Sei sulla pagina 1di 3

UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA DE BOLÍVAR

FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES & HUMANIDADES


COORDINACIÓN DE HUMANIDADES
ÉTICA & PROFESIONALISMO

NOMBRE Y APELLIDOS: Miguel Adres Contreras López


SECCIÓN: AA - 1753

RESEÑA CRÍTICA

TÍTULO DE LA RESEÑA
ÉTICA, CARÁCTER, JUSTICIA Y
FELICIDAD
TÍTULO DEL CAPÍTULO RESEÑADO

Conjugar justicia y felicidad.

RESUMEN EXPOSITIVO DEL CAPÍTULO RESEÑADO (aquí se presentan, en forma selectiva y condensada, los
contenidos fundamentales del capítulo).

En el capítulo, titulado Conjugar justicia y felicidad, Cortina nos da las últimas claves para conseguir
llevar una vida plena, para ser justos y felices. En primer lugar, ser justos supone “dar a cada uno lo
que le corresponde”, esto implica exigirnos mutuamente que todas y cada una de las personas
respetaremos nuestros derechos, que son las limitaciones mínimas al momento de relacionarnos con
las demás personas y no agraviar su persona. En cuanto a la felicidad, “la buena forma de llevar la
vida (encaminada a la calidad de esta) de tal manera que al individuo le depare un futuro en el cual
seguir con la finalización o realización de su proyecto de vida (siendo esta la fuente de la felicidad)”
nadie puede exigir a otros que sean felices de una manera determinada, sino que cada persona es la
que ha de optar por un camino u otro, cual se encamina hacia ella como cree más conveniente. En
este aspecto, los Estados tienen la responsabilidad de garantizar las bases de justicia para que cada
cual pueda decidir cómo ser feliz, y que no se impida a los demás hacer lo mismo.
Con la llegada del mundo moderno, la felicidad comienza a entenderse como bienestar, como el
“conseguir el máximo posible de bienes sensibles” y ese estar bien se identifica con las posibilidades
de consumo Sin embargo, el consumo, más allá de referirse a la satisfacción de necesidades vacías
(necesidades artificiales), puede replantearse, convertirse en una oportunidad para sacar adelante
una vida feliz. Para esto, la autora propone aunar dos virtudes en nuestro carácter: lucidez y
cordura. La lucidez que nos permite ser conscientes de que “el ethos consumista no es natural, sino
que está creado artificialmente, y que con él se pierden una gran cantidad de oportunidades
felicitantes”. La cordura permite discernir entre el exceso y el defecto en nuestras prácticas de
consumo, pero también en nuestra vida en general, dado que implica la aceptación de las
vulnerabilidades personales para darle paso a la cooperación. Así pues, con el ejercicio de dichas
virtudes, el sujeto podrá encaminar su consumo, para que contribuya a la felicidad propia y de los
demás.
Esta obra de Adela Cortina sirve para recordarnos el verdadero sentido de la ética en tiempos
modernos, como recordatorio a las personas de que somos capaces de escoger nuestro rumbo en la
vida, y a las instituciones de la responsabilidad que tienen con para la sociedad. Recordando también
un hecho clave, y es que no existe el individuo aislado como tal, sino que las comunidades funcionan
porque nos encontramos conectados los unos a los otros, somos seres dependientes y nuestra
vulnerabilidad nos permite apreciar la importancia que tienen valores como la justicia, la felicidad y la
cooperación. Aportándonos la esperanza necesaria para alcanzar la meta suprema: “ser felices en el
seno de sociedades justas”.
COMENTARIO CRÍTICO – ARGUMENTADO DEL CAPÍTULO RESEÑADO

La palabra “ética” proviene de la palabra griega êthos, que significa “carácter”. Todas las personas,
las instituciones, los pueblos, se forjan un carácter. La formación en la que por repetición de actos y
de esta manera crear un carácter. Y de eso trata la ética: de la formación de un buen carácter.

¿Qué quiere decir la creación de un buen carácter?

Adela Cortina nos recuerda que “si no tomamos nota de lo cara que sale la falta de ética, en dinero y
en dolor… El coste de la inmoralidad seguirá siendo imparable. Y, aunque suene fuera de contexto,
seguirán pagándolo sobre todo los más débiles”.

Es por ello que nos invita a un tipo nuevo de “hominización cultural”. Que consiste en cambiar la
conciencia derribando lo asumido y aprovechando las cualidades innatas para generar a la sociedad.
Con el fin de desarrollar la capacidad de entender, defender y respetar el espacio de los demás
obedeciendo reglas o “derechos” que nos garantizan un trato digno, además que con la utilización
continua de esta forma de actuar creamos un tipo de patrón accionario, tal cual como si de un
musculo se tratará, de forma en la cual crear una memoria muscular que representa nuestro
CARÁCTER y lo cual es sumamente necesario a la hora del desarrollo personal orientado a la
felicidad.
Y personalmente no dudo forma en la que Adela concibe la justicia (y otros conceptos) es la
concepción más eficaz ya que nos habla “del límite de los mínimos” y nos sugiere de igual forma que
la justicia consiste en hacer lo bueno, siempre y cuando esto se pueda hacer, entonces es nuestra
obligación actuar de esta manera, siempre buscando apoyar y no agredir la felicidad de otros o
causarle sufrimiento.

CONCLUSIÓN

En conclusión ¿para qué nos sirve la Ética.


La ética nos es útil para aprender a llegar a ser felices por efecto de la finalización de nuestros planes
a futuro (elegido por cada uno), lo cual está dirigido a la calidad de vida que se enfoca en la
aprovecharían del consumo de forma “lucida” y consciente de las necesidades naturales y de la
creación de las necesidades artificiales creadas por el marketing de las empresas para seguir
generando movimiento en el carrusel de la estratificación de consumo (sociedad de consumo) y esto
las masa para que la representación propias de las relaciones interpersonales y la imagen del
individuo mismo son las cosas. Es justo por eso que debemos ser “cuerdos” con respecto a este
último fenómeno y no caer en el materialismo y/o consumismo (adictivo, es decir insaciable) y solo
hay que consumir lo necesario para que el camino hacia la realización de nuestro proyecto de vida no
sea desagradable, al contrario que sea placentero y no nos cause sufrimiento alguno a otras
personas; y justo en ese momento nos encaminamos a directamente a actuar justamente. Ese
cuidado mínimo hacia el trato a los demás llamados derechos humanos.
En la carrera de la excelencias contra uno mismo, claramente el individuo debe cambiar la
consciencia derribando lo asumido y aprovechar las cualidades innatas para generar la esperanza de
cambio social y la reconstrucción económica y cultural de las sociedades.

Potrebbero piacerti anche