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ESCUELA DE CIENCIAS JURÍDICAS Y POLÍTICAS

CARRERA DE DERECHO

ANTEPROYECTO DE MONOGRAFIA PARA OPTAR AL TÍTULO DE


LICENCIADO EN DERECHO

ANÁLISIS JURÍDICO DEL DERECHO A LA EDUCACIÓN SUPERIOR


EN LA REPÚBLICA DOMINICANA

PRESENTADO POR:
EMILIO DIAZ GARCIA
CESAR SENA AGRAMONTE

ASESOR:
RADHAMÉS VEGA DOMÍNGUEZ, M.A.

SANTO DOMINGO, D. N., REPÚBLICA DOMINICANA,


2018 Los conceptos emitidos en esta
monográfico son de la exclusiva
responsabilidad de los sustentantes
ESCUELA DE CIENCIAS JURÍDICAS Y POLÍTICAS
CARRERA DE DERECHO

ANTEPROYECTO DE MONOGRAFIA PARA OPTAR AL TÍTULO DE


LICENCIADO EN DERECHO

ANÁLISIS JURÍDICO DEL DERECHO A LA EDUCACIÓN SUPERIOR


EN LA REPÚBLICA DOMINICANA

PRESENTADO POR:
EMILIO DIAZ GARCIA
2013-4864
CESAR SENA AGRAMONTE
2013-5159

ASESOR:
RADHAMES VEGA DOMÍNGUEZ, M.A.

SANTO DOMINGO, D. N., REPÚBLICA DOMINICANA,


2018
ANÁLISIS JURÍDICO DEL DERECHO A LA EDUCACIÓN SUPERIOR
EN LA REPÚBLICA DOMINICANA
ANTECEDENTES

La vinculación conceptual de la educación superior al derecho fundamental a la


educación de las personas debe mantenerla excluida de las apetencias de lucro
privado y convocar por el contrario la acción solidaria del Estado y de los particulares
para garantizar la financiación adecuada y necesaria para su desarrollo y
cualificación.

Los cambios significativos que han sobrevenido en el mundo y en nuestro propio país
en asuntos relativos a la sociedad, a la educación superior y a la investigación
científica hacen necesaria una reforma de la educación superior que incluya los
instrumentos conceptuales, institucionales, administrativos y financieros propicios
para que los investigadores, académicos y estudiantes puedan concurrir en
condiciones favorables al proceso universal de reflexión intelectual, de producción de
nuevos conocimientos y de participación en los múltiples ámbitos en que discurren
los procesos de la vida social.

Para este propósito, una reforma justa debe favorecer que las instituciones de
educación superior consoliden y fortalezcan su aporte en la transformación de la
sociedad y en la construcción de la nacionalidad colombiana, en la que se afirme la
convivencia pacífica, la democracia y la ciudadanía plena de sus integrantes, en el
marco del Estado Social de Derecho consagrado por nuestra Constitución Política.

A la par que se ha erigido la educación como un derecho humano fundamental, se ha


hecho más categórica la exigencia de que los Estados asuman plenamente la
responsabilidad de garantizar que ese derecho deje de ser una simple declaración
formal y se convierta en una realidad efectiva que compromete la actuación positiva
de cada Estado. Esto se corresponde con el desarrollo de la doctrina constitucional
moderna que ha consistido, principalmente, en su preocupación por los mecanismos
que garanticen el disfrute efectivo de los derechos.

1
Justamente una de las diferencias fundamentales de estos derechos de segunda
generación con respecto a los derechos de primera generación (libertad de
pensamiento y derechos políticos), consiste en que mientras estos últimos son
considerados derechos negativos, ya que lo que se demanda del Estado es que se
abstenga de su violación, los derechos de segunda generación son entendidos como
derechos positivos en tanto que para su cumplimiento es imprescindible la actuación
permanente del Estado y de la sociedad.

La Declaración Universal de los Derechos Humanos aprobada por la Asamblea


General de las Naciones Unidas el día 10 de diciembre del año 1948, formuló que
toda persona tiene derecho a la educación. La educación debe ser gratuita, al menos
en lo concerniente a la instrucción elemental y fundamental. La instrucción elemental
será obligatoria. La instrucción técnica y profesional habrá de ser generalizada; el
acceso a los estudios superiores será igual para todos, en función de los méritos
respectivos1.

