Existen muchos factores, tan variables como cional, por eso tú como educador o padre, le
la diversidad misma, pero todos confluyen en puedes dar la mejor ayuda a través de acep-
la impotencia. tar la adicción y no minimizarla para poder
 Imposibilidad de hablar. ayudar con amor, sin prejuicios. Paralela-
mente, aceptar la adicción se complementa
 Abandono de los padres o pérdida de con una visión elevada en la que tu hijo ven-
un ser querido. cerá su adicción a través de la confianza que
 Sobreprotección de los padres. le tengas. Recuerda que tu visión de él en
este momento está sesgada, tu hijo tiene
 Comparaciones o competencia. muchas cualidades y es una persona maravi-
 Perfeccionismo y expectativas irreales llosa.
de los padres.
 Falta de privacidad.
 Humillaciones, burlas o culpabilizar.
 Falta de honestidad de los padres.
 Padres adictos.
 Falta de autoestima.
 Sentir que no pertenece a la familia.
 Deseo de huir de la confusión.
 Prevención
“Más vale prevenir que lamentar” dice el re-
frán. Pero para lograrlo, debemos puntualizar
cómo:
 Estar presente, interesarte sin sobrepro-
teger.
 Mantener la comunicación abierta, dán-
dole su lugar y escuchando a tu hijo. Dr. Gonzalo López
Director
 Aceptar su individualidad.
 Enseñarle a manejar el fracaso y la frus- Profa. Mercedes Takagui Carbajo
tración. Subdirectora Académica

 No tener expectativas irreales.

 Respetar sus cosas y su espacio. Lic. Ernesto Uribe Gómez
Jefe de División de Licenciatura
 Ser lo más honesto posible y decidir qué
tipo de información compartes a tus hijos.
Mtra. María Lorena Velasco Mariscal
 Como adulto, debes ser ejemplo y mos- Coordinadora de la Especialidad de
trarle cómo: Lenguas Extranjeras : Inglés

*manejas tus propios fracasos sin adic-

ciones Jesús Alfonso Victoria Espinoza
Coordinador de la licenciatura:
*disfrutas tu vida Piscología

*vives el presente con optimismo

Desarrollo socioemocional y aprendizaje
*sientes satisfacción con tu trabajo Curso

Mantén el miedo a raya Lucrecia Bahena Cerón

Titular del curso
Utiliza estas afirmaciones para hacer el me-
dio a un lado y ayudar a tu adolescente.
2018-2019 Alanís Espejel Fabrizio Alejandro
 Mi miedo no le pertenece a mi hijo, sólo yo
Ciclo escolar
soy responsable de mis emociones Flores Corzo Megan
 Me sobrepongo a mi miedo para guiar a
mi hijo con confianza