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UNIDAD EDUCATIVA: SANTA MARÍA MAGDALENA POSTEL

NIVEL: INICIAL EN FAMILIA COMUNITARIA ESCOLARIZADA

PROFESORA:
Lenny García Guzmán.
AÑO Y LUGAR:
2016 Tiquipaya.
SUBSISTEMA:
Educación Regular.
DEPARTAMENTO:
Cochabamba.
DISTRITO EDUCATIVO:
Tiquipaya.
UNIDAD EDUCATIVA:
Santa María Magdalena Postel.
CATEGORIA:
Producción de textos educativos.

Tiquipaya - Bolivia
PRESENTACIÓN

El presente trabajo de sistematización muestra la actividad educativa que se desarrolló de manera


coordinada y articulada, entre las profesoras y los y las estudiantes de 2° “A y B” de inicial en familia
comunitaria escolarizada del colegio de convenio “Santa María Magdalena Postel, durante el mes de
Junio de la gestión 2016. Pretende ir acorde a las exigencias educativas del modelo educativo “Elizardo
Pérez y Avelino Siñani”, tratando de responder a las exigencias sociales de la comunidad, lo cual se
refleja en el PSP del colegio, titulado: “Revalorización de los alimentos producidos en nuestra comunidad
para gozar de una alimentación saludable”, realizando la articulación del currículo base del nivel y el
regionalizado quechua, para que de esta manera se contribuya al cambio educativo demandado por el
país.
En el plan de desarrollo curricular elaborado para el mes de Junio se trabaja de manera específica la
temática de la “alimentación”, tema que ayuda a desarrollar al máximo el PSP de la unidad educativa,
pero cabe señalar que a pesar de que ésta es una temática casi exclusiva del campo vida, tierra y
territorio, nosotras, como maestras del nivel inicial, trabajamos de forma articulada con los otros tres
campos restantes, vale decir, a través de esta temática de la alimentación, introducimos también
contenidos del campo de cosmos y pensamiento, comunidad y sociedad, y finalmente el campo de
ciencia, tecnología y producción, lo cual será descrito en el desarrollo del presente escrito.
El plan tuvo un tiempo de duración de un mes, que en el transcurso de su ejecución sufrió algunas
modificaciones de forma, como los tiempos y espacios previstos, pero además también existieron
algunas modificaciones de fondo, ya que se fueron incluyendo algunos contenidos que no se
encontraban planificados, esto a partir de las inquietudes e interés que generaron algunas actividades en
los/as estudiantes, todo lo cual será relatado en el desarrollo de la sistematización de la experiencia que
vivimos en las aulas del 2° año de inicial en familia comunitaria escolarizada.
El trabajo está organizado siguiendo la lógica de los momentos metodológicos, es decir, comenzaremos
narrando las actividades, anécdotas, vivencias, experiencias, intervenciones, sentimientos,
pensamientos, etc. que se desarrollaron primero en la práctica, segundo en la teoría, tercero en la
valoración y por último durante la producción.
Para la ejecución del plan de desarrollo curricular, principalmente en el desarrollo de las orientaciones
metodológicas planificadas se implicó a los padres y madres de familia, a través de algunas reuniones
informativas o comunicados escritos, pidiéndoles su colaboración para contribuir con el trabajo de aula,
además de informarles sobre objetivos pedagógicos de aquello, esto con el fin de involucrarlos en el
proceso de aprendizaje de sus hijos/as, lo cual fue recepcionado de manera positiva y activa por la
mayoría de ellos/as.
Por otro lado, también se contó con la contribución y participación de la profesora de valores,
espiritualidades y religiones del nivel primario y algunos estudiantes de cuarto de primaria del colegio,
quienes brindaron toda la predisposición para poder ayudar a que se desarrollé algunas actividades
programadas durante el momento de la producción, que también le sirvió a la colega mencionada para
desarrollar algunos contenidos sobre los valores de la cooperación y honestidad.
Finalmente, decir que, a partir del plan de desarrollo curricular elaborado para el mes de Junio se trató de
responder a la temática del PSP de nuestra unidad educativa, articulando contenidos desde el currículo
base y regionalizado, siguiendo los pasos metodológicos propuestos, desarrollando orientaciones
metodológicas que permitan el aprendizaje vivencial y práctico de los niños/as del 2° “A y B” de nivel
inicial, que responda a sus características individuales evolutivas, referidas al aprendizaje concreto,
actividades que también permiten “aprender haciendo” en contacto con la realidad y las actividades
productivas que se desarrollan en la comunidad de Cuatro Esquinas del municipio de Tiquipaya.
El plan de desarrollo curricular comenzó a ejecutarse con algunos días de retraso, vale decir a partir del
día miércoles 8 de Junio, esto por las actividades religiosas del país y las fechas festivas de los maestros
bolivianos.
El día miércoles ingresamos al aula a la hora habitual, esperamos que lleguen la mayoría de los/as
estudiantes, una vez que se encontraban la mayoría de ellos/as, comenzamos con las actividades
rutinarias de aula, como son el saludo en idioma castellano y quechua, la oración y el control de
asistencia, presentamos el tema a abordar que son “los alimentos”, seguidamente pedimos a todos/as
que saquen los alimentos que trajeron de sus casas para comer durante el recreo, además del desayuno
escolar que ese día fue plátano con yogurt.
En un primer momento los observamos, los contamos, los describimos y al estarse desarrollando dicha
actividad, uno de los niños (MF) intervino y dijo: “mi mamá me manda mate de manzanilla porque me
está doliendo mi garganta, para que no me enferme, y me ha dicho que no corra”, aprovechando la
intervención, recordamos el tema anterior, sobre los remedios naturales, y les pregunte a todos/as
“porque le habrá mandado la mamá MF mate de manzanilla para su garganta”, en coro respondieron,
“porque es una medicina”, en ese momento sentimos satisfacción, porque pudimos constatar que las
actividades de investigación y socialización que se habían desarrollado en la anterior temática fueron
comprendidos y que ahora son utilizados para responder a necesidades de nuestros/as estudiantes y que
además los padres y madres de familia están asumiendo responsabilidades en la educación de sus
hijos/as reforzando la enseñanza de aula.
Después de la intervención, retomamos la actividad que estábamos realizando y seguidamente entramos
al momento de realizar la separación de los alimentos, según su origen; surgieron algunas
complicaciones cuando se nos presentaron algunos alimentos, como los jugos y las bolsitas de avena
con leche, unos decían que venían de los árboles y otros decían que de la tienda. Hicimos un alto y
comenzamos a explicar el origen de los alimentos, teniendo que entrar al momento de la teoría para