Posteriormente, en el año 1966 el Pacto Internacional de Derechos Económicos,


Sociales y Culturales postuló en su artículo 13 que la enseñanza superior debe
hacerse igualmente accesible a todos, sobre la base de la capacidad de cada uno,
por cuantos medios sean apropiados, y en particular por la implantación progresiva
de la enseñanza gratuita.

La constitución de la República Dominicana en sus artículos 63 plantea el derecho a


la educación explicando que Toda persona tiene derecho a una educación integral,
de calidad, permanente, en igualdad de condiciones y oportunidades, sin más
limitaciones que las derivadas de sus aptitudes, vocación y aspiraciones.

1 Artículo 26, Declaración Universal de los Derechos Humano.

2
En su numeral 3 dice la educación superior en el sistema público será financiada por
el Estado, garantizando una distribución de los recursos proporcional a la oferta
educativa de las regiones, de conformidad con lo que establezca la ley. La educación
superior debe estar adecuadamente financiada por la sociedad, a fin de garantizar su
cobertura, pertinencia y calidad y permitir el acceso y permanencia a la misma a
todos aquellos que califiquen sobre la base de sus méritos, capacidades y esfuerzos.

Asimismo, se debe promover y financiar el desarrollo de la investigación que permita


la generación creativa de conocimientos y la incorporación de los avances científicos
y tecnológicos al quehacer productivo en beneficio del desarrollo económico y social
a escala local, regional y nacional. Este financiamiento debe dirigirse, tanto a la
oferta como a la demanda, y se sustentará en criterios de eficiencia, eficacia,
transparencia y rendición de cuentas2.

Se establece como principio en el financiamiento de la educación superior, la ciencia


y la tecnología la participación del Estado y del sector privado. El Estado Dominicano
tendrá la responsabilidad de financiar la educación superior pública y de contribuir al
financiamiento de la privada. Además, de mejorar, flexibilizar y transformar la gestión
de las instituciones de educación superior, la ciencia y la tecnología del país,
mediante la adopción de políticas de financiamiento apropiadas que garanticen el
acceso, la equidad y solidaridad en la distribución de los beneficios del Sistema
Nacional de Educación Superior, Ciencia y Tecnología.

Las constituciones políticas reiteraron y actualizaron principios conductores de la


educación. Incorporaron en sus textos postulados construidos y legitimados a lo largo
de la historia de los pueblos, de su tradición educativa, y que han sido reconocidos
como universales. Hicieron propios muchos fundamentos propuestos por
pensadores, y recrearon otros debatidos en foros y conferencias nacionales,
regionales y mundiales, en donde constituyentes, representantes de la sociedad civil,
expertos y gobiernos, analizaron, discutieron, llegaron a acuerdos y formularon

2 Artículo 89 la Ley número 139-01 de Educación Superior, Ciencia y Tecnología.

3
orientaciones y posibles rutas a seguir, según las características y circunstancias de
los entornos de la educación en general, y de la superior en particular.
En todos los casos, la educación se considera como un derecho fundamental de la
persona y como un servicio público que cumple una función social; por tanto, la
educación debe contribuir a que el individuo acceda a los bienes y valores de la
cultura, y debe influir de manera permanente en el desarrollo de ciudadanos y
países.

De igual manera, la educación debe ser parte esencial del bien común y estar
inspirada en la búsqueda de sociedades justas, abiertas y tolerantes, basadas en los
principios de solidaridad, libertad y justicia, respeto por los derechos humanos,
conservación y sostenimiento del medio ambiente, promoción de la cultura de la paz
y del uso compartido del conocimiento y de la información.

Los textos señalan que la familia, la escuela y la sociedad son responsables de una
educación integral, y a la educación básica, le otorgan el carácter de universal,
gratuita y obligatoria. Por su parte, las leyes de la educación han retomado en sus
objetivos los postulados constitucionales y han incorporado elementos más cercanos
a los valores, a las características sociopolíticas y a la cultura, dando importancia a
ciertas características nacionales, a través de preceptos como los que aparecen en
ciertas normas, relacionados con la educación intercultural3.

En cuantos los antecedentes bibliográficos se puede observar que los derechos


humanos, la paz, la democracia y la educación para todos, que están en los
postulados constitucionales, en los escenarios del debate y en los compromisos de la
sociedad civil, de las agendas de gobiernos y de los foros de organismos
internacionales, abrieron espacio de reflexión en la Conferencia de Ginebra, que
destaco la educación formal y la educación no formal como instrumentos
indispensables para iniciar y promover los procesos sostenibles de construcción de la
paz, la democracia y los derechos humanos; pero advirtió que ellas, por si solas, no

3 Revelo, 2004, Pág. 15.

4
pueden aportar las soluciones a la complejidad, a las tensiones e incluso a las
contradicciones del mundo con temporáneo.
Las Constituciones y las leyes reafirman que la educación superior es un
instrumentos valioso que contribuye al desarrollo socioeconómico, científico, técnico,
cultural, político y ético de la sociedad, y agregan que este nivel educativo debe ser
capaz de formar ciudadanos integrales y profesionales idóneos vinculados al
progreso espiritual, social y material de sus países.

Señalan, también, que la educación debe aportar los elementos fundamentales al


desarrollo de personas autónomas y participantes, para que se vinculen a la
construcción de valores que favorezcan la dignidad humana. Estos instrumentos
afirman que la educación superior debe contribuir a sostener la calidad de todo el
sistema educativo, de la ciencia y de las artes; a la conformación de sistemas
ambientales sostenibles y a la consolidación de las comunidades académicas.

Muchos han sido las declaraciones, los propósitos, los planes formulados y los
esfuerzos realizados, pero variadas las dificultades y contradicciones para lograrlos.
De principios y objetivos similares se ha pasado a las duras realidades y a las
grandes diferencias en sus logros. Países que han obtenido importantes
realizaciones en la alfabetización y en la escolarización, por ejemplo, han dejado a la
zaga a sus vecinos, y lo que es aún peor, regiones de avanzada en un mismo país
se han distanciado de manera extrema y peligrosa en materia educativa y, por
supuesto, en su desarrollo de otras regiones casi siempre ubicadas en la periferia de
su geografía. Para superar estas desigualdades, se ha buscado un modelo de
educaci6n y de desarrollo sustentable y compatible con las aspiraciones de los
pueblos, modelo que hasta ahora no ha sido posible conseguir.

La educación superior debe ser ante todo reflexiva, critica y aportante, pues ella se
funda, según lo expresa R. Hutchins, en que en alguna parte del Estado debe existir
una organización cuyo propósito sea meditar profundamente sobre los problemas
intelectuales más importantes, para que ilumine todo el sistema educativo y las
5
cuestiones teóricas y prácticas que se plantean a los pensadores y a los hombres de
acción.
La calidad y la pertinencia en la prestación del servicio educativo son condiciones de
toda institución de educación superior, pues por su tradición y características deben
ser organizaciones que aprenden, con capacidad para adaptarse a los cambios del
entorno y sin temor a competir8, dispuestas a realizar evaluaciones que las lleven a
mejorar constantemente, pero también instituciones responsables y dispuestas a
rendir cuentas a la sociedad, como ejercicio pleno de su autonomía.

Por naturaleza, las universidades y las instituciones de educación superior en


general deben ser plurales, responsables de su quehacer, capaces de incorporar
métodos pedagógicos que promuevan el espíritu investigativo y la búsqueda del
conocimiento, para que se aprenda a ser, para que se aprenda a vivir en comunidad,
para que se aprenda a aprender y para que se aprenda a emprender nuevas
entidades productivas.4

En Chile hay dos formas de evaluación de la calidad de la educación superior: el


licenciamiento de instituciones privadas y la acreditación de programas de pregrado y
de posgrados académicos para universidades autónomas. La primera surge en 1990
con la expedición de la Ley 18962 Orgánica Constitucional de Enseñanza de Chile,
que dio inicio formal a un sistema de autorización de funcionamiento para
universidades e institutos profesionales no autónomos de naturaleza privada. Este
licenciamiento apunta a otorgar el reconocimiento oficial para iniciar actividades y,
luego de un periodo de desarrollo, lograr su plena autonomía.