responder a la inquietud, después de aquello les pedimos que revisáramos la clasificación que hicimos,
para constatar si era la correcta, fuimos corrigiendo algunos errores analizando cada uno de los
alimentos presentes, dejando para el final los alimentos en cuestión, los jugos y la leche con avena,
llegando los mismos estudiantes a la conclusión de que son alimentos procesados, que antes de pasar
por las fábricas fueron alimentos naturales.
Para generar más expectativa en relación al tema del origen de los alimentos, observamos el video y
fotografías que tomamos el año pasado del paseo pedagógico que realizamos a la casa de una
compañera de curso, de quién su madre elabora quesillo para la venta. Mientras pasábamos las
imágenes comenzaban a susurrar entre ellos/as, se identificaban en las fotografías y también echaban de
menos a algunos compañeros/as que ya no están en el curso en la presente gestión.
Existieron risas y varias intervenciones de sucesos que habían acontecido de los cuales nosotras no nos
habíamos percatado, por ejemplo: BL dijo: “cuando estábamos yendo por ese caminito yo he metido mi
pie al barro y el JM se ha reído”, entonces reflexionamos acerca de la actitud de nuestro compañero, sin
atacarlo, realizando una pequeña cuestionante acerca de que si los accidentes que suceden son motivo
de burla, tratamos de hacer un ejercicio empático, en el cual deberíamos decir si nos gustaría que
cuando nos suceda algo parecido se nos rían, muchos/as se quedaron callados/as y moviendo la cabeza
decían que no, después de esta pequeña reflexión continuamos observando las imágenes y salió otro
comentario de ACH quién dijo: “era muy lejos profe, no hemos cansado mucho”, nos causó risa y les
explicamos que el caminar es una buena forma de hacer ejercicios y que los ejercicios son una forma de
mantenernos sanos y fuertes, pero que la próxima que realizáramos otra actividad como esta,
tomaríamos las previsiones de los descansos y de llevarnos agua para hidratarnos.
Cuando terminamos de ver los fotografías les pregunte si se acordaban de donde provenía la leche, y
todos/as gritaron en coro: “de la vaca”, entonces les dije y que cosas se pueden hacer con la leche y
respondieron “queso, yogurt, mantequilla…”, los felicitamos y les dijimos que lo que habíamos trabajado
el año anterior lo habían aprendido bien. Entonces, les lanzamos otra pregunta: “quién se acuerda cómo
hemos hecho el quesillo en la casa de VM”, gritaron en coro “yo”, y les dije que levantaran la mano para
poder participar.
Elegimos a una de las niñas, que casi nunca participa, NF y ella comenzó a relatar los pasos que
habíamos seguido: “primero hemos llegado a su casa de la VM, nos hemos sentado en la piedra y hemos
visto lo que su mamá estaba ordeñando la leche, mi mamá también hace así, después le ha puesto es
cosita pequeñita, como piedrita”, interviene MF: “la tabletita”, preguntamos, “y qué se llama esa tabletita”
y VM responde “cuajo”. Entonces le pedimos a NF que retome su narración y dice: “después que le ha
puesto la cuajo, se ha vuelto, así (mueve sus manos) medio como durito, pero no tanto y nos ha hecho
comer (hace un gesto de desagrado)”, su compañero D recordó los gestos y sensaciones de algunos/as
de las niñas/os (BL, JM) que no quisieron probar el cuajo que se forma antes de estar lista la leche para
hacer quesillo, les preguntamos por qué no quisieron comer y dijeron que porque no les gustaba que se
querían vomitar, que sus mamás no les dan para comer esa cosa.
BL intervino y dijo: “pero cuando ya era queso ya he comido, eso ya estaba rico”, mostrando que los
gustos de persona a persona varían, hicimos una pequeña intervención para decirles que no importa en
qué consuman la leche, qué lo importantes es consumirla, ya sea cómo leche pura, queso, mantequilla,
yogurt, etc.
Otra vez le pedimos a NF, que continuara y dijo: “después la señora ha hecho el queso con sus manos,
yo también se hacer cuando mi mamá hace”, después de esto le agradecimos por su participación y les
anunciamos que ahora observaríamos el video de aquella experiencia y que comprobaríamos si
realmente no nos olvidamos de ningún paso, pudimos ver que recordamos perfectamente los pasos para
la elaboración del quesillo, aunque se nos olvido el ingrediente de la sal.
Antes de cambiar de actividad una niña GV dijo: “también estaba rico el quesito que hemos hecho aquí
(refiriéndose al curso), haremos otra vez profe”, entonces les anunciamos que más adelante volveríamos
a elaborar quesillo y que para ello invitaríamos al curso a la mamá de VM para recordarnos cómo
hacerlo, sonrieron y aplaudieron felices.
A partir de estas actividades prácticas, puntualizamos algunos detalles sobre el origen o procedencia de
los alimentos, haciendo énfasis en los alimentos de origen natural (animal y vegetal) y artificiales o
procesados (dulces y golosinas), ya ahondar en el tema, ya que en la actividad práctica que realizamos y
por necesidad e iniciativa de los/as estudiantes ya dimos la explicación pertinente al tema con ayuda de
los alimentos que traen de merienda, así que nos remitimos a afianzar el conocimiento realizando una
dinámica en la cual los niños/as debían reconocer su merienda y para podérsela llevar a su mesa para
consumirla, debería decir la procedencia del mismo si no acertaba, debería cantar alguna canción.
Por otro lado, también resolvimos algunas hojas de trabajo que implicaban la clasificación de los
alimentos según su origen, dónde los/as estudiantes deberían poner a prueba los conocimientos
adquiridos, la mayoría de ellos/as resolvieron las hojas sin ningún inconveniente, a excepción de algunos
niños a quienes se les brindo una explicación individualizada para que pudieran terminar de comprender
el contenido, haciendo uso de ejemplos de su contexto.
De esta forma terminamos con esa temática y después les explicamos que realizaríamos una
investigación acerca de los beneficios y perjuicios que tienen ambos grupos de alimentos para la salud y
desarrollo de las personas, para lo cual necesitaríamos la ayuda de nuestros padres y madres de familia,
primero explicamos con la hoja de tarea preelaborada, lo que se debería trabajar, haciendo una réplica
de la misma hoja en la pizarra.
Lo primero que deberían hacer es pedirles a sus padres y madres de familia que escriban en la primera
columna lo que habían investigado acerca de un alimento específico, luego que se los lean y después
que ellos/as procedan a escribir su propio texto en la siguiente columna, según sus posibilidades, antes
de que se retirasen del aula reunimos a la mayoría de padres y madres de familia y les dimos la misma
explicación, añadiendo además la razón u objetivo pedagógico que se persigue con esta actividad, que
es la capacidad de investigación, la producción de textos orales y escritos.
Llegó el momento de compartir la información en el curso de forma oral, para lo cual pedimos algunos
voluntarios/as, sólo levantaron las manos pocos, no quisimos forzarlos y entonces elegimos a uno de los
voluntarios JMA, salió a frente y comenzó con su explicación: “no debemos comer dulces porque nos
dañan los dientes, tampoco debemos comer los chizitos porque están hechos de cartón y colorantes y
duele la barriga, tampoco debemos tomar gaseosas porque tiene mucho gas”, le agradecimos por su
participación, le brindamos un voto de aplausos y a medida que iba hablando nosotras tomábamos nota
en un papelógrafo (réplica de las hojas de tarea), luego le pedimos a otro de las niñas que levantaron su
mano que pase a compartir su experiencia, AM comenzó su explicación de la siguiente manera: “buenos
días profesora, e investigado que no debemos comer los dulces porque nos vuelve inquietos, nos daña
los dientes, las pipocas y chizitos produce cáncer”, en ese momento intervinimos y les preguntamos a
todos/as si sabían a qué se refería el cáncer, DC dijo: “eso mata a las personas, mi abuelita se ha muerto
con eso”.
Retomando las palabras de DC, explicamos que evidentemente los doctores recomiendan que no
consumamos esos alimentos porque producen cáncer, nos dirigimos a la pizarra y dibujamos una
persona con algunas células blancas y tomamos el marcador negro, para asemejarlo con la enfermedad
y fuimos pintando poco a poco las células blancas hasta que la persona queda totalmente negra y es el
momento en el que muere, los niños/as quedaron impresionados, nadie habló sólo miraban el dibujo, a
momentos me cuestioné si es que la información que había dado era muy fuerte, pero después pensé
que es mejor que desde pequeños conozcan las consecuencias de algunas decisiones que tomamos.
Después de esa intervención me dirigí de nuevo a AM y le pedí que termine de explicarnos porque nos
debemos consumir las gaseosas, terminó diciendo: “no debemos tomar las gaseosas porque dañan el
estómago, produce gastritis”, la aplaudimos y después le preguntamos si sabía que era la gastritis, me
miró y me dijo tímidamente “mi mamá no me ha dicho eso”, le sonreímos y le pedimos que se sentase,
entonces les explique a los niños/as que la gastritis también es una enfermedad del estómago, que arde
por dentro y que no nos deja consumir varios alimentos como el pan, fideos, etc. porque nos produce
dolor y en ocasiones vómitos, tratamos de no ahondar más en el tema, porque los vimos con cara de
susto, después de la explicación del cáncer.
Elaboramos un par de hojas de trabajo para que los/as estudiantes pudieran identificar los alimentos que
no contribuyen al desarrollo armónico del cuerpo, para lo cual deberían utilizar los conocimientos
adquiridos hasta el momento.
Al igual que con los alimentos artificiales, procedimos con el compartir de las investigaciones hechas
sobre los alimentos naturales, en este caso nombré a un niño y a una niña para que nos explicaran,
primero salió BA que dijo: “las frutas debemos comer porque nos ayuda a crecer, la leche ayuda a los
huesos y la carne cicatriza la piel”, explicamos a qué se refiere la cicatrización y enseguida invitamos a E
para que también comparta lo que había investigado, dijo: “debemos consumir frutas porque nos dan
vitaminas y nos ayudan a combatir las enfermedades, los lácteos nos ayudan a que los huesos sean
fuertes y la carne nos ayuda a crecer”, despedimos a ambos compañeros con aplausos.
Al igual que con los alimentos artificiales se tomó nota de las investigaciones realizadas en un cuadro
preelaborado, réplica de la hoja de la hoja de tarea, seguidamente realizamos la lectura de los cuadros
para reforzar nuestros conocimientos, además resolvimos algunas hojas de trabajo en las cuales los
niños/as deberían identificar los alimentos naturales que nos ayudan a crecer.
Presentamos gráficos de diferentes lácteos (leche, queso, yogurt), frutas (sandía, plátano y naranja) y
proteínas (carne, huevo, pollo), fuimos nombrando que origen tienen mediante preguntas, puntualizamos
sobre los beneficios que conllevan para la salud su consumo, AM dice: “profe a mí me gusta mucho el
plátano”, y otros niños/as dicen: “a mí también”, les preguntamos qué cosas buenas tendrá el plátano y
MF responde: “ayuda a crecer”, acotamos diciendo: “que además de ayudarnos a crecer el plátano nos
ayuda a que cuando estamos corriendo o haciendo ejercicios no se nos paralice el cuerpo, porqué tiene
potasio”. Después de haber conversado sobre su origen y beneficios pedimos a algunos estudiantes que
pasen al frente y coloquen en la columna de la familia de alimentos a la que pertenece cada gráfico,
pudimos observar que ninguno tuvo dificultades para realizar la actividad, después realizamos la misma
actividad en de forma individual en hojas de trabajo, dónde primero deberían colorear las imágenes,
cortarlas y pegarlas en la columna respectiva.
Conversamos sobre los alimentos naturales que nos gustan consumir, nombraron varias frutas, lácteos y
proteínas, entonces les propusimos que preparemos algunos de esos alimentos en el curso, les dijimos
podemos hacer limonada, todos/as gritaron en grupo: “si”, también podríamos hacer “quesillo” y
“charque”, aplaudieron emocionados.
Entonces les preguntamos que necesitaríamos para poder cocinar, uno de los niños dijo: “alimentos”, no
era la respuesta que esperábamos, entonces rectificamos la pregunta: “alguien sabe, que se llama el libro
que nos ayuda a cocinar?”, todos/as miraron pensativos, entonces especifique más, “es un libro que nos
dice que ingredientes vamos a utilizar y cómo tenemos que cocinar”, una niña dijo: “Ah, mi mamá tiene
ese libro, tiene dibujos de las comidas de pique (se rió)”, le dije: “si, pero que se llama”, les pusimos
ejemplos de otros textos: “(mostrando un cuento) por ejemplo este libro se llama cuento, será que nos
sirve para podamos cocinar?”, en coro respondieron “no”, entonces, volvimos a repetir la pregunta “cómo
se llamará el libro que nos ayuda a cocinar”, al ver que realmente nadie conocía la respuesta, decidimos
mostrarles un libro de recetas y presentarles su nombre, explicando sus características.
Aprovechamos está actividad para evidenciar la presencia de los números y letras que nos indican las
cantidades y nombres de los ingredientes que utilizaremos, aprovechamos está situación para explicar el
tema de números ordinales y su uso para nombrar las cosas en orden, desde lo primero hasta lo último
que se hace, realizamos varios ejemplos.
Anunciamos que para preparar la limonada, el quesillo y el charque primero deberíamos investigar qué
beneficios tiene para la salud, cómo se preparan y elaboraríamos recetas de las mismas, una niña BL
dijo: “pero nosotros no sabemos escribir”, le respondimos “claro que saben, los niños/as también