Su objetivo es cautelar la fe pública, asegurar niveles básicos de calidad, promover


su desarrollo cualitativo y proteger a los usuarios del sistema (auspiciantes,
estudiantes, padres de familia, empleadores y comunidad en general). El
licenciamiento es de carácter obligatorio para todas las instituciones privadas, que

4 Ibíd., Pág. 4.

6
deberán someterse a la verificación del Consejo Superior de Educación, CSE, a fin
de alcanzar su plena autonomía si demuestran cumplir con los criterios definidos
para tal fin. Es un proceso sistemático que se realiza a través de varios actos de
verificación del desarrollo del proyecto institucional por parte de comisiones de pares
y de expertos designados por el Consejo5.

El proceso de licenciamiento incluye las distintas áreas de la institución, supervisa el


cumplimiento del proyecto institucional, asesora a las instituciones en sus distintas
funciones y entrega información al público en general. El proceso, que incluye la
evaluación externa realizada por consultores del CSE, arroja una serie de
observaciones que deben ser tenidas en cuenta para que al cabo de seis años de
seguimiento por parte del Consejo, si se han superado las debilidades identificadas,
se otorgue la autonomía a la institución. El Consejo Superior de Educación, CSE,
que este presidido por el Ministro de Educación, es un organismo autónomo
conformado por ocho miembros propuestos por las instituciones de educación
superior y otras entidades.

La acreditación de los programas de pregrado se ha venido desarrollando de manera


experimental desde 1999 cuando el Ministerio de Educación creo por decreto la
Comisión Nacional de Acreditación de Pregrado, CNAP, con carácter asesor y
conformada por quince miembros, encargada de diseñar y llevar a cabo el proceso
de acreditación. Esta acreditación es voluntaria está dirigida a los programas de
pregrado que ofrecen las instituciones de educación superior autónomas públicas y
privadas, y verifica los estándares básicos de calidad. Con esta experiencia de la
CNAP se ha elaborado y tramitado ante el Congreso nacional un proyecto de ley
para institucionalizar la acreditación de programas académicos.

Chile cuenta, además de los dos organismos antes mencionados para el


licenciamiento de instituciones de educación privadas y para la acreditación de los

Ley numero 18962 Orgánica Constitucional de Enseñanza de Chile.

7
programas de pregrado de las universidades autónomas públicas y privadas, con la
Comisión Nacional de Acreditación de Posgrado, CONAP, conformada por diez
miembros designados por el Ministro de Educación y encargada de la acreditación de
maestrías y doctorados.

En Ecuador, la Ley Orgánica de Educación Superior 16 No-77 de 2000 establecido el


Sistema Nacional de Evaluación y Acreditación de la Educación Superior, que
funciona de manera independiente pero en coordinaci6n con el Consejo Nacional de
Educaci6n Superior, CONESUP. En 2002 se puso en funcionamiento el Consejo
Nacional de Evaluación y Acreditación, CONEA, como un organismo independiente
conformado por ocho miembros para orientar el Sistema de Evaluación y
Acreditación de la Educación Superior, SEAES, el cual busca asegurar la calidad de
las instituciones de educación superior, fomentar procesos permanentes de
mejoramiento de la calidad académica y de gestión, y ofrecer información a la
sociedad sobre el nivel de desempeño institucional, a fin de garantizar su calidad y
propiciar su mejoramiento.

La acreditación es obligatoria para todas las universidades, escuelas politécnicas e


institutos técnicos y tecnológicos del país. Actualmente, el CONEA viene preparando
el modelo correspondiente para la acreditación de programas e instituciones de
educación superior de Ecuador6.

Las principales funciones que la ley otorga este Consejo se refieren a la promoción
de la cultura de la evaluación en las instituciones del Sistema de Educaci6n Superior;
la determinaci6n de las políticas de evaluación y acreditación; la definici6n de las
características, criterios, indicadores de calidad e instrumentos que deben aplicarse
en la evaluación externa; la definición de los términos de referencia para la
autoevaluación; la colaboración de normas, guías y documentos técnicos para la
autoevaluación, evaluación externa y acreditación; y el otorgamiento de certificados

6 Ley Orgánica de Educación Superior 16 No-77 de 2000

8
de acreditación a programas, instituciones de educación superior, y a las unidades
académicas que cumplan con todos los requisitos exigidos.
En España, la Ley Orgánica de Universidades de 2001 establecido la promoción y
garantía de la calidad de las universidades españolas mediante la evaluación,
certificación y acreditación, que están a cargo de la Agenda Nacional de Evaluación
de la Calidad y Acreditación, ANECA, creada por la misma ley y encargada de
orientar el proceso de acreditación y de asumir e integrar las actividades de
evaluación de la calidad que venían siendo desarrolladas por el Consejo de
Coordinación Universitaria, el cual trabaja actualmente para propiciar la permanente
mejora de la docencia, de la investigación y el logro de los objetivos propuestos por
la Reforma Universitaria. La acreditación en España, según esta ley, es obligatoria y
referida a estándares de calidad para universidades, programas de pregrado y
postgrados académicos. Entre los campos sobre los cuales trabaja la ANECA están:
la evaluación institucional, la certificación, la acreditación, la evaluación del
profesorado y la convergencia europea.