escriben, pero un poco diferente de los grandes, ustedes pueden escribir algunas letras y además
dibujar. Los dibujos también son una forma de escribir”, dijeron: “ah”.
De esta forma proporcionamos una hoja de trabajo en la cual los niños/as deberían ejercitar la
cardinalidad de los números del 6 al 10, coloreando la cantidad de limones que indica el símbolo
numérico, además deberían investigar acerca de las propiedades nutritivas del limón.
Compartimos la investigación realizada sobre las propiedades nutritivas del limón, pudimos observar que
incluso algunos de los estudiantes habían escrito en su hoja de trabajo la información que se había
solicitado, puntualizamos diciendo, que el limón contiene vitamina “C” que es muy buena para subir las
defensas y protegernos de los resfríos, que en esta época del año es excelente porque hace bastante
frío.
Entonces les recordamos que prepararíamos limonada y que para ello deberíamos escribir la receta, para
ello utilizamos unas plantillas preelaboradas, un cuadro para escribir y dibujar los ingredientes y una
segunda hoja para escribir la preparación, les dijimos que pensaran un momento en las cosas que
necesitaríamos y luego empezaron a dictar: “necesitamos limones, agua y azúcar”, primero dibujamos en
la segunda columna un limón, una jarra y una cuchara, después les preguntamos: “cuántos limones
necesitaremos” dijeron diferentes cantidades, finalmente anotamos 4, y en la última columna escribimos
el texto correspondiente, continuamos con los siguientes ingredientes de la misma forma, una vez que
terminamos realizamos una lectura grupal, la primera vez no fue homogénea, a algunos les costó un
poco, pero en la tercera vez lo hicieron casi todos/as.
Continuamos con escritura individual, diciéndoles que cada uno/a debía escribir sus ingredientes
guiándose en el ejemplo que les pusimos en la pizarra, nos sorprendimos al ver que los niños/as
empezaron a copiar todo lo que estaba allí, algunos iban leyendo lo que hacían, algunos tardaron un
poco más, pero todos terminaron sus recetas, luego pasamos a la parte de la preparación, dónde se
procedió de la misma forma, es decir, los/as estudiantes fueron dictando la preparación, aprovechamos la
situación para poner en práctica nuestros conocimientos acerca de los números ordinales, puntualizando
acerca de su uso, colocamos números ordinales al comenzaron cada oración, utilizamos letras y dibujos,
una vez que terminamos la escritura grupal se procedió con la forma individual, en la cual todos/as
optaron por copiar lo escrito en la pizarra.
Para el día siguiente se pidió los ingredientes dando las respectivas recomendaciones a los padres de
familia, para que puedan enviar lo solicitado, madres y padres de familia preguntaron para que les
estábamos pidiendo esos ingredientes, entonces les explique que era para poner en práctica lo que
habían investigado además de preparar la limonada realizando la lectura de una receta, una de las
mamás, se río y me dijo: “acaso ya saben leer”, la mire y le dije: “sí, ya verá cuando sea la feria y
expongan”, se sorprendió y se fue.
Al día siguiente observamos las recetas que elaboramos, pedimos un voluntario/a que quisiera leer los
ingredientes que necesitábamos, varios levantaron las manos, pero al final elegimos a una niña AMF,
comenzó su lectura señalando con su dedo las palabras y los dibujos, todos/as fueron controlando sus
ingredientes, constatamos que casi todos/as contábamos con lo solicitado y enseguida continuamos con
el siguiente paso que era la preparación.
Por cuestión de seguridad, las profesoras procedimos con el cortado de los limones, aprovechamos este
momento, aunque no era tema de avance, para conversar sobre la noción de entero y mitad, explicando
a los niños/as los términos que se utilizarían en futuras recetas.
Cuando nos preparamos para pedir otro/a voluntaria para leer la preparación, uno de los niños L dijo,
“profesora yo quiero leer lo que tenemos que hacer”, me reí, y le dije que está bien y de igual forma
procedió con la lectura, y en las partes que le costaba realizarla lectura, sus compañeros/as
complementaban la oración.
Primero comenzamos a exprimir los limones con ayuda de exprimidoras manuales, algunos/as no sabían
cómo, se les indico cómo hacerlo, otros se quejaban porque les ardían las manos, otros fueron muy
hábiles para realizar la actividad, se les preguntó dónde aprendieron, y varios comentaron que les ayudan
en casa a sus mamás.
Segundo, cada grupo de niños/as unieron el jugo del limón en un recipiente y fuimos comparando
quienes obtuvieron más y quienes menos, uno de los niños (DC) cuando procedíamos a constatar que su
grupo era el que menos tenía, dijo “no se vale, de ellos es más poquito de nosotros está más arriba el
agüita (refiriéndose al jugo de limón)”, que en realidad no era así, sino que las jarras de los otros grupos
eran anchas y la de ellos angosta, entonces tuve que detenerme y explicarles que todas las jarras son
para la misma cantidad de jugo de limón, aunque unas parezcan más grandes y otras más pequeñas, así
que para verificar lo que decía, vaciamos el jugo que ellos habían exprimido y vaciamos en una de las
jarras que supuestamente contenía menos líquido, en coro todos dijeron “oh” y alguien preguntó qué
pasó, por qué había disminuido el jugo, tuve que retomar la explicación y hacerles entender que lo único
que diferenciaba a las jarras era su grosor pero que podían contener la misma cantidad de jugo de limón
y que los números que están en las jarras sirven para comprobar cuanto de líquido contiene y que si se
fijaban la mesa de DC tenía menos de 1 y la mesa de JM tenía una onza, fue así que se quedaron
tranquilos, pero yo sentí la necesidad de seguir reforzando este contenido ya que se refiere a la
propiedad de la “conservación de cuerpos”.
Después de esta actividad, que nos tomó más tiempo del previsto, retomamos la preparación de la
limonada, vaciando el jugo de limón de todos los grupos en un bidón de agua hervida, luego agregamos
el azúcar, contando las cucharas que se necesitaban, luego cada niño/a consumieron en el aula la
limonada elaborada y algunos se llevaron a su casa lo que sobró.
Para la clase siguiente llevamos al aula un pedazo de carne en estado de descomposición, se las
mostramos a los/as estudiantes y les preguntamos: “¿alguien sabe que es esto? (mostrando el pedazo
de carne)”, una niña dijo: “es carne, pero hedionda”, esta respuesta provocó risas en el aula, después
retomamos la conversación y dije. “y por qué estará con mal olor o hedionda, como dicen”, DC dijo: “es
que está podrida”, a raíz de esta respuesta les dije: “y por qué estará podrida”, BA dijo: “es que no lo has
guardado en el frizider”, retomé está intervención y les dije: “si BA, está así porque no le he guardo en el