En Paraguay, el sistema de acreditación es de reciente aparición, pues la Ley 2072


de 2003 credo la Agenda Nacional de Evaluación y Acreditada de la Educación
Superior, encargada de evaluar y acreditar la calidad de los programas académicos y
de las instituciones de educación superior. La acreditación, según lo señala la norma,
tiene carácter voluntario, salvo para las carreras de riesgo social. Comprende la
autoevaluación, la evaluación externa y el informe final. El proceso de acreditación se
realiza en las carreras y programas de educación superior que ya posean
egresados.7

En los antecedentes de la investigación se encontró en la Universidad Evangélica


Dominicana (UNEV) se encontró la monografía con el título análisis de la educación
superior a nivel internacional y sus características particulares en cada país. El
objetivo general fue analizar la característica de la educación superior en las

7 Ibíd., Pág. 4.

9
diferentes regiones del mundo. Los objetivos específicos fueron describir los
elementos que explican la educación superior a nivel internacional; explicar a
importancia de la educación superior en el desarrollo de los países; y proponer
elementos de educación superior encontrados a la educación superior dominicana.
La educación superior, la educación postsecundaria o la educación de tercer nivel es
una etapa final opcional de aprendizaje formal que ocurre después de completar la
educación secundaria. A menudo impartida en universidades, academias,
universidades, seminarios, conservatorios e institutos de tecnología, la educación
superior también está disponible a través de ciertas instituciones de nivel
universitario, incluyendo escuelas vocacionales, escuelas comerciales y otras
universidades profesionales que otorgan títulos académicos o certificaciones
profesionales.

La educación terciaria a nivel no universitario a veces se denomina educación


avanzada o educación continua, a diferencia de la educación superior. El derecho de
acceso a la educación superior se menciona en varios instrumentos internacionales
de derechos humanos. La ONU Pacto Internacional de Derechos Económicos,
Sociales y Culturales de 1966 declara, en su artículo 13, que "la enseñanza superior
debe hacerse igualmente accesible a todos, sobre la base de la capacidad, por
cuantos medios sean apropiados, y en particular por la implantación progresiva de
educación gratis". En Europa, el artículo 2 del Primer Protocolo del Convenio
Europeo de Derechos Humanos, adoptada en 1950, obliga a todas las partes
signatarias a garantizar el derecho a la educación.

En los días en que pocos alumnos progresaban más allá de la educación primaria o
la educación básica, el término educación superior se usaba a menudo para referirse
a la educación secundaria, lo que puede crear cierta confusión. [6] Este es el origen
del término escuela secundaria para varias escuelas para niños entre las edades de
14 y 18 (Estados Unidos) o 11 y 18 (Reino Unido y Australia).

10
La educación superior incluye la enseñanza, la investigación, el trabajo aplicado
riguroso (por ejemplo, en las escuelas de medicina y las escuelas de odontología) y
las actividades de servicios sociales de las universidades. Dentro del ámbito de la
enseñanza, incluye tanto el nivel de pregrado, y más allá de eso, el nivel de posgrado
(o el nivel de posgrado). El último nivel de educación a menudo se conoce como
escuela de postgrado, especialmente en América del Norte. Además de las
habilidades que son específicas para un grado particular, los posibles empleadores
en cualquier profesión buscan evidencia de pensamiento crítico y habilidades de
razonamiento analítico, trabajo en equipo habilidades, alfabetización informacional,
juicio ético, habilidades para tomar decisiones, habilidades lingüísticas, habilidades
para resolver problemas, y un amplio conocimiento de las artes liberales y las
ciencias.