refrigerador”, entonces explique sobre la función que cumple la tecnología para la conservación de
algunos alimentos, que si los consumimos sin tener cuidado pueden ocasionarnos enfermedades
estomacales.
Realizamos una hoja de trabajo en la cual los/as estudiantes deberían recortar algunas imágenes de
alimentos y realizar la clasificación de aquellos alimentos que necesitan refrigeración y de aquellos que
no lo necesitan, una vez culminada con esta actividad, lanzamos otra pregunta: “¿y cuándo no habían
refrigeradores qué harían las personas para que su carne no se pudra o eche a perder?”, nadie contesto
y entonces procedimos a explicar que existe una forma de conservar los alimentos que es la
deshidratación de alimentos, que en el caso de la carne es volviéndola en charque y que para comprobar
aquello lo elaboraríamos en el curso.
Entonces les preguntamos y cómo podemos hacer el charque, quién nos podrá indicar; nosotras
pensábamos en mandar una tarea en la cual investigaran acerca de la elaboración del charque, pero
grande fue nuestra sorpresa cuando vimos que una niña, NF, levanto la mano y dijo: “yo sé hacer
charque, mi tía hace y vamos con mi mamá a ayudarle”, entonces aprovechamos aquella situación y le
pedimos que nos guiara en la elaboración de la receta.
Retomamos la misma modalidad utilizada para la elaboración de la receta pictográfica de la limonada, le
pedimos a NF que nos dijera qué ingredientes necesitaríamos, dijo: “un pedazo de carne, bien planita
(refiriéndose a que debe estar rebanada) y también sal para poner a la carne”, después de escucharla
procedimos a escribir y dibujar en la pizarra, seguidamente todos/as comenzaron a elaborar la hoja de
ingredientes, al culminar, nos dirigimos nuevamente a NF y le dijimos: “y ahora como hacemos”, ella nos
dijo: tenemos que echar con la mano arta sal a la carne y después cuando ya tenga arta sal lo colgamos
en un alambre donde haya sol para que se seque”, después de escucharla atentamente escribimos en la
pizarra y seguidamente cada uno/a elaboró su receta individual, está vez notamos que lo hicieron con
mayor velocidad y precisión que la primera vez, a medida que iban terminando les pedimos que realicen
la lectura de su texto, algunos/as lo realizaron muy bien aunque también hubieron casos que necesitaron
ayuda para poder realizar su lectura, en este caso también se utilizaron los conocimientos acerca de la
cardinalidad y ordinalidad de los números.
Solicitamos a los padres y madres de familia mediante una nota que enviaran para el día siguiente un
cuarto de kilo de carne de res rebanada, explicándoles el objetivo y la finalidad. Al día siguiente le
pedimos a la misma niña que nos dictó la receta que revisase si todos/as sus compañeras habían llevado
su pedazo de carne, en su mayoría fue así, aunque hubieron niños/as que no tenían, así que procedimos
a pedirles a las personas que tenían mayor cantidad de carne que compartiesen con los que no tenían,
así lo hicieron.
Luego pusimos unos recipientes al medio de cada mesa para poner la sal respectiva, y ejercitamos el
conteo, les dijimos: “cuántas cucharas de sal necesita cada persona”, fijándose en la pizarra dijeron: 1,
entonces nos dirigimos a una de las mesas y les dijimos: “entonces en esta mesa cuántas cucharas de
sal deberemos poner”, se quedaron mirándonos y les dijimos: “lo primero que tenemos que hacer es
contar cuantas personas hay”, contamos entre todos/as, llegando a 4 niños/as, entonces volvimos a
preguntar: “ya sabemos que en esta mesa hay cuatro personas, entonces cuantas cucharas de sal debe
haber”, pensaron un momento y al ver que no había respuestas, tome 4 cucharas y le di a cada persona
de la mesa una cuchara, fue entonces que una de las niñas AMF dijo: “cuatro, tiene que haber cuatro
cucharas de sal”, le dije: “muy bien, entonces nos dirigimos a la pizarra y dibujamos a cuatro personas y
cuatro cucharas y explicamos sobre la correspondencia, para fijar este conocimiento, realizamos el
mismo procedimiento con cada mesa de trabajo, en las cuales las respuestas se dieron con mayor
rapidez y facilidad.
Entonces procedimos a indicarles la operación para colocar la sal y todos/as comenzaron a realizarlo,
algunos/as realizaban comentarios como: “wacala, esto tiene sangre, me quiero lavar mis manos”, fue un
momento de risas, pero finalmente todos/as terminaron su trabajo, nos lavamos las manos y salimos a
colgar las carnes a una cuerda que improvisamos en el patio del kínder, lavamos y ordenamos las cosas
que utilizamos. Durante el recreo pudimos observar que hubo un grupo que por iniciativa se sentó cerca
de las carnes y les indicaban a los niños/as de los otros cursos que tuvieran cuidado para no hacerlas
caer.
En la salida, las madres de familia preguntaron cómo nos había ido con la experiencia, se le dijo que muy
bien, muchas se sonrieron y nos preguntaron qué haríamos con aquello, les respondimos que
venderíamos el día de la feria y exposición, se asombraron y se despidieron.
Al día siguiente, esperamos que llegue la mayoría de los niños/as y después salimos a observar lo que
había pasado, algunos dijeron: “mira ya no está roja la carne, está guinda”, otros/as “se está secando
como la ropa”, intervinimos y preguntamos: “cómo estaba la carne ayer” en coro respondieron: “fresca”, y
ahora cómo está, “un poco seca”, entonces explicamos lo que estaba sucediendo asemejándolo con el
proceso de secado de la ropa, después nos dirigimos al aula y en un cuadro grupal tomamos nota de los
cambios que había sufrido la carne, realizamos el mismo procedimiento durante 2 días más y finalmente,
realizaremos una hoja de trabajo en la cual los/as estudiantes ordenaron secuencialmente las imágenes,
haciendo uso de los números ordinales. Aprovechamos esta situación para explicar también la noción
temporal del antes y el después.
Como última actividad invitamos al curso a la madre de familia productora de quesillo, la saludamos en el
idioma que más usa, el quechua; llegó con un balde de leche recién ordeñada, y nos dijo: “profita,
empezaríamos no más ya, se va a enfriar y ya no va a agarrar”, entonces se acomodo en e suelo y se
inclino de cuclillas, le pedimos que se pusiera sobre una de las mesas para que los niños/as puedan
observar lo que estaba haciendo, nos pusimos alrededor de ella y derritió un cuarto de una pastilla de
cuajo en una cuchara de agua, luego lo puso a la leche y nos dijo: “ya, ya no le miraremos sino no va a
agarrar el cuajo”, le preguntamos y eso por qué, y nos respondió: “creencias”, entonces todos/as
volvimos a nuestro lugar y aprovechamos el tiempo que tardaría el proceso, para escribir, grupal e
individualmente los ingredientes que se necesitarían para elaborar el quesillo, procedimos de igual forma