Desde la Segunda Guerra Mundial, los países desarrollados y muchos países en


desarrollo han aumentado la participación del grupo de edad que en su mayoría
estudia la educación superior desde la tasa de elite, de hasta 15 por ciento, a una
tasa másiva del 16 al 50 por ciento. En muchos países desarrollados, la participación
en la educación superior ha seguido aumentando hacia lo universal o, lo que Trow
llamó más tarde, acceso abierto, donde más de la mitad del grupo de edad
correspondiente participa en la educación superior.

La educación superior es importante para las economías nacionales, como una


industria, por derecho propio, y como una fuente de personal capacitado y educado
para el resto de la economía. Los trabajadores con educación universitaria han
recibido una prima salarial mensurable y es mucho menos probable que se
conviertan en desempleados que los trabajadores menos educados. Sin embargo, la
admisión de tantos estudiantes con una capacidad promedio para la educación
superior inevitablemente requiere un declive en los estándares académicos, facilitado
por la inflación de grado. Además, la oferta de graduados en muchos campos de
estudio excede la demanda de sus habilidades, lo que agrava el desempleo de los
graduados, el subempleo, el credencialismo y la inflación educativa.
11
En la universidad Central del este se encontró el tema Tendencias de la Educación
Superior Dominicana, elaborado por Miguel Ángel Castro Peña, José Gálvez Pérez,
Antonio De La Rosa. El objetivo general del mismo fue estudiar las tendencias
modernas de la educación superior en la República Dominicana. Los objetivos
específicos fueron describir la importancia de la educación superior para el desarrollo
de la República Dominicana; describir el desarrollo de la educaicon superior
dominicana; explicar como la ley número 139-01 de Educación Superior, Ciencia y
Tecnología ha impactado a la educación dominicana.

A 16 años de la puesta en vigencia de la Ley 139-01 de Educación Superior, Ciencia


y Tecnología, periodo en el que la República Dominicana ha logrado avances
importantes en la calidad, la investigación científica en el fortalecimiento institucional
y el crecimiento de la matrícula universitaria.

Hoy en día se puede afirmar que el sistema se ha consolidado, no obstante el tema


de la calidad sigue siendo una materia pendiente en la región y, por tanto, en
República Dominicana. Hay que precisar que la calidad es un propósito en
construcción permanente en una sociedad en la cual el cambio está presente en
cada acción que se emprende hacia el logro de una educación que responda a las
demandas del presente y del futuro.

Como ejemplo de ese esfuerzo colectivo, diferentes actores y sectores de la


sociedad dominicana hemos ido construyendo espacios, elaborando planes y
proyectos, firmando acuerdos y aprobando legislaciones que garanticen la
construcción de una educación superior cada vez de mayor calidad.

En el 2008 aprobamos tres Planes Decenales (2008/2018): el del Ministerio de


Educación Superior, Ciencia y Tecnología, el del Ministerio de Educación y del
Instituto Nacional de Formación Técnico Profesional. En el caso del MESCYT,
además del Plan Decenal de Educación Superior, se elaboró también, el de Ciencia
12
Tecnología e Innovación para de esa manera completar los dos ámbitos de acción
del Ministerio. Estos planes fueron orientados por las tendencias que en ese
momento marcaban el camino a seguir para lograr fortalecer el sector educativo.

Mientras que en el 2010 fue promulgada una nueva Constitución de la República, la


cual establece en el artículo 63, el derecho a la educación. Precisa que el Estado
debe velar por la calidad de la educación superior y financiará los centros y
universidades públicos, de conformidad con lo que establezca la ley y que definirá
políticas para promover e incentivar la investigación, la ciencia, la tecnología y la
innovación que favorezcan el desarrollo sostenible, el bienestar humano, la
competitividad, el fortalecimiento institucional y la preservación del medio ambiente,
para lo cual apoyará a las empresas e instituciones privadas que inviertan a esos
fines.

Actualmente está en ejecución la Estrategia Nacional de Desarrollo 2030, que incluye


entre sus contenidos consolidar un sistema de educación superior de calidad, que
responda a las necesidades del desarrollo de la Nación; actualizar el currículo de la
educación superior para alcanzar estándares internacionales de calidad; establecer
un sistema nacional de acreditación de profesores y carrera académica y crear una
masa crítica de docentes-investigadores por medio de la formación de maestros y
doctores en universidades de reconocida calidad mundial y la atracción de
profesionales de alto nivel residentes en el exterior, con criterio de igualdad de
oportunidades.