que en las anteriores recetas, sólo que está vez la madre de familia controlo que lo estemos haciendo
bien.
Después de unos 20 minutos, se dirigió al balde de leche y nos dijo: “ya, ya está saliendo el suero, miren
está ya medio espesito”, todos/as las niñas corrieron a ver, dejando lo que estaban trabajando y nos dijo:
“ahora, con calmita hay que empujar al fondo el espeso” y nosotras le dijimos: “ay, pero esa parte es bien
difícil, el año pasado cuando hicimos solas hemos pataleado, nunca desaparecía el suero y al final ha
quedado como queso desmenuzado”, la señora se rió, y dijo: “ es que muy rápido han debido hacer, hay
que hacer con calmita, con cariñito”
Todos/as las niñas se quedaron mirando atentamente, algunos querían poner sus manos dentro el
recipiente, pero la señora les dijo: “no, no el queso se puede enojar que uno no más tiene que hacer”,
cuando iba sacando el suero, no dijo: “esto (señalando el suero) dice que es curativo, varias personas ya
nos han dicho, compran pues, hay un viejito que dice que se ha curado de no sé qué enfermedades con
esto”, entonces nos dirigimos a los/as estudiantes y les dijimos: “están escuchando, este suero es
también medicina, así que cuando sus papás tengan alguna enfermedad grave o ustedes pueden tomar”,
algunos/as hicieron cara de desagrado, pero escucharon atentamente lo que se dijo.
Después puso sal y repartió por mesa de trabajo la masa del queso, la madre de familia les explico cómo
deberían manipular para obtener el quesillo y todos/as las niñas/os comenzaron a realizarlo, unos/as con
más éxito que otras. Finalmente, le preguntamos cuanto tiempo podríamos guardarlo y nos dijo que 3,
pero en el refrigerador. La despedimos agradeciéndole por su ayuda y nos dijo que para ella es un gusto
ayudarnos, que le hubiera encantado traer mote para que puedan comer.
Realizamos una hoja de trabajo sobre secuenciación de imágenes, para recordar los pasos que se
seguimos para obtener el quesillo, haciendo uso de números ordinales y la noción de temporalidad:
antes-después y a continuación terminamos de realizar la receta pictográfica.
Nos pusimos en círculo y conversamos sobre lo importante que es valorar el trabajo de nuestros padres y
madres de familia dedicados a la producción de alimentos como sustento económico de nuestras
familias, también conversamos sobre la utilidad que tiene conocer los números y letras para poder
realizar actividades cotidianas, como compras o preparar recetas utilizando las cantidades adecuadas. Al
escuchar esta conversación, hubo algunas intervenciones, JL dijo: “yo siempre le ayudo a mi mamá”, y
otros/as decían: “yo también”. Entonces terminamos comprometiéndonos a que agradeceríamos a
nuestros padres por las cosas que nos dan y que si no nos podrían comprar alguna cosa trataríamos de
entenderlos y no hacer berrinches.
Después de haber desarrollado todo lo planificado, nos preparamos para presentar a la comunidad
educativa de nuestro colegio, las actividades y trabajos que realizamos en ese tiempo, primero
seleccionamos a los/as estudiantes que representarían al curso en la feria del PSP de nuestra unidad
educativa Santa María Magdalena Postel, luego nos contactamos con dos estudiantes de 4to. de
primaria, de la profesora Gilka, para coordinar la función que cumplirían durante la actividad del PSP, que
se refiere a servir cómo banqueros que se encarguen de recepcionar el dinero real y cambiarlo por fichas
de colores para que los niños/as del inicial puedan vender sus productos preparados por ellos/as mismas.
Seguidamente delegamos a algunas madres de familia, para que contribuyan con la preparación de los
platos que estarán a la venta, cómo el charque y el mote con quesillo, esto con el fin de conocer el uso de
los números en la vida cotidiana, el uso del dinero, las operaciones matemáticas de conteo y desconteo y
los valores de la honestidad y respeto.
Durante el desarrollo de la feria en sí, los niños/as explicaron el trabajo que realizamos de forma
individual y con ayuda de sus padres y madres de familia, con respecto a por qué no debemos consumir
alimentos artificiales o procesados, y porque debemos consumir alimentos naturales, presentaron las
recetas que elaboraron de la limonada, el charque y el quesillo, realizando una lectura de lo que
“escribieron”, y finalmente se terminaba el recorrido con el puesto de venta de los platos preparados.
Durante la exposición los estudiantes de cursos superiores, se asombraban de el contenido de la
exposición, sobre todo cuando los niños/as les explicaban las consecuencias de consumir alimentos
artificiales o procesados como los dulces, los chizitos y las gaseosas, y me peguntaba, “cierto profe” y yo
les dije que sí, que crean lo que les dicen los niños/as porque esa información salió de las
investigaciones que realizaron con ayuda de sus padres.
Luego nos visitaron profesores del colegio y quedaron admirados cuando evidenciaron que los niños/as
del nivel inicial pueden producir textos, felicitaron a los estudiantes y dijeron que a veces las personas no
valoran el trabajo que se realiza en el kínder, que estos son espacios para demostrar a todos/as la
importancia del nivel para la vida y la educación.
Otro aspecto interesante fue que los estudiantes de 4° de primaria también utilizaron sus conocimientos
de matemáticas para poder devolver el cambio y controlar los precios de venta, además que pude
observar un trabajo solidario con los niños del inicial, ya que les recordaban cuantas fichas debían recibir,
controlaban que cuenten bien y por ende los niños del inicial también pudieron aprender lo que realizaban
sus compañeros de primaria.
También se vio una activa participación de los padres y madres de familia, no sólo del curso, sino de todo
el colegio, quienes pacientemente esperaron su turno para poder realizar su compra, aunque siempre
hay excepciones, vertiendo algunos comentarios como “mira tan chiquitos ya están vendiendo”, “profe
ellos ya escriben”, “hablan bien”. Al escuchar estos comentarios tanto los estudiantes como mi persona
nos sentimos muy bien, satisfechos porque el trabajo que realizamos estaba siendo reconocido.
En este último momento metodológico pudimos evidenciar que mis estudiantes pusieron en práctica
todos los conocimientos que adquirieron en el desarrollo de la planificación, logrando cumplir con el
objetivo planteado: “Fortalecemos el valor de la reciprocidad entre compañeros/as, conociendo las
costumbres y actividades productivas de la comunidad, los alimentos nutritivos, números ordinales y
cardinales, mediante actividades de investigación, secuenciación, clasificación, producción de textos
escritos y orales, para mejorar nuestros hábitos alimenticios consumiendo los productos de nuestra
comunidad”.
LOGROS Y DIFICULTADES

Después de haber ejecutado en su totalidad el plan de desarrollo curricular elaborado para el mes de
Junio, el cual articula los cuatro campos de conocimientos y saberes, los contenidos del currículo base y
del regionalizado, la temática del PSP y la cuatro dimensiones, se pudieron obtener los siguientes logros
y dificultades:

 Se pudo constatar que, evidentemente los niños/as del nivel inicial en familia comunitaria
desarrollan mejor sus conocimientos, habilidades y capacidades por medio de actividades en las
cuales puedan interactuar de forma activa con lo que les rodea, ya sea, la naturaleza misma, las
personas de su entorno, las actividades productivas de la comunidad, etc., es decir a través del
“hacer”, despertando además su interés por aprender.

 Pudimos observar que el proceso de lectura y escritura de los niños/as de esta edad escolar se
da mediante activadores de ideas, que son los dibujos, que cobran importancia a partir de que el
texto que escriben o leen tiene un significado real para ellos/as, es decir, que los/as estudiantes
entiendan lo que están escribiendo o leyendo y que además haya sido producido por ellos/as
mismas, logrando superar de este modo con la lectura y escritura mecánica, que no cobra
significado a la hora de aprender.

 En cuanto al trabajo pedagógico docente, podemos afirmar que el trabajar en coordinación y