Plantea la necesidad de establecer un sistema nacional de acreditación de


instituciones de educación superior, para asegurar un crecimiento ordenado y
eficiente de la oferta de educación superior y garantizar su calidad, y promover la
certificación de las competencias profesionales de los egresados de educación
superior, entre otros aspectos.

13
Otra estrategia que se ejecuta en el país, en procura de lograr una educación de
calidad, es el Pacto Nacional para la Reforma Educativa de República Dominicana,
aprobada y firmada en el 2014 con la participación de los principales actores del
sistema educativo dominicano, instituciones del gobierno central, el Consejo
Económico y Social, partidos políticos, entre otros, con la presencia de expertos e
invitados especiales en calidad de testigos, convocados por el Presidente de la
República.

14
JUSTIFICACIÓN

La importancia de esta investigación es que se explica la importancia de la educación


superior en el desarrollo del país, también como las universidades juegan un papel
legítimo, único y relevante en la cooperación internacional para el desarrollo.
Después de una época en la que se obvió el papel de la educación superior en el
desarrollo social y económico de los países socios, las instituciones de educación
superior están obteniendo cada vez más reconocimiento a lo largo de los últimos
años como instituciones clave para el desarrollo y la cooperación internacional.

Para fomentar el desarrollo sostenible y mejorar el bienestar social se requiere, entre


otros factores, la disponibilidad de profesionales altamente cualificados y la
capacidad de la sociedad para innovar y adaptar las tecnologías y los conocimientos
a un contexto nacional específico.

Las universidades ofrecen habilidades y conocimiento para desarrollar todos los


sectores de la sociedad y gestionar el desarrollo de manera efectiva. Concretamente,
las universidades contribuyen al desarrollo de sus países por medio de sus cuatro
ámbitos principales: la formación y el desarrollo del capital humano; la investigación
científica; el desarrollo social y cultural; la innovación y el progreso económico.

En las universidades se forman los profesionales de las distintas áreas económicas,


sociales y públicas, así como los futuros líderes políticos y económicos. Un ámbito
clave en este sentido que demuestra la importancia de la educación superior es la
formación de profesorado para la educación primaria y secundaria.

Las universidades son espacios para garantizar la libertad de pensamiento y


expresión con el fomento del liderazgo intelectual y las habilidades de buena
gobernanza. Las universidades son responsables de formar a las personas en
valores y actitudes, para que puedan convertirse en la ciudadanía necesaria para

15
construir sociedades civiles activas y responsables, y para mejorar la gobernanza y
la democracia de sus países.
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

En el amplio campo de la Educación Superior en la República dominicana se podría


citar una serie de problemáticas, que han venido surgiendo como consecuencia de la
nueva revolución tecnológica, del proceso de globalización de los mercados, que ha
traído con su implementación una serie de cambios a la población mundial, de tipo
filosófico, social, cultural, ético, moral y profesional. Dichos cambios se presentan
como un reto a enfrentar para la Educación Superior, no solo en la República
Dominicana sino a nivel global.

Entre los elementos que se pueden nombrar en cuanto a al educación dominicana se


pueden explicar el bajo nivel en los docentes del uso de técnicas o metodologías
eficientes, además que no existe una orientación adecuada, clara, del perfil del
docente que la institución universitaria y la sociedad requieren.

Un elemento que no permite la actualización en los procesos es brecha digital que


separa a docentes, alumnos y viceversa. Esto presupone una desigualdad
económica y social con respecto al acceso, uso o impacto de las tecnologías de la
información y la comunicación (TIC). La división dentro de los países (como la brecha
digital en los Estados Unidos) puede referirse a las desigualdades entre individuos,
hogares, negocios o áreas geográficas, generalmente en diferentes niveles
socioeconómicos u otras categorías demográficas.

La superpoblación estudiantil que afecta seriamente la planificación, organización,


así como también actividades de coordinación académica de las universidades
principalmente las estatales, igualmente las universidades no ofertan las carreras
que la sociedad realmente está demandando y en última instancia no existen
programas permanentes de Investigación. Las pocas investigaciones que se realizan,

16
sus resultados no son aprovechados comercialmente, por no existir un plan de
desarrollo estratégico entre las universidades y el empresariado.