equipo entre paralelos, comenzando desde la planificación y terminando en la presentación al
público del trabajo realizado, permite obtener mejores resultados de aprendizaje en nuestros/as
estudiantes, ya que a partir de la experiencia o ideas nuevas que cada maestra/o pueda aportar
en el trabajo son útiles para proponer y ejecutar actividades que despierten el interés de los/as
estudiantes por aprender.

 Se evidencia la participación activa de los padres y madres de familia en el proceso de


enseñanza y aprendizaje de sus hijos/as que se desenvuelve en la escuela, colaborando con las
tareas que se envían a la casa para anticipar o reforzar los conocimientos y saberes que se
pretenden trabajar.

 Es necesario que se organicen actividades dónde los niños/as del nivel inicial puedan mostrar el
trabajo que se realiza en aula, esto con el fin de superar las creencias de la sociedad misma, que
piensa que este nivel de educación no tiene mucha importancia, ya que es un espacio en el cual
el niño/a va a jugar y a “acostumbrarse” a la escuela, para luego tener un ingreso menos
traumático a la primaria.

 Creemos que es necesario lograr, cada vez más, que los padres y madres de familia asuman un
papel protagónico en la educación de sus hijos/as, las cuales deben estar enmarcadas en el
aspecto pedagógico, creando actividades que les permitan participar de forma activa, pero que a
la vez no perjudiquen las actividades que desarrollan y esto se logrará a través de reuniones
propositivas, donde, tanto maestras como padres y madres de familia, emitan sus opiniones y
porque no coordinen actividades.

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