17
En esta investigación se responderán las siguientes preguntas:

¿Cómo afecta la perspectiva jurídica la educación superior en la República


Dominicana?
¿Cuáles son los aspectos jurídicos fundamentales de la educación superior en la
República Dominicana?
¿Qué funciones tienen los organismos responsables de la educación superior?
¿Cuáles desafíos enfrenta la educación superior marco de la legislación vigente en la
República Dominicana?

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OBJETIVOS

Objetivo general
Analizar desde una perspectiva jurídica la educación superior en la República
Dominicana.

Objetivos específicos
Describir los aspectos jurídicos fundamentales de la educación superior en la
República Dominicana.
Explicar las funciones de los organismos responsables de la educación superior en la
República Dominicana.
Identificar los desafíos de la educación superior el marco de la legislación vigente en
la República Dominicana.

19
METODOLOGÍA

El estudio a realizar sobre el análisis jurídico del derecho a la educación superior en


la República Dominicana será de tipo cualitativo, en la misma se hará un análisis de
los diferentes elementos que intervienen para explicar el tema como son su evolución
y los resultados sociales que ha producido el fenómeno en favor de la sociedad, de
igual forma se analizarán los resultados experimentados por la educación superior
dominicana en relación a otro país.

De igual forma se hará una descripción de las instituciones que intervienen en la


educación superior y cuáles son sus funciones dentro del organigrama institucional
que supone las tareas a realizar en un fenómeno de primera trascendencia para el
desarrollo del país, esto se hará a través del método bibliográfico.

Este constituye una metodología de investigación cualitativa, que integra los relatos
del comportamiento del fenómeno, sus etapas y acontecimientos de relevancia,
además de toda la información o documentos de los que se pueda disponer sobre la,
con el propósito de conocer y analizar la percepción de la realidad social.

Como técnica se usara el análisis documental esta técnica es una operación


intelectual que da lugar a un subproducto o documento secundario que actúa como
intermediario o instrumento de búsqueda entre el documento original y documento
que se pretende elaborar. La operación a realizar es un proceso de interpretación y
análisis de la información de los documentos y luego sintetizarlo.

El método sintético es un proceso analítico de razonamiento que busca reconstruir


un suceso de forma resumida, valiéndose de los elementos más importantes que
tuvieron lugar durante dicho suceso. La síntesis es un proceso mental que busca
comprimir la información presente y explicar la parte más importante donde esta se
relaciona con la realidad a estudiar.

20
ESQUEMA TENTATIVO

CAPÍTULO I
JURÍDICOS FUNDAMENTALES DE LA EDUCACIÓN SUPERIOR EN LA
REPÚBLICA DOMINICANA
1.1. Aspectos generales de la ley número 139-01 de educación superior
1.2. Concepto de educación superior Ley número 139-01
1.3. Marco legal del funcionamiento de instituciones de educación superior
1.4. Acreditación de las Instituciones de Educación Superior
1.5. Análisis sobre la calidad de la educación superior en la República Dominicana
1.6. Financiamiento de la educación superior dominicano

CAPÍTULO II
FUNCIONES DE LOS ORGANISMOS RESPONSABLES DE LA EDUCACIÓN
SUPERIOR EN LA REPÚBLICA DOMINICANA
2.1. Ministerio de Estado de Educación Superior, Ciencia y Tecnología
2.2. Consejo Nacional de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (CONESCT)
2.3. Funciones de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) como órgano
rector
2.4. Sistema Nacional de Información de la Educación Superior, la Ciencia y la
Tecnología

CAPÍTULO III
DESAFÍOS DE LA EDUCACIÓN SUPERIOR EL MARCO DE LA LEGISLACIÓN
VIGENTE EN LA REPÚBLICA DOMINICANA
Incrementar el nivel en los docentes del uso de técnicas o metodologías eficientes
Disminuir la brecha digital que separa a docentes y los alumnos
Crear método para reducir la superpoblación estudiantil que afecta seriamente la
planificación
Crear carreras que la sociedad realmente este demandando

21
BIBLIOGRAFÍA

Aparicio Izquierdo, F. (1994). La calidad de la enseñanza superior y otros temas


universitarios. Madrid: Universidad Politécnica de Madrid.
Castellano de Sjöstrand, María Egilda (1998). Aportes para la educación superior
